¿Fue el siglo XVI una catástrofe demográfica para México? Una respuesta basada en la demografía...

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Papeles de Población ISSN: 1405-7425 [email protected] Universidad Autónoma del Estado de México México McCaa, Robert ¿Fue el siglo XVI una catástrofe demográfica para México? Una respuesta basada en la demografía histórica no cuantitativa Papeles de Población, vol. 5, núm. 21, julio-septiembre, 1999, pp. 223-239 Universidad Autónoma del Estado de México Toluca, México Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=11202108 Cómo citar el artículo Número completo Más información del artículo Página de la revista en redalyc.org Sistema de Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

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Descenso demográfico

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  • Papeles de PoblacinISSN: [email protected] Autnoma del Estado de MxicoMxico

    McCaa, RobertFue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? Una respuesta basada en la demografa

    histrica no cuantitativaPapeles de Poblacin, vol. 5, nm. 21, julio-septiembre, 1999, pp. 223-239

    Universidad Autnoma del Estado de MxicoToluca, Mxico

    Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=11202108

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  • Fue el siglo XVI una catstrofedemogrfica para Mxico?Una respuesta basada en la

    demografa histricano cuantitativa*

    La guerra de nmeros es decir, el debate en torno al tamao de lapoblacin nativa al momento del contacto con europeos y el grado dedespoblacin que sigui contina en los aos noventa (Rabell, 1993:35), aunque sin la intensidad que tuvo cuando aparecieron primeramente losresultados de investigacin de los maximalistas Sherburne Cook y WoodrowBorah. El lado minimalista, fundado por ngel Rosenblat, ha crecido enaos recientes.1 A pesar de las persistentes crticas de ste (1967), ni

    Introduccin

    Robert McCaaDepartamento de HistoriaUniversidad de Minnesota

    ResumenEl debate en torno al tamao de laspoblaciones nativas de Amrica en el momentodel contacto con los europeos y el grado dedespoblacin que le sigui contina ennuestros das.El artculo analiza el tema desde la perspectivade la demografa histrica no cuantitativa,mediante un nuevo examen de las fuenteshistricas para el caso de Mxico. Laconclusin es que s hubo una catstrofedemogrfica ocasionada por epidemias laprimera ocurri en el Mxico central, en 1520,y fue de viruela asociadas al crueltratamiento a que se someti a la poblacinnativa y a la devastacin ecolgica queacompa a la colonizacin espaola.

    AbstractThe debate around the size of the nativepopulations from America in the moment ofthe contact with the europeans and thedepopulation degree that it continued himcontinues in our days.The article analyzes the topic from theperspective of the historical demography notquantitative, by means of a new exam of thehistorical sources for the case of Mexico. Theconclusion is that if there was a demographiccatastrophe caused by epidemics the firsthappened in the central Mexico in 1520 and itwas of smallpox associated to the crueltreatment that underwent to the nativepopulation and the ecological devastation thatit accompanied to the spanish colonization.

    * Traduccin de Carlos Aguirre.1He adoptado la nomenclatura latina de Hugh Thomas, maximalista y minimalista, por considerarlamenos agraviante que la vulgar terminologa anglosajona de high counters y low counters.

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    Cook, antes de su deceso, ni Borah a partir de 1966, cuando present un cortoensayo al Congreso de Americanistas de Mar del Plata, Argentina, decidieronconfrontar directamente a sus opositores (Borah, 1971). En dcadas subsecuentes,la imagen demogrfica de la poblacin nativa de Mxico durante el siglo XVI,ofrecida por Cook y Borah, fue criticada en casi todos los frentes: datos,mtodos, manipulaciones, interpretaciones y, por ltimo, en su tesis globalsobre el desastre demogrfico (Rosenblat, 1967; Sanders, 1976; Zambardino,1980; Henige, 1992 y Brooks, 1993). Con motivo del Quinto Centenario,Denevan (1992) ofreci un oportuno resumen del debate. Luego, en 1993, lahistoria de la primera epidemia de suelo virgen (virgin soil epidemic) que asolMxico, aqulla de 1520-1521 recibi un ataque frontal. El desastre fuereducido a ... un ataque leve de viruelas, tal como ocurra en la Europacontempornea, con algo de sufrimiento, algunas muertes y pocos efectosposteriores (Brooks, 1993).

    Por qu Rosenblat, Sanders y Florescano descartan laepidemia de viruela de 1520-1521?

