Todos los indicios así Io su

GffiSIDEI'O§DERO SC

El pasado día 3 de Septiembre, y al igual que otras muchascadenas de televisión de todo el mundo por las mismas fe-chas, Antena-3 emitía en España un documental sobre elpresunto estrellamiento en 1947 de un OVNI en Roswell(EE.UU.) en el que se incluían unas imágenes -nunca emiti-das por televisión en nuestro país hasta ese momento- querecogían la supuesta autopsia que habría sido rcalizada enFort Worth, ese mismo año, a uno de los presuntos seres ex-traterrestres que se habrían encontrado en la nave. La polé-mica en nuestro país estaba seruida. ¿Era auténtica Ia filma-ción? ¿Contábamos, por fin, con una prueba definitiva de laexistencia y visita de extraterrestres a la Tierra? ¿O, por elcontrario, se trataba de un fraude?

oN¡AR ÁLVAREZ

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il

ii

UANDO aquellas imágenes apare-cieron en la pantalla del televisoruna extraña sensación invadió mi

cuerpo. Porque, de ser auténticas, consti-tuirían la prueba más sólida que han tenidonunca los hombres de nuestro tiempo dela existencia de otros seres inteligentes enalgún lugar del universo. Y, sin embargo,las informaciones que desde el principionos habían estado llegando periódicamen-te parecían indicar que se trataba de unhábil montaje. Los numerosos e interesa-dos rumores iniciales sobre la autenticidad-muchos de los cuales luego se demostra-rían falsos- y la propia estrategia planteadapor Ray Santilli Rumours, el productorque "registró" los derechos de la filmación-afirmando que se los compró a un ex cá-mara norteamericano, que habría sidoquien las habría rodado en directo durantelos acontecimientos- filtrando lenta y pro-gresivamente los datos para generar unestado de progresiva expectación, lo que

desde luego logró sobradamente, así pa-recían conoborarlo.

En Gran Bretaña, por ejemplo, cinco mi-llones y medio de espectadores quedaronhipnotizados por las crudas imágenes de la

"autopsia" del cuerpo del presunto extrate-nestre; y sólo 24 horas despuás, la emisoraSKY de televisión anunciaba que, tras laemisión del documental, se habian vendidoen tan cofto lapso de tiempo, ¡23.000 co-pias!de la película "H lncidente Roswell".EnAlemania, por su parte, fueron cuatro millo-nes las personas que siguieron las peripe-

cias de los anónimos patólogos. Otros mu-chos millones de telespectadores, aunqueno tenemos las cifras exactas, las contem-plaron igualmente estupefactos en EstadosUnidos, Francia o Japon. En España, la au-diencia de Antena 3 fV, que emitió una pe-queña parte de la cinta con la autopsia -unos 4 minutos, aproximadamente- llegó asuperar los tres millones y medio de espec-tadores en la noche del pasado domingo 3

r sffisttTIINMOffiF

de Septiembre. Y, tras su emisión, las reac-ciones no se hicieron esperar; cautela yemoción contenida por un lado; y escepti-cismo, comprensible, por el otro. Por su par-

te, el informativo de la tarde dirigido y pre-

sentado por Lurb Maiñas en Tele-S llamabala atención horas antes dando un amplio re-portaje sobre el caso, pero proyectandoimágenes de la película de cine que en sudia se rodó recreando lo ocumdo... sin infor-mar al público de que lo que estaban viendono eran las imágenes supuestamente autén-ticas de las que estaba hablando.

IINA AUTOPSIA POCO ESCRT'PUIOSA

Debemos recordar que la primera pro-yección pública masiva de las imágenes dela "autopsia" tuvo lugar pocos días antes, en

Sheffield, al norte de lnglatena, ante un mi-llar de estudiosos del fenómeno OVNI. Du-rante la misma, Ray Santilli, de 39 años, ase-guró por enésima vez que la filmación habiasido tomada por un cámara octogenariomientras trabajaba para el Ejército en 1947.

Y disculpó los bruscos movimientos de las

imágenes y la pérdida del enfoque por la di-ficultad de operar con una r(7ida indumenta-ria que, entre otras cosas, no le permitia ob-tener más que una escasa visión a través de

una pequeña abertura frente a sus ojos.Santilli aclaró que la cámara, cuyo modelo

En esta doble página, en la parte inferior,algunas de /as rnslanfáneas

enfresacadas del documental emitido enEspaña por Antena-3 en las que puedeverse al presu nto ertrabrresfre cuya

autopsia se supone fue realizada en FartWorth, a donde habría sido trasladado el

cadáver desde Soswe//.

no ha dado a conocer, no disponia de obje-tivo macro y ello explicaba los continuos de-senfoques cuando el plano se ciena.

