Día 1 Entra a Sus Puertas con Acción de...

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10 Días de Oración 2017

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Introducción ¡Bienvenido a los Diez Días de Oración 2017! En los diez años desde que la iglesia ha comenzado a orar por los diez días al principio de cada año, hemos visto como Dios ha trabajado varios milagros. El Espíritu Santo ha forjado reavivamiento, conversiones, una renovada pasión por el evangelismo y ha curado relaciones. ¡Verdaderamente, la oración es el lugar de nacimiento del reavivamiento!

Creemos que su vida y de aquellos por los que ora serán cambiadas a medida que se unan a los miembros de la iglesia para orar por el derramamiento del Espíritu Santo, a quien el Padre ha prometido darle a aquellos que le piden. Aquí hay algunas respuestas de aquellos que participaron en el pasado Diez Días de Oración:

“Como iglesia comenzamos a orar por la lluvia, porque nuestro país estaba pasando por una sequía. Era perturbador y todas las personas estaban en pánico, pero quiero agradecer a Dios, porque después de tres días Él contestó nuestras oraciones. Ahora llueve todos los días y quiero agradecer a Dios por una oración contestada.” Lee Moyo

“Estoy alabando a Dios por lo que Él ha hecho en nuestra iglesia Njiro SDA en Arusha, Tanzania. Una dama, musulmana, atendió los Diez Días de Oración en sábado y volvió el lunes confesando que ella estaba dependiendo de medicinas de magos y brujería para conseguir trabajo, pero ahora, después de atender el sermón del sábado, ella decidió botarlas y depender solo de Jesús. Dos días después de botar los medicamentos, ella fue llamada para un trabajo como gerente de logística en una gran compañía de transporte en Dar es Salaam y ahora ella se está preparando para el bautismo que será el próximo sábado. Alexis Nzitonda, Tanzania

“Comenzamos nuestros Diez Días de Oración en el día 10 de este mes y hemos estado experimentando la paz que Cristo nos da en nuestros corazones a pesar de los desafíos que tenemos. Uno de los miembros de nuestro grupo ha visto como Dios ha bendecido su vida al proveer un nuevo trabajo localizado en nuestra ciudad capital. Dios ha bendecido a otra hermana quien es una madre soltera con dos niños pequeños al decirle a la esposa de un maestro que comprará comida para ella. Dios, también contestó las oraciones de una abuela por su nieta quien todavía es una pequeña, pero estaba enferma y en el hospital. En el día 14 de este mes esa niña estaba curada. Continuamos nuestras secciones de oración a las 4:00 de la mañana en nuestra pequeña iglesia en la aldea de Tanoliu, localizada en la parte norte de la isla de Efate en Vanuatu. Todos somos bendecidos por el Espíritu Santo al unirnos a los Diez Días de Oración.” Sharon Timothy,

Vanuatu

“He estado orando por mi hijo durante estos diez días de oración y él ha sido bendecido con un nuevo trabajo al cual ama.” Marianne McFeeters

“Pedí ayuda por el tiempo que paso en todo tipo de medios de comunicación, especialmente la televisión y durante el primer día de oración fui dirigida a que ayunara de toda la televisión durante los diez días de oración, y me demostraron formas de cómo llenar mi mente con comida espiritual en vez medios corruptos. Estos diez días fueron de gran bendición que tenemos la intención de establecer tiempos de oración regulares y más largos.” John Weston

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Nuestro Lema de Oración: Un Santuario Vivo Durante los Diez Días de Oración, haremos un viaje al santuario y trataremos de ver qué lecciones podemos

aprender de él. El tema del santuario deberá estudiarse cuidadosamente, ya que es una de las piedras fundamentales de nuestra fe y esperanza. Nos enseña el trabajo que Cristo está haciendo por nosotros. Nos revela su carácter. También, nos dice que Cristo espera de nosotros y como debemos vivir en la tierra. Nos recuerda que debemos vivir con una visión de eternidad y que no podemos hacer nada por nosotros mismos. Es sólo por Cristo y su sacrificio que nuestros pecados pueden ser perdonados, y su justicia dada a nosotros. “El asunto del santuario debería ser claramente comprendido por el pueblo de Dios” (La Fe por la Cual Vivo, p. 205). “Todos tenemos que tener en cuenta el tema del santuario en nuestra mente. Dios no permita que el ruido de palabras que salen de los labios humanos disminuya la creencia de nuestro pueblo en la verdad de que hay un santuario en el cielo y que un modelo de este santuario fue construido una vez en esta tierra. Dios desea que su pueblo se familiarice con este modelo, manteniendo siempre ante sus mentes el santuario celestial. Debemos mantener nuestras mentes apoyadas en la oración y el estudio de la palabra de Dios; que podamos comprender estas verdades.” (E.G. White, Carta 233, 1904)

Sugerencias para los Tiempos de Oración • Mantenga sus oraciones cortas—una o dos oraciones en un tópico en específico. Dale a otros su

turno. Puedes orar cuantas veces quieras, así como hablas en una conversación. • No le tengas miedo al silencio, ya que les da tiempo a todos para escuchar al Espíritu Santo. • Cantar juntos mientras el Espíritu te guía es una gran bendición. No necesitas un piano para esto;

cantar acapella está bien. • En vez de usar su tiempo de oración valioso hablando acerca de sus pedidos de oración,

simplemente ore por ellos. Luego otros también pueden orar por sus pedidos y clamar las promesas que necesitas.

Reclamar las Promesas Cuando oramos es fácil enfocarnos en nuestras necesidades, dificultades, retos—y llorar sobre nuestra

situación. Pero este no es el propósito de la oración. La oración está destinada a fortalecer nuestra fe. Por tal razón, te animamos a que clames las promesas de Dios en su tiempo de oración. Ellas te ayudarán a quitarte los ojos de ti mismo y tu debilidad y ponerlos en Jesús.

“Toda promesa que está en la Palabra de Dios es nuestra. En vuestras oraciones haced referencia a la palabra empeñada por Jehová y por la fe reclamad sus promesas” (En los Lugares Celestiales, p. 73).

¿Cómo puede clamar sus promesas? Por ejemplo, cuando ora por paz, puedes clamar Juan 14:27 y decir, “Señor, tu nos has dicho en tu palabra, ‘La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden’ Dame la paz que tú has prometido dejarnos.” Agradece al Señor porque te da paz, aunque no la sientas en ese lugar y momento.

Hemos preparado un documento, “Promesas para Reclamar en la Oración,” con diferentes promesas que puedes clamar. Cuando ores ten estas promesas cerca. Clama las promesas de Dios ene oraciones públicas y privadas.

Ayuno Te animamos a que ayunes como Daniel durante estos diez días. Comenzar el año con oración y ayuno es una

gran manera para consagrar nuestras vidas a Dios en el año que viene. “De ahora en adelante hasta el fin del tiempo, los hijos de Dios debieran ser más fervientes y más despiertos, y no confiar en su propia sabiduría, sino en la sabiduría de su Caudillo. Ellos debieran dedicar días especiales al ayuno y la oración.

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No es necesario que se abstengan de alimento, pero debieran comer con moderación alimentos sencillos” (Consejos Sobre el Régimen Alimenticio, p. 223).

Sabemos de Daniel, que comió frutas y vegetales por diez días. Nosotros también te animamos a que adoptes una dieta sencilla durante estos diez días. Una dieta sencilla que elimina las azucares, comida procesada y refinada, y sodas nos beneficia en diferentes niveles. Primero, comer simplemente significa menos tiempo necesario para preparar la comida y más tiempo disponible para pasar con el Señor.

Segundo, mientras más sencilla nuestra dieta, más fácil es para nuestro estomago digerirla y nuestras mentes estarán más claras. Pero el ayuno no solo es abstenerse de la comida. También animamos a que te abstengas del televisor, películas, juegos de computadora e incluso Facebook y YouTube. Algunas veces las cosas que no son malas en si, como Facebook y YouTube, pueden tomar mucho de nuestro tiempo.

Ponga a un lado todo lo posible, para que pueda pasar más tiempo con el Señor.

Espíritu Santo Asegúrese pedirle al Espíritu Santo a que te demuestre como o que debes orar en la vida de una persona o en

una situación particular. No solamente debemos orar en el nombre de Cristo, sino por la inspiración del Espíritu Santo. Esto explica lo que significa el pasaje que dice que “el mismo Espíritu pide por nosotros con gemidos indecibles.” Dios se deleita en contestar tal oración. Cuando con fervor e intensidad expresamos una oración en el nombre de Cristo, hay en esa misma intensidad una prenda de Dios que nos asegura que él está por contestar nuestra oración “mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos”. (Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 113)

Fe

Se nos dice en el Espíritu de Profecía que, “La oración y la fe harán lo que ningún poder en la tierra podrá hacer” (El Ministerio de Curación, p. 407). “Tomad tiempo para orar, y al hacerlo, creed que Dios os oye. Mezclad fe con vuestras oraciones. Puede ser que no todas las veces recibáis una respuesta inmediata, pero entonces es cuando la fe se pone a prueba. Sois probados para ver si confiaréis en Dios, si tenéis una fe viviente y estable. ‘Fiel es el que os llama, el cual también lo hará’. 1 Tesalonicenses 5:24. Recorred el paso angosto de la fe. Confiad en las promesas del Señor. Confiad en Dios en medio de las tinieblas. Ese es el tiempo cuando se debe manifestar fe” (Testimonios para la Iglesia, tomo 1, p. 156).

También se nos dice, “cualquier don que él haya prometido; luego tenemos que creer para recibir y dar gracias a Dios por lo que hemos recibido (La Educación, p. 258). Así que, haz un hábito de agradecer a Dios por adelantado lo que Él va hacer y el cómo va contestar tus oraciones.

Ore por Siete Te animamos a que ores de forma especial durante estos diez días por siete personas las cuales te gustaría ver

acercándose a Dios. Pueden ser miembros de familia, amigos, compañeros de trabajo, vecinos o simplemente personas conocidas. Tome un tiempo y pida a Dios por quien a EL le gustaría que usted orara. También pídele a que te de un fervor ardiente por estas personas. Pide que puedes hacer por estas personas, después de los Diez Días de Oración, para poder ayudar a revelar el carácter de amor de Dios.

Haz Algo por los Demás—Total Involucramiento de los Miembros

Cada vez que pasamos tiempo de calidad orando, esto conducirá a satisfacer las necesidades de las personas en formas prácticas. Te animamos a que te unas a la Iglesia Adventista del Séptimo Día alrededor del mundo para involucrarse y compartir el amor de Jesús. ¿Qué pasaría si cada persona que conoce a nuestro Salvador hiciera algo para compartir a Cristo con otros? ¿Qué pasaría si pusiéramos a un lado nuestro egoísmo y nos moviéramos de nuestra zona de confort para ayudar a otros a experimentar el amor de nuestro maravillosa Padre? La Conferencia General ha lanzado una iniciativa llamada Total Involucramiento de los Miembros y te animamos a que seas parte de ello. Hemos preparado una lista de

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actividades sugeridas que usted y su grupo de oración pueden hacer juntos después de los Diez Días de Oración. Mientras trabajas para organizar todo, sólo recuerda evitar que estos arreglos te distraigan de la oración.

Digamos al mundo la maravillosa noticia de la salvación. ¡Hagamos nuestra parte para que Cristo pueda venir pronto y llevarnos a casa!

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¡Bienvenido!

Guía del Líder

¡Bienvenido a los Diez Días de Oración 2017! Dios ha obrado muchos milagros a través del programa Diez Días de Oración desde que empezó como “Operation Global Rain” en 2006. El Espíritu Santo ha forjado reavivamiento, conversiones, una renovada pasión por el evangelismo y ha curado relaciones.

Esta guía tiene como objetivo ayudarle como líder. La primera sección cubre tópicos relacionados a los Diez Días de Oración 2017 y la segunda parte incluye consejos que ayudará a ti y a su grupo. Recuerda que esto solos son recursos e ideas. Siéntese libre de cambiar cosas mientras el Espíritu te guía.

Durante los Diez Días de Oración, 11-21 de enero de 2017, su grupo deberá reunirse personalmente a diario o una oración en unidad de una hora utilizando el teléfono. Si su iglesia no puede llevar a cabo los Diez Días de Oración entre el 11 y 21 de enero, entonces le animamos a que escoja otra ocasión más adecuada. El undécimo día, 21 de enero, cae sábado. Este día es una celebración de todo lo que Dios ha hecho en respuesta a la oración en unidad. Esperemos que estas ideas y sugerencias ayuden a que los Diez Días de Oración sea una experiencia poderosa para su pequeño grupo o familia de la iglesia.

Mientras embarcas este viaje, toma tiempo para leer los testimonios de aquellos que han participado en los Diez Días de Oración 2016:

“Como iglesia comenzamos a orar por la lluvia, porque nuestro país estaba pasando por una sequía. Era perturbador y todas las personas estaban en pánico, pero quiero agradecer a Dios, porque después de tres días Él contestó nuestras oraciones. Ahora llueve todos los días y quiero agradecer a Dios por una oración contestada.” Lee Moyo

“Estoy alabando a Dios por lo que Él ha hecho en nuestra iglesia Njiro SDA en Arusha, Tanzania. Una dama, musulmana, atendió los Diez Días de Oración en sábado y volvió el lunes confesando que ella estaba dependiendo de medicinas de magos y brujería para conseguir trabajo, pero ahora, después de atender el sermón del sábado, ella decidió botarlas y depender solo de Jesús. Dos días después de botar los medicamentos, ella fue llamada para un trabajo como gerente de logística en una gran compañía de transporte en Dar es Salaam y ahora ella se está preparando para el bautismo que será el próximo sábado. Alexis Nzitonda, Tanzania

“Comenzamos nuestros Diez Días de Oración en el día 10 de este mes y hemos estado experimentando la paz que Cristo nos da en nuestros corazones a pesar de los desafíos que tenemos. Uno de los miembros de nuestro grupo ha visto como Dios ha bendecido su vida al proveer un nuevo trabajo localizado en nuestra ciudad capital. Dios ha bendecido a otra hermana quien es una madre soltera con dos niños pequeños al decirle a la esposa de un maestro que comprará comida para ella. Dios, también contestó las oraciones de una abuela por su nieta quien todavía es una pequeña, pero estaba enferma y en el hospital. En el día 14 de este mes esa niña estaba curada. Continuamos nuestras secciones de oración a las 4:00 de la mañana en nuestra pequeña iglesia en la aldea de Tanoliu, localizada en la parte norte de la isla de Efate en Vanuatu. Todos somos bendecidos por el Espíritu Santo al unirnos a los Diez Días de Oración.” Sharon Timothy, Vanuatu

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“He estado orando por mi hijo durante estos diez días de oración y él ha sido bendecido con un nuevo trabajo al cual ama.” Marianne McFeeters

“Pedí ayuda por el tiempo que paso en todo tipo de medios de comunicación, especialmente la televisión y durante el primer día de oración fui dirigida a que ayunara de toda la televisión durante los diez días de oración, y me demostraron formas de cómo llenar mi mente con comida espiritual en vez medios corruptos. Estos diez días fueron de gran bendición que tenemos la intención de establecer tiempos de oración regulares y más largos.” John Weston

Información General de los Diez Días de Oración ¿Por qué un viaje de oración por el santuario?

