El Aborto

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El Aborto Por Iván René Lindo Cabrales. Antes de iniciar con lo pertinente al aborto, considero conveniente a modo de reflexión la frase a continuación: “Una colectividad que con diversos pretextos se orientara hacia el aborto legalizado, iría contra los esfuerzos realizados en siglos de civilización. Se pondría al mismo tiempo fuera de las perspectivas fundamentales de la antropología cristiana y de su respeto absoluto al hombre desde el primer momento de su concepción hasta el último aliento de su vida”. (Pablo VI) Ahora entrando en materia veamos lo que es el tema en cuestión. Se llama aborto la expulsión (espontánea o provocada) del feto antes de que sea viable. La expulsión normal del feto al término de un embarazo es el parto. Si el feto se expulsa antes de tiempo (aproximadamente nueve meses), pero es viable, se denomina parto prematuro. Cuando el feto es

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El Aborto

Por Ivn Ren Lindo Cabrales.

Antes de iniciar con lo pertinente al aborto, considero conveniente a modo de reflexin la frase a continuacin: Una colectividad que con diversos pretextos se orientara hacia el aborto legalizado, ira contra los esfuerzos realizados en siglos de civilizacin. Se pondra al mismo tiempo fuera de las perspectivas fundamentales de la antropologa cristiana y de su respeto absoluto al hombre desde el primer momento de su concepcin hasta el ltimo aliento de su vida. (Pablo VI)

Ahora entrando en materia veamos lo que es el tema en cuestin.Se llama aborto la expulsin(espontnea o provocada)del feto antes de que sea viable. La expulsin normaldel feto altrmino de un embarazo es el parto. Si el feto se expulsa antes de tiempo (aproximadamente nueve meses), pero es viable, se denomina parto prematuro. Cuando el feto es expulsado antes de tiempo y no es viable, por su escaso desarrollo, se habla de aborto.

Tipos de abortoElaborto natural o espontaneo: No es provocado de manera intencional, siendo la causa ms frecuente la muerte fetal por anomalas congnitas del feto, frecuentemente genticas y en otros casos se debe a anormalidades del tracto reproductivo, o a enfermedades sistmicas de la madre o enfermedades infecciosas.

El aborto inducido: Consiste en provocar la muerte biolgica delembrinofetopara su posterior eliminacin, con o sinasistencia mdica, y en cualquier circunstancia social o legal. El aborto puede ser inducido bien sea por medicamentos (consiste en la interrupcin del desarrollo del embrin y en su eliminacin por el canal del parto, todo ello inducido por lo que suele ser una combinacin de frmacos. Solo es factible en las primeras semanas del embarazo), o bien sea quirrgico (Conjunto de tcnicas quirrgicasque tienen el fin de provocar el aborto, es decir, terminar voluntariamente elproceso gestacional).La historia del aborto indica que la interrupcin voluntaria del embarazo ha sido una prctica habitual desde hace milenios.En eldebate sobre el abortoexisten controversias de muy distinto carcter: cientficas, sanitarias, socioeconmicas,ticasy religiosasque, en parte, se recogen en los distintosordenamientos jurdicos sobre el aborto en cada pas, donde la prctica delaborto inducidopuede considerarse underechoo undelito. El debate sobre este tema el algo polmico, debido a que este busca responder el anhelo universal de la bsqueda de una vida plenamente humana. Y todos los procesos de bsqueda son especialmente aptos para suscitar utopas, apasionamientos, msticas y mesianismos. Siempre en nombre de la mayor libertad y dignidad del ser humano, admitidas como bandera de progreso y liberacin. El debate, adems, se presenta como una encrucijada propicia para el choque de valores (choque que suele llevar nos a tomar elecciones equivocadas por ser consideradas ticas bajo ciertas circunstancias). Nos encontramos con el hecho de la defensa universal del respeto a la vida norma moral aceptada generalmente por todos , pero tambin con el hecho brutal y concreto de que ese pretendido respeto choca a diario con otros valores[footnoteRef:1], tcitamente reconocidos como superiores, al menos en la circunstancia concreta. [1: Entre esos nuevos valores cabra colocar el proceso de emancipacin de la mujer, las mayores exigencias de la crianza y la educacin de los hijos, entre otros. Cabe agregar que en el curso de la polmica sobre el aborto, se ha ido insistiendo cada vez ms en el derecho a elegir para justificar tal accin.]

Por otra parte, el problema se sita en un momento de evidente secularizacin y socializacin de la tica. El razonamiento moral trata de liberarse de anteriores tutelas religiosas y, al mismo tiempo, apela con frecuencia a nuevas normatividades heternomas, como las basadas en el ordenamiento legal o bien en el consenso social.Veamos ahora dos posturas diferentes sobre el aborto a fin de conocer lo que se habla de este.

