formación profesional - JCCM

de Castilla-La Mancha

profesional

ii plan deformación

Edita: Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha

Elaboración del Plan: Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha

Diseño y maquetación: IMP ComunicaciónImpresión: AGSM

Depósito Legal: AB-119-2008

Vivimos en un mundo globalizado, en un momento de la Historia en que los cambios se produ-cen a velocidad de vértigo. Seguramente ninguna causa explica mejor este carácter cambiante de nuestra sociedad como la revolución tecnológica que nos permite mover capitales, bienes, servicios, conocimientos y personas alrededor del mundo con extraordinaria celeridad, incre-mentando las oportunidades de competitividad y bienestar; pero exigiéndonos, en contraparti-da, una rauda adaptabilidad a las nuevas condiciones que van apareciendo en el proceso. Quien no lo hace, se queda atrás.

En este contexto, en Castilla-la Mancha, durante los últimos años, hemos realizado un gran es-fuerzo por conjugar el capital económico, el capital social y el capital humano, con el propósito de crear un entorno de oportunidades y de igualdad cada vez más consolidado. Estamos apro-vechando estos años de autonomía, en los que somos dueños de nuestro propio destino, para ganar al tiempo.

En este proceso ha sido fundamental el desarrollo y la progresiva cualificación del capital huma-no, que, sin ningún tipo de duda, constituye nuestra principal riqueza. Incrementar la educación y la formación de las personas es nuestro principal objetivo, porque somos conscientes de que con ello contribuimos a favorecer la mayor competitividad de las empresas y, de esta manera, también avanzamos por el camino de la igualdad.

Queremos que en Castilla-La Mancha se valore el esfuerzo del trabajo y a los trabajadores. Para ello, la formación es fundamental. Y por eso hemos realizado este II Plan de Formación Profesional, desde el acuerdo y la concertación con los Agentes Sociales. Es un plan con protagonismo y responsabili-dad compartidos. Lo hemos elaborado todos juntos y lo hemos insertado en la red de otros acuer-dos regionales, como el Pacto por el Desarrollo y la Competitividad o la Declaración Institucional para el Diálogo Social, que guardan una relación estrecha con la Formación Profesional.

El propio Plan es un gran pacto entre las instituciones y agentes representados en el Consejo de Formación Profesional, que se concreta en un documento, fruto de la reflexión compartida sobre la situación actual y sobre los factores y elementos necesarios para impulsar la Formación Profesional en nuestra región.

No hay futuro sin presente. Y el presente son nuestros jóvenes, nuestros trabajadores y trabaja-doras. Para ellos, esencialmente, se ha diseñado este II Plan de Formación Profesional.

Formación implica Educación, porque la Formación Profesional no es sólo parte consustancial de las políticas de empleo, sino también de las políticas educativas, ya que no sólo contribuye a la preparación profesional, sino también al desarrollo personal, a las capacidades necesarias

para participar en la vida cultural, económica, social y laboral, a la integración social, la convi-vencia y la ciudadanía democráticas. Dentro de ese marco, la formación es un derecho básico y, por tanto, inalienable, de todos los trabajadores y trabajadoras de Castilla-La Mancha, que se debe fortalecer, al mismo tiempo, en los sectores más vulnerables en los procesos de in-serción laboral, como los jóvenes sin experiencia profesional, mujeres y personas con algún grado de discapacidad.

La formación debe llevar a la cualificación, a la adquisición de competencias profesionales que han de ser reconocidas en el intercambio económico, pues no en balde, como se indica en la Declaración Institucional para el Diálogo Social en Castilla-La Mancha, estas cuestiones “pueden tener su desarrollo en la negociación colectiva, comprometiéndose [los firmantes] a potenciarla, desde el respeto a la madurez y la autonomía de las partes, para contribuir a su impulso y desa-rrollo”. Esta Declaración considera que “el capital humano, su formación y su adaptabilidad, es un factor estratégico para la productividad de las empresas de la Región y fuente de satisfacción de las expectativas vitales y profesionales de los trabajadores”.

La formación para el empleo no es sólo la que reciben nuestros alumnos y alumnas en el sis-tema educativo, sino también la que se dirige a quienes buscan empleo o precisan renovar o transformar sus competencias para afrontar nuevas ocupaciones. Pero también la formación en el empleo es fundamental si queremos un trabajo de calidad, seguro, estable, cualificado, que promueva la competitividad, en el que el trabajador se adapte al puesto de trabajo pero tam-bién lo mejore gracias a su mayor competencia y mejores iniciativas.

Quiero, en estas palabras introductorias del documento, reconocer el papel esencial del Consejo de Formación Profesional, que impulsa y coordina la oferta formativa; integra en la práctica el subsistema de Formación Profesional del sistema educativo con el de Formación para el Empleo; articula un sistema de orientación profesional a lo largo de la vida educativa y laboral de las per-sonas; construye un dispositivo que permite acreditar las competencias profesionales de nuestros trabajadores y trabajadoras; impulsa los estudios e investigaciones sobre Formación Profesional; y, muy especialmente, difunde con objetividad y prestigio la Formación Profesional.

José María Barreda FontesPresidente de Castilla-La Mancha

Í N D I C EÍ N D I C E

Í N D I C EÍ N D I C E

I. PREÁMBULO 10

1. Marco de referencia 12Igualdad en el acceso y derecho a la formación profesional 12Cultura del pacto y el diálogo social 12Adaptación de la formación profesional al mercado de trabajo 13Capital humano y cohesión social 13Aprendizaje a lo largo de la vida 14Acreditación de competencias 15Desarrollo normativo 15Instrumentos para la gestión de la formación profesional 16Otras iniciativas regionales relacionadas con la formación profesional 18Los centros formativos 19El profesorado 20Información, orientación y asesoramiento profesional 20

2. Diagnóstico 212.1. Retos para el sistema regional de formación profesional 21

El reto de ordenar la formación profesional 21El reto de aprovechar los recursos y de planificar coordinadamente la oferta formativa 21El reto de adecuar la formación al mercado de trabajo 22El reto de construir itinerarios socioprofesionales coherentes 22El reto de acreditar las competencias adquiridas 23El reto de investigar la formación profesional 23El reto de mejorar la calidad 23

2.2. Tendencias del mercado de trabajo y situación de la formación profesional 23La situación del mercado de trabajo 23La respuesta de la formación profesional 25Escenarios prospectivos 26

3. Características básicas del plan 27Antecedentes 27Duración 27Acuerdo y corresponsabilidad 28Ejes directores e intenciones 28

II. OBJETIVOS Y MEDIDAS 30

1. Potenciar la formación profesional en Castilla-La Mancha como factor clave de competitividad y cohesión social de la región 321.1. Potenciar la corresponsabilidad y la participación social e institucional, a través

del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, en la planificación, puesta en marcha, seguimiento y evaluación de la formación profesional 32

1.2. Promover el conocimiento de los programas europeos de formación profesional y la participación en los mismos 33

1.3. Difundir la oferta de formación profesional de manera que resulte accesible a los ciudadanos y ciudadanas y a las empresas 34

1.4. Promover que las empresas, las organizaciones empresariales, los sindicatos y los propios trabajadores y trabajadoras consideren la formación profesional como una herramienta estratégica y de desarrollo 34

2. Fomentar la igualdad de oportunidades en el acceso a la formación profesional, como elemento básico que facilita la participación activa en la vida social, cultural y económica 352.1. Fomentar el aprendizaje a lo largo de la vida como derecho de todos los

ciudadanos y ciudadanas 362.2. Poner en marcha actuaciones que promuevan el acceso a la

formación profesional de las personas con mayores dificultades de inserción sociolaboral 37

3. Adaptar las diferentes ofertas de formación profesional a la realidad castellano-manchega y promover la coordinación entre ellas 383.1. Adecuar la oferta de formación profesional al mercado de trabajo y

a la estructura productiva de Castilla-La Mancha 393.2. Promover estudios e investigaciones, con la colaboración del Observatorio

del mercado de trabajo y las ocupaciones, para detectar necesidades formativas y planificar la oferta de formación profesional 40

3.3. Coordinar la oferta de formación profesional que realizan las distintas instituciones y subsistemas 41

3.4. Adecuar la oferta de formación profesional a las características de la región 413.5. Adecuar la oferta a los/as destinatarios/as de la formación

y promover competencias transversales para su desarrollo personal y profesional 42

4. Promover la oferta integrada en centros que imparten formación profesional y crear una red pública de centros integrados en la región para responder a las necesidades del sector productivo 434.1. Fomentar los centros integrados de formación profesional 444.2. Promover la oferta integrada de formación profesional en centros públicos 444.3. Promover la oferta integrada de formación para el empleo en

centros colaboradores 45

5. Impulsar el reconocimiento, evaluación y acreditación de las competencias profesionales y fomentar la mejora del nivel de cualificación de los trabajadores y trabajadoras en un contexto de aprendizaje permanente 455.1. Establecer mecanismos de reconocimiento, evaluación y acreditación de las

competencias adquiridas 46

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5.2. Establecer una oferta de formación, con los complementos necesarios, dirigida a la consecución de títulos de formación profesional y certificados de profesionalidad 47

5.3. Contribuir al desarrollo del Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales a partir de un análisis de las necesidades de Castilla-La Mancha 48

5.4. Poner en valor la oferta no asociada al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales 48

6. Desarrollar un sistema integrado de información, orientación y asesoramiento profesional 496.1. Fomentar el trabajo en red de los recursos de orientación existentes 506.2. Impulsar el carácter de la orientación como proceso que se desarrolla

a lo largo de la vida 506.3. Recopilar información relevante y difundirla entre profesionales y usuarios/as 516.4. Promover la adquisición de competencias para la toma de decisiones

en la elección, búsqueda y mantenimiento del empleo 516.5. Proporcionar formación a los orientadores y orientadoras 51

7. Promover la calidad y eficacia de las ofertas de formación profesional 527.1. Promover la calidad de la formación profesional, fomentando la

evaluación de la misma y el intercambio de experiencias sobre los procedimientos empleados para ello 53

7.2. Proporcionar formación al profesorado en competencias didácticas y específicas 54

7.3. Mantener una dotación adecuada de instalaciones y equipamientos 557.4. Favorecer las prácticas en empresas y la formación en alternancia 55

III. ACTUACIONES Y TEMPORALIZACIÓN 58

IV. EVALUACIÓN 66

1. Procedimientos e indicadores para obtener información 681.1. Método 1: Grupo de discusión 68

Valoración de actuaciones específicas por parte del Consejo de Formación Profesional 68Valoración de actuaciones específicas en el marco de los distintos programas o actuaciones 69

1.2. Método 2: check list o lista de comprobación 701.3. Método 3: estadística descriptiva, recogida y tratamiento de la información 71

2. Temporalización de la evaluación y seguimiento del Plan 72

V. MEMORIA ECONÓMICA 74

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P R E á M B u L O

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I I PLAN DE FORMACIóN PROFESIONAL DE CASTILLA-LA MANCHA

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1. MARCO DE REFERENCIA

La formación profesional representa una necesidad para el sistema productivo y para la promo-ción profesional y personal de los trabajadores y trabajadoras. Por esta razón, es un factor clave de desarrollo y competitividad y pieza básica dentro de una política activa cuyo objetivo sea la mejora de las perspectivas de trabajo de las personas y la mejora de la competitividad de las empresas en una economía en evolución constante.

Igualdad en el acceso y derecho a la formación profesional

La participación de todos los ciudadanos y ciudadanas en la vida social, cultural y económica es el objetivo básico de las políticas activas de empleo y, por tanto, de la formación profesional.

Por este motivo, asumimos como básicos los principios de equidad e inclusión y, más particu-larmente, la igualdad de oportunidades en el acceso al empleo, en la formación y promoción profesionales, y en las condiciones de trabajo. En consecuencia, y como no podía ser de otra forma, los principios contemplados en el artículo 5 de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres deben estar presentes en todas las actuaciones de formación profesional.

La formación profesional contempla a las personas como capital humano, pero sobre todo, como actores en el ejercicio de derechos: derecho a elegir su profesión, a conocer y adaptarse a los cambios del sistema productivo, a conocer sus propias posibilidades y a desarrollarlas.

Esto hace que sean necesarias medidas de apoyo para garantizar estos derechos, en particular a quienes, por su menor cualificación profesional, tienen mayores dificultades para acceder al mercado de trabajo.

Cultura del pacto y el diálogo social

El diálogo social es el eje principal sobre el que se asienta el presente y futuro del desarrollo económico de un territorio. Fruto de este diálogo, en Castilla-La Mancha se firmó un Acuerdo por el Empleo (2004-2007) y, más recientemente, un Pacto por el Desarrollo y la Competitividad (2005-2010).

En el segundo de estos documentos se considera la formación profesional “como un objetivo estratégico para el Gobierno y los Agentes Sociales, constituyendo como tal una prioridad en las acciones de Gobierno”. Esta consideración deriva del papel que se le concede en el desarrollo

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social y económico, que actualmente se caracteriza por menores índices de paro, pero en el que se precisa una apuesta decidida por la calidad en el empleo, hacia la cual deben orientarse los pactos y acuerdos que vengan en el futuro.

Precisamente, la Declaración Institucional para el Diálogo Social en Castilla-La Mancha, firmada el 9 de noviembre de 2007, pretende apoyar y reforzar dicho diálogo entre los interlocutores sociales y económicos y el Gobierno de la región en diversas materias con incidencia laboral y, entre ellas, en la formación del capital humano para lograr una mayor cualificación profesional y una mayor empleabilidad de la población activa.

Esta misma cultura del diálogo, en el ámbito estatal, ha dado lugar al Acuerdo de Formación Profesional para el Empleo firmado por el Gobierno y los agentes sociales el 7 de febrero de 2006, y al Acuerdo para la Mejora del Crecimiento y del Empleo, refrendado por el Real Decreto Ley 5/2006, de 9 de junio, para la Mejora del Crecimiento y del Empleo.

Adaptación de la formación profesional al mercado de trabajo

La oferta de formación profesional debe adaptarse a las necesidades de los distintos sectores productivos, teniendo en cuenta la situación presente y el inmediato futuro.

La formación profesional suele ligarse a las políticas activas de empleo, tal como señala la Ley 56/2003, de 16 de diciembre, de Empleo, que sitúa la formación ocupacional y la continua en el centro de las políticas del ámbito laboral que mejor pueden contribuir a la consecución de los objetivos de em-pleo, que hoy en nuestra región debe ser de calidad, estable, seguro y cualificado.

Así pues, hoy es más evidente que nunca la función estratégica de la formación profesional en la preparación de las personas y, particularmente, en la mejora de la competitividad, en la adaptación de las cualificaciones profesionales a las necesidades del entorno productivo y en las políticas de empleo como instrumento de inserción profesional.

Capital humano y cohesión social

Pero la formación profesional también debe ligarse a las políticas de educación, puesto que, además de tener en cuenta las necesidades de las empresas, debe responder a las necesidades de las personas.