El tema del santuario deberá ser estudiado cuidadosamente, ya que es una de las piedras fundamentales de nuestra fe y esperanza. Nos enseña el trabajo que Cristo está haciendo por nosotros. Nos revela su carácter. También, nos dice que Cristo espera de nosotros y como debemos vivir en la tierra. Nos recuerda que debemos vivir con una visión de eternidad y que no podemos hacer nada por nosotros mismos. Es sólo por Cristo y su sacrificio que nuestros pecados pueden ser perdonados, y su justicia dada a nosotros.

Hojas Temáticas Diarias

Una hoja temática ha sido preparada por cada uno de los diez días. La primera página sugiere un plan para el tiempo de oración e incluye ideas para temas específicos de oración y canciones sugeridas para cantar juntos. La segunda página contiene pasajes de la Biblia y Elena G. de White que añaden percepción al tema de la noche. Recomendamos que saque copia a las hojas temáticas para que cada participante pueda tener una para poder seguir el tiempo de oración. Puedes ser copiadas por delante y por detrás.

Iglesias alrededor del mundo se unirán en la oración con cada tema diario. Únase con ellos en oración a través de las escrituras, citas y sugerencias de oración en cada hoja temática. Mientras más centrado estés en la temática, será más significativo su tiempo de oración. Sin embargo, usted no se ve obligado a adherirse únicamente a la hoja temática; simplemente déjale guiarte. No tienes que orar por todos los puntos ordenadamente—solo son puntos sugeridos a incluir.

Trasfondo del Santuario Asegúrese que su grupo está familiarizado con el santuario del desierto que fue construido por Moisés de

acuerdo a las instrucciones de Dios. Lean juntos Éxodo 40 o motive a sus miembros del grupo a que los revisen en sus hogares. Si es posible, traiga una foto o un diagrama del santuario en cada reunión, para que el grupo pueda visualizar el diseño.

Puedes tener miembros del grupo que anteriormente no han estudiado la relación entre el santuario terrenal, el santuario celestial y el plan de salvación. Si es así, pueden reunirse antes de los Diez Días de Oración para introducir el tópico con un sencillo estudio bíblico.

Pasajes de Elena White en las Diferentes Partes del Santuario Hemos incluido varios versos de la Biblia y pasajes de Elena White para cada noche. Estos pasajes hablan

acerca de diferentes partes del santuario y por qué son relevantes para nosotros. Le sugerimos que los lea junto con su grupo. Esto se puede realizar al principio del tiempo de oración, para preparar el escenario para el tema del día o algún parte del tiempo de oración.

Tiempo Sugerido para Cada Sección de Oración

Cuánto tiempo pasarás en cada sección de oración variará cada vez que oren juntos. Los siguientes marcos de tiempo son sugerencias para lo que normalmente funciona bien:

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• Bienvenida/Introducción: 2-5 minutos • Leer las Escrituras y Pasajes de Elena White: 3 minutos • Alabar a Dios en el Tiempo de Oración: 10 minutos • Confesión y Reclamar Victoria Sobre el Pecado: 3-5 minutos • Suplica e Intercesión en el Tiempo de Oración: 35 minutos • Agradecimiento en el Tiempo de Oración: 10 minutos

Intercede por Siete Anime a cada persona a pedirle a Dios que les muestre siete personas para orar durante los diez días.

Pueden ser miembros de familia, amigos, compañeros de trabajo, miembros de iglesia, etc. Anímelos a orar para que el Espíritu Santo guíe a estas siete personas para que se conviertan a Jesús. Miembros del grupo también deberían pedir a Dios que le demuestre como pueden orar por necesidades específicas y que alcancen estas siete personas durante los diez días.

Servicios de Sábado Durante los Diez Días de Oración 2017

Ten una oración con un enfoque especial y compartan testimonios de las oraciones contestadas durante los servicios de ambos sábados. Se creativo—hay muchas maneras para compartir con la familia de la iglesia lo que está pasando durante las reuniones diarias de oración.

Celebración para el Último Sábado

Especialmente, el último sábado, deberá ser diseñado como un tiempo de gran regocijo en todo lo que Dios ha hecho durante los diez días. Incluya tiempo suficiente para los testimonios de las oraciones contestadas, predicación/aprendizaje bíblico acerca de la oración y alabanzas. Guie a la congregación en un tiempo de oración, para que aquellos que no han atendido las reuniones diarias puedan experimentar el gozo de orar con otros. Vea los materiales del Día 11 para más ideas.

Seguimiento a los Diez Días de Oración 2017—Total Involucramiento de

los Miembros Ore mucho para saber qué es lo que quiere Dios que su iglesia/grupo continúe haciendo lo que Él ha

comenzado durante los “10 Días de Oración 2017”. Quizás continuarás con una reunión de oración semanal. O quizá Dios quiera que comiences un nuevo ministerio en su iglesia o un acercamiento a la comunidad. Sea abierto y siga donde Dios lo guíe. Se sorprenderá a medida que camine con Él.

Especialmente le animamos a que haga algo practico para otros. Nos solo deberíamos orar por las personas, sino también llegar de manera tangible. La Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día ha lanzado una tremenda iniciativa llamada Total Involucramiento de los Miembros e invitamos a cada miembro e iglesia que se unan a este alcance. Las personas están esperando algo mejor, por algo que nosotros tenemos, pero ellos no. No guardemos los regalos de Dios para nosotros mismos, sino compartámoslos. ¡Usemos nuestros talentos para decirle a otros sobre nuestro amante Salvador!

Hemos incluido un documento con actividades sugeridas. A través de la oración escoja una o varias actividades que son adecuadas para tu grupo, después escoge un día, y sean las manos y pies de Jesús. Si solo oramos y nos compartimos a Jesús con otros, tarde o temprano dejaremos de orar. Así que, pide a Dios que te demuestre como ser un ejemplo para aquellos que lo necesitan.

Testimonios ¡Por favor comparte historias de como Dios ha obrado durante los Diez Días de Oración 2017! Sus

historias serán un estímulo para muchos otros. Los testimonios pueden enviarse a [email protected] o sometidos a www.tendaysofprayer.org

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Puntos Importantes de la Oración en Unidad Estar de Acuerdo

Cuando alguien ora una petición a Dios, asegúrese que otros oren por la misma petición y estén de acuerdo—¡esto es poderoso! No piense que, si una persona ya oro por la petición, no necesitan orar por ella. “Además les digo que, si dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi Padre que está en el cielo.” (Mt. 18:19) ¡Que alentador es ser levantado en oración!

Reclamar las Promesas de Dios

Hemos preparado un documento con diferentes promesas que pueden ser reclamadas en oración. Anime al grupo a clamar las promesas de Dios mientras oran. Es muy fácil enfocarnos en nuestros problemas. Pero cuando clamamos las promesas de Dios, incrementamos nuestra fe y nos recuerda que nada es imposible con Dios. Las promesas nos ayudan a despejar nuestra debilidades y dificultades, y ponerlas en Jesús. Por cada debilidad y cada dificultad podemos encontrar promesas bíblicas para reclamar. Anime a las personas a buscar por mas promesas y escríbelas para que las puedas clamar en el futuro.

“Con sincera sencillez debemos declarar nuestras necesidades al Señor, y reclamar sus promesas con tal fe y confianza, que la congregación sepa que hemos aprendido a prevalecer en oración con Dios. Los hermanos se sentirán animados a creer que la presencia del Señor está en la reunión, y abrirán sus corazones para recibir su rica bendición. Su fe en vuestra sinceridad será aumentada, y estarán listos para escuchar con oídos dispuestos la instrucción dada por el predicador.” (El Evangelismo, p. 111)

Ayuno Invite a aquellos que estén contigo en los Diez Días de Oración para considerar algún tipo de ayuno, tales

como el ayuno de la televisión, música secular, películas, el Internet, dulces u otros tipos de comida que son difíciles de digerir. Utilicé tiempo extra para orar y estudiar la Biblia, pidiendo a Dios a que te ayudé y a tu congregación a permanecer más plenamente en Cristo. Al adoptar una dieta simple, los miembros del grupo permitirán a sus mentes más receptivas a la voz del Espíritu Santo.

Espíritu Santo

Asegúrese pedirle al Espíritu Santo a que te demuestre como o que debes orar en la vida de una persona o en una situación particular. La Biblia nos dice que no sabemos que no debemos orar por y que el Espíritu Santo es el que está intercediendo por nosotros.

No solamente debemos orar en el nombre de Cristo, sino por la inspiración del Espíritu Santo. Esto explica lo que significa el pasaje que dice que “el mismo Espíritu pide por nosotros con gemidos indecibles.” Dios se deleita en contestar tal oración. Cuando con fervor e intensidad expresamos una oración en el nombre de Cristo, hay en esa misma intensidad una prenda de Dios que nos asegura que él está por contestar nuestra oración “mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos”. (Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 113)

Unidad Física Al comenzar una sesión de oración en unidad, invite a todos a estar juntos. Cuando las personas se acercan a

formar un estrecho círculo, ayuda a promover un espíritu de unidad, lo cual es muy importante para la oración en unidad. Si las personas se dispersan en el cuarto, también es difícil escuchar las oraciones de las otras personas.

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Diario Tener un diario de oración durante los Diez Días de Oración puede ser una buena manera para los

participantes a internalizar el tema diario de oración, hacer compromisos concretos con Dios y reconocer sus bendiciones hacia ellos. Escribir nuestras oraciones y mantener un registro de las contestaciones de Dios es un camino seguro para la motivación.

Escribir en el diario puede ser incluido de varias formas en los Diez Días de Oración. Puede proveer tiempo durante la reunión de oración para que las personas escriban sus respuestas a Dios en su diario privado de oración. O puede tener un diario grupal de peticiones y contestaciones de oración—en una libreta, en un cartel grande o en línea. Una forma simple de hacer esto es dibujar una línea por la mitad del papel. Escriba las peticiones en la columna izquierda y las respuestas en la columna derecha. ¡Es emocionante y produce el contemplar hacia atrás y ver como Dios ha respondido las oraciones!

Reverencia Estimula y se ejemplo de una actitud reverente. Nos acercamos a la sala del trono del rey del universo. No

tratemos este tiempo de oración descuidadamente con nuestra postura o manierismos. Sin embargo, no es necesario que todos se arrodillen continuamente. Quieres que las personas estén cómodas por una hora, así que, anima a las personas a que se arrodillen, se sienten o se paren mientras Dios dirige o están cómodos.

Cuan Larga Debe Ser la Oración

Las oraciones tienen que ser cortas y al punto. Esto da oportunidad para que otros puedan orar también. Trate de limitar sus oraciones a unas pocas oraciones. Cada persona puede orar múltiples veces.

Oraciones hechas en frases cortas mantiene el tiempo de oración interesante y permite al Espíritu Santo impresiona al grupo a como orar. No necesitas abrir t cerrar cada oración con frases tales como, “Querido Dios” y “Amen.” Es una conversación continua con Dios.

Silencio

Como líder, no domine el tiempo de oración. La meta es lograr que otros oren. Tiempos de silencios maravillosos, pues dan tiempo a Dios para hablar a nuestros corazones. Permite que el Espíritu Santo trabaje y dele tiempo a todos para orar.

Cantar

Grupos de canciones espontaneas, entrelazadas entre oraciones, añaden belleza a la reunión de oración. Un listado de canciones apropiadas aparece al final de cada hoja temática. No sienta que necesite usar todas las canciones—estas son simplemente sugerencias. El cantar es también una buena forma de transición de una sección de oración a otra.

Tomando Pedidos de Oración

No solicite peticiones de oración del grupo. En vez, dígale a las personas que oren por sus pedidos y anime a otros a unirse en acuerdo y oración por esos pedidos. ¡He aquí por qué: tiempo! El mencionar los pedidos tomaran demasiado tiempo del momento de oración. Satanás se alegra si nos pueden mantener hablando acerca del problema en vez de estar orando acerca del problema. Los miembros del grupo a menudo comenzaran aconsejar y sugerir soluciones. ¡El poder es de Dios! Mientras más oramos, más de su poder es liberado.

Tu Tiempo Diario ¡Esto es tan importante! Asegúrese que usted como líder está tomando tiempo diariamente a los pies de Jesús,

hablando con El y leyendo su palabra. Si haces el conocer a Dios una prioridad en su vida, se abrirá una hermosa experiencia para usted. “Del lugar secreto de oración fue de donde vino el poder que hizo

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estremecerse al mundo en los días de la gran Reforma. Allí, con santa calma, se mantenían firmes los siervos de Dios sobre la roca de sus promesas.” (El Conflicto de los Siglos, p. 192)

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10 Días de Oración 2017 www.tendaysofprayer.com

Día 1—Entra a Sus Puertas con Acción de Gracias “Entren por sus puertas con acción de gracias; vengan a sus atrios con himnos de alabanza; denle

gracias, alaben su nombre.” Salmos 100:4

Formato Sugerido para el Tiempo de Oración

Alabaza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios por lo que es, por su amor, su sabiduría, su

santidad, etc. • Alaba a Dios que “Su presencia me llena de alegría” (Sal. 16:11) • Alaba a Dios por el santuario y las enseñanzas que podemos aprender de él.

Confesión y Reclamar Victoria sobre el Pecado (aproximadamente 5 min.)

