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EL MUNDO, SAN JUAN, P. H — JUEVES 28 DE JULIO DE 1938...
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EL MUNDO, SAN JUAN, P. H — JUEVES 28 DE JULIO DE 1938. 5 e En torno a la Fortaleza Por E. COMBAS GlERRA Deapuéa dt la tragedia del lunes en Ponce, como consecuencia de la cual estaré obligado a permanecer breves dias recluido en mi hogar, habla que oir los comentarios de los "valientes" qua no «tuvieron por todo aquello... "Si yo hubiera estado all! salto y me fajo con los que disparaban" declan algunos... Otros hubieran hecho esto o aquello para evitar el atentado... Naturalmente, después de sabida la adi- vinanza, la solución es muy fácil... • • • No exlate la menor duda de que el gobernador Wlnship demostró -n esa ocasión que es un verdadero militar... Habla que ver la cara de indignación que puso Su Excelencia cuando un grupo de amigos > simpatizadores sujos, todos portorriqueños, se empeñaron en reti- rarlo de la tribuna, casi a rastras... Pero inmediatamente, después ríe enterarse preliminarmente de los resultados del cobarde atentado en otras personas y de lamentar lo ocurrido al coronel Irlzarry, subió nuevamente a ia tribuna, infundiendo confianza en el público, que volvió a ocupar su sitio invadiendo las orillas de la plaza pública, no sin antea naber prodigado un aplauso prolongado y entusiasta al Jefe del Ejecutivo Insular, en cuyas ropas estrujadlslmas. romo resultado riel forcejeo que estableció con sus amigos, se velan también algunas manchas de sangre de personas que resultaron heridas allí alrededor suyo... En los momentos en que el Gobernador habla ocupado nue- Asignan un policía a Teodoro Gómez Turull al salir en libertad provisional Seijo intentó escudarse detrás del chófer Ángel Santiago Mercado pero éste se escabulló. El herido cayó al segundo disparo de espaldas al pavimento y recibió allí cinco balazos más El fiscal Hernán R. Franco, al terminar la investigación del suce- so de sangre que ocurrió a las nue- vo menos veinte minutos de la ma- ñana de ayer en la prolongación de la calle Luna, cerca de la Iglesia Catedral, formuló acusación de ase- sinato genérico contra el señor Teo- doro Gómez Turull por haber mata- do a tiros al señor Jesús María \amente su puesto en el templete, apoyando sus manos sobre la ba- randilla y la mirada escrutadora hacia el público, desfilaba frente al! 2°M„ { U„J.I. jl....... «a..¿1, templete un grupo de veteranos de voluntarlos csp.no.es presididos por \ SftJSSíSSJ'S BStf proví- METÍS,? iZ^^Lt^A^ POrUht ° rgU,,0S0 - * "«*£ después. la P men. ;Lo que e« la vanidad!... Después de la tragedia, cuando ya todo volvía a encauzarse por el plan originalmente trazado, se acercó a mi un Individuo y me dijo con suma complacencia en el rostro: Olga, yo estaba aquí en el templete... Pues me alegro que haya resultado ile- so; se lo diré a Castro, nuestro corresponsal aquí en Ponce, para que lo diga «n EL MUNDO... Una de las primeta* oslas alcanzó a Va- lentín del Rio en el muslo deicrho... A su lado .>• encontraba el li- cenciado Fernando Fornarls. a quien salpicó le sangre del herido en la pierna Izquierda del pantalón... Fornarls prestó un gran servicio romo enfermero, pues ayudó a Del Rio, al traslado del coronel Irisa- rTj a la farmacia Mostoso y luego a la Clínica Dr. Pila y también a este cronista... Ro«aly y Olpl, aunque Ilesos, tenían sus ropas man- chadas también de sangre, al prestar ayuda a los heridos... • • • l.a Clínica del doctor De la Pila Iglesias prestó un excelente ser- vicio... Ks digno del ma.\or elogio la atención, solicitud y cortesías de todo el personal idóneo y amable... La clínica es espaciosa, lim- pia, clara, y está dotada de un equipo moderno y completo... Manos suaves y santas de un grupo de Hermanas de la Caridad ayudan con IU dulzura a los médicos y enfermeras portorriqueños... Y hasta la intensidad del dolor mengua y casi desaparece ante tanto carino y ante tanta bondad... La atención para el paciente es máxima... • • • l.os «iireana de Ponce fueron motivo de un disgusto conyugal entre clonada fianza fué prestada por el señor Manuel N. Miró y el doctor J. Torruellas Casáis, mediante ges- tión al efecto del abogado defensor del acusado, licenciado M. Benltez Flores. Antecedentes del caso Como recordarán nuestros lecto- res hace varias semanas, el sábado 25 de junio, por la noche, Jesús Ma- rta Seijo, conocido prestamista de la capital, abatió a tiros a su esposa Mercedes Gómez, en la residencia de ésta, calle del Sol de nuestra ca- pital. En esa ocasión Seijo fué he- rido de hala por el seftor aRamón Nieves Allcea, quien en la noche de autos Intervino en el asunto, y al mediar, se alega fué atacado por Sel.lo. Este último fué recluido en el Hospital Municipal de Santurce y al ser dado de alta en dicha ins- titución Ingresó en la cárcel de dis- trito por orden del fiscal Massari, acusado de asesinato, atentado a la vida y portación de armas, flján- una horicua \ su espo.»o continental... Ambos se encontraban en el. dolé en total una fianza de $23.500. Hace unos días Seijo salió en liber- tad provisional, al prestar la men- cionada fianza. El seftpr Teodoro Gómez Turull, hermano de la señora Gómez, esta- ba consternado por la trágica muer- te de su hermana, a quien quería entrañablemente. Milton Seijo, de trece años de temple'e y cuando sonó la primera descarga de tiros, cuando cundió el pánico, ambos se refugiaron en el zaguán del Municipio, junto con otras personas... Pero el esposo reaccionó y entonces intentó volver a la tribuna. . Fué entonces cuando la dama portorriqueña, temiendo por I» virin de su