DATOS BIOGRÁFICOS DE MANUEL DÍEZ TAVANERA, …PITTM, 86, Palencia, 2015, pp. 103-138, ISSN...

PITTM, 86, Palencia, 2015, pp. 103-138, ISSN 0210-7317

El presente trabajo tiene su origen enuna conferencia pronunciada en el ColegioOficial de Farmacéuticos de Palencia conmotivo de las fiestas patronales del año2014. Su título era “La Expedición filantró-pica de la vacuna de la viruela. El armadorde la corbeta María Pita, Manuel DíezTavanera, un palentino de Villaviudas”. Enella, tras un repaso por lo que fue la enfer-medad de la viruela, sus medios de comba-tirla, el descubrimiento y la práctica de lavacunación y un somero relato de lo que fuey significó la Expedición filantrópica de lavacuna, hice un bosquejo biográfico de lafigura de Manuel Díez Tavanera, un palenti-

no cuyo papel ha pasado prácticamentedesapercibido por los historiadores, apenasmerece una ligera cita por su condición dearmador de la corbeta donde transcurrió laprimera parte de la Expedición hasta su lle-gada a Veracruz. Con los datos que encontréen diversa bibliografía, y mis investigacio-nes en varios archivos, he recopilado unaserie de datos, bastantes más de los aquíexpuestos, con los que he redactado el pre-sente trabajo. En ellos primeramente identi-fico a su familia, la de los Tavanera, y la vin-culo con la de los Durango, conocidos enPalencia como comerciantes y harineros1.Son parte de una bastante numerosa canti-

DATOS BIOGRÁFICOS DE MANUEL DÍEZ TAVANERA,NATURAL DE VILLAVIUDAS, ARMADOR DE LA CORBE-TA MARÍA PITAEN LA EXPEDICIÓN FILANTRÓPICA DELA VACUNA DE LA VIRUELAJulio Estrada NéridaFarmacéutico y Especialista Universitario en Archivística

RESUMEN: Este trabajo tiene dos partes diferenciadas. En la primera se hace una recopilación de datos fami-liares y biográficos del comerciante y armador de buques Manuel Díez Tavanera, residente en La Coruña,natural de Villaviudas (Palencia), y en la segunda las vicisitudes y viaje de la corbeta María Pita, de su pro-piedad, contratada por la Real Hacienda para la Expedición filantrópica de la vacuna de la viruela.PALABRAS CLAVE: Tavanera, Durango, corbeta María Pita, Expedición filantrópica, vacuna, viruela.

BIOGRAPHICAL FACTS ABOUT MANUEL DÍEZ TAVANERA, BORN IN VILLAVIU-DAS AND OWNER OF THE MARÍA PITA CORVETTE ON THE PHILANTROPICEXPEDITION OF THE SMALLPOX VACCINE.ABSTRACT: This essay is divided into two parts. The first one includes a compilation of biographical andfamily facts about the tradesman and shipowner Manuel Díez Tavanera, who came from Villaviudas (Palen-cia) and lived in La Coruña. The second one narrates the vicissitudes of the voyage of the María Pita corvet-te, which he owned and which was hired by the Real Hacienda (the Royal Tax Office) for the philanthropicexpedition of the smallpox vaccine.KEY WORDS: Tavanera, Durango, María Pita corvette, Philanthropic expedition, vaccine, smallpox.


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dad de emigrantes de la zona de Villaviudasy Baltanás que en estos años marchan a tie-rras gallegas y otras partes practicando elcomercio, con vista a las particulares cir-cunstancias que se daban entonces al abrirseel comercio con América desde el puerto deLa Coruña. Tras hacer una biografía, quecomenzamos con su tío, Santiago DíezTavanera, y la narración de diversas vicisi-tudes por las que tuvieron que pasar, dedicouna segunda parte a narrar el proceso decontratación de la corbeta para la Expedi-ción, obviando la narración del resto de loshechos, que, sobre todo a partir de la cele-bración del bicentenario son más conocidos,ya que la conmemoración ha dado lugar a laaparición de diversos trabajos y a la publi-cación de nueva y variada documentación.

Creo necesaria hacer alguna advertenciainicial: la primera es que aunque ManuelDíez Tavanera escribe el nombre con uve, seencuentra, incluso entre miembros allega-dos escrito con be, por ello, aquí aparece deuna u otra forma. Los cuadros que adjuntode las familias dejan ver que los verdaderosapellidos de Manuel serían Díez Ibáñez,pero él mismo firma de diversas formas,aunque el más frecuente es Díez Tavanera,como su tío, o Tavanera y sobrino, nombrecomercial, y en algún caso especial, comoen su testamento, utiliza el más completo deDíez Ibáñez Tavanera. Para hacer un pocode luz e intentar no confundir una genera-ción con otra, he hecho las genealogíascorrespondientes, con algunas fechas orien-tativas.

LA FAMILIA DE MANUEL DÍEZ [IBÁ-ÑEZ] TAVANERALos abuelos paternos: Alejandro Díez,natural de Baltanás, casado con ÁguedaTavanera Casero, natural de Villaviudas,

ella de segundo matrimonio (anterior conSantiago Balbás).El padre y sus hermanos:Alejandro Díez Tavanera, nacido el 6 denoviembre de 1723 y bautizado el 14 delmismo2. Manuel Díez Tavanera, nacido el 18 dediciembre de 1725, bautizado el 1º de enerode 17263. Clara Díez Tavanera, bautizada el 21 deagosto de 17284. Santiago Díez Tavanera, nacido el 6 deenero de 1730 y bautizado el 20 del mismo5. Rosa Díez Tavanera, nacida el 28 de febre-ro de 1734 y bautizada el 7 de marzo6. Francisco Díez Tavanera, nacido el 10 denoviembre de 1736 y bautizado el 25 delmismo7. Águeda Díez Tavanera, nacida el 8 de octu-bre de 1739 y bautizada el 31 del mismo8. Los abuelos maternos: Andrés Ibáñez yMaría Calvo, naturales de Villaviudas.La madre y sus hermanos:María Ibáñez Calvo, nacida el 12 de febre-ro de 1723 y bautizada el 20 de febrero delmismo9. Francisco Ibáñez Calvo, nacido el día de laCruz 14 de septiembre de 1725 y bautizadoel 29 del mismo10. Teresa Ibáñez Calvo, bautizada el 30 denoviembre de 172611. Francisco y Manuel Ibáñez Calvo, melli-zos, nacidos el 14 de agosto de 1729 y bau-tizados el 24 del mismo12. Catalina Ibáñez Calvo, nacida el 1 denoviembre de 1731 y bautizada el 25 delmismo13.


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Andrés Ibáñez Calvo, nacido el 15 de enerode 1733 y bautizado el 8 de febrero14. Los padres:Manuel Díez Tavanera y Teresa IbáñezCalvo. Contrajeron matrimonio el 27 deenero de 174815. Él falleció el 20 de mayo de179416 y ella el 9 de noviembre de 180317.Él y sus hermanos, todos nacidos en Villa-viudas: sus apellidos serían Díez Ibáñez:Alejandro Díez Tavanera, nacido el 17 deoctubre de 1748, y por estar bautizado de nece-sidad, el 27 de octubre solo se le administraronlos santos óleos y crisma18. Padrinos FranciscoDurango Tabanera y Catalina Tavanera.Águeda Díez Tavanera, nacida el 27 de sep-tiembre de 1752 y bautizada el 7 de octubredel mismo19. Fueron padrinos Francisco Ibá-ñez y Ángela Arias.Toribio Díez Tavanera, nacido el 16 de abrilde 1755 y bautizado el 27 del mismo20.Padrinos Francisco Durango Tabanera yTeresa Montoya.Mateo Díez Tavanera, nacido el 20 de agos-to de 1757 y bautizado el 2 de octubre delmismo21. Padrinos Francisco Durango yÁngela Rodríguez. Casado con Cecilia Sanzen 178422, enterrado el 13 de diciembre de1828 en la iglesia parroquial23.Manuel Díez Tavanera, nacido el 17 demarzo de 1760 y bautizado el 25 delmismo24. Fueron padrinos Francisco IbáñezPeña y Clara Díez.Clara Díez Tavanera, nacida el 22 de agos-to de 1762 y bautizada el 5 de septiembredel mismo25. Fueron padrinos Santiago DíezTabanera y Teresa Díez.María Josepha Díez Tavanera, nacida el 11de marzo de 1765 y bautizada el 23 delmismo26. Fueron padrinos Francisco IbáñezPeña y Clara Díez.

LA FAMILIA DE ÁNGELA DURANGOIGLESIAS (SU MUJER)Los abuelos paternos: Francisco DurangoGil, casado en Villaviudas el 2 de mayo de172527 en 1º matrimonio con Ana TabaneraCasero y en 2º el 22 de agosto de 175128 conÁngela Rodríguez. Enterrado el 30 dediciembre de 177429.El padre y sus hermanos:María Durango Tabanera, bautizada el 18de agosto de 172630, casada con AgustínNúñez.Catalina Durango Tabanera, bautizada el 3de mayo de 172931, casada 1º con RosendoMontoya y 2º con Fernando Baranda.Francisco Manuel Durango Tabanera,nacido el 8 de diciembre de 1731 y bautiza-do el 29 del mismo32, casado con Mª Cruz deOrtúzar y Vélez (vº de Valladolid).Rafael Durango Tabanera, nacido el 16 deoctubre de 1734 y bautizado el 24 delmismo33 (vº de Dueñas).Juan Antonio Durango Tabanera, nacidoel 13 de junio de 1737 y bautizado el 24 delmismo34, casado con Ana Iglesias Sarrico-lea (vº de Palencia).Ana Durango Tabanera, nacida el 21 deabril de 1740 y bautizada el 30 del mismo35,casada con Pedro García Giraldo.Teresa Durango Tabanera, nacida el 26 deseptiembre de 1742 y bautizada el 3 de octu-bre del mismo36.Cipriano Durango Tabanera, nacido el 15de septiembre de 1745 y bautizado el 4 deoctubre del mismo37.Los abuelos maternos: Miguel de Iglesiasde Toro y Teresa de Sarricolea y Cabañas.


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La madre y sus hermanos:Ana de Iglesias SarricoleaTeresa de Iglesias SarricoleaJosefa Iglesias SarricoleaFrancisca Xaviera Iglesias SarricoleaLos padres: Juan Antonio Durango Tabanera (vº dePalencia), casado con Ana Iglesias Sarrico-lea. Él falleció el 14 marzo de 180238.Ella y sus hermanos:Ángela Durango Iglesias, nacida el 2 demarzo de 1761 y bautizada de necesidad;oleo y crisma el 7 del mismo39.Paula Durango Iglesias, nacida el 30 dejunio de l762 y bautizada el 4 de julio40.Eleuterio Durango Iglesias, nacido 18 deabril de 1764 y bautizado el 2241. Presbítero.Juan Pío Durango Iglesias, nacido el 11 dejulio de 1766 y bautizado el 1442.Miguel Durango Iglesias, nacido el 23 deseptiembre de 1768 y bautizado el 25 delmismo43.Romualda Vicenta Durango Iglesias, naci-da el 7 de febrero de 1770 y bautizada el 12del mismo44. Casada con José Pérez Ordó-ñez.Ana Durango Iglesias, nacida el 23 de sep-tiembre de 1771 y bautizada el 27 delmismo45.Saturnina Durango Iglesias, nacida el 11 defebrero de 1773 y bautizada el 17 delmismo46. Casada con José Calderón.Catalina Durango Iglesias, nacida el 30 deabril de 1774 y bautizada el 3 de mayo delmismo47.Aniceto Durango Iglesias, nacido el 17 deabril de 1777, y bautizado el 19 del mismo48.

Petra Durango Iglesias, nacida 13 de abrilde 1780 y bautizada el 17 del mismo49.Rafael Durango Iglesias, nacido el 24 deoctubre de 1781 y bautizado el 27 delmismo50.

SANTIAGO DÍEZ TABANERACasado el 6 de junio de 175351 con Tere-

sa Cuesta Carazo, hija de Manuel Cuesta yCatalina Carazo, todos vecinos de Villaviu-das. Murió en Villaviudas, enterrado el 2 deoctubre de 1803.

Los inicios de Santiago Díez Tabanera enSantiago

Los inicios de Santiago Díez Tavaneraen el comercio debieron producirse, comoera normal entonces, trabajando para otro;con el tiempo se formaba una compañía decomercio y finalmente se establecía por sucuenta, dependiendo de la actividad, delnegocio y de la capacidad de cada uno. Losinicios no debieron ser muy buenos.

En 1766, Francisco Durango Tavanera,su pariente, se había avecindado en Vallado-lid, y tenía en Santiago un comercio queatendía por medio de un mancebo52. El 5 dejunio de 1767, Santiago Díez Tavanera yTeresa Cuesta su mujer, vecinos de Villaviu-das, y tratantes en varios géneros, hacen unpoder a Francisco Durango, sobre quiebra ydeudas53:

… decimos que habiendo venido de algúntiempo a esta parte en quiebra y disminu-ción de nuestros bienes y caudal por variosfracasos que nos han acaecido, tratamos connuestros acreedores por medio de avisos yrazón verídica que les hemos enviado tantoa los que residen en la villa de Baiona deFrancia como en otros pueblos de dichoreino nos diesen espera por el tiempo queles pareciese y perdonasen la cantidad quegustasen allanándonos a pagar el resto que


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quedase con amistosa composición y pare-ce que la mayor parte en personas y canti-dades han condescendido a dichas esperas yremesa, habiendo dado y otorgado su poderespecial a D. Miguel Durrutchi uno dedichos acreedores que les ha sustituido enD. Francisco Durango vecino y mercaderen la ciudad de Valladolid para cuanto con-tiene; por tanto y que tenga efecto dichasesperas y convenio, yo la expresada TeresaCuesta bajo de la expresada licencia y man-comunidad referida otorgo que doy todo mipoder … al dicho Santiago Díez Tavanerami marido especial para que en mi nombrey representación de mi persona y bienestrate con dicho D. Francisco Durango comotal apoderado de la mayor parte de los refe-ridos mis acreedores bajo del estado que leestá remitido el perdón y remesa que mehan de hacer de los escritos que contra mítienen y esperas que me deben dar para lapaga y satisfacción de los restos que queda-sen líquidos, obligándome como me obligoa su entera satisfacción a los plazos y formaque tratare, se ajustare y conviniere con eldicho D. Francisco Durango a nombre desus partes, otorgando en este particular ycuanto en su razón ocurra, la escritura deobligación ajuste y convenio con la asina-ción de pagas, plazos, obligaciones, condi-ciones, requisitos, fuerzas, y firmezas que lepareciere y convengan para su entera vali-dación, la que así ejecutada la apruebo, rati-fico y quiero la tenga tanto como si por mífuese otorgada como lo es este poder paradicho fin doy al citado mi marido sin nin-guna limitación y con libre, franca y gene-ral administración y relevación en forma ycon obligación que hago y haga de todosmis bienes muebles, raíces, dote, arras ydemás que meto y me puedan pertenecercon renunciación de las leyes de mi fuerocompetentes... a favor de las mujeres… lasrenuncio y renuncié… porque la hago de miespontanea voluntad… en cuyo testimoniomarido y mujer otorgamos así ante el pre-sente escribano y testigos en la ciudad deValladolid, digo en la ciudad de Villaviudasa 5 de junio de 1767 siéndolo FranciscoGonzález Ibáñez y Francisco Díez, vecinos.