• Pide a Dios que te demuestre los pecados que necesitas confesar en tu corazón. Clama Su victoria sobre esos pecados.

• Pide a Dios perdón por no tener siempre un corazón agradecido. • Agradece a Dios porque Él perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9.

Suplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos)

• Ore para que Dios le dé un espíritu agradecido. • Ore para que puedas aprender a regocijarte en las pruebas a través del Espíritu Santo que

permanece en su corazón diariamente. • Ore para que sus palabras sean palabras de alabanza y agradecimiento que dirigen a las personas

a Jesús. • Pide a Dios que te ayude a reflejarlo en tus palabras. • Ore para que Dios lo ayude a entender el mensaje del santuario y su significado en tu vida. • Ore para que podamos levantar a Cristo y el crucificado y regresando otra vez—porque Él es

nuestro Salvador y Señor, que nos ha dado su último mensaje de advertencia de amor y redención para proclamar al mundo.

• Ore por todos los miembros de la iglesia para que puedan sentir la carga de alcanzar almas a medida que seguimos los pasos de Cristo e interactuamos con aquellos que necesitan una relación personal con el Señor.

• Ore por un reavivamiento espiritual para los jóvenes de Adventistas del Séptimo Día que atienden colegios y universidades públicas a nivel mundial. Ore para que se conviertan en embajadores y misioneros vibrantes para Cristo.

• Ore por “Adventist Mission” al coordinar los proyectos de plantación de iglesias a nivel mundial y busca los fondos necesarios para enviar pioneros de “Global Mission” en áreas no alcanzadas.

• Ore por las personas que viven en las ciudades más grandes del mundo y que están rodeados por tantas cosas que los distrae de Jesús. Ore para que puedan oír el susurro del Espíritu Santo en medio de su entorno.

• Ore para que Dios levante más médicos misioneros para plantar iglesias entre los 830 grupos de personas dentro de los 11 países de la División África Centro Oriental.

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• Ore para que Dios levante jóvenes para plantar iglesias para los 750 grupos de personas dentro de los 13 países de la División Euro-Asiática.

• Ore por los ministerios de Capellanía Adventista al movilizar capellanes y miembros interesados a ministras aquellos que están en la prisión.

• Ore para que las siete (o más) personas en su lista vean la necesidad de abrir sus corazones al Espíritu Santo.

• Pide a Dios que te de oportunidades para expresar tu gratitud a Él delante de esas siete personas. Pide también que te demuestre como hacerlo.

• Ore por cualquier necesidad personal que tengas. Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos)

• Agradece a Dios por el gozo que puedes experimentar en Su presencia. • Agradece a Dios por el privilegio de ser testigo a través de las palabras de alabanza y

agradecimiento. • Agradece a Dios por las cosas maravillosas que Él va hacer en estos diez días.

Canciones Sugeridos Nuevo Himnario Adventista: “Da Gloria a Dios” (#2); “Todos Juntos Reunidos” (#12); “Con Acentos de Alegría” (#145). Viejo Himnario Adventista: “Mi Creador, Mi Rey” (#68); “Dad Gracias y Hoy Cantad” (#466).

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Entra a Sus Puertas con Acción de Gracias “Entren por sus puertas con acción de gracias; vengan a sus atrios con himnos de alabanza; denle

gracias, alaben su nombre.” Salmos 100:4

Alegrad vuestro trabajo con cantos de alabanza. Si queréis tener un registro limpio en los libros del cielo, nunca os impacientéis ni rezonguéis. Vuestra oración diaria sea: “Señor, enséñame a hacer lo mejor. Enséñame cómo trabajar más eficientemente. Dame energía y alegría” . . . Poned a Cristo en todo lo que hacéis. Entonces vuestra vida estará llena de alegría y agradecimiento. . . Hagamos lo mejor posible, avanzando gozosamente en el servicio del Señor, con nuestro corazón lleno de su felicidad. (Conducción de Niño, p. 136)

A medida que usted ofrece sus ofrendas de agradecimiento, Dios es glorificado, y le da más. A

medida que usted rebosa de agradecimiento, Él le da más gozo. Aprendemos a alabar a Dios, de quien provienen todas las bendiciones. ¿No comenzaremos aquí, hoy, a dar vuelta la página y a olvidar nuestras murmuraciones, quejas y críticas y a dominar la lengua para decir palabras corteses, y palabras amantes, y palabras de simpatía, y a expresar tierna bondad por cada uno de sus hijos? (Reflejemos a Jesús, p. 277)

Como seguidores de Cristo hemos de hacer que nuestras palabras sean motivos de ayuda y ánimo

mutuos en la vida cristiana. Necesitamos hablar mucho más de lo que solemos de los capítulos preciosos de nuestra experiencia. Debiéramos hablar de la misericordia y la amante bondad de Dios, de la incomparable profundidad del amor del Salvador. Nuestras palabras debieran ser palabras de alabanza y agradecimiento. Si la mente y el corazón están llenos del amor de Dios, éste se revelará en la conversación. No será un asunto difícil impartir aquello que forma parte de nuestra vida espiritual. Los grandes pensamientos, las nobles aspiraciones, las claras percepciones de la verdad, los propósitos altruistas, los anhelos de piedad y santidad, llevarán fruto en palabras que revelarán el carácter del tesoro del corazón. Cuando Cristo sea así revelado por nuestras palabras, éstas poseerán poder para ganar almas para él. (Ser Semejante a Jesús, p. 93)

Si verdaderamente amamos a Cristo, debemos glorificarlo con nuestras palabras. No creyentes a

menudo son convencidos al escuchar las palabras puras de alabanza y gratitud a Dios. (Review and Herald, 25 de enero de 1898)

El alabar a Dios de todo corazón y con sinceridad, es un deber igual al de la oración. Hemos de

mostrar al mundo y a los seres celestiales que apreciamos el maravilloso amor de Dios hacia la humanidad caída, y que esperamos bendiciones cada vez mayores de su infinita plenitud. Mucho más de lo que hacemos, debemos hablar de los preciosos capítulos de nuestra vida cristiana. Después de un derramamiento especial del Espíritu Santo, aumentarían grandemente nuestro gozo en el Señor y nuestra eficiencia en su servicio, al repasar sus bondades y sus maravillosas obras en favor de sus hijos. (Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 241)

El Señor Jesús es nuestra fortaleza y alegría, un gran almacén del cual, en cada ocasión, los

hombres pueden sacar fuerzas. Cuando lo escudriñamos, hablamos de Él, somos cada vez más capaces de contemplarlo—mientras utilizamos su gracia y recibimos las bendiciones que nos ofrece, tenemos algo que podemos utilizar para ayudar a otros. Llenos de gratitud, comunicamos a los demás las bendiciones que nos han sido dadas. Así, recibiendo e impartiendo, crecemos en gracia; y una corriente rica de gracia y gratitud constantemente fluye de nuestros labios; el dulce espíritu de Jesús enciende gratitud en nuestros

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corazones y nuestras almas son elevadas con un sentido de seguridad. La justicia inexcusable e injustificable de Cristo se convierte en nuestra justicia por medio de la fe.

Deje que las bendiciones refrescantes de cada día despierten alabanza en nuestros corazones por muestras de su cuidado amoroso. Cuando abres tus ojos en la mañana, dele gracias a Dios que Él te ha sostenido durante toda la noche. Dele gracias por su paz en tu corazón. Mañana, tarde y noche, que la gratitud tan dulce como el perfume ascienda al cielo… (My Life Today, p. 171)

¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor! Alaben a Dios en su santuario, alábenlo en su

poderoso firmamento. Alábenlo por sus proezas, alábenlo por su inmensa grandeza. (Sal. 150: 1, 2)

Ustedes pueden ser exactamente lo que Cristo dijo que sus discípulos deberían ser: “La luz del

mundo”. Mateo 5:14. Ustedes deberían esparcir a otros esa luz, esperanza y fe. No deben marchar en su servicio quejándose, como si El fuera un capataz duro que pone sobre ustedes cargas que no pueden llevar. Este no es el caso. Él quiere que ustedes estén llenos de gozo, llenos de la bendición de Dios, a fin de que conozcan la longitud y la anchura y la altura y la profundidad del amor de Dios, que excede todo conocimiento. Cuando se menciona su nombre, Él quiere que haga vibrar la cuerda tónica y sus corazones responderán. Entonces podrán ofrecer acción de gracias y gloria y honor y alabanza a Aquel que se sienta en el trono y al Cordero. (Fe y Obras, p. 80)

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Día 2—El Altar del Holocausto “Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes,

en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.” Romanos 12:1


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su oración alabando a Dios por quien Él es. • Alabe a Dios por el regalo de salvación. • Agradece a Dios por el sacrificio de Jesús. • Alabe a Dios por la vida de Jesús, que nos enseñó como sacrificar el yo y entregar nuestra

voluntad a Dios.

Confesión y Reclamar Victoria Sobre el Pecado (aproximadamente 5 minutos)

• Pide a Dios que te enseñe que pecados debes confesar públicamente y cuales debes confesar en privado. Clama su victoria sobre esos pecados.

• Pide a Dios perdón por las veces que tuviste miedo de sacrificar lo que te hace tropezar. • Agradece a Dios porque Él perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9.

Suplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos) • Ore para que al igual que el altar del holocausto fue ungido con el aceite santo (Ex. 40:10), su

vida sea ungida por el Espíritu Santo, para que todo lo que ofrezcas y sacrifiques al Señor sea aceptable para Dios.

• Pídele a Dios que te quite cualquier cosa que te impida rendir su tiempo, dinero, fuerza, habilidades, miedos, esperanzas y voluntad. Cuéntale que quieres pertenecer enteramente a Cristo.

• ¿Hay alguna cosa en tu corazón que te impida entregarte completamente a Él? Díselo. Pide que te haga dispuesto a entregarte por completo.

• Ore para que su pastor local y líderes de iglesia en diferentes niveles puedan rendirse sin reservas a Dios y su servicio.

• Ore para que pasemos más tiempo estudiando los valores eternos a través de la oración y la Biblia. Ore para que la voluntad de Dios se realice en vez de la nuestra propia voluntad y pide al Espíritu Santo que nos mantenga alejados de las influencias mundanas y las tendencias que amenazan nuestra experiencia espiritual diaria.

• Ore para que los jóvenes de nuestra iglesia no tengan miedo de crucificar el yo. • Ore por todas las personas no cristianas. Ore para que el pueblo de Dios aprenda a construir

cualquier puente necesario para alcanzarlos. • Pide a Dios líderes de la iglesia que sean piadosos, educables y humildes que representen el

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liderazgo centrado en Cristo en la misión de la iglesia de proclamar los mensajes de los tres ángeles. También ore para que la justicia de Cristo este en el centro de estos mensajes.

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• Ore para que podamos organizar muchos “centros de influencia” en las grandes ciudades alrededor del mundo. Ore para que estos centros puedan ser una gran diferencia en la vida de las personas mientras descubren la verdad de Dios a través del servicio cristiano.

• Ore para que las siete (o más) personas en tu lista puedan ver su necesidad y abran su corazón al Espíritu Santo.

• Ore por cualquier necesidad que tengas.

Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos) • Agradece a Dios porque Él responderá según su voluntad y su tiempo. • Agradece a Dios que Él está dispuesto a tomar tu corazón pecador y hacerlo puro y santo. • Agradece a Dios que Jesús estaba dispuesto a vivir y morir, no por sí mismo, sino por aquel que

lo envió. • Agradece a Dios por revelarse en una manera especial en tu vida durante estos diez días de

oración.

Canciones Sugeridas Nuevo Himnario Adventista: “Tu Pueblo Jubiloso” (#28); ); “Te Quiero, Mi Señor” (#246); “Tuyo Soy, Jesús” (#253); “Salvador, a ti me rindo” (#261); “Cerca, Mas Cerca” (#451).

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El Altar del Holocausto “Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes,

en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.” Romanos 12:1

Cada mañana y tarde un cordero de un año fue sacrificado sobre el altar, simbolizando la consagración diaria de la nación y su constante dependencia a la expiación de la sangre de Cristo. Solo una ofrenda “sin mancha” podía ser un símbolo de su perfecta pureza de quien iba a ofrecerse como “un cordero sin mancha.” 1 Pedro 1:19. El apóstol Pablo dice, “por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.” Romanos 12:1. Aquellos que lo aman con todo su corazón desearán darle el mejor servicio de su vida, constantemente buscando traer todos los poderes de su ser en armonía con su voluntad. (From Eternity Past, p. 244)

Para que podamos alcanzar este alto ideal, debe sacrificarse todo lo que causa tropiezo al alma. Por medio de la voluntad, el pecado retiene su dominio sobre nosotros... A menudo nos parece que entregar la voluntad a Dios es aceptar una vida contrahecha y coja: pero es mejor, dice Cristo, que el yo esté contrahecho, herido y cojo, si por este medio puede el individuo entrar en la vida. Lo que le parece desastre es la puerta de entrada al beneficio supremo. (Reflejemos a Jesús, p. 369)

Dios no aceptará nada menos que una rendición incondicional. Los cristianos medio convertidos y pecadores nunca entraran en el cielo. Allí no encontrarían felicidad; porque no saben nada de los principios elevados y santos que gobiernan a los miembros de la familia real. (Cada Día con Dios, p. 143)

He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. (Ga. 2:20)

Requiere sacrificio entregarnos a Dios, pero es sacrificio de lo inferior por lo superior, de lo terreno por lo espiritual, de lo perecedero por lo eterno. No desea Dios que se anule nuestra voluntad, porque solamente mediante su ejercicio podemos hacer lo que Dios quiere. Debemos entregar nuestra voluntad a Él para que podamos recibirla de vuelta purificada y refinada, y tan unida en simpatía con el Ser divino que Él pueda derramar por nuestro medio los raudales de su amor y su poder. Por amarga y dolorosa que parezca esta entrega al corazón voluntarioso y extraviado, aun así, nos dice: “Mejor te es”. (Reflejemos a Jesús, p. 369)