    Esta tesis no es nueva. ngel Rosenblat, William T. Sanders, y ahora EnriqueFlorescano, tambin disminuyen la importancia de la epidemia. Como mostraren este ensayo, Rosenblat simplemente ignora las evidencias sobre la primeraepidemia de viruela, al igual que toda evidencia sobre los efectos de lasenfermedades contagiosas. Sanders (1976: 129) observa slo dos epidemiasmayores en el siglo XVI ninguna antes de 1540, pero no toma en cuentaninguna evidencia para 1520. Florescano (1994: 111) menciona ... terriblesmortandades causadas por las epidemias de 1545-1548, 1563-1564,1576-1581 y 1587-1588 ..., pero, al hacerlo, excluye todas las epidemias deviruela de su lista, al igual que cualquier gran contagio antes de 1540.Florescano parece suscribir la tesis de Sanders de que ninguna epidemia mayorocurri antes de 1540 (vase tambin Rabell, 1993: 24).

    Fue una sorpresa para m descubrir que Rosenblat, el ms terco defensor dela tesis minimalista, tambin descart el impacto de la viruela. Mi perplejidadcreci cuando repar que Sanders y Florescano excluyen la epidemia de viruelade 1520 de sus listas de epidemias mortales del siglo XVI. Si el virus delorthopox no contribuy al colapso demogrfico en Mxico central en 1520,

  • 225 julio/septiembre 1999

    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    entonces la interpretacin catastrfica de la historia poblacional del contactoest errada. Si el caso mejor documentado de una epidemia en suelo virgen nopuede sostenerse, entonces la extensin del paradigma hacia otros encuentrosiniciales entre europeos y nativos americanos se vuelve dbil y quiz hastainsostenible (Brooks, 1993: 28-29).

    Afortunadamente, un reexamen de este caso se facilita por la existencia denumerosas fuentes en espaol y nhuatl relatos de testigos, extensos registrostributarios para un gran nmero de pueblos nativos, numerosas investigacioneshechas por autoridades seculares y religiosas, y crnicas escritas porconquistadores y conquistados. Slo en dcadas recientes muchas de estasfuentes han sido sometidas a riguroso escrutinio por los estudiosos. Al iniciarmi revisin de las evidencias, segu los pasos sealados por los ms slidosensayos historiogrficos sobre la historia epidemiolgica de Mxico en el sigloXVI (Prem, 1991; Somolinos dArdois, 1982; Dobyns, 1993 y Mrquez, 1993).

    Las extremas implicaciones del argumento revisionista y su estrategia defavorecer la filologa antes que la cuantificacin, la narrativa antes que losnmeros (estrategia que, adems, permite ahorrar tiempo) son tan atractivas queyo mismo me sent seducido a explorar los temas de la demografa de laconquista, usando mtodos no cuantitativos. Una lectura contrastada de losrelatos publicados sobre la primera epidemia del viejo mundo que azot Mxicopodra ayudarnos a determinar si, en efecto, la viruela fue una epidemia menoro una catstrofe de proporciones mayores.

    Demografa histrica no cuantitativa

    Deliberadamente he escogido una aproximacin no cuantitativa, debido a quequienes no son cuantificadores muestran una persistente hostilidad hacia lasevidencias numricas. Por tanto, las cifras y los datos tributarios de Cook yBorah no han sido considerados en este ejercicio. Dado que la interpretacinminimalista se basa principalmente en relatos y no en nmeros, estudi unaamplia variedad de documentos del siglo XVI, incluyendo memorias, genealogasde gobernantes, reportes, crnicas e historias. Respondiendo al reclamo deRabell por una nueva lectura de las fuentes, reexamin aqullas usadas porBrooks descripciones de Hernando Corts, Francisco Lpez de Gmara,Bernal Daz del Castillo y los franciscanos Toribio de Motolina y Bernardinode Sahagn y todas las otras fuentes publicadas en espaol y nhuatl que crepertinente usar. Aqullos que conocen bien las evidencias no se sorprendern

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    con mis conclusiones (Crosby, 1967 y Motolina, 1979). Cualquier revisinexhaustiva de las ms autorizadas descripciones del siglo XVI mostrara que loscontemporneos teman que las poblaciones nativas se extinguieran debido a lasviolentas epidemias.

    Dado que el silencio es un adversario incmodo (la mayora de los minimalistasno explican por qu ignoran o desprecian la viruela de 1520), el anlisis quesigue se concentra principalmente en Rosenblat, aunque mis argumentos sirvenigualmente para contradecir a los historiadores que niegan la fuerza de laviruela, sin haber evaluado ellos mismos las evidencias.

