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EL ACTO JURIDICO Fernando Vidal Ramírez LAS MODALIDADES DEL ACTO JURIDICO 122. PREMISA En el desarrollo de la estructura del acto jurídico hemos señalado entre sus elementos a los llamados elementos accidentales (Supra Nº 33). Indicamos que estos elementos no se ligan ni a la esencia del acto jurídico ni corresponden a la naturaleza propia de un acto determinado, pues son incorporados por las partes en ejercicio de la autonomía de su voluntad pero siempre que no desvirtúen la esencia o naturaleza del acto y que no resulten contrarios al orden público. Por eso, Messineo indica que pueden, indiferentemente, existir o no existir. Los elementos accidentales vienen a ser lo que el Código Civil denomina Modalidades del Acto Jurídico, considerando como tales a la condición, al plazo y al cargo, también llamado modo. Pese a que la denominación de modalidades deriva de esta ultima, Josserand considera a las dos primeras como las modalidades por - excelencia, criterio que hacemos nuestro y que más adelante explicitaremos. En el desarrollo de los elementos accidentales y atendiendo a la posibilidad de su incorporación al acto jurídico,

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Eric Palacios Martnez

EL ACTO JURIDICO

Fernando Vidal Ramrez

LAS MODALIDADES DEL ACTO JURIDICO

122. PREMISA

En el desarrollo de la estructura del acto jurdico hemos sealado entre sus elementos a los llamados elementos accidentales (Supra N 33). Indicamos que estos elementos no se ligan ni a la esencia del acto jurdico ni corresponden a la naturaleza propia de un acto determinado, pues son incorporados por las partes en ejercicio de la autonoma de su voluntad pero siempre que no desvirten la esencia o naturaleza del acto y que no resulten contrarios al orden pblico. Por eso, Messineo indica que pueden, indiferentemente, existir o no existir.

Los elementos accidentales vienen a ser lo que el Cdigo Civil denomina Modalidades del Acto Jurdico, considerando como tales a la condicin, al plazo y al cargo, tambin llamado modo. Pese a que la denominacin de modalidades deriva de esta ultima, Josserand considera a las dos primeras como las modalidades por - excelencia, criterio que hacemos nuestro y que ms adelante explicitaremos.

En el desarrollo de los elementos accidentales y atendiendo a la posibilidad de su incorporacin al acto jurdico, debemos asociar estos elementos a la distincin de los actos jurdicos entre actos modales y puros, segn el acto jurdico pueda o no admitir la insercin de modalidades (Supra N 29).

Los Actos Modales se ubican en el campo de las relaciones obligacionales y es la razn por la cual el tratamiento legislativo de las modalidades los vincula al Derecho de las Obligaciones. Sin embargo, es conveniente precisar que en atencin a la sistemtica del Cdigo Civil estn comprendidos en el tratamiento legislativo que a la Teora del Acto Jurdico le dispensa nuestro ordenamiento civil.

Antes de iniciar el estudio de cada una de las tres modalidades debemos sealar, desde ya, que existen similitudes entre la condicin y el plazo, en cuanto ambas suspenden o extinguen los efectos del acto jurdico, mientras que el cargo impone obligaciones anexas a la adquisicin de un derecho. Y hay que advertir, como lo hace Messineo, que la accidentalidad de la condicin y del plazo debe entenderse solamente en el sentido de que queda al arbitrio del declarante, o de los declarantes, incluir, o no, aquellos elementos en el negocio, mas no en el sentido de que, una vez incluidos, se pueda dejar de respetarlos. Su inclusin en el acto jurdico los transforma, pues, en elementos tan esenciales como los verdaderamente esenciales, pues se constituyen en requisitos de eficacia, ~ cuya insercin en el acto no afecta su eficacia.

Para concluir con esta premisa habra que plantear, como lo hace Albaladejo, una cuestin de terminologa. A las modalidades se les considera tambin autolimitaciones voluntarias y determinaciones o disposiciones accesorias.

La expresin "autolimitaciones voluntarias", que corresponde a la condicin y al plazo, se explica en cuanto que por la autonoma de la voluntad, sta se restringe a s misma, reduciendo el valor que en otro caso tendra, y los efectos ms amplios que, faltando la limitacin, surgiran ex voluntate del acto, pues si en vez de celebrar un contrato bajo condicin o por un plazo se celebrase puramente, los efectos no estaran supeditados a que se cumpla la condicin o se venza el plazo.

Las expresiones "determinaciones o disposiciones accesorias corresponden al cargo, se explican, pues mientras la condicin constituyen en requisitos voluntarios de eficacia del acto, cargo no se constituye en un requisito de eficacia.

LA CONDICION

123. DELlMITACION CONCEPTUAL

Para delimitar el concepto de la condicin como modalidad del acto jurdico es preciso considerar que la condicin, como vocablo jurdico, deriva del latn condto, que es indicativo de cualidad, ndole, situacin y hasta de clusula de un contrato. De ah, que se le atribuyan o se le use en distintos significados y sentidos y que, como advierte Coviello, se le emplee para indicar cosas diversas, como las circunstancias de hecho que deben realizarse para la aplicacin de una ley, los requisitos de un negocio jurdico y, tambin la contraprestacin en un contrato oneroso o las clusulas o pactos que forman el contenido principal y necesario de un negocio. Tambin es usado como indicativo de una situacin jurdica, que Arauz Castex y Llambas, la refieren a la "condicin jurdica de las personas" y aludir as a la situacin general de ellas ante el Derecho como, por ejemplo, la condicin de la mujer casada, la condicin de los extranjeros o la condicin de los incapaces.

Frente a la diversidad de acepciones es necesario, entonces, precisar el concepto de la condicin como modalidad del acto jurdico, o simplemente, como condicin-modalidad, esto es, delimitar su concepto para darle su sentido estricto como modalidad, a fin de que quede entendida, como tambin lo seala Coviello, como la clusula por la cual el autor o autores del negocio jurdico hacen depender su eficacia o resolucin de un acontecimiento futuro e incierto. De este modo, la condicin viene a ser el mismo suceso futuro e incierto del que se hace depender la eficacia o la resolucin del negocio.

El hecho, acontecimiento o suceso del que se hace depender la eficacia del acto jurdico, Albaladejo lo concepta como la limitacin puesta por el sujeto a su declaracin de voluntad y en virtud de la cual los efectos jurdicos del negocio se hacen depender del acontecimiento incierto. Y, al igual que el autor italiano anteriormente citado, el tratadista espaol aclara que, por brevedad, se dice que el negocio es condicional, pero que realmente no es el negocio sino la produccin de sus efectos lo que est sub condtione, por lo que con la palabra condicin se designa no slo la limitacin establecida si no tambin el acontecimiento incierto del que se hacen depender los efectos del negocio. Para Len Barandiarn el acto es condicional cuando sus efectos estn subordinados a un acontecimiento incierto y futuro.

La condicin, como ya lo hemos visto, es un elemento accidental del acto jurdico y es, tambin, una limitacin que voluntariamente se imponen los propios celebrantes y que, como tal, se constituye en un elemento esencial pues de ella depende la eficacia del acto jurdico. Si de la condicin, como afirma Coviello, depende la suerte de todo el negocio jurdico es evidente que forma parte integrante y sustancial del mismo, por lo que no es que se quiera una cosa distinta que viene a agregarse sino que se quiere bajo condicin y, as es como la declaracin de voluntad y la condicin, slo en fuerza de anlisis y de abstraccin, pueden considerarse distintamente, pues no son en realidad sino una cosa nica e indivisible.

La condicin-modalidad viene a ser, pues, un hecho futuro e incierto que arbitrariamente y por la sola voluntad de los declarantes se incorpora al acto jurdico, el que le queda supeditado en cuanto a la produccin de sus efectos. El hecho, en s, es un elemento extrao a la sustancia y naturaleza del acto jurdico y, por ello, la condicin es un elemento accidental, pero es tambin, al mismo tiempo, una limitacin a la eficacia del acto que voluntariamente se imponen sus celebrantes. Sin embargo, no obstante su gnesis voluntaria, por distinguirse de los elementos requeridos por la ley, se le denomina conditio facti por contraposicin de la conditio iuris.

La conditio iuris tiene su origen en la ley o en la naturaleza del acto, por lo que no es una condicin-modalidad. Messineo considera que no es una verdadera y propia condicin y, por consiguiente, tampoco es un elemento accidental, sino que, ms bien, constituye un presupuesto lgico, de naturaleza legal, o bien un requisito objetivo, al que esta subordinada la eficacia y, alguna vez, la validez misma del negocio. Como enfatiza el tratadista italiano, la conditio iuris no constituye parte de la declaracin de voluntad, en cuanto tiene su raz en la ley, o en la misma finalidad objetiva del negocio y por eso es un hecho extrnseco a l, por lo que influye sobre la suerte del negocio, pero ab extra y no, como la conditio facti, ab intra. Albaladejo considerando la diversidad de criterios que ha desarrollado la doctrina para distinguir la conditio facti de la conditio iuris, estima que las condiciones facti no son requisitos legales de eficacia y, consiguientemente, no son sino circunstancias externas al negocio que, al ser acordadas por las partes, ellas mismas determinan que sin su concurrencia el negocio no despliegue sus efectos o deje de desplegarlos.

Por lo que queda expuesto, las conditio iuris y las conditio facti no son especies de un mismo gnero y as lo considera la doctrina dominante, puesto que la una es el resultado de un requisito de eficacia establecido por la ley y, la otra, por la voluntad de las partes, Son condiciones iuris, a manera de ejemplo, la muerte del testador respecto de la eficacia del testamento o que llegue a existir la cosa futura cuando de ella depende la existencia del contrato, pues si bien puede haber un grado de incertidumbre en la verificacin de la condicin, ella es impuesta por la ley y no por la voluntad de las partes.

La conditio facti, esto es, la condicin-modalidad, es un hecho futuro e incierto del cual las partes deciden hacer depender los efectos del acto jurdico que han celebrado. Para Messineo es un acontecimiento, evento o hecho futuro e incierto, esto es, un acontecimiento que no se ha verificado todava y que se ignora si llegar a verificarse: a la verificacin, o sea, a la produccin del mismo, las partes subordinan la eficacia del negocio. Len Barandiarn la define como un evento futuro e incierto que tiene influencia en cuanto a las consecuencias que corresponden al acto jurdico en el cual la condicin se ha insertado y, para precisar su definicin, pone, entre otros, los siguientes ejemplos: te har una donacin maana si llueve (o si no llueve) en Lima; te comprar tu casa si obtengo el premio mayor en la prxima lotera. Como precis el maestro, se trata de una relacin arbitraria entre el supuesto de hecho determinante del efecto jurdico y este ltimo. As, no sera condicin-modalidad, por ende, la que dijese que te vendo mi casa con la condicin que me pagues el precio pactado, pues el pago del precio es una conditio iuris, que adems es un elemento esencial y constitutivo del contrato y no un elemento accidental, mientras que s sera una condicin-modalidad la que dijese que te dono mi casa si obtengo la casa que es materia de una lotera, pues se trata de un elemento que no es esencial ni constitutivo y s ms bien accidental, ya que la donacin se hace depender de un suceso incierto arbitrariamente pactado y condicionante del acto jurdico, como es el resultado de una lotera,

124. CARACTERES DE LA CONDICION

De la delimitacin conceptual de la condicin-modalidad se infiere que debe ser necesariamente pactada y que los caracteres del hecho, suceso, evento o acontecimiento pactado como condicin sea futuro y que sea incierto.

