El cuidado del cuerpo mensaje

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EL CUIDAD DEL CUERPO En Génesis (1:26-30) se hace referencia a algunos de los aspectos aquí recordados en el pasaje de la creación del hombre: respecto a la forma y sus tipos «...a imagen de Dios le creó; creólos varón y hembra... », y cita funciones principales, nutrición «...comer...», metabolismo «...creced...», relación «...dominad a los peces del mar y a las aves del cielo y a todos los animales que se mueven sobre la tierra...», y reproducción «...multiplicaos...». De la consideración de la armonía que existe fuera de nosotros (el Cosmos) y la armonía que existe en nuestro propio cuerpo aún sin conocimiento absoluto de ambos, nos surge una idea de perfección en la que estamos insertos, inasequible racionalmente a nuestra limitada inteligencia. Concepto Como cuerpo físico que es, supone una masa que ocupa un volumen, está limitado en el espacio e impresiona nuestros sentidos. Biológicamente, el cuerpo es el conjunto de estructuras armónicamente integradas en una unidad morfológica y funcional que constituye el soporte físico de nuestra persona durante la vida, específicamente diferenciado en dos únicos tipos, masculino y femenino, según el carácter de nuestro propio sexo. Bajo una visión sistemática, el cuerpo humano —como los cuerpos de los animales—, está organizado en diferentes niveles según una jerarquía. Moléculas à Células à Tejidos àÓrganos Sistemas à Aparatos Formación del cuerpo humano. Dios nos hizo seres capaces de reproducirse y dejar descendencia.

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EL CUIDAD DEL CUERPO

En Génesis (1:26-30) se hace referencia a algunos de los aspectos aquí recordados en el pasaje de la creación del hombre: respecto a la forma y sus tipos «...a imagen de Dios le creó; creólos varón y hembra... », y cita funciones principales, nutrición «...comer...», metabolismo «...creced...», relación «...dominad a los peces del mar y a las aves del cielo y a todos los animales que se mueven sobre la tierra...», y reproducción «...multiplicaos...».      De la consideración de la armonía que existe fuera de nosotros (el Cosmos) y la armonía que existe en nuestro propio cuerpo aún sin conocimiento absoluto de ambos, nos surge una idea de perfección en la que estamos insertos, inasequible racionalmente a nuestra limitada inteligencia.

ConceptoComo cuerpo físico que es, supone una masa que ocupa un volumen, está limitado en el espacio e impresiona nuestros sentidos.

Biológicamente, el cuerpo es el conjunto de estructuras armónicamente integradas en una unidad morfológica y funcional que constituye el soporte físico de nuestra persona durante la vida, específicamente diferenciado en dos únicos tipos, masculino y femenino, según el carácter de nuestro propio sexo.

Bajo una visión sistemática, el cuerpo humano —como los cuerpos de los animales—, está organizado en diferentes niveles según una jerarquía.

Moléculas à Células à Tejidos àÓrganos Sistemas à Aparatos

Formación del cuerpo humano.

Dios nos hizo seres capaces de reproducirse y dejar descendencia.

Antes de que cada uno de nosotros naciéramos, Dios ya había pensado en nosotros y trazó un plan para nuestra vida. Él nos dio un cuerpo que empezó a formarse a partir del momento en que fuimos fecundamos por las células reproductoras de nuestros progenitores.

El producto de la unión de estas células se llama feto a partir de la octava semana de vida intrauterina, de formación de nuevo.[

Una vez en esta etapa el feto va desarrollando todo su cuerpo. Empiezan a formar órganos y sistemas, y pasa a fortalecerlos, progresando en su crecimiento y desarrollo como ser humano.

Luego empieza el proceso de creación de la masa encefálica, el corazón y los pulmones, también se van formando las cavidades auditivas, para finalmente formar las extremidades y los músculos y órganos restantes.

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Una vez que el bebé nace todas las estructuras que iniciaron su formación seguirán madurando en el exterior.

El desarrollo mental y motor se caracterizan por la aparición regular de un conjunto de habilidades en etapas sucesivas.

Poco a poco va incorporando el concepto de su propio cuerpo sintiéndolo como suyo propio. Y poco a poco va desarrollando dos conceptos… Corporalidad e imagen corporal.