La filmación, que tiene una duración totalde 91 minutos, muestra tres procesos deautopsia bien definidos: un primer corte, de7 minutos de duración, donde puede verse,tendido en una mesa situada en el interiorde una tienda de campaña, el cuerpo de unextraño ser que examinan dos hombres a laluz de una lámpara de petróleo, pareciendoque están tomando un pedazo de piel deuno de los brazos. (Ver MAS ALLA DE LACIENCIA n" 77.)

La segunda "autopsia" fue mostrada porprimera vez el pasado 26 de Abrit a Mauri-cio Baiata, productor independiente de te-levisión que trabaja desde hace tres añospara el italiano Centro Ufológico Nacional(CUN), a fin de sondear su posible interésen adquirir los derechos de emisión paraItalia. Baiata pudo ver en aquella ocasión12 minutos más de película, que mostrabana un ser desnudo dentro de una sala de au-topsias, aparentemente más descompuesto

que el primero. En esta escena, sin embar-go, los "doctores" que aparecen en el filmno llevan gúantes, si bien utilizan máscarasde cirujano.

Se conocen, por último, 1B minutos másde película, de los que forman parte las imá-genes difundidas por la cadena española detelevisión. Este fragmento del celuloide ex-hibe un proceso de autopsia que dura apro-ximadamente 50 minutos y tiene lugar enuna sala de pequeñas dimensiones quemuestra en una de sus paredes un reloj y unteléfono. También deja ver la presencia deotra persona, ataviada con máscara de ciru-jano, que parece dirigir la operación de ex-tracción de órganos y tejidos.

Queda añadir, finalmente, que en la en-kevista que mantuve hace un par de mesescon Santilli, éste me aseguró que disooníatambién de imágenes de la recuperacióndel objeto, así como de los materiales res-catados del presunto OVNI estrellado.

Debo decir que, en el primer visionadode las cintas, gran parte de los 105 asisten-tes del que fuera denominado 8th lntema-

tiona/ UFO Congresg celebrado en la Universidad de Hallam, en Sheffield, (lnglatena)-uno de cuyos organizadores, del que luegohablaremos, es Phillip Mantle, del BritishUFO Research Association (BUFORA)-, lle-garon a la conclusión de que la película esauténtica. Algunos albergaban, por el con-trario, serias dudas; entre éllos, expertos -anatomistas como el prestigioso doctorFred Spoors, para quien "la ciatura es sos-pechosamente humana". Otros, finalrnente,entendían que la filmación, sin ningún géne-ro de dudas, es un montaje fraudulento; esosí, muy bien presentado.

¿ES IIN MONIAIE ERAIIDIIIJEI\¡-f O?

A lo largo de este medio siglo se han re-cogido más de 200 testimonios .directos oindirectos- relacionados con el incidente deRoswell. Y, como ha hecho notar el estudio-so español Ramón Oroz, ha habido decla-raciones de todo tipo. Entre ellas destaca,por su importancia, la de la mujer del pilotoque presuntamente habria transportado losrestos de la nave y a sus supuestos tripu-lantes, el comandante Henderson, al afir-mar que, antes de morir, su esposo le contóla historia y le aseguró que era real; si bienañade que jamás Ie mencionó que existieseuna filmación.

De hecho, y este es uno de los puntosclaves de la cuestión, hay dos aspectosfundamentales cuya aclaración permitiríandespejar la incógnita sobre este excepcio-nal documento gráfico. Por un lado, presen-

n uno enlrevista personol que mclnluve hdce un parde meses con Sontilli -ofirmo el outor de estereparimágenes de lo recuperación del obieto, osímaterioles rescotodos del OVNI estrellodo.

toie- ésre me oseguró que disponía tdmbién delnes de lo recuperación del obieb, osí como dede

Baio estas líneas, diversos momentos de la autopsia. En la parte superio¡ y de izda. a dcha., fotograma correspondiente a la imagenemitida por la RTL alemana en la que puede verse a un grupo de hombres en dirección at supubsto OVN\ eétrettado; a su dchi.,

supuesúos reslos en fotograma emitido por el Canal 4 británico; en el centro, y a su lado, momento en que un cirujano se dlspone a?xlraer velg legro de los ojos con unas pinzas; en el extremo derecho, el cirujano abre el cráneo con ayuda de uña sierra. Eit ta f¡tainferior, a la izda., la piel es echada hacia delante, viéndose un cerebro con pocas arrugas y de pequeño tamaña (¿hidrocefatia?); a

su lado, el cirujano iefe dirige la operacíón desde detrás del cristal; en el centro, aspecto de ta p6¡s superior abierta, que, siÁembargo, no permite apreciar.los órganos-.internos con claridad; a la dcha., el cadáver, tras ser abierto en'canal; por último, imagen

que deja ver los aificios de vaciado de las fluídos corporales de la mesa de autopsias.

tar públicamente al autor de la filmación, alcámara que hoy se esconde en el anonima-to y cuyo nombre ni siquiera ha sido facilita-do; y, por otro, la datación de la pel'aula pa-ra saber su antigüedad real.

