EFECTO DE LA TERAPIA CONDUCTUAL INTEGRATIVA DE PAREJA …

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Terapia Conductual Integrativa de Pareja 1 EFECTO DE LA TERAPIA CONDUCTUAL INTEGRATIVA DE PAREJA EN LA INSATISFACCIÓN, DE ACUERDO CON EL ORDEN DE PRESENTACIÓN DE LAS ESTRATEGIAS DE INTERVENCIÓN MÓNICA RIVA GUTIÉRREZ *SONIA ZAMBRANO PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE PSICOLOGÍA MAESTRÍA EN PSICOLOGÍA CLÍNICA COMPORTAMENTAL COGNOSCITIVA Bogotá, Colombia 2012 *Directora de tesis

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Terapia Conductual Integrativa de Pareja 1

EFECTO DE LA TERAPIA CONDUCTUAL INTEGRATIVA DE PAREJA EN

LA INSATISFACCIÓN, DE ACUERDO CON EL ORDEN DE PRESENTACIÓN

DE LAS ESTRATEGIAS DE INTERVENCIÓN

MÓNICA RIVA GUTIÉRREZ

*SONIA ZAMBRANO

PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA

FACULTAD DE PSICOLOGÍA

MAESTRÍA EN PSICOLOGÍA CLÍNICA COMPORTAMENTAL COGNOSCITIVA

Bogotá, Colombia

2012

*Directora de tesis

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 2

TABLA DE CONTENIDO

RESUMEN, 7

1 INTRODUCCIÓN, 9

2 JUSTIFICACIÓN Y PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA, 11

3 MARCO TEÓRICO Y EMPÍRICO, 18

3.1 Definición de Insatisfacción de Pareja, 18

3.1.1 Adquisición de la insatisafacción de pareja, 26

3.1.2 Mantenimiento de la insatisfacción de pareja, 30

3.2 Evaluación de la Insatisfacción de Pareja, 33

3.2.1 Cuestionarios de evaluación de la insatisfacción de pareja, 36

3.2.2Entrevista de evaluación de la insatisfacción de pareja, 39

3.3 Intervención Psicológica de la Insatisfacción de pareja, 41

3.3.1Aceptación, 46

3.3.2Cambio, 47

4 OBJETIVOS, 52

4.1 Objetivo General, 52

4.2 Objetivos Específicos, 52

5 MÉTODO, 53

5.1 Diseño, 53

5.2 Variables, 53

5.2.1Variable independiente, 53

5.2.2Variable dependiente, 55

5.3 Hipótesis terapeutica, 57

5.4 Instrumentos, 57

5.4.1Inventario de pareja, 57

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 3

5.4.2Autorregistro,58

5.5 Procedimiento, 59

5.5.1Fase A, 59

5.5.2Fase B, 61

5.5.3Fase C, 62

5.5.4Fase D, 62

5.6 Participantes, 62

6 RESULTADOS, 65

6.1 Evaluación, 65

6.2 Autorregistros, 65

6.2.1Resultados pareja uno, 66

6.2.2Resultados pareja dos, 74

6.2.3Resultados pareja tres, 84

6.2.4Resultados pareja cuatro, 91

6.2.5Resultados pareja cinco, 100

6.2.6Resultados pareja seis, 110

6.2.7Resultados de la comparación entre las parejas, 121

7 DISCUSIÓN, 130

REFERENCIAS, 139

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 4

Lista de Figuras

Figura 1. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 1, 67

Figura 2. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 1, 68

Figura 3. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja

número 1, durante cada etapa de intervención, 71

Figura 4. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja

número 1, durante todo el proceso de intervención, 74

Figura 5. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 2,75

Figura 6. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 2, 77

Figura 7. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja

número 2, durante cada etapa de intervención, 80

Figura 8. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja

número 2, durante todo el proceso de intervención, 83

Figura 9. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 3, 84

Figura 10.Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 3, 86

Figura 11. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja

número 3, durante cada etapa de intervención, 88

Figura 12. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja

número 3, durante todo el proceso de intervención, 90

Figura 13. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 4, 92

Figura 14. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 4, 93

Figura 15. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja

número 4, durante cada etapa de intervención, 96

Figura 16. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja

número 4, durante todo el proceso de intervención, 100

Figura 17. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número5, 101

Figura 18. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 5, 103

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 5

Figura 19. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja

número 5, durante cada etapa de intervención, 107

Figura 20. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja

número 5, durante todo el proceso de intervención, 109

Figura 21. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 6, 111

Figura 22. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 6, 112

Figura 23. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja

número 6, durante cada etapa de intervención, 117

Figura 24. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja

número 6, durante todo el proceso de intervención, 120

Figura 25. Promedio del nivel de malestar en cada una de las etapas de las etapas de

intervención en las 6 parejas 6, 121

Figura 26. Promedio de la frecuencia de discusiones en cada una de las etapas

intervención en las 6 parejas, 125

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 6

Lista de Apéndices

Apéndice A

Esquema General de la Terapia Comportamental Integrativa de Pareja

Apéndice B

Inventario de Interacción de la Pareja

Apéndice C

Autorregistro Diario

Apéndice D

Consentimiento Informado

Apéndice E

Formulación de Casos

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 7

EFECTO DE LA TERAPIA CONDUCTUAL INTEGRATIVA DE PAREJA EN

LA INSATISFACCIÓN SEIS DE PAREJAS

Resumen

Se analizó si existían o no diferencias en la insatisfacción de pareja, dependiendo del

orden aleatorio de presentación de las estrategias empleadas por la intervención, basada en

la guía de manejo de la terapia conductual integrativa (TCI) en pareja, en seis parejas en la

ciudad de Bogotá. Se empleó un diseño experimental de caso único, con un método de

series en el tiempo, con evaluación de elementos intraserie, entre elementos y entre sujetos;

donde la presentación de cada uno de los elementos se realizó aleatoriamente. Se encontró

que la TCI, afectó positivamente la insatisfacción en todas las parejas, donde se observó

que aceptaban que las diferencias eran inevitables, pero el nivel de afectación ante estas se

disminuyó, igualmente se aumentó el porcentaje en los patrones de comportamientos

positivos y se determinaron los patrones de comportamiento de polarización. En cuanto a la

estrategia que fue más efectiva, se observó que el intercambio de comportamientos

positivos pudo reducir el nivel de malestar en un mayor número de personas, seguida por la

estrategia de aceptación, por último la de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas. En cuanto a la estrategia, empleada al mismo tiempo en las parejas, que

presentó una disminución en el nivel de malestar en ambas parejas, fue dada por la de

intercambio de comportamientos positivos, siendo introducida como la primera estrategia;

al igual que por la estrategia de aceptación, siendo introducida como la segunda estrategia.

Estos hallazgos sugieren, que la guía de intervención de la TCI de pareja, es una

herramienta adecuada para la intervención en los problemas de pareja y que el orden de

presentación de las diferentes estrategias, no presenta una diferencia significativa.

Palabras clave: guía de intervención, terapia comportamental integrativa de pareja,

aceptación, cambio, insatisfacción de pareja.

Abstract

In this investigation, we analyzed whether there were differences in partner

dissatisfaction, depending on the random order of presentation of the strategies employed

by the intervention, based on management’s guidance integrative behavioral in couple

therapy (TCI), in six couples who consulted in the city of Bogotá. We used a single case

experimental design, with a method of time series, with evaluation within elements,

between elements and between subjects; where the presentation of each of the elements

were randomly. We found that the IBCT, affected dissatisfaction positively in all the

couples, where it was observed that they accepted that the differences were inevitable, but

the level of involvement with these was decreased; the percentage also was increased in

positive behavior patterns and determine the behavior patterns of polarization. As for the

objective of which strategy was more effective, it was observed that the strategy that could

reduce the level of discomfort increased by number of people, was given by the exchange

of positive behaviors, followed by the acceptance and finally the training in communication

and problem solving. In terms of strategy, employed at the same time the couples had a

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 8

decreased of discomfort for both partners, was given by the exchange of positive behaviors,

being introduced as the first strategy; as well as the strategy of acceptance, being

introduced as the second strategy. These findings suggest that the intervention guide of the

IBT for couples is an appropriate tool for intervention in their problems and that the order

of presentation of the different strategies showed no significant difference.

Keywords: Intervention guide, integrative behavioral couple therapy, acceptance,

change, couples dissatisfaction.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 9

1 Introducción

Esta investigación se realizó con el objetivo principal de evaluar el efecto de la terapia

comportamental integrativa, sobre la insatisfacción de seis parejas, en la ciudad de Bogotá.

Fundamentándose, dentro del marco conceptual y metodológico de las intervenciones

psicológicas de tercera generación en la terapia de la conducta, en donde se emplean

intervenciones basadas en la aceptación, integrando las terapias comportamentales.

Hayes (2004), delimitó las terapias de tercera generación a aquellas terapias que se

fundamentan en el planteamiento contextual, donde se la da énfasis al análisis funcional de

la conducta, siendo la flexibilidad el criterio de adaptación ante los problemas, dejando de

lado la idea de la desaparición de los problemas.

La intervención realizada, fue planteada basándose en la guía de manejo de la terapia

comportamental integrativa de pareja, diseñada por Christensen & Jacobson (1998). Para la

evaluación, se realizó en primer lugar, un análisis funcional de los problemas presentados

por cada una de las parejas, en donde se evaluaban la historia individual de cada sujeto que

compone la pareja, como la historia de la interacción de la pareja; con el fin de poder

determinar la clase de respuesta, su adquisición y mantenimiento. Posteriormente, se

plantearon las hipótesis explicativas y de intervención de cada caso, lo cual llevó a plantear

una adecuada intervención sobre las conductas meta de cada pareja.

El diseño de la investigación, fue de tipo experimental de caso único, con un método de

series en el tiempo: evaluación de elementos intraserie, entre elementos y entre sujetos

(Hayes, Barlow & Nelson-Gray, 1999). El procedimiento, fue realizado a través de etapas,

la primera fue la etapa de evaluación, las siguientes etapas eran las de intervención, las

cuales se realizaron de acuerdo a cada una de las estrategias empleadas por la intervención;

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 10

del análisis de los resultados obtenidos, se planteó la parte final de esta investigación, la

discusión.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 11

2 JUSTIFICACIÓN Y PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Desde que las personas nacen, la sociedad, los padres, el colegio y el medio enseñan

que las personas deben ser personas sociales, que se tienen que relacionar de diferentes

maneras con su entorno para poder desarrollarse, para poder crecer y ser parte activa de la

sociedad a la que pertenecen. Una de las formas en las que se relacionan con su medio, es a

través de las relaciones de pareja, las cuales son conformadas de acuerdo con los valores y

creencias individuales, pero que se conjugan para poder establecer una relación de

intimidad con otra persona que tiene sus propias creencias y valores.

La unión de dos personas para conformar una pareja, es el primer paso para poder llegar

a ser una familia. Es por esta razón, que es fundamental que esa pareja se forme y se

desarrolle de forma adecuada, positiva en donde se conjuguen y se generen nuevos valores,

que van a ser transmitidos a su nueva familia. Ya que, según la declaración de los derechos

humanos realizada en el año de 1948 y hasta la actualidad, la familia es la base fundamental

de la sociedad (Naciones Unidas, 2004), y que esta se compone de las relaciones de pareja,

se convierte en un eje principal de prevención y promoción de su salud, del bienestar de las

personas que la componen, porque ese bienestar se ve reflejado directamente en la

sociedad.

Actualmente, la sociedad Colombiana muestra una grave problemática al interior de sus

familias, en la cual prevalece la violencia intrafamiliar. Según el Instituto Nacional de

Medicina Legal en Colombia existen tres tipos de violencia intrafamiliar, la violencia

infantil, la violencia de pareja y la violencia entre otros familiares. Se registraron, en el año

2011, 76693 casos de violencia intrafamiliar, 49949 de esos casos fueron por violencia de

pareja; en el año 2010, se reportaron 78439 casos de violencia intrafamiliar, siendo 51436

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 12

casos de violencia de pareja, en el año 2009, se registraron 83806 casos, siendo 55571

casos relacionados con la violencia entre la pareja (Instituto Nacional de Medicina Legal y

Ciencias Forenses, 2011; Carreño, 2010).

Durante los años 2005, 2006 y 2007, se registraron 35 muertes en circunstancias

contextualizadas en el marco de la violencia intrafamiliar; en relación específicamente a la

violencia de pareja, se presentaron 20 casos, lo cual sigue confirmando que la mayor

prevalencia de violencia intrafamiliar se relaciona con la de pareja. Además, se encontró

que una gran proporción de las víctimas fue agredida antes de la muerte en múltiples

oportunidades de manera física, verbal y psicológica (Carreño, 2008). En el año 2009, se

registraron 12 homicidios a causa de la violencia intrafamiliar, de los cuales 8 casos fueron

por violencia entre la pareja, continuando así con la mayor prevalencia (Carreño, 2011).

En congruencia con los datos presentados anteriormente, afirmó que la insatisfacción de

la pareja se relaciona con la violencia familiar, el alcoholismo, la farmacodependencia y los

divorcios; igualmente afecta diferentes esferas de la persona, como en las relaciones entre

la familia (hijos-padres), su satisfacción laboral, su salud y su calidad de vida (Arias, 2003;

Whisman, Snyder & Beach, 2009; Snyder, Heyman & Haynes, 2005; Lebow, Chambers,

Christensen &Johnson, 2012).

Al comprender que las terapias de pareja no solo han demostrado ser una ayuda para

mejorar la relación entre la pareja, sino también para el tratamiento de problemas

emocionales y comportamentales que se presentan en las personas que componen la diada

(Whisman, Snyder & Beach, 2009); lo cual demuestra aún más la relevancia que tiene la

terapia de pareja, sobre los problemas que se presentan en la pareja y a nivel individual,

mejorando así la calidad de vida de las personas. Es así, que al establecer las prioridades y

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 13

necesidades de intervención en cuanto a la atención de la violencia intrafamiliar y los

demás problemas que se pueden derivar de la satisfacción o insatisfacción de la pareja,

permitirá realizar un mejor abordaje para la prevención de estos problemas, que no sólo

afectan al individuo, la pareja y al núcleo familiar sino también a su comunidad y sociedad

en general.

Como se observa que la violencia de pareja es la que tiene una mayor prevalencia sobre

las demás tipologías; lo cual, lleva a pensar que el mayor esfuerzo de prevención de la

violencia intrafamiliar sería en este nivel, ya que siendo el núcleo de la familia, se pueden

enseñar conductas saludables, las cuales serán enseñadas no sólo a los miembros de la

diada sino también a sus hijos y demás familiares. Al lograr que la pareja, se relacione de

forma adecuada, aprenda a superar sus diferencias y a aceptarlas, pueden enseñar a los

demás miembros de su familia estos comportamientos, ellos a su vez transmitirán estas

enseñanzas a otras personas y se formará entonces una cadena de aprendizaje dentro de la

sociedad en general.

Es importante aclarar, que estos datos epidemiológicos sobre la violencia en la pareja,

son solamente los datos que han sido registrados por Medicina Legal en el país; lo que

quiere decir, que estos solamente son los datos que han sido reportados ante esta unidad

legal cuando se hace la denuncia, teniendo entonces un sin número de casos sin reportar,

mostrando entonces estos datos una porción de la realidad de la violencia intrafamiliar en el

país.

Al encontrar homicidios con antecedentes de evaluación previa por lesiones personales

en el contexto de la violencia intrafamiliar, muestra las fallas del sistema legal y social, en

el deber de protección e intervención de las víctimas de la violencia (Carreño, 2008). Por

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 14

tanto, se ve la necesidad de generar métodos de evaluación e intervención tanto para la

familia, como para la pareja.

Adicionalmente, la problemática de pareja, no está dada solamente por la violencia

entre la pareja sino también por los problemas que tienen que afrontar en su cotidianidad y

la forma en la cual lo hacen. Generando diferentes tipos de sentimientos a su interior, que

desembocan en conflictos de pareja e incluso en la separación de la misma. Según la

Superintendencia de notariado y registro, se legalizaron 21617 divorcios en el año 2011,

5313 divorcios en el año 2010, 10618 en el 2009, 9436 en el 2008 y 8291 en el 2007. Lo

cual demuestra que es una cifra que va en ascenso cada año. Evidenciándose la importancia

de prevenir la disolución de la familia, la cual se da por la separación de la pareja.

Esa disolución de la pareja o de la familia, se presenta principalmente porque hay

insatisfacción por una parte o ambas partes de la pareja, lo cual los lleva a tornar la decisión

de separarse. Siendo entonces, un problema de relevancia en el cual el psicólogo puede

contribuir a que las parejas, a través de una ayuda terapéutica, transformen su relación y

puedan seguir estando juntas, manteniendo el núcleo de la familia y por lo tanto de la

sociedad.

Para responder ante la necesidad de evaluar e intervenir la problemática relacionada con

la pareja, se debe ofrecer por parte de la ciencia y de la disciplina, las mejores herramientas

de las cuales se disponen actualmente. Por lo tanto, esta investigación aporta tanto para la

Pontificia Universidad Javeriana como para la psicología, un sustento empírico que

corrobora los efectos de una intervención psicológica en las parejas, pero tratando de

evaluar si el orden de introducción de las estrategias de intervención, influyen sobre los

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 15

efectos obtenido; siguiendo así la línea de interés por las terapias de tercera generación, en

donde la aceptación es un elemento fundamental de la misma.

Por lo tanto, esta investigación empleará la guía de intervención de la terapia

conductual integrativa (Christensen & Jacobson, 1998), para tratar las problemáticas de

pareja, primero porque la investigación va en congruencia con las líneas de investigación de

la Pontificia Universidad Javeriana, sobre las terapias de tercera generación; segundo,

porque esta terapia es de tipo comportamental, ya que el modelo le aporta a la terapia

integrativa el método del análisis funcional; por lo cual se demuestra que se empleó una

terapia que está dentro del enfoque empleado por la terapeuta y la Maestría de la Pontificia

Universidad Javeriana; tercero, porque la terapia comportamental integrativa de pareja, ha

demostrado tener un mayor nivel de efectividad sobre la terapia comportamental tradicional

(Baucom, Sevier, Eldridge, Doss & Christensen, 2011; Christensen, Atkins, Berns,

Wheeler, Baucom & Simpson, 2004; Christensen, Atkins, Baucom & Yi, 2010); lo cual

permite, ofrecerle a los consultantes la mejor alternativa de intervención, garantizando el

comportamiento ética de la investigación.

Adicionalmente, esta investigación aporta un estudio riguroso para el desarrollo de la

ciencia, ya que las investigaciones acerca de la insatisfacción de pareja, en el contexto

latinoamericano y principalmente en el colombiano, no han sido lo suficientemente

desarrolladas (Arias, 2003; Lundblada & Hansson, 2006). Aunque se han realizado

investigaciones, principalmente en Estados Unidos, en donde se ha afirmado que las terapia

comportamental integrativa es efectiva, es importante resaltar que no existe una evidencia

empírica que determine el orden de presentación de las estrategias de la intervención, que

pueda ser un potencializador para sus efectos, debido a que esta terapia emplea tres

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 16

componentes diferentes, el intercambio de comportamientos, el entrenamiento en

comunicación y solución de problemas y la aceptación (Christensen & Jacobson 1998;

Lebow, Chambers, Christensen & Johnson, 2012; Snyder, Castellani & Whisman, 2006).

Lebow, Chambers, Christensen &Johnson (2012) en una estudio acerca de las terapias

de pareja, desde el 2000 hasta el 2009. Encontraron que en los estudios realizados sobre la

efectividad de las terapias de pareja, tienen un cambio positivo en el 70%. Afirmaron, que

la terapia comportamental integrativa presenta mejores resultados a largo plazo que las

terapias comportamentales tradicionales e igualmente llegaron a la conclusión de que no se

han realizado estudios en donde se demuestre el porqué la terapia funciona; abriendo un

camino de investigación en diferentes vías, como por ejemplo, si la terapia funciona de

acuerdo al orden de introducción de las diferentes estrategias.

De acuerdo con el vacio sobre el por qué funcionan las terapias de pareja, Snyder,

Castellani & Whisman (2006), afirmaron que para investigar el proceso de cambio, se

podían emplear los métodos de investigación como los análisis de regresión, el análisis

linear de los modelos jerárquicos (criterio cambiante y entre sujetos) y el análisis de tareas

de resultados cercanos que suceden entre sesiones. Por lo tanto, plantean que las

investigaciones futuras se pueden beneficiar de estudios de caso único o de diseños de

replicación de casos, del análisis de los componentes de la intervención y de ensayos

clínicos abiertos; como de investigaciones que buscan disminuir o eliminar las recaídas,

estudiar enfoques integrativos, en la generalización de los resultados, en el costo beneficio

de las intervenciones, entre otros.

Es importante resaltar que la intervención, también debe tener un enfoque de

prevención, en donde no sólo se trabaje con las parejas casadas, sino que se pueda aplicar a

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 17

cualquier diada, a las parejas que convivan, que tengan una relación cercana o romántica y

en parejas homosexuales (Christensen, Jacobson & Babcock, 1995); lo cual va en

concordancia con la transformación que ha tenido tanto la familia como las parejas a través

del tiempo.

Demostrando entonces, la importancia de generar guías terapéuticas que sean

empíricamente validadas, que aporten al desarrollo de la sociedad, la ciencia, la disciplina y

la academia. Siendo entonces esta investigación, el pilotaje de un protocolo, el cual es un

paso fundamental para llegar al gran objetivo de la validación. Por tanto, el problema de

investigación planteado sería, ¿si existen o no diferencias en la insatisfacción de pareja,

dependiendo del orden aleatorio de presentación de las estrategias empleadas por la

intervención, basada en la guía de manejo de la terapia conductual integrativa en pareja, en

seis parejas en la ciudad de Bogotá?

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 18

3 MARCO TEÓRICO Y EMPÍRICO

Para entender esta investigación, se hace necesario desarrollar los temas que se van a

tratar, enmarcándolos dentro de las teorías que se han desarrollado sobre los mismos, pero

principalmente mostrando lo que se está trabajando actualmente en relación con ellos. Por

lo tanto, se iniciará con el tema principal de la investigación, el comportamiento problema,

la insatisfacción de pareja.

3. 1 Definición de Insatisfacción de Pareja

Para comprender la problemática que se va a tratar dentro de esta investigación, es

necesario empezar a describir y analizar cómo se han definido y entendido las diferentes

formas de relacionarse en pareja.

Roach, Browdwn y Frazier (1981), definieron que la satisfacción o insatisfacción

marital era la forma en que la persona percibía su propio matrimonio respecto a un continuo

de mayor o menor favorabilidad en un punto en el tiempo (como se citó en Arias, 1989).

Pick y Andrade (1988), definieron la satisfacción marital como “el grado de favorabilidad

(actitud) hacia los aspectos del cónyuge y de la interacción conyugal” (como se citó en

Acevedo, Restrepo & Tovar, 2007, p. 12)

Según Epstein y Baucom (2002), existen dos tipos de comportamientos entre una

pareja, los cuales han sido denominados comportamientos positivos y comportamientos

negativos. Los comportamientos negativos, son aquellos que se presenta cuando un

compañero presiona al otro a través de un patrón de interacción de demandas emocionales,

estas demandas suelen presentarse a medida del tiempo con una mayor intensidad y

conducen por lo tanto a la pareja al proceso de polarización (Sullaway & Christensen,

1983; citados por Rehman & Holtzworth-Munroe, 2006).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 19

Por el otro lado, los comportamientos positivos, desarrollan la reciprocidad positiva,

esto se presenta cuando existe la tendencia de que uno de los miembros se comporte de

forma positiva con el fin de incrementar la probabilidad de que el otro responda de manera

positiva; mientras que por lo comportamientos negativos, se desarrolla la reciprocidad

negativa, la cual es cuando un miembro exhibe un comportamiento negativo, para evocar

un comportamiento negativo en la otra persona (Epstein & Baucom, 2002).

A pesar de que los dos tipos de reciprocidad se den tanto en parejas sin conflicto como

en conflicto, se observa que en las parejas en conflicto se presenta un aumento en la

reciprocidad negativa. Es así, como desde la perspectiva del aprendizaje social, varios

estudios han demostrado que las conductas negativas están asociadas con una disminución

en la satisfacción de la pareja y/o una mayor probabilidad de divorcio (Bradbury, Campbell

& Fincham, 1995; Carrere & Gottman, 1999; Gill, Christensen & Fincham, 1999; Gottman,

Coan, Carrere & Swanson, 1998; Gottman & Levenson, 1999; Kiecolt, Katz & Gottman,

1993; Pascua & Bradbury , 1998; Rogge & Bradbury, 1999, como se citaron en McNulty &

Russell, 2010). Sin embargo, McNulty & Russell (2010), afirmaron que los

comportamientos negativos pueden ser adaptativos, si ayudan a la pareja a resolver

problemas en el futuro, aunque disminuyan la satisfacción de la pareja en el presente.

Es así, que el comportamiento negativo puede ser de dos tipos, directo o indirecto. El

comportamiento negativo directo se clasifica en: 1. La culpabilización entre la pareja, la

cual es entendida como una crítica directa del compañero acerca de su comportamiento

negativo; ya sea por un comportamiento del pasado, de la actualidad o del futuro (por

ejemplo “tú nunca me escuchas”). O también una señalización directa del papel que jugó el

compañero en un problema, ya sea por un problema del pasado, de la actualidad o del

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 20

futuro (por ejemplo “Eso es tu culpa”). 2. Dar una orden al compañero, el cual es dar una

instrucción directa al compañero para que realice un comportamiento para solucionar un

problema (por ejemplo “no hagas eso nunca más”). 3. Rechazar al compañero, o

descalificar directamente su punto de vista, lo cual implica insultar o señalar directamente

los defectos personales del compañero (por ejemplo “eres tan inmaduro o no me importa lo

que pienses”) (McNulty & Russell, 2010).

El comportamiento negativo indirecto se clasifica en: 1. Presuntas atribuciones, por

ejemplo “Se cómo te sientes realmente”. 2. Preguntas hostiles, por ejemplo “Qué te dije?”.

3. Evitación de la responsabilidad, por ejemplo “No puedo parar”. 4. El sarcasmo, por

ejemplo “Si… esa es una buena idea” (McNulty & Russell, 2010).

Sin embargo, hay que insistir que el comportamiento negativo, no siempre genera

insatisfacción en las parejas, ya que esos comportamientos pueden ser adaptativos en la

medida en que motivan el cambio en el compañero, ayudando así a la pareja a resolver los

problemas. En contraste, los comportamientos negativos no son adaptativos cuando no

existe la necesidad de un cambio, lo cual en vez de generar cambios en función de

solucionar problemas, generan resentimientos en la pareja. Tendiendo entonces a ser

adaptativo cuando el problema que se enfrenta es de gran importancia y relevancia para la

pareja, caso contrario cuando los problemas no son tan importantes y por eso el empleo de

conductas negativas tiende a ser innecesario y por lo tanto poco adaptativo, generando

conflictos en la pareja y disminuyendo su satisfacción (McNulty & Russell, 2010). Esta

diferencia es importante, ya que aclara cuales son los comportamientos negativos que

necesitan ser modificados y cuáles no, evaluando así el comportamiento de acuerdo con la

función que cumple en el contexto específico de la pareja.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 21

Gottman (1993), basándose en las teorías del aprendizaje social, afirmó que cuando

existe un desbalance entre los comportamientos positivos y los negativos al interior de la

pareja, en donde se intercambian comportamientos más aversivos en comparación de

comportamientos más placenteros, es probable que la pareja esté insatisfecha e inestable

(como se citó en Berns, Jacobson & Christensen, 2000). No sólo corroborando lo

anteriormente mencionado, sino explicando a la vez que la insatisfacción en una pareja se

define de acuerdo con el aumento en el intercambio de estímulos aversivos y a la

deprivación de reforzadores en comparación de los estímulos placenteros. Entendiéndose,

que los comportamientos negativos cumplen una función aversiva mientras que los

comportamientos positivos están relacionados con la estimulación placentera.

Continuando con la teoría del aprendizaje social, se puede afirmar que los juicios acerca

de la relación, se basan en el intercambio de recompensas o costos dados por un

comportamiento determinado, de lo cual depende el tipo de evaluación que cada uno de los

miembros realice acerca de su relación; es así, que si se presenta un mayor intercambio de

recompensas, la evaluación de la relación será más positiva; mientras que si existe un

mayor intercambio de costos, la evaluación tenderá a ser más negativa (McNulty & Russell,

2010; Christensen & Jacobson 1998).

En conclusión, se podría afirmar que las conductas negativas tienden a ser

problemáticas cuando al presentarse acarrean mayor costos que beneficios para la relación,

lo cual incide directamente en el nivel de satisfacción. Según McNulty y Russell (2010), las

conductas negativas que acarrearían mayor costo para la relación serían los

comportamientos que involucran declaraciones indirectas, las cuales implican tácticas

implícitas como las conductas de evitación, de insinuación y suposición, se entiende que

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 22

tienen un mayor costo porque son vagos y ambiguos en cuanto a lo que pretenden lograr en

el compañero; es decir, que no cumplen con su función de cambio sino que generan

resentimientos en la pareja. Es así, como las conductas negativas que tienden a generar

beneficios, son aquellas que son directas como la culpa, las ordenes y el rechazo, ya que

estos comportamientos dicen de forma explícita el cambio que se desea del compañero;

aumentando la probabilidad de generar un cambio.

Desde la perspectiva de las terapias de tercera generación, la insatisfacción de la pareja

ha sido entendida como la consecuencia de las incompatibilidades que se presentan entre la

pareja, las cuales se generan de las similitudes y diferencias que en un momento fueron

atractivas, pero al pasar del tiempo se volvieron una fuente de incompatibilidad

(Christensen & Jacobson 1998).

Cuando se empiezan a presentar las diferencias entre la pareja, al inicio los compañeros

la aceptan, pero cuando esas incompatibilidades se vuelven costosas, se presenta la

frustración y con ella comportamientos de demanda y de retirada; esto, conduce a

comportamientos coercitivos, de vilipendio y de polarización (Christensen & Jacobson

1998). Por lo tanto, las interacciones de las parejas incrementan la probabilidad del

conflicto, generando una sobreevaluación del conflicto y se subestima el comportamiento

de apoyo que se presente (Cutrona, 1996; Bradbury, Rogge & Lawrence, 2001; como se

citaron en Herrington, Mitchell, Castellani, Joseph, Snyder & Gleaves, 2008).

Las incompatibilidades en las parejas, se presentan de acuerdo con unos temas

centrales, como lo son el de cercanía vs. la distancia, el control vs. la responsabilidad, tú no

me amas vs. yo sí te amo, eres tú la que no me ama, y el artista vs. el científico. Debido a

las incompatibilidades entre la pareja, se presenta que uno o los dos compañeros de la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 23

pareja se encuentran deprivados de reforzamiento o expuestos a situaciones aversivas,

generando interacciones negativas y conflictivas (Christensen & Jacobson 1998).

Por lo tanto, esas incompatibilidades o diferencias van a afectar la evaluación que cada

uno de los miembros realiza en cuanto a su nivel de satisfacción con la pareja, en un

momento determinado. Es así, que según Eldridge & Christensen (2002), la disminución en

la satisfacción de la pareja, se relaciona con la presentación de niveles elevados de

comportamientos de demandas y de retiradas.

Según Christensen y Pasch (1993), esas interacciones negativas y conflictivas, generan

tres patrones de comportamientos: 1. Una eviatación mutua, en donde las parejas no

discuten esas diferencias de forma abierta; 2. Una interacción negativa mutua, en donde los

dos compañeros emplean ataque aversivo; y 3. Un patrón de retirada, en donde un

compañero emplea la interacción negativa, mientras el otro evita y se retira (como se citó

en Christensen & Jacobson 1998).

Por lo tanto, desde la perspectiva conductual-cognoscitiva, cuando se quiere definir un

problema, la conceptualización se hace desde dos puntos de vista: Primero, de la existencia

de un exceso en el comportamiento o porque existe un déficit del mismo; segundo, de

acuerdo a la funcionalidad que cumple ese comportamiento dentro del contexto específico.

Según Epstein y Baucom (2002), las parejas que presentan algún tipo de conflicto o

problema, su relación gira entorno principalmente de excesos y déficits de conductas tanto

positivas como negativas entre ellos. Estos comportamientos, se pueden categorizar en tres

tipos de patrones: Primero, las parejas se pueden presentar con un exceso de conductas

negativas y con un déficit de conductas positivas. Segundo, parejas con déficits tanto de

conductas positivas como negativas, se podría decir que estas parejas son aquellas que han

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 24

estado juntas por muchos años, siendo definida la relación por ellos mismos como una

“pareja que ha perdido vitalidad”. Finalmente, algunas parejas demuestran tener un alto

nivel tanto de conductas positivas como negativas; estas relaciones son definidas por ellos

mismos como “tormentosas”, ya que es probable que tengan períodos de profundas crisis

para luego experimentar períodos de reconciliación y cuidado.

Para poder tener una mejor comprensión del funcionamiento de las parejas en relación

con su satisfacción o no con la relación, se hace necesario categorizar tanto los

comportamientos positivos como los negativos. A pesar de que no hay un acuerdo en esta

tipología, parecieran encontrarse dos grandes categorías de comportamientos que están

relacionadas con el ajuste de la pareja. Primero, las parejas pueden vincularse o no en

comportamientos expresivos que implican cuidado, preocupación, afecto y amor; se

enfocan en los aspectos emocionales de la relación, en ayudar o no a que la pareja se sienta

protegida y valorada. Segundo, las parejas se pueden involucrar o no en acciones

instrumentales, las cuales son las que ayudan a mantener la relación, como el obtener

dinero, preparar la comida, realizar las tareas de la casa, tomar decisiones, etc. (Epstein &

Baucom, 2002).

Algunas investigaciones han encontrado que la reducción en los comportamientos

negativos y el incremento de los comportamientos positivos, juegan un papel importante en

el bienestar o insatisfacción de la pareja (Sayers, Baucom, Sher, Weis & Heyman, 1991;

Sevier, Eldridge, Jones, Doss & Christensen, 2008; como se citó en Baucom, Sevier,

Eldridge, Doss & Christensen, 2011). Sin embargo, es importante resaltar que las personas

tienden a dar valores diferentes a estos comportamientos; algunos hacen más énfasis en las

tareas pragmáticas mientras que otros aprecian más los actos expresivos. Es aquí donde

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 25

pueden surgir conflictos, ya que cuando uno de los dos considera que la otra va a apreciar

un gesto específico y se esfuerza por demostrarle a su compañero(a) cuánto lo (la) aprecia y

no necesariamente éste lo va a valorar de manera positiva (Epstein & Baucom, 2002).

Las conductas negativas inciden sobre el significado de la relación y por lo tanto

afectan el grado de satisfacción que cada pareja tiene de la misma. Un exceso de

comportamientos negativos caracteriza a muchas parejas en conflicto, de hecho se ha

encontrado que estos comportamientos negativos tienen un impacto mayor en el compañero

que los mismos gestos positivos. Es así que las parejas en conflicto presentan una

frecuencia mayor de comunicación negativa tal como culpabilizar al otro, no asumir

responsabilidades, etc. (Epstein & Baucom, 2002).

Por otro lado, cuando se habla del aspecto emocional en la interacción de la pareja, se

observa que las parejas que presentan una regulación emocional, son parejas que

demuestran una mayor satisfacción con su pareja; mientras que en las parejas que presentan

una regulación emocional negativa, demuestran una menor satisfacción (Yuan, McCarthy,

Holley & Levenson, 2010).

Epstein & Baucom (2002), afirmaron que las diferentes formas de comportamiento

negativo hacia el compañero, que hacen disminuir el nivel de satisfacción con la pareja se

deben principalmente porque son comportamientos negativos frecuentes en las

interacciones, los cuales conllevan a un sentimiento negativo general y continuo en la

relación y porque se emplean formas displicentes de comunicación tales como la crítica y la

hostilidad, lo cual perjudican el autoestima del compañero.

Generalmente, cuando la tasa de comportamientos negativos se ha vuelto intolerable

dentro de la relación, uno o los dos miembros de la pareja comienzan una terapia, en el

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 26

momento en que piden ayuda terapéutica, estas dificultades se han vuelto bastante

aversivas.

Concluyendo entonces, que la insatisfacción de pareja, es la forma en que la persona

percibe su propio matrimonio respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad en un

punto en el tiempo (Roach, Browdwn y Frazier, 1981; como se citó en Arias, 1989), donde

evalúa los comportamientos del cónyuge y de la interacción (Pick y Andrade, 1988; como

se citó en Acevedo, Restrepo & Tovar, 2007), dependiendo de la presentación de

incompatibilidades en diferentes temas (Christensen, & Jacobson, 1998), como la

cercanía/distancia, el control/responsabilidad, el tú no me amas/yo sí te amo, eres tú la que

no me ama y el artista/el científico. Estos temas de diferencias, son los generadores de

conflicto entre la pareja. Adicionalmente, la insatisfacción de pareja, está determinada por

la presentación de patrones de comportamientos que tienen la intención de modificar el

comportamiento del compañero como los patrones de comportamientos negativos, y los

patrones de comportamientos de polarización.

3.1.1 Adquisición de la insatisfacción de pareja

Cuando se habla de la adquisición del comportamiento problema, se hace referencia

a la forma en la cual la persona, en este caso la pareja, aprendió o adquirió el

comportamiento. Es importante, que la/el psicóloga/o evalúe dentro del análisis funcional,

la forma en que se adquirió el comportamiento.

En la adquisición de la insatisfacción de pareja, se debe entender que es un

comportamiento que se puede aprender tanto por las historias individuales de cada uno de

los miembros que conforman la pareja, como por los patrones de interacción que se

desarrollan al interior de la misma pareja; Bandura (1969), afirmó que los problemas que

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 27

presentan en la pareja, son producto de sus patrones de interacción (como se citó en

Rehman & Holtzworth-Munroe, 2006). McNulty, O’Mara & Karney (2008), afirmaron que

el cambio en la severidad de los problemas entre la pareja, dados sus patrones de

interacción, se encuentran igualmente relacionados negativamente con los cambios en la

satisfacción marital. Esto fue confirmado en dos estudios longitudinales realizados por

McNulty & Russell (2010), en donde encontraron que la relación entre la presentación de

los comportamientos negativos y la satisfacción de la pareja, depende de si estos

comportamientos negativos se presentan en los problemas irrelevantes, haciendo que estos

problemas se vuelvan relevantes; mientras que si los comportamientos negativos se

presentan en los problemas severos, estos se mejoran.

