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UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES ESCUELA DE POST GRADO CENTRO UNIVERSITARIO DE NOR ORIENTE DOCENTE: M.Sc. VIVIANA NINETH VEGA MORALES CURSO TEORÍA GENERAL DEL NEGOCIO JURÍDICO FORMAS DE MANIFESTACION DE LA VOLUNTAD GRUPO DE TRABAJO NO. 1 MARIA EUGENIA ALVA SERRANO MERLY ELIZABETH CHINCHILLA IZAGUIRRE AURA VIOLETA REY YALIBAT YANINA MARISOL HERRERA COY MIRNA ARACELY RAMIREZ GODOY

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UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES ESCUELA DE POST GRADO CENTRO UNIVERSITARIO DE NOR ORIENTE DOCENTE: M.Sc. VIVIANA NINETH VEGA MORALES CURSO TEORÍA GENERAL DEL NEGOCIO JURÍDICO

FORMAS DE MANIFESTACION DE LA

VOLUNTAD

GRUPO DE TRABAJO NO. 1

MARIA EUGENIA ALVA SERRANO

MERLY ELIZABETH CHINCHILLA IZAGUIRRE

AURA VIOLETA REY YALIBAT

YANINA MARISOL HERRERA COY

MIRNA ARACELY RAMIREZ GODOY

INTRODUCCION

El p ropós i to de es te t raba jo es de da r a conocer las formas de

manifestación de la voluntad en el Negocio Jurídico, y las diferentes teorías de

manifestación de la voluntad, tales como la teoría de la voluntad que hace

referencia a que la voluntad es lo único válido, ya que esta es lo que realmente

desea la persona; la teoría de la declaración que se refiere a que lo declarado en

el documento basta para la creación, interpretación y efectos del acto jurídico ya

que se apoya en el principio de la buena fe y que lo que se encuentra declarado

es exactamente lo deseado por la persona.

Asimismo se presenta la formación del consentimiento, la importancia de su

integración, y sus elementos subjetivos (La voluntad del acto, Manifestación y

voluntad y El disenso) y objetivos (La manifestación expresa, La manifestación

tácita y La manifestación presunta).

Y por último que la comunicación de las partes puede establecerse de manera

expresa o tácita. La manifestación es expresa cuando la persona declara

personalmente o por medio de su representante legal, su decisión de obligarse; y

la manifestación tácita es algo que se sobreentiende como consecuencia de una

conducta “pasiva”; o bien resultar de la presunción de la ley en los casos en que

ésta lo disponga expresamente, según el contenido de los artículos 1252 y el

1253.

Ejemplificando con un caso concreto, la forma de manifestación de voluntad.

FORMAS DE MANIFESTACION DE LA VOLUNTAD

A) TEORIAS:

1. De la teoría de la voluntad a la teoría de la declaración:

El negocio jurídico es una declaración de voluntad que se exterioriza y que va

dirigida a la creación, modificación o extinción de las relaciones jurídicas. Por

ello la declaración de voluntad constituye un acto por el que se exterioriza un

determinado contenido.

Cuando se habla de consentimiento contractual hay que mantener separados

los siguientes fenómenos: a) la voluntad interna e individual de cada

contratante, en la que puede valorarse el simple querer y el propósito empírico

que la guía; b) la declaración que el contratante emite y a través de la cual su

voluntad es conocida, tanto por el otro contratante como por las demás

personas; c) lo que puede llamarse la voluntad o intención común, es decir,

aquella zona donde las dos declaraciones (o más declaraciones) coinciden,

pues es evidente que el contrato supone esa zona de coincidencia. Si las

declaraciones no se cruzasen habría disenso o desacuerdo, pero no contrato1.

1.1. Teoría de la voluntad

La formulación de la teoría, tal y como aparece en el “Sistema” de

SAVIGNY y en las obras inmediatas de UNGER y SINTENIS, es de gran

sencillez: la voluntad es el elemento primordial del negocio jurídico; lo que

el Derecho recibe y dota de consecuencias jurídicas es el querer del

individuo mediante el cual manifiesta su propia autonomía en el orden

1MALUQUER DE MOTES BERNET, Codificación, persona y Negocio jurídico, Barcelona, 2003, AAVV.