    A diferencia de Brooks, Rosenblat, Sanders y otros, quienes minimizan laimportancia de la viruela, yo sostengo que la mortalidad generada por el virusen Nueva Espaa fue demogrficamente significativa y varias veces mayor queen Europa. Cualquier supuesta similitud con Europa o, en trminos generales,la idea de que el impacto de la viruela fue minsculo no est corroborada porla considerable masa de evidencias publicadas sobre este tema en los ltimos470 aos (al igual que Brooks, Rosenblat y los minimalistas en general, slo usofuentes publicadas, pero mi anlisis contrastado es ms exhaustivo que la deellos).

    Hasta donde he podido determinar, cualquier escritor del siglo XVI que serefera a las tendencias poblacionales de los nativos invariablemente concluaque un descenso precipitado estaba en marcha y que las epidemias representabanuna causa importante de tal descenso, cuando no la ms importante. Una extensadiscusin de estas evidencias se presenta en mi ensayo Spanish and NahuatlViews of Smallpox and Demographic Catastrophe in Mexico (McCaa, 1995).Aqu slo resumir las observaciones de Motolina, Sahagn, Pomar, MuozCamargo y Lpez Velasco.

    Hacia mediados del siglo XVI los historiadores y cronistas empezaron areflexionar acerca de la brutalidad de las diversas epidemias. En 1542 Motolinaescribi sobre tres grandes devastaciones que l busc hacer coincidir con losaos terminados en 1, siendo la ms importante la guerra, la pestilencia y lahambruna de 1521. Varios aos despus que su manuscrito fuera enviado aEspaa (y mientras su autor estaba en Guatemala), la gran devastacin de 1545hizo su aparicin, de modo que no sabemos cmo su numerologa habra tratadode dar cuenta de esta catastrfica epidemia (Motolina, 1979: 292-295).

    El 8 de noviembre de 1576, mientras se desarrollaba la tercera gran epidemiadel siglo, Sahagn, en una rara intervencin directa en su Historia general, ypara la cual no existe la correspondiente versin en nhuatl, se preguntaba si la

  • 227 julio/septiembre 1999

    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    presente plaga exterminara la poblacin nativa. Sahagn respondi a lapregunta en forma directa y vigorosa, sin dejar duda alguna de que el ataque deviruela de 1520 fue extremadamente letal, ms letal incluso que la guerra(muri casi infinita gente), pero que la ms mortfera de todas fue la epidemiade matlazhuatl de 1545, ... una pestilencia grandsima y universal, donde, entoda esta Nueva Espaa, muri la mayor parte de la gente que en ella haba.Slo en Tlatelolco Sahagn afirma haber enterrado 10 000 personas antes decaer enfermo l mismo. En el momento en que l escriba, en noviembre de1576, el nmero de muertes creca diariamente. De acuerdo con Sahagn,muchos moran de hambre, sin cuidados de ningn tipo y sin tener siquieraalguien que les ofreciera una jarra de agua, pues los auxilios caritativos sehaban extinguido. l tema que si el contagio continuaba por otros tres o cuatromeses ms, no iban a quedar nativos y la tierra volvera a llenarse de bestiassalvajes y monte silvestre. Sahagn razonaba que, por un lado, los espaoleseran muy pocos para colonizar la tierra y, por otro lado, los indios se estabanextinguiendo (Sahagn, 1938: 3: 355-361).

    Pomar, el historiador de la ciudad de Texcoco, tambin resalt tres grandesepidemias en el siglo XVI, las de 1520, 1545 y 1576, pero caracteriz la de 1520como la peor: ... haber hecho mayor dao que en las que despus ac han tenido,sin otras muchas pestilencias que han tenido de menos furia. Pomar report queTexcoco, que se rindi a Corts sin ofrecer resistencia, sola tener unos15 000 ciudadanos (vecinos), pero que no llegaba ni a 600 en la dcada de1580, cuando Pomar redact su Relacin. Muchos poblados sometidos mspequeos haban desaparecido por completo.

    Mi estimacin favorita es la que ofrece un razonamiento ms explcitamentecuantitativo: aquella de Muoz Camargo para la provincia de Tlaxcala, tambinescrita en la dcada de 1580, pero publicada hasta 1981:

    Yo digo que la primera [1520] devio de ser la mayor porque avia mas gente, y laseg[un]da [1545] fue ansi mismo muy grande por que la tierra estava muy entera,y esta ultima [1576] no fue tan grande como las dos prim[e]ras porque aun que muriomucha gente escapo mucha con los remedios que les hazian los espaoles yreligiosos ... (Muoz, 1981: 36).

