Ensayo dg2
-
Upload
daniel-guerra -
Category
Documents
-
view
155 -
download
1
Transcript of Ensayo dg2
UNIVERSIDAD ISRAEL
FACULTAD DE DISEÑO GRÁFICO EMPRESARIAL
PROYECTO DE TESIS II
10 º “A” Diurno
TEMA:
ENSAYO SOBRE EL DISEÑO GRÁFICO
Autor:
Daniel Guerra L.
Docente:
Mauro Ruiz
Fecha:
28 de Junio de 2009
Quito - Ecuador
EL DISEÑO GRÁFICO: Una profesión poco valorada
En la era actual, considerada como la de “la información” estamos siendo parte
de un ritmo de vida vertiginoso, donde la competencia en el campo profesional es cada
vez más implacable y exige una preparación de primer nivel para poder sobresalir y
obtener un nivel de vida adecuado. Ahora, debemos darnos cuenta las grandes falencias
que tenemos como país en el campo de la educación, que han impedido que el Ecuador
surja y ocupe los primeros sitios en desarrollo de ciencia y tecnología.
A lo largo de este ensayo iré exponiendo diversos aspectos que han relegado la
profesión de Diseño Gráfico a niveles tan bajos que inclusive, quienes han cursado la
carrera en universidades son considerados como personas de nivel medio, que no
tuvieron agallas de seguir una verdadera profesión y que sus expectativas de
crecimiento se verán siempre limitadas a niveles operativos.
Un Diseñador Gráfico no es solamente la persona que sabe dibujar, pintar y
operar ciertos programas como PhotoShop o Ilustrador. Un verdadero diseñador es
quien tiene la capacidad de construir conceptos y los plasma gráficamente para suplir
cierta deficiencia que ha podido percibir en su día a día, logrando en su público cierto
grado de impacto reflejado en un cambio de conducta en el mejor de los casos. Este
proceso de creación requiere de un nivel de creatividad para poder logar el objetivo de
la manera más precisa con la menor cantidad de elementos y sobre todo que no de lugar
a interpretaciones incorrectas que desvirtúen el mensaje comunicado.
Si bien es cierto que la tecnología ha sido el motor generador de cambios positivos en la
sociedad a través del tiempo, podemos señalar también como un aspecto culpable de
muchos otros efectos que resaltan más profundamente, entre ellos el hecho de matar la
2
creatividad de los niños, mediante los populares juegos de video, presentados en un
extenso abanico de colores, precios, capacidades, marcas y formatos, impidiendo que a
su corta edad sean ellos mismo quienes vayan formando su mundo a través de la
imaginación, pues estos artefactos no hacen más que impedirles el desarrollo de su
mente, presentándoles un mundo ya existente, con un limitado número de alternativas
de solución y poco nivel de interactividad, creando seres autómatas, limitados a lo que
la pantalla les ofrece y sin la capacidad de imaginar más allá.
Juan Carlos Darias nos presenta una breve relación entre los jóvenes que tienen
videojuegos y que posteriormente incursionan en el mundo del diseño gráfico en estos
términos:
Los videojuegos son la nueva alternativa de conocimiento y
entretenimiento, con el consiguiente peligro distorsionante que implican
y que no hace más que alimentar la actitud apática de los jóvenes hacia el
saber como valor fundamental de cualquier disciplina o profesión. Ellos
están acostumbrados a un entorno visual lleno de efectos especiales,
efectos que han sido insertados en el entorno gráfico gracias a la mala
utilización de programas como Photoshop; esto ha permitido la aparición
de una nueva clase de pseudo-diseñadores denominados en el ambiente
como «fotochoperos», comunicadores visuales caracterizados por su
habilidad para utilizar plug-ins y efectos 3D y, claro está, ser «rápidos y
efectivos», según su opinión «profesional». (Darias, 11)
Otro causante de la falta de creatividad de los estudiantes es el sistema de educación
caduco del que forman parte nuestras instituciones educativas: la manera obstinada de
ciertos profesores de inculcar sus materias por medio de la memorización, no ha logrado
3
más que estudiantes convertidos en pseudomáquinas esperando órdenes para poder
actuar, sin la oportunidad de aportar con sus ideas al desarrollo del conocimiento.