En el estudio realizado por Rehman y Holtzworth-Munroe (2006), en donde realizaron

un estudio a través de diferentes culturas, llegaron a la conclusión de que se puede

generalizar universalmente la relación negativa entre el patrón de interacción de demanda y

retirada con la satisfacción marital. En cuanto a la influencia del generó sobre al patrón de

interacción, afirmaron que este patrón de interacción no depende del género sino de cuál

compañero quiere el cambio, es decir que el patrón varía acorde a su función en el

contexto; pero sin embargo, se debe tener en cuenta la cultura a la que pertenece la pareja,

ya que la cultura determina la estructura de la pareja (patriarcado, matriarcado o

igualitaria), en donde si se encuentran diferencias de género. Esta investigación presentó

una limitación importante que puede influir directamente sobre estas conclusiones, ya que

es necesario tener medidas acerca de las creencias de acuerdo a los roles de género.

Los patrones de interacción negativo entre las parejas, se pueden presentar por

diferentes razones: 1. Las parejas no son consientes del impacto de sus conductas negativas;

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 28

2. Los individuos aprenden conductas negativas como una estrategias para promover el

cambio de comportamiento, para que sus necesidades sean suplidas o para poner fin a los

gestos negativos de su pareja; 3. Uno de los dos actúa de manera destructiva para crear

distancia entre la pareja; 4. El comportamiento negativo de la pareja puede ser el resultado

de psicopatología individual; y 5. Los comportamientos negativos surgen de necesidades

frustradas y desembocan en reciprocidad negativa, por lo que el patrón de interacción causa

conflicto (Epstein & Baucom, 2002).

Es así, que cuando se habla de insatisfacción de pareja, relacionada principalmente con

la disminución de los comportamientos positivos, como los gestos pequeños entre la pareja,

existen al menos tres factores que hace que se presente esa disminución en el

comportamiento, como: 1. Las diferencias individuales, que podrían ser como el haber

crecido en familias en las que estos comportamientos fueron muy poco frecuentes; por lo

tanto, no son parte importante de la cotidianidad de la persona; es decir, que se aprendió por

modelamiento. 2. Patrones de comportamientos que se desarrollan al interior de la pareja,

en donde las personas refieren que al comienzo de la relación eran más románticos y

cariñosos con sus parejas, pero que debido a las múltiples demandas y actividades diarias,

estos gestos pasaron a un segundo plano y 3. Continuando con los patrones que se

desarrollan al interior de la pareja, algunas parejas comentan que los comportamientos

pequeños de afecto y cariño todavía se presentan, pero que no tienen el mismo impacto que

alguna vez tuvieron, posiblemente debido a lo que Jacobson y Margolin (1979)

denominaron erosión del refuerzo; es decir, si un comportamiento se repite durante un largo

período de tiempo, su calidad de reforzamiento disminuye o pierde valor (como se citó en

Epstein & Baucom, 2002; Christensen, Jacobson & Babcock, 1995).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 29

Según Patterson (1982), la insatisfacción de pareja también puede ser el resultado por el

inicio de comportamientos que emplean técnicas coercitivas como la deprivación de un

reforzamiento o la exposición a un aversivo (como se citó en Christensen, Jacobson &

Babcock, 1995), los cuales son considerados patrones de comportamientos negativos.

Esos patrones de interacción negativos que conducen a la insatisfacción de pareja,

pueden ser desarrollados a través del tiempo de la relación, donde la exposición a las

diferencias o incompatibilidades se reconocen a medida que la pareja tiene un mayor

contacto y se conocen mejor o se generan más diferencias por las experiencias que

comparten juntos o por la experiencia individual (Christensen, Jacobson & Babcock, 1995).

Soportando la idea anterior, Osterhout, Frame y Johnson (2011), en un estudio realizado

observaron que las parejas que se encuentran comprometidas, presentan antes del

matrimonio, comportamientos negativos de interacción; por lo tanto, afirman que durante la

etapa del compromiso, las terapias psicológicas pueden ser de gran ayuda para prevenir los

conflictos y sus consecuencias.

Al estar relacionada la adquisición de la insatisfacción de pareja con la historia de vida

de la persona, inevitablemente se deben hablar de problemas que presentan las personas

antes y durante su relación; esos problemas individuales, pueden ser denominados como

psicopatologías previas (ansiedad, depresión, consumo de sustancias psicoactivas, etc.),

también afectan la evaluación sobre la satisfacción de pareja. South, Krueger y Iacono

(2011), en su estudio pudieron demostrar una correlación negativa entre la presentación de

alguna psicopatología con el ajuste a las relaciones de pareja. Concluyendo, que las

diferencias en las experiencias de cada individuo, sus problemas individuales y sus

experiencias vividas con la pareja, pueden llegar a afectar la satisfacción de la pareja en

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 30

ciertos momentos. Demostrando, que no se necesita estar casado para presentar

insatisfacción en la pareja, considerando entonces que no solamente la etapa anterior al

matrimonio, sino también en relaciones de pareja que inician o llevan años juntas, se puede

emplear la intervención no solo para ayudar a la pareja que presenta actualmente

insatisfacción, sino también para prevenir la posible presentación de la insatisfacción, a

través del desarrollo de habilidades en diferentes etapas de la pareja para que aprendan a

afrontar posibles problemas en el futuro.

Por lo tanto, cuando se habla de cómo afecta cada uno de estos antecedentes a la

conducta de insatisfacción de pareja, Johnson, Davila, Rogge, Cohan, Lawrence, Karney &

Bradbury (2005), en su investigación de tipo correlacional, afirmaron que las habilidades

negativas al igual que el afecto negativo, están relacionados con el nivel de insatisfacción

de pareja, mientras que los patrones de interacción están relacionados con el cambio en la

insatisfacción.

Esto lleva a concluir que tanto la teoría, como las investigaciones, han demostrado que

las diferencias individuales, posibles psicopatologías individuales, la historia de aprendizaje

y principalmente los patrones de interacción en la pareja tienen una relación negativa con la

satisfacción de la pareja.

3.1.2 Mantenimiento de la insatisfacción de pareja

Es común que las parejas en conflicto tiendan a responder a los comportamientos

negativos de sus parejas con otros comportamientos negativos. Cada individuo tiende a

considerar que la cadena de conductas negativas fue iniciada por su compañero,

justificando sus propios gestos como una respuesta a lo que su compañero hace o deja de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 31

hacer; una simple conducta negativa puede comenzar una cadena de comportamientos

destructivo (Epstein & Baucom, 2002).

Esa cadena de comportamientos negativos se mantiene, debido a que cuando un

miembro de la pareja cede, se presenta un reforzamiento positivo y negativo; por parte de la

persona que está empleando el método coercitivo, se refuerza el comportamiento

positivamente ya que obtiene lo que buscaba, mientras que por parte de la persona que

estaba recibiendo la conducta coercitiva, se refuerza su comportamiento negativamente ya

que deja de recibir la estimulación aversiva. Por lo tanto, al ser reforzados los dos

miembros de la pareja, se espera que esta cadena de comportamientos destructivos se siga

presentando (Christensen, Jacobson & Babcock, 1995). Por lo tanto, el comportamiento de

la pareja se mantiene por un condicionamiento directo.

Es así, que cuando la persona es sometida a estados de privación de una consecuencia o

si se le expone a una estimulación aversiva, la consecución de la consecuencia, o el escape

o evitación de la estimulación aversiva, se convierten en reforzadores, alterando el

comportamiento de acuerdo a su historia individual de aprendizaje (Valdivia Y Luciano,

2006), pero teniendo en cuenta su contexto actual entre la pareja.

En cuanto al mantenimiento de la insatisfacción de pareja que se presenta por el

reforzamiento negativo debido a que la persona escapa o evita la exposición a una

estimulación aversiva, desde la teoría de los marcos relacionales, se denomina como la

evitación experiencial destructiva, donde el sujeto hace todo lo necesario para mantenerse

alejado de la experiencia de malestar y dolor en el cual vive, convirtiéndose esta en un

reforzador (Luciano y Hayes, 2001).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 32

Es así, que la evitación experiencial, es la estrategia para alterar o controlar la forma,

frecuencia o sensibilidad situacional de las experiencias internas. Esas experiencias internas

son los pensamientos, sentimientos, sensaciones o recuerdos; realizando la evitación

experiencial de forma natural, debido a la capacidad que se tiene de evaluar, predecir y

evitar eventos (Luoma, Hayes & Walser, 2007). Cuando se habla del trastorno de evitación

experiencial, se hace referencia a que la persona evita lo que le produce malestar o dolor, de

forma constante y generalizada, lo cual lo lleva a que viva una vida limitada, debido a que

este patrón evitativo extiende el sufrimiento a diferentes áreas de funcionamiento. Siendo

entonces, la evitación experiencial perjudicial, ya que la persona no resuelve sus conflictos,

ya que la evitación se interpone entre lo que la persona desea para su vida (Wilson &

Luciano 2002).

Por lo tanto, cuando se presentan cambios continuos en los patrones de comportamiento

de la pareja, tienden a existir cambios sobre la percepción del compañero (Gottman, 1994;

como se citó en Beach, Fincham, Amir & Leonard, 2005), llevando a la pareja a presentar

de forma constante las cadenas de comportamientos negativos y a evitar experiencialmente

sus emociones para evitar el dolor, lo que conlleva a un cambio en los patrones de

interacción cotidianos, la percepción de bienestar acerca de la relación y del compañero,

confirmando así la insatisfacción que sienten con su pareja, manteniendo el proceso de

polarización.

Cuando la pareja, entra en ese proceso de polarización, según Christensen y Jacobson

(1998), los compañeros tienden a comportarse más coercitivamente, convirtiendo sus

diferencias en deficiencias; por lo tanto, cada vez las personas se polarizan más en su

posición. Esto, lleva a cada uno de los compañeros a repetir con mayor frecuencia la cadena

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 33

de comportamientos negativos y la evitación experiencial, lo que resulta en un aumento en

la deprivación y en la forma en que perciben sus diferencias.

Esos comportamientos negativos, los cuales están relacionados con la forma de

comunicación inadecuada que se presenta en las parejas, exacerban o impiden la solución

de los conflictos, principalmente porque no permiten la articulación entre los pensamientos

y sentimientos sobre los problemas y porque la pareja presenta un déficit en la toma de

decisiones para afrontar, reducir ese problema (Snyder, Heyman & Haynes, 2005; Johnson,

Davila, Rogge, Cohan, Lawrence, Karney & Bradbury 2005).

Concluyendo, que no sólo las contingencias directas mantienen el comportamiento,

igualmente sucede con las operaciones o eventos cuyas funciones provienen de situarlos

según sus marcos relacionales, trabajando por lo tanto sobre las contingencias directas y

sobre la historia del individuo derivada de las circunstancias presentes (Valdivia y Luciano,

2006), lo cual lleva a las personas a evitar experiencialmente, para dejar de sentir el dolor

que les genera ese conflicto.

Por lo tanto, la intervención debe estar enfocada en los diferentes aspectos que

mantienen la insatisfacción de la pareja, los cuales son: 1. La afectación o reactividad

emocional ante las discusiones o problemas, 2. La cadena de interacción negativa o los

patrones de interacción de la pareja, 3. El déficit de habilidades de comunicación y solución

de problemas y 4. La evitación experiencial.

3.2 Evaluación de la Insatisfacción de Pareja

La cultura y la subcultura, influyen en la manera en que los individuos o la pareja se

comportan y en cómo interpretan sus acciones. Entre una cultura y otra, pueden haber

aspectos comunes pero también diferencias en las formas de comunicación (verbal y no

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 34

verbal) y en la manera de expresar los sentimientos, actitudes y emociones. Los

investigadores y clínicos deben ser sensibles a las diferencias culturales (entre culturas,

entre la misma nacionalidad y entre las relaciones no tradicionales como las parejas de gays

y lesbianas) para poder comprender el funcionamiento de las parejas (Epstein & Baucom,

2002; Snyder, Heyman & Haynes, 2005). Es por esta razón, que la evaluación de una pareja

debe ser a través de análisis funcional, el cual debe ser realizado ideográficamente (Cone,

1998; Haynes, Leisen & Blaine, 1997; Haynes & O´Brien, 2000; como se citaron en

Snyder, Heyman & Haynes, 2005).

La conducta problema, al igual que cualquier otra, se evalúa a través de entrevistas,

cuestionarios y protocolos de observación conductual, lo que se podría denominar una

evaluación multimetódica. Se realiza tanto una evaluación individual (cada uno de los

miembros de la pareja), como a la pareja y a los factores medioambientales que contribuyen

a las preocupaciones de la pareja sobre su relación (Epstein & Baucom, 2002; Christensen

& Jacobson, 1998).

La evaluación debe estar orientada a identificar los diferentes factores que afectan en el

funcionamiento de la pareja, al igual que el contexto en donde se desarrolla la relación.

Tanto la historia personal de cada uno de los miembros de la pareja, como la historia de la

propia de la relación, aportan información valiosa sobre las experiencias pasadas que

pueden continuar teniendo un efecto negativo en la pareja. Adicionalmente, se deben

indagar sobre los recursos que ellos han usado tanto en el presente como en el pasado, para

identificar aquellos que les han funcionado para solucionar los problemas, en comparación

de los que no han sido útiles o que han incrementado la problemática (Epstein & Baucom,

2002; Christensen y Jacobson, 1998).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 35

Por lo tanto, la terapia conductual cognoscitiva realiza una serie de pasos para la

evaluación de una pareja, los cuales son: 1. Identifica inicialmente los problemas

presentados y establece las reglas del proceso terapéutico, lo anterior puede basarse en el

uso de cuestionarios de autorreporte y la entrevista de la primera sesión. 2. Evalúa la

historia de la relación, así como del funcionamiento actual de la pareja, incluye la

observación conductual de la interacción de la pareja. 3. Evalúa la historia individual y el

funcionamiento actual de cada miembro por separado. 4. Retroalimenta a la pareja sobre los

resultados del proceso de evaluación (Epstein & Baucom, 2002).

Según Christensen y Jacobson (1998), al igual que la terapia conductual cognoscitiva, la

terapia conductual integrativa se organiza alrededor de la formulación, teniendo como

objetivo el análisis funcional que permitirá entender cuál es el comportamiento problema,

cómo se aprendió y como se ha mantenido; de tal manera, que se pueda generar el plan de

tratamiento de una forma más eficaz. Para esto, la evaluación que realiza el terapeuta debe

apuntar a resolver seis preguntas principales, ¿Qué tan conflictualizada está la pareja?,

¿Qué tan comprometida está la pareja con la relación?, ¿Cuáles son los aspectos que los

dividen?, ¿Por qué estos aspectos son un problema para ellos?, ¿Cuáles son las fortalezas

que los mantienen juntos? y ¿Qué puede hacer el tratamiento para ayudarles?.

En la terapia comportamental integrativa, se analizan los temas en los cuales la pareja

presenta diferencias, ya que estos con frecuencia son las clases de respuestas, donde se

entiende que son comportamientos que cumplen con la misma función (Christensen,

Jacobson & Babcock, 1995; Christensen y Jacobson, 1998); es importante tener claro las

clases de respuestas, ya que permite un mejor entendimientos de la problemática que

presenta pareja y por lo tanto es la base de un adecuada análisis funcional.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 36

Realizar una adecuada definición de las clases de respuestas, permite por lo tanto al

terapeuta detectar áreas de importancia que el mismo consultante no había mencionado,

pero que son relevantes; igualmente permite ver la universalidad de los problemas y es útil

para los consultantes, clasificar los comportamientos de acuerdo a los temas (Christensen,

Jacobson & Babcock, 1995).

Unas de las limitaciones para evaluar la interacción de pareja son que el psicólogo no

está presente en la mayor parte de la interacción entre la pareja, la naturaleza idiosincrática

de la historia de aprendizaje, se tiene un nivel limitado para influenciar directamente las

condiciones en sus vidas y que las parejas describen no sólo las variables controladores sino

también las variables derivadas (Christensen, Jacobson & Babcock, 1995; Christensen y

Jacobson, 1998). Si se analizan estas limitaciones, son las limitaciones que se presentan en

cualquier proceso de evaluación psicológica, las cuales han sido manejadas a través de

diferentes formas, como por ejemplo los autorregistros, la observación de los

comportamientos durante las terapias, las tareas para la casa que permiten la generalización

del comportamiento.

3.2.1 Cuestionarios de evaluación de la insatisfacción de pareja

El terapeuta puede escoger el administrar un cuestionario de auto reporte a los

miembros de la pareja, se le deben entregar al terapeuta antes de la sesión inicial. Se

realizan con el objetivo de que el terapeuta pueda revisarlos, para poder incluir algunos

aspectos específicos de la relación, dentro de la entrevista inicial de la primera sesión. Una

excepción a este procedimiento, se da en los casos en que se ha reportado en el contacto

telefónico sobre un caso de abuso o violencia, en este caso los cuestionarios sobre abuso

deben ser administrados en las sesiones individuales (Epstein & Baucom, 2002).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 37

Christensen, Atkins, Baucom y Yi (2010), en su investigación, emplearon autorreportes

para evaluar el nivel de malestar presentado por las parejas. Whisman, Snyder & Beach

(2009), en su investigación, desarrollaron un screening para evaluar el desacuerdo de

pareja, pero igualmente resaltan la importancia emplear los autorregistros. Christensen y

Eldrige (2005), igualmente emplearon autorregistros para demostrar la relación entre los

patrones de comportamiento de demanda-retirada y la satisfacción marital (como se citó en

Rehman, & Holtzworth, 2006). Snyder, Heyman y Haynes (2005), afirmaron que los

autorreportes, sirven para obtener información importante acerca de la tasa de frecuencia y

la intensidad de las interacciones negativas, al igual que de los patrones de interacción de la

pareja. Demostrando así, que existen infinidad de investigaciones, que apoyan el empleo de

los autorregistros, dada su eficacia y efectividad en recoger información relevante para la

evaluación del comportamiento.

Pero, no se pueden evitar mencionar la existencia de un sin número de cuestionarios,

escalas, test que pueden ser empleados, como lo son: La escala de ajuste diádico (Spanier,

1976), el inventario de satisfacción marital (Snyder, 1979), Inventario de Cumplimiento de

necesidades (Prager & Buhrmester, 1998), el inventario de interacción sexual (Rust &

Golombok, 1986), el inventario familiar de eventos y cambios de vida (McCubbin,

Patterson & Wilson, 1991), el cuestionario de áreas de cambio (Weiss, Hops & Patterson,

1973), el cuestionario de modelos de comunicación (Christensen & Sul- laway, 1984), el

estudio de la actitud matrimonial (Pretzer, Epstein & Fleming, 1991), el inventario de

creencias en la relación (Eidelson & Epstein, 1982), el inventario de normas especificas de

relación (Baucom, 1996), entre otros (como se citaron en Epstein & Baucom, 2002). Estos

son igualmente importantes y válidos a la hora de realizar una evaluación de pareja.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 38

Existen un sin número de escalas, inventarios, pruebas, test que tienen el objetivo de

evaluar la interacción entre la pareja, la gran mayoría surgió como una medida

principalmente de la insatisfacción marital, dejando de lado a las parejas que no estaban

casadas, posteriormente se iniciaron a construir o validar estas pruebas tanto para parejas

como para matrimonios.

La validación de estas pruebas, también se basan en su aplicación en diferentes

comunidades e idiomas. Unos ejemplos de esto, son la validación de la escala de

satisfacción marital desarrollada por Roach, Bowden y Frazier, (1981), la cual fue traducida

y aplicada por Estrella (1985) en una comunidad Mexicana y Puerto Riqueña (como se citó

en Arias, 1989); posteriormente Arias (1989) y Arias (2003), evaluaron la confiabilidad y

validez, de la versión en español, aplicándola en México. En estas investigaciones, se

encontró una alta validez interna de la versión en español, siendo un instrumento valiosos

en la investigación y diagnóstico.

Otro ejemplo de validación de una escala, es la investigación realizada por Santos,

Vallejo & Sierra (2009), en donde validaron la escala de ajuste diádico (Spanier, 1976;

como se citó en Santos, Vallejo & Sierra, 2009) en una muestra española, encontrando que

esta escala, en su versión corta mostró una adecuada fiabilidad y validez.

Siendo importante el uso de estas pruebas para la evaluación de la insatisfacción de

pareja, donde muchos autores e investigadores se han esforzado para su validación, es

importante resaltar que los autorregistros pueden ser más flexibles, se diseñan de acuerdo

con los requerimientos y aportan una información valiosa sobre el comportamiento, motivo

por el cual fueron seleccionados en esta investigación como el método para evaluar el

comportamiento a través de toda la evaluación e intervención.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 39

Para esta investigación, se desarrolló un autorregistro, que permitiera obtener los datos

de evaluación acerca del nivel de malestar, de la frecuencia de discusiones o problemas y

de los patrones de comportamiento negativos y de polarización, ya que ningún cuestionario,

escala o inventario, permite obtener esta información a través de un solo formato.

3.2.2 Entrevista de evaluación de la insatisfacción de pareja

La entrevista para evaluar la problemática de la pareja, tiene como objetivo básico el

poder realizar la formulación del caso clínico, esta formulación será la base y la guía para la

intervención. Incluye adicionalmente otro objetivo, el cual consiste en lograr un impacto

terapéutico durante la fase de evaluación, de tal manera que las parejas se comprometen en

su propio proceso (Christensen & Jacobson, 1998). Por lo tanto, esta entrevista se

fundamentará en indagar la historia general de la pareja y el funcionamiento actual de la

relación, además el terapeuta deberá realizar la observación conductual de la interacción de

la pareja (Epstein & Baucom, 2002; Christensen & Jacobson, 1998).

Es así, como independiente de si la intervención es conductual cognoscitiva o

integrativa, la entrevista debe apuntar siempre a la realización de la formulación del caso;

lo cual, implica conocer los antecedentes de la relación y los individuales, conocer su

funcionamiento actual y los recursos con que cuentan, teniendo en cuenta el contexto en

donde se desenvuelve la pareja. Es decir, esto va a permitir definir y entender cuál es el

comportamiento problema de la pareja en particular, saber cómo se adquirió o aprendió el

mismo y cómo se está mantenido. Con esta información, se puede establecer la

intervención adecuada a esta problemática en esa pareja particular.

Es importante, que el terapeuta pueda generar un vínculo con la pareja durante la

evaluación, debe ser una alianza terapéutica con ambos miembros, para este fin el terapeuta

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 40

debe procurar ser imparcial. En la medida en que el terapeuta escuche y valide las quejas de

cada uno, genera una alianza o vínculo con cada uno y con la pareja (Christensen &

Jacobson, 1998). Se debe dar una sensación de igualdad al interior de la relación, que cada

uno de los miembros de la pareja no piense que el terapeuta tome postura, sino que sea

neutral.

Los propósitos principales de evaluar la historia son: primero poder comprender como

se ha desarrollado la relación de pareja a lo largo del tiempo; segundo, tener en cuenta los

aspectos positivos de la relación en contraste con el conflicto actual y tercero, observar el

estilo afectivo de cada miembro y el grado actual de vinculación con la relación, mientras

se indagan los momentos significativos en su historia (Epstein & Baucom, 2002).

Cuando se evalúa el funcionamiento actual de la relación, es importante enfocarse en

las preocupaciones actuales y las fortalezas de la relación, incluyendo: las demandas que

están experimentando, los recursos disponibles y los que utilizan y cualquier característica

individual o de la pareja que reduzca la habilidad para que se adapten a las circunstancias

(Epstein & Baucom, 2002; Christensen & Jacobson, 1998).

En cuanto a la observación conductual de la interacción de la pareja, el terapeuta debe

observar el comportamiento de cada individuo y su interacción, para poder identificar la

frecuencia de las acciones positivas, negativas y de los diferentes tipos de secuencias de

comportamientos entre las parejas. Una forma para poder realizar esta observación, durante

la entrevista, es crear situaciones simuladas de interacción (Epstein & Baucom, 2002).

La entrevista, es empleada a la vez como una herramienta para que la pareja al salir de

la sesión, se sienta mejor de como entraron, sintiendo alivio al comprender el proceso que

van a comenzar (Christensen & Jacobson, 1998), se debe tener presente que la intención de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 41

realizar una entrevista en donde se recuerde el pasado de cómo se conocieron, cómo

decidieron formar la pareja, su primer beso, es con la intención de recordar eventos

positivos en la pareja.

3.3 Intervención Psicológica de la Insatisfacción de Pareja

Una vez realizada la evaluación donde se obtiene la formulación del caso, se pasa a

plantear la intervención. La formulación es importante, ya que esta permite saber sobre qué

variables se deben intervenir para poder ejercer un cambio en el comportamiento del

consultante.

Gurman (2001), afirmó la práctica en las terapias para la intervención en las

problemáticas de la pareja está distanciada de la investigación, debido a que la

investigación se está enfocando más en los paquetes y las técnicas o métodos terapéuticos;

la investigación como la práctica debería estar enfocada en la conexión adecuada entre el

terapeuta y su marco conceptual. Es por esto, que se hace necesario aclarar, que cuando un

terapeuta aplica los protocolos que han sido empíricamente validados, los emplean como

una guía y no como una serie estricta de pasos a implementar, el psicólogo debe tener

habilidades terapéuticas, en donde a través de la utilización de esos protocolos, sea capaz de

aplicarlos y moldearlos a las características individuales de sus consultantes, estando

acorde y manejando correctamente su marco conceptual. Adicionalmente, la unión entre la

investigación y la práctica, es asegurarse que a través de la validación de los protocolos, se

le está ofreciendo a los consultantes intervenciones que han demostrado ser efectivas

(Sexton, Coop, Gurman, Lebow, Holtzworth & Johnson, 2011).

Al plantear la intervención psicológica para la insatisfacción de pareja, se realizó una

búsqueda sobre las diferentes intervenciones empleadas por el modelo conductual

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 42

cognoscitivo, se encontraron las terapias comportamentales como las de intercambio de

comportamientos (BE) y el entrenamiento en comunicación y solución de problemas que

han sido ampliamente utilizadas, igualmente se encontró la terapia conductual integrativa.

Posteriormente, se realizaron diferentes análisis para determinar cuál de las dos emplear,

teniendo en cuenta que como profesional ético, primero se le debe ofrecer las mejores

alternativas a los consultantes, segundo, que a nivel clínico se está regulando la utilización

de intervenciones empíricamente validadas y tercero, que la terapia estuviera en

congruencia tanto con el enfoque de la investigación, del terapeuta y de la Universidad.

Es así, que ese primer análisis, inició con la comparación entre las dos terapias, ya que

la terapia comportamental integrativa se fundamenta en las bases de la terapia

comportamental; encontrándose que el factor común, es el análisis funcional del

comportamiento. Ese análisis funcional del comportamiento, conduce al entendimiento de

la función que cumple un comportamiento determinado, así se pueden manipular las

condiciones antecedentes y consecuentes de ese comportamiento; objetivo principal de toda

intervención psicológica (Christensen & Jacobson, 1998).

La diferencia entre la terapia comportamental integrativa y las comportamentales, es

que la primera se interesa más por un cambio basado en las contingencias naturales,

mientras que la terapia comportamental se basa en el cambio generado por el seguimiento

de reglas; siendo el factor diferenciador la inclusión de la estrategia de aceptación a las

estrategias de cambio, que emplea la terapia comportamental (Christensen & Jacobson,

1998). La terapia comportamental integrativa de pareja, hace parte de las terapias

psicológicas de la tercera generación, ya que enfatiza en los aspectos de la experiencia

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 43

privada (emoción), en la aceptación y en mindfulness, haciendo énfasis en el análisis

funcional del comportamiento (Lebow, Chambers, Christensen &Johnson, 2012).

Al integrar entonces las dos estrategias, la aceptación junto con las de cambio en una

intervención, se puede afirmar que la insatisfacción de la pareja se disminuirá, ya que se

reforzará el comportamiento tanto por el seguimiento de la reglas, como por las

contingencias naturales; se pensaría entonces que la terapia comportamental integrativa,

sería más efectiva en comparación con la terapia comportamental. El seguimiento de reglas,

hace entonces referencia a esas instrucciones que se le da a la persona, con la función de

que este las implemente en su contexto natural.

Demostrando así, que para la terapia comportamental integrativa se hace fundamental

trabajar con las contingencias naturales, ya que esta se siente más natural y es más aceptado

por los consultantes (Christensen & Jacobson, 1998). El terapeuta comportamental

tradicional, le enseña a la pareja la forma adecuada de comunicarse y de reforzar esa

comunicación; mientras que en la terapia comportamental integrativa, el terapeuta le ayuda

a cada uno de los miembros a procesar su reacción de acuerdo a la comunicación que se

presenta entre ellos, dejando que esas respuestas moldeen el comportamiento del otro

(Christensen, Atkins, Baucom & Yi, 2010).

En cuanto a la efectividad de la terapia comportamental integrativa, Lundblad y

Hansson, (2006) realizaron una investigación en Suiza, emplearon un diseño multicéntrico

no aleatorizado, con un solo grupo clínico, encontrando que se presentó una mejoría del 50

al 75%, esta mejoría se mantuvo en el seguimiento a los dos años.

Respecto a esta diferencia en cuanto a la efectividad de cada terapia, Shadish y Baldwin

(2005) y Snyder, Castellani & Whisman (2006), realizaron una serie de investigaciones,

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 44

donde demostraron que la terapia en pareja, principalmente la terapia comportamental,

influye en el mejoramiento de la interacción entre la pareja; dados los cambios ocurridos

por la terapia comportamental. Christensen y Heavey (1999), igualmente en su

investigación, demostraron que esos cambios se mantenían entre 6 meses y un año de

realizada la intervención. Es importante aclarar, que existe un gran vacío en cuanto a la

investigación de la efectividad de la terapia de pareja, debido a que se han realizado pocas

investigaciones que estudian su efectividad después de 2 o más años de haber sido

implementada (como se citaron en Christensen, Atkins, Baucom & Yi, 2010).

Christensen, Atkins, Baucom y Yi (2010), realizaron una investigación con una

metodología de ensayo clínico aleatorizado, en donde evaluaron los efectos de la terapia

comportamental y la terapia comportamental integrativa de pareja, durante un período de 5

años, posteriores a la intervención. Ellos encontraron que existía una gran mejoría en la

satisfacción de la pareja durante la intervención; mientras que inmediatamente después de

terminada la intervención, se observó un descenso, el cuál es esperado cuando se hace la

retirada. Pero, durante la etapa de seguimiento (5 años después), se encontró que las parejas

que seguían juntas, mejoraron su nivel de satisfacción, comparados con sus niveles

anteriores al tratamiento. La comparación entre los resultados de la terapia comportamental

y la integrativa, evaluados en el seguimiento a 5 años, no fueron significativos; sin

embargo, en el seguimiento realizado a los 2 años de terminada la intervención, si

mostraban diferencias significativas, las parejas que recibieron la terapia comportamental

integrativa mantuvieron tasas más elevadas de satisfacción en comparación con las parejas

que recibieron la terapia comportamental tradicional.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 45

Estos resultados, soportan la investigación realizada por Jacobson, Christensen, Prince,

Cordova y Eldrige (2000), donde compararon parejas a las que se les había realizado la

terapia comportamental de pareja y la terapia comportamental integrativa, encontraron:

Primero, se realizó claramente la distinción entre las dos terapias y que las parejas que

recibieron la TCI, mostraron un mayor incremento en la satisfacción de pareja en

comparación de las parejas que recibieron la terapia comportamental.

Lundblada, y Hansson, (2006) realizaron una investigación en Suiza, donde querían

probar la efectividad de la terapia comportamental integrativa en ese país. Emplearon un

diseño multicéntrico no aleatorizado, con un solo grupo clínico, encontrando que se

presentó una mejoría del 50 al 75%, esta mejoría se mantuvo en el seguimiento a los dos

años.

Esta diferencia en la efectividad de la terapia comportamental integrativa y la terapia

comportamental tradicional, se puede deber principalmente a que la terapia integrativa se

enfoca en los temas a largo plazo, mientras que la terapia comportamental tradicional se

enfoca en el intercambio comportamental incrementando la interacción positiva, pero

dejando de lado los temas a largo plazo (Jacobson, Christensen, Prince, Cordova & Eldrige,

2000; Christensen, Atkins, Baucom & Yi, 2010; Lebow, Chambers, Christensen &Johnson,

2012).

Es así, que el factor adicional que se plantea (Christensen & Jacobson, 1998), en la

terapia comportamental integrativa, es el grado de aceptación con el que las parejas

comienzan un proceso colaborativo, en donde ambas partes deben ser responsables por lo

que deben cambiar. De lo anterior, depende en gran medida el éxito de la terapia y debe ser

evaluado antes del inicio de la intervención.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 46

Por lo tanto, la TCI se fundamenta en que los problemas presentados por la pareja, no

son el resultado de sus conflictos por sus acciones u omisiones, sino principalmente son el

resultado de su reactividad emocional a estos; por tal razón, la énfasis principal de esta

terapia es la aceptación (Christensen, Atkins, Baucom & Yi, 2010).

Para poder realizar ese cambio deseado, la terapia comportamental integrativa emplea

dos estrategias principales, la aceptación y el cambio, donde cada estrategia tiene sus

diferentes técnicas de intervención. Por lo tanto, en la TCI, se combinan estrategias para

lograr la aceptación emocional junto con estrategias orientadas al cambio (Jacobson et al.,

2000).

3.3.1 Aceptación.

Son las estrategias empleadas que tienen como objetivo principal, ayudar a la pareja

a concebir sus diferencias o problema de una forma diferente. Se debe aclarar que la

aceptación es diferente a resignación, ya que la aceptación no quiere erradicar los

problemas sino convertirlos en vehículos de intimidad y esos problemas en vez de tratarlos

directamente, pueden cambiar por ellos mismos una vez se deje de luchar para cambiar al

compañero (Christensen & Jacobson, 1998; Berns, Jacobson & Christensen, 2000). La

aceptación, es una forma alternativa a la evitación experiencial de los eventos privados.

Esta, determina que la persona debe estar atenta de los eventos privados que fueron

determinados por su historia personal de vida, sin necesidad de cambiarlos, principalmente

cuando al cambiarlos genera un daño físico (Luoma, Hayes & Walser, 2007).

Las estrategias principales que se emplean en las estrategias de aceptación son:

1. La unión empática acerca del problema, son intervenciones enfocadas en la

emoción, el objetivo es lograr la unión o conexión empática. Por lo tanto, intentan

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 47

disminuir el impacto del comportamiento negativo, lo cual se logra por la expresión del

dolor que sienten sin realizar acusaciones; en donde se dice que “el dolor más la acusación

es igual a discordia entre la pareja, dolor menos acusación es igual a aceptación”

(Christensen & Jacobson, 1998; p. 104).

2. El desapego unificado, su objetivo es ayudar a que la pareja se distancie del

problema, realizando un análisis intelectual del problema. Se puede realizar enfocando a la

pareja en los temas de diferencias, en el proceso de polarización y en la trampa mutua en la

que ha caído la pareja, haciendo comparaciones de los problemas que han sucedido entre

ellos, colocando otra silla donde los consultantes sienten al problema, entre otras técnicas

(Christensen & Jacobson, 1998; Berns, Jacobson y Christensen, 2000).

3. La tolerancia, se emplea principalmente en consultantes donde se observa que la

unión empática y el desapego unificado no son eficaces para el cumplimiento del objetivo

de la aceptación; por lo tanto, el objetivo de esta técnica es generar tolerancia para que la

pareja pueda interrumpir y/o recuperarse de los conflictos más rápidamente. La base de esta

técnica, es que los compañeros toleren comportamientos que no son destructivos y que

posiblemente el compañero no quiera cambiar. Se debe aclarar que hay situaciones que no

deben ser toleradas como la violencia. Las estrategias empleadas son señalar los aspectos

positivos de los negativos, practicar el comportamiento negativo en la sesión, simular los

comportamientos negativos en la casa y promover la tolerancia a través del autocuidado

(Christensen, & Jacobson, 1998; Berns, Jacobson y Christensen, 2000).

3.3.2 Cambio.

Son técnicas empleadas en la terapia comportamental de pareja, que tienen el

objetivo principal de instigar un cambio directamente a través de instrucciones, este cambio

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 48

se generaliza a los diferentes contextos de la pareja; esto se realiza con el fin de que se

presente un balance entre los comportamientos positivos y los comportamientos negativos

(Christensen & Jacobson, 1998). Las técnicas de cambio son:

1. Intercambio de comportamientos, en donde su principal objetivo es en donde su

objetivo es incrementar el reforzamiento entre la pareja, al menor costo posible

(Christensen, Jacobson & Babcock, 1995; Christensen & Jacobson, 1998).

2. Entrenamiento en comunicación/resolución de problemas, en donde le objetivo es

enseñar habilidades de comunicación mientras solucionan un problema específico, para así

poder solucionar problemas en el futuro. Las reglas de la estrategia son: Primero, se discute

solamente un solo problema; segundo, la persona discute su propia visión del tema; tercero,

el compañero inicia con un parafraseo de lo que el otro acabo de decir (Christensen,

Jacobson & Babcock, 1995; Christensen & Jacobson, 1998).

La estrategia presenta unos pasos ordenados, en donde lo primero que se debe hacer es

definir el problema, en el cual se debe dar un punto positivo del mismo, aprender a manejar

al problema en términos específicos, descriptivos y comportamentales, expresando sus

sentimientos acerca del problema mencionado y reconociendo el papel que juega dentro del

problema, esta fase se finaliza con un breve resumen del problema; posteriormente, se pasa

a la fase de solución el problema, donde la discusión se debe enfocar en encontrar

soluciones más que en una elaboración del problema, enfocándose en la elaboración de una

lluvia de ideas, la cual es evaluada por la pareja de acuerdo a los costos y beneficios, siendo

esta discusión centrada en un compromiso y negociación mutua, llegando a acuerdos

específicos y dejándolos por escrito (Christensen, Jacobson & Babcock, 1995; Christensen

& Jacobson, 1998).).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 49

El entrenamiento en habilidades de comunicación es importante, debido a que muchas

parejas refieren que se sentirían felices de tener gestos afectuosos con sus compañeros, pero

realmente no saben cómo hacerlo. Cada persona puede encontrar su manera singular de

demostrar el afecto hacia su pareja. Puede ser útil entonces, que la persona exprese lo que

realmente desea a su compañero, ya que muchas veces es difícil preguntarle a la pareja

sobre lo que desean, prefieren o necesitan. Esto puede deberse principalmente a tres

factores: primero, la persona puede creer que es inapropiado preguntarle a su pareja lo que

necesita; segundo, muchas parejas refieren que la interacción pierde sentido cuando se

“debe” preguntar al otro sobre sus intereses, para sentirse querido y amado; tercero, así la

persona considere que es apropiado preguntar, él o ella podrían tener dificultad para

expresar sus deseos y necesidades.