La doctrina es coincidente en el sealamiento de estas caractersticas, aunque con algunos matices. Albaladejo, por ejemplo, considera que huelga hablar de futuro y que basta exigir que sea incierto, puesto que si el acontecimiento es pasado o presente, podr ser desconocido, pero no incierto y que la incertidumbre implica futuridad, precisando como requisito indispensable o como caracterstica propia la de ser un acontecimiento establecido arbitrariamente, posicin, esta ltima, que tambin adopta Len Barandiarn(16), pero precisando que la condicin debe ser necesariamente un hecho futuro e incierto.

124.1. El hecho en que consista la condicin ha de ser necesariamente pactado

La condicin como modalidad del acto jurdico tiene su origen en la autonoma de la voluntad y, por eso, el hecho en que la condicin consiste, debe ser necesariamente pactado por las partes, sin ms limitaciones que aquellas a las que est sometida la autonoma de la voluntad (Supra N 15). Como se trata, segn ya se ha indicado, de una limitacin que las mismas partes se imponen respecto a la eficacia del acto jurdico slo es posible en los actos modales, que en este caso vienen a ser sub conditione o condicionales, pues no puede pactarse en los actos puros, como el matrimonio, la adopcin, el reconocimiento de un hijo extramatrimonial o la aceptacin o la renuncia de una herencia.

La autonoma de la voluntad, que implica la libertad de pactar, est enmarcada por el orden pblico que no permite la insercin de condiciones en los actos puros, prohibiendo su supeditacin a una condicin y, por ello, su estipulacin, por ser contraria al orden pblico, la hace nula la norma general establecida en el arto V del Ttulo Preliminar del Cdigo Civil o le atribuye las consecuencias previstas en los arts. 171 y 172 del mismo Cdigo cuando se configuran las denominadas condiciones impropias (Infra N 124.5) Y la condicin potestativa a cargo del deudor (Infra N 124.3).

La insercin de una condicin tiene lugar, como aclara Albaladejo, no en el sentido de suceso, sino en el de limitacin, en el momento de la manifestacin de voluntad, y ha de revestir la forma prescrita para el acto. Si la insercin de la condicin es posterior al acto, en realidad se celebra un nuevo acto con contenido igual al anterior, pero sometido a la condicin.

124.2. El hecho en que consiste la condicin ha de ser futuro

El hecho en que consiste la condicin ha de ser futuro, pues esta caracterstica asegura la incertidumbre objetiva de la condicin. Como explica Len Barandiarn, si bien un hecho futuro por s solo no basta para caracterizar la condicin, la incertidumbre del suceso debe ir acompaada de su carcter de futuro.

Esta caracterstica explica la norma del Art. 175 del Cdigo Civil, que permite la estipulacin de un plazo dentro del cual el acontecimiento en que la condicin consiste llegue o no a verificarse, sealando que "si la condiciones que no se realice cierto acontecimiento dentro de un plazo se entender cumplida desde que vence el plazo ...".

124.3. El hecho en que consiste la condicin ha de ser incierto

El hecho en que consiste la condicin ha de ser incierto, es decir, contingente, en el sentido de que puede o no realizarse. Enneccerus puntualiza que lo incierto debe serio para el saber humano.

Esta caracterstica sustenta el concepto mismo de la condicin y, en alguna medida, tiene tambin asiento en el arto 175 anteriormente acotado: "si la condicin es que no se realice cierto acontecimiento dentro de un plazo, se entender cumplida ... desde que llega a ser cierto que el acontecimiento

no puede realizarce".

125. CLASIFICACION DE LA CONDICION

Delimitado el concepto de la condicin y precisadas sus caractersticas, es imprescindible, para apreciar y mejor entender el tratamiento legislativo que le dispensa el Cdigo Civil, proceder a su clasificacin. Para el efecto, vamos a considerar, bsicamente, la clasificacin desarrollada por Len Barandiarn y, a partir de ella, pasar luego a considerar su tratamiento por el Cdigo Civil.

Con este planteamiento, las condiciones pueden clasificarse en: a) expresas y tcitas; b) positivas y negativas; c) potestativas, casuales y mixtas; d) suspensivas y resolutorias; e) propias o impropias; y, f) perplejas.

Debemos advertir que las condiciones son opuestas dentro de un mismos criterio de clasificacin, esto es, que son expresas o son tcitas o que son suspensivas o son resolutorias, por ejemplo, pero que son concurrentes cuando corresponden a distintos criterios de clasificacin, esto es, que una misma condicin puede ser expresa, propia y suspensiva.

Por ltimo, debemos advertir que si bien todos los criterios de distincin son igualmente importantes, el tratamiento legislativo de la condicin gira en torno a la condicin suspensiva y a la condicin resolutoria.

125.1. Condiciones expresas y condiciones tcitas Las condiciones pueden ser expresas y pueden ser tcitas, segn que resulten de la manifestacin de voluntad expresa o tcita de las partes. Albaladejo considera que la condicin puede ser expresa o tcita como, en general, la manifestacin de voluntad: el negocio es condicional, aunque la condicin no se declare expresamente, siempre que se deduzca de la manifestacin que se quiso sub conditione.

Para la determinacin del carcter expreso o tcito de la condicin es necesario, entonces, aplicar las reglas de la manifestacin de voluntad ex presa (Supra N 40.1) o de la manifestacin de voluntad tcita (Supra N 40.2).

125.2. Condiciones afirmativas y condiciones negativas

Las condiciones pueden ser afirmativas, tambin llamadas positivas, o pueden ser negativas, segn la condicin se haga depender de la verificacin o no del suceso respectivo. La distincin estriba simplemente en cmo se ha pactado la condicin, esto es, segn que el hecho o suceso en que consiste deba o no realizarse. Si la condicin se ha pactado para que el hecho se realice, es afirmativa, y, si se ha pactado para que no se realice, es negativa.

Como puede apreciarse, lo afirmativo o negativo de la condicin depende de si se produce o no una alteracin y ese es el sentido que a esta distincin le da la doctrina. Enneccerus, por ejemplo, estima que las condiciones positivas exigen para su cumplimiento una alteracin, no as las negativas, independientemente de la manera como han sido redactadas y as, verbigratia, "si te quedas soltero" es una condicin negativa. Coviello es del mismo parecer y considera positiva la condicin cuando el hecho cambia el estado actual de las cosas y es negativa cuando el estado actual de las cosas no se muda, importando poco la forma gramatical en que se hayan expresado las condiciones y, as, es condicin positiva si se pacta "te doy ciento si te casas" y tambin si se pacta "te doy ciento, si no permaneces clibe"; por el contrario, la condicin ser negativa si se pacta "te doy ciento, si no tengo ms hijos que el que tengo ahora" o "si me quedo con los nicos hijos que tengo".

Adems, debe considerarse el pacto para que la condicin se realice dentro de un plazo. En tal hiptesis, como acota Betti, las condiciones negativas slo se tienen por cumplidas cuando el hecho o suceso no puede ya verificarse, que es la hiptesis prevista en el anteriormente acotado arto 175 del Cdigo Civil.

Las condiciones afirmativas o positivas, y tambin las negativas, pueden ser expresas o tcitas, y stas, a su vez, pueden ser positivas o negativas.

125.3. Condiciones potestativas, condiciones casuales y condiciones mixtas

Las condiciones pueden ser potestativas, casuales o mixtas, segn que su realizacin sea dependiente de la voluntad de una de las partes, independiente de la voluntad de ambas, y por eso se les llama tambin fortuitas, o, a la vez, sean dependientes e independientes de la voluntad de una o de ambas partes.

El criterio expuesto es el generalizado en la doctrina. Para Ennecerus, por ejemplo, el cumplimiento de la condicin potestativa depende de la declaracin de voluntad de una de las partes, la casual de otros factores, y, la mixta, de la voluntad de uno de los interesados y de otras circunstancias.

Precisado el criterio de distincin, es conveniente detenerse en cada una de las clases de condiciones que resultan.

En primer lugar, en las condiciones potestativas, las cuales, a su vez, deben diferenciarse, segn se trate de condiciones potestativas dependientes de la voluntad de la parte acreedora o de la voluntad de la parte deudora.

Len Barandiarn(26) enfatiz que esta diferenciacin era imprescindible y en sus comentarios al Cdigo Civil de 1936 explic que condicin potestativa dependa del deudor el acto era nulo en cuanto a su obligacin concierne, porque uno no puede obligarse y al propio tiempo desobligarse al quedar a su arbitrio comprometerse o no por esa obligacin, mientras que, en cambio, se poda pactar vlidamente una obligacin sujeta a condicin potestativa dependiente del acreedor quien puede exigir el cumplimiento o condonara: obligacin que ha servido para que en el Cdigo Civil vigente se declare nula la condicin potestativa part debtors (art. 172).

La doctrina es uniforme en la apreciacin que efectu el maestro. Messineo justifica este parecer con la consideracin de que, si el enajenante, o respectivamente el deudor, pudiera a su placer querer o dejar de querer la enajenacin del derecho o la asuncin de la obligacin, el negocio existira

y no existira al mismo tiempo, o sea, carecera de consistencia; sera como si el negocio hubiese sido estipulado en broma. Del mismo parecer son Betti y Coviello.

Para que la condicin potestativa part debtors pueda anular el acto jurdico, advirti tambin Len Barandiarn, que debe ser absolutamente y no simplemente potestativa, es decir, que el hecho puesto como condicin est sometido, exclusivamente, a la voluntad del deudor, como si dijese que

me obligo "si yo as lo quiero". De este modo, si la condicin es simplemente potestativa de parte del deudor, pero no absolutamente, como si dijese que lile obligo "si no me curo el vicio de la embriaguez", el acto es vlido. De lo expuesto se infiere, entonces, que la condicin potestativa a cargo del deudor puede distinguirse en absolutamente potestativa y en simplemente potestativa.

En relacin a la condicin potestativa part debtors, el Cdigo Civil ha consignado en el art. 172 una norma segn la cual "es nulo el acto jurdico cuyos efectos estn subordinados a condicin suspensiva que dependa de la exclusiva voluntad del deudor". La norma no registra antecedente en el Cdigo Civil de 1936 y recepta la posicin de Len Barandiarn en cuanto a la necesidad de integrar dicho vaco y la trata como una condicin absolutamente potestativa, pero refirindola a slo la condicin suspensiva (Infra N 125.4), asumiendo la frmula contenida en el Anteproyecto De la Puente Zusman, en cuya Exposicin de Motivos la denominan puramente potestativa y la definen como aquella que, dependiendo de la voluntad de uno de los interesados en el acto, consiste slo en que ste lo quiera como, por ejemplo, si declara vender a condicin de querer hacerlo, explicando que la nulidad se aplica no a cualquier clase de condicin sino nicamente a la suspensiva, en el entendimiento de que si se pacta una condicin resolutoria (Infra N 125.4) el deudor ya se oblig y, por lo tanto, queda sujeto a su declaracin de voluntad.

