EL FIEL HALCÓN

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1 Pincha en la imagen y podrás ver un video sobre los halcones. RESUMEN DE LA LECTURA: Una leyenda es un relato corto, que se basa en sucesos reales de la historia pero que cuenta una historia fantástica, imaginada. Algunas leyendas cuentan historias de caballeros medievales. En estas narraciones suelen aparecer castillos, caballeros, reyes y nobles, campesinos, cazadores, etc. ADAPTACIÓN MATERIAL DIDÁCTICO ÁREA DE LENGUA. PROYECTO “LA CASA DEL SABER” DE LA EDITORIAL SANTILLANA. 4º EDUCACIÓN PRIMARIA. ADAPTACIÓN PARA UN NCC DE 2º-3º DE EP. ANA QUEVEDO MONTES (PT DEL CEIP AMÓS DE ESCALANTE. CANTABRIA).

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TEXTO ADAPTADO PARA LA LECTURA EN EL AULA

Transcript of EL FIEL HALCÓN

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Pincha en la imagen y podrás ver un video sobre los halcones.

RESUMEN DE LA LECTURA:

Una leyenda es un relato corto, que se basa en sucesos reales de la historia

pero que cuenta una historia fantástica, imaginada.

Algunas leyendas cuentan historias de caballeros medievales. En estas

narraciones suelen aparecer castillos, caballeros, reyes y nobles, campesinos,

cazadores, etc.

ADAPTACIÓN MATERIAL DIDÁCTICO ÁREA DE LENGUA. PROYECTO “LA CASA DEL SABER” DE LA EDITORIAL SANTILLANA. 4º EDUCACIÓN PRIMARIA. ADAPTACIÓN PARA UN NCC DE 2º-3º DE EP.

ANA QUEVEDO MONTES (PT DEL CEIP AMÓS DE ESCALANTE. CANTABRIA).

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La lectura de la unidad 5 sucede también en la Edad Media. Un joven noble

tiene un halcón al que quiere mucho. A este joven le gusta ir a cazar con su

halcón (como has visto en el video). Va a descubrir que su halcón es mucho

más que un compañero de caza. ¿Quieres saber cómo lo descubre?

Hace mucho tiempo, vivió un joven noble aficionado a la caza. El joven noble

caballero se llamaba Hernando. Le gustaba pasar horas y horas en el campo

cazando con su halcón.

El halcón de Hernando era muy bonito, de color oscuro y con ojos brillantes.

Tenía una línea de plumas blancas alrededor del cuello que parecía un collar

de plumas.

Hernando tenía su halcón desde hace mucho tiempo. Desde que era un halcón

pequeñito. Lo había educado, adiestrado, enseñado a cazar y a obedecerle.

Sentía por él un cariño especial.

Cuando iban a cazar el halcón se posaba muy quieto en el brazo de Hernando.

Esperaba hasta que el caballero le daba una señal. Entonces empezaba a

volar, muy rápido y muy alto en el cielo. Cuando veía a la presa, se lanzaba en

picado sobre ella. Cuando terminaba de cazar, regresaba obediente a posarse

en el brazo de Hernando.

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Un día muy caluroso, cuando regresaban de caza,

Hernando sintió mucha sed.

Empezó a buscar una fuente.

Buscó y buscó un buen rato, hasta que por fin vio que

de una roca manaba un hilillo de agua.

El joven Hernando acercó sus manos al agua para recoger un poco y beber.

Pero…, cuando ya casi iba a beber, el halcón que estaba posado en su hombro

empezó a mover sus alas asustado. Y, de repente, salió volando.

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Hernando se asustó y se le cayó el agua que tenía entre las manos.

Hernando volvió a poner las palmas de las manos el manantial para beber. Y,

justo cuando iba a beber, el halcón se posó en su hombro con mucha fuerza. El

joven otra vez se asustó y derramó el agua.

Hernando ya se estaba enfadando de verdad. Por 3ª vez intentó beber agua

del manantial, y el halcón empezó a picotearle.

Hernando intentó librarse de él mientras decía:

¡Vaya! ¡Qué mala suerte!

¡Con la sed que tengo!

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- ¡Maldito pájaro! ¡Ya está bien! ¡Fuera de aquí! ¿Te has vuelto loco? ¡No

quiero verte nunca más!

El halcón se asustó de los gritos de Hernando y se puso muy triste. Levantó el

vuelo y se perdió en el cielo.

Hernando, todavía furioso y enfadado, se acercó otra vez al manantial. Cuando

acercaba su boca al agua para beber oyó la voz de un hombre que le gritaba:

Hernando soltó el agua. Se giró y vio a un muchacho que le decía:

- Es muy peligroso beber del manantial. ¡Ni siquiera los animales se

acercan!

En ese momento Hernando comprendió todo.

Hernando entendió que su fiel halcón le había salvado la vida. Hernando se

sintió muy triste y unas enormes lágrimas rodaron por sus mejillas pensando en

su amigo el halcón.

¡Señor, señor, no lo hagáis! ¡No

bebáis del manantial! ¡El agua

está envenenada!

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De repente, en el cielo apareció el halcón planeando en el cielo. Y, poco

después, como siempre, se posó en el hombro de Hernando.

¿Cómo te imaginas tú a Hernando y a su halcón? Dibújalos en el recuadro.