En un mundo global e interdependiente, con una economía basada en el conocimiento y en el que se producen fenómenos de deslocalización y cambios económicos de envergadura, hay


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una creciente especialización de los puestos de trabajo junto a -en aparente paradoja- una ne-cesidad imperiosa de reforzar las competencias transversales y la formación polivalente para permitir la adaptación a los más que previsibles cambios de ocupación a lo largo de la vida.

Por eso es tan importante asegurar el desarrollo de todas las competencias básicas, no sólo profesionales o técnicas, sino también aquellas que favorecen la educación a lo largo de la vida y el retorno al sistema educativo cuando se precise, la integración social y la participación, la convivencia y la ciudadanía democráticas.

La formación profesional es inversión en capital humano. Sirve de manera esencial a la pro-moción profesional y social de los trabajadores y trabajadoras y al desarrollo de los recursos humanos de las empresas, contribuyendo a la integración sociolaboral y, en suma, a la cohe-sión social.

Aprendizaje a lo largo de la vida

La Comisión Europea ha puesto como objetivo para los años venideros que el aprendizaje per-manente no sea sólo un aspecto de la educación y la formación, sino también de la participa-ción, a través de un conjunto indivisible de contextos didácticos.

Se entiende por aprendizaje a lo largo de la vida toda actividad de formación útil, realizada de manera continua, y que tiene por objeto mejorar las cualificaciones, los conocimientos y las capacidades de las personas. utiliza diferentes vías, que dan lugar a lo que se denomina como aprendizaje formal, no formal e informal.

Entendemos por vía formal de aprendizaje aquella que se produce en un contexto estructurado y organizado y que conduce a una certificación con valor académico o profesional; vía no formal de formación sería aquella que se produce fuera de este marco, pero que está estructurada explícitamente para lograr determinados aprendizajes, aunque no conduce a una acreditación oficial; y educación informal sería la que se adquiere de forma no intencionada a través del trabajo o la experiencia a lo largo de la vida, pero que permite la adquisición de determinadas competencias relevantes para el desempeño profesional.

Las directrices que, desde 1997, se elaboran en la unión Europea con el fin de orientar las políticas de empleo de los estados miembros consideran el aprendizaje permanente como un elemento vital para responder a los cambios económicos y sociales y reforzar el empleo, la reforma económica y la cohesión social como parte de una economía basada en el cono-cimiento.


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Acreditación de competencias

La formación profesional es un todo único que persigue la competencia profesional de quienes acceden a ella, tanto para facilitar su inserción o reinserción laboral, como para permitir su pro-moción en el mundo del trabajo.

Es precisamente este concepto clave de competencia profesional el que permite concebir la formación profesional como algo integrado, con unos objetivos comunes y con un mismo re-ferente. Entendemos competencia profesional como el conjunto de capacidades, conocimien-tos, destrezas y actitudes adquiridas a través de la formación o, en su caso, de la experiencia laboral, que permiten el ejercicio de la actividad profesional conforme a las exigencias de la producción y el empleo.

uno de los principales retos del sistema de formación profesional es, precisamente, lograr la acre-ditación de las competencias profesionales adquiridas por diferentes vías, esto es, avanzar hacia un acuerdo básico para reconocer lo que alguien sabe hacer, independientemente de la forma en que lo haya aprendido. La consecución de este acuerdo compete actualmente al Gobierno de la nación y se desarrolla mediante el Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales, dentro del cual se deben situar los dispositivos de las comunidades autónomas, las cuales tienen por otra parte el com-promiso de contribuir a su mejora. Y sin embargo, trasciende el propio marco de nuestro país, pues es un elemento básico para el desarrollo y la movilidad laboral en el espacio único europeo.

Precisamente, diferentes directrices europeas, incluido el Marco de acción para el desarrollo permanente de las competencias y las cualificaciones, elaborado por los interlocutores sociales como contribución al Consejo Europeo de Barcelona 2002, han señalado la importancia de este reconocimiento: para los trabajadores y trabajadoras, porque contribuye a la estabilidad y la me-jora en el empleo y motiva a seguir formándose; para las empresas, porque aumenta la competi-tividad, ayuda a optimizar sus recursos y da transparencia al mercado laboral; y para la sociedad, porque hace visible el aprendizaje a lo largo de la vida, permite luchar contra la exclusión social y dota de más racionalidad a los sistemas de formación.

Desarrollo normativo

En los últimos años, se han producido en nuestro país cambios normativos para avanzar en la transparencia de las cualificaciones y la flexibilización del acceso a la formación profesional de estudiantes y trabajadores/as, tanto ocupados como desempleados.

El primer hito fue la promulgación de la Ley Orgánica 5/2002, de 19 de junio, de las Cualifica-ciones y de la Formación Profesional, que estableció un Sistema Nacional de Cualificaciones


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Profesionales para avanzar en un enfoque de aprendizaje permanente y en la integración de las distintas ofertas de formación profesional, propiciando el reconocimiento y la acreditación de las competencias profesionales adquiridas tanto a través de procesos formativos formales y no formales como de la experiencia laboral.

El Real Decreto 395/2007, de 23 de marzo, por el que se regula el subsistema de formación profesional para el empleo, que deriva de dicha ley, integró en un único modelo de formación profesional para el empleo las dos modalidades clásicas de formación ocupacional y continua, e introdujo mejoras con el fin de adaptar la formación dirigida a los trabajadores y trabajadoras ocupados y desempleados a la nueva realidad económica y social, así como a las necesidades que demanda el mercado de trabajo.

Por su parte, la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación reguló, entre otras materias, la formación profesional del sistema educativo, estableciendo un conjunto de ciclos formativos de grado medio y de grado superior que tienen como finalidad preparar a los alumnos y alumnas para la actividad en un campo profesional y facilitar su adaptación a las modificaciones laborales que puedan producirse en su vida, así como contribuir a su desarrollo personal y al ejercicio de la ciudadanía democrática.

El Real Decreto 1538/2006, de 15 de diciembre, por el que se establece la ordenación general de la formación profesional del sistema educativo, ofreció una nueva ordenación de la forma-ción profesional del sistema educativo, con el fin de que las nuevas titulaciones y las enseñan-zas conducentes a las mismas respondan a las necesidades de la sociedad del conocimiento, basada en la competitividad, la empleabilidad, la movilidad laboral, y en el fomento de la cohesión y la inserción social, adaptándose a los intereses y capacidades de las personas.

Finalmente, debemos reseñar la Ley 23/2002, de 21 de noviembre, de Educación de Personas Adultas en Castilla-La Mancha, que atribuyó a esta modalidad educativa, entre otras, la mejora de las competencias técnico-profesionales del alumnado mayor de edad. También la Ley Orgánica 2/2006 de Educación le impuso la finalidad de que las personas adultas puedan adquirir, actualizar, completar o ampliar sus conocimientos y aptitudes para su desarrollo personal y profesional.

Instrumentos para la gestión de la formación profesional

La Estrategia de Lisboa para los objetivos en educación y formación incorporaba el aprendizaje permanente entre los indicadores estructurales para 2010. El Consejo Europeo planteó, en junio de 2005, la necesidad de relanzar dicha Estrategia y aprobó las directrices integradas para el crecimiento y el empleo 2005-2008, entre las que incluye la dirigida a adaptar los sistemas de educación y de formación a las nuevas necesidades en materia de competencias.


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Siguiendo estas directrices, y en el marco que establece la normativa estatal antes mencionada, en Castilla-La Mancha se ha puesto en funcionamiento una serie de mecanismos y propuestas para la gestión de la formación profesional.

Dicha gestión viene condicionada por la diferente manera en que las Consejerías competentes en materia de educación y en materia laboral han asumido las competencias traspasadas por el Estado. Mientras que la primera asume el desarrollo legislativo y la ejecución de la enseñanza en toda su extensión, niveles, grados, modalidades y especialidades, la segunda restringe su acción principalmente a la ejecución de las acciones y programas establecidos con carácter estatal.

La formación profesional del sistema educativo se ordena en ciclos formativos de grado medio y ciclos formativos de grado superior, integrados por módulos profesionales de duración variable (el equivalente a las áreas o materias de otros niveles educativos), que constan de una serie de conocimientos teóricos-prácticos en función de las diversas actividades que se desarrollan en una profesión. Todos los ciclos formativos llevan incorporado un módulo profesional de Forma-ción en centros de trabajo que se desarrolla en empresas.

El acceso a los ciclos formativos requiere estar en posesión de una titulación académica, el Graduado en Educación Secundaria para los de grado medio y el título de Bachiller para los de grado superior, o bien superar una prueba de acceso específica.

Para el alumnado que no ha superado los objetivos de la Educación Secundaria Obligatoria, existe una oferta de programas de garantía social, que progresivamente se están sustituyendo por los nue-vos programas de cualificación profesional inicial, regulados por la Ley Orgánica 2/2006 de Educa-ción, y que permiten acreditar un nivel 1 de cualificación profesional y obtener, previa superación de ciertos módulos formativos de carácter voluntario, el Graduado en Educación Secundaria.

Corresponde a la Administración educativa planificar y autorizar la implantación de los distintos ciclos formativos, y también adaptar el currículo de los distintos títulos de formación profesional a partir de la normativa básica de ámbito estatal.

un caso particular lo constituye la educación de personas adultas en materia de formación pro-fesional que incluye, además de cursos de preparación para las pruebas de acceso a ciclos formativos y de obtención de títulos de Técnico y Técnico Superior, o de programas de garantía social, una muy amplia oferta de programas no reglados de carácter profesional.

Estos programas no reglados, que en la medida de lo posible se asocian al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales, están dirigidos a aquellas personas, tanto desempleadas como ocupadas, que quieren adquirir, mejorar o actualizar sus competencias profesionales para adap-tarse a los cambios del sistema productivo, y pueden, por tanto, identificarse con una verdadera


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formación para el empleo tal como se entiende en el contexto laboral. Con el fin de ajustarse a las necesidades horarias de la población adulta, su duración es variable y oscila entre un trimes-tre, un cuatrimestre o un año académico completo.

Por su parte, el subsistema de formación profesional para el empleo está integrado por la forma-ción de demanda, que abarca las acciones formativas de las empresas y los permisos individua-les de formación financiados total o parcialmente con fondos públicos; la formación de oferta, que comprende los planes de formación dirigidos prioritariamente a trabajadoras/es ocupados y las acciones formativas dirigidas prioritariamente a trabajadores/as desempleados; la forma-ción en alternancia con el empleo, que está integrada por las acciones formativas de los con-tratos para la formación y por los programas públicos de empleo-formación; y las acciones de apoyo y acompañamiento a la formación, que son aquellas que permiten mejorar la eficacia del subsistema de formación profesional para el empleo.

Las anteriores iniciativas de formación se realizan principalmente mediante la concesión de sub-venciones públicas concedidas a entidades públicas y privadas, en el marco de lo que establece la Ley 38/2003, de 17 de noviembre, General de Subvenciones.

una parte importante de las acciones formativas en Castilla-La Mancha son realizadas por las organizaciones empresariales y sindicales más representativas de la región, que están represen-tadas en el Consejo de Formación Profesional y en los órganos de gobierno del Servicio Público de Empleo.

La mayor parte de los programas formativos se realizan a partir de las bases reguladoras de concesión de subvenciones establecidas mediante órdenes del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, y se financian con fondos procedentes del Estado y del Fondo Social Europeo.

una parte de las acciones de formación para el empleo, sin embargo, se financian con fondos pro-pios de la Comunidad Autónoma, aunque también se cuenta con una aportación del Fondo Social Europeo. En este caso, como es obvio, no es preciso ajustarse a las bases reguladoras estable-cidas por el Estado.

Otras iniciativas regionales relacionadas con la formación profesional

La formación continua de los trabajadores públicos y del personal estatutario de Sanidad, de gran importancia para el desarrollo de nuestra región, corresponde ejecutarla a otros organis-mos públicos, en particular la Consejería de Administraciones Públicas y el SESCAM, y no es objeto explícito del II Plan de Formación Profesional.


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Sin embargo, sí es importante destacar otros programas formativos con especial incidencia en el empleo o que colindan con la formación profesional. Sin ánimo de ser exhaustivos, podemos citar el programa de formación agraria, la formación enfocada a la obtención de carnés profesionales, o los cursos de animación o dirección de actividades juveniles para el tiempo libre. Es importante que, en el marco de la formación profesional y las cualifica-ciones que define el presente Plan, pueda analizarse conjuntamente las posibilidades para elaborar itinerarios formativos y acreditar las competencias adquiridas por los participan-tes en dicha formación.

Así mismo, cabe resaltar el hecho de que buena parte de los planes y estrategias de ámbito regio-nal, algunos vigentes y otros finalizados pero que van a renovarse en breve, incluyen entre sus me-didas algunas que tienen que ver con la formación para el empleo: Plan de Igualdad de Oportuni-dades entre mujeres y hombres, Plan Joven, Plan de Integración Laboral de los inmigrantes, Plan de Acciones para la Seguridad y Salud Laboral, Plan de Salud Mental, Plan Regional de Integración Social, Estrategia para el Desarrollo Sostenible del Medio Rural, Plan Regional de Conciliación de la vida laboral, familiar y personal, Plan de Fomento del Autoempleo, etc.

Los centros formativos

Las enseñanzas de formación profesional en el sistema educativo se imparten, en su inmensa mayoría, en centros de titularidad pública pertenecientes a la Administración educativa.

Los programas no reglados de formación profesional de la oferta de educación de personas adultas se imparten en centros y aulas propios, pero también a través de actuaciones convenidas entre la Administración educativa y las Corporaciones locales y entidades sin ánimo de lucro.

La mayor parte de la formación para el empleo preferentemente destinada a desempleados y desempleadas se realiza a través de centros colaboradores homologados que realizan las accio-nes formativas a través de la concesión de subvenciones.

En este marco, cobra especial significación la red de centros propios, constituida por centros de titularidad pública que imparten formación profesional para el empleo, formación que deberá ser cada vez más amplia y diversificada. A ellos se unirán los centros de referencia nacional y los centros integrados de formación profesional.

Precisamente estos últimos, regulados por el Real Decreto 1558/2005, de 23 de diciembre, por el que se regulan los requisitos básicos de los Centros Integrados de Formación Profesional, constituyen un paradigma de la integración de los subsistemas de formación profesional y des-empeñarán un papel destacado en la orientación profesional, la formación del profesorado, el


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asesoramiento a otros centros, la relación con el sistema productivo, y la evaluación y mejora de la calidad de las ofertas formativas.

Esto no significa que podamos olvidar el papel que desempeñan actualmente los centros homo-logados en formación para el empleo, que ayudan a vertebrar una oferta formativa plural y de calidad. Precisamente, debe ser un objetivo compartido la extensión de una cultura de la calidad en todos los centros que ofrecen formación para el empleo.

El profesorado

Corresponde a funcionarios y funcionarias docentes impartir las enseñanzas de formación pro-fesional en el sistema educativo, mientras que la formación para el empleo corre a cargo en su mayor parte de docentes contratados por las entidades colaboradoras.

Sea como sea, cabe exigir la máxima calidad en el desempeño profesional, para lo cual debe proporcionarse formación a todo el profesorado, mediante actividades diferenciadas para los diversos profesionales, pero también mediante acciones en las que participen conjuntamente y que permitan el encuentro e intercambio de experiencias.

