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De escaleras y monumentos por el mundo
El Periódico. Viajar 1 ENERO 2016
La afición del ser humano por construir en las alturas ha provocado que las escaleras sean
un elemento imprescindible más. Y es que antes, de la llegada de los ascensores, ellas
eran lo único con lo que se podían salvar las alturas. En esta lista te ofrecemos algunas de
las escaleras más llamativas -ya sea pro belleza o por cantidad de peldaños- de los
monumentos o lugares de imprescindible visita alrededor del mundo. Aunque es cierto que
algunas de ellas se pueden evitar con ascensores o rampas, nosotros recomendamos
subirlas sin prisa pero sin pausa. Porque la belleza que las rodea no tiene parangón.
Escalera Helicoidal del Vaticano
Realizada por Giuseppe Momo en 1932 esta escalera de doble espiral crea un efecto
óptico de infinito desde arriba. Es la entrada a los Museos Vaticanos.
Castillo de Nauplia
Con casi mil peldaños, la escalera de da acceso al Castillo de Nauplia (Grecia) se puede
salvar subiendo en coche por una rampa ubicada en la parte posterior del promontorio
donde se encuentra el castillo. Pero os perderéis las espectaculares vistas desde la
escalera.
Buda de Leshan
La única manera de bajar hasta los pies del Gran Buda de Leshan (China) es a través de
una estrecha escalera anclada a la pared de la montaña donde suele haber una cola
infinita de gente. Los altos barrotes de seguridad pueden provocar sensación de agobio
pero es inevitable.
Escaleras Haiku
También conocidas como "escaleras al cielo", se encuentran en Oahu, en Hawai. Con más
de 4.000 escalones transcurren por el valle de Haiku hasta la cima del Pu’u Keahi A
Kahoe. Su peculiaridad es que siempre están cubiertas por nubes.
Half Dome en el Parque Nacional Yosemite
En Estados Unidos, esta "media cúpula" granítica es ascendida por muchos escaladores a
lo largo del año. En su cara oriental se encuentra esta escalera que no es más que una
serie de cables dispuestos en forma de escalera y que da acceso a la cima.
Colina de Mandalay
Hasta la cima de la colina de Mandalay (Myanmar) se puede acceder a través de una
empinada carretera en coche o a través de una escalera de más de 1700 escalones. Al ser
un lugar sagrado hay que subirla descalzo y las panorámicas que se van obteniendo en el
ascenso son una maravilla.
Torre Eiffel
Una de las formas de conocer a fondo uno de los monumentos más visitado de París es
subiendo hasta la segunda planta a través de las escaleras en vez de los ascensores.
Además de hacer ejercicio cuidarás tu bolsillo, ya que el acceso es más barato.
Torres de Bolonia
La torre Garisenda y la torre Asinelli son las torres más famosas de Bolonia. Hasta lo más
alto de la segunda se puede subir salvando los más de 400 escalones que contiene el
interior de esta torre medieval que ofrece desde su mirador unas increíbles vistas de uno
de los cascos urbanos medievales más importantes de Italia.
Pailón del Diablo
También conocida como la cascada del Río Verde, el Pailón del Diablo se encuentra en
Ecuador y hasta él se accede a través de unas escaleras de miedo debido al ambiente las
hace resbaladizas. Además, a veces están cubiertas de niebla por lo que su acceso se
hace imposible.
Monte Hua
Las escaleras Monte Hua (China) dan acceso a una de las cinco colinas sagradas del
taoísmo por lo que son miles de cientos los usuarios de estas escaleras de vértigo cada
año.
Cuevas de Batu, Malasia
Estas cuevas se ubican en el interior de una montaña de piedra caliza y contienen
numerosos templos hindúes, probablemente los más importantes fuera de la India. Su
acceso se realiza a través de una imponente escalera que asombra aún más cuando se la
ve repleta de peregrinos.
The Monumet de Londres
La escalera de caracol del Monumento al Gran Incendio de Londres puede resultar
bastante estrecha pero realmente merece la pena por las grandes vistas que otorga el
mirador sobre la Torre de Londres.
Santorini
Si los crucerístas quieren conocer la isla de Santorini no les queda más remedio que subir
la empinada escalera que da acceso al puerto desde la ciudad de Fira. Quien no quiera (o
pueda) subir andando siempre podrá alquilar un burro.
Escaleras Potemkin en Odesa
Estas escaleras son las más emblemáticas de la ciudad ucranianas. Llamadas así en
honor a la sublevación del acorazado Potemkin, se construyeron en el siglo XIX para unir
el centro de la ciudad con su puerto en el Mar Negro.
Templo de Ananda en Bagán
Son cientos de turistas los que cada mañana llegan hasta es la cima de este templo para
ver amanecer sobre las cientos de pagodas que se encuentran en Bagán (Myanmar). Sus
empinados y altos escalones hacen que la bajada pueda resultar peligrosa.
Estatua de la Libertad
El acceso hasta la corona de la Estatua de la Libertad de Nueva York se hace a través de
una empinada escalera de caracol metálica y recientemente reformada tras las intensas
obras que ha sufrido el monumento.
Arrozales de Longji
La visita a las terrazas de arroz de Longji, en Ping´an (China) es una de las excursiones
más típicas cuando se viaja hasta Guilin. Lo que pocos saben es que para subir hasta la
cima de estas terrazas hay que subir empinadas escaleras hechas sobre el terreno a
través de piedras y excavando la tierra. Esto, unido al calor y la humedad, puede resultar
muy duro para algunos aunque merece la pena.
Atomium de Bruselas
Este monumento en forma de átomo tiene en su interior numerosas escaleras estrechas
que parecen que te van a transportar hasta algún mundo de fantasía. Muchas son
mecánicas por lo que el esfuerzo por subirlas es nulo.
Templo en Machu Picchu
Si algo llama la atención en Machu Picchu (Perú), además de su majestuosidad, es el gran
número de escaleras que tiene. Estas permitían las comunicaciones en la antigua ciudad
inca y aún se conservan más de un centenar de todos los tamaños.
Palazzo Contarini del Bovolo
Las escaleras exteriores de caracol del Palazzo Contarini del Bovolo, en Venecia, son
conocidas como la Scala Contarini del Bovolo. Este palacio del siglo XV ofrece al final de
estas bellas escaleras repletas de arcos, unas bellas vistas sobre los tejados de la "ciudad
de los canales".