A raíz de este fracaso, parece que San-tiago Díez Tabanera y Francisco Durangoforman compañía en 1768 para trabajar en ydesde Galicia, instalándose en Santiago,posiblemente con vistas a comerciar conAmérica, compañía que liquidarán en 1784al incorporarse su sobrino Manuel Díez Ibá-ñez Tavanera al negocio, para lo cual forma-rá con él nueva compañía, como veremos.La primera noticia que conocemos de supresencia en Galicia es del año 1769 en queaparece Santiago Díez Tavanera comoarrendatario de las rentas de Manuel Baeza,de Ponferrada el 9 de diciembre de 176954.

En 1771 entró en sociedad con José deAndrés García fundando una casa comercialen Montevideo y Buenos Aires, para traer aEspaña una serie de productos, especial-mente cueros, para lo que éste entregó496.578 reales, posiblemente en variasremesas. Fue nombrado gerente de estanueva empresa Alejandro Díez Tavanera,sobrino de Santiago, que parece es el prime-ro de los sobrinos que trabajan con él, y queresidente en Ferrol, por Juan AntonioDurango y compañía, vecino y comercianteen Palencia, se da un poder55, en esta ciudadel 24 de noviembre de 1772 para entrega degéneros y representación, por regresar a supatria Francisco Diago, natural de Baltanás,entonces residente en Buenos Aires, y querepresentaba sus intereses.

En La Coruña en fecha 14 de diciembrede 1772 Santiago Díez Tabanera y compa-ñía, del comercio de Santiago, hizo tambiénescritura de compañía56 con Alejandro DíezTavanera, su sobrino, por tiempo de seisaños, capitulando en ella que éste debía depasar inmediatamente a las ciudades deMontevideo y Buenos Aires y más dondefuese necesario y encargarse del caudal ygéneros que en aquel paraje tenía la compa-

ñía en poder de Francisco Diago, de aquellavecindad, dándole de lo que le entregaserecibo con individual razón de los génerosrecogidos y de los que le fueran remitidospor el otorgante y su compañía, así como delos 64.165 reales, importe de los génerosque en la ciudad de La Coruña había embar-cado y transportado a Buenos Aires, y por sutrabajo había de llevar la mitad de las utili-dades obtenidas, conforme con las capitula-ciones que estaban hechas, y entre ellas latercera era que anualmente había de haceravanze de todos esos géneros para la mejorclaridad, régimen y gobierno de la compa-ñía, y la cuarta que durante el tiempo quecorriese con esta manipulación y comerciohabía de tener el mayor cuidado y actividadde no hacer empréstitos algunos, y cuandofuese preciso ejecutarlo no había de excederel todo de dos mil pesos, y haciéndolo fueseresponsable de su cobro, de cuyo instrumen-to había dado fe Domingo Basazo, escriba-no de La Coruña57. Con estas instruccionesel citado Alejandro partió hacia BuenosAires con los géneros que así le entregó elotorgante, donde recogió de FranciscoDiago los que tenía existentes, de que remi-tió razones en 28 de marzo de 1773 y en 8de noviembre de 1775, así como del primeravanze, sin que con posterioridad lo hiciesede ningún otro, pretextando que a su vueltaasí lo cumpliría, en cuya buena fe se lesiguieron haciendo diferentes remesas demás géneros y otras cosas, manejando todoa su arbitrio y voluntad.

En Baltanás el 11 de octubre de 1774Teresa Cuesta Carazo da un poder ante Enri-que Caballero para testar a favor de su mari-do, Santiago Díez Tavanera, y éste, el 9 demayo de 1775, en Santiago, estando ellapresente y enferma, hace el testamento58. Enél le nombra por su único heredero, y des-

pués de las mandas obligadas y voluntarias,le da instrucciones sobre cómo hacer con laparte que a ella corresponde:

… y resultando como me persuado y jui-ciosamente lo contemplo que lo ansí entre-gado a dichos mis padres y hermanos,asciende a más de lo que con arreglo a loque dejo dispuesto les pertenece de miherencia, igualmente quiero y es mi volun-tad restituyan todo el exceso a dicho mimarido por no ser razonable que habiendosido el único que lo agenció con muchoafán y trabajo, después de haber experi-mentado muchas quiebras y vaivenes defortuna hasta llegar al extremo de verse enuna suma pobreza como consta muy bien alos citados mis padres y parientes y espúblico en este reyno, se quiera abusar poraquéllos de la franqueza y liberalidad aque su propensa bondad y el amor paternalle ha conducido hasta aquí...

De la actividad de Alejandro en BuenosAires y Montevideo, poco más se sabe; en1776 envía 200.000 libras de cuero al pelo59,y en 6 de octubre de 1780 dio un podergeneral sin limitación alguna, ante JuanEugenio Rodríguez escribano de RealHacienda, Minas y Registros de aquellaciudad a Santiago Díez Tabanera, que secopia en otro especial de poder que le da,para que en su nombre se presentase en ape-lación ante el tribunal de la Real Haciendade la ciudad de Buenos Aires, que teníainterpuesto pleito sobre la cobranza delramo de guerra, que había declarado deberíacontribuir por los cueros que tenía acopia-dos y almacenados en Montevideo. SantiagoDíez Tavanera, sustituye el poder el 16 defebrero de 1781 en varios procuradores yagentes en los Reales y Supremos Consejosen la villa de Madrid para seguir la apela-ción hasta su absolución60.

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La muerte de Alejandro Díez provocóuna perturbación en los planes de la compa-ñía. Alejandro falleció, no conocemos lacausa, el 11 de junio de 1781 en Montevideo(sic), del que se tiene conocimiento enPalencia el 12 de noviembre, y por los fami-liares se redacta un poder61 a FranciscoMedina y a falta de éste a Manuel Basabil-baso, vecinos de Buenos Aires, para querecogieran todo lo a él perteneciente y lopusieran en comunicación de Santiago DíezTavanera, su tío, vecino de la ciudad de San-tiago en el Reino de Galicia, como ya hemosvisto. Éste, según el mismo nos relata en elpoder62 que dio el 21 de noviembre de 1781,cuando esperaba su regreso con bien, sehalla con la impensada novedad de habersefallecido en dicha ciudad de Buenos Aires.Y siendo normal que todos los enseres ymás efectos de la compañía, y la de otrosinteresados se hubiera inventariado y puestoa cubierto evitando su extravío y perjuiciode terceros, por ello y otros justos motivosda y otorga también todo su poder a Fran-cisco Medina y por su falta a Manuel Basa-bilbaso vecinos de la ciudad de BuenosAires para que en su nombre acudieran anteel juez de difuntos, u otro que pudiera cono-cer de dicho inventario, practicando las dili-gencias conducentes para recoger de la per-sona o personas en que se hubieran deposi-tados todos los enseres y efectos de la com-pañía que estaban al cargo de su sobrino,como también las deudas que fueran en sufavor, dando recibo y carta de pago en bas-tante forma, y si hubiera que liquidar algunacuenta lo pudieran hacer con arreglo a loslibros de caja, avanzes, cartas y más asien-tos que en el particular hubiera, dando avisode lo que fuera ocurriendo para en su vistaremitirles las instrucciones y más adverten-cias que fuera conveniente de las que no se

podrían salir. Por su parte, José de AndrésGarcía envía a su sobrino Julián del Molinoa América en 1782, y el 28 de enero de 1784disolvían en buena armonía la compañía63.

El 30 de noviembre de 1781 el padre deAlejandro, Manuel Díez Tavanera, en Villa-viudas, pidió en la parroquia se le señalasesepultura para poner sobre ella una ofrenday cantar un responso por espacio de un año;se admitió la petición, y se asignó la sepul-tura donde estaba enterrado Alejandro Díez,su abuelo64.

En 1780 Santiago Díez Tabanera se hacecargo por traspaso de una casa sita en lacalle de la Azabachería65. El día 1º de julio,Josef Naveira, presbítero, cofrade de ganan-cia de la ilustre cofradía de Nuestra Señorade la Concepción, sita en la iglesia de San-tiago, hace escritura en la cual dice que porotra de 29 de octubre de 1765 había adquiri-do de los consiliarios y más cofrades de lacofradía, por título de subforo a su favor, elútil de dicha casa en renta anual de 59 duca-dos por tiempo y voces del foro principal,otorgado por D. José de España como suce-sor del vínculo intitulado de los España afavor de D. Domingo López de la Iglesia,mercader, y doña María Mosquera, sumujer, con la obligación de cumplir todaslas condiciones estipuladas en el foro y quedentro de los tres años, el otorgante había dehacer los reparos necesarios, y no lo ejecu-tando fuese nulo el subforo, pero no pudien-do reedificar la casa, que amenazaba ruinapor su antigua construcción, y siendo nece-sario crecida suma de reales, por carecer demedios buscó a persona que aceptase lacesión, lo que hizo Santiago Díez Tavanera,y se convinieron en que el otorgante cedía ytraspasaba a favor del segundo la casa, conla contribución anual de 59 ducados, a pagaren dos plazos, y que con toda brevedad

Datos biográficos de Manuel Díez Tavanera, natural de Villaviudas, armador de lacorbeta María Pita en la Expedición filántropica de la vacuna de la viruela

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debía de reedificarla, para que no se acaba-se de inutilizar, y de la cual le dio la pose-sión.

Santiago Díez Tabanera vuelve a Villa-viudas hacia 1784, tras formar compañíacon su sobrino Manuel Díez Tavanera, aquien deja a cargo del negocio, aunque sinabandonarlo, haciendo frecuentes viajes aGalicia, e incluso participa como regidor enla vida de su pueblo, aunque no deje por ellode atender sus intereses.

En 1789 envía a otro sobrino, ToribioDíez Tabanera, a Pontevedra, prestándole82.000 reales el 5 de febrero para montaruna empresa66.

Santiago Díez Tabanera hace testamentocerrado en La Coruña el 18 de marzo de1801 ante el escribano Jacinto Pereira67 y uncodicilo en Villaviudas el 29 de septiembrede 180368. Murió el 1 de octubre sin descen-dencia, siendo enterrado el día 2 de octubresiguiente69.

MANUEL DÍEZ [IBÁÑEZ] TAVANERAEN SANTIAGO

Tras el fallecimiento de Alejandro, San-tiago Díez Tabanera recurre a otro de sussobrinos, que seguramente ya estaba traba-jando con él. El 11 de mayo de 1782, ManuelDíez Tavanera, residiendo en Santiago,teniendo el propósito de casarse con ÁngelaDurango Iglesias, vecina de la ciudad dePalencia, hija de Juan Francisco DurangoTavanera y de Ana Iglesias Sarricolea, primadel otorgante en tercer grado de consangui-nidad (las abuelas paternas de ambos eranhermanas), con licencia de su padre, ManuelDíez Tavanera, le da poder70 para que en sunombre acuda donde competa para practicarlas diligencias necesarias hasta conseguir ladispensa, en atención a que, por medio de

Francisco Ibáñez, tenía dotado a la dichaconforme a su estado, cuya cantidad se depo-sitaría hasta que tuviera efecto el matrimo-nio, que había de celebrar su padre en sunombre. Ese mismo día Santiago Díez Taba-nera, da su poder71 a su cuñado, y tío deManuel, Francisco Ibáñez, vecino de Villa-viudas, para que en su nombre pasase a tra-tar y conferenciar con la referida Ángela ysus padres la dote que le había de dar conrespecto a su estado y circunstancias, y unavez concertado, había de entregar y ponerdicha cantidad donde correspondiera, reco-giendo recibo. El 21 de junio de 1783,Manuel Díez en virtud de los poderes ante-riores, una vez conseguida la dispensa, y laasignación de dote de 5.500 reales, que leadelantó su tío Santiago Díez Tabanera pormano de Francisco Ibáñez, confiere nuevopoder72 a su padre para que en su nombreverifique que todo está cumplido.

Se celebran las capitulaciones matrimo-niales entre Santiago Díez Tavanera, y elpadre de la novia, Juan Antonio DurangoTavanera, en Palencia el 7 de julio de 178373por las cuales Juan Antonio Durango le da15.000 reales por cuenta de las legítimaspaterna y materna de su hija, y SantiagoDíez Tavanera aporta 11.000 reales. Contra-en matrimonio por poderes el mismo día 7de julio de 1783 en la catedral de Palencia74,sustituyendo al novio su padre. En 5 deagosto de 1783, Manuel Díez Tavanera, quetenía la dotación en depósito con mandatodel provisor de la diócesis de Palencia, nopudiendo pasar en persona a recogerla, daun poder75 a su suegro Juan Antonio Duran-go para que en su nombre perciba los 5.500reales adelantados de la dote de donde estu-viesen depositados.

En 10 de febrero de 1784 le hace su tíoun poder general76 por tener que ausentarse



de Santiago para Villaviudas, aunque en rea-lidad a lo que iba era a disolver la Compañíade Valladolid. El 13 de marzo, Manuel DíezTavanera, dice que su tío tenía hecha com-pañía con Francisco Durango, comerciantey vecino de Valladolid y habiendo delibera-do recíprocamente disolverla, y para esteefecto ajustar y liquidar sus cuentas, y el queresultase alcanzado, para su reintegro,habrían de tratar y capitular lo que tuviesenpor conveniente, y para el caso de serlo sutío a favor de Francisco Durango, paramayor seguridad de éste en lo que escritura-sen, el otorgante da su poder77 al referidoSantiago Díez Tabanera para que en su nom-bre pueda obligar la persona y todos sus bie-nes que por cualquier razón le toquen y per-tenezcan, para el mayor seguro, estabilidady firmeza de lo que así capitulasen, así comopara que intervenga en su nombre en el ins-trumento que en dicha razón se otorgase.

Una vez resuelto, en 22 de septiembre,se hace la escritura de compañía mediante lacual Manuel Díez Tavanera la toma a sucargo78, bajo el nombre de Tavanera y Sobri-no, valorada en 365.070 rs y 7 mrs en efec-tos y deudas de las tres clases según pormenor resultaba de los libros, avanze hechoen febrero y cuenta finiquita, transigida enel mes de abril con su antiguo compañeroFrancisco Durango, deducidos los créditos ydepósitos contra él, y que debería ir satisfa-ciendo a sus vencimientos, y le asigna porrazón de trabajo y agencia al fin de la com-pañía, que ha de seguir hasta últimos días defebrero de 1790, la mitad íntegra de las uti-lidades que se produjeran, quedando a favordel otorgante la casa de Santiago donde sehallaba colocado dicho comercio segúnconstaba del instrumento de cesión que lehizo Francisco Durango, su anterior socio.

A todo ello dio conformidad Manuel DíezTavanera que estaba presente.

Debió de integrarse bien en Santiago,pues en las elecciones que se celebran en suayuntamiento para el año 1786, ManuelTavanera, que así se le nombra en la docu-mentación de referencia, resultó elegidocomo diputado del común, pero alegó paraeximirse el ser menor de 25 años y habersecasado recientemente, algo que en la legis-lación no se contemplaba. Sin embargo,estas circunstancias fueron tenidas en cuen-ta y aunque había tenido el mayor númerode votos, consiguió eximirse y que se nom-brara al segundo más votado79.

Su mujer, Ángela Durango Iglesias,actúa como testigo en el matrimonio cele-brado en Palencia el 29 de marzo de 178980entre su hermana Romualda Durango y JoséPérez Ordoñez, tristemente famoso porhaber sido asesinado a raíz de los aconteci-mientos que tuvieron lugar en Palencia apartir de mayo de 180881.