Información, orientación y asesoramiento profesional

La orientación profesional es un elemento de primer orden para la mejora de la formación profesional y del empleo, tal como se encargan de señalar distintos estudios del CEDE-FOP y la OCDE, y directrices de la unión Europea, como las contenidas en la Resolución del Consejo sobre el fortalecimiento de las políticas, sistemas y prácticas en materia de orientación permanente.

Los distintos subsistemas han mantenido hasta el presente sistemas paralelos de orientación profesional, que no siempre alcanzan la máxima generalización.

En el sistema educativo de nuestra Comunidad Autónoma se ha optado, tal como establece el Decreto 43/2005, de 26 de abril, por el que se regula la Orientación Educativa y Profesional en la Comunidad Educativa de Castilla-La Mancha, por un modelo interno de orientación, lo que significa que los profesionales de la misma trabajan a tiempo completo integrados en los claus-tros de los centros docentes. Esto permite coordinar mejor la contribución a la orientación de los tutores y tutoras académicos, y deseablemente, colaborar en la orientación profesional y la orientación al alumnado de los ciclos formativos con el profesorado responsable de Formación y orientación laboral y de la Formación en centros de trabajo.

P R E á M B u L O / D I A G N ó S T I C O

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La orientación profesional a trabajadoras y trabajadores desempleados, por su parte, se desa-

rrolla, principalmente, a través de las acciones de orientación profesional y asistencia al autoem-

pleo, un servicio externo establecido por la administración laboral para el conjunto de nuestro

país. En Castilla-La Mancha se ha abierto en la convocatoria que regula estas acciones, si bien

de forma no sistemática, una vía para la orientación de las personas ocupadas.

2. DIAGNÓSTICO

2.1. Retos para el sistema regional de formación profesional

Diversos análisis, muchos de los cuales se recogían ya en el anterior Plan de Formación Profe-

sional 2003-2006, han detectado una serie de problemas estructurales y funcionales que plan-

tean muy importantes retos al sistema regional. Dichos retos se exponen a continuación.

El reto de ordenar la formación profesional

Actualmente, existe una cierta dispersión de competencias en los ámbitos laboral y educativo, y

un desarrollo insuficiente de la normativa estatal que permita el trasvase y reconocimiento de las

competencias adquiridas por distintas vías formativas. Tampoco se han dado pasos en Castilla-

La Mancha para arbitrar instrumentos que permitan que las administraciones educativa y laboral

y los agentes sociales otorguen reconocimiento, dentro de los estrechos márgenes permitidos,

a dichas competencias en el sistema productivo de nuestra región.

Además, puesto que no hay permeabilidad suficiente entre los subsistemas como para flexibili-

zar el paso de uno a otro, resulta difícil animar y orientar a las personas a mantener un esfuerzo

permanente de actualización y mejora de su cualificación profesional.

El reto de aprovechar los recursos y de planificar coordinadamente la oferta formativa

Los distintos subsistemas de formación profesional suelen planificar sus actuaciones de forma

independiente, de manera que no es infrecuente encontrarse con una oferta formativa atomiza-

da y dispersa. A esto contribuye el hecho de que algunos instrumentos normativos exceden el

marco autonómico, muchas de las partidas presupuestarias tienen carácter finalista y una parte

de la oferta depende para su desarrollo de entidades externas.


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Sin embargo, tanto la unidad teórica de la formación profesional, definida en la Ley 5/2002 de Cualificaciones y Formación Profesional, como la necesidad de rentabilizar el uso de infraestructuras, equipamientos y recursos materiales y humanos, evitando solapamientos, aconseja realizar una planificación conjunta y, por lo tanto, coordinada, de todas las acciones de formación.

Así mismo, será necesario estudiar conjuntamente la complementariedad y coherencia de los distintos planes y estrategias regionales con incidencia en la formación para el empleo, por muy compleja que resulte la coordinación entre las distintas administraciones y agentes responsables, con vistas a mejorar su eficacia, optimizar sus acciones y lograr una mayor trans-parencia y transferencia de las competencias adquiridas.

El reto de adecuar la formación al mercado de trabajo

Es casi crónico el hecho de que algunos ciclos formativos con una elevada inserción laboral son poco demandados por el alumnado. Por su parte, en formación para el empleo existe un exceso de oferta en determinadas especialidades o zonas geográficas, lo que se explica porque son muy demandadas por el alumnado -aunque no tanto por el sistema productivo- y porque suelen tener un coste de equipamiento menor que otras especialidades que serían más necesarias.

Pero además, la peculiar estructura empresarial de Castilla-La Mancha, junto a la dispersión territorial y el marcado carácter rural de la región, amplifican el reto de adecuar la formación al mercado de trabajo.

El reto de construir itinerarios socioprofesionales coherentes

Se observa con demasiada frecuencia que un amplio número de alumnos y alumnas realizan sucesivamente cursos de formación que poco o nada tienen que ver con sus características y expectativas profesionales.

Se hace necesario, pues, impulsar planes individualizados de aprendizaje que permitan a las personas, mediante programas formativos viables y adaptados a la realidad, construir itinerarios socioprofesionales coherentes para su desarrollo profesional y personal.

Para ello, se requiere el concurso de la orientación, un servicio que debe ser accesible, en cualquier momento de la vida, a ocupados/as y a desempleadas/os, a empresas, a estudian-tes. Es responsabilidad de los poderes públicos garantizar la igualdad de acceso a dicho servicio.


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El reto de acreditar las competencias adquiridas

En la actualidad, no existe un sistema capaz de evaluar y reconocer formalmente las competencias profesionales adquiridas independientemente de las diversas vías utilizadas para alcanzarlas.

Tampoco disponemos de evidencias que nos permitan analizar y anticipar las necesidades de cualificación profesional en nuestra región.

Finalmente, no siempre se reflejan las cualificaciones profesionales en la organización de las categorías profesionales, la movilidad o la promoción en el seno de la empresa.

El reto de investigar la formación profesional

No siempre existen suficientes estudios que permitan observar la situación actual y tendencias del sistema productivo en la Comunidad Autónoma, así como las necesidades de formación y cualificación de la población. Esto tiene incidencia notable sobre la planificación de la oferta formativa.

Pero, además, la propia formación profesional puede ser objeto de estudio, con el fin de mejorar la enseñanza en sus aspectos técnicos y didáctico-metodológicos.

El reto de mejorar la calidad

La mejora de la calidad requiere un seguimiento, inspección y evaluación de la formación profe-sional hecha con rigor y personal debidamente cualificado y comprometido.

También precisa de equipamientos e instalaciones bien dotadas, potenciando además la red propia de centros formativos.

Y, por último, necesita que la selección del profesorado sea idónea, y que su formación permanente mantenga unos estándares de calidad, tanto en los aspectos técnicos como didácticos.

2.2. Tendencias del mercado de trabajo y situación de la formación profesional

La situación del mercado de trabajo

El número de personas activas en la región ha crecido de manera muy notable en los últimos años y, lo que es más importante, se ha creado empleo y reducido la tasa de paro hasta llegar a niveles inferiores a la tasa nacional.


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En el caso de las mujeres, la tasa de ocupadas crece porcentualmente casi el doble que en el caso de los hombres, si bien la tasa de empleo femenino aún dista mucho de estar en los niveles de la media de nuestro país. En cambio, la tasa de paro femenino en la región se ha situado por primera vez en la historia por debajo de la tasa nacional.

Si atendemos a las ocupaciones más contratadas, observamos que el mercado de trabajo de Cas-tilla-La Mancha está muy fragmentado en función del sexo, con una distribución ocupacional muy masculinizada o muy feminizada, predominando la contratación en ocupaciones no cualificadas en ambos casos, con un peso relativo muy alto de las ocupaciones relacionadas con la construcción en el caso masculino y más diversificada, aunque también bastante concentrada (en los sectores de limpieza, dependientas de comercio, hostelería y asistencia a las personas) en las mujeres.

En cuanto a nuestro tejido empresarial, éste se caracteriza por la aplastante mayoría de microempre-sas, con un 50% de empresas sin asalariados, y un 90% en total con menos de 5 asalariados. Entre las empresas sin asalariados predominan las que se dedican al comercio al por menor y a la hostelería. Esto nos obliga a plantearnos las necesidades de formación de este tejido microempresarial, y las dificultades logísticas y organizativas que puede acarrear la formación continua.

Sin embargo, es el sector de la construcción el que mayor número de empresas registra en Cas-tilla-La Mancha. Este dato es importante ante una posible coyuntura desfavorable en el sector, que aconseja estar preparados para el posible reciclaje de sus trabajadores y trabajadoras, en especial los de menor cualificación, para evitar posibles bolsas de exclusión del mercado laboral; sin duda la formación es un instrumento imprescindible en esta tarea.

En lo que se refiere a la industria, el tejido industrial de la región es el que mayor crecimiento por sectores ha experimentado en los últimos años, destacando la fabricación de productos metálicos. La formación para el sector industrial habrá de tener en cuenta las necesidades actuales de las in-dustrias existentes al tiempo que considera las opciones de futuro que suponen las ocupaciones relacionadas con el desarrollo rural y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

Para terminar de completar este panorama, hay que hacer referencia a la alta siniestralidad labo-ral en nuestra región, si bien con una tendencia claramente descendente, y la alta temporalidad, que dibujan un panorama de empleo de poca calidad.

una situación de casi pleno empleo, pero en ocupaciones que requieren poca cualificación, no invita a los trabajadores y trabajadoras a esforzarse para cualificarse. unamos a esto las altas ta-sas de abandono prematuro del sistema educativo y los bajos índices de titulación en Castilla-La Mancha, y nos dará como resultado una población escasamente preparada para afrontar la me-jora de su formación, el incremento de la competitividad o el reto de diversificar las ocupaciones del tejido productivo o la reconversión en algunos sectores en crisis.


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Las personas apostarán más por la formación cuando ésta les conduzca a obtener un título o una certificación orientada al empleo, les dé seguridad en su puesto de trabajo o les permita la movilidad dentro o fuera de su empresa.

La respuesta de la formación profesional

A esta situación antes descrita, el sistema de formación profesional de nuestra región está res-pondiendo con una oferta cada vez más amplia y diversificada, aunque aún debe continuar potenciándose.

Si analizamos la formación ocupacional (plan FIP) por familias profesionales, observamos que destacan muy especialmente Administración y oficinas y Servicios a las empresas, fami-lias que por otra parte, aun conservando el protagonismo, van perdiendo peso en beneficio de otras como los Servicios sociales y a la comunidad o la formación en Sanidad, impulsadas sin duda por la promulgación de la Ley de Dependencia. Pero también crecen otras familias como la de Hostelería y turismo, Transporte y mantenimiento de vehículos e Informática y comunicaciones, aunque el porcentaje que representan respecto del total aún no es dema-siado significativo.

En cuanto a la formación propia del Programa Operativo de Castilla-La Mancha, destacan las aportaciones a la familia de Transporte y mantenimiento de vehículos, y también las familias de Sanidad, Servicios socioculturales y a la comunidad, Comercio y marketing, Informática y comunicaciones y Seguridad y medio ambiente. En conclusión, se está utilizando adecuada-mente este tipo de formación para incidir en los sectores productivos con gran interés relacio-nados con la sociedad de la información y el conocimiento, el desarrollo rural y los servicios personales y la sanidad.

En lo que se refiere a formación continua, según el último dato de que disponemos por familias profesionales, la de Servicios a empresas y la de Administración y oficinas coparon más de la mitad de los cursos impartidos, seguidas a gran distancia por Sanidad y Comercio. La mayor demanda de formación continua no se centra en sectores de futuro sino en los preponderantes en el pre-sente, con lo cual, aunque coadyuva a las necesidades actuales de las empresas, la empleabilidad puede verse limitada por la evolución futura del sistema productivo.

En cuanto a la formación profesional del sistema educativo, predominan los ciclos formati-vos de servicios a empresas (familia profesional de Administración y oficinas), el Turismo, la Hostelería, el Medio ambiente, las Nuevas tecnologías, la Industria y el transporte, la Sanidad y los servicios a personas, en la línea de actuación seguida también a grandes rasgos por la formación para el empleo.


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Escenarios prospectivos

Los buenos resultados del mercado laboral autonómico no pueden hacer olvidar la coyuntura económica actual en la que nos encontramos inmersos, que puede conducir a un cambio de ciclo que, sin duda, afectaría a Castilla-La Mancha. Si bien de seguir la evolución citada, a finales de 2009 Castilla-La Mancha podría llegar al pleno empleo, el gran reto a partir de aquí no será ya la cantidad, sino la capacidad del mercado para obtener profesionales con mayor cualifica-ción capaces de dotar a las empresas del valor añadido que precisan para ser competitivas en el entorno globalizado en el que nos encontramos.

La eficiencia en la asignación de recursos humanos y la cualificación de los mismos, así como la recualificación de trabajadores procedentes de sectores maduros en los que la región está espe-cializada, o de sectores con un cierto nivel de riesgo de desempleo como la construcción, junto con una elevación sustancial y generalizada de la cualificación y la formación de las personas que se incorporen al mercado laboral en los próximos años, son los retos que debe afrontar el nuevo Plan de Formación Profesional de Castilla-La Mancha.

La formación profesional debe configurarse como la principal política activa de empleo, a través de la cual se incida en la cualificación profesional adecuada de las personas y grupos con mayo-res dificultades de inserción laboral, aprovechando los recursos para fijar itinerarios formativos individualizados que tengan en cuenta las necesidades personales en el contexto que ofrece la evolución del mercado de trabajo.

La oferta formativa debe tratar de adecuarse a las exigencias del mercado y anticiparse a las ocupaciones emergentes, nuevos yacimientos de empleo y necesidades formativas futuras que surgen del crecimiento de los diversos sectores económicos; pero también debe ocuparse de sectores ya consolidados que precisan de una atención específica por cuanto la mejora de la cualificación redunda en una mayor productividad y en la mejora de la calidad en el empleo.

La potenciación de las enseñanzas técnicas en la formación profesional inicial, sea dentro del siste-ma educativo o para personas desempleadas, ha de ser completada con la formación continua en aplicaciones específicas, pero también con el conocimiento de idiomas extranjeros y una adecua-da alfabetización en las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

Respecto a la formación continua, el manejo de maquinaria especializada, la alfabetización in-formática en aplicaciones relacionadas con la actividad cotidiana en el puesto de trabajo, la formación respecto a los riesgos existentes en las distintas profesiones, o la formación en mate-ria de idiomas y marketing así como los nuevos métodos de gestión empresarial, son aspectos del máximo interés. Como en el resto de la formación, en la continua se precisa el concurso decidido de todos los agentes: en primer lugar, de las propias empresas, de modo que sean

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capaces de percibir la formación como una inversión y no como un coste; en segundo lugar de los sindicatos, capaces de transmitir a los trabajadores y trabajadoras la necesidad de reciclaje y adaptación a las nuevas circunstancias; y en tercer lugar, de las Administraciones Públicas, que deben colaborar con los agentes sociales para fijar acciones formativas eficaces y detectar necesidades de formación.

