Elementos Plan M4 Ok
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Material tomado del Curso Reducción del Riesgo de Desastres en el Sector Educativo (UNICEF) Página 1
Componentes del Plan de Gestión de Riesgos
Es un conjunto de acciones, guiadas por objetivos específicos, destinadas a la reducción del
riesgo, así como a la preparación de la comunidad educativa para responder, adecuadamente
a eventos adversos.
El Plan Escolar de gestión del riesgo es también, una herramienta que permite vincular todos
los factores estructurales y no estructurales de los cuales depende que la escuela sea una
zona segura para la comunidad educativa, de manera que los distintos actores que conforman
esa comunidad puedan conocerlos, reconocerlos e intervenir sobre cada uno de ellos.
El objetivo de esa intervención es reducir en lo posible los factores generadores de riesgo
(amenazas y vulnerabilidades), evitar que se conviertan en desastres y mejorar la capacidad de
la comunidad educativa para responder adecuada y oportunamente en caso de que, a pesar de
todas las prevenciones que se hayan tomado, llegue a
producirse una emergencia o un desastre.
El Plan Escolar de Gestión del Riesgo se encarga de
diseñar y adoptar las estrategias que deben llevarse a
cabo para garantizar que, aun en situaciones de
emergencia o desastre, en el ámbito de la escuela se
respeten los derechos de la población infantil y
adolescente, en particular el derecho a ser sujetos de un proceso de educación con calidad. A
esto nos referimos cuando hablamos de la continuidad de la educación en situaciones de
desastre o emergencia.
Cuando hablamos de la escuela no nos referimos exclusivamente a las instalaciones físicas en
donde funciona la institución educativa, sino en general a los espacios y tiempos en donde, en
condiciones de “normalidad” o en circunstancias de desastre o emergencia, se lleva a cabo el
proceso educativo. Y por supuesto, a los actores de ese proceso, es decir, a la comunidad
educativa (padres y madres; maestros y maestras; alumnos y alumnas). Tampoco nos
referimos de manera exclusiva a las instituciones que imparten educación primaria o
secundaria, sino que el concepto abarca desde las instituciones que imparten educación pre-
escolar hasta las que ofrecen programas de postgrado.
El Plan de Gestión del Riesgo debe contemplar también los
pasos que debe seguir la institución educativa para
normalizar la educación después de que se haya producido
una crisis, lo cual puede llegar incluso a la necesidad de
reparar o de reconstruir las instalaciones que hayan
resultado, o incluso de construir unas nuevas instalaciones
en un nuevo lugar, o en el mismo siempre y cuando las
condiciones de riesgo lo permitan.
Las medidas tendientes a corregir los factores generadores de riesgo que ya existen en la
escuela o en el territorio en donde esta se encuentra, constituyen la aplicación, en el ámbito
del Plan Escolar, de la llamada gestión correctiva del riesgo.
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Las precauciones que deben tenerse en cuenta para evitar que, por ejemplo, cuando se instale
un nuevo laboratorio o cuando se realiza la ampliación de la escuela se generen nuevos
riesgos, se realice la llamada gestión prospectiva del riesgo.
Y la preparación para que la comunidad educativa esté en capacidad de responder adecuada y
oportunamente cuando se produzcan una emergencia o un desastre que no hayan podido
evitarse y para alcanzar una nueva “normalidad” lo más pronto posible, corresponde a la
llamada gestión reactiva del riesgo.
Es decir, que toda la gestión del riesgo se hace presente y resulta aplicable en el ámbito de la
escuela y de la comunidad educativa.
Al igual que la gestión del riesgo en general constituye o debe constituir una dimensión
inseparable del proceso de desarrollo –precisamente la dimensión que determina que el
desarrollo sea verdaderamente “sostenible”- el Plan Escolar de Gestión del Riesgo debe
constituir una dimensión integral del proceso educativo.
Y si bien no es la única, sí es una de las dimensiones que determinan que la educación sea de
calidad, lo cual debe reflejarse en el perfil de las personas que egresan del proceso educativo.
El Plan Escolar de Gestión del Riesgo contribuye a que
comprendamos mejor las dinámicas naturales y
sociales del territorio en donde se encuentra la escuela
o en donde viven o van a vivir y a trabajar los niños,
niñas, adolescentes y, en general, las personas de
cualquier edad que protagonizan ese proceso
educativo. Como consecuencia de esa mejor
comprensión, se espera que seamos capaces de
contribuir a la construcción de unas relaciones más armónicas y más “sostenibles” con
nuestros territorios.