En 1795 vende en Santiago una casasituada en la Vía Sacra nº 4 por 80.000 realesal también comerciante Manuel de la Riva82.

MANUEL DÍEZ TAVANERA EN LACORUÑA. REAL CONSULADO

Ya casado, y con plenos poderes pararegir la compañía formada con su tío,Manuel Díez Tavanera traslada su domiciliodesde Santiago a La Coruña83 donde conti-núa con su actividad mercantil, y parece quecon cierto prestigio y buenas ganancias,pues el 29 de octubre de 1794 es admitidoen la matrícula del Real Consulado Maríti-mo y Terrestre en la clase de Comerciantes,junto con otros destacados mercaderes, y enla Junta General de matrícula en 20 dediciembre, solo dos meses después de su


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admisión, se convocan elecciones paracubrir los cargos directivos de cada clase(mercaderes, comerciantes y fabricantes) ysale elegido para Prior con 12 de los 16votos84 para el bienio 1795-1796 y repite en1799-180085, 1805-1806, a partir de 181486,y bienio 1817-18. Al ser elegido en 1799,manifestó su deseo de no aceptar el cargopor razones de carácter personal, pero laintervención directa del Rey le hizo cambiarde opinión. Se le concedió una gratificaciónpara compensarle “del giro de sus negociosque tiene que abandonar en alguna medi-da.” En ese mismo mandato, el Rey le dis-pensó del cargo de Prior, por desempeñar elde Director de la Casa de Reducción deMoneda (Vales Reales) de La Coruña87. Enel Kalendario Manual y Guía de forasterosen Madrid para el año de 1801, p. 120, apa-rece como uno de los directores de la cajasubalterna en La Coruña de la Real Caxa dedescuentos, cuyo presidente era el CapitánGeneral de Galicia.

Precisamente durante uno de sus manda-tos, en 1806, se inauguró en el Consuladouna importante biblioteca, que todavía exis-te, en la que pronunció un pequeño discursopor el que es más conocido en La Coruña alser uno de los primeros impresos realizadosen la ciudad en la época moderna: Discursoque compuso y leyó el prior del Real Consu-lado de La Coruña Don Manuel Díez Tava-nera el día 15 de agosto de 1806 en la Salade la Biblioteca... establecida por... PedroAntonio Sánchez, canónigo de la... iglesia deSantiago. Impreso en La Coruña, Imprentade la Viuda e hijas de Riesgo, 180688.

Actividad comercialSu actividad comercial en Galicia en

unos primeros momentos pudiera definirse

como comerciante de géneros al por mayor,pues compraba productos varios en Francia,zona de Burdeos, y otros lugares, que des-pués vendía a otros comerciantes, no solo deEspaña, sino de América. Según nos dicenlas guías comerciales del momento, en LaCoruña, “el tráfico de los comerciantes almayor de esta plaza es igual, a corta dife-rencia, en todos los ramos de comercio, asínacionales como extranjeros, y los más tra-tan en cacao, azúcar, aceite, jabón, harinas,paños, bayetas, palo campeche, arroz, cue-ros al pelo, canela, lencerías así nacionalescomo extranjeras, bacalao, y todos losdemás géneros y efectos comerciables.” Enlos protocolos de escribanos queda reflejadaesta actividad comercial, por encontrarsedocumentos de poder para reclamar elimporte de letras impagadas y para su cobrovía judicial.

Por una Real orden fechada en Aranjuezel 21 de junio de 1800, se aprueba su pro-puesta de embarcar 6.000 resmas de papelcon destino a Montevideo89. También cons-ta la exportación de harinas a América yventas en toda Galicia a comerciantes pormenor. Es de suponer que no faltaríanmedias y otros productos de fabricaciónpalentina.

Se puede rastrear su huella en diversosalmanaques mercantiles y guías, así en elAlmanaque mercantil, ó Guía de comercian-tes, para el año de 1797, pp. 416 y 412, sele cita como consiliario y accionista de laCompañía de Seguros Marítimos de laCoruña, y en la lista de comerciantes, conexpresión del nombre comercial Tavanera ysobrino, lo que también se indica en lasguías de los años 1800 y 1808.

También aparece en el Almanach ducommerce de Paris, des départemens de la




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France et des principales villes du Mondede los años 1805, p. 636, y 1809, p. 804, alreferenciar entre las Principales places ducommerce d’Europe, a Corogne (La), y asus comerciantes.

Armador de barcosSu actividad como armador de barcos la

constatamos desde 1800, aunque puede seranterior, pues ya en 1797 aparece como con-siliario y accionista de la Compañía deSeguros marítimos de La Coruña90. A partirdel momento en que se convierte en arma-dor y propietario de barcos, aprovecha via-jes de ida y vuelta para llevar y traer géne-ros, y así incrementar sus beneficios. Vea-mos algunos de esos barcos.

En 23 de junio de 1800 hace escritura deobligación y fianza a favor de la RealHacienda para armar una fragata nombradaUnión91. Dice tiene pronta para dar a la veladesde ese puerto al de Montevideo dichafragata, su capitán Tomás de Llano, armadaen guerra con 22 cañones y mercancía; ypara su total armamento necesitaba variosutensilios y municiones, para lo que habíahecho la correspondiente solicitud alcomandante general de las armas a fin deque se le franqueasen de los almacenes de laReal Hacienda; se le manda entregar conintervención del contador provincial deArtillería los utensilios siguientes: cien car-tuchos de lanilla de a ocho, cincuenta espa-das de las antiguas con guarniciones de fie-rro, cincuenta fusiles completos con cincocajones, cuatrocientas piedras de fusil, tres-cientas para pistola, once quintales de pól-vora de cañón, un quintal de fusil, un cajóncon mil doscientos cartuchos de fusil y tres-cientos sesenta estopines de a ocho concarrizo.

El 12 de agosto de 1800 hace escriturade poder y fianza a favor de la Real Hacien-da para armar una fragata nombrada Anto-neta92. Dijo tener armada en corso y mer-cancía dicha fragata, su capitán Josef Anto-nio de Velasco, para hacer viaje a Veracruzcon pliegos del Real Servicio y cargo por laReal Hacienda, y que necesitando para sutotal armamento varios pertrechos y muni-ciones de guerra, había hecho la correspon-diente solicitud al señor comandante generalde las armas, a fin de que se le concediesende los almacenes de la Real Hacienda conarreglo a lo prevenido por S.M. en la realordenanza de corso, y se le mandan entregarlos utensilios siguientes: doce pies de cabra,doce chifles de aire, doce planchas de plomopara cañón, doce guarda cartuchos de a cua-tro, doce botafuegos con regatón, treintaespeques, dos juegos de alcufas (?), doceatacadores con sus lanadas de a cuatro, dosrascadores de idem, cuatro cucharas con sussacatrapos, doscientas balas rasas de a cua-tro, doscientas piedras de fusil, ciento cin-cuenta de pistolas, doscientos estopines concarrizo, cuatro sacatrapos para fusil, ciencartuchos de lanilla de a cuatro, un barril demil doscientos cartuchos para fusil, diezquintales de pólvora de cañón empacada ydos quintales de fina, todo lo que se mandaverificar con intervención del contador pro-vincial de Artillería.

En 30 de junio de 1802 compra al con-signatario en La Coruña de los señores Jese,Roberto y Guillermo Waln, residentes yvecinos de Filadelfia, la fragata Willian-penn, su capitán Benjamín Ros, con bande-ra americana que se hallaba en el puerto, de320 toneladas en precio de 6.000 pesos fuer-tes (unos 120.000 reales), pago que efectúaen metálico93.



En 17 de julio de este año 1802, comopropietario de la fragata Carmela, de 330toneladas, tripulada con 24 hombres, sucapitán Tomás de Llano, que estaba parazarpar rumbo a La Habana con cargamentode harina y otros efectos, solicita la patentenecesaria a las autoridades portuarias94. Estafragata ya estaba de vuelta en abril de 1803,en que está presta a salir rumbo a Veracruzy la Habana con mercancías varias al mandodel alférez de navío Manuel de Zulueta95. El24 de marzo de 1804 salió para Montevideocon varios efectos, y regresó con cueros,dinero y otros. Inició el regreso el 1 dediciembre y el 9 de febrero de 1805 fuedetenida y apresada por una fragata de gue-rra inglesa y dirigida al puerto de Ply-mouth96.

El 14 de agosto de 1802, compra unacorbeta, también americana, nombradaPathy, surta en La Coruña, que había llega-do procedente de Boston, de 226 toneladaspor precio de 90.000 reales97.

En el año 1803 la Real Hacienda contra-ta su corbeta María Pita de 200 toneladas,para transportar la Real Expedición Filan-trópica de la Vacuna, y en 1809 compra unbarco, no sabemos de que clase, para mar-char a Inglaterra con su familia, como vere-mos más adelante.

El día 14 de julio de 1807 Manuel DíezTavanera otorga en La Coruña un poder98ante el escribano Manuel Baltasar de Pazos,escribano del Real Consulado, a D. FélixÁlvarez de Álvarez, vecino de la Villa yCorte de Madrid para que en su nombreacuda al Real y Supremo Consejo de Casti-lla, solicitando Real Provisión, con expre-sión de la Real Cédula de 4 de noviembre de1791, “para que las justicias de estos reinosa quien corresponda, u otra persona, no

impidan por ningún pretexto ni motivo quelos sujetos que dejaren nombrado en su tes-tamento, hagan por si, el inventario cuentasy particiones de los bienes y herencia quequedasen al tiempo de su fallecimiento,amistosa y extrajudicialmente para evitarlos gastos y perjuicios que de lo contrario seoriginarían.” Por resolución del Consejo deCastilla, hecho en Madrid a 28 de julio de1807, y provisión de 31 de agosto99, “Seconcede a esta parte la facultad que solicitaentendiéndose que verificado el fallecimien-to de D. Manuel Díez Tabanera el inventa-rio extrajudicial que se formare se ha deconcluir dentro del término de cuatromeses, protocolizándose después en oficiode escribano público”. Entendemos, portanto, que en estas fechas se hizo o preten-dió hacer por parte de Manuel Díez Tavane-ra testamento referido a sus bienes.

En la Guerra de la IndependenciaEl Real Consulado, en los prolegómenos

de la invasión francesa le nombra su repre-sentante en la Diputación General del clero,nobleza y Estado que se había de celebrar enBayona (Francia) el día 19 de junio de 1808,convocada por Napoleón para tratar la situa-ción política de España100, pero a la que noasistió a la vista de los acontecimientos ocu-rridos. Pero Manuel Díez Tavanera no fueajeno durante este tiempo a los aconteci-mientos que se vivieron en Galicia y enEspaña. Formó parte de la Junta provisionalinstalada en La Coruña el 30 de mayo de1808, y después, de la Junta de Haciendaformada en el seno de la Junta del Reino deGalicia, constituida el 14 de junio, cuyosmiembros se nombran el 15, siendo ManuelDíez Tavanera uno de los nombrados; pre-tende renunciar al nombramiento, pero se ledice que “en las actuales circunstancias


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nadie debe escusarse de hacer lo que se lemande”101. Su actuación dura hasta el 4 deoctubre de 1808 en que la Junta del Reinoacepta la dimisión de sus cargos que hicie-ron varios miembros de la Junta de Hacien-da debido a disconformidades con su mane-ra de actuar (parece que no hacía muchocaso de los informes que emitían)102. A pesarde ello protesta la Junta la dimisión, recor-dando “que los servicios de los que renun-cian son dignos de la mayor consideracióndel Reino”.

Regidor del AyuntamientoEn el Ayuntamiento coruñés fue diputa-

do de abastos en los años 1802, 1803 y1808103. En 1804 toma parte activa en losacuerdos adoptados para paliar la hambru-ma que padeció la ciudad104. En los momen-tos previos a la invasión de La Coruña porlas tropas francesas en el mes de enero de1809, su ideología liberal y contraria a lainvasión, le aconsejó abandonar la ciudad,según escrito que dirige a sus compañerosde Junta Directiva del Consulado105. Seencuentra todavía en La Coruña el 16 deenero de 1809, día en que forma parte delAyuntamiento en calidad de regidor bie-nal106. Ese mismo día 16 de enero da unpoder107 a Julián Cordón Villadiego, delcomercio de la ciudad de Santiago y a Mar-cial Francisco del Adalid y Manuel deLlano, del de La Coruña, para que a su nom-bre y de su sociedad Tavanera y sobrino

...… en representación de todos sus dere-chos y obligaciones liquiden, ajusten, tran-sijan y finalicen todos los asuntos pertene-cientes al comercio del otorgante que giranen este Reino, sus bienes y rentas, pidien-do execuciones, expidiendo y aceptandoletras, acudiendo judicial y extrajudicial-

mente a los tribunales y juzgados dondecompeta con producción de toda clase dedemandas, pidiendo informaciones, otor-gando toda clase de convenios, transaccio-nes, cartas de pago, y finalmente los cita-dos apoderados o cada uno de por sí y susrespectivos sustitutos hagan y practiquentodas las diligencias y gestiones que elmismo otorgante haría si se hallase presen-te, pues para toda y cuantas incidenciasocurran confiere este poder general espe-cial y sin limitación con todas las cláusulasde derecho y las de aprobación obligaciónrelevación poderío, sumisión y renuncia-ción de leyes en forma.

No conforme con la presencia francesaen la Coruña, y temeroso sin duda de lasrepresalias por haber formado parte de laJunta del Reino de Galicia, marcha a Ingla-terra con su familia y con las cosas que pudollevarse. Recogemos este testimonio de unproceso que se abre en el Almirantazgoinglés, pues salió del puerto de La Coruñael 17 de enero de 1809 en un barco inglés,de nombre Victoria y también Alfred thegreat, que había comprado a la Junta deGalicia, barco que había sido requisado pri-mero por los franceses a los ingleses, y queposteriormente (a finales de 1803) embarga-ron los españoles a los franceses, y que, trasser retenido en Pontevedra, se encontraba enel puerto de La Coruña y estaba pendientede vender con los bienes incautados por laJunta, de lo que se encargó José Calderón,su cuñado. En Inglaterra, desembarcó en elpuerto de Weymouth, y se le reclama la pro-piedad del barco, pues dada la premura de lasalida, la operación se había hecho sin ladocumentación necesaria, pero al final delproceso se le reconoce la propiedad, dadaslas circunstancias y situación de guerra108.



Tras la expulsión de los franceses deGalicia regresa a La Coruña, aunque sufamilia se queda en Londres; el día 6 denoviembre de 1809, comunica por escrito ala Junta directiva del Consulado que seencuentra de vuelta en la ciudad y se nom-bra una comisión para que acuda a su domi-cilio a solicitarle la reincorporación al cargode Prior, dado el reconocido prestigio de queManuel Díez Tavanera disfrutaba entre laclase comercial coruñesa y las razones porlas que había abandonado el cargo. La rein-corporación fue inmediata109.

En las diligencias efectuadas por unaprotesta de letra110 que se presenta el 8 defebrero para su tramitación en el Consuladode La Coruña contra Tavanera y sobrino,expedida en Porto el 7 de enero de 1809, porEnrique de Roger, por un importe de 3.600reales de vellón, a pagar en oro y plata y noen vales reales, que no se había podidocobrar, informa el escribano que “además deconstarme como público hallarse ausentesde esta ciudad los sobredichos Tavanera ysobrino, sin haber dejado dependiente algu-no en su casa de comercio”, había hechoalgunas preguntas a comerciantes “que dije-ron ignoran su paradero”, de lo cual entera-do el también comerciate Juan FranciscoBarrié “manifestó estaba pronto a satisfacersu importe por honor de la firma de loslibradores y bajo las protestas hechas”,como así lo hizo, de que se otorgó el corres-pondiente recibo. Ello es una prueba delprestigio que gozaba en la ciudad.

