El insecto que está matando a nuestras palmeras

COMISIÓN EUROPEA

El insecto que está matando a nuestras palmerasEsfuerzos de la UE para combatir al picudo rojo de las palmeras

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Esfuerzos de la UE para combatir al picudo rojo de las palmeras 3

ÍNDICE

1. INTRODUCCIÓN ...................................................................... 5

2. DESCRIPCIÓN .......................................................................... 5

3. PLANTAS HUÉSPEDES ........................................................... 5

4. IMPORTANCIA ......................................................................... 6

5. BIOLOGÍA ................................................................................. 8

6. DAÑOS Y SÍNTOMAS ............................................................. 9

7. DETECCIÓN ............................................................................ 11

8. DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA ............................................ 11

9. PRESENCIA DEL PICUDO ROJO DE LAS PALMERAS EN

LA UNIÓN EUROPEA (SITUACIÓN DEL AÑO 2010) ........ 13

Situación en Chipre ......................................................................................... 13

Situación en Grecia .......................................................................................... 13

Situación en Francia ........................................................................................ 13

Situación en Italia .............................................................................................. 13

Situación en Malta ............................................................................................ 14

Situación en Portugal ..................................................................................... 14

Situación en Eslovenia ................................................................................... 14

Situación en España ........................................................................................ 14


El insecto que está matando a nuestras palmeras4

10. ASPECTOS DE LA POLÍTICA DE LA UE .............................. 15

Medidas de emergencia ............................................................................... 15

1. Clasifi cación del picudo rojo de las palmeras:

Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) ................................................. 17

2. Lista de las plantas huéspedes sensibles ...................................... 17

3. Requisitos específi cos para las importaciones

en la UE ............................................................................................................. 19

4. Requisitos específi cos para el movimiento dentro

de la UE ............................................................................................................. 21

5. Inspecciones para comprobar la presencia o ausencia

permanente del picudo rojo de las palmeras ........................... 22

6. Demarcación de las zonas con presencia de

Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) y planes de acción

para las mismas ............................................................................................ 23

11. AYUDAS FINANCIERAS DE LA UE ..................................... 29

Ayudas económicas ....................................................................................... 29

Apoyo a la investigación .............................................................................. 29

12. RECOMENDACIONES ........................................................... 30



1

3

2

INTRODUCCIÓN

El picudo rojo (RPW) es un insecto nocivo, no originario de Europa, que

puede atacar a una amplia variedad de palmeras, como las palmeras

datileras, los cocoteros, la palmera areca y otras muchas especies pal-

máceas. Este insecto entró en el territorio comunitario a través de las

importaciones de palmeras. Se ha detectado en todos los países me-

diterráneos de la Unión Europea, provocando una gran preocupación

sobre el futuro de las palmeras en la el territorio comunitario.

DESCRIPCIÓN

Nombre científi co: Rhynchophorus ferrugineus (Olivier)

Nombres comunes: asiatic palm weevil; palm weevil; red palm weevil;

red strip weevil; coconut weevil; Picudo rojo de las palmeras (Español);

Charancon asiatique du palmier (Francés); Indomalaiischer Palmen-

Russler (Alemán).

Posición taxonómica: Insecta: Coleoptera: Curculionidae

PLANTAS HUÉSPEDES

El Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) es una plaga de las palmeras (Are-

caceae). Se considera que el insecto no representa un peligro para las

palmeras cuyo tronco tenga un diámetro en la base inferior a los cinco

centímetros. Las principales especies de palmeras en el área medite-

rránea son Phoenix dactylifera y Phoenix canariensis. Phoenix canariensis

se cultiva como planta ornamental mientras que Phoenix dactylifera es

muy apreciada por su fruto, los dátiles.



4

También se consideran susceptibles al Rhynchophorus ferrugineus

(Olivier) las siguientes especies:

Areca catechu, Arecastrum romanzoffi anum (Cham) Becc, Arenga pin-

nata, Borassus fl abellifer, Brahea armata, Butia capitata, Calamus merillii,

Caryota maxima, Caryota cumingii, Chamaerops humilis, Cocos nucife-

ra, Corypha gebanga, Corypha elata, Elaeis guineensis, Howea forsteria-

na, Jubea chilensis, Livistona australis, Livistona decipiens, Metroxylon

sagu, Oreodoxa regia, Phoenix canariensis, Phoenix dactylifera, Phoenix

theophrasti, Phoenix sylvestris, Sabal umbraculifera, Trachycarpus fortunei

y Washingtonia spp.