El Señor tiene una gran obra para que hagamos, y él nos invita a contemplarlo, a confiar en él, a andar con él, y a conversar con él. Él nos invita a realizarle una entrega sin reservas de todo lo que tenemos y de todo lo que somos, para que cuando nos llame a sacrificarnos por él, estemos listos y dispuestos a obedecer. Gozaremos de la plenitud de la gracia divina únicamente cuando le entreguemos todo a Cristo. Conoceremos el significado de la verdadera felicidad únicamente cuando mantengamos el fuego ardiendo en el altar del sacrificio. Dios recompensará en el futuro a aquellos que han hecho el máximo en el presente. ... Él nos prueba cada día, bajo diferentes circunstancias; y elogia a sus obreros en cada esfuerzo sincero que éstos realizan, no porque sean perfectos, sino porque están deseosos de trabajar desinteresadamente para él, y porque ven que mediante la relación con él pueden obtener perfección. (Nuestra Elevada Vocación, p. 193)

El llamado de Cristo al sacrificio y a una entrega sin reservas significa la crucifixión del yo. Para obedecer este llamado debemos tener una fe incondicional en El como Ejemplo perfecto, y una clara comprensión de que hemos de representarlo ante el mundo. Quienes trabajen para Cristo han de hacerlo a

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la manera de Él. Han de vivir su vida. Su invitación a una entrega incondicional ha de ser suprema para ellos. No han de permitir que vínculo o interés terrenal alguno les impida rendirle el homenaje de sus corazones y el servicio de sus vidas. Perseverante e incansablemente han de trabajar con Dios para salvar las almas que perecen del poder del tentador. (Alza tus Ojos, p. 233)

La invitación a ponerlo todo sobre el altar del servicio le llega a cada uno. No se nos pide a todos que sirvamos como sirvió Eliseo, ni somos todos invitados a vender cuanto tenemos; pero Dios nos pide que demos a su servicio el primer lugar en nuestra vida, que no dejemos transcurrir un día sin hacer algo que haga progresar su obra en la tierra. Él no espera de todos la misma clase de servicio. Uno puede ser llamado al ministerio en una tierra extraña; a otro se le pedirá tal vez que dé de sus recursos para sostener la obra del Evangelio. Dios acepta la ofrenda de cada uno. Lo que resulta necesario es la consagración de la vida y de todos sus intereses. Los que hagan esta consagración oirán el llamamiento celestial y le obedecerán. (Profetas y Reyes, p. 165)

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Día 3—El Lavacro “Acerquémonos, pues, a Dios con corazón sincero y con la plena seguridad que da la fe, interiormente

purificados de una conciencia culpable y exteriormente lavados con agua pura.” Hebreos 10:22


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios por quien es (su carácter). • Alabe a Dios porque quiere lavar todos tus pecados. • Alabe a Dios porque Él te está llamando a vivir puramente y sanamente.

Confesión y Reclamar Victoria sobre el Pecado (aproximadamente 5 minutos) • Pide a Dios que te enseñe si hay algún pecado que necesitas confesar privadamente. Clama su

victoria sobre esos pecados. • Pide a Dios que perdone las veces tus palabras y actos no demostraron la pureza del carácter. • Agradece a Dios porque Él perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9.

Suplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos) • Ore para que al igual que el lavacro fue ungido con aceite santo (Ex. 40:11), el Espíritu Santo

limpie y purifique tu corazón. • ¿Hay alguna área en tu vida donde no se refleja la limpieza y purificación que Cristo desea para

ti? Entrégalo a Dios. • ¿Tu casa es un lugar limpio y puro? Pídele a Dios a que te ayude hacer tu casa un lugar donde los

ángeles aman morar. • ¿A veces tienes dificultades manteniendo tus pensamientos positivos y puros? Rinde tus

pensamientos a Dios y pídele que los santifique. • Ore para que los niños y jóvenes de la iglesia puedan entender la importancia de la limpieza y

pureza en el hogar y también en sus conversaciones y pensamientos. • ¿Conoces a alguien quien lucha en el área de limpieza y pureza, interior y exterior? Póngalos en

oración. • Ore para que podamos llevar personas a Cristo y su justicia como el único camino hacia la vida

eterna. • Ore por el creciente énfasis en “Reavivamiento y Reforma” en todo el mundo. Ore por este

reavivamiento para ti, tu familia, tu iglesia y tu comunidad. Ore también por la participación en actividades de oración en todo el mundo, al suplicar juntos por la lluvia tardía del Espíritu Santo y el cumplimiento de Joel 2, Ósea 6 y Hechos 2.

• Pide a Dios que proteja a nuestros jóvenes y a nosotros de las influencias mundanas al enfocarnos en la Biblia y servicio desinteresado a otros.

• Ore por el número creciente de personas seculares en el mundo que no tienen algún interés en la religión. Ore para que el Espíritu Santo pueda derrumbar paredes que han construido en su corazón.

• Ore por las naciones musulmanas y los grupos del mundo que permanecen resistentes a Jesucristo. Ore para que puedan oír y responder al evangelio.

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• Ore para que Dios pueda levantar misioneros urbanos que construyan iglesias en los 806 grupos de personas dentro de los 20 países de la División Inter-Europea.

• Ore para que las siete (o más) personas en tu lista permitan a Dios poner un deseo de pureza en sus corazones.

• Ore por cualquier necesidad que tengas. Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos)

• Agradece a Dios porque “por dentro nos vamos renovando día tras día.” (2 Co. 4:16) • Agradece a Dios que Él está dispuesto a vivir en tu corazón. • Agradece a Dios que Él ha enviado ángeles para contestar las oraciones que has orado en esta

semana.

Canciones Sugeridas Nuevo Himnario Adventista: “Tu Pueblo Jubiloso” (#28); “Te Quiero, Mi Señor” (#246); “Tuyo Soy, Jesús” (#253); “Salvador, a ti me rindo” (#261); “Dulce Comunión” (#374); “Como la Mujer Junto al Pozo” (#456).

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El Lavacro “Acerquémonos, pues, a Dios con corazón sincero y con la plena seguridad que da la fe, interiormente

purificados de una conciencia culpable y exteriormente lavados con agua pura.” Hebreos 10:22

Entre el altar y la puerta del tabernáculo estaba el lavacro, que también era de bronce, hecho de los espejos que habían sido la ofrenda voluntaria de las mujeres de Israel. En el lavacro los sacerdotes se lavaban sus manos y sus pies cada vez que entraban a los compartimientos sagrados o se acercaban al altar para ofrecer un sacrificio al Señor. (Christ in His Sanctuary, p. 26)

¿Qué impresión tenía esto sobre la gente? Era para demostrarles que cada partícula de polvo debe

ser eliminada antes que llegue a la presencia de Dios, porque Él era tan alto y santo que a menos que cumplieran con estas condiciones, la muerte seguiría… (Gospel Workers, 1982, p. 162)

Dios requiere que todos los que profesan ser su pueblo elegido, aunque no sean maestros de la

verdad, sean cuidadosos de preservar la limpieza y pureza personales, también la limpieza y el orden en sus casas y en su lugar de trabajo. Somos ejemplos para el mundo, epístolas vivientes conocidas y leídas por todos los hombres. Dios requiere que todos los que profesan piedad, y especialmente los que enseñan la verdad a los demás, se abstengan de toda apariencia de mal (Testimonios para la Iglesia, Tomo 2, p. 543)

La verdad nunca pone sus pies delicados en el camino de impureza e inmundicia… El, quien era tan particular que los hijos de Israel debían acariciar hábitos de limpieza, no sancionará cualquier impureza en los hogares de sus hijos de estos tiempos. Dios desfavorece cualquier impureza.

Las esquinas sucias y descuidadas en la casa tenderán a hacer esquinas impuras y descuidadas en el alma. (My Life Today, p. 129)

Los cristianos serán juzgados por los frutos que produzca la obra de reforma. Mostrarán el efecto

que produjo en ellos cada verdad. El que llega a ser hijo de Dios debe practicar hábitos de orden y limpieza. Por pequeña que sea, cada acción ejerce su influencia. El Señor desea que cada ser humano sea un agente por intermedio del cual Cristo pueda manifestar el Espíritu Santo. No hay razón para que los cristianos sean indiferentes o descuidados con relación a su apariencia exterior. Deben ser pulcros y estar bien arreglados, pero sin adornos. Interior y exteriormente también deben ser puros. (Recibiréis Poder, p. 94)

Todas las filosofías de la naturaleza humana han venido a parar en confusión y vergüenza,

siempre que Dios ha dejado de ser reconocido como todo en todo. Pero la preciosa fe inspirada de Dios comunica fuerza y nobleza de carácter. Al espaciarse en su bondad, su misericordia y su amor, la percepción de la verdad se hará cada vez más clara; el deseo de la pureza de corazón y de la claridad de pensamiento se hará también más elevado y más santo. Moviéndose el alma en la pura atmósfera de santos pensamientos, se transforma por su comunión con Dios mediante el estudio de su palabra. La verdad es tan amplia, de tanto alcance, tan profunda, tan ancha, que se pierde uno a sí mismo de vista. El corazón se ablanda y se rinde en la humildad, la bondad y el amor. (La Fe por la Cual Vivo, p. 225)

Dios ama la pureza, la limpieza, el orden y la santidad. Dios requiere que, en su pueblo, a quienes

faltan estas cualidades, las busquen y no descansen hasta que las hayan obtenido. Deben iniciar la obra de reforma y elevar sus vidas, para que en conversación y en comportamiento, en sus actos y sus vidas, sean una continua recomendación de su fe y tengan un poder de tal manera ganador y competente sobre los incrédulos, que se vean inducidos a reconocer que son los hijos de Dios.

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La verdad como está en Jesús, no degradará, sino que elevará a quien la recibe, purificará su vida, refinará su gusto y santificará sus juicios. (Nuestra Elevada Vocación, p. 232)

Por tanto, sean perfectos, así como su Padre celestial es perfecto. (Mat. 5:48)

En la medida en que Dios actúa en el corazón por intermedio de su Santo Espíritu, el hombre

debe cooperar con él. Los pensamientos deben ser controlados y refrenados para que no sigan la tendencia a contemplar asuntos que debilitan y corrompen al ser entero. Si deseamos que el cielo acepte las palabras que expresamos, y que al mismo tiempo sean provechosas para quienes las escuchen, la pureza debe caracterizar nuestra manera de pensar. (Recibiréis Poder, p. 54)

Por último, hermanos, consideren bien todo lo verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo

lo puro, todo lo amable, todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que sea excelente o merezca elogio. (Flp. 4:8)

El cielo es puro y santo y los que pasen por las puertas de la ciudad de Dios, deben revestirse

aquí de pureza interior y exterior. (La Segunda Venida y el Cielo, p. 93)

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Día 4–La Mesa del Pan de la Proposición “Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree,

no tendrá sed jamás.” Juan 6:35


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios por quien Él es. • Alabe a Dios que Jesús es el Pan de Vida. • Alabe a Dios que le está invitando a comer de este pan de vida.


• Pida a Dios que le muestre si está impidiendo rendir alguna cosa a Él. Confiese esto a Él privadamente.

• Reclame victoria sobre estos pecados. • Agradece a Dios por su perdón de acuerdo a 1 Juan 1:9.

Súplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos)

• Pida a Dios que, así como la mesa del pan de la proposición era ungida con aceite (Éxodo 40:9), el Espíritu Santo le pueda dirigir y enseñar en el estudio de la Biblia.

• Ore que Dios pueda ayudarle a comer el Pan de Vida diariamente y pasar tiempo diariamente en la Palabra.

• Ore que los líderes de iglesia (su pastor de iglesia local, Líderes de asociación, unión y Conferencia General) pasen tiempo diariamente estudiando la Palabra de Dios.

• Ore que Dios le enseñe como compartir el Pan de Vida con otros. • Ore por un enfoque renovado en el estudio de los libros de Daniel y Apocalipsis, con un

énfasis particular en las bendiciones del servicio del santuario. • Ore por una mayor participación en la lectura personal diaria de la Biblia siguiendo el

programa “Creed en sus profetas” el cual enfatiza el estudio de la Biblia y del espíritu de profecía.

• ¿Tiene amigos o conocidos que no se están alimentando del Pan de Vida sino de cosas temporales que el mundo ofrece? Ore por ellos. Pida a Dios que le indique como ayudarles a entender la importancia de tomar tiempo para comer el pan celestial.

• Ore por el grupo de personas asiáticas que incluye a los budistas e hindúes, muchos de los cuales nunca han escuchado acerca de Jesús o de lo que Él ha hecho. Ore que Dios nos dé sabiduría especial para saber cómo alcanzar estos corazones.

• Ore para que Dios levante un ejército de obreros para plantar iglesias entre 948 grupos de personas dentro de 38 países de la División Interamericana.

• Ore que Dios levante mártires dispuestos a trabajar entre 746 grupos de personas entre 20 países de la Unión del Medio oriente Norte de África.

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• Ore por las personas en la Ventana 10/40, donde hay muy poca influencia cristiana. Ore que Dios abra los corazones de las personas para recibir las buenas nuevas de Jesús.

• Ore por un aumento en el aprecio por los escritos del Espíritu de Profecía como aplicables hoy en día. Ore que los líderes y miembros de iglesia lean las instrucciones, los consejos y palabras de ánimo regularmente.

• Ore que siete (o más) personas en su listado de oración puedan entender la necesidad de leer la Palabra de Dios y alimentarse del Pan de Vida.

• Ore por cualquier necesidad personal que pueda tener.

Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos) • Agradece a Dios por las maneras que Jesús da ejemplo en como pasar tiempo diariamente en

comunión con el Padre. • Agradece a Dios por adelantado por cómo Él va a responder a sus oraciones.

Canciones Sugeridas

Nuevo Himnario Adventista: Yo temprano busco a Cristo, (#603); Como la mujer junto al pozo, (#456); Fija tus ojos, (#211); Cristo me ayuda por El a vivir, (#408). Antiguo Himnario Adventista: No yo, sino El, (#302).

