El Derrumbe Existencial de San Francisco - Yorokobu

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Fotos de cdrin / Shutterstock.com Licencia 15 DICIEMBRE, 2014

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San Francisco USA crack-up

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    15 DICIEMBRE, 2014

  • 40

    ElDerrumbeExistencialdeSanFranciscoStartups,gentrificacin,hipsters, millennials,apagan la identidadnica de la ciudadcaliforniana

    POR DANI GARCA (@DANIGARCIAUSA )

    La gran mentira de lasstartups

    Es la poca ms triste de la

    historia de esta ciudad. La

    marihuana zarandea a Marc;

    esta tarde ha fumado ms de

    lo normal. Esta es una

    ciudad romntica que est

    siendo arrasada por todo

    este rollo de la tecnologa,

    vocaliza sorprendentemente

    HOSTING OFICIAL

    TENEMOS UNA TIENDA

  • Lbien. En su silueta perenne

    con el porro y viendo a los

    Giants, este profesor

    cuarentn de escritura en

    UCSF tambalea su estatura

    antiamericana lamentndose

    de que est demasiado

    colocado, pero no le falta

    razn: San Francisco es una

    ciudad que est perdiendo

    su alma.

    a ciudad del norte

    de California se ha

    construido siempre

    sobre pioneros.

    Pocas horas despus del

    devastador terremoto de

    1906, los sanfranciscans ya

    estaban construyendo sus

    nuevas casas. Pero las

    explosiones econmicas

    siempre han sido por

    oleadas: la fiebre del oro, los

    hippies, el boom del

    puntocom y, ahora, las

    startups. Yo viv el

    puntocom y la gente de

    ahora es como ms sosa. Por

    entonces haba fiestas en

    todos lados porque los

    jvenes ganaban dinero y lo

    celebraban. Peroahora?Solo estn preocupados en

    crear proyectos, no tienen

  • tiempo para vivir. Irene,

    natural de Chicago, trabaja

    en una ONG que asiste por la

    noche a los sintechos de la

    ciudad, cerca de 6.500 segn

    reportes de las autoridades

    locales. Muchos de ellos

    duermen en SoMa (South of

    Market), la zona por

    excelencia de los techies

    desde que el gobierno de la

    ciudad respaldara hace tres

    aos un programa para traer

    Silicon Valley al corazn de

    San Francisco. Charlamos

    bajo el penetrante fro de la

    baha, en Market Street,

    donde presenciamos cmo

    son desalojados de las

    calles a las cuatro y media de

    la madrugada por

    trabajadores del

    Ayuntamiento, un par de

    horas antes de que jvenes

    millennials, la mayora

    llegados a California de otras

    partes del pas y del mundo,

    recorran estas calles para

    seguir codiciando una

    porcin de xito.

    El dinero de la

    tecnologa est

    destripando

    la personalidad,

  • esttica y carcter

    original y nico

    El movimiento

    antitecnologa empieza a

    generalizarse, especialmente

    en los habitantes nativos de

    San Francisco cabreados por

    los alquileres desorbitantes

    que han trado las startups.

    Pero sobre todo porque

    creen que todo ese dinero

    est destripando la

    personalidad y esttica

    original y nica por las que

    siempre se ha conocido a San

    Francisco, gente agradable,

    clida y con una vida laid-

    back (relajada).

    Ves a la gente de este bar?

    me dice mi amigo Isaac,

    prototipo de californiano del

    rea con predisposicin

    innata al buen rollo.

    Estamos en un bar estndar

    de Mission District, solapada

    al oeste de SoMa, un

    hervidero y referente hipster

    internacional.

    Esta no es mi gente, no me

    siento identificado.

    Programadores,

    financieros no son de aqu.Los que somos de San

    Francisco ya no podemos

  • permitirnos vivir aqu por

    esta gente.

    No tardamos en movernos

    de bar en este comienzo de la

    noche. De camino nos asalta

    a la vista un complejo de

    apartamentos de lujo que,

    arquitectnicamente,

    asesina el paisaje.

    Esta es la mierda de la que

    te hablo sube la voz, una

    macarrada de Miami Beach

    en medio de La Misin.

    Llegamos al tpico dive

    (cutre) bar americano.

    Pedimos turno para el billar y

    bebemos unas Tecates que

    sirven directamente en lata,

    cerveza mexicana y la ms

    barata en cualquier bar entre

    las varias opciones que suele

    haber. Llega Tyler, amigo de

    Isaac, clsica silueta surfera y

    clido de palabra como

    cualquier nativo del norte de

    California.

    Me cri cerca de aqu, en

    una familia de clase media

    me dice Tyler, ahora no

    puedo. Tengo 26 aos, si

    quisiera formar una familia

    an menos. No es solo el

    alquiler, son las escuelas, ir a

    un restaurante las cosasbsicas. Como otros amigos

  • de familia trabajadora, me he

    tenido que mudar a Oakland.

    Qu ha ocurrido

    con el espritu

    iconoclasta de San

    Francisco?

    San Francisco es el nuevo

    epicentro meditico de la

    innovacin, el consumo

    desatado y los alquileres

    desproporcionados. Una

    ciudad que era el campo de

    cultivo de la contracultura es

    ahora inhabitable para la

    mayora de la gente normal,

    est siendo estrangulada.

    Qu ha ocurrido con el

    espritu iconoclasta de San

    Francisco? La razn

    originaria que,

    posteriormente, ramifica en

    otras muchas: las startups.