IMPORTANCIA

Las palmeras son árboles de una gran importancia medioambiental,

paisajística, económica y cultural para los países mediterráneos de la

UE. Las palmeras están presentes en los parques urbanos y jardines

particulares y el público está muy preocupado por su conservación.

También existen algunos palmerales que forman parte del patrimonio

cultural de la humanidad, como por ejemplo en Creta (Grecia) o en

Elche (España).



5BIOLOGÍA

El picudo rojo mide unos tres centímetros de largo. Su color rojizo

ferruginoso y su gran tamaño lo hacen inconfundible. Sus larvas ex-

cavan galerías de más de un metro de longitud en los troncos, debili-

tando a la palmera y pudiendo llegar a causar su muerte. Una palmera

puede albergar simultáneamente cientos de insectos en las diferentes

fases de su ciclo biológico. Todos los daños causados por la alimenta-

ción, tienen como resultado la destrucción de la palmera, momento

en el cual los insectos adultos se trasladan a otra planta huésped.

Sus características biológicas son uno de los principales motivos por

los que la plaga del picudo rojo se ha convertido en una de las amena-

zas más importantes para las palmeras de todo el mundo:

Es un insecto volador que recorre grandes distancias. Se ha registra- �

do la dispersión de este organismo a una distancia de más de un

kilómetro, y se han localizado, al cabo de cinco días, ejemplares mar-

cados a siete kilómetros del lugar donde fueron liberados.

Las larvas se desarrollan dentro de la palmera, destruyendo su �

sistema vascular y haciendo que se marchite y muera. En la fase

inicial de la infestación los síntomas son apenas visibles. Posterior-

mente, cuando los síntomas aparecen, son tan graves, que tienen

como resultado la muerte de la palmera.

Las hembras ponen alrededor de 300 huevos, normalmente tres �

veces al año. Huevos, larvas, pupas y aldultos pueden encontrarse

simultáneamente en la misma palmera.

Aproximadamente a los cuatro meses de la puesta ya se ha desarro- �

llado una nueva generación de insectos adultos.



CICLO BIOLÓGICO (Duración ciclo: 3 a 4 meses):

Adulto

Huevo

Larva

Pupa

60 a 90 días 3 a 5 días

45 a 60 días20 a 25 días

6DAÑOS Y SÍNTOMAS

Los daños son causados por las larvas, que perforan túneles y grandes

cavidades y pueden encontrarse en cualquier parte de la palmera. Las

larvas se alimentan del tejido en crecimiento situado en la copa, des-

truyendo la yema apical y provocando la muerte de la palmera.

Durante las primeras fases de infestación resulta muy difícil detectar la

presencia del Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) y por lo general solo

se descubre cuando la palmera está gravemente afectada. Una obser-

vación cuidadosa puede revelar una serie de señales indicadoras de la

presencia de la plaga como por ejemplo, la existencia de orifi cios en la

corona o en el tronco por los que el insecto expulsa la fi bra masticada

(por los que a veces sale un líquido viscoso de color pardo), o el sonido

crujiente producido por las larvas al alimentarse en el tronco, así como

el aspecto decaído de los folíolos y penachos de la palmera.

Los síntomas que pueden manifestarse visiblemente en las primeras

fases de la infestación incluyen la destrucción de la nueva vegetación,

el decaimiento de las hojas externas, retorcimiento de las hojas en las

axilas y un desplomado general de la corona de la palmera.



7

8

DETECCIÓN

La primera aparición del picudo rojo en Europa se registró en España

en 1996. Solamente a mediados de la década de 2000 se tuvo clara

conciencia del gran alcance de la plaga en los países del sur de Euro-

pa. La legislación correspondiente de la UE está en vigor desde 2007.

Desde esta fecha, los organismos ofi ciales de protección fi tosanitaria

de los Estados Miembros llevan a cabo detallados programas anuales

de inspección en su territorio.

DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA

El picudo rojo de las palmeras es originario de Asia meridional y

Melanesia. Desde la década de 1980 ha ampliado rápidamente su

distribución geográfi ca y hasta el momento se ha confi rmado su

presencia, como mínimo, en 45 países. Alrededor de 1985 llegó a

Arabia Saudí y a los Emiratos Árabes Unidos. Se ha detectado en

Egipto, Israel, Jordania y los territorios controlados por la Autoridad

Palestina. Se considera una plaga de importancia mundial.



Su introducción en el territorio de la Unión Europea fue accidental.