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La Mesa del Pan de la Proposición

“Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.” Juan 6:35

El pan de la proposición se conservaba siempre ante la presencia del Señor como una ofrenda perpetua. De

manera que formaba parte del sacrificio diario, y se llamaba “el pan de la proposición” o el pan de la presencia, porque estaba siempre ante el rostro del Señor. Éxodo 25:30. Era un reconocimiento de que el hombre depende de Dios tanto para su alimento temporal como para el espiritual, y de que se lo recibe únicamente en virtud de la mediación de Cristo. En el desierto Dios había alimentado a Israel con el pan del cielo, y el pueblo seguía dependiendo de su generosidad, tanto en lo referente a las bendiciones temporales como a las espirituales. El maná, así como el pan de la proposición, simbolizaba a Cristo, el pan viviente, quien está siempre en la presencia de Dios para interceder por nosotros. El mismo dijo: “Yo soy el pan vivo que he descendido del cielo.” Juan 6:48-51. (Patriarcas y profetas, p.367)

La Palabra de Dios debe transformarse en nuestro alimento espiritual. “Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida;

el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás”. Juan 6:35. El mundo perece por falta de la verdad pura, no adulterada. Cristo es la verdad. Sus palabras son la verdad, y poseen un valor mayor y un significado más profundo de lo que aparecen en la superficie. Las mentes avivadas por el Espíritu Santo discernirán el valor de estas declaraciones... (Exaltad a Jesús, p. 100)

Hay muy poco beneficio que se pueda obtener de una lectura apresurada de las Escrituras. Se puede leer la

Biblia de principio a fin y sin embargo no percibir su hermosura ni comprender su significado profundo y oculto. Un pasaje que se estudia hasta que su significado le resulta claro a la mente, y evidente su relación con el plan de salvación, es de mucho más valor que la lectura superficial de muchos capítulos sin ningún propósito definido y sin que se gane ninguna instrucción positiva. Mantenga su Biblia con usted. Léala a medida que se presenta la oportunidad; grabe los textos en su memoria. Aun mientras transita por las calles puede leer un pasaje y meditar acerca de él, hasta fijarlo en la memoria.

En su Palabra está la vida de Cristo, que da vida al mundo. Era mediante ella como Jesús sanaba las

enfermedades y echaba fuera demonios; por su Palabra calmó el mar y resucitó muertos; y la gente dio testimonio de que hablaba con poder. Expresó la palabra de Dios, como lo había hecho a través de todos los profetas y maestros del Antiguo Testamento. La Biblia entera es una manifestación de Cristo. Es nuestra fuente de poder.

Así como nuestra vida física se sostiene gracias al alimento, también la espiritual es sustentada por la Palabra de Dios. Cada alma necesita recibir personalmente la vida que proviene de la Palabra de Dios. Del mismo modo como cada uno puede comer por sí mismo si ha de recibir alimento, así también debemos recibir la Palabra de Dios personalmente. No la debemos obtener únicamente a través de los pensamientos de otros.

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Sí, la Palabra de Dios es el pan de vida. Los que la comen y la digieren, haciéndola parte integrante de cada acción y cada atributo de su carácter, crecen robustos en la fuerza de Dios. Esto vigoriza el alma, perfecciona la experiencia y produce un gozo que perdurará eternamente. (Exaltad a Jesús, p. 255)

De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, tiene vida eterna. Yo soy el pan de vida. Vuestros padres

comieron el maná en el desierto, y murieron. Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, no muera. (Juan 6:47-50)

Muchos sufren de hambre y no tienen fuerza porque, en vez de comer del Pan que descendió del cielo, llenan

su mente con cosas de menor importancia. Pero si el pecador participa del Pan de vida, se convertirá en un alma viviente regenerada y restaurada. El Pan que descendió del cielo infundirá nueva vida a sus debilitadas energías. El Espíritu Santo tomará de las cosas de Dios y se las mostrará; y si las recibe, su carácter se limpiará de todo egoísmo, y se refinará y purificará para el cielo. (A fin de conocerle, p. 106)

En nuestra vida diaria, ante nuestros hermanos y ante el mundo, debemos ser intérpretes vivientes de las

Escrituras, que hagan honor a Cristo revelando su mansedumbre y humildad de corazón. Al comer y digerir el pan de vida revelaremos un carácter simétrico. Por medio de nuestra unidad, apreciando a otros más que a nosotros mismos, debemos dar al mundo un testimonio viviente del poder de la verdad... (Exaltad a Jesús, p. 99).

El Espíritu Santo descenderá para todos los que estén rogando por el pan de vida para darlo a sus vecinos.

(The Faith I Live By, p. 334)

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Día 5–El Candelabro “Vosotros, pues, sois mis testigos, dice Jehová, que yo soy Dios.” Isaías 43:12

Formato sugerido para el tiempo de oración

Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience alabando a Dios por quien Él es (Su carácter). • Alabe a Dios que nos llama a ser sus testigos. • Alabe a Dios que es una luz en nuestro camino.


• Pida a Dios que le muestre los pecados que debe confesar abiertamente y aquellos que debe confesar en privado. Reclame Su victoria sobre esos pecados.

• ¿Hay ocasiones en las cuales no ha sido un buen testigo de Dios? Pida su perdón. • Agradece a Dios por su perdón de acuerdo a 1 Juan 1:9.


• Ore que, así como el candelabro (Éxodo 40:9) era ungido con aceite, sea lleno del Espíritu Santo y se convierta en una luz t un testigo para el Señor.

• Ore que Dios le ayude a revelar su carácter a aquellos a su alrededor. • Pida a Dios un corazón humilde para que pueda ver en qué áreas de la vida no ejerce una

buena influencia sobre otros. • ¿Tiene alguna área en la vida en la que debe crecer para poder reflejar a Cristo? Dé permiso a

Dios para trabajar en esas áreas. • Pida a Dios que le llene con Su amor para que su amor fluya de usted hacia otros. • Pida por el involucramiento de cada miembro de iglesia alrededor del mundo en la

proclamación del fuerte pregón. Ore de que, al someternos al Espíritu Santo, nos haga uno en El.

• Ore por el aumento de la comprensión espiritual y evangelística de cada administrador de la iglesia alrededor del mundo mientras levantamos a Cristo y la misión y mensaje únicos de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Pida a Dios que ayude a Su pueblo remanente, la Iglesia Adventista del Séptimo Día, a nunca perder la identidad profética de quien somos.

• Ore por un fuerte enfoque en el evangelismo de los grupos pequeños, dando a todos los miembros la oportunidad de participar en la testificación personal acerca de Jesús y su hermoso carácter. Ore que cada una de las creencias fundamentales y doctrinas es proclamada con Jesús como centro.

• Ore sinceramente que las familias Adventistas del Séptimo Día puedan revelar el amor de Dios en sus hogares y la comunidad al mostrar como Cristo puede traer armonía dentro del hogar y remover abuso y ansiedad a través del poder santificador de Su justicia. Ore que

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podamos señalar a otros la bendecida oportunidad de unirse a la familia eternal de Dios en el cielo. • Ore por los miles de pioneros de Misión Global que están plantando iglesias, muchos de

ellos en situaciones difíciles. Ore por la seguridad de ellos, por sabiduría y por éxito. • Ore que Dios prepare voluntarios para servir a 70 grupos de personas dentro del Campo de

Israel. • Ore que las siete (o más) personas en su listado de oración pueda ver a Jesús en usted y

quieran tenerlo en sus corazones también. • Ore por cualquier necesidad personal que tenga (Prov. 3:5,6).

Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos)

• Agradece a Dios que está dispuesto a trabajar en usted y cambiarlo. • Agradece a Dios que puede hacerlo una luz que alumbra en la oscuridad. • Agradece a Dios que está contestando las oraciones que has levantado conforme a Su

voluntad.

Canciones Sugeridas Nuevo Himnario Adventista: Jesús resucitado, (#103); Ama el Pastor sus ovejas, (#124), Escuchad, Jesús nos dice, (#563). Antiguo Himnario Adventista: No yo, sino El, (#302).

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El Candelabro “Vosotros, pues, sois mis testigos, dice Jehová, que yo soy Dios.” Isaías

43:12

Los dos olivos vierten su áureo aceite por medio de los tubos de oro en el áureo depósito del cual se alimentan las lámparas del santuario. El aceite áureo representa el Espíritu Santo. Los ministros de Dios han de estar permanentemente surtidos de este aceite para que a su vez puedan impartirlo a la iglesia. “No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos”. (Testimonios para los ministros, p. 188)

Más el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho. (Juan 14:26)

Y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios. (Hechos 4:31)

Pero nadie puede impartir lo que no ha recibido. En la obra de Dios, la humanidad no puede generar nada...

Era el áureo aceite vertido por los mensajeros celestiales en los tubos de oro, para ser conducido del recipiente de oro a las lámparas del Santuario, lo que producía una luz continua, brillante y resplandeciente. Es el amor de Dios continuamente transferido a los hombres y a las mujeres lo que los capacita para impartir luz. En el corazón de todos los que están unidos a Dios por la fe, el áureo aceite del amor fluye libremente, para brillar en buenas obras, en un servicio real y sincero por Dios. (Ser semejante a Jesús, p.253)

Cada uno de nosotros ejerce una influencia sobre aquellos con los cuales entramos en contacto. Esa influencia

la tenemos de Dios, y somos responsables por la forma en que la usamos. Dios desea que se ponga del lado de la verdad, pero queda con cada uno de nosotros decidir si nuestra influencia será pura y elevadora, o si actuará como una malaria venenosa. Los que son participantes de la naturaleza divina ejercen una influencia que es semejante a la de Cristo. Santos ángeles los asisten en su camino, y todos aquellos con los cuales entran en contacto reciben ayuda y bendición. Pero los que no reciben a Cristo como su Salvador personal, no pueden influir en otros para bien. Ésos pierden toda esperanza de la vida eterna, y por medio de su ejemplo extravían a otros. Vigilen bien su influencia; es “su culto racional”, para colocarla en el lado del Señor. (Ser semejante a Jesús, p. 92)

La influencia no estudiada e inconsciente de una vida santa es el sermón más convincente que se puede dar en

favor del cristianismo. (My Life Today, p.122)

Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. Mateo 5:16

Nadie puede ser independiente de sus prójimos, pues el bienestar de cada uno afecta a los demás. Es el

propósito de Dios que cada uno se sienta necesario para el bienestar de los otros y trate de promover su felicidad.

Cada alma está rodeada de una atmósfera propia, de una atmósfera que puede ser cargada del poder

vivificante de la fe, el valor y la esperanza, y endulzada por la fragancia del amor. O puede ser pesada y fría por causa de la bruma del descontento y el egoísmo, o estar envenenada por la

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contaminación fatal de un pecado acariciado. Toda persona con la cual nos relacionamos queda, consciente o inconscientemente, afectada por la atmósfera que nos rodea.

Es ésta una responsabilidad de la que no nos podemos librar. Nuestras palabras, nuestros actos, nuestro

vestido, nuestra conducta, hasta la expresión de nuestro rostro, tienen influencia. De la impresión así hecha dependen resultados para bien o para mal que nadie puede medir. Cada impulso impartido de ese modo es una semilla sembrada que producirá su cosecha. Es un eslabón de la larga cadena de acontecimientos humanos, que se extiende hasta no sabemos dónde.

Si por nuestro ejemplo ayudamos a otros a desarrollar buenos principios, les damos poder para hacer el bien.

Ellos a su vez ejercen la misma influencia sobre otros, y éstos sobre otros más. De este modo, miles pueden ser bendecidos por nuestra influencia inconsciente.

Arrojen una piedrecita al lago, y se formará una onda, y otra y otra, y a medida que crecen éstas, el círculo se

agranda hasta que llega a la costa misma. Lo mismo ocurre con nuestra influencia. Más allá del alcance de nuestro conocimiento o dominio, obra en otros como una bendición o una maldición. (Ser semejante a Jesús, p. 94)

Si los que profesan ser seguidores de Cristo no resplandecen como luminarias en el mundo, el poder vital los

abandonará y se volverán fríos y sin la semejanza de Cristo. El embrujo de la indiferencia se apoderará de ellos, junto con una mortal pereza espiritual, que los convertirá en cadáveres en lugar de representantes vivientes de Jesús. Todos debemos levantar la cruz, y asumir con modestia, humildad y sencillez intelectual los deberes que Dios nos asigna, para realizar esfuerzos personales en favor de los que nos rodean y necesitan auxilio y luz.

Todos los que acepten estos deberes gozarán de una experiencia rica y variada, su propio corazón irradiará

fervor, y serán fortalecidos y estimulados para hacer esfuerzos renovados y perseverantes con el fin de obrar su propia salvación con temor y temblor, porque Dios es quien obra en ellos tanto el querer como el hacer según su buena voluntad. (Ser semejante a Jesús, p. 252)

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Día 6–El Altar del Incienso “Exhorto, ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los

hombres” 1 Tim. 2:1


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios por quien Él es (Su carácter). • Agradece a Dios por Jesús, quien nos enseñó que necesitamos interceder por otros. • Agradece a Dios que nos ha dado el gran privilegio de interceder.

Confesión y Reclamar la Victoria Sobre el Pecado (aproximadamente 5 minutos)

• Pídele a Dios que le muestre que pecados necesita confesar privadamente. Reclame Su victoria sobre esos pecados.

• Ore por el perdón por las ocasiones cuando no oró por otros.

Súplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos) • Ore que, así como el altar del incienso era ungido con aceite (Ex. 40:9), sus oraciones serán

inspiradas y guiadas por el Espíritu Santo. • ¿Habrá alguna persona por la cual el Señor ha colocado una carga en su corazón? Preséntelo en

oración. • ¿Habrá personas en su vida las cuales le son difíciles de aceptar? Ore por ellos y pida a Dios que

le dé amor por ellos. • Interceda por aquellos que se han entregado a la predicación de la Palabra. • Presente en oración al liderazgo de su iglesia, asociación, unión y Conferencia General. • ¿Conoce a alguien que ha escogido apartarse de Dios? Preséntelo en oración. • Presente en oración a aquellos que están desanimados y cargados. • Interceda por los miembros de iglesia que viven en áreas del mundo que son desafiantes y

enfrentan diariamente acoso por la práctica fiel de sus creencias. Señor llénalos con poder para vivir sus vidas como un testigo del poder redentor y eternal de Dios.

• Ore por cada Adventista del Séptimo Día alrededor del mundo para que sea usado por el Espíritu Santo en el alcance de otros y el evangelismo, ya sea en los grupos pequeños, testificación personal y el evangelismo público.

• Ore por los Centros de Influencia en los Centros Urbanos de Misión Global alrededor del mundo ya que estos traen educación, cuidado de la salud, estilos de vida saludables y otros ministerios asociados a su comunidad. Ore que ellos puedan satisfacer las necesidades reales de las personas y luego puedan conectarlas con Jesús.