Una vez que el estudiante ha pasado por su etapa escolar y de colegio, viene una
etapa más difícil y conflictiva, la elección de una carrera profesional. Aquí se
profundizan varios aspectos que provocan la mala reputación de la carrera de Diseño
Gráfico: por un lado tenemos una inadecuada asistencia en los departamentos de
orientación vocacional, que no explican claramente los objetivos de cada carrera y las
aptitudes que deben tener los estudiantes para poder cursarla. Por otro lado tenemos el
concepto errado que existe sobre la educación en el Ecuador, pues al convertirse en un
negocio, se ha dado una suerte de baratillo de ofertas entre universidades e institutos
cada año que salen nuevos bachilleres.
Este afán desmedido de lucrar con la educación superior y la falta de control por
parte de las autoridades ha permitido la formación de gran cantidad de institutos y
universidades ofreciendo en gran cantidad de ellas la carrera de Diseño Gráfico, incluso
en tiempos récord de 6 meses, otorgando el título de “asistentes en diseño”. Al
respecto, Fabricio Victores Soledispa comenta:
¿Es acaso el estado responsable de crear leyes que impidan este tipo de
actividades educativas que afectan a las plazas de trabajos? ¿Existen
acaso centro de capacitación que den cursos de «asistencia en leyes y
jurisprudencia», «asistente de medico», «asistente de cirujano», con una
formación de tres a seis meses? Es momento de crear conciencia, de
entender y buscar soluciones a este tipo de problemas que solo
promueven la mediocridad. Cabe preguntarse: ¿quién defiende nuestras
4
vidas profesionales?, ¿quién vela por los intereses de la profesión?
(Victores, 11).
Este punto es de los más graves para la profesión, pues como explicaba en el
principio, en la actualidad la competencia profesional hace que quienes salen al mundo
laboral estén obligados a seguir preparándose, seguir cursos, seminarios, postgrados,
con el fin de obtener a más de la superación personal, un trabajo estable y bien
remunerado. Pero si tenemos que aprender muchas veces a hacer de todo por un sueldo
miserable, de qué sirve toda la inversión de tiempo y dinero que hemos realizado?.
Realmente se convierte en un hecho que desmotiva a quienes estamos cursando
la carrera de Diseño Gráfico cuando se publica en la prensa el requerimiento de
“diseñadores gráficos” con dominio de varios programas y obteniendo un sueldo que a
duras penas pasa del salario mínimo vital. Es tan errónea la concepción que tienen las
empresas sobre nuestra carrera, que consideran al diseñador como una herramienta que
sabe operar un software, lo que es un trabajo básico y por lo tanto su remuneración es
baja. Quedan a un lado todos los años de preparación que se ha tenido. Es imperativa la
conformación de un colegio de Diseñadores Gráficos en el Ecuador que realicen un
papel efectivo de protección al graduado, con el establecimiento de un tarifario real,
además del control a todos los institutos y universidades, permitiendo de esta manera
que la calidad de la educación suba y así también la condición del ambiente laboral.
Además es importante destacar que el ser Diseñador constituye un papel muy
importante, pues debe constituirse en la obligación de una capacitación y actualización
constante, a fin de tener siempre a mano las últimas herramientas para ser más efectivo
nuestro trabajo así como también los conocimientos adecuados para saberlas ocupar.
5
Respecto a esto último Fabricio Victores añade:
Operar el software no te convierte en un diseñador, ni siquiera el
conocimiento te nombra diseñador. Es la experiencia, el criterio para
tomar decisiones, para comunicar efectivamente y solucionar todos estos
problemas que surgen al diseñar productos gráficos y audiovisuales.
(Victores, 11)
Continuando con el proceso de formación del Diseñador, luego de haber pasado por
toda su etapa de formación en la universidad, se presenta al mundo laboral con varias
expectativas, sin embargo el proceso de formación como expliqué anteriormente, recién
ha empezado. Especialmente por la fama de que nuestra profesión es muy mal pagada y
de la explotación por parte de las empresas a quienes hacen las tareas de diseño,
provocan en los recién egresados una proyección a crear sus propias empresas. Este
aspecto es muy positivo siempre y cuando sea manejado de una manera profesional, con
la capacitación necesaria para encontrar un adecuado segmento del mercado al cual
dirigirse además de un conocimiento pleno del tema de negocios.
