EL GATO NEGRO.

Análisis literal.

La ternura que abrigaba mi corazón era tan grande que llegaba a convertirme en objeto de burla para mis compañeros.

Me casé joven y tuve la alegría de que mi esposa compartiera mis preferencias por los animales domésticos.

Plutón era el nombre del gato que se había convertido en mi favorito y mi camarada.

Mi carácter se alteró radicalmente por culpa del alcohol.

Una noche en que volvía a casa completamente embriagado, al morderme el gato, enfurecí y le saque un ojo.

Una mañana, obrando a sangre fría, le pasé un lazo por el pescuezo y lo ahorqué en la rama de un árbol.

La misma noche del pervertido acto, se incendió mi casa y todo quedó destruido.

Tiempo después en un bar me encontré con un gato idéntico a Plutón y lo lleve a mi casa.

Al intentar matar al gato con un hacha asesine a mi esposa y escondí el cadáver en una pared.

La policía encontró el cadáver gracias a los maullidos del gato.

Análisis inferencial.

Podemos observar a un hombre cuyo carácter se ve drásticamente alterado por el alcohol, el amor por sus seres cercanos empieza a parecerle innecesario, su enfermedad llega al punto de la perversión, donde lleno de furia le quita un ojo a su mejor amigo y posteriormente lo ahorca, lo cual desencadena una serie de sucesos que terminan en la psicosis del hombre concluyendo en el asesinato de su esposa la cual a pesar de los tratos de su marido intenta protegerlo, pero ya es demasiado tarde, su cuerpo yace en la pared esperando a ser encontrado por los policías gracias al lamento del gato negro.

Análisis analógico.

Comprendiendo el texto se puede extraer muchas ideas y situaciones para reflexionar, el alcoholismo, la depresión, los tabús, la autocompasión, la ira y la tranquilidad, situaciones que comúnmente atravesamos, pero que no prestamos el mayor interés por descubrir la razo y el motivo de estas sensaciones.