    Las startups ya no se crean

    por ex directivos de

    Microsoft de polo y

    pantalones chinos. Todos

    somos CEO, CMO, CCOUn vagn de metro puede

    ser un sitio para hacer

    coworking. Se dice treinta

    veces al da social y veinte

    startup. Se pivota, se pivota

  • y despus se pivota. No se

    concibe una oficina sin mesa

    de ping-pong, videoconsola

    de los noventa, piscina de

    bolas, sillones en forma de

    huevo y puffs. A veces hay

    ms becarios que empleados,

    por supuesto sin pagar,

    incluso existe la figura del

    metabecario, el becario sin

    salario que aspira a un

    puesto de becario con

    salario.

    Un estereotipo general

    retratado con comicidad

    objetiva en la reciente serie

    de la HBO Silicon Valley y

    que se ha propagado con

    xito para seguir engrasando

    el sistema econmico.

    Mientras, la realidad es que

    muchas startups, que ni

    siquiera han hecho un dlar

    en ventas, han sido vendidas

    por millones (Instagram), se

    producen fiascos de 25

    millones de dlares (Clinkle)

    o algunos nios-bien

  • adiestrados por ese mensaje

    de avaricia tu trozo de

    xito en este mundo

    vocean pblicamente que les

    parece grotesco que haya

    vagabundos en la calle de su

    oficina, Market Street (unas

    declaraciones

    desafortunadas del CEO de

    AngelHack, Greg Gopman).

    Es el molde del tech bro (el

    emprendedor tecnolgico

    macho alfa) en San Francisco.

    En Nueva York, la gente de

    Wall Street saben que son

    unos capullos, les gusta. En

    Los ngeles, viven a gusto en

    su superficialidad, la

    reconocen y disfrutan. En

    San Francisco, los techies

    creen que estn salvando el

    mundo con sus startups.

    La gran mentira de las

    startups dice Marc

    encuadrando la frase sobre el

    aire con sus manos.

    Estoy en el despacho de

    Marc en UCSF. Ahora no

    est fumado por razones

    obvias y me pide consejo

    sobre cmo encarar una

    clase de escritura con

    alumnos de habla no inglesa

    mientras entremezcla

  • titulares propios de una

    persona que conoce esta

    ciudad desde hace 43 aos.

    Viene a ser lo mismo que

    los carroeros avariciosos de

    Wall Street de la Generacin

    X. Ha cambiado la forma de

    trabajar, s, pero no la fra

    ambicin por el dinero y el

    deshumanizante concepto

    del xito. Son cnicos, buscan

    una porcin de xito a costa

    de todo, y no tienen una vida

    normal con tiempo libre.

    Entre el 80-90% de

    las startups fracasan,

    mientras

    que el 44% de las

    PYMEs salen

    adelante

    Entre el 80 y 90% de startups

    fracasan en sus primeros

    aos de vida en Estados

    Unidos, mientras que el 44%

    de los pequeos y medianos

    negocios, las que se han

    llamado mi negocio de toda

    la vida, sobreviven en los

    primeros cinco aos de vida

    segn datos

    gubernamentales. Da la

    sensacin de que las startups

    no son ms que otro

  • alimento de la imparable

    rueda del neoliberalismo.

    El guin de lagentrificacin

    Nueva York es el arquetipo

    histrico, pasado y presente

    de gentrificacin, una ciudad

    que devora y marca los ciclos

    econmicos, sociales y

    culturales. Ha ocurrido

    siempre, en SoHo, Tribeca y

    Greenwich Village en los

    setenta y ochenta. Todos

    eran el epicentro de los

    bohemios y ahora son pasto

    de franquicias, boutiques de

    lujo y una lista interminable

    de apartamentos de

    famosos. Ha ocurrido

    recientemente en Brooklyn;

    el monstruo se qued sin

    alimento en Manhattan y

    cruz el East River. En poco

    ms de diez aos,

    Williamsburg ha sido

    transformado de un rea

    residencial pobre y

    adormilada de judos,

    europeos del este e hispanos

    de clase trabajadora, en

    habitantes con barba y

    tatuajes que pertenecen al

    menos a una banda, escriben

    en un blog y pasan las noches

  • desarrollando proyectos.

    Pero Nueva York no tiene

    lmites, el tsunami

    gentrificador se extiende a

    las viejas fbricas

    reconvertidas en lofts de

    Greenpoint (norte), los

    barrios residenciales y de

    clase trabajadora de East

    Williamsburg y Bushwick

    (este, sureste) y la emergente

    Fort Greene (sur) donde se

    erige el nuevo Barclays

    Center de los Brooklyn Nets,

    del que ahora todos son fans

    de toda la vida. Es, como lo

    llama Spike Lee en un

    brillante discurso, el jodido

    sndrome de Cristbal Coln.

    Incluso en Harlem, siempre

    pintado como un nido de

    peligrosidad, el 90% de sus

    habitantes de la zona este

    sufren el mismo destino.

    Como dice Spike Lee,

    la gentrificacin

    es el jodido sndrome

    de Cristbal Coln

    A da de hoy, Nueva York

    afronta una crisis de

    vagabundos peor que la

    poca de la Gran Depresin.

    Los alquileres se disparan y

  • las ayudas para desarrollo de

    inmuebles de lujo son las

    mayores en toda la historia

    de la ciudad mientras hay

    recortes en los servicios para

    los sintechos y la vivienda

    asequible ya no lo es. Se tiran

    abajo aparcamientos de

    residentes, parques

    infantiles y centros

    comunitarios para construir

    casas de lujo en ese terreno.