esposo, entabló una polémica... Como parecía no pederlo convencer con la palabra se le agarró al cuello... Y los dejé en esa actitua para volver al templete... Al poco rato vi allí al ca- ballero continental solo... Entonces llegó la esposa, hecha una fie- recila amable, y estableció la polémica de nuevo, mientras halaba a su esposo por un brazo... Y entonces el hombre perdió la serenidad! edad, hijo del primer matrimonió sajona y respondió iracundo a las pretensiones de su costilla... Re- del señor Seijo, quien vivía con los cuerdo haber visto a la esposa del coronel Urrutia. presa de terrible I familiares de la señora Gómez, des- espanto, preguntando en el zaguán municipal al coronel retirado Shep- pard. en inglés, si su esposo estaba herido... E: coronel Sheppard res- pondió entonces que "el marido de nadie ha sido herido"... Pero esto no pareció tranquilizar a la señora Urrutia. quien se encontraba presa de una gran excitación nerviosa... El juez Todd no perdió los espe- juelos, pero con el tiroteo se le malogró una conferencia en la resi- dencia de Pijuán, en donde hahla de discutirse con el Gobernador so- bre la vacante de juez de distrito de San Juan... Las señoras de los Alcaldes le San .luán y Mayagüez. que se encontraban en primer tér- mino en el templete. ronser\«ton su serenidad y luego acompañaron a"| sus esposos, los señores De Castro y Marín, a las ceremonias de Guá- nica. en donde se llevó a cabo la colocación de una placa conmemo- rativa de la fecha... Hubo quienes perdieron sus cajas de dientes, y como consecuencia, el apetito... Me parece que no se ha hecho todavia mención de los honores qua lo« niños del Asilo rindieron a su huen Director el coronel Luis Iri- garry... El coche fúnebre era seguido por una larga fila de automó- viles con familiares, amigos y compañeros del militar que tan ines- perada y trágica muerte recibiera... En uno de loa automóviles Iban el coronel .losé E. Colom y el comandante Antonio R. Silva, grandes amigos y también fraternos compañeros que fueron del desaparecido... Cuando la fúnebre comitiva llegó a las afueras de Cayey. en su triste \ piadosa marcha hacia San Juan, los asilados y una multitud inmensa le esperaban... Eran alredor de las diez y media de la noche... Un silencio profundísimo de meditación reinaba en aquel momento solem- ne... Hasta la salida para San Juan le acompañaron para prodigarle su más sentida despedida... 'Los asilados se colocaron en formación militar a la derecha de la carretera, presentando arma», con sus fusiles civiles .. Y continuó la triste procesión... • • • Cordell Hull quiere humanizar la guerra... El dia que la guerra se humanice dejarla de serlo... La única manera de humanizar la guerra serla mediante simulacros, entregándosele a cada parte un 'problema" para su desarrollo... El único peligro existente está en que el día que los arbitros se reúnan para hacer la "crítica", se arme la gorda y entonces dé principio la guerra verdad... • • • Hace nnoa dias que no visito la casa rosada, como describió la se- ñora Rooseselt a La Fortaleza... Pero no es difícil adivinar que Su Excelencia ha sido visitado por Infinidad de optómetras . , Lo mismo ocurrirá en las residencias de Martínez Nadal y García Méndez... El lunes, cuando a eso de las doce de la noche, pasé en auto con direc- ción a mi casa por frente a la residencia de don Rafael Martínez Nadal en Guaynabo, habla tertulia en el balcón... cuendo se presentaron al sitio de loa hechos los policías Félix Guar» rilóla, Julio Zenón Ríos y Leopoldo Gutiérrez, y minutos después el sar- gento Loyola y policías Galo Sega- rra, Amérlco Ortiz. Antonio Ramos y Erasmo López. Dos de los referi- dos guardias, con sus armas en la mano, se scercaron a proceder al arreato de Gómez, y éste levantó la suya con intención de entregarla a los agentes. Entonces, por detrás de su persona, se abalanzó el pai- sano Marcelino Clemente, alias "Gofio", quitándole el arma. Antes de que éste se alejase del sitio, el policía Guardlola procedió a qui- tarle !a pistola. Como recordarán nuestros lecto- res, en la noche de la muerte da la señora Gómez, el boxeador "Go- fio" intervino eñ la lucha entre Seijo y Nieves Allcea, y le quitó «1 arma a este último. Declaraciones de los testigos La Policía detuvo en el sitio de los hechos a todas aquellas perso- nas que presenciaron el suceso de sangre, conduciéndolos al cuartel policiaco de San Juan, en donde prestaron testimonio ante el fiscal Franco. Entre las personas que es- tuvieron presentes, en la oficina de investigación, vimos al taquí- grafo Arroyo, quien tomó para el fiscal las declaraciones; al fiscal Massari; a los fiscales especiales Palés Matos y Andréu Ribas; al capitán Rafael B. Díaz; al jefe Ja- cinto Alvarez; y al licenciado Ma- nuel Benltez Flores, abogado de- fensor de Gómez, quien oyó algu- nas de las declaraciones. Los testigos que prestaron decla- ración ayer fueron los siguientes: guardias Guardiola, Rfos y Gutié- rrez; el niño Milton Seijo, Juan F. González, Marcelino Clemente (Go- la calle, y al otro extremo de la orilla el automóvil qua él gula. Qua a esa hora vio venir por la acera a Seijo acompañado de tu hijo Milton, y cuando faltaban co- mo dos o tres yardas para ellos Vega Alta. Presenció los hechos, pero se abstuvo de hacer manifes- taciones para la Prensa, alegando que lt perjudicaba hablar sobra al caso. Andrés Sotomayor manifestó al habla aconsejado que fuera a la Policía y lo notificara, lo cual ha- bla hecho Inmediatamente el señor Gómez; que da la Policía lo envia- ron a ver al fiscal y que éste !