El 16 de enero de 1810 concurre a laasamblea preparatoria que bajo la direccióndel capitán general, y formada por represen-tantes de todas las clases de la población, (éllo hizo como representante del comercio),tendría por objeto deliberar sobre la defensadel Reino, así como la posible actuación en

el caso de una nueva invasión por las tropasfrancesas. El 22 de enero queda instaladauna Junta bajo el nombre de Junta Superiorprovincial de Armamento, Defensa y Subsi-dios del Reino de Galicia. A esta reuniónconcurre Manuel Díez Tavanera comorepresentante por el comercio111. Su actua-ción se prolonga hasta octubre, y él es unode los fijos, es decir uno de los que concurrecon más frecuencia a las reuniones, siendouna de las primeras decisiones la de propo-ner un medio pronto y arreglado de conse-guir 25 millones de reales para poner enmarcha un ejército de 20.000 hombres consus dotaciones y armamento112. Para mejoralcanzar sus objetivos la Junta se divide encinco comisiones: Guerra, Hacienda,Gobernación, Gracia y Justicia y Estado. Dela de Hacienda, como ya había sucedido en1808, formó parte Manuel Díez Tavanera.El 27 de enero de 1810 se encarga por laJunta Superior a esta Junta de Hacienda labúsqueda de un crédito contra alguna casade comercio de Londres por cuatro millonesde reales para comprar fusiles y sables. Loscuatro encargados de buscar crédito facilitana la Junta Superior el suyo personal, segúncontrato que firman el 14 de febrero sobre lacasa García’s & Lewis, de Londres por70.000 libras esterlinas. Tavanera es uno deellos113. También el 1º de febrero, a Tavane-ra y otro les piden que adelanten 6.000pesos fuertes (120.000 reales) para aprovi-sionar la Efigenia, un barco que debía ir aLondres, y 494 reales para pagar al impre-sor114. Estos adelantos se realizan sin condi-ciones, para reintegrar “en la primera oca-sión”.

No podemos olvidar tampoco el emprés-tito de 60.000 reales que Manuel Díez Tava-nera ofreció, en 16 de agosto de 1810, cuan-do los Diputados del Reino de Galicia, pró-


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ximos a salir para incorporarse a las Cortesreunidas en Cádiz, pedían anticipos de dietaspara el viaje115. Pero, la existencia de estaJunta Superior fue corta; el 14 de septiembrede 1810 se recibió en La Coruña la R.O. de17 de junio disponiendo que las Juntas Supe-riores y Provinciales se redujesen en núme-ro, y tras varias reuniones, en sesión solem-ne el 4 de octubre, se produce la adecuación,con notable disgusto por parte de todos,entre otras cosas por el cese de personas,como Manuel Díez Tavanera, que habíanactuado hasta entonces con soberanas atribu-ciones y una reconocida competencia.

Existe un testimonio, recogido en elDiario de las discusiones y actas de las Cor-tes de Cádiz, en cuya sesión del día 4 deagosto de 1811 se mandó pasar á las comi-siones respectivas una memoria dirigida alas Cortes por Manuel Díez Tavanera,fechada en Londres el 10 de julio de 1811,que comprende varias reflexiones, muy inte-resantes sobre la situación en España116. Porfortuna, se conserva este interesante docu-mento en el Archivo del Congreso de laDiputados, y es digna de que se publiquealgún día117. Está dividida en cuatro partes,de las cuales la primera trata del Gobierno,la segunda del Estado, la tercera de Hacien-da y la cuarta de Guerra. La Mesa de Esta-do, en Cádiz el día 5 de agosto de 1811,manda que se dirija a las otras comisiones,pero hasta el día 13 de septiembre de 1813,es decir dos años después, no se resuelve elexpediente, en el sentido de “No despacha-do por la comisión por no ser ya tiempo”.

Últimas noticias. Testamento, muerte ysucesión

Son pocas las noticias que poseemos apartir de este momento, sin duda dedicado asu familia, sus negocios y atender su casa de

comercio. El 8 de junio de 1810, en LaCoruña, se hace escritura privada entreManuel Díez Tavanera y Eusebio de Zalbi-dea, del comercio de La Coruña, por la cualle ofreció y prometió entregar la cantidad de200.000 reales vellón en concepto de doteuna vez efectuado el matrimonio con su hijaAntonia Díez Durango, que entonces seencontraba en Londres. Eusebio de Zalbi-dea, de origen vasco, había nacido en LaCoruña el 21 de junio de 1786118, de familiade comerciantes (su padre Gerónimo de Zal-videa, y su madre Ana María del Valle), queademás aparece a partir de 1819, y durantemuchos años, formando parte de la corpora-ción municipal como regidor. Esta es laescritura privada:

Digo yo D. Manuel Díez Tavanera, vecinoy del comercio de esta ciudad que por mí ymi mujer Dª Ángela de Durango comopadres de nuestra hija Antonia, residenteséstas en Londres, que en consequencia deconvenio hecho con D. Eusebio de Zalbi-dea de contraer matrimonio con éste, luegoque llegue a Londres para donde va a salir;que para soportar las cargas del matrimo-nio, le he prometido y me obligo entregar-le por razón de dotal de mi hija la cantidadde doscientos mil reales de vellón siemprey cuando que los quiera; y además consti-tuyo la obligación de mantenerlos y tener-los en nuestra compañía en tiempo de cua-tro años. Que si el dicho Zalbidea luegoque contraiga matrimonio no hiciese usode la citada cantidad y que por motivosimprevistos, yo el Tavanera no me hallaseen disposición de dársela cuando me lospida, le señalo por hipotecas especialespara su seguridad, la casa que habito y mepertenece en la calle Real señalada con elnº 9, los ranchos y huertas que tengo juntoa los molinos en santo Thomás, las rentasque gozo y cobro en la parroquia de Oza, yen la de Peybas, obispado de Lugo, de quedesde luego y sin necesidad de más instru-mento podría hacerse cargo; y entretanto



que no se verifica el contratado matrimo-nio y que mi familia no regrese a España,doy este resguardo al citado Zalbidea, yquiero que tenga el mismo valor y firmezaque si fuera una escritura pública, a cuyaclase se elevará al regreso de […..] el Zal-videa no usase de la partida citada y el[….] la acepta recibe y se conforma fir-mando este convenio y llevándosele a supoder. Coruña junio ocho de mil ochocien-tos y diez.

Acepto Manuel Díez Tavanera ® Eusebio de Zalbidea®

El matrimonio se celebró en Londres en10 de agosto del año 1810, y la familia enpleno, pasados unos años, regresó a LaCoruña, donde se pasa a escritura pública laparticular que se había hecho previa a lacelebración del matrimonio. En efecto, enLa Coruña, el 5 de enero de 1815 se hacepor Manuel Díez Tavanera y su mujer Ánge-la Durango Iglesias, un “instrumento dedote” en que se recogen los datos de la escri-tura anterior, y se anexa la privada hechacon anterioridad119.

Y habiéndose verificado el matrimoniopropuesto del D. Eusebio con la Dª Anto-nia en Londres el día dos de agosto delmismo año de diez quedó en toda su fuer-za y vigor el citado papel de obligación,reducido en sustancia a la oferta dotal delos doscientos mil reales y quatro años demanutención señalando a Zalbidea porhipotecas especiales si no recibía aquellacantidad y Tabanera no se hallaba en dis-posición de entregárselas, la casa nº nueveque habitan los otorgantes en esta callereal, los ranchos y huertas de los molinosde santo Tomás y rentas que cobran de laparroquia de Oza y de Peibas en el obispa-do de Lugo, cuyo papel y obligación reco-nocen subsistente el D. Manuel y su espo-sa Dª Ángela y quieren tenga todo efecto,exceptuándose solamente los bienes de

Peybas que posteriormente se han vendi-do; y dijeron también que sin embargo dehaberse concluido los quatro años por quehicieron obligación de mantener en sucompañía a los hijos y que éstos se hanseparado trasladándose a su casa por elaumento de su familia, los otorgantes seconstituyen a continuar manteniéndolossuministrándoles lo necesario para sudecente subsistencia. Y mediante que elcitado Zalbidea no ha sacado ni saca losdoscientos mil reales ofrecidos por nodebilitar el giro de la casa, y que por lossucesos que puedan ocurrir quiere teneruna garantía suficiente, o que se eleve aescritura pública el papel de obligaciónhecho por el Tavanera, desde luego loscitados D. Manuel y Dª Ángela convieneny son gustosos en ello en la mejor forma,vía y manera que más firme y válida sea enderecho revalidan por medio de esta escri-tura pública la indicada oferta dotal, obli-gándose como se obligan con sus personasy bienes muebles y raíces, presentes yfuturos por sí y sus herederos a cumplir yque cumplirán con todo lo pactado y a quecada y cuando el D. Eusebio su mujer y sushijos o herederos quieran usar de la indica-da cantidad de los doscientos mil reales oparte de ellos se les entregarán en dinerometálico de plata u oro, y no otra especiede que el D. Eusebio, su mujer o herede-ros, otorgarán recibo y carta de pago de lacantidad que recojan. Presente dicho D.Eusebio que aceptando como lo tieneaceptado y nuevamente siendo necesarioacepta se obliga igualmente en debidaforma a tener y conservar la referida canti-dad de los doscientos mil reales por dote ycapital de su citada mujer Dª AntoniaTabanera y Durango (sic); y todas partespara que mejor lo cumplan se sujetan apagar todas las costas y demás perjuiciosque en cualquiera omisión o contravenciónse originen con sumisión a los señores jue-ces y justicias de S.M. su fuero y domici-lio, a fin de que así se lo hagan pagar guar-dar y haber por firme, como si fuese en vir-tud de sentencia definitiva de juez compe-tente pasada en cosa juzgada….


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En 1815, se le propone por el Consula-do de la ciudad, formar parte de la comisiónque debería elaborar un informe en relacióncon el proyecto de Código de Comercio120,pero que rechazó alegando su mal estado desalud. En 1816 recibe un encargo de partedel Consulado para ir a Madrid, con el obje-to que se expresa en el poder que para ellole dieron el 19 de marzo121:

Poder de los señores Prior y cónsules deeste Real Consulado a favor del exPrior D.Manuel Díez Tavanera.En la sala de audiencia consular de la ciu-dad de La Coruña a 14 de marzo de 1816estando en ella D. Ramón Antonio Garcíade Caunedo, Prior, y los cónsules D. Sal-vador Fullos y Juan Francisco Barrié, dije-ron: Que consecuente con lo prevenido porS.M. en real orden de 6 de febrero ha nom-brado la Junta de Gobierno de este propioConsulado en la celebrada en 12 delcorriente mes al señor exPrior D. ManuelDíez Tavanera para que en calidad dediputado de este cuerpo pase a la villa ycorte de Madrid a efecto de que con otrosdos de la Comisión de reemplazos deCádiz y uno de cada Consulado de lapenínsula, traten y arreglen lo conducentea presencia del Excmo. Sr. Secretario deEstado y del despacho universal deHacienda, sobre el arreglo de los 30 millo-nes pedidos al comercio por una real ordende 6 de diciembre del año próximo pasado;y que además propongan a S.M. todocuanto contemplen conducente para aten-der al fomento de la Agricultura, Artes,Industria y Comercio Nacional. En cuyaconsecuencia los tres señores otorgantespor su derecho y en representación delcomercio de esta ciudad y su partido, dany confieren todo su poder cumplido quan-to tienen y se requiera más pueda y debavaler al citado exPrior D. Manuel DíezTavanera, tanto para lo que va referido,que pueda debidamente ejercer sus funcio-nes, que le sirva de credencial, como paraque pueda al mismo tiempo a nombre de

este Consulado excitar y promover cuales-quiera objetos relativos a aquellos particu-lares y todo cuanto contemple a su defen-sa derechos y regalías presentándose anteel Rey nuestro señor (que Dios guarde)Supremos Consejos y demás tribunalesdonde se requiera produciendo cuantasinstancias contemple oportunas por hallar-se bien enterado de todos los asuntos quedebe promover en los bienios en que hasido Prior; y siendo preciso para ello oparte sustituir este poder lo podrá hacer enlos procuradores o agentes que por bientuviere… poder amplio, general, especialy sin limitación alguna…

Para encargarse durante su ausencia delnegocio, el 14 de marzo de 1816 hace escri-tura por la cual da a Eusebio de Zalbidea, suyerno, un poder general, sin limitación algu-na122:

Que en consideración a hallarse próximo ahacer ausencia de este pueblo, conoce queda y confiere todo su poder cumplido… asu hijo político D. Eusebio de Zalbidea,también del comercio de esta ciudad paraque en su nombre y representando su per-sona acción y derecho, así particular comode la citada sociedad pueda girar y admi-nistrar…

Tal como había hecho su tío, en la madu-rez de su vida regresa a su villa natal paravivir aquí con mayor asistencia sus últimosaños y acaso también morir aquí, pues a par-tir de este momento él también regresa y fre-cuenta su presencia en Villaviudas y enPalencia, pero antes, en La Coruña el 23 dejunio de 1820 da un poder general, especial,sin limitación alguna a su yerno Eusebio deZalbidea:

Que mediante tiene que ausentarse a supaís y otras partes y ser necesario dejar



persona de su confianza que continúe en elgiro de esta su casa y comercio que siguebajo el nombre social de Tabanera y sobri-no: conoce que da y confiere todo supoder123 cumplido…, a su hijo político D.Eusebio de Zalbidea con todas las faculta-des correspondientes para que en represen-tación del otorgante siga como hasta aquímanejando a su arbitrio la citada casa decomercio, haciendo cuantas negociacionesle parezca… y finalmente disponga y hagade esta casa de comercio lo mismo quehiciera el otorgante si fuese presente, usan-do de la misma firma de Tabanera y sobri-no en su correspondencia… poder generalespecial y sin limitación alguna…

Y el año 1821 le encontramos en Palen-cia, viudo (la muerte de Ángela Durangoocurrió entre 1815 y antes del 31 de julio de1818), con su hija casada en La Coruña, ypreocupándose de velar y administrar suspropiedades en Villaviudas, que no habíadejado de incrementar durante este tiempoy, por otro lado, cumplir con sus familiares,dando cuenta de las mandas que había toma-do a su cargo al ser nombrado heredero desu tío Santiago, muerto en 1803, que por sutestamento otorgado en La Coruña en 1801le había declarado heredero universal124.También en Villaviudas redacta el 26 deseptiembre de 1821 su propio testamento125,en el que, curiosamente, no habla nada desus negocios, y sí se ocupa de dejar bienarreglados sus asuntos familiares, dejandopor heredera universal a su hija AntoniaDíez Durango. De este testamento entresa-camos los siguientes datos:

Testamento de D. Manuel Díez IbáñezTavanera del comercio de la ciudad de LaCoruña, y residente actualmente en la dePalencia, natural de la villa de Villaviudas,viudo que soy y quedé de Dª ÁngelaDurango, natural que fue de la dicha de

Palencia, hijo legítimo y de legítimo matri-monio de Manuel Díez Tavanera y TeresaIbáñez Calbo, difuntos, naturales y veci-nos que fueron de esta dicha villa, estandosano…Tiene dos hermanos que lo son MateoDíez Ibáñez, casado con Cecilia Sanz,vecino de esta villa sin que tenga sucesión,y Teresa Díez Ibáñez, vecina de la misma,viuda de Joaquín González, a quien man-tiene su hijo D. Manuel González delcomercio de la Coruña, con todo lo nece-sario para su subsistencia, que tiene otrasdos hijas Gertrudis y Francisca casadascon Marcelino García y Agustín Carazo,vecinos de esta villa, y dos hijos D.Manuel y D. Víctor González, vecinos deLa Coruña.Heredero de su tío Santiago Díez Tavane-ra con varias obligaciones y legatos queresultan de su testamento que otorgó en 18de marzo de 1801 en la ciudad de La Coru-ña ante el escribano de S.M. y del númerode ella Jacinto Pereira, y del cobdicilo quehizo en testimonio del infrascrito escriba-no Miguel Antonio Sanz Martínez confecha en esta villa 29 de septiembre de1803 y bajo de cuyas disposiciones falle-ció en dicho año, y que durante el tiempode su testamento a el de su muerte hubopérdidas y desgracias muy considerables,de que no quise dar noticia al dicho mi tíoD. Santiago, por manera que si hubieratenido alguna de ellas hubiera reformado oanulado todas sus disposiciones, pero sinembargo queriendo yo conformar misideas benéficas a favor de toda la familiahe procurado cumplir todas las dichas dis-posiciones.Y para cumplir y pagar todo lo por mí dis-puesto en cuanto a lo piadoso, dejo y nom-bro por mis testamentarios albaceas, sifalleciese en La Coruña a dicho mi yernoD. Eusebio Zalbidea y a D. José Calderón;si fuese en Palencia, a D. Eleuterio Duran-go y D. José Ojero de la Vega, y si en estavilla a Mateo Díez, a mi sobrino D. JoséEsteban Díez y al presente escribano con-firiéndoles el poder necesario para quereclamen a mi heredero su importe, contodas las facultades que sobre este particu-


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lar son correspondientes. Y cumplido ypagado, en el remanente que quedare detodos mis bienes, derechos y acciones, ins-tituyo por mi heredera universal a mi hijaúnica Dª Antonia Díez Durango, mujerlegítima del dicho D. Eusebio Zalbidea, yhabida en mi matrimonio con Dª ÁngelaDurango, para que les haya y herede con labendición de Dios y la mía.