    En la serie Boss, bajo esa

    dura caricatura de la poltica

    y con el teln de fondo de

    Chicago, se plasma

    perfectamente la absorcin

    por el sistema de la gestin

    de la ciudad de nuestros das

    como un producto. Los

    ayuntamientos permiten que

    empresas privadas (bajo

    corruptelas asentadas)

    inviertan grandes sumas de

    dinero de las que, por

    supuesto, salen beneficiados.

    El hecho es que la

    gentrificacin puede afectar

    a cualquiera y casi siempre

    negativamente. No soluciona

    problemas, simplemente los

    mueve hacia fuera, incluso es

    un problema pblico de

    salud tal como reconoce el

  • Centro de Control y

    Prevencin de Enfermedades

    estadounidense (ms niveles

    de estrs, violencia, crimen y

    enfermedades mentales).

    La ciudad de

    nuestros das

    se gestiona como un

    producto

    Es San Francisco Nueva

    York?, se pregunta New

    York Mag. La avalancha

    gentrificadora hace que la

    ciudad californiana ya haya

    sobrepasado en cifras a la

    Gran Manzana en la

    categora de desorbitantes

    alquileres. Dnde se estn

    yendo los sanfranciscans? A

    East Bay, Oakland, ciudad de

    innata clase trabajadora, al

    otro lado del Bay Bridge

    donde los arrendamientos

    son ms baratos.

    Hasta en Santa Cruz estn

    notando la subida de

    precios. Santa Cruz, la

    misma de Surfin U.S.A. de los

    Beach Boys, una preciosa

    localidad costera a una hora

    y poco de San Francisco,

    sufre el terremoto de los

  • alquileres. Davy es un

    espritu californiano con

    pasaporte britnico adherido

    ya a la personalidad del

    Pacfico desde hace diez

    aos, pero no ha perdido el

    gaznate de las islas. Parece el

    hermano gemelo olvidado de

    Russell Brand. Vivir en San

    Francisco es una locura, y

    esto es una burbuja que en

    algn momento va a estallar

    por algn lado.

    La regulacin inmobiliaria y

    de los arrendamientos en la

    ciudad californiana es

    prcticamente nula, favorece

    por completo a los

    propietarios especuladores

    que, amparndose al

    laberinto legal de la llamada

    Ellis Act del estado de

    California, pueden

    desahuciar a sus inquilinos

  • sin que estos tengan

    prcticamente derechos. En

    San Francisco, los

    desahucios bajo esta ley han

    subido un 170% desde

    febrero de 2010 al

    mismomes de 2013 segn

    informes del Ayuntamiento.

    Ello desemboca, junto al

    hecho de que construir en la

    ciudad es casi imposible por

    cuestin de espacio y la cada

    vez ms atacada regulacin

    de edificios altos que

    preserva la esttica de la

    ciudad, en una oferta escasa

    a la hora de buscar

    apartamento. Es un

    escenario propio de Los

    Juegos del Hambre, como

    cita New York Mag. El smil

    no es exagerado: se puede

    escribir un libro de las

    tcnicas y trucos que emplea

    el cazador de casa entre 20 y

    35 aos, desde ponerse la

    alarma a determinadas horas

    del da (incluso de

    madrugada) porque los

    primeros que contestan a los

    anuncios de Craigslist tienen

    ms posibilidades, al uso de

    determinadas palabras en la

    descripcin de tu perfil.

  • La regulacin

    inmobiliaria de San

    Francisco

    favorece por

    completo a los

    propietarios

    especuladores

    Pero no es solo el alud de no

    saber qu hacer con la

    riqueza lo que hace a San

    Francisco ser Nueva York,

    sino el extravo de su natural

    identidad. Gotham es

    Gotham desde hace aos.

    Pero San Francisco era

    hasta hace poco esa ciudad

    a la que te mudabas porque

    eras demasiado raro para

    Los ngeles y demasiado

    vago para Nueva York. El

    sitio perfecto donde

    encajaba tu personalidad

    estrafalaria y loca, sin

    fronteras y sin pose. Ahora,

    donde haba una tienda de

    porno hay una cafetera

    donde tomarse un caf sin

    ordenador o tablet te hace

    sentir mal, una escena

    inequvoca de la Gran

    Manzana.

    Los actores del sistema

    El sistema recuper un viejo

  • concepto para asesinar su

    esencia psicpata y filosfica

    y disfrazarse con su cuerpo:

    hipster. Los hipsters

    actuales son un tipo de

    subcultura generada por el

    neoliberalismo, cuyos

    valores exaltan la reaccin

    poltica enmascarada de

    rebelin bajo una fachada de

    vicio, es decir, el postureo

    de toda la vida, como analiza

    el sonado libro de Mark

    Greif, Qu fue de lo hipster.

    La imagen que se vende del

    hipster es aquel que combate

    el comercialismo y la

    estandarizacin que nos

    define da a da, pero todo

    reducto diferenciador es una

    oportunidad comercial; la

    saciedad del sistema lo

    encontr para producirlo en

    serie porque necesitaba una

    imagen para el motor del

    desarrollo urbano y

    comercial de las ciudades,

    una tendencia de identidad y

    gustos que poder vender.

    Despus, tras la explosin de

    la burbuja del puntocom, el

    neoliberalismo necesitaba un

    nuevo ciclo para engrasar sus

    engranajes del futuro: las

    startups. Entonces,

  • inevitablemente, el mundo

    de los hipsters y las startups

    colisionan. El resultado?

    Nace un nuevo cuento: los

    millennials.

    Nos venden una

    definicin de xito y

    de sueos

    necesaria para que

    siga funcionando el

    sistema

    Los millennials son un

    grupo de 80 millones de

    personas (en Estados

    Unidos) nacidos entre 1980

    y 1996 que tiene valores

    comunes como la falta de

    autoridad, alta tolerancia,

    cercana con su familia, deseo

    de compromiso y un gran

    nivel de optimismo. Se

    cuestionan el

    funcionamiento del sistema.