Se debe buscar la integración del Plan Escolar de Gestión del Riesgo en los planes
institucionales de los centros educativos o PEI en forma articulada y coordinada con los planes
oficiales de preparación local, nacional y regional para fomentar la ampliación de la cobertura
de los preparativos en el ámbito educativo y a la vez darles carácter continuo y permanente.
Este último aspecto garantiza su contextualización a través del conocimiento de las amenazas
aplicables y del análisis y comprensión de las causas y consecuencias de los riesgos particulares
de cada entorno escolar y comunitario. Esto permite una intervención positiva de los
miembros de la comunidad y por ende, el aumento de la resiliencia de las comunidades
educativas.
El Plan debe responder a las siguientes preguntas:
¿Qué debemos hacer para prevenir y mitigar riesgos?
¿Cómo prepararnos adecuadamente para responder a las emergencias?
Consideraciones importantes
El Plan debe:
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Elaborarse, considerando todos los riesgos a que está expuesta la comunidad
educativa y los recursos existentes o que se pueden adquirir.
Ser diseñado por el Comité de Seguridad Escolar en conjunto con la dirección del
centro educativo, padres de familia, representantes de los alumnos y otras personas
de la comunidad.
Abarcar los siete componentes de la gestión de riesgo (prevención, mitigación,
preparación, alerta, respuesta, rehabilitación y reconstrucción).
Ser parte del programa de actividades que cada año preparan los centros educativos
para el desarrollo institucional.
Buscar la integración de los planes de seguridad escolar en los planes institucionales de
los centros educativos – PEI, en forma articulada y coordinada con los planes oficiales
de preparación local, nacional y regional para fomentar la ampliación de la cobertura
de los preparativos en el ámbito educativo y a la vez darles carácter continuo y
permanente. Este último aspecto garantiza su contextualización a través del
conocimiento de las amenazas aplicables y del análisis y comprensión de las causas y
consecuencias de los riesgos particulares de cada entorno escolar y comunitario. Esto
permite una intervención positiva de los miembros de la comunidad y por ende, el
aumento de la resiliencia de las comunidades educativas.
Importancia del Plan Escolar de Gestión del Riesgo
Los objetivos primordiales del plan escolar son:
Salvaguardar las vidas contemplando estrategias y acciones conducentes al retorno a
clases.
Crear las condiciones institucionales necesarias para que sea posible la prevención, la
mitigación del riesgo, así como la preparación de los centros educativos, para así
responder a situaciones de emergencia y desastres.
Contribuir con el proceso de formación de una mejor educación en gestión del riesgo
La decisión de dotar a la institución educativa de un Plan Escolar de Gestión del Riesgo, puede
provenir de las autoridades nacionales, regionales o locales (por ejemplo mediante una ley o
una directiva presidencial o ministerial que haga obligatorio asumir ese compromiso), de las
directivas de la institución educativa que son conscientes de la necesidad y de la
responsabilidad de contar con una escuela segura, de los padres y madres de familia
dispuestas a exigir que se respete el derecho a la protección de sus hijos e hijas, de los mismos
niños, niñas y adolescentes, del personal docente o, en general, de cualquier integrante de la
comunidad educativa, o de varios de ellos, en cualquiera de los casos, se debe tomar en
cuenta:
Identificar riesgos y recursos.
Reducir o corregir los riesgos existentes.
Organizar a la comunidad educativa para la gestión del riesgo.
Mejorar las condiciones de la infraestructura y de los servicios del centro educativo
para responder a los eventos adversos.
Promover la unión de esfuerzos, el trabajo cooperativo y la solidaridad.
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Enriquecer la educación sobre el riesgo y el desastre.
Orientar las acciones de prevención, mitigación y preparación para emergencias y
desastres.
Cualquiera que sea el origen de la decisión, la responsabilidad final de iniciar el proceso
tendiente a la adopción de un Plan Escolar de Gestión del Riesgo está en cabeza del director o
de la directora de la institución educativa. Esta es la persona que, en función de su cargo, debe
responder ante la comunidad educativa, ante las autoridades de distintos niveles y ante la
comunidad en general por lo que se haga o se deje de hacer.