• aconsejó que radicara en la Corte Municipal, sección segunda, una de- nuncia por caución contra Seijo. El Fiscal Franco en acción El fiscal Franco entró en acción tan pronto como tuvo conocimiento del suceso. En uno de los salones del cuartel de la Policía de San Juan fueron Interrogados por él los primeros testigos, cuyas declara- clones detallamos. El acusado Gó- mez Turrull fué conducido a la presencia de Franco tan pronto como se la aplicó la prueba de la paraflna y se le tomaron las hue- llas digitales, negándose a decla- rar. Estuvieron presentes en el Inte- rrogatorio los fiscales Massari y Palés Matos y el oficial jurídico del Departamento de Justicia, li- cenciado César Andréu Ribas. En la escena de los hechos Nuestros redactores sé traslada- ron al escenarlo de los hechos en compañía del fiscal Franco, obser- vando sobre el terreno y oyendo los relatos de algunos de los tes- tigos presenciales. Una pequefta mancha de sangre, en los adoqui- nes de la calle, marca el sitio don- de cayó el interfecto. En el escenario del suceso uno de nuestros redactores habló con el chófer Ángel Santiago, que se sal- vó milagrosamente de las balas dis- paradas a Seijo. Nos manifestó que él estaba sentado en la verja que divide la plazoleta de la Catedral con la prolongación de la calle de la Luna, que Seijo y su hijo Mil- sitio del suceso y el hospital, Seijo dio algunas muestras de vida, laa cuales deisparecieron por comple- to instantes después. El cadáver fué conducido al hos- pital municipal de San Juan, don- de se le habla de hacer la autop- sia. , El acusado sale bajo fianza, custodiado Tan pronto cerno el acusado pres- tó la fianza de diez mil dólares que le fué fijada por el delito do asesinato genérico, y la de $600 por portar armas, salió del cuartel po- liciaco de San Juan acompañado de su abogado defensor M. Benltez Flores y algunos de sus familiares y amigos. Un guardia fué asignado, para su custodia, con el objeto de proteger su vida en caso dt algu- na agresión. Informe preliminar de autopsia De la Clínica Miramar al Hospi- tal Municipal de Santurce fué con- ducido el cadáver de Seijo,- en don- de le fué practicada la autopsia por el doctor Martínez Alvarez, quien estuvo trabajando en la mis- ma hasta las siete de la noche. En el registro que se la hizo al señor Seijo, ordenado por al Fiscal, la Policía no le encontró encima arma alguna. Solamente la ocu- paron varios documentos y cartas. En un registro que la Detective hi- zo en la residencia de SeIJó, en la calle San José, los agentas da la secreta ocuparon debajo del col- chón un revólver, calibre 38, car- gado con sri s balas. En su informe preliminar de au- topsia, el doctor Martínez Alvarez participó a las autoridades poli- ciacas de las siguientes ocho heri- das de balas que, presentaba al cuerpo de Seijo: herida en la re- gión de la caja torácica, al nivel Mercedea Gomes, a quien su esposo dló muerte el dia 26 de Junio último. Teodoro Gomes Tumi, abatió a Uroa al matador de au hermana Mercedes. COST USSTO OWN « Cuestan menos porque son más duraderas, arrancan más ligero, y no fallan nunca. BAUEY'S MOTOR SERVICE CO. STOP 8 — SAN JUAN de la noche del suceso en la calle del Sol paso a vivir con un primo de su papá. Y anteayer, Seijo fué a buscar a su hijo para que fuese a vivir con él a su nueva residencia en la calle San José, pues se en- contraba muy solo y decia necesitar la compañía de Milton. Camino a desayunarse recibe la muerte Según la declaración de los tes- tigos ante el fiscal de distrito, se desprende que en la mañana de ayer, Jesús María Seijo y su hijo Milton, caminaban por la acera de la calle prolongación Luna, y ya llegando al Garage Las Monjas, de la calle Cristo, Teodoro Gómez Tu- rul, corriendo por el atrio de la Iglesia Catedral hacia el lado de la pared que sirve de división con la calle, con una pistola calibre 45, nueva, de reglamento, al acercarse a Seijo por detrás le hizo una des- carga de siete tiros, matándolo ca- si en el acto. Milton Seijo declaró al fiscal que en el preciso instante en que le preguntaba a su papá dónde iban a tomar café, oyó jos disparos, vien- do al señor Gómez disparándole a su padre. Que él (Milton) en acti- tud deaeaperada le dijo a Gómez: "Bendito, tio Teodoro, no siga dis- parando..."; paro que no oyó sus ruegos, continuando el ataque con la pistola, presenciando a tu padre caer herido al suelo. Gómez se entrega a ¡a Policía 7a Gómez habla descargado su pistola, y Seijo yacía en al suelo, fio>, Ramón Iguina, Andrés Soto- mayor, Ángel Santiago Mercado, Juana Aviles, Juana Torres, Ma- nolln Escalera, Manuel Figueroa Rivera y José M. Vélez, alias "Pon- ceño". El testigo Ángel Santiago Mer- cado dijo ser chófer de la señora viuda de Emmanuelli, y cuando «1 suceso se encontraba recostado en la pared del atrio, en la acera de acercarse hacia el sitio donde él. ae encontraba, una persona que ve- nia corriendo, en dirección hacia aquéllos, pero por el atrio, con una pistola que portaba le hizo un pri- mer disparo por detrás que s él le pareció hizo blanco en un brazo de Seijo. Que cuando éste se sintió herido trató de parapetarse con él, no lográndolo, y en momentos en que se disponía a cruzar la calle para huir, recibió otro tiro que le tumbó al pavimento, cayendo de espaldas, y estando en esta posi- ción, recibió de Gómez el resto de la descarga, que él calcula en siete disparos. Santiago Mercado continuó de- clarando que casi en el instante en que Gómez terminó de descargar su arma a* presentó "Gofio", qui- tándole la pistola, y al tratar de irse con ella del sitio llegó el po- licía Guardiola, obligándole a que le entregase el arma. La testigo Juanita Aviles oyó va- rios disparos y lo único que vio fué el cuerpo