EI Padrino como gua EI consultor y economista Javier Llanos sostiene que las empresas familiares tienen mucho que aprender de los comportamientos de los clanes mafiosos, pistolas aparte

L. A. VEGA

Don Vito; su heredero Santino (el sottocapo); su segundo hijo, Fredo; su consigliere (lo que hoy sera el asesor externo), Tom Hagen, y sus dos socios mas antiguos se renen con Virgil El Turco Sollozzo, que plantea a la famiglia entrar en el negocio de la droga. Sollozzo se burla de los polticos que Vito Corleone hace sonar en su bolsillo como monedas. El Turco habla de grandes beneficios si Corleone entra en el negocio. Santino puentea

durante la conversacin a su padre, que le detiene con un gesto. El Padrino se niega a invertir el milln que le piden y finaliza la reunin. Al final, le echa la bronca a su hijo, por haber mostrado un flanco que poco despus le costara al Don un atentado sin consecuencias. El cerrado mundo de la mafia, lleno de violencia y dinero sucio. Pero incluso de esta cinaga oscura pueden obtenerse enseanzas, y muy tiles para la empresa, y la familia en particular, segn el consultor y economista Javier Llanos, que ayer ofreci una charla sobre el liderazgo en la Camara de Comercio apoyndose precisamente en escenas de El Padrino, de Francis Ford Coppola.

Primera leccin: no entres en negocios que puedan destruir la visin, el alma de tu empresa. El objetivo de Don Vito es llegar a ser legales y que haya un senador Corleone. Para eso crea una red de relaciones, desde abajo, desde el barrio, hasta las altas esferas. Y por eso se dedica a negocios relativamente veniales, como el juego y la prostitucin, y nunca entrara en la maldita droga, que le enajenara a los poderosos, necesarios para que un Corleone llegue a ser uno de los que mueven los hilos.

Segunda leccin: en una negociacin no desprecies los contactos del que tienes enfrente. Cuando quieras hacerte con una persona, adora sus dolos. Si quieres romper con ella, sobrepasa sus lmites. No es buena idea irse a negociar a Barcelona con una camiseta de Cristiano Ronaldo. Hay unas rayas rojas, si traspasas los lmites, las negociaciones se rompen, aseguro Llanos.

Tercera leccin: mantn una voz nica. En el momento que hay fisuras, los proveedores, los bancos, los trabajadores nos pueden crujir. Si se detecta una brecha, corres el peligro de que el competidor te ataque por el lado de tu hermano, de tu hijo, te monte un cisma y te destruya en un ao. Cuando estemos hablando de negocios con

un extrao, no digas lo primero que se te pasa por la cabeza, le espeta el Don a su hijo Santino, que acabara pronto muerto por su mala cabeza.

La visin del Don no podra ser mas familiar. Se la expresa a su hijo Michael en otra escena crucial de la pelcula, cuando el hijo menor ya le ha heredado. He trabajado toda mi vida por el bienestar de mi familia. Siempre me he negado a ser un mueco en manos de los poderosos, dice El Padrino, un hombre que no ejerce un liderazgo duro, como Fanucci, que muere precisamente por cruzar una raya roja y amenazar a la mujer y los hijos de Corleone.

Don Vito es emptico, sabe gestionar la diversidad (sabe tratar tanto a un potentado como a un hijo del arrabal), es asertivo, es decir, sabe decir que no sin ofender. La familia es sagrada. La experiencia me ense a no ser confiado. La mujer y los chicos pueden serlo, los hombres no, palabra de Don.

Y pueden extraerse enseanzas incluso sobre la sucesion. En el citado encuentro de Don Vito con Michael, este escucha atentamente todo lo que tiene que ver con el esquema general, con la estrategia. Cuando el padre se mete en los asuntos del da a da, Michael le corta cariosamente: Yo dirijo. Te dije que lo hara y lo estoy haciendo. Y es que el sucedido no debe entrar en temas de gestin, seala Llanos. La conversacin discurre entre caricias psicolgicas, esas que deben prodigarse en la empresa antes de toda reunin.

Algo tiene la mafia para que haya durando cerca de 200 aos. No ha podido funcionar solo a base de dinero y pistolas. El miedo no cohesiona, seal al inicio de la charla Llanos, que tuvo la idea de esta conferencia tan especial a partir del libro Lecciones de estrategia con El Padrino, de Guillermo de Haro. Podemos copiar esos comportamientos, pistolas aparte, asegura.