En ese sentido, y aunque Santilli nuncaha querido confirmarlo -ni desmentirlo- elcámara, hoy octogenario, habría sido -se-gún Phillip Mantle- un tal Jack Barnett oBarret. Y si bien algunos investigadoresaseguran que efectivamente el autor fue él yvive aún en Cincinnati, en el Estado de Ohio(EE.UU.), otros, como elfísico nuclear Stan-ton Friedman, ponen en duda que algunavez sea presentado públicamente porque,sencillamente, dudan de que exista. De he-cho, las indagaciones que yo mismo he po-dido realizar personalmente evidencian queen 1947 no existía ningún Bamett entre elpersonal de la base militar de Roswell. Aun-que al comentarle este hecho a Phillip Man-tle, que como ya he menclonado fue quiendio su nombre como autor de la filmación,éste argumentaria que el cámara no era dela base, sino que habia sido enviado ex pro-feso desde Washington para tal misión.

¿Y DE QIrIÉN SE OCIIr,Tf,, EL C,IíMARAIAI{TTSMA?

Lo cierto, sin embargo, es que el investi-gador británico George Winfield constatópronto que, efectivamente, existió un talGrady L. "Barney" Barnett relacionadocon el caso, que habria sido testigo directoy habría visto, incluso, los cuerpos aquel Ju-lio de 1947. Sólo que esa persona murió en1969... y, por tanto, no estando vivo hoy, di-fícilmente podría haber vendido material al-guno a Santilli.

Lo que nos lleva, lógicamente, a plante-arnos sisu nombre no habrá pretendido serutilizado como "pantalla" de una operacióncomercial fraudulenta...

üra de las cuestiones que no ha trascen-dido a la luz pública son algunas de las pr+tendidas "confesiones" que el misterioso cá-mara -Bamett o quien fuera- habría hecho aSantilli. Entre ellas, que había visto ¡vivos! alos "monstruos" -asíhabría calificado a lospresuntos extraterrestres- en el desiefto e,incluso, que éstos aullaban sin cesar. Esmás, los militares, según su relato, la habíantomado a golpes de culata con ellos. La ufó-loga Jenny Randles, que se hizo eco de es-tas declaraciones del productor británico,agrega que uno de ellos fue incluso atado aun jeep y anastrado por el desierto. Lo que,en opinión del controvertido ufólogo españolVicente Ballester Olmos, ponente en elcongreso de Sheffield, no deja de ser un ele-mento delirante más dentro de esta historia.

Lo importante, en cualquier caso, es queSantilli, pese a la presión de varias cadenasde televisión, que querían presentar al cá-mara como testigo en sus documentales,se ha negado en redondo argumentandoque el anciano ex oficial de la USAF se es-conde por tres motivos: el temor a declararlos beneficios de su venta, el bienestar desu familia (especialmente sus nietos) anteuna hipotética "venganza" por haber revela-do el secreto y eljuramento de fidelidad he-cho a su pa's. El argumento deltemor a Ha-

cienda se antoja, sin más, ridículo; casi tan-to como el temor a una presumible "ven-ganza" del Gobierno norteamericano. Encuanto a su juramento, nadie puede creer -si la historia es cierta- que el tal Barnett ibaa haber tenido escondidas en el sótano desu casa durante 48 años las controvedidasfilmaciones y, después, vendedas por dine-ro, traicionando al Gobiemo de su país, quesería el propietario legal de las mismas, yalegar que no puede aparecer públicamenteporque quiere ser "fiel" a su patna. La con-tradicción es evidente.

EL CELUIOIDE, Á EI(AMEN

La daiación de la antigüedad de la peli-cula es otro de los puntos fundamentales aresolver. Santilli me aseguró personalmenteque habia hecho analizar el material en treslaboratorios distintos (ver MÁS ALLA DE LACIENCIA no 79). Uno de los "expertos" fueLaurence Cate, quien hizo su análisis enHollywood. Pero he aquí que el Sunday Ti-mes ha averiguado que el "experto" Catees, en realidad, un simple vendedor de Ko-dak, no un analista.