de Seijo en el suelo, y a la señora Juana Morales aten- diendo a Milton Seijo, quien se encontraba en estado sumamente nervioso. El siguiente testigo, Juan F. Gon- zález, guia oficial del Instituto de Turiamo, declaró que cuando el su- ceso se encontraba conversando con el policía Guardiola al lado de la Catedral. VIó caminando por la acera de la calle a un nombre | acompañado de un niño, y observó a otro corriendo tras él, pero a tra- vés del atrio. Presenció que le dis- paró al que Iba por la acera, ca- yendo éste de espaldas contra el pavimento, y en el suelo le hijo va- rios disparos más. Al acercarse al sitio reconoció al herido, que era Jesús M. Seijo. Declaró además el testigo que el policía Guardiola en seguida corrió hacia el sitio Je los hechos, y al llegar ordenó a "Gofio" le entregase la pistola de Gómez, y que éste con otros agen- tes procedieron al arresto del agre- sor. Manolin Escalera, dijo encontrar- se en una guagua que se dedica a la trasportación de pasajeros a fiscal que cuando el suceso se en- contraba en el Garaje Las Monjas. Solamente vio los últimos disparos que Gómez le hizo a Seijo cuando éste se encontraba de espaldas al pavimento. Marcelino Clemente, alias "Go- fio", manifestó que cuando los pri- meros disparos estaba en la Plaza de Armas, y corrió en dirección a donde procedían los mismos. Alegó que al llegar al sitio de los hechos, se le fué por detrás a Gómez y la quitó la pistola, entregándosela al policía Guardiola. El testigo José M. Vélez, alias "Ponceño". dice que subia por la calle del Cristo cuando los dispa- ros. Corrió hacia donde partían, llegando en el momento en que Gofio le quitaba el arma a Gómez. Manifestó además que entre él. Go- fio y otras personas más, subieron a Seijo al automóvil de Rafael Cór- dova Dávlla, llevándolo primero al Hospital de Medicina Tropical y luego a la Clínica Miramar, en donde dejaron el cadáver. Ramón Iguina declaró que al oír los disparos salta de una impren- ta de la calle del Cristo a tomar agua. Lo único que v'ó fué a un hombre herido en el suelo y a dos policías con sus armas en alto, en el instante de proceder al arresto del acusado. Le aplicaron ¡a prueba de la parafina El seftor Gómez Turull, complet,. mente sereno, se sometió a la prue- ba de la paraflna momentos des- pués de haber sido condecido bajo arresto al cuartel de la Policía de San Juan. La prueba, que fué aplicada a ambas manos del acusado, dio el siguiente resultado: en la mano derecha, positivo copioso en la pal- ma, el dorso y el dedo pulgar; en la mano izquierda, positivo copio- so en la palma, y pequeftos puntos de pólvora en el pulgar y en el dorso. • También se le tomaron al seftor Gómez las huellas digitales y los informes de reglamento. Joaé M. Seijo, muerto ayer a balazos en la prolongación de la calle Luna. e.H.s.i» * >S i-"-, 70 ALCrJMfJL PER VDl Pro RICODISIILLING Co. ARLt IHO, Rfi SOLAMENTE EXISTE UN ALCOHOLADO SUPERIOR 70 Habla el abogado de Gómez „ r ' En la sala donde se aplicaba la prueba de la parafina los periodis- tas entrevistaron al Ledo. Benltez Flores, abogado del seftor Gómez Turull. El licenciado Benltez Florea manifestó que su defendido le habla notificado hace unos días que habla recibido varias amena- zas del interfecto Seijo; que él le ton venían por la acera de dicha calle y que Gómez venia por ¿a plazoleta. Que cuando se iniciaron los disparos, muy cerca de él. tra- tó de ponerse a salvo, ya que una de las balas disparadas le pasó muy cerca. Interrogado sobre si Seijo hizo alguna exclamación an- tes de caer abatido por las balas, manifestó que no habla dicho una palabra. Murió en el camino al hospital Seijo fué conducido inmediata- mente después del tiroteo a la Clí- nica Miramar. donde llegó sin vi- da. Los guardias Amérlco Ortiz y Galo Segarra condujeron a Seijo en un automóvil hasta la clínica, don- de se le declaró muerto por lo* médicos. En el recorrido entre el del esternón con hemorragia deno- sa; herida en la región abdominal superior derecha; herida en la re- gión lumbal derecha; herida en la región Iliaca superior Izquierda; herida en el trocander Izquierda; herida en el costado superior Iz- quierdo; herida en el costado supe- rior derecho cerca del axila; heri- da en el antebrazo superior derecho todas las heridas con éntrala y sa- lida. Todos fueron sentencia- dos RIO DE JANEIRO, julio 27. (P. U.)—Todo* los veinticinco integra- listas (menos uno) acusados de asal- tar el Palacio presidencial de Gua- nabara el 11 de mayo recibieron sus sentencias después de un rápi- do juicio de un dia. Gonzaga, Nasclmen^to. Pereira y Lima recibieron sentencias da diez años igual que al líder de la re- vuelta, Fournler. Pero la senten- cia total de Gonzaga subió a 30 años con trabajos forzados debido a la acusación adicional de homi- cidio. Las demás sentencias fluc- tuaron entra cinco y ocho años. Los disturbios en Palestina JERUSALEN. julio 27. (P. U.)— Continúan los estallidos de bombas, tiroteos e incendios premeditados en toda Tierra Santa pomo resul- tado de la guerra tribal entra ára- bes y judíos. Una corta militar en Halfa sen- tenció doa árabes a muerte por por- tar armas da fuego. Laa ejecucio- nes tuvieron lugar poco después. En Kalkllieh una banda armada incendió la estación ferroviaria des- pués da vencer y desarmar a loa guardias y demis empleados de la estación. Los árabes apedrearon a incendiaron un camión Judio des- truyéndolo. El campamento militar de Nablus sa halla an llamas. Doa árabes perecieron apuñaleados. LA CERVEZA DE DISTINCIÓN Freiría Bnoa, * Co. Agan tea. L SÁBADO 30 Sensacional Venta de Calzado LA FAVORITA San Juan, Río Piedras y Mayagüez «.