    Este concepto sobre los

    millennials o generacin Y

    es cuestionable y

    propagandstico, no solo

    porque exista un molde

    prefabricado distribuido por

    los medios de masas, sino

    porque vende una definicin

    de xito y de sueos que el

    capitalismo necesita renovar

  • para que siga funcionando la

    mquina. Citando a Ignasi

    Gir sobre la ola de

    optimismo: Por lo general,

    nuestros sueos, tienden a

    ser dibujos esbozados por

    egos sobrealimentados,

    destinados a disfrazar

    carencias en lugar de activar

    virtudes Ms si basas tufelicidad en alcanzar cumbres

    en lugar de disfrutar del

    camino recorrido hasta llegar

    a ellas.

    Somos una

    generacin narcisista,

    cmoda de

    conciencia y carente

    del sentido real de

    rebelin

    Nuestra generacin es ese

    producto que cree

    cuestionar el sistema, pero

  • trabaja para l, amorfinado

    principalmente por las

    industrias culturales. Se

    canibalizan las subculturas,

    se estandarizan hasta que se

    agotan y quedamos

    dependientes del siguiente

    ciclo porque estamos

    innatamente diseados para

    necesitar algo. En San

    Francisco, hasta hace unos

    aos, podas encontrarte de

    repente tanto una librera

    anarquista como un to

    recubierto de purpurina; no

    haba un motivo o necesidad

    para que existieran ambos,

    por eso la crisis existencial y

    muerte de espritu de esta

    ciudad se debe a lo

    autntico, s, lo autntico,

    como deca Lester Bangs en

    Casi Famosos.

    Falta la gente autntica

    me dice Tyler mientras nos

    fumamos un cigarro a la

    salida de un bar en Clarion

    Alley, un emblema artstico

    de la ciudad y el reflejo de esa

    identidad genuina de los 150

    aos de San Francisco.

    Un sistema que se agota

    Los Beatles son ms

    populares que nunca. La

  • furgoneta de Volkswagen ha

    vuelto. Los hippies son ahora

    hipsters. Los derechos de los

    negros se han convertido en

    los derechos de los gays.

    Vietnam es Irak. El LSD es el

    MDMA. Carol King es Lana

    del Rey. Amy Winehouse es

    la Janis Joplin de hoy.

    Woodstock es Coachella,

    Burning Man y Bonnaroo.

    Los vinilos vuelven a ser

    vinilos. Las tiendas de discos

    son Urban Outfitters. Y JFK

    es Obama. La historia es

    eminentemente cclica.

    Todo se produce y

    consume, cada

    vez ms, en ciclos ms

    cortos

    Todo lo que vivimos ya ha

    existido, tiene otro nombre

    porque se renueva para que

    lo volvamos a necesitar, pero

    el problema es que los ciclos

    del capitalismo se van

    agotando cada vez ms

    rpido, me dice Irene. Todo

    se consume ms rpido, en

    ciclos ms cortos y masivos,

    cine, moda, msica, artebajo esquemas

    prefabricados. Hace cuatro

  • aos la tendencia era la

    moda e influencias en msica

    de los sesenta; hace dos, la

    de los ochenta; ahora se lleva

    lo grunge. Cuando la moda y

    la msica alcancen el

    presente, volver a girar el

    refrito? La creatividad

    humana es el recurso

    econmico definitivo,

    seala el economista Richard

    Florida en su teora Creative

    Class. Florida apunta que

    para el buen desarrollo

    econmico hay que estimular

    y atraer artistas,

    diseadores, arquitectospara que las ciudades

    prosperen econmicamente.

    Neoliberalismo en su ms

    plena esencia

    instrumentalizando la

    creatividad.

    Pero el resultado esta vez no

    le est saliendo tan bien al

    sistema que chupa los ciclos

    ms rpidamente. El sueo

    americano quiebra. En un

    pas que se mueve nica y

    exclusivamente por el dinero,

    el deterioro de la clase media,

    base econmica de Estados

    Unidos, es progresivo

    porque no es sostenible que

  • un hogar dedique ms del

    30% de sus ingresos a pagar

    una casa. Amrica se hace

    vieja, los millennials pierden

    su independencia porque el

    pas registra la tasa ms alta

    en cuatro dcadas de jvenes

    viviendo con sus padres, un

    concepto poco usual para

    una sociedad programada

    para dejar el hogar a los

    dieciocho aos, y la

    precariedad laboral en esta

    generacin es

    incuestionable, porque lo de

    los becarios no pagados es el

    pan de cada da como en

    Espaa.

    El sueo americano

    quiebra por el

    deterioro

    de una clase media de

    usar y tirar

    Una clase media de usar y

    tirar, la primera lnea de

    batalla del General

    Neoliberalismo. Los artistas,

  • los hipsters, las startups, los

    millennials somosnosotros. Es el modelo de

    nuestra fuerza humana,

    laboral, moral y tica. Es

    como esa escena de un

    captulo de Los Simpsons

    cuando Bart se pregunta

    dnde estar el Pequeo

    Ayudante y le viene a la

    cabeza un seor con una pala

    echando perros a una caldera

    como si se tratara de carbn

    y voceando: Ms perro!.

    El apocalipsis hipster est

    cerca canta Tulu.

    Only in San Francisco

    Tulu es un californiano de

    origen samoano que dice ser

    un sintecho.