    Las evidencias ofrecidas por una amplia variedad de fuentes escritas enespaol y nhuatl durante el siglo XVI apuntan a una sola conclusin: laepidemia de viruela de 1520 aparece como una de las tres peores crisisdemogrficas del siglo en la cuenca de Mxico. La tasa de mortalidad a causa

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    de la viruela y la hambruna en 1520-1521 fue probablemente menor que la delas epidemias de matlazhuatl de 1545-1546 y 1576-1577. No obstante, siaceptamos el juicio ofrecido por uno de los ms celebrados cronistas de la eracolonial, la epidemia de viruela de 1520 fue la ms grande catstrofe demogrficadel siglo para las poblaciones de habla nhuatl de Mxico central. Ms an, nilas descripciones espaolas ni las indgenas se limitan a los territorios circundantesa Tenochtitlan. Un estudio cuantitativo completo pueblo por pueblo de las cifraspoblacionales, laboriosamente extradas de las Relaciones geogrficas, recuentostributarios, censos y toda otra fuente disponible, revela la extensa amplitudgeogrfica de la despoblacin (Ciudad Real, 1976: 1: 70, 95; 2: 73; Aguilar,1977: 97; Len, 1933: 9; Daz del Castillo, 1960: 292 y Gerhard, 1986).

    Consenso sobre la catastrfica declinacin poblacional

    Los violentos desacuerdos respecto al tamao de la poblacin nativa antes delcontacto tienden a oscurecer el amplio consenso sobre la catstrofe demogrficaque el siglo XVI represent para las poblaciones nativas de Mxico central,sobre el hecho de que las epidemias, la explotacin y las disrupciones ecolgicasfueron los principales agentes. Todas las cifras poblacionales de comienzos dela era moderna contienen enigmas provenientes de errores de todo calibre. Aunas, para algunos historiadores las fuentes narrativas son fcilmente equvocas,las generalizaciones son difciles de extraer o, tal vez, simplemente los nmerostienen su propia fascinacin.

    El cuadro 1 ofrece un resumen de las cifras poblacionales en dos momentosdel siglo XVI, 1519 y 1595, de acuerdo con varios trabajos serios y ampliamentecitados de historiadores modernos. La ltima columna del cuadro muestra elporcentaje de disminucin poblacional a lo largo del siglo que se deduce de cadagrupo de cifras. En casos en que los autores ofrecen rangos y no cifras absolutas,ellos se incluyen en el cuadro. La grfica 1 est basada en la columna 3 y muestrael porcentaje de disminucin poblacional a lo largo del siglo deducido de lascifras de estos especialistas. Se incluye informacin sobre Mxico el reade medio milln de kilmetros cuadrados de Cook y Borah (excluyendoYucatn, Chiapas y el Norte), el Valle Central y los 128 pueblos de Kubleren Mxico central, Michoacn y Oaxaca. Las cifras para la poblacin total deMxico al momento del contacto varan desde 4.5 millones (Rosenblat,Aguirre Beltrn) hasta 30 millones (Cook y Borah). Este enorme rango reflejala escasez de datos, pero tambin un desacuerdo fundamental sobre cmo los

  • 229 julio/septiembre 1999

    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    pocos datos disponibles deben ser interpretados. Si se necesita precisar eltamao de la poblacin nativa en 1519, se requiere de una larga cadena desuposiciones y extrapolaciones. Aun as, algunas cifras resultan mejorfundamentadas que otras.

    CUADRO 1DESPOBLACIN: ESTIMADOS DE POBLACIN Y PORCENTAJES DE

    DESCENSO DEDUCIDOS PARA LOS NATIVOS MEXICANOS, 1519-1595

    Regin Autor Poblacin Poblacin Descenso1519 1595 %

    Mxico Rosenblat 4.5 3.5 22Aguirre Beltrn 4.5 2.0 56Zambardino 5-10 1.1-1.7 64-89Mendizbal 8.2 2.4 71Cook y Simpson 10.5 2.1-3.0 71-80Cook y Borah 18-30 1.4 78-95

    Regin simbitica deMxico central Sanders

    * 2.6-3.1 0.4 85-87

    Valle de Mxico Whitemore 1.3-2.7 0.1-04 69-96Gibson 1.5 0.2 87

    128 pueblos Kubler 0.2 0.1 55

    Nota: el nadir del desastre demogrfico se coloca usualmente en el siglo XVII. Escog 1595 como unpunto de inflexin (end-point), no porque crea que este sea el nadir de la poblacin nativa, sino parainterpolar, en lugar de extrapolar, cifras comparables para el mayor nmero de autores.