3. CARACTERÍSTICAS BÁSICAS DEL PLAN

Antecedentes

El Plan de Formación Profesional de Castilla-La Mancha 2003-2006 quiso ser el instrumento re-gional que acompañara, mediante la inversión en capital humano, la dotación de infraestructu-ras y la inversión para el desarrollo económico y social de la región.

La redacción del Plan sirvió para la puesta de largo del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, órgano de participación social e institucional creado por la Ley 1/2001, de 5 de abril, y en el que están representadas la Administración regional, las organizaciones empre-sariales y los sindicatos más representativos.

El Plan supuso la movilización de iniciativas y recursos relacionados con el desarrollo de la for-mación profesional, disponiendo de un referente (los programas y subprogramas incluidos y sus correspondientes medidas) que ha permitido que la política de formación profesional de la Comunidad Autónoma disponga de una orientación y unos objetivos definidos.

Sin embargo, no pudo avanzar en algunas cuestiones clave, muchas de ellas subsidiarias de la normativa y desarrollos estatales, como la integración de los subsistemas de formación profesio-nal o la acreditación de competencias profesionales.

Duración

una vez agotado el plazo temporal del Plan de Formación Profesional 2003-2006, convenía reco-ger sus avances y profundizar en el desarrollo normativo, consolidar y coordinar la oferta de los diferentes subsistemas de formación profesional y dar un impulso a la calidad de la misma.

El II Plan de Formación Profesional tendrá una duración de cuatro años, con una evaluación in-termedia que puede conllevar propuestas para modificarlo.


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Acuerdo y corresponsabilidad

Los principios básicos del II Plan de Formación Profesional de Castilla-La Mancha se encuentran en los documentos clave del acuerdo social, en particular el Pacto por el Desarrollo y la Com-petitividad, así como en todas aquellas políticas regionales relacionadas con la formación y la calidad en el empleo.

El propio Plan es un gran pacto entre las instituciones y agentes representados en el Consejo de Formación Profesional. Por eso, hemos querido que se concrete en un documento participado, fruto de la reflexión compartida sobre la situación actual y sobre los factores y elementos nece-sarios para impulsar la formación profesional en nuestra región.

Y esta reflexión compartida nos lleva a la corresponsabilidad de los agentes sociales y la Ad-ministración en el diseño, planificación, puesta en práctica y seguimiento de las medidas, una corresponsabilidad que no sea sólo consultiva o ejecutiva, sino que se convierta en un eje trans-versal o metodológico del Plan que nos indique la forma de llevarlo a cabo.

Ejes directores e intenciones

Tres son los grandes ejes directores del II Plan de Formación Profesional:

Potenciar la formación profesional y fomentar la calidad de la oferta formativa, con espe- –cial atención a la implantación, difusión y coordinación de la misma (Objetivos 1, 3, 4, 7).

Promover la empleabilidad de las personas y perfilar su itinerario formativo-ocupacional, pro- –porcionando orientación a lo largo de la vida y ayudando a capitalizar los conocimientos y competencias adquiridas mediante vías formales y no formales y la experiencia laboral (Obje-tivos 5, 6).

Promover la igualdad de oportunidades en el acceso a la formación y potenciar la forma- –ción de personas y grupos con menor cualificación y mayores dificultades de inserción sociolaboral, haciendo de la formación profesional un instrumento de cohesión social (Objetivo 2).

Y tres son también las intenciones principales del presente Plan:

Queremos desarrollar de manera creativa y adaptada a la realidad de nuestra región los –programas formativos que derivan de la normativa estatal sobre formación profesional en el sistema educativo y la formación para el empleo, pero también impulsar una oferta

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propia a través del Programa Operativo de Castilla-La Mancha y el desarrollo de los títu-los de formación profesional.

Queremos potenciar la red de titularidad pública de formación para el empleo, en la –que pueda ampliarse la oferta de los distintos subsistemas, y comenzar a cimentar una red de centros integrados a partir de las posibilidades que abre el correspondiente Real Decreto.

Queremos potenciar el papel del Consejo regional de Formación Profesional y crear –instrumentos, derivados del mismo, que contribuyan a planificar, supervisar y valorar el desarrollo en un mismo territorio de la oferta conjunta de formación profesional, tanto la del sistema educativo como la formación para el empleo.

El II Plan de Formación Profesional de Castilla-La Mancha define la estrategia regional y las líneas maestras en la formación de los trabajadores y trabajadoras y de quienes aspiran a serlo. En este sentido, pretende ordenar y orientar la formación profesional en nuestra región, coordinando la oferta formativa, vertebrando la funcionalidad de la misma para el desarrollo y el crecimiento económico y social, y proporcionando pautas de trabajo para el conjunto de iniciativas que, en el marco institucional o por impulso de los agentes sociales, incluyan acciones que impliquen formación o cualificación profesionales.

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1. POTENCIAR LA FORMACIÓN PROFESIONAL EN CASTILLA-LA MANCHA COMO FACTOR CLAVE DE COMPETITIVIDAD Y COHESIÓN SOCIAL DE LA REGIÓN

El II Plan de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, en línea con las prioridades recogidas en el Pacto por el Desarrollo y la Competitividad de Castilla-La Mancha 2005-2010, considera la formación profesional como un objetivo estratégico para el Gobierno y los agentes sociales, constituyendo como tal una prioridad que hace que se encuentre presente, en una u otra forma, en otros muchos planes y programas de nuestra Comunidad Autónoma.

No es extraño, tampoco, que ocupe un lugar destacado en muchos de los acuerdos básicos que reflejan una cultura de diálogo social, tanto a nivel estatal como autonómico.

Pero lo que aquí nos interesa destacar es la importancia de potenciar aquellos instrumentos que, en nuestra región, existen al servicio de la formación profesional, empezando por el Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha.

Otro aspecto alude a la noción de Castilla-La Mancha como región europea. Los programas e iniciativas comunitarios en materia de formación profesional van encaminados a facilitar la libre circulación de las trabajadoras y trabajadores, de manera que la población activa pueda acceder a la formación en cualquier otro Estado de la unión Europea, facilitando así la movilidad geográ-fica en el ámbito profesional. El conocimiento de dichos programas e iniciativas comunitarias y la participación en los mismos es un deber de la Administración pública regional y los agentes sociales. En este sentido apuntan la realización de prácticas en empresas de otros países miem-bros y el aprendizaje de otros idiomas europeos.

Finalmente, la potenciación de la formación profesional debe reforzarse mostrando a la socie-dad lo que ésta aporta. De la percepción que la sociedad castellano-manchega tenga de la formación profesional depende en gran medida que ésta pueda responder de forma positiva a la mejora de la empleabilidad. El aprendizaje permanente a lo largo de toda la vida debe ser entendido como factor esencial para mejorar la calidad de vida, por lo que la formación profe-sional debe alcanzar una difusión adecuada, tanto entre las trabajadoras y trabajadores como entre las empresas, contribuyendo así a la mejora de su prestigio. Asimismo, es necesario que la oferta de formación existente sea divulgada de manera accesible y sencilla.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS Y MEDIDAS

1.1. Potenciar la corresponsabilidad y la participación social e institucional, a través del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, en la

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planificación, puesta en marcha, seguimiento y evaluación de la formación profesional

1.1.1. Se dotará con recursos humanos y materiales las estructuras de apoyo técnico crea-das para favorecer el buen funcionamiento del Consejo de Formación Profesional de Cas-tilla-La Mancha.

1.1.2. Se establecerá un plan de trabajo de las estructuras de apoyo técnico al Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, y se valorará, a partir de su funcionamiento, la necesidad de nuevos órganos relacionados con el desarrollo del Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales en nuestra región.

1.1.3. Se promoverá la participación de los agentes sociales y los municipios en los órganos provinciales y en las comisiones de trabajo que se constituyan en el seno del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha para colaborar en la planificación y segui-miento de la formación profesional.

1.1.4. Se establecerá un procedimiento para facilitar que las distintas normas, planes y pro-gramas que incidan en la formación profesional sean conocidas y valoradas por el Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, sin perjuicio de las competencias atribui-das al Consejo Escolar y al Consejo Económico y Social.

1.1.5. El Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha mantendrá reuniones e intercambios con el Consejo general de formación profesional y con los Consejos autonó-micos, y promoverá la celebración de encuentros en Castilla-La Mancha.

1.1.6. El Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha establecerá un plan de trabajo con los/as responsables de las distintas consejerías y administraciones que tengan incidencia en la formación profesional, con el fin de conocer y valorar sus planes de forma-ción en el marco de la Comisión Permanente de dicho Consejo.

1.2. Promover el conocimiento de los programas europeos de formación profesional y la participación en los mismos

1.2.1. Se difundirá el Programa europeo de aprendizaje permanente y otras iniciativas comu-nitarias y se fomentará el intercambio de experiencias de los/as participantes en las mismas.

1.2.2. Se pondrán en marcha iniciativas para impulsar la realización de prácticas en empre-sas extranjeras, tanto en la formación profesional del sistema educativo como en la forma-ción para el empleo, a través de los programas Leonardo y Erasmus.


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1.2.3. Se establecerán acciones específicas de aprendizaje de idiomas extranjeros para facili-tar la participación de los destinatarios de la formación profesional en programas europeos.

1.2.4. Se complementará las becas Erasmus y Leonardo para los/as estudiantes de forma-ción profesional que participen en estos programas.

1.2.5. Se fomentará la creación de una red de empresas dispuestas a recibir alumnado de formación profesional procedente de otros países y que participe en los programas Leo-nardo y Erasmus.

1.3. Difundir la oferta de formación profesional de manera que resulte accesible a los ciudadanos y ciudadanas y a las empresas

1.3.1. Se realizarán periódicamente campañas de difusión y publicitarias de la oferta de formación profesional de Castilla-La Mancha y de las condiciones de acceso y caracterís-ticas de la misma, en especial de aquella que se encuentra asociada al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales y que, por tanto, permite obtener títulos y certificados de profesionalidad.

1.3.2. Se celebrarán encuentros y jornadas de carácter regional y provincial, con la partici-pación de los/as distintos profesionales implicados en la formación profesional, los agentes sociales y el tejido empresarial.

1.3.3. Se potenciará la participación del sector productivo, junto con los centros de formación, en los encuentros y jornadas que se celebren, en particular en la Feria regional de formación y empleo y en las Jornadas técnicas de profundización sobre formación profesional.

1.3.4. Se mantendrá un espacio web institucional del Consejo de Formación Profesional de Cas-tilla-La Mancha, que tendrá vínculos con otras páginas y portales de información y orientación.

1.4. Promover que las empresas, las organizaciones empresariales, los sindicatos y los propios trabajadores y trabajadoras consideren la formación profesional como una herramienta estratégica y de desarrollo

1.4.1. Se dará prioridad en las convocatorias y ayudas que correspondan a las iniciativas de los agentes sociales que pretendan difundir, informar y sensibilizar sobre la importancia de la formación profesional.

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1.4.2. Las distintas administraciones y los agentes sociales colaborarán en la difusión que se realice, mediante medios impresos y audiovisuales, de la normativa que regula la formación de demanda y los beneficios sociales y económicos que pueden obtener trabajadoras/es y empresarias/os con la cualificación profesional que aporta la forma-ción para el empleo.

1.4.3. Se publicarán guías para fomentar las buenas prácticas, dirigidas a las empresas que realicen contratos con incidencia en la formación y otras acciones dirigidas a la cualificación de sus trabajadores y trabajadoras.

1.4.4. Se difundirán las empresas que colaboren en el ámbito de la formación profesional y se otorgarán menciones específicas a aquellas que resulten especialmente destacadas.

1.4.5. Las organizaciones empresariales y sindicales contribuirán a fomentar la formación profesional de aquellas trabajadoras y trabajadores contratados con poca cualificación como mecanismo para aumentar la competitividad y productividad de las empresas.

1.4.6. Se adecuarán las convocatorias de ayudas para potenciar los planes de formación en empresas que tengan en cuenta tanto el desarrollo empresarial como personal y profesio-nal de los trabajadores y trabajadoras.

2. FOMENTAR LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES EN EL ACCESO A LA FORMACIÓN PROFESIONAL, COMO ELEMENTO BÁSICO QUE FACILITA LA PARTICIPACIÓN ACTIVA EN LA VIDA SOCIAL, CULTURAL Y ECONÓMICA

La formación profesional permanente es un derecho de todo trabajador o trabajadora, cuyo ejercicio ha de ser fomentado por las administraciones públicas. Esto supone poner en marcha modalidades formativas y establecer condiciones de acceso –entre ellas, la oferta semipresen-cial, la enseñanza on-line, la flexibilización de horarios, la oferta modular, la convocatoria de pruebas libres, etc.- que faciliten el aprendizaje permanente y el desarrollo acumulativo de com-petencias de la población castellano-manchega.

Esto implica, en consonancia con los principios democráticos de la Constitución y el Estatuto de Autonomía de Castilla La Mancha, garantizar una formación profesional para la igualdad y desde la igualdad entre hombres y mujeres, una formación profesional que haga posible la inclusión de la población inmigrante y discapacitada, una formación profesional capaz de contribuir a estimu-lar la participación en la vida social, cultural y económica de todas las personas.


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Por otro lado, se ha de tener en cuenta que determinados colectivos, en particular los más desfa-vorecidos y también los que presentan más baja cualificación, tienen menores oportunidades de formación y por lo tanto de acceso al empleo. Por ello, habrá que desarrollar programas activos que promuevan la formación, cuando sea necesario en alternancia con el empleo y acompañada de otras actuaciones complementarias, de los/as jóvenes que abandonan sin titulación el sistema educativo, de la población inmigrante, de las/os parados de larga duración, de las personas discapacitadas, de las mujeres que sufren una doble discriminación por estar sujetas a condiciones de exclusión, etc.


2.1. Fomentar el aprendizaje a lo largo de la vida como derecho de todos los ciudadanos y ciudadanas

2.1.1. Se divulgarán las condiciones que regulan los permisos individuales para la formación y se promoverá su uso, incluido el supuesto de participación en procesos para la acredita-ción de competencias.

2.1.2. Se realizarán acciones de sensibilización y estudios de investigación en materia de conciliación de la vida familiar con la formación profesional.

2.1.3. Se profundizará en las experiencias existentes que permiten flexibilizar los horarios de asistencia a la formación profesional que se imparte presencialmente, la oferta modular dirigida a trabajadores y trabajadoras y las pruebas que dan acceso a la formación o permi-ten conseguir títulos y certificados.

2.1.4. Se impulsará el uso de nuevas metodologías de formación, la educación a distancia y el uso de medios telemáticos para facilitar el acceso a la formación profesional, indepen-dientemente de si existe oferta presencial cercana.

2.1.5. Se impulsarán los planes de formación de empresas mediante oferta modular y otras fórmulas que permitan flexibilizar el acceso a la formación.