En este punto, es indispensable enseñar a la pareja habilidades para expresarse

emocionalmente (Epstein & Baucom, 2002). Sin embargo, diferentes investigaciones

afirman que los patrones de comunicación negativos, afectan de forma directa la

satisfacción marital, por lo tanto es un componente fundamental ha tener en cuenta en la

intervención de esta problemática (Sanford, 2006; Johnson, Davila, Rogge, Cohan,

Lawrence, Karney & Bradbury 2005). Si bien, la comunicación por sí sola no mejora la

satisfacción en la pareja, pero hace parte fundamental para la intervención y mejoría de la

misma.

Ayudar a las parejas a que dejen de atacarse entre ellos y defenderse a sí mismas, no es

suficiente. Desde la perspectiva cognitivo-conductual, se puede encontrar un déficit en

habilidades de comunicación, pero además pueden existir otros factores que deben

evaluarse minuciosamente para ser abordados. Es importante tener en cuenta que el grado

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 50

del incremento en la satisfacción de la relación, tiene poca correlación con el incremento en

habilidades de comunicación por sí mismas (Christensen & Jacobson, 1998); Epstein &

Baucom, 2002). Es así, como Rehman & Holtzworth (2006), realizaron un análisis de los

patrones de comunicación, de demanda y retirada, en la interacción marital; encontraron,

que ese patrón de comunicación era inherente tanto en el hombre como en la mujer y que

por lo tanto, la diferencia en la interacción de pareja estaba enfocada principalmente en el

factor contextual.

Adicional a la explicación de lo que es la terapia comportamental integrativa de pareja,

se debe desarrollar el tema de cómo se implementa, ya que presenta diferentes

componentes. El orden de presentación de los diferentes componentes a veces es

determinado por las características de cada caso; sin embargo, en la TCI se presenta que los

métodos de cambio son más eficaces después de que la pareja ha logrado los objetivos

propuestos por las técnicas de aceptación (Christensen & Jacobson, 1998; Berns, Jacobson

& Christensen, 2000); aunque no se han realizado estudios que confirmen esto.

Para finalizar, esta terapia debe ser implementada por un terapeuta entrenado en ella,

que comprenda sus funciones y por lo tanto debe desarrollar ciertas habilidades como lo

son: Estar atento al material pertinente para la realización del análisis funcional, tener

sensibilidad al contexto, aceptar, habilidad para mostrar y enfocarse en la formulación,

habilidad para mantener una atmósfera terapéutica, habilidad en la utilización del lenguaje

y saber cuándo se debe terminar la terapia(Christensen & Jacobson, 1998).

Barraca (2009), en consonancia con lo anterior, afirmó que las habilidades de un

terapeuta con una formación cognitivo conductual, son limitadas en la aplicación de

técnicas de intervención de tercera generación. Demostrando la necesidad de que el

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 51

terapeuta conductual se actualice en las diferentes técnicas y habilidades requeridas para la

utilización de las técnicas de las terapias de tercera generación, no solo para entenderlas

conceptualmente sino también para desarrollar las habilidades necesarias, para que el

terapeuta sea la persona más idónea y profesional posible, garantizándole a los consultantes

un servicio de calidad.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 52

4 OBJETIVOS

4.1 Objetivo General:

Analizar si existen o no diferencias en la insatisfacción de pareja, dependiendo del

orden aleatorio de presentación de las estrategias empleadas por la intervención, basada en

la guía de manejo de la terapia conductual integrativa en pareja, en seis parejas en la ciudad

de Bogotá

4.2 Objetivos Específicos:

1. Identificar el efecto de la intervención sobre la insatisfacción de las parejas, de

acuerdo a la implementación del protocolo de la TCI.

2. Determinar si se generan o no cambios en las unidades de medidas de

intercambio de conductas, solución de problemas y aceptación, en los participantes.

3. Comparar los efectos de la modificación de conducta en cada una de las fases del

diseño de investigación.

4. Demostrar cómo una intervención conductual-cognoscitiva integrativa, se puede

realizar con rigurosidad metodológica, sin detrimento de aspectos éticos.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 53

5 METODO

5.1 Diseño

Se empleó un diseño experimental de caso único, con un método de series en el

tiempo: evaluación de elementos intraserie, entre elementos y entre sujetos. El diseño

principal es A-B-C-D; donde A es la línea de base (la cual se obtuvo durante la etapa

evaluación), B es la etapa de intervención basada en el componente de aceptación, C es la

etapa de intervención basada en intercambio de comportamientos positivos y D es la etapa

de intervención basada en el entrenamiento en comunicación y solución de problemas. El

orden de implementación de las fases de intervención varió para cada pareja. Quedando así:

pareja uno el diseño es A-B-C-D, pareja dos es A-C-D-B, pareja tres es A-D-B-C, pareja

cuatro es A-B-D-C, pareja cinco es A-C-B-D y pareja seis es A-D-C-B.

La selección de este diseño se basó principalmente, en que es un diseño que permite

analizar los datos entre sus fases, mostrando sus cambios en los niveles, tendencias y

variabilidad; permitiendo realizar conclusiones de los efectos de la intervención sobre la

conducta de los consultantes. Al igual, permite evaluar el efecto de varios elementos de las

intervenciones; adicionalmente, cuando se hacen las comparaciones entre los sujetos,

cambiando el orden de introducción de las fases, permite observar si el orden tiene o no

efecto sobre el comportamiento (Hayes, Barlow & Nelson-Gray, 1999).

5.2 Variables

5.2.1 Variable independiente

Terapia Conductual Integrativa de Pareja. Es una terapia psicológica que se enfoca

en la identificación y control de variables en la interacción de la pareja. Por lo tanto, los

cambios en el comportamiento de la pareja, se fundamentan más en el moldeamiento de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 54

contingencias más que por el cumplimiento de reglas, (Jacobson & Christensen, 1998). El

objetivo principal, es promover en la pareja, una atmósfera donde el dolor pueda ser

expresado sin culpabilizar y acusar, siendo recibido por la pareja de una manera no

defensiva; es decir, que el nivel de afectación producido ante la presentación de diferencias,

se reduzca. Mostrando así, el por qué esta terapia es llamada integrativa, ya que la

aceptación como el cambio se retroalimentan constantemente (Christensen & Jacobson,

1998; Christensen, Atkins, Baucom & Yi, 2010).

La terapia, se divide en dos categorías básicas de intervención:

1. Las intervenciones basadas en la aceptación, en donde sus objetivos son en primer

lugar, no eliminar completamente el conflicto y las diferencias de la pareja sino en ayudarla

a ver sus diferencias de una manera más constructiva y llegar a convertirlas en fortalezas; lo

importante, es que la pareja pueda valorar la diferencia, buscando que la pareja acepte y

aprecie sus diferencias para acercarse y tener una relación con mayor intimidad. En

segundo lugar, neutralizar el impacto del comportamiento negativo del compañero, de tal

manera que sus efectos sean menores; por lo tanto, el comportamiento negativo o la falta de

comportamientos positivos es menos problemático y el tiempo de recuperación por los

comportamientos indeseados, es más corto (Christensen & Jacobson, 1998)

2. Las intervenciones basadas en el cambio (Christensen & Jacobson, 1998), en donde

se presentan las siguientes técnicas:

a) Intercambio de comportamiento, su objetivo principal es cambiar de manera directa

comportamientos problemáticos en una dirección positiva.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 55

b) Entrenamiento en comunicación y solución de problemas, su objetivo es enseñar a

las parejas a escuchar y expresarse de manera directa pero no culpabilizante, como tal

complementan las técnicas de aceptación.

5.2.2 Variable dependiente

Insatisfacción de pareja: forma en que la persona percibe su propia pareja respecto a

un continuo de mayor o menor favorabilidad en un punto en el tiempo (Roach, Browdwn y

Frazier, 1981; como se citó en Arias, 1989), donde evalúa los comportamientos del

cónyuge y de la interacción (Pick y Andrade, 1988; como se citó en Acevedo, Restrepo &

Tovar, 2007), dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(Christensen & Jacobson, 1998) como:

1. Cercanía/distancia, en donde un compañero busca más la cercanía, mientras el

otro busca más distanciamiento (inexpresividad de emociones, menos comportamientos

íntimos, y menos participación en tareas instrumentales).

2. Control/responsabilidad, en donde las parejas que manifiestan este tema como

argumento para su conflicto, discuten sobre quien lleva el control de los dominios de la

vida en pareja y quien debe ser quien lleve la responsabilidad de los dominios donde

ninguno quiere el control.

3. Tú no me amas/yo sí te amo, eres tú la que no me ama, ambos compañeros

experimentan que el otro es poco cariñoso, desagradecido y poco solidario.

4. El artista/el científico, se caracteriza por la tendencia del compañero artista de

valorar la espontaneidad y la aventura, y la tendencia del compañero científico de valorar la

predictibilidad y obtención de metas.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 56

Estos temas de diferencias, son los generadores de conflicto entre la pareja (Christensen

& Jacobson, 1998). Se mide, por medio del promedio diario de la evaluación que cada uno

de los sujetos de la pareja realice del nivel de malestar percibido que genera la diferencia,

por medio de una escala visual análoga donde puntúa diariamente de 0 a 10; en donde 10 es

el máximo nivel de malestar y 0 es el mínimo nivel de malestar.

La insatisfacción de pareja, está determinada por la presentación patrones de

comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero, como los:

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos que tienen la

función de disminuir la probabilidad de presentación de un comportamiento del compañero;

estos son los comportamientos de deprivación de un reforzamiento, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable para la persona; la exposición a una estimulación aversiva, el cual se presenta

cuando una situación se le expone a algo negativo o desagradable para la persona; y los dos

patrones al mismo tiempo, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona (Christensen, & Jacobson, 1998). Se evalúan, por medio de

la frecuencia semanal de los conflictos por las diferencias que se presentan en la pareja, en

donde cada conflicto se clasifica en un patrón de comportamiento negativo; obteniendo así

una frecuencia semanal de la presentación de cada patrón.

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 57

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción (Christensen, & Jacobson, 1998). Se evalúan, por medio de la frecuencia

semanal de la presentación de conflictos por las diferencias que se presentan en la pareja,

en donde cada conflicto se clasifica en un patrón de comportamiento de polarización;

obteniendo así una frecuencia semanal de la presentación de cada patrón.

5.3 Hipótesis terapéutica

Para todos los casos siendo esta: Si se interviene sobre la insatisfacción de las 6

parejas, a través de las diferentes estrategias que emplea la terapia comportamental

integrativa (TCI), como la aceptación, el intercambio de comportamientos positivos y el

entrenamiento en solución de problemas, se esperaría observar en las 6 parejas: 1. Que las

parejas continúen presentando diferencias; 2. Que el promedio del malestar, presentado

ante las diferencias, disminuya; 3. Que se presenten o incrementen los patrones de

comportamientos positivos, siendo estos superiores en comparación con los patrones de

comportamientos negativos.

5.4 Instrumentos.

A continuación se realiza una descripción de los formatos, o técnicas que se emplea-

ron a través de las etapas que se llevaron a cabo en el proceso terapéutico.

5.4.1 Inventario de pareja

Se empleó el inventario de la interacción de pareja, para la realización de la

entrevista (ver Apéndice B), el cual condujo al terapeuta hacia la obtención de los datos,

tanto generales como específicos de la conducta problema presentada por cada pareja. Este

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 58

debía ser diligenciado individualmente por los miembros que componen la pareja (Cautela,

1990).

5.4.2 Autorregistro.

El autorregistro, fue diseñado por la investigadora para poder obtener los siguientes

datos individuales: la frecuencia semanal de las diferencias o discusiones, el nivel de

malestar que producían esas discusiones, la frecuencia de los patrones de comportamientos

negativos como positivos y de los patrones de comportamiento de polarización (ver

Apéndice C).

Este debía ser realizado por los miembros de la pareja, de forma individual, durante

todos los días en una semana; es decir, desde el día de la sesión, donde era entregado el

formato del autorregistro hasta la siguiente sesión programada.

Cuando se realizó su entrega, se dio la explicación a la pareja de cómo debía ser

diligenciado, esto se presentó desde la primera sesión de evaluación, continuándose con su

realización durante toda la intervención, hasta la última sesión.

En el autorregistro, la persona debía describir la situación que era evaluada como

molesta y por lo tanto denominada como una discusión, la cual se presentaba debido a las

diferencias que se daban entre los compañeros; las situaciones, describían los patrones de

comportamientos de polarización de evitación mutua, de retirada y de interacción negativa

mutua.

Esas situaciones, eran clasificadas de acuerdo con los patrones negativos de

comportamiento, los cuales tenían la función de disminuir la probabilidad de presentación

del comportamiento que presentaban los compañeros. Las categorías eran:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 59

1. Exposición: Si la persona ante una situación era expuesta a algo negativo o

desagradable.

2. Deprivación: Si a la persona, durante una situación se le estaba quitando o

imposibilitando la posibilidad de obtener algo agradable.

3. Exposición y deprivación: Si a la persona ante una situación se le exponía y se le

deprivaba al mismo tiempo.

Igualmente, cada situación era puntuada de acuerdo al nivel de malestar que produjera;

se calificaba en una puntuación de 0 a 10, donde 0 era el mínimo nivel de malestar y 10 era

el máximo nivel de malestar.

Finalmente, la persona registraba también los comportamientos positivos de

reforzamiento, los cuales eran aquellas situaciones que eran evaluadas como agradables,

por ejemplo: donde obtuvo algo positivo o donde lo dejaron de exponerlo a algo negativo;

principalmente donde se sentía gratificado y quisiera que se volviera a repetir. Es decir,

registraba los patrones de comportamientos que presentaban una alta probabilidad de

volverse a repetir.

5.5 Procedimiento

El procedimiento, se realizó a través de las etapas del diseño y de la guía de manejo

clínico de la terapia comportamental integrativa en pareja, se empleó la estructura general

de la guía de la TCI en pareja (Ver Apéndice A). Ese procedimiento, se describirá

brevemente a continuación.

5.5.1 Fase A

La duración de esta fase fue de tres sesiones de una hora cada sesión, una vez a la

semana; se realizó una sesión inicial con la pareja, posteriormente una sesión individual y

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 60

la última sesión fue de retroalimentación. En esta fase, se pudo desarrollar la formulación

de los casos, la cual se obtuvo del registro de la información suministrada por ellos y de la

observación de las conductas clínicamente relevantes tipo uno (las cuales son la

presentación de las conductas problemas dentro de consulta) y de la información obtenida

del Inventario de pareja (ver Apéndice B); a cada uno de los miembros, se les dejó de tarea

la realización de un autorregistro (Ver Apéndice C), durante la semana siguiente a la

sesión; obteniéndose así, la línea base. En esta fase, se fortaleció la relación entre el

terapeuta y el paciente.

En la primera sesión de la evaluación, se presentó toda la explicación acerca de lo qué

consistía la participación de los consultantes en la investigación, firmando así el

consentimiento informado (Ver Apéndice D). Cuando la pareja aceptaba participar en la

investigación, se les explicaba el enfoque conductual; posteriormente, se pasaba a indagar

por el motivo de consulta y la historia del desarrollo de la pareja, finalizando con la

aplicación del inventario de pareja, que entregaban antes de irse, este inventario permitió

recolectar la información de forma estructurada. Igualmente, se dejaron las tareas para la

casa, una tarea era la realización de los autorregistros, los cuales fueron presentados con la

explicación del porqué y para qué era necesario y del cómo realizarlo, dando ejemplos

obtenidos del comportamiento directo de los consultantes; la segunda tarea era una lectura

(Kramer, 1998), que la pareja debía realizar individualmente, cada lectura se acompañaba

con una discusión y cuestionamiento (Christensen & Jacobson, 2000) de acuerdo a lo

presentado en la guía de intervención (Christensen & Jacobson, 1998); todas las sesiones

finalizaban con la asignación de las dos tareas para la casa.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 61

La segunda sesión, fue la sesión individual, se inició con la revisión de la tarea; si la

tarea no era realizada, esta se desarrollaba durante la sesión y se explicaba nuevamente el

rol tanto del terapeuta como del paciente (el cual forma parte activa del proceso),

mostrando las ventajas de la realización de los autorregistros, sobre el mismo proceso

terapéutico, a través del análisis del comportamiento de los pacientes durante esa semana

(todas las sesiones iniciaban de esta forma). En esta sesión, se indagó aún más por el

motivo de consulta, enfocándose principalmente sobre las áreas problemáticas de la pareja,

con el objetivo de identificar con mayor claridad los temas de conflicto, el proceso de

polarización y las trampas mutuas; para poder desarrollar la formulación del caso y diseñar

la intervención. La sesión finalizó, con la asignación de las tareas para la casa

(autorregistros y lecturas), de acuerdo con la guía de intervención.

La tercera sesión de evaluación, fue de retroalimentación, en donde se realizó la

explicación de la formulación clínica del caso y la intervención, a través del modelo

teórico, dando ejemplos con casos del mismo paciente; al finalizar la explicación, se les

pidió a los consultantes que ellos explicaran qué habían entendido, para verificar que

quedara claro. Una vez que la formulación se entendió, los consultantes tomaban la

decisión de continuar con el proceso terapéutico o no; cerrando la sesión, con el acuerdo

entre el paciente y el terapeuta, de que una vez se obtuvieran los objetivos que fueron

planteados conjuntamente, se finalizaba la intervención. La intervención se diseñó para ser

desarrollada en un total de 14 sesiones, 1 sesión semanal; las cual se dividieron de acuerdo

con cada fase de intervención.

5.5.2 Fase B

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 62

Fase de intervención basada en aceptación, su duración fue de 4 sesiones, 1 sesión

semanal. Los objetivos de esta fase, consistieron en ayudar a la pareja a que sus diferencias

fueran más constructivas, convertir esas diferencias en fortalezas y neutralizar el impacto

del comportamiento negativo del compañero (Christensen & Jacobson, 1998).

5.5.3 Fase C

Fase de intervención basada en el intercambio de comportamientos positivos, su

duración fue de 3 sesiones, 1 sesión semanal. El objetivo de esta fase, consistió en cambiar

los comportamientos negativos por comportamientos positivos (Christensen & Jacobson,

1998). Cada sesión de intervención durante esta fase, se desarrolló de acuerdo con la guía

de intervención, donde principalmente iniciaban con la revisión de las tareas y finalizaban

con la entrega de las mismas para la próxima sesión.

5.5.4 Fase D

Fase de intervención basada en el entrenamiento en comunicación y solución de

problemas, su duración fue de 4 sesiones, 1 sesión semanal. El objetivo de esta fase, fue

enseñar a las parejas a escuchar y expresarse de manera directa (Christensen & Jacobson,

1998). Cada sesión de intervención durante esta fase, se desarrolló de acuerdo con la guía

de intervención, donde principalmente iniciaban con la revisión de las tareas y finalizaban

con la entrega de las mismas para la próxima sesión.

5.6 Participantes

Seis parejas de la ciudad de Bogotá, las cuales fueron convocadas a través de

diferentes medios como el voz a voz, publicación de avisos en dos universidad y parejas

que consultaran en la IPS de esas universidades por insatisfacción en la pareja; por lo tanto,

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 63

cada pareja tiene características diferentes, lo único en común es que están buscando ayuda

psicológica, para el problema de pareja.

De acuerdo al inicio de la pareja, era asignada a un diseño, es decir que la primera

pareja fue la que inició primero y así sucesivamente. Por lo tanto, a la primera pareja se le

aplicó el diseño A-B-C-D. Es una pareja integrada por jóvenes, ella tenía 24 años y él 27

años de edad, cuando iniciaron la terapia tenían 3 años de relación. Él proviene de un

estrato socioeconómico 4 y ella 3. Los dos eran recién egresados de una carrera

universitaria, él se graduó primero que ella, aunque iniciaron al mismo tiempo. Él tenía

varias alternativas laborales, donde sus ingresos eran adecuados y por lo tanto tomó la

decisión de iniciar una especialización, ella solamente trabaja freelance, el trabajo era más

esporádico y por lo tanto, tenía un mayor tiempo libre en comparación de él; sus ingresos

eran bajos y la situación económica de su familia era precaria.

A la segunda pareja, se le aplicó el diseño A-C-D-B, es una pareja integrada por dos

personas de 43 años de edad, cuando iniciaron la terapia tenían 26 años de relación. Él

proviene de un estrato socioeconómico 2 y ella 4; la pareja es de un estrato socioeconómico

5. No son casados, pero conviven desde hace 15 años, tienen 2 hijos. Los dos son

profesionales, él se graduó de una universidad pública, con ayuda económica de sus

suegros, ella se graduó de una universidad privada. Él tenía un mejor trabajo con ingresos

más elevados, en comparación de ella.

La tercera pareja, trabajó bajo el diseño A-D-B-C, es una pareja integrada por una

persona joven y una mayor, ella tenía 26 años y él 45 años; cuando iniciaron la terapia

tenían 8 años de relación con una convivencia del mismo tiempo, tienen 3 hijas, las cuales

no son de él, aunque él registró a las niñas porqué pensó que sí eran de él. Él proviene de un

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 64

estrato socioeconómico 2 y ella 1; la pareja es de un estrato socioeconómico 2. Él no

terminó su primaria, mientras ella la validó con ayuda de él, e inició sus estudios de una

carrera técnica. Él es conductor de buses y ella ama de casa. Él tenía un matrimonio

anterior, con un hijo de esa relación, del cual se hace cargo.

A la cuarta pareja, se le aplicó el diseño A-B-D-C, es una pareja integrada por dos

personas jóvenes de 22 años de edad; cuando iniciaron la terapia tenían 1 año de relación.

Los dos eran de un pueblo de Boyacá, de un estrato socioeconómico 5. Ella estaba

estudiando una carrera profesional, mientras que él era recién egresado de una carrera

profesional y estaba trabajando. A ambos todavía los apoyan económicamente sus familias,

aunque no son sus padres; a él lo criaron los abuelos y a ella la crió una tía, aunque se

hablaban y veían con sus padres.

A la quinta pareja, se le aplicó el diseño A-C-B-D, es una pareja integrada por dos

personas jóvenes, ella tenía 28 años y él 24 años; cuando iniciaron la terapia tenían 1 año y

un mes de relación, con una convivencia de 6 meses; tenían una hija, ella tenía una hija

mayor de otra relación previa. Los dos eran de un estrato socioeconómico 3, los dos son

bachilleres, él estaba haciendo la carrera de policía y ella trabajaba vendiendo diferentes

productos; aunque ella inició varias carreras técnicas pero no terminó.

A la sexta pareja, se le aplicó el diseño A-D-C-B, es una pareja integrada por dos

personas jóvenes de 20 años de edad; cuando iniciaron la terapia tenían 1 año y 2 meses de

relación. Los dos eran de un estrato socioeconómico 4, estaban estudiando la misma carrera

profesional, en la misma universidad e iban en el mismo semestre.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 65

6 RESULTADOS

6.1 Evaluación

De la evaluación, se pudo obtener la formulación de caso (Ver Anexo E), está planteada

dependiendo, de qué es lo que le pasa a la pareja, qué es lo que mantiene esa conducta y

qué se puede hacer para ayudarlos con su problema. Se desarrolló la formulación de cada

pareja, en donde se formuló para cada uno de ellos, la hipótesis explicativa (Ver Anexo E).

Una vez planteada las hipótesis explicativas y debido a que se empleó una guía de

intervención, se planteó un sola hipótesis terapéutica, la cual ayudará a determinar si los

objetivos de la investigación se cumplieron o no.

6.2 Autorregistros

Los datos que se obtuvieron de los autorregistros, permitieron medir en la pareja, de

manera individual, la frecuencia semanal de las discusiones, el promedio semanal del nivel

de malestar que se presenta ante esas discusiones; identificando los patrones de

comportamiento negativo y positivo, y los patrones de comportamiento de polarización.

El análisis de los datos, se realizó iniciando por la explicación de las mediciones

tomadas de cada pareja, comparando el comportamiento de las personas que componen

cada diada, en cada etapa de intervención. En primer lugar se analizó el nivel de malestar

que producían las discusiones, posteriormente la frecuencia de discusiones, pasando al

análisis de los patrones de comportamientos negativos en comparación con el patrón de

comportamiento positivo, finalizando con el análisis de los patrones de comportamientos de

polarización (este análisis no se realizó por cada etapa, sino el promedio de presentación

durante toda la intervención).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 66

Posteriormente, el análisis que se llevó a cabo, fue una comparación entre todas las

parejas, durante las etapas de evaluación e intervención; graficando el orden de

presentación de cada una de las etapas, en cada una de las parejas, ya que este fue asignado

de forma aleatoria, para poder determinar si existen o no diferencias entre el orden de

presentación y los resultados de la intervención. Esta comparación se realizó entre el nivel

de malestar y la frecuencia de las discusiones.

6.2.1 Resultados pareja uno

Por lo tanto, en el análisis de datos de las parejas, se inició por la explicación de los

datos obtenidos de la pareja número uno, con la explicación del nivel de malestar

presentado tanto por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 1), en

donde el nivel de malestar percibido por ella en su relación, presentó un descenso desde la

etapa inicial de evaluación de un nivel de 3 a un nivel de 1, durante las etapas de

intervención de aceptación y de intercambio de conductas positivas se mantuvo el nivel de

malestar principalmente entre un nivel de 0 a 1, en la etapa de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas logró mostrar un mantenimiento del malestar en el

nivel de 0.

El nivel de malestar percibido por él en su relación (ver Figura 1), presentó una

variación de nivel de 0 a 1 durante la etapa de evaluación y las etapas de intervención de

aceptación y de intercambio de comportamientos; en la etapa final de intervención de

entrenamiento en solución de problemas se mantuvo el malestar en un nivel de 0

incrementándose en la última semana a 1.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 67

Figura 1. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 1.Se comparó el comportamiento

de ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase

de intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

En la comparación del nivel de malestar de ella en comparación con el de él, se observó

en general, en las etapas de intervención, que tanto ella como él presentaban un nivel que

oscilaba entre el rango de 0 a 1; exceptuando un nivel superior por parte de ella, en la

sesión 1 (ver Figura 1).

En el análisis de la frecuencia de discusiones presentado tanto por ella, como por él y la

comparación entre ambos (ver Figura 2), se observó que ella presentó una disminución en

la frecuencia de discusiones desde la etapa inicial de intervención, disminuyó de 4

discusiones hasta 1 discusión en la semana, posteriormente en las etapas de intervención de

aceptación y de intercambio de comportamientos positivos la frecuencia de discusiones fue

variable entre un mínimo de 0 discusiones hasta un máximo de 3 discusiones en la semana,

en la última etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas la frecuencia de las discusiones se mantuvo en 0.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 68

Figura 2. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 1. Se comparó el comportamiento de

ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de

intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

De la frecuencia de discusiones de él, se pudo observar que durante la etapa inicial de

evaluación su frecuencia de discusiones se mantuvo en un rango de frecuencia entre 0 y 1,

posteriormente en las etapas de intervención de aceptación e intercambio de

comportamientos positivos la frecuencia de discusiones se presentó entre un rango de 0 a 3,

mientras que en la etapa final de intervención de entrenamiento en comunicación y solución

de problemas presentó durante las tres primeras semanas una frecuencia de discusiones de 0

pero la última semana la frecuencia aumentó a 3 discusiones.

Comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones en la pareja número 1,

se pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación presentó una disminución tanto

en la frecuencia de las discusiones como en el malestar percibido, en las etapas de

intervención de aceptación y de intercambio de comportamientos positivos, aunque la

frecuencia de discusiones presentó un rango variable entre 0 a 3 discusiones, el nivel de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 69

malestar estuvo en un rango variable de 0 a 1, mostrando que aunque la frecuencia de

discusiones aumentó, el nivel de malestar se mantuvo e incluso disminuyó en comparación

con la etapa anterior; durante la etapa final de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas, tanto el nivel de malestar como la frecuencia de

discusiones se mantuvieron en 0 (ver Figuras 1 y 2).

En él, se pudo observar que en la etapa inicial de evaluación, tanto el nivel de malestar

como la frecuencia de discusiones presentaron un rango variable de 0 a 1; mientras que en

las etapas de intervención de aceptación y de intercambio de comportamientos, el nivel de

malestar presentó un rango variable de 0 a 1 y la frecuencia de discusiones presentó un

rango variable de 0 a 3 discusiones; mostrando, que aunque la frecuencia de las discusiones

aumentó, el nivel de malestar presentado se mantuvo o disminuyó en comparación con la

etapa anterior. En la última etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y

solución de problemas, se observó que tanto el nivel de malestar como la frecuencia de

discusiones presentaron un nivel y frecuencia de 0, pero en la última semana se

incrementaron tanto la frecuencia de discusiones (3) como el nivel de malestar (1),

manteniéndose el nivel de malestar en comparación con el presentado durante las etapas

anteriores, esto se presentó debido a que en esa semana el inició un trabajo nuevo que le

demandaba tiempo y traslado a otra ciudad (ver Figuras 1 y 2).

En el análisis del porcentaje de comportamientos negativos presentado tanto por ella,

como por él y la comparación entre ambos, en la pareja número 1 (ver Figura 3), se pudo

observar que ella en la etapa inicial de evaluación presentó un porcentaje mayor en las

frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo

(50%) y de exposición a un aversivo conjuntamente con la deprivación de un reforzador

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 70

(50%), mientras que el menor porcentaje de la frecuencia fue presentada por el patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento (9%). En la etapa de intervención de aceptación

en comparación con la etapa de evaluación, se observó que el porcentaje de las frecuencias

de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo (0%) y de

deprivación de un reforzador (21%) disminuyeron en comparación con la etapa anterior, el

porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición a un

aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (50%) se mantuvo en comparación

con la etapa anterior y el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento positivo

de reforzamiento (24%) presentó un aumento en comparación con la etapa anterior. En la

tercera etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos, se presentó que

tanto los porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo (50%) y de la deprivación de un reforzador (43), como el

porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (32%)

aumentaron en comparación de la etapa anterior, el porcentaje de la frecuencia del patrón

negativo de comportamiento de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador (0%) disminuyó en comparación con la etapa anterior. En la última etapa de

intervención en el entrenamiento de comunicación y solución de problemas, los porcentajes

de las frecuencias en todos los patrones de comportamiento negativo dimuyeron (0%), la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo (35%) aumentó en comparación con las

etapas anteriores.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 71

Figura 3. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja número 1,

durante cada etapa de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

Por parte de él (ver Figura 3), se observó que en la etapa inicial de evaluación, la

frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo (10%)

presentó un mayor porcentaje, mientras que no presentó ningún porcentaje en la frecuencia

del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la

deprivación de un reforzador (0%), el siguiente promedio menor se presentó en la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (6%). En la etapa de

intervención de aceptación en comparación con la etapa de evaluación, se observó que los

porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento negativo de exposición a un

aversivo (50%) y del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (23%),

aumentaron en comparación con la etapa anterior; los porcentajes de las frecuencias de los

patrones de comportamientos negativos de deprivación de un reforzador (17%) y de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 72

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%), se matuviron

en comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa de intervención de intercambio de

comportamientos positivos, se presentó que los porcentajes tanto de las frecuencia de los

patrones de comportamientos negativos de deprivación de un reforzador (50%) y de la

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación a un reforzador (100%), como del

patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (35%), aumentaron en comparación

de la etapa anterior; el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo

de exposición a un aversivo (20%), disminuyó en comparación de la etapa anterior. En la

última etapa de intervención en el entrenamiento de comunicación y solución de problemas,

se mantuvo el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo (20%) en comparación con la etapa anterior; los porcentajes de las

frecuencias en los patrones de comportamientos negativos de deprivación a un reforzador

(17%) y de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%),

presentarón una disminución en comparación con la etapa anterior; el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (36%) aumentó en

comparación con la etapa anterior.

En comparación de la frecuencia de los patrones de comportamientos tanto positivos

como negativos entre la pareja número 1 (ver Figura 3), se pudo observar que ella en la

etapa inicial de evaluación presenta una mayor porcentaje en la frecuencia de todos los

patrones de comportamientos, tanto negativos como positivos, en comparación con él. En la

etapa de intervención de aceptación, ella mostró un mayor porcentaje en la frecuencia de

los patrones de comportamiento negativos de deprivación a un reforzador y de exposición a

un aversivo conjunto con la deprivación a un reforzador, mientras que el porcentaje de la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 73

frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo de ella fue

menor en comparación con él; el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento

positivo de reforzamiento fue muy similar en esta etapa, tanto en ella como en él. En la

etapa de intervención de intercambio de comportamientos, el porcentaje de la frecuencia

del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo, fue mayor en ella en

comparación con él; en los porcentajes de las frecuencias de los patrones de

comportamientos negativos de deprivación de un reforzador y de exposición a un aversivo

conjunto con la deprivación de un reforzador, ella presentó un menor porcentaje en

comparación con él; en el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento

positivo de reforzamiento, ella presentó un porcentaje muy similar al de él. En la última

etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, ella

presentó un porcentaje menor en comparación con él, en la frecuencia de los patrones de

comportamientos negativos de exposición a un aversivo y de la deprivación de un

reforzador; en el porcentaje de la frecuencia de los patrones de comportamientos negativos

de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, los dos

presentaron el mismo porcetaje; en el porcentaje de la frecuencia del patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento, ella presentó un porcentaje muy similar al de él.

Con respecto al porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamientos de

polarización en la pareja número 1 (ver Figura 4), se pudo observar que ella presentó un

mayor porcentaje de la frecuencia en el patrón de comportamiento de interacción negativa

mutua (45%), seguido del patrón de comportamiento de evitación mutua (40%) y el menor

porcentaje de la frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de retirada (15%).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 74

Figura 4. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja número 1, durante

todo el proceso de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él.

En cuanto a los patrones de comportamientos de polarizción de él (ver Figura 4), se

pudo observar que presentó un mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento de evitación mutua(53%), seguido del patrón de comportamiento de

interacción negativa mutua (35%) y el menor porcentaje de la frecuencia lo presentó el

patrón de comportamiento de retirada (12%).

En comparación de los patrones de comportamientos de polarización entre la pareja (ver

Figura 4), se pudo observar que ella presentó un porcentaje mayor en las frecuencias de los

patrones de comportamiento de polarización de interacción negativa mutua y de retirada, en

comparación de él. Mientras que en el porcentaje de la freceuncia del patrón de

comportamiento de polarización de evitación mutua, él mostró una mayor porcentaje en

comparación con ella.

6.2.2 Resultados pareja dos

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 75

Figura 5. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 2.Se comparó el comportamiento

de ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase

de intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

En los datos obtenidos de la pareja número 2, en el nivel de malestar presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 5), se observó que en nivel

de malestar percibido por ella en su relación, en la etapa inicial de evaluación presentó un

ascenso de un nivel de malestar de 4 a un nivel de 9, durante la etapa de intervención de

intercambio de conductas presentó un descenso de un nivel de malestar de 9 a 0, durante las

etapas de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas y la

final de aceptación presentó un rango variable de nivel de malestar entre 0 y 5; terminando

en la última sesión en un nivel de malestar de 1.

El nivel de malestar percibido por él en su relación (ver Figura 5), presentó un aumento

de nivel de 0 a 3 durante la etapa de evaluación, en la etapa de intervención de intercambio

de comportamientos positivos el nivel de malestar estuvo en un rango variable de 0 a 6, en

la etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas el

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 76

nivel de malestar estuvo en un rango variable de 1 a 4 y en la etapa final de intervención de

aceptación el nivel de malestar estuvo en un rango variable de 0 a 4.

En la comparación del nivel de malestar de ella en comparación con el de él, se observó

en general, durante todas las etapas de intervención, que ambos presentaban un nivel

similar; excepto en las sesiones 7 y 8, en donde él presentó un nivel superior en

comparación de ella (ver Figura 5).

En la pareja número 2, en el análisis de la frecuencia de discusiones presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 6), se observó que ella en la

etapa inicial de evaluación presentó una frecuencia de discusiones entre un rango variable

de 6 a 9, en la etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos inició

con una frecuencia de 2 discusiones, posteriormente aumentó la frecuencia a 18 discusiones

y finalizó en una frecuencia de 0 discusiones; en la etapa de intervención de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas la frecuencia de discusiones fue variable entre un

mínimo de 0 discusiones hasta un máximo de 5 discusiones en la semana, en la última etapa

de intervención de aceptación la frecuencia de las discusiones fue variable entre un mínimo

de 0 discusiones hasta un máximo de 6 discusiones, terminando la última sema de

intervención en una frecuencia de 0 discusiones.

De la frecuencia de discusiones de él (ver Figura 6), se pudo observar que durante la

etapa inicial de evaluación su frecuencia de discusiones presentó un rango variable entre 2

y 8 discusiones, posteriormente en la etapa de intervención de intercambio de

comportamientos positivos la frecuencia de discusiones inició con una frecuencia de 1

discusión, aumentó la siguiente semana a 11, después disminuyó a 0 y finalizó en 4

discusiones en la semana; en la siguiente etapa de intervención de entrenamiento en

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 77

comunicación y solución de problemas, su frecuencia de discusiones se mantuvo en un

rango variable entre 1 y 5 discusiones; en la etapa final de intervención de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas la frecuencia de discusiones presentó un rango

de 1 a 5 discusiones; en la etapa final de intervención de aceptación durante las dos

primeras semanas tuvo una frecuencia de discusiones de 0 pero las siguientes dos

aumentaron hasta 7 discusiones y en la última semana la frecuencia disminuyó a 0

discusiones.

Figura 6. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 2. Se comparó el comportamiento de

ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de

intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

Comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones, se pudo observar que

ella en la etapa inicial de evaluación presentó un ascenso de malestar mientras que la

frecuencia de las discusiones se mantuvo en un rango; en la etapa de intervención de

intercambio de comportamientos positivos, aunque el movimiento tanto del nivel de

malestar como la frecuencia de discusiones se comportaron similar, disminuyendo en

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 78

general con un pico en aumento en la semana 5, en donde se pudo observar que aunque la

frecuencia de las discusiones se aumentó y el nivel de malestar también, el malestar en

comparación con el pico de la fase anterior es menor en comparación con esta fase, en

donde la frecuencia de discusiones es mayor; en la etapa de intervención de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas, tanto la frecuencia de discusiones como el nivel

de malestar presentaron un comportamiento similar de disminución, se observa el mismo

patrón en la etapa de intervención de aceptación (ver Figuras 5 y 6).

En él, comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones, se pudo observar

que en la etapa inicial de evaluación, a pesar de que la frecuencia en las discusiones en la

segunda semana disminuyó, el nivel de malestar se mantuvo; en la etapa de intervención de

intercambio de comportamientos positivos, aunque el movimiento tanto del nivel de

malestar como de la frecuencia de discusiones se comportaron similar, aumentando en la

semana 5, se pudo observar que aunque el pico en la frecuencia de las discusiones aumentó

en comparación de la frecuencia del pico de la etapa anterior, el nivel de malestar se

mantuvo igual en los dos picos; en las etapas de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas y de aceptación, tanto la frecuencia de discusiones

como el nivel de malestar presentaron un comportamiento similar (ver Figuras 5 y 6).

