Entrada: Pueblo de reyes, asamblea santa, pueblo sacerdotal, pueblo de Dios.

Bendice a tu Señor.

Te cantamos oh Hijo amado del Padre. Te alabamos eterna palabra salida de Dios.

Te cantamos, oh Hijo de la Virgen María, Te lavamos oh Cristo nuestro hermano.

Nuestro salvador.

Salmo responsorial: Vamos alegres a la casa del Señor

Comunión:

Beberemos la copa de Cristo, en la mesa del Señor. Amén. Aleluya. (bis)

Es la nueva alianza en la sangre del Señor,

Amén. Aleluya. Proclamamos su muerte esperando su retorno.

Amén. Aleluya.

Es la fiesta de Las bodas de Cristo con su iglesia, Amén. Aleluya.

Dichosos los invitados al banquete de estas bodas. Amén. Aleluya.

Salida

Christus vincit, Christus regnat, Christus, Christus imperat.

Iglesia de San Pablo. Dominicos. Valladolid.- Tel. 983 35 66 99 http://sanpabloysangregorio.dominicos.es

HORARIO DE MISAS. Diarios: Mañana: 8:00, y 13:15. Tarde: 19:30.

LAUDES: 07:55 h.- ROSARIO: 19:55 h.- VÍSPERAS: 20:30 Festivos: Mañana: 9:30, 11,30, 12:30 y 13:30.

y sus vísperas: Tarde: 19:30 y 20:30.

IGLESIA DE SAN PABLO. VALLADOLID

2O de noviembre de 2016. * * *

Solemnidad de Jesucristo Sumo Sacerdote

CLAUSURA DEL AÑO SANTO DE LA MISERICORDIA

Recordemos lo que establecía el Papa Francisco en el documento de convocatoria del Año Santo Jubilar de la Misericordia: “concluirá en la solemnidad litúrgica de Jesucristo Rey del Universo, 20 de noviembre de 2016.” Este día, nos recuerda Don Ricardo, nuestro cardenal, en su última carta dominical, tendrá en Roma la clausura de Puerta Santa abierta por el Papa el día 8 de diciembre de 2015 (en los 50 años de la clausura del Concilio Vaticano II). Como ha dicho el Papa, termina el tiempo cronológico del año jubilar, cerrándose la Puerta Santa que es un signo elocuente del paso que debemos recorrer para acogernos a la misericordia de Dios; pero con la conclusión de que estos signos, no cierran el año de gracia, proclamado por Jesús. Continúa el Padre Dios esperándonos; la Misericordia es siempre el nombre más apropiado de Dios; la compasión de Dios era, es y será el “Corazón palpitante del Evangelio”. Podemos estar seguros, como dice el himno de Navidad, que “el corazón más perdido. ya sabe que alguien lo busca”. Dios existe, está cerca de nosotros, nos ama, nos perdona. Nadie tiene razón para decir que Dios no se acuerda de él, y que le ha dejado de su mano. Todos y cada uno somos amados personal-mente por Dios. La puerta de su corazón está siempre abierta... Precisamente en la fiesta de la Divina Misericordia, el II Domingo de Pascua del 2015, firmó el Papa Francisco la Bula de la convocatoria del Año Jubilar de la Misericordia, a punto de ser clausurado este domingo 20 de noviembre. Recordemos que el Papa San Juan Pablo II murió el año 2005 el día 05 de abril, precisamente la víspera de la fiesta de la divina Misericordia. Hace poco, dice Don Ricardo que han celebrado en Roma un Simposio homenaje al Beato Pablo VI. Pues bien, en junio de este año ha sido publicado un texto inédito (de cuando era consiliario de los jóvenes estudiantes católicos en Roma), que lleva por título “Misericordia”. De este texto son las siguientes palabras: “Misericordia. No basta, dice: Dios es amor. Dios ha amado al mundo. Es preciso añadir: Dios es misericordia. Dios ha amado a un mundo culpable. No a los hijos, no a simples criaturas, sino rebeldes, a ingratos, a perdidos. A sus seres ha amado. Seres que no eran dignos, ni útiles, ni agradables, ni buenos para sí mismos, ni buenos para Él. Amando al pecador, Dios da ejemplo de suma indulgencia. Dios ama al malvado no para que sea así, sino para hacer de él alguien bueno”. (IEV. Valladolid, Archidiócesis. Nov.)