    Dej mi trabajo de

    cocinero, era demasiado

    estrs lo dice mientras se

    bebe una cerveza y vemos el

    partido del Liverpool del que

    es fan acrrimo.

    El tema recurrente con

    cualquier nativo de San

    Francisco es sobre cmo se

    est yendo a la mierda la

    ciudad, como en Espaa es

    sobre la crisis. La gente est

    muy quemada.

  • Tulu divaga en teoras

    conspirativas, no parece

    estar en sus cabales. Lejos de

    que, con el paso de los

    minutos, me parece que Tulu

    miente ms que habla y

    cuestione la salud de su

    cerebro, los prejuicios

    quedan al lado porque este

    samoano es la pura esencia

    de ciento cincuenta aos de

    excentricismo, rareza e

    identidad nica.

    El tema recurrente

    con cualquier nativo

    es sobre cmo

    se est yendo a la

    mierda la ciudad por

    culpa de la

    tecnologa

    La hostilidad hacia la

    industria de la tecnologa

    est en cada conversacin.

    Por eso, los verdaderos

    sanfranciscans se estn

    organizando contra este

    canibalismo econmico que

    esta agrandando las

    desigualdades sociales,

    haciendo honor a sus genes

    en contra de. Los activistas

    empiezan a dar dolor de

    cabeza al alcalde Ed Lee, a

  • quien el cuchicheo de la calle

    le sita en el bolsillo de las

    startups. El grupo de accin

    Eviction Free San Francisco

    (San Francisco Sin

    Desahucios) organiza

    escraches delante de las

    casas de los propietarios de

    los apartamentos,

    apareciendo en los medios

    locales un da s y otro

    tambin.

    Al activismo ms feroz

    tampoco le hace ninguna

    gracia los Google Buses, los

    autobuses de startups

    equipados hasta el ltimo

    detalle para hacer la media

    hora de San Francisco a

    Silicon Valley lo ms cmoda

    posible a sus empleados.

    Nos tratan como nios

    pequeos. Nos recogen casi

    en casa, nos deja en el

    trabajo y a la vuelta igual. No

    tenemos que preocuparnos

    de nada, se regodea Davy,

    quien trabaja en Yahoo!

  • gracias a que su antigua

    startup fue comprada por el

    gigante estadounidense. Los

    manifestantes han

    bloqueado varias veces estos

    buses en protesta porque

    congestionan ms de lo

    normal el trfico, suben los

    alquileres de las zonas donde

    paran en ms de un 20% y

    usan paradas de autobuses

    pblicos sin pagar un solo

    dlar al erario pblico.

    Algunos han acabado con

    alguna pedrada en la ventana

    o sin neumticos.

    El movimiento

    antigentrificador que cruza el

    pas desde Nueva York a San

    Francisco pasando por

    Austin se manifiesta tambin

    con propuestas ms

    pacifistas que recuperan el

    espritu colectivista de los

    sesenta. Las comunas hippies

    del nuevo milenio son casas

    de diez-doce personas donde

    se hacen actividades

    colaborativas, se enaltece la

    creatividad y el

    emprendimiento. Hay unos

    cincuenta sitios de este tipo

    en toda la baha de San

    Francisco que, por espritu,

  • respiran la resistencia

    gentrificadora; sin embargo,

    el precio medio de la

    habitacin (1.200 dlares) es

    ms asociable a las hackers

    houses, casas que se

    encuentran fcil en Airbnb a

    las que llegan jvenes de

    todos los rincones para

    empezar a cambiar el

    mundo. Estas casas de

    hackers, como las de la serie

    Silicon Valley, son granjas de

    tech bros nica y

    exclusivamente preocupados

    por desarrollar algo, ello

    implica descender en

    prioridad las relaciones

    humanas. En una de mis

    primeras bsquedas de

    apartamento en San

    Francisco top con una de

    ellas en SoMa, donde me

    hicieron una entrevista para

    saber si era si era aceptable

    para la casa, segn rezaba el

    anuncio de Craiglist. Fui

    descartado al no ser

    demasiado geek, segn las

    palabras del llamado CEO de

    la casa, un israel de rudo

    acento al que no le

    convencieron mis

    argumentos sobre mi

    sociabilidad con los

  • vagabundos y que

    necesitaba algo barato unas

    semanas.

    El movimiento

    antigentrificador se

    manifiesta desde

    escraches hasta

    comunas de

    creatividad

    El ltimo reducto son los

    pisos de alquiler controlado,

    propietarios que mantienen

    la cordura ante la infeccin

    de la gentrificacin. Irene

    vive en uno de esos

    apartamentos, pero sabe que

    cuando a su casero no le

    quede otra opcin del pacto

    verbal que tienen, tendr que

    subir el alquiler.

    Llevo quince aos aqu y

    cuando pase, volver a

    Chicago suspira.

    Las ciudades y los barrios

    cambian, la historia lo

    prueba, en eso consiste la

    evolucin. No podemos

    congelarlos y convertirlos en

    un museo. Es imborrable el

    progreso que aporta a la

    humanidad este monstruo

    econmico, con una

    consecuente generacin de

  • empleo que cualquier ciudad

    del mundo querra. Pero ello

    no se rie con abogar por un

    crecimiento de ellas ms

    humano y natural no

    anclado en el city-branding.

    Crear ms alojamiento que

    la poblacin se pueda

    permitir es ms eficiente

    financieramente que intentar

    mantener la ciudad

    tendenciosa y con las calles

    seguras en la mente de la

    gente me comenta

    mientras me ensea algunas

    de las propuestas de la ONG

    para la que trabaja.