    Rosenblat, el lingista argentino, quien siempre despreci el apelativo dehistoriador demogrfico que otros estaran tentados de conferirle, caracterizasu trabajo slo como una vaga aproximacin, sin fanatismo, basado enverosimilitud o una razonable probabilidad, pero, no obstante, lo nicofactible. Vale la pena citar su razonamiento:

    El anlisis de esos trabajos [de Cook y Borah] me reafirma en mis clculosmoderados de 1935, que aspiran, sin fanatismo, a ser slo un ndice relativo, de vaga

    * No obstante, la cifra de Sanders es extrapolada de 1568.Fuentes: Mendizbal (1946, 3: 309-338), Kubler (1942, 22: 606-643), Rosenblat (1954, 1: 57-122),Zambrardino (1980, 11: 1-27), Whitemore (1992: 154), Borah y Cook (1960: 46-47 y 1963: 88), Cooky Simpson (1948: 38, 43, 45), Aguirre Beltrn (1972: 200-1, 212), Sanders (1976: 120) y Gibson(1964: 137-8).

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    aproximacin, lo cual me parece por lo dems lo nico factible. Me guiaba entoncesfundamentalmente, en cada paso hacia lo desconocido, el criterio de verosimilitud,o de razonable probabilidad, y no creo an hoy que puede caber otro (Rosenblat,1967: 81).

    Cook-Borah

    Whitemore

    Gibson

    Sanders

    Zambardino

    Cook-Simpson Kubler

    Mendizbal Rosenblat

    Des

    pobl

    amie

    nto

    (%)

    100

    75

    50

    25

    0

    Mnimo

    Mximo

    De nueve, ocho de los escenarios son de catstrofe

    GRFICA 1EL DESPOBLAMIENTO, 1519-1595: POR NUEVE AUTORIDADES

    Desafortunadamente, Rosenblat, a pesar de su perseverancia, fracas en suintento de concretar este encomiable espritu de investigacin y, ms importantean, no logr tomar en cuenta la masa de valiosas descripciones espaolascontemporneas, ni siquiera alguna de las crnicas indgenas o mestizas.Rosenblat, a lo largo de tres dcadas de publicaciones sobre esta materia(1935-1967), prcticamente no modific ninguna de sus cifras y su ampliamentecitado trabajo tampoco fue objeto siquiera de un modesto escrutinio acadmico.Para Mxico, Rosenblat escogi cifras compiladas antes de 1570 por el cronistareal Lpez de Velasco, particularmente aqullas de pueblos individuales. Para1492, Rosenblat dirige al lector a un apndice de fuentes, pero, luego de undetenido examen, di con la sorpresa de no encontrar ninguna para Mxico antes

  • 231 julio/septiembre 1999

    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    de 1570. En su lugar, critica las cifras de mexicanistas como Mendizbal yKubler (Rosenblat, 1954, 88, 239-240 y Lpez de Velasco, 1870: 409-539).

    Rosenblat sugiere que su patrn de cambio est bsicamente de acuerdo conel de Kubler, quien escribe acerca de una alarmante mortalidad en el sigloXVI (Kubler, 1942: 606, 621), pero esto no es cierto. Su vaca retrica continadespistando incluso a historiadores demogrficos que trabajan con mtodoscuantitativos (Rabell, 1993: 20). El cuadro 1 muestra claramente que Rosenblates el nico que postula una disminucin en la poblacin nativa de menos de 25por ciento. Su posicin no presentara problema alguno si tuviera un slidofundamento. Su simpata por las cifras de Kubler, que sugieren una cada de 50por ciento a lo largo del siglo, no se extiende hacia la aceptacin del patrn dedeclinacin delineado por el trabajo de Kubler. Del mismo modo, Rosenblatacepta las cifras de Lpez de Velasco, pero ignora el relato que acompaabalas cifras del cronista! Lpez de Velasco, despus de analizar una vastaseleccin de informaciones compiladas por la burocracia imperial, concluyeque para la totalidad del reino, ... al principio los naturales fueron muchos masen numero de los que despues ha habido, porque en muchas provincias, dondehaba gran multitud dellos, han llegado casi a se acabar del todo (Lpez deVelasco, 1870: 14). Para otras localidades, el autor muestra una recuperacinpoblacional, pero es claro que, a lo largo de su texto, Lpez de Velasco semuestra ms favorable a la declinacin que a la recuperacin.