Raúl Bellucia comenta con respecto a los estudiantes de Diseño Gráfico lo siguiente:
Existe una fuerte tendencia por parte del estudiantado a interesarse en
apreciar sólo los productos gráficos de los estudios referentes del
mercado, observándolos casi como figuritas, y mostrando un preocupante
desinterés por indagar en temas referidos al negocio del diseño. De esta
manera, armar un estudio propio está más emparentado con la idea de
auto-emplearse que con la de formar una empresa de diseño. (Bellucia,
11)
6
Podemos determinar que existe cierto déficit de enseñanza en cuanto se refiere al tema
de gestión empresarial. Se presenta un mayor interés en la carrera en los temas que más
se relacionan con el aspecto gráfico, dejando a un lado los conocimientos que debe
adquirir para manejar su propia empresa, considerando como materias de relleno. El
profesional recién graduado sale al campo laboral sin una adecuada formación que le
permita manejar en un negocio propio, temas como el flujo de trabajo, tiempos de
entrega, sistemas de cobro, etc. Es decir no tiene cimentado los conceptos de
planificación, elaboración de estrategias de negocios, conocimiento de ventas, que le
impiden surgir adecuadamente y constituirse en una empresa sólida con una misión y
visión bien fundamentada.
En su artículo, “El perfil del diseñador está errado”, Jorge Piazza expone algunas
deficiencias que tiene el diseñador al enfrentarse al mundo laboral:
El panorama resulta desalentador: a nuestra incapacidad natural para la
venta, hay que sumarle nuestro perfil profesional errado —asociado a la
informalidad y la bohemia—, que contribuye a una sub-valoración de la
actividad por parte del mundo empresario, en un mercado en el que la
oferta de diseñadores supera con creces a la demanda, determinando
precios cada vez más bajos para los servicios de diseño gráfico (ley
básica del mercado) y, por ende, también un deterioro en los sueldos de
los diseñadores asalariados. (Piazza, 11)
Una vez que hemos terminado nuestra carrera adquiriendo la mayor cantidad de
conocimientos posibles, debemos estar plenamente concientes del costo que implicó
llegar a ese nivel, por lo tanto los trabajos que realicemos no deben ser cobrados a
precio de regalo, “prostituyendo” la carrera, lo que se revertirá en nuestra contra, pues
7
seremos cómplices de quienes consideran al Diseño Gráfico como una actividad que
puede realizarse por simple asimilación. En el artículo ¿El diseño ha perdido su rumbo?,
Juan Carlos Darias nos dice:
¿Dónde queda entonces todo aquel bagaje necesario para ejercer nuestro
oficio? Resumido, quizás, en una sola palabra: «cultura». ¿Cómo se
puede aplicar con éxito la paleta de colores de los programas de
computación desconociendo la teoría básica del color o, desde la
perspectiva práctica, saber lo que es mezcla, saturación, tono, pigmento,
adicción, entre muchos otros conceptos teóricos-prácticos del color? No
mencionemos siquiera los aspectos compositivos y sus posibilidades.
(Darias, 11)
Este comentario es útil para reflexionar acerca de otro grave problema que se presenta
entre los diseñadores: para que nuestra carrera sea respetada y valorada, es necesario
que dominar la parte teórica de la carrera. El tener conocimientos firmes permitirá una
defensa correcta y con argumentos válidos sobre cualquier trabajo que realicemos. Esto
significa que el tener destrezas al manejar un software, servirá únicamente como un
complemento al correcto uso de la semiótica, manejo de conceptos gráficos, teorías del
uso del color, etc., fundamental en nuestra carrera.
En el artículo Educación creativa y estratégica del diseño, Álvaro Magaña Tabilo
señala:
Desde nuestro enfoque disciplinar (académico y profesional) podemos
considerar que hoy no basta con mostrar cómo se diseña, sino hace falta
entender por qué se diseña, qué beneficios generan los diseños que
realizamos, cuál es la importancia estratégica de su utilización —en las
8
empresas, organizaciones, asociaciones y sectores productivos, ya sean
de servicios o de fabricación—, y qué influencia tiene sobre el
crecimiento y desarrollo de provincias, países y regiones. (Magaña, 11)
A partir de los conocimientos recibidos en la carrera, los cuales se convierten en
nuestras herramientas, es necesario conocer hasta dónde vamos a llegar con nuestro
mensaje, sus alcances y de qué manera nuestro trabajo va a aportar para que cierta
necesidad sea efectivamente satisfecha.