La remisin de la nulidad de la condicin potestativa a slo la condicin suspensiva no es compartida por la codificacin civil, como lo hace notar Lohmann.

El acotado arto 172 parte de la consideracin de una condicin "que dependa de la exclusiva voluntad del deudor", lo que lleva a la interpretacin de que se trata de una condicin absolutamente potestativa part debitors. No obstante, debe de tenerse en cuenta que siempre habrn factores que le son ajenos al deudor y que pueden influir sobre el hecho dependiente de su voluntad en que consiste la condicin, lo que significa que para la nulidad se requiere de la prevalencia de la voluntad del solvens en cuanto a la realizacin del hecho.

La condicin potestativa dependiente de la voluntad del acreedor no presenta los problemas que a anterior y el Cdigo Civil la considera plenamente vlida, al extremo, que no objeta su insercin.

En segundo lugar, la condicin casual que como hemos advertido, est determinada por un hecho cuya realizacin es independiente de la voluntad de los sujetos comprometidos por su manifestacin de voluntad, sea porque depende del azar o del hecho de un tercero, como por ejemplo, si se compromete una donacin si sobreviene una sequa o si un tercero gana una competencia deportiva.

El Cdigo Civil tambin considera a la condicin casual plenamente vlida, pues tampoco objeta su insercin.

Por ltimo, la condicin mixta que como tambin hemos advertido, est determinada por un hecho cuya realizacin depende en parte de la voluntad de uno de los interesados y en parte del azar o del hecho de un tercero como, por ejemplo, si el interesado pacta jugar un partido de ftbol y contribuir al triunfo haciendo por lo menos un gol y sin que el contrario llegue a anotar ninguno.

La condicin mixta tampoco ha merecido objecin del Cdigo Civil, lo que hace plenamente vlida su estipulacin.

Las condiciones potestativas, casuales o mixtas pueden ser expresas o tcitas y tambin positivas o negativas, de igual manera que stas y aqullas pueden ser potestativas, casuales o mixtas.

125.4. Condiciones suspensivas y condiciones resolutorias

La distincin de las condiciones en suspensivas y resolutorias es, como lo hemos ya advertido, la ms importante y una u otra estn siempre presentes en todo acto sub condtone, mxime si la condicin misma es un hecho, suceso, evento o acontecimiento del cual se hace depender la eficacia del acto jurdico. La condicin es suspensiva cuando se debe esperar su realizacin para que el acto produzca sus efectos y, es resolutoria, contrariamente, cuando los efectos del acto cesan al realizarse la condicin.

La nocin que hemos dejado expuesta se mantiene inalterada desde el Derecho Romano, luego de admitirse la resolutoria, pues la suspensiva fue admitida con anterioridad, como apunta Tola.

La condicin suspensiva como la resolutoria fueron receptadas en el Cdigo Napolen e irradiadas a la codificacin civil, habindoles la doctrina mantenido el mismo contenido conceptual. Coviello, por ejemplo, concepta la condicin suspensiva como el acontecimiento futuro e incierto del que se hace depender el negocio jurdico, esto es, el negocio existe aun antes de que la condicin se cumpla, pero permanece en suspenso su eficacia; y, la condicin resolutoria, como el acontecimiento futuro e incierto del cual se hace depender la eficacia ya nacida del negocio, esto es, el negocio existe y produce todos los efectos de que es capaz hasta que la condicin se realice. Para Betti, es suspensiva la condicin que, mientras no se verifica, suspende la regulacin de intereses dispuesta por el negocio, aplazando el momento de su vigencia, pero durante su pendencia el negocio sometido a ella no engendra an la nueva situacin jurdica que la ley vincula al tipo de negocio a que aqul pertenece, pero puede producir otros efectos, provisionales y preliminares, encaminados a hacer posible el orden de intereses concebidos una vez que la condicin se cumpla; y, es resolutoria la condicin que est destinada a resolver la regulacin de intereses, a hacerla cesar con su realizacin y, mientras pende, el negocio a que afecta produce todos los efectos propios de su tipo, pero no gozan stos de carcter definitivo e irrevocable.

As, pues, cuando el acto jurdico est sometido a condicin suspensiva o cuando lo est a condicin resolutoria, es cuando de manera ms ntida se puede apreciar el rol de la condicin como una limitacin establecida por las partes en cuanto a la produccin de los efectos. Sin embargo, no es siempre fcil distinguir si la condicin es suspensiva o resolutoria, ya que la diferencia de efectos que producen no depende de la naturaleza del acontecimiento, sino de la voluntad contenida en el acto sub condtone. Por eso Messineo considera que ante la posible variedad de expresiones para indicar la condicin, puede ocurrir que se forme duda sobre si la condicin es suspensiva o resolutoria y que stas pueden, lgicamente, convertirse la una en la otra, hacindose de la condicin suspensiva afirmativa una condicin resolutoria negativa, como por ejemplo, si se pacta que "te dar mil si la nave llega a Asia", que equivale a pactar que "te dar mil, pero lo devuelves si la nave no llega a Asia".

Tanto la condicin suspensiva como la resolutoria pueden ser expresas o tcitas, afirmativas o negativas, potestativas, casuales o mixtas, pues, como ya advertimos, los criterios de distincin de una categora a otra no son excluyentes.

125.5. Condiciones propias y condiciones impropias

Las condiciones pueden ser propias o impropias y ste es el nombre con el que actualmente se les conoce, pues eran las que en el Derecho Romano se conocieron como posibles y lcitas y como imposibles e ilcitas. Por eso, como explic Len Barandiarn, las condiciones impropias son las que conciernen a acontecimientos ilcitos o imposibles, de suerte que son condiciones propias las referentes a sucesos lcitos y posibles. Pero hay que tener cuidado al aplicar el criterio de distincin: una condicin consistente en un hecho fsicamente necesario, es decir, un evento que no puede dejar de ocurrir, es tambin una condicin impropia, pues ya hemos visto que una de las caractersticas de la condicin es la de ser un hecho incierto (Supra N 124.3).

La condicin propia, por la acotacin que acabamos de hacer, es la que consiste en un hecho, evento, suceso o acontecimiento futuro e incierto, siendo la incertidumbre una nota distintiva de gran importancia. De ah que lo que necesariamente tiene que ocurrir, como la llegada del da despus de la noche, al igual que lo que es imposible de ocurrir, como una nueva salida del sol al llegar la noche, por su certeza, no puede configurar una condicin propia. La posibilidad, es decir, que el hecho pueda o no realizarse, es lo que configura la condicin propia. Pero, adems, la condicin propia requiere-de la licitud y de la posibilidad jurdica, todo lo cual permite su insercin en el acto jurdico y constituirla en una limitacin en cuanto a la produccin de sus efectos.

Para explicar las denominadas condiciones impropias doctrina suele subdistinguirlas. As, Albaladejo lo hace en necesarias, imposibles, de presente y pasado y legales: las necesarias son los acontecimientos de inevitable realizacin; las imposibles son las irrealizables y pueden ser de hecho o de derecho; las de presente y pasado, carecen de incertidumbre -y de futuridad, agregamos nosotros-; y, las legales que vienen a ser las conditio iuris -las hemos ya considerado al hacer la delimitacin conceptual de la condicin (Supra N 123)-. Adems, el mismo tratadista espaol se refiere a las condiciones prohibidas considerando por tales aquellas que por ser ilcitas, inmorales o contrarias a las buenas costumbres, el Derecho las excluye. El Cdigo Civil slo legisla, de manera explcita, sobre las condiciones impropias no hacindolo respecto de las condiciones propias por ser innecesario, pues lo hace implcitamente desde que stas son las susceptibles de pactarse al ser las contrarias a las impropias.

A las condiciones impropias el Cdigo Civil les dedica el art 171 preceptuando las consecuencias de pactarlas: "La condicin suspensiva ilcita y la fsica o jurdicamente imposible invalidan en el acto. La condicin resolutoria ilcita y la fsica y jurdicamente imposible se consideran no puestas". La norma fue tomada tanto del Proyecto de la Comisin Reformadora formulado en base a las ponencias de Len Barandiarn y de Vega Garca, como del Anteproyecto de Manuel de la Puente y Susana Zusman. Registra como antecedente el arto 1104 del Cdigo Civil de 1936.

Como puede apreciarse, el arto 171 da una solucin diferente segn se trate de una condicin suspensiva impropia o de una condicin resolutoria impropia. Manuel de la Puente y Susana Zusman, autores del Anteproyecto anteriormente citado, en su Exposicin de Motivos explicaron que la invalidez del acto, cuando se trata de una condicin suspensiva impropia, resulta de la interpretacin de que quien hace depender el acto de una condicin fsica y jurdicamente imposible y que por ello no ha de verificarse, no quiere, en definitiva, el acto; y, en cuanto a la condicin resolutoria impropia, en aplicacin del mismo criterio interpretativo, se llega a una solucin contraria, puesto que quien hace depender la resolucin del acto jurdico de una condicin fsica o jurdicamente imposible, no quiere la resolucin y, por ello, el acto debe mantener plenamente su vigencia. A este razonamiento debe considerarse la ilicitud de la condicin, segn sea suspensiva o resolutoria, agregamos nosotros.

El tratamiento del Cdigo Civil, mediante su arto 171, a las condiciones suspensiva y resolutoria cuando son impropias nos parece coherente. Cuando la condicin suspensiva es impropia la invalidez del acto es una consecuencia necesaria toda vez que la condicin no debe ni puede realizarse y la eficacia del acto depende de tal realizacin. Cuando la condicin resolutoria es impropia, la consecuencia necesaria es contraria, ya que la ineficacia del acto depende de una condicin que no debe ni puede realizarse.

Por ltimo, es del caso precisar que el arto 171 es una norma de excepcin respecto de la norma general del arto V del Ttulo Preliminar del Cdigo Civil.

125.6. Condiciones perplejas

Las condiciones perplejas son las que contienen una interna contradiccin que, como precis Len Barandiarn, son insalvables, pues no permiten conocer lo que quieren los que las han pactado. Albaladejo considera como tales a los acontecimientos que cuando son pactados como condicin contradicen lo querido, como por ejemplo si alguien estipula: "Quiero que A sea mi heredero, pero slo para el caso de que muera antes que yo". Para Messineo la condicin perpleja es una clase de condicin impropia y la define como aquella cuyo sentido es ambiguo o contradictorio con el resto del negocio, o bien no inteligible en relacin al contenido del negocio: su efecto es la invalidez del negocio. Del mismo parecer es Enneccerus, para quien las condiciones perplejas anulan el negocio en su totalidad, si de la interpretacin no resulta otra cosa.

