Freud, Hitler y El Nazismo

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Freud y el Nazismo ¿Qué dijo Freud de Hitler cuando éste era solamente un niño? ¿Quién no ha visto un documental sobre el nazismo y ha pensado que Hitler sufría de trastornos mentales? De hecho, en 1942 el servicio de Inteligencia británico analizó un discurso que Hitler había pronunciado ese mismo año, donde se revelaban claros síntomas de histeria, epilepsia e incluso paranoia. Pero mucho antes de llegar al poder, un jovencísimo Adolf Hitler (para ser más exactos, tan solo un niño) ya mostraba síntomas de desequilibrio mental. Ante esta situación, el doctor de cabecera de su familia, Eduard Bloch, consultó al insigne médico vienés Sigmund Freud. De acuerdo a estudios llevados a cabo por los autores Laurence Marks y John Forrester, dedicados a estudiar la vida y las obras de Freud, en el año 1895 el creador del psicoanálisis sugirió que el pequeño Adolf fuera internado en una institución de salud mental para niños. Pero, lamentablemente, tal recomendación no fue llevada a la práctica. Freud y el pequeño Adolf A los seis años de edad, Adolf Hitler sufría de pesadillas muy intensas donde se veía a si mismo cayendo en profundos abismos o sufría persecuciones donde era capturado y azotado hasta desear la muerte. Estos episodios (y muchos más, de naturaleza psicológica) convencieron al doctor Bloch de que el niño necesitaba la ayuda de un especialista, motivo por el cual recurrió a Sigmund Freud, quien como padre del psicoanálisis tenía una exitosa consulta donde acudía tanto la clase alta como la clase media de la época. El doctor Bloch consultó a Freud el caso de Adolf Hitler en varias ocasiones, siendo, en todos los casos, muy claro el diagnóstico: internación y tratamiento, con lo que su madre Klara estuvo totalmente de acuerdo. Sin embargo, Adolf no fue internado (y ni siquiera tratado), pues Alois Hitler, su

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  • Freud y el Nazismo

    Qu dijo Freud de Hitler cuando ste era solamente un nio?

    Quin no ha visto un documental sobre el nazismo y ha pensado que Hitlersufra de trastornos mentales? De hecho, en 1942 el servicio de Inteligencia britnico analiz un discurso que Hitler haba pronunciado ese mismo ao, donde se revelaban claros sntomas de histeria, epilepsia e incluso paranoia.

    Pero mucho antes de llegar al poder, un jovencsimo Adolf Hitler (para ser ms exactos, tan solo un nio) ya mostraba sntomas de desequilibrio mental. Ante esta situacin, el doctor de cabecera de su familia, Eduard Bloch, consult al insigne mdico viens Sigmund Freud.

    De acuerdo a estudios llevados a cabo por los autores Laurence Marks y John Forrester, dedicados a estudiar la vida y las obras de Freud, en el ao 1895 el creador del psicoanlisis sugiri que el pequeo Adolf fuera internado en una institucin de salud mental para nios. Pero, lamentablemente, tal recomendacin no fue llevada a la prctica.

    Freud y el pequeo Adolf

    A los seis aos de edad, Adolf Hitler sufra de pesadillas muy intensas dondese vea a si mismo cayendo en profundos abismos o sufra persecuciones donde era capturado y azotado hasta desear la muerte. Estos episodios (y muchos ms, de naturaleza psicolgica) convencieron al doctor Bloch de queel nio necesitaba la ayuda de un especialista, motivo por el cual recurri a Sigmund Freud, quien como padre del psicoanlisis tena una exitosa consulta donde acuda tanto la clase alta como la clase media de la poca.

    El doctor Bloch consult a Freud el caso de Adolf Hitler en varias ocasiones,siendo, en todos los casos, muy claro el diagnstico: internacin y tratamiento, con lo que su madre Klara estuvo totalmente de acuerdo. Sin embargo, Adolf no fue internado (y ni siquiera tratado), pues Alois Hitler, su

  • padre, no lo permiti. Este era un hombre muy intransigente que buscaba que su pequeo hijo continuara su carrera de funcionario de aduanas.