“La declaración de voluntad negocial”, págs. 315, 316, afirma: “…la exteriorización de la voluntad, elmecanismo o medio de exteriorizar ésta y la existencia de una concreta y determinada voluntad de realizar el negocio forman una unidad, que constituyen la declaración de voluntad, pero que puedendistinguirse separadamente, como tres factores distintos, a saber: el acto humano (es una conductaque la persona exterioriza voluntariamente), el medio de expresión (para llevar a término la declaracióndebe realizarse por el medio adecuado) y la voluntad del negocio o contenido volitivo (expresar elcontenido del negocio es fijar el sentido de la declaración. Lo que significa que el sujeto que la realizaha de establecer y designar el objeto y el efecto jurídico buscado).

social. Ciertamente la voluntad, como movimiento psíquico interno, necesita

una exteriorización o manifestación, pero la declaración es sólo un

elemento instrumental, ya que lo esencial sigue siendo la voluntad interna;

por ello, en el conflicto entre lo esencial y lo accidental; voluntad y

declaración, prevalece siempre lo primero.

1.2. Teoría de la declaración

Fue el maestro ROWER quien invirtió los términos de la anterior teoría. Por

un lado, se repudia que un simple y vago deseo del declarante, pueda

concebirse como punto de partida de consecuencias jurídicas. Por otro, se

denunció la falsedad de la doctrina, en cuanto resulta inservible para

justificar determinados fenómenos en que la voluntad real deja de ser

fundamental y exclusiva.

Como consecuencia de las críticas formuladas contra la teoría voluntarista,

adquiere relevancia la de la declaración, que eleva a elemento esencial del

negocio no la voluntad interna, sino la exteriormente manifestada; la

declaración no es, en consecuencia, un mero elemento de prueba de la

voluntad, con la que necesariamente debe coincidir, ya que es su mera

exposición, sino que la declaración es elemento decisivo y determinante de

la vinculación.

1.3. Proceso de transición de la teoría de la voluntad a la teoría de la

declaración

Como una nueva manera de enfocar y resolver el problema, se ha

defendido que lo característico de la declaración está en que origina un

deber ser o en que se establece aquello que será válido; es decir, que por

la declaración se origina una norma concreta para los particulares, que el

negocio contiene un precepto con el que los particulares regulan entre sí

sus propias relaciones. Esta teoría, recibida con recelo y críticas, parece sin

embargo irse abriendo camino. Se le defiende, como superadora de la

polémica sobre la primacía entre voluntad y declaración, y también como

conforme con la teoría de la voluntad, o por considerarse la mejor expresión

de la teoría declaracionista.

En este proceso la categoría del negocio jurídico se introduce con una

precisa función: reconducir las desigualdades formales, introducidas por la

codificación a un principio de igualdad. Tal categoría, en cuanto categoría

abstracta, puede dominar ambos sistemas de derecho privado y sirve como

elemento unificador más allá de su duplicidad. Se convierte en una

categoría en cuyo interior se coordinan los intereses de la clase empresarial

con aquellos de las otras clases sociales, de los vendedores de las materias

primas, de los compradores del producto final. El éxito de esta operación se

constata en la doctrina mercantilista, que adopta también la categoría de

negocio jurídico para el análisis de los actos y de los contratos mercantiles.

B) GENERALIDADES DEL CONSENTIMIENTO:

FORMACIÓN DEL CONSENTIMIENTO:

Refiere el autor DEKKERS; el consentimiento no surge espontáneamente, sino

que esta precedido por una serie de tratos o conversaciones previas, que tiene

como punto inicial una oferta y, como consecuencia normal de ella, la aceptación

por aquel a quien se ha hecho.

EL CONSENTIMIENTO:

Como hemos visto, la voluntad de celebrar el acto es su motor principal. En los

contratos, esa voluntad se llama consentimiento y es un elemento complejo

formado por la integración de dos voluntades que se conciertan. En un acuerdo

de voluntades: dos quereres que se reúnen y constituyen una voluntad común.

¿COMO SE FORMA EL CONSENTIMIENTO?

Requiere de dos emisiones de voluntad secusivas, de dos declaraciones

unilaterales: la oferta o propuesta y la aceptación.

El consentimiento (y por ende el contrato) no es ni la oferta sola ni es la

aceptación sola. Ambas reúnen y se funden. El acuerdo de voluntades se forma

cuando una oferta vigente es aceptada lisa y llanamente.

IMPORTANCIA DE SU INTEGRACIÓN.

Determinar el momento en que se logra el acuerdo es de sumo interés, ya que, a

partir de entonces, surge el consentimiento, nace el contrato y empieza a producir

sus efectos legales, pues antes de su formación no hay contrato ni obligaciones.

