Economia 3D - Martin Lousteau

847

Transcript of Economia 3D - Martin Lousteau

  • Economa 3D

    Una nueva dimensinpara tus preguntas de

    siempre

  • ILUSTRACIONES:AUGUSTO COSTHANZO

  • MARTN LOUSTEAU

    ECONOMA 3D

    Una nueva dimensinpara tus preguntas de

    siempre

  • EDITORIAL SUDAMERICANABUENOS AIRES

  • Lousteau, MartnEconoma 3D : Unanueva dimensinpara tus preguntasde siempre. - 1a ed.- Buenos Aires :Sudamericana,2011.EBook. -. (ObrasDiversas)

    ISBN 978-950-07-3550-6

    1. EnsayoArgentino. I. TtuloCDD A864

  • Edicin en formato digital: abril de 2011

    2011, Editorial Sudamericana S.A.Humberto I 555, Buenos Aires.Diseo de cubierta: Juan PabloCambariere.Ilustraciones: Augusto CosthanzoTodos los derechos reservados.Esta publicacin no puede serreproducida, ni en todo ni en parte, niregistrada en, o transmitida por, unsistema de recuperacin de informacin,en ninguna forma ni por ningn medio,sea mecnico, fotoqumico, electrnico,magntico, electroptico, por fotocopia ocualquier otro, sin permiso previo porescrito de la editorial.ISBN 978-950-07-3550-6www.megustaleer.com.ar

  • Conversin a formato digital: eBookFactorywww.ebookfactory.org

  • A Javier, conquien me habra

    encantadocompartir mil y

    una charlassobre los temas

    de este libro.

  • AgradecimientosSe suele pensar que escribir

    un libro es una tarea solitaria. Unagran proporcin del trabajoefectivamente lo es. Pero el procesocompleto, desde que se gesta la ideahasta que los ejemplares llegan alas libreras, es sin dudas denaturaleza colectiva.

    En este caso, el primer mritocorresponde a Pablo Avelluto yGlenda Vieites, quienes imaginaroneste proyecto editorial. Tambin aFernanda Longo, quien en losltimos meses debi hacerse cargode la ingrata tarea de seguir losavances.

  • Diversas personas colaboraronen distintos momentos hasta llegaral producto final. Alejandro Parisiley e hizo algunas sugerencias paramejorar los primeros bocetos.Martn Llamb y Ariel Cukierkornme mostraron un camino diferenteal que vena siguiendo: suya fue lasugerencia de reelaborar el formatopara hacer captulos ms breves ydinmicos.

    El equipo de economa de miconsultora, LCG, compuesto porMelisa Sala, Agustn Bruno yGastn Rossi, quienes meacompaan desde hace varios aos,siempre ha estado dispuesto a

  • discutir cuestiones varias, buscandolos datos pertinentes y trabajandocon ellos.

    Martina Chidiak y VernicaGutman fueron claves pararescatarme de la maraa de temascorrespondientes a la parte demedio ambiente. Y mi amigo yempedernido evolucionista, LucasOber, me facilit excelente materialpara la seccin sobre economa delsexo.

    Los lunes en Perros de la callefueron una suerte de ensayo previo.Le agradezco a Andy Kusnetzoff porla invitacin a integrarme a suprograma, a Nicols Cajg por la

  • discusin al aire de muchos deestos temas, y a Jimena Blizniuk yFlorencia Surez por todo lorelacionado con la produccin de lacolumna radial. A todo el resto delequipo por la buena onda semanal,y a los oyentes por participar de lascharlas desde el otro lado delmicrfono.

    Una mencin especial mereceNicols Harry Salvarrey quien,adems de su labor en la radio,result clave en el ltimo tramo dela tarea, cuando el agotamientosuele hacerse sentir. Reley variasveces el material, corrigi detalles yaport sus toques a varios captulos,

  • que mejoraron la versin definitiva.Las ilustraciones que

    acompaan a cada una de las diezsecciones, as como tambin la tapay la contratapa, son responsabilidadde Augusto Costhanzo, que con sugran talento logr sintetizar lo que alas palabras a veces les cuesta.

    Gracias a todos aquellos quesupieron entender esta ocupacintemporal que en algunos momentosse interpuso con otrasresponsabilidades y en otros hastalimit los ratos de ocio.

    Finalmente a vos, lector, quete has tomado el trabajo de leerestos agradecimientos: espero que

  • hagas lo propio con el resto dellibro.

  • IntroduccinProbablemente pienses que la

    economa es rida y fra. Tambin,quizs, aburrida. No voy a intentarconvencerte de lo contrario. Aunquete sorprenda, suelo pensar lomismo.

    Algunos creen que loseconomistas somos personajesextremadamente calculadores,capaces de ponerle un precio a todo.Otros asumen que se trata de unosnerds con anteojos que miran elmundo desde una ptica pocointeresante y alejada de lo humano.Cualquiera sea tu visin,probablemente una reunin de

  • economistas no sea tu manera idealde pasar una velada. Quedatetranquilo: tampoco es la ma.

    En tiempos recientes se hanpublicado bastantes libros quetratan de revertir esta percepcingeneralizada. Intentan, por ejemplo,mostrarte que la economa est entodo lo que ves y hacscotidianamente, y que quienes lapractican son como unos SherlockHolmes de lo numrico. Paracongraciarse con un pblico msamplio, otros cuentan creativasinvestigaciones que muestran quelos humanos no siempre funcionancomo predice la teora econmica.

  • Finalmente, un tercer gruporeproduce experimentos o trabajosde naturaleza mucho ms llamativapara poner de manifiesto que noslo estudiamos el dinero, elpresupuesto y las tasas de interssino tambin temas mucho msextraos, capaces de provocar desdecuriosidad hasta cierto morbo.

    No soy un gran fantico deestos libros. Aunque algunospueden tener partes muyinteresantes e incluso se hanconvertido en best sellers globales,muchos me parecen intentos de losestudiosos o tragas de la clase pordemostrar que, a pesar de todo,

  • tienen onda suficiente para seducira la chica ms linda del curso.

    Mi objetivo est bien lejos depretender convencerte de lasbondades de la economa. La idea esque podamos reflexionar ydivertirnos abordando asuntosbastante diversos. Discutiremostpicos supuestamente solemnescomo el desarrollo, la desigualdad,el cambio climtico o la crisisfinanciera internacional reciente, yotros quizs ms importantes, comola felicidad, el sexo o, incluso, elftbol. Compartiremos losinconvenientes que genera pensarque los humanos podemos ser

  • calculadores como pretenden loseconomistas. Y hasta les echaremosuna mirada a algunos de losproblemas ms arraigados de lasociedad argentina.

    Te propongo queexperimentemos juntos cmo laeconoma aborda cuestiones detodos los das, pero tambin cmonuestros razonamientos mshabituales nos pueden servir paraentender de economa. Y combinarambas visiones para tener unpequeo diagnstico de dnde estparado nuestro pas y qu podemoshacer para mejorar su situacin.

    He intentado volcar en estas

  • pginas mi experiencia personalcomo economista en tres reasdistintas. He dedicado algn tiempoa la investigacin y la docencia. Diclases en colegios secundarios y enuniversidades de ac y de afuera,tanto en grado como en posgrado.Ahora sumo a mis quehaceres unacolumna en Perros de la calle, elprograma radial de AndyKusnetzoff. Espero que lacombinacin de estos mbitos, consus especificidades y cdigospropios, me sea til para podertransmitir algunos conceptos deuna manera ms amena, menostcnica.

  • Por otra parte, he trabajadodurante aos, y an lo hago, comoconsultor para empresas. Muchosde mis clientes han sido y sonbancos de Wall Street. Por eso creoentender cmo funcionan algunascosas en ese extrao mbito de lofinanciero que ha generado granparte de los problemas que vemoshoy en tantos pases.

    Pero seguramente mi tareams conocida haya sido en el sectorpblico. Trabaj en el Banco Centralcomo asesor de su presidente, luegome desempe como ministro de laProduccin de la Provincia deBuenos Aires y despus me toc

  • dirigir dos aos completos el BancoProvincia, tras lo cual fui ministrode Economa y Produccin duranteun breve perodo.

    Siento que todos los pasos quehe dado me enriquecieron dealguna manera. Con aciertos yerrores, cada una de esasresponsabilidades asumidas mepermiti ampliar las perspectivas ydesarrollar visiones mscomplementarias y eclcticas sobreciertos temas, que intent volcaraqu.

    Escribir un libro suele ser unatarea ardua. Y el esfuerzo es intil sitermina siendo aun ms difcil

  • leerlo. He tratado de que ste no seael caso: quise divertirme al hacerlopara que vos tambin pudierasentretenerte mientras recorrs suspginas.

    El resultado final de tantotrabajo es Economa 3D. Esperoque lo disfrutes.

    Martn Lousteau

  • HOMBRE EXTRAO

  • George Bernard Shaw dijouna vez: El hombre queescucha la voz de la razn

    est perdido, porque larazn esclaviza las mentesde todos aquellos que noson lo suficientemente

    fuertes como paradomarla. Este

    pensamiento resume unode los principales desafos

    que se le plantean a laeconoma en estos das: que

  • todas sus teoras estnpensadas a partir de un

    hombre extremadamenteracional y egosta. Sin

    embargo, a menudo nuestrocerebro nos convence de

    actuar de una determinadamanera cuando, si nos

    detuviramos un instante areflexionar, lo razonable

    sera completamentedistinto.

  • 1.1. Ms que un discorgido

    Cajas mentales y elpsiclogo Nobel de

    Economa

    Imaginate que vas a una casade electrodomsticos a comprar unLCD que cuesta 6.000 pesos. Estspor pagar y tu pareja te dice que a lavuelta la competencia tiene elmismo modelo a 5.980 pesos. Quhacs? Camins las dos cuadras

  • para ahorrarte 20 pesos?Ahora imaginate que ese da tu

    sobrino cumple aos y pensaste enregalarle un oso de peluche queviste a 40 pesos. Esta vez, cuandovas a pagar, tu pareja te dice que ala vuelta, en otra juguetera, vio elmismo juguete a 20 pesos. Por elosito que cuesta la mitad, acaso nocaminaras las dos cuadras?

    En el caso del LCD,probablemente considers queahorrar 20 pesos en 6.000 es poco,y no estaras dispuesto a realizar elesfuerzo. Pero en el caso del osopara tu sobrino querido, ahorrar 20pesos en 40 te parece mucho y s lo

  • haras. Lo llamativo es que enambos casos la disyuntiva esidntica: vale la pena caminar doscuadras para quedarme con 20pesos ms en el bolsillo?

    Lo que pasa es que uno poneesos idnticos 20 pesos en distintascajas mentales. Cajas mentalestan simples como LCD o Regalospara mi sobrino. Y si uno yadecidi comprar un LCD para verlos partidos de su equipo, ahorrarse20 pesos en la caja LCD no esrelevante. En cambio, ahorrarse 20pesos en la caja Regalos para misobrino nos hace sentir un geniode los negocios.

  • Ests yendo a un recital de tugrupo favorito. En tu bolsillo llevsla entrada, que te cost 100 pesos yotros 200 pesos en efectivo. Cuandollegs a la puerta, te das cuenta deque perdiste la entrada. Todava haydisponibles en la boletera. Tecomprs otra?

    Ahora imaginate que vas con300 pesos al recital y la idea deadquirir el ticket ah. Al llegar te dascuenta de que te desaparecieron100 pesos de tu bolsillo. Te dasmedia vuelta y te retirsapesadumbrado por el contratiempoo la comprs de todas maneras?