    Es domingo 20 de abril

    (4/20) en San Francisco, el

    da que se consume ms

    cannabis del ao y los

    fumaos brotan ms de lo

    normal. Si ya es normal de

    por s, solo puede ocurrir

    aqu. Adems es Domingo de

    Pascua. Una caravana de seis

    coches recorre la calle 24

  • pitando como si hubieran

    ganado la Copa de Europa,

    pero no, celebran que El

    Salvador Ha Resucitado

    como tienen pintado en las

    lunas de sus coches: cosas de

    esta ciudad. Hay una carrera

    de triciclos colina abajo en

    Potrero Hill (Bring Your Own

    Wheels), disfraces de las

    Tortugas Ninja, vehculos

    hechos con cubos de basura

    y carritos de beb diseados

    como triciclos espaciales: un

    domingo cualquiera en San

    Francisco. Vuelvo a casa en el

    cuadro habitual de

    personajes que es el Muni de

    la ciudad (metro-tranva), un

    colgao con auriculares

    enormes, gorra y monopatn

    baila a espasmos como

    cuando Phoebe corra por el

    parque. Mi risa y la del resto

    del vagn no es contenible.

    Mi acompaante de asiento

    me mira y me sonre: Only

    in San Francisco.

    El reportaje ampliado se

    puede encontrar en el

    fanzine homnimo en las

    libreras: Enclave de Libros

    (Madrid), La Central de

    Callao (Madrid), Arrebato

  • DANI GARCA (1 ARTCULOS)Periodista y escritor. Observador de los cambios sociales. Abogado de la

    cultura. Analista de deportes americanos en Onda Cero.

    Y LAS HISTORIAS CONTINAN

    Los relatos de Yorokobu no acaban aqu. Tenemos un par de replicantes en Facebook y Twitter.

    Y como somos gente de mundo, creamos sus clones allende los mares: Yorokobu Amrica y

    @yorokobuamerica.

    AHORA HACEMOS LIBROS!

    Ahora, Brands and Roses, responsable de Yorokobu,

    tambin edita libros. Hemos empezado con dos referencias.

    Cien Cocinas es un recorrido gastronmico por el

    Mediterrneo en el que Luis Palacio explica la historia y la

    receta de muchos de los platos ms representativos de los

    pases del viejo mar. Lo ilustra TemaBCN, estudio responsable de Ling, con ms de 30

    maravillosas infografas.

    Era Tan Suave comienza a lo bestia, con el asesinato del osito de Mimosn. A partir de ah, unasucesin de iconos publicitarios como el Gigante Verde o Mr. Proper, se reparten los papeles en

    esta novela negra escrita por Jos Luis Moro e ilustrada por Juan Daz-Faes.

    NEWSLETTER

    Libros (Madrid), La Central

    del Raval (Barcelona), y

    CCCB Laie (Barcelona). La

    presentacin del fanzine es el

    mircoles 21 de enero de

    2015 en Enclave de Libros

    (Madrid).

  • TESTIMONIOS HACKER

    En un mundo de bytes, los hackers son los

    arquitectos de la vida digital. Personas que ven la

    vida en lneas de cdigo. Clouds es un documental...

    GETAROUND: EL AIRBNB DELOS COCHES

    22 horas de media. Cada da millones de coches

    pasan el 90% de su existencia estacionados. En

    algunos casos esta cifra es mucho mayor. Tiempo

    e...

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    un ojo a la carpeta de Correo No Deseado, que a veces se pone muy quisquillosa.

    NO SE VAYA TODAVA, AN HAY MS...

    DICEN POR AH

    JUANJOMagnfico artculo (largo de ms, por poner un pero). Entre lo filosfico y lo social.

    Muy urbano.Si hay algo que me aterra del devenir de nuestro mundo es esa falta de

    gente autntica en nuestra vida cotidiana, de vivir sin identidad, del impersonalismo.

    Esto slo lo podremos cambiar entre todos. Ya no nos salvar ni el arte.

    RESPONDER

  • DANIGracias Juanjo! Es largo porque el origen es un reportaje/ensayo que est

    en formato fanzine, fsicamente es ms digerible. Al final del artculo

    puedes ver donde est por si te interesa.

    Comparto al 100% tu reflexin de resumen.

    RESPONDER

    JESSNo soy ni de Madrid ni de Barcelona y me gustara tener el

    fanzine. Se puede pedir online a alguna tienda de las que

    citaste?O a ti directamente?

    Muchas gracias y decirte que es de lo ms interesante que he

    ledo en mucho tiempo.

    RESPONDER

    DANI GARCAPues mira. Te dejo enlaces:

    http://www.arrebatolibros.com/es/libreria/?

    libroId=38972

    http://www.lacentral.com/web/book/?

    id=9788461155224

    Gracias por tus palabras!

    RESPONDER

    IBONJugosa descripcin de la tecnologa que nos rodea. Me permito ampliar el escenario

    no solo a San Francisco si no a gran parte del mbito que nos rodea: nios (de escuela

    oficial) que tienen que programar para no quedarse al margen, aplicaciones de

    smartphone (tableta de turrn de toda la vida) para absolutamente cualquier idiotez,

    en fin. De obligada lectura :)

    RESPONDER

    DANI GARCAGracias Ibon! :)

    RESPONDER

    BORIS JDARMe ha gustado mucho el reportaje pero creo que an ms la idea de distribuirlo en

    forma de fanzine. Espero que tengas mucha suerte con ello. ;)

    RESPONDER

  • DANI GARCAGracias Boris. Si te apetece comprarlo, est a 3 euros. Bueno, bonito y

    barato :)

    RESPONDER

    DARIO GARCIAViv en SF y me el artculo me afecta especialmente. Todos mis amigos estn pasndolo

    bastante mal y tenindose que mudar a otras ciudades despus de llevar toda su vida

    all :(

    RESPONDER

    DANI GARCAUna lstima, s. Yo mi ltimo piso tuve suerte en un alquiler controlado en

    Inner Sunset, pero cuando vuelva en unos meses ir a Oakland. Es una

    locura el alquiler, de media 1.500 la habitacin.