La última noticia que de él encontramosnos hace suponer que ya había fallecido. Esuna escritura de arrendamiento126 otorgadaen Villaviudas el 19 de febrero de 1830, dediferentes propiedades, por ocho años y1.100 reales de renta unificada, cuyo primerplazo sería el día último de octubre delmismo año, otorgada por Marcelino Garcíay Agustín Carazo a favor de D. Eusebio deZalbidea, marido de Dª Antonia Díez, veci-no y del comercio de la ciudad de La Coru-ña.

De momento no conocemos dondemurió, ni la trayectoria de sus descendien-tes, ni si continuó la vinculación a Villaviu-das y Palencia. Son muchos los datos quetodavía desconocemos, pero como conclu-sión decir que sacamos a la luz un palentino,de Villaviudas, hasta ahora desconocido ensu tierra, pero digno de serlo en el lugar quele vio nacer, que tuvo que salir fuera, comotambién ocurre ahora, en búsqueda de unfuturo más halagüeño, y que nunca dejó deseguir ligado a ella, orgulloso de sus raíces.

MANUEL DÍEZ TAVANERA Y LACORBETA MARÍA PITA DE LA EXPE-DICIÓN FILANTRÓPICAPunto de partida y contratación del barcopara el viaje

Obviando hacer una relación de lo quefue la viruela, los medios de combatirla,variolización y vacunación, así como las

causas y circunstancias que dieron lugar a laExpedición Filantrópica de la vacuna de laviruela127, en este capítulo vamos a incidirsobre el barco en que se inició la expedi-ción, desde su contratación hasta su regresoa La Coruña. Para ello vamos a utilizar,aparte de la bibliografía tradicional y la quesurgió tras la conmemoración del segundocentenario en 2003128, la documentaciónrecogida en el archivo de protocolos de LaCoruña, ya que, aunque ha sido utilizada porParrilla Hermida129, lo ha sido de un modoparcial y con evidentes errores. Por ellohacemos la transcripción completa de losdocumentos de la contrata con el armador yde éste con capitán y tripulación, y añadimoslos restantes, entre ellos la contrata hechacon el capitán de la corbeta Pedro del Barco.Es de destacar que en ningún documento delos consultados y aquí reproducidos apareceel nombre de Pedro Blanco Casariego, queen el trabajo citado se atribuye al capitán dela corbeta como perteneciente a la tripula-ción de la corbeta María Pita.

En la elección de transporte para laExpedición primó la rapidez y la economíasobre la comodidad, por lo que en un primermomento se pensó que la solución era el usode los Buques Correo de la Real Armada.Los Correos Marítimos se crearon por unaReal Cédula de 6 de agosto de 1764 por elrey Carlos III, y poco después, el 24 de agos-to se estableció su reglamento130. Su propósi-to era llevar y traer de manera regular lacorrespondencia generada en España y Amé-rica, con especial atención a la de carácterdiplomático y militar, por medio de unosbarcos que saldrían mensualmente desde elpuerto de La Coruña hasta el de La Habana,con escalas previas en Puerto Rico y SantoDomingo. Desde La Habana, se enviabanbarcos menores que recogían la correspon-



dencia en Veracruz, Tierra Firme y Perú.También transportaban viajeros y mercancí-as, tanto a la ida como a la vuelta. Desde el5 de diciembre de 1767, se estableció unasegunda línea, con salidas desde La Coruñacada tres meses, con destino a Montevideo yBuenos Aires, cubriendo el Sur americano. Apartir de 1771 se incrementó el número deviajes a uno cada dos meses.

Además, en 1785 se había fundado enLa Coruña el Real Consulado Marítimo yTerrestre con el fin de fomentar la agricultu-ra y la industria en la región y extender lanavegación en Ultramar131. La Coruña llegóasí a convertirse en uno de los principalespuertos de conexión con América, motivopor el que debió escogerse para la salida dela expedición y contratación del buque, aun-que en el momento en que se organiza, sehabía producido un declive por la aperturade otros puertos a este tráfico.

Propuestas de barcos. La corbeta MaríaPita

El viaje en los Correos Marítimos hubie-ra exigido muchos facultativos para incor-porarse a las distintas rutas, por lo que sedecide contratar un barco mercante exclusi-vo para la Expedición, que pudiera perma-necer en cada puerto el tiempo necesariopara la vacunación de la zona. Las gestionespara conseguir el buque comienzan con unaReal Orden de 27 de julio de 1803 dirigidaal Juez de Arribadas de Indias del puerto deLa Coruña encargándole que busque «unbuque mercante, bien acondicionado, debuen andar, con gente experta, y de unas250 toneladas poco más o menos». Se anun-ció a los armadores y dueños de buquesmercantes del puerto, para que hiciesen suspropuestas; en principio se presentaron porJosé Becerra, dueño de la fragata Silph, y

por Manuel Díez Tavanera, armador ydueño de la corbeta María Pita, formandocada uno su plan de condiciones; el Juez deArribadas las envía al rey el 10 de agostopara su decisión, sugiriendo la segunda pormás velera, más barata y más acorde con lasnecesidades, y por real orden de 30 delmismo, se le avisa por el ministro José Anto-nio Caballero, de que habían parecido exor-bitantes las condiciones propuestas por losdos armadores, devolviéndolas para que sebuscase otro que las hiciese más moderadas,teniendo en consideración que la demora encada una de las dos escalas podría ser dequince días, y al regreso podía cargar elbuque de su cuenta, e incluso parcialmente ala ida, reportando ganancias considerables;no se creía justo que la Real Hacienda paga-se por entero el viaje, dado que solo el fleteexcedía al valor de los buques; y teniendo encuenta que las dimensiones de la corbeta eransuficientes, se pide al Juez de Arribadas quese convenga con el mismo armador, o conotro de un buque de igual porte, unas condi-ciones regulares y equitativas, procediendo sifuera necesario el acuerdo con peritos.

Pero tras la llegada de Francisco XavierBalmis, el 1 de octubre, manifiesta que detodos los barcos disponibles el mejor, pormás económico, era la fragata San José, pro-piedad de Manuel de Goycoechea, con elúnico inconveniente de que, por estar pen-diente de unas reparaciones, no se encontra-ba en puerto, aunque el armador se compro-metía a tenerla en La Coruña el día 8 deoctubre. En consecuencia, admitió las nue-vas propuestas hechas por los armadores,que se examinaron escrupulosamente conayuda de los dos peritos navieros del puerto,Martín Badía y Juan Bauptista Larragoyti,como asimismo de otras personas facultati-


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vas, y oyendo también el parecer y dictamende Francisco Xavier Balmis.

Se presentaron las siguientes propues-tas: La de Manuel Díez Tavanera, que comoveremos, fue la admitida. La del armadorManuel de Goycoechea que propone la fra-gata San José, que aunque no era mejor quelos barcos propuestos por el Juez de Arriba-das, pedía un flete de 2.000 reales menos, yrebajaba 400 reales por la manutención decada persona de primera clase y 200 por losde segunda, y además no exigía el pagohasta el día de la partida. Pero a Balmis nole satisface del todo esta fragata porque noestaba en ese momento en el puerto y nopudo verla, y además, obligaría a demorar elinicio de la Expedición en ocho días. El día8, Balmis comprueba que la fragata SanJosé no se encontraba en el puerto, con loque esta propuesta fue desestimada en vir-tud de que el barco no había llegado en lafecha acordada. Esto motivó que el Juez deArribadas contratase la corbeta María Pitaque, después de la fragata San José, era laque presentaba mayores ventajas. Sinembargo, desconocida en Madrid esta cir-cunstancia, es aprobada por el Rey el 11 deoctubre la propuesta de la San José por 1300pesos el mes; se envían al Juez de Arribadaslos documentos originales para formalizar lacontrata una vez llegada a La Coruña y com-probadas sus dimensiones. José Becerra elmismo día 8 de octubre ofrece a Balmis elbergantín La Valentina de 220 toneladas, loque se considera fuera de plazo, por lo quelos armadores Francisco Barrié y José Bece-rra, el 12 de octubre, presentaron protestasante el Rey contra el Juez de Arribadas porla forma en que se había hecho la tramita-ción del contrato con la María Pita, lo quedio lugar a que el 12 de diciembre el reyordenase al intendente de ejército de La

Coruña que practicase una investigación,cuyas conclusiones no conocemos. Publica-mos un documento de poder de ManuelDíez Tavanera para defenderse de las acusa-ciones, ya que dice que se ha oído su peti-ción para proceder a su defensa, pues “se hamancillado el honor o integridad del otor-gante” (documento 6). Posiblemente el pro-ceso se vio en el tribunal de la Intendencia.

Llegado el día del plazo acordado, 8 deoctubre, se cierra el contrato por el coman-dante de Marina, en nombre de la RealHacienda, con Manuel Díez Tavanera,armador de la corbeta María Pita, que habíarebajado 400 pesos en el flete y 40 pesos demesa por mes, quedando el importe en 1400pesos mensuales. La María Pita era una cor-beta de unas 200 toneladas, con tres palos degran altura y velas cuadradas. La escriturase hace en presencia de Francisco XavierBalmis y de Pedro del Barco, teniente denavío, su capitán (documento 1). El 22 deoctubre envió el Juez de Arribadas el con-trato firmado, que se aprueba por el Rey y el21 de noviembre se le remite orden para queacelere la partida de la Expedición, así comoal Ministro de Hacienda para que hicieseentrega de la anticipación estipulada alarmador, y al de Estado para que expidieseel salvoconducto de las potencias beligeran-tes, que se estaban enfrentando en el Atlán-tico en aquel momento. Como proteccióninternacional, la Expedición debería contarcon un salvoconducto autorizado por losgobiernos inglés y francés, pero salió sin él.

Por Real Orden de 23 de octubre esnombrado para el mando de la corbeta elTeniente de Fragata de la Real ArmadaPedro del Barco y España, natural de Somo-rrostro, Vizcaya, destinado en la Comandan-cia de Matrículas de La Coruña, y el 20 denoviembre se hace el contrato entre él y el



armador Manuel Díez Tavanera (documento2), donde éste le da un poder general sinlimitaciones para cuanto necesitara duranteel viaje. Este documento se publica ahorapor primera vez.

El 29 de noviembre, día anterior a la sali-da, se firma el contrato entre el armador y latripulación, compuesta del capitán y primerpiloto y 26 personas más (documento 5).

Trayecto realizado por la corbeta MaríaPita

El 30 de noviembre de 1803 la corbetaMaría Pita zarpa del puerto de La Coruña,con la tripulación, 10 expedicionarios y 22niños132. No voy a narrar lo ocurrido en lasdiversas rutas. Voy a seguir a la corbetaMaría Pita desde su salida hasta en su regre-so a La Coruña. Llega al puerto de SantaCruz de Tenerife el 9 de diciembre de 1803y el 6 de enero de 1804 abandona Canariasrumbo a Puerto Rico, donde llega el 9 febre-ro y se despide el 12 de marzo, rumbo aVenezuela: llega el 20 de marzo a PuertoCabello y sale de La Guayra el 8 de mayopara La Habana donde llega el 26 de mayo.Aunque el contrato se firmó hasta el 27 deenero de 1804, para entonces la corbeta nohabía llegado a La Habana, por lo que sedecide prorrogarlo en las mismas condicio-nes. El 16 de junio de 1804 se hace el con-trato para la travesía de la Habana a Vera-cruz con escala en el puerto de Campeche,por el capitán Pedro del Barco, como apo-derado del armador. Desde La Habana con-tinúa viaje el 18 de junio; llega el 25 dejunio a Puerto de Sisal-Mérida en la penín-sula de Yucatán, de donde sale el 19 de juliohacia Veracruz donde llega el 24 de julio.

Regreso a La Coruña de la corbeta MaríaPita

El viaje de la corbeta hasta Veracruz,donde queda desligada de la expedición,duró 8 meses y algunos días, saliendo de LaCoruña el 30 de noviembre de 1803 y regre-sando desde Veracruz el 8 de agosto de 1804según López y Pedrido133, y el día 10 segúnRamírez134, realizando una escala en LaHabana. En este puerto permaneció durantemes y medio para intentar aliviar el empeo-ramiento del mayordomo enfermo, y muyposiblemente para cargar mercancía, y par-tió el 23 de octubre, según confirma elarmador, Manuel Díez Tavanera, en la cartaen que solicita la admisión a “libre plática ycomercio” de la María Pita en el muellecoruñés. Con un cargamento de azúcar ypalo de tinte, la corbeta arribó al puerto deLa Coruña, el día 6 de enero de 1805, “a lasdoce del día como resulta de documentofehaciente”135, tras una larga y penosa trave-sía de 76 días, durante la cual la embarca-ción fue abordada por un buque corsarioinglés y estuvo apresada y tripulada algúntiempo por un guardiamarina y diez marine-ros ingleses. A los cinco días del regreso,fallecía por enfermedad José Mosquera,mayordomo de la corbeta. Ante el temor deque pudiera haberse contagiado por los tri-pulantes del corsario, se le hace una inspec-ción por médicos en La Coruña para deducirel carácter de la enfermedad, pues se temeque los corsarios ingleses hubiesen recaladoantes en Gibraltar, puerto en estado de pes-tilencia en aquel momento. De las pesquisasrealizadas se concluye, como causa másverosímil de la muerte, la complicación pro-ducida por un cólico que había sufrido enVeracruz. Manuel Díez Tavanera utiliza laprolongada duración del viaje de regreso“en estación tan cruda de invierno” y la no


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existencia de algún “mal contagioso” en LaHabana como argumentos para apartar cual-quier recelo sobre la salud de la embarca-ción y sus tripulantes, por “si estas razonesy la del mal estado del buque por lo que hasufrido en los temporales y mar mereciesenalguna consideración e indulgencia”. Publi-camos también un documento de poder deManuel Díez Tavanera sobre la nulidad deun seguro para la corbeta, aunque el malestado del documento nos ha impedido sulectura completa (documento 7).

