Resumen por : Carmen Elizabeth Alvarez Plaza

Tutor : Ing. Andrés Avilés

Cambio y continuidad en la

práctica de enseñanza

Este capítulo nos deja muchas reflexiones sobre la magnitud de los cambios que están enfrentando las escuelas en la actualidad.

Hay que destacar que países como Argentina están creando políticas de Estado para que se den los cambios tecnológicos en las escuelas, para superar la brecha digital y acercarnos más a la cultura digital, ya que éste trabajo no se lo debe dejar únicamente a las instituciones sino que el Estado forme parte de éstos cambios para poder alcanzar éstos nuevos desafíos.

Según Flavia Terigi (2006) :“La escuela sigue siendo el dispositivo institucional de mayor escala para la transmisión intergeneracional. Es necesario asumir, como parte de las políticas, la generación de condiciones que hagan razonables las demandas sobre la enseñanza. Pero generar dichas condiciones no puede limitarse a diseñar e implementar políticas de dotación material y de establecimiento de normas marco y transferir a las escuelas la responsabilidad de encontrar los modos pedagógico-didácticos de resolver la enseñanza. La enseñanza, en el marco de sistemas educativos masivos, es una responsabilidad de esfera política”

La concibe como un proceso interactivo, cara a cara. Desde esta perspectiva, el docente resulta un artesano individual que elabora resoluciones en la interacción directa con los alumnos a su cargo.

Define a la enseñanza como un sistema institucional, como una gran organización.

Según Feldman (1999), existen dos grandes enfoques sobre la enseñanza.

A lo largo del documento hemos ido señalando algunos aspectos importantes:

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Para la escuela, el acceso a las nuevas tecnologías

El acercamiento de la escuela a las formas de producir la cultura en la vida actual.

La renovación del entusiasmo a los estudiantes con la enseñanza y el aprendizaje

Plantearse objetivos como para qué enseña y qué es importante que sus alumnos aprendan.

Debemos enfatizar que existen muchos docentes que aún piensan que las nuevas tecnologías complementan o apoyan lo que vienen haciendo, y no suponen grandes cambios en la forma ni en el contenido de la enseñanza. Y la mayoría de esto surge por el desconocimiento que tienen ellos en cuanto a los nuevos cambios y transformaciones, por eso es importante que los docentes se capaciten y estén preparados para desenvolverse y cumplir con las exigencias de la educación actual.

Algunos docentes consideran a la Red como una gigantesca biblioteca, que creen que basta con producir textos con imágenes cada vez más atractivos , divertidos y con ello lograrán mejores aprendizajes. Pese a ser usuarios frecuentes de las tecnologías, los usos pedagógicos todavía adolecen de poca imaginación y de mucha continuidad.

La mayoría de los docentes usan la Red para buscar recursos, material de apoyo sin mucha orientación sobre los sitios recomendados o reconocidos y esto conlleva a que puedan obtener información falsa o dudosa; es por eso que se debe dar más importancia a las falencias que se presentan al aplicar la tecnología en el aula, empezando primero por los educadores para que ellos puedan guiar a sus alumnos de la mejor manera posible y poder superar las barreras que nos limitan alcanzar los nuevos desafíos.

Pero es importante que la escuela no se conforme solo con eso ,sino que también ayude a que los alumnos puedan ir más allá de lo que acceden por su propia cuenta, vinculándose con otro tipo de comunidades que surjan de intereses menos individuales, enseñando (etimológicamente, enseñar es poner señas, marcar el camino) otras rutas posibles para la navegación que las que proveen los buscadores más conocidos, y generando formas de producción cultural menos estandarizadas, más autónomas y creativas.

Una de las muchas preguntas que se formulan es ¿cuál es la diferencia que puede poner la escuela, como institución vinculada a la formación de una cultura pública común y compartida, en este nuevo marco político y cultural?

Consideramos que preguntas como esas pueden ayudarnos a evitar que la escuela se convierta en una institución irrelevante, fortaleciéndola como un espacio de experiencias de conocimiento ricas y complejas sobre el mundo en el que vivimos.

Es de importancia que los docentes estemos preparados para poder responder a las inquietudes de nuestros alumnos sobre los dilemas que nos enfrentamos todos los días sobre los cambios que se vienen dando y que ellos tomen conciencia de que existen parámetros de lo que ellos pueden ver, explorar en este nuevo mundo de la tecnología .

Las nuevas tecnologías prometen muchas veces la satisfacción inmediata del usuario, la adaptación a cada uno, y el entrar y salir cuando uno quiere, que combinan mejor con el “para algunos” que con el “para todos”. Hay que aclarar que ese “todos” no es ya el todo homogéneo que se pensaba antes, pero sí es el “todos” de una sociedad a la que le preocupa la justicia y la igualdad en el acceso al conocimiento, y que pretende sostener una conversación y un marco de acciones compartidas. En esas otras tareas, la función de la escuela sigue siendo fundamental.

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