En nuestra opinin, la solucin que plantea el art 171 del Cdigo Civil es tambin aplicable a la condicin perpleja: si la condicin perpleja es suspensiva el acto es invlido; si es resolutoria, se considera no puesta.

126. EFECTOS DE LA CONDICION

Pactada la condicin, que para que surta efectos debe ser propia (Supra N 125.5), el acto jurdico qued! celebrado pero su eficacia subordinada a la condicin pactada: si es suspensiva, la eficacia est en suspenso hasta que la condicin se realice, y, si es resolutoria, despliega su eficacia hasta que la condicin se realice.

Sea que la condicin se haya pactado como suspensiva o que se haya pactado como resolutoria, respecto de la eficacia del acto jurdico celebrado se presentan etapas perfectamente diferenciadas: a) la etapa de la pendencia de la condicin, o pendent conditione, que comprende la etapa o el perodo en que todava no se realiza el hecho en que la condicin consiste y se ignora si se cumplir o no; b) la de cumplimiento de la condicin, o existit conditione, que comprende la etapa o el perodo que sigue a la realizacin del hecho en que la condicin consiste o que se le tiene por realizado; y, c) el de la falta de realizacin, o dficit conditione, que es cuando se comprueba que el hecho en que la condicin consiste no se ha realizado o no podr realizarse. Como seala Messineo, a cada una de las etapas de la condicin se vinculan los correspondientes efectos de la condicin y, correlativamente, del negocio.

Los efectos de la condicin pactada son distintos, y hasta opuestos, segn la condicin sea suspensiva o resolutoria.

126.1. La pendencia de la condicin

Ya hemos advertido que la etapa pendent conditione es la que corresponde a la espera de la realizacin del hecho en que la condicin consiste.

En esta etapa los efectos del acto no se producen si la condicin es suspensiva o se han producido, si es resolutiva.

Es conveniente, en primer lugar, determinar la naturaleza de los derechos originados por el acto jurdico antes que la condicin se realice. La doctrina suele, en tal circunstancia, hacer referencia a derechos contingentes, eventuales o expectaticios. Albaladejo,considerando que el derecho definitivo no se adquirir sino cuando la condicin suspensiva se cumpla, cree preferible hablar de que la celebracin del negocio crea una expectativa de produccin de los efectos de ste, atribuyendo, as, al adquirente eventual una expectativa de adquisicin; y, en el caso de la condicin resolutoria, el mismo autor espaol considera que existe tambin una expectativa pues, por ejemplo, quien enajena bajo condicin resolutoria, tiene la expectativa de readquirir lo enajenado. Betti afirma que el titular de una expectativa condicionada no lo es de ningn derecho actual; slo es el eventual titular de un derecho futuro. Len Barandiarn se refiri a derechos eventuales.

El Cdigo Civil se ocupa del perodo de pendencia de la condicin en el art 173: 'Pendiente la condicin suspensiva, el adquirente puede realizar actos concervatorios. El adquirente de un derecho bajo condicin resolutoria puede ejercitarlo pendiente sta, pero la otra parte puede realizar actos conservatorios. El deudor puede repetir lo que hubiese pagado antes del cumplimiento de la condicin suspensiva o resolutoria". La norma est tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora y registra como antecedentes los arts. 1106 Y 1108 del Cdigo Civil de 1936, as como del arto 1356 del Cdigo Civil italiano, como anotaron Manuel de la Puente y Susana Zusman.

El arto 173, como puede apreciarse, regula la etapa pendent conditione en relacin a la cual destaca el derecho del adquirente a realizar actos conservatorios y el derecho del deudor a repetir lo pagado.

126.1.a. El derecho del adquirente a realizar actos conservatorios

Ya hemos visto que el derecho que emerge de un acto sub conditione es un derecho eventual, contingente o expectaticio, pero derecho que, como tal, es susceptible de tutela jurdica. De ah, que el arto 173 reconozca al adquirente el derecho a realizar actos conservatorios. Pero la titularidad del derecho a los actos conservatorios es distinta segn se trate de que la condicin sea suspensiva o que sea resolutoria.

En el caso de la condicin suspensiva es el adquirente el que con su derecho expectaticio tutelado puede realizar los actos conservatorios, pues el acto sub conditione an no ha desplegado su eficacia y as lo establece el primer apartado del arto 173: "Pendiente la condicin suspensiva, el adquirente puede realizar actos conservatorios".

En el caso de la condicin resolutoria no es el adquirente el que puede realizar los actos conservatorios sino el transferente el que recibe la tutela jurdica, pues el adquirente del derecho puede ejercitarlo y es ante tal ejercicio que el transferente tiene el derecho a realizar actos conservatorios, como lo precisa el segundo apartado del arto 173: "El adquirente de un derecho bajo condicin resolutoria puede ejercitarlo pendiente sta, pero la otra parte puede realizar actos conservatorios".

Planteada as la tutela jurdica es conveniente precisar lo que debe entenderse por actos conservatorios y para ello debemos atender a la fuente del arto 173 que, como hemos indicado, es tambin el arto 1356 del Cdigo Civil italiano, no obstante lo cual la doctrina italiana no ha explicitado un concepto para explicarlos:.Mmessineo se limita a sealar que acerca de la expresin "actos conservatorios" debe observarse que la misma no puede dejar de ser diversa, segn que se trate del adquirente o bien del enajenante del derecho condicionado. Bigliazzi, Breccia, Busnelli y Natoli consideran que se trata de remedios que operan en forma preventiva.

Tomando estas ideas, nosotros consideramos que se trata de actos orientados a evitar la prdida del derecho y, de ah, que la nocin de los actos conservatorios deba referirse a una multiplicidad de actos, tales como requerimientos para la constitucin de garantas reales, constitucin de fianzas, contratacin de plizas de seguro &i toda otra medida para asegurar el derecho y evitar su prdida. Lohmann, con buen criterio, anota que con la 'mencin a los actos conservatorios el arto 173 ha querido excluir los actos dirigidos a ejecutar o cumplir el negocio condicionado.

Por ltimo como lo establece la ms generalizada doctrina, los derechos pendent conditione pueden ser objeto de transmisin por acto inter vivos y tambin mortis causa.

126.1.b. El derecho del deudor a repetir lo pagado

El tercer apartado del arto 173 confiere al deudor el derecho a repetir lo pagado antes del cumplimiento de la condicin suspensiva o de la condicin resolutoria.

El deudor viene a ser la parte obligada frente al adquirente si la condicin es suspensiva, y, en el caso de la condicin resolutoria, es el adquirente. As como el derecho que emerge del acto sub condtione es de naturaleza eventual, contingente o expectaticia, as tambin la correlativa obligacin no puede generar una pretensin firme en favor del acreedor, que en el caso de la condicin suspensiva es el adquirente que est a la espera que el hecho en que la condicin consiste se realice, y, en el caso de la condicin resolutoria, es quien est a la espera de que la condicin se realice para que el adquirente entregue lo que le entreg.

El carcter condicional mismo de la obligacin no coloca al deudor en una posicin en la cual le sea exigible la prestacin en que la obligacin consiste, pues sta se tornar exigible slo una vez cumplida la condicin. Por eso su derecho a reclamar la devolucin, esto es, a la repeticin de lo paga

do, se sustenta en el carcter sub conditione de la obligacin resultante de la condicin suspensiva o resolutoria, en su caso, y en el carcter mismo del derecho del acreedor, como derecho eventual, contingente o expectaticio.

En este sentido se han pronunciado Manuel de la Puente y Susana Zusman sealando que en el caso de la condicin suspensiva, por no crearse un derecho cierto en el adquirente, se estara verificando un verdadero pago indebido; y, en el caso de la condicin resolutoria, no existe inconveniente en aplicar el mismo criterio, aunque a la inversa.

Es pues, en conclusin, la naturaleza contingente del derecho del accipiens la que sirve de sustento al derecho a la repeticin del solvens, quien slo debe probar, para que se le devuelva lo pagado, que cumpli con la prestacin sin que se hubiera realizado el hecho en que consista la condicin.

126.2. El cumplimiento de la condicin

La etapa de cumplimiento de la condicin, existit conditione, es la que sobreviene si la condicin se realiza. Realizado el hecho en que la condicin consista, si era suspensiva, el acto comienza a desplegar su eficacia, y, si era resolutoria, cesa en sus efectos. Los derechos se tornan en firmes, constituidos o adquiridos y las obligaciones en exigibles.

Con la realizacin de la condicin, como anota Messineo, si ha sido suspensiva el negocio se convierte en puro y simple, esto es, como si no hubiese estado nunca subordinado a condicin, y se hace eficaz; si la condicin es resolutoria, se desvanecen todos sus efectos. Al acaecer la condicin, ha escrito Betti, surge, o bien desaparece, la regulacin de intereses dispuesta, y el negocio despliega automtica mente los efectos propios del tipo a que pertenece, o los pierde automticamente.

La etapa existit condtone la regula el Cdigo Civil en las reglas, respectivamente, de la indivisibilidad y de la irretroactividad de la condicin.

126.2.a. La indivisibilidad de la condicin

Como acabamos de advertir, la indivisibilidad de la condicin la norma el arto 174 del Cdigo Civil: "El cumplimiento de la condicin es indivisible, aunque consista en una prestacin divisible. Cumplida en parte la condicin, no es exigible la obligacin, salvo pacto en contrario". La norma registra como antecedente el arto 1107 del Cdigo Civil de 1936 y fue tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora.

Como puede apreciarse, el arto 174 da contenido a una norma general en el sentido de que el cumplimiento de la condicin es indivisible, pero que puede pactarse la divisibilidad sea que se trate de una condicin suspensiva o de una condicin resolutoria. De ah, que la indivisibilidad opere si es que la partes no pactaron en contrario, constituyndose, por eso, en una norma supletoria.

La indivisibilidad del cumplimiento de la condicin debe entenderse en el sentido de que el hecho en que la condicin consiste debe realizarse totalmente, como cuando la eficacia del acto se hace depender de que una persona cruce a nado desde Chorrillos hasta La Punta: para que la condicin se considere cumplida debe haberse cubierto ntegramente la distancia, pues, de no ser as, no se adquiere el derecho ni es exigible la obligacin, si la condicin es suspensiva; y, si es resolutoria, no se readquiere el derecho y es inexigible la obligacin.

Las prestaciones vinculadas a la relacin jurdica sub conditione pueden ser divisibles o indivisibles. La divisibilidad o indivisibilidad de la prestacin depende de su naturaleza o del pacto. Por su naturaleza, la prestacin es divisible si es susceptible de divisin, como una suma de dinero, y, es indivisible, si no lo es, como la entrega de un caballo. Por el pacto, la divisibilidad o la indivisibilidad depende de lo convenido, como cuando se pacta que la entrega de la suma de dinero sea en su totalidad y no por partes.