España notifi có su presencia en 1996, seguida posteriormente por

Italia en el 2004, Grecia en el 2005, Chipre y Francia en el 2006, Malta y

Portugal en el 2007 y Eslovenia en el 2009. Actualmente se encuentra

en todos los Estados Miembros de la zona mediterránea y en Portugal.



9PRESENCIA DEL PICUDO ROJO EN LA UNIÓN EUROPEA

(SITUACIÓN EN 2010)

Situación en Chipre

En Chipre, el Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) se descubrió por

primera vez en 2006. Desde entonces este organismo se ha propa-

gado hasta llegar a afectar a una amplia zona de la costa meridional

y occidental, y han aparecido brotes en varias localidades del interior.

El número de brotes ha aumentado ligeramente (2007: 47; 2008: 100;

2009: 83 y 2010: 111).

Situación en Grecia

La primera aparición ocurrió en 2005. En 2007, tres prefecturas notifi -

caron 36 brotes y 241 en 2008 (estudio parcial). En 2009 el organismo

estaba presente en once prefecturas, entre ellas por primera vez en

Creta. La plaga se ha expandido en el 2010, año en que se ha detecta-

do en 15 prefecturas.

Situación en Francia

El insecto fue visto por primera vez en 2006. Actualmente está presen-

te en Córcega (2006), Provenza-Alpes-Costa Azul (2006) y Languedoc-

Rosellón (2007). Desde 2007 la plaga se ha propagado de manera im-

portante en la Provenza, mientras que en el Languedoc la situación se

mantiene estable. En Córcega se ha observado un incremento lento, y

en 2010 se ha notifi cado un nuevo departamento donde existen bro-

tes de la plaga.

Situación en Italia

El primer brote se notifi có en 2004. El número de regiones afectadas

por el mismo pasó de cinco a trece entre 2007 y 2010, de un total de 20

regiones. La superfi cie afectada es muy extensa en algunas regiones

como Puglia, Campania, Sicilia y Lazio.



Situación en Malta

La primera aparición data de 2007. Se produjeron once brotes en 2007,

elevándose a 131 en 2008, aunque su número se redujo a 28 en 2009,

considerándose la isla de Gozo como libre de este organismo.

Situación en Portugal

Se notifi có por vez primera en 2007. En la actualidad, el Rhynchophorus

ferrugineus (Olivier) está presente en cinco regiones de Portugal conti-

nental y en la isla de Madeira. Se considera que el Algarve es la región

más contaminada. Desde 2007 la plaga se ha extendido, afectando a

un número cada vez mayor de regiones y municipios.

Situación en Eslovenia

Los primeros hallazgos de Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) se notifi -

caron en 2009. El organismo se encontró en Piran, en un jardín privado

donde estaban infestados un ejemplar de Phoenix dactylifera y cinco

de Phoenix canariensis, procedentes de Italia. En Koper también se en-

contró infestado un ejemplar de Phoenix canariensis. En 2010 no se han

registrado nuevos casos de esta plaga.

Situación en España

El primer brote se produjo en 1996 en la provincia de Granada, en la

Comunidad Autónoma de Andalucía. Hasta 2003 los brotes estuvie-

ron limitados al territorio andaluz. A partir de 2004 el organismo se

propago principalmente por la costa del mediterráneo así como por

las islas.



10ASPECTOS DE LA POLÍTICA DE LA UE

Medidas de emergencia

El principal marco legislativo del régimen fi tosanitario de la Unión Europea

es la Directiva 2000/29/CE de 8 de mayo de 2000 relativa a las medidas de

protección contra la introducción en la Comunidad de organismos noci-

vos para los vegetales o productos vegetales, y contra su propagación en

el interior de la Comunidad.

Con arreglo a esta Directiva, cuando un Estado miembro considere que

existe peligro de introducción o propagación en su territorio de un or-

ganismo nocivo no regulado por la Directiva, puede adoptar de forma

temporal cualquier medida adicional que sea necesaria para protegerse

del mismo.

El Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) no está incluido en la Directiva bá-

sica. Sin embargo, un informe de evaluación del riesgo de plagas puso

de manifi esto que este organismo específi co causa graves daños a los

árboles, con una importante mortalidad para determinadas especies ve-

getales de la familia de las Palmae, limitada a las plantas con un diámetro

del tallo en la base superior a cinco centímetros (las plantas sensibles).

Una vez constatada su rápida propagación, la Comisión, previa consulta a

los Estados Miembros, adoptó en mayo de 2007 la Decisión 2007/365/CE

con medidas de emergencia para evitar la introducción y propagación

del insecto.