En la pareja número 2, en el análisis del porcentaje de comportamientos negativos

presentado tanto por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 7), se pudo

observar que ella en la etapa inicial de evaluación presentó un mayor porcentaje en la

frecuencia del patrón de comportamiento negativo de deprivación de un reforzador (45%),

mientras que el menor porcentaje en la frecuencia fue presentado por el patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 79

reforzador (0%), seguido por el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento

positivo de reforzamiento (3%). En la etapa de intervención de intercambio de

comportamientos positivos en comparación con la etapa de evaluación, se observó que el

porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de deprivación de un

reforzador (6%) disminuyó en comparación con la etapa anterior; mientras que los

porcentajes en las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición

a un aversivo (29%), de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador (57%) y el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (18%)

aumentaron en comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa de intervención de

entrenamiento en comunicación y solución de problemas, se presentó que los porcentajes

en las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un

aversivo (29%) y de exposición a un aversivo junto con la deprivación a un reforzador

(21%) disminuyeron, en comparación de la etapa anterior; wl porcentaje de la frecuencia

del patrón de comportamiento negativo de deprivación de un aversivo (23%) y el patron de

comportamiento positivo de reforzamiento (36%), aumentaron en comparación de la etapa

anterior. En la última etapa de intervención de aceptación, el porcentaje en la frecuencia del

patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la

deprivasión de un refuerzo (21%), se mantuvo en comparación de la etapa anterior;

mientras que los porcentajes en las frecuencias de los patrones de comportamientos

negativos de exposición a un aversivo (24%) y la deprivasión de un refuerzo (26%), al igual

que el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (43%), aumentaron en

comparación con la etapa anterior.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 80

Figura 7. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja número 2,

durante cada etapa de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

Por parte de él (ver Figura 7), se observó que en la etapa inicial de evaluación presentó

un porcentaje mayor en la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición

a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (100%), mientras que el menor

porcentaje en la frecuencia fue presentado en el patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento (4%), seguido por el porccentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo (21%) . En la etapa de intervención

de intercambio de comportamientos positivos en comparación con la etapa de evaluación,

se observó que el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo (32%) y el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento

(20%), aumentaron en comparación con la etapa anterior; el porcentaje en la frecuencia de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 81

los patrones de comportamientos negativos de deprivación de un reforzador (24%) y de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%), disminuyeron

en comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa de intervención de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas, se presentó que los porcentanjes en la frecuencia

del patrón de comportamiento negativo de deprivación de un reforzador (29%) y en la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (36%), aumentaron en

comparación de la etapa anterior; el porcentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo (29%), disminuyó en comparación

con la etapa anterior; el porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento negativo

de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%), se mantuvo

en comparación con la etapa anterior. En la última etapa de intervención en aceptación, los

porcentajes en las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición

a un aversivo (18%) y de deprivación de un reforzador ()18%, disminuyeron en

comparación con la etapa anterior; el porcentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador (0%), se mantuvo en comparación con la etapa anterior; el porcentaje en la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (40%), aumentó en

comparación con la etapa anterior.

Al comparar los porcentajes de las frecuencias de los patrones de comportamientos

tanto positivos como negativos entre la pareja número 2 (ver Figura 7), se pudo observar

que ella en comparación con él, en la etapa inicial de evaluación, presentó un porcentaje

mayor en la frecuencia de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un

aversivo y de deprivación de un reforzador; en el porcentaje de la frecuencia del patrón de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 82

comportamiento negativo de exposición a un aversivo junto con la deprivación a un

reforzador, ella presentó un porcentaje menor en comparación con él; en el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento, los dos presentaron un

porcentaje similar. En la etapa de intervención de intercambio de comportamientos

positivos, ella mostró un porcentaje mayor en la frecuencia del patrón de comportamiento

negativo de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador; en los

porcentajes de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición

a un aversivo y deprivación de un reforzador, al igual que en el porcentaje del patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento, ella presntó un porcentaje menor en

comparación con él. En la tercera etapa de intervención en entrenamiento en comunicación

y solución de problemas, ella presentó un porcentaje menor en las frecuencias de los

patrones de comportamiento negativo de exposición a un aversivo y en la deprivación de un

reforzador, en comparación con él; en el porcentaje de la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador, ella presentó un porcentaje mayor en comparación con él; en el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento, los dos tuvieron el

mismo porcentaje. En la última etapa de intervención de aceptación, ella presentó el mayor

porcentaje de las frecuencias en todos los patrones de comportamiento, tanto en los

patrones de comportamientos negativos como en el patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento.

Con respecto al porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamientos de

polarización en la pareja número 2 (ver Figura 8), se pudo observar que ella presentó un

mayor porcentaje de la frecuencia en el patrón de comportamiento de interacción negativa

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 83

mutua (42%), seguido del patrón de comportamiento de retirada (32%) y el menor

porcentaje de la frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de evitación mutua

(25%).

Figura 8. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja número 2, durante

todo el proceso de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él.

En cuanto a los patrones de comportamientos de polarizción de él (ver Figura 8), se

pudo observar que presentó un mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento de interacción negativa mutua (53%), seguido del patrón de

comportamiento de evitación mutua (25%) y el menor porcentaje de la frecuencia lo

presentó el patrón de comportamiento de retirada (12%).

En la comparación de los patrones de comportamientos de polarización entre la pareja

(ver Figura 8), se pudo observar que ella presentó un porcentaje mayor en la frecuencia del

patrón de comportamiento de retirada, en comparación con él. En la frecuencia del patrón

de comportamiento de evitación mutua, tanto él como ella presentaron el mismo porcentaje.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 84

En la frecuencia del patrón de comportamiento de interacción negativa mutua, ella presentó

un porcentaje menor en comparación de él.

6.2.3 Resultados pareja tres

Figura 9. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 3.Se comparó el comportamiento

de ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase

de intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

En la pareja número 3, en los datos obtenidos del nivel de malestar presentado tanto por

ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 9), el nivel de malestar

percibido por ella en su relación, en la etapa inicial de evaluación presentó un rango

variable entre un nivel de malestar de 7 y un nivel de 3, durante la etapa de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas el nivel de malestar presentó un descenso de un

nivel de malestar de 5 a 0, pero en la última semana subió a un nivel de malestar de 1,

durante las etapas de intervención de aceptación y la final de intercambio de

comportamientos positivos presentó un rango variable de nivel de malestar entre 0 y 3;

terminando en la última sesión en un nivel de malestar de 0.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 85

El nivel de malestar percibido por él en su relación (ver Figura 9), presentó una

variación de nivel de 4 a 3 durante la etapa de evaluación, en la etapa de de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas el nivel de malestar presentó una disminución de

un nivel de 2 a un nivel de 0; en la etapa de aceptación el nivel de malestar aumentó su

nivel de 0 a 2, pero en las semana finales mostró un descenso a 0 y se mantuvo; en la última

etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos el nivel de malestar se

mantuvo en 0 la primera semana, pero posteriormente aumentó a 1, manteniéndose este

nivel hasta el final de la intervención.

En la comparación del nivel de malestar de ella en comparación con el de él, se observó

que la línea de base ella presentó tanto un movimiento diferente, como un mayor nivel de

malestar en comparación con él; adicionalmente en la sesión16, también presentó un

aumento significativo en compasión con él. En el resto de las etapas de intervención, ambos

presentaban un nivel similar (ver Figura 9).

En la pareja número 3, en el análisis de la frecuencia de discusiones presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 10), se observó que ella en

la etapa inicial de evaluación presentó una frecuencia de discusiones que disminuyó, de

frecuencia de 11 discusiones a 3 discusiones; en la etapa de intervención de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas, ella inició con una frecuencia elevada de 9

peleas y descendió las siguiente tres semanas a una frecuencia de 0 peleas, terminando la

última semana en un aumentó de frecuencia de 3 peleas en la semana; en la etapa de

intervención de aceptación, la frecuencia de discusiones estuvo en un rango variable entre 0

y 8 discusiones, iniciando en una frecuencia de 0 y finalizando con la misma frecuencia; en

la última etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos, la frecuencia

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 86

de las discusiones inició en una frecuencia mínima de 0 discusiones, posteriormente

aumentó a una frecuencia de 10 discusiones y finalizó con una frecuencia de 0 discusiones

en la semana.

Figura 10. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 3. Se comparó el comportamiento de

ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de

intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

De la frecuencia de discusiones de él (ver Figura 10), se pudo observar que durante la

etapa inicial de evaluación su frecuencia de discusiones presentó un aumento de 3

discusiones a 5 discusiones en la semana; en la etapa de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas la frecuencia de discusiones inició con una

frecuencia de 4 discusiones, después aumentó la siguiente semana a una frecuencia de 5

discusiones y finalizó las siguientes semanas con una frecuencia de 0 discusiones; en la

siguiente etapa de intervención de aceptación, la frecuencia de discusiones se mantuvo en

0, exceptuando la semana 11 que presentó un incrementó a 5 discusiones, pero

posteriormente volvió a una frecuencia de 0 discusiones; en la etapa final de intervención

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 87

de intercambio de comportamientos positivos, durante la primera semana tuvo una

frecuencia de 0 discusiones, las siguientes 2 semanas aumentó la frecuencia hasta 4

discusiones, finalizando con un descenso a una frecuencia de 3 discusiones en la semana.

Comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones en la pareja número 3

(ver Figuras 9 y 10), se pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación, a pesar de

que presentó un descenso en la frecuencia de discusiones de 11 a 3 discusiones, el nivel de

malestar se mantuvo en un rango variable entre 3 y 7; en la etapa de intervención de

entrenamiento en comunicación y solución de problemas, aunque el movimiento tanto del

nivel de malestar como la frecuencia de discusiones se comportaron de manera similar,

disminuyendo en general semana a semana y aumentando en la última semana, se observó

que el paso de la etapa inicial a la siguiente, presentaron un comportamiento diferente, en

donde la frecuencia de discusiones aumentó pero el nivel de malestar inició su descenso; en

la etapa de intervención de aceptación, tanto la frecuencia de discusiones como el nivel de

malestar presentaron un comportamiento similar variable, exceptuando la última semana en

donde a pesar de que la frecuencia de discusiones aumentó, el nivel de malestar se mantuvo

igual que con la frecuencia anterior de discusiones; en la última etapa de intervención de

intercambio de comportamientos positivos, aunque tanto la frecuencia de discusiones como

el nivel de malestar presentaron un comportamiento similar variable, pero se pudo observar

que la frecuencia de discusiones tanto en la etapa anterior como en esta, presentaron una

elevación, siendo mayor la elevación en la última etapa, pero el nivel de malestar en esos

dos picos no presentó variación.

En él, comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones (ver Figuras 9 y

10), se pudo observar que en la etapa inicial de evaluación, a pesar de que frecuencia de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 88

discusiones presentó un aumento, el nivel de malestar disminuyó; en las siguientes etapas

de intervención, tanto la frecuencia de las discusiones como el nivel de malestar,

presentaron un patrón de movimiento similar, aunque en la semana 3, a pesar de que la

frecuencia de discusiones se mantuvo igual en comparación de la semana anterior, el nivel

de malestar disminuyó; en la semana 5 la frecuencia aumentó en comparación de la semana

anterior, pero el nivel de malestar se mantuvo igual; y en la semana 16 la frecuencia de

discusiones fue igual que en la semana 5, el nivel de malestar era menor en la semana 16 en

comparación del presentado en la semana 5.

Figura 11. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja número 3,

durante cada etapa de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

En comparación de la frecuencia de los patrones de comportamientos tanto positivos

como negativos entre la pareja número 3 (ver Figura 11), se pudo observar que él en

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 89

comparación con ella, en la etapa inicial de evaluación presenta un mayor porcentaje en las

frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo y en

la deprivación de un reforzador; en el porcentaje de la frecuencia en el patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo junto con la deprivación a un

reforzador, los dos demuestran un porcentaje igual y en el procentaje de la frecuencia del

patrón de comportamiento positivo de reforzamiento, él presenta un menor porcentaje que

ella. En la etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas, ella mostró un mayor porcentaje en la frecuencia de los patrones de

comportamientos negativos de deprivación de un reforzador y de exposición a un aversivo

conjunto con la deprivación de un reforzador; en los porcentajes de la frecuencia del patrón

de comportamiento negativo de exposición a un aversivo, ella presenta un porcentaje igual

que él; en el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento, ella presenta un menor porcentaje en comparación con él. En la tercera etapa

de intervención en entrenamiento en comunicación y solución de problemas, ella presentó

un menor porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento, en comparación de él; el porcentaje en la frecuencias de los patrones de

comportamientos negativos de exposición a un aversivo, de deprivación de un reforzador y

de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, ella presentó una

mayor frencuencia en comparación con él. En la última etapa de intervención de

aceptación, ella presentó un promedio mayor en las frecuencias de los patrones de

comportamientos negativos de exposición a un aversivo y de exposición a un aversivo

conjunto con la deprivación de un reforzador, como en el patrón de comportamiento

positivo de reforzamiento; en el promedio de la frecuencia del patrón de comportamiento

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 90

negativo de deprivación de un reforzador, ella mostró un porcentaje menor en comparación

con él.

Figura 12. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja número 3, durante

todo el proceso de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él.

Con respecto al porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamientos de

polarización en la pareja número 3 (ver Figura 12), se pudo observar que ella presentó un

mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento de interacción negativa

mutua (44%), seguido del patrón de comportamiento de retirada (29%) y el menor

porcentaje en la frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de evitación mutua

(27%).

En cuanto a los patrones de comportamientos de polarización de él (ver Figura 12), se

pudo observar que presentó un mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento de evitación mutua(43%), seguido del patrón de comportamiento de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 91

retirada (38%) y el menor porcentaje de la frecuencia lo presentó el patrón de

comportamiento de interacción negativa mutua (19%).

En la comparación de los patrones de comportamientos de polarización entre la pareja

(ver Figura 12), se pudo observar que ella presentó un porcentaje mayor en la frecuencia

del patrón de comportamiento de retirada en comparación con él. En la frecuencia del

patrón de comportamiento de evitación mutua, ella presentó un menor porcentaje en

comparación con él. En la frecuencia del patrón de comportamientos de interacción

negativa mutua, ella presentó un promedio de frecuencia mayor en comparación con él.

6.2.4 Resultados pareja cuatro

En la pareja número 4, en los datos obtenidos del nivel de malestar presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 13), el nivel de malestar

percibido por ella en su relación, en la etapa inicial de evaluación, presentó una

disminución de un nivel de malestar de 4 a un nivel de 0; durante la etapa de intervención

de aceptación, el nivel de malestar se presentó en un rango entre un nivel de 4 y un nivel de

1, pero en las 2 últimas semanas disminuyo a un nivel de 1; durante la etapa de intervención

de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, el nivel de malestar presentó

un rango variable en un nivel de 0 y un nivel de 1, aumentándose en las últimas dos

semanas en un nivel de 1; en la etapa final de intervención de intercambio de

comportamientos positivos, la primera semana se mantuvo el nivel de 1, igual que en la

etapa anterior, en las siguientes dos semanas el nivel de malestar aumentó a 3 y en la última

semana el nivel disminuyó a 0.

El nivel de malestar percibido por él en su relación (ver Figura 13), en la etapa inicial

de evaluación, presentó un mantenimiento en el nivel malestar de 1; en la etapa de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 92

intervención de aceptación, el nivel de malestar presentó una disminución a un nivel de 0,

en comparación con la etapa anterior, esto se mantuvo durante dos semanas, en las

siguientes dos semana el nivel de malestar presentó un ascenso hasta un nivel de malestar

de 3; en las siguientes etapas de intervención de entrenamiento en comunicación y solución

de problemas y de intercambio de comportamientos positivos, el nivel de malestar se

mantuvo en 0.

Figura 13. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 4. Se comparó el

comportamiento de ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B

corresponde a la fase de intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de

intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas.

En la comparación del nivel de malestar de ella en comparación con el de él, se observó

que en todas las fases ella presentó un movimiento oscilante en comparación con él, que

presentó mayor estabilidad; adicionalmente, se observó que ella por lo general, mantuvo un

nivel mayor que él, siendo la diferencia significativa en las sesiones 1, 2, 4, 6, 15 y 16 (ver

Figura 13).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 93

Figura 14. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 4. Se comparó el comportamiento de

ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de

intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

En la pareja número 4, en el análisis de la frecuencia de discusiones presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 14), se observó que ella en

la etapa inicial de evaluación, presentó en la primera semana una frecuencia de 4

discusiones, en la segunda presentó una aumento en la frecuencia a 11 discusiones y en la

última semana presentó una disminución a 1 discusión; en la etapa de intervención de

aceptación, presentó un patrón de disminución con subidas, en un rango de frecuencia de 4

a 1 discusión; en la etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas, la frecuencia de discusiones estuvo en un rango variable entre 0 a 2 discusiones,

iniciando en una frecuencia de 0 y finalizando con un frecuencia de 1 discusión; en la

última etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos, la frecuencia de

las discusiones inició en una frecuencia de 3 discusiones, esto se mantuvo en la siguiente

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 94

semana, posteriormente aumentó a una frecuencia a 10 discusiones y finalizó con una

frecuencia de 0 discusiones en la semana.

De la frecuencia de discusiones de él (ver Figura 14), se pudo observar que durante la

etapa inicial de evaluación, su frecuencia de discusiones presentó un aumento en la primera

sema, de 1 discusión a 3 discusiones y posteriormente volvió a disminuir a 1 discusión; en

la etapa de intervención de aceptación, la frecuencia de discusiones se mantuvo las dos

primeras semanas en una frecuencia de 0 discusiones, después aumentó las siguientes

semanas hasta una frecuencia de 4 discusiones y finalizó la última semana con una

frecuencia de 0 discusiones; en las siguientes etapas de intervención, tanto en la de

entrenamiento en comunicación y solución de problemas como en la de intercambio de

comportamientos positivos, la frecuencia se mantuvo en 0 discusiones.

Comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones en la pareja número 4,

se pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación (ver Figuras 13 y 14), a pesar de

que presentó un aumento en la frecuencia de discusiones de 4 a 11 discusiones, el nivel de

malestar se mantuvo en 4, en la siguiente semana la frecuencia de discusiones presentó el

mismo patrón de descenso que el nivel de malestar; en la etapa de intervención de

aceptación, se pudo observar que aunque la frecuencia de las discusiones presentó un

aumento al pasar de una etapa a otra, ese aumento es inferior a la frecuencia presentada en

la etapa anterior, pero superior en comparación a la semana 1, donde el nivel de malestar se

mantiene igual que el presentado en la etapa anterior y en la semana 1; en la etapa de

intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, tanto la

frecuencia de discusiones como el nivel de malestar presentaron un comportamiento similar

variable, el nivel de malestar se mantuvo igual que con la frecuencia anterior de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 95

discusiones; en la última etapa de intervención de intercambio de comportamientos

positivos, tanto la frecuencia de discusiones como el nivel de malestar presentaron un

comportamiento similar variable, observando que a pesar de que la frecuencia de las

discusiones en la semana 16 aumentó en comparación con el pico presentado en la semana

4, el nivel de malestar que se presentó en la semana 16 fue inferior al presentado en la

semana 4.

Al comparar la frecuencia de discusiones con el nivel de malestar percibido por él (ver

Figuras 13 y 14), se pudo observar que en la etapa inicial de evaluación, a pesar de que

presentó un rango variable entre 1 y 3 en la frecuencia de discusiones, el nivel de malestar

se mantuvo en 1; en la etapa de intervención de aceptación, se pudo observar que aunque la

frecuencia de las discusiones presentó un comportamiento similar al nivel de malestar, pero

se presentó una diferencia en el aumento del nivel de malestar presentado en relación con la

frecuencia, en donde la frecuencia de 0 discusiones de la semana quinta pasó a una

frecuencia de 3 discusiones, posteriormente subió a un frecuencia de 4 en la séptima

semana, mientras que el nivel de malestar se incrementó de un nivel de 0 en la semana

quinta a un nivel de 1 en la sexta semana y después a un nivel de 3 en la séptima,

mostrando que el nivel de malestar se incrementó más de lo normal en la séptima semana;

en las dos etapas de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas y en la de intercambio de comportamientos positivos, tanto la frecuencia de

discusiones como el nivel de malestar presentaron un comportamiento igual, con una

frecuencia y un nivel de 0.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 96

Figura 15. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja número 4,

durante cada etapa de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

En la pareja número 4, en el análisis del porcentaje de comportamientos negativos,

presentado tanto por ella como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 15), se

pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación presentó un porcentaje mayor de la

frecuencia en el patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo (37%),

mientras que el menor porcentaje de la frecuencia fue presentado por el patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador (0%), seguido por el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento

positivo de reforzamiento (4%). En la etapa de intervención de aceptación en comparación

con la etapa de evaluación, se observó que el porcentaje de la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo (30%), disminuyó en comparación

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 97

con la etapa anterior; los porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento

negativo de deprivación de un reforzador (33%) y el del patrón de comportamiento positivo

de reforzamiento (16%), aumentaron en comparación con la etapa anterior; el porcentaje de

la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto

con la deprivación de un reforzador (0%), se mantuvo en comparción con la etapa anterior.

En la tercera etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas, los promedios de las frecuencias del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (25%) y el patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento (15%), aumentaron en comparación de la etapa

anterior; los promedios de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de

la deprivación de un refuerzo (0%) y el de exposición a un aversivo (9%), disminuyeron en

comparación de la etapa anterior. En la última etapa de intervención de intercambio de

comportamientos positivos, todos los promedios de las frecuencias aumentaron en

comparación con la etapa anterior.

Por parte de él (ver Figura 15), se observó que en la etapa inicial de evaluación presentó

un promedio mayor en la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición

a un aversivo (56%), mientras que el menor promedio en la frecuencia fue presentado por

los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo conjunto con la

deprivación de un reforzador (0%) y en el de deprivación de un reforzador (0%), seguido

por el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento

(6%). En la etapa de intervención de aceptación en comparación con la etapa de evaluación,

se observó que los promedios de las frecuencias de los patrones de comportamientos

negativos de deprivación de un reforzador (100%) y el de exposición a un aversivo

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 98

conjunto con la deprivación de un reforzador (100%) y el patrón positivo de reforzamiento

(15%), aumentaron en comparación con la etapa anterior; el promedio de la frecuencia del

patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo (44%), disminuyó en

comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas, se presentó que el promedio de la frecuencia del

patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (36%), aumentó en comparación de la

etapa anterior; los promedios de las frecuencias de los patrones de comportamientos

negativos de la exposición a un aversivo (0%), de la deprivación de un reforzador (0%) y

de la exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%),

disminuyeron en comparación con la etapa anterior. En la última etapa de intervención en

el intercambio de comportamientos positivos, los porcentajes de las frecuencias de los

patrones de comportamientos negativos de la exposición a un aversivo (0%), de la

deprivación de un reforzador (0%) y de la exposición a un aversivo conjunto con la

deprivación de un reforzador (0%), se mantuvieron en comparación con la etapa anterior; el

porcentaje de la frecuencia del comportamiento positivo de reforzamiento (43%), aumentó

en comparación con la etapa anterior.

Al comparar la frecuencia de los patrones de comportamientos tanto positivos como

negativos, se pudo observar que él en comparación con ella (ver Figura 15), en la etapa

inicial de evaluación presentó un mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo; en los porcentajes de las frecuencias

de los patrones de comportamientos negativos de deprivación a un reforzador y de

exposición a un aversivo junto con la deprivación a un reforzador, él demuestra un

porcentaje menor en comparación con ella; en el procentaje de la frecuencia del patrón de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 99

comportamiento positivo de reforzamiento, él presentó un porcentaje similar a ella. En la

etapa de intervención de aceptación, él mostró un mayor porcentaje en todas las frecuencias

de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo, deprivación de

un reforzador y de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador;

en el porcentajes de la frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento,

él presentó un porcentaje similar a ella. En la tercera etapa de intervención en

entrenamiento en comunicación y solución de problemas, ella presentó un mayor porcentaje

en las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un

aversivo y de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, en

comparación de él; en los porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento

negativo de exposición a un aversivo y en el patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento, ella presentó una mayor porcentaje en comparación con él. En la última

etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos, ella presentó un

porcentaje mayor en todas las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de

exposición a un aversivo, de deprivación de un reforzador y de exposición a un aversivo

conjunto con la deprivación de un reforzador; en el porcentaje de la frecuencia del patrón

de comportamiento positivo de reforzamiento, los dos mostraron porcentajes similares.

Con respecto al porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamientos de

polarización en la pareja número 4 (ver Figura 16), se pudo observar que ella presentó un

mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento de evitación mutua (37%),

seguido del patrón de comportamiento de interacción negativa mutua (33%) y el menor

porcentaje de la frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de retirada (31%);

aunque los porcentajes fueron muy similares.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 100

Figura 16. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja número 4, durante

todo el proceso de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él.

En cuanto a los patrones de comportamientos de polarización de él (ver Figura 16), se

pudo observar que presentó un mayor porcentaje en la frecuencia en el patrón de

comportamiento de interacción negativa mutua(42%), seguido del patrón de

comportamiento de evitación mutua (33%) y el menor porcentaje de la frecuencia lo

presentó el patrón de comportamiento de retirada (25%).

Al comparar los patrones de comportamientos de polarización entre la pareja (ver

Figura 16), se pudo observar que ella presentó un porcentaje mayor en las frecuencias de

los patrones de comportamientos de evitación mutua y de retirada, en comparación con él.

En el patrón de comportamiento de interacción negativa mutua, ella presentó un menor

porcentaje en comparación con él.

6.2.5 Resultados pareja cinco

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 101

Figura 17. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número5. Se comparó el

comportamiento de ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B

corresponde a la fase de intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de

intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas.

En la pareja número 5, en los datos obtenidos del nivel de malestar presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 17), el nivel de malestar

percibido por ella en su relación, en la etapa inicial de evaluación, presentó un aumento de

un nivel de malestar de 4 a un nivel de 6; durante la etapa de intervención de intercambio

de comportamientos positivos, el nivel de malestar presentó un descenso de 6 a 3; durante

la etapa de intervención de aceptación, el nivel de malestar presentó una disminución en

comparación con la etapa anterior, pasando de un nivel de malestar de 3 a uno de 0, el cual

se mantuvo hasta el final de la etapa, exceptuando la semana 9 en donde el nivel de

malestar amentó a 1; en la etapa final de intervención de entrenamiento en comunicación y

solución de problemas, el nivel de malestar presentó un aumento en comparación con la

etapa anterior, pasando de un nivel de malestar de 0 a uno de 3, pero en las siguientes

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 102

semanas el nivel disminuyo hasta 0 y se mantuvo así durante 3 semanas hasta finalizar la

intervención.

El nivel de malestar percibido por él en su relación (ver Figura 17), en la etapa inicial

de evaluación, presentó un rango variable del nivel de malestar entre 4 y 6; en la etapa de

intervención de intercambio de comportamientos positivos, el nivel de malestar presentó

una disminución a un nivel de 0, en comparación con la etapa anterior, pero en la última

semana se incrementó a un nivel de malestar de 2; en la siguiente etapa de intervención

aceptación, el nivel de malestar descendió a un nivel de malestar de 0, manteniéndose en

este nivel, exceptuando la semana 11, en donde presentó un aumento del nivel de malestar a

1; en la etapa final de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas, el nivel de malestar presentó un aumento considerable en comparación con la

etapa anterior, pasó de un nivel de malestar de 0 a uno de 7, en las siguientes dos semanas

descendió hasta un nivel de 0, pero la última semana de intervención aumentó el nivel a 1.

En la comparación del nivel de malestar de ella en comparación con el de él, se observó

que en todas las fases ella presentó un movimiento similar en comparación con él; excepto

en la semana 13, donde él presento un aumento significo en el nivel en comparación con

ella (ver Figura 17).

En la pareja número 5, en el análisis de la frecuencia de discusiones presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 18), se observó que ella en

la etapa inicial de evaluación, presentó un aumento en la frecuencia de 4 discusiones hasta

9 discusiones; en la etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos,

presentó un patrón de disminución hasta una frecuencia de 3 discusiones, en la última

semana mostró un incremento a 5 discusiones; en la etapa de intervención de aceptación, la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 103

frecuencia de discusiones disminuyó en comparación con la etapa anterior, de 5 discusiones

a 0 discusiones, en la siguiente semana la frecuencia se aumentó a 3 discusiones, en las

siguientes tres semanas la frecuencia disminuyó a 0 discusiones; en la última etapa de

intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, la frecuencia de

las discusiones aumentó en comparación de la etapa anterior, de 0 discusiones a 5

discusiones, en las siguientes dos semanas la frecuencia disminuyó hasta 0 discusiones, en

las últimas 3 semanas de intervención la frecuencia disminuyó a 0 discusiones.

Figura 18. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 5. Se comparó el comportamiento de

ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de

intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

De la frecuencia de discusiones de él (ver Figura 18), se pudo observar que durante la

etapa inicial de evaluación, su frecuencia de discusiones presentó un rango estable de 6

discusiones a la semana; en la etapa de intervención de intercambio de comportamientos

positivos, la frecuencia de discusiones presentó un patrón de descenso hasta la semana

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 104

sexta, posteriormente aumentó en la última semana, a una frecuencia de 5 discusiones; en la

etapa de intervención de aceptación, la frecuencia de las discusiones presentó una

disminución a 0 discusiones, manteniéndose hasta la decima semana, en la siguiente

semana presentó un aumento a una frecuencia a 4 discusiones, pero la siguiente semana

final, presentó un descenso a 0 discusiones; en la última etapa de intervención en

entrenamiento en comunicación y solución de problemas, la frecuencia aumentó en

comparación con la etapa anterior, de una frecuencia de 0 discusiones a una frecuencia de 8

discusiones, posteriormente en las siguientes semana la frecuencia descendió hasta o

discusiones y en la última semana de intervención aumentó a 3 discusiones.

Comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones en la pareja número 5,

se pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación (ver Figuras 17 y 18), a pesar de

que presentó un aumento en la frecuencia de discusiones en la última semana, el nivel de

malestar se mantuvo igual que la semana anterior; en las siguientes etapas de intervención

en intercambio de comportamientos positivos, de aceptación y de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas, se pudo observar que la frecuencia de las

discusiones presentó un comportamiento similar al del nivel de malestar. Pero en la semana

7, la frecuencia de discusiones fue superior en comparación de la semana 5, pero el nivel de

malestar de la semana 7 fue menor que el presentado en la semana 5; en la semana 9, la

frecuencia de las discusiones fue igual en comparación de la semana 6, pero el nivel de

malestar de la semana 9 fue inferior al presentado en la semana 6; y en la semana 13, la

frecuencia en las discusiones fue superior que en la semana 1, pero el nivel de malestar de

la semana 13 fue menor que el de la semana 1.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 105

Al comparar la frecuencia de discusiones con el nivel de malestar percibido por él (ver

Figuras 17 y 18), se pudo observar que en la etapa inicial de evaluación, a pesar de las

discusiones se mantuvo en una frecuencia de 6, el nivel de malestar aumento en la segunda

semana. En la etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos, se pudo

observar que la frecuencia de las discusiones presentó un comportamiento similar al del

nivel de malestar; pero la frecuencia presentada en la semana 7 fue igual en la semana5,

siendo el nivel de malestar en la semana 7 menor en comparación de la semana 5. En la

etapa de intervención de aceptación, aunque el comportamiento de la frecuencia de las

discusiones presentó un comportamiento similar al del nivel de malestar, se pudo observar

que aunque el pico presentado en la frecuencia durante la semana 11 fue mayor que el pico

presentado en la semana 7, el nivel de malestar presentado en la semana 11 fue menor en

comparación con el de la semana 7. En la última etapa de intervención en entrenamiento en

comunicación y solución de problemas, la frecuencia de discusiones presentó un

comportamiento similar al del nivel de malestar, pero se pudo observar al igual que en la

etapa anterior, que aunque el pico presentado en la frecuencia durante la semana 17 fue

igual que el pico presentado en la semana 7, el nivel de malestar presentado en las semanas

15 y 17 fue menor en comparación con el de la semana 11e igual a la semana 7, su nivel de

malestar fue menor.

En la pareja número 5, en el análisis del porcentaje de comportamientos negativos,

presentado tanto por ella como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 19), se

pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación presentó un porcentaje mayor en la

frecuencia del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto

con la deprivación de un reforzador (67%), mientras que el menor porcentaje de la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 106

frecuencia fue presentado por el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (1%),

seguido por el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo (37%). En la etapa de intervención de intercambio de

comportamientos positivos en comparación con la etapa de evaluación, se observó que los

porcentajes de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición

a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (33%) y el de deprivación de un

reforzador (30%), disminuyeron en comparación con la etapa anterior; el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (19%) aumentó en

comparación con la etapa anterior; el porcentaje de la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo (37%), se mantuvo en comparción

con la etapa anterior. En la tercera etapa de intervención de aceptación, el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (38%), aumentó en

comparación de la etapa anterior; todos los promedios de las frecuencias de los patrones de

comportamientos negativos, el de la deprivación de un refuerzo (9%), el de exposición a un

aversivo (7%) y el de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador (0%), disminuyeron en comparación de la etapa anterior. En la última etapa de

intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, los porcentajes

de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un

aversivo (19%) y de deprivación de un reforzador (22%), al igual que el patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento (42%), aumentaron en comparación de la etapa

anterior; el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%), se mantuvo en

comparación con la etapa anterior.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 107

Figura 19. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja número 5,

durante cada etapa de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

Por parte de él (ver Figura 19), se observó que en la etapa inicial de evaluación presentó

un promedio mayor en la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de deprivación

de un reforzador (36%), mientras que el menor promedio en la frecuencia fue presentado

por el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (0%), seguido por los patrones

de comportamientos negativos de exposición a un aversivo (36%) y de exposición a un

aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (36%), presentado estos dos el

mismo porcentaje. En la etapa de intervención de intercambio de comportamientos

positivos en comparación con la etapa de evaluación, se observó que el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (27%), aumentó en

comparación con la etapa anterior; todos los porcentajes de las frecuencias de los patrones

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 108

de comportamientos negativos, el de exposición a un aversivo (29%), el de exposición a un

aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%) y el de deprivación de un

reforzador (18%), disminuyeron en comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa

de intervención de aceptación, se presentó que los porcentajes de las frecuencias del patrón

de comportamiento positivo de reforzamiento (35%) y del patrón de comportamiento

negativo de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (17%),

aumentaron en comparación de la etapa anterior; los porcentajes de las frecuencias de los

patrones de comportamientos negativos de la exposición a un aversivo (9%) y de la

deprivación de un reforzador (5%), disminuyeron en comparación con la etapa anterior. En

la última etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas,

todos los porcentajes de las frecuencias tanto de los patrones de comportamientos negativos

de la exposición a un aversivo (29%), de la deprivación de un reforzador (41%) y de la

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (50%), como la

frecuencia del comportamiento positivo de reforzamiento (38%), aumentaron en

comparación con la etapa anterior.

Al comparar la frecuencia de los patrones de comportamientos tanto positivos como

negativos (ver Figura 19), se pudo observar que él en comparación con ella, en la etapa

inicial de evaluación presentó un menor porcentaje en todas las frecuencias de los

patrones de comportamientos negativos y del patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento. En la etapa de intervención de intercambio de comportamientos positivos, él

mostró un mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento; en todos los porcentajes de las frecuencias de los patrones de

comportamientos negativos, él presentó un porcentaje menor a ella. En la tercera etapa de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 109

intervención de aceptación, él presentó un mayor porcentaje en los porcentajes de las

frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo y de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, en comparación con

ella; en los porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento negativo de

deprivación de un reforzador y en el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento,

él presentó un menor porcentaje en comparación con ella. En la última etapa de

intenrvención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, él presentó un

porcentaje mayor en todas las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de

exposición a un aversivo, de deprivación de un reforzador y de exposición a un aversivo

conjunto con la deprivación de un reforzador; en el porcentaje de la frecuencia del patrón

de comportamiento positivo de reforzamiento, él mostró un porcentaje menor en

comparación con ella.

Figura 20. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja número 5, durante

todo el proceso de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 110

Con respecto al porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamientos de

polarización en la pareja número 5 (ver Figura 20), se pudo observar que ella presentó un

mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento de interacción negativa

mutua (48%), seguido del patrón de comportamiento de evitación mutua (30%) y el menor

porcentaje de la frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de retirada (22%).

En cuanto a los patrones de comportamientos de polarización de él (ver Figura 20), se

pudo observar que presentó un mayor porcentaje en las frecuencias de los patrones de

comportamientos de interacción negativa mutua(37%) y de evitación mutua (37%), el

menor porcentaje de la frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de retirada

(26%).

En la comparación de los patrones de comportamientos de polarización entre la pareja

(ver Figura 20), se pudo observar que ella presentó un porcentaje mayor en la frecuencia

del patrón de comportamiento de evitación mutua, en comparación con él. En los

porcentajes de las frecuencuencas de los patrones de comportamiento de interacción

negativa mutua y de retirada, ella presentó un menor porcentaje en comparación con él.

6.2.6 Resultados pareja seis

En la pareja número 6, en los datos obtenidos del nivel de malestar presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 21),el nivel de malestar

percibido por ella en su relación, en la etapa inicial de evaluación, presentó un aumento de

un nivel de malestar de 4 a un nivel de 6; durante la etapa de intervención de entrenamiento

en comunicación y solución de problemas, el nivel de malestar se presentó en un rango

variable de 8 a 4, mostrando un movimiento de descenso; durante la etapa de intervención

de intercambio de comportamientos positivos, el nivel de malestar presentó una

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 111

disminución en comparación con la etapa anterior, pasando de un nivel de malestar de 4 a

uno de 0, en las siguientes semanas presentó un aumento en el nivel de malestar a 2 y en la

última semana disminuyó a 1; en la etapa final de intervención de aceptación, el nivel de

malestar presentó un aumento en comparación con la etapa anterior, pasando de un nivel de

malestar de 1 a 4, las siguientes semanas presento un rango variable entre 1 y 4, terminando

las últimas dos semanas de intervención en un nivel de 1.

Figura 21. Promedio semanal del nivel de malestar, en la pareja número 6. Se comparó el

comportamiento de ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B

corresponde a la fase de intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de

intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas.