    La mayor parte de la gente

  • desiste de comprar en el primercaso pero lo hace en el segundo. Escurioso. Si te pons a pensar, lassituaciones son idnticas y losresultados deberan ser similares.En el primero llevs tres papelitosque valen 300 pesos con laintencin de ver en accin a ungrupo que te gusta. Al llegar allugar, slo te quedan 200 pesos. Site gasts 100 pesos en ingresar, vesel show y te queds con otros 100pesos para despus. Y en elsegundo es exactamente lomismo!

    Lo que pasa es que tu cerebronuevamente asigna cada

  • circunstancia a una caja mentaldiferente. Pagar 200 pesos por unaentrada que vale 100 es undisparate, pero perder 100 pesos denuestra cuenta de gastos generalesparece mucho menos relevante.

    Esto, que a cualquiera lepuede resultar una simplecuriosidad, para la economa es unreto. Las leyes econmicas dicenque el dinero es fungible, es decirque los 20 pesos de uno y otro casotienen el mismo poder de compra, ypor lo tanto valen lo mismo. Dehecho, cuando los uses nadie va anotar la diferencia de dnde losconseguiste. Pero, como vemos, las

  • personas no siempre noscomportamos de acuerdo con estasleyes, y entonces aparecendiferencias entre ciencia y realidad.

    La trampa de las cajasmentales no discrimina por nivel deconocimiento de la teoraeconmica. Una vez habl de estetema en la radio, y al rato recib unmensaje de Guillermo, un amigoque posee un doctorado enEconoma en la prestigiosa LondonSchool of Economics and PoliticalScience. Deca: Me voy de viaje detrabajo esta semana. Me dieron tresveces ms de lo que pens que meiban a dar en concepto de viticos

  • no reintegrables. Pensamientoinstantneo: Me gasto tutti. Pero enel fondo es plata, no? Por qu noguardarla? Porque est en la cajamental Viene de arriba, as quevale todo...

    Qu pasa cuando unadisciplina como la economa se basaen supuestos equivocados? Esevidente que llega a conclusionestambin equivocadas. Por eso, paraun economista no es fcil reconoceruna particularidad central de suteora: sus leyes fueron pensadasbasndose en el supuesto de unhombre superior y racional alextremo. En otras palabras, as

  • como la fsica mide fenmenos enlas condiciones ideales y ficticiasdel vaco, la economa fue pensada apartir de un hombre irreal queacta de acuerdo con principiosestructurados y predecibles. Ahoratal vez podamos entender cmo unbuen da del ao 2002 el PremioNobel de Economa qued para unpsiclogo.

    Que el israel-estadounidenseDaniel Kahneman recibiera, junto aVernon Smith, semejantereconocimiento signific unempujn para bajar del pedestal alHomo economicus, un serhipottico, egosta, siempre fro y

  • calculador a la hora de tomardecisiones. Kahneman fue unpionero en incorporar al anlisis laposibilidad de que el hombre sigacomportamientos aparentementecarentes de lgica.

    A partir de ese momento, laeconoma se acerc todava ms alos maravillosos misterios delcomportamiento humano. Tal vez loms interesante de la influencia delos tericos de la llamadaeconoma del comportamiento esque ahora prestamos ms atencina esas supuestas anomalas, otenemos ms elementos paraexplicarlas y predecirlas.

  • Nuestro cerebro nos juegaalgunas pasadas inexplicables. Unavez pinch una goma del auto y fuia una gomera con la idea decambiarla por una nueva. Lapersona que me atendi me explicque era mejor cambiarlas siemprede a pares y me sugiri que lareparara y la intercambiara por la derepuesto, que estaba en condicionesun poco mejores. Como si fuera unacomedia, a los dos das apareciotro neumtico pinchado. Estoylejos de considerarme una personazen, pero la situacin no me pusofastidioso. Todo lo contrario: estabaaliviado porque iba a tener una

  • excusa para comprar dos gomasnuevas y resolver el temadefinitivamente. En otras palabras,gastar, en menos de una semana,una pequea fortuna que no estabaen mis planes para poner el auto encondiciones me gener satisfaccin.Como si el costo adicional de laltima pinchadura se compensaracon el hecho de eliminar de una demis cajas mentales el inconvenientede estar pendiente de losneumticos. Lo curioso es quepodra haberlo hecho antes.

    Ser consciente de estos trucosde la mente no slo es importantepara alterar en el sentido correcto

  • algunas predicciones que la teoraeconmica suele hacer. Tambinpuede permitir que te liberes de latrampa y tomes tu decisin con mstranquilidad y menos cargo deconciencia.

    Imaginate que sacaste unabono para tomar clases de teniscon un muy buen profesor. Televants a las 7 de la maana y haceun fro polar. Mirs por la ventana yest nublado, hasta parece que va allover en cualquier momento. Quhacs? Vas a la clase o te quedsdurmiendo bien tapado un ratoms? Ahora imaginate la mismasituacin pero con la diferencia de

  • que la clase de tenis te la ganaste enun sorteo del trabajo.

    Est claro que en el segundocaso la mayora de las personas sequeda en casa. En cambio, muchosde aquellos que tuvieron que pagarla clase deciden salir al fro de muymala gana con la posibilidad dearruinarse el da...

    Quizs la pregunta adecuadapara hacerte si ests en casa concalefaccin y afuera hace un fro delocos es cunto estaras dispuestoa pagar por quedarte adentro ycalentito?. Si la cifra es igual osuperior al costo de la clase, esmejor que te olvides de cmo la

  • conseguiste. Es una buena forma detransformar lo que te parece unaprdida en una ganancia. Ojo, noestoy incentivando la pereza ni lafalta de constancia. Si haber pagadoes tu forma de comprometerte,adelante. Slo te propongo quemires tus decisiones de formasalternativas, para que tusatisfaccin no sea presa de unamera mala pasada de tu cerebro.

  • 1.2. Cajas chicas, cajasgrandes

    Prstamos,negocios, riesgos yel rol de los bancos

    Hace un tiempo, una prima seestaba mudando y me pidi que leguardara (y cuidara) 5.000 pesosque tena ahorrados. Meses mstarde la encontr en una reuninfamiliar y me consult si era unabuena idea tomar un crdito

  • personal de 3.000 pesos a docemeses para comprar una laptop. Eldilogo que tuvimos ante algunosfamiliares fue ms o menos elsiguiente:

    Yo: Acordate de que todava tengotus ahorros, y si sacs un crdito vasa pagar en intereses el equivalenteal 70% anual.Prima: Prefiero pagar intereses ydejar los ahorros por cualquiercosa.Yo: Pero vas a pagar casi 1.000pesos de intereses. Vas a pedirprestados 3.000 para devolver4.000.Prima: Entiendo, pero me sientoms segura con el prstamo.

  • Yo: Hagamos lo siguiente: yo tepresto al 20%.Prima: Buensimo. Me voy aahorrar un montn en intereses!Yo: Te das cuenta de que te voy aprestar tus propios 3.000 pesos,no?Prima (piensa un segundo, despusse re): Ah... Claro... Ahora entiendocmo funcionan los bancos.

    Todo este asunto no es algoque ocurra slo en las familias.Cuando fui presidente del BancoProvincia, conoc grandes empresasque tenan un plazo fijo y lo ponanen garanta para tomar un crdito.Igual que mi prima, los gerentesfinancieros de estas grandes

  • empresas le estaban dando al bancoahorros por los que recibanintereses pequeos, y pidindole asu vez prstamos por los quepagaban intereses elevados.

    Una explicacin posible es queen muchas personas la caja mentalCrdito va por un caminoseparado de la caja Ahorro oInversin. Con esto no quierodecir que endeudarse est mal; aveces endeudarse es conveniente.Lo que quiero decir es que hay queestar atentos a las cajas mentales,para que no nos hagan cometererrores.

    Hablando de bancos, quizs

  • podamos analizar un poco el rol delsistema financiero. No s si es tucaso, pero hay mucha gente, casitodos menos los banqueros, quedetesta a los bancos. Tal vez porquea veces cobran tasas de intersdemasiado altas, o porque cuandovamos a pagar un servicio nostopamos con una cola interminable,o porque en alguna crisis nodevolvieron los ahorros. Sinembargo, y aunque duela aceptarlo,los bancos cumplen un papel muyimportante en la economa.

    Supongamos que mi sueldo esde 5.000 pesos y todos los mesesme sobran 500 pesos, que ahorro

  • en una alcanca. Y que como yo haymuchas personas.

    Ahora imaginate que hay unapequea fbrica que quiere compraruna mquina que cuesta 5.000pesos. Pero esta empresa no tienehoy el dinero y necesita que alguiense lo preste.

    Si vivisemos en una pequeacomunidad donde todos se conocen,probablemente podramosorganizarnos y entre varios leprestaramos los fondos a laempresa a cambio de un inters.Pero la realidad es diferente: novivimos en una pequea comunidady las personas que tienen

  • excedentes no necesariamentesaben evaluar la capacidad derepago de una pyme o de unapersona que va a endeudarse. Yquienes necesitan el dinero nopueden identificar fcilmente a losque se lo podran facilitar. Para esohay especialistas; para eso estn losbancos. Los bancos sonintermediarios financieros quesirven de enlace entre los quetienen ms dinero del que usan yaquellos que necesitan ms dinerodel que tienen.

    En definitiva, las personas conexcedentes pueden invertirlos en undepsito bancario a cambio de un

  • inters (conocido como tasa pasiva)y aquellos que requieren fondospueden tambin recurrir al bancopara tomar un prstamo pagandointereses (en este caso conocidocomo tasa activa).

    El problema es que los bancosno son entidades benficas, sinoque funcionan como cualquiernegocio: quieren ganar dinero.Entonces el inters que le cobran altomador de un prstamo va a sermayor que el que le pagan alahorrista por sus depsitos. Y con ladiferencia entre la tasa activa y latasa pasiva los bancos pagansueldos, alquileres y el telfono,

  • entre otras cosas, y les sobra,generalmente, como para que susdueos pasen unas (cuantas) lindasvacaciones en Europa con susfamilias.

    Supongamos que tens unamuy buena idea para producir algonovedoso que la gente querracomprar. Sin crdito bancario,tendras que ahorrar o ver si algnconocido te presta el dinero parallevar adelante tu proyecto. stesera ms pequeo de lo que tegustara, y el productoprobablemente sera ms caro,porque lo haras en menorescantidades.

  • Si los bancos te prestaran atasas razonables, podras empezarcon una escala mucho mayor ytodos saldran ganando. La gente,porque al haber ms unidades de tuproducto ste sera ms barato; vos,porque venderas ms y ganarasms dinero; el banco, porque harauna diferencia con el prstamo; ylos ahorristas, porque los bancospodran pagarles ms por susdepsitos. Como ves, el crdito espara la economa como la sangreque fluye mejor y con ms oxgenodentro de un cuerpo. Si funcionabien, hace que todo se desarrollemejor.

  • Los bancos son tambin unnegocio muy particular porque, alrevs que el resto, su negocio estprimordialmente basado en dineroque no es propio sino de losdepositantes. Es por eso que, adiferencia de, por ejemplo, unkiosco, son regulados y controladospor alguien. Ese alguien es el BancoCentral, y su rol supervisor es vitalporque, al prestar gran parte de losdepsitos, los bancos no tienen encada momento todo el dinero de susdepositantes sino slo una parte deltotal. Por este motivo cuando haypnico y todos corren al mismotiempo a retirar sus ahorros, los

  • bancos no pueden devolverlos.Esta explicacin no debera

    generarte temor. As funcionan entodos lados, aunque a losargentinos las experiencias pasadasnos lleven a desconfiar. Hay unconocido conductor de televisinque cierta vez fue a Miami y pidique le dejaran ver todos susahorros. El gerente se extramucho, pero ante la insistencia notuvo ms remedio que ir a la bvedageneral de la entidad, juntar unacantidad de dinero equivalente aldepsito en cuestin y mostrrsela.