La norma que regula la indivisibilidad de la condicin no es de orden pblico, porque, siendo supletoria, puede convenirse que aunque la condicin se cumpla slo en parte la obligacin sea exigible en todo o en parte, requirindose, en este ultimo caso, eso s, que la prestacin sea divisible por naturaleza.126.2.b. La irretroactividad de la condicin

Como tambin lo hemos advertido, la irretroactividad de la condicin la norma el arto 177 del Cdigo Civil: "La condicin no opera retroactivamente, salvo pacto en contrario". La norma registra como antecedente al arto 1110 del Cdigo Civil de 1936 y fue tomada del proyecto de la Comisin Reformadora.

La norma de la irretroactividad de la condicin apareci en la codificacin civil del presente siglo al ser planteada por el Cdigo alemn, pues el Cdigo Napolen propici la retroactividad as como tambin el Cdigo de Vlez Sarsfield, aunque respecto de este ltimo los proyectos de reforma se han orientado dentro de la tendencia de la irretroactividad Y autorizando a las partes a pactar la retroactividad, tanto en el Anteproyecto Bibiloni, como el Proyecto de 1936 y el Anteproyecto de 1954.

Nuestro Cdigo Civil de 1852, como los de su poca, recept la retroactividad de la condicin como principio y, por eso, fue un sustancial cambio el que introdujo el arto 1110 del Cdigo Civil de 1936, lo que llev a Olaechea a destacar la cuestin tocante a la irretroactividad, sealando que la mayora de los Cdigos modernos no atribuan efecto a la condicin sino a partir del momento en que se cumple, aunque algunos reservaban a las partes el derecho de estipular la retroaccin. Len Barandiarn, comentando la introduccin de la irretroactividad, explic que algunos textos del Derecho Romano dieron efecto retroactivo a las estipulaciones bajo condicin y que la tesis de la retroaccin hizo fortuna entre los Cdigos modernos, sancionndolo el Cdigo Civil francs y adems, entre otros, los de Italia de 1865, de Argentina, Espaa y, como ya se ha indicado, el nuestro de 1852, para, posteriormente, al ser impugnada la tesis de la retroaccin, adoptarse la irretroactividad en Cdigos como el de Alemania y Brasil, entre otros.

La posicin en favor de la retroactividad de la condicin se explica en la consideracin de que toda condicin se realiza retroactivamente, pues realizada la condicin es como si el contrato hubiera sido concluido pura Y simplemente, desde su origen, quedando las partes en la misma situacin en que habran estado de no haber pactado la condicin. De este modo, si se trata de condicin suspensiva, el cumplimiento de ella determina como si la eficacia existiera desde la fecha de la celebracin del acto y, en cambio, si se trata de condicin resolutoria, el cumplimiento de ella determina que se considere como si nunca hubiese existido el acto.

La adopcin de la irretroactividad de la condicin, como ya lo hemos indicado, la inici el Cdigo Civil alemn. Sin embargo, no fue tratada categricamente, pues si bien el arto 158 la enuncia, el arto 159 previ un efecto retroactivo cuando ste resultara del contenido del negocio.

Inspirndose en el Cdigo Civil alemn, a travs del brasileo, fue que el Cdigo Civil de 1936 acogi la regla de la irretroactividad. Len Barandiarn la justific sealando que diversos efectos propios de la condicin, una vez realizada, no podran tener explicacin de aplicarse el principio de retroaccin, considerando, a manera de ejemplo, lo relativo a la cuestin de la prestacin del riesgo y del peligro tanto con la condicin suspensiva como con la resolutoria. Lo hizo tambin con referencia a los efectos en el pasado y procedi a analizar la doctrina clsica francesa y la de algunos de sus doctrinarios, como Colin y Capitant, para quienes la retroactividad de la condicin era una ficcin, concluyendo el maestro en que resultaba explicable el movimiento contrario al principio de la retroactividad. Tomando posicin por la irretroactividad se pregunt el maestro: Por qu ciertos efectos de causas anteriores a la verificacin de la condicin han de respetarse? Para Len Barandiarn el acto sub conditione existe y no depende del hecho puesto como condicin aunque sus efectos estn subordinados a un acontecimiento futuro que significa un aplazamiento, pues tales efectos no surgen coetneamente con el acto, sino que quedan pendientes, sujetos a la eventualidad de la produccin del hecho incierto y futuro. Y as, concluy Len Barandiarn que enfrentadas las tesis de la retroactividad y de la irretroactividad, se saca la impresin de que ms vale no imponer en la ley una declaracin general sobre el asunto, pues se trata de efectos jurdicos que conciernen a las situaciones derivadas de una convencin condicional, de la que puede resultar que algunos efectos de la condicin se remonten al pasado y otros no, no siendo necesario para los primeros declarar la retroactividad ni para los segundos declarar la irretroactividad.

No obstante la corriente legislativa y doctrinal que se inicia con el Cdigo Civil alemn, el Cdigo Civil italiano de 1942 ha dado cabida a la regla de la retroactividad en su arto 1360. Messineo lo explica porque la condicin se pone en el momento mismo en que se perfecciona el negocio y nace juntamente con l, de lo que infiere que, verificndose la condicin suspensiva, el negocio adquiere eficacia ab origine (ex tune) y que, verificndose la condicin resolutoria, el negocio pierde eficacia ab origine (ex tune) y, as, todo lo que medio tempore ha sido efecto del ejercicio del derecho, o materia de adquisicin por parte del sujeto, viene a ser, por s, reducido a la nada. Betti, para quien la retroactividad responde mejor al nexo hipottico que por disposicin de las partes une el evento previsto a la regulacin de sus intereses, considera que la retroactividad no es un carcter necesario y constante de la condicin, sino slo una nota natural y dispositiva de ella, lo que las partes o la naturaleza de la relacin pueden perfectamente excluir.

El arto 177 del Cdigo Civil vigente ratifica, pues, la adopcin del principio de la irretroactividad en nuestra codificacin civil a partir de 1936 mantenindolo sin categoricidad. Como la norma no es de orden pblico y, ms bien, supletoria, la condicin no slo opera ex nunc, esto es, para el futuro, sino que tambin puede operar ex tune, esto es, para el pasado, segn lo convengan las partes en ejercicio de la autonoma de la voluntad. De este modo, ad exemplum, si se vende un inmueble arrendado bajo condicin suspensiva, hasta que sta se realice el vendedor seguir percibiendo la renta, pero, si se pacta la retroactividad y la condicin se realiza, la renta corresponde al comprador y debe reintegrrsela el vendedor; y si lo que se ha pactado es una condicin resolutoria, hasta que sta se realice la renta la percibe el comprador, pero, si se pacta la retroactividad y la condicin se realiza, la renta corresponde a quien era la parte vendedora en el contrato que se resuelve.

127. DEFECTO DE LA CONDICION

Como lo hemos venido desarrollando, la condicin est sujeta a pasar por dos de las tres etapas que hemos sealado: el de pendencia o pendeteonditione, y la de cumplimiento, o existit conditione. Sin embargo, como tambin lo hemos sealado, puede haber una tercera que es la de la falta de cumplimiento o dficit conditione. Esta ltima, es excluyente con la del cumplimiento, pues cesando la etapa de la pendencia la condicin o se cumple o defecciona. Esta ltima situacin constituye el defecto de la condicin.

La doctrina considera los efectos de la dficit eonditione en dos hiptesis, segn se haya pactado una condicin suspensiva o una resolutiva. El Cdigo Civil vigente, como tampoco su antecedente, no tiene norma expresa al respecto, por lo que las consecuencias del defecto de la condicin deben entenderse normados implcitamente y con este criterio concluir en que si la condicin pactada es suspensiva y no se realiza, el acto carecer de eficacia, y, si la condicin pactada es resolutoria y tampoco se realiza, el acto mantendr su eficacia indefinidamente, como si se hubiera celebrado un acto puro. Esta es la solucin de la doctrina dominante y la que consideramos que emerge del articulado del Cdigo Civil vigente.

No obstante lo que queda expuesto, consideramos tambin que la norma contenida en el arto 175 puede encuadrarse dentro de la regulacin del defecto de la condicin.

En efecto, el acotado arto 175 establece que "Si la condicin es que no se realice cierto acontecimiento dentro de un plazo, se entender cumplida desde que vence el plazo, o desde que llega a ser cierto que el acontecimiento no puede realizarse". La norma fue tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora, y registra como antecedente el arto 1105 del Cdigo Civil de 1936, que Len Barandiarn coment considerando que si se haba fijado plazo dentro del cual deba realizarse la condicin poda sobrevenir uno u otro extremo, decidindose a esa virtud la suerte definitiva del convenio.

En el desarrollo del maestro, si el plazo se venca sin que llegara a ser cierto que la condicin suspensiva no poda ya realizarse, si el hecho fue positivo, la condicin caducaba y el negocio no surta sus efectos si la condicin era suspensiva, o resultaban estos efectos sin variacin si la condicin era resolutoria. Pero si el hecho era negativo, entonces, a diferencia del hecho positivo, haba que esperar, como regla, a que venciera el plazo fijado, para determinar si la condicin se cumpla o no. Evidentemente, precis Len Barandiarn, en el caso positivo no haba nada que esperar una vez que dentro del plazo el evento tena lugar. Pero en el caso negativo haba que esperar hasta el vencimiento del plazo, porque hasta ese momento poda verificarse el hecho y, por lo tanto, no cumplirse la condicin, aunque en ciertos casos no es de necesidad, por razn de la fuerza natural de las cosas, aguardar hasta el vencimiento del plazo, pues desde antes puede resultar indubitable que no puede in futurum sobrevenir el evento, como puede ser en el caso de que se ofrezca una prestacin si una yegua no tiene cras dentro de un plazo y la yegua muere antes siquiera de estar en estado de preez.

El acotado arto 175 ha previsto slo el caso de una condicin negativa.

Sin embargo, puede interpretarse en consideracin a la exgesis de Len Barandiarn a su norma antecedente, que, mutatis mutandis, si la condicin es positiva y llega a ser cierto que no se realizar, caduca automticamente la condicin antes del vencimiento del plazo. As, conforme al ejemplo propuesto por el maestro, si se ofrece una prestacin si una yegua tiene cras dentro de un plazo y muere antes de estar siquiera en estado de preez, la condicin se tendr por no cumplida antes del vencimiento del plazo.

Como hemos visto al detenernos en las caractersticas de la condicin se trata de un hecho futuro e incierto y son, precisamente, estas caractersticas, las que justifican una norma como la del arto 175. El pacto para hacer del acto jurdico uno sub conditone puede tener una limitacin temporal, pues si la condicin no est sujeta a un plazo, y se mantiene la incertidumbre en cuanto a la posibilidad de su realizacin, los derechos emergidos del acto jurdico no sern definitivos ni ste surtir efectos definitivos, mantenindose la contingencia propia del acto que se celebra sub conditone y que slo puede encontrar solucin, a nuestro criterio, en aplicacin del arto 175, si el hecho en que consiste la condicin se torna irrealizable y deviene, por tanto, en condicin impropia (Supra N 125.5).