Reconocimiento al capitán.El capitán de la corbeta Pedro del Barco

vio su trabajo recompensado. A su vueltarecibió el ascenso merecido. Se le nombróTeniente de Navío el día 8 de diciembre de1804, y se le concedió una pensión vitaliciade 300 pesos, en marzo de 1805. Publica-mos un documento en que da poder para sucobro en Buenos Aires pues su importedebía salir de las vacantes mayores y meno-res del obispado de esa ciudad (documento8). Finalmente, por decreto de Carlos III defecha 17 de abril de 1815 se aprueba el nom-bramiento de caballero supernumerario dela orden de Carlos III136.

APÉNDICE DOCUMENTAL

Documento 1. Contrata que otorgó el señorComandante de Marina de esta Provincia anombre de la Real Hacienda con D. ManuelDíez Tabanera armador de la corbeta MaríaPita para conducir a la América al Director dela Comisión de la Bacuna. La Coruña, 8 deoctubre de 1803.AHPC. Protocolos. Andrés Antonio de Leyes yLourido, sign. 8050, 1803, fol. 155-158.

En la ciudad de La Coruña, a ocho días delmes de octubre año de mil ochocientos y tres:El señor D. Ignacio María de Alcíbar, Capitánde Navío de la Real Armada Comandante mili-tar de Marina de esta Provincia, Juez de Arri-vadas de Indias en ella, a presencia de míescribano de su Juzgado y testigos dijo: Quedeseando el Rey propagar a sus dominios deIndias al precioso descubrimiento de la Bacu-na, ha mandado formar una expedición com-puesta de varios facultativos instruidos en elmétodo de inocularla al cuidado del DirectorD. Francisco Xavier de Balmis su médicohonorario de Cámara, que debría pasar conellos a este puerto y embarcarse para la Haba-na con escala precisa y alguna mansión en laIsla de Tenerife, una de las Canarias, y enPuerto Rico, llevando a su bordo un butiquín,varios utensilios precisos, de doce a quincepersonas poco más o menos entre facultativos,enfermeros y criados, y de veinte a veinte ycinco niños de ocho a diez años, con sus equi-pajes moderados, para que durante la navega-ción se vayan inoculando subcesivamente conel objeto de que llegando fresco el pus bacunopueda hacerse la primera operación de brazo abrazo en aquellos naturales, a este fin quisoS.M. que dicho señor Juez de Arrivadas deIndias de este puerto, buscase y ajustase en élun buque mercante, bien acondicionado, debuen andar, con gente experta, y de unas dos-cientas cinquenta toneladas poco más omenos, que se considera necesario para quenavegue con comodidad la expedición referi-da a los destinos expresados, en el supuesto deque el capitán o dueño debría franquear a susindividuos todo lo principal del buque, estar alas órdenes del Director para la salida de estepuerto, y de las dos escalas, darles mesa y lodemás necesario según costumbre, y que en suvirtud procediese dicho señor desde luego acelebrar la contrata de quenta de la RealHacienda, con las condiciones más ventajosas,y la de que se pagase en la Habana el preciodel fletamiento excepto aquella cantidad que elcapitán o dueño pidiese anticipada para suhabilitación, la que facilitaría el gobierno consu aviso, según que en los propios términos seexpresa en la Real Orden de veinte y siete deJulio último que se le ha comunicado directa-mente por el Excmo. señor D. Josef Antonio



Caballero; y en su debido cumplimiento elseñor Juez de Arrivadas lo anunció a los arma-dores y dueños de buques mercantes de estepuerto que podían tener las calidades necesa-rias para hacer el viaje prevenido, para que, elque de ellos se manifestase más ventajoso a laReal Hacienda, acordase la contrata que debíaformalizarse en este caso; en su virtud se hicie-ron propuestas por D. Josef Becerra, y D.Manuel Díez Tabanera y Sobrino, comercian-tes de esta Plaza, y dueños de las fragatas mer-cantes Silph y María Pita, formando cada unode ellos su plan de condiciones, sobre las cua-les estribaba el orden de contrata que cada unose proponía; y no habiéndose deliberado dichoseñor Juez de Arrivadas a aceptarlas las haconsultado originales a S.M. por oficio de diezde agosto último, para que acordara lo quefuese de su Real agrado, y por real orden detreinta del mismo agosto, se le avisa por elExcmo. señor D. Antonio Caballero de quehan parecido exorbitantes las condiciones pro-puestas por dichos dos armadores de la fragataSilph y corbeta María Pita, devolviéndolas deReal Orden para que se buscase otro armadorque las hiciese moderadas, teniendo en consi-deración que la demora en cada una de las dosescalas podría ser de quince días, y al regresopodía cargar el buque de su quenta, y muchaparte de él a la ida, reportando ganancias con-siderables, pues los equipajes eran muy cortos,las personas mayores serían de diez a once ylos niños no pasarían de diez y ocho a veinte;por lo mismo no era justo que la Real Hacien-da pagase por entero el viaje redondo y contanta exorbitancia, que solo el fletamientoexcedía al valor de ambos buques; y en estainteligencia, y la de que las dimensiones de lacorbeta bastaban para el objeto, arreglasedicho señor Juez de Arrivadas con el armador,o se conviniese con otro que lo fuese de buquede igual porte poco más o menos las condicio-nes regulares y equitativas en tales casos,valiéndose de sus propios conocimientos, pro-cediendo si fuese necesario de acuerdo conotros peritos en la materia, y llevando el obje-to de no gravar excesivamente el Erario, ni auncon las crecidas anticipaciones en este puerto,encargando de orden del Rey que se evacuaseeste asunto con la inteligencia, actividad y celoque tenía acreditado en su Real servicio, según

por menor lo expresa dicha Real orden; en suconsecuencia procurando cumplimentarla conel mayor acierto, y en quanto le fue posible almenor perjuicio de la Real Hacienda, admitiólas propuestas que le han hecho diferentesarmadores de esta Plaza; hizo D. Manuel DíezTabanera nuevamente las suyas, que unas yotras se han examinado escrupulosamente, nosolo por sí, sino por medio de los dos peritosnavieros de este puerto D. Martín Badía y D.Juan Bauptista Larragoyti, sujetos expertos yde pericia, como así mismo de otras personasfacultativas, oyendo también el parecer y dic-tamen del Director don Francisco Xabier deBalmis, con quien procedió acorde, para evitaren lo posible todo perjuicio a la Real Hacien-da, y al mismo tiempo, proporcionar buque delas calidades necesarias para el viaje; y por fin,después de oídos unos y otros armadores par-ticularmente, y tomado los conocimientosnecesarios, acordó dicho señor Juez de Arriva-das admitir el plan de condiciones que última-mente formó Don Manuel Tavanera y Sobrino,cuyo contenido de ellas son a saber:Se fletará por el D. Manuel Tabanera y Sobri-no en todo el resto de este mes la corbetaMaría Pita, porte doscientas toneladas pocomás o menos, matriculada por este puerto, yestará corriente para el día primero de noviem-bre próximo, de capitán, oficiales de mar y tri-pulación en suficiente número y gente expertay matriculada, sano, seco y estanco el buquede quilla y costado, bien carenado y pertrecha-do en disposición de dar la vela, y a disposi-ción desde aquel mismo día del Director D.Francisco Xavier de Balmis sin la menor omi-sión hasta la Habana, haciendo escalas enCanarias y Puerto Rico, con la calidad de quecomo el Director pueda recibir órdenes, ohallarse con ellas distintas de las con que pro-cede el señor Juez de Arribadas, para variar oaumentar puntos de escala, se obliga el arma-dor D. Manuel Tabanera, a hacer que el capi-tán que fuese de la corbeta siga sus órdenes dedestino.Que el buque empezará a devengar su fletedesde el día en que el armador avise de estarpronto a dar la vela de este puerto, que debráhacerlo en el señalado si no pudiese antes.


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Que la suministración de víveres o comidapara la familia que ha de embarcarse se conta-rá en todas partes desde que se verifique elconsumo, cesando éstas en los puntos de arri-badas hasta el embarque.Quarta condición, que el fletamiento del buqueha de ser y correr por meses hasta su últimodestino, abonando la Real Hacienda por cadauno a mil quatrocientos pesos fuertes, conadvertencia que verificada la salida han decontarse empleados y ganados quatro meses.Quinta condición, que para la manutención seabonarán por cada individuo de primera mesa,a cien pesos fuertes, que llegarán a cinco per-sonas; los de segunda mesa, que serán otrossiete, a noventa pesos cada uno, y los de terce-ra, que serán de veinte a veinte y quatro niños,según en este acto lo asegura el señor Balmisque está presente a cinquenta pesos fuertescada uno, unos y otros mensuales, y a todos seles dará almuerzos, refrescos y cenas corres-pondientes a sus clases; la comida de primeramesa será una olla, dos o tres principios, y trespostres, con vino y pan fresco; lo mismo los desegunda, a excepción de un principio y postremenos que los de primera; y a los de terceramesa, un buen cocido y alguna cosa más aciertos niños enfermos u algún extraordinario,a todos en determinado día de la semana.Sexta condición, que si las arrivadas en laAmérica fuesen más de dos, o que el consumode víveres exceda del plazo de tres meses, seabonará al D. Manuel Tabanera y Sobrino pordiferencia o mayor valor de todas cosas enAmérica una tercera parte más de lo que vaseñalado por persona.Sétima condición, de que al armador Tavanerase le anticipará en esta plaza por razón de ran-cho el importe de tres meses, según lo quealcancen; el resto, si excediese lo recibirá en laHabana, o Bera Cruz con el importe del fleta-miento sin la menor demora, y siempre enmonedas físicas, pero si el viaje fuere más dila-tado, o hubiese alguna ocurrencia extraordina-ria que obligue al capitán a pedir dinero enqualquier punto dispondrá el señor Directorque se le entregue a buena quenta.Octava condición, que si preparado ya el buquey hecho acopio de las provisiones, hubiese por

disposición del gobierno, comisionado u otracausa no esperada que no penda del armadormotivo o resolución de suspensión de estaexpedición o variación de buque, se abonará alarmador por falso flete el importe de dos mesesy uno de rancho, y si esta novedad acaeciese enCanarias o Puerto Rico, se tendrá por conclui-do y ganado el viaje de quatro meses por fleta-miento y tres de rancho que se les satisfará enqualquiera de ellos o la Habana.Novena condición, que si durante el viaje yestancia en los puertos a que se destine se decla-rasen hostilidades y no tiene la Comisión salvo-conducto, abonará la Real Hacienda al armadorel importe del premio de seguro, mediantedocumentos fehacientes que presentará.Décima condición, que si la Guayra o Cumañáfuese uno de los puntos de la Comisión en lamisma corbeta, se le satisfará allí al armadortodo lo que tuviese devengado, así de fletescomo de rancho, si para ello hubiese posibili-dad por parte de la Real Hacienda.Cuyas condiciones, según van expresadas seexaminaron con todas las demás que se pre-sentaron y atendidas con preferencia así por sucontenido como por la calidad y circunstanciasdel buque, se adaptaron y eligieron entre todaslas más con intervención del D. FranciscoXavier de Balmis, que está presente y al mejorbeneficio de la Real Hacienda y seguridad delviaje. Por lo que dicho señor D. Ignacio Maríade Alcíbar, Juez de Arrivada de Indias de estepuerto, en debido obedecimiento de las sobe-ranas resoluciones con que se halla, y usandode la facultad que por ellas se le permite: habíay hubo desde ahora mismo, y en nombre de laReal Hacienda a quien representa por admiti-das y acetadas dichas condiciones, las queserán todas ellas cumplidas según el tenor decada una, y en este concepto estando tambiénpresente el D. Manuel Tabanera, por sí y Com-pañía dijo: Que se obligaba y obligó con supersona, sus bienes y los de la propia Compa-ñía, a que dichas condiciones en quanto está desu parte el cumplimiento, se lo dará en todo ypor todo y a cada una de ellas sin faltar a lamenor cosa ni lo hará el capitán que fuese dela corbeta durante el viaje, sobre que presta yformaliza la obligación que sea más válida ysin reserva más de lo que en sí comprende cada



una de dichas diez condiciones en cuyo caso sesujeta a los tribunales de Indias, Marina y víareservada de S.M. para que así se le haga cum-plir, como si fuera sentencia definitiva dadapor juez competente, pasada en autoridad decosa juzgada, cerca de lo cual renunció a todasleyes, fueros y derechos de su favor, con lageneral que las prohíbe en forma: en cuyo tes-timonio así lo dijeron, otorgaron y firmaron,de que son testigos el teniente de navío DonPedro del Barco, el mismo D. FranciscoXavier de Balmis y D. Eduardo del Casal, resi-dentes en esta plaza, y el Balmis de la villa ycorte de Madrid, de todo lo cual, y que dichoseñor Juez de Arribadas previno a mí escriba-no sacase una copia de esta escritura para con-sultar a S.M. y que conozco a los señores otor-gantes doy fee.Francisco María de Alcíbar ® Manuel Díez Tavanera

y Sobrino ®Fui testigo presentePedro del Barco ®

Documento 2. Poder que otorgó D. ManuelDíez Tavanera a D. Pedro del Barco para loque expresa. La Coruña, 20 de noviembre de1803.AHPC. Protocolos. Andrés Antonio de Leyes yLourido, sign. 8050, 1803, fol. 182.

En la ciudad de La Coruña a veinte días delmes de noviembre año de mil ochocientos ytres: ante mí escribano de Marina y testigospareció presente D. Manuel Díez Tavanera,vecino y del comercio de esta ciudad, dueñopropietario y armador de la corbeta españolanombrada María Pita de la matrícula de estepuerto, de que es comandante y maestre D.Pedro del Barco theniente de fragata de la RealArmada y dijo: Tiene fletado dicho buque conla Real Hacienda bajo la correspondiente con-trata, para hacer viaje al puerto de la Havana,y otros varios de América, a conducir y trans-portar al Director y más individuos de laComisión de la Bacuna, siendo de cuenta delotorgante la manutención de dichos indivi-duos; y como para este objeto, y otros quales-quiera que puedan ofrecerse así para las habi-

litaciones del buque, ranchos, carga, desem-bolsos y percibos, ventas y compras, toda clasede negociaciones, ajustes, o nuevas contratas,sea necesario persona que represente al quehabla, conoce que por la presente escritura yen la vía y forma que más cabida tenga y hayalugar en derecho, da y otorga todo su podercumplido el que se requiere más forma y váli-do sea, al referido D. Pedro del Barco, capitány maestre de la insignuada corbeta, para quedurante la expresada comisión y viaje que estápróximo a emprender en qualquiera puerto oparaje donde llegue, o arribe, represente la per-sona, acción y derecho del otorgante, tantopara qualesquiera provisiones, habilitaciones,pagas, percibos, ventas, compras, ajustes ynuevas contratas, cuanto como para otras qua-lesquiera negociaciones que se ofrezcan y pre-senten: que el poder general especial, amplio ysin limitación de cosa alguna, que para ello serequiera el mismo le da, y confiere con todaslas facultades que se necesiten, libre, franca ygeneral como si por sí mismo lo ejecutara, y seobliga de estar y pasar por ello a todo tiempo,a cuyo fin se somete a las justicias de SuMagestad, su fuero, jurisdicción y domicilio,para que se lo hagan cumplir y haber por firmecomo si fuere sentencia definitiva dada porJuez competente pasada en autoridad de cosajuzgada consentida y no apelada, cerca de locual renunció a todas leyes, fueros y derechosde su favor y la general que las prohíbe enforma. En testimonio de lo cual así lo dijo,otorgó y firma de que fueron testigos D.Manuel Quintela, D. Andrés Morandeira y D.Juan de Castro, vecinos de esta ciudad, de todolo cual y conocimiento del otorgante yo escri-bano doy fee.