    En un mundo perfecto losbancos compiten mucho entre s, lo

  • cual hace que sean baratos; y comoestn bien controlados, no entraanriesgos. Imaginate que para darteun crdito los bancos se pelearancomo los supermercados con lasofertas. Lamentablemente, rara vezes as. A veces abusan de la falta deconocimiento de la gente y de laprescindencia del regulador paracobrar en exceso. Quizs tedestratan aprovechando que noexisten demasiadas alternativas.Otras veces las crisis hacen que nopuedan devolverte tus ahorros. Yotras se enceguecen tanto conobtener ganancias que terminangenerando grandes descalabros,

  • como en la actual crisis financieramundial.

    Lo importante es que losbancos no son malos en s mismos.Bien administrados y biencontrolados, deberan ser un motorfundamental del crecimientoeconmico de un pas, aunque hoypor hoy ocupen mucho ms lugaren la caja mental que lleva laetiqueta Crisis que en la que diceDesarrollo.

  • 1.3. Ilusin monetaria

    Qu valor leasignamos al

    dinero?

    Gans un sorteo realizado porun importantsimo banco. Para elpremio pods optar entre cobrar200 pesos hoy o 250 en un mes. Esmuy probable que no me equivoquesi arriesgo que elegiras los 200hoy, no? Ahora te cambio undetalle. Qu pasa si las alternativasconsisten en 200 en seis meses o

  • 250 en siete? Si cambiaste deopinin y ahora optaste por los 250deberas tener en cuenta que dentrode medio ao la decisin a tomarser exactamente igual a la delprimer caso, y aun as habrselegido lo contrario.

    No es fcil hacercomparaciones a futuro. Y encimahay contextos que confunden ms,como cuando hay inflacin alta. Enesas condiciones se puede producirlo que se denomina ilusinmonetaria.

    Imaginate que gasts 2.000pesos por mes en compras en elsupermercado y que tu sueldo es de

  • 5.000. No hay nada de inflacin.Vas progresando en tu trabajo y alao te aumentan el sueldo un 4%,con lo que pass a ganar 5.200pesos.

    Ahora cambiemos por estaotra situacin. A fin de ao teaumentan el sueldo a 6.000 pesospero la inflacin es del 20%. Esoimplica que a la hora de cobrar tunuevo salario la cuenta delsupermercado se elev a 2.400pesos.

    En el primer caso podas hacer2,5 compras con tu sueldo desde elprimer mes hasta eldecimosegundo. Y al principio del

  • nuevo ao tus ingresos tealcanzarn para 2,6 compras. Esdecir que tu poder adquisitivosubi.

    En el segundo ejemplo, alllegar el mes trece podrs realizarsolamente 2,4 compras. A pesar dehaber subido en trminosnominales, el valor real de tusalario cay. Adems, en el mes seisla inflacin habr acumulado 10%,llevando tu gasto en supermercadoa 2.200 pesos cuando todava gans5.000 pesos, lo cual hace que tupoder de compra sea de menos de2,3 veces tu carrito mensual.

    Como vers, a pesar de que

  • 6.000 pesos parecen mucho msque 5.200, en un contextoinflacionario te pueden generarmenos capacidad de compra, lo cuallos convierte, en realidad, enmenos.

    Algo similar est ocurriendoactualmente en la Argentina con eldinero que uno ahorra en un banco.Con una inflacin de alrededor de25%, al dejar tu plata en la caja deahorro, la misma pierde un quintode su valor en un ao. Hacer unplazo fijo al 10% slo reduce unpoco la prdida, llevndola al 12%.

    Pensars que pasaexactamente lo contrario cuando

  • comprs algo en cuotas y sininters. Y tens razn, pero sloparcialmente. Es cierto que pagscero de intereses aun cuando lainflacin es elevada. Pero alcomprar algo en cincuenta cuotas,financiacin que supo ponerse demoda en algn momento, incurrsen otros gastos.

    En primer lugar, estsrecibiendo todos los meses unresumen de saldo de tu tarjeta, quese cobra. En segundo trmino,debs pagar un seguro de vida paracubrir, ante la eventualidad de tumuerte, el monto que an nocancelaste, y posiblemente algn

  • otro gasto administrativo.Finalmente, el tener la tarjetavigente por el trmino de ms decuatro aos te fuerza a pagar elcosto anual de su renovacin.

    Adquirir en cincuenta pagosun LCD de 32 pulgadas que cuesta4.000 pesos va a dar lugar a cuotasmensuales de 80 pesos. Pero a ellole tens que sumar el envo delresumen, que puede rondar los 15pesos. A su vez, habr que pagarcuatro renovaciones cuyo costo irsubiendo ao a ao. Imaginemosque es de 360 pesos en promedio,es decir el equivalente a 30 pesosmensuales. Y el seguro de vida ms

  • otros gastos administrativos puederondar el 4% anual del saldo, esdecir un promedio de 7 pesos pormes.

    Entre todo, la cuota promedioya no ser de 80 pesos sino de 132.Y as, la tasa que implcitamenteests pagando es casi del 30%anual. Si prests atencin a turesumen podrs hacer tus propiosclculos de cul es el costofinanciero de estos esquemas sininters.

    Cuando te ofrecen prestarte1.000 pesos para que devuelvas enveinticuatro cuotas de 60, unopuede tentarse y pensar que la

  • suma de los pagos alcanza 1.440pesos. Y que entonces uno pag44% en dos aos, es decir 22%anual aproximadamente. Larealidad es bien distinta, ya quecuando se pagan las cuotas seabonan intereses pero tambin secancela parte del capital. Entonces,al terminar el primer ao ya debsmucho menos que al principio, ycerca del final del prstamo tudeuda es casi nada, por lo que losporcentajes se calculan sobrevalores cada vez ms bajos.

    Ello implica que es errneocalcular los intereses sobre el total.Si los nmeros se hacen

  • correctamente, la tasa de intersanual que ests pagando en nuestroejemplo es de 45%, es decir el doblede lo que creas. Y si las cuotasfueran de 75 pesos, la tasa sera del87%, casi dos veces ms. Mientrasal tomador lo puede engaar elhecho de que 15 pesos ms o menospor mes no le hacen una diferenciamayor, el prestamista estduplicando su rendimiento.

    Este tipo de explotacin esmuy comn entre aquellos que sededican al crdito para consumo delos sectores de menores ingresos. Ycomo si ello fuera poco, algunoselementos de marketing pueden

  • inducir a la gente a tomar el crditoaun con costos ms elevados. Untrabajo que llev a cabo un equipode investigadores en conjunto conuna entidad sudafricana que sededica a este tipo de prstamosdemostr que al incluir un soloejemplo claro de repago, cifras decunto dinero se poda perder si sesacaba el crdito con un competidorms caro y fotos de gente sonrientecon la cual el potencial cliente podaidentificarse, era posible elevar lastasas de inters hasta 4%, con elenorme impacto que hemos vistoque ello implica para el rendimientodel prestamista.

  • 1.4. Tachame la doble

    Engaos yprobabilidades

    Cierta vez me llamaron delprograma Metro y medio porque suconductor, Sebastin Wainraich,estaba discutiendo con PabloFabregas acerca de estadstica yprecisaban un jurado. Uno sostenaque si, al tirar una moneda, habasalido cara nueve veces seguidas,era ms probable que el prximotiro resultara ceca. El otro

  • pensaba que las probabilidades eranexactamente iguales para cadaalternativa.

    Quin tena razn? En primerlugar, si al arrojar la moneda al airenueve veces seguidas siempre teencontraste con el mismoresultado, haras bien en revisarla.Antes de apostar, fijate que notenga dos caras iguales, porejemplo. Porque las probabilidadesde que ocurra algo as son slo dedos en mil.

    Esto te puede llevar a pensarque casi con seguridad el prximotiro debera ser distinto a los nueveanteriores. Sin embargo, te

  • equivocs. Una vez hechos los tirosprevios, cada nueva ejecucin esindependiente de lo ya ocurrido.Pens, por ejemplo, que mientrasSebastin y Pablo estn jugando pordcima vez, llegs vos. Si tenscerteza de que la moneda no estamaada, cuntas probabilidadesle asigns a cada resultado?Cincuenta y cincuenta, no?

    Eso significa que si aposts 5pesos tens tantas chances deperder como de ganar, por lo queslo lo haras contra 5 pesos de tuoponente. Si en los tiros anterioressali cara, y penss que ceca tienems chances, estaras dispuesto a

  • apostar 10 pesos a ceca contra 5pesos del que opta por cara? Si lohacs sistemticamente vas aperder mucho dinero.

    Sin embargo, mucha gentetiene la ilusin de que ello no es as.Lo que confunde es no poderseparar la probabilidad de que sedieran todos esos extraosresultados previos con la del eventopor venir.

    Quizs con otro ejemplo tequede ms claro. La probabilidad deque ests viajando en avin, quehaya un desperfecto grave, queaterricen sanos y salvos en el agua yque al evacuar te golpees

  • fuertemente es extremadamentebaja, casi inexistente. Ahora, si elaccidente ocurri de veras y ya estssaliendo a las apuradas por lapuerta de emergencia en medio delcaos, la probabilidad de que telastimes es mucho ms alta.

    De igual forma, es muyimprobable que salga cara diezveces seguidas. De hecho, hay unasola manera de que eso suceda, y esque en cada uno de los tiros salgacara. Y hay muchas maneras de queno pase. Basta que salga ceca unasola vez en cualquiera de los tiros.Que salga dos veces. O tres. Onueve. O que salgan cuatro caras y

  • luego cinco cecas. O que se alternenlas caras y las cecas. Por eso es tanpoco probable obtener todas lascaras seguidas. En cambio si yasalieron las nueve, en el prximotiro hay slo una manera de quesalga cara y slo una de que salgaceca, por lo que las probabilidadesson iguales.

    Nuestra mente no est tanpreparada para calcular rpida ycorrectamente las probabilidadesdel complejo mundo de hoy.Cuando surgi el ser humano, todoera ms sencillo: menos gente ennuestro entorno, menosalternativas, exposicin a un

  • nmero ms reducido desituaciones. El cerebro estabaprogramado para reaccionarrpidamente ante ciertos riesgos,como un depredadorpersiguindonos. Hoy, salvo quenos pongamos a hacer rigurosascuentas, nuestra mente estimaprobabilidades de una manerasencilla pero primitiva. Y muchasveces equivocada.

    Uno de los motivos por los quecaemos en errores al analizarsituaciones inciertas es que nuestramente tiende a juzgar las chancesde ocurrencia de determinadoacontecimiento de acuerdo con la

  • facilidad con que hallamosrecuerdos de eventos similares.

    Naturalmente, lacomunicacin permanente y masivaafecta lo que queda impreso ennuestra memoria, y es por ello quenos equivocamos en ciertasapreciaciones. Hay una tendencia arecordar ms lo terrible de unevento que su probabilidad deocurrencia.