    El padre de Hitler lo someta a malos tratos y vejaciones diarios, razn por laque Adolf-nio incluso trat de escapar de la casa varias veces durante su infancia. Segn los investigadores, a fin de evitar que se descubrieran sus maltratos, Alois siempre impidi el internamiento y el posterior tratamiento de su hijo.

    Tiempo ms tarde, ya a los 18 aos, al ser rechazado para entrar a la Academa de Artes de Viena por dos veces (entre 1907 y 1908), Adolf sufri crisis de nervios terriblemente fuertes, exacerbndose de este modo an ms su malestar psicolgico.

    El autor de la solucin final salv a un judo

    En 1938, cuando el nazismo se encuentra en su mximo apogeo y Alemania se anexa a Austria con la Anschluss, los judos austriacos comenzaron a ser reprimidos por la Gestapo. Pero hubo un mdico de origen judo que escribia Hitler directamente pidiendo proteccin; y fue el propio Fhrer quien orden a Martin Bohrmann protegerlo. El individuo agraciado fue el mismo doctor Eduard Bloch, que no fue molestado en ningn momento mientras obtena el salvoconducto que le permitira a l y a su mujer viajar a Estados Unidos.

    Ante semejante historia, es inevitable preguntarse qu hubiera ocurrido si el padre de Hitler hubiera aceptado internar a su hijo. Qu hubiese pasado si el entonces sufrido nio hubiese recibido el tratamiento psicolgico adecuado? Es casi forzoso pensar que, muy probablemente, la historia mundial hubiera cambiado y el Holocausto nunca se hubiera producido. No obstante, solo se trata de suposiciones. Nunca lo sabremos.

    Freud y el Nazismo

    El pensamiento de Jean Joseph Gaux, siempre me ha motivado a repensar

  • aspectos de la institucin psicoanaltica. Desde su trabajo El inconsciente Freudiano y la revolucin iconoclasta, pudimos pensar la dimensin que la Ley Mosaica tena en el pensamiento psicoanaltico.1 La publicacin de Freud y la estructura religiosa del nazismo2, me conecta nuevamente con lo que he venido pensando hace unos cuantos aos, la estructura religiosa de la Institucin Psicoanaltica3.Gaux plantea la escritura del Moiss como respuesta, una intervencin de Freud a la locura de Hitler, pero adems, muestra que no fue tan slo una locura, sino una estrategia de accin de masas, para sus fines polticos. Al mismo tiempo, al luchar contra la figura del judo en el doble frente amalgamado del capitalismo (la finanza juda internacional) y del marxismo (doctrina juda) Hitler proclama desde el cmienzo que acta segn el espritudel todopoderoso nuestro creador que combate para defender, la obra del Seor, cumpliendo con esto una misin para lo cual haba sido felizmente predestinado. De all la ambigedad permanente de lo religioso en el discurso de Hitler: a la vez concebido en la perspectiva fra del poltico pragmtico (slo una fe profunda puede sublevar a las masas; la religin tiene un valor prctico que corresponde a profundas necesidades vitales) y profesado, sin rodeos, segn el modo retrico de la conviccin, por aqul que se cree una fuente de la palabra de Dios, un orador elegido por el cielo para reclamar su verdad.4 Hitler, supo que una estructura religiosa era la ms eficaz para la conduccin poltica en su causa. En Psicologa de las Masas y Anlisis del Yo, refirindose a las dos masas artificiales, la Iglesia y el Ejrcito, Freud dice: ...un sesgo democrtico anima a la Iglesia... todo cristiano debe identificarse con Cristo y amar a los otros cristianos como El los ha amado... (por el contrario en el ejrcito)... se pone en ridculo (el soldado) cuando pretende identificarse con el general en jefe... (y ejemplificacon la escena seis de la obra de Shiller Wellestein Lager donde el montero se burla del sargento)... su modo de carraspear y de escupir es la que ha copiado perfectamente Ud. Aquello que Freud haba descripto tericamente, Hitler lo llevaba a la prctica en lo que fue su obra maestra delterror, el Movimiento Nacional Socialista. Mein Kempf se transforma en la Biblia del pueblo alemn, la cruz gamada el smbolo invencible, Hitler, el Mesas y sus oradores sus sacerdotes. La cultura alemana y europea sucumbi por adhesin o por la fuerza a esta nueva religin. El nazismo tom por sorpresa a las instituciones cientficas de su poca, no porque fuerainesperado sino porque no se crea, en un principio, en su fuerza. Nadie se poda imaginar entonces hasta qu punto este movimiento penetrara en las relaciones sociales. La Institucin Psicoanaltica Alemana y sus miembros cayeron en la misma trampa. Transcribo a continuacin los datos histricos