ELEMENTO SUBJETIVO DEL CONSENTIMIENTO:

El elemento subjetivo del negocio jurídico se integra de los siguientes aspectos:

La voluntad del acto

Manifestación y voluntad

El disenso (desacuerdo)

Estos tres elementos que se mencionan son fundamentales para que el

consentimiento sea tomado de una manera correcta, que sirven como parámetro

para establecer la certeza jurídica que se le da al acto que realizan los sujetos, al

crear derechos y obligaciones bilaterales para que dicho acto jurídico sea válido y

surta efectos. Al hacer esta mezcla de elementos se dice que el contrato puede

concretarse de manera correcta.

La voluntad del acto

Ahora bien, las manifestaciones a la vez de ser coincidentes, constituyen un

vehículo para exteriorizar la voluntad; de ahí la idea que el consentimiento,

como se desprende del significado etimológico, entraña un encuentro de las

voluntades efectivas de las partes.

La concepción tradicional del contrato, como la del acto o negocio jurídico

que lo engloba, tiene como núcleo la existencia de la voluntad, por cuanto

se los concibe como un medio de autodeterminación de los interesados. Por

ello la manifestación exterior debe guardar una relación de correspondencia

con la voluntad interna del sujeto.

Manifestación y voluntad

Se establece que la manifestación, es decir; la voluntad de una persona o

de varias, al expresarse se está dando una voluntad exterior con la que al

realizar un negocio jurídico se puede establecer su certeza o validez por la

simple manifestación de los sujetos que realizan dicho negocio.

El disenso (desacuerdo):

El disenso constituye una anormalidad que se da en los actosjurídicos

bilaterales, en particular en el contrato y consiste en unfallido encuentro de

la voluntad de los contratantes, en razón de undiverso significado que ellos

dan a sus manifestaciones.

El disenso es evidente cuando se exterioriza en lasmanifestaciones de las

partes, cuando el malentendidoconduce a una formulación de la declaración

de aceptación pero esta no concuerda con la de la oferta.

ELEMENTO OBJETIVO DEL CONSENTIMIENTO

El elemento objetivo del consentimientoconsiste en lasdiversas formas de

manifestaciones en las que se puede concretar de un negocio jurídico, de la

materia que se trate, las cuales son indispensables en el negocio jurídico

efectuado, siendo estas:

La manifestación expresa

La manifestación tácita

La manifestación presunta

C. FORMAS DE MANIFESTAR LA VOLUNTAD:

La manifestación de voluntad puede ser expresa o tácita y resultar también de

la presunción de la ley en los casos en que ésta lo disponga expresamente,

según el contenido del artículo 1252 del Código Civil.

1. MANIFESTACIÓN EXPRESA:

La manifestación expresa o también llamada “positiva” se dacuando la

persona declara o manifiesta personalmente, o por medio de su

representante legal, por escrito o por signos inequívocos, su decisión de

obligarse.

El Diccionario de la Real Academia de la Lengua establece, que puede

darse a entender por medio de palabras o gestos, como por ejemplo,

declarar la voluntad en la asamblea de una sociedad anónima, hablando o

levantando la mano para expresar su voluntad.

2. MANIFESTACIÓN TACITA:

La manifestación tácita es algo que se sobreentiende como consecuencia

de una conducta “pasiva”. Cuando se manifiesta, mediante actos por los

cuales se puede conocer con certidumbre la existencia de la voluntad, en

los casos en que no se exige una expresión positiva o cuando no haya

protesta o declaración expresa contraria; por ejemplo: en los contratos de

arrendamiento se habla de la “tácita reconducción” y consiste en que el

plazo y el mismo contrato, se tiene por prorrogado, si al llegar el momento

previsto para que termine la relación jurídica se sigue ocupando el bien y se

sigue pagando y cobrando la renta.

Por eso es que un contrato de ese tipo se sugiere que cualquier prorroga

debe ser expresa, para que la conducta pasiva de las partes no opere como

manifestación tácita de voluntad, si así lo desean los contratantes.

Según la exposición de motivos del Código Civil, “la voluntad tácita puede

consistir en un hecho material que dé a conocer la aceptación de la

obligación sin que lo manifieste con palabras. El mandatario, por ejemplo,

que comienza a ejercer el mandato sin que expresamente haya contestado

su aceptación al mandante, manifiesta tácitamente su voluntad”.

3. MANIFESTACIÓN PRESUNTA:

También la ley puede presumir que hay manifestación de voluntad en casos

específicos; por ejemplo, el artículo 879 del Código de Comercio, al

referirse al contrato de seguro, establece una presunción de aceptación de

obligarse, cuando regula:

“Se considera aceptada la solicitud de prorrogar o modificar un contrato de

seguro, o de restablecer uno suspendido, si el asegurador no lo rechaza

dentro de los quince días siguientes al de la recepción de la solicitud. Este

precepto no es aplicable a las solicitudes de aumentar la suma asegurada y

en ningún caso al seguro de persona”.