    Record la psicosis generadacon la gripe A (H1N1), a vecesllamada porcina, y su presencia enlos medios. La gripe estacionalhabitual afecta a entre tres y cincomillones de personas en todo el

  • mundo y causa entre 250.000 y500.000 muertes, pero rara vez segana un titular en la tapa de undiario. En cambio, la gripe porcinase transform en furor meditico.Finalmente, el Centro de Control yPrevencin de Enfermedades de losEstados Unidos estima que en esepas las muertes por H1N1 fueron lamitad de las de una gripe estacionalpromedio.

    De la misma manera nospuede aterrorizar viajar en avin.Sin embargo, segn el ConsejoNacional de Seguridad de losEstados Unidos, es setenta vecesms probable morir a causa de un

  • accidente terrestre que de unoareo. Claro que la marca que dejanen nuestra mente las noticias decada uno de ellos es bien distinta.Las grandes catstrofes, comoterremotos, tsunamis, pandemias yactos terroristas captan fcilmentenuestra atencin. Y la emocin quelos acompaa los hace parecer mscomunes de lo que en rigor son.

    Mientras en los EstadosUnidos mueren cerca de 38.000personas por ao en accidentes deauto, la probabilidad de perecer enuno de avin es de menos de 1 en 10millones. Pero inmediatamentedespus del 11 de septiembre de

  • 2001 mucha gente dej de viajar enavin. De hecho, 1,4 millones depersonas en el mundo alteraron susplanes de viaje. Y una gran cantidadopt por hacerlo por tierra, cuandoen realidad es ms riesgoso. Por esecambio, se estima que slo en lostres meses posteriores al ataque alas Torres Gemelas fallecieron1.000 personas ms que lo comnen accidentes de trnsito.

    Ms all de este efecto dedistorsin que genera la enormevisibilidad de algunos riesgos,tambin ocurre a veces que otrosfactores, como la ansiedad porutilizar la informacin velozmente,

  • entorpezcan el camino de nuestrosclculos.

    Para verlo claramente,analicemos la siguiente situacin.Se estima que en la Argentina hayalrededor de 120.000 personasinfectadas con VIH, lo querepresenta tres de cada milpersonas, aproximadamente.

    De acuerdo con los estndaresde la metodologa ms habitual, decada mil tests positivos, 15 sonfalsos positivos (98,5% soncorrectos). Y de cada mil negativos,3 son falsos negativos (99,7% soncorrectos).

    Toda la poblacin es sometida

  • al examen. El tuyo sale positivo.Viendo el desempeo de los tests,penss que tens 98,5% deprobabilidad de estar infectado conVIH y te desespers.

    Ahora bien, eso es lo que pasasi nos quedamos en la superficie dela informacin. Pensemos un pocoms en profundidad lo que estocurriendo. Entre los 40 millonesde ciudadanos, hay 120.000seropositivos y 39.880.000seronegativos. De los primeros,habr tres de cada mil queobtendrn un falso negativo, esdecir, solamente 360 individuos,mientras que 119.640 recibirn

  • verdaderos positivos. De lossegundos, habr quince de cada milque sern falsos positivos, es decir598.200 personas, y 39.281.800verdaderos negativos.

    Cuando el laboratorio miratodos los negativos, se encuentracon que tiene un total de39.282.160. De stos slo 360 sonfalsos negativos. Es decir que aquelque obtuvo negativo est muyseguro, ya que la chance de falsonegativo es de slo cuatro en unmilln. Pero para los positivos esdistinto. Hay un total de 717.840casos, con 119.640 verdaderos y598.200 falsos. Es decir que

  • solamente el 16,7% del total estrealmente infectado. Es por estetipo de razonamientos que se exigeun segundo test.

    Claro que en la vida real stasno sern las proporciones ya que nose hacen test los 40 millones sinouna cantidad mucho menor. Peroaun as, antes de preocuparte enexceso, es mejor hacerte unsegundo test.

    Yendo ms all de losresultados de supuestos anlisis desangre, lo que es recomendable esque no des por sentada lainformacin con la que conts sloporque creas entenderla

  • perfectamente. Todo en esta vidatiene segundas lecturas, y el sentidocomn puede hacerte tomardecisiones basadas en datos que tumente procesa automticamente yubica en cajas que, muchas veces,no son las que corresponden. Loque s corresponde es que antes detener relaciones hagas el esfuerzode abrir esa caja de preservativosque est ah noms, en la mesita deluz.

  • 1.5. Trucos de-mentes

    Comparacionesmentales ydecisiones

    complicadas

    La filosofa budista suele decirque una de las causas de lainfelicidad es nuestra tendencia acomparar y compararnos. Con losdems, con lo que podra ser ohaber sido, con lo que fuimos.Evolutivamente estamos

  • preparados para hacer esos anlisis.Sin embargo, realizarlos obsesiva ypermanentemente puede generaruna sensacin de insatisfaccin casicontinua. Y los problemas no seterminan ah. Parece que recurrir aesa prctica ni siquiera garantizaresultados en el mundo menosespiritual y ms material.

    Comparar alternativas puedeparecer una manera muy rigurosade tomar nuestras decisiones, muysuperior a elegir sin meditar.Nuestro cerebro est preparadopara comparar y optar rpidamenteen temas que hacen a nuestrasupervivencia como especie. Sin

  • embargo, cuando intentamosutilizar este mecanismo para losproblemas cotidianos de nuestravida actual, parece fallar.

    Ests buscando trabajo y tedan a elegir entre dos alternativas.En la primera vas a ganar 6.000pesos por mes en el primer ao,5.000 en el segundo y 4.000 en eltercero. En la segunda, la oferta esde 3.000 pesos en el primero, 4.000en el segundo y 5.000 en el tercero.Por cul te inclins?

    La suma de lo que ganaras enlos 36 meses en el primer caso es de180.000 pesos; en el segundo,144.000. Es una diferencia

  • significativa, que equivale a 1.000pesos ms cada mes de los tres aosque permanezcas en tu empleo. Sinembargo, la mayora de la genteopta por la segunda alternativa:prefiere salarios crecientes adecrecientes, independientementede si la suma total es menor.

    En realidad la decisin estmuy relacionada con nuestratendencia a comparar los eventosactuales con el pasado. Y dada estapropensin, es sencillo ver por qucaemos en el truco de las ofertasque se nos presentan como rebajas:el tpico cartel de Antes con unprecio tachado y el Ahora con el

  • nuevo.Si cres que tu inteligencia te

    hace inmune a estos efectos, podsprobar con un simple ejercicio.Abrs el diario y ves que una casa deelectrodomsticos vende la nuevaPlaystation, que normalmentecuesta 4.000 pesos, a 3.200.Corrs a comprarla?

    Ahora imaginate otrasituacin: hojeando el peridicoencontrs que la consola de juegosest en oferta por 2.000 pesos. Salsrpido en busca de ella, pero alllegar el vendedor te explica quehaba un cupo limitado a ese precio,pero que de todas maneras pods

  • comprarla a 3.000. Lo hacs?Probablemente no. Sin embargo,este precio es aun menor que el delejemplo anterior.

    Naturalmente, no slocomparamos con el pasado sinotambin entre alternativaspresentes, y en esos casos tampocoestamos exentos de caer en trampaso engaarnos con las pequeasdecisiones cotidianas. Supongamosque, aunque estime vender pocasbotellas al ao, el dueo de unrestaurante decide incluir en lacarta de vinos algunos con preciosexorbitantes. Por qu ocupar lugaren las cavas si esos vinos tan caros

  • se venden muy de vez en cuando?La explicacin es sencilla y nosolamente est relacionada con larentabilidad de esas botellas. Hayun fenmeno conocido comoaversin a los extremos en el cualel aadido de alternativas quetengan caractersticas distintivasmuy marcadas (sean positivas onegativas) acrecienta la posibilidadde que la eleccin caiga sobreopciones de caractersticasintermedias.

    En el ejemplo de la carta devinos sera as. Si hay un vino de lacasa a 10 pesos, otro intermedio a20 y un tercero a 30, al dueo del

  • restaurante le convendra agregaren la carta un cuarto de 70 pesos.De esa forma, lograra vender msvinos de 30 pesos. Es sencillo perono falla. La gente siente aversinpor los extremos y tiende a elegirlos del medio. Y, como vers, enesto tampoco somos razonables. Siprefera el vino de 20 pesos al de30, por qu agregar el de 70 pesosaltera mi decisin? Es como ir acenar y preferir el flan al heladopara el postre, hasta que sabs quetambin hay ensalada de frutas yentonces te inclins por el helado...

    Las alternativas marean.Agregar opciones puede hacerte

  • cambiar de opinin y no slo porevitar los extremos. Imaginate quete dan a elegir entre dos personaspara salir en una cita. Ambas sonmuy atractivas, slo que una lo esde una manera tpicamente rubia yla otra clsicamente morocha. Noconozco tus gustos, as que eleg laque ms te plazca.

    Ahora te cambio el escenario:de la belleza que elegiste, ya searubia o morocha, ahora hay dosejemplares parecidos. Y sigueestando la otra. En este nuevo casocon tres alternativas, dnde recaetu decisin? Varios estudiosmuestran que agregar opciones

  • similares reduce la apetencia porlos pertenecientes a ese grupo,mientras que incorporar opcionesinferiores a una alternativa mejoranla percepcin de esta ltima.

    Para decidir tambin solemoscomparar con lo que ya tenemos, yeso genera interesantes anomalas.Algunas veces he recibido de regalobuenas botellas de whisky o vino,de un precio que jams pagara.Curiosamente, tampoco venderalas que tengo. Es decir que situviera que comprarlas las valoroen menos del precio que tienen,pero a la hora de deshacerme deellas es exactamente al revs.

  • Este efecto fue probado en unexperimento en la Universidad deCornell. Se dividi aleatoriamenteuna clase en dos, y a una mitad se leregalaron tazas con el logo de launiversidad. Luego se arm unasubasta para recaudar fondos en lacual los que tenan tazas debanvendrselas a los otros. A pesar deque no haba nada que losdistinguiera, mientras loscompradores no aceptaban pagarms de 2,75 dlares por unejemplar, los vendedores no sedesprendan del objeto por menosde 5,25 dlares. Poseer algo te hacevalorarlo ms.

  • Como pods ver, hay infinidadde ejemplos que muestran que, a lahora de tomar decisiones, somosmenos racionales de lo que la teoraeconmica pretende y mucho msmanipulables. Es posible que elcontexto en el que las alternativasse nos plantean modifique nuestraspreferencias, y eso es algo que noslo los expertos en marketingdeberan saber sino vos tambin,para evitar caer en las trampas.

  • 1.6. Sesgo desupervivencia

    xitos, fracasos yfalsos referentes

    A los humanos nos gustaencontrar principios por los queguiarnos. Nos dan tranquilidad yreducen la ansiedad, algo que esparticularmente importante en lostiempos que corren.

    Quizs ste sea el motivo porel que los libros de autoayuda detoda ndole estn en auge. Gran

  • parte de ellos contiene tcnicasorientadas a elevar el bienestarpersonal del lector. Suelen sugerirteque el mundo ha multiplicado lareceta de las comidas rpidas atodos los mbitos y que ello es unafuente sustancial de angustia. Terecomiendan, entonces, queintentes abstraerte de la velocidaddel mundo que te rodea y quevuelvas a los ritmos naturales ylentos. Pero lo hacen en cientocincuenta pginas de rpida y fcillectura! Es decir te prometen unafelicidad instantnea,contradiciendo su propiodiagnstico y constituyendo, as,

  • una gran paradoja.Algunos de esos libros

    intentan explicarte cmo hacertemillonario o ser creativo o tenerms xito con el sexo opuesto. Ypara extraer sus frmulas mgicasacostumbran analizar la vida depersonas que son referentes en cadauna de esas reas.