  • (solamente ellos y no las hiptesis y conclusiones) de un trabajo de investigacin que realic durante los aos 1985/86 en la Ctedra de Psicologa Institucional cuyo titular era el Lic. Ricardo Malfe, conjuntamente con dos colegas ms, Lic. Carlos Guzzetti y Lic. Ricardo Ileayassoff5. Estos mismos datos sern trabajados desde otra perspectiva: Lahistoria oficial cuenta cmo el movimiento psicoanaltico fue literalmente aniquilado en Alemania durante el nazismo, los hechos demuestran una integracin con un costo muy alto; a expensas de los psicoanalistas judos pero con su consentimiento, a expensas de su tica pero con la anuencia del mismo Freud, el movimiento fue salvado. En 1910 Abraham funda la Deutsche Psychoanalytische Gessellschaft (DPG), diez aos despus funda el Instituto Psicoanaltico de Berln dirigido por Max Eitington del cual dependa la Policlnica de Berln donde se ofreca tratamiento por un honorario que posibilitaba el acceso al mismo por parte de sectores populares. El psicoanlisis fue ganando un lugar en la cultura de su tiempo. A tal punto que en 1932, en el congreso de Wiesbaden, el presidente de entonces, Eitington, sostena que el psicoanlisis marchaba hacia el reconocimiento oficial. Tengamos en cuenta que la DPG tena menos de cincuenta miembros y un nmero no mayor de candidatos. El psicoanlisis era patrimonio de una lite cultural pero no social. Su pblico estaba compuesto por intelectuales de clase media, muchos de ellos judos, y que constituan un sector muy minoritario de la sociedad. Su influencia cultural se deba no a la masividad de sus adeptos sino a la fuerza de sus ideas. Adems es en el Instituto de Berln donde comienzan a desarrollarse los primeros anlisis didcticos a nivel institucional. Al mismo tiempo, como yadijimos, intentaba acercar la psicoterapia psicoanaltica a las clases populares mediante la labor de la Policlnica de Berln. Todo esto enmarcadoen la aspiracin del reconocimiento oficial. En 1926 se crea la Sociedad Mdica General para la Psicoterapia, sociedad de alcance internacional, donde participaron entre otros: A. Adler, G. Jung, Karen Horney, Kurt Lewin, Ernst Simmel, Ernst Kretschmer, Frieda Fromm Reichman, J.H. Schultz-Hencke, Felix Deutsch y G. Groddek. La DPG le neg su reconocimiento porque participaban ex-discpulos expulsados del movimiento y por representar orientaciones psicoterauticas no ortodoxas respecto del psicoanlisis; en 1930 G. Jung era su presidente. En 1932 Eitington afirmaba an que el ansiado reconocimiento oficial etaba a punto de ser alcanzado pero en 1933 la ley de arianizacin de las sociedades cientficas defina que ningn judo poda ocupar cargos directivos en dichassociedades; en la DPG Eitington, Fenichel y Simmel renunciaron, Freud haba aconsejado no provocar represalias por desconocer la orden, haba que