La norma contenida en el arto 175 puede considerarse, pues, como regulatoria de la dficit conditione y, sin lugar a dudas, como una solucin legal a priori a fin de que los interesados no estn indefinidamente en espera de la realizacin de la condicin.

128. EL CUMPLIMIENTO DE LA CONDICION COMO SANCION A LA MALA FE

El Cdigo Civil ha considerado un modo de realizacin de la condicin, dndola por cumplida, como sancin a la mala fe y que nosotros tratamos separadamente en razn de que no corresponde propiamente a la manera como debe operar la condicin, aunque, desde luego, si estamos de acuerdo con la solucin planteada.

El arto 176 del Cdigo Civil establece que: "Si se impidiese de mala fe el cumplimiento de la condicin por la parte en cuyo detrimento habra de realizarse, se considerar cumplida. Al contrario, se considerar no cumplida, si

se ha llevado a efecto de mala fe por la parte a quien aprovecha tal cumplimiento". La norma fue tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora 69) y registra como antecedente el arto 1111 del Cdigo Civil de 1936.

La acotada norma trata de preservar la buena fe que debe regir la relacin jurdica emanada de un acto jurdico al que han querido las partes su bordinar sus efectos a la produccin de un evento pactado como condicin. La hiptesis es de una condicin potestativa que no depende exclusivamente de la voluntad del deudor o que sea de cargo del acreedor.

La idea es, como ha escrito Len Barandiarn en su exgesis del Cdigo Civil de 1936, que no se impida o no se provoque la realizacin de la condicin por ninguna de las partes a que concierne la obligacin respectiva, o sea, que si el impedimento o 'Ia provocacin para la realizacin de la condicin proviene de hecho extrao a ellas, de fuerza mayor o de la voluntad de un tercero, no obrara el arto 1111 del Cdigo antecedente, o sea, en la actualidad el arto 176 del vigente Cdigo Civil.

El mismo Len Barandiarn indic que pactada la condicin, ni el obligado debe proceder de mala fe para impedir que se cumpla, ni el acreedor debe proceder de mala fe para forzar su cumplimiento. Frente a este indebido comportamiento es que el arto 176, en el primer supuesto, reprende el proceder del deudor considerando que la condicin se ha efectuado y, en el segundo, castiga el comportamiento del acreedor disponiendo que la condicin no se ha realizado.

EL PLAZO

129. DELlMITACION CONCEPTUAL

El plazo est indesligablemente vinculado al transcurso del tiempo, que es el hecho jurdico de mayor relevancia y al que el ordenamiento legal le atribuye diversas consecuencias jurdicas, pues est vinculado a la existencia humana misma y de l depende, por ejemplo, alcanzar la mayora de edad y con ella la capacidad de ejercicio, as como la vigencia de un contrato. El transcurso del tiempo sustenta, adems, instituciones jurdicas tales como la prescripcin, adquisitiva o extintiva, y la caducidad. El transcurso del tiempo adquiere, as, una trascendencia fundamental en relacin a los actos jurdicos.

El vocablo tiempo, del latn, tempus, es uno de los ms ricos en acepciones en la lengua espaola y, por eso, indagar sobre la esencia del tiempo y trazar su nocin es ms una tarea de la Filosofa que del Derecho. Acierta, por ello, Garca Amigo cuando afirma que el Derecho recibe la idea del tiempo del mundo extrajurdico, acoplndola a sus exigencias y tomando en consideracin notas peculiares como la necesidad de su acaecer, la de ser un hecho permanente, continuo y constante, y, la de ser un fenmeno cuantitativamente medible y computable por unidades convencionales. El tiempo deviene, pues, en una realidad jurdica en cuanto que el Derecho Objetivo lo reconoce como un factor de las relaciones jurdicas y lo aprehende mediante las normas para el cmputo de su transcurso (Infra N 134).

El plazo, que es transcurso del tiempo, considerado como modalidad, viene a ser, al igual que la condicin, una limitacin puesta por las partes a la eficacia del acto jurdico que han celebrado. Messineo entiende por plazo el tiempo en el que el negocio adquiere eficacia, o bien pierde eficacia. Betti expresa que cuando la parte no tiene motivos para dejar en suspenso o sumir en incertidumbre el valor vinculante del negocio, y s, en cambio, inters en diferir o limitar en el tiempo su realizacin prctica, hacindola comenzar o cesar en una cierta fecha, lo obtiene imponindole un plazo.

El Derecho Romano admiti subordinar la eficacia de los contratos a un plazo, que llam dies y quo los romanistas, traducindolo, denominaron trmino? dndole al vocablo dies diferentes manifestaciones, como las apunta Tola. De ah, que sea usual utilizar plazo y trmino como sinnimos, aunque la diferencia radica en que el trmino es el da inicial y final del plazo, pero debindose advertir que el Cdigo Civil vigente evita utilizar la expresin trmino y slo da cabida a la de plazo.

Len Barandiarn recogi la distincin de las siguientes manifestaciones del plazo: a) Dies certus an et quando, cuando el trmino es determinable con toda exactitud, como cuando se dice te pagar el 20 de enero del prximo ao, o la prxima Navidad, o de aqu a 5 meses; b) Dies certus an et incertus quando, cuando el trmino tiene que presentarse inevitablemente, pero no se sabe por anticipado que da ser, como cuando se dice el da que Pedro muera; c) Dies incertus an et certus quando, cuando no se sabe si el trmino tendr lugar aunque se puede precisar el da a que alude ese trmino, como cuando se dice te pago el da 5 de febrero de 1999 en que Pedro cumplir 50 aos de edad, pues el trmino puede ser fijado con certeza pero puede ocurrir que Pedro muera antes de cumplir 50 aos; y, d) Dies incertus an et quando, cuando hay incertidumbre en cuanto si el trmino se presentar, como cuando se dice te pagar el da que Pedro se case, pero puede ser que Pedro no quiera casarse nunca. Como lo aclara el propio Len Barandiarn, en los casos c) y d) no hay propiamente un plazo, sino una condicin, pues lo caracterstico del plazo es la certidumbre que el trmino se presentar o llegar.

La doctrina es unnime en la determinacin conceptual del plazo. As, los Mazeaud lo definen como un acontecimiento futuro y cierto cuya llegada retrasa la exigibilidad de un derecho o entraa su extincin, entendiendo por acontecimiento futuro y cierto aquel que se producir con seguridad en el porvenir, aquel cuya realizacin futura es cierta. Para Coviello, el trmino o plazo es un acontecimiento futuro, pero cierto, desde el cual comienza o hasta el cual dura la actuacin de la eficacia de un negocio jurdico, o sea el ejercicio de los derechos y el cumplimiento de las obligaciones que de l derivan. Arauz Castex y Llambas lo conceptan como la modalidad de los actos jurdicos referida a un hecho futuro, pero a un hecho necesario, que fatalmente ha de ocurrir. Albaladejo dice que el negocio jurdico a trmino o plazo es aquel negocio en el que las partes no quieren que los efectos se produzcan sino desde o hasta un momento futuro, pero cierto.

El acto jurdico, pues, al que puede insertarse el plazo no ha de ser puro, sino modal, esto es, un acto en el que las partes han pactado un plazo con la finalidad de determinar el momento desde el cual comienza o acaba la eficacia del negocio, por lo que su incorporacin se constituye en una limitacin a la eficacia del acto jurdico, porque siendo un elemento extrao a l ha sido arbitrariamente establecido por voluntad de las partes, por lo que esa misma voluntad lo convierte en un elemento esencial.

Los efectos de todo negocio jurdico, como expone Albaladejo, precisan producirse en el tiempo y, por ello, todo negocio implica tiempo durante el cual desarrollar su eficacia. Pero el negocio en el que el trmino es elemento accidental debe ser distinguido del negocio que por propia naturaleza requiere un tiempo limitado en el que falten, o durante el que se produzcan sus efectos o, en general, sus consecuencias. As, por ejemplo, no es accidental la existencia del plazo durante el cual el depositario debe custodiar la cosa recibida en depsito (art. 1814 del Cdigo Civil), o el plazo en el cual el comodatario debe devolver la cosa que recibi para su uso (art. 1728 del mismo Cdigo). Hay tambin otros actos en los que la temporalidad es de su esencia y, por eso, el plazo es un elemento esencial de carcter constitutivo, como en el arrendamiento (art. 1666 del Cdigo acotado).

El plazo, como elemento accidental o modalidad del acto jurdico viene a ser, entonces, un hecho, acontecimiento o evento futuro y cierto, que necesariamente, fatalmente, tiene que producirse, como si una persona vende un inmueble de su propiedad ocupado por sus padres y conviene en entregarlo cuando sus padres mueran, se tiene un plazo, pues la entrega depende de un hecho futuro que es tambin un hecho cierto, que necesariamente va a ocurrir; o, si una persona arrienda su casa por un ao y conviene en entregarla a los tres meses de celebrado el contrato, se tienen dos plazos convencionalmente pactados: uno, el primero, que es un elemento esencial, constituido por la temporalidad del contrato de arrendamiento (art. 1666 del Cdigo Civil), aun cuando sea resolutorio (art. 1699), y, el segundo, que es un elemento accidental, pues es un plazo pactado que no es constitutivo del arrendamiento sino determinante de su eficacia, pues la obligacin de entregar la casa al arrendatario est en suspenso hasta que se cumpla el plazo pactado para la entrega.

El plazo se distingue de la condicin en que es un hecho futuro y cierto, mientras que sta es un hecho futuro e incierto, y, por eso, no puede entenderse como plazo el hecho que sea de realizacin imposible. De este modo, en relacin con la condicin, tiene de comn el que el hecho sea futuro y necesariamente pactado, pero la diferencia radica en la certeza de la realizacin del evento, siendo este criterio unnime en la doctrina. Messineo enfatiza la diferencia a base del carcter de la falta de certeza de la realizacin, que est nsita en la condicin, y de la certeza de su realizacin, que es propio del trmino, como ligado que est al indefectible transcurso del tiempo, por lo que concluye en que no puede oscurecer tal criterio el hecho de que se trate, en ambos casos, de un evento futuro.

Para concluir con la delimitacin conceptual del plazo debemos enfatizar que el plazo como modalidad del acto jurdico, el plazo-modalidad, tiene que ser pactado, esto es, originarse en la autonoma de la voluntad, caracterstica por la cual no debe confundirse con el plazo que tiene su origen en la ley aun cuando la determinacin de su duracin corresponda a la voluntad de las partes.

130. CARACTERES DEL PLAZO

De la delimitacin conceptual que hemos trazado se infiere que el plazo modalidad debe ser necesariamente pactado y que el hecho, acontecimiento, suceso o evento en que consista debe ser futuro y debe ser cierto.