El nivel de malestar percibido por él en su relación (ver Figura 21), durante la etapa

inicial de evaluación, presentó un rango variable del nivel de malestar entre 3 y 4; en la

etapa de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, el nivel

de malestar presentó una disminución a un nivel de 0, en comparación con la etapa anterior,

en las siguientes semanas el malestar se incrementó a un nivel de 5 y posteriormente

A D C B

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 112

descendió hasta un nivel de malestar de 0; en la siguiente etapa de intervención de

intercambio de comportamientos positivos, el nivel de malestar se presentó en un rango

variable de 0 a 1, finalizando la última semana en un nivel de malestar de 0; en la etapa

final de intervención de aceptación, el nivel de malestar presentó un aumentó en

comparación de la etapa anterior, de un nivel de malestar de 0 a un nivel de 2, en las

siguientes semanas el nivel de malestar se presentó en un rango variable entre 0 y 2,

finalizando en la última semana en un nivel de malestar de 1.

En la comparación del nivel de malestar de ella en comparación con el de él, se observó

que en todas las fases ella presentó un movimiento similar en comparación con él; excepto

en la semana 4, donde se presentó un movimiento opuesto, ella incremento

significativamente su nivel mientras que él decremento significativamente (ver Figura 21).

Figura 22. Frecuencia semanal de discusiones, en la pareja número 6. Se comparó el comportamiento de

ella con el de él. La letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de

intervención de aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos

positivos y D corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de

problemas.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 113

En la pareja número 6, en el análisis de la frecuencia de discusiones presentado tanto

por ella, como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 22), se observó que ella en

la etapa inicial de evaluación, presentó un una frecuencia variable entre un rango de 5 a 8

discusiones, mostrando un movimiento en ascenso; en la etapa de intervención de

entrenamiento en comunicación y solución de problemas, el nivel de malestar se presentó

entre un rango variable de 4 a 7 discusiones, mostrando un movimiento de disminución

finalizando en una frecuencia de 4 discusiones; en la etapa de intervención de intercambio

de comportamientos, la frecuencia de discusiones disminuyó en comparación con la etapa

anterior, de 4 a 0 discusiones, en las siguientes semanas la frecuencia se aumentó hasta 2

discusiones, en la siguiente semana la frecuencia disminuyó a 1 discusión; en la última

etapa de intervención de aceptación, la frecuencia de las discusiones aumentó en

comparación de la etapa anterior, de 1 a 3 discusiones, en las siguientes semanas la

frecuencia se presentó en un rango variable entre 1 y 3, manteniéndose las últimas semanas

en una frecuencia de 3 discusiones.

De la frecuencia de discusiones de él (ver Figura 22), se pudo observar que durante la

etapa inicial de evaluación, su frecuencia de discusiones presentó una disminución en la

frecuencia de 4 a 3 discusiones; en la etapa de intervención de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas, la frecuencia de discusiones presentó una

disminución en comparación de la etapa anterior, pasó de una frecuencia de 3 a una de 0

discusiones, en las siguientes semanas la frecuencia aumentó hasta 4 discusiones,

manteniéndose la siguiente semana en esa frecuencia, disminuyendo la siguiente semana a

una frecuencia de 0 discusiones; en la etapa de intercambio de comportamientos positivos,

la frecuencia de las discusiones se mantuvo la primera semana en la frecuencia de la etapa

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 114

anterior, la siguiente semana presentó un aumento a 1 discusión, esta frecuencia se mantuvo

la siguiente semana, pero posteriormente presentó una disminución a una frecuencia de 0

discusiones; en la última etapa de intervención en aceptación, la frecuencia aumentó en

comparación con la etapa anterior, de una frecuencia de 0 a 2 discusiones, posteriormente

presentó un rango variable entre 0 y 3 discusiones, finalizando en la última semana de

intervención en una frecuencia de 3 discusiones.

Comparando el nivel de malestar y la frecuencia de discusiones en la pareja número 6,

se pudo observar que ella (ver Figuras 21 y 22) en la etapa inicial de evaluación, presentó

un movimiento de aumento tanto en el nivel de malestar como en la frecuencia de las

discusiones, en la semana dos a pesar de que la frecuencia de las discusiones disminuyó el

malestar se mantuvo igual que la semana anterior. En la etapa de intervención de

entrenamiento en comunicación y solución de problemas, se observó que la frecuencia de

las discusiones presentó un comportamiento opuesto a el nivel malestar, por ejemplo en la

cuarta semana la frecuencia de las discusiones disminuyó y el nivel de malestar aumentó,

así fue el comportamiento hasta la semana 7, en donde el comportamiento presentó un

movimiento similar. En las siguientes etapas de intervención de intercambio de

comportamientos positivos y de aceptación, el comportamiento de la frecuencia de las

discusiones fue similar al comportamiento del nivel de malestar, exceptuando las últimas

semanas de la etapa de intervención de aceptación, donde se observó que en las semanas 16

y 17 la frecuencia de las discusiones se mantuvo igual que la frecuencia de la semana 15,

pero el nivel de malestar en las semanas 16 y 17 disminuyó manteniéndose en el mismo

nivel de malestar durante las dos semanas.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 115

Al comparar la frecuencia de discusiones con el nivel de malestar percibido por él (ver

Figuras 21 y 22), se pudo observar que en la etapa inicial de evaluación, aunque la

frecuencia de las discusiones en la primera semana disminuyó, la frecuencia del nivel de

malestar se mantuvo igual que a la semana anterior, en la tercera semana se presentó que la

frecuencia de discusiones se mantuvo pero el nivel de malestar aumentó. En la etapa de

intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas, se pudo observar

que la frecuencia de las discusiones presentó un comportamiento similar al del nivel de

malestar hasta la semana 5, en la semana 6 se observó que aunque la frecuencia fue igual

que en la semana 1, el nivel de malestar fue superior en la semana 6 que en la semana 1, en

la semana 7 se observó que aunque la frecuencia se mantuvo en comparación de la 6, el

nivel de malestar disminuyó; y en la semana 8 se presentó un patrón similar entre la

frecuencia de discusiones y el nivel de malestar. En las siguientes etapas de intervención de

intercambio de comportamientos positivos y de aceptación, el comportamiento de la

frecuencia de las discusiones fue similar al comportamiento del nivel de malestar,

exceptuando las últimas semanas de la etapa de intervención de aceptación, donde se

observó que en la semana 15 la frecuencia de las discusiones fue superior en comparación

de la frecuencia de la semana 13, pero el nivel de malestar en la semana 15 se mantuvo

igual en comparación de la semana 13, se presentó un fenómeno parecido en la semana 17,

donde la frecuencia de discusiones aumentó igual que en la semana 15, pero el nivel de

malestar en la semana 17 fue menor al presentado en la semana 15.

En la pareja número 6, en el análisis del porcentaje de comportamientos negativos,

presentado tanto por ella como por él y la comparación entre ambos (ver Figura 23), se

pudo observar que ella en la etapa inicial de evaluación presentó un porcentaje mayor en la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 116

frecuencia del patrón de comportamiento negativo de deprivación de un reforzador (30%),

mientras que el menor porcentaje de la frecuencia fue presentado por el patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento (0%), seguido por el porcentaje de la frecuencia

del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo (29%). En la etapa de

intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas en comparación

con la etapa de evaluación, se observó que todos los porcentajes de las frecuencias tanto de

los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo (38%), de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (50%) y el de

deprivación de un reforzador (48%), como del patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento (26%), aumentaron en comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa

de intervención de intercambio de comportamientos positivos, el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (34%), aumentó en

comparación de la etapa anterior; todos los patrones de comportamientos negativos de

exposición a un aversivo (14%), de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación

de un reforzador (0%) y el de deprivación de un reforzador (3%), disminuyeron en

comparación de la etapa anterior. En la última etapa de intervención de aceptación, todos

los porcentajes de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de

exposición a un aversivo (19%), de deprivación de un reforzador (24%), de exposición a un

aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (20%), aumentaron en comparación

de la etapa anterior; el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento positivo

de reforzamiento (37%), se mantuvo similar en comparación con la etapa anterior.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 117

Figura 23. Porcentaje de patrones de comportamientos negativos y positivos, en la pareja número 6,

durante cada etapa de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

Por parte de él (ver Figura 23), se observó que en la etapa inicial de evaluación presentó

un promedio mayor en la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de deprivación

de un reforzador (24%), mientras que el menor promedio en la frecuencia fue presentado

por el patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la

deprivación de un reforzador (0%), seguido por el porcentaje de la frecuencia del patrón de

comportamiento positivo de reforzamiento (4%). En la etapa de intervención de

entrenamiento en comunicación y solución de problemas en comparación con la etapa de

evaluación, se observó que los porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento

positivo de reforzamiento (26%) y del patrón de comportamiento negativo de deprivación

de un reforzador (55%), aumentaron en comparación con la etapa anterior; los porcentajes

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 118

de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos, de exposición a un

aversivo (33%) y de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador

(0%), se mantuvieron igual en comparación con la etapa anterior. En la tercera etapa de

intervención de intercambio de comportamientos positivos, se presentó que los promedios

de las frecuencias del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (34%) y del

patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo conjunto con la

deprivación de un reforzador (100%), aumentaron en comparación de la etapa anterior; los

promedios de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a

un aversivo (3%) y de la deprivación de un reforzador (6%), disminuyeron en comparación

con la etapa anterior. En la última etapa de intervención de aceptación, los porcentajes de

las frecuencias del patrón de comportamiento negativo de exposición a un aversivo (19%) y

el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento (36%), aumentaron en comparación

con la etapa anterior; los porcentajes de las frecuencias del los patrones de

comportamientos negativos de deprivación de un reforzador (0%) y de exposición a un

aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador (0%), disminuyeron en comparación

con la etapa anterior.

En la comparación de la frecuencia de los patrones de comportamientos tanto positivos

como negativos (ver Figura 23), se pudo observar que él en comparación con ella, en la

etapa inicial de evaluación presentó un mayor porcentaje en los porcentajes de las

frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo y de

deprivación de un reforzador, como en el patrón de comportamiento positivo de

reforzamiento; en el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, él presentó un

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 119

menor porcentaje en comparación con ella. En la etapa de intervención de entrenamiento

em comunicación y solución de problemas, él mostró un mayor porcentaje en las

frecuencias del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento y en el patrón de

comportamiento negativo de deprivación de un reforzador; en los porcentajes de las

frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de exposición a un aversivo y de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, él presentó un

porcentaje menor en comparación con ella. En la tercera etapa de intervención de

intercambio de comportamientos positivos, él presentó un mayor porcentaje en frecuencias

de los patrones de comportamientos negativos de deprivación de un reforzador y de

exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un reforzador, en comparación con

ella; en los porcentajes de las frecuencias del patrón de comportamiento negativo de

exposición a un aversivo y en el patrón de comportamiento positivo de reforzamiento, él

presentó un menor porcentaje en comparación con ella. En la última etapa de intenrvención

de aceptación, él presentó un porcentaje mayor en la frecuencia del patrón de

comportamiento negativo de exposición a un aversivo, en comparación con ella; en los

porcentajes de las frecuencias de los patrones de comportamientos negativos de deprivación

de un reforzador y de exposición a un aversivo conjunto con la deprivación de un

reforzador, él mostró un porcentaje menor en comparación con ella; en el porcentaje de la

frecuencia del patrón de comportamiento positivo de reforzamiento, él mostró un

porcentaje similar al de ella.

Con respecto al porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamientos de

polarización en la pareja número 6 (ver Figura 24), se pudo observar que ella presentó un

mayor porcentaje en la frecuencia del patrón de comportamiento de retirada (50%), seguido

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 120

del patrón de comportamiento de evitación mutua (28%) y el menor porcentaje de la

frecuencia lo presentó el patrón de comportamiento de interacción negativa mutua (22%).

Figura 24. Porcentaje de patrones de comportamientos de polarización, en la pareja número 6, durante

todo el proceso de intervención. Se comparó el comportamiento de ella con el de él.

En cuanto a los patrones de comportamientos de polarización de él (ver Figura 24), se

pudo observar que presentó un mayor porcentaje en las frecuencias de los patrones de

comportamientos de interacción negativa mutua(45%), seguidpo por el patrón de

comportamiento de retirada (35%), el menor porcentaje de la frecuencia lo presentó el

patrón de comportamiento de evitación negativa (19%).

En la comparación de los patrones de comportamientos de polarización entre la pareja

(ver Figura 24), se pudo observar que ella presentó un promedio mayor en los porcentajes

de las frecuencias de los patrones de comportamientos de retirada y de evitación mutua, en

comparación con él. En el porcentaje de la frecuencia del patrón de comportamiento de

interacción negativa mutua, ella presentó un menor porcentaje en comparación con él.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 121

6.2.7 Resultados de la comparación entre todas las parejas

A continucación, se presentarán el análisis de los resultados obtenidos en el nivel de

malestar, en donde se tienen en cuenta las comparaciones entre las parejas, los miembros de

las parejas y las etapas de la intervención; en donde las etapas, son presentadas en diferente

orden de introducción a cada pareja (ver figura 25).

Figura 25. Promedio del nivel de malestar en cada una de las etapas de las etapas de intervención en

las 6 parejas. Se comparó el comportamiento de ella con el de él y el comportamiento entre las parejas. La

letra A, corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de

aceptación, la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D

corresponde a la fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

En cuanto al nivel de malestar en cada una de las etapas de intervención, en

comparación de las seis parejas (ver figura 25), se pudo observar en la etapa de evaluación,

que la mujer de la pareja dos presentó el mayor promedio del nivel de malestar (6),seguida

por las mujeres de las parejas tres, cinco y seis (5), seguidas por la mujer de la pareja cuatro

(3) y con el menor porcentaje, la mujer de la pareja uno (2); el hombre que presentó el

mayor porcentaje en esta etapa fue el de la pareja cinco (5), seguido por el hombre de la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 122

pareja tres (4), seguido por los hombres de las parejas dos y seis y con los menores

promedios, los hombres de las parejas uno y cuatro (1).

En la segunda etapa de intervención, en comparación con la etapa anterior y entre las

parejas que presentaron la misma fase (ver figura 25), se observó que en las parejas uno y

cuatro (B), el promedio del nivel de malestar de ambas mujeres disminuyór; el promedio

del nivel de malestar del hombre de la pareja uno disminuyó, pero en el hombre de la pareja

4 se mantuvo. En las parejas dos y cinco (C), los promedios de la frecuencias del nivel de

malestar, disminuyeron tanto en las mujeres como en los hombres de las dos parejas. En

las parejas tres y seis (D), el promedio del nivel de malestar de la mujer de la pareja tres

disminuyó, pero el de la mujer de la pareja seis, aumentó; el promedio del nivel de malestar

disminuyó an ambos hombres de las parejas.

En la tercera etapa de intervención, en comparación con la etapa anterior y entre las

parejas que presentaron la misma fase (ver figura 25), se observó que en las parejas uno y

seis (C), el promedio del nivel de malestar de la mujer de la pareja uno se mantuvo (de B a

C), mientras que el promedio de la mujer de la pareja seis, disminuyó significativamente

(de D a C); el promedio de nivel de malestar del hombre de la pareja uno aumentó (de B a

C), mientras que el del hombre de la pareja seis disminuyó (de D a C). En las parejas dos y

cuatro (D), el promedio del nivel de malestar de la mujer de la pareja dos se mantuvo (de C

a D), mientras que en las mujer de la pareja cuatro disminuyó (de B a D); el promedio del

nivel de malestar del hombre de la pareja dos aumentó (de C a D), mientras que el nivel del

hombre de la pareja cuatro disminuyó (de B a D). En las parejas tres y cinco (B), el

promedio del nivel de malestar tanto de la mujer de la pareja tres (de D a B) y de la mujer

de la pareja cinco (de C a B), diminuyó; igualmente, el promedio del nivel de malestar del

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 123

hombre de la pareja tres (de D a B), como del hombre de la pareja cinco (de C a B),

disminuyó.

En la cuarta etapa de intervención, en comparación con la etapa anterior y entre las

parejas que presentaron la misma fase (ver figura 25), se observó que en las parejas uno y

cinco (D), el promedio de nivel de malestar de la mujer de la pareja uno disminuyó (de C a

D), mientras que el malestar de la mujer de la pareja cinco aumentó (de B a D); el promedio

de nivel de malestar de los hombres se comportó igual, en el hombre de la pareja uno

disminuyó (de C a D), mientras que el del hombre de la pareja cinco aumentó (de B a D).

En las parejas dos y seis (B), el promedio del nivel de malestar de la mujer de la pareja dos

se mantuvo (de D a B), mientras que el de la mujer de la pareja sesis se aumentó (de C a B);

mientras que en el nivel de malestar de los hombres, tanto de la pareja dos (de D a B) como

de la pareja seis (de C a B), se mantuvo. En las parejas tres y cuatro (C), el promedio del

nivel de malestar de de la mujer de la pareja tres se mantuvo (de B a C), mientras que el de

la mujer de la pareja cuatro disminuyó (de D a C); el promedio del nivel de malestar del

hombre de la pareja tres aumentó (de B a C), mientras que el del hombre de la pareja

cuatro se mantuvo (de D a C).

En comparación del proceso disminución a través de las etapas (ver figura 25), desde su

inicio hasta su finalización se pudo observar que la pareja uno desmostró un claro patrón de

descenso del promedio del nivel de malestar, entre la etapa inicial de evaluación hasta la

etapa final de intervención; la pareja tres demuestró tambien ese patrón de disminución

entre la etapa inicial de evaluación hasta la tercera fase de intervención, pero en la última

fase se mantuvo en comparación de la etapa anterior; la pareja seis, también mostró ese

patrón de descenso entre la etapa inicial de evaluación y la tercera etapa de intervención,

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 124

pero en la segunda y la cuarta etapa de la intervención ella mostró un aumento en el nivel y

él en la última etapa se mantuvo en el mismo nivel, en comparación de la etapa anterior; la

pareja cinco, también demuestró un patrón de descenso del promedio del nivel de malestar,

pero en la última etapa de intervención, tanto ella como él presentaron un incremento; la

pareja dos, fue la única pareja que tanto él como ella, solamente presentaron un descenso en

el promedio de la etapa inicial de evaluación a la segunda etapa de intervención, en la

siguiente fase los dos presentaron un aumento, el cual se mantuvo en la etapa final de

intervención; en la pareja cuatro, ella si presentó un patrón de descenso en promedio del

nivel de malestar, desde la etapa inicial de evalación hasta la última etapa de intervención,

mientras que él presentó un descenso en el promedio de la etapa inicial de intervención

hasta la tercera fase de intervención, pero en la cuarta fase presentó un aumento.

En la comparación entre la primera etapa de evaluación con la última etapa de

intervención, en cuanto al promedio del nivel de malestar entre las parejas (ver figura 25),

se observó que en las parejas uno, tres, cuatro, cinco y seis, tanto las mujeres como los

hombres mostraron una reducción en el promedio; en la pareja dos, el promedio de la

frecuencia del nivel de malestar en ella disminuyeron, pero en él presentaron un promedio

igual.

Igualmente, se realizó un análisis de los resultados obtenidos en la frecuencia de las

discusiones, en donde se tuvieron en cuenta las comparaciones entre las parejas, los

miembros de las parejas y las etapas de la intervención; en donde las etapas, son

presentadas en diferente orden de introducción a cada pareja (ver figura 26).

En cuanto a la frecuencia de las discusiones en cada una de las etapas de intervención,

en comparación de las seis parejas (ver figura 26), se pudo observar en la etapa de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 125

evaluación, que la mujer de la pareja dos presentó el mayor promedio de la frecuencia de

discusiones (6),seguida por las mujeres de las parejas tres y cinco (21), seguidas por la

mujer de la pareja seis (16), seguida por la mujer de la pareja (15) y con el menor

porcentaje, la mujer de la pareja uno (8); el hombre que presentó el mayor porcentaje en

esta etapa fue el de la pareja cinco (18), seguido por el hombre de la pareja dos (15),

seguido por el hombre de la pareja tres (13), seguido por el hombre de la parejas seis (10),

seguido por el hombre de la pareja cuatro (5) y con el menor promedio, el hombre de la

pareja uno (2).

Figura 26. Promedio de la frecuencia de discusiones en cada una de las etapas intervención en las 6

parejas. Se comparó el comportamiento de ella con el de él y el comportamiento entre las parejas. La letra A,

corresponde a la fase de evaluación (línea de base), la B corresponde a la fase de intervención de aceptación,

la C corresponde a la fase de intervención de intercambios de comportamientos positivos y D corresponde a la

fase de intervención de entrenamiento en comunicación y solución de problemas.

En la segunda etapa de intervención, en comparación con la etapa anterior y entre las

parejas que presentaron la misma fase (ver figura 26), se observó que en las parejas uno y

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 126

cuatro (B), el promedio de la frecuencia de las discusiones de ambas mujeres disminuyó;

mientras que el promedio de los hombres de las parejas aumentó. En las parejas dos y cinco

(C), los promedios de la frecuencia de discusiones, disminuyeron tanto en las dos mujeres

de las parejas, como en el hombre de la pareja cinco, mientran el promedio del hombre de

la pareja dos se mantuvo similar. En las parejas tres y seis (D), el promedio de la

frecuencia de discusiones de la mujer de la pareja tres disminuyó, pero el de la mujer de la

pareja seis, aumentó; el promedio de la frecuencia de discusiones disminuyó en el hombre

de la pareja tres, pero en el hombre de la pareja seis el promedio de la frecuencia se

mantuvo.

En la tercera etapa de intervención, en comparación con la etapa anterior y entre las

parejas que presentaron la misma fase (ver figura 26), se observó que en las parejas uno y

seis (C), el promedio de la frecuencia de discusiones de la mujer de la pareja uno aumentó

(de B a C), mientras que el promedio de la mujer de la pareja seis, disminuyó

significativamente (de D a C); el promedio de la frecuencia de discusiones del hombre de la

pareja uno se mantuvo (de B a C), mientras que el del hombre de la pareja seis disminuyó

(de D a C). En las parejas dos y cuatro (D), el promedio de la frecuencia de discusiones de

la mujer de la pareja dos disminuyó (de C a D), mientras que en la mujer de la pareja cuatro

aumentó (de B a D); el promedio de la frecuencia de discusiones del hombre de la pareja

dos se mantuvo (de C a D), mientras que el nivel del hombre de la pareja cuatro disminuyó

(de B a D). En las parejas tres y cinco (B), el promedio de la frecuecia de discusiones de la

mujer de la pareja tres aumentó, (de D a B)mientras que el de la mujer de la pareja cinco

disminuyó (de C a B); el promedio de la frecuencia de las discusiones de los hombres, tanto

de la pareja tres (de D a B), como del hombre de la pareja cinco (de C a B), disminuyó.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 127

En la cuarta etapa de intervención, en comparación con la etapa anterior y entre las

parejas que presentaron la misma fase (ver figura 26), se observó que en las parejas uno y

cinco (D), en el promedio de la frecuencia de discusiones de la mujer de la pareja uno

disminuyó (de C a D), mientras que el malestar de la mujer de la pareja cinco aumentó (de

B a D); el promedio de la frecuencia de las discusiones de los hombres se comportó igual,

el hombre de la pareja uno disminuyó (de C a D), mientras que el del hombre de la pareja

cinco aumentó (de B a D). En las parejas dos y seis (B), el promedio de la frecuencia de las

discusiones tanto de la mujer de la pareja dos (de D a B) como la mujer de la pareja seis (de

C a B), se aumentó; en el promedio de la frecuencia de discusiones en el hombre, de la

pareja dos disminuyó (de D a B), mientras que en el hombre de pareja seis aumentó (de C a

B). En las parejas tres y cuatro (C), el promedio de la frecuencia de discusiones de la mujer

de la pareja tres disminuyó (de B a C), mientras que el de la mujer de la pareja cuatro

aumentó (de D a C); el promedio del nivel de malestar del hombre de la pareja tres aumentó

(de B a C), mientras que el del hombre de la pareja cuatro se mantuvo (de D a C).

En comparación del proceso de disminución del promedio de la frecuencia de

discusiones a través de las etapas (ver figura 26), desde su inicio hasta su finalización no se

pudo observar claramente en ninguna de las parejas, pero en la pareja cinco, se puedo

observar un patrón de descenso hasta la tercera etapa de intervención,pero en la última eta

presenta un ascenso.

En la comparación entre la primera etapa de evaluación con la última etapa de

intervención, en cuanto al promedio de las frecuencias de las discusiones entre las parejas

(ver figura 26), se observó que en las parejas dos, tres y seis, tanto las mujeres como los

hombres mostraron una reducción en el promedio; en las parejas uno y seis, el promedio de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 128

la frecuencia de las discusiones en ella disminuyeron, pero en él presentaron un promedio

similar; en la pareja cuatro, el promedio de la frecuencia de las discusiones presentó un

porcentaje similar, mientras que el promedio de él disminuyó.

En comparación entre el promedio de la frecuencia de las discusiones y el promedio del

nivel de malestar en cada una de las etapas (ver figura 26), se observó que en la pareja uno,

a pesar de que el procentaje del promedio de las discusiones de él aumentaron en la

segunda fase de intervención, el promedio del nivel de malestar disminuyó; en la tercera

etapa de intervención, el promedio de la frecuencia de discusiones se aumentó, pero el

promedio del nivel de malestar se mantuvo igual que a la etapa anterior; en el resto de

promedios, tanto él como ella, en la comparación de la frecuencia de las discusiones como

en el nivel de malestar, presentaron un movimiento similar.

En la pareja dos, se pudo observar que en la segunda etapa de intervención, él presentó

un porcentaje similar en la frecuencia de las discusiones, pero su porcentaje en el nivel de

malestar diminuyó; en la tercera etapa de intervención, ella presentó un menor porcenaje en

la frecuencia de discusiones, pero su porcentaje del nivel de malestar se mantuvo; el

procentaje de la frecuencia de discusiones de él, en la tercera etapa de intervención se

mantuvo, pero el promedio del nivel de malestar se incrementó; en la cuarta etapa de

intervención, el promedio de las discusiones de ella aumentó, pero el promedio del nivel de

malestar se mantuvo; el porcentaje de la frecuencia de discusiones de él, en la cuarta etapa

de intervención disminuyó, pero el promedio del nivel de malestar se mantuvo.

En la pareja tres, en la etapa de intervención tres, el promedio de la frecuencia de las

discusiones de ella aumentó significativamente, pero el promedio del nivel del malestar

disminuyó; en la etapa cuarta, el promedio de la frecuencia de discusiones de ella

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 129

disminuyeron significativamente, pero el promedio del nivel de malestar se mantuvo; los

otros promedios presentaron un movimiento similar.

En la pareja cuatro, en la segunda etapa de intervención, el promedio de la frecuencia

de las discusiones de él aumentaron, pero el promedio del nivel de malestar se mantuvo; en

la tercera etapa de intervención, el promedio de la frecuencia de discusiones de ella

aumentó, pero el promedio del nivel de malestar disminuyó; los demás promedios

presentaron un comportamiento similar.

En la pareja cinco, a pesar de que ella mostró un porcentaje de frecuencia de

discusiones mayor al de él durante la etapa de evaluación, su promedio del nivel de

malestar fue igual; en la demás etapas, el proncetaje de la frecuencia de las discusiones

presentó un comportamiento similar al porcentaje del nivel de malestar.

En la pareja seis, en la segunda etapa de intervención, el porcentaje de la frecuencia de

las discusiones de él se mantuvieron, pero el porcentaje del nivel de malestar disminuyó; en

la etapa cuarta de intervención, el promedio de la frecuencia de las discusiones de él

aumentaron, pero el promedio del nivel de malestar se mantuvo. En ella, se observó que en

la etapa cuarta de intervención, presentó un incremento significativo en el promedio de la

frecuencia de las discusiones, pero el aumento en el promedio del nivel de malestar fue

mínimo; en las demás etapas, el comportamiento del promedio de las discusiones fue

similiar al promedio del nivel de malestar.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 130

7 DISCUSIÓN

En relación con el objetivo de la investigación, de evaluar si existen o no diferencias de

acuerdo con el orden de introducción de las estrategias de intervención, se pudo observar

que en todas las parejas en la primera etapa de intervención, independiente de la estrategia

implementada, se presentó una disminución en el promedio del nivel de malestar; excepto

en la pareja 6, en la cual la primera estrategia fue el entrenamiento en comunicación y

solución de problemas. En cuanto a la segunda etapa de intervención, en las parejas 3 y 5,

quienes tuvieron la etapa de intervención de aceptación, las parejas demostraron una

disminución en el nivel de malestar; en las otras parejas el cambio no fue similar. En cuanto

a la tercera etapa de intervención, ninguna de las parejas con la misma estrategia,

presentaron un cambio similar.

Esto demuestra, que la terapia comportamental integrativa, genera una disminución en

cuanto a la insatisfacción de la pareja, independiente del orden de presentación de las

diferentes estrategias que emplea. Adicionalmente, se confirma, que cada pareja es

diferente y que por lo tanto, el orden de presentación de las estrategias, está determinado

por las características propias de la pareja (Christensen & Jacobson, 1998).

En cuanto a la estrategia que fue más efectiva, se observó que el intercambio de

comportamientos positivos pudo reducir el nivel de malestar en un mayor número de

personas, seguida por la estrategia de aceptación, por último la de entrenamiento en

comunicación y solución de problemas. En cuanto a la estrategia, empleada al mismo

tiempo en las parejas, que presentó una disminución en el nivel de malestar en ambas

parejas, fue dada por la de intercambio de comportamientos positivos, siendo introducida

como la primera estrategia; al igual que por la estrategia de aceptación, siendo introducida

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 131

como la segunda estrategia. Estos hallazgos sugieren, que la guía de intervención de la TCI

de pareja, es una herramienta adecuada para la intervención en los problemas de pareja y

que el orden de presentación de las diferentes estrategias, no presentó una diferencia

significativa.

Comparando entonces el efecto positivo que se demostró de la intervención, aunque el

orden de presentación de cada una de las estrategias fuera diferente para cada pareja,

permite afirmar que el orden de presentación de los diferentes componentes, no influye en

el efecto logrado por la intervención; lo importante entonces para lograr un cambio en la

insatisfacción de la pareja, sería la conjugación de todos los elementos de la TCI. Por lo

tanto, el orden puede ser determinado principalmente por las características de cada caso.

En cuanto a la afirmación de que los métodos de cambio son más eficaces después de

que la pareja ha logrado los objetivos propuestos por las técnicas de aceptación

(Christensen, & Jacobson, 1998; Berns, Jacobson y Christensen, 2000); esta investigación

demostró que las técnicas enfocadas al cambio, generan una disminuci{on sobre la

insatisfacción de pareja, sin necesariamente haber logrado los objetivos propuestos por las

técnicas enfocadas en la aceptación. Es importante resaltar, que en esta investigación no se

logró observar un patrón determinante, debido a que no hay varios grupos de comparación;

por lo tanto, se recomienda para investigaciones futuras, emplear varios grupos de

comparación, que presenten el mismo orden de introducción de las diferentes estrategias,

para que esta afirmación pueda ser confirmada.

En cuanto a los objetivos propuestos por la intervención, se pudo observar que la

terapia comportamental integrativa tuvo un efecto positivo sobre la insatisfacción marital

de las 6 parejas; es decir, que las parejas por medio de la TCI, lograron disminuir su nivel

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 132

de insatisfacción con la pareja. Por lo tanto, esta investigación está en congruencia con las

investigaciones realizadas por Shadish y Baldwin (2005), Snyder, Castellani y Whisman

(2006), Christensen y Heavey (1999) (como se citaron en Christensen, Atkins, Baucom &

Yi, 2010), Christensen, Atkins, Baucom y Yi, (2010) Jacobson, Christensen, Prince,

Cordova y Eldrige (2000) y Atkins, Marín, Lo, Klann & Hahlweg, K. (2010) las cuales

llegaron a la misma conclusión.

La afirmación anterior, se sustenta sobre la obtención de las metas terapéuticas, las

cuales eran que si se intervenía sobre la insatisfacción presentada por las 6 parejas, a través

de las diferentes estrategias que emplea la terapia comportamental integrativa (TCI), como

la aceptación, el intercambio de comportamientos positivos y el entrenamiento en solución

de problemas, se esperaría observar en las 6 parejas: 1. Que las parejas continuaran

presentando diferencias (discusiones); 2. Que el promedio del nivel de malestar, presentado

ante las diferencias, disminuyera; y 3. Que se presentaran o incrementaran los patrones de

comportamientos positivos, siendo estos superiores en comparación con los patrones de

comportamientos negativos.

Por lo tanto, al analizar los resultados obtenidos, en relación a la primera meta

terapéutica en cada una de las parejas, se puede afirmar que todas las parejas siguieron

presentando diferencias (discusiones). Pero en la pareja número 1, en la última fase de

intervención, por parte de ella no hubo presentación de diferencias, al igual que en la pareja

número 4, por parte de él.

En relación a los resultados obtenidos, en cuanto a la presentación de diferencias, en

cada pareja, en donde se comparó el comportamiento de ella y el de él, se pudo analizar que

en la pareja número 1, ambos presentaron un comportamiento diferente. En la pareja

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 133

número 4, en la primera fase de intervención, los dos presentaron diferencias, pero en la

segunda y tercera fase, él no presentó diferencias mientras que ella sí. En las parejas 2, 3, 5

y 6 se pudo observar, que tanto ella como él presentaron un movimiento similar; sin

embargo, en las parejas número 3 y 6, la frecuencia de ella era superior en comparación con

la de él. Esto demuestra, que cada persona evalúa de forma diferente su relación, por lo

tanto lo que es una diferencia o discusión para una persona, no lo es para la otra, como lo

afirmó McNulty & Russell, (2010).

Adicionalmente, es importante tener en cuenta, que la presentación de discusiones,

donde se observan patrones de comportamientos negativos pueden ser adaptativas para la

pareja, ya que en ocasiones ayudan a la pareja a resolver problemas en el futuro (McNulty

& Russell, 2010); evidenciando la importancia de disminuir en la terapia, la afectación

emocional que tienen los patrones de interacción negativo en cada uno de los miembros de

la pareja, más que el hecho de tratar de eliminarlos. Esto, se encuentra en congruencia que

la principal meta terapéutica de la terapia comportamental integrativa (Christensen &

Jacobson, 1998).

En cuanto a la segunda meta terapéutica, al analizar los resultados obtenidos, se puede

afirmar que se disminuyó el promedio del nivel de malestar presentado ante las diferencias.

En relación a los resultados obtenidos, en cuanto al nivel de malestar, en cada pareja, en

donde se compara el comportamiento de ella y el de él, se pudo analizar que en las parejas

número 1,2, 3, 5 y 6, tanto él como ella presentaron un comportamiento y nivel similar; en

la pareja número 4, los dos presentaron un movimiento muy diferente, donde el nivel de

malestar de ella era con frecuencia superior al de él.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 134

Cuando en la intervención terapéutica, se planteó una meta inicial de que la pareja

continuará presentado diferencias (discusiones) y en la segunda meta terapéutica se planteó

que el nivel de malestar debe disminuir, es debido a que la meta principal de la TCI de

pareja, se fundamenta en que los problemas presentados por la pareja, no son el resultado

de sus conflictos, sino principalmente son el resultado de su reactividad emocional a estos;

por tal razón, el énfasis principal de esta terapia es la aceptación (Christensen, Atkins,

Baucom & Yi, 2010); por lo tanto, el nivel de malestar que genera una diferencia es lo que

debe disminuir, aunque se sigan presentando esas diferencias. Concluyendo entonces, que

la pareja acepta que las diferencias son inevitables pero no les produce un nivel de malestar

relevante, disminuyendo así la insatisfacción en la pareja.

Siendo así, que esta investigación, logró el objetivo principal de la TCI de pareja, en

donde a través del análisis de los datos, se compara la frecuencia de presentación de las

diferencias (discusiones) con el nivel de malestar, se observó en todas las parejas, tanto en

ella como en él, que aunque la frecuencia de las diferencias se incrementara en

comparación con otras frecuencias presentadas anteriormente, el nivel de malestar se

mantenía o disminuía. Demostrando entonces, que las parejas aceptaban que había

diferencias, pero su nivel de insatisfacción se reducía.

En cuanto a la tercera meta de intervención, donde se busca que se presenten o

incrementen los patrones de comportamientos positivos, siendo estos superiores en

comparación con los patrones de comportamientos negativos, a través del análisis de los

resultados, se pudo observar que en todas las parejas, tanto en él como en ella, mostraron

que el porcentaje de los patrones de comportamientos positivos se incrementaron a medida

de la intervención. En las parejas número 1, 3 y 5, ellos iniciaron con un porcentaje inferior

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 135

al de ellas, pero al finalizar la intervención, ellos finalizaron con un porcentaje similar al de

ellas. En la pareja número 2, 4 y 5, ellas iniciaron con un porcentaje menor al de ellos pero

al finalizar la intervención, ellas presentaron un porcentaje similar al de ellos.

En la comparación entre las etapas de intervención y los patrones de comportamiento

negativos con los patrones de comportamientos positivos, en las parejas 1 y 6, se pudo

observar, que el porcentaje de los patrones de comportamientos positivos, tanto en ella

como él en la última etapa de intervención, fueron superiores al porcentaje de los patrones

de comportamientos negativos. En las parejas número 2 y 3, desde la segunda etapa de

intervención hasta la última, el porcentaje de los patrones de comportamiento positivos

superó al porcentaje de los patrones de comportamientos negativos. En la pareja número 4,

se observó en él, que desde la segunda etapa de intervención hasta la última etapa, el

porcentaje de los patrones de comportamientos positivos fueron superiores al porcentaje de

los patrones de comportamientos negativos;. En la pareja número 5, se presentó el mismo

fenómeno que en la pareja número 4, exceptuando que ella fue la que mostró una

superioridad en el porcentaje de los patrones de comportamientos positivos desde la

segunda etapa de intervención y él fue quien mostró en la segunda etapa una superioridad

del porcentaje de los patrones de comportamientos positivos, pero en la última etapa mostró

la superioridad en el porcentaje de los comportamientos negativos de exposición junto a la

deprivación y en la deprivación.

Demostrando así, que se logró la tercera meta de intervención, donde se presentaron

o incrementaron los porcentajes de los patrones de comportamiento positivos. En cuanto al

incremento del porcentaje de los patrones de comportamiento positivo en comparación de

los porcentajes de los patrones de comportamientos negativos, en general se logró un

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 136

aumento en el porcentaje de los comportamientos positivos en comparación de los

negativos; exceptuando en él y ella de las parejas 4 y 5.