  • preservar el movimiento. En el mes de noviembre una asamblea general de la DPG aprob una proposicin de Eitington limitando la direccin de la sociedad a slo dos miembros, Felix Boehm y Karl Mueller-Braunschweig. Ambos eran freudianos convencidos y distaban de simpatizar con el movimiento nazi. Es de sealar que este ltimo public en 1934 en el semanario nazi Reichswart un artculo titulado Psicoanlisis y Weltanschauung, cuyo principal objetivo era defender al psicoanlisis de los ataques del nuevo orden. El reproche que a menudo se le hace al psicoanlisis, como investigacin y como terapia, de ser destructivo y extrao al espritu alemn... Es un hecho que, manejado por un espritu de destruccin, es un instrumento peligroso y resulta tanto ms decisivo saber quin posee ese instrumento... El psicoanlisis se esfuerza por transformar a los gozadores impotentes en hombre aptos para la exitencia, a las persona con instintos bloqueados en personas con instintos seguros, a los soadores yespritus quimricos en individuos que traten a la realidad de hombre a hombre (...) a los disgustados, conducirlos sin falta al srvicio de la vida. Para situar esta referencia en su contexto cotejmosla con lo que, en ese mismo ao, Kurt Gauger, mdico miembro de la SA, sostuvo en una conferencia dictada ante el Congreso Mdico de Psicoterapia. El problema de la salud del alma de nuestro pueblo es la cuestin bsica por la que se interesa el nacional-socialismo... Hitler... no nos prometi nada. El logr algo psicolgicamente sin precedentes, en cuanto que hizo demandas ms bien que promesas. El pidi de todo individuo el mximo en trminos de participacin, y una buena disposicin para la accin. En ese mismo ao unsub-grupo de la sociedad Mdica Generel para la Psicoterapia toma el nombre de Sociedad Mdica General Alemana para la Psicoterapia, de carcter nacional y dependiente de la primera, su director era M. Gring, primo del Mariscal del Reich. En 1935 todos los miembros judos de la DPGtuvieron que renunciar, exista la posibilidad de disolver el movimiento en protesta ante semejante exigencia pero se opt por la salvacin del mismo; los psicoanalistas arios saban, como sus colegas judos, que estos ltimos deban de todas formas exiliarse lo antes posible y no por ser psicoanalistas sino por ser judos. Hubo un solo miembro no judo, H. Bernhardt que renunci al mismo tiempo para protestar por la decisin tomada. Una de las hiptesis Geoffrey Cocks6 es que los psicoanalistas arios se vieron beneficiados por la exclusin de los judos, al acceder por ese hecho a posiciones de relevancia que hasta entonces ocupaban estos ltimos. En este sentido lo que sucedi entre los psicoanalistas es una rplica de lo sucedido en el conjunto de la sociedad alemana. En 1936 el relator de asuntos universitarios del partido nazi en Berln respondi a las crticas que algunos

  • psicoterapeutas dirigan a Freud aclarando que l no cuestionaba el psicoanlisis, sino el hecho de que ste fuera ejercido por judos ...todos sabemos que la reaccin de Wasserman fue descubierta por un judo, pero nadie estara tan loco en Alemania como para no usarla... fueron sus palabras. En ese mismo ao se le exige a la DPG que se separe de la IPA y secumple inmediatamente; la Sociedad Mdica General Alemana se fusiona, por recomendacin del Ministerio del Interior del Reich, con el Instituto Psicoanaltico de Berln dando origen al Instituto para la Investigacin Psicolgica y la Psicoterapia (llamado Instituto Gring) bajo la direccin de M. Gring. El 11 de marzo de 1938 Austria fue anexada al Tercer Reich, el20 del mismo mes y ao en una reunin que cont con la presencia de un delegado del partido nazi, Jones por la IPA, C. Muller Braunschweig como secretario de la DPG y miembro del consejo administrativo del Instituto Gring, Federn como presidente sustituto de la Sociedad Psicoanaltica de Viena (WPV) y Ana Freud como su vice-presidente; se firm un convenio enel cual Freud como presidente de la WPV haca a la DPG depositaria de los derechos y deberes de la WPV incluidos sus bienes. En noviembre del mismo ao la DPG se disuelve convirtindose en el grupo de trabajo A delinstituto Gring que subsisti hasta 1942, finalmente pas a llamarse Conferencia de Casos y Terapia hasta 1944. Prohibidos ya el Anlisis Didctico y la docencia en 1938 se prohbe la utilizacin del lenguaje psicoanaltico. No era posible hablar de Freud ni utilizar trminos psicoanalticos, empezando por el de Complejo de Edipo. Incluso la misma palabra psicoanlisis deba ser reemplazada por la expresin terapia psquica de gran profundidad y larga duracin. En 1944 el Instituto Gring pasa a denominarse Instituto para la Investigacin Psicolgica y la Psicoterapia del Concejo de Investigacin del Reich; el reconocimiento oficial llega tarde. La asimilacin de la DPG en el instituto de Goering, coincide con la reconversin del psicoanlisis en la psicoterapia. La poltica de los nazis respecto de la psicoterapia formaba parte de un plan ms vasto. Se trataba para ellos de la uniformizacin de todas las disciplinas y la regimentacin de las sociedades cientficas por parte del estado. El sentido del instituto de Gering era reunir a todas las corrientes psicoteraputicas alemanas bajo un solo techo, intentando de este modo hacer desaparecer toda pluralidad de ideas. La lectura de Mein Kampf era obligatoria. La formacin que ofreca el instituto era eclctica. Inclua la teora de Jung y seminarios de psicoanlisis a condicin de que no utilizasen la terminologa freudiana, como partes de una disciplina nica, una supuesta psicoterapia genuinamente alemana. Si bien en 1933 las obras de Freud son quemadas en la plaza pblica hay versiones que indican que durante varios