Las misiones efectuadas por la Comisión en los Estados Miembros, y la in-

formación recogida por un grupos de expertos de la Comisión y de todos

los Estados Miembros afectados por el picudo rojo, han demostrado que

los resultados de la aplicación de esta Decisión no fueron plenamente

satisfactorios por lo que respecta a las medidas adoptadas en los casos

en los que se detectó la presencia de Rhynchophorus ferrugineus (Olivier).

El conjunto de la información disponible se presentó en la conferencia

internacional sobre el Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) celebrada en

España en 2010. A la luz de dicha información, la Comisión modifi có en

2010 la Decisión 2007/365/CE.

La Decisión modifi cada contiene medidas más estrictas para combatir el

picudo rojo de las palmeras.



Entre estas medidas se emergencia se incluyen las siguientes:

1. Clasifi cación del picudo rojo de las palmeras: Rhynchophorus

ferrugineus (Olivier).

2. Lista de las plantas sensibles: 23 especies y un género de palmeras.

3. Requisitos específi cos para las importaciones en la UE.

4. Requisitos específi cos para el movimiento dentro de la UE.

5. Inspecciones para comprobar la presencia o eliminación permanente

del picudo rojo de las palmeras.

6. Demarcación de las zonas de la UE con presencia de picudo rojo de

las palmeras.



1. Clasifi cación del picudo rojo de las palmeras:

Rhynchophorus ferrugineus (Olivier).

2. Listado de las plantas sensibles:

Plantas, excepto los frutos y semillas, que tengan un diámetro del tallo

en la base superior a cinco centímetros, de Areca catechu, Arecastrum

romanzoffi anum (Cham) Becc, Arenga pinnata, Borassus fl abellifer, Bra-

hea armata, Butia capitata, Calamus merillii, Caryota maxima, Caryota cu-

mingii, Chamaerops humilis, Cocos nucifera, Corypha gebanga, Corypha

elata, Elaeis guineensis, Howea forsteriana, Jubea chilensis, Livistona aus-

tralis, Livistona decipiens, Metroxylon sagu, Oreodoxa regia, Phoenix cana-

riensis, Phoenix dactylifera, Phoenix theophrasti, Phoenix sylvestris, Sabal

umbraculifera, Trachycarpus fortunei y Washingtonia spp.



3. Requisitos específi cos para las importaciones en la UE

Las plantas sensibles originarias de terceros países deberán ir acompa-

ñadas de un certifi cado fi tosanitario en el que se indique, en la rúbrica

«Declaración adicional» que dichas plantas:

a) han sido cultivadas en todo momento en un país en el que no se ha

detectado el organismo; o

b) han sido cultivadas en todo momento en una zona declarada libre

de la plaga; o

c) han sido cultivadas, durante un período de al menos un año antes

de la exportación, en un lugar de producción:

i) que esté registrado y supervisado por el servicio fi tosanitario

nacional del país de origen,



ii) donde las plantas han sido colocadas en un sitio con completa

protección física frente a la introducción del organismo o en el

cual se aplican tratamientos preventivos apropiados, y

iii) donde no se han observado signos del organismo en inspec-

ciones ofi ciales realizadas al menos cada tres meses e inme-

diatamente antes de la exportación.



4. Requisitos específi cos para el movimiento dentro de la UE

Las plantas sensibles originarias de la Comunidad o importadas en ella

únicamente podrán ser trasladadas dentro de la Comunidad si van

acompañadas de un pasaporte fi tosanitario y:

a) han sido cultivadas en todo momento en un Estado miembro o ter-

cer país en el que no se ha detectado el organismo; o

b) han sido cultivadas en todo momento en un lugar de producción

situado en una zona declarada libre de la plaga, o

c) han sido cultivadas, durante un período de dos años antes del tras-

lado, en un lugar de producción situado en un Estado miembro y,

en ese período:

i) han sido colocadas en un sitio con completa protección física

frente a la introducción del organismo o en el cual se aplican

tratamientos preventivos apropiados, y



ii) no han mostrado signos del organismo en inspecciones ofi cia-

les realizadas al menos cada tres meses;

d) o bien

d) en el caso de las plantas importadas, han sido cultivadas desde su

introducción en la Comunidad, durante un período de al menos un

año antes de su traslado, en un lugar de producción situado en un

Estado miembro y en ese período:

i) han sido colocadas en un sitio con completa protección física

frente a la introducción del organismos o en el cual se aplican

tratamientos preventivos apropiados y

ii) no han mostrado signos del organismo en inspecciones ofi cia-

les realizadas al menos cada tres meses.