En un mundo donde impera la tendencia globalizadora, es imprescindible buscar nuevas
alianzas, nuevas aplicaciones de la carrera en otros campos de acción, lo que será
beneficioso para nosotros pues nos mantendrá en un imparable proceso de investigación
y desarrollo constante. A propósito de este tema, Álvaro Magaña añade:
…la disciplina del Diseño debe integrar aspectos creativos,
investigativos, estratégicos y de desarrollo formal para realizar las
acciones del diseño (diseñar), por lo que es necesario motivar y generar
una cultura innovadora en la formación de diseñadores profesionales a
través del trabajo cooperativo, la búsqueda de nuevas oportunidades de
involucrar a la disciplina en otras áreas del conocimiento, y de realizar
investigaciones y desempeños capaces de capitalizar nuevos
conocimientos generadores de valor añadido.
El Diseño Gráfico debe constituirse como un proceso de creación, donde se ven
involucrados gran cantidad de circunstancias externas como el estado de ánimo del
autor, ambiente en el cual se realiza el trabajo, etc., por lo que la mayoría de
oportunidades es necesario que el diseñador se tome su tiempo, un descanso que le
permita comparar su avance. Raúl Belluccia apunta:
9
El diseñador, tras analizar las necesidades, condiciones y programa de
cada trabajo que le encargan, da inicio al proceso de diseño propiamente
dicho y, entre otras cosas: imagina, dibuja o representa para ver cómo
queda, modifica, corrige, ajusta colores y tipografías, hace pruebas a
distintos tamaños, deja que el boceto «descanse» hasta la mañana
siguiente para verlo «con otros ojos», retoma el camino o lo cierra por el
momento y explora otras variantes, o tal vez se bloquea y decide
«olvidarse» por dos días, vuelve al ataque, compara y critica lo hecho,
confecciona algunos prototipos y los contrasta con los de la competencia
o con casos similares, relee el programa y lo coteja con el boceto...
En este ensayo se ha explorado varios tópicos que han hecho de la carrera de Diseño
Gráfico, una actividad poco valorada, desprestigiada inclusive por nosotros mismos, al
darnos vergüenza indicar el precio de nuestro trabajo porque tenemos en cuenta que tras
nuestro están muchas más personas desesperadas que harían lo mismo por un fracción
de lo que estamos pidiendo. Aunque no es un problema exclusivo de la carrera de
Diseño, pues la desocupación está golpeando a varios países a nivel mundial, es
precisamente por la falta de control de las autoridades que han proliferado centros de
capacitación ofreciendo cursos rápidos de diseño que existe una sobre oferta de
diseñadores en el país específicamente.
¿Qué podemos hacer para cambiar este oscuro panorama?
Pienso que no todo está perdido y es en estos tiempos de crisis cuando surgen las buenas
ideas, la creatividad. Podemos explorar un sinfín de recursos que la tecnología nos trae,
teniendo en mente siempre que toda actividad que realicemos deberá ser enmarcada en
10
la ética profesional y si puede ser enfocada a resolver problemas de índole social, todo
el esfuerzo que hemos hecho se verá gratamente recompensado.
A más de las herramientas de diseño, es importante adquirir conocimientos de gestión
empresarial, lo que nos beneficiará al momento de montar una empresa propia, pasando
de ser empleados a generadores de empleo con ideas claras de nuestros objetivos, con
una adecuada planificación estratégica que nos permita encontrar el elemento
diferenciador que nos posicione en el mercado.
Considero que al ser comunicadores visuales, nuestro papel en la sociedad es
preponderante para ser generadores de un cambio que debe darse cuanto antes en el
campo social, económico y ambiental, pues el limitarnos a lucrar con nuestro
conocimiento nos convertirá en personas mediocres al no dar paso a un crecimiento
integral.
BIBLIOGRAFÍA
Belluccia Raúl, http://foroalfa.org/es/articulo/68/Procesos_vs__resultados_en_la_ensenanza_del_diseno
Darias, Juan Carlos, http://foroalfa.org/es/articulo/158/El_diseno_ha_perdido_el_rumbo
Magañas Álvaro, http://foroalfa.org/es/articulo/75/Educacion_creativa_y_estrategica_del_diseno
Piazza Jorge, http://foroalfa.org/es/articulo/188/El_perfil_del_disenador_esta_errado
Victores Fabricio, http://foroalfa.org/es/articulo/191/Disenadores_de_la_nueva_era
11