    Rosenblat critica la escuela catastrfica por no tomar en cuenta elpotencial de recuperacin de la poblacin nativa (Rosenblat, 1967: 8-9). Suobjecin permaneci desatendida hasta hace muy poco, cuando ThomasWhitmore public una serie de comprensivas y sofisticadas simulacionesepidemiolgicas. Algunos descartarn este trabajo como simple ficcin histricade tono cuantitativo, pero las simulaciones de Whitmore ofrecen una respuestaparcial a la pregunta de Rosenblat acerca del rol de la recuperacin demogrficaen los periodos entre dos epidemias consecutivas. De las simulaciones deWhitmore, basadas en las tasas de morbilidad y mortalidad obtenidas delescrutinio de los datos histricos a escala mundial, se desprende que los nivelesposibles de mortalidad epidmica probablemente sobrepasaban el potencialhomeosttico de la poblacin indgena incluso sin tomar en cuenta lasmuertes debidas a la guerra o a la disrupcin social y ecolgica. Lassimulaciones revelan, asimismo, aquello que Rosenblat no apreci: la devastacinproducida por las enfermedades epidmicas. Rosenblat razonaba as:

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    CIEAP/UAEMPapeles de POBLACIN No. 21

    Realmente, si en mi estudio llegu a cifras moderadas o bajas para la poblacin de1492, no fue porque yo me lo propusiera as. Los datos de que dispona sobre lapoca de la Conquista no me llevaban a ms, a no ser que supusiera unas enormesy horrendas matanzas, muy del gusto de una imaginacin macabra pero que meparecan inverosmiles con las tcnicas de exterminio del siglo XVI (Rosenblat,1967: 8-9).

    Si Rosenblat hubiera prestado mayor atencin a los textos de Lpez deVelasco, Lpez de Gmara y otros cronistas tempranos, en lugar de tcnicasde exterminio habra considerado un mecanismo sociobiolgico ms poderoso:las enfermedades epidmicas.

    Mi estudio de las fuentes de Rosenblat para Mxico y de un nmeroconsiderable de otros textos revisados aqu y en mi artculo Spanish andNahuatl Views anteriormente citado, me fuerzan a rechazar sus vagasaproximaciones respecto a las poblaciones antes del contacto y, ms importantean, a rechazar el patrn de declinacin demogrfica sugerido por sus cifras.Los lectores atentos de los relatos tempranos en espaol y nhuatl puedenadvertir una catstrofe demogrfica; en realidad, una sucesin de catstrofes deinsostenible magnitud. Si se requieren nmeros para descifrar este asunto,dichos nmeros deben coincidir con los relatos.

    Los argumentos de los nativos registrados en las Relaciones geogrficas enel ltimo cuarto del siglo XVI confirman esta imagen. En Michoacn, de 23poblados en los cuales se mencionan las causas de la catstrofe demogrfica, 20culpan a las pestilencias y enfermedades. Los crudos nmeros que acompaanestos textos sugieren declinaciones de entre 60 y 80 por ciento. La guerra no esmencionada ni una sola vez como causa probable, pero el exceso de trabajo semenciona en muchos casos, al igual que la intervencin divina y otros factoresmenos verosmiles (Percheron, 1988: 142, 146, 149, 151-152).

    Mientras los historiadores continan insistiendo en la novedad de la tesis deque las epidemias fueron la mayor causa de la despoblacin, los relatos del sigloXVI ofrecen claro testimonio de la primaca de las epidemias, al igual que varioscronistas e historiadores posteriores. Lpez de Velasco (1870: 14) atribuye ladeclinacin a la guerra, la opresin y las enfermedades nunca vistas en aquellaspartes como fueron las viruelas que les pegaron los espaoles. Lpez deGmara (1826: 1: 278) enfatiza igualmente la matanza no a fierro sino dedolencia. Miguel Othn de Mendizbal, en un ensayo publicado originalmenteen 1939, argument persuasivamente en contra de la importancia de la mortalidadproducida por la guerra (debemos concluir que la mortalidad militar juega un

  • 233 julio/septiembre 1999

    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    papel poco importante en el decrecimiento colonial de la poblacin indgena),y en su lugar, luego de revisar un extenso nmero de Relaciones geogrficas delsiglo XVI, cit la siguiente explicacin contempornea como pestilenciasgrandes que a avido en diversos tiempos y aos (1946, 319-320).

    En el polo opuesto a Rosenblat se ubican las cifras de Cook y Borah, peroellos no estn solos. Clavijero, quien escribi hacia fines del siglo XVIII,sostuvo que todos los cronistas estaban de acuerdo en que la poblacin antes dela conquista fue grande, pero que ninguno se atrevera a arriesgar un guarismopara el nmero real. l sugera 30 millones como una cifra probable, pero almismo tiempo sostuvo (como Cook y Borah lo haran casi dos siglos ms tarde)que cualquier cifra est sujeta a un amplio margen de error (Clavijero, 1987: 2:338-339). Las cifras de Cook y Borah, sin embargo, son de un orden de magnitudmayor que la generalidad de las que las precedieron, y han provocado la mayorcontroversia y escepticismo.