  • aos, hasta 1938, el retrato de Freud estaba colgado en la pared del Instituto de Goering frente al del Fhrer. Pero al mismo tiempo sus obras permanecan guardadas bajo llave y para consultarlas deba firmarse un pedido escrito. El Instituto Alemn para la Investigacin Psicolgica y la Psicoterapia fue financiado en un comienzo por los aportes de sus miembros.Luego del inicio de la guerra recibe ayuda del Frente de Trabajo para el apoyo de la psicologa industrial, de la Luftwaffe, del Partido y del Estado. En 1942 pasa a ser financiado por el Instituto de Investigaciones del Reich, para pasar en 1944 a formar parte directamente del Consejo de Investigaciones del Reich, esto es, adquiere rango oficial. El proceso que culmina con el paso de la psicoterapia al status gubernamental, la lleva al apogeo de su desarrollo profesional. Bajo el nacional-socialismo no produjo progresos tericos pero s un avance en cuanto a su aceptacin por los mdicos y el pblico en general. El inters de los nazis en la psicoterapia se apoya en la preocupacin por la salud del pueblo. Consideraban que una psicoterapia y una psicologa arianizadas garantizaran la productividad y la lealtad del pueblo alemn, como as tambin permitiran determinar las cualidades internas y los imponderables del carcter ario. Desde el comienzode este proceso en 1933 los analistas alemanes mantuvieron permanentes consultas con Freud y su hija Anna. En ese momento ante la ley de arianizacin, Freud pensaba, al decir de Jones, que el simple cambio de personas en la direccin de la DPG no impedira de ningn modo que el gobierno terminara por proscribir el psicoanlisis en Alemania. As y todo noconsideraba prudente darles el pretexto que significara el abstenerse de realizar el cambio ordenado y fue as como consinti en que Eitington fuera reemplazado por Boehm en la Comisin. En enero Freud haba aconsejado a Eitington no abandonar su puesto hasta ltimo momento. Ms adelante, en 1937, en el curso de una reunin en su casa para discutir la integracin del Instituto de Gering, en la que Behm habla durante tres horas, Freud lo interrumpe y se retira diciendo. Basta! los judos han sufrido a causa de sus convicciones durante siglos. Ahora ha llegado el momento de que los colegas cristianos sufran por las suyas propias. No concedo ninguna importancia al hecho de que mi nombre se menciona en Alemania, siempre ycuando mi obra sea presentada all en una forma correcta.7 A pesar de todosesos esfuerzos, todo fue intil, los pocos psicoanalistas no judios que permanecieron en Alemania tomaron caminos alternativos; algunos se dedicaron a la prctica privada e intentaron cierta independencia del InstitutoGering, que promova una psicoterapia aria estandarizada. Como dijimos anteriormente el 11 de marzo de 1938 los nazis anexan Austria y a fines de mayo Freud emigra a Londres, despus de varias persecuciones a su familia