En cualquier caso, otro de los análisis fuerealizado en lnglatena por Peter G. Milson,determinando, tras examinar las filmaciones,

oy dos osrytos fundamentoles cuya ocloración

presenlor públicamente ol autor de la filmoción, ol

que los códigos del proceso industrial se re-

piten cada 20 años y que los que pre-serta

ia película pueden ser de 1927, 1947 o1967. Sin embargo, el texto de Milson, al

que también ha tenido acceso MAS ALLA

Óf n CleUCA, omite deliberadamente el

año 1987, su informe no posee membretede Kodak y el fax que muestra a pie de pá-gina pertenece en realidad aMafueting Plan-

nihg Manager, Motion Picture & Television

lmáging y no a la multinacional alemana. En

conáuéién, es rotundamente falso, contra lo

que ha venido afirmando Santilli, que la casa

Kodak haya analizado el material.En cambio, hay que decir que la cadena

norteamerican a Fox der;luÓ el 28 de Agos-

to pasado haber realizado por su cuenta un

análisis químico de la pel'aula y los resulta-

dos apuntan al año 1947 como fecha de fa-

bricación de la misma. Añadiendo que la

doble perforación del celuloide y la ausen-

cia de soundtrack (pista de sonido), acredi-tan la antigüedad del film.

Si esto fuera así, es decir, que la cinta es

auténtica, ello no excluye que hubiera sido

un montaje fraudulento hecho en 1947 o en

años posteriores por motivos y razones que

hoy desconocemos; incluso, podia ser tam-bién una auténtica autopsia, pero hecha a

una joven aquejada de progeria, como ex-

plicaremos más adelante.

IIN f

'ESCENARIO " PERTECTO

Hay que reconocer, en cualquier caso,que el escenario es perfecto. De hecho, al

analizar las imágenes en detalle los prime-

ros elementos objeto de debate fueron lamesa de operaciones, el cable del teléfono

y el reloj que colgaba de una de las paredes

de la sala de autopsias, siendo estudiadoscon posterioridad los tra¡es empleados por

los patólogos y las técnicas e instrumentos

utilizados para realizar la autopsia.Pues bien: las últimas investigaciones

apuntan a que, efectivamente, se trata deuna mesa de autopsias con aguleros para

recoger los fluidos, típica de esa época. En

cuanlo al cable en espiral del teléfono, que

hizo sospechar que hubiera podido ser ins-

talado en los mismos años más tarde, se

confirmó que ya era utilizado en 1945; por

último, quedó igualmente constatado que

los primeros relojes del tipo que muestran

las imágenes aparecieron en 1938.En cuanto a los trajes, son los típicos que

se usaban en instalaciones químicas o nu-

cleares. Y considerando que Roswell era

entonces el único lugar del planeta que dis-ponía de esa tecnologia, entra dentro de loposible que tales indumentarias estuvieran

allí. Aunque se hable de que la disecciónfue practicada en Dallas.

En suma, ninguno de esos elementosdesmiente la hipótesis de la autenticidadde la película; pero tampoco permite

descartar que no fueran buscados cuida-dosamente parala "puesta en escena" -

tuviera ésta lugar en 1947 o en 1992-máxime si se sospechaba que cualquieraspecto sería investigado con detalle,como así está sucediendo.

AIITOPSItrI! : OPINIONES DISPARES

En lo que se refiere a las autopsias, las

opiniones son más dispares. Así, la cadena

aiemana RTL puso en manos del profesor

Wotfgang Eisenmenger, uno de los pató-

looos más reconocidos del país germano,

uña copia de la filmación. Visionada la mis-

ma, este forense admitió que tanto los ins-

trumentos empleados como las técnicas se

conesponden con las de hace 50 años. Pe-

ro lo que no concuerda -añadió- es la esca-

sa salida del fluido sanguíneo por las inci-

siones. Por su parte, el forense italianoPaolo Fiorino explicó que las imágenesmuestran un cuerpo con ausencia de rigormots (a clásica rigidez de los cadáveres),por lo que cabe deducir que el cuerpo de-bia haber fallecido poco tiempo antes. Pero,

de ser así, debería verse en las imágenes

fluir la sangre de forma más abundante'En cuanto a la abertura del cráneo -se-

gún opinión de Eisenmenger- é¡ta es'poc9-profeiional" . " Parece -añadiía-que están

cortando pan; aunque es crbrto que esto no

exctuye nada porque también en la autopsia

del presidente Kenndy se cometieron mu-

chós enores y nadie cuestionó la autentici-dad de /os forenses".

Por su parte, el doctor Paul O'Higgim'del lJniversity College, de Londres, y habi-tual en los foros de lntemet, cuestión que

e ssegurs que-el.desconoeido cámars glle rodóloÁ pátiruta'§ do la presunta autapsia allas películas de la presun¡o au.toPsts st

.

extiaterrestre confesó a Sontilli haber visto§upuesfos alienígens§ 's los que ealificó da

"monslruo§", no da exlraterre§lra§' vivos,

g

carriando y aullando p§r cl desierla,

los

luego comentaremos, declaraba reciente-mente al diario Obseruer que § pensamospor un momento en que rcalmente eran loscadáveres de seres de otro mundo, hubiensido una opot'tunidad única para los científi-cos. ¿Debemos creernos, pues, que losiban a haber descuarilzado en una sola ta-de? Yo hubiera necesitado semanas pararealizu una autopsia como esa".