Áreas de desarrollo del Plan Escolar de Gestión del Riesgo
Adicionalmente a los pasos para la elaboración del plan escolar, es necesario considerar las
áreas de desarrollo del plan escolar: currículo para la formación, organización, articulación con
la estrategia de continuidad escolar en casos de emergencia, participación de la comunidad.
Es necesario reflexionar con los y las participantes sobre la posibilidad de integrar áreas nuevas
en el Plan.
Pasos Básicos para la Elaboración del Plan
Paso 1. Motivar
Descripción: Antes del establecimiento y la ejecución de un Plan Escolar de Gestión del
Riesgo se deben hacer actividades de información y promoción en la Comunidad
Educativa.
Objetivo: Todo el personal de una u otra forma tendrá influencia en el proceso de
diseño y ejecución del Plan Escolar de Gestión del Riesgo. Deben comprometerse a
concretar un buen plan.
Recomendaciones: Que participen como apoyo diferentes instituciones, tales como los
bomberos, la Cruz Roja y el Comité Local de Emergencias en las actividades que se
programen (reuniones, presentación de video, charlas, visitas, etc.). La motivación
incluye la capacitación del personal directivo, docentes, estudiantes y demás
miembros de las comunidades escolares de los centros educativos para una adecuada
respuesta ante una emergencia o desastre con el apoyo de programas, cursos y
material informativo y didáctico de organizaciones de los sectores de primera
respuesta y ayuda humanitaria.
Paso 2. Diagnosticar
Descripción: Elaboración de un inventario detallado de las amenazas, la condición de
vulnerabilidad y los recursos del centro educativo (capacidades).
Objetivo: Identificar y priorizar los riesgos y los recursos de la institución para lograr el
diseño de un Plan Escolar de Gestión del Riesgo realista y pertinente.
Recomendaciones: Realizar un diagnóstico participativo con la comunidad educativa,
complementado con el criterio de especialistas en el tema.
Este paso incluye la elaboración del mapa de seguridad escolar con la información recopilada
en la evaluación de amenazas, condición de vulnerabilidad, riesgos y capacidades del centro
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educativo, el sistema de alerta, y la identificación y señalización de las rutas de evacuación y
lugares seguros.
Paso 3. Organizar
Descripción: Conocida la realidad (riesgos y recursos) se organiza el personal de forma
que se atiendan criterios de autoridad, responsabilidad, disponibilidad y de respuesta
a la realidad observada.
Objetivo: Integrar el Comité de Seguridad Escolar, las Brigadas y otros grupos de apoyo
para el diseño y la ejecución del Plan Escolar de Gestión del Riesgo.
Recomendaciones: De ser posible se debe integrar a los distintos equipos (brigadas),
personal que voluntariamente se ofrezca, que haya tenido alguna experiencia en estos
temas y que tenga actitudes y aptitudes para su buen desempeño.
Estructura Base de la Organización de la Gestión del Riesgo (Comité de Seguridad Escolar).
El coordinador es el responsable del desempeño del Comité. El mantiene una comunicación
efectiva con las autoridades locales de educación y de emergencias. Sus colaboradores
inmediatos son los coordinadores de brigada con quienes integra el Comité.
A su vez, el coordinador de cada una de las brigadas mantiene una permanente comunicación
y coordinación con el Coordinador del Comité de Seguridad escolar y con sus colegas
coordinadores de las otras brigadas.
Con base en esta comunicación y coordinación, se mantiene la unidad del desarrollo del Plan
Escolar de Gestión del Riesgo en general y, en caso de emergencia, del manejo de los
operativos establecidos en la estrategia de respuesta para la atención de emergencias del Plan.
Debe hacerse énfasis en el criterio de UNIDAD con que se deben ver los componentes de la
organización, aunque haya varios niveles jerárquicos y distintas funciones.
Ha de señalarse que este esquema es una base sobre la cual, según la realidad de cada centro
educativo, se diseñará la que más convenga.
Organización de brigadas de emergencia escolar para actividades de primeros auxilios, control
de incendios, entre otras.
Otro grupo importante dentro del equipo es el Grupo de actualización curricular, cuyo objetivo
es promover y facilitar que la gestión del riesgo no se asuma como algo aislado del proceso de
enseñanza-aprendizaje, que constituye la actividad central de la institución educativa, sino
como algo que forma parte integral e inseparable de la misma, y de lo cual depende en gran
medida la calidad de la educación impartida.