Manuel Díez Tavanera ®

Documento 3. Poder de D. Pedro del Barcoantes del viaje. La Coruña, 28 de noviembre de1803.AHPC. Protocolos. Manuel Baltasar de Pazos,sign. 6766, 1803, fol. 172.

Pedro del Barco, teniente de fragata de la RealArmada del Departamento del Ferrol, da su


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poder a D. Manuel Hernández, también tenien-te de fragata para que en su nombre y en susausencias pueda cobrar, percibir y recaudartodas y cualesquiera cantidades que le seandebidas, dando y otorgando de ellas los recibosy cartas de pago…Documento 4. Poder que otorgó el marineromatriculado Josef Cortés a su madre. La Coru-ña, 28 de noviembre de 1803.AHPC. Protocolos. Andrés Antonio de Leyes yLourido, sign. 8050, 1803, fol. 191.

En la ciudad de la Coruña a veinte y ocho díasdel mes de noviembre año de mil ochocientos ytres: ante mí escribano de Marina y testigospareció presente Josef Cortés, matriculado yvecino de esta ciudad y dijo: que como talmatriculado y en clase de marinero hizo unacampaña por espacio de diez años sirviendo aS.M. en el navío nombrado San Vicente y otrosbuques del Rey que pasaron a la Trinidad deBarlovento y más destinos que se le han dado,cuios sueldos y asignación a que por este res-pecto es acreedor se le está debiendo: ymediante tiene entendido se va a hacer el paga-mento de dicha asignación a todos los indivi-duos que la devengaron en la citada campaña,atento el que expone tiene que ausentarse deesta población a la América con plaza de gru-mete en la corbeta nombrada María Pita, queestá próxima a emprender viaje desde estepuerto al de la Havana a conducir el director ymás individuos de que se compone la Expedi-ción de la Vacuna, a fin de que haiga personaque durante su ausencia le represente su perso-na, derecho y acción, cobre, perciba y recaudela expresada asignación y haber que le corres-ponda como tal grumete en cuia clase ha servi-do la citada campaña según resultará de losajustes que al efecto se le expidan, conoce quepor el presente faculta, da y otorga todo supoder cumplido el que tiene y por derecho serequiera más firme y válido sea, a su madreJuana de Quintián, también vecina de esta ciu-dad, mujer de Manuel Cortés, padre del otor-gante, ausente en la América, para que en sunombre, cobre y perciba qualesquiera intereses,sueldos, haberes y asignación que al otorgantese le adeuden, sean debidos y paguen en la

Contaduría de Marina de esta Provincia, u otropareje (sic), a cuyo fin si fuere necesario ocurraal Departamento y solicite se le entreguen res-pidan (¿) sus ajustes entablando para ello ytodo lo más que ocurra las competentes instan-cias, y de lo que cobre y perciba dé los condu-centes resguardos, recibos y cartas de pago, yfinalmente practique todas quantas agencias,diligencias y solicitudes fueren precisas hastaconseguir el total reintegro que el que habladesde ahora mismo y para quando la referida sumadre hiciere y obrare qualquiera de los parti-culares referidos todo lo aprueba, confirma yratifica como si por él propio otorgante fuerahecho, y se obliga de estar y pasar por ello sincontravención alguna como si fuera sentenciadefinitiva de juez competente pasada en juzga-do a cuyo fin se somete y da poder a los juecesy justicias de Su Magestad, fuero y domiciliopara que se le hagan cumplir y haber por firmecerca de lo qual renuncia todas Leyes, fueros yderechos de su favor y la general en forma: entestimonio de la qual así lo dijo, otorgó y nofirma por no saber según así lo asertó, hácelo asu ruego un testigo de los presentes, que entodo ello lo fueron D. Domingo Álbaro, D.Manuel Quintela y D. Juan de Castro, vecinosde esta ciudad, de todo lo qual y conocimientodel otorgante yo escribano doy fee.Como testigo y a ruegoJuan Benito de Castro ®

Documento 5. Contrata de Manuel DíezTavanera armador de la corbeta María Pita conel capitán y tripulación de la misma para viaje.La Coruña, 29 de noviembre de 1803.AHPC. Protocolos. Andrés Antonio de Leyes yLourido, sign. 8050, 1803, fol. 196-7.

En la ciudad de La Coruña a veinte y nuevedías del mes de noviembre año de mil ocho-cientos y tres ante mí escribano de Marinapareció presente D. Manuel Díez Tavaneravecino del comercio de esta plaza armador ypropietario de la corbeta española María Pita,de esta matrícula, capitán D. Pedro del Barcoque va con destino a Canarias y otros puertosde América a conducir la Bacuna de quenta de



la Real Hacienda, y con arreglo a lo preveni-do por ordenanza y reales ordenes contrató lasresultas del viaje ida y vuelta con el capitán ytripulación en esta forma:Capitán y primer piloto D. Pedro del Barcogana en cada mes cinquenta y tres pesos fuertesSegundo piloto: D. Pedro Martín de la Llanahijo de Josef veinte y dos pesos, que estos doscon el contramaestre D. Josef Pozo queda sinefecto los sueldos y se remiten a la contrataparticular que tienen hecho con el armadorGuardián Josef Alburo gana veinte pesos fuertesCarpintero Vicente Aldao gana quinceCocinero Gregorio García gana veinteSegundo cocinero Francisco del Barco esclavodel capitán gana ocho pesos fuertesMayordomo Josef Mosquera gana treintapesos fuertesMarineros Andrés Pozo, Antonio Ortega, JosefLorenzo, Josef Chousiño, Rosendo Anido,Álbaro Pozo, Francisco Lerena cada uno a diezpesos fuertes al mesMatrículas Josef Fontán, Manuel Castiñeira,Josef Nogerol y Josef Cortés de marineros adiez pesos fuertes al mesAndrés Dóriga, Francisco Villaverde, Francis-co Varón, Antonio Vellón, Andrés Andrade, adiez pesos fuertes cada unoLos pajes Josef Morás y Fernando Fariña e Ildi-fonso Pozo a seis pesos fuertes cada uno al mesQue todos confiesan tienen percibido anticipa-damente dos mesadas, y por dichos sueldosvan obligados a seguir viaje a todos los puer-tos de la comisión y volver a este puerto comode su matrícula, y queda obligado el armador asocorrer a las mujeres y familias de cada indi-viduo con la mitad de asignación del mesexceptuando los dos primeros que quedanpagados.Que a la vuelta del viaje cumpliendo todosbien y exactamente con su obligación seránpagados de sus haberes y por separado un mesde gratificación a voluntad del armador.Que a todos se les pagará hospital, y en el ínte-rin correrá su sueldo con tal que la enferme-dad no sea por gustos y pasatiempos volunta-rios, o de mujeres.

Que ninguno ha de poder tomar travesía niausentarse pena de perder sus haberes e incu-rrir en deserción como los individuos de laarmada castigados según éstos.Que todos han de obedecer a su capitán y ofi-ciales y guardar la debida subordinación sien-do árbitro el capitán a perseguirlos y tratarloscomo a desobedientes en buques del Rey.Que si alguno muriese será obligación delcapitán traer documento que acredite la causade su muerte y buena quenta para darla dequanto le fincase.Que aun cuando las arribadas y los puntos dela navegación sean muchos no se ha de dar porfinalizado el viaje sino en este puerto, y elmismo capitán va obligado a conducir toda lagente, darla buen trato, y el armador a provis-tar en toda la navegación el buque de sufi-ciente número de rancho y de buena calidad,sin obligación de dar vino; Con lo qual se ha por formalizada esta contra-ta y todos se obligaron a estar y pasar por ellacon sumisión a los Jueces de Arribadas deIndias y tribunales competentes para que leshagan estar por ello como sentencia definitivapasada en cosa juzgada, renunciaron a todasleyes de su favor lo otorgaron, y firmaron losque saben, de que son testigos D. Eduardo delCasal, D. Juan de Castro y Josef Tarrago, veci-nos de esta ciudad de lo qual, y que avise alteniente de fragata D. Pedro del Barco capitándel buque para esta expedición solicita copiade esta escritura y la presente al señor coman-dante militar de Marina de esta provincia parasu visto bueno.Manuel Díez Tavanera ® Por mí y todos mis

individuosPedro del Barco®

Documento 6. Poder que otorgó D. ManuelDíez Tavanera a procuradores para pleitos. LaCoruña, 8 de mayo de 1804.AHPC. Protocolos. Andrés Antonio de Leyes yLourido, sign. 8051, 1804, fol. 56.

En la ciudad de la Coruña a ocho días del mes demayo, año de mil ochocientos y quatro: Por ante


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mí escribano de S.M. y testigos D. Manuel DíezTavanera, vecino y del comercio de esta plaza, aquien doy fe conozco, y sigue bajo el nombresocial de Tavanera y sobrino, y propietario yarmador de la corbeta nombrada María Pita, quese halla en viaje para América, al mando de D.Pedro del Barco, Teniente de Fragata de la RealArmada, conduciendo la Comisión de la Vacu-na, bajo la dirección de D. Francisco Xavier deBalmis, dijo, que con motivo de dicha expedi-ción se han hecho a S.M. (que Dios guarde)varias representaciones por sujetos de ésta, enlas que haciendo subpuestos falsos, se ha man-cillado el honor o integridad del otorgante, porlo qual y el haberse remitido por la Subperiori-dad dichas representaciones al Señor Intenden-te de este ejército para que se les oyese en justi-cia, acudió también a S.M. suplicándole que afin de vindicar su conducta se dignase mandarse le tuviese por parte en esta causa y habiendoobtenido esta Real gracia por notificación quese le ha hecho, y a fin de exponer y deducir antedicho Señor Intendente lo que le convenga conarreglo a derecho, otorga y confiere todo supoder cumplido y quanto se requiere a D. JosefJacinto de Mira, D. Andrés López de Couto, D.Vitorio Suárez Blanco y D. Benito Pulleiro,Procuradores de los Juzgados de esta mismaciudad, a todos y a cada uno insolidum, concláusula expresa de que lo puedan jurar y subs-tituir las veces y en quien le parezca, a fin deque a nombre del otorgante representando supersona acción y derecho, le defiendan en laexpuesta causa, en los Tribunales, donde com-peta produciendo […. Varias líneas en mal esta-do …] para donde y con derecho puedan ydeban, siguiendo éstos y los demás recursoshasta obtener éxito favorable; y finalmentepractiquen quantas gestiones judiciales y extra-judiciales sean conducentes, las mismas que elotorgante haría si se hallare presente pues paratodo y quantas incidencias obcurran, confiereeste poder general, especial, sin limitación, contodas las cláusulas de derecho, y las de aproba-ción, a cuanto en su virtud se hiciere y obrare,… En cuyo testimonio así lo dijo otorga y firmasiendo testigos D. Josef Calderón, …. Manuel Díez Tavanera ®

Documento 7. Poder de Manuel Díez Tava-nera sobre reclamación de nulidad de seguro.La Coruña, 25 de enero de 1805.AHPC. Protocolos. Manuel Baltasar de Pazos,sign. 6768, 1805, f. 12.

Poder que otorgó Manuel Díez Tavanera a D.Joaquín Ferreira Sanpayo, vecino de Oporto yD. Josef Calderón, residente en ella para recla-mar en Lisboa sobre la nulidad de seguroshechos en aquella plaza por cuenta de la casadel que otorga, según se dice, o supone, elcatorce del corriente sobre buque, fletes y car-gamento de la corbeta española nombradaMaría Pita, su capitán D. Pedro del Barco,veniente de la Habana, y que arribó a este puer-to el día seis del citado mes a las doce del díacomo resulta de documento fehaciente que asi-mismo les dirige, y mediante a que dicho segu-ro es notoriamente nulo, así por la colisión ydolo que se advierte en la correspondencia con-tradictoria del comisionado en Lisboa, comoporque desde la arribada de dicho buque hastael instante de hacer el seguro, intermediaronmás de doscientas horas para 93 leguas que hayde distancia desde aquí a Lisboa, cuya circuns-tancia hace nulo cualquier riesgo perdido oganado por la probabilidad de poderse saber enel parage [……..] precisamente en este caso elque […mal estado..…] se supo en Lisboa porexpresos [……….] para Portugal piden se res-cinda [……] dicho contrato lisa y llanamente esin estipendio ni premio de extorno en conside-ración a haberse efectuado o supuesto hechocon noticia positiva de la llegada del buque; encuyo caso reclamen también las multas y penasaplicadas a los contraventores de la buena feque debe observarse en semejantes contratoscon todo lo más que tengan por conveniente….. hasta obtener éxito favorable.Manuel Díez Tavanera ®

Documento 8. Poder que otorgó D. Pedro delBarco a D. Antonio de las Cagigas y D. Juliánde la Cendeja para lo que expresa. La Coruña,19 de julio de 1805.AHPC. Protocolos. Andrés Antonio de Leyes yLourido, sign. 8052, 1805, fol. 56.



En la ciudad de La Coruña a diez y nueve díasdel mes de julio año de mil ochocientos ycinco ante mí escribano de Marina y testigospareció D. Pedro del Barco, teniente de navíode la Real Armada y vecino desta propia ciu-dad e dijo que por el tenor de la presenteescriptura y en la mejor forma que haya lugarotorga que da y confiere todo su poder cumpli-do, llano, general y especial quanto tiene enderecho se requiera, más firme y válido sea enprimer lugar a D. Antonio de las Cagigas, y ensegundo a D. Julián de la Cendeja, ambosvecinos y del comercio de la ciudad de BuenosAires, a cada uno y qualquiera de los dos queprimero lo acepte, con cláusula expresa dejuramento y substitución, para que en su nom-bre y representando a su propia persona puedacobrar, percibir y recaudar la pensión vitaliciade trescientos pesos anuales que disfruta y leha concedido S.M. sobre las vacantes mayoresy menores del obispado de Buenos Aires,dando y otorgando de lo que así cobrasen losconducentes recibos y cartas de pago con lassolemnidades y requisitos precisos para suvalidación, lo que como sean celebrados porlos sobredichos, o qualquiera de ellos, el quehabla lo aprueba desde ahora mismo parasiempre jamás, confirma y ratifica como si éllo efectuara, …..Pedro del Barco ®

NOTAS

1 Sobre los Durango ver: Javier MORENO LÁZARO,“La fábrica de Monzón de Campos (1786-1805): laprimera harinera de España”, en Investigaciones his-tóricas: Época moderna y contemporánea, Nº 11,1991, pp. 109-130; Los empresarios harineros cas-tellanos (1765-1913).Madrid, Fundación EmpresaPública, 1999, p.14 y La industria harinera en Cas-tilla la Vieja y León, 1778-1913. Tesis doctoral.UVA, 1998, pp. 79 y ss y 108.

