Existencia de Dios, fragmento

5
I. LA EXISTENCIA DE DIOS, EL RETO DE LA FILOSOFÍA MODERNA ¿Dios existe?, es la pregunta más difícil que se ha planteado la filosofía. La respuesta, afirmativa o negativa, siempre ha sido insatisfactoria. Del lado afirmativo, los filósofos teístas han sostenido que Dios existe; del lado negativo, los filósofos o ateos (como suele llamárseles) han rechazado fervientemente la existencia de Dios. No obstante, la humanidad desea con mucha fuerza, que los científicos demuestren una u otra posibilidad de una vez por todas. La idea de que Dios puede demostrarse está muy arraigada en la mente del hombre; como Hans Küng apunta: “las pruebas de Dios, tiene una impresionante tradición: los mayores genios de la humanidad le han dedicado sus mayores esfuerzos” (Küng, Hans. (1975 Pág. 722) Dios existe, es la presuposición fundamental y primaria de las religiones más importantes del mundo: el cristianismo, judaísmo e islamismo. Por supuesto, decir “Dios existe” es más fácil que sostenerlo. “Dios existe” es una afirmación que merece ser analizada detalladamente. Porque, cuando se afirma que “Dios existe” no se quiere decir que Dios existe en la mente de las personas, o que Dios existe en otra dimensión del universo. Cuando se dice que Dios existe, significa que existe realmente, en total referencia a su no existencia. Dios no existe, es la vehemente afirmación de muchos científicos: físicos, filósofos, psicólogos, entre otros muchos. No obstante, si probar la existencia de Dios es difícil, probar su no existencia ha sido

description

En realidad, éste es sólo un fragmento acerca de la posibilidad de la existencia de Dios y cómo entonces, se conocería.

Transcript of Existencia de Dios, fragmento

Page 1: Existencia de Dios, fragmento

I. LA EXISTENCIA DE DIOS, EL RETO DE LA FILOSOFÍA MODERNA

¿Dios existe?, es la pregunta más difícil que se ha planteado la filosofía. La respuesta, afirmativa

o negativa, siempre ha sido insatisfactoria. Del lado afirmativo, los filósofos teístas han sostenido

que Dios existe; del lado negativo, los filósofos o ateos (como suele llamárseles) han rechazado

fervientemente la existencia de Dios. No obstante, la humanidad desea con mucha fuerza, que los

científicos demuestren una u otra posibilidad de una vez por todas. La idea de que Dios puede

demostrarse está muy arraigada en la mente del hombre; como Hans Küng apunta: “las pruebas

de Dios, tiene una impresionante tradición: los mayores genios de la humanidad le han dedicado

sus mayores esfuerzos” (Küng, Hans. (1975 Pág. 722)

Dios existe, es la presuposición fundamental y primaria de las religiones más importantes del

mundo: el cristianismo, judaísmo e islamismo. Por supuesto, decir “Dios existe” es más fácil que

sostenerlo. “Dios existe” es una afirmación que merece ser analizada detalladamente. Porque,

cuando se afirma que “Dios existe” no se quiere decir que Dios existe en la mente de las

personas, o que Dios existe en otra dimensión del universo. Cuando se dice que Dios existe,

significa que existe realmente, en total referencia a su no existencia. Dios no existe, es la

vehemente afirmación de muchos científicos: físicos, filósofos, psicólogos, entre otros muchos.

No obstante, si probar la existencia de Dios es difícil, probar su no existencia ha sido

sencillamente imposible.1 Algunos extremistas creen que no forma material, racional o científica

de demostrar que Dios no existe. Porque, mientras más avanzan las ciencias, lo científicos se van

convenciendo de la existencia de un Ser Superior.2

La cuestión de Dios es sumamente importante para la filosofía moderna y posmoderna, por

eso, antes de demostrar su existencia o inexistencia, se tendrá que considerar el “Dios” que quiere

probarse. Es ridículo tratar de demostrar la existencia de algo, sin saber de qué algo significa. Ya

que, como ha dicho Agustín de Hipona: “Dame, Señor, a conocer y entender qué es primero, si

invocarte o alabarte, o si es antes conocerte que invocarte, Mas, ¿quién habrá que te invoque si

antes no te conoce? Porque, no conociéndote, fácilmente podría invocar una cosa por otra.”

(Agustín de Hipona, 410, pág. 1).

1 Esto es lo que opinó William L. Craig en su Debate sobre la existencia de Dios 2 En un artículo del libro de Norman Geisler, ¿Quién creó a Dios?, en las páginas 65-71, William L. Craig escribe de lo mismo.

Page 2: Existencia de Dios, fragmento

1. El Dios que existe

Actualmente es imposible calcular cuántas religiones existen el mundo, ¡mucho menos

cuántos dioses han tenido los hombres! Richard Dawkings, en una entrevista, afirmó que son

más de tres mil religiones con sus dioses; pero, seguro que hay más de tres mil. La pregunta

del millón es: de todos estos dioses ¿quién es el que existe realmente? Otra pregunta curiosa es

¿qué lo hace diferente a los demás? La solución es que el Dios existente debe poseer

características únicas que sólo Él pueda cumplir.

