CRÓNICA DESDE IRLANDA (DEL 7 AL 14 DE JULIO DEL 2014)

MIÉRCOLES, 10 DE JULIO

Después de haber desayunado, desde las 09:00 a

las 11:00 horas, hemos tenido libre para visitar la

bella ciudad de GALWAY, con cerca de los

300.000 habitantes, la segunda ciudad más

grande de Irlanda.

Paseo por la calle peatonal, donde teníamos el

hotel. Visita de la Colegiata de San Patricio,

administrada por la Iglesia evangélica. Su

estructura es de un gótico, prácticamente un de

salón de salón, pero con una gran austeridad, que le aporta un especial ámbito de

espiritualidad.

Hemos visitado la Catedral Católica de San

Patricio. Catedral magestuosa, repleta de

símbolos religiosos, que te hacen recordar

los grandes misterios de nuestra fe

cristiana: El misterio de Dios y del hombre,

presente en la encarnación de Dios en la

Virgen María, y la presencia de Cristo en la

Eucaristía. La lámpara de la fe, la lámpara

encendida del Sagrario nos hace recordar

la vacilante fe del hombre iluminada por la

gracia de Dios, presente en Cristo Sacramentado, y de una forma real en el Sagrario.

Muchísimas más cosas de gran belleza

encierra esta bella ciudad. No hay que

dejar pasar la mención a los PUB,

punto encuentro en la socialización de

la ciudad, sobre todo en la época

ambruna que padeció Irlanda.

A las 11:30 horas, salimos hacia la

Región de BURRE, haciendo una breve

parada en lo alto de la escabrosa

montana para contemplar una

especie de paisaje lunar en la cumbre

de la misma.

Y así, trascurriendo el viaje una serpenteante y estrecha carretera, llegamos a un pueblecito

llamado LISDONVAMA, en donde en una taberna, al más entigüo estilo irlandés, nos

preparamos para comer y, habiendo terminado de comer, emprendemos nuestro camino

hacia…

LOS ACANTILADOS DE MOHER. Se trata de una

zona de acantilados sobre la costa del Océano

Atlántico, de aproximadamente ocho Km. de

extensión con alturas de hasta 214 mtr. La torre de O’Brien es el punto más alto desde donde

se pueden ver los acantilados de Moher.

Vistos los acantilados de Moher, hemos

emprendido camino hacia el Condado de

Kerry. Nos hemos instalado en el Hotel, en

la ciudad de KILLARMEY. Hemos cenado

nada más habernos instalado en las

habitaciones y, posteriormente, hemos

podido asistir a una demostración

preciosa, folklórica, de unas expresiones

culturales artísticas, de cante, baile… de la

cultura irlandesa.