La norma transcrita contiene una manifestación de voluntad que proviene

de una presunción legal.

Las figuras jurídicas comprendidas en el código civil entre las obligaciones

provenientes de hechoslícitos sin convenio (artículos 1605 al 1644) son

casos de obligaciones en que el consentimiento lo presume la ley fundada

en principios de equidad.

EL SILENCIO

La exposición de motivos del Código Civil, enuncia lo siguiente: “El silencio no es

la manifestación de voluntad, dice el artículo 1,253, sino únicamente cuando

existiendo relaciones anteriores entre las partes, el interesado está obligado a

contestar. Así, por ejemplo, si de acuerdo con un contrato de mutuo en cuenta

corriente, el deudor recibe el saldo de su cuenta en la época convenida y no lo

objeta ni contesta dentro del término que el acreedor le fija, se supone que lo

acepta, siendo su silencio, en este caso, expresión de consentimiento. De no

existir tales relaciones anteriores, no está obligada a contestar la parte que sea

requerida aunque se le amenace con tener su silencio como aceptación de lo que

se le interroga”

ACTIVIDAD

Lea, transcriba e interprete los artículos 1518, 1519 y 1522 del Código Civil. Una

vez efectuado lo anterior, resuelva el siguiente caso:

1. Marta propone a Ángel venderle un inmueble ubicado en el municipio

de Cobán, Alta Verapaz, por el precio de ciento cincuenta mil

quetzales (Q.150,000.00) los cuales deben pagarse al contado, Ángel

acepta.

a) Diga en qué momento se formó el consentimiento y surgió el

contrato.

b) Indique si en el caso de la oferta anterior se están cumpliendo los

tres requisitos mínimos que debe tener un contrato.

c) Indique cómo fue la aceptación de la compradora, de conformidad

con el artículo 1,522 del Código Civil, en su segunda parte.

d) Si Ángel hubiera aceptado comprar el inmueble, pero en dos

mensualidades, ¿se habría formado el consentimiento y por ende el

contrato?

e) Si Ángel hubiera aceptado la compraventa del inmueble, pero

inmediatamente dice NO ¿habría nacido el consentimiento?

CONCLUSIONES

1. La manifestación de voluntad es la exteriorización que realiza una persona

con el objetivo de dar a conocer a los demás lo que desea o que el fin que

persigue se cumpla como lo desea, dicha manifestación de voluntad la

puede realizar mediante un acto jurídico. Podemos decir que en un acto

jurídico la voluntad es lo único válido, ya que es lo que el individuo

realmente desea realizar. Ante esto nos encontramos con la autonomía de

la voluntad, la cual consiste en que las partes hacen uso de la voluntad,

pues son ellas quienes establecen sus propias normas con las que van a

regir. Esta autonomía les permite la libertad de poder contratar o no.

2. Podemos afirmar con certeza que nuestra legislación únicamente regula la

manifestación de voluntad Expresa llamada también Positiva; la

manifestación Tácita es algo que se sobreentiende como consecuencia de

una conducta pasiva, y resultar también de la presunción de la ley en los

casos en que ésta así lo disponga expresamente, tal y como lo establece el

Artículo 1252 del Código Civil. Encontrándose la primera cuando la

manifestación de voluntad se realiza de manera verbal, por escrito o por

otros signos inequívocos con relación a determinados objetos, y la

segunda cuando la declaración se manifiesta a través de actos por los que

se puede conocer con certidumbre la existencia de la voluntad en los casos

en que no se exige una expresión positiva o cuando no haya protesta o

declaración expresa contraria.

3. La figura del Silencio si bien es cierto se encuentra regulada en nuestra

legislación, la misma no se considerará como manifestación tácita de

voluntad sino en los casos en que existe, para la parte a quien afecta, la

obligación de explicarse.

BIBLIOGRAFIA

1. “El Negocio Jurídico” 5ª. Edición. AGUILAR GUERRA, VLADIMIR OSMAR.

2. Lecturas seleccionadas y casos de derecho civil. RODRIGUEZ V. HILDA

VIOLETA.

3. Teoría General de las Obligaciones. Dr. VILLEGAS LARA, RENÉ ARTURO.

4. Código Civil, Decreto-Ley numero 106; anotado y concordado. Lic.SIGÜENZA

SIGÜENZA, GUSTAVO ADOLFO.

5. http://es.shvoong.com/law-and-politics/1744699-derecho-civil-manifestacion-

voluntad/≠ixzz25i6rZlo4