5. Inspecciones para comprobar la presencia o eliminación

permanente del picudo rojo de las palmeras

Los Estados Miembros están obligados a realizar inspecciones anuales

para comprobar la presencia o ausencia del picudo rojo de las palme-

ras. Los resultados de estas inspecciones, junto con la lista de zonas de-

marcadas, se enviarán a la Comisión y a los demás Estados Miembros

a más tardar el 28 de febrero de cada año. En los Estados Miembros en

que se detectó la presencia del organismo, esta notifi cación deberá ir

acompañada de una lista actualizada de las zonas demarcadas, con su

descripción y situación (incluyendo mapas).

Los Estados Miembros deberán notifi car por escrito a la Comisión y a

los demás Estados Miembros la presencia del organismo, a más tardar

a los cinco días de su detección, en cualquier zona de su territorio don-

de previamente no se hubiera detectado.

Si en las inspecciones anuales no se detecta la presencia del organis-

mo durante tres años consecutivos, se podrá concluir que ha sido erra-

dicado de la zona en cuestión.



10 kmZona infestada

Zona tampón

Zona demarcada

6. Demarcación de las zonas con presencia de Rhynchophorus ferrugineus (Olivier) y planes de acción para las mismas

Cuando se confi rme la presencia en la zona de Rhynchophorus ferru-

gineus (Olivier), el Estado Miembro procederá a demarcar las zonas y

a aplicar el plan de acción que corresponda. Los Estados Miembros

afectados deberán notifi car estos planes a la Comisión y a los demás

Estados Miembros en el plazo de un mes. Esta notifi cación incluirá una

descripción de la zona demarcada, un mapa y el propio plan de ac-

ción.

Las zonas demarcadas constarán de las partes siguientes:

i) una zona infestada en la que se haya confi rmado la presencia

del organismo y en la que se encuentren todas las plantas sen-

sibles que muestren síntomas causados por el organismo,

ii) una zona tampón cuyo límite esté a una distancia mínima de

10 km del límite de la zona infestada.



La delimitación exacta de las zonas se basará en principios científi cos

fundados, la biología del organismo, el nivel de infestación, la época

del año y la distribución de las plantas sensibles en el Estado miembro

afectado.

El plan de acción correspondiente deberá contener una descripción

detallada de las medidas ofi ciales adoptadas para la erradicación del

organismo, así como un calendario para la puesta en práctica de cada

una de esas medidas.

Las medidas ofi ciales que deben tomarse en las zonas demarcadas de-

berán incluir:

a) las medidas oportunas encaminadas a erradicar el organismo, entre

ellas:

i) la destrucción o, si procede, el saneamiento mecánico comple-

to de las plantas sensibles afectadas,



ii) medidas para impedir la propagación del organismo durante

las operaciones de destrucción o saneamiento, aplicando tra-

tamientos químicos en las proximidades inmediatas,

iii) el tratamiento apropiado de las plantas sensibles infestadas,

iv) si procede, la captura masiva con trampas de feromonas en

las zonas infestadas,

v) si procede, la sustitución de las plantas sensibles por plantas

no sensibles,

vi) cualquier otra medida que pueda ayudar a erradicar el orga-

nismo;

b) medidas de seguimiento intensivo para detectar la presencia del

organismo con inspecciones y métodos apropiados, incluidas las

trampas de feromonas, por lo menos en las zonas infestadas;



c) cuando sea necesario, medidas específi cas para hacer frente a pe-

culiaridades o complicaciones que puedan difi cultar la adecuada

aplicación de las medidas. En particular las relacionadas con la ac-

cesibilidad y la adecuada erradicación de todas las plantas sensibles,

infestadas o presuntamente infestadas, sin importar su ubicación, su

pertenencia pública o privada ni la persona o entidad responsable.

El plan de acción deberá incluir, como mínimo, las medidas ofi ciales

mencionadas. Asimismo deberá exponer las razones en las que se

basan las medidas que vayan a ponerse en práctica, describiendo la

situación, los datos científi cos y los criterios en función de los cuales se

han escogido tales medidas.

En las zonas demarcadas en las que los resultados de las inspecciones

anuales de al menos tres años pongan de manifi esto la imposibilidad

de erradicar el organismo en el plazo de un año más, el plan de acción

se centrará primero en la contención y supresión del organismo en

la zona infestada, manteniendo la erradicación como objetivo a largo

plazo.