En cuanto a la afirmación, de que las conductas negativas están asociadas con una

disminución en la satisfacción de la pareja, más aún cuando se presenta un desbalance entre

las conductas negativas y las conductas positivas (Bradbury, Campbell, y Fincham, 1995;

Carrere & Gottman, 1999; Gill, Christensen, y Fincham, 1999; Gottman, Coan, Carrere, y

Swanson, 1998; Gottman y Levenson, 1999; Johnson MD et al., 2005; Kiecolt Katz y

Gottman, 1993;-Glaser et al., 2003; Pascua y Bradbury , 1998; Rogge y Bradbury, 1999,

como se citaron en McNulty & Russell, 2010; Gottman, 1993, como se citó en Berns,

Jacobson, & Christensen, 2000), esta investigación refuerza esa afirmación, ya que se

observó, que cuando el porcentaje de conductas negativas disminuye y los patrones de

comportamiento positivo aumentan, la insatisfacción de la pareja disminuye.

Sin embargo, se observó que aunque se presentaban comportamientos negativos, el

nivel de malestar disminuía o se mantenía; por lo tanto, se puede afirmar que el

comportamiento negativo no siempre genera insatisfacción en las parejas (McNulty &

Russell, 2010). Permitiendo afirmar que no solamente, en las parejas que presentan algún

tipo de conflicto o problema, su relación gira entorno principalmente de excesos y déficits

de conductas tanto positivas como negativas entre ellos (Epstein y Baucom, 2002); sino que

en general, las interacciones entre la pareja, giran en torno de comportamientos tanto

positivos como negativos, pero que su valoración o afectación emocional, llevará a

experimentar a la persona un déficit en comportamientos positivos o un exceso en

comportamientos negativos.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 137

En cuanto a los porcentajes de los patrones de comportamientos de polarización, se

observó que en las parejas número 1 y 3, en ellas se presentó un mayor porcentaje en la

interacción negativa mutua, mientras que en ellos el mayor porcentaje, se presentó en la

evitación mutua. En la pareja número 2, tanto en ella como en él, el mayor porcentaje fue

en la interacción negativa mutua. En la pareja número 4, en ella el mayor porcentaje se

presentó en la evitación mutua, mientras que en él, el mayor porcentaje fue en la

interacción negativa mutua. En la pareja número 5, en ella el mayor porcentaje, lo presentó

la interacción negativa mutua, mientras que en él, el mayor porcentaje se presentó tanto en

la evitación mutua como en la interacción negativa mutua. En la pareja 6, en ella se

presentó un mayor porcentaje en la retirada, mientras que en él el mayor porcentaje lo

presentó la interacción negativa mutua.

Estos resultados, están en consonancia con la afirmación de que cada pareja se debe

ver independientemente; es decir, que tanto la evaluación como la intervención, se deben

desarrollar ideográficamente, debido a que cada pareja tiene sus características propias

(McNulty & Russell, 2010). Esa evaluación que realiza cada persona acerca de su

satisfacción con la pareja, depende tanto de la historia individual de aprendizaje como de la

historia de interacción con su pareja (Epstein & Baucom, 2002; Christensen, Jacobson, &

Babcock, 1995; Osterhout, Frame, & Johnson, 2011; South, Krueger, & Iacono, 2011)

Por lo tanto, se hace necesario realizar más investigaciones, con un mayor número de

parejas con el mismo orden de presentación de las estrategias de intervención, que permitan

observar un patrón claro, donde se diferencien los resultados de acuerdo a la introducción y

orden de cada estrategia de intervención. Adicionalmente, se recomienda realizar

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 138

investigaciones, donde se observe el mantenimiento de los resultados de la intervención a

través del tiempo; lo cual permite evaluar la efectividad de la intervención.

En cuanto a la afirmación que realizó Gurman (2001), donde la práctica en las terapias

para la intervención en las problemáticas de la pareja, está distanciada de la investigación,

debido a que esta se enfoca más en los paquetes y las técnicas o métodos terapéuticos y la

práctica debería enfocarse en la conexión adecuada entre el terapeuta y su marco

conceptual; se puede afirmar, que esta investigación, como otras realizadas anteriormente

como las de Christensen, y Jacobson (1998), Berns, Jacobson y Christensen (2000),

Christensen, et al. (2004), Christensen, et al. (2010), McNulty y Russell (2010), Jacobson,

et al. (2000) entre otras, cumplen con la función de nutrir la práctica profesional, en donde

se le está brindando a los terapeutas, en congruencia con un marco de referencia definido,

una herramienta valiosa para intervenir los problemas de las parejas, con técnicas que han

sido empíricamente validadas; realizando así investigaciones metodológicamente rigurosas,

en donde a los consultantes se les garantice calidad en los servicios psicológicos.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 139

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Terapia Conductual Integrativa de Pareja 146

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 147

Apéndice A

ESQUEMA GENERAL DE LA TERAPIA COMPORTAMENTAL

INTEGRATIVA DE PAREJA

La siguiente información presentada, es una traducción que se realizó del esquema de

intervención de la terapia comportamental integrativa de pareja, realizado por Christensen,

(s. f.), en la Universidad de California, los Ángeles, Estados Unidos.

Este esquema, corresponde a la síntesis de la guía de intervención de la terapia

comportamental integrativa de pareja, realizada por Christensen & Jacobson. (1998). Inicia

por la explicación de la fase de evaluación, explicando que se debe hacer durante la primera

sesión, las sesiones individuales y la sesión de retroalimentación. Posteriormente realiza el

esquema de la intervención y finaliza con el esquema de la terminación de la terapia.

Fase de evaluación y retroalimentación.

Esquema de la primera entrevista.

1. La presentación, información breve, introducción o revisión a la terapia de pareja

2. Principios para discutir los temas que siguen:

a. Cada persona habla por sí misma.

b. Cada persona tiene la oportunidad de hablar; reducir las interrupciones

c. Ir y venir entre la pareja

d. Mantener la neutralidad - mediante el apoyo a ambos

e. Hacer lo impersonal, personal

f. Hacer lo vago, específico

3. Presentando las quejas: ¿Qué los llevó a la terapia de pareja, Cuáles son sus objetivos o

metas?

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 148

a. Principales problemas y los objetivos o metas asociados

b. Los principales patrones de interacción

4. Historia de la Relación: Esté pendiente del material o información para la formulación

a. ¿Qué fue lo que los atrajo inicialmente? (¿Qué de esa atracción puede ser la fuente de

los problemas actuales?)

b. ¿Cuál fue su primera historia? (Fortalezas; precursores o antecedentes de los patrones

actuales; estresores que generaron o crearon el problema)

c. Desarrollo del problema actual

d. Situación actual incluyendo como van las cosas cuando ellos están bien

5. Reparta el paquete de medidas; explique las razones; pida privacidad

a. Ejemplo de las razones: "Me gustaría que cada uno de ustedes complete o realizara

estos cuestionarios y los traen a la sesión individual. Ellos me proporcionaran

información adicional para entender o comprender su relación".

b. Ejemplo de la privacidad: "Por favor, cada uno los resuelve o completa

individualmente en privado. Cada uno ve la relación de manera o forma diferente y es

importante que yo entienda estos puntos de vista por separado o distintos. En nuestra

sesión de retroalimentación, voy a tratar de dar sentido a sus puntos de diferentes

puntos de vista y les ofreceré a los dos una forma de entender su relación."

6. Si es apropiado, saque el libro; asigne la parte I para la sesión de retroalimentación

7. Agende o programe las sesiones individuales

Esquema de las entrevistas individuales.

1. Advertencia de Confidencialidad:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 149

a. Muestra o Ejemplo: "La terapia de pareja es diferente a la terapia individual por

lo tanto tengo responsabilidad con ambos compañeros; sin embargo, no voy a revelar un

secreto que se desea mantener confidencial a la pareja; sin embargo, si el secreto es

relevante para la relación actual, voy a trabajar con usted para que se lo pueda decir a su

pareja o de otra forma se resolverá el problema”.

b. "A menos que me diga lo contrario, voy a asumir que cualquier información que

usted me diga está bien para ser discutida en nuestra reunión conjunta"

2. Pasar de la presentación de los problemas a las medidas y a la primera entrevista

a. Determinar el/los principal/es problema/s

b. Reunir información a profundidad.

3. Violencia

a. Hacer seguimiento de los temas o incidentes de violencia

b. El incidente con mayor grado de violencia, el incidente más reciente, obtener detalles

específicos

4. Compromiso

a. Nivel de compromiso con la relación actual

b. ¿Cualquier relación/aventura actual? Por ejemplo, a veces cuando las personas tienen

problemas en su relación, buscan el contacto y la satisfacción de alguien más. ¿Está usted

en una relación con otro hombre/mujer en este momento? ¿En el pasado?

c. Colaboración en conjunto: ¿Qué podría USTED hacer diferente?

5. Historia psiquiátrica individual y el tratamiento

6. Repase la historia de la familia de origen

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 150

a. El matrimonio de los padres (posible modelo para los problemas actuales; por

ejemplo, su mamá y su papá discutían mucho, lo que molestó a su marido, por lo que él

decidió no discutir nunca en su propio matrimonio)

b. La relación entre padres e hijos (posible modelo para los problemas actuales: por

ejemplo, su padre fue muy crítico con ella y ella trató de complacerlo y aplacarlo; mismo

patrón con su esposo)

c. Ambiente familiar (posible modelo para los problemas actuales: su familia evitaba el

conflicto a toda costa y ahora el trata de hacer con su esposa)

7. Repase la historia de relación: las primeras relaciones o matrimonios anteriores (patrones

similares a los actuales; por ejemplo, otras mujeres lo dejaron por otros hombres, por lo que

él no confía)

8. Situación actual: Los estresores, las presiones, los factores que afectan en la situación

actual del problema (por ejemplo, ella recibe poco apoyo/contacto de su marido por lo que

busca a sus hijos por la cercanía, que le hace sentirse excluida, y crea una mayor distancia

entre ellos).

9. Nota: si usted no puede cubrir todo lo anterior, reducir/eliminar los puntos 6 al 8.

Sesión de retroalimentación.

1. Actualización: ¿Alguna novedad desde la última vez que nos vimos?

2. Dar una descripción: Muestra: "Esta es la sesión de retroalimentación, que ofrecerá una

visión general de mi comprensión de los problemas y describirá la manera o forma en cómo

vamos a trabajar sobre ellos. Sin embargo, sólo los he visto en unas cuantas sesiones, así

que podría no tener las cosas bien claras o tener algunos vacios de información. Por favor,

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 151

denme retroalimentación sobre la información, confirmando, corrigiendo, o elaborando lo

que tengo que decir".

3. Nivel de Angustia: En base a las medidas y la entrevista, proporcionar información sobre

nivel de angustia, incluyendo la retroalimentación sobre la violencia

4. Nivel de compromiso: Basado en la entrevista y en las medidas, proporcionar

información sobre el nivel de compromiso

5.Formulación de los problemas:

a. Principales problemas/temas que les causan problemas (en caso de que el problema

más importante tenga que ver con el reconocimiento de la enfermedad o patología de un

miembro, proveer educación sobre la enfermedad/patología)

b. Las diferencias (incompatibilidades)

c. Las reacciones emocionales/sensibilidades

d. Los factores estresantes externos

e. Los patrones de interacción/comunicación

f. Impacto de los problemas en la emoción y en la relación (la trampa, el "Problema

reactivo”)

6. Ejemplos

a. Confianza

I. Principales problemas/temas que causan problemas (por ejemplo, los argumentos

sobre el contacto de ella con otros hombres; el tema importante es la confianza)

II. Las diferencias (incompatibilidades): (por ejemplo, Ella cree que es bueno que ellos

tengan relaciones estrechas con amigos del otro sexo, él piensa que esas amistades deberían

ser muy limitadas; ellos difieren en lo que está bien con los amigos del otro sexo).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 152

III. Reacciones Emocionales/sensibilidades (por ejemplo, la aventura de la madre de él

llevó a la ruptura del matrimonio de sus padres, la búsqueda larga y difícil, de ella, por la

independencia y la autonomía, hace que ella no quiera responder por su paradero; ella

secretamente seguía viendo un viejo novio cuando ellos empezaron a salir, lo cual él nunca

ha olvidado ni perdonado).

IV. Los factores estresantes externos: (el trabajo de ella requiere mucho contacto con

los hombres y con muchos viajes)

V. Los patrones de interacción/comunicación: (por ejemplo, ella ha empezado a

compartir cada vez menos con él sobre sus contactos con otros hombres, y él se ha

convertido en más cuestionador, lo que lleva a ocasionales estallidos o problemas entre

ellos.)

VI. Impacto de los problemas en la emoción y en la relación (la trampa; Polarización; el

problema reactivo): (por ejemplo, debido a la polarización entre ellos, ella comparte incluso

menos información que nunca acerca de su contacto con los hombres; hay una menor

confianza que antes; ella se siente controlada por él; él se siente "excluido" de la vida de

ella y temeroso de infidelidad; ellos se han vuelto tan alienados que cada uno ha

considerado la separación y el divorcio.)

b. La depresión

I. Principales problemas/temas que causan los problemas: la depresión de él y la

interacción a su alrededor. Proporcionar educación clave sobre la depresión.

II. Las diferencias (incompatibilidades): Para empezar, ella es mucho más explícita de

lo que es él, su depresión lo lleva a él ser aún menos abierto y próximo.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 153

III. Reacciones Emocionales/sensibilidades: Ella teme tener que cuidar a todos como

su madre lo hizo - él, los niños. Él es sensible a la crítica en general, pero sobre todo

cuando él está deprimido.

IV. Los factores estresantes externos: Él está teniendo dificultades para encontrar

cualquier tipo de trabajo.

V. Los patrones de interacción/comunicación: Ella se vuelve crítica de él cuando lo ve

haciendo nada, lo cual tiene el efecto de hacerlo retraerse más, lo que lleva a más críticas

por parte de ella. Ocasionalmente, esto conduce a estallidos donde ellos discuten, ella se

siente culpable por ser tan crítica, se vuelve más favorable y, a continuación hay un breve

período de mayor acercamiento entre ellos.

VI. Impacto de los problemas en la emoción y en la relación (la trampa; la polarización,

el problema reactivo): Ella siente que el peso de la familia está sobre ella, ella se siente sola

y enojada. Él siente que no puede hacer nada bien a los ojos de ella o de nadie y se siente

deprimido y sin esperanzas.

c. Trastorno por estrés postraumático (PTSD)

I. Principales problemas/temas que les causan problemas: el trastorno de estrés

postraumático de él y la interacción alrededor de esto. Proporcionar educación clave sobre

el PTSD.

II. Las diferencias (incompatibilidades): Ella siempre ha estado menos cómoda con las

emociones negativas que él. El PTSD de él, lo lleva a vacilar entre estallidos de

adormecimiento y estallidos emocionales.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 154

III. Reacciones Emocionales/sensibilidades: Ella teme las reacciones emocionales de él

- ¿cuándo puede suceder la próxima explosión? Él teme a una variedad de estímulos por el

PTSD y hace todo lo posible para evitarlos (por ejemplo, súbitos ruidos fuertes).

IV. Los factores estresantes externos: Ellos viven en una zona ruidosa y mala de la

ciudad donde los carros pitan fuertemente, fuegos artificiales, e incluso se oyen disparos

ocasionalmente.

V. Los patrones de interacción/comunicación: Ella tiende a caminar de puntillas

alrededor de él, preocupada porque él se enoje, y preguntándose lo que está pasando con él

cuando es evasivo y distante; él no comparte mucho con ella, reacciona fuertemente cuando

hacen ruidos fuertes, tiende a enfadarse con ella, pero luego se siente culpable y se retrae.

VI. Impacto de los problemas en la emoción y en la relación (la trampa; la polarización,

el problema reactivo): Ambos sienten que están viviendo en un ambiente peligroso donde

en cualquier momento algo explosivo que podría suceder. Ella se pregunta cuánto tiempo

puede quedarse con él; él teme que ella lo dejará.

7. Puntos fuertes: Los puntos fuertes que ellos tienen como individuos y como pareja que

les dan esperanza (por ejemplo, ellos han estado juntos en tiempos difíciles, ellos trabajan

bien juntos como padres, ellos aún tienen sexo satisfactorio ocasionalmente; ellos

comparten un profundo sentido de patriotismo).

Tratamiento.

1. Los objetivos serán para modificar la forma de comunicarse/interactuar (patrones de

interacción); quizá modificar los factores de estrés externo (si es posible), no van a cambiar

lo que son como personas (sus diferencias perdurables)

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 155

2. En el período de sesiones, se tratarán o discutirán los incidentes que reflejan el problema

entre ustedes (por ejemplo, los incidentes alrededor del tema de la confianza), y las

cuestiones relacionadas con el problema (por ejemplo, discutir qué tipo de contacto está

bien, cuáles son sus temores con respecto al otro - por ejemplo, el temor de ella de ser

controlada, el de él de ser engañado). El objetivo o meta de estas discusiones no es

encontrar quién es el culpable, si no para entender estos incidentes y problemas y para

abordarlos o manejarlos con mayor eficacia. También nos centraremos en las interacciones

positivas entre los dos.

3. El cuestionario semanal enfocará nuestras sesiones - ir sobre el cuestionario (se empleó

el autorregistro)

4. El libro ofrece una visión general del tratamiento. Asignar un capítulo, una sección, o

animarlos a leer lo que puedan, dependiendo de la pareja.

Fases de intervención en la terapia conductual integrativa de parejas

1. Enfoque de las intervenciones

a. Enfoque de abajo hacia arriba: el trabajo con las interacciones – las "cosas" diarias de

las relaciones, pero las interacciones que tienen un impacto emocional en los compañeros

(usualmente aquellos que reflejan la formulación)

b. Las interacciones en las sesiones de terapia (positivas y negativas)

c. Los incidentes (positivos y negativos) que suceden fuera de la sesión de terapia

d. Las cuestiones o problemas de interés actual (por ejemplo, problemas de dinero,

tratar con los suegros)

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 156

e. Basándose o enfocándose en lo real, en vivo, las interacciones actuales mejor que los

ejercicios y simulacros (por ejemplo, identificando qué es lo que siente el compañero que

está “cerrado” en el momento mejor que darle un nombre a la emoción.

f. El énfasis en el cambio espontáneo como resultado de experiencias en la sesión antes

de un enfoque sobre el cambio deliberado (por ejemplo, la resolución de problemas).

2. Intervenciones para prevenir, interrumpir, redireccionar o restringir la interacción

problemática

a. Interrumpir y frenar una interacción en curso (por ejemplo, pidiendo a los

compañeros que resuman los mensajes fundamentales del otro)

b. Arbitrar las discusiones por lo que es una retroalimentación (por ejemplo, reformular

el mensaje de cada compañero para hacerlo más comprensible, eliminando parte de la culpa

y la actitud defensiva, y facilitar las transiciones entre los compañeros)

c. Redireccionar el centro de la discusión (por ejemplo, reducir el enfoque inicial en la

resolución de problemas o en el cambio, dirigiendo la atención hacia la experiencia del aquí

y del ahora más que en el contenido inicial)

d. Dirigir o estructurar una interacción más productiva (por ejemplo, continuar la

discusión cuando uno se empieza a cerrar)

e. Enfatizar en algunos aspectos e ignorar otros aspectos de una interacción

f. Tener miembros que hablen a través de ellos mejor que entre ellos directamente

g. Como último recurso, separe los clientes y hable individualmente con cada uno de

ellos antes de tenerlos juntos nuevamente.

3. Intervenciones enfocadas o centradas en la emoción (el objetivo es la unión o conexión

empática)

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 157

a. Estar atento a las reacciones emocionales e identificar las emociones primarias

b. Estimular la divulgación de las emociones primarias, y las no reveladas (indague

acerca de las emociones, sugiera emociones, refleje las emociones, direccione la

revelación de emociones a través de la aprobación)

c. Estimular que se centren o enfoquen en lo que cada uno siente más que en lo que

ellos piensan que el otro siente

d. Estimular la emoción primaria inicial en lugar de la emoción reactiva (por ejemplo, el

daño inicial en vez del distanciamiento posterior y sentimientos de "No me importa

más")

e. Valida la experiencia emocional de cada uno

f. El objetivo es la discusión de una experiencia significativa de la relación donde

ambos compañeros comparten sus sentimientos y experimenten simpatía y empatía por

los sentimientos del otro. A menudo, como resultado la pareja siente una mayor

sensación de cercanía (unión empática)

4. Intervenciones centradas o enfocadas en lo Cognitivo (el objetivo es el desapego

unificado)

a. Describa el patrón de interacción (Qué está sucediendo en la interacción): factores

desencadenantes, secuencia, puntos de inflexión, las relaciones funcionales. Promover la

interacción con conciencia plena; esto quiere decir, que la persona esté alerta y consciente,

enfocando la realidad presente de forma flexible y sin dejarse llevar por pensamientos o

reacciones emotivas, centrándose en el aquí y el ahora (Kabat-Zin, 1990, 1996; como se

citó en Martín & Garcia, 2007).

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 158

b. Estimule los pensamientos importantes, opiniones, dudas no reveladas

c. Utilice un lenguaje que cree distancia - la metáfora, el humor, la generación de

nombres

d. Adoptar una actitud "científica" hacia el patrón - valoraciones, comparaciones,

contrastes

e. Observe "bendiciones mezcladas" (sarcasmos o ironías) de las características

particulares de los compañeros (por ejemplo, la emocionalidad de uno puede añadir

color a la relación pero también la puede hacer volátil); observe cómo sus diferencias se

equilibran entre sí (por ejemplo, la ambición de ella y el fácil desinterés o desgane de

él)

f. El objetivo es una discusión en dónde los compañeros en forma conjunta puedan

discutir sus puntos de vista y observaciones sobre una experiencia significativa de la

relación en una forma descriptiva, imparcial o sin juicios, con conciencia. A menudo, el

resultado es la sensación de una perspectiva común sobre un problema

(desprendimiento unificado).

5. Intervención centradas o enfocadas en el comportamiento (el objetivo es el cambio

directo y una mayor tolerancia)

a. Repetir las interacciones (hacerlo mejor)

b. Ensayos de los comportamientos negativos como una forma de exposición, de

desensibilización

c. Intercambio comportamental - identificación de acciones positivas que cada uno

puede tener en forma individual o conjunta

d. Entrenamiento en comunicación y resolución de problemas

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 159

e. Los objetivos son que una discusión en donde los compañeros tratan de hacer una

mejor interacción o aprender una mejor manera o forma de discutir, que una discusión en

donde los compañeros de forma juguetona repitan una interacción negativa, o una discusión

de resolución de problemas en donde los compañeros discuten la manera que cada uno

podría cambiar para solucionar el problema. A menudo el resultado es una sensación de

control o de confianza de que un problema se puede mejorar.

6. Orden de las intervenciones

a. Enfocarse en las intervenciones enfocadas en la aceptación (unión empática y

desprendimiento unificado) antes de las intervenciones enfocadas en el cambio ,

particularmente las intervenciones de cambio deliberado (como las del intercambio

comportamental, entrenamiento en comunicación y en resolución de problemas)

b. Normalmente integrar la unión empática y el desprendimiento unificado (por

ejemplo, investigar sobre un incidente de modo que se observe lo que lo desencadena y la

secuencia (desprendimiento unificado), pero las emociones fuertes son identificadas y

exploradas (por ejemplo, provocando emociones más suaves – unión empática)

c. Adaptar las intervenciones a lo que funciona con la pareja (por ejemplo, si la pareja

utiliza el humor para disipar la tensión entre ellos, trate de generar nombres humorísticos

para su patrón)

7. Esquema de una sesión típica de intervención

a. Reúna y examine los cuestionarios (autorregistros)

b. Revise cualquier evento violento/evento o cambios importantes, según sea

necesario

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 160

c. Comente sobre cómo fue la semana como una pareja (basado en las 4

puntuaciones); revisar la tarea si se ha asignado

d. Revise el evento positivo

I. Si el evento positivo fue significativo (por ejemplo, la primera vez que tuvieron

relaciones sexuales en un tiempo, un mayor acercamiento entre ellos, manejaron el

problema identificado de una forma más constructiva), a continuación, revise con mayor

detalle, identificando lo que cada uno hizo para que las cosas fueran mejor, así ellos pueden

obtener el crédito por sus esfuerzos positivos y entender las relaciones funcionales entre su

comportamiento y los resultados

II. Si el evento positivo fue relativamente insignificante (por ejemplo, fueron a una

película a divertirse juntos, vieron amigos que les gustaba), revise sólo brevemente con

comentarios adecuados (por ejemplo, ustedes dos todavía pueden divertirse juntos a pesar

de los problemas).

e. Establezca la agenda basada en los incidentes y los temas que ellos deseen

discutir (divida el tiempo entre los temas si ellos quieren hablar de diferentes temas)

f. Utilice las intervenciones anteriores para enfocar de manera constructiva los

temas

g. Modifique la agenda si la discusión acerca de un problema se convierte en

problema

I. Intervenga para mejorar la discusión

II. Cambie el enfoque, de la experiencia del "aquí y ahora" más que en la discusión

del problema (por ejemplo, el incidente de la última semana)

h. Aliente el final de la sesión

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 161

I. Inicie el final de la sesión varios minutos antes del final real

II. Notifique a la pareja que el final de la sesión se acerca

III. Deles tiempo para sus comentarios finales sobre el tema para que puedan salir

con un cierre

IV. Resuma los puntos importantes de la sesión (por ejemplo, revise y valide los

principales sentimientos/posiciones de la pareja, resalte revelaciones importantes,

complicaciones, y las ironías sobre el problema, reforzar los esfuerzos positivos,

debidamente indique las dificultades)

V. Revise las tareas adecuadas si se plantearon durante la discusión

VI. Reparta los cuestionarios con las tareas (si las hubiere) por escrito

Fase de terminación en la terapia conductual integrativa de pareja.

1. Identificación de cuándo debe comenzar la terminación

a. La pareja ha realizado progresos significativos

b. La pareja sugiere que están listos para la terminación

c. La pareja tiene muy poco para trabajar en sesiones de la importancia emocional

d. Nota: en el ensayo clínico, la mayoría de estas parejas muy angustiadas emplearon

alrededor de 25 sesiones de terapia, pero algunas claramente podrían haber empleado

más

2. Retirada de la terapia de pareja

a. Espacie las sesiones a intervalos más largos

b. Permita sesiones de refuerzos cuando sea necesario

c. Administre las medidas de post-evaluación antes del final de la sesión de la fase

de retirada y antes de la sesiones de refuerzo

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 162

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 163

Apéndice B

INVENTARIO DE INTERACCIÓN DE LA PAREJA

La siguiente información, es una traducción del Couple interaction survey schedule

(CISS), realizado por Cautela (1990). Este se empleo como el cuestionario de datos

personales de la pareja.

Nombre __________________________________ Fecha _______________________

Fecha de nacimiento ______________ Edad ________ Tiempo de relación _________

Nombre de la pareja ___________________________________ Edad _____________

Nombres y apellidos de los hijos ____________________________________________

_________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________

I. Razones para buscar ayuda profesional _____________________________

_________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________

Podría decir sobre su noviazgo:

- Cuándo se conocieron ___________________________________________________

- Cómo y dónde se conocieron ______________________________________________

_______________________________________________________________________

- Cómo fueron sus relaciones _______________________________________________

_______________________________________________________________________

- Hubo relaciones prematrimoniales __________________________________________

_______________________________________________________________________

II. Las siguientes preguntas se refieren a su pareja:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 164

A. Las tres conductas (cosas) que más admire __________________________________

_________________________________________________________________________

_________________________________________________________________________

___________________________________________________________________

B. Las tres conductas (cosas) que más le irriten o disguste ________________________

_________________________________________________________________________

_________________________________________________________________________

___________________________________________________________________

C. Otras conductas (cosas) que le irriten de su pareja ____________________________

_________________________________________________________________________

_________________________________________________________________________

___________________________________________________________________

- En este momento que desearía cambiar en la relación con su pareja _______________

_________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________

III. Las siguientes conductas se refieren a usted mismo (a):

A. Las tres conductas que yo creo molestan a mi pareja __________________________

_________________________________________________________________________

_________________________________________________________________________

___________________________________________________________________

B. Las tres conductas o cosas que poseo y creo son más admiradas por mi pareja ______

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 165

_________________________________________________________________________

_________________________________________________________________________

___________________________________________________________________

IV. Relación sexual.

A. Número de veces por semana que ustedes tienen relaciones íntimas: ______________

B. Número de veces por semana que ustedes comparten cualquier conducta genital ____

C. Usted llega al orgasmo durante sus relaciones:

Todas las veces__ Casi todas las veces___ Algunas veces___ Rara vez____ Nunca ____

D. Su pareja llega al orgasmo durante sus relaciones:

Todas las veces___ Casi todas las veces___ Algunas veces___ Rara vez___ Nunca ____

- Qué sucede después de sus relaciones _______________________________________

_______________________________________________________________________

E. Yo calificaría nuestra vida sexual como:

Muy satisfactoria____ Satisfactoria ____ Regular____ Pobre____ Muy pobre____

F. Mi pareja calificaría nuestra vida sexual como:

Muy satisfactoria____ Satisfactoria ____ Regular____ Pobre____ Muy pobre____

G. Lo mejor de nuestra vida sexual es: ________________________________________

_________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________

H. Lo peor de nuestra vida sexual es: _________________________________________

_________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________

I. Usted inicia el sexo:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 166

Todas las veces__ Casi todas las veces__ La mitad de las veces__ Rara vez__ Nunca __

J. Su pareja inicia el sexo:

Todas las veces__ Casi todas las veces__ La mitad de las veces__ Rara vez__ Nunca __

K. Me gustaría mejorar nuestra vida sexual en la siguiente forma: __________________

_________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________

V. Desacuerdos

A. Yo generalmente inicio las discusiones:

Todas las veces__ Casi todas las veces__ La mitad de las veces__ Rara vez__ Nunca __

B. Mi pareja generalmente inicia las discusiones:

Todas las veces__ Casi todas las veces__ La mitad de las veces__ Rara vez__ Nunca __

C. Señale cual de las siguientes situaciones ocurren durante una discusión o conflicto.

Nunca Un

poco

Regular Frecuentemente Muy

frecuentemente

1. Tratar de culparse el

uno al otro.

2. En las discusiones se

recuerda el pasado.

3. Levantar la voz y

gritar

4. Encontrar una

solución para que la

discusión no ocurra de

nuevo.

5. Solicitar ayuda a

familiares.

6. Dar por terminada la

discusión sin llegar a un

arreglo.

D. Nuestras discusiones se refieren a:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 167

Nunca Un

poco

Regular Frecuentemente Muy

frecuentemente

1. Dinero

2. Celos

3. Parientes

4. Sexo

5. Trabajos caseros

6. Hijos

7. Vida social

8. Su ocupación

9. Ocupación de su

pareja

10. Críticas de su pareja

11. Críticas mías

12. Otras

____________________

____________________

____________________

VI. Hijos

A. ¿Quién disciplina principalmente a los niños? _______________________________

B. Usted y su pareja están de acuerdo sobre cómo disciplinar a los niños _____________

Si no, ¿en qué están en desacuerdo? __________________________________________

C. ¿Es la conducta de los niños un factor contribuyente para su problema? ___________

¿Si es así cómo? _________________________________________________________

D. ¿Quién disciplina a los niños más efectivamente? Usted ______ o su pareja _______

E. ¿Qué tanto tiempo, en comparación con su pareja se ocupa usted de las necesidades de

los niños (tales como alimentación, vestido, etc.)?

0 - 10% del tiempo _____ 10 – 20% del tiempo _____ 20 – 30% del tiempo ____

30 – 40% del tiempo _____ 40 – 50% del tiempo ______ 50 – 60% del tiempo ____

60 – 70% del tiempo _____ 70 – 80% del tiempo _____ 50 – 60 % del tiempo _____

90 – 100% del tiempo _____

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 168

F. ¿Qué actividades recreacionales comparte usted con sus hijos?

Nombre del niño Actividad

______________________________ ___________________________________

______________________________ ___________________________________

______________________________ ___________________________________

______________________________ ___________________________________

G. ¿Qué actividades recreacionales comparte su pareja con sus hijos?

Nombre del niño Actividad

______________________________ ___________________________________

______________________________ ___________________________________

______________________________ ___________________________________

- ¿Se preocupa por que los niños estén en contacto con su pareja? __________________

- ¿Cree usted que está cumpliendo a cabalidad con sus niños? _____________________

H. ¿Quién es la persona más dominante en su relación?

En general ______________________________________________________________

En diferentes áreas _______________________________________________________

_______________________________________________________________________

Podría responder Sí o No a las siguiente conductas sobre su parea.

1. Mi pareja es cariñoso(a) _____

2. Es hacendoso(a) _____

3. Buena madre (padre) _____

4. Se preocupa por mi salud _____

5. Me prefiere a mí antes que a sus amigos _____

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 169

6. Me ayuda al sostenimiento del hogar _____

7. Me defiende si alguien habla mal de mí _____

8. Hace el amor para complacerme _____

9. Me acompaña cuando le hago una invitación _____

10. Se preocupa cuando a mi familia se le presentan problemas _____

11. Me llama con palabras cariñosas _____

12. Comparte conmigo los problemas hogareños ____

13. Rechaza los chismes _____

14. Se preocupa porque coma bien _____

15. Me llama la atención con firmeza pero sin herirme _____

16. Respeta mis amistades _____

17. Es sincero(a) _____

18. Es limpio(a) _____

19. Es agradable _____

20. Reconoce sus errores _____

21. Toma decisiones contando conmigo _____

22. Es seguro en sus sentimientos para conmigo _____

23. Acepta mis errores ____

24. Me corrige con paciencia _____

25. Es responsable _____

26. Es fiel _____

27. Sabe perdonar _____

28. Se preocupa por el futuro del hogar _____

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 170

29. Me felicita cuando me va bien _____

30. Comparte mis fracasos _____

31. Se siente orgulloso(a) de mi _____

32. Cuando hablo siempre me mira _____

33. Me hace obsequios con frecuencia _____

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 171

Apéndice C

AUTORREGISTRO DIARIO

A continuación, usted realizará un listado de situaciones y comportamientos (breve

descripción) que se presentan con cierta frecuencia en su relación de pareja.

Cada comportamiento lo va a clasificar de acuerdo a:

1. Exposición (expo): Si esa situación lo expone a algo negativo o desagradable para

usted.

2. Deprivación (depri): Si se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable para usted.

3. Exposición y deprivación: Si se le expone y se le depriva al mismo tiempo.

4. Nivel de malestar: Puntuará de 0 a 10 el nivel de malestar o conflicto que le genera

esa situación o comportamiento; donde 0 es el mínimo nivel de malestar y 10 es el máximo

nivel de malestar.

NOTA: Igualmente, registre situaciones que usted evalúe como agradables, por

ejemplo: donde obtuvo algo positivo o donde lo dejaron de exponerlo a algo negativo;

principalmente donde usted se sintió gratificado y quisiera que se volviera a repetir.

Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado Domingo

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de Malestar

____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_ Nivel de Malestar

____

Expo__ Depri_ Nivel de

Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Expo__ Depri_

Nivel de Malestar ____

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 172

Apéndice D

CONSENTIMIENTO INFORMADO

FACULTAD DE PSICOLOGÍA

DECLARACIÓN CONSENTIMIENTO INFORMADO

Introducción

Yo ________________________________, identificado con la Cédula de Ciudadanía

número ___________________________ de _____________, como persona natural y

actuando por mi propia voluntad, confirmo que he sido invitado a participar en este estudio

de investigación, la cual es regulado por la Ley 1090 que decreta la normatividad de la

Psicología. Este estudio es conducido por la Psicóloga Mónica Riva Gutiérrez, con el fin de

completar los requisitos del programa de Maestría Clínica y de la Salud de la Pontificia

Universidad Javeriana, sede Bogotá.

Propósito del estudio

El propósito de este estudio, es conocer el efecto de una intervención terapéutica basada

en la terapia conductual integrativa, sobre los niveles de incompatibilidad en parejas de la

ciudad de Bogotá. Entiendo que la información que pueda ser recolectada por mi

participación será empleada con fines investigativos.

Descripción del procedimiento

En este estudio, se desarrollarán los procedimientos establecidos para el diseño del

estudio. Realizando la aplicación del protocolo de la intervención de pareja integrativa, el

cual maneja una primera fase de evaluación, una fase de intervención y una fase de

seguimiento.

Retribución y beneficios por la participación

Entiendo que NO recibiré dinero por participar en este estudio. Los beneficios

adquiridos serán los aprendizajes que se desarrollarán con la intervención terapéutica de

pareja.

Riesgos e incomodidades

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 173

No se conoce o se espera que corra algún riesgo por participar en este estudio, excepto

por las diferentes emociones que se puedan generar al participar en la intervención

terapéutica.

Confidencialidad

Entiendo que cualquier información personal, familiar o social mía, que haga parte de

los resultados de la investigación será mantenida de manera confidencial. En ninguna

publicación, en la que se usen mis resultados, se mencionará mi nombre o algún dato que

me pueda identificar, a menos que lo consienta y autorice por escrito.

Participación voluntaria

La participación en este estudio es voluntaria. Entiendo que tengo la libertad de retirar

mi consentimiento de participación en esta investigación en cualquier momento del estudio,

sin ningún tipo de repercusión.

Información

Para obtener información acerca de esta investigación puedo comunicarme con la Ps.

Mónica Riva Gutiérrez al correo electrónico [email protected] o al celular 316-

4169546, con su supervisora de Tesis la Ps. Sonia Zambrano al teléfono 3277300 ext. 5059

Hago constar que he entendido la información, he recibido una copia de este formato y

que

CONSIENTO PARTICIPAR VOLUNTARIAMENTE EN ESTE ESTUDIO.

_______________________________ ________________________

Firma del participante No. De Documento de Identidad

___________________________

Iniciales del participante

________________________________ ________________________

Firma de Ps. Mónica Riva G No. Documento de

Identidad

Consentimiento de participación, firmado a los ______ días del mes _________ de

2011.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 174

Apéndice E

FORMULACIÓN DE CASOS

Pareja número 1.

Análisis descriptivo del caso clínico.

Para poder entender los componentes generales de un caso clínico, es necesario

operacionalizar el motivo de consulta, describir tanto la historia actual (evaluación

sincrónica), como la historia pasada o de aprendizaje (evaluación diacrónica) del

consultante. Estos dos tipos de evaluaciones, permitieron obtener cuales son los factores de

adquisición y de mantenimiento de la conducta problema del consultante. Se inicia con la

descripción y operacionalización del motivo de consulta.

Descripción y operacionalización del motivo de consulta.

El motivo de consulta con el cual llegó la pareja, se clasificó de acuerdo a los temas de

conflictos, donde se observan los patrones de comportamientos negativos, los cuales son:

1 .Cercanía-distancia, ella afirma que cuando ella está con su familia o sus amigos, él se

indispone, no habla, hace mala cara; “no entiendo por qué hace eso si estoy al lado de él,

todo el tiempo estoy con él”. Él afirma que él hace eso porque quiere estar solo con ella,

que cuando ella está con otra gente deja de hablarle y de ponerle atención por estar con la

otra gente “por eso no me gusta compartir mucho con otra gente, eso hace que ella me

ponga menos atención”. Ella quisiera que él fuera más abierto con su familia y amigos, que

no se encerraran tanto en su relación, mientras que él quiere tener más tiempo con ella y

compartir menos con otras personas.