Paso 4. Diseñar
Descripción: El Comité de Seguridad Escolar diseña el Plan tomando en cuenta la
información del diagnóstico y el criterio de especialistas locales.
Objetivo: Diseñar el Plan Escolar de Gestión del Riesgo realista, que integre todos los
elementos de la gestión del riesgo.
Recomendaciones: Su diseño debe ser participativo, debe ser divulgado a toda la
Comunidad Educativa y a las instituciones claves de la comunidad.
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Estos cuatro pasos se complementan con acciones para:
Ejecutar: implica, además de poner en práctica lo que se planifica, el desarrollo e
implementación de una estrategia de divulgación y capacitación del Plan Escolar de Gestión del
Riesgo en la comunidad educativa.
Evaluar y Corregir: consiste en la revisión del Plan Escolar de Gestión del Riesgo sobre la base
de lecciones aprendidas de los ejercicios y/o emergencias verdaderas a través de los
simulacros y simulaciones.
Sistematizar: es la implementación continua del plan en un ciclo constante de aplicación de los
mismos pasos.
Otro aspecto a considerar en la elaboración del Plan Escolar de Gestión del Riesgo son las
acciones inmediatas a implementar desde el sector educativo en situaciones de emergencia
como respuesta temprana: La primera etapa Recreativa y Preparatoria para la reanudación de
clases, la segunda etapa basada en la educación no formal, y la tercera etapa de la
reanudación de la educación formal.
Adicionalmente es necesario considerar que esta respuesta inmediata o temprana se
encuentra directamente relacionada con la preparación del plan para la educación en
situaciones de emergencia en el cual se articularían políticas, estrategias y acciones que deben
preverse y concretarse por parte de los Ministerio de educación para la restitución de la
gestión educativa luego de la ocurrencia de una emergencia.
A continuación los contenidos básicos que debe tener el Plan Escolar de Gestión del Riesgo y
una matriz operativa que posibilitaría su elaboración:
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Plan Escolar de Gestión del Riesgo y la Planificación Educativa Institucional – PEI
Cada escuela tiene un Proyecto Educativo Institucional (PEI), que describe la escuela a la que
toda la comunidad educativa aspira. Allí ponemos cuál es la escuela que queremos llegar a ser,
cómo queremos que nos identifiquen, cuáles son los niveles de excelencia a los que aspiramos,
el tipo de docentes que debemos tener, el tipo de hombres y mujeres que aspiramos llegar a
formar; todo lo cual es una guía orientadora para la actividad educativa.
En ese marco, entendemos que si aspiramos a tener una institución sólida y que cumpla con
sus objetivos, debemos también preocuparnos por cualquier cosa que la amenace. Ese sentido
común nos obliga a incorporar la gestión de riesgos en el PEI.
En el Proyecto Educativo Institucional no solamente se define la orientación actual de la
escuela y en general de la comunidad educativa, y se sientan las bases para el desarrollo de
herramientas concretas de gestión del riesgo, como los planes escolares diseñados para tal
efecto, sino que se determinan el perfil de los y las estudiantes que egresan de la institución, y
la manera como ésta se relaciona con la comunidad circundante e interviene en la solución de
algunos de los problemas que la aquejan. Es decir, que el PEI establece el marco conceptual y
metodológico dentro del cual se construye la “escuela segura”, al igual que las orientaciones
para que desde la escuela se pueda contribuir a la construcción de un “territorio seguro”.
Existen experiencias de elaboración de PEI con enfoque de gestión de riesgos, incluso
herramientas desarrolladas que brindan propuestas para hacer esta tarea más sencilla. La
Institución educativa es que valora el mecanismo adecuado para planificar sus acciones de
reducción del riesgo. Generalmente, con la incorporación del Plan de Gestión del Riesgo como
anexo del PEI se logra por un lado la oficialización de este último, ya que los PEI deben ser
presentados a las unidades administrativas del sector educativo para su validación, y por otro
lado, que dicho instrumento este amarrado al documento de planificación más importante de
la institución educativa convirtiéndose en una herramienta clave de la gestión educativa de la
escuela y por ende del proceso educativo de la comunidad.