    Suelo desconfiar de estostextos por dos motivos principales:primero, porque si lograr esoscometidos fuera tan simple comoseguir una receta, todos lo habranhecho; y segundo, porque deducirlecciones generales a partir de unospocos casos concretos es un mtodo

  • extremadamente cuestionable.Si toms a un grupo de

    inventores exitosos vers que todoshan sido muy persistentes en susesfuerzos. Ese descubrimiento tepuede llevar a creer que sa es laclave. Pero muchos de los quesiguen fracasando y pasaninadvertidos tambin soninsistentes. Y al comprometer susahorros y su tiempo en la bsqueda,esa tenacidad puede llevarlos a laruina personal y de su familia.

    Muchsimas veces en la vida lamuestra de la que se dispone lacomponen slo aquellos que hantenido xito, ya que los dems

  • desaparecieron en el camino. Y ellolleva a extraer conclusionesequivocadas. Este efecto ilusoriotiene un nombre: sesgo desupervivencia.

    Imaginate la siguientesituacin en un casino donde hay5.000 personas jugando. Separamos2.048 y les ponemos unas vinchascon antenas metlicas en la cabeza,tras lo cual las llevamos a jugarruleta a una sala aparte. Suconsigna: tienen que elegir entrerojo o negro (el cero est excluidoen esa ruleta). Cada uno tiene 50%de probabilidades de acertar y elque no lo hace debe irse. Despus

  • de una primera tanda completaquedarn 1.024 que participan deuna nueva ronda, tras la cualpermanecen 512 y assucesivamente. Tras diez vueltasquedarn solamente dos individuoscon antenas que son enviados denuevo al saln principal.

    Si ests en el casino ypregunts quines son losindividuos con antenas, te dirn queson dos que han acertado diez bolasconsecutivas el color que iba a salir.Algunos hasta dicen que lo quellevan en la cabeza les permitepercibir unas vibraciones que lesindican qu color habr de salir.

  • Seguiras con tu apuesta la de ellosen el prximo tiro? Y si nosupieras el resto del experimento?Como vers, muchas veces noactuamos de acuerdo con lasprobabilidades reales sino con lapercepcin social de los eventos.

    A pesar de que intentemos noverlo, este sesgo de supervivenciasuele ser un problema muypresente cuando un inversor quiereelegir a alguien para que le manejesus ahorros. Cambi acertar el colorde la bola por ganar dinero y tedars cuenta del porqu. Losadministradores de fondos quesiguen en el negocio son aquellos a

  • los que les ha ido bien, pero no estan sencillo determinar si sus fojasde servicios no estn en granmedida determinadas por el azar.

    Se puede ir un poquito msall con estos razonamientos, talcomo lo muestra el siguienteejemplo adaptado del libro deNassim Taleb Engaados por elazar.

    Un economista al que noconocs pero que se presenta comoun experto de la Bolsa te mandauna carta el 2 de enero indicandoque el mercado va a subir ese mes yse cumple el pronstico. Recibsotra el 1 de febrero diciendo que el

  • mercado bajar y de nuevo ocurre.Si las cartas exitosas se repiten porvarios meses, llega un momento enel que le confis todos tus ahorros.Pero unos meses ms tarde viene elfracaso y el economista te dice quehas perdido todo tu dinero. Cuandose lo mencions a tu vecino ste tecuenta que recuerda haber recibidodos de esas cartas pero que elpronstico fall al segundo mes yno recibi ms misivas.

    Lo que ocurri puede habersido muy parecido a lo del casino,slo que alguien aprovech paraesquilmarte y quedarse con tusahorros, como en la pelcula Nueve

  • reinas. El tramposo sac 10.000nombres de la gua telefnica, enviuna carta alcista a la mitad de lamuestra, y una bajista a la otramitad. Al mes siguiente, seleccionlas personas para las cuales elpronstico se haba cumplido(5.000 personas) y repiti elprocedimiento: a una mitad le dijoque la Bolsa subira y a la otra quebajara. Al prximo mes hizo lomismo con los que quedaron y assucesivamente hasta que el nmerose redujo a un grupo de 500personas, que se transformaron ensus vctimas.

    El ejemplo ms divertido de

  • esta trampa de la mente es delpropio Taleb quien escribi: Sicolocamos un nmero infinito demonos frente a una mquina deescribir, existe la certidumbre deque uno de ellos escriba unaversin exacta de la Ilada. Pero,una vez sucedido esto, apostaraalguien a que este mono escribirtambin la Odisea?

  • 1.7. Un ultimtum

    No es posible sertan racional

    En economa experimentalexiste un juego muy interesantedesarrollado por primera vez en1982 y utilizado luegoexhaustivamente a los efectos deanalizar el comportamientohumano. Se llama Ultimtum yfunciona de la siguiente manera.Hay dos partes, y a una se le da unmonto de dinero que la otra conoce.

  • El primero debe decidir cmorepartirlo, mientras el segundo slopuede elegir entre aceptar orechazar la propuesta. Si la acepta,se reparte de acuerdo con loestipulado; si la rechaza, ambos sevan con las manos vacas.

    La teora es bien clara encuanto a su prediccin de cmodebe desarrollarse el Ultimtum.Para el segundo jugador espreferible aceptar cualquierpropuesta antes que irse con lasmanos vacas. Sabiendo esto, elprimer participante propone unreparto altamente desigual, dndoleal otro lo mnimo posible. De esta

  • manera, si estuviramos hablandode 100 pesos, el resultado deberaser de una distribucin de 99 y 1pesos.

    La universidad en la que hicemis cursos de doctorado, UniversityCollege London, gast dos millonesde libras esterlinas, cerca de seismillones de pesos, para poderexperimentar con ste y muchosotros juegos. Donde quiera que esteexperimento se haga, los resultadosque arroja son muy parecidos. Enprimer lugar, ms de la mitad de laspersonas estn dispuestas a ofrecerun reparto perfectamenteequitativo. Y en segundo, ofertas

  • menores a 20% para el jugador dostienen probabilidades significativasde ser rechazadas.

    Una pregunta vlida es: seraigual la decisin si hubiera cienmillones de dlares para repartir,con una mnima porcin de unmilln? Probablemente no, aunqueel costo del experimento sera tanelevado que sera imposible llevarloa cabo. Lo mejor que se les haocurrido a los investigadores esllevar sus dlares a lugares dondevalen mucho ms, como pases muypobres con monedas muy dbiles. Yaun as se ha observado que ofertasdesiguales para el jugador dos pero

  • tan altas que equivalen para l acasi al salario promedio de mediomes han sido rechazadas.

    Existen diferentesexplicaciones para los resultadosque se observan en la realidad. Porejemplo, podra ocurrir que elprimer jugador tema que unapropuesta extrema sea rechazada yopte por ser ms generoso en suoferta. Ello implica prever que elotro no ser todo lo racional que lateora requiere.

    Otra alternativa es que losparticipantes no estn motivadosslo por el dinero, sino que valorentambin la justicia distributiva. As,

  • por ejemplo, el jugador uno es msfeliz llevndose menos a casaporque le hace bien ver que el otrotambin est mejor.

    Algunos investigadoressostienen que los jugadores quehacen la propuesta pueden temerun impacto negativo en sureputacin. Se basan en laobservacin de que en algunassociedades pequeas se tiende ahacer ofertas ms equitativas queen otras de mayor tamao. Sinembargo, esto es contradicho porversiones del juego donde semantiene el anonimato de cadaparte y aun as la distribucin ms

  • extrema es rechazada en el 80% delos casos.

    La capacidad de ponerse en ellugar del otro resulta un elementosignificativo para ver qu ocurre. Sise modifica el juego y se les pide aambos jugadores que expliciten quofreceran y qu rechazaran sinsaber qu jugador les tocar ser, elresultado tiende a ser msigualitario. Y lo mismo ocurrecuando en la versin original aljugador uno se le da oxitocina paraque se sienta ms emptico con elotro: se vuelve mucho msgeneroso.

    Como descubrieron un

  • psiquiatra alemn y unneurocientfico britnico, lahormona oxitocina hace queseamos ms empticos y podamosidentificarnos ms con el prjimo.El ser humano es social pornaturaleza, y para ello poseedisparadores qumicos especficosque ayudan a mantener el equilibriocolectivo. Sin ellos, la convivenciase complica. Ya lo sospechabaPlatn en Las leyes al sostener quese deba evitar tanto la pobrezacomo la riqueza extremas, ya quelas desigualdades generan odio.Quizs debamos cuestionarnos siestamos adecuadamente preparados

  • para lo que las megalpolis de hoyimplican en trminos de anonimatoy aislamiento individual.

    Ms all de todas estasdisquisiciones, el juego delUltimtum se suele utilizar comoun ejemplo adicional de algunasprecauciones a tener en cuenta a lahora de aplicar la ms pura teoraeconmica a predicciones delmundo real.

    Exista un indgena al que,cuando se le ofreca una moneda deun peso y otra de cincuentacentavos, optaba sistemticamentepor quedarse con esta ltima. Unavez que se pudo constatar que el

  • individuo comprendaperfectamente el valor de cada unade las monedas, su caso comenz allamar cada vez ms la atencin.Estaba claro que se trataba de unhombre extremadamente irracional.

    La gente, particularmente loseconomistas, viajaba de diversoslados para verificar en personasemejante fenmeno. As fueronpasando muchos curiosos einvestigadores. Hasta que un dalleg hasta la reserva india unpsiclogo y, despus de hacer el testcon idntico resultado, le preguntal hombre si comprenda que estabasiendo irracional, dado que la

  • moneda que rechazaba vala eldoble que la que elega. Pero elindio lo contradijo rpidamente: Sitomara la moneda de un peso novendra tanta gente a ofrecermegratis sus monedas de cincuentacentavos.

    Cuando enfoca los problemas,la economa muchas veces lo hacepensando en hombres fros yracionales. Pero aun cuando stossean calculadores, tener una visinmuy sesgada o que nos haga perderde vista otros factores adicionalespuede hacernos cometer severoserrores de apreciacin.

    Quizs por eso Keynes, uno de

  • los economistas ms grandes,escribi que El estudio de laeconoma parece no requerirningn don especializado de unorden excepcionalmente superior.No es una disciplinaverdaderamente fcil comparadacon las ramas superiores de lafilosofa y la ciencia pura? Sinembargo, los economistas, no yabuenos, sino slo competentes, sonautnticos mirlos blancos. Unamateria fcil, en la que pocosdestacan! Esta paradoja quizspuede explicarse por el hecho deque el gran economista debe poseeruna rara combinacin de dotes.

  • Tiene que llegar a mucho endiversas direcciones, y debecombinar facultades naturales queno siempre se encuentran reunidasen un mismo individuo. Debe sermatemtico, historiador, estadista yfilsofo (en cierto grado). Debecomprender los smbolos y hablarcon palabras corrientes. Debecontemplar lo particular entrminos de lo general y tocar loabstracto y lo concreto con elmismo vuelo del pensamiento.Debe estudiar el presente a la luzdel pasado y con vista al futuro.Ninguna parte de la naturaleza delhombre y de sus instituciones debe

  • quedar por completo fuera de suconsideracin. Debe sersimultneamente desinteresado yutilitario; tan fuera de la realidad ytan incorruptible como un artista, ysin embargo, en algunas ocasiones,tan cerca de la tierra como unpoltico.

    Se trata sin dudas de unestndar demasiado alto,prcticamente inalcanzable, peroqu son las metas sino eso?Lamentablemente esta profesinmuchas veces suele olvidar susverdaderos objetivos.

