Pueblos Originarios

Se ubicaron en los valles transversales entre los ríos Copiapó y Aconcagua.

Su mayor desarrollo se dio en los valles de Huasco, Elqui, Limari y Choapa , es decir en territorios de la 3era y 4ta región.

Adoraban al sol. Se desconoce cuáles

eran sus prácticas religiosas, pero se piensa que creían en la existencia de una vida extraterrenal, por el cuidado que ponían al momento de enterrar a sus muertos.

Depositando cántaros con alimentos y otras ofrendas.

Con el tiempo, fueron mejorando la calidad de las sepulturas, hasta confeccionar verdaderos ataúdes de piedra.

Actividad económica eran agricultores, cazadores y tejedores.

La agricultura fue realizada en terrenos al fondo de los valles que regaban por medio de canales artificiales.

De las cosechas obtenían maíz, papa y algodón.

Con el algodón fabricaban la ropa.

La ganadería practicada era de tipo trashumante, lo que significa que en verano los animales eran llevados a pastar a la cordillera y en invierno a la costa donde se proveían de peces, mariscos y animales marinos.

Los diaguitas fueron expertos artesanos, tanto metalúrgicos como alfareros, e incorporaron a los adornos de oro y plata, piedras semipreciosas como el lapislázuli.

Su cerámica destaca por sus vasijas decoradas con diseños geométricos en rojo, blanco, amarillo y negro

Especialmente aquellas conocidas como jarro-pato y una forma de jarrón adoptada de los incas llamada aríbalo.

Se agruparon en aldeas de varias familias con parentesco entre si y la autoridad fue ejercida por el mas anciano de ellos.

Las aldeas se agrupaban en señoríos y en cada valle existieron dos señoríos uno dominaba hasta la costa y otro hasta el sector cordillerano.

Eran un pueblo sedentario. Los diaguitas vivían

siempre en el mismo lugar.

Vestían largas camisetas de lana tejida con adornos geométricos y ponchos.

Calzaban ojotas de cuero.

Algunos se cubrían la cabeza con un gorro con orejeras, de colores muy vivaces.

Otros usaban vinchas, prendedores, aros y coloridas pecheras, de plumas, huesos, piedras y metales.

El idioma del pueblo diaguita era el kakán , que según las fuentes se lo llama también Kaká , caca , Kaká y chaka.

La completa desaparición de esta lengua fue en el siglo XVII, sin que haya quedado ningún registro.

Los historiadores piensa que se trataba de un lengua proveniente del quechua pero otra piensan que viene del ayamara.

Las construcciones que utilizaban para vivir eran chozas agrupadas en aldeas pequeñas, hechas de ramas cubiertas de barro y techo de paja, a las que se sumaban unas bodegas subterráneas empleadas para almacenar maíz y otros alimentos.