2.1.6. Se darán ayudas para facilitar la conciliación de la vida familiar con la formación pro-fesional.

2.1.7. Se establecerán acuerdos con las universidades implantadas en Castilla-La Mancha para facilitar el acceso directo y con reconocimiento de créditos a estudios universitarios del alumnado que haya cursado ciclos formativos de grado superior, en consonancia con la legislación general.

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2.1.8. Se facilitará el uso de las residencias universitarias y no universitarias, con las condiciones que se establezcan, al alumnado de la formación profesional del sistema educativo, en particular cuando curse especialidades con poca demanda pero alto gra-do de inserción.

2.1.9. Se ampliarán y mejorarán las becas destinadas al alumnado y los trabajadores y tra-bajadoras que tengan que desplazarse para realizar estudios de formación profesional, en particular cuando cursen especialidades con poca demanda pero alto grado de inserción.

2.2. Poner en marcha actuaciones que promuevan el acceso a la formación profesional de las personas con mayores dificultades de inserción sociolaboral

2.2.1. Se profundizará en los programas que facilitan recursos de apoyo y acciones de forma-ción profesional destinadas a las personas y grupos con mayores dificultades de inserción.

2.2.2. Se elaborarán estudios periódicos sobre las necesidades de aquellas personas y gru-pos con mayor dificultad de acceso a la formación y de inserción sociolaboral.

2.2.3. Se implantarán de forma progresiva y de acuerdo con criterios de calidad los progra-mas de cualificación profesional inicial, favoreciendo tanto la adquisición de competencias profesionales como la vuelta al sistema educativo de los/as jóvenes participantes.

2.2.4. Se pondrán en relación con la oferta general de formación profesional aquellas otras ofertas formativas derivadas de las iniciativas europeas que trabajen con grupos desfavo-recidos o en zonas rurales.

2.2.5. Se darán becas para cursar ciclos formativos y formación para el empleo en sectores productivos con alto índice de inserción laboral en los que la mujer está poco representada.

2.2.6. Se facilitará el acceso a los programas de formación en alternancia de personas y grupos de carácter prioritario por su baja cualificación y mayores dificultades de inserción sociolaboral: mujeres, jóvenes con fracaso escolar, inmigrantes, discapacitados/as...

2.2.7. Se potenciarán las acciones de información, orientación profesional y acompaña-miento en el empleo dirigidas a personas y grupos con menor cualificación y mayores difi-cultades de inserción sociolaboral.

2.2.8. Se mejorará la oferta de formación profesional y los programas de transición a la vida activa susceptibles de atender a las necesidades formativas de las personas con dificulta-


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des de inserción sociolaboral, en particular cuando ello conlleve la posible obtención de títulos o certificados de profesionalidad.

3. ADAPTAR LAS DIFERENTES OFERTAS DE FORMACIÓN PROFESIONAL A LA REALIDAD CASTELLANO-MANCHEGA Y PROMOVER LA COORDINACIÓN ENTRE ELLAS

una de las características fundamentales que debe poseer la formación profesional es la de confor-mar una oferta formativa de calidad, actualizada y adaptada a las necesidades del tejido producti-vo y a los intereses de los trabajadores y trabajadoras ocupados y desempleados de la región.

La programación de la formación profesional debe apoyarse en estudios de necesidades forma-tivas contrastados. En el caso de la formación para el empleo, la fuente principal de información deberá ser el Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones de Castilla-La Mancha. En el caso de la formación profesional del sistema educativo, además de los datos que el Observa-torio proporcione, se deberá tener en cuenta que el sistema educativo establece unas finalida-des adicionales en relación con el desarrollo personal de los/as jóvenes.

una vez detectadas las necesidades, las administraciones públicas, con el concurso de comisio-nes provinciales en las que también estarán representados los agentes sociales, deben afrontar una planificación coordinada de las ofertas de formación profesional para dar respuesta a las necesidades de cualificación de la población, optimizar el uso de recursos públicos y evitar la duplicidad de esfuerzos. Dicha planificación dará lugar a una radiografía permanentemente ac-tualizada y dinámica de la formación profesional del sistema educativo y la formación para el empleo en Castilla-La Mancha.

Esta oferta deberá adaptarse a la gran extensión territorial de nuestra Comunidad Autónoma, lo que requiere, entre otras medidas, el uso de las nuevas tecnologías para favorecer el acceso a la formación profesional y la comunicación entre los distintos implicados en la misma.

También es necesario partir de un análisis permanente del contexto geográfico, demográfico y medioambiental de cada uno de los territorios de nuestra región. En particular, deberá tenerse en cuenta que Castilla-La Mancha es una región eminentemente rural, por lo que las estrategias en materia de formación profesional deben coordinarse con las actuaciones que, en materia de desarrollo rural, llevan a cabo otros organismos.

Y finalmente, habrá de partir de las características de la población castellano-manchega, en particular las tasas de ocupación y la formación previa tanto en competencias clave de carácter

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transversal como en competencias específicas. Porque una formación profesional de calidad es aquella que, no sólo se adapta a las necesidades presentes del sistema productivo, sino que impulsa la cualificación de los trabajadores y trabajadoras para anticiparse a las tendencias de futuro, dinamizar el mercado de trabajo e incrementar la competitividad.


3.1. Adecuar la oferta de formación profesional al mercado de trabajo y a la estructura productiva de Castilla-La Mancha

3.1.1. Se potenciará la oferta formativa en sectores con alto grado de inserción así como en sectores estratégicos y de expansión regional.

3.1.2. Se financiará la formación profesional de trabajadoras/es en sectores con mayo-res riesgos de reconversión o crisis, para facilitar su posible reinserción en otras ocu-paciones.

3.1.3. Se pondrán en marcha, con la colaboración de las organizaciones que los repre-sentan, planes de formación adaptados a las necesidades de las pequeñas y medianas empresas -en especial las microempresas-, los trabajadores autónomos y las empresas de economía social.

3.1.4. Se pondrán en marcha ayudas, con los compromisos mutuos que se establezcan, para el desarrollo de acciones singulares de formación en empresas que aporten valor aña-dido destacable al desarrollo económico de la región.

3.1.5. Se dará prioridad en las convocatorias de investigación, desarrollo e innovación a los proyectos empresariales que conlleven la formación de trabajadoras y trabajadores.

3.1.6. Se constituirán paneles de personas expertas, con la colaboración de los agentes sociales, para realizar propuestas acerca de la implantación y organización de las ofertas formativas correspondientes a las distintas familias profesionales.

3.1.7. Se darán ayudas e incentivos para que las empresas, en especial las microempresas, puedan desarrollar sistemas de gestión del aprendizaje y para promover experiencias de formación en el puesto de trabajo.

3.1.8. Se realizarán estudios para conocer las implicaciones que, de cara a la formación, tiene la relación de ocupaciones de difícil cobertura.


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3.2. Promover estudios e investigaciones, con la colaboración del Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones, para detectar necesidades formativas y planificar la oferta de formación profesional

3.2.1. Se dotará al Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones de medios téc-nicos y humanos para que impulse estudios e investigaciones, con las directrices que de-termine el Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, sobre tendencias del mercado de trabajo, situación de los sectores productivos y formación profesional y detec-ción de necesidades formativas.

3.2.2. Se dará participación al Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones en la planificación, la selección y la supervisión de estudios e investigaciones sobre el mercado de trabajo y la formación profesional, realizados al amparo de convocatorias, asistencias técnicas o cualesquier otro procedimiento.

3.2.3. Se establecerán prioridades para la realización de acciones de apoyo y acompaña-miento a la formación, que ayuden a detectar las necesidades formativas y, en consecuen-cia, a planificar la oferta coordinada de los distintos subsistemas de formación profesional.

3.2.4. Se establecerán procedimientos para facilitar que el Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones disponga de la información necesaria para el cumplimiento de las funciones que tiene encomendadas.

3.2.5. Se establecerán procedimientos que hagan partícipes a los distintos profesionales de las oficinas de empleo de la detección de necesidades de formación y, en su caso, de la planificación y gestión de la formación profesional.

3.2.6. Se realizarán estudios para conocer la situación de la formación de demanda y boni-ficada, u otra formación que realizan las empresas por necesidades productivas.

3.2.7. Se realizarán estudios con la colaboración de instituciones externas, entre ellas las universitarias, sobre necesidades y líneas maestras de la formación profesional, con el fin de complementar la perspectiva aportada por las acciones complementarias y los informes del Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones.

3.2.8. Se realizarán, con la colaboración del Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones, estudios e investigaciones sobre necesidades de formación que reflejen tanto el punto de vista del tejido empresarial como el del propio alumnado y los/as tra-bajadores/as.

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3.3. Coordinar la oferta de formación profesional que realizan las distintas instituciones y subsistemas

3.3.1. Se crearán comisiones provinciales de formación profesional, en las que participarán los agentes sociales e instituciones representadas en el Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, para analizar la situación actual y contribuir a la planificación y seguimien-to de la oferta de formación profesional en el ámbito geográfico que les corresponda.

3.3.2. Se impulsará, en el marco de las comisiones provinciales de formación profesional, la constitución de subcomisiones o mesas de trabajo cuando sea preciso el análisis más pormenorizado en ámbitos geográficos más reducidos o la gestión diferenciada de los distintos subsistemas de formación profesional.

3.3.3. El Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha estudiará, en el marco de la planificación conjunta de la oferta de formación profesional, la complementariedad de las iniciativas de formación con incidencia en el empleo que vienen promovidas por diferentes instituciones y entidades de Castilla-La Mancha.

3.3.4. Se promoverán nuevos acuerdos con las Consejerías competentes para analizar, evaluar y establecer los requisitos formativos necesarios que conduzcan a la obtención de acreditaciones o carnés profesionales.

3.4. Adecuar la oferta de formación profesional a las características de la región

3.4.1. Se ampliará y coordinará la oferta on-line, así como las actuaciones de apoyo al alum-nado matriculado en la misma y el uso de nuevas tecnologías de la información y comuni-cación, de manera que sea posible adaptarse a la dispersión territorial y a la existencia de zonas rurales de difícil cobertura para la formación presencial.

3.4.2. Se autorizarán ciclos formativos con una matrícula reducida con el fin de contribuir al desarrollo social y económico de los distintos territorios de la región.

3.4.3. Se impulsarán las experiencias que, mediante la impartición de módulos profesio-nales en cursos alternos, la implantación de ciclos formativos de carácter temporal o la rotación de ciclos formativos de una misma familia profesional en sucesivos cursos esco-lares, permitan mantener una oferta de formación profesional específica en zonas poco pobladas.


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3.4.4. Se facilitará el uso de instalaciones y equipamientos de titularidad pública o privada, previo acuerdo con los titulares, para impartir formación para el empleo en aquellas áreas rurales con menor infraestructura.

3.5. Adecuar la oferta a los/as destinatarios/as de la formación y promover competencias transversales para su desarrollo personal y profesional

3.5.1. Se impulsará la oferta de formación profesional que permita obtener certificados de profesionalidad, en particular cuando los destinatarios potenciales no dispongan de un título de formación profesional.

3.5.2. En la formación prioritariamente destinada a jóvenes que abandonan el sistema edu-cativo sin titulación, se complementará la formación técnica dirigida a la adquisición de competencias profesionales con una formación polivalente, dirigida a la adquisición de competencias clave y de habilidades sociales y para la convivencia.

3.5.3. Se promoverá la obtención del Graduado en Educación Secundaria, utilizando las posibilidades que brinda la educación de personas adultas, de todo el alumnado de for-mación para el empleo que carezca de dicha titulación.

3.5.4. Se fomentará la alfabetización digital inserta en el currículo asociado a la adquisición de competencias técnicas o específicas, con el objeto de favorecer la empleabilidad de las/os trabajadoras/es.

3.5.5. Se fomentará el aprendizaje de idiomas dentro de los programas de formación profe-sional con el objeto de favorecer la empleabilidad de las/os trabajadoras/es.

3.5.6. Se fomentará la oferta bilingüe en determinados ciclos formativos y cursos de forma-ción para el empleo.

3.5.7. Se potenciará el componente formativo de los contratos de formación, con el fin de garantizar por un lado la formación básica asociada a la superación de la enseñanza obliga-toria, y por otro la formación asociada a la acreditación de competencias profesionales.

3.5.8. Se impartirán, en la oferta formativa de diferentes subsistemas, módulos de sensibi-lización medioambiental.

3.5.9. Se integrarán en el currículo de la formación profesional los aspectos teóricos y prác-ticos de la formación medioambiental, incluyendo el uso eficiente de los recursos naturales,

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la minimización de la producción de residuos y gestión de los mismos y las buenas prácticas ambientales aplicables a cada familia profesional.

3.5.10. Se impartirán, en la oferta formativa de diferentes subsistemas, módulos de igual-dad de oportunidades.

3.5.11. Se dará formación específica en prevención de riesgos laborales dentro de la oferta de formación profesional, facilitando las convalidaciones de los módulos previamente cur-sados.

3.5.12. Se mantendrá un enfoque didáctico que transmita valores y conocimientos necesa-rios para extender la cultura de la salud y la prevención de riesgos laborales en los distintos programas de formación profesional.

3.5.13. En el seno del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, se estudia-rá una propuesta coordinada para abordar la formación en prevención de riesgos laborales en el conjunto de la oferta de formación profesional.

4. PROMOVER LA OFERTA INTEGRADA EN CENTROS QUE IMPARTEN FORMACIÓN PROFESIONAL Y CREAR UNA RED PÚBLICA DE CENTROS INTEGRADOS EN LA REGIÓN PARA RESPONDER A LAS NECESIDADES DEL SECTOR PRODUCTIVO

Es preciso arbitrar procedimientos para, por una parte, rentabilizar los recursos existentes y apro-vechar de manera eficiente la existencia de centros que podrían impartir formación profesional del sistema educativo y formación para el empleo, y por otra articular un modelo de centro que sea paradigma de verdadera integración de los subsistemas.

El centro integrado se concibe como una institución al servicio de los ciudadanos y ciudadanas y del sector productivo, y debe contribuir a la cualificación y recualificación de las personas, acomodándose a sus distintas expectativas profesionales. El centro integrado pretende, asi-mismo, atender a las necesidades de cualificación inmediatas y emergentes del mercado de trabajo, ser un referente orientador para el sector productivo y formativo de su entorno, faci-litar la integración de las ofertas de formación profesional y rentabilizar los recursos humanos y materiales disponibles.

En Castilla-La Mancha se deberá definir el modelo de centro integrado, la dimensión de la red pú-blica de este tipo de centros y las familias profesionales que se implanten en cada uno de ellos.


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Por otra parte, el impulso de otros centros públicos que dispongan de una oferta integrada de formación profesional es una herramienta que permite cumplir el doble objetivo de coordinar y extender las diferentes ofertas, y contribuye además a favorecer la permeabilidad entre los dos subsistemas. Esto es particularmente cierto para los centros docentes que imparten formación profesional del sistema educativo, que habrán de ser estimulados a ampliar su oferta formativa al tiempo que se pone en valor su esfuerzo por contribuir a la formación para el empleo de los castellano-manchegos.

Finalmente, es justo reconocer el papel que pueden desempeñar los centros colaboradores acreditados para la implantación de una oferta formativa que abarque las distintas modalidades de formación para el empleo.