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EL MUNDO, SAN JUAN, P. H JUEVES 28 DE JULIO DE 1938. 5
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En torno a la Fortaleza Por E. COMBAS GlERRA
Deapua dt la tragedia del lunes en Ponce, como consecuencia de la cual estar obligado a permanecer breves dias recluido en mi hogar, habla que oir los comentarios de los "valientes" qua no tuvieron por todo aquello... "Si yo hubiera estado all! salto y me fajo con los que disparaban" declan algunos... Otros hubieran hecho esto o aquello para evitar el atentado... Naturalmente, despus de sabida la adi- vinanza, la solucin es muy fcil...
No exlate la menor duda de que el gobernador Wlnship demostr
-n esa ocasin que es un verdadero militar... Habla que ver la cara de indignacin que puso Su Excelencia cuando un grupo de amigos > simpatizadores sujos, todos portorriqueos, se empearon en reti- rarlo de la tribuna, casi a rastras... Pero inmediatamente, despus re enterarse preliminarmente de los resultados del cobarde atentado en otras personas y de lamentar lo ocurrido al coronel Irlzarry, subi nuevamente a ia tribuna, infundiendo confianza en el pblico, que volvi a ocupar su sitio invadiendo las orillas de la plaza pblica, no sin antea naber prodigado un aplauso prolongado y entusiasta al Jefe del Ejecutivo Insular, en cuyas ropas estrujadlslmas. romo resultado riel forcejeo que estableci con sus amigos, se velan tambin algunas manchas de sangre de personas que resultaron heridas all alrededor suyo... En los momentos en que el Gobernador habla ocupado nue-
Asignan un polica a Teodoro Gmez Turull al salir en libertad provisional Seijo intent escudarse detrs del chfer ngel Santiago Mercado pero ste se escabull. El herido cay al segundo disparo de espaldas al pavimento y recibi all cinco balazos ms El fiscal Hernn R. Franco, al
terminar la investigacin del suce- so de sangre que ocurri a las nue- vo menos veinte minutos de la ma- ana de ayer en la prolongacin de la calle Luna, cerca de la Iglesia Catedral, formul acusacin de ase- sinato genrico contra el seor Teo- doro Gmez Turull por haber mata- do a tiros al seor Jess Mara \amente su puesto en el templete, apoyando sus manos sobre la ba- randilla y la mirada escrutadora hacia el pblico, desfilaba frente al! 2M { UJ.I. jl....... a..1,
templete un grupo de veteranos de voluntarlos csp.no.es presididos por \ SftJSSSSJ'S BStf prov-
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;Lo que e la vanidad!... Despus de la tragedia, cuando ya todo volva a encauzarse por el plan originalmente trazado, se acerc a mi un Individuo y me dijo con suma complacencia en el rostro: Olga, yo
estaba aqu en el templete... Pues me alegro que haya resultado ile- so; se lo dir a Castro, nuestro corresponsal aqu en Ponce, para que lo diga n EL MUNDO... Una de las primeta* oslas alcanz a Va- lentn del Rio en el muslo deicrho... A su lado .> encontraba el li- cenciado Fernando Fornarls. a quien salpic le sangre del herido en la pierna Izquierda del pantaln... Fornarls prest un gran servicio romo enfermero, pues ayud a Del Rio, al traslado del coronel Irisa- rTj a la farmacia Mostoso y luego a la Clnica Dr. Pila y tambin a este cronista... Roaly y Olpl, aunque Ilesos, tenan sus ropas man- chadas tambin de sangre, al prestar ayuda a los heridos...
l.a Clnica del doctor De la Pila Iglesias prest un excelente ser-
vicio... Ks digno del ma.\or elogio la atencin, solicitud y cortesas de todo el personal idneo y amable... La clnica es espaciosa, lim- pia, clara, y est dotada de un equipo moderno y completo... Manos suaves y santas de un grupo de Hermanas de la Caridad ayudan con IU dulzura a los mdicos y enfermeras portorriqueos... Y hasta la intensidad del dolor mengua y casi desaparece ante tanto carino y ante tanta bondad... La atencin para el paciente es mxima...
l.os iireana de Ponce fueron motivo de un disgusto conyugal entre
clonada fianza fu prestada por el seor Manuel N. Mir y el doctor J. Torruellas Casis, mediante ges- tin al efecto del abogado defensor del acusado, licenciado M. Benltez Flores.
Antecedentes del caso
Como recordarn nuestros lecto- res hace varias semanas, el sbado 25 de junio, por la noche, Jess Ma- rta Seijo, conocido prestamista de la capital, abati a tiros a su esposa Mercedes Gmez, en la residencia de sta, calle del Sol de nuestra ca- pital. En esa ocasin Seijo fu he- rido de hala por el seftor aRamn Nieves Allcea, quien en la noche de autos Intervino en el asunto, y al mediar, se alega fu atacado por Sel.lo. Este ltimo fu recluido en el Hospital Municipal de Santurce y al ser dado de alta en dicha ins- titucin Ingres en la crcel de dis- trito por orden del fiscal Massari, acusado de asesinato, atentado a la vida y portacin de armas, fljn-
una horicua \ su espo.o continental... Ambos se encontraban en el. dol en total una fianza de $23.500. Hace unos das Seijo sali en liber- tad provisional, al prestar la men- cionada fianza.
El seftpr Teodoro Gmez Turull, hermano de la seora Gmez, esta- ba consternado por la trgica muer- te de su hermana, a quien quera entraablemente.