Segundo libro de Samuel 3 En aquellos días, todas las

tribus de Israel se presen-taron ante en Hebrón y le dijeron:

“Hueso tuyo y carne tuya somos; desde hace tiempo, cuando Saúl reinaba sobre nosotros, eras tú el que dirigía las entradas y salidas de Israel. Por su parte, el Señor te ha dicho: Tú pastorearás a mi pueblo, Israel”.

Los ancianos de Israel vinieron a ver al rey en Hebrón. El rey hizo una alianza con ellos en Hebrón, en presencia del Señor, y ellos le ungieron como rey de Israel.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial 121, 1-5 R/. “Vamos alegres a la casa del Señor”.

¡Qué alegría cuando me dijeron:

Vamos a la casa del Señor! Ya están pisando nuestros pies

tus umbrales, Jerusalén.

Allá suben las tribus, las tribus del del Señor, según la costumbre

de Israel, a celebrar el nombre del Señor; en ella

están los tribunales de justicia, en el palacio de David.

Carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 1,12-20

Hermanos: Damos gracias a Dios Padre, que nos ha hecho capaces de compartir la herencia del pueblo santo en la luz. Él nos ha sacado del dominio de las tinieblas, y nos ha trasladado al reino del Hijo de su Amor, por cuya sangre hemos recibido la redención, el perdón de los pecados.

Él es imagen de Dios invisible,

primogénito de toda criatura; porque en el fueron creadas todas las cosas: celestes y terrestres, visibles e invisibles, Tronos, Domi-naciones, Principados, Potestades; todo fue creado por él y para él.

Él es anterior a todo, y todo se mantiene en él. Él es también la cabeza del cuerpo: de la iglesia.

Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, y así es el primero en todo.

Porque en él quiso Dios que residiera toda la plenitud. Y por él y para él quiso reconciliar todas las cosas, las del cielo y las de la tierra, haciendo la paz por la sangre de su cruz.

Palabra de Dios.

Santo evangelio según san Lucas 23, 35-43. En aquel tiempo, los magistrados hacían muecas a Jesús diciendo: “A otros ha salvado, que se salve a sí mismo, si él es el Mesías de Dios, el Elegido”.

Se burlaban de él también los soldados, que se acercaban y le

ofrecían vinagre, diciendo: “Si eres tú el rey de los judíos,

sálvate a ti mismo”. Había también por encima de

él un letrero. : “Éste es el rey de los judíos”. Uno de los malhechores

crucifi-cados lo insultaba diciendo: “¿No eres tú el Mesías?

Sálvate a ti mismo y a nosotros”. Pero el otro lo increpaba: “¿Ni siquiera temes tú a Dios,

estando en la misma condena? Nosotros en verdad lo estamos justamente, porque recibimos el pago de lo que hicimos; en cambio, éste no ha hecho nada malo”

Y decía: “Jesús, acuérdate de mí cuando

llegues a tu Reino”. Jesús le dijo:

En verdad te digo: Hoy estarás conmigo en el Paraíso”.

Palabra del Señor.

II CICLO DE DIALOLOS DE SAN

PABLO 2016-2017. Dominicos. Valladolid

* * * Laudato si. La custodia de la creación.

23 NOV. Fr. Ricardo Luis Carballada, Prior de San Esteban y Profesor de la Facultad de teología de Salamanca:

La teología de la creación y la verdad revelada

Miércoles, día 23 noviembre

A las siete de la tarde.

El próximo domingo, 27 de noviembre,

comienza el adviento ciclo A..