    Los empiricistas de Berkeley buscaron trasladar el debate del terreno de lascreencias al terreno de las evidencias, usando documentacin de los tributospagados por los pueblos conquistados. La larga cadena de suposiciones yfactores de conversin que se necesitaba para deducir el nmero de pagadoresde tributos a partir de las listas de tributos pagados, y luego deducir laspoblaciones totales, han convencido a muchos estudiosos del tema que elejercicio es poco confiable. A pesar de todo, los escritos de Cook y Borah sonmenos dogmticos de lo que sus crticos nos han hecho pensar. Hace muchosaos Borah anot lo siguiente:

    Cuanto mayor es el nmero de agentes y agencias que participan de la recolecciny procesamiento de materiales, ms amplio ser el margen de error ... Para aquellas[estimaciones poblacionales] del primer siglo, parece plausible que a lo ms quepodemos aspirar es a estimaciones del orden de magnitud (Cede y Barah, 1976: 30-31).

    La cifra de 25.2 millones de Cook y Borah para la poblacin de Mxico almomento del contacto es ampliamente citada, pero pocos mencionan su rangode cifras: de 18 a 30 millones (Cook y Borah, 1963: 88; 1971, 115). Sus crticosRosenblat, Sanders, Zambardino y otros podran replicar que, incluso, esterango es una exageracin descabellada. Pero lo que yo encuentro excepcionalen el cuadro 1 es la correspondencia entre los diferentes escenarios de desastredemogrfico, los de Cook y Borah y los de sus crticos, con excepcin deRosenblat.

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    El problema es ilustrado por el libro de Hugh Thomas The Conquest ofMexico (1993: 609-614). Este texto, fruto de una prodigiosa investigacin, lidiavigorosamente con las cifras de la poblacin nativa de Mxico en 1520.Thomas, para ser justos, se queda dentro de las reglas historiogrficasconvencionales y se enfrenta a todas las estimaciones inspiradas acerca deltamao poblacional. Thomas hace un recuento de la dura confrontacin entrelos maximalistas, la Escuela de California, y los minimalistas como Rosenblat,Zambardino, Kubler, Sanders y otros.

    Yo propongo que abandonemos las viejas reglas sobre cmo hacer la mejorestimacin del tamao poblacional y que concentremos nuestra atencin, msbien, en la pregunta acerca de la magnitud del descenso poblacional. Que la tasade descenso sea 1:2 (un descenso de 50 por ciento) o 1:25 (96 por ciento) esimportante, pero lamentablemente la calidad de la informacin cuantitativa nonos permite con frecuencia tal precisin.

    Dejando de lado a Rosenblat, cuando se trata de discutir el grado dedeclinacin, todas los especialistas en el estudio de los efectos demogrficos dela conquista son maximalistas. Todos coinciden en que la poblacin nativadeclin al menos en 50 por ciento a lo largo del siglo XVI, sin duda unacatstrofe demogrfica cualquiera que sea el porcentaje exacto. La furia de laguerra de nmeros no nos ha permitido ver la existencia de una aceptabletregua sostenida por las narraciones.

    Para reas ms pequeas, los estimados poblacionales requieren menosextrapolacin y el rango de incertidumbre, por tanto, tambin se reduce. Todoslos investigadores del tema que trabajan con fuentes primarias Mendizbal,Kubler, Rosenblat, Gerhard, Gibson, Cook, Borah, Percheron, Sanders yotros alientan la investigacin a nivel local. As, la estimacin de Sanderspara la regin simbitica de Mxico central est basada en un muestreo deexcavaciones arqueolgicas y listas tributarias a lo largo de un rea de slo20 000 kilmetros cuadrados (Sanders, 1976: 120, 130).

    Dado que Sanders no considera que la epidemia de 1520 sea demogrficamentesignificativa (ver Sanders 1976: 129, cuadro 4.4), sus cifras para 1519 deberanser infladas por algn factor (1.1, 1.2, 1.3, ..?) para tomar en cuenta ladevastacin producida por la viruela y documentada por fuentes nahuas yespaolas. Gibson y Kubler tambin compilan cifras para un grupo selecto depoblados con informacin disponible para dos o tres puntos a lo largo del sigloXVI. Mendizbal ofreci un retrato detallado de algunos pueblos en Michoacny su cifra para Mxico est basada en gruesas extrapolaciones de esos datos,

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    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    los cuales luego us para ajustar los clculos del acadmico italiano DinoCamavitto. Cuando el anlisis se hace an ms fino, aparece la misma figuramacabra: un colapso demogrfico de 50-80 por ciento, aun cuando los pobladosque desaparecieron por completo son excluidos del anlisis (mtodo que usdeliberadamente Kubler).