Milton Seijo, de trece aos de
temple'e y cuando son la primera descarga de tiros, cuando cundi el pnico, ambos se refugiaron en el zagun del Municipio, junto con otras personas... Pero el esposo reaccion y entonces intent volver a la tribuna. . Fu entonces cuando la dama portorriquea, temiendo por I virin de su esposo, entabl una polmica... Como pareca no pederlo convencer con la palabra se le agarr al cuello... Y los dej en esa actitua para volver al templete... Al poco rato vi all al ca- ballero continental solo... Entonces lleg la esposa, hecha una fie- recila amable, y estableci la polmica de nuevo, mientras halaba a su esposo por un brazo... Y entonces el hombre perdi la serenidad! edad, hijo del primer matrimoni sajona y respondi iracundo a las pretensiones de su costilla... Re- del seor Seijo, quien viva con los cuerdo haber visto a la esposa del coronel Urrutia. presa de terrible I familiares de la seora Gmez, des- espanto, preguntando en el zagun municipal al coronel retirado Shep- pard. en ingls, si su esposo estaba herido... E: coronel Sheppard res- pondi entonces que "el marido de nadie ha sido herido"... Pero esto no pareci tranquilizar a la seora Urrutia. quien se encontraba presa de una gran excitacin nerviosa... El juez Todd no perdi los espe- juelos, pero con el tiroteo se le malogr una conferencia en la resi- dencia de Pijun, en donde hahla de discutirse con el Gobernador so- bre la vacante de juez de distrito de San Juan... Las seoras de los Alcaldes le San .lun y Mayagez. que se encontraban en primer tr- mino en el templete. ronser\ton su serenidad y luego acompaaron a"| sus esposos, los seores De Castro y Marn, a las ceremonias de Gu- nica. en donde se llev a cabo la colocacin de una placa conmemo- rativa de la fecha... Hubo quienes perdieron sus cajas de dientes, y como consecuencia, el apetito...
Me parece que no se ha hecho todavia mencin de los honores qua lo nios del Asilo rindieron a su huen Director el coronel Luis Iri- garry... El coche fnebre era seguido por una larga fila de autom- viles con familiares, amigos y compaeros del militar que tan ines- perada y trgica muerte recibiera... En uno de loa automviles Iban el coronel .los E. Colom y el comandante Antonio R. Silva, grandes amigos y tambin fraternos compaeros que fueron del desaparecido... Cuando la fnebre comitiva lleg a las afueras de Cayey. en su triste \ piadosa marcha hacia San Juan, los asilados y una multitud inmensa le esperaban... Eran alredor de las diez y media de la noche... Un silencio profundsimo de meditacin reinaba en aquel momento solem- ne... Hasta la salida para San Juan le acompaaron para prodigarle su ms sentida despedida... 'Los asilados se colocaron en formacin militar a la derecha de la carretera, presentando arma, con sus fusiles civiles .. Y continu la triste procesin...
Cordell Hull quiere humanizar la guerra... El dia que la guerra
se humanice dejarla de serlo... La nica manera de humanizar la guerra serla mediante simulacros, entregndosele a cada parte un 'problema" para su desarrollo... El nico peligro existente est en que el da que los arbitros se renan para hacer la "crtica", se arme la gorda y entonces d principio la guerra verdad...
Hace nnoa dias que no visito la casa rosada, como describi la se-
ora Rooseselt a La Fortaleza... Pero no es difcil adivinar que Su Excelencia ha sido visitado por Infinidad de optmetras . , Lo mismo ocurrir en las residencias de Martnez Nadal y Garca Mndez... El lunes, cuando a eso de las doce de la noche, pas en auto con direc- cin a mi casa por frente a la residencia de don Rafael Martnez Nadal en Guaynabo, habla tertulia en el balcn...
cuendo se presentaron al sitio de loa hechos los policas Flix Guar rilla, Julio Zenn Ros y Leopoldo Gutirrez, y minutos despus el sar- gento Loyola y policas Galo Sega- rra, Amrlco Ortiz. Antonio Ramos y Erasmo Lpez. Dos de los referi- dos guardias, con sus armas en la mano, se scercaron a proceder al arreato de Gmez, y ste levant la suya con intencin de entregarla a los agentes. Entonces, por detrs de su persona, se abalanz el pai- sano Marcelino Clemente, alias "Gofio", quitndole el arma. Antes de que ste se alejase del sitio, el polica Guardlola procedi a qui- tarle !a pistola.
Como recordarn nuestros lecto- res, en la noche de la muerte da la seora Gmez, el boxeador "Go- fio" intervino e la lucha entre Seijo y Nieves Allcea, y le quit 1 arma a este ltimo.
Declaraciones de los testigos
La Polica detuvo en el sitio de los hechos a todas aquellas perso- nas que presenciaron el suceso de sangre, conducindolos al cuartel policiaco de San Juan, en donde prestaron testimonio ante el fiscal Franco. Entre las personas que es- tuvieron presentes, en la oficina de investigacin, vimos al taqu- grafo Arroyo, quien tom para el fiscal las declaraciones; al fiscal Massari; a los fiscales especiales Pals Matos y Andru Ribas; al capitn Rafael B. Daz; al jefe Ja- cinto Alvarez; y al licenciado Ma- nuel Benltez Flores, abogado de- fensor de Gmez, quien oy algu- nas de las declaraciones.
Los testigos que prestaron decla- racin ayer fueron los siguientes: guardias Guardiola, Rfos y Guti- rrez; el nio Milton Seijo, Juan F. Gonzlez, Marcelino Clemente (Go-
la calle, y al otro extremo de la orilla el automvil qua l gula. Qua a esa hora vio venir por la acera a Seijo acompaado de tu hijo Milton, y cuando faltaban co- mo dos o tres yardas para ellos
Vega Alta. Presenci los hechos, pero se abstuvo de hacer manifes- taciones para la Prensa, alegando que lt perjudicaba hablar sobra al caso.
Andrs Sotomayor manifest al
habla aconsejado que fuera a la Polica y lo notificara, lo cual ha- bla hecho Inmediatamente el seor Gmez; que da la Polica lo envia- ron a ver al fiscal y que ste ! aconsej que radicara en la Corte Municipal, seccin segunda, una de- nuncia por caucin contra Seijo.