    RESPONDER

    KRESTSlo una cosa: excelente artculo!

    RESPONDER

    DANI GARCASolo una cosa: se agradece mucho

    RESPONDER

    JESSNo encuentro tienda online para comprar el fanzine con el reportaje ampliado.

    Alguien me puede ayudar?

    RESPONDER

    DANI GARCAHola Jess. Aqu tienes:

    http://www.arrebatolibros.com/es/libreria/?libroId=38972

    http://www.lacentral.com/web/book/?id=9788461155224

    RESPONDER

    Pingback: Perdn por ser moderno | The Creative RiotJAVIER BANSExcelente lectura con una vision 360.

    Que pena que aporte un toque gris al sello del pasaporte (cada da quedan menos

    sitios interesantes)

  • RESPONDER

    DANI GARCALa verdad que nunca intent que fuera pesimista. De hecho el ltimo

    captulo del artculo es positivo: Pese a todo, San Francisco sobrevive, su

    identidad.

    RESPONDER

    CRISTIAN DRAGNEAmagnifico es la palabra que utilic yo tb al postar tu articulo en mi fb.

    y deca tb Remplazar San Francisco por Berlin y el articulo seria un puetazo en el

    estomago de cualquier berlines (as es una patada a un cadver)

    Tio, tienes una lucidez que brillas y una perspectiva global como muy poquitos.

    ademas lo escribes todo con claridad y creatividad, q es lo mas difcily mi humilde aportacin a tu descripcin del monstruo neo-liberal: mientras sea legal

    q haya gente rica, mientras q de hecho a todos nos parezca eso normal, el monstruo

    seguir viviendo en formas infinitas.

    Peace!

    RESPONDER

    DANI GARCAGracias to!

    El caso de Berln requerira otro artculo, desde luego, con una clara

    explicacin de qu paso despus del Muro de Berln. Bueno, hay muchas

    cosas por ah escritas. Es algo que no me atrevera hacer porque no he

    vivido all, creo que necesitas siempre una perspectiva in town.

    RESPONDER

    DANIELInteresante artculose toma su tiempo en explicar lo cual es una novedad hoy dadonde se da por sentado que nadie lee. Me sorprende sin embargo la nostalgia del

    artculo, esa nostalgia que tambin se repite sin para por un mundo precapitalista que

    nadie conoce pero que se asume mejor, ms humano, ms natural en finquiz lonico que me sorperendo fue la escueta referencia a Richard Florida como ejemplar

    de neoliberalismohay que leer al autor, realmente llamar a Florida neoliberal es unabsurdoque instrumentaliza la creatividad, hmmm cualquier artista instrumentalizala creatividad en su obra..el autor nos quiere asustar con la palabra instrumentalizarel tambin instrumentaliza esta pgina web y a aquellos que la desarrollaronlaslgrimas y la nostalgia no le hacen ni cosquillas al capitalismocmo escriben acmismo, mejor cuntanos algo bonito.

    RESPONDER

    DANI GARCAEl tema de Florida era complicado de abordar, el texto ya en s es muy

    explicativo como dices, me tomo mi tiempo, e intent aligerarlo siempre

  • para que no fuera muy pesado, especialmente en reflexiones econmicas y

    filosficas.

    Estoy de acuerdo contigo en esa vivencia actual nostlgica, el mundo de

    antes. Y es cierto que no lo hemos vivido para valorarlo. Cualquier tiempo

    pasado fue mejor, no? El sndrome Manrique. Siempre ha pasado. Creo que,

    a nivel humano, son unos tiempos jodidos y mi opinin es que va a peor (en

    general, no en casos individuales), pesimismo? No creo. Como dijo Rust

    Cohle (True Detective): soy lo que llama la sociedad como pesimista, pero

    soy un realista.

    El tema de la instrumentalizacin me lo tienes que desarrollar ms, pero

    creo que tu idea va porque soy vctima de lo que escribo. El denucia lo que

    es, y eso dentro del texto lo reconozco, formo parte de ello

    TOTALMENTE. Pero creo que un individuo hoy es libre al ser consciente

    de ello, valorarlo y criticarlo (y si puede evitarlo de alguna manera o no

    contribuir). Soy millennial, soy hipster, he trabajado en startup, he vivido

    en un piso gentrificado, pero ser consciente de ello y no moverse como una

    oveja creo te hace libre en parte. No te hace ni mejor ni peor.

    Por ltimo, no creo que el texto sea pesimista. Te remito a la cita de Rust

    Cohle, creo que es realista, y acaba siendo optimista en el ltimo captulo.

    San Francisco se conserva, no es lo que era antes, pero sigue teniendo su

    nica manera de ser, su rareza.

    Gracias!

    RESPONDER

    NGELAparte de felicitarte por el artculo, cada vez que leo/escucho/y vivo estos temas

    siempre me queda la duda de si eso mismo no es lo que vivieron los anteriores

    habitantes de la ciudad, en este caso la llegada de la generacin beat, perturb la

    tranquilidad, los ritmos de vida, y quieras o no precios que afrontaban los abuelos de

    algunos que ahora hay en SF. Cuando la economa de una ciudad cambia, lo hace

    tambin ella misma, no se puede acusar al movimiento startup de algo que ocurre en

    todos lados, dentro de varios aos cambiar el modelo. La sociedad es cambiante,

    siempre lo ha sido, lo que se debe evitar a travs de polticas adecuadas de

    contrarrestar la mayor parte de los efectos negativos sobre las personas que vienen

    asociados a esos cambios.