  • Lecturas adicionales

    Si te interesan los temas deesta seccin, te recomiendo algunaslecturas complementarias.

    En primer lugar, dosexcelentes libros del mismo autor.Ellos son:

    Taleb, N.: El cisne negro,Barcelona, Paids, 2008.

    Taleb, N.: Existe la suerte?,Barcelona, Paids, 2009.

    Para algo un poco menosfilosfico y ms especfico acerca de

  • comportamientos humanos queresultan extraos para la cienciaeconmica tradicional, pods leer:

    Motterlini, M.: Economaemocional, Barcelona, Paids,2008.

    El concepto de cajas mentalesfue postulado por vez primera porRichard H. Thaler. Su nombre eningls es mental accounting omental accounts. Si bien sutraduccin correcta sera cuentaso contabilidad mental, me haparecido ms apropiado traducirlocomo cajas mentales. Si quersprofundizar sobre ellas, pods

  • consultar algunos de los trabajos deeste autor, entre ellos:

    Thaler, R.: Towards a positivetheory of consumer choice,Journal of Economic Behaviorand Organization, 1980, 1, 39-60.

    Thaler, R.: Anomalies: Savings,fungibility and mentalaccounts, Journal ofEconomic Perspectives, 1990,vol. 4, N 1.

    Para ms anomalas, tesugiero a Amos Tversky o EdgarSchafir. Por ejemplo:

    Schafir, E. y Tversky, A.: Thinking

  • through uncertainty:nonconsequentia! reasoningand choice, CognitivePsychology, 1992, 24, 449-474.

    Simonson, I., y Tversky, A.: Choicein context: tradeoff contrastand extremeness aversion,Journal of MarketingResearch, 1992, 29, 281-295.

    Bertrand, M., Parlan, D.,Mullainathan, S., Schafir E. yZinman, J.: Whats psychologyworth? A field experiment inthe consumer credit market,NBER Working Papers, 2005.

    En YouTube encontrars lascharlas TED de Dan Gilbert, conuna explicacin amena sobre

  • distorsiones de nuestra percepcin.

  • DESARROLLO

  • El desarrollo es la cuestinfundamental de la que se

    debe ocupar la cienciaeconmica. Otros temas

    pueden sercircunstancialmente la

    moda, requerirherramientas ms

    sofisticadas y hasta ser msdivertidos o exticos. Pero

    la economa pierde su raznde ser si no puede ayudar amejorar la calidad de vida y

  • el bienestar de la gente.Debemos ser capaces de

    comprender cmo hatenido lugar el desarrollo enun nmero significativo depases para poder extender

    las mejoras al resto delmundo.

  • 2.1. La historieta deldesarrollo

    De dnde venimos;adnde vamos

    El desarrollo es el aumento delas oportunidades y la capacidad delas personas para que puedan llevarla vida que desean. Implica unaexpansin de la educacin, mssalud, creciente seguridad en elfuturo, mayor libertad y elevacindel poder adquisitivo. Resulta obvioque todas estas mejoras en el

  • estndar de vida requieren recursos.Y para comprender la cantidad

    de recursos que genera un pas paralograr estos objetivos loseconomistas usamos el ingresopromedio por habitante. Porejemplo, en 2009, el PBI promediopor habitante en Madagascar fue de414 dlares, en la Argentina de7.725 dlares, y en los EstadosUnidos de 45.934 dlares.Naturalmente otra cuestinimportante es ver cmo sedistribuyen esos ingresos entre lapoblacin, porque los promediospueden esconder desigualdadesnotorias. Una persona con un pie en

  • el horno y otro en el freezer enpromedio est bien, pero la puedeestar pasando muy mal. De todasformas, es una buena manera deempezar.

    Pero antes de preguntarnoscmo se elevan el ingreso porhabitante y la calidad de vida, valela pena pensar qu tan reciente es elfenmeno del desarrollo econmicoen el mundo.

    Habrs estudiado en elsecundario acerca de aquellosprimeros Estados, como Sumeria,Acadia, Asiria o la famosa Babiloniacon sus jardines colgantes. No hacefalta que recuerdes datos ni corras a

  • buscar tus viejos libros de historia;quizs alcance con que recuerdes lahistorieta de Nippur de Lagash, queera sumerio.

    De la Grecia antigua todavatenemos escritos y subsisten susruinas, y hay pelculas quereconstruyen la poca. Lo mismoocurre con Roma: hay unaminiserie de HBO, documentales deHistory Channel, la propiaGladiador o la historieta de Astrix.

    Cuanto ms nos acerquemosen el tiempo, ms material tendrsdisponible para hacerte una idea decmo eran los estilos de vida en elpasado. De la Edad Media hay an

  • castillos y catedrales y numerosaspelculas de caballeros con susarmaduras. Y de la Edad Moderna,que se inicia en tiempos de lainvencin de la imprenta, la cadade Constantinopla y eldescubrimiento de Amrica hay anms. Pues esta poca finaliz enmedio de la Revolucin Francesa, laIndependencia de los EstadosUnidos o la Revolucin Industrial,cuando faltaban tan slo cincuentaaos para que naciera la fotografa.

    Ahora intentemos imaginar elhogar y la mesa de una familiatpica o promedio en Babilonia, ElCairo, Atenas, Roma, Pars y

  • Londres a travs del tiempo. Desdeel Egipto de Cleopatra hasta elLondres de Dickens o el Pars deVctor Hugo. Cunto cres que hacambiado su estndar de vida en eltranscurso de esos ms de tres milquinientos aos? Mucho, nada,poco? La verdad es que se hamantenido constante durante todoese tiempo; y en los ltimos dossiglos se ha multiplicado por diez.Como ves, ha habido ms cambiosen los ltimos doscientos aos queen los tres mil quinientosanteriores.

    El desarrollo como fenmenoamplio est inequvocamente

  • relacionado con la RevolucinIndustrial. Antes, el mundofuncionaba de una maneradiferente, regido por la lgicamalthusiana. Esta palabra derivadel economista britnico ThomasMalthus, quien sostena que laTierra posea una capacidadlimitada de produccin para atendera una poblacin en crecimientopermanente. Mientras laproduccin progresaba de maneraaritmtica (2, 4, 6, 8, 10, 12) lacantidad de gente lo haca en formageomtrica (2, 4, 8, 16, 32, 64).

    Como ves, la diferencia escrucial. Mientras en las dos

  • primeras etapas los niveles sonparecidos, a la larga se genera unabrecha cada vez mayor. Estarelacin generaba restriccionesevidentes para obtener un progresocontinuo: tarde o temprano elincremento poblacional llevara alagotamiento de recursos yterminara regulndose porhambrunas, enfermedades oguerras.

    En aquel mundoprimordialmente rural, cada avancetecnolgico, como la incorporacinde arados y caballos en lassiembras, mejoraba la produccin.Sin embargo, la poblacin tambin

  • creca. Ms alimentos implicabanmejor salud, ms hijos y mayoresperanza de vida. La produccin seincrementaba proporcionalmente alaumento de gente y as el ingresopor habitante se mantenaconstante.

    Lo que alter de maneraradical la lgica del mundo fue latecnificacin que vino con laRevolucin Industrial. Las nuevasmaquinarias fueron generandomayor produccin. Pero tambinrequeran mayores conocimientospara ser utilizadas. Esto hizo que, amedida que el nuevo contexto sehaca la norma, los padres deban

  • prestar ms atencin a la formacinde sus hijos para que pudierantener las herramientas necesariasen los nuevos tiempos. Yempezaron a tener menos hijos

    Las nuevas fuentes de trabajoatrajeron flujos migratorios hacialas ciudades. La poblacin urbanafue creciendo, mientras que se ibaproduciendo una mayorespecializacin laboral. En mbitosdonde vive poca gente, uno debehacer muchas tareas distintas. Enuna gran poblacin, en cambio, seaprovecha lo que uno mejor hace yse cobra un sueldo por ello. Y luegose intercambia lo obtenido por lo

  • que se necesita en los mercadosurbanos.

    Decamos que las mujerestenan menos hijos. Con el correrdel tiempo tambin empezaron aacceder al mercado laboral y luego aeducarse. El resultado fue que habams gente trabajando (y que cadauno produca ms) para mantener aun total de habitantes que creca aun ritmo menor al de antao.Entonces aument en formanotoria el ingreso promedio porhabitante. Sencillo: la ecuacinms torta y menos gente traecomo resultado porciones msgrandes.

  • Est claro que esto no haocurrido en todo el mundo, pero sen un nmero importante de pasesque se han ido separando del resto.Y cada vez que un pas consiguesubirse a la autopista del desarrollo,se suma a ese conjunto detriunfadores. Son las nacionesdesarrolladas. En cambio, a losque estn atascados en colectora selos llama, un pococondescendientemente, pases envas de desarrollo, como si se lesestuviera dando una palmadita en laespalda y dicindoles: Dale, pibe,vos tambin pods. Pero a algunosla espera y el retraso se les estn

  • haciendo increblemente largos.A los efectos de lograr una

    mayor equidad global es precisosubir a todos los pases al carro deldesarrollo. Hoy, el 60% de ladesigualdad entre personas en elplaneta est explicada por el pas enque uno nace. Es decir que sitomara a dos personas al azar en elmundo me bastara conocer suciudadana para poder predecircorrectamente ms de la mitad desus diferencias de poderadquisitivo.

    Si queremos un mundo msjusto, es preciso que la desigualdadse acerque cada vez ms a cero. Para

  • ello se debe abrazar el cambiotecnolgico y es necesario que lagente tenga mejor salud, mseducacin y que exista mayorequidad entre gneros. Tambin serequiere una poltica reproductivams consciente y responsable.

    Ahora bien, qu hace faltapara llegar a ese objetivo? Y sobretodo, cunto falta?

  • 2.2. Una cuestin deritmo

    El crecimientosostenido y la magia

    del interscompuesto

    Resulta claro que el desarrollono es un proceso global. Una de lasgrandes lecciones que deja elanlisis de los pases que lolograron es que se trata de unatarea que requiere constancia. De

  • poco sirve sucumbir a euforias ydepresiones. Lo importante eslograr incrementos sostenidos delingreso por habitante.

    Si queremos ir de BuenosAires a Bariloche en auto, lavelocidad promedio a la quepodemos viajar depende del modeloque manejamos, del dinero paracombustible con que contamos, delas aptitudes y el estado fsico delconductor, de las normas detrnsito y de las condiciones delcamino, entre otras cosas. Si vamosdemasiado rpido, se corre el riesgode no llegar. Puede ocurrir que elcamino nos juegue una mala pasada

  • o que el conductor cometa un errory tengamos un accidente. Osimplemente que nuestro dinero nonos alcance para pagar el mayorconsumo de combustible queimplica la mayor velocidad. Oincluso que la temperatura delmotor se eleve por ir demasiadorpido y el auto no aguante y serompa.

    Algo muy similar ocurre con elritmo al que puede crecer un pas.Depende, entre otras cosas, de lascaractersticas generales de laeconoma, de los recursosdisponibles, de la calidad de losdirigentes y del contexto econmico

  • global. Si se crece demasiadorpido, se corre el riesgo decomprometer el desarrollosostenible, como el auto que puedetener un accidente. Y as como elautomvil tiene un medidor detemperatura, en una economanormal ese termmetro es lainflacin.

    Cuntas veces escuchaste aconsagradas estrellas afirmar que lodifcil no es llegar sino mantenerse?Algo similar sucede ac. Es muchoms importante la capacidad decrecer continuamente sininterrupciones que hacerlo muyrpido pero acumulando

  • inconsistencias que despusgeneran problemas y,eventualmente, crisis y cadas en elingreso. Se trata de hacer aldesarrollo ms sustentable.