Corporalidad: Concepto que hace alusión a la experiencia vivida. “Es mi cuerpo visto desde dentro según mis experiencias vividas”.

Imagen Corporal: Concepto aportado por el psicoanálisis que consiste en la representación mental de la superficie del cuerpo. Cada representación puede darse de una manera negativa o positiva.

Cada persona desarrollará un concepto sobre sí misma.

Mayordomos en el cuidado del cuerpo

Dios nos hizo y nos quiere tal y como somos nos cabe a nosotros demostrar gratitud y respeto a Él por hacernos así.

El cuerpo físico y psíquico junto con todas sus funciones se encuentra en perfecto equilibrio. Cabe a nosotros cuidarlo, ya que por un simple descuido podemos provocar serios daños en él.

Dios en su Palabra nos enseña de una manera muy clara como cuidar tanto de nuestro cuerpo físico como de nuestra mente.

Alimentación Para funcionar, este organismo necesita alimentos. Si lo comparamos con un automóvil podemos decir que la comida no es solamente el combustible necesario para su marcha, sino también el acero de la carrocería y el motor, el plástico de los asientos y el tablero de mandos, la goma de las cubiertas y los cables del circuito eléctrico. Pues la comida no es sólo el combustible del organismo, genera la sustancia misma de nuestro cuerpo.

Todas las células, las hormonas y las enzimas son, por lo tanto, fabricadas a partir de las moléculas contenidas en la comida.

Este proceso de transformación del alimento en células enzimas y nutrientes se hace por medio de reacciones químicas que se da dentro de nosotros.

Debemos comer de una manera equilibrada beber mucho líquido en nuestra dieta para favorecer a que todos estos procesos se lleven a cabo de una manera eficaz. Es necesaria una alimentación variada para obtener todo tipo de alimento. Nuestro cuerpo necesita carbohidratos, grasas, proteínas, y otros, pero tenemos que mantener un

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equilibrio en todos estos elementos porque de la misma forma que los necesitamos pueden volverse contra nosotros perjudicando nuestra salud.

Descanso- trabajoNuestro cuerpo fue hecho para moverse y estar activos. Todos necesitamos trabajar y tener alguna actividad y no sólo para mantener la casa y la familia sino también para sentirnos útiles, estar bien con nuestro entorno, y con nosotros mismos. El ejercicio físico y el trabajo nos hacen sentir bien como personas y como consecuencia mejorando nuestro estado anímico.

Pero como todo si nos excedemos terminamos por perjudicar a este cuerpo. Necesitamos un tiempo para nosotros y descansar. Todo tiene su tiempo. Un trabajo excesivo nos llevará a un estado de estrés que se da a partir del momento cuando se agotan las armas de defensa que tiene el sujeto para vencer a ese objetivo a cumplir. Cuando no sentimos más fuerzas para seguir adelante, es momento de recapacitar a ver lo que estoy haciendo y cambiar. En el momento en que tomamos una decisión equivocada, nuestro cuerpo va “disparar la señal de alerta” de qué manera, lo hará en forma de sobrecarga muscular. La sobrecarga mantenida llevará a un fallo en esa musculatura afectando a la articulación en la cual el músculo está inserto, llevando al sujeto a padecer posibles desgastes articulares. Pero la cuestión no sólo se queda ahí sino que también puede alterar otros músculos responsables de la respiración, entre ellos está el diafragma lo que puede llevar al sujeto a parecer continuos episodios de “falta de aire”.

Por todo esto y más, es necesario mantener el equilibrio de nuestro. Y es lo que Dios nos dice en su Palabra, Dios espera que tengamos la preocupación de buscar todo aquello que beneficia nuestro cuerpo. Eso envuelve actitudes, pensamientos, palabras, alimentación, descanso y mucho más.

La sociedad hoy en día no está preocupada con esto. No dan valor al cuerpo que Dios les ha dado. Dañándolo y a la larga van a sufrir las consecuencias y van a dar cuentas a Dios de cómo han cuidado su cuerpo.

Tenemos una responsabilidad grande en nuestras manos.