  • y allanamientos a su casa, gracias a la mediacin de la princesa Marie Bonaparte8. Todo este proceso deja huellas muy fuertes en la Institucin Psicoanaltica, lo ms fuerte es el cambio de su lengua madre (alemana por inglesa). Otras debern tener que ver con la culpa que produjo este proceso de integracin ya que en la biografa de Jones se sostiene la teora de la liquidacin. En Alemania es recien en la dcada del setenta que comienzanun trabajo de reconstruccin9. En 1950 Mller Braunchweing funda la la Deutsche Psychoanalistische Vereinigung (DVP) un desprendimiento de nueve miembros de la DPG. Pero solamente la primera fue reconocida por laIPA. La tradicional Sociedad Psicoanaltica Alemana, fundada por Abraham en 1910, no ser ms componente de la asociacin internacional y se afiliar a la Americam Academy of Psychoanalisis10. Tambien dej una huella muy dura en la identidad de los psicoanalistas alemanes, lo que Erikson (1959) caracteriz de autonomia versus vergenza y deuda. A los psicoanalistas alemanes no les est permitido la cmoda manera habitual de reafirmar las identidades profesionales propias a travs de la crtica terica a Freud (el padre fundador), pues esto es sentido como una identificacin con aquellos que lo rechazaron poltica y racialmente y persiguieron a l y a su pueblo, es ah la ambivalencia entre la ortodoxia servil y la formacin reactiva neurtica en contra de ella11. La pregunta es: Qu lo lleva a Freud a ese empecinamiento suicida, para sus colegas y para la institucin? Por qu los discpulos alemanes seguan consultndolo, obedecindolo a pesar de lo que padecan? En la reunin entre Behn y Freud en 1937, el primero trataba de disuadir a ste de continuar en Alemania, la respuesta fue clara: Defiendan mis ideas, no mi nombre, a costa de su sacrificio. Los catlicos como antes los Judos... no eran ni unos ni los otros eran Psicoanalistas, (el problema de los judos ya se haba superado en la Institucin) que no podan sostener sus ideas frente a la mquina de hacer pensar a todos igual, que era el nazismo. Freud es claro, las convicciones psicoanalticas deban defenderse igual que las religiosas. Ya en 1885, estando en la Salpetrie cuenta en una carta a su novia Martha algunas disputas que tena con sus colegas y dice: ya en la escuela me encontraba entre los opositores ms audaces. Siempre estaba all cuando se trataba de defender una idea muy extrema y por regla general dispuesto a pagar por ello. A menudo me pareci que soy heredero del espritu insumiso, y de toda la pasin con que mis antepasados defendansu templo, y que poda sacrificar mi vida por una gran causa.12 Cuando unainstitucin cientfica, poltica, etc., convierte la tarea de difundir sus ideas encausa, deviene en religin, en fe. Slo desde all se puede sacrificar la vida. Parafraseando a Goux podemos decir que podramos considerar religin a todo dipositivo significante que pueda sostenerse al punto de