4.1. Fomentar los centros integrados de formación profesional

4.1.1. Se desarrollará un marco normativo regional que posibilite la creación de una red pública de centros integrados.

4.1.2. Se pondrá en marcha un conjunto de centros integrados con una oferta diversificada que abarque las familias profesionales que se determinen.

4.2. Promover la oferta integrada de formación profesional en centros públicos

4.2.1. Se ampliará el número de centros públicos de la Administración educativa que dispo-nen de oferta integrada de formación profesional.

4.2.2. Se impulsará la oferta de formación profesional en los centros y actuaciones de edu-cación de personas adultas.

4.2.3. Se consolidará la oferta de formación para el empleo, en sus distintas modalidades, en los centros propios de la Administración laboral.

4.2.4. Se establecerán protocolos de colaboración entre la Administración educativa y la-boral y los agentes sociales con el objeto de optimizar la utilización de las instalaciones y centros públicos para impartir diferentes modalidades de formación profesional y definir el papel del profesorado respecto a las mismas.

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4.2.5. Se desarrollarán estudios y análisis que permitan definir un modelo de centro propio de formación para el empleo.

4.3. Promover la oferta integrada de formación para el empleo en centros colaboradores

4.3.1. Se arbitrarán fórmulas que permitan que una proporción significativa de la formación de demanda se imparta en centros colaboradores acreditados por la Administración laboral.

5. IMPULSAR EL RECONOCIMIENTO, EVALUACIÓN Y ACREDITACIÓN DE LAS COMPETENCIAS PROFESIONALES Y FOMENTAR LA MEJORA DEL NIVEL DE CUALIFICACIÓN DE LOS TRABAJADORES Y TRABAJADORAS EN UN CONTEXTO DE APRENDIZAJE PERMANENTE

Mejorar la cualificación de los trabajadores y trabajadoras es uno de los factores clave para el aumento de la competitividad de las empresas, pero además contribuye a mejorar la empleabi-lidad y movilidad de las personas.

El reconocimiento de las competencias profesionales adquiridas, no sólo a través de procesos formativos regulares, sino también de la experiencia laboral o de otras vías informales y no for-males, debe ser una herramienta que motive a las trabajadoras y trabajadores a identificar y, en su caso, elevar su nivel de cualificación, en un proceso de aprendizaje a lo largo de la vida.

Para contribuir a capitalizar las competencias adquiridas, se pondrán en marcha dispositivos de reconocimiento, evaluación, acreditación y registro de las competencias profesionales.

Como resultado de los procesos derivados de dichos dispositivos, puede surgir la necesidad de elevar el nivel de cualificación de quienes participan en los mismos. Para ello, la Comunidad Autó-noma de Castilla-La Mancha deberá desarrollar una oferta formativa de carácter modular y flexible, que complemente la formación acreditada con el objeto de conseguir el correspondiente título de formación profesional o certificado de profesionalidad. Deberán identificarse previamente los colec-tivos prioritarios objeto de este tipo de procesos y, en algunos casos, será necesario impulsar expe-riencias de acreditación de competencias, previo acuerdo con las administraciones competentes.

Para que dicha oferta de formación, junto con las demás ofertas, se adecue a los requerimientos del mercado de trabajo, es preciso realizar un análisis de la adaptación del Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales a la estructura productiva de la Comunidad Autónoma para proponer,


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en su caso, cambios en las cualificaciones, de manera que los títulos de formación profesional y los certificados de profesionalidad se adapten al sistema productivo de Castilla-La Mancha. Es necesario establecer mecanismos que permitan por un lado el contraste de las cualificaciones con la realidad de la región y por otro la elevación de propuestas al Instituto Nacional de las Cualificaciones.

Finalmente, ha de ponerse en valor en el mercado de trabajo la oferta formativa que, aunque no esté asociada al Catálogo Modular de Formación Profesional, puede cubrir las necesidades de las empresas de la región y, por lo tanto, ser reconocida por éstas en parecida forma a como ocurre con la formación acreditada.


5.1 Establecer mecanismos de reconocimiento, evaluación y acreditación de las competencias adquiridas

5.1.1. Se realizarán estudios para detectar colectivos prioritarios que posean experiencia laboral y no tengan acreditadas sus competencias profesionales, con el objeto de implantar procesos de reconocimiento, evaluación y acreditación de las mismas.

5.1.2. Se realizarán periódicamente estudios e investigaciones para determinar el nivel de cualificación de los/as trabajadores/as ocupados y desempleados de Castilla-La Mancha.

5.1.3. Se desarrollarán experiencias para el reconocimiento, evaluación y acreditación de competencias que conduzcan a la obtención de certificados de profesionalidad y títulos de formación profesional, en tanto en cuanto no se desarrolle una normativa básica estatal.

5.1.4. Se diseñará un dispositivo unificado para el reconocimiento, evaluación, acreditación y registro de competencias, que servirá para el sistema educativo y productivo, funcionará de manera permanente, contemplará los recursos humanos y materiales necesarios, y será evaluado tanto desde el punto de vista personal del trabajador o trabajadora como de su repercusión laboral y social.

5.1.5. Dentro del dispositivo de competencias, se agilizará el registro de las competencias adquiridas a través de los programas de cualificación profesional inicial y los programas públicos de empleo y formación.

5.1.6. Dentro del dispositivo de competencias, se facilitará, en consonancia con la normati-va vigente, la acreditación de la formación para el empleo no asociada a títulos de forma-ción profesional o certificados de profesionalidad.

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5.1.7. Se establecerá un procedimiento para involucrar a los/as profesionales de la orien-tación y al profesorado de la formación profesional, así como a expertos/as del sistema productivo, en la puesta en marcha del dispositivo de competencias.

5.1.8. Se difundirá y dará publicidad al dispositivo de competencias tanto entre las/os pro-fesionales de la formación profesional como entre los potenciales beneficiarios.

5.1.9. Se pondrá en marcha el registro de competencias de Castilla-La Mancha en virtud de las necesidades y características del dispositivo de competencias.

5.1.10. Se establecerá un documento de competencias para el empleo de Castilla-La Mancha que recoja tanto las unidades de competencia acreditadas como las orientaciones para capi-talizar y completar las mismas, y que resulte homologable con el documento Europass.

5.1.11. Se pondrá a disposición de las administraciones y organizaciones empresariales in-formación sobre el documento de competencias para el empleo de Castilla-La Mancha con el fin de fomentar su reconocimiento en el ámbito de la Comunidad Autónoma.

5.2. Establecer una oferta de formación, con los complementos necesarios, dirigida a la consecución de títulos de formación profesional y certificados de profesionalidad

5.2.1. Se diseñarán itinerarios y se ofrecerá la formación necesaria para obtener certi-ficados de profesionalidad y títulos de formación profesional a quienes participen en los procesos colectivos de acreditación, reconocimiento y evaluación implantados en Castilla-La Mancha.

5.2.2. Se pondrán en marcha acciones de itinerario completo, acciones formativas por uni-dades de competencia y programaciones flexibles que posibiliten la realización de itinera-rios formativos conducentes a la obtención de certificados de profesionalidad y títulos de formación profesional.

5.2.3. Se impulsarán las actividades de educación de personas adultas orientadas al mundo laboral que estén adaptadas al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales.

5.2.4. Se establecerán criterios, con la colaboración de grupos de expertas/os, para la impartición, dentro de la formación de oferta y de la oferta modular, de unidades formativas más reducidas que puedan acumularse para dar lugar a una unidad de com-petencia.


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5.3. Contribuir al desarrollo del Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales a partir de un análisis de las necesidades de Castilla-La Mancha

5.3.1. Se adaptarán los programas formativos conducentes a títulos o certificados de profe-sionalidad, con la colaboración de paneles de expertos, a las peculiaridades de las cualifi-caciones implantadas en la región, dentro de los márgenes permitidos.

5.3.2. Se establecerá un mecanismo para, con la participación de los agentes sociales y la contribución de expertos, elaborar propuestas dirigidas a la Administración general del Estado con respecto a la posible incorporación al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales de nuevas cualificaciones necesarias para la comunidad de Castilla-La Man-cha y de posibles actualizaciones de las cualificaciones existentes.

5.3.3. Se establecerá un mecanismo para, con la participación de los agentes sociales, elaborar propuestas dirigidas a la Administración general del Estado con respecto a la adaptación de los sistemas de acreditación de competencias a la realidad de Castilla-La Mancha.

5.3.4. Se propondrá a la Administración general del Estado la actualización del Fichero maestro de especialidades de formación.

5.4. Poner en valor la oferta no asociada al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales

5.4.1. Se mantendrá una oferta formativa adaptada a las características singulares de Cas-tilla-La Mancha, impulsando progresivamente su integración en el Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales.

5.4.2. Se mantendrá una oferta formativa no asociada al Catálogo Nacional de Cualificacio-nes Profesionales cuando responda a necesidades localmente justificadas del mercado de trabajo y permita una alta inserción laboral.

5.4.3. Se fomentará que aquellas actividades de educación no formal promovidas por di-ferentes entidades y administraciones y que tengan repercusión para empleo se integren progresivamente en el marco establecido por el Catálogo Nacional de Cualificaciones Pro-fesionales.

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6. DESARROLLAR UN SISTEMA INTEGRADO DE INFORMACIÓN, ORIENTACIÓN Y ASESORAMIENTO PROFESIONAL

Dentro del marco establecido por la Ley Orgánica 5/2002 de las Cualificaciones y de la For-mación Profesional y la Ley Orgánica 2/2006 de Educación, y teniendo en cuenta el Decreto 43/2005, por el que se regula la Orientación educativa y profesional, se deberá definir un sistema propio de información y orientación profesional de Castilla-La Mancha.

Este sistema debe tener en cuenta los dispositivos actualmente existentes, tanto en el ámbito educativo como laboral, gestionados directamente por la Administración o de forma subsidiaria por agentes sociales, ayuntamientos y otras entidades públicas y privadas. La principal caracte-rística de dicho sistema no es la integración física u orgánica de los servicios, sino el trabajo en red a partir de la comunión de los objetivos, finalidades y acciones. Esto implica, entre otras ac-tuaciones, la divulgación conjunta de la oferta formativa y la situación del mercado de trabajo, el desarrollo de procedimientos consensuados de orientación on-line y presencial, la colaboración en el desarrollo de programas de asesoramiento, etc.

La orientación constituye un proceso continuo que capacita a cada uno de los ciudadanos y ciu-dadanas de cualquier edad y en cualquier momento de sus vidas, a determinar sus capacidades e intereses, a contrastarlas con su conocimiento del mundo educativo y laboral y a adoptar de-cisiones educativas, de formación y empleo. Precisamente por este carácter continuo, el sistema debe prever el intercambio de información sobre y la derivación de los usuarios entre los/as profesionales que intervienen con la persona, con las cautelas que la ley establece.

El sistema de información y orientación profesional debe alimentarse con una información ade-cuada sobre el mercado de trabajo y sobre la oferta de formación profesional, suministrada por los gestores de esta última y por el Observatorio del mercado de trabajo y las ocupaciones, y contar con los recursos materiales que le permitan organizarla y difundirla. Pero, sobre todo, ha de poner el énfasis en los programas que favorezcan no sólo la mera información, sino la ad-quisición por parte del orientado de competencias clave de carácter transversal y para la toma de decisiones. Son muchos los documentos internacionales que remarcan la necesidad de que la persona orientada participe con su propia voz en el proceso y desarrolle habilidades para la autogestión del aprendizaje.

Finalmente, el sistema ha de contar con personal cualificado, lo que hace necesario abordar la formación de los orientadores y orientadoras, sean éstos funcionarios/as de la Administración o profesionales contratados/as a través de las diversas órdenes de convocatoria. Precisamente, en esta formación –como, por otra parte, en cualquier acción de asesoramiento- se deberá incor-porar la perspectiva de género y la educación intercultural.


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6.1. Fomentar el trabajo en red de los recursos de orientación existentes

6.1.1. Se analizará la normativa existente sobre información y orientación profesional con el fin de establecer sus posibilidades para el desarrollo del sistema integrado de Castilla-La Mancha.

6.1.2. Se hará un catálogo de los recursos de orientación existentes en el mundo educativo y laboral, analizando su contribución específica al sistema de orientación profesional.

6.1.3. Se establecerán procedimientos de colaboración entre Administraciones, organiza-ciones sindicales y empresariales, y otras entidades o instituciones, con el fin de interco-nectar los recursos de orientación para que sirvan como nodos de acceso al sistema para cualquier usuario/a que lo precise.

6.2. Impulsar el carácter de la orientación como proceso que se desarrolla a lo largo de la vida

6.2.1. Se establecerán procedimientos y recomendaciones para la actuación conjunta de distintos profesionales con el objeto de facilitar la orientación desde edades tempranas.

6.2.2. Se establecerán mecanismos y guías de procedimiento que permitan incluir activi-dades de orientación y asesoramiento en los procesos formativos más relevantes y en los momentos de toma de decisiones de la vida educativa y laboral de las personas.

6.2.3. Se establecerán instrumentos de derivación que faciliten el seguimiento de las/os usuarias/os por los servicios de orientación pertenecientes a distintas administraciones y entidades.

6.2.4. Se extenderán las acciones de información y orientación profesional a toda la pobla-ción de Castilla-La Mancha que lo precise, tanto si está en edad escolar como si se encuen-tra ocupada o desempleada.

6.2.5. Se dará especial relevancia a la orientación profesional en las actuaciones de valora-ción del aprendizaje, de información y de asesoramiento que se emprendan en la educa-ción de personas adultas.

6.2.6. Se pondrán en marcha programas de evaluación de los procesos de orientación, que valoren, entre otros aspectos, la participación activa de los usuarios/as y el impacto de la intervención sobre los mismos.

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6.3. Recopilar información relevante y difundirla entre profesionales y usuarios/as

6.3.1. Se elaborarán documentos informativos sobre la formación profesional y el mercado de trabajo para uso del sistema de información y orientación.

6.3.2. Se desarrollará un portal de información y orientación profesional de Castilla-La Man-cha y se pondrán en marcha otros servicios en línea e interactivos.

6.3.3. Se promoverán actividades diversas que permitan al alumnado y, en su caso, a sus familias, conocer de primera mano la oferta de formación profesional.

6.3.4. Se facilitará el acceso telemático al portal de información y orientación en aquellas zonas que no dispongan de recursos específicos de orientación profesional.

6.4. Promover la adquisición de competencias para la toma de decisiones en la elección, búsqueda y mantenimiento del empleo

6.4.1. Se pondrán en marcha actuaciones encaminadas a estimular el espíritu emprendedor y el autoempleo en las personas que cursen acciones de formación profesional.

6.4.2. Se promoverá en las distintas etapas del sistema educativo el desarrollo de compe-tencias para la autonomía e iniciativa personal.

6.4.3. Se promoverá, en los distintos servicios de orientación, la realización de programas de orientación profesional que fomenten el autoconocimiento y la adquisición de competencias para la toma de decisiones dentro del marco de planes individualizados de aprendizaje.