    Lo que me parece interesante es ese espritu de asociacionismo que tienen all, cosa

    que en los sitios de Espaa que conozco no veo, o es excluyente.

    Felicidades

    RESPONDER

  • DANI GARCAMuy de acuerdo. De hecho puntualizo que las ciudades no podemos

    congelarlas y meterlas en un museo, todo cambia. El punto que propones

    me gusta, llevo unos meses investigando (todo poquito a poco, ya sabes)

    sobre si esto pasaba antes (que va a ser que s), pero buscando textos

    (artculos, columnas, libros) que hablen del tema, y cmo lo hacan. Muchas

    veces creo que esto no es nada nuevo, aunque metiendo el plano

    econmico, creo que el neoliberalismo le ha dado a todo una dimensin

    monstruosa. En el aspecto social y filosfico, creo que estas crisis siempre

    han existido, y ms aun escritas desde gente como nosotros, veinteaeros o

    treinteaeros.

    RESPONDER

    VICTORMi mas sincera enhorabuena por el articulo. Me considero mas lector de prensa mas

    que de literatura, y te puedo asegurar que hacia tiempo no lea algo tan fresco, tan

    excelentemente redactado y usando un enfoque tan sutil sobre el tema que has

    tratado. Sencillamente genial. Lectura recomendada sin duda alguna. Un saludo desde

    Alemania y a seguir manteniendo el nivel :-)

    RESPONDER

    DANI GARCAEs un placer leer estas cosas, esto s que es fresco de verdad :) Un saludo

    por all!

    RESPONDER

    JONhttp://www.todoporlapraxis.es/?p=2485

    RESPONDER

    PEDRO MUJICASencillamente soberbio.

    RESPONDER

    DANI GARCAGracias Pedro!

    RESPONDER

    ANDR SEBASTIANExcelente lectura, perfecta para ampliar un poquito ms la conciencia. Me encantara

    en algn momento tener ese fanzine, estara totalmente entre mis recomendaciones.

  • Saludos y agradecimientos desde Per! (:

    RESPONDER

    DANI GARCAGracias!

    En Arrebato y La Central (ambas) est online, no se si lo enviarn hasta

    Per, pregntalo. Yo creo que la Central s. Seguramente los costes de

    envo son ms que los 3euros del fanzine.

    RESPONDER

    NENRealmente interesantsimo me ha conmovido,?quees lo q nos pasa? No nos rebelamos

    contra nada. En casa criamos NINIS y as nos va la vida. Como dicen

    Shit Happens aunque no es lo que deberamos querer. Felicidades por El Derrumbe

    Existencial Mundial!!!

    RESPONDER

    DANI GARCAGracias! :)

    RESPONDER

    CARLOS IGLESIASGracias por acercarme de forma tan lcida una realidad que desconoca.

    Prometo comprarme el fanzine!

    RESPONDER

    DANI GARCAEra la idea! Gracias ;)

    RESPONDER

    DAVIDLo mismo digo, gracias a ambos. Aqui en Singapur yo si me encuentro

    cercano a esta realidad, trabajo a menudo con un grupo conocido como

    JFDI Asia, donde muchos componentes provienen de Sillicon Valley y si,

    doy fe de mucho de lo que en este articulo se dice, la diferencia es que este

    es un pais joven, en un continente bastante vacio y por lo tanto, todo este

    engendro existencial es parte ya de cultura general asiatica en lo mas

    adentro de su ser. Te invito a pasarte por aqui y observar hacia donde vael mundo en este lado del planeta amazing reality.

    RESPONDER

  • *NOMBRE *EMAIL WEBSITE

    DANI GARCASuena muy interesante, a nivel periodstico es un territorio

    poco explorado por lo que el tema es fresco. No dudes que lo

    tendr en cuenta (a ver si ahorro) y gracias por hacerme

    conocer una realidad que no conoca. Un saludo!

    RESPONDER

    CSARVivo en Tijuana y amo SF. Apenas estuve ah hace una semana. El artculo me pareci

    soberbio. En Tijuana existe (existimos) mucha banda que tenemos en SF una especie de

    modelo aspiracional de lo que debe ser una ciudad. Sin duda anhelamos todo aquello

    que la distingue como la fascinante ciudad que es, pero tambin esa vibra uber techie

    de los start ups como motor de todo lo que hay y habr. Sin duda existe una vibra muy

    positiva y propositiva en torno a esto, pero pocos se detienen a cuestionar algunos de

    los riesgos, ms all de aquello de lo ya somos vctimas y victimarios a la vez.

    Felicidades por la pieza. Saludos.

    RESPONDER

    DANI GARCAExacto Csar! Conozco el desarrollo del mundo startup en Tijuana y me

    gusta.

    Yo propongo una evolucin sostenible, algo que no cree esas

    desigualdades econmicas y sociales. Algo que no cree tanta

    homogeneidad cultural. Y sobre todo que no reste tanta autenticidad al ser

    humano, en trminos filosficos. Gente de verdad y no artificial.

    No estoy en contra de ninguna evolucin, as es el mundo, pero no de la

    forma que se hace, tan voraz.

    RESPONDER

    Pingback: El Derrumbe Existencial de San FranciscoPingback: Construyendo mercados - Yorokobu

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