    Conclusin

    Considero que una mayor atencin a los relatos contemporneos conducir a unconsenso respecto a la escala, causas y consecuencias del desastre demogrficoque azot Mxico en el siglo XVI. Existe un acuerdo sobre el hecho de que unacatstrofe demogrfica ocurri y que las enfermedades epidmicas fueron unfactor determinante para que la mortalidad se desatara, empezando, en Mxicocentral, con la viruela de 1520. Pero el rol de las enfermedades no puede serentendido sin tener en cuenta el cruel tratamiento a que se someti a la masa dela poblacin nativa (migracin forzada, esclavitud, demandas laborales abusivasy tributos exorbitantes) y la devastacin ecolgica que acompaa la colonizacinespaola. La mortandad asociada con la guerra de conquista fue claramente unfactor secundario, excepto en algunos casos aislados, como la devastacin deCholula o la destruccin de Tenochtitlan.

    Un examen contrastado y no dogmtico de una amplia variedad de fuentesprimarias para la epidemia de 1520 deja escasa duda de que la viruela devastla cuenca central de Mxico, causando una enorme mortandad. La epidemia secompara con los ms letales desastres que los anales indgenas solan registrar.No tenemos medios para saber si la fraccin de muertes por la viruela fue de undcimo o la mitad, pero de mi lectura de los textos discutidos aqu se desprendeque la fraccin real debe caer dentro de estos dos extremos, quiz muy cerca delpunto medio.

    La posicin de los iconoclastas respecto al tamao de la poblacin previa alcontacto ha sido recientemente reclamada por David Henige:

    A pesar de tres siglos de estimacin espordica, que culminaron en 50 aos deintensa investigacin, todava no es posible postular que cualquier nmero, ocualquier rango de nmeros, ms all de cierto mnimo irreducible, essignificativamente ms plausible que cualquier otro nmero o rango de nmeros(Henige, 1992: 22).

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    Los nmeros son todava controversiales, pero los relatos son incontestables.Si dejamos de lado la discusin alrededor de los nmeros, aparece un amplioacuerdo en los relatos espaoles y nahuas y en los patrones de declinacindibujados por los historiadores. Despus de casi cinco siglos de escritura sobreel tema, existe un consenso de que una catstrofe demogrfica ocurri en el sigloXVI en Mxico y que empez en 1520 con la primera epidemia de viruela.

    Para los historiadores que trabajan con fuentes narrativas, existe una granbiblioteca de textos publicados en espaol y nhuatl acerca de las calamidadesdemogrficas de la conquista y la colonizacin temprana. Para los historiadoresapegados a la cuantificacin, los expertos sealan niveles generales de destruccindemogrfica para Mxico central a lo largo del siglo XVI por encima de 50 porciento, posiblemente arriba de 75 por ciento, e incluso de 90 por ciento enalgunas regiones extensas, como las tierras bajas (Mrquez, 1993: 37-38, 51, 53,56). Los ruidosos debates provocados por las cifras de los maximalistas, comoaquellas de Cook y Borah, oscurecen con frecuencia las similitudes en losescenarios de colapso demogrfico entre los maximalistas y los minimalistas,dejando de lado a Rosenblat. Incluso Aguirre Beltrn (1972: 200-201, 212),quien acepta la cifra de Rosenblat para 1519, descarta sus nmeros paraperiodos posteriores en el siglo XVII, rechazando por tanto los patrones dedescenso poblacional de Rosenblat. Segn mi lectura de las evidencias, laposicin revisionista es insostenible porque niega la devastacin de la primeraepidemia que azot Mxico: la viruela de 1520.

    Reducir ms la incertidumbre historiogrfica requerir el escrutinio adicionaly cuidadoso de evidencias archivsticas y arqueolgicas, tareas que en aosrecientes pocos parecen estar inclinados a realizar (Smith et al., 1994). Mientrastanto, encuentro convincente el testimonio del oidor licenciado FranciscoCeynos, quien resume la opinin de muchos observadores ilustrados del sigloXVI. Ceynos, luego de cinco aos como fiscal en el Real Consejo de Indias