6.4.4. Se fomentará la inclusión en los distintos programas formativos, y en especial en aquellos dirigidos predominantemente a jóvenes, de módulos para la adquisición de com-petencias personales y sociales, de gestión y de adaptación al cambio.

6.5. Proporcionar formación a los orientadores y orientadoras

6.5.1. Se realizarán encuentros y actividades conjuntas de formación entre los orientadores y orientadoras de los diferentes subsistemas con el fin de que se produzca un intercambio de buenas prácticas.


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6.5.2. Se impulsará que los Centros de referencia y los Centros integrados desarrollen acti-vidades relevantes para la difusión de recursos, el asesoramiento y la formación de orien-tadoras y orientadores.

6.5.3. Se promoverá la participación de orientadores y orientadoras en programas trasna-cionales que contribuyan a su formación.

7. PROMOVER LA CALIDAD Y EFICACIA DE LAS OFERTAS DE FORMACIÓN PROFESIONAL

Para garantizar la calidad de las ofertas de formación profesional impartida es necesario dispo-ner de criterios e indicadores que consideren aspectos tales como la satisfacción del alumnado, las instalaciones y equipamientos de los centros, el impacto de las acciones formativas en la inserción o reinserción laboral, los materiales didácticos, la formación de docentes, tutores/as y gestoras/es, etc.

Precisamente por ello, en Castilla-La Mancha se han venido impulsando estos últimos años di-versos sistemas de calidad, tanto en la formación del sistema educativo como en la formación para el empleo, cuyos resultados conviene ahora analizar. Para ello, resulta muy útil poner en contacto a las personas implicadas en estos procesos, facilitando el debate e intercambio de experiencias sobre evaluación de la calidad.

Al referirse a la calidad, especial mención merece la formación de los/as docentes, pues de sus habilidades y competencia profesionales dependerá en gran medida el nivel de la formación impartida. Habrá que promover dicha formación, tanto en las competencias de carácter transversal -relativas al proceso de enseñanza-aprendizaje, el uso de tecnologías de la información y la comunicación, la gestión social del aula o la adopción de estrategias di-dácticas que tengan en cuenta la perspectiva de igualdad de oportunidades y la educación intercultural- como en las específicas de su especialidad. Para ello, habrá que aprovechar y poner en relación las distintas modalidades y experiencias de formación del profesorado existentes en nuestra región, facilitando espacios para la formación conjunta de profesiona-les de los distintos subsistemas.

Por otra parte, debe asegurarse la eficacia de la oferta de formación profesional impartida, realizando de manera regular una evaluación de impacto que analice si se cubren las necesida-des de la población activa y del tejido empresarial. Y, por supuesto, mantener adecuadamente dotadas las instalaciones y equipamientos de los centros, imprescindible para una enseñanza de calidad.

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Asimismo, se debe seguir potenciando la formación en centros de trabajo y las prácticas en empresas, así como la formación en alternancia, como elemento clave para la adquisición de competencias pero también para profundizar en las relaciones entre formación y empresa. La característica más relevante de esta formación es que se desarrolla en un ámbito productivo real, donde los alumnos y alumnas podrán observar y desempeñar las actividades y funciones propias de los distintos puestos de trabajo.


7.1. Promover la calidad de la formación profesional, fomentando la evaluación de la misma y el intercambio de experiencias sobre los procedimientos empleados para ello

7.1.1. Se consolidarán los criterios de calidad establecidos para centros y acciones de for-mación de demanda.

7.1.2. Se pondrán en marcha acciones de sensibilización para extender la cultura de la calidad, se dará formación sobre la misma a los actores de la formación profesional y se fomentará el intercambio de experiencias sobre los distintos modelos de gestión de la calidad empleados.

7.1.3. Se potenciará la evaluación de los procesos didácticos y los resultados del aprendiza-je en todas las actividades de formación profesional.

7.1.4. Se potenciará la evaluación de la idoneidad del profesorado que imparte la forma-ción para el empleo.

7.1.5. Se evaluará el impacto de la formación profesional considerando parámetros tales como inserción laboral, continuación de los estudios, tasas de abandono o repetición, sa-tisfacción del alumnado y satisfacción, en su caso, de las familias.

7.1.6. Se evaluarán las prácticas en empresas considerando indicadores tales como satis-facción del alumnado, de la empresa y del centro formativo, cumplimiento de los acuerdos y seguimiento tutorial.

7.1.7. Se ampliará el número de centros que participan en sistemas de gestión de la calidad.

7.1.8. Se estudiarán fórmulas que permitan simplificar y agilizar los trámites para implantar ofertas de formación profesional, sin perjuicio de la calidad de las mismas.


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7.1.9. Se facilitará que profesionales cualificados del sistema productivo participen en la formación, dentro de los márgenes establecidos en la normativa sobre títulos de formación profesional y certificados de profesionalidad.

7.1.10. Se catalogarán los módulos profesionales que comporten riesgo físico para el alum-nado y el profesorado así como los que supongan una especial complejidad organizativa, con el fin de adoptar medidas para la mejora de los procesos de enseñanza y aprendizaje.

7.1.11. Se impulsará la formación de los trabajadores y trabajadoras que participen en pro-yectos empresariales de investigación, desarrollo e innovación.

7.2. Proporcionar formación al profesorado en competencias didácticas y específicas

7.2.1. Se impulsará la formación didáctico-metodológica de todo el profesorado de for-mación profesional, con la colaboración de las administraciones públicas, en particular las competentes en educación y empleo.

7.2.3. Se fomentará la actualización científico-técnica del profesorado de formación profe-sional, a través de cursos y estancias formativas en empresas.

7.2.4. Se establecerán mecanismos de colaboración para facilitar la formación del profe-sorado de formación profesional, cualquiera que sea el subsistema en el que ejerza su actividad, tanto en la oferta gestionada por la Administración educativa como en la impul-sada por la Administración laboral, para lo que se reservará un porcentaje de plazas en la proporción que permita la normativa específica.

7.2.5. Se promoverán encuentros e intercambios de buenas prácticas entre profesores y profesoras que imparten los mismos módulos profesionales en distintos subsistemas.

7.2.6. Se impulsarán acciones formativas para el profesorado que se incorpora por primera vez a la docencia.

7.2.7. Se proporcionará formación específica dirigida a los gestores y gestoras de la formación.

7.2.8. Se impulsará la formación de los/as docentes contratados en las actuaciones de edu-cación de personas adultas orientadas al mundo laboral y en los programas de empleo y formación.

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7.2.9. Se establecerán criterios homogéneos respecto a los contenidos, procedimientos y modalidades recomendables para la formación del profesorado que imparte similares módulos profesionales en distintos subsistemas.

7.2.10. Se constituirá un registro de docentes expertos/as que podrán ser contratados para impartir formación para el empleo.

7.2.11. Se incluirán módulos especializados en prevención de riesgos laborales en los cur-sos de formación de formadores/as.

7.2.12. Se incluirán módulos especializados en igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en los cursos de formación de formadoras/es.

7.3. Mantener una dotación adecuada de instalaciones y equipamientos

7.3.1. Se renovarán los materiales didácticos, equipos y herramientas en virtud de su estado de conservación y de los cambios producidos en los sistemas productivos, así como del desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y comunicación.

7.3.2. Se estudiarán las posibilidades de mejora de los espacios e instalaciones estableci-dos en la normativa general sobre formación profesional, y en virtud de ello se ampliarán los mismos en los centros educativos de nueva creación y en aquellos en los que la cons-trucción del edificio lo permita.

7.3.3. Se establecerán mecanismos que potencien la colaboración de las empresas en la dotación de equipamientos de formación profesional, así como el uso compartido de las respectivas instalaciones por parte de las empresas y de los centros formativos.

7.4. Favorecer las prácticas en empresas y la formación en alternancia

7.4.1. Se potenciarán las prácticas en empresas en todos los subsistemas de formación pro-fesional, incluida la formación orientada al mundo laboral que se imparte en la enseñanza de personas adultas y los programas de cualificación profesional inicial.

7.4.2. Se establecerá un modelo de prácticas en empresas que incluya referentes para la calidad de las mismas tales como la simplificación de la gestión, la adecuación de los tuto-res y tutoras, la programación de las actividades en la empresa y en el centro formativo, y el seguimiento y evaluación del alumnado.


56

7.4.3. Se elaborará y dará a conocer un censo único de empresas que colaboren en las prácticas.

7.4.5. Se dará formación a los tutores y tutoras de la empresa y de los centros formativos que participan en las prácticas no laborales y en los contratos de formación.

7.4.6. Se fomentará, con el apoyo de las organizaciones empresariales, que las/os empre-sarias/os colaboren en la difusión de las prácticas en empresas y en la búsqueda de nuevas empresas colaboradoras.

7.4.7. Se promoverán acuerdos con las diferentes administraciones públicas para la realiza-ción de prácticas en empresas.

A C T u A C I O N E S Y T E M P O R A L I Z A C I ó N

3


60

La siguiente tabla sintetiza las principales actuaciones necesarias para el desarrollo del Plan, convenientemente temporalizadas.

ACTUACIONES RELACIONADAS CON...2008 2009 2010 20111er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Acreditación y certificaciones

Poner en marcha experiencias para acreditar la experiencia laboral y los aprendizajes no formales

Estudiar la posible acreditación de cursos de educación no formal

Poner en marcha un dispositivo de competencias propio de Castilla-La Mancha

Informar sobre el sistema de acreditaciones para impulsar el reconocimiento de las competencias acreditadas por parte de administraciones y empresas

Acuerdos y protocolos

Llegar a acuerdos con empresas y administraciones para la realización de prácticas no laborales y para la acogida de alumnado de proyectos Leonardo y Erasmus

Elaborar protocolos de colaboración entre distintos profesionales para planificar la formación y participar en la acreditación de competencias

Elaborar protocolos para el funcionamiento de un sistema integrado de orientación profesional

Establecer un procedimiento para contribuir al desarrollo del Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales a partir del análisis de la realidad castellano-manchega

Adecuación de la oferta formativa

Impartir una oferta formativa que contemple la flexibilidad horaria

Potenciar la oferta modular, dirigida tanto a trabajadores/as como a empresas

Potenciar el uso de medios telemáticos y la oferta on-line y a distancia

Planificar una oferta formativa para sectores en expansión y para sectores en crisis


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sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Planificar una oferta formativa para microempresas y empresas que desarrollan su actividad en sectores estratégicos

Planificar una oferta formativa para autónomos/as y empresas de economía social

Rentabilizar los centros públicos existentes, ampliando su oferta formativa a otros subsistemas

Planificar una oferta adaptada a las características singulares de Castilla-La Mancha y a necesidades particulares del mercado de trabajo

Potenciar la oferta dirigida a obtener títulos de formación profesional y certificados de profesionalidad

Planificar una oferta dirigida a personas y grupos con menor cualificación y mayores dificultades de inserción sociolaboral

Ayudas y becas

Dar ayudas para conciliar la vida familiar con la formación profesional

Dar ayudas complementarias de las becas Leonardo y Erasmus

Dar ayudas para transporte, alojamiento y manutención cuando se precise

Dar ayudas para potenciar la formación profesional de las mujeres en familias en las que se encuentran poco representadas

Desarrollo curricular

Potenciar la formación en idiomas

Potenciar la formación en tecnologías de la información y la comunicación

Potenciar, asociados a la oferta de formación profesional, los mecanismos que permitan obtener el Graduado en Educación Secundaria

Potenciar la educación en valores de convivencia y ciudadanía democrática


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sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Potenciar la educación de la iniciativa personal, la cultura emprendedora y la adaptación al cambio

Potenciar la formación en prevención de riesgos laborales

Potenciar la educación ambiental

Potenciar la formación para la igualdad de oportunidades

Desarrollo normativo

Adecuar las convocatorias para favorecer planes de formación en empresas que contribuyan al desarrollo personal y profesional de los trabajadores y trabajadoras

Adecuar las convocatorias de formación en alternancia para favorecer la participación de personas y grupos desfavorecidos

Elaborar normativa para la constitución de comisiones provinciales de formación profesional

Elaborar normativa para poner en marcha una red de centros integrados

Adecuar la normativa sobre orientación profesional

Difusión y divulgación

Difundir los programas europeos de formación profesional

Difundir la oferta de formación profesional

Difundir la normativa sobre formación de demanda y permisos de formación

Difundir los programas y convocatorias de formación profesional

Difundir el dispositivo de competencias de Castilla-La Mancha

Divulgar las empresas que colaboran de forma relevante con la formación profesional

Poner en marcha un Portal de orientación profesional de Castilla-La Mancha


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sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Elaboración de documentos

Elaborar documentación para la web del Consejo de Formación Profesional

Elaborar guías sobre formación dirigidas a empresas

Elaborar guías dirigidas al sistema de orientación profesional

Estudios e investigaciones

Realizar estudios sobre necesidades de formación y cualificación profesional

Realizar estudios sobre personas y grupos con mayores dificultades de inserción sociolaboral

Realizar estudios previos para la acreditación de competencias

Realizar estudios sobre oferta formativa y mercado de trabajo

Realizar un catálogo de los recursos de orientación

Evaluación y mejora de la calidad

Evaluar la calidad de la oferta formativa en todas sus dimensiones: impacto, profesorado, metodología, etc.

Promover modelos y criterios para evaluar y gestionar la calidad

Potenciar los proyectos de investigación, desarrollo e innovación que conlleven formación de los trabajadores y trabajadoras

Potenciar las prácticas en empresas en las diferentes modalidades formativas

Participar en proyectos europeos de movilidad Leonardo y Erasmus

Elaborar un modelo homogéneo en todos los subsistemas para las prácticas en empresas


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sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Formación del profesorado

Celebrar encuentros de intercambio de experiencias entre profesionales de la formación

Celebrar ferias y jornadas provinciales y regionales sobre formación profesional, con participación de profesionales y empresas

Potenciar la formación conjunta de profesorado de los distintos subsistemas

Promover el intercambio entre orientadores/as y su formación

Fomentar la formación didáctico-metodológica y científico-técnica del profesorado de los distintos subsistemas

Fomentar las estancias formativas en empresas

Potenciar la formación del profesorado novel, los tutores y tutoras de empresa y los/as gestores/as y administradores/as de la formación

Grupos y comisiones de trabajo

Poner en marcha comisiones de trabajo para planificar y coordinar la oferta formativa, tanto a nivel regional como provincial

Mantener reuniones con otros Consejos de formación profesional

Poner en marcha grupos de expertos/as para analizar las cualificaciones y su adecuación a Castilla-La Mancha, valorar la implantación de programas formativos y desarrollar propuestas de formación sobre prevención de riesgos laborales

Orientación y asesoramiento

Desarrollar acciones de orientación y acompañamiento a personas con menor cualificación y mayores dificultades de inserción sociolaboral

Extender la orientación al alumnado adulto y a los trabajadores y trabajadoras ocupados


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sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Desarrollar programas que fomenten el autoconocimiento y la toma de decisiones

Recursos e instalaciones

Dotar de recursos humanos y materiales las estructuras susceptibles de proporcionar apoyo técnico al Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha

Poner en marcha la red pública de centros integrados de formación profesional

Mantener una dotación e instalaciones adecuadas a la oferta formativa

Llegar a acuerdos con empresas y administraciones para el uso compartido de instalaciones y equipamientos

E V A L u A C I ó N

4


68

1. PROCEDIMIENTOS E INDICADORES PARA OBTENER INFORMACIÓN

La pluralidad de medidas y actuaciones previstas en el II Plan de Formación Profesional hace que, para su evaluación, debamos organizar la información en torno a dos tipos de variables: cuantitativas y cualitativas. En este sentido, y reiterando la heterogeneidad de las acciones pre-vistas, será conveniente, en algunos casos, disponer de datos meramente cuantitativos; en otros, sin embargo, la evaluación habrá de realizarse con métodos cualitativos: de la combinación de ambos se obtendrá una serie de valoraciones, por programas y de manera global, cuyo resulta-do será la evaluación propiamente dicha.