  • justificar la guerra o dar la vida. En varias oportunidades Freud, se dirige asus discpulos hablando de la causa. Sobre todo en los momentos difciles. En una carta a Abraham (en la poca que se jugaba la defenestracin de Jung) le dice:...No le pido que se sacrifique por mi persona sino por la causa13. Este le contesta: ...Conservo siempre la sensacin que me es difcil hacer lo suficiente por nuestra causa, ya que la deuda que tengo contrada con Ud. es en algn aspecto demasiado grande. La respuesta de Abraham es brillante, seguramente haba estudiado, pero no lo recordaba el trabajo sobre la Negacin, se sacrifica por Freud y no por la causa. La respuesta de Freud fue acorde: ...acceder automticamente a un puesto de gran importancia...13 y lo nombra presidente de la DPG. Groddeck escribiFreud acerca de su incorporacin a la causa, que prefera una conversin con reservas, la respuesta de Freud es muy ilustrativa: ...observo que me insta Ud. a confirmarle que no es psicoanalista, que no pertenece al grupo dediscpulos sino que se le puede considerar como algo aparte e independiente.Evidentemente le hara un gran favor a Ud. si lo rechazara al lugar de Adler o Jung. Pero no puedo hacerlo, debo reclamarlo a Ud., debo insistir en que es un analista de primer orden que ha captado la esencia de la cuestin de una vez para todas. El hombre que ha reconocido que la resistencia y la transferencia son el eje del tratamiento, pertenecen irrevocablemente a la cacera desenfrenada14. En estas cartas Freud pone de manifiesto tres aspectos: implicacin total y absoluta; l defina la condicin de psicoanalista y pertenencia, y el discenso se pegaba con la expulsin. Esa pequea orda salvaje cacera desenfrenada (como en la intimidad llamaba a su organizacin), no pudo matar al padre, pero si existieron guerras fratricidas. Freud es el Creador, Dios, y en la iconoclasia, en la ley Mosaica, ste es infigurable y no hay correspondencia absoluta entre Dios y el padre. En tanto Dios es palabra, no existe identificacin a ste, slo se puede adorarlo y repetir sus palabras, slo queda la fe, que es la base de la obediencia. La estructura libidinosa, donde la palabra del lder conserva semejante fuerza, sustenta una transferencia donde el sujeto se coloca en unaposicin de goce masoquista (Psicologa de las Masas y Anlisis del Yo) y lared libidinal que sustentaba la causa tena que ver con la fe, la obediencia y los que osaban disentir eran excomulgados (Adler, Jung, Stekel, Rank, etc.). Otros siguieron caminos ms trgicos como Tausk y Silherer (suicidio) Y en Alemania, muchos, se integraron al Instituto Gering, siguiendo las consignas de su lder de defender la causa del psicoanlisis. Concuerdo con Gaux, que en su obra pstuma Freud, responde a la locura de Hitler, dicindole que el pueblo judo no era el elegido de Dios. Pero tambin quiero afirmar que es una intervencin analtica sobre el origen de la

  • Institucin del Psicoanlisis. Advierte que la posicin de Moiss como padrey legislador del pueblo judo, no coincide con la de Dios-Creador (iconoclasta) y que adems Moiss es un extranjero en su cultura. Es en ese lugar de out sider que l no se puede colocar frente a su organizacin, quedando sobre-implicado en la misma. No puede sacar a su pueblo psicoanaltico del cautiverio de los nazis. No mira a su alrededor esta comprometido con su causa, que no es ms que difundir sus descubrimientosy que estos no fueran deformados. La estructura de secta religiosa le permiteun control poltico omnipotente y seguramente adecuado, para una ciencia nueva y de carcter conjetural. El defenda la pureza de una ciencia nueva, los nazis la pureza de una raza. La obstinacin religiosa en Freud continu mientras estuvo en Viena. Despues de la invasin de los nazis y en la ltima reunin de la Junta de Gobierno de la Asociacin Psicoanaltica de sta Freud observ._todos estamos acostumbrados a la persecucin: por nuestra historia, nuestra tradicin y algunos por experiencia personal_ Inmediatamente despus de la destruccin del templo de Jerusalem por Tito, el rabino Jrchanawban Zakkai, pidi permiso para abrir la primera escuela sobre la Torah en Jabneh. A los pocos das saldr para un exilio, que ser la dispora del psicoanlisis. En los ltimos captulos del Moiss, Freud plantea una concepcin de la historia, donde afirma que los pueblos conservan como latente vivencias y acontecimientos primordiales acontecidos (Geschichte - Urgeschichte) y pueden retornar despus de muchos aos con la fuerza de un delirio psictico (Historich) o retorno e verdad. Reescrito en esa dispora el legado mayor para sus discpulos e instituciones, es este texto con este final sobre la repeticin histrica que no ha sido muy tomado en cuenta, quizs por ser freudianos?

    Alfredo CaeiroPsicoanalista