En la red no se lee igual
-
Upload
fad-fostering-arts-and-design -
Category
Documents
-
view
213 -
download
0
description
Transcript of En la red no se lee igual
En la red no se lee igual3Dos obras analizan y dan consejos sobre el uso de la lengua en los nuevos medios ‘on line’
ERNEST ALÓS BARCELONA
Nunca habíamos leído y es-
crito tanto hasta la explo-
sión de los nuevos medios
basados en la red. Pocos
hablan con sus dispositivos y en cam-
bio «la mayoría prefiere la escritura»,
destaca el profesor de la UPF Daniel
Cassany. Pero al mismo tiempo este
uso ha hecho evolucionar el lenguaje
«a una velocidad nunca vista», apun-
ta el experto en nuevos medios Mario
Tascón. Ambos están detrás de dos li-
bros que llegan a las librerías en los
próximos días y que abordan la teo-
ría y la práctica de las nuevas realida-
des de la lectura y la escritura.
Tascón es el director (detrás hay
40 especialistas) de Escribir en inter-net. Guía para los nuevos medios y las re-des sociales, editado por Galaxia Gu-
tenberg y la Fundación del Español
Urgente BBVA, en el que se abordan
«problemas teóricos y soluciones
prácticas». Desde reglas de uso respe-
tuoso y efectivo (netiqueta) a consejos
prácticos elementales, los concep-
tos teóricos básicos de la arquitec-
tura de una web o un libro de esti-
lo propio para cada medio. Aun con
la RAE detrás, el tono de sus «reco-
mendaciones» es el de «no promul-
gar normas rígidas, sino de formar
en la mente de los lectores de la obra
una preocupación constante por los
usos idiomáticos». En línea. Leer y es-cribir en la red, de Daniel Cassany, pu-
blicado en el año 2011 en catalán en
catalán (Graó) y ahora en castella-
no por Anagrama, analiza también
las «nuevas maneras de utilizar la es-
critura para interactuar y resolver
tareas sociales» pero poniendo más
énfasis la escuela. Por ejemplo: un
ejercicio para que los alumnos sean
usuarios críticos de la Wikipedia.
¿CON FALTAS? BUENO... / Tanto Cassany
como los autores del libro coordina-
do por Tascón asumen con normali-
dad las «formas escritas no normati-
vas», en palabras del primero, que
ponen los pelos como escarpias a
más de un académico o profesor, o la
integración de «formas gráficas ini-
maginables hasta ahora», hasta for-
mar una neolengua que algunos
han llamado netspeak, cyberspeak o,
en el caso del inglés, netlish (¿aquí de-
beríamos hablar de interñol o netca-talà?). Marta Torres la define como
una «escritura ideofonemática» y
Xosé Castro, en el libro de la Fundéu,
califica recursos como la supresión
de tildes, las onomatopeyas, siglas,
emoticonos, abreviaturas... como
una «ortografía adaptada» a los lími-
tes de espacios o la inmediatez. En
lugar de «ejemplos vandálicos de es-
COMPIS
aki va el 5è capitol
Nu tng kasibateria
¿QUÉ TAL?
+1APOYO A UN MENSAJERETUITEADO
FA‘FOLLOW ALLWAYS’ RECOMENDAR SEGUIR A ALGUIEN EN TWITTER
(^_^)FELICIDAD, EN ASIA
:-(TRISTEZA,EN OCCIDENTE
(;_;)TRISTEZA,EN ASIA
:-PBURLAO BROMA
;-)COMPLICIDAD
:-DCARCAJADA O RISA
LOL‘LAUGHING OUT LOUD’RIENDO A CARCAJADAS
>_<PREOCUPACIÓNO ENOJO
WTF‘WHAT THE FUCK’(SORPRESA)
critura», Cassany asume estos usos
como «el resultado de comunicarse
de una manera eficaz, rápida y bara-
ta», además de una forma de identi-
ficación juvenil. «La economía del
lenguaje en internet no se debe en-
tender como ignorancia, sino como
la adaptación de la escritura a estas
nuevas realidades», opina Markus
Steen. «A más espacio disponible y
más público, más correctos y con
menos atajos» son los textos, conclu-
ye Tascón. Porque aquí, dice Cas-
sany, entra otro concepto, el de lo
«vernáculo digital». Usos «en el ám-
bito privado y ocioso de la familia y
los amigos, que hacemos por inicia-
tiva propia, cuando y como nos da la
gana y sin seguir norma o directriz
alguna». «Una comunicación en
gran parte privada que se convierte
en pública», dice Tascón. En este es-
pacio entre lo privado y lo público
nacen desde los blocs a la fan fic, crea-
ción de una obra nueva que recrea el
universo de un autor. En general, do-
cumentos que se adaptan a las capa-
cidades de los nativos digitales defini-
dos por Marc Prensky: cómodos en
documentos enlazados y que combi-
nan formatos, que practican la mul-
titarea, conectados y cooperativos,
rápidos pero impacientes...
