8/9/2019 Diario del Cnico 666

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Tucumn, esc. Junio 7 de 2008 e.. v.., 10:10 a.m. / corr. Junio 20 de 2008 e.. v..; 8:40 a.m.

El Cnico6 6 6 (entre lo dicho y el hecho)

El Maestro Thrion nos revela una cifra numrica supuestamente pre-revelada en tiempos de los

Padres de la Iglesia, un nmero asumido por elppulus como aquel innombrable e impensablenombre de la segunda Bestia delApocalipsis. Pero lo que el Maestro nos indica con su verdaderoApocalipsis (re-velacin), laLegis, es que entre lo que decimos (u omos), aprendemos ysospechamos, hay una gran necesidad de Voluntad Verdadera para alcanzar el practicar, hacer,

com-prender y explicar.

Es aqu que, desde las distintas Escuelas Iniciticas a las que pertenecemos (o pertenecimos), el

llegar a desarrollar en el contexto cotidiano de la realidad fsica [asthesis] un posibleperfeccionamiento de la Magia(k), implica el com-prender, ya no intelectualmente, sino com-penetrado y com-prometido con la Realidad Substancial [ousa] que conocemos cuandoalcanzamos los estados iniciticos que demandan del operador alquimista una alta concentracin yun honesto aprendizaje, que entre lo pensado y lo practicado, debemos asegurarnos de que el

camino [methods] emprendido, tiene que necesariamente contemplar el Amor (toda laLey).

No voy ni a discutir de las diversas especulaciones esotricas que nos trae el 666 [] ni tampocolas disquisiciones que nos revela el Amor [], porque en mi ejercicio diario del Iniciado en losmystrion recurro frecuentemente al autoexmen diario de con-ciencia [protreptiks] pitagrico y alos Versos ureos, donde antes que pre-ocuparme de mi propia construccin templaria como arch-tektn, me ocupo de la vida en laphsis para el resultado necesario en la muerte (aqu, como elsmbolo inicitico por excelencia).

As, y dado que lo superfluo de los conocimientos [mathmatas] obtenidos vulgarmente daan elestado eidtico que persigue la verdad [a-ltheia], acudo al pequeo gran nmero que se nos harevelado: 666.

No esperen que lo que yo haga resulte en una Gran Obra, pero recuerden que como partculas del

gran Todo, cada cual desde su posicin alcanzar el ptimo resultado con sus acciones: en mi caso

particular, toda mi potencia inicitica es canalizada en el trabajo del proteccionismo animal como

defensor ambiental. Dado que mi entorno no se vincula con una gran fauna, mi radio de accin serefiere al inmediato urbano, especficamente a las mascotas domsticas abandonadas en la va

pblica. Esta realidad que los argentinos vivimos a diario y ahora en mayor grado, sumadas a las

justificaciones que los ndices de pobreza revelados al pueblo agravan, se excusa a los humanos a

despreocuparse del resto de la vida (animal y vegetal), y con eso entramos en la decadencia civilque slo podr ser corregida si predicamos-con-el-ejemplo, ya que la filosofa hecha accin,

desde el punto de vista peripattico, es lapolitik que requiere ser atestiguada y tambin imitada porlos agentes de cambio. Muchas veces nos preguntamos si acaso los mrtires no dejan la marca de

sus ideas con sus obras Bueno, yo no pretendo ser lacerado ni menos an empalado al estilo

romnico, sino ms bien, al combinar mis actividades profanas con las revelaciones iniciticas,

trabajar y actuar en consecuencia, con coherencia y consideracin. A diario puede vrseme en las

calles o en la rutas recogiendo mascotas abandonadas o perdidas, las que con un grupo de activistas

solidarios, ponemos en anuncios mientras las rehabilitamos; luego, al estar en ptimas condiciones

para la convivencia (o insercin en una sociedad ), las reubicamos mediante el mtodo deadopcin solidario que se lleva a cabo en la salida de los mercados de alta circulacin poblacional o

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en peatonales, donde se presentan a estos maestros del Amor como potenciales nuevos miembros

de aquella manada-familia que los adopte.

Entonces, la marca que disparo en las manifestaciones y movilizaciones realizadas para reclamar a

los gobiernos municipal y estatal de Tucumn por losDerechos del Animal(Declaracin Universaladoptada por la UNESCO y que este ao celebra su 30 Aniversario), es, de una manera apcrifa

(oculta en el sentido gnstico del trmino), la marca de la Bestia. Esto me permite actuar a partirde una cifra osmbolon harto (re)conocido por la comunidad; y, a riesgo de repeler a las masas, lasatraigo magnticamente porque no se explican sus motivaciones a causa del alto hechizo de la

clave escondida estratgicamente: como los reclamos al oficialismo dirigente del gobierno-fariseo

local se concentran en un control poblacional canino y felino humanitario a travs de medidas

sanitarias como la castracin masiva, el 666 () aparece desmenuzado en las tres consignas que

justifican dicha accin: 6meses es el ciclo de celo de las hembras caninas, en promedio cada partonos trae aproximadamente seis cachorros, de los cuales la mitad puede ser hembra (al ao son 6),luego a los 6meses, esas seis cachorras estn listas para entrar en el ciclo de celo que repetir lacifra. En resumen, con las medidas sanitarias reclamadas, controlamos la natalidad descontroladaapuntando a una responsabilidad ciudadana con asistencia gubernamental (en particular, en los

estratos ms marginados de la antes mencionada sociedad).

Como no hay educacin [paidea], el entorno est listo para nuestro cinismo. Recordemos queesta rama de las escuelas conocidas como socrticas: los ciniki [: perruno] hacan todo porreforzar la tarea delphilosophs desatendiendo lo superfluo (amaban como perros, se apareaban enla calle, coman los restos, dorman en los rincones, y a falta de un pelaje salvaje, vestan

simplemente una sola prenda por el resto de sus vidas). En nuestros tiempos, hacerlo nos

confundira con los mendigos, y nadie por educacin, se aproximara a uno para dialogar.

Aqu es donde nuestras capacidades y competencias se ponen a prueba: los funcionarios de turno,

generalmente ciudadanos poco preparados para sus funciones, requieren ser con-vencidos

[vencidos sofstica(da)mente con argumentaciones persuasivas de iniciados altamente preparadospara vampirizar crowleyanamente a la audiencia], y as permitirles considerarse los autores de estas

estrategias polticas. Y eso es muy positivo, puesto que lo que requerimos que perdure en el tiempoes la Obra, no el autor Los cambios culturales y de la idiosincrasia son bastante difciles, pero

requieren de nuestra aplicacin diaria de la Voluntad. Quin nos asegura? A menudo

escuchamos a nuestros Maestros decir que con un poco de Fuerza, el mazo direccionar el cincelque desbastar lapiedra hasta acabarla. Dnde por cinismo logramos que el ser-humano alcance lahonestidad? Las kategoro de las especies nos coronan tirnicamente entre lo dems, y eso nos alejade la re-ligin del Uno, como si escupiramos al cielo sin esperar nada de la Ley.

MarcoALbornozLosPerrosPrimero.com.ar