    Los argentinos no tieneninconveniente alguno en entendereste principio. Durante laconvertibilidad el ingreso porhabitante se increment en un 24%.Sin embargo, su insostenibilidadmostr su peor cara en 2002,cuando experimentamos una cadade 12% del ingreso per cpita.

    Estas altas y bajas sonextremadamente nocivas. Dentrodel grupo de los veinticuatro pases

  • ms avanzados del mundo,cuntos crees que alcanzaron sumximo ingreso por habitante antesde 2000? La respuesta es ninguno,y el motivo es claro: la tendencia deeste grupo de naciones es a creceren forma continua.

    En el caso de Latinoamrica,15 de los 25 pases que la componen(un 60%) alcanzaron su mximoingreso por habitante antes de quecerrara el milenio. Y en frica, lohicieron 25 de las 34 naciones delcontinente (un 73%). El motivotambin es claro: en los pases nodesarrollados el crecimiento esdiscontinuo y algunos sufrieron

  • cadas en su ingreso en lo que va deeste siglo.

    Alrededor de 1820 el ingresopor habitante de Europa occidentalera 2,9 veces el de frica. Hoy, esacifra alcanza a 13,1 veces. Lollamativo es que la diferencia decrecimiento anual del ingreso porhabitante entre ambas regiones enestos casi ciento noventa aos esmnima: Mientras frica creci al0,7% por ao, Europa lo hizo aapenas el 1,6%!

    Ac se puede ver con claridadla magia del inters compuesto o elcrecimiento exponencial. Es unprincipio muy sencillo: el

  • crecimiento es, por decirlo dealguna manera, acumulativo. Sitens 100 pesos y los inverts al20% anual, al cabo de doce meseshabrs ganado 20 pesos. Perodespus de dos aos te habrshecho con 44 pesos y no con 40. Esque los intereses nuevos nodependen slo de lo que depositasteoriginalmente sino de lo que fuisteacumulando a travs del tiempo conintereses anteriores. Si lo dejarasdiez aos no tendras solamente tus100 pesos originales ms 200 pordiez aos de intereses. En lugar deesos 300 el inters compuesto tehara obtener 619 pesos.

  • Y cuanto ms extenso sea eltiempo que consideres mayor es lapotencia de este simple mecanismo.Fijate, si no, en el siguienteejemplo. De acuerdo con elcalendario judo, Jehov cre aAdn y Eva hace 5.771 aos. Sidesde esa poca la humanidadhubiera crecido a un ritmoconstante de 1% anual, hoy elmundo tendra 2 x 1.015770habitantes. Ello equivale a17.365.000.000.000.000.000.000.000personas en lugar de los casi7.000.000.000 actuales. Sinembargo, para que en estos 5.771aos la primera pareja de humanos

  • hubiera generado el nmero actualde ciudadanos la tasa decrecimiento anual tendra quehaber sido de tan slo 0,38%. Aprimera vista no parece tanta ladiferencia entre 1% y 0,38%, no?

    Como vers, a la hora delprogreso econmico, la clave pasams por la continuidad delcrecimiento del ingreso porhabitante que por su velocidad.Lamentablemente, solemos serpresas de frases llamativas perofuera de foco. Aquella discusin queplanteaba si era necesario o noenfriar la economa debera serreemplazada por una que apunte a

  • cmo hacer ms sustentable eldesarrollo. Basta con uncrecimiento sostenido para que lasituacin de cada generacin seasustancialmente mejor que la de laanterior. Y sa es la verdadera basedel progreso.

    En los ltimos veinte aos,gracias a un crecimiento promediode 3,5% anual, Chile ha logradoduplicar su PBI per cpita. Y alritmo de su crecimiento en lo queva del siglo XXI, China estconsiguiendo duplicar el ingreso desus habitantes cada siete aos ymedio! En los ltimos veinte aos,China multiplic por seis veces su

  • PBI por habitante. Dicho de otramanera, las generaciones actualesen Chile y China son dos y seisveces ms ricas (respectivamente)que las de hace veinte aos.

    El caso argentino esdramticamente distinto. Nuestropas ha estado lejos de alcanzar uncrecimiento continuo, aunque losaos ms recientes, desde 2003hasta 2008, constituyan unaexcepcin. De hecho, en los ltimostreinta y cinco aos hemos padecidouna elevada volatilidad en laevolucin de nuestro PBI, algo queva a contramano de las tendenciasde mayor estabilidad que han

  • mostrado el mundo y la regin. Sihablamos de ritmo, hace tiempoque a nuestro pas se le rompi elmetrnomo. Y no hace falta tenerodo absoluto para darse cuenta.

  • 2.3. Los campeonesmundiales de la

    volatilidad

    De crisis en crisis

    Recuerdo haber ido en autohacia fines de 2009 con Metro ymedio, el programa de SebastinWainraich y Julieta Pink, sonandoen la radio. Y se produjo el siguienteintercambio:

    Sebastin: Son las siete y cinco de latarde y estamos en Metro y medio.

  • Estamos con Julieta, como todas lastardes, y nuestra consigna de hoyes...Julieta: Lugar y momento de unadecisin trascendente para la vidade los oyentes.Sebastin: Perfecto. Entonces,ustedes nos tienen que llamar ycontarnos algo que dicidieron queles haya cambiado la vida.Julieta: Llamen y cuenten algorelevante que hayan decidido, ellugar donde ocurri o tomaron esadecisin y qu paso despus.Sebastin: Vayamos al primerllamado. Buenas tardes. Quinhabla?Oyente: Hola. Soy Carlos, deFloresta.Sebastin: Edad, Carlos?Oyente: 43.

  • Sebastin: 43. Perfecto. Contanostu decisin.Oyente: Bueno en la crisis la de2001 yo haba decidido irme avivir afuera yJulieta: Slo los argentinos, cuandohablamos de crisis, tenemos queaclarar a cul nos referimos.Sebastin: Es cierto. Habls de lade 2001, no? Ni la de 2009, ni el95, ni la del 89.Oyente: Jajaja. S, la de 2001.Julieta: Nos remos pero es parallorar...

    Si algo caracteriza a laeconoma argentina es su extremavolatilidad macroeconmica, conrecurrentes ciclos de picos y valles.Desde los 70 nuestro entorno

  • econmico ha sido ocho veces msvoltil que el de Brasil o Chile, ycasi veinte veces ms que el deEstados Unidos o Canad, pornombrar algunos pases de nuestrocontinente. Es decir que la lnea denuestro crecimiento econmicoparece un electrocardiogramadesquiciado y genera el mismoefecto en la salud de muchosargentinos.

    De hecho, son tantas las crisisque hemos vivido y calaron tanhondo en nuestra idiosincrasia quehasta tienen nombre propio en lamemoria colectiva: Rodrigazo,Tablita, Plan Austral, Plan

  • Primavera, hiperinflacin, PlanBonex, Tequila, 2001. Es como loshuracanes a los que se les ponenombre slo cuando son losuficientemente poderosos, ynosotros hemos tenido una crisisimportante cada seis aos.

    Definitivamente en laArgentina se conoce del tema.Quizs sea por ello que los gerentesargentinos son buscados enmomentos en que el mundoatraviesa fases complicadas. Es quecon tanta experiencia sobre el lomoes ms difcil amilanarse oparalizarse.

    Ahora mir estas reglas

  • mnemotcnicas sobre la volatilidadde la economa argentina. No vas adejar de sorprenderte cuando te descuenta de que lo ms estable quetuviste en los ltimos aos es elasadito de los domingos.

    1x3: Desde 1900 en adelantehemos estado uno de cada tres aosen recesin. O sea que,estadsticamente hablando, lasrecesiones son ms frecuentes quelos mundiales, y se juegan siempreac. 4x4: Desde principios del siglo XXsolamente en cuatro oportunidadeshemos podido crecer al menoscuatro aos consecutivos a un ritmomnimo de 4% (el doble del

  • crecimiento poblacional en esetiempo). 25x10: en los ltimos veinticincoaos hemos padecido nada menosque diez recesiones. La cadaacumulada del PBI del perodo hasido del 42%. Esto ltimo implicaque un adulto de 50 aos quecomenz a trabajar a los 25 pas el40% de su vida laboral en recesin.

    Estos abruptos vaivenes,producidos por polticasmacroeconmicas insostenibles,han generado un incremento delingreso por habitante muy magro:solamente el 0,6% anual en losltimos treinta y cinco aos. Sicontinuamos con este desempeo

  • hacia adelante, har falta nadamenos que un siglo para duplicar elestndar de vida actual. Por suertela salud avanz mucho y hayesperanzas de vivir cien aos...triste consuelo.

    Pero las consecuencias de lavolatilidad macroeconmica sobrela sociedad van mucho ms all quela prdida de bienestar que tienelugar con las recesiones.

    Por su parte, la Argentina debeser el nico pas en el que losempresarios declaran su orgullo porno deberles un peso a los bancos.En otros, los crditos se utilizanpara poder crecer mejor y ms

  • rpido.Resulta claro que en un

    contexto tan voltil no se puededesarrollar una verdadera culturadel crdito. Pero tambin el ahorrose altera. Tras haber sufrido varioscolapsos bancarios, los ahorristaseligen depositar a corto plazo ypreferentemente en monedaextranjera. Y muchos buscanrefugio en algn otro lugar que estexento de los vaivenes domsticos yenvan fondos al exterior.

    Si un primo o un cuado tepide pesos prestados paradevolvrtelos en cinco aos, a qutasa le prests? Difcil calcularlo. Le

  • ofrecs contabilizarlo en dlaresporque a vos te deja ms tranquilo.Pero a l no: si todo explota no sabesi podr cumplir con elcompromiso.

    Algo similar ocurre con losbancos. Sin un ambiente mspredecible es imposible que existanlos prstamos en nuestra propiamoneda a largo plazo y a tasasrazonables. Y ya vimos lo que pasen 2001-2002 cuando todo estuvodenominado en dlares o en pesosconvertibles. Entonces terminanbuscando nichos que sean rentablesen forma rpida, con la aplicacinde tasas de inters muy altas para la

  • actividad productiva.Todo esto hace que nuestro

    sistema financiero sea muypequeo si se lo compara con el depases de un nivel de desarrollosimilar al argentino. El crdito alsector privado es apenasequivalente a un 11% de todo lo quese produce en un ao en el pas. Esacifra es un tercio del promediolatinoamericano y casi una sextaparte del promedio asitico. Dehecho, nuestro sistema financieroes el ms pequeo deLatinoamrica. Para que te des unaidea, en Chile es ocho veces msalto que en la Argentina, y en Brasil

  • cuatro. Y en Espaa o los EstadosUnidos ms de quince vecesnuestro registro.

    Pero no se trata slo deconsecuencias financieras. Cuandohay tantos y tan grandes vaivenes esdifcil que se establezca un perfilproductivo claro. Qu convieneproducir? La respuesta vara segnsi el dlar es alto o bajo, si losimpuestos son de una manera uotra, si hay crdito o no, si elconsumo interno est fortalecido. Yen la Argentina stas soncircunstancias que cambianseguido. Esta dificultad la enfrentantanto el sector privado como el

  • gobierno, que es quien debe trazarpolticas productivas quecontemplen el largo plazo. Lo que stenemos, en cambio, es una granprctica para aprovechar el cambiode contexto a la hora de comenzar aimportar productos.