Por un lado, este nuevo mundo
expande la creación. La ciberetique-ta critica a los fisgones, perezosos o
que no aportan nada de interés (lur-kers, idlers y smurfs). «En la red no es
posible ser solo un gran lector (...) en
internet los lectores también escri-
ben (...) No se puede estar pasivo o ca-
O.J.D.:
E.G.M.:
Tarifa:
Fecha:
Sección:
Páginas:
109452
608000
10954 €
12/09/2012
CULTURA
60,61
LLL
llado», escribe Cassany. Por el otro lado, cuenta con limitaciones a las que escritores y diseñadores de me-dios deben aprender a adaptarse. Los estudios de movimiento ocu-lar (la lectura en F: en horizontal los dos primeros niveles, y repaso rápido en vertical del resto) mues-tran según Jakob Nielsen que los internautas leen un promedio del 20% del contenido de una web, lo que le lleva a recomendar que no se escriba en línea más del 50% de lo que se habría escrito en papel, ade-más de adoptar varios principios básicos de escritura breve, ordena-da, segmentada y vinculada.
LECTORES ACTIVOS / En definitiva, contar con «el lector asume más iniciativa al elegir qué quiere leer y en qué orden» cuando lee en línea. Porque según Cassany hay lectura digital que apenas se diferencia de la tradicional, y una lectura en lí-nea caracterizada por la conexión, la cooperación, la ausencia de fil-tros y la diversificación de las for-mas de escritura. «Cada platafor-ma, ya sea Facebook, Twitter, Go-ogle +, los blogs, los chats, los foros o los medios digitales, tienen sus particularidades, reglas y caracte-rísticas», recuerda la Fundéu. Pero incluso para autores que vi-ven con más excitación ser protago-nistas de un momento de cambio que con nostalgia... algo de esto aún hay. «¿Será este mi último libro? (...) No puedo dejar de sentirme como un monje medieval que escribe en latín cuando en la calle hablan ro-mance», concluye Cassany. H
Escribir para las máquinas
33Un ejemplo de hasta qué punto
escribir en internet contiene cam-
bios profundos y a veces inadver-
tidos. En última instancia el desti-
natario de un texto es un lector
humano, pero hoy se ha de pensar
también en programas informáti-
cos como si fuesen lectores. Ma-
rio Tascón apunta esta nueva ne-
cesidad comunicativa: «Que los
textos que escribimos sean com-
prendidos por las máquinas y sus
algoritmos para que, a través de
plataformas como son los busca-
dores, otras personas puedan en-
contrarnos». Además de las co-
nocidas técnicas SEO (Search
engine optimization) para hacer
un texto más visible en los busca-
dores, existen otros condicionan-
tes que a veces, admite la Fundéu,
obligan a forzar las normas gra-
maticales de la RAE, como man-
tener los puntos en cifras largas
(8.000.000, en lugar de mantener
espacios en blanco cada tres ci-
fras como aconseja hoy la Acade-
mia) para que los programas pue-
dan hacer operaciones con ellas,
o juntar palabras en los hashtags
o etiquetas de Twitter.
CAMBIO DE CHIP
Terapia de cómic
O.J.D.:
E.G.M.:
Tarifa:
Fecha:
Sección:
Páginas:
109452
608000
10954 €
12/09/2012
CULTURA
60,61