¿sE PODÍAN,,FABRIC.ER" CIIERPO§AI¡IEI'I1947?

Rolf Gisen, veterano especialista en larealización de efectos especiales, entiende,por su pafte, que en 1947 era imposible "fa-bricar" un cuerpo de las características delmostrado en el film, ya que ese tipo de téc-nica empezó a desanollarse en la décadade los sesenta. Sin embargo, una atinadaobservación del investigador español Pe-dro P. Canto, que ha analizado los fotogra-mas a través del ordenador, observó uncorte "excesivamente limpio" en la muñecaderecha del supuesto alienígena, como si

hubiera sido hecha a un muñeco. En defini-tiva, seguimos sin respubsta. Máxime si el"muñeco" hubiera sido fabricado reciente-mente y utilizado posteriormente para la"representación" que luego seria filmada.

Porque de ser un trucaje, los timadoreshabrian valorado hasta el más mínimo deta-lle. Hasta tal punto que Mantle pudo distin-guir, para su sorpresa, el nombre de DeüevBronk en la parte superior del libro de notasde uno de los médicos que ayudan en laautopsia. Y también Baiata declaró habervisto subtítulos en la filmación de 12 minu-tos que visionó y que, textualmente, decían:

En la página anterior, a la izda., Walter Haut,rclacianes públicas de la base de Roswell en1947 cuando fue entrevistado rec¡entemente

por aÁs ettÁ DE tA ctENctry a su dcha., elpatólogo Wolfgang Eisenmengeq debajo, unade las 22 latas que presuntamente contenían

la filmación original -en 16 mm.- de laautopsia. En esta pá9., aniba, a la izda., Pedro

Cantó muestru su hallazgo al autor de estereportaje; debajo, pimer plano de la imagen

del ordenador. Sobre esfas líneas, Ray Santilli.

"Autopsia ejecutada por Detlev Bronk". Cla-ro que lo mismo que pueden ser detallescuidados... podrían servir para demostrarsu autenticidad. Seguimos a oscuras...

En cualquier caso, el hecho de que apa-rezcan algunos subtftulos y que algunas delas imágenes proyectadas por las emisorasde televisión parezcan secuencias montadas,sugiere una hipotesis según la cual el materialfilmado peftenecería a algún documental.Mantle, que ha mantenido una extraña acti-tud frente a este asunto, descarta la idea deque las imágenes formen pañe -como tam-bién se ha sugerido de un documental brasi-leño hecho en los años 60. Winfield, por supañe, propuso también la idea de que estasautopsias pudieron haber sido creadas por el

propio Gobiemo de los Estados Unidos emo video de formación para actuar de formaefectivafrente a un eventual contacto.

¿SON LOS SIIPIIESTOSnr¡n¡rsRREsrREs JóvENEsPREMA,TIIRAMETI¡'IE ENVEIECIDOS?

En las últimas semanas, los expertos han

trasladado sus hipótesis a otros campos.Walter Andrews, por ejemplo, plantea laposibilidad de que el pequeño ser que sehalla tendido en la mesa de autopsias pue-

da ser un joven aquejado de progeria. Estaenfermedad hereditaria afecta a niños queviven muy pocos años y envejecen muy rá'pidamente; por eso carecen de vello y demadurez sexual. Y, con frecuencia, son fo-co de otras enfermedades como la hidro-cefalia, lo que justificaría la gran capacidadcraneal del supuesto extratenestre.

Esta hipótesis, sin embargo, no explica-ria la ausencia de ombligo ni los seis dedosen las cuatro extremidades. Detalle que haplanteado otra hipótesis: la de los experi-mentos genéticos. La pequeña entidad po-día ser, en tal caso, un ser humano genéti-camente manipulado o una mutaciónespontánea fruto de los ensayos nuclearesen la zona. De hecho, cabe destacar queSantilli ha declarado que el cámara nuncase ha referido a estos pequeños seres co-mo procedentes del espacio exterior, sinoque en sus mnversaciones siempre hablóde ellos como "monstruos".

lndicar, finalmente, que para el veteranoufólogo español Antonio R¡bera, que visio-nó la película emitida por ,Antena 3 fV en el

Centro Civico de Sant Feliu de Codines jun-to a decenas de personas, el prsunto ex-tratenestre -que fuera bautizado como Bos-wie- no es auténtico. Ribera se inclina porpensar que el documental podría ser unfragmento de alguna pel'tcula de ficción, porcuanto la anatomía de los supuestos extra-terrestreis no se corresponde con ningunade las descripciones habituales de los hu-manoides.