    Este gran cuadro de situacinno contribuye a definir el perfilproductivo del pas. Entoncessurgen dicotomas tan argentinascomo campo vs. industria, bienesvs. servicios, proteccionismoexcesivo vs. aperturaindiscriminada, o intervencionismovs. libre mercado, tan habituales alo largo de nuestra historia

  • nacional.El camino a seguir es el de

    agregar valor a nuestras materiasprimas, lo cual genera msbeneficio, ms trabajo y mejoressueldos. Pero para ello hace faltainvertir. Y mucho. Un premio Nobelde Economa, John Hicks, dijo unavez que quien invierte a largo plazoentrega un rehn. El problema esten que si desconozco la ferocidad delos captores es mejor no tener anadie en sus manos. De igualmanera, si no se sabe qu puedeocurrir maana prefiero nocomprometer ms capital. Y as nosquedamos con una economa que,

  • pese a sus posibilidades, todavaexporta muchos productosprimarios, que son aquellos que sevenden prcticamente en el estadoen que se encuentran en lanaturaleza y que son tambininsumos en la industriamanufacturera.

    Ciertamente nuestro sistematributario tambin pierde de vistasus objetivos y hasta suracionalidad con tantas crisis.Cuando stas generan problemasfiscales se suelen crear impuestosde emergencia, distorsivos oregresivos, que luego perduran. Tales el caso del impuesto a los dbitos

  • y crditos, o al cheque, lasretenciones en niveles elevados, laganancia mnima presunta, entreotros.

    Sin crdito, cuando caen losingresos, muchos negocios yfamilias suelen hacer frente alproblema postergando el pago deimpuestos. Y luego son tantos losincumplidores que el Estado declaramoratorias. A la larga ello deriva enuna cultura de la evasin y en laimplementacin de impuestos depeor calidad pero de ms fcilrecaudacin. As, nuestra estructuratributaria se va a alejando cada vezms de lo que debera ser.

  • Entre otras cosas, eso atentacontra el crecimiento de laspequeas y medianas empresas,que en la Argentina generanalrededor del 80% de los puestos detrabajo. A los problemasestructurales que enfrentan hay quesumarle el hecho de que por susrecursos estas empresas son las quemenos capacidad tienen paraprevenir las crisis y cubrirse antesus efectos. Ello explica por qu elpas posee altas tasas de natalidadpero tambin de mortandad depymes.

    Ms all de todas estasconsecuencias econmicas estn las

  • sociales y culturales. Tanto vaivn,tanta impredecibilidad, nostransforman en una sociedad mscortoplacista: nos cuestaplanificar y hacer el esfuerzocotidiano que lleva a resultadosperdurables.

    En las crisis hay gente quepierde todo y se empobrecesbitamente, y otra que se hace ricade la nada. Y la fantasa de que sepuede hacer la diferenciaaprovechando estos momentos ycon poco trabajo no es beneficiosapara nuestros valores. De hecho,todos los sacudones que hemosvivido han generado un deterioro

  • persistente en la distribucin delingreso.

    Por si ello fuera poco, cuandotodo explota hay claros impactospersonales. Muchos pierden eltrabajo o sus ahorros. Y enconsecuencia se suceden muchosepisodios que indican deteriorosms profundos en la calidad devida: suben la venta de ansiolticos,la tasa de divorcios, los ataquescardacos y hasta los suicidios.

    En ltima instancia, lo quediferencia a los pases desarrolladoses que sus ciudadanos no se paseanpor las calles con cara depreocupacin. Saben que su

  • supervivencia est garantizada y noconsideran posible que de la nochea la maana ocurra algncataclismo generalizado que lostermine afectando. Esa tranquilidades una gran fuente de bienestar.

    No caben dudas de que laeconoma argentina precisa bajarsede la montaa rusa y generar unentorno ms estable y apacible paratodos. Y si lo conseguimos, unmundo de oportunidades se abrirante nuestros ojos.

  • 2.4. El buen equilibrista

    Estrategias para quetodos ganemos

    En Economa se suele enseara los alumnos a maximizar algunavariable sujeta a determinadocontexto. En este tipo de ejercicios,el ambiente se considera fijo,inalterable o, como reza laexpresin latina que se usacomnmente: caeteris paribus(todo lo dems constante). Se tratade una suposicin que sirve para

  • simplificar algunos procesos con elfin de concentrarse slo endeterminado aspecto de sufuncionamiento, pero est claro quees algo exagerado cuandointentamos aplicarlo a la vidacotidiana.

    En este raro mundo idealterico, bastara con que undefensor de ftbol sea ms alto queel delantero rival para asegurar questos nunca le metern un gol decabeza, por ejemplo.

    Pero esta idealizacin ignoraque en todos los procesosintervienen muchos determinantesentrecruzados: si estamos en la fila

  • del banco y la persona que estdelante nuestro est distrada, nopor eso dejar de protestar si noscolamos. Por lo cual en la vidadiaria es imposible pretender queeso ptimo que buscamos suceda,puesto que quienes nos rodeanforman un contexto que no actacomo una constante inalterable. Dehecho, en la mayora de los casosconstituyen una variableimpredecible.

    La Teora de los Juegospermiti sistematizar de unamanera ms clara la incorporacinde las respuestas de los dems anuestras propias acciones. El

  • concepto de equilibrio de Nash serefiere precisamente a eso: unestado determinado se considera deequilibrio cuando, dado lo que losdems hicieron, ningn participantedel juego quiere cambiar laestrategia que eligi. Cuando estoocurre con todos los jugadores elresultado puede ser considerado deequilibrio.

    Quizs te suene familiar esenombre. Tal vez porque lo oste enla pelcula Una mente brillante, enla cual Russell Crowe interpreta aJohn Nash, un genial peroexcntrico matemtico que fue unode los pioneros en un campo de

  • estudio muy complejo pero denombre poco serio: la Teora de losJuegos.

    Existe una gran cantidad dejuegos en los que participamosinadvertidamente en formacotidiana, los cuales a primera vistano ofrecen ningn equilibrio claro.Por ejemplo, al jugar al piedra,papel o tijera cada jugador tiene tresopciones posibles, las cuales seimponen o son derrotadas segnqu opcin elija su contrincante.

    Pero hay otros juegos queposeen mltiples equilibrios deNash. Ello significa que, enprincipio, predecir qu equilibrio

  • prevalecer parecera una cuestinmeramente azarosa. Imaginemosque todos los lectores de este libroparticipan del siguiente juego. Senos entrega a cada uno unaidentidad y una direccin deinternet para ingresar endeterminada fecha y a determinadahora. Llegado el momento, cuandotodos nos conectamos a la webdando nuestro nombre de usuario ycontrasea, en pantalla aparece unmazo de naipes de pquer. Luego senos pide que seleccionemos unacarta, una sola. Pero antes dehacerlo leemos las siguientesinstrucciones:

  • 1. Se jugar una sola vez.2. Se te asign a un grupo de veintepersonas en total.3. Cuando en la pantalla aparezcala palabra YA debers elegir unacarta y slo una.4. No pods hablar ni comunicarteabsolutamente con nadie de tugrupo para coordinar estrategias.5. El premio consiste en losiguiente: se forma un pozo de diezpesos elevados a la cantidad degente que eligi la misma carta, yesa cantidad de dinero se reparteentre todos los que coincidieron enla eleccin.

    El ltimo punto significa quesi slo vos elegiste esa carta, tellevars diez pesos. Si coincids con

  • otra persona, se llevarn 102 = 100pesos, es decir cincuenta cada uno.Si logrs coordinar con otras nuevepersonas (componiendo la mitaddel grupo) tendrn 1010 =10.000.000.000 pesos, lo queequivale a mil millones de pesospor persona. Finalmente, si todoseligen la misma carta tendrn unpozo total de 1020 =100.000.000.000.000.000.000pesos, lo que significa que cada unose llevar5.000.000.000.000.000.000 depesos. Te parece que son muchosceros? En letras esto se traduce a lafriolera de 5 trillones de pesos por

  • cabeza. Imaginate todo lo quepodras comprar con ese dinero:varias islas del Caribe, el club deftbol del que sos hincha, losrestaurantes que ms te gustan, laobra de tu escritor preferido, todoslos shows de tu cantante preferidallegaras a esta situacin soada:vos en tu propia isla del Caribe, conel plantel de Independiente jugandoa la pelota en tu playa privada,mientras Diana Krall (y ElvisCostello, tampoco es cosa deseparar a la gente) est tocando elpiano y cantando a un costado; almismo tiempo Narda Lepes yFerrn Adri te estn preparando el

  • almuerzo y Ian McEwan estescribiendo tu propia biografaIncreble, no? Pero lo msincreble es que te seguirasobrando dinero, tanto como paracomprarte Microsoft, Apple

    Ahora, hac una pausa en tusilusiones y eleg con cuidado unnaipe entre las cincuenta y dosopciones que la baraja de pquer teofrece. Record que no debe ser lacarta que ms te gusta, ni la de tusuerte, sino aquella que penss quelos dems probablemente decidanelegir. No sigas leyendo hasta queno tengas bien clara tu opcin.

    Ya te decidiste por una? Por

  • casualidad es uno de los ases? Si larespuesta es afirmativa, fue el decorazones? En general un nmeromuy grande de jugadores toma estadecisin. Otros optan por el de picko trbol o algunos de los reyes. Sibien podras haber elegidocualquiera de las cartas, no lasmirs todas de la misma manera;seguramente ni se te ocurri laposibilidad de elegir el cuatro dediamantes.

    En este juego hay cincuenta ydos posibles equilibrios de Nash,que son aquellos donde todos losparticipantes optan por la mismabaraja independientemente de cul

  • sea la elegida. Sin embargo, notodos esos equilibrios tienen lamisma probabilidad de seralcanzados. Hay algo que torna msprobable que se extraigandeterminadas cartas. Esedeterminante suele ser cultural, yse denomina estrategiasobresaliente porque existe unapercepcin compartida de que hay,en palabras de Thomas Schelling,un punto focal para lo que esperacada persona que el otro espera quel espera que es esperable hacer.

    Uno de nuestros problemas enla Argentina es que el as decorazones se llama crisis: todos

  • pensamos que va a haber una en unfuturo cercano. Y ello afectanuestros comportamientos y nosenfoca solamente en el corto plazo,en lugar de prestar atencin a lascuestiones fundamentales quecontribuirn a nuestro desarrollo.

  • 2.5. Los chinos y el bifede chorizo

    La oportunidad dealimentar mejor al

    mundo

    Los principales pases endesarrollo estn creciendo a tasasnunca vistas anteriormente. Y conello estn mejorando la calidad devida de sus ciudadanos. As,centenares de millones de personashan salido de la pobreza extrema en

  • las ltimas dcadas. China sola sacade esa situacin al equivalente amedia Argentina por ao.

    Qu es lo primero que haceun individuo que deja de ser pobre?Consumir ms, obviamente. Pero,en particular, comienza a mejorarsu dieta: ingiere paulatinamentecada vez ms protena animal(carnes y lcteos) en desmedro de laprotena vegetal. Quizs para unpas tan rico como la Argentina encuanto a produccin alimenticiaesto suene raro, pero hay muchosdonde la carne de cualquier tipo olos quesos no forman parte de laingesta habitual. En China, por

  • ejemplo, dicen que los occidentalesolemos a leche. Es natural que assea puesto que ese producto y susderivados constituyen uncomponente primordial de nuestraalimentacin. Pero a ellos les llamala atencin porque su realidad esdiferente. Hace veinte aos, suconsumo de productos lcteos porhabitante era una veinteava partedel promedio mundial. Creci, peroan hoy es tres veces me