Dios es súper poderoso. Es más, debe ser omnipotente: lo ha de poder hacer todo. Con la

salvedad que este poder no será absurdo. Dios no podrá hacer lo lógicamente imposible, tal

como dice José Martínez (2001 pág. 58) “no entra en el campo de su acción lo absurdo, lo

ridículo o lo contradictorio.”

Dios es súper inteligente. Carl Sagan, el cosmólogo ate, reconoce que el universo es

muchísimo más de lo que el ser humano puede concebir. De esto, también se deduce que el

Dios que existe, ha de ser omnisciente, siendo la omnisciencia de Dios “el perfecto

conocimiento que Dios tiene de sí mismo y de todas las cosas. (Orton, Wiley. 1992. P. 112).

Dios es supremamente moral. El Dios que existe, no ha de estar por encima de la moralidad,

ni por debajo de ella. Dios será moral por naturaleza, sabrá reconocer la diferencia entre lo

bueno y lo malo. También ha de ser moralmente perfecto, es decir: será “la referencia de la

moralidad absoluta en las personas.”3

Dios es necesario. Dios será el único ser que existirá necesariamente: su existencia es

necesaria. Como piensa Agustín de Hipona, Él es simple absoluto y necesario. También

Tomás de Aquino define a Dios como el Único ser qué es incontingente; es decir, que su

ausencia supondrá el fin de todas las cosas contingentes

Dios es único. Debido a que todas las características antes mencionadas sólo puede tenerla

un único Dios. Si Dios ha de ser poderoso, omnisciente, moralmente perfecto, increado,

inmutable, eterno, omnipresente, etc. Por consiguiente, no puede haber dos seres iguales con

estas mismas cualidades, la cuestión de Dios se reduce a la cerrada pregunta: ¿o existe un ser

así, o no lo existe?

3 William L. Craig ha llegado a afirmar que sin Dios no existen valores morales absolutos, en Debate sobre la existencia de Dios: doc. Craig vs doc. Shock

Page 3: Existencia de Dios, fragmento

Entonces, para demostrar la existencia de Dios se tendrá que probar que un ser con esas

cualidades existe. Y entonces, para demostrar la inexistencia de Dios se tendrá que probar que

no existe un ser con esas cualidades. Claro que plantear esa apodíctica es más fácil que

cumplirla. Pues bien, se saben las cualidades de ese Dios que ha de existir o no existir. Pero

sigue la interrogante: ¿Se puede probar su existencia o su no existencia? En el siguiente

apartado se tratará de conocer si es posible probar o demostrar la existencia de Dios.

2. La demostrabilidad de Dios

Para muchas personas y “en opinión de muchos defensores de la teología natural, puede

llegarse a la firme convicción de que Dios existe valiéndose de argumentos racionales.”

(Martínez, pág. 47). Para otras personas “probablemente Dios no existe”; esta es una

afirmación provenida de gente respetuosa, sin fanatismo ni radicalidad. En realidad expresa el

punto de vista de mucha gente, aunque no sea la mayoría.4

Sin embargo, para la mayoría de religiosos, especialmente los cristianos, asegurar la

existencia de Dios es fundamental. “La primera pregunta a tratar en la preevangelización es:

‘¿existe Dios?’” (Norman Geisler y Ron Brooks, 1995. Pág. 19) Pedro en su primera epístola

recomienda: “estad siempre preparados para presentar defensa, con mansedumbre y

templanza, ante todo aquel que demande razón de la esperanza que habita en vosotros.” 1

Pedro 3.15 (Nueva Versión Internacional). Por eso, para los teístas defender positivamente la

existencia de Dios es primordial. Ellos deben estar “siempre preparados” para hacerlo.

Ahora bien, para los del otro bando, demostrar la inexistencia de Dios no tiene tanta

importancia. Por eso quiénes realmente están interesados en demostrar la existencia de Dios,

son los teístas. Y han sostenido que Dios puede conocerse a través de tres testigos.5 La Biblia,

principal fuente de conocimiento de Dios; “la evidencia de que Dios existe se halla, por

supuesto, en toda la Biblia”6. La conciencia humana también habla de la existencia de Dios,

“la naturaleza humana es tal, que necesariamente desarrolla la idea de Dios por medio de la

revelación, de la misma manera que la mente desarrolla el conocimiento del mundo externo a

través de la información que le proporcionan los sentidos. Y de la naturaleza, todo lo que

existe da la evidencia de la existencia de Dios.” (Grudem, Wayne. 2003. Pág. 146).

4 Esto es así en opinión de Juan Estrada, en un artículo llamado “Probablemente Dios no exista”, en la página 2. 5 Esto es lo que defiende Wayne en su Teología Sistemática6 Según José Silva Delgado y otros autores