El Fiscal Franco en accin
El fiscal Franco entr en accin tan pronto como tuvo conocimiento del suceso. En uno de los salones del cuartel de la Polica de San Juan fueron Interrogados por l los primeros testigos, cuyas declara- clones detallamos. El acusado G- mez Turrull fu conducido a la presencia de Franco tan pronto como se la aplic la prueba de la paraflna y se le tomaron las hue- llas digitales, negndose a decla- rar.
Estuvieron presentes en el Inte- rrogatorio los fiscales Massari y Pals Matos y el oficial jurdico del Departamento de Justicia, li- cenciado Csar Andru Ribas.
En la escena de los hechos
Nuestros redactores s traslada- ron al escenarlo de los hechos en compaa del fiscal Franco, obser- vando sobre el terreno y oyendo los relatos de algunos de los tes- tigos presenciales. Una pequefta mancha de sangre, en los adoqui- nes de la calle, marca el sitio don- de cay el interfecto.
En el escenario del suceso uno de nuestros redactores habl con el chfer ngel Santiago, que se sal- v milagrosamente de las balas dis- paradas a Seijo. Nos manifest que l estaba sentado en la verja que divide la plazoleta de la Catedral con la prolongacin de la calle de la Luna, que Seijo y su hijo Mil-
sitio del suceso y el hospital, Seijo dio algunas muestras de vida, laa cuales deisparecieron por comple- to instantes despus.
El cadver fu conducido al hos- pital municipal de San Juan, don- de se le habla de hacer la autop- sia. ,
El acusado sale bajo fianza, custodiado
Tan pronto cerno el acusado pres- t la fianza de diez mil dlares que le fu fijada por el delito do asesinato genrico, y la de $600 por portar armas, sali del cuartel po- liciaco de San Juan acompaado de su abogado defensor M. Benltez Flores y algunos de sus familiares y amigos. Un guardia fu asignado, para su custodia, con el objeto de proteger su vida en caso dt algu- na agresin.
Informe preliminar de autopsia
De la Clnica Miramar al Hospi- tal Municipal de Santurce fu con- ducido el cadver de Seijo,- en don- de le fu practicada la autopsia por el doctor Martnez Alvarez, quien estuvo trabajando en la mis- ma hasta las siete de la noche.
En el registro que se la hizo al seor Seijo, ordenado por al Fiscal, la Polica no le encontr encima arma alguna. Solamente la ocu- paron varios documentos y cartas. En un registro que la Detective hi- zo en la residencia de SeIJ, en la calle San Jos, los agentas da la secreta ocuparon debajo del col- chn un revlver, calibre 38, car- gado con sris balas.
En su informe preliminar de au- topsia, el doctor Martnez Alvarez particip a las autoridades poli- ciacas de las siguientes ocho heri- das de balas que, presentaba al cuerpo de Seijo: herida en la re- gin de la caja torcica, al nivel
Mercedea Gomes, a quien su esposo dl muerte el dia 26 de Junio ltimo.
Teodoro Gomes Tumi, abati a Uroa al matador de au hermana Mercedes.
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de la noche del suceso en la calle del Sol paso a vivir con un primo de su pap. Y anteayer, Seijo fu a buscar a su hijo para que fuese a vivir con l a su nueva residencia en la calle San Jos, pues se en- contraba muy solo y decia necesitar la compaa de Milton.
Camino a desayunarse recibe la muerte
Segn la declaracin de los tes- tigos ante el fiscal de distrito, se desprende que en la maana de ayer, Jess Mara Seijo y su hijo Milton, caminaban por la acera de la calle prolongacin Luna, y ya llegando al Garage Las Monjas, de la calle Cristo, Teodoro Gmez Tu- rul, corriendo por el atrio de la Iglesia Catedral hacia el lado de la pared que sirve de divisin con la calle, con una pistola calibre 45, nueva, de reglamento, al acercarse a Seijo por detrs le hizo una des- carga de siete tiros, matndolo ca- si en el acto.
Milton Seijo declar al fiscal que en el preciso instante en que le preguntaba a su pap dnde iban a tomar caf, oy jos disparos, vien- do al seor Gmez disparndole a su padre. Que l (Milton) en acti- tud deaeaperada le dijo a Gmez: "Bendito, tio Teodoro, no siga dis- parando..."; paro que no oy sus ruegos, continuando el ataque con la pistola, presenciando a tu padre caer herido al suelo.
Gmez se entrega a a Polica
7a Gmez habla descargado su pistola, y Seijo yaca en al suelo,
fio>, Ramn Iguina, Andrs Soto- mayor, ngel Santiago Mercado, Juana Aviles, Juana Torres, Ma- nolln Escalera, Manuel Figueroa Rivera y Jos M. Vlez, alias "Pon- ceo".
El testigo ngel Santiago Mer- cado dijo ser chfer de la seora viuda de Emmanuelli, y cuando 1 suceso se encontraba recostado en la pared del atrio, en la acera de
acercarse hacia el sitio donde l. ae encontraba, una persona que ve- nia corriendo, en direccin hacia aqullos, pero por el atrio, con una pistola que portaba le hizo un pri- mer disparo por detrs que s l le pareci hizo blanco en un brazo de Seijo. Que cuando ste se sinti herido trat de parapetarse con l, no logrndolo, y en momentos en que se dispona a cruzar la calle para huir, recibi otro tiro que le tumb al pavimento, cayendo de espaldas, y estando en esta posi- cin, recibi de Gmez el resto de la descarga, que l calcula en siete disparos.
Santiago Mercado continu de- clarando que casi en el instante en que Gmez termin de descargar su arma a* present "Gofio", qui- tndole la pistola, y al tratar de irse con ella del sitio lleg el po- lica Guardiola, obligndole a que le entregase el arma.