• Ore por los líderes de negocios adventistas para que testifiquen del amor de Jesús con los 691 grupos de personas en los ocho países de la División de Asia-Pacífico Norte.

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• Ore por la unidad en cada iglesia y entidad mundial basada en respeto humilde a la Palabra de Dios, respeto mutuo, respeto por los reglamentos y procesos aceptados por la iglesia, y en la oración ferviente y el poder del Espíritu Santo. Ore por un compromiso total con la misión de la iglesia en la proclamación del mensaje de los tres ángeles en Apocalipsis 14 y el cuarto ángel de Apocalipsis 18.

• Ore para que el amor de Dios sea perfeccionado en Su iglesia. • Ore para que las siete (o más) personas en su listado vean su necesidad de abrir sus

corazones al Espíritu Santo. • Ore por cualquier otra necesidad personal que tenga.


• Agradece a Dios que ama más a las personas por las cuales has orado que lo que las ama usted.

• Agradece a Dios que el Espíritu Santo “intercede por nosotros con gemidos indecibles” (Rom. 8:26).

• Agradece a Dios que Cristo intercede por nosotros en el santuario celestial.

Canciones Sugeridas Nuevo Himnario Adventista: Al andar con Jesús, (#488); Todas las promesas, (#412); Sed puros y santos, (#375).

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El Altar del Incienso

“Exhorto, ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres” 1 Tim. 2:1

Mientras de mañana y de tarde los sacerdotes entraban en el lugar santo a la hora del incienso, el sacrificio

diario estaba listo para ser ofrecido sobre el altar de afuera, en el atrio. Esta era una hora de intenso interés para los adoradores que se congregaban ante el tabernáculo. Antes de allegarse a la presencia de Dios por medio del ministerio del sacerdote, debían hacer un ferviente examen de sus corazones y luego confesar sus pecados. Se unían en oración silenciosa, con los rostros vueltos hacia el lugar santo. Así sus peticiones ascendían con la nube de incienso, mientras la fe aceptaba los méritos del Salvador prometido al que simbolizaba el sacrificio expiatorio. (Patriarcas y profetas, p. 366)

Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra

profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. (Heb. 4:14-16)

Hermanos, orad en casa, en vuestra familia, a la mañana y a la noche. Orad fervorosamente en vuestra

cámara; y mientras os dedicáis a vuestra labor diaria, elevad vuestra alma a Dios en oración. Así fué como Enoc anduvo con Dios. La plegaria silenciosa y ferviente del alma se elevará al trono de gracia como santo incienso y será tan aceptable para Dios como si fuese ofrecida en el santuario. Para todos los que le busquen, Cristo llega a ser una ayuda oportuna en tiempo de necesidad. Serán fuertes en el día de la prueba. (El hogar cristiano, p. 189)

Debiéramos orar a Dios mucho más de lo que lo hacemos. Hay gran fortaleza y bendición al orar juntos en

familia con nuestros hijos y para ellos. (La conducción del niño, p. 497)

Nuestras oraciones no han de consistir en peticiones egoístas, meramente para nuestro propio beneficio. Hemos de pedir para poder dar. El principio de la vida de Cristo debe ser el principio de nuestra vida. “Por ellos—dijo Cristo, refiriéndose a sus discípulos—yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en verdad” Juan 17:19 La misma devoción, la misma abnegación, la misma sujeción a las declaraciones de la Palabra de Dios que se manifestaron en Cristo, deben verse en sus siervos. Nuestra misión en el mundo no es servirnos o agradarnos a nosotros mismos. Hemos de glorificar a Dios cooperando con él para salvar a los pecadores. Debemos pedir bendiciones a Dios para poder comunicarlas a los demás. La capacidad de recibir es preservada únicamente impartiendo. No podemos continuar recibiendo tesoros celestiales sin comunicarlos a aquellos que nos rodean. (Palabras de vida del gran maestro, p. 108)

Hay almas que han perdido su valor; habladles, orad por ellas. Hay quienes necesitan el pan de vida. Leedles

de la Palabra de Dios. Hay una enfermedad del alma que ningún bálsamo puede alcanzar, ninguna medicina curar. Orad por estas [almas] y traedlas a Jesucristo. Y en toda vuestra obra Cristo estará presente para impresionar los corazones humanos. (El ministerio de bondad, p. 175)

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Al procurar ganar a otros para Cristo, llevando la preocupación por las almas en nuestras oraciones, nuestros propios corazones palpitarán bajo la vivificante influencia de la gracia de Dios; nuestros propios afectos resplandecerán con más divino fervor; nuestra vida cristiana toda será más real, más ferviente, más llena de oración. (Palabras de vida del Gran Maestro, p. 289)

Cuando muera el yo, se despertará un deseo intenso por la salvación de otros, - un deseo que conducirá a

esfuerzos perseverantes a hacer el bien. Habrá una siembra junto a todas las aguas; y súplicas fervientes, oraciones importunas, ascenderán al cielo en favor de las almas perecederas. (Obreros evangélicos, 1892, p. 470, en inglés)

¡Oh, si se pudiera escuchar por todas partes la ferviente oración de fe: ¡Dame las almas sepultadas ahora

debajo de la basura del error, si no, muero! Traigámoslas al conocimiento de la verdad tal como lo es en Jesús. (Cada día con Dios, p. 169)

Hay que buscar a las almas, orar por ellas y trabajar en su favor. Han de hacerse llamamientos fervorosos y se deben ofrecer oraciones fervientes. Nuestras peticiones débiles y sin espíritu han de ser reemplazadas por súplicas llenas de intenso fervor. (Testimonios para la iglesia, Tomo 7, p. 14)

Comenzad a orar por las almas; aproximaos a Cristo, colocaos más cerca de su costado sangrante. Permitid

que un espíritu humilde y sereno adorne vuestras vidas, y haced que vuestras peticiones fervientes, sinceras y humildes asciendan hacia Dios en busca de sabiduría para tener éxito en la salvación no sólo de vuestra propia alma, sino también de otras almas. (Testimonios para la iglesia, Tomo 1, p. 449)

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Día 7–El Arca: La Vara de Aarón “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis

fruto, y vuestro fruto permanezca” Juan 15:16

Formato Sugerido para el Tiempo de Oración Alabanza (aproximadamente 10 minutos)

• Comience alabando a Dios por quién Él es (Su carácter). • Alabe a Dios quien le ha llamado a llevar fruto. • Alaba a Dios que podamos llevar fruto y que nuestro fruto permanecerá mientras

permanecemos en Cristo.

Confesión y reclamar victoria sobre el pecado (aproximadamente 5 minutos) • Pida a Dios que le muestre que pecados confesar abiertamente y cuales confesar

privadamente. Reclame su victoria sobre esos pecados. • Pida perdón a Dios por las veces en que no llevó fruto. • Pida perdón a Dios por las veces en que trató de llevar fruto usando su propio poder. • Agradezca a Dios que El perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9

Súplica e intercesión (aproximadamente 35 minutos)

• Ore que, así como la vara de Aarón floreció y llevó fruto (Núm. 17:8), otros puedan ser bendecidos por el fruto del Espíritu (Gál. 5:22,23) en su vida.

• Ore que Dios le enseñe a vivir una vida escondida en Cristo. • Pida a Dios que le ayude a vivir una vida centrada en Cristo para poder llevar fruto. • Pida a Dios que le ayude a crecer en gracia. • ¿De qué permanece conectado durante el día? Pida a Dios que le ayude a permanecer

conectado a Él para que pueda reflejarlo a aquellos a su alrededor. • ¿De dónde recibe su fortaleza? Pida a Dios que le ayude a encontrar su fortaleza en El. • Ore por las actividades de evangelización integral o comprensiva que serán organizadas a

través del mundo enfocado tanto hacia “Misión en las ciudades” como a las áreas rurales. • Ore para que Dios prepare jóvenes profesionales para plantar iglesias para los 789 grupos de

personas dentro de 9 países de la División Norteamericana. • Pida a Dios que abra oportunidades para entrenar misioneros en la plantación de iglesias para

los 676 grupos de personas dentro de 9 países de la División Sudamericana. • Ore por los 541vgrupos de personas dentro de los 18 países de la División de África

Meridional y Océano Indico. • Ore para que el Espíritu Santo prepare a los miembros de iglesia a dar seguimiento y

discipular a los radio escuchas de Radio Mundial Adventista en las ciudades. • Ore por la iniciativa del programa del Departamento de Jóvenes Un año en Misión (OYIM)

mientras busca entrenar la próxima generación de líderes de misión en las urbes.

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• Ore por mayor colaboración entre la organización de la iglesia y los ministerios de apoyo en la gran tarea de evangelizar a nuestras comunidades y el mundo.

• Ore por una mayor concientización y distribución de literatura Adventista del Séptimo Día (impresa o electrónica) por los miembros de iglesia, y por un incremento en el énfasis del ministerio de la página impresa.

• Ore para que las siete (o más) personas en su listado vean su necesidad de permanecer en Cristo y llevar fruto.

• Ore por cualquier necesidad personal que tenga. Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos)

• Agradece a Dios que para poder llevar fruto solo se necesita permanecer en El. • Agradece a Dios que Cristo es su fuerza. • Agradece a Dios que quiere que seas una bendición para otros.

Canciones sugeridas Nuevo Himnario Adventista: Ama el Pastor sus ovejas, (#124). Antiguo Himnario Adventista: No yo, sino El, (#302).

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El Arca: La Vara de Aarón

“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca” Juan 15:16

Cada cristiano tendrá un espíritu misionero. El llevar fruto es trabajar como Cristo trabajó, amar a las almas como Él nos ha amado. El primer impulso de un corazón renovado es traer a otros también al Salvador; y en el momento en que una persona se convierte a la verdad, el siente el deseo sincero que aquellos en la oscuridad vean la preciosa luz brillando de la palabra de Dios. (To be Like Jesus, p. 281)

La planta no germina, crece o da fruto para sí misma, sino que “da simiente al que siembra, y pan al

que come”. Isaías 55:10. Así ningún hombre ha de vivir para sí mismo. El cristiano está en el mundo como representante de Cristo, para la salvación de otras almas.

No puede haber crecimiento o fructificación en la vida que se centraliza en el yo. Si habéis aceptado a Cristo como a vuestro Salvador personal, habéis de olvidar vuestro yo, y tratar de ayudar a otros. Hablad del amor de Cristo, de su bondad. Cumplid con todo deber que se presente. Llevad la carga de las almas sobre vuestro corazón, y por todos los medios que estén a vuestro alcance tratad de salvar a los perdidos. A medida que recibáis el Espíritu de Cristo—el espíritu de amor desinteresado y de trabajo por otros—, iréis creciendo y dando frutos. Las gracias del Espíritu madurarán en vuestro carácter. Se aumentará vuestra fe, vuestras convicciones se profundizarán, vuestro amor se perfeccionará. Reflejaréis más y más la semejanza de Cristo en todo lo que es puro, noble y bello. (Exaltad a Jesús, p. 268)

Decidid ser miembros de la vid viva que lleva frutos. El vástago puede florecer únicamente cuando recibe vida y fortaleza de la cepa. Aprovechad entonces cada oportunidad de relacionaros más estrechamente con Cristo. Llegaréis a ser uno con él, únicamente creyendo en él, amándolo, copiándolo y dependiendo enteramente de él; y mediante vosotros, su vida y su carácter se revelarán al mundo. (Nuestra elevada vocación, p. 147)

En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos. (Juan 15:8)

Podéis tener un espíritu ferviente, y vuestro corazón radiante con el amor de Jesús. Permaneced en Cristo como el vástago en la vid. Extrayendo sustancia de la vid, seréis ramas florecientes, y llevaréis mucho fruto para la gloria de Dios. ¡Oh, necesitáis mucho contemplar fijamente a Jesús! Perseverad contemplando sus encantos. Mientras lo contempléis se mantendrán brillando y ampliándose hasta que seáis llenos con toda la plenitud de Dios, y llevéis mucho fruto para su gloria. El sarmiento está demasiado firmemente implantado en la cepa como para ser separado por cualquier viento. La fortaleza y el crecimiento vigoroso dicen al mundo que estáis arraigados en Jesús, que vuestro fundamento es seguro. (Nuestra elevada vocación, p. 218)

Cada rama que da fruto es un representante vivo de la vid, pues da el mismo fruto que la vid… Cada rama demostrará si tiene vida o no; porque donde hay vida, hay crecimiento. Hay una comunicación continua de las propiedades vivificantes de la vid, y esto se demuestra por el fruto que da las ramas. (From the heart, p. 119)

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Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén. (2 Pedro 3:18)

La gracia de Cristo debe ser entretejida con todo aspecto del carácter... El diario crecimiento en la vida de Cristo crea en el alma un cielo de paz; en una vida tal continuamente hay fruto... En las vidas de aquellos que han sido rescatados por la sangre de Cristo, constantemente aparecerá la abnegación. Se verán la bondad y la justicia. La tranquila experiencia interior llenará la vida de bondad, fe, mansedumbre y paciencia. Esta debe ser nuestra experiencia diaria. Debemos formar caracteres libres de pecado, caracteres hechos justos en la gracia de Cristo y por medio de ella. (La maravillosa gracia de Dios, p. 320)

El deseo del Señor es que sus seguidores crezcan en gracia, que su amor abunde más y más, que

estén llenos de los frutos de justicia... Donde hay vida, habrá crecimiento y fructificación; pero a menos que crezcamos en la gracia, nuestra espiritualidad se empequeñecerá, será enfermiza, estéril. Solo mediante el crecimiento y la fructificación podemos cumplir el propósito de Dios para nosotros. Cristo dijo: “En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto”. Juan 15:8. A fin de llevar mucho fruto, debemos aprovechar al máximo nuestros privilegios. Debemos usar cada oportunidad que se nos concede para fortalecernos. (A fin de conocerle)-

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Día 8–El Maná “Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan

que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.” Juan 6:51


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios por quien Él es (Su carácter) • Alabe a Dios que Jesús es el Maná que bajó del cielo. • Alabe a Dios por su Palabra de la cual podemos alimentarnos.


• Pida a Dios que le muestre que pecados confesar en privado. Reclama la victoria sobre esos pecados.

• Pida perdón a Dios por los momentos en que has escogido no alimentarte del Maná Celestial.