130.1. El plazo debe ser necesariamente pactado

El plazo debe ser necesariamente pactado por las partes. Como se trata de una restriccin a la eficacia del acto jurdico slo es posible pactarlo en los actos modales; su insercin en un acto puro no es vlida.

El pacto que determine la existencia del plazo debe tambin diferenciarse de los plazos establecidos por la ley, aun cuando en relacin a stos las partes quedan en libertad para establecer su duracin.

La libertad de las partes para pactar la insercin del plazo-modalidad en un acto jurdico, se sustenta en el postulado de la autonoma de la voluntad, con las restricciones que resultan de las normas de orden publico. Al contrario de la regulacin de la condicin, el Cdigo Civil no le ha prestado al plazo, en este aspecto, una especial atencin.

130.2. El plazo debe ser un hecho futuro

El plazo debe ser un hecho futuro porque est ligado al transcurso del tiempo. Requiere, necesariamente, del medio tempore entre la celebracin del acto jurdico y la realizacin del hecho al que estn subordinados los efectos.

130.3. El plazo debe ser un hecho cierto

El plazo debe ser un hecho cierto porque necesaria y fatalmente ha de realizarse. Slo puede haber contingencia, es decir, incertidumbre, en cuanto a la oportunidad de la realizacin del hecho, mas no en cuanto a su realizacin, respecto de la cual debe haber certeza. Esta caracterstica es esencial y es la determinante del lindero conceptual con la condicin.

131. CLASIFICACION DEL PLAZO

131.1. Plazo expreso Y plazo tcito

El plazo puede ser expreso o tcito. La existencia de un plazo, como de la condicin, no se presupone: ha de surgir de la manifestacin de voluntad, expresa o tcita (Supra N 40).

131.2. Plazo de duracin determinada y plazo de duracin indeterminada

El plazo puede ser de duracin determinada o de duracin indetermina da, segn pueda determinarse o no su duracin al momento de celebrarse el acto jurdico. El primero es un dies certus an et quando y, el segundo, un dies certus an incertus quando. Uno y otro pueden ser expresos o tcitos.

Para el plazo de duracin determinada, el Cdigo Civil contiene normas para su cmputo (Infra NQ 134) pues su determinacin es en base a una fecha. Por eso, es posible que por anticipado se fije el da del vencimiento.

El plazo de duracin indeterminada depende de un hecho de necesaria realizacin pero que no puede establecerse la oportunidad o fecha de su realizacin. El plazo existe porque existe la certidumbre de que el acontecimiento se producir, pero no puede conocerse anticipadamente la fecha de su ocurrencia, cuando, como en el ejemplo anterior, se constituye una renta para un interdicto pero a partir de la muerte de sus padres.

La duracin del plazo de duracin indeterminada puede ser fijada por la voluntad de una de las partes, por un tercero o judicialmente, de lo que nos ocuparemos ms adelante (Infra NQ 133).

131.3. Plazo suspensivo y plazo resolutorio

Es la distincin ms importante por cuanto, conceptuado el plazo como un hecho, suceso, acontecimiento o evento del cual se hace depender la eficacia del acto jurdico, la idea del plazo suspensivo o del plazo resolutorio est nsito en el concepto. As, el plazo es suspensivo, des a quo, cuando debe cumplirse para que el acto comience a surtir sus efectos y, por eso, se le llama tambin plazo inicial. El plazo es resolutorio, des ad quem, cuando los efectos del acto jurdico se producen inmediatamente despus de su celebracin pero cesan a partir de su vencimiento y, por eso, se le llama tambin plazo extintivo o final.

Los derechos y las obligaciones nacidas de un acto jurdico sometido a un plazo son derechos firmes, constituidos o adquiridos, porque dependen de un hecho de necesaria realizacin. En el plazo suspensivo el derecho o la obligacin han nacido, existen, pero no son exigibles hasta el vencimiento del plazo, como cuando se celebra un contrato de compraventa y se pacta que la entrega del bien y el pago del precio se efectuarn el1 Q de enero del ao siguiente. Por el contrario, en el plazo resolutorio, el derecho o la obligacin han nacido, existen, son exigibles, pero hasta el vencimiento del plazo, como cuando se constituye una renta en favor de un menor hasta que cumpla la mayora de edad.

El Cdigo Civil distingue con toda claridad el plazo suspensivo del plazo resolutorio en su arto 178: "Cuando el plazo es suspensivo, el acto no surte efecto mientras se encuentre pendiente. Cuando el plazo es resolutorio, los efectos del acto cesan a su vencimiento ...".

Tanto del plazo suspensivo como del plazo resolutorio nos volveremos a ocupar al hacerlo de los efectos del plazo (Infra NQ 132).

132.EFECTOS DEL PLAZO

Pactado el plazo el acto jurdico queda celebrado, pero sujeto a los efectos del plazo, sea suspensivo o resolutorio, como se infiere del ya acotado arto 178: "Cuando el plazo es suspensivo, el acto no surte efectos mientras se encuentre pendiente. Cuando el plazo es resolutorio, los efectos del acto cesan a su vencimiento. Antes del vencimiento del plazo, quien tenga derecho a recibir alguna prestacin puede ejercitar las acciones conducentes a la cautela de su derecho".

La norma, que no registra antecedente en nuestra codificacin civil y que fue tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora(84), plantea dos etapas perfectamente diferenciadas: a) la de la pendencia del plazo; y, b) la del cumplimiento o vencimiento del plazo.

132.1. La pendencia del plazo

La pendencia del plazo es la etapa durante la cual se est a la espera de su cumplimiento o vencimiento. Como lo dispone el arto 178 del Cdigo Civil, anteriormente acotado, si el plazo es suspensivo, el acto no surte efectos hasta que se cumpla o venza, y, si el plazo es resolutorio, los efectos del acto se han producido pero cesan a su cumplimiento o vencimiento.

El mismo arto 178 al regular esta etapa precepta que, antes del vencimiento del plazo, quien tenga derecho a recibir alguna prestacin puede ejercitar las acciones conducentes a la cautela de su derecho. Adems, el arto 180 dispone que si el deudor pag antes del vencimiento del plazo suspensivo no puede repetir lo pagado, pero que si pag por ignorancia del plazo si tiene derecho a la repeticin.

Antes de ocupamos de las normas regulatorias de la etapa de pendencia del plazo, debemos detenemos en la consideracin de la naturaleza de los derechos originados por el acto jurdico cuyos efectos estn supeditados al cumplimiento de un plazo y reiterar que estos derechos son firmes, constituidos o adquiridos al contrario de los derechos nacidos de un acto sub condtone.

En efecto, al contrario que la condicin, que es un hecho futuro e incierto y que por estos caracteres los derechos emergidos del acto sub condtone son contingentes, eventuales o meramente expectaticios, el plazo, por ser un hecho futuro pero cierto, hace que los derechos emergidos del acto que le est sometido sean derechos ya firmes, constituidos o adquiridos. Por ello tambin, la naturaleza de estos derechos los hace, con mayor razn que los emanados de actos sub conditione, transmisibles, tanto por acto inter vivos como por acto mortis causa.

132.1.a. Las acciones conducentes a la cautela del derecho

Como ya hemos advertido, el ltimo prrafo del Art. 178 establece que "Antes del vencimiento del plazo, quien tenga derecho a recibir alguna prestacin puede ejercitar las acciones conducentes a la cautela de su derecho". Como tambin lo hemos advertido, la norma fue tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora con los cambios de redaccin hechos por la Comi

sin Revisora(85) y no registra antecedente en el Cdigo Civil de 1936 que slo la previ para el caso de un acto sub conditione, respecto de la cual acot Len Barandiarn(86) que si la cautela del derecho est permitida en atinencia a la condicin con mayor razn en cuanto al plazo.

"Las acciones conducentes a la cautela del derecho" son equivalentes a "los actos conservatorios" a que hace referencia el arto 173 del Cdigo Civil. Pero la expresin utilizada por el arto 178 nos parece ms acertada por su precisin y mayor amplitud ya que comprende, entre otras, a la accin pauliana (Infra NQ 166) Y a todas a las que nos hemos referido al ocupamos de los actos conservatorios (Supra NQ 126.1.a).

132.1.b. El derecho a la repeticin de lo pagado

Al igual que durante la pendencia de la condicin, puede el deudor, durante la pendencia del plazo, cumplir con la obligacin. En este caso, segn el arto 180 "El deudor que pag antes del vencimiento del plazo suspensivo no puede repetir lo pagado. Pero, si pag por ignorancia del plazo, tiene derecho a la repeticin". La norma fue tomada del Proyecto de la Comisin Reformadora y registra como antecedente el arto 1113 del Cdigo Civil de 1936, aun cuando sta no se refiri slo al plazo suspensivo como lo hace el arto 180.

En relacin a la norma antecedente consideramos conveniente detenernos en las principales opiniones que ella motiv. En su Exposicin de Motivos, Olaechea dej constancia que se reconoca al deudor el derecho de repetir el pago si lo hizo por error antes de cumplirse el plazo, agregando que el punto divida a los juristas pues, mientras algunos sostenan que el pago es irrepetible, otros propugnaban la tesis contraria, y que se haba adoptado esta segunda posicin considerando que el pago anticipado por error del plazo implicaba un enriquecimiento indebido. Len Barandiarn tom una posicin contraria y consider que la facultad de repetir supone que no existe un debitum, aunque errneamente lo haya credo el deudor, lo que presupone, a su vez, que se haya pagado lo indebido, y, en su exgesis de la norma afirm que tratndose de una deuda con plazo la obligacin existe, es cierta, y slo estn diferidos sus efectos, por lo que si se paga antes del plazo no hay pago de lo indebido. Refutando a Olaechea sostuvo que era insostenible la identificacin que pretenda entre la situacin del deudor bajo condicin que paga antes de realizarse sta, y la del deudor a plazo que paga antes de vencerse ste, porque en el primer caso no hay an un derecho creado sino una expectativa, a diferencia del segundo caso, en que el derecho est constituido.

La posicin de Len Barandiarn, que compartimos, es la inspiradora de la solucin adoptada por el arto 180 del vigente Cdigo al establecer la irrepetibilidad de lo pagado, pues el plazo es un hecho cierto de cumplimiento inexorable, y slo permitir la repeticin si se paga por ignorancia del plazo.

La norma contenida en el arto 180 es clara y no requiere de esfuerzo hermenutica para su cabal interpretacin. Sin embargo, creemos que son vlidas algunas acotaciones.

En primer lugar, debe considerarse que la irrepetibilidad de lo pagado es la regla general y que la excepcin es la repetibilidad, el derecho a exigir la devolucin de lo pagado, cuando el pago se efecta por ignorancia del plazo.

En segundo lugar, que la procedencia de la repeticin de lo pagado que franquea el mismo arto 180 se fundamenta en la ignorancia del plazo. La ignorancia es ausencia de conocimiento y como tal se asimila al error, que es un vicio de la voluntad (Infra NQ 172) que puede hacer anulable el acto jurdico (Infra NQ 176). De ah, que la ignorancia deba entenderse respecto a la existencia del plazo o de la oportunidad de su cumplimiento o de la fecha de su vencimiento, pues nada obsta para que el deudor concientemente efecte un pago anticipado.