La testigo Juanita Aviles oy va- rios disparos y lo nico que vio fu el cuerpo de Seijo en el suelo, y a la seora Juana Morales aten- diendo a Milton Seijo, quien se encontraba en estado sumamente nervioso.
El siguiente testigo, Juan F. Gon- zlez, guia oficial del Instituto de Turiamo, declar que cuando el su- ceso se encontraba conversando con el polica Guardiola al lado de la Catedral. VI caminando por la acera de la calle a un nombre | acompaado de un nio, y observ a otro corriendo tras l, pero a tra- vs del atrio. Presenci que le dis- par al que Iba por la acera, ca- yendo ste de espaldas contra el pavimento, y en el suelo le hijo va- rios disparos ms. Al acercarse al sitio reconoci al herido, que era Jess M. Seijo. Declar adems el testigo que el polica Guardiola en seguida corri hacia el sitio Je los hechos, y al llegar orden a "Gofio" le entregase la pistola de Gmez, y que ste con otros agen- tes procedieron al arresto del agre- sor.
Manolin Escalera, dijo encontrar- se en una guagua que se dedica a la trasportacin de pasajeros a
fiscal que cuando el suceso se en- contraba en el Garaje Las Monjas. Solamente vio los ltimos disparos que Gmez le hizo a Seijo cuando ste se encontraba de espaldas al pavimento.
Marcelino Clemente, alias "Go- fio", manifest que cuando los pri- meros disparos estaba en la Plaza de Armas, y corri en direccin a donde procedan los mismos. Aleg que al llegar al sitio de los hechos, se le fu por detrs a Gmez y la quit la pistola, entregndosela al polica Guardiola.
El testigo Jos M. Vlez, alias "Ponceo". dice que subia por la calle del Cristo cuando los dispa- ros. Corri hacia donde partan, llegando en el momento en que Gofio le quitaba el arma a Gmez. Manifest adems que entre l. Go- fio y otras personas ms, subieron a Seijo al automvil de Rafael Cr- dova Dvlla, llevndolo primero al Hospital de Medicina Tropical y luego a la Clnica Miramar, en donde dejaron el cadver.
Ramn Iguina declar que al or los disparos salta de una impren- ta de la calle del Cristo a tomar agua. Lo nico que v' fu a un hombre herido en el suelo y a dos policas con sus armas en alto, en el instante de proceder al arresto del acusado.
Le aplicaron a prueba de la parafina
El seftor Gmez Turull, complet,. mente sereno, se someti a la prue- ba de la paraflna momentos des- pus de haber sido condecido bajo arresto al cuartel de la Polica de San Juan.
La prueba, que fu aplicada a ambas manos del acusado, dio el siguiente resultado: en la mano derecha, positivo copioso en la pal- ma, el dorso y el dedo pulgar; en la mano izquierda, positivo copio- so en la palma, y pequeftos puntos de plvora en el pulgar y en el dorso.
Tambin se le tomaron al seftor Gmez las huellas digitales y los informes de reglamento.
Joa M. Seijo, muerto ayer a balazos en la prolongacin de la calle Luna.
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Habla el abogado de Gmez r '
En la sala donde se aplicaba la prueba de la parafina los periodis- tas entrevistaron al Ledo. Benltez Flores, abogado del seftor Gmez Turull. El licenciado Benltez Florea manifest que su defendido le habla notificado hace unos das que habla recibido varias amena- zas del interfecto Seijo; que l le
ton venan por la acera de dicha calle y que Gmez venia por a plazoleta. Que cuando se iniciaron los disparos, muy cerca de l. tra- t de ponerse a salvo, ya que una de las balas disparadas le pas muy cerca. Interrogado sobre si Seijo hizo alguna exclamacin an- tes de caer abatido por las balas, manifest que no habla dicho una palabra.
Muri en el camino al hospital
Seijo fu conducido inmediata- mente despus del tiroteo a la Cl- nica Miramar. donde lleg sin vi- da. Los guardias Amrlco Ortiz y Galo Segarra condujeron a Seijo en un automvil hasta la clnica, don- de se le declar muerto por lo* mdicos. En el recorrido entre el
del esternn con hemorragia deno- sa; herida en la regin abdominal superior derecha; herida en la re- gin lumbal derecha; herida en la regin Iliaca superior Izquierda; herida en el trocander Izquierda; herida en el costado superior Iz- quierdo; herida en el costado supe- rior derecho cerca del axila; heri- da en el antebrazo superior derecho todas las heridas con ntrala y sa- lida.
Todos fueron sentencia- dos
RIO DE JANEIRO, julio 27. (P. U.)Todo* los veinticinco integra- listas (menos uno) acusados de asal- tar el Palacio presidencial de Gua- nabara el 11 de mayo recibieron sus sentencias despus de un rpi- do juicio de un dia.
Gonzaga, Nasclmen^to. Pereira y Lima recibieron sentencias da diez aos igual que al lder de la re- vuelta, Fournler. Pero la senten- cia total de Gonzaga subi a 30 aos con trabajos forzados debido a la acusacin adicional de homi- cidio. Las dems sentencias fluc- tuaron entra cinco y ocho aos.
Los disturbios en Palestina
JERUSALEN. julio 27. (P. U.) Continan los estallidos de bombas, tiroteos e incendios premeditados en toda Tierra Santa pomo resul- tado de la guerra tribal entra ra- bes y judos.
Una corta militar en Halfa sen- tenci doa rabes a muerte por por- tar armas da fuego. Laa ejecucio- nes tuvieron lugar poco despus. En Kalkllieh una banda armada incendi la estacin ferroviaria des- pus da vencer y desarmar a loa guardias y demis empleados de la estacin. Los rabes apedrearon a incendiaron un camin Judio des- truyndolo. El campamento militar de Nablus sa halla an llamas. Doa rabes perecieron apualeados.
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![[07 03-2011]-pactos entre esposos.](https://static.fdocuments.es/doc/165x107/55a02bfe1a28ab2f348b45d7/07-03-2011-pactos-entre-esposos.jpg)