• Pida perdón a Dios por los momentos en que ha escogido para satisfacer su hambre con cosas temporeras.

• Agradece a Dios porque te perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9.

Súplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos) • Ore que, así como los israelitas juntaban el maná cada mañana, busquemos de forma individual,

buscar tener diariamente una fresca experiencia con el Señor, comiendo su carne y bebiendo su sangre al rendirnos completamente a Él en obediencia.

• Ore que individualmente nos demos cuenta que estamos llegando al cierre del tiempo de prueba. Que permitamos que el Espíritu Santo haga todo lo que necesite hacer en nuestras vidas para poder desarrollar nuestro carácter.

• Pida a Dios que le enseñe a como alimentarse del Maná Celestial. • Pida a Dios que le dé su Espíritu Santo para que pueda entender Su Palabra y entender la

verdad. • Pida a Dios que le dé una vida nueva mientras lee Su Palabra y medita acerca de Cristo y de su

vida. • Pida a Dios que le ayude a meditar solo en aquellas cosas que te edifican espiritualmente. • Ore que los líderes de la iglesia (su pastor de la iglesia local, líderes de asociación, unión,

división y Conferencia General) y sus familias se alimentan cada día del Maná Celestial. • Ore por los miles de pioneros de Misión Global que están plantando iglesias, muchos de

ellos en situaciones peligrosas. Ore por su seguridad, su sabiduría y por éxito. • Ore por la fidelidad de Dios, Su Palabra, su mensaje Adventista, y por su Misión para

nosotros. Ore por nuestra disposición a seguirlo en todo, y que El demuestre Su poder en nuestras vidas.

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• Ore para el aumento de la asistencia a la Escuela Sabática, donde los miembros en invitados puedan enfocarse en el compañerismo, misión, estudio de la Biblia y evangelismo local.

• Ore por un poderoso reavivamiento de la piedad primitiva para limpiar la iglesia de Dios en los días finales. Ore para que podamos representar la verdad aunque se caigan los cielos.

• Ore para que Dios levante a los jóvenes para hacer discípulos entre los 1,459 grupos de personas en los 20 países de la División del Pacífico Sur.

• Ore que siete (o más) personas en tu lista vean su necesidad de comer del Maná Celestial. • Ore por cualquier necesidad personal que tenga.


• Agradece a Dios que cuando te alimentas de Su comida, no tendrá hambre jamás. • Agradece a Dios que Jesús no ha enseñado a como alimentarnos del Maná Celestial. • Agradece a Dios por el poder de Su Palabra.

Canciones Sugeridas

Nuevo Himnario Adventista: El pan de vida soy, (# 581); Dadme la Biblia, (#205); Dejo el mundo, (#252); Prefiero mi Cristo, (#269); Abre mis ojos a la luz, (#195).

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El Maná “Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan

que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.” Juan 6:51 Se les ordenó recoger diariamente un gomer* para cada persona; y de él no habían de dejar nada para el otro

día. Algunos trataron de guardar una provisión para el día siguiente, pero hallaron entonces que ya no era bueno para comer. La provisión para el día debía juntarse por la mañana; pues todo lo que permanecía en el suelo era derretido por el sol… Al sexto día el pueblo recogió dos gomeres por persona. Los jefes inmediatamente hicieron saber a Moisés lo que había pasado. Su contestación fue: “Esto es lo que ha dicho Jehová: Mañana es el santo sábado, el reposo de Jehová: lo que hubiereis de cocer, cocedlo hoy, y lo que hubiereis de cocinar, cocinadlo; y todo lo que os sobrare, guardadlo para mañana.” Así lo hicieron, y vieron que no se echó a perder. Y Moisés dijo: “Comedlo hoy, porque hoy es sábado de Jehová: hoy no hallaréis en el campo. En los seis días lo recogeréis; más el séptimo día es sábado, en el cual no se hallará.” (Patriarcas y profetas, p. 301- 302)

El maná que caía del cielo para el sustento de Israel era un símbolo de Aquel que vino de Dios a dar vida al

mundo. Dijo Jesús: “Yo soy el pan de vida. Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y son muertos. Este es el pan que desciende del cielo.... Si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.” Juan 6:48-51. Y entre las bendiciones prometidas al pueblo de Dios para la vida futura, se escribió: “Al que venciere, daré a comer del maná escondido.” Apocalipsis 2:17. (Patriarcas y profetas, p. 303)

Nuestro Salvador es el pan de vida; cuando miramos su amor y lo recibimos en el alma, comemos el pan

que desciende del cielo. Recibimos a Cristo por su Palabra, y se nos da el Espíritu Santo para abrir la Palabra de Dios a nuestro entendimiento y hacer penetrar sus verdades en nuestro corazón. Hemos de orar día tras día para que, mientras leemos su Palabra, Dios nos envíe su Espíritu con el fin de revelarnos la verdad que fortalecerá nuestras almas para las necesidades del día. (La oración, p.353.)

Mirando constantemente a Jesús con el ojo de la fe, seremos fortalecidos. Dios hará las revelaciones más

preciosas a sus hijos hambrientos y sedientos. Hallarán que Cristo es un Salvador personal. A medida que se alimenten de su Palabra, hallarán que es espíritu y vida. La Palabra destruye la naturaleza terrenal y natural e imparte nueva vida en Cristo Jesús. El Espíritu Santo viene al alma como Consolador. Por el factor transformador de su gracia, la imagen de Dios se reproduce en el discípulo; viene a ser una nueva criatura. El amor reemplaza al odio y el corazón recibe la semejanza divina. Esto es lo que quiere decir vivir de “toda palabra que sale de la boca de Dios.” Esto es comer el Pan que descendió del cielo. (Deseado de todas las gentes, p.355)

Llénese el corazón con las palabras de Dios. Son el agua viva, que sacian la sed ardiente. Son el pan de vida

del cielo. Jesús declara, “Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros.” (Juan 6:53) Y se explica diciendo, “El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.” (Juan 6:63). Nuestros cuerpos se construyen de lo que podemos comer y beber; y en la economía natural, es en

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lo que meditamos lo que dará tono y fuerza a nuestra naturaleza espiritual. (Christian Education, p. 57)

Tenéis la Palabra del Dios vivo y con sólo pedirlo podéis recibir el don del Espíritu Santo para hacer de dicha Palabra un poder para los que creen y obedecen. La obra del Espíritu Santo es guiar a toda verdad. Cuando dependéis de la Palabra del Dios vivo con el corazón, la mente y el alma, el conducto de comunicación queda expedito. El estudio profundo y ferviente de la Palabra bajo la dirección del Espíritu Santo os suministrará maná fresco, y el mismo Espíritu hará eficaz su empleo. El esfuerzo de los jóvenes para disciplinar la mente para alcanzar elevadas y santas aspiraciones será recompensado. Los que hacen esfuerzos perseverantes en este sentido, y aplican la mente a la tarea de comprender la Palabra de Dios, están preparados para ser obreros juntamente con Dios. (Testimonios para la iglesia, Tomo 6, p. 167)

Las personas con quienes se relaciona el cristiano tienen derecho de conocer lo que ha sido revelado al

seguidor de Cristo, y él tiene que darlo a conocer por precepto y ejemplo. El cristiano debe publicar las buenas nuevas de salvación, y nunca debe cansarle la repetición de las manifestaciones de la bondad de Dios. Debe extraer continuamente con Cristo, y también extraer constantemente de Cristo, a fin de comer la carne y beber la sangre del Hijo del hombre, las cuales Jesús identifica como sus palabras, que son espíritu y son vida. De ese modo tendrá una renovada provisión de maná celestial. Cada cristiano, encumbrado o humilde, rico o pobre, educado o ignorante, tiene que hablar del reino de Dios, tiene que hablar de Cristo y de él crucificado, a quienes se encuentran en ignorancia y pecado. Tenéis que hablar a los pecadores, porque aunque no lo sepáis, Dios está obrando en sus corazones; nunca olvidéis que él atribuye una gran responsabilidad a cada palabra que pronunciáis en presencia de ellos... (Ministerio de publicaciones, p. 315)

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Día 9–Los Mandamientos Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley. Salmos 119:18


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios que porque nos amó, nos dio su ley. • Alabe a Dios que su ley es ley de amor. • Alabe a Dios que quiere escribir su ley en el corazón.


• Pide a Dios que te muestre los pecados que necesitas confesar privadamente. Reclama su victoria sobre esos pecados.

• Pida perdón a Dios por esos momentos en que voluntariamente escogió ir contra la ley de Dios.

• Agradece a Dios que perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9.

Súplica e Intercesión (aproximadamente 35 minutos) • Pida que el Espíritu Santo escriba Su ley en la mente y corazón, de acuerdo a la promesa en

Hebreos 10:15-17. • Pida a Dios que le ayude a vivir una vida llena del gozo de Cristo. • Ore que Dios le dé amor en el corazón por El y por aquellos en su alrededor. • Pida a Dios que le ayude vivir una vida que muestre a otros que Su ley es una ley de amor

tanto para Dios como para los hombres. • Pida a Dios que le ayude a negarse a sí mismo por la verdad para que pueda hacer una

impresión sagrada en el mundo. • Ore que nuestra iglesia use cada formato de medios sociales adecuado para compartir el

mensaje de los tres ángeles de modo práctico, creativo y fresco a las personas del siglo veintiuno.

• Ore por un enfoque continuo en la creencia de la creación bíblica, el cual muestra que nuestro mundo fue creado en seis días literales, consecutivos por la palabra del Señor.

• Ore por un incremento en la participación en el evangelismo por todas las instituciones de la iglesia mientras apoyan la misión de la iglesia.

• Ore por una amplia aceptación de un ministerio de salud integral (“trabajo médico misionero”), el cual permite a los miembros de iglesia seguir el desinteresado ejemplo de Jesús de satisfacer las necesidades diarias de otros.

• Ore por los refugiados alrededor del mundo que están sufriendo. Ore especialmente por aquellos de países cercanos para convertirse en creyentes en Jesús mientras tienen la oportunidad de interactuar con cristianos.

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• Ore a Dios al llamar a maestros y educadores retirados para ministrar a 2,566 grupos de personas dentro 14 países de la División de Asia – Pacífico Sur.

• Ore a Dios para levantar guerreros de oración para interceder por 2,568 grupos de personas dentro de 4 países de la División del Sudeste Asiático.

• Ore por cada Departamento de Escuela Sabática/Ministerios Personales de la iglesia local mientras buscan el plan de Dios para ministrar sus comunidades a través de estudios bíblicos y la testificación personal.

• Ore que siete (o más) personas de su listado de oración puedan entender que la ley de Dios es ley de amor y que si lo aman deben guardar sus mandamientos.

• Ore por cualquier necesidad personal que tenga.

Agradecimiento (aproximadamente 10 minutos) • Agradece a Dios por darnos la ley para guiarnos. • Agradece a Dios que nos llama para mostrar a otros Su amor. • Agradece a Dios que Su ley en nuestros corazones puedan traer nuestros propios intereses a

subordinación a consideraciones altas y eternales.

Canciones Sugeridas Nuevo Himnario Adventista: Al andar con Jesús, (#488); Castillo fuerte es nuestro Dios, (#400); Tuyo soy, Jesús, (#253).

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Los Mandamientos Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley. Salmos 119:18

La ley de Dios es una ley de amor. Él nos rodeó de hermosura para enseñarnos que no estamos en la tierra únicamente para mirar por nosotros mismos, para cavar y construir, para trabajar e hilar, sino para hacer la vida esplendorosa, alegre y bella por el amor de Cristo. Así como las flores, hemos de alegrar otras vidas con el ministerio del amor. (El discurso maestro de Jesucristo, p.83)

La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos. (Salmos 19:7-8)

La obra que el cristianismo debe cumplir en el mundo no consiste en despreciar la ley de Dios ni apartarse de

su sagrada dignidad en lo más mínimo, sino escribir esa ley en la mente y el corazón. Cuando la ley de Dios se implanta de ese modo en el alma del creyente, éste se acerca a la vida eterna por los méritos de Jesús... El propósito del Evangelio se cumple cuando se realiza este gran fin. Su obra, a través de los siglos, consiste en unir los corazones de sus seguidores en un espíritu de fraternidad universal, por medio de la fe en la verdad, para fundar de esta manera el sistema de orden y armonía del cielo en la familia de Dios en la tierra, a fin de que ellos sean considerados dignos de convertirse en miembros de la real familia de lo alto. Dios, en su sabiduría y misericordia, prueba a los hombres y las mujeres aquí, para ver si obedecerán su voz y respetarán su ley, o si se rebelarán como Satanás... (Hijos e hijas de Dios, p.52)

Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos. Porque

todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. (1 Juan 5:3-4)

Siendo la ley del amor el fundamento del gobierno de Dios, la felicidad de todos los seres inteligentes

depende de su perfecto acuerdo con los grandes principios de justicia de esa ley. Dios desea de todas sus criaturas el servicio que nace del amor, de la comprensión y del aprecio de su carácter. No halla placer en una obediencia forzada, y otorga a todos libre albedrío para que puedan servirle voluntariamente. (Patriarcas y profetas, p. 12)

Dios ha dado al hombre Su santa ley como la medida del carácter. Por su ley se puede ver y sobrellevar cada

defecto en el carácter. Usted puede separarse de cada ídolo, y vincularse al trono de Dios por la cadena dorada de la gracia y la verdad. (Bible Echo, Jan. 14, 1901, par. 3)

La ley del amor exige devoción del cuerpo, la mente y el alma al servicio de Dios y nuestros semejantes. Y este servicio, al mismo tiempo que hace de nosotros una bendición para los demás, nos imparte la mayor bendición a nosotros mismos. La abnegación forma la base de todo verdadero desarrollo. Por el servicio abnegado obtenemos la más elevada cultura de toda facultad. (Consejo para los maestros, p. 32)

El yugo que nos liga al servicio es la ley de Dios. La gran ley de amor revelada en el Edén, proclamada en el Sinaí, y en el nuevo pacto escrita en el corazón, es la que liga al obrero humano a