2 Archivo Diocesano de Palencia (en adelanteADP). Villaviudas. Nuestra Señora de la Asunción.Libro 5º de bautizados (1713-52), fol. 63v.

3 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 5º de bautizados (1713-52), fol. 77.

4 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 5º de bautizados (1713-52), fol. 103v.











15 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 4º de matrimonio (1656-1751), fol. 158v.

16 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 5º de difuntos (1764-97), fol. 173v.

17 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 6º de difuntos (1797-1834), fol. 32v.





22 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 5º de matrimonios (1751-1834), fol. 140.

23 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 6º de difuntos (1797-1834), fol. 153.




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27 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 4º de matrimonios (1656-1751, fol.103v.











38 Archivo de la Catedral de Palencia (en adelanteACP). Parroquia de la catedral. Libro 2º de difuntos(1789-1820), fol. 168v.

39 ACP. Parroquia de la catedral. Libro 15 de bau-tizos (1755-1761), fol. 289v.

40 ACP. Parroquia de la catedral. Libro 16 de bau-tizos (1761-68), fol. 32.












52 Xosé Ramón BARREIRO FERNÁNDEZ, “A burgue-sía compostelá (1780-1808). Una base de datos” enSemata, 12, 2000, p. 61.

53 Archivo Histórico Provincial de Palencia (enadelante AHPP). Protocolos. Antonio Joseph Rojo,sign. 11874, 1767, f. 48.

54 Archivo Histórico Universitario de Santiago (enadelante AHUS). Protocolos, leg. 7.153 (ant.). Ref:Xosé Ramón BARREIRO FERNÁNDEZ, “A burguesíacompostelá (1780-1808). Una base de datos” enSemata, 12, 2000, p. 43.

55 AHPP. Protocolos, Josef Antigüedad, leg. 6155,1772, fol. 266.

56 Inserto en escritura posterior. AHUS. Protoco-los. Andrés Guerra de Andrade, 5124 (1781), f. 109.

57 No hemos encontrado el protocolo de este escri-bano en el Archivo Histórico de Protocolos de LaCoruña (en adelante AHPC).

58 AHUS. Protocolos. José Antonio de Sanín,5892 (1775), f. 72-74.

59 AHUS. Protocolos, 6.653, escritura del 29-VII-1776. Ref.: Xosé Ramón BARREIRO FERNÁNDEZ, “Laburguesía compostelana: la familia de Andrés Gar-cía”. (1760-1815), en Semata, 1, 1988, p. 278.

60 AHUS. Protocolos. Andrés Guerra de Andrade,5124, 1781, fol. 18.

61 AHPP. Protocolos. Faustino Joseph de la Serna.Sign. 10603, s. fol.

62 AHUS. Protocolos. Andrés Guerra de Andrade,5124 (1781), f. 104.

63 AHUS. Protocolos, 7.421 (ant.). Xosé RamónBARREIRO FERNÁNDEZ, “La burguesía compostelana:la familia de Andrés García”. (1760-1815), en Sema-ta, 1, 1988, p. 278.

64 ADP. Villaviudas. Nuestra Señora de la Asun-ción. Libro 5º de difuntos, (1764-1797), fol. 99.




66 AHUS. Protocolos, 6.694. Ref. Xosé RamónBARREIRO FERNÁNDEZ, “A burguesía compostelá(1780-1808). Una base de datos” en Semata, 12,2000, p. 61.

67 AHPC. Protocolos. Jacinto Pereira, 6298(1803), ff. 146-168. Testamento nuncupatorio de D.Santiago Díez Tabanera con los autos de su solemni-zación fecha 18 de marzo de 1801. Falleció el 1º deoctubre, y se hace copia protocolizada el 12 de octu-bre de 1803 a petición de Manuel Díez Tavanera.

68 AHPP. Protocolos. Miguel Antonio Sanz Martí-nez, sign. 11888, 1803, f. 134.





73 AHPP. Protocolos. Faustino Joseph de la Serna.Sign. 10.604 (1783), s. fol.

74 ACP. Parroquia de la catedral. Libro 7º de casa-dos (1764-1791), fol. 185v.





79 Eduardo CEBREIROS ÁLVAREZ, El municipio deSantiago de Compostela a finales del antiguo régi-men (1759-1812). Tesis doctoral. Universidad de LaCoruña. 1997, p. 233, nota 658.

80 ACP. Parroquia de la catedral. Libro 7º de casa-dos (1764-1791), fol. 237.

81 Sobre este trágico suceso ver: Soledad ARRIBASGONZÁLEZ, “Monzón durante la Guerra de la Inde-pendencia”, en Actas del I Congreso de Historia dePalencia, Vol.3, 1987, pp. 551-568.

82 Xosé R. BARREIRO FERNÁNDEZ, “Un modelo deprotoburguesía compostelá. Manuel de la Riva1780.1831”, en Empresarios de Galicia. Vol 1, Fun-dación CaixaGalicia, Santiago de Compostela, 2006,pp. 66-85.

83 Archivo Municipal de La Coruña (en adelanteAMC). Matrícula de los vecinos y personas existen-tes en la parroquia de San Nicolás en el año de 1795.Aparecen en la Rúa Nueva nº 22 un total de 9 perso-nas, sin especificar. A pesar de las pesquisas realiza-das no conseguí consultar el padrón de 1803. AMC.Caja 1057.

84 Enrique MARTÍNEZ BARREIRO, La Coruña y elcomercio gallego en el siglo XVIII. Edición do Cas-tro. Sada (A Coruña), p. 92

85 Acta del Real Consulado de 2 de enero de 1799.Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros del comercioen La Coruña. Fundación Caixa Galicia, Lex Nova,Valladolid, 2008, p. 231-233.

86 Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros delcomercio en La Coruña. Fundación Caixa Galicia,Lex Nova, Valladolid, 2008, p. 231-233.

87 Acta del Real Consulado de 2 de enero de 1800.Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros del comercioen La Coruña. Fundación Caixa Galicia, Lex Nova,Valladolid, 2008, p. 231-233. Según el Mercurio deEspaña de junio de 1799, p. 221, el rey había apro-bado el nombramiento que la junta de electores delConsulado de La Coruña había hecho para su prioren D. Fabián López Sagastizábal, accediendo aldesistimiento que hizo de dicho empleo D. ManuelDíez Tavanera.

88 Digitalizado, puede consultarse por internet.89 Archivo Documental Español, publicado por la

Real Academia de la Historia. Tomo XXIX. Catálo-go de la Colección Mata Linares. Vol. IV. RemediosCONTRERAS y Carmen CORTÉS. Madrid, MXMLX-XII, p. 513, (Tomo CXX, f. 110, nº 10115).

90 Almanaque mercantil, ó Guía de comerciantes,para el año de 1797, p. 416.

91 AHPC. Protocolos. Manuel Baltasar de Pazos,6763 (1800), f. 79 y 87.

92 AHPC. Protocolos. Manuel Baltasar de Pazos,6763 (1800), f. 109.

93 AHPC. Protocolos. Andrés de Leyes y Lourido,8049 (1802), f. 109.


95 AHPC. Protocolos. Andrés de Leyes y Lourido,8050 (1803), f. 65

96 AHPC. Protocolos. Manuel Baltasar de Pazos,6768 (1805), fols. 32 y 106.



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99 Archivo Histórico Nacional (en adelante AHN).Consejos 27498, exp. 21. Resolución de la Cámarade Castilla sobre inventario extrajudicial.

100 Acta del Real Consulado 24 mayo 1808. Ref.:Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros del comercioen La Coruña. Fundación Caixa Galicia. Lex Nova,Valladolid, 2008, p. 233.

101 AHN. Estado. Leg. 76-A, Conferencia delReino del día 15 de junio de 1808, fol. 50.

102 AHN. Estado. Leg. 76-A, Conferencia delReino del día 4 de octubre de 1808, fol. 15v.

103 Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros delcomercio en La Coruña. Fundación Caixa Galicia.Lex Nova, Valladolid, 2008, p. 233.

104 Antonio LÓPEZ, y Joaquín PEDRIDO, “200 añosde la expedición Balmis. El regreso rocambolescode la nave ‘María Pita’”. en El Domingo (dominicalde La Opinión de A Coruña), año VII, nº 303, 10 deseptiembre 2006, p. 7.

105 Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros delcomercio en La Coruña. Fundación Caixa Galicia.Lex Nova, Valladolid, 2008, p. 232.

106 AMC. Libro de actas. Sesión de 16 de enero de1809. Ref.: César VAAMONDE LORES, Colección dedocumentos del Boletín de la Real Academia Galle-ga, tomo III, nº XLI, pp. 125-6.



109 Reports of cases argued and determined in thehigh court of Admiralty; commencing with the judg-ments of the right hon. Sir William Scott, easter term1808. By Thomas Edwards, L.L.D. Advocate. Lon-don, 1810, pp. 97-102.

110 Acta del Real Consulado de 6 de noviembre de1809. Ref.: Alfonso GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros delcomercio en La Coruña. Fundación Caixa Galicia.Lex Nova, Valladolid, 2008, p. 232.

111 Fernando MARTÍNEZ MORÁS, La Junta Superiorde Subsidios Armamento y Defensa del Reino deGalicia. La Coruña, 1955, p. 47.

112 Fernando MARTÍNEZ MORÁS, La Junta Supe-rior de Subsidios Armamento y Defensa del Reino deGalicia. La Coruña, 1955, p. 52.

113 Fernando MARTÍNEZ MORÁS, La Junta Supe-rior de Subsidios Armamento y Defensa del Reino deGalicia. La Coruña, 1955, p. 89 y 114.



116 Diario de las discusiones y actas de las Cortes.Tomo Séptimo. Sesión 4 de agosto 1811. Cádiz: Enla Imprenta Real 1811, p. 306.

117 Archivo del Congreso de los Diputados. Lega-jo 20, número 44. Digitalizado, puede consultarsepor internet.

118 Archivo Histórico Diocesano de Santiago (enadelante AHDS). San Nicolás (La Coruña). Libro debautizados 1766-1788, f. 362. El 21 de junio de 1786nació y fue bautizado, hijo legítimo de D. GerónimoSalbidea y de su mujer Dª Ana Mª del Balle, se lepuso por nombre Eusebio Ángel. Fue su padrinoNicolás Arias, todos vecinos de la parroquia.


120 Acta del Consulado 13 abril 1815. Ref.: Alfon-so GARCÍA LÓPEZ, Los pioneros del comercio en LaCoruña. Fundación Caixa Galicia. Lex Nova, Valla-dolid, 2008, p. 233.



123 AHPC. Protocolos. Manuel Baltasar de Pazos,6782 (1819), f. 53

124 AHPC. Protocolos. Jacinto Pereira, 6298(1803), ff. 146-168. Testamento nuncupatorio de D.Santiago Díez Tabanera con los autos de su solemni-zación fecha 18 de marzo de 1801. Falleció el 1º deoctubre, y se hace copia protocolizada el 12 de octu-bre de 1803 a petición de Manuel Díez Tavanera.

125 AHPP. Protocolos. Miguel Antonio Sanz Mar-tínez, sign. 11892, 1821, f. 634.

126 AHPP. Protocolos. Miguel Antonio Sanz Mar-tínez, sign. 11894, 1830, f. 29.

127 Existe abundante bibliografía. Es fundamentalSusana María RAMÍREZ MARTÍN, La Real expediciónfilantrópica de la vacuna en la Real Audiencia deQuito. Tesis doctoral. UCM. Madrid, 1998. Comoúltimas contribuciones José Luis DURO TORRIJOS,



Los inicios de la lucha contra la viruela en España.Técnica e ideología durante la transición de la ino-culación a la vacuna (1750-1808). Tesis doctoral.Universidad de Alicante, 2014 y José TUELL y JoséLuis DURO-TORRIJOS, “El viaje de la vacuna contrala viruela: una expedición, dos océanos, tres conti-nentes y miles de niños”, en Gaceta Médica deMéxico, 151 (2015), pp. 416-425.

128 La documentación relativa a la contratación yregreso de la corbeta María Pita se encuentra en elArchivo General de Indias, Indiferente General, leg.1558-A, de la que se han publicado índices parcia-les, y en el Archivo Histórico Nacional, Estado, leg.3215 nº 241, cuyo índice fue publicado por PilarLEÓN TELLO, Un siglo de Fomento español, (años1725-1825). Expedientes conservados en el AHN.Ministerio de Cultura. Madrid, 1980, pp. 85-88, peroes fundamental la que se encuentra en el Archivomunicipal de La Coruña, utilizada por AntonioLópez, y la que se encuentra en el Archivo Históricode Protocolos de La Coruña, donde hemos revisadola utilizada por Parrilla y encontrado alguna más quepublicamos ahora.

129 Miguel PARRILLA HERMIDA, “La ExpediciónFilantrópica de la Vacuna antivariólica a América en1803. El contrato de fletamiento de la Corbeta MaríaPita”, en Revista del Instituto «José Cornide» deEstudios Coruñeses, 1974-75, nº 10-11, pp. 203-209.

130 Francisco GARAY UNIBASO, Correos marítimosespañoles, III, Indias Occidentales (de 1514 a1827). Bilbao, Mensajero, 1987.

131 Mª del Carmen SÁNCHEZ RODRÍGUEZ DE CAS-TRO, El Real Consulado de La Coruña: impulsor de

la Ilustración (1785-1833). Ediciós do Castro. ACoruña, 1992.

132 Destacamos las importantes aportaciones reali-zadas por Antonio López y Joaquín Pedrido sobrelos niños vacuníferos y la identidad de la rectora dela Casa de Expósitos Isabel Zendal Gómez. AntonioLÓPEZ y Joaquín PEDRIDO, “Los héroes vuelven acasa. 17 niños que cambiaron el mundo” en ElDomingo (dominical de La Opinión de A Coruña),año VII, nº 302, 3 de septiembre 2006, pp.2-6. Anto-nio LÓPEZ, “La rectora Isabel, al descubierto”, en ElDomingo (dominical de La Opinión de A Coruña),año XIII, nº 629, 28 de abril de 2013, pp. 1-4.

133 Antonio LÓPEZ y Joaquín PEDRIDO, “200 añosde la expedición Balmis. El regreso rocambolescode la nave ‘María Pita’”. en El Domingo (dominicalde La Opinión de A Coruña), año VII, nº 303, 10 deseptiembre 2006, pp. 5, a quien seguimos en estaparte de la historia.

134 Susana María RAMÍREZ MARTÍN, La Real expe-dición filantrópica de la vacuna en la Real Audien-cia de Quito. Tesis doctoral. UCM. Madrid, 1998, p.277, según documento firmado por Pedro del Barcoen La Coruña el 12 de enero de 1805. AMC. Junta deSanidad. Carpeta 2, 1803-04.

135 Ver documento 7.136 AHN. Estado. Carlos III. Exp. 1456-4. Vicente

de CADENAS Y VICENT, Extracto de los expedientesde la Orden de Carlos 3º, tomo II, exp. 1456.Madrid, Hidalguía, 1981, p. 35.


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Firmas de Manuel Díez Tavanera

DATOS BIOGRÁFICOS DE MANUEL DÍEZ TAVANERA, …PITTM, 86, Palencia, 2015, pp. 103-138, ISSN...

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