ELNEGOCIODELAÑO

En cualquier caso, Santilli ha ganado mu-chos millones con la venta de las imágenesa las cadenas de televisión de todo el mun-do, aunque éstas sólo mostraron luego unapequeña parte de las aüopsias. Claro que

existe, además, otro negocio: el que gener¿t

el inierás de los denominados Lrfofans, quie'nes a traves de lntemet pueden conseguir,por "sólo" 33 libras esterlinas (unas 6.500ptas.), copias del video de la autopsia.

Y para apoyar la hipotesis de que detrásde todo hay, sobre todo, un excelente nego-cio, solo falta añadir que el subteniente Wal-ter Haut, relaciones públicas de la base deRoswell en 1947, se ha asociado con el se-puhurero del pueblo en aquella época para

aprovechar el tirón publicitario que el temaha levantado en Estados Unidos. Así, segúnha podido saber H¡ÁS ALLR or n clrruÓn,en principio trataron de comprar los terenos-de titularidad privada- donde supuestamen-

a codens nork;omericana Fox decloró que lo cints deSantilli se fabricó, efeclivamenb, en 1947. Pero ounsiendo esto así, ello no exduye que hvbiera sido unmontuie froudulento hxho en 1947 o en clñosposteriores por motivosy razanes qve hoydesconocem os; incluso, podrís ser también unaauléntica autopsia, Wro hecho a uns ioven aqueiod¿de prageria, camo explicaremos más adelonte.

after the shuttle erew Pieked ffiup the alien's distress eall i*'ñiile orbitine f4arth on

^tluil ',i,fii

8_

The astrofiauts were appnr'entlv authorized to attenrpl c

docking with the alien's bus'sized. bullet.shaped craft.

te se habÍa estrellado el OVNI; pero, ante lanegativa del propietario de los mismos, recu-nieron a otra estratagema: mod¡f¡car su testi-monio sobre el lugar donde cayo el misterio-so objeto, situándolo unos kilómetros másallá... Y de esta forma, explotar turísticamen-te elcaso.,. Sin comentarios.

Claro que, por todo ello, hay quienes op¡-nan que el propio Santilli no es sino otra'!íc-tima" de este tipo de intereses comerciales.Cuando lo ciedo es que, auténtica o falsa, lapelícula ha proporcionado a áste el mejor n+gocio de su vida. Porque, ¿qué opinar de s-ta declaración reciente del propio Santilli a larevista alemanaFOCUS?:'Yo no digo que lapelícuh sea auténtica; yo solo digo que todoel mundo la debe ver y sacar sus proprasconcfu §tones". Esclarecedor ¿no?

Diversas fuentes aseguran que el pro-ductor británico se vio obligado a asociarsepara hacer frente al pago de 100.000 dóla-res -unos 13 millones de pesetas- por elmaterial gráfico. Suma muy elevada y difícilde conseguir para una pequeña empresaque se gana la vida con libros y videos deElvis Presley o Brian Jones. Por eso, y apesar del marcado cariz económico que elasunto ha puesto de manifiesto, hay quie-nes siguen pensando que tras la financia-ción de Santilli, y tras la pel'rcula y la estrate-gia de acudir a los testigos y ponerlos entrela espada y la pared para conseguir certifi-car su autenticidad, se esconden podero-sos intereses. Pero, ¿cuáles? ¿Con qué in-tenciones? ¿Desacreditar el caso Roswell?

¿Desprestigiar el movimiento ufológico?Desde el primer momento Santilli ha par-

ticipado activamente en la discusión del te-ma a través de la red mundial lnternet, unade las más potentes vías de la informacióny auténtico nido de rumores. El congresistapor Nuevo México Steven Schiff promete,además, nuevas revelaciones en los próxi-mos meses. Sin embargo, otros, como elagente especial Richard Doty, quitan hierroal asunto y, tal como adelantábamos en pa-sadas ediciones, opinan que el video bienpodríia ser una falsificación de la que el Go-bierno nofteamericano, a través del Depar-tamento de las Fuezas Aéreas de lnteligen-cia Espacial(AFOSD, ya tenía noticias en1980. Las piezas del rompecabezas siguen,pues, sobre la mesa.

IIiITERNET: EL NIIHTIO fORO DEINTRIGÁST'TOLóGICAI;

Y es que son muchas las cosas que no en-cajan en esta historia. Por ejemplo, que PhillipMantle juegue en ella tan extraño papel desded principio. Porque, a diferencia de otros di-rectivos del BUFORA, tanto Mantle comoCal Nagaiüs, coautores en 1994., por cierto,del libro UFO aMuctions, witl'tout consent, sehan mostado ambiguos ante la opinión públi-ca a la hora de pronunciarce sobre la autenti-cidad de las imágenes, pero sus intervenciones han sido esenciales pam que la operaciónde Santilli encont"ra apoyo en las emisorasde televisión. Y, además, Mantle y Nagaitishan sido los coorganizadores del VlllCongeso lntemacionalde üologia recientemente ce-lebrado en Shefield, convertido asíen la ne-cesaria plataforma de presentación de las

ui Dean's sourees §aY the

pel'aulas. Por otra parte, sus investigacioneshan ayudado, si bien indirectamente, a inclinarlabalanza hacia la posible autenticidad delasunto, confrmando en algunos casos rumo-res que habian sido vertidos por el propioSantilli en lntemet (ntemational Network ofComputers), una potente autopista de la infor-mación a la que acceden desde sus respecti-vas terminales más de treinta millones deusuarios. De hecho, fue através de ella mmoSantilli y sus colaboradores fltraron los prim+ros rumores de la existencia de la película.