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la voluntad de Dios. Si fuésemos abandonados a nuestras propias inclinaciones para ir adonde nos condujese nuestra voluntad, caeríamos en las filas de Satanás y llegaríamos a poseer sus atributos. Por lo tanto, Dios nos encierra en su voluntad, que es alta, noble y elevadora. El desea que asumamos con paciencia y sabiduría los deberes de servirle. El yugo de este servicio lo llevó Cristo mismo como humano. El dijo: “Me complazco en hacer tu voluntad, oh Dios mío, y tu ley está en medio de mi corazón.”3 “He descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, mas la voluntad del que me envió.”4 El amor hacia Dios, el celo por su gloria, y el amor por la humanidad caída, trajeron a Jesús a esta tierra para sufrir y morir. Tal fue el poder que rigió en su vida. Y él nos invita a adoptar este principio. (El deseado de todas las gentes, p. 296)

Amar a Dios y al prójimo es el todo del hombre. La ley de amor está escrita sobre las tablas del alma, el

Espíritu de Dios mora en él, y su carácter se manifiesta en buenas obras. Jesús se hizo pobre para que por medio de su pobreza nosotros seamos hechos ricos. ¿Qué sacrificios estamos dispuestos a hacer por su causa? ¿Está su amor entronizado en nuestros corazones? ¿Amamos al prójimo como Cristo nos amó a nosotros? Si poseemos este amor por las almas, ese mismo amor nos hará considerar seriamente si por medio de nuestras palabras, hechos o de alguna manera con nuestra influencia, estamos colocando la tentación frente a los que tienen poca fuerza moral. No censuraremos a los débiles y a los que sufren como constantemente lo hacían los fariseos, sino que procuraremos quitar toda piedra de tropiezo del camino de nuestro hermano, no sea que el cojo se desvíe del sendero. (Testimonios para la iglesia, Tomo 5, p. 338)

Los que, por amor de la verdad, siguen el ejemplo de abnegación de Cristo, hacen una impresión considerable

sobre el mundo. Su ejemplo es convincente y contagioso. Los hombres ven que hay entre los hijos de Dios una fe que obra por amor y que purifica el alma de todo egoísmo. En la vida de quienes obedecen los mandamientos de Dios, los mundanos ven la evidencia convincente de que la ley de Dios es una ley de amor para con Dios y el hombre. (Testimonios para la iglesia, Tomo 7, p. 141)

La ley de Dios en nuestros corazones traerá a la subordinación nuestros propios intereses hacia

consideraciones eternales. (Sons and Daughters of God, p. 50)

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Día 10–Las Cortinas de Lino Y este será su nombre con el cual le llamarán: Jehová, justicia nuestra. Jeremías 23:6


Alabanza (aproximadamente 10 minutos) • Comience su tiempo de oración alabando a Dios por su justicia que es impartida a nosotros. • Alaba a Dios que su justicia es un don gratuito. • Alaba a Dios que a través del sacrificio de Jesús y su intercesión por nosotros, podemos llegar al

trono de Dios y reclamar Su manto de justicia.

Confesión y Reclamar Victoria Sobre el Pecado (aproximadamente 5 minutos) • Pida a Dios que muestre que pecados confesar abiertamente y que confesar privadamente.

Reclama su victoria sobre esos pecados. • Ore por perdón por aquellos momentos en que confió en su propia fuerza. • Pida perdón a Dios por los momentos en que tuviste en espíritu de justicia propia. • Agradece a Dios que perdona de acuerdo a 1 Juan 1:9.


• Conoce a alguien que necesita el manto de justicia de Cristo. Ore por ellos. • Pide al Señor un deseo de vencer el pecado y desarrollar un carácter semejante al carácter de

Cristo. • Ore que Dios ponga en su corazón el deseo de tener la justicia de Cristo. • Ore que el Espíritu Santo le enseñe a como aceptar la justicia de Cristo. • Pida a Dios que cada uno de forma individual represente a Cristo y las vestiduras de su justicia en

nuestro diario vivir, en nuestro estilo de vida y en nuestra vestimenta. • Ore por un elevado sentido de urgencia en los líderes y miembros de iglesia. Ore por la

conciencia de que estamos en el fin del tiempo y de que Jesús viene pronto. • Ore por la testificación poderosa de los medios Adventistas del Séptimo Día como estos medios

planifican iniciativas evangelísticas masivas, integradas alrededor del mundo. • Ore por la continuación de distribución masiva de libros maravillosos tales como el conflicto de

los siglos, El deseado de todas las gentes, Palabras de vida del gran Maestro, Camino a Cristo, y otros. Ore que una cosecha de almas sea el resultado de las semillas plantadas por estos libros.

• Ore por un aumento en el compromiso a la educación Adventista del Séptimo Día en todos los niveles ya que es importante para la fuerza laboral futura y la misión directa de la iglesia.

• Ore a Dios que se levanten guerreros de oración intercesora que intercedan por 893 grupos de personas dentro de 25 países de la División Transeuropea.

• Pide a Dios que levante enfermeras y doctores para plantar nuevas iglesias entre 1,978 grupos de personas en los 22 países de la División África Centro Oriental.

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• Ore por los miembros Servicios e Industrias laicas adventistas (ASI) al ayudar a sus líderes de asociaciones o misiones locales diseñar planes a largo plazo de misión en la urbe, incluyendo ministerio de salud integral y total involucramiento de los miembros como parte de la Misión en las Ciudades.

• Ore por siete (o más) personas en su listado para que vean su necesidad de la justicia de Cristo. • Ore por cualquier necesidad personal que tenga.


• Agradece a Dios que está trabajando en las vidas de su familia, amigos y vecinos. • Agradece a Dios que tiene personas que anhelan ser más semejantes a Él. • Agradece a Dios que está trabajando en los corazones de todas las personas por las cuales ha

estado orando.

Canciones sugeridas Nuevo Himnario Adventista: Tu pueblo jubiloso, (#28); Pronto yo veré a Jesús, (#324); Hay una fuente sin

igual, (#286); Comprado con sangre por Cristo, (#296). Antiguo Himnario Adventista: Cuando mi lucha toque a su final, (#108); Todos los que tengan sed, (#408).

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Las Cortinas de Lino Y este será su nombre con el cual le llamarán: Jehová, justicia nuestra. Jeremías 23:6

El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles. (Apocalipsis 3:5)

Todos los que se hayan revestido del manto de la justicia de Cristo subsistirán delante de él como escogidos

fieles y veraces. Satanás no puede arrancarlos de la mano de Cristo. Cristo no dejará que una sola alma que con arrepentimiento y fe haya pedido su protección, caiga bajo el poder del enemigo. Su Palabra declara: “¿O forzará alguien mi fortaleza? Haga conmigo paz, sí, haga paz conmigo.” Isaías 27:5. La promesa hecha a Josué es hecha a todos: “Si guardares mi ordenanza, ... entre estos que aquí están te daré plaza.” Zacarías 3:7. Los ángeles de Dios irán a cada lado de ellos, aun en este mundo, y ellos estarán al fin entre los ángeles que rodean el trono de Dios. (Joyas de los Testimonios, Tomo 2, p.174)

Únicamente el manto que Cristo mismo ha provisto puede hacernos dignos de aparecer ante la presencia de

Dios. Cristo colocará este manto, esta ropa de su propia justicia sobre cada alma arrepentida y creyente... Este manto, tejido en el telar del cielo, no tiene un solo hilo de invención humana. Cristo, en su humanidad, desarrolló un carácter perfecto, y ofrece impartirnos a nosotros este carácter. “Como trapos asquerosos son todas nuestras justicias”. Todo cuanto podamos hacer por nosotros mismos está manchado por el pecado. Pero el Hijo de Dios “apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él” (Exaltad a Jesús, p. 157)

Cuando estemos vestidos con la justicia de Cristo no nos deleitaremos en el pecado, pues Cristo estará

trabajando con nosotros. Podremos cometer errores, pero odiaremos el pecado que causó el sufrimiento del Hijo de Dios. (Mensaje para los jóvenes, p. 239)

El Señor viene, y ahora necesitamos el aceite de la gracia en las vasijas de nuestras lámparas. Pregunto: ¿Quién estará de parte del Señor? Antes que Jesús se fuera, prometió regresar de nuevo, y recibirnos a sí

mismo, “para que donde yo estoy—dijo él—, vosotros también estéis”. Somos extranjeros y peregrinos en este mundo. Hemos de esperar, velar, orar y trabajar. Toda la mente, toda el alma, todo el corazón, y toda la fuerza han sido comprados por la sangre del Hijo de Dios. No hemos de creer que tenemos el deber de usar un ropaje de peregrino precisamente de un color o de una forma tales, sino que hemos de emplear el atavío prolijo y modesto que la Palabra inspirada nos enseña a usar. Si nuestros corazones están unidos con el corazón de Cristo, tendremos un deseo muy intenso de ser vestidos de su justicia. Nada se colocará sobre la persona para atraer la atención, o para crear polémica. (Testimonios para los ministros, p. 130)

Mientras los hijos de Dios afligen sus almas delante de él, suplicando pureza de corazón, se da la orden:

“Quitadle esas vestiduras viles”, y se pronuncian las alentadoras palabras: “Mira que he quitado de ti tu pecado, y te he hecho vestir de ropas de gala”. Se pone sobre los tentados, probados, pero fieles hijos de Dios, el manto sin mancha de la justicia de Cristo. El remanente despreciado queda vestido de gloriosos atavíos, que nunca han de ser ya contaminados por las corrupciones del mundo. Sus nombres permanecen en el libro de la vida del Cordero, registrados entre los fieles de todos los siglos. Han resistido los lazos del engañador; no han sido apartados de su lealtad por el rugido del dragón. Ahora están eternamente seguros de los designios del tentador. Sus pecados han sido transferidos al originador de ellos. (Consejos para la iglesia, p. 643)

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El hijo de Dios no estará satisfecho hasta que sea vestido de la justicia de Cristo, y sostenido por el poder que da vida. Cuando ve una debilidad en el carácter, no es suficiente confesarlo vez tras vez; debe trabajar con determinación y energía para sobrellevar sus defectos al construir rasgos opuestos de carácter. Él no huirá de este trabajo porque sea difícil. Se requiere del cristiano una energía incansable, pero no se le requiere trabajar con sus propios esfuerzos; poder divino acuerda su demanda. Todo el que está esforzándose sinceramente por la victoria sobre el yo, se apropiará de la promesa, “Bástate mi gracia” 2 Corintios 12:9. (Obreros evangélicos, p. 420 en inglés, versión 1892)

Cada cual tendrá que sostener un violento combate para triunfar del pecado en su propio corazón. Por

momentos, es una obra muy penosa y desalentadora; pues al mirar los defectos de nuestro carácter, nos detenemos a considerarlos, cuando en realidad deberíamos mirar a Jesús y revestir el manto de su justicia. Quien quiera que entre en la ciudad de Dios por las puertas de perla, entrará como vencedor, y su victoria más grande será la que habrá obtenido sobre sí mismo. (Testimonios para la iglesia, tomo 9, p. 147)

Ningún pecado puede tolerarse en aquellos que andarán con Cristo en ropas blancas. Las vestiduras sucias

han de ser sacadas, y ha de ponerse sobre nosotros el manto de la justicia de Cristo. Por el arrepentimiento y la fe, somos habilitados para prestar obediencia a todos los mandamientos de Dios, y somos hallados sin culpa delante de él. Los que recibirán la aprobación de Dios están ahora afligiendo sus almas, confesando sus pecados, y suplicando fervientemente el perdón por Jesús su Abogado. Su atención está fija en él, su esperanza y su fe se concentran en él, y cuando se da la orden: “Quitadle esas vestimentas viles, y vestidle de ropas de gala, y pongan mitra limpia sobre su cabeza,” están preparados para atribuirle toda la gloria de su salvación. (Joyas de los testimonios, Tomo 2, p. 175)

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Día 11–Testificación y Servicio

Formato Sugerido para el Último Sábado

El sábado final debe ser tiempo de gran regocijo en todo lo que Dios ha hecho por usted y su iglesia durante

los Diez días de oración. Diseñe su día para celebrar la bondad y gran poder de Dios. Considere como ha experimentado el derramamiento del Espíritu Santo durante los pasados diez días. El sábado es una oportunidad de regocijarse en lo que él ha hecho, está haciendo y hará.

Texto: Isaías 43:10

“Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí.”

Las necesidades de cada congregación son únicas, así que por favor trabaje con los líderes locales para desarrollar un plan específico para su iglesia. Aquí hay algunos artículos sugeridos para incluir en el culto del último sábado:

Ø Enseñanza bíblica basado en Isaías 43:10: esto puede ser un sermón o una homilía, o el pasaje

puede ser usado como base para juntos entretejer historias de como Dios ha obrado durante estos Diez días de oración.

Ø Testimonios: Incluya tiempo suficiente para testimonios de oraciones contestadas. Aquellos que han participado en los Diez días de oración deben tener muchas historias que pueden compartir con la congregación, pero anímeles a ser breves para que todos puedan participar. Otros también pueden tener historias. Sería bueno tener algunos testimonios previamente planificados, además de tener un tiempo disponible para compartir.

Ø Tiempo de oración: Invite a toda la congregación a unirse en tiempo de oración. Puede dirigir a la congregación a través de una oración interactiva similar a lo que ha usado a través de toda la semana. Pueden orar juntos sobre un pasaje o texto en específico. Puede hacerse en grupos pequeños o todos orando juntos. Otra opción puede ser tener diferentes tipos de oraciones a través del culto – orando las Escrituras, grupos pequeños, individual, congregacional, silenciosa, y así sucesivamente.

Ø Cantar: Este es un día de regocijo en todo lo que Dios ha hecho, y la música es una grandiosa manera de celebrar. Si hay un himno o canción que se ha convertido en la canción tema para su grupo, asegúrese de cantarlo con toda la congregación.

Ø Planes futuros: Si Dios te ha guiado hacia un evangelismo especial o ministerio a través de los Diez días de oración, deje que la familia de la iglesia conozca sus planes e invíteles a unirse a él.

Ø Niños/jóvenes: Una historia infantil acerca de la oración será ciertamente apropiada. También, si tiene algún niño o joven involucrado en las reuniones regulares de oración, permítales compartir sus testimonios y/o puedan dirigir el tiempo de oración.

Ø Flexibilidad: Esté seguro de ser flexible en sus planes para que pueda seguir la dirección del Espíritu Santo a través del servicio.

Día 1 Entra a Sus Puertas con Acción de...

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