Postura liberal o permisiva (a favor del aborto).La postura liberal se resume con toda la brutalidad requerida en la siguiente frase: No hay que ver el aborto como un homicidio de una persona viva, sino la eviccin de un intruso e el cuerpo de la madre[footnoteRef:2]. Como vemos, esta postura busca interpretar los derechos del hombre como derechos de propiedad. Para los que estn a favor de la postura liberal es un hecho natural que cada individuo ejerza dominio sobre su cuerpo y sus actos (este tipo de dominio propio de los seres humanos es la propiedad[footnoteRef:3]). De todo esto resulta la visin tan permisiva del aborto, definiendo as al feto slo como un intruso, definicin en la cual no es ilgico comparar el feto con un tumor, un coagulo sanguneo o un apndice inflamado; entonces la mujer, titular de un derecho absoluto sobre su propio cuerpo, puede practicar sobre ella misma un aborto, o libremente hacer un contrato con un hombre del oficio para que se encargue de tal operacin. Ahora bien, supongamos que el feto sea un ser humano como lo proponen los adversarios del aborto, las cosas no seran esencialmente distintas; pues el cuerpo de la mujer en cinta, en efecto, no es un bien sin dueo, apropiable por simple ocupacin: el derecho de propiedad conlleva el derecho de preservar esta propiedad contra una intrusin violenta. De esto resulta que ningn ser humano tiene el derecho de imponer a otro un gesto positivo a su favor si este no lo ha consentido previamente. Por tanto una mujer puede recurrir al aborto sin importar el momento del embarazo, el motivo o las circunstancias. [2: Diccionario de tica y filosofa moral, Tomo I, pg. 1] [3: Por ejemplo: el derecho a la libertad de expresin es el derecho a poseer una sala espaciosa o de alquilarla, y de hablar en ellas con la gente que atraviesa su umbral.]

Una postura conservadora (en contra del aborto).Teora de la Iglesia Catlica: la teora propuesta por la Iglesia afirma que la vida humana debe ser respetada (y protegida en consecuencia) desde el instante de su concepcin, es por esto que se argumenta que en el cigoto que surge producto de la fecundacin ya est constituida la identidad biolgica de un nuevo individuo humano.Con lo cual, segn afirma Po XII, no hay hombre alguno, autoridad humana alguna, ciencia alguna, ninguna indicacin mdica, eugnica, social, econmica o moral que pueda presentar u otorgar un ttulo jurdico vlido para disponer directa o indirecta y deliberadamente de una vida humana inocente, es decir para disponer de ella en vista de su destruccin considerada como meta, o como medio para obtener una meta que quizs en s misma no es del todo ilegtima. Es por ello que el aborto no puede ser justificado por ninguna accin tomando la primaca del principio paulino: No se har el mal para que llegue el bien (Rm. 3, 8).

Veamos ahora una reflexin tica objetiva segn Jos Romn Flecha[footnoteRef:4]. [4: Sacerdote Catlico y catedrtico de Teologa Moral, especializado en Biotica.]

La reflexin tica sobre el aborto se refiere necesariamente al valor ltimo de la vida humana, tutelado por el mandamiento bblico -y extra bblico- No matars. La vida es el primero de los derechos de la persona.Por otra parte, la persona no puede ser imaginada como una realidad distinta realmente del ser humano. Es preciso acudir de nuevo a las antiguas palabras de Tertuliano: Es ya hombre el que ha de ser hombre. Por decirlo con categoras ms actuales, el respeto a la vida del no-nacido no puede ignorar la historicidad inherente al ser humano.Pero la mencin de la conocida frase de Tertuliano puede resultar ambigua. Si se pretende despenalizar algunas situaciones especialmente dramticas no se debera acudir al falaz expediente de afirmar que lo eliminado no es todava una persona humana. Pero la postura adversa al aborto tampoco debera aferrarse a una concepcin anticuada que parece pretender que del germen humano ha de salir una persona humana. Es preciso repensar la antropologa subyacente a ambas posturas:

Pienso que en el germen est ya todo lo que en su desarrollo constituir lo que suele llamarse hombre, pero sin transformacin ninguna, slo por desarrollo. El germen es ya un ser humano. Pero no como crean los medievales (y los medievalizantes que muchas veces ignoran serlo), porque el germen sea germen de hombre, esto es, un germen de donde saldr un hombre, sino porque el germen es un hombre germinante y, por tanto, es ya formalmente y no slo virtualmente hombre. La germinacin misma es ya formalmente humana.

En nuestro tiempo hemos llegado a comprender que el respeto a la vida humana no admite discriminaciones de sexo, de libertad o esclavitud, de razas o etnias, de creencia religiosa o de afiliacin socio-poltica. En consecuencia, deber decirse que tampoco puede admitir discriminaciones de edad. No son los criterios adjetivales los que han de determinar el aprecio de la vida humana. El ser humano es una unidad a lo largo de su desarrollo histrico, como admite la Biologa: El estar en camino es inseparable de la condicin humana: estamos siempre en un proceso de avance, de realizacin personal, que nicamente concluir en el momento de nuestra muerte. Por eso, cuando se ha puesto en marcha una realidad con destino humano, tenemos que afirmar que estamos ya ante un ser, llamado a convertirse en persona en su sentido ms pleno y cuya existencia debe ser defendida. Es incoherente proclamar la inviolabilidad de la vida ya nacida y negrsela al zigoto, al embrin o al feto: en todos los casos, estamos ante una existencia que tiene un destino humano, a los que falta an mucho por avanzar en su proceso de maduracin personal, pero que ya ha iniciado la apasionante aventura de entrar en un destino humano.

En consecuencia, desde el punto de vista objetivo, hemos de mantener que el aborto constituye la supresin de la vida humana, la cual constituye el valor ontolgico y tico fundamental tanto para la existencia personal como para la convivencia social. El aborto comparte objetivamente la calificacin moral negativa debida al homicidio. Ningn ser humano es dueo de la vida de sus semejantes.