He aquíalgunos ejemplos y sus contra-dicciones:

1. Carl Nagaitis difunde el rumor deque Steven Spielberg está interesado enhacerse con los derechos de las cintassobre la autopsia para utilizarlas en unfilm que preparaía sobre el incidente deRoswell, recabando así, indirectamente,la atención de los medios de comunica-ción de medio mundo.

- La mentira se descubre al ser rápida-mente desmentida; pero el efecto -conse-guir la atención de los medios- se ha con-seguido.

2. Elsocio de Sanülli, Chris Cary, dise-ña una estategia de mercado basada enrevelar datos gradualmente y sólo en elmomento en que se conseguía elclímaxde inteÉs adecuado.

- Curiosamente, el congreso ante más demil personas, especialmente periodistas einvestigadores ufológicos, para exhibir lasimágenes de la película de la autopsia, loorganizan Mantle y Nagaitis.

3. Alguien cree reconocer en las imá-genes mostradas por Santilli secuenciasde un antiguo documental= "UnsolvedIt/lysteri*".

- Phillip Mantle desmiente de inmediatotal posibilidad. ¿Por qué sin investigarlo?¿Conoce talvez ese documental?

4. Se denuncia que las técnicas de ro-daie no se coresponden con las de 1947.las cámaras de la época emn muy pesa-das, poco manejables y solían colocarceen trípode. Difícilmente podía rodarsecon ella sobre el hombro, de forma móvil,como sugieren las cintas de Santilli.

- Este explica que la peculiaridad de las

inguno de los elementos que oparecen en lapelícvla desmienten la posibilidad de que seoouténlica; pero ellono fueran buscados

tampoco Wrmite descarlor qaecuidadasamenb psro la

"puesla en escena", máxime sí se sospechoba quecualquier aspecto sería investigado con detalle,coma ssí está sucediendo.

Los montajes fraudulentos eon presuntos extraterrestres y su relación con seres humanos son habituales en la prensasensacionalista norteamericana. En esta doble página, una buena muestra de ello.

5¿

tomas rodadas se debe a la molesta indu-mentaria del operador que, además, teníaque desenvolverse en un pequeño espaciocompartido con los málicos. Sin embargo,existen distintas secuencias en las que el

cámaraestá a solas con el cadáver del pre-

sunto extratenesire y no hay ni un solo pla-

no rodado con trípode.5. Los expertos denuncian que el

cuerpo no posee el clásico rigor mortisde un cadáver por cuanto los cirujanos -según las imágenes vistas- mueven sindificultad algunas articulaciones, demos-trativas del escaso tiempo transcurridodesde la muerte delpequeño ser.

- No se explica, en consecuencia, que nose aprecie mayor cantidad de fluidos. Laduda de que sea un ser vivo se hace máspatente. Y,

6. Toda la puesta en escena es tanmeticulosamente real, está todo tan ensu sitio y con tan sutil detalle, que pare-cieran iustificar que Ia película es, en ver-dad, auténtica, rodada bn 1947.

- Los expertos, sin embargo, señalan nosolo que la autopsia no se hace conecta-mente por los supuestos patólogos, sinoque hubiera sido imposible realizarla enunas horas como sugiere el film. Es más,añaden que si se tratara realmente del ca-dáver de un extraterrestre jamás se hubierahecho la autopsia en una tienda de campa-ña, con medios tan rudimentarios inclusopara la época, en condiciones totalmenteinapropiadas por muy en secreto que sequisiera mantener, con tan escaso personal

cualificado y de manera tan burda. El traba-jo hubiera tenido que haber sido muchomás eficiente, elaborado y complejo.