2. Tú no me amas. - Yo si te amo, eres tú la que no me ama, él afirma, que cuando

pelean, ella le dice que él ya no la quiere, pero la respuesta de él es que él si la mama, pero

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 175

que ella es la que ya no lo quiere porque el es un mal novio. Son respuestas que se dan

cuando pella principalmente le pelea por no interactuar principalmente con la familia, o

cuando ella siente que él no la está apoyando en alguna situación. Él le dice a ella que ya no

lo ama, porque siente que todo lo que él dice o hace ella se lo critica y que por eso ya no lo

quiere, ella responde que no es una crítica sino una opinión sobre algo pero el siempre se lo

toma muy personal.

3. El artista y el científico: Ella afirma que él piensa que ella no planea las cosas

principalmente en el trabajo, pero el problema que se está presentando es que él se quiere ir

a vivir con ella pero no han planeado según ella de qué van a vivir. Entonces él le dice a

ella que debería ser más espontánea y empezar a ver como les viviendo juntos. Ella prefiere

tener organizado cómo van a establecerse mientras él se quiere lanzar sin tener en cuenta

los factores como la economía, el lugar donde van a vivir, principalmente porque ella no

tiene actualmente un trabajo estable como él.

El motivo de consulta, también se clasificó de acuerdos a los patrones de polarización,

los cuales son:

1. Comportamientos de evitación mutua, ella afirma “él siempre sale con que yo ya no o

quiero y se pone muy triste para evitar el problema, entonces prefiero no seguir diciendo

nada para que no se sienta mal”.

2. Patrón de retirada, ella afirma que empieza a hacerle el reclamo de la situación, por

ejemplo con su mamá que casi no le habla, entonces ella empieza a decirle si es que le cae

mal y él a veces simplemente se va y me deja con la palabra en la boca”. Él afirma, que

cuando ella empieza a decirle cosas entonces él prefiere dejarla hablando sola, o a veces

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 176

cuando él le dice que debe planear para hacer las tareas del trabajo o de la universidad, ella

simplemente me dice “ya vas a empezar y me deja de hablar”.

3. Interacción negativa mutua, él empieza a decirle a ella que le dedique más tiempo y

entonces ella empieza a decirle que por qué no pueden halar un poco con su familia,

entonces el empieza a decirle que es que ella no lo quiere mientras ella le dice a él que él no

la comprende.

Estado actual –análisis sincrónico.

Son una pareja, que tiene 3 años de noviazgo. Se cuadraron cuando estaban en la

universidad, los dos son diseñadores gráficos. Los dos se encuentran cuando él ha

programado verse, ya que él está estudiando una especialización de su carrera y trabaja.

Ella solamente trabaja, cuando le salen trabajos de tipo freelance. Los dos son muy unidos,

no tienen muchos amigos, eso hace que el tiempo libre que él tiene se lo dedique a ella.

Afirman que son muy afectuosos y cariñosos, les gusta decirse a diario que se quieren.

Él manifiesta, que le da mucha tristeza ver cuando ella esta brava o molesta y por eso evita

tener malgenio con ella, aunque no esté de acuerdo con su comportamiento, por ejemplo

llegar tarde o en situaciones donde ella no planea su trabajo y por eso tiene que salir tarde.

Afirma que admira su capacidad de ser cariñosa y de expresar ternura, su talento con el

diseño y su “individualidad”, haciendo referencia a que “ella no va con la corriente”. Le

molesta que a veces demuestra inseguridad, que se molesta por cosas que pasaron hace

tiempo y que sus nervios la llevan a un estado de malestar con situaciones que no lo

merecen. El afirma “si ella está mal yo también estoy mal”.

Ella afirma que lo más le gusta de él, es que es tierno y cariñoso con ella, es organizado

y protector, aunque afirma que a veces se vuelve sobre protector. Lo que más le molesta es

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 177

que tiene actitudes frente a la gente de no contestarles es sarcástico y no se integra,

principalmente con su familia. Adicionalmente, cuando ella le cuenta un problema, no es

tan expresivo y por eso no sabe si le importa o no lo que ella le está contando, o le dice que

son “showsitos” y lo minimiza todo; mientras que él si le cuenta y ella siempre le pone

atención.

En cuanto a las relaciones sexuales, no han podido tener una con penetración, ya que

ella siente mucho dolor, han podido realizar actividades alternas, aunque ella afirma que

eso la pone temerosa ya que ella sabe a que a él le gustaría poder hacerlo y de pronto él se

puede cansar de eso. Él manifiesta, que aunque si le gustaría, la entiende y que eso no le

importa demasiado, él afirma “hay que buscar soluciones”.

La familia de ella, actualmente está pasando por una situación económica difícil,

mientras la familia de él están bien económicamente y por eso lo ayudan a estudiar. Ella

afirma, “le ofrecieron un buen trabajo pero como no eran las expectativas de la mamá, lo

rechazo, mientras que a mí no me sale nada”.

Historia – análisis diacrónico.

Son una pareja que llevan juntos 3 años. Se conocieron en la universidad, pero eran

amigos. Empezaron a andar ellos dos con un amigo en común. Pero al tiempo empezaron a

andar solo los dos hasta que un día él le dijo a ella que se cuadraran por Messenger porque

no fue capaz de decirle en persona. Así fue como iniciaron su relación.

Ella siempre ha tenido un trastorno de ansiedad que le ha generado ataques de pánico, él

no lo supo hasta el 1 y medio donde ella empezó a realizar una terapia homeopática y

afirma que la hacía sentir mucho mejor. Ella afirma que no le decía nada porque pensaba

que él se iba a alejar porque ella estaba loca. La familia de ella está compuesta por la mamá

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 178

y una tía que está criando a una prima de ella. Ha sido una familia conflictiva ya que el

papa tenía otra familia pero siempre estaba von la mamá de ella, el vivió con ellas un

tiempo pero siente que era “un infierno” porque él le pegaba a la mamá y no ayudaba

económicamente en la casa. Afirma que desde entonces ha tenido los ataques de pánico,

incluso le tenía medo a los cuchillos porque él la amenazó una vez con uno y desde

entonces no podía ver un cuchillo.

La familia de él es unida, los papás se conocieron y al poco tiempo se casaron. Tiene un

hermano. “Mis papas son bohemios, pero a mi mama le toco llevar las riendas económicas

de la casa porque mi papá se lo gastaba todo en rumba”, el papá toco en bares junto con él y

el hermano. La mamá tiene una empresa de suministros. Afirma, que él nunca ha visto

mayores peleas entre los papas y que antes son muy calmados y lo apoyan en todo, incluso

le dicen que trabajo le sirve o cuál no y lo siguen apoyando económicamente.

Grado de afectación de la problemática.

Conducta

problema (Nombre)

Áreas de funcionamiento

afectado y gravedad

Afectación de otras

personas

Insatisfacción de

pareja

Pareja: afectación elevada

Social: afectación elevada

A la familia de ella y

amigos

Condiciones biológicas del/la consultante.

Ella presenta un trastorno de ansiedad que le generan ataques de pánico contantemente,

por tal motivo ella tiende a aislarse y retraerse. Siente que su pareja no la entiende y como

ella lo afirma “es un showsito más”, por eso cuando ella presenta lo ataques de pánico se

aísla y prefiere no hablarle.

Contexto de funcionamiento

CONTEXTO DESCRIPCIÓN DEL COMPORTAMIENTOS

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 179

CONTEXTO QUE SE PRESENTAN

FAMILIAR La familia de ella, se

compone de la mama, una tía y

una prima que la crió la tía,

aunque ella le dice hermana.

El papa ha estado presente en

ocasiones, aunque la mamá

cuando era novia de él no supo

que el ya tenía otra familia, se

enteró cuando ella quedo

embarazada y en ese momento

la mama presentó depresión.

Posteriormente cuando ella ya

tenía más o menos 6 años el

fue a vivir con ellas, pero le

pegaba a la mamá, ella afirma

“que fue una situación muy

difícil por él nunca la apoyo”.

Actualmente no conviven

juntos, y su familia presenta

problemas a nivel económico.

La familia de él, se

compone de mama, papá y un

hermano. Él la describe como

una familia unida, sin

problemas. La mamá es la que

decide en la casa. El papá es

músico y toca con sus hijos en

bares y fiestas.

Cuando los dos comparten

con sus familias, ella afirma que

él es muy sarcástico y cortante,

que habla de manera

monosilábica, cosa que la

molesta mucho.

La familia de él interactúa

normal con Mónica, pero no

comparten mucho tiempo con la

familia de él, ya que casi siempre

están en la casa de ella.

ACADEMICA Los dos son profesionales,

aunque él se graduó antes que

ella. Adicionalmente él está

actualmente estudiando una

especialización.

En esta área, él siempre ha

dicho que ella es insegura en

cuanto a su trabajo y por eso dice

que no se graduó antes. Ella

afirma que él es bueno, pero que

siempre le estaba diciendo a ella

cómo debería organizar su tiempo

para los diferentes trabajos.

LABORAL Los dos trabajan freelance.

Él sin embargo trabaja tanto en

su profesión como con la

empresa de la mamá.

Ella afirma que a él le han

salido mejores oportunidades de

trabajo pero las ha rechazada

porque la mamá de él le dice que

eso no es lo que debe aspirar. Él

afirma que a ella también le han

salido buenas oportunidades pero

ella no sabe manejar bien su

tiempo, aunque ella es muy buena

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 180

en lo que hace.

SOCIAL Los dos son personas que

no tienen muchos amigos. Les

gusta compartir tiempo junto.

Los amigos que tienen son

principalmente de la

universidad y la familia.

Ella afirma que él no es muy

conversador cuando están con sus

amigos y pasa has por

“antipático”, situación que se

presenta también con su familia.

Él afirma que cuando ella está

con sus amigos no le presta tanta

atención, por eso prefiere estar

sólo con ella.

Formulación de hipótesis:

PROBLEMA HIPÓTESIS

Presentación de

insatisfacción de pareja por las

diferencias que se presentan en

cada tema entre la pareja, Está

determinada por la presentación

patrones de comportamientos que

tienden a modificar el

comportamiento del compañero,

como los patrones de

comportamientos negativos

(deprivación de un reforzamiento,

y/o la exposición a una

estimulación aversiva) y los

patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los

comportamientos de interacción

negativa mutua y los

comportamientos de retirada)

PREDISPOSICIÓN:

Los factores que pueden predisponer a que esta

pareja presente conflicto son:

- Las diferencias individuales

- Las diferencias en la crianza de cada uno

- Las diferencias en las dinámicas familiares

- Los problemas de ansiedad por parte de ella

ADQUISICIÓN:

La administración inadecuada de contingencias,

pudo influir en que las personas empezaran a

presentar conflicto al interior de su pareja por las

diferencias existentes entre ellos.

MANTENIMIENTO:

Posiblemente, los conflictos entre la pareja se

siguen presentando por la presentación de las

contingencias directas que se presentan

actualmente. Las cuales están determinadas por dos

patrones de comportamiento, los patrones de

comportamientos negativos (deprivación de un

reforzamiento, y/o la exposición a una estimulación

aversiva) y los patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los comportamientos

de interacción negativa mutua y los

comportamientos de retirada).

Unidades de análisis:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 181

Insatisfacción de pareja: Es la forma en que la persona percibe su propio matrimonio

respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad (nivel de malestar) en un punto en

el tiempo, dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(cercanía/distancia, control/responsabilidad, tu no me amas/yo sí te amo y el artista/el

científico), lo cual genera conflicto entre la pareja. Está determinada por la presentación

patrones de comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero,

como los:

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos de deprivación de

un reforzamiento, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable para la persona; la exposición a una

estimulación aversiva, el cual se presenta cuando una situación se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona; y los dos patrones al mismo tiempo, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo o desagradable para la persona.

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción.

Hipótesis explicativa.

La pareja 1, presenta insatisfacción de pareja, la cual es entendida como la evaluación

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 182

que cada uno de los compañeros realiza sobre el nivel de insatisfacción, de acuerdo a los

temas de conflicto (cercanía-distancia, tú no me amas - yo si te amo, eres tú la que no me

ama y el artista/el científico) que se presentan en la pareja; esas diferencias están

determinadas por patrones de comportamientos que tienen la tendencia de modificar el

comportamiento del compañero, estos son los patrones de comportamientos negativos, en

donde uno o los dos compañeros están deprivados de reforzamiento y/o expuestos a una

estimulación aversiva, como por los patrones de comportamiento de polarización, donde los

compañeros presentan comportamientos de evitación mutua, de interacción negativa mutua

y el patrón de retirada; incrementando aún más el conflicto. Esto lleva a la pareja a una

trampa mutua, donde cada uno de los miembros presentan un estado de desesperanza de

que las cosas no van a cambiar.

Este problema pudo ser predispuesto por las diferencias individuales, las diferencias en

la crianza de cada uno, las diferencias en las dinámicas familiares y los problemas de

ansiedad por parte de ella. Se adquirió por la administración inadecuada de contingencias y

se mantiene por la presentación de las contingencias directas que se presentan actualmente.

Estas contingencias son los patrones de comportamientos negativos y los patrones de

comportamientos de polarización.

Pareja número 2.

Análisis descriptivo del caso clínico.

Para poder entender los componentes generales de un caso clínico, es necesario

operacionalizar el motivo de consulta, describir tanto la historia actual (evaluación

sincrónica), como la historia pasada o de aprendizaje (evaluación diacrónica) del

consultante. Estos dos tipos de evaluaciones, permitieron obtener cuales son los factores de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 183

adquisición y de mantenimiento de la conducta problema del consultante. Se inicia con la

descripción y operacionalización del motivo de consulta.

Descripción y operacionalización del motivo de consulta.

El motivo de consulta con el cual llegó la pareja, se clasificó de acuerdo a los temas de

conflictos, donde se observan los patrones de comportamientos negativos, los cuales son:

1. Cercanía-distancia, el esposo quiere que ella sea más activa en la pareja, “ella no da

tanto como yo en la relación y en la familia”, adicionalmente que este constantemente en

contacto “no sé donde ella está, mientras ella si sabe donde yo estoy; ella conoce todos mis

amigos y yo no conozco los amigos de ella” “Somos como módulos independientes”.

Mientras que la esposa reporta “Esos celos de él, se enloqueció, no puedo hacer nada, mi

trabajo es estar en la calle pero él no lo entiende”. Adicionalmente ella le critica la forma en

que él se comporta con sus amigos y por eso no le gusta que el comparta con ellos porque

según el “mis amigos se creen de un estrato más alto, son pedantes y no le agradan”.

2. Control y responsabilidad, ella afirma “yo soy siempre la que tomo las decisiones, la

que invita, la que hace los planes. Él solo toma las decisiones pequeñas, como cosas de la

casa, del día a día”. El afirma: “Ella no me deja ni hablar, no acepta explicaciones, ella

maneja la conversación, yo empiezo a hablar y ella me quita la palabra”. Adicionalmente,

él afirma: “con las cosas relacionadas de la casa, ella se ha alejado, yo me encargo de los

niños, de la comida y demás responsabilidades de la casa, ella debería colaborar un poco

más”.

3. El artista y el científico, el esposo afirma “ella no es arriesgada, sigue en ese trabajo

donde no le pagan bien y tiene que hacer el trabajo de varias personas; mientras que yo

siempre he tomado decisiones arriesgadas, y me ha ido bien, he conseguido mejores

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 184

trabajos”. Ella afirma “yo he luchado para conseguir mi trabajo, no ha sido tan fácil como

para él, pero yo quiero demostrar que si puedo y por eso me quedo”.

El motivo de consulta, también se clasificó de acuerdos a los patrones de polarización,

los cuales son:

1. Comportamientos de evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una

incompatibilidad abiertamente sino que la evitan y no la discuten. El afirma que prefiere

hacerse cargo de las responsabilidades de la casa sin decirle a ella, “porque no gano nada si

le digo, igual no lo hace entonces prefiero quedarme callado y no decirle”. Ella, dice que lo

mejor para ella, es tomar las grandes decisiones “igual le pregunto qué debemos hacer y él

simplemente no responde nada, entonces yo como siempre termino yo tomando las

decisiones, entonces prefiero ya ni preguntarle”.

2. Patrón de retirada, en donde un compañero emplea la interacción negativa como

demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la interacción. Cuándo él empieza a

acusarla con que le está siendo infiel, ella simplemente o se baja del carro o se va de la

casa. Igualmente cuando ella le empieza a decir que no es cariñoso, que si no es capaz de

simplemente tutearla, él se queda callado o cambia el tema, cuando se vuelve muy

insistente prefiere dormirse o ir a ver a los niños.

3. Interacción negativa mutua, en donde los dos compañeros emplean ataques aversivos,

ambos interactúan con rabia, críticas, culpas y ataques. Como por ejemplo: Ella afirma “Él

siempre me saca en cara que es el que más gana, el que más hace en la casa, me critica mi

trabajo y mis amistades”. Él afirma “Ella nunca me deja hablar, siempre me está cortando,

me está culpando por lo que nos está sucediendo, me dice que ya no me quiere, que todo lo

que le digo le fastidia”.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 185

Estado actual –análisis sincrónico.

Son una pareja, tienen 2 hijos que están estudiando en el colegio. Cada uno trabaja. El

gana más en su trabajo a nivel económico, y tiene mayor tiempo disponible. Ella gana

menos y el tiempo que le dedica a su trabajo es mayor. Motivo por el cual él le dedica más

tiempo al hogar y al cuidado de los hijos.

El trabajo de él es en una oficina, mientras que ella tiene que hacer constantemente

visitas a otras empresas, tiene que viajar y por lo tanto no siempre está en la oficina.

Comparten el fin de semana con sus hijos, cuando ella no sale de viaje. Llevan a los

hijos a sus actividades como el football y demás actividades.

Cuando él la llama, y ella no le contesta, el empieza a llamarla varias veces y empieza a

piensa “quien sabe con quién estará que no puede contestar el teléfono”. Ella afirma, que

está en reuniones o que dejó el celular en la cartera y por eso no lo escuchó.

Cuando ella llega a la casa o en el carro cuando lo recoge en trabajo, el empieza a

decirle que si tiene otra persona, ella le dice que otra vez con el mismo tema y termina

sacándole el pasado de su infidelidad, y adicionalmente involucra el tema de la plata,

“como el carro es suyo, me bajo”. Así continua la interacción hasta que pelean por todos los

temas del pasado y el conflicto actual queda a un lado.

Historia – análisis diacrónico.

Son una pareja que llevan juntos 26 años. Desde el colegio, iniciaron a ser pareja.

Ella afirma que desde el colegio ella era la que toma las decisiones, como por ejemplo

de cuadrarse “yo fui la que me le acerque y lo busque, además fui la que decidió que ya

éramos una pareja”. El dice “desde esa época yo siempre fui parco con ella, no la tuteaba,

incluso hoy en día no la tuteo aunque lo haga con las demás personas”.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 186

A través de su relación, ella fue la que siempre motivó que estudiaran, “incluso mi

familia fue la que nos dio la ayuda económica para que los dos pudiéramos estudiar”. El

afirma “ella tomaba esas decisiones y por eso yo inicié a estudiar lo mismo que ella, pero

en segundo semestre me retiré porque de verdad eso no era lo mío, entonces dejé de

estudiar, y por lo que ella me molestaba empecé a estudiar otra carrera en otra universidad

y lo logré”.

Durante la época de la universidad, cada uno tubo sus amigos, el afirma “ella siempre

sabia donde estaba yo, mientras que yo no sabía dónde estaba ella, y si le preguntaba no me

decía”. En esa época, tuvieron una crisis fuerte porque ella empezó a consumir drogas,

motivo por el cual ella se le perdía a él. Adicional, él empezó a tomar alcohol con sus

amigos. Cuando él se dio cuenta, le ayudó a salir del problema y continuaron su relación,

tomando la decisión de casarse.

Al casarse, ella arregló todo, la ayuda económica se la dieron la familia de ella. Al

tiempo de estar casados, ya cada uno con sus trabajos, inicialmente ella ganaba mejor que

él, entonces aportaba más que él, posteriormente el empezó a conseguir mejores trabajos y

empezó a ganar mejor que ella y por lo tanto aportaba más que ella. Compraron el

apartamento y carro, cosas que él pagaba. El cambio en varias ocasiones de trabajo,

mientras que ella continua en su trabajo inicial.

En una de las partes en donde él trabajaba, tuvo una relación con una subalterna,

relación que duró aproximadamente un año, hasta que la esposa se dio cuenta, él termino

con la relación. Ella empezó a distanciarse y a salir sola con sus amistades, adicionalmente

porque ella dice que a él le da pereza salir con sus amigos porque “se creen de mejor

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 187

familia”, entonces cuando salen no habla con ellos, prefiere quedarse callado, porque él

dice que ella lo critica si habla cualquier cosa.

Grado de afectación de la problemática.

Conducta

problema (Nombre)

Áreas de funcionamiento

afectado y gravedad

Afectación de otras

personas

Insatisfacción de

pareja

Familiar: afectación elevada

Social: afectación elevada

A los hijos y a la

familia de ella

Amigos en conjunto y

compañeros del trabajo

Condiciones biológicas del/la consultante.

Tanto él como ella han tenido problemas con el consumo de sustancias. Ella consumió

drogas el consumió alcohol. Actualmente, cuando él consumo alcohol, se presentan

conflicto principalmente porque ella lo deja solo. Eso genera mayor tensión en la relación,

porque ella dice que está con otras personas, que se puede gastar su dinero como él quiera.

Él afirma, que le molesta que él no pueda salir con sus amigos mientras ella si sale con los

de ella.

Contexto de funcionamiento

CONTEXTO DESCRIPCIÓN DEL

CONTEXTO

COMPORTAMIENTOS QUE

SE PRESENTAN

FAMILIAR Familia compuesta por

los 2 padres y 2 hijos.

La familia de él es

distante, él dice que siempre

han sido de esa forma, no se

hablan constantemente y

tampoco se encuentran con

frecuencia.

La familia de ella es

unida, se reúnen

frecuentemente, salen de

paseo y comparten mucho

tiempo.

La familia de él siempre han sido

distantes y poco expresivos

emocionalmente.

La familia de ella son expresivos,

unidos y están pendientes el uno del

otro.

Esto ha generado problemas en la

pareja, porque la familia de ella no es

puntual, lo cual genera gran molestia

en él.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 188

ACADEMICA Pareja de profesionales

con estudios universitarios,

ella tiene un postgrado.

El afirma que quisiera hacer otro

estudio, pero no la ha hecho por lo

que tiene que aportar bastante en el

hogar.

LABORAL El trabaja en una oficina,

su horario es de 8 am a 5 pm.

Es jefe de su área.

Ella trabaja en una

empresa, donde tiene que

realizar visitas a otras

empresas y estar viajando.

Le han prometido asensos,

pero no se los han otorgado,

por el contrario han sacado

gente y a ella le ha toca

asumir esas funciones

adicionales.

Debido a que ella constantemente

tiene que estar trasladándose, a él le

molesta que no le conteste el teléfono,

y de una vez lo relaciona con alguna

infidelidad.

Ella atribuye su poca colaboración

en el hogar, debido a su carga

laboral.

SOCIAL Cada uno tiene su grupo

de amigos, de la universidad,

del trabajo y del colegio.

Ella cuenta con un grupo social

diferente al de él. Debido a la

universidad en la que estudio cada

uno, el nivel socioeconómico y el tipo

de trabajo que desempeña cada uno.

A él no le gusta compartir mucho

tiempo con los amigos de ella.

Formulación de hipótesis:

PROBLEMA HIPÓTESIS

Presentación de

insatisfacción de pareja por las

diferencias que se presentan en

cada tema entre la pareja, Está

determinada por la presentación

patrones de comportamientos que

tienden a modificar el

comportamiento del compañero,

como los patrones de

comportamientos negativos

(deprivación de un reforzamiento,

y/o la exposición a una

estimulación aversiva) y los

patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los

comportamientos de interacción

PREDISPOSICIÓN:

Los factores que pueden predisponer a que esta

pareja presente conflicto son:

- Las diferencias individuales

- Las diferencias en la crianza de cada uno

- Las diferencias en las dinámicas familiares

- Infidelidad de parte de él en el pasado

ADQUISICIÓN:

La administración inadecuada de contingencias,

pudo influir en que las personas empezaran a

presentar conflicto al interior de su pareja por las

diferencias existentes entre ellos.

MANTENIMIENTO:

Posiblemente, los conflictos entre la pareja se

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 189

negativa mutua y los

comportamientos de retirada)

siguen presentando por la presentación de las

contingencias directas que se presentan

actualmente. Las cuales están determinadas por dos

patrones de comportamiento, los patrones de

comportamientos negativos (deprivación de un

reforzamiento, y/o la exposición a una estimulación

aversiva) y los patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los comportamientos

de interacción negativa mutua y los

comportamientos de retirada).

Unidades de análisis:

Insatisfacción de pareja: Es la forma en que la persona percibe su propio matrimonio

respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad (nivel de malestar) en un punto en

el tiempo, dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(cercanía/distancia, control/responsabilidad, tu no me amas/yo sí te amo y el artista/el

científico), lo cual genera conflicto entre la pareja. Está determinada por la presentación

patrones de comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero,

como los:

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos de deprivación de

un reforzamiento, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable para la persona; la exposición a una

estimulación aversiva, el cual se presenta cuando una situación se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona; y los dos patrones al mismo tiempo, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo o desagradable para la persona.

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 190

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción.

Hipótesis explicativa.

La pareja 2, presenta insatisfacción de pareja, la cual es entendida como la evaluación

que cada uno de los compañeros realiza sobre el nivel de insatisfacción, de acuerdo a los

temas de conflicto (cercanía-distancia, control y responsabilidad y el artista/el científico)

que se presentan en la pareja; esas diferencias están determinadas por patrones de

comportamientos que tienen la tendencia de modificar el comportamiento del compañero,

estos son los patrones de comportamientos negativos, en donde uno o los dos compañeros

están deprivados de reforzamiento y/o expuestos a una estimulación aversiva, como por los

patrones de comportamiento de polarización, donde los compañeros presentan

comportamientos de evitación mutua, de interacción negativa mutua y el patrón de retirada;

incrementando aún más el conflicto. Esto lleva a la pareja a una trampa mutua, donde cada

uno de los miembros presentan un estado de desesperanza de que las cosas no van a

cambiar.

Este problema pudo ser predispuesto por las diferencias individuales, las diferencias en

la crianza de cada uno, las diferencias en las dinámicas familiares y la infidelidad de parte

de él en el pasado. Se adquirió por la administración inadecuada de contingencias y se

mantiene por la presentación de las contingencias directas que se presentan actualmente.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 191

Estas contingencias son los patrones de comportamientos negativos y los patrones de

comportamientos de polarización.

Pareja número 3.

Análisis descriptivo del caso clínico.

Para poder entender los componentes generales de un caso clínico, es necesario

operacionalizar el motivo de consulta, describir tanto la historia actual (evaluación

sincrónica), como la historia pasada o de aprendizaje (evaluación diacrónica) del

consultante. Estos dos tipos de evaluaciones, permitieron obtener cuales son los factores de

adquisición y de mantenimiento de la conducta problema del consultante. Se inicia con la

descripción y operacionalización del motivo de consulta.

Descripción y operacionalización del motivo de consulta.

El motivo de consulta con el cual llegó la pareja, se clasificó de acuerdo a los temas de

conflictos, donde se observan los patrones de comportamientos negativos, los cuales son:

1. Cercanía-distancia, el esposo quiere que ella sea más cercana tanto emocionalmente

como sexualmente “a ella no le gusta que le toque la vagina, siempre me quita la mano; la

busco para tener relaciones y nunca quiere”, adicionalmente afirma “ha dejado de

llamarme, de acompañarme en el colectivo y de estar pendiente de mi; ya no es la misma de

antes” “cuando dormimos nunca me abraza, si la busco dice que está muy acalorada”. Ella

afirma, que “él no entiende que ahora estoy estudiando y no tengo tanto tiempo como antes,

ya no lo puedo acompañar a toda hora porque tengo que hacer trabajos”, con respecto al

área sexual ella afirma “no me deja tranquila, todas las noches me quiere tocar, no se da

cuenta que estoy molesta por lo casposo que ha sido y que no quiero estar con él, no sé si

ya no lo quiero”, “siempre anda de mal genio, ya no siente el deseo”.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 192

2. Tú no me amas. - Yo si te amo, eres tú la que no me ama, él afirma, que ella ya no le

agradece por todas las cosas que él hace por ella como “no sé qué hacer, malo si la recoge y

malo si no la recojo; cuido a las niñas y dice que todo lo hago mal, definitivamente no le

gusta nada de lo que yo hago por ella. Le he dicho si quiere tener un tiempo y que se vaya,

pero tampoco quiere…”. Ella afirma, “todo lo que él dice debe ser así o si no se molesta,

me habla duro, le digo que estoy con compañero del estudio y se molesta, mejor dicho ya

todo lo molesta y no solo se molesta conmigo sino con todo el mundo”.

El motivo de consulta, también se clasificó de acuerdos a los patrones de polarización,

los cuales son:

1. Comportamientos de evitación mutua, él afirma “a veces cuando la busco para tener

relaciones y ella no quiere, yo simple mente me volteo y me duermo”. Ella afirma, “cuando

no quiero tener relaciones, solo le digo que tengo calor y estoy cansada, él se voltea y los

dos nos dormimos”.

2. Interacción negativa mutua, ella afirma “si la noche anterior no quise estar con él,

todo el día me trata mal, me grita me habla golpeado, es echando sátiras a todo momento,

como si tengo a otra persona; pero aún, si me encuentro con un compañero me cela con él,

vive diciendo que está muy viejo y que por eso ya no quiero estar con él”. Él afirma “si le

hablo, ella ya está molesta, todo lo que digo está mal y me critica, siento que soy muy viejo

para ella, que a ella le gustará estar con pelados de su misma edad”

3. Patrón de retirada, por lo general cuando pelean, ella es la que se va y lo deja a él.

Estado actual –análisis sincrónico.

Él tiene 45 años y ella 26 años. Son una pareja de 8 años de relación. Tienen 2 hijas. El

maneja un colectivo, ella es ama de casa y estudia enfermería. Ella presenta muchas dudas

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 193

en relación a la edad y afirma que desde que le dijo la verdad sobre las niñas (no son de él),

él ha cambiado mucho, “ya todo es una peleadera, no puedo estudiar con compañeros

porque se pone celo, y vive diciendo que me vaya con esos pelados que me entienden mejor

que él, que es un viejo”. Ella informa que él no la maltrata físicamente, pero que por esas

dudas, ella ha dejado de sentir el deseo sexual, y que este es uno de los mayores motivos

por lo que discuten. Adicionalmente, acepta que ha dejado de acompañarlo y de estar

pendiente de él como lo estaba anteriormente porque primero, está estudiando y segundo

porque le molesta que sea tan “cansón”.

Él comenta, que se siente orgulloso de que estudie, pero eso lo hace sentir inseguro por

lo que ella se rodea de compañeros de su misma edad y el observa que ella se entiende muy

bien con ellos “yo veo que se ríe con ellos y conmigo no, es decir ellos la divierten y la

entienden”. Siente que definitivamente las cosas cambiaron, cuando ella le contó que las

niñas no eran de él, pero afirma que la entiende debido a la situación por la que estaban

pasando en esos momentos.

Historia – análisis diacrónico.

Se conocieron en una cafetería de un paradero de buses, en donde el parqueaba. Él la

veía y un día le habló, ella le comentó que tenía problemas económicos y que no tenía

donde quedarse, él le dijo que se fuera con él y ella aceptó. Estuvieron viviendo 6 meses

como amigos, posteriormente empezaron la relación amorosa.

Ella había terminado una relación, porque él la engañó; él también hace un año se había

separado de un matrimonio que duró 3 años.

A los 2 meses de empezar su relación, la maná del hijo de él lo demandó, por alimentos,

por lo cual se lo llevaron a la cárcel. Duró 12 meses preso (2004), el afirma “ella fue la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 194

única que estuvo pendiente de mi, nadie de mi familia me ayudó”. Ella empezó a trabajar

en un restaurante, conoció a un hombre y quedó embarazada. Él salió, y a ella le tocó irse

donde la mamá porque se enfermó de un riñón, cuando ella estuvo con su madre, el tubo

relaciones con otra persona, pero la dejó cuando ella regresó; ella nunca le dijo que ese

bebe no era de él. Ella si se enteró de la infidelidad de él y dice “se acabo la confianza”.

Ella afirma que en ese momento sentía que ella no le importaba, desde ese momento se

empezó a dañar la relación. Cuando nació la niña, a ella le tocó irse al Huila, donde la

mamá, porque él no tenía trabajo y estaban mal económicamente. Ella afirma “otra vez me

puse a loquear y volví a quedar embarazada”. Pero ella regresó y él pensó que esa bebe

también era suya.

En el 2009, ella tomó la decisión de contarle lo de las niñas. Desde ese momento ella

afirma “ya no se le podía hablar, todo era a los gritos; aunque él dice que me perdona y que

él es el papá de las niñas yo no creo que me haya perdonado porque todo es un

problema””Se volvió más casposo”.

Hace un año, ella le dijo que no quería seguir con él, porque “por más que hiciera me

respondía de mal genio, nunca hacia nada bien”. Ellas se quería casar con él, “él ya no

ponía atención lo único que hacía era trabajar”.

Grado de afectación de la problemática.

Conducta

problema (Nombre)

Áreas de funcionamiento

afectado y gravedad

Afectación de otras

personas

Insatisfacción de

pareja

Familiar: afectación elevada

Social: afectación elevada

A los hijos

Amigos en conjunto y

compañeros del estudio de

ella

Contexto de funcionamiento.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 195

CONTEXTO DESCRIPCIÓN

DEL CONTEXTO

COMPORTAMIENTOS QUE SE

PRESENTAN

FAMILIAR Familia compuesta

por los 2 padres y 2 hijas.

La familia de él es

distante, no los apoya ni

les colabora.

La familia de ella es

del Huila, es más cercana

a la mamá.

El papá de él no lo apoya

económicamente, él afirma “siempre me

ha tratado mal, cuando le manejaba el

colectivo era pensando que le iba a robar

la plata. Nunca han querido a Y”.

El papá de ella, la toco sexualmente

cuando era pequeña, por eso ella se vino

a Bogotá, “escapando de él, yo ni iba a

dejar que me violara”. Afirma que la

mamá ni los hermanos hacían nada a

pesar de que ellos sabían. Sin embargo,

en sus embarazos, la mamá la ha

ayudado.

ACADEMICA El es bachiller. Ella

validó su bachillerato.

Actualmente está

estudiando enfermería.

El no quiere estudiar más, pero

afirma “si yo puedo ayudar a que Y se

supere, le voy a ayudar “. Él le paga la

carrera.

LABORAL El trabaja manejando

un colectivo.

Ella es ama de casa.

A él le gustaría que ella lo

acompañara más cuando maneja el

colectivo.

SOCIAL Él no tiene muchos

amigos. Ella comparte

con los compañeros de la

universidad.

Cuando ella estudia con sus

compañeros, es motivo de pelea.

Formulación de hipótesis:

PROBLEMA HIPÓTESIS

Presentación de

insatisfacción de parejas por las

diferencias que se presentan en

cada tema entre la pareja, Está

determinada por la presentación

patrones de comportamientos que

tienden a modificar el

comportamiento del compañero,

como los patrones de

comportamientos negativos

(deprivación de un reforzamiento,

y/o la exposición a una

estimulación aversiva) y los

PREDISPOSICIÓN:

Los factores que pueden predisponer a que esta

pareja presente conflicto son:

- Las diferencias individuales

- Las diferencias en la crianza de cada uno

- Las diferencias en las dinámicas familiares

- Su nivel educativo

- La infidelidad en el pasado por parte de ella.

ADQUISICIÓN:

La administración inadecuada de contingencias,

pudo influir en que las personas empezaran a

presentar conflicto al interior de su pareja por las

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 196

patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los

comportamientos de interacción

negativa mutua y los

comportamientos de retirada)

diferencias existentes entre ellos.

MANTENIMIENTO:

Posiblemente, los conflictos entre la pareja se

siguen presentando por la presentación de las

contingencias directas que se presentan

actualmente. Las cuales están determinadas por dos

patrones de comportamiento, los patrones de

comportamientos negativos (deprivación de un

reforzamiento, y/o la exposición a una estimulación

aversiva) y los patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los comportamientos

de interacción negativa mutua y los

comportamientos de retirada).

Unidad de análisis:

Insatisfacción de pareja: Es la forma en que la persona percibe su propio matrimonio

respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad (nivel de malestar) en un punto en

el tiempo, dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(cercanía/distancia, control/responsabilidad, tu no me amas/yo sí te amo y el artista/el

científico), lo cual genera conflicto entre la pareja. Está determinada por la presentación

patrones de comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero,

como los:

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos de deprivación de

un reforzamiento, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable para la persona; la exposición a una

estimulación aversiva, el cual se presenta cuando una situación se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona; y los dos patrones al mismo tiempo, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo o desagradable para la persona.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 197

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción.

Hipótesis explicativa.

La pareja 3, presenta insatisfacción de pareja, la cual es entendida como la evaluación

que cada uno de los compañeros realiza sobre el nivel de insatisfacción, de acuerdo a los

temas de conflicto (cercanía-distancia y tú no me amas - yo si te amo, eres tú la que no me

ama) que se presentan en la pareja; esas diferencias están determinadas por patrones de

comportamientos que tienen la tendencia de modificar el comportamiento del compañero,

estos son los patrones de comportamientos negativos, en donde uno o los dos compañeros

están deprivados de reforzamiento y/o expuestos a una estimulación aversiva, como por los

patrones de comportamiento de polarización, donde los compañeros presentan

comportamientos de evitación mutua, de interacción negativa mutua y el patrón de retirada;

incrementando aún más el conflicto. Esto lleva a la pareja a una trampa mutua, donde cada

uno de los miembros presentan un estado de desesperanza de que las cosas no van a

cambiar.

Este problema pudo ser predispuesto por las diferencias individuales, las diferencias en

la crianza de cada uno, las diferencias en las dinámicas familiares, su nivel educativo y la

infidelidad en el pasado por parte de ella. Se adquirió por la administración inadecuada de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 198

contingencias y se mantiene por la presentación de las contingencias directas que se

presentan actualmente. Estas contingencias son los patrones de comportamientos negativos

y los patrones de comportamientos de polarización.

Pareja número 4.

Análisis descriptivo del caso clínico.