El plan de acción deberá ser aplicado por funcionarios técnicamente

cualifi cados o agentes u operarios cualifi cados debidamente autoriza-

dos o, al menos, bajo la supervisión directa de los organismos ofi ciales

competentes.

No será necesario defi nir una zona demarcada en los casos en que no

hay constancia anterior de la presencia del insecto y:

a) en un radio de diez kilómetros alrededor de las plantas infestadas,

la infestación se hubiera detectado únicamente en plantas pertene-

cientes a un lote de plantas sensibles;

b) dicho lote hubiera sido introducido en la zona afectada en un perío-

do anterior no superior a cinco meses, y ya hubiera estado infestado

antes de su introducción;



11

c) teniendo en cuenta los estudios científi cos, la biología del organis-

mo, el nivel de infestación, la época del año y la distribución peculiar

de las plantas sensibles en el Estado miembro afectado, no ha pro-

ducido ningún riesgo de propagación del organismo con posterio-

ridad a la introducción en la zona del lote infestado.

En tales casos, aunque los Estados Miembros deberán elaborar un plan

de acción, pueden optar por no defi nir una zona demarcada y limitar

las medidas ofi ciales a destruir las plantas infestadas, llevando a cabo

un programa intensivo de inspección en una zona de al menos diez

kilómetros, así como el seguimiento de los restos de las plantas infes-

tadas.

AYUDAS FINANCIERAS DE LA UE

Ayudas económicas

En los casos de introducción o propagación de Rhynhophorus ferrugi-

neus en la Comunidad, los Estados Miembros podrán recibir una ayuda

económica en concepto de «control fi tosanitario», destinada a cubrir

los gastos relacionados directamente con las medidas necesarias que

se hayan adoptado o que se prevean adoptar al objeto de luchar con-

tra el organismo para erradicarlo o, si ello no fuera posible, para conte-

ner su propagación.

Apoyo a la investigación

Es muy importante fomentar y coordinar la investigación y el desarro-

llo mediante programas dirigidos a la detección precoz, el control y la

erradicación de la plaga.

En este sentido, la Comisión Europea cofi nancia un proyecto de inves-

tigación específi co en el ámbito de la detección precoz, la biología y

las técnicas de control del picudo rojo de las palmeras. Este proyecto

proporcionará información esencial a las autoridades europeas y a los

Estados Miembros para mejorar las estrategias encaminadas a la erra-

dicación o control de este organismo.



12RECOMENDACIONES

Para lograr dicho control y erradicación resulta fundamental la rápida

identifi cación de las palmeras infestadas, y los síntomas visuales pue-

den ayudar a detectarlas. En las primeras fases de infestación puede

observarse hojas externas caídas, rertorcimiento de las hojas en las axi-

las y un desplomado general de la corona de hojas. Por otro lado, una

observación cuidadosa puede revelar las siguientes señales indicado-

ras de la presencia de la plaga: orifi cios en la corona o en el tronco por

los que se expulsa la fi bra masticada (que a veces destilan un líquido

viscoso de color pardo); en el tronco de la palmera es posible percibir

el sonido crujiente producido por las larvas al alimentarse, y los folíolos

y penachos presentan un aspecto decaído.

Si ve usted algún insecto o percibe alguno de los síntomas descritos

anteriormente, le rogamos que se ponga inmediatamente en contac-

to con el organismo nacional (o regional) responsable de la protección

fi tosanitaria de su país.



En Internet hay disponible información adicional en 23 lenguas sobre la Unión Europea, en la página web:http://europa.eu

Para más información sobre la salud de las plantas, véase:http://ec.europa.eu/food/plant/organisms/index_en.htm

y sobre el picudo rojo de las palmeras:http://ec.europa.eu/food/plant/organisms/emergency/index_en.htm

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Esfuerzos de la UE para combatir al picudo rojo de las palmeras

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ND-30-11-282-ES-C

En la Unión Europea, las palmeras son árboles ornamentales con un gran valor medioambiental, económico y cultural, especialmente en los países mediterráneos. El picudo rojo de las palmeras es un insecto nocivo originario de Asia oriental que llegó por vez primera a la UE en 1996, a través de palmeras importadas en España. Con los años se propagó a todos los Estados Miembros de la UE del Mediterráneo, así como a Portugal. La UE realiza esfuerzos para impedir su propagación o, aquellos lugares donde todavía es posible, llevar a cabo su erradicación.

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