En definitiva, estos detalles y muchosotros que harían excesivamente extensoeste ar1ículo, justifican la incredulidad res-pecto de la autenticidad de tales cintas. Nosomos nosotros, en cualquier caso, quienes

debemos probar que tales cintas son un

fraude, eso sí, bastante bien montado. SonSantilli y sus colaboradores quienes debendemostrar fehacientemente que no' son

unos simples embaucadores. Primero, dan-do a la opinión pública el nombre del pre-sunto cámara que rodó las imágenes y selas vendió, y presentándolo públicamentepara ser intenogado; y, segundo, entregan-do a instituciones verdaderamente cualifica-das material filmográfico para corroborar,cuando menos, la fecha exacta de la fabri-cación de la película. Lo demás son ganas

de perder el tiempo.Sólo una duda permanece en mí: si la

pel'rcula es un espectacular fraude, ¿se es-conde tras ella un simple montaje para ha-cer dinero fácil? ¿O, por el contrario, escon-de una intención inconfesable? He dereconocer que no tengo respuesta. Perohay algo que los lectores deberían tenerclaro: existen muchas posibilidades de que,

efectivamente, en el año 1947 se estrellaraun OVNI en Roswell. Las evidencias en esesentido son abrumadoras y pocos investi-gadores rechazan ese hecho. Luego, sien-do esto así, ¿hay detrás de la operaciónque nos ocupa un intento de desprestigiarel "incidente Roswell" con la táctica de pro-vocar primero la creencia de que había en

el interior de la nave extraterrestres, algunosincluso vivos, y luego "desvelar" la verdadpara desánimo de quienes aceptaron la his-toria inventada como auténtica, consiguien-do así que luego nadie acepte tampocoque, en efecto, se recuperaron los restos deuna nave extraterrestre? Dejo al lector que

saque sus propias conclusiones.

]osep Guijano

I propietario de lo películo de lo outopsio alpresun¡o coo,(,ver dedeclorado recientemt

§us propiss conclusiones'r,

39

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«MAS ALLA DE LA CIENCIA,'es una publicación de J. C.

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o parcial de los lF-rtos eimágenes si, au to r¡ zac ió n

expresa porescrlto,Precio:4O0 ptas. (lVA incluido)

EL ffEXTRATERRESTRE''DE ROSWELL

A emisión por diversas cadenas de televisión de med¡omundo de unas imágenes que recogen la supuesta au-topsia que habría sido realizada en Fort Worth a uno delos presuntos seres extraterrestres que se habrían en-contrado en el interior de un'OVNI estrellado el año

1947 en Roswell (EE.UU.) ha conmocionado, comprensiblemen-te, a millones de personas. Especialmente porque hay suf¡c¡en-tes indicios para pensar que la película es autént¡ca. Pero tam-bién de Io contrario. Por eso, y aún siendo consc¡entes de queasum¡mos una toma de posición m¡noritar¡a respecto de las opi-n¡ones exprgsadas ¡asta ahora por la mayor parte de los espe-cialistas, MAS ALLA DE LA CIENCIA, que fue la primera publ¡ca-ción española en dar cuenta, con var¡as semanas de antelación,de la ex¡stencia de esas c¡ntas, no puede dejar de expresar suconvenc¡miento, ante las investigaciones y ev¡denc¡as que pose-emos hasta la fecha, de que la película es un montaje fraudulen-to. lgnoramos, por supuesto, s¡ en el trasfondo de todo ello exis-te sólo un ¡nterés comerc¡al o si alguna institución oficial,lógicamente norteamericana, se halla detrás de lo que podríaconst¡tu¡r un ¡ntento de desprestigiar el asunto del Ilamado inci-dente Roswell. Porque podría suceder que Ia intención oculta delos autores de tal montaje fuera, en pramer lugar, interesar y con-moc¡onar al público en general, tras engañar a los especialistas,con unas imágenes que vendrían a demostrar no sólo que exis-ten seres extraterrestres, sino que v¡s¡tan la Tierra y que el Go-bierno de los Estados Unidos tiene en su poder restos de susnaves y cadáveres de sus tr¡pulantes; para, luego, desvelar elfraude y desprestigiar así ante la opinión pública y los medios decomun¡cación social -ante éstos, sobre todo- cualqu¡er otra ¡n-formación que en el futuro puC¡era cqnocerse sobre el caso. Almenos, así lo pensamos en MAS ALLA DE LA CIENCIA. Porque,a¡ margen de la pe¡ícula ahora n'encontrada", lo cierto es queexisten ev¡dencias suficientes para concluir que, en.efecto, unOVNI se estrelló en Roswell en 1947. Pero no hay prueba algunade que tal artefacto estuviera tripulado. Un solo dato más: el Go-bierno noñeamericano real,tzaba en esa época en Roswell prue-bas secretas de viabilidad de "platillos vo¡antes", varios de loscuales se estrel¡aron. Y parece que algunos de ellos fueron ocu-pados por monos, como luego se hiciera en el caso de las navesespac¡ales. Su visión -o la de sus cadáveres- pudo confundir alos testigos. Y esos testimonios utilizarse ahora para rrcorrobo-rat" ,a autenticidad de esos rrextraterrestres" que todos hemosvisionado en tan polém¡cas cintas.

ITIVENfARIO