Para poder entender los componentes generales de un caso clínico, es necesario

operacionalizar el motivo de consulta, describir tanto la historia actual (evaluación

sincrónica), como la historia pasada o de aprendizaje (evaluación diacrónica) del

consultante. Estos dos tipos de evaluaciones, permitieron obtener cuales son los factores de

adquisición y de mantenimiento de la conducta problema del consultante. Se inicia con la

descripción y operacionalización del motivo de consulta.

Descripción y operacionalización del motivo de consulta.

El motivo de consulta con el cual llegó la pareja, se clasificó de acuerdo a los temas de

conflictos, donde se observan los patrones de comportamientos negativos, los cuales son:

1. Cercanía-distancia, ella afirma “no tenemos la confianza para decirnos las cosas, la

mayor razón es que él no expresa las cosas” “Sólo piensa en él y no en lo que yo puedo

estar sintiendo, yo le digo lo que me molesta, lo que me disgusta y él como si nada” “no le

ve el problema a nada”. Él afirma “me gustaría que confiara en mí, que dejara de armarse

películas, ella me puede decir las cosas”.

2. El artista y el científico, él afirma “ella planea todo, la hora, la fecha y que vamos a

hacer” “no es espontánea, todo es predecible, si se derrumba un plan no lo puede levantar, y

el que lo derrumba soy yo””Yo no voy a cambiar y no me voy a pegar a un horario”. Ella

afirma Él no tiene en cuenta que yo he arreglado y planificado las cosas, simplemente si

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 199

sale otro plan con los amigos o lo que sea deja de lado lo que ya habíamos planeado, yo

acepto que me gusta planear pero es lo mejor”.

El motivo de consulta, también se clasificó de acuerdos a los patrones de polarización,

los cuales son:

1. Comportamientos de evitación mutua, ella afirma, que a veces tiene que ser bastante

explicita para que tengan relaciones sexuales: “Yo lo consiento, arreglé todo para que

pudiéramos estar juntos, pero él ni se da cuenta, entonces simplemente nos ponemos a ver

televisión, él no me dice nada y yo tampoco le digo nada.

2. Interacción negativa mutua, él afirma que cuando sale un plan diferente y él le dice y

ella se molesta y empiezan a gritarse y se echan en cara, ella dice “él no me tiene en cuenta,

no le importa mi esfuerzo y no lo valora, simplemente cambia el plan, yo le digo que es un

egoísta…”. Él dice “yo le empiezo a decir que se fresquee, que no es para tanto, que no va a

pasar nada grave, que se deje de armar videos”

3. Patrón de retirada, por lo general cuando pelean, él se va a hacer sus planes con sus

amigos y ella también sale con sus amigos.

Estado actual –análisis sincrónico.

Él y ella tienen 22 años. Son una pareja de 1 año de relación. El trabaja y ella estudia.

Actualmente en la pareja, se han presentado problemas principalmente porque discuten

frecuentemente, ella piensa que no se conocen, que no hay confianza entre ellos y que solo

lo pueden hacer cuando hablan por el chat.

A él le molesta, que frecuentemente él le pregunta pero ella no le dice nada hasta que se

encuentra en el chat “me parece tan impersonal, me molesta y simplemente la ignoro”.

Adicionalmente, ella dice que en las relaciones sexuales, no demuestra mucho interés, que

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 200

ella intenta llamar su atención, pero que él no se da ni por enterado. Además, a ella no le

gusta que él se hable con sus exnovias, pero él lo hace y le dice constantemente que no se

haga videos. Ella entonces dice que él es muy fresco, y él dice que ella es muy complicada.

Historia – análisis diacrónico.

Se conocieron por un amigo mutuo. Salieron 4 citas anteriormente como amigos, hasta

que decidieron cuadrarse. Él ha tenido dos parejas previas, afirma que con ellas no había

tanta pelea, pero que siempre le ha pasado que cuando pelea dice cosas ofensivas que

hieren a la otra persona y después pide disculpas; adicionalmente “yo siempre he sido

fresco, me gusta no planear ni analizar tanto las situaciones” “A pesar de todo, N siempre le

ha gustado planear y eso había sido bueno porque ella me daba mi espacio y el de ella, cada

uno sale con sus amigos y respeta los espacios”.

Ella, ha tenido relaciones previas, pero afirma que desde que termina con una relación,

no vuelve a saber nada de ellos “yo pienso que eso es respeto a la pareja, por eso le digo a

él que es lo único que me molesta”. Desde un inicio de la relación, le gustaba la forma de

ser, que era descomplicado y muy amigable.

Grado de afectación de la problemática.

Conducta

problema (Nombre)

Áreas de funcionamiento

afectado y gravedad

Afectación de otras

personas

Insatisfacción de

pareja

Social: afectación media Amigos de cada uno.

Contexto de funcionamiento.

CONTEXTO DESCRIPCIÓN

DEL CONTEXTO

COMPORTAMIENTOS QUE SE

PRESENTAN

FAMILIAR Él fue criado por su

abuela. Sus papás son

separados y no viven en

Las familias de los dos son

separadas, fueron criados por otras

personas diferentes a los padres. Ellos

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 201

Bogotá.

Ella fue criada

también por la abuela, sus

padres son separados.

mantienen contacto con ellos, los visitan

de vacaciones.

ACADEMICA El es recién graduado

de la universidad, ella no

ha terminado su carrera.

Cada uno tiene los contextos

separados, aunque se hayan conocido por

un amigo en común.

LABORAL El trabaja, tiene una

jornada de 8 a 5 pm.

Dado el horario de trabajo de él y el

académico de ella, las horas que

comparten juntos son principalmente la

noche y los fines de semana.

SOCIAL Él no tiene muchos

amigos al igual que ella,

pero casi no comparten

conjuntamente con los

amigos.

A ella no le gusta que él salga mucho

con sus amigos porque por lo general le

promete que no se va a emborrachar ni a

quedarse tan tarde, cosa que casi nunca

se cumple. Adicionalmente, cuando él

sale, ella empieza a llamarlo

constantemente, por lo cual él deja de

contestarle el teléfono, generando mayor

conflicto entre la pareja.

Formulación de hipótesis:

PROBLEMA HIPÓTESIS

Presentación de

insatisfacción de parejas por las

diferencias que se presentan en

cada tema entre la pareja, Está

determinada por la presentación

patrones de comportamientos que

tienden a modificar el

comportamiento del compañero,

como los patrones de

comportamientos negativos

(deprivación de un reforzamiento,

y/o la exposición a una

estimulación aversiva) y los

patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los

comportamientos de interacción

negativa mutua y los

comportamientos de retirada)

PREDISPOSICIÓN:

Los factores que pueden predisponer a que esta

pareja presente conflicto son:

- Las diferencias individuales

- Las diferencias en la crianza de cada uno

- Las diferencias en las dinámicas familiares

ADQUISICIÓN:

La administración inadecuada de contingencias,

pudo influir en que las personas empezaran a

presentar conflicto al interior de su pareja por las

diferencias existentes entre ellos.

MANTENIMIENTO:

Posiblemente, los conflictos entre la pareja se

siguen presentando por la presentación de las

contingencias directas que se presentan

actualmente. Las cuales están determinadas por dos

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 202

patrones de comportamiento, los patrones de

comportamientos negativos (deprivación de un

reforzamiento, y/o la exposición a una estimulación

aversiva) y los patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los comportamientos

de interacción negativa mutua y los

comportamientos de retirada).

Unidad de análisis:

Insatisfacción de pareja: Es la forma en que la persona percibe su propio matrimonio

respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad (nivel de malestar) en un punto en

el tiempo, dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(cercanía/distancia, control/responsabilidad, tu no me amas/yo sí te amo y el artista/el

científico), lo cual genera conflicto entre la pareja. Está determinada por la presentación

patrones de comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero,

como los:

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos de deprivación de

un reforzamiento, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable para la persona; la exposición a una

estimulación aversiva, el cual se presenta cuando una situación se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona; y los dos patrones al mismo tiempo, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo o desagradable para la persona.

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 203

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción.

Hipótesis explicativa.

La pareja 4, presenta insatisfacción de pareja, la cual es entendida como la evaluación

que cada uno de los compañeros realiza sobre el nivel de insatisfacción, de acuerdo a los

temas de conflicto (Cercanía-distancia y el artista/el científico) que se presentan en la

pareja; esas diferencias están determinadas por patrones de comportamientos que tienen la

tendencia de modificar el comportamiento del compañero, estos son los patrones de

comportamientos negativos, en donde uno o los dos compañeros están deprivados de

reforzamiento y/o expuestos a una estimulación aversiva, como por los patrones de

comportamiento de polarización, donde los compañeros presentan comportamientos de

evitación mutua, de interacción negativa mutua y el patrón de retirada; incrementando aún

más el conflicto. Esto lleva a la pareja a una trampa mutua, donde cada uno de los

miembros presentan un estado de desesperanza de que las cosas no van a cambiar.

Este problema pudo ser predispuesto por las diferencias individuales, las diferencias en

la crianza de cada uno y las diferencias en las dinámicas familiares. Se adquirió por la

administración inadecuada de contingencias y se mantiene por la presentación de las

contingencias directas que se presentan actualmente. Estas contingencias son los patrones

de comportamientos negativos y los patrones de comportamientos de polarización.

Pareja número 5.

Análisis descriptivo del caso clínico.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 204

Para poder entender los componentes generales de un caso clínico, es necesario

operacionalizar el motivo de consulta, describir tanto la historia actual (evaluación

sincrónica), como la historia pasada o de aprendizaje (evaluación diacrónica) del

consultante. Estos dos tipos de evaluaciones, permitieron obtener cuales son los factores de

adquisición y de mantenimiento de la conducta problema del consultante. Se inicia con la

descripción y operacionalización del motivo de consulta.

Descripción y operacionalización del motivo de consulta.

El motivo de consulta con el cual llegó la pareja, se clasificó de acuerdo a los temas de

conflictos, donde se observan los patrones de comportamientos negativos, los cuales son:

1.Cercanía-distancia, él quiere que ella sea más dedicada en la relación de pareja, “ella

dice que da tanto como yo en la relación y en la familia, pero no es así, yo llego del trabajo

y ella me pone es a hacer tareas en la casa, mientras que lo único que yo quiero es

descansar al lado de ella, que me consienta y me de amor”, adicionalmente que este

constantemente en contacto “no sé donde ella está, ella trabaja independiente ero no me

avisa en donde se la pasa, mientras yo si la vivo llamando a informarle donde estoy porque

si no ella se molesta”. Mientras que ella reporta “Él es muy celoso, parece un loco,

llamándome cada rato para saber en dónde estoy y con quién, no entiende que debo trabajar

y que debo relacionarme con la gente, el que las hace se las imagina”. Adicionalmente, ella

le critica que él solamente quiere ser consentido pero no quiere consentir, igualmente pasa

con la hija de ella, él no la consiente sino que él quiere que ella lo consienta. Agrega “él

quiere conocer todos mis amigos, pero él no me presenta los de él ni me lleva a las

reuniones del trabajo, la excusa que él dice es que lo amigos son terribles y que yo soy muy

bonita, entonces ellos me molestarían y por eso no me lleva”.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 205

2. Control y responsabilidad, ella afirma “yo soy siempre la que arreglo la casa, la que

coordina que se va a hacer en el tiempo que él tiene libre, él nunca se preocupa por

compartir tiempo, si fuera por él se la pasaría durmiendo; por eso, él se molesta cuando yo

planeo y organizo el día. También pasa con la casa, él dice que me gusta controlar todo,

incluso a él, pero es que no entiende que si yo no lo hago el no lo hace y me molesta

mucho”. Él afirma que “Ella no me deja descansar y no entiende que estoy trabajando duro

para conseguir el dinero para realizar planes con ella y la niña, pero como no me deja ni

opinar a veces, entonces prefiero quedarme callado y que ella diga que se debe hacer, pero

eso me hace sentir que estoy con una persona controladora y que no me deja opinar”.

Adicionalmente dice que le molesta mucho la forma en que ella dice que tiene toda la

responsabilidad de la familia y no se da cuenta que el aporta principalmente toda la parte

económica de la casa y que la ayuda tanto con la hija de ella como con la hija de los dos.

3. Tú no me amas. - Yo si te amo, eres tú la que no me ama, él constantemente le dice a

ella que no lo quiere, por lo que a todo momento ella le recrimina que él no ayuda en la

casa, ni con las niñas y que no quiere compartir tiempo con ella. Ella suele decirle que el

problema no es de ella sino de que él ya no la quiere y que por eso él se comporta de esa

manera en la casa, ella afirma “yo creo que el ya no es feliz en la casa, porque uno lo ve y

es divertido con sus amigos tomando y saliendo, cosa que en la casa es bravo y gruñón por

todo”.

4. El artista y el científico, él afirma que “ella es muy impulsiva, vive planeando planes

y no se da cuenta que debemos racionalizar los gastos, que no tenemos toda la plata del

mundo para vivir haciendo planes”, el dice que ella a pesar de que es tierna y es lindo que

organice cosas alocadas, el no tiene siempre el humor y la plata para complacerla. Ella

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 206

afirma que “él no tiene imaginación, no le gusta pensar en cosas novedosas para la pareja ni

para la familia, siempre es la misma rutina y no entiende que la rutina mata, yo hago planes

pero no necesariamente todo es plata como él dice, también son cosas que no se necesitan

plata, pero como siempre vive cansado para hacer cosas conmigo y con sus hijas”.

El motivo de consulta, también se clasificó de acuerdos a los patrones de polarización,

los cuales son:

1. Comportamientos de evitación mutua, ella afirma que ya sabe que tiene que hacer

todos los oficios en la casa y para evitar peleas ya no le dice nada, mientras que él dice que

como a ella le gusta controlar todo, él prefiere quedarse callado y hacer las cosas como ella

quiere para evitar pelear.

2. Patrón de retirada, él prefiere irse a tomar con sus amigos, cuando ella empieza a

recriminarlo porque no les dedica tiempo. Ella también dice, que cuando él se molesta,

prefiere irse donde su mamá para no generar un conflicto más grave.

3. Interacción negativa mutua, ella afirma que “él siempre me saca en cara su dinero,

que por él tengo un lugar donde vivir con mis hijas, siempre todo es dinero para él”. Él

afirma “ella siempre quiere que yo haga lo que ella quiere, siempre me recrimina que

quiero descansar y vivo durmiendo, pero ella no entiende que los turnos que tengo son

duros y que me canso, por eso no la ayudo con los oficios y sí a veces quiero solo dormir”.

Estado actual –análisis sincrónico.

Son una pareja que llevan juntos un año y un mes. Tienen una hija los dos, y ella tiene

una niña mayor con otra persona. Conviven juntos desde hace más o menos 6 meses, pero

dicen que irse a vivir juntos no ha sido muy positivo, porque viven peleando ya no solo por

la relación sino también por la casa, el arreglo y él tiempo que se le dedica a la familia.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 207

Él es policía, trabaja en diferentes turnos, tanto en la mañana, en la tarde o en el día.

Ella trabaja vendiendo productos de forma independiente, su trabajo cosiste en visitar a los

diferentes clientes, esto ha generado conflictos al interior de su pareja, quien afirma que él

nunca sabe donde esta ella, ni con quien.

Él afirma que la quiere mucho, que le parece una mujer bonita, dedicada, que es limpia

y ordenada; pero a veces afirma, que es peor que vivir con la mamá de él, ya que ella no le

exigía hacer nada en la casa, pero ella es “una loca del aseo, si algo se ensucia debo

limpiarlo inmediatamente porque si no es pelea segura”. Dice que a veces, el piensa que es

mejor que cada uno viva por su lado pero que continúen como una pareja.

Ella afirma, que él cuando quiere ser tiene lo es, pero que principalmente es de

malgenio, no le gusta nada en la casa, que cuando ella le pide un favor lo hace de mala

gana, con mala cara. Ella afirma “a veces me provoca salir corriendo con mis dos hijas,

pero me quedo e intento salvar esto porque la niña pequeña está muy apegada a él. Además

yo lo quiero, lo conozco y lo he visto como un buen hombre, que quiere seguir conmigo y

que me quiere”.

Historia – análisis diacrónico.

La pareja se conoció en internet, dos meses antes de iniciar su relación. Ella es 4 años

mayor que él. Se escribían y se mandaban fotos. Él tomó la iniciativa de encontrarse, eso le

gusto a ella quién aceptó s invitación. Cuando se vieron, los dos dicen que se gustaron y

tomaron la decisión de iniciar una relación. Al mes de estar cuadrados, él le empezó a decir

a ella que quería tener un hijo con ella, ella al principio le dijo que no porque ella convivía

todavía con el papa de su hija mayor, entonces él le dijo que se fueran a vivir juntos y que

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 208

tuvieran un bebe, ella le dijo que prefería vivir un tiempo sola, entonces se fue de la casa

del papa de la niña y se fue a vivir a una habitación sola. Al mes, quedó embarazada.

Cuando quedó embarazada, a él no le gustó y le recriminó que el bebe no era de él,

entonces se separaron. Él inició una nueva relación de pareja con otra persona, la cual

también la conoció´ por internet. Desde entonces ella dice que él tiene varias relaciones en

Internet.

Durante la separación, él la llamaba y la insultaba, ella empezó a trabajar para

mantenerse y mantener a las niñas, eso no le gustó a él y también empezó a recriminarle

eso. Ella afirma “fue una época dura porque yo no entendí que paso si él quería que yo

tuviera un bebe, entonces no me cuide y por eso quede en embarazó. Pero me dejó, yo lo

quería matar. Pero a la vez quería que él volviera conmigo porque yo lo quería mucho,

entonces me aguanté todo, pero ahora las cosas han cambiado y por eso hay problemas”.

Grado de afectación de la problemática.

Conducta

problema (Nombre)

Áreas de funcionamiento

afectado y gravedad

Afectación de otras

personas

Insatisfacción de

pareja

Familiar: afectación elevada

Social: afectación elevada

Laboral: afectación elevada

A los hijos y a la

familia de ella

Amigos en conjunto y

compañeros del trabajo

Contexto de funcionamiento.

CONTEXTO DESCRIPCIÓN

DEL CONTEXTO

COMPORTAMIENTOS QUE SE

PRESENTAN

FAMILIAR Familia compuesta

por la pareja, una hija de

ellos y una hija mayor de

ella con otra persona.

La familia de él es

distante, no conoce a su

papá, es hijo único y lo

La familia de él siempre ha sido

distante, la mamá es poco expresiva, el

dice que ella solo le daba la plata

suficiente para mantenerse, pero nunca

fue cariñosa ni afectiva con él,

igualmente se portaba la abuela. Aunque

él en la casa no tenía que hacer ningún

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 209

crió la mamá y la abuela.

La familia de ella es

unida, se reúnen

frecuentemente, tiene

varios hermanos y los

papas viven juntos con

todos sus hijos, menos

ella.

oficio y nunca colaboró

económicamente. Todo lo que ganaba en

el trabajo era para sus gastos.

La familia de ella son expresivos,

unidos y están pendientes el uno del

otro; ella comparte mucho tiempo con

ellos y les ha contado de sus problemas

de pareja. Esto ha generado que él le

diga a ella que no le gusta su familia,

porque son chismosos, les gusta estar

pendientes de lo que les pasa a los

demás.

ACADEMICA Los dos son

bachilleres, él está

haciendo carrera en la

policía.

Ella quiere estudiar una carrera

tecnológica, pero dice que no tiene plata

para hacerlo.

LABORAL Él trabaja en la

policía, tiene turnos tanto

en la mañana, como en la

tarde y en la noche, su

horario varia de semana a

semana y sólo tiene un día

de descanso a la semana,

aunque debe estar

disponible ante cualquier

eventualidad.

Ella trabaja vendiendo

productos, de forma

informal e independiente,

no tiene horario

establecido, tiene que

visitar a los clientes donde

ellos le digan.

Debido a que ella trabaja en la calle,

se han presentado problemas porque ella

no lo llama a él a decirle constantemente

donde esta, entonces él ha optado por

llamarla constantemente, cosa que ella

interpreta como celos de él y

desconfianza.

SOCIAL Cada uno tiene su

grupo de amigos, él

principalmente son

compañeros del trabajo y

del colegio. Los amigos

de ella son familiares y

personas a las que les

vende sus productos.

Ella cuenta con un grupo social

diferente al de él. Debido a su trabaja y

su familia, pero ella le presenta a él sus

amigos. Mientras que él no le ha

presentado su grupo de amigos a ella,

porque dice que ella es muy bonita y no

quiere pelear con sus amigos si la llegan

a molestar.

Formulación de hipótesis:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 210

PROBLEMA HIPÓTESIS

Presentación de

insatisfacción de parejas por las

diferencias que se presentan en

cada tema entre la pareja, Está

determinada por la presentación

patrones de comportamientos que

tienden a modificar el

comportamiento del compañero,

como los patrones de

comportamientos negativos

(deprivación de un reforzamiento,

y/o la exposición a una

estimulación aversiva) y los

patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los

comportamientos de interacción

negativa mutua y los

comportamientos de retirada)

PREDISPOSICIÓN:

Los factores que pueden predisponer a que esta

pareja presente conflicto son:

- Las diferencias individuales

- Las diferencias en la crianza de cada uno

- Las diferencias en las dinámicas familiares

- Infidelidad de parte de él en el pasado

ADQUISICIÓN:

La administración inadecuada de contingencias,

pudo influir en que las personas empezaran a

presentar conflicto al interior de su pareja por las

diferencias existentes entre ellos.

MANTENIMIENTO:

Posiblemente, los conflictos entre la pareja se

siguen presentando por la presentación de las

contingencias directas que se presentan

actualmente. Las cuales están determinadas por dos

patrones de comportamiento, los patrones de

comportamientos negativos (deprivación de un

reforzamiento, y/o la exposición a una estimulación

aversiva) y los patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los comportamientos

de interacción negativa mutua y los

comportamientos de retirada).

Unidad de análisis:

Insatisfacción de pareja: Es la forma en que la persona percibe su propio matrimonio

respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad (nivel de malestar) en un punto en

el tiempo, dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(cercanía/distancia, control/responsabilidad, tu no me amas/yo sí te amo y el artista/el

científico), lo cual genera conflicto entre la pareja. Está determinada por la presentación

patrones de comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero,

como los:

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 211

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos de deprivación de

un reforzamiento, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable para la persona; la exposición a una

estimulación aversiva, el cual se presenta cuando una situación se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona; y los dos patrones al mismo tiempo, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo o desagradable para la persona.

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción.

Hipótesis explicativa.

La pareja 5, presenta insatisfacción de pareja, la cual es entendida como la evaluación

que cada uno de los compañeros realiza sobre el nivel de insatisfacción, de acuerdo a los

temas de conflicto (Cercanía-distancia, Control y responsabilidad, Tú no me amas. - Yo si

te amo, eres tú la que no me ama y El artista/el científico) que se presentan en la pareja;

esas diferencias están determinadas por patrones de comportamientos que tienen la

tendencia de modificar el comportamiento del compañero, estos son los patrones de

comportamientos negativos, en donde uno o los dos compañeros están deprivados de

reforzamiento y/o expuestos a una estimulación aversiva, como por los patrones de

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 212

comportamiento de polarización, donde los compañeros presentan comportamientos de

evitación mutua, de interacción negativa mutua y el patrón de retirada; incrementando aún

más el conflicto. Esto lleva a la pareja a una trampa mutua, donde cada uno de los

miembros presentan un estado de desesperanza de que las cosas no van a cambiar.

Este problema pudo ser predispuesto por las diferencias individuales, las diferencias en

la crianza de cada uno, las diferencias en las dinámicas familiares y la infidelidad de parte

de él en el pasado. Se adquirió por la administración inadecuada de contingencias y se

mantiene por la presentación de las contingencias directas que se presentan actualmente.

Estas contingencias son los patrones de comportamientos negativos y los patrones de

comportamientos de polarización.

Pareja número 6.

Análisis descriptivo del caso clínico.

Para poder entender los componentes generales de un caso clínico, es necesario

operacionalizar el motivo de consulta, describir tanto la historia actual (evaluación

sincrónica), como la historia pasada o de aprendizaje (evaluación diacrónica) del

consultante. Estos dos tipos de evaluaciones, permitieron obtener cuales son los factores de

adquisición y de mantenimiento de la conducta problema del consultante. Se inicia con la

descripción y operacionalización del motivo de consulta.

Descripción y operacionalización del motivo de consulta.

El motivo de consulta con el cual llegó la pareja, se clasificó de acuerdo a los temas de

conflictos, donde se observan los patrones de comportamientos negativos, los cuales son:

1. Cercanía-distancia, ella quiere que él sea más cercano, detallista y dedique más

tiempo a la pareja, “el no da tanto como yo, en un principio de la relación lo hacía pero

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 213

ahora no da nada, no me llama ni está pendiente de las fechas importantes ni del día a día

conmigo”, ella siente que a veces no demuestra interés por ella y la relación. Él afirma que

a veces le cansa que ella todo el tiempo lo esté llamando, le dé constantemente detalles,

“me gustaría que no fuera tan dependiente de mi y que me diera un poco de espacio, sin que

se pusiera brava o molesta, a veces es exageradamente tierna”, él se refiere a las

manifestaciones y dice que puede ser molesto para las otras personas, no discrimina los

contextos para esas manifestaciones o lo que le dice.

2. Control y responsabilidad, ella afirma que “él espera a que yo de el primer paso no da

la pauta de buscar, no colabora y no hace las cosas cuando toca como tener la cama,

algunos trabajos, todo toca rogarle para que lo haga”, ella piensa que es injusto porque a

ella le toca sacrificar tiempo con su familia mientras que él no. En las situaciones donde

están peleando, ella afirma: “él siempre quiere tener el control, simplemente o me debo

callar o él se va, me siento a veces sometida a lo que él quiere hacer, o si no la opción más

fácil para él es terminarme”. Él afirma que a ella le gusta que hagan las cosas como y

cuándo ella quiere, si quiere pelear en frente de todo el mundo lo hace y no le importa

como yo me sienta o lo que piensen los demás. Adicionalmente, manifiesta que si ella

quiere que él haga algo, se vuelve incisiva en el tema “me lo repite tantas veces, que le

termino diciendo que si para que no siga o me pongo bravo y la amenazo con que

terminemos”.

3. Tú no me amas. - Yo si te amo, eres tú la que no me ama, ella afirma que él ya no la

quiere, porque no le demuestra interés ni en ella ni en la relación, ella afirma

“constantemente le pregunto si ya no me quiere porque ya no es detallista, ya no me llama y

en sí porque cambió desde el inicio de la relación hasta hoy”. Él afirma que él siente, que

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 214

ella ya no l quiere, porque “siento que la relación a veces me ahoga, que no me deja hacer

las cosas quiero, y si le digo algo me sale con que yo ya no la quiero, por eso también le

digo constantemente que terminemos”.

4. El artista y el científico, él afirma que ella es impulsiva, “ella no se controla ni

siquiera enfrente de la gente, ella es muy espontánea en todo, hasta con las peleas”; él

reconoce que le gusta cuando ella le da detalles de sorpresa o le prepara una situación

sorpresa, pero afirma que eso a veces le molesta porque “no todo el tiempo debemos estar

improvisando y mucho menos cuando peleamos”. Ella afirma que él es muy racional, que le

saca la lógica a todo, a los detalles, a la relación y a las peleas; aunque ella acepta que

cuando pelean su conducta es muy impulsiva, ella afirma “a mi me gustaría que él fuera

más libre y tranquilo, que fuera más abierto y que no le diera tanta pena hacer locuras”.

El motivo de consulta, también se clasificó de acuerdos a los patrones de polarización,

los cuales son:

1. Comportamientos de evitación mutua, ella dice que la forma más fácil que él tiene

para salirse de un problema es terminándole; entonces cuando él se pone en esa posición

ella también prefiere no confrontarlo y quedarse callada. Él dice, que él prefiere dejar el

problema quieto, que si él no dice nada ante algo que le molesta no genera conflicto y por

eso se queda callado.

2. Patrón de retirada, él afirma “cuando ella empieza a pelar como una loca, yo

simplemente me quedo callado y cuando puedo me voy del sitio y la dejo a ella”. Ella dice

“cuando él empieza a recriminarme y a decirme que terminemos, a veces yo salgo

corriendo como loca y lo dejo tirado”.

3. Interacción negativa mutua, ella afirma que cuando los dos pelean el empieza a

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 215

sacarle en cara las peleas anteriores y le dice que ella no entiende donde se puede pelear y

donde no, que a ella no le importa molestar a la gente, adicionalmente le recrimina que se

comporta como loca. Mientras que él afirma que cuando los dos empiezan a pelear, ella

siempre le saca en cara que él termina por nada y empieza a confrontarlo diciéndole que le

termine como suele hacer.

Estado actual –análisis sincrónico.

Son una pareja que tienen 1 año y 2 meses de relación. Actualmente estudian la misma

carrera en la misma universidad y semestre. Se encuentran en la universidad y comparten

tiempo juntos fuera de esta; se encuentran los fines de semana y por lo general él se queda

en la casa de ella, situación que ha generado conflicto con la familia de él.

Sus amigos son principalmente comunes, aunque ella y él tienen amigos por aparte,

principalmente del colegio y del barrio. Por lo tanto, salen casi siempre juntos con sus

amigos.

Los dos, empezaron las prácticas de la universidad, motivo por el cual, se han

distanciado un poco; a ella le ha ido bien en su práctica y está contenta con esta, mientras

que a él, no le ha ido bien generando tensión y estrés tanto en él como en la pareja, él

afirma “sé que no debo desquitarme con mi novia pero es la que más me entiende y me

ayuda en cierta forma”.

La familia de ella aprueba la relación, aunque sienten que ella está muy apegada a él.

Mientras que la familia de él, se molesta porque le quita tiempo para compartir con la

familia, lo cual genera dificultades en la pareja.

Ellos afirman que la relación ha sido muy luchada y que a veces no saben si deban o no

continuar, pero que los dos saben que quieren al otro y que por eso están buscando ayuda.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 216

Ella afirma “él ha dejado de ser cariñosos, de estar pendiente de mí y por eso es que me he

vuelto más demandante de atención y lo peor es que no lo hago de la mejor manera, yo se

que lo acoso y a veces lo agobio con mis reclamos, lo único que yo quiero es estar bien con

él”.

Él afirma que él quiere intentar ser nuevamente cariñoso con ella, porque él la quiere y

sabe que ha cambiado mucho con ella, “me gustaría que desde un principio los dos

hubiéramos dado lo mismo, a veces no si se va a lograr que los dos demos igual”. Estos

conflictos han llevado a que peleen constantemente, que él ante cada discusión le diga a ella

que terminen, que ella trate de confrontarlo en cualquier momento sin medir las

consecuencias.

Historia – análisis diacrónico.

Se conocieron en la universidad, pero ella tenía novio. Cuando ella termino con su

pareja, se hizo amiga de él, empezaron a gustarse e iniciaron la relación. En ese entonces,

ella afirma “yo seguía tragada de mi ex novio entonces no daba mucho en la relación y no

estaba pendiente de los sentimientos de él”. Él afirma, que él un comienzo el estaba muy

enamorado y era muy detallista con ella, el dice “yo daba todo de mi para que ella olvidara

a su ex novio, pero poco a poco me fui cansando y deje de serlo”.

Ella, en su relación anterior, presento problemas de alcohol y drogas, el novio la

maltrataba física, psicológica y emocionalmente; motivo por el cual, ella afirma que al

principio de su relación con su novio estaba muy precavida y por eso no daba todo. Pero

que cuando empezó a enamorarse y a darse cuenta de que su pareja actual era muy diferente

a la anterior empezó a dar, “pienso que fue tarde porque yo empecé a dar cuando él dejo de

darle”.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 217

Él solamente tuvo una relación anterior a la actual, él dice que no fue tan importante y

no experimentó mucho, 2realmente he experimentado muchas cosas nuevas con mi actual

relación de pareja, pero siento que al principio fui el que daba y ahora no quiero dar mucho,

la relación ha continuado porque ella cambió mucho y me da ahora en exceso”.

Grado de afectación de la problemática.

Conducta

problema (Nombre)

Áreas de funcionamiento

afectado y gravedad

Afectación de otras

personas

Insatisfacción de

pareja

Familiar: afectación elevada

en la familia de él

Social: afectación elevada

Amigos en conjunto

Condiciones biológicas del/la consultante.

Ella tuvo problemas con el consumo de sustancias. Ella consumió drogas y alcohol. Ella

realizó un proceso de rehabilitación institucionalizada, a la cual todavía asiste a reuniones y

se cuida de recaídas. Actualmente, ella no consume, a él no le molesta y salen a divertirse.

Contexto de funcionamiento.

CONTEXTO DESCRIPCIÓN

DEL CONTEXTO

COMPORTAMIENTOS QUE SE

PRESENTAN

FAMILIAR La familia de él es

muy cercana. Se apoyan

mutuamente, les gusta

compartir tiempo junto, se

reúnen frecuentemente,

salen de paseo.

La familia de ella no

es unida, los padres están

separados, la mamá es

principalmente la que la

apoya y le ayuda

económicamente. Es una

familia muy

independiente.

A la familia de él, le molesta que él

se distancie tanto por su relación de

pareja, anteriormente ella se quedaba en

la casa de él, pero la mamá de él le dejó

claro que no le gustaba ese

comportamiento y desde entonces no se

quedan en la casa de él. Esto ha

generado problemas en la pareja, porque

ella siente que la familia de él no la

quiere.

La familia de ella, aceptan y salen

constantemente con él, él se queda en

algunas ocasiones en la casa de ella, esto

genera conflictos con la familia de él.

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 218

ACADEMICA Son estudiantes de

últimos semestres de la

carrera. Los dos están en

la misma carrera y mismo

semestre.

Los dos son dedicados

exclusivamente a sus estudios. Tienen

buen desempeño en su carrera, aunque a

veces cuando han realizado trabajos

conjuntamente, ella afirma que él a veces

le deja la carga a ella, principalmente

cuando la materia no le interesa,

terminando ella con los trabajos; esto

genera a veces conflicto en la pareja,

principalmente porque ella siente que

hace todo y que el siempre presenta

excusas como su familia o falta de

tiempo.

SOCIAL Tiene amigos en

común, los de la

universidad. Pero cada

uno, tiene también otros

amigos, del colegio y del

barrio.

A él le gusta compartir tiempo con

sus amigos más que ella, eso lo has

llevado a tener problemas en cuanto al

manejo de tiempo y planes compartidos.

Formulación de hipótesis:

PROBLEMA HIPÓTESIS

Presentación de

insatisfacción de parejas por las

diferencias que se presentan en

cada tema entre la pareja, Está

determinada por la presentación

patrones de comportamientos que

tienden a modificar el

comportamiento del compañero,

como los patrones de

comportamientos negativos

(deprivación de un reforzamiento,

y/o la exposición a una

estimulación aversiva) y los

patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los

comportamientos de interacción

negativa mutua y los

comportamientos de retirada)

PREDISPOSICIÓN:

Los factores que pueden predisponer a que esta

pareja presente conflicto son:

- Las diferencias individuales

- Las diferencias en la crianza de cada uno

- Las diferencias en las dinámicas familiares

- Problemas de consumo de sustancias por parte

de ella.

ADQUISICIÓN:

La administración inadecuada de contingencias,

pudo influir en que las personas empezaran a

presentar conflicto al interior de su pareja por las

diferencias existentes entre ellos.

MANTENIMIENTO:

Posiblemente, los conflictos entre la pareja se

siguen presentando por la presentación de las

contingencias directas que se presentan

actualmente. Las cuales están determinadas por dos

patrones de comportamiento, los patrones de

comportamientos negativos (deprivación de un

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 219

reforzamiento, y/o la exposición a una estimulación

aversiva) y los patrones de comportamientos de

polarización (evitación mutua, los comportamientos

de interacción negativa mutua y los

comportamientos de retirada).

Unidad de análisis:

Insatisfacción de pareja: Es la forma en que la persona percibe su propio matrimonio

respecto a un continuo de mayor o menor favorabilidad (nivel de malestar) en un punto en

el tiempo, dependiendo de la presentación de incompatibilidades en diferentes temas

(cercanía/distancia, control/responsabilidad, tu no me amas/yo sí te amo y el artista/el

científico), lo cual genera conflicto entre la pareja. Está determinada por la presentación

patrones de comportamientos que tienden a modificar el comportamiento del compañero,

como los:

1. Patrones de comportamientos negativos: son los comportamientos de deprivación de

un reforzamiento, el cual se presenta cuando en una situación se le está quitando o

imposibilitando la obtención de algo agradable para la persona; la exposición a una

estimulación aversiva, el cual se presenta cuando una situación se le expone a algo negativo

o desagradable para la persona; y los dos patrones al mismo tiempo, el cual se presenta

cuando en una situación se le está quitando o imposibilitando la obtención de algo

agradable pero al tiempo se le expone a algo negativo o desagradable para la persona.

2. Los patrones de comportamientos de polarización: son los comportamientos de

evitación mutua, en donde ninguno de los dos confronta una incompatibilidad abiertamente

sino que la evitan y no la discuten. Los comportamientos de interacción negativa mutua, en

donde los dos compañeros emplean ataques aversivos, interactuando con rabia, críticas,

culpas y ataques. Y los comportamientos de retirada, en donde un compañero emplea la

Terapia Conductual Integrativa de Pareja 220

interacción negativa como demandar, culpar y acusar; el otro evita y se retira de la

interacción.

Hipótesis explicativa.

La pareja 6, presenta insatisfacción de pareja, la cual es entendida como la evaluación

que cada uno de los compañeros realiza sobre el nivel de insatisfacción, de acuerdo a los

temas de conflicto (Cercanía-distancia, Control y responsabilidad, Tú no me amas. - Yo si

te amo, eres tú la que no me ama y El artista/el científico) que se presentan en la pareja;

esas diferencias están determinadas por patrones de comportamientos que tienen la

tendencia de modificar el comportamiento del compañero, estos son los patrones de

comportamientos negativos, en donde uno o los dos compañeros están deprivados de

reforzamiento y/o expuestos a una estimulación aversiva, como por los patrones de

comportamiento de polarización, donde los compañeros presentan comportamientos de

evitación mutua, de interacción negativa mutua y el patrón de retirada; incrementando aún

más el conflicto. Esto lleva a la pareja a una trampa mutua, donde cada uno de los

miembros presentan un estado de desesperanza de que las cosas no van a cambiar.

Este problema pudo ser predispuesto por las diferencias individuales, las diferencias en

la crianza de cada uno, las diferencias en las dinámicas familiares y los problemas de

consumo de sustancias por parte de ella en el pasado. Se adquirió por la administración

inadecuada de contingencias y se mantiene por la presentación de las contingencias directas

que se presentan actualmente. Estas contingencias son los patrones de comportamientos

negativos y los patrones de comportamientos de polarización.