Por ltimo, el arto 180 slo considera el derecho a la repeticin si el plazo es suspensivo, por lo que el derecho a repetir no es ejercitable si el plazo es resolutorio. La rato legis radica en que la obligacin del deudor ya existe, como existe el derecho del acreedor, aunque diferida en cuanto a la oportunidad en que debe procederse al pago por tratarse de un plazo suspensivo, mientras que si el plazo es resolutorio el acto ya ha desplegado su eficacia y las prestaciones tienen que ser necesariamente pagadas hasta el vencimiento del plazo. De ah, que la limitacin a slo el plazo suspensivo puede considerarse atinada, pero creemos que la misma ratio legis tampoco impide que pueda repetirse lo pagado, por ignorancia, antes del vencimiento del plazo resolutorio.

132.2. El cumplimiento o vencimiento del plazo

Como lo hemos ya precisado, el plazo como hecho de necesaria realizacin determina que, luego de cumplido o de vencido, el acto jurdico surta definitivamente sus efectos, si es suspensivo, o que stos cesen, si es resolutorio. El Cdigo Civil no ha legislado sobre la etapa de cumplimiento o vencimiento del plazo, pero as resulta de su tantas veces acotado arto 178.

La interpretacin de la situacin resultante del cumplimiento o vencimiento del plazo que dejamos expuesta, que corresponde a la del arto 178, y que ahora concluimos en el sentido de que opera ex nunc es la asumida unnimemente por la doctrina. As, por ejemplo, Albaladejo la resume claramente al sostener que la llegada del trmino opera ipso iure, es decir, de pleno derecho y sin alcance retroactivo. El cumplimiento de las obligaciones y el ejercicio de los derechos que constituyen el contenido de la relacin jurdica son, con el trmino inicial, diferidos, y con el trmino final, limitados en el tiempo y se extinguen al quedar cumplido segn ha expuesto Betti, lo que no releva de mayor desarrollo.

133. LA DETERMINACION DE LA DURACION DEL PLAZO

Como hemos visto, el plazo puede ser de duracin determinada o de duracin indeterminada (Supra N 131.2) por lo que no obstante ser un hecho de necesaria realizacin, el Cdigo Civil establece criterios para que la duracin del plazo pueda determinarse. Estos criterios estn en funcin al plazo dies certus an et quando, es decir, cuando la determinacin del plazo pueden hacerla las partes celebrantes del acto jurdico con toda exactitud y, excepcionalmente, cuando se trata de un plazo dies certus an et incertus quando, es decir, cuando no es posible a las partes determinar anticipadamente la duracin del plazo.

Para la determinacin de la duracin del plazo con toda exactitud y anticipadamente, el Cdigo Civil ha dado contenido a las reglas de cmputo a que se refiere el arto 183 y, para los casos en que no es posible determinarla anticipadamente el Cdigo Civil autoriza a que pueda ser determinado judicialmente, conforme al arto 182.

Veamos, separadamente, las dos maneras de determinacin de la duracin del plazo.

134. LA DETERMINACION DE LA DURACION DEL PLAZO MEDIANTE LA APLlCACION DE LAS REGLAS DE COMPUTO

El ya acotado arto 183 del Cdigo Civil establece las reglas de cmputo del plazo para determinar su duracin de manera exacta y anticipada por las partes celebrantes del acto jurdico en los trminos siguientes: "El plazo se computa de acuerdo al calendario gregoriano, conforme a las siguientes regias: 1) El plazo sealado por das se computa por das naturales, salvo que la ley o el acto jurdico establezcan que se haga por das hbiles. 2) El plazo sealado por meses se cumple en el mes del vencimiento y en el da de ste correspondiente a la fecha del mes inicial. Si en el mes del vencimiento falta tal da, el plazo se cumple el ltimo da de dicho mes. 3) El plazo sealado por aos se rige por las reglas que establece el inciso 2. 4) El plazo excluye el da inicial e incluye el da del vencimiento. 5) El plazo cuyo ltimo da sea inhbil, vence el primer da hbil siguiente". La norma fue adoptada por la Comisin Revisora(92) y registra como antecedente el arto 1116 del Cdigo Civil de 1936.

Como podemos apreciar, el arto 183 slo considera reglas para computar el plazo por das, por meses y por aos, sometiendo todas estas unidades de medida del tiempo al Calendario Gregoriano. El anlisis e interpretacin de las reglas de cmputo hace necesario detenerse en ellas y vincularlas con los conceptos desarrollados por la doctrina en relacin al tiempo y su transcurso.

134.1. El Calendario Gregoriano

Como acabamos de ver, el arto 183 somete las reglas de cmputo al Calendario Gregoriano, as llamado por haber sido adoptado por el Papa Gregario XIII, en 1582, y que rige, desde entonces, en el mundo occidental y cristiano.

El cmputo de los plazos, que es el cmputo del transcurso del tiempo, se remonta a pocas primitivas cuando el ser humano va dejando de ser nmade y comienza a asentarse como agricultor, presentndosele la necesidad de conocer la duracin de las estaciones pues los perodos de siembra y de cosecha los vincul siempre a los fenmenos solares y lunares. Con el avance de la civilizacin y el progreso pudo ir determinando la duracin del perodo anual hasta llegar a poder hacerlo con relativa exactitud.

El calendario usado en la actualidad tiene su origen en el que usaron los romanos. Fue el emperador Julio Csar quien orden la adopcin de un ao solar de 365 das y 6 horas, disponiendo que un ao, que result ser el ao 46 anterior a la era cristiana, tuviera 445 das para as concordar cada ao con el ao solar, que habra de tener 365 das, excepto cada cuatro aos, en que el ao habra de tener 366 das para as absorber las 6 horas que no se incluan en los tres aos inmediatamente anteriores. Este fue el llamado Calendario Juliano.

En el siglo XVI la Iglesia Catlica procedi a la revisin del Calendario Juliano con la finalidad de ajustarlo a las festividades de la cristiandad, que consider se haban desfasado. Fue as que el Papa Gregorio XIII orden que se suprimieran diez das del ao 1582 y dispuso, adems, que dejara de ser bisiesto el ao final de cada siglo a menos que el nmero correspondiente a tal ao fuera mltiplo de 400. A partir de esta reforma el calendario pas a denominarse, como hasta nuestros das, Calendario Gregoriano.

El Calendario Gregoriano, como es sabido, plantea el cmputo del transcurso del tiempo por aos de 365 das ms un ao bisiesto de 366 das cada 4 aos; los aos divididos en 12 meses de 31 das los de Enero, Marzo, Mayo, Julio, Agosto, Octubre y Diciembre, de 30 das los de Abril, Junio, Setiembre y Noviembre, y de 28 das el de Febrero que, al ser bisiesto cada cuatro aos, alcanza 29 das; las semanas en 7 das y los das divididos en 24 horas, las horas en 60 minutos y los minutos en 60 segundos.

Tomando como base el Calendario Gregoriano, la doctrina ha hecho varias distinciones en relacin al tiempo y su transcurso, distinguiendo, as, un tiempo fijo y un tiempo mvil y un tiempo til y un tiempo continuo.

El Calendario Gregoriano es considerado como el tiempo fijo al que hace referencia la doctrina, respecto del cual Messines opina que escapa a la consideracin doctrinal del tiempo y su transcurso. El tiempo mvil, por el contrario, segn la referencia de la doctrina, es al que se aplican las unidades de medida para la determinacin de la duracin del plazo y en relacin a ellas se distingue el tiempo til, cuando el cmputo slo considera los das hbiles, y el tiempo continuo, cuando son considerados tanto los das hbiles como lo inhbiles.

134.2. El cmputo del tiempo mvil

El tiempo mvil, por lo que acabamos de dejar indicado, es el que requiere de reglas para establecer los momentos o instantes del tiempo, medido en su transcurso, para determinar la duracin del plazo. Para su cmputo se han formulado dos sistemas: el de la computacin natural, computatio naturalis, y el de la computacin civil, computatio civilis.

Por la computacin natural se procede a determinar la duracin del plazo de momento a momento, esto es, de una hora determinada a otra hora determinada dentro de un da, un mes o un ao, como, por ejemplo, si se contrae la obligacin a las 12 horas de un da y se establece el vencimiento del plazo a las 12 horas del da al que corresponde dicho vencimiento; mientras que por el sistema de la computacin civil no se procede de momento a momento, sino que se adopta el da por entero, como, por ejemplo, si el plazo es de 30 das debe esperarse el transcurso completo del trigsimo da, hasta las 24 horas, para que quede vencido el plazo. Por la computacin natural si se trata de meses, se consideran todos los das que calendariamente tenga cada mes y as, por ejemplo, si el plazo se otorg en un mes de 30 das y el mes de vencimiento tiene 31, el plazo queda vencido ese da 31; en cambio, en la computatio civiles se considera que todos los meses tienen 30 das y, as, por ejemplo, el plazo de 6 meses se considera de 180 das, aun cuando no todos los meses del perodo tengan 30 das. Por ltimo, mientras

que en la computatio naturalis se excluyen los das hbiles, en el cmputo civil se incluyen.

El Cdigo Civil no ha diferenciado los dos sistemas y, como ya los hemos advertido, su arto 183 slo refiere a la aplicacin del tiempo mvil las unidades de medicin determinadas por das, meses y aos.

134.2.a. El cmputo por das

El arto 183 en sus incs. 1), 4) Y 5) norma el cmputo por das. Segn el inc. 1 "el plazo sealado por das se computa por das naturales, salvo que la ley o el acto jurdico establezcan que se haga por das hbiles"; por el inc. 4), "el plazo excluye el da del vencimiento"; y, por el inc. 5), "el plazo cuyo ltimo da sea inhbil, vence el primer da hbil siguiente".

Como puede apreciarse, el Cdigo Civil utiliza las expresiones das naturales, das hbiles y das inhbiles, por lo que corresponde establecer los conceptos.

La regla es, conforme al inc. 1, que el plazo se computa por das naturales, lo que no significa que el Cdigo Civil haya adoptado el sistema de la computa to naturalis, ni el cmputo de momento a momento, sino que la referencia a los das naturales implica a los das enteros, a las 24 horas de cada da. Por ello, por el carcter supletorio de la regla, el inc. 1 deja librado a que la ley -referencia que para los efectos del plazo-modalidad no es pertinente- o el acto jurdico establezcan que se hagan por das hbiles, lo que significa que se deja librada a la autonoma de la voluntad los das que pueden ser computables.

La norma, por su carcter supletorio, delega en la voluntad de las partes que decidan sobre el sistema de cmputo. Nada impide que adopten la computacin natural y que establezcan los das de momento a momento y que excluyan los das inhbiles, o, que adopten la computatio cvilis e incluyan los das hbiles. Slo ante el vac