De entre los diferentes tipos de evaluación, se ha optado por la denominada evaluación plura-lista, para conseguir la mejora continua del propio Plan a través del rediseño de las actuaciones mediante un seguimiento continuo de sus indicadores.

Por todo ello, para la evaluación del Plan se establecen dos tipos de indicadores (cualitativos y cuantitativos), basados en tres métodos de recogida y tratamiento de la información.

1.1. Método 1: Grupo de discusión

La Comisión Permanente del Consejo se constituirá en grupo de discusión –una metodología de sobra conocida- para valorar cualitativamente una serie de cuestiones que se articulan en dos niveles:

Valoración de actuaciones específicas por parte del Consejo de Formación Profesional

El Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha hará una valoración específica, a través de reuniones de su Comisión Permanente constituida en grupo de discusión, de los as-pectos que considere más relevantes o bien de aquellos que no disponen de una evaluación propia en el marco de un programa o actuación concretos. La información necesaria para el seguimiento del Plan de Formación Profesional será obtenida de las conclusiones de dicha Co-misión Permanente con una periodicidad anual.

El grupo de discusión tendrá como apoyo una serie de ideas básicas en torno a las cuales se establecerá el debate, y que son las siguientes:

¿La dotación de los órganos que proporcionan apoyo técnico al propio Consejo es sufi- –ciente y su funcionamiento resulta operativo y eficaz?

E V A L u A C I ó N / P R O C E D I M I E N T O S E I N D I C A D O R E S . . .

69

¿El sector productivo participa y colabora en las distintas jornadas y encuentros, progra- –mas europeos y prácticas en empresas?

¿Las comisiones de coordinación provincial y los grupos de trabajo muestran un funcio- –namiento eficaz y sus propuestas resultan útiles y pertinentes?

¿El dispositivo de acreditación de competencias de Castilla-La Mancha funciona adecua- –damente y da respuesta a las demandas de los potenciales usuarios y a las necesidades detectadas?

¿La página web del Consejo de Formación Profesional y el Portal de orientación profe- –sional son herramientas útiles para usuarios y profesionales?

Valoración de actuaciones específicas en el marco de los distintos programas o actuaciones

La mayor parte de los programas relacionados con la formación incluyen una memoria anual sobre el cumplimiento de sus objetivos. Sin embargo, debido a la heterogeneidad de las actua-ciones, no existe un momento único de recogida de información, sino que probablemente ésta se realice en distintos períodos del año, en función de la puesta en marcha e implementación de cada uno de ellos.

La información obtenida a partir de las conclusiones de las memorias de estos programas será sometida a la Comisión Permanente del Consejo, constituida como grupo de discusión, para elaborar el documento de seguimiento que permita la posterior evaluación del Plan.

De nuevo, los temas a tratar por el grupo de discusión, basados en las conclusiones de las pre-citadas memorias, girarán en torno a las siguientes cuestiones:

¿Las convocatorias de ayudas han permitido el desarrollo de planes de formación de –empresas que conjugan las necesidades empresariales y las expectativas e intereses de los trabajadores y trabajadoras?

¿Se ha facilitado el acceso de personas y grupos con dificultades de inserción sociolabo- –ral a los programas de formación y empleo?

¿Resultan adecuados y funcionales los programas dirigidos a personas y grupos con –dificultades de inserción sociolaboral?

¿Los programas de cualificación profesional inicial han tenido un desarrollo equilibrado –en sus objetivos?


70

¿Los distintos órganos de la administración laboral -oficinas de empleo, Observatorio –ocupacional- participan asiduamente en la detección de necesidades de formación y en la planificación y seguimiento de las ofertas formativas?

¿Resulta operativa la forma de incluir en los programas formativos la formación com- –plementaria y transversal en tecnologías de la información y la comunicación, idiomas, igualdad de oportunidades, educación ambiental, prevención de riesgos laborales, es-píritu emprendedor, etc.?

¿Ha resultado eficaz la forma de generalizar los programas de información, orientación –y asesoramiento profesional al conjunto de la población, incluidos los trabajadores y trabajadoras ocupados?

¿Resultan eficaces las medidas emprendidas para evaluar la calidad de la formación pro- –fesional?

1.2. Método 2: check list o lista de comprobación

El modelo de check list sirve para verificar que se han realizado determinadas actuaciones espe-cíficas, con independencia del uso de otros métodos de estadística descriptiva o de la emisión de juicios de valor de índole cualitativa.

una parte de la información necesaria para el seguimiento del Plan se obtendrá, por tanto, a partir de una lista de control o verificación, cumplimentada anualmente por la Comisión Permanente del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha en relación con las siguientes cuestiones:

¿Se ha llegado a acuerdos con organizaciones empresariales y empresas para la realiza- –ción de prácticas, el uso compartido de equipos e instalaciones y la acogida de partici-pantes en programas europeos?

¿Se ha elaborado un modelo unificado de prácticas en empresas? –

¿Se ha llegado a acuerdos entre la Administración y los agentes sociales para definir el –uso de instalaciones y centros con oferta integrada?

¿Se ha llegado a acuerdos entre la Administración y los agentes sociales para establecer –una red de servicios de orientación profesional?

¿Se han editado guías de buenas prácticas en formación profesional? –


71

¿Se ha elaborado un catálogo de recursos de orientación? –

¿Se han publicado y difundido documentos de información y orientación profesional? –

¿Se ha elaborado el documento de competencias de Castilla-La Mancha? –

¿Se ha confeccionado el registro de docentes de formación para el empleo? –

¿Se han puesto en marcha centros integrados? –

¿Se han establecido protocolos de derivación y colaboración entre servicios de orien- –tación?

1.3. Método 3: estadística descriptiva, recogida y tratamiento de la información

Muchas de las medidas y programas desarrollados pueden ser cuantificados. Si bien la informa-ción necesaria para el seguimiento del Plan suele estar disponible con una periodicidad variable en función del programa del que extraigamos los datos, debido al proceso administrativo de aprobación, instrucción y resolución y al proceso de gasto público, consideramos que el semes-tre es la unidad de medida temporal más adecuada para el seguimiento del Plan en lo que a datos cuantitativos se refiere.

Para cada uno de los programas que se citan a continuación, los órganos gestores de cada uno de los mismos facilitarán a la Comisión Permanente del Consejo las siguientes variables:

Denominación de la acción. –

Número de actuaciones. –

Numero de usuarios por sexo y edad (cuando este dato sea posible por la naturaleza del –programa).

Territorio de la actuación (municipio si fuera posible o provincia en caso contrario). –

Inversión aprobada por cada actuación. –

Los programas sobre los que habrán de facilitarse las variables antedichas serán los siguientes:

Programas europeos de formación profesional. –

Actividades de difusión. –


72

Jornadas y encuentros. –

Ayudas para conciliación de la vida familiar y la formación. –

Becas y ayudas. –

Ayudas para la formación de jóvenes titulados. –

Programas de cualificación profesional inicial. –

Programas de formación en alternancia. –

Cursos en oferta modular. –

Cursos de enseñanza a distancia y on-line. –

Cursos conducentes a títulos de formación profesional. –

Cursos conducentes a certificados de profesionalidad. –

Cursos no asociados a títulos de formación profesional o certificados de profesionalidad. –

Cursos que incluyen módulos transversales y complementarios. –

Planes de formación de empresas mediante acuerdos con la Administración. –

Estudios e investigaciones sobre formación profesional. –

Cursos de formación del profesorado. –

Estancias formativas en empresas. –

2. TEMPORALIZACIÓN DE LA EVALUACIÓN Y SEGUIMIENTO DEL PLAN

Los métodos para obtener información están al servicio del verdadero seguimiento y evaluación del Plan, es por tanto una monitorización que se realizará mediante dos procesos:

Por una parte, y en el marco de las funciones propias del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, se emitirá un informe de situación de la formación profesional en nuestra Comunidad Autónoma, que tendrá carácter de informe de seguimiento del presente Plan.


73

Por otra parte, se realizará una evaluación intermedia del Plan de Formación Profesional, por parte del propio Consejo y con las ayudas técnicas que el mismo determine. Dicha evaluación servirá para orientar, en lo que se precise, la continuación de las medidas establecidas, a partir de las recomendaciones y conclusiones de dicha evaluación.

Al término de la vigencia del presente Plan, se realizará una evaluación final del mismo, con la misma metodología que se utilice para la evaluación intermedia.

2008 2009 2010 20111er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.1er

sem.2º

sem.

Procedimientos para obtener información

Valoración de actuaciones específicas por parte del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha

Valoración de actuaciones específicas en el marco de los distintos programas o actuaciones

Lista de comprobación sobre determinadas actuaciones específicas

Recogida y tratamiento de datos cuantitativos

Procesos de seguimiento y evaluación del Plan

Informe de situación de la formación profesional en Castilla-La Mancha

Evaluación del Plan de Formación Profesional

El Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha elaborará un plan de trabajo para la planificación, puesta en marcha y seguimiento de las medidas y actuaciones previstas en el Plan de Formación Profesional que contemplará, si es necesaria, la constitución de comisiones y grupos de trabajo o la contribución de ayudas técnicas.

Con la colaboración del Observatorio del mercado de trabajo y de las ocupaciones, se realizará una Memoria técnica sobre evaluación con diferentes posibilidades y modelos, que será some-tida a la aprobación del Consejo de Formación Profesional de Castilla-La Mancha, con el fin de realizar la evaluación intermedia y final.

M E M O R I AE C O N ó M I C A

5


76

ACTUACIONES PRESUPUESTADAS 2008 2009 2010 2011 TOTAL

1. Actividades de divulgación y sensibilización

227.143 € 291.686 € 296.320 € 301.046 € 1.116.195 €

- Material divulgativo y campañas- Publicaciones y guías- Portal de Orientación y portal del

Consejo de Formación Profesional

2. Programas formativos 170.868.586 € 174.513.519 € 178.218.713 € 181.979.322 € 705.580.140 €

Oferta flexible modular y pruebas libres en ciclos formativos

210.000 € 238.000 € 240.760 € 253.575 € 942.335 €

Oferta a distancia y on-line 5.190.406 € 5.294.214 € 5.400.098 € 5.508.100 € 21.392.818 €

Oferta dirigida a personas y grupos con dificultades de inserción:- Programas de garantía social y

cualificación profesional inicial- Programas de retorno al sistema

educativo- Formación en alternancia:

programas públicos de empleo y formación

40.763.805 € 41.579.081 € 42.410.663 € 43.258.876 € 168.012.425 €

Oferta adaptada a las características singulares del tejido productivo de Castilla-La Mancha:- Cursos para la inserción y

reinserción laboral en sectores preferentes, acciones singulares, cursos con compromiso de contratación

- Cursos dirigidos a autónomos/as y empresas de economía social

- Cursos no asociados a certificados de profesionalidad justificados por necesidades del mercado de trabajo

- Actividades formativas para la acreditación de colectivos prioritarios

26.391.579 € 26.919.411 € 27.457.799 € 28.006.955 € 108.775.744 €

M E M O R I A E C O N ó M I C A

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Oferta general de formación:

- Cursos para la obtención de

certificados de profesionalidad y

títulos de formación profesional

- Otra oferta de formación a

trabajadoras/es ocupados

93.583.729 € 95.853.832 € 97.115.259 € 98.361.458 € 384.914.279 €

Formación en competencias

transversales:

- Formación en idiomas y nuevas

tecnologías de la información y la

comunicación

- Formación en competencias

transversales (educación ambiental,

igualdad entre mujeres y hombres,

prevención de riesgos laborales,

ciudadanía y convivencia, espíritu

emprendedor)

4.729.067 € 5.001.128 € 5.474.631 € 5.849.604 € 21.054.430 €

3. Instalaciones, equipamientos y

dotaciones

5.225.185 € 6.229.689 € 7.236.282 € 10.045.008 € 28.736.164 €

Centros integrados 900.000 € 1.800.000 € 4.500.000 € 7.200.000 €

Inversión en equipamientos e

instalaciones

5.225.185 € 5.329.689 € 5.436.282 € 5.545.008 € 21.536.164 €

4. Formación del profesorado 2.053.262 € 2.094.327 € 2.136.214 € 2.178.938 € 8.462.741 €

- Jornadas y encuentros (ferias,

jornadas técnicas, otras)

- Formación del profesorado

(docentes, gestores/as, tutores/as

de prácticas…)

- Estancias formativas en empresas

- Formación de orientadores/as

- Grupos de trabajo de expertas/os

5. Otros gastos 16.303.695 € 16.711.287 € 17.129.070 € 17.557.296 € 67.701.348 €

Estudios e investigaciones sobre formación profesional

1.150.000 € 1.173.000 € 1.196.460 € 1.220.389 € 4.739.849 €


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Ayudas personales para la formación:- Ayudas para conciliar la vida

personal con la formación profesional

- Becas y ayudas de transporte, alojamiento y manutención, incluidas prácticas en el extranjero

- Becas destinadas a mujeres que cursen formación profesional no vocacional

- Ayudas para contratos de formación de tituladas/os universitarios y de formación profesional

- Ayudas para contratos de formación de tecnólogas/os en proyectos de I+D+i

7.673.550 € 7.785.781 € 7.941.497 € 8.100.327 € 31.501.155 €

Acreditación de competencias:- Experiencias previas de acreditación- Dispositivo de competencias de

Castilla-La Mancha

148.000 € 300.000 € 233.000 € 246.060 € 927.060 €

Orientación:- Servicios y programas generales de

orientación- Servicios y programas específicos

de orientación dirigidos a personas y grupos en situación de desventaja

4.086.350 € 4.168.077 € 4.251.439 € 4.336.467 € 16.842.333 €

Evaluación de la calidad de la formación profesional

820.000 € 836.400 € 853.128 € 870.191 € 3.379.719 €

Prácticas en empresas 2.425.795 € 2.474.311 € 2.523.797 € 2.574.273 € 9.998.176 €

TOTAL PLAN DE FORMACIÓN PROFESIONAL

194.677.871 € 199.840.508 € 205.016.599 € 212.061.610 € 811.596.588 €

M E M O R I A E C O N ó M I C A

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de Castilla-La Mancha

profesional

ii plan deformación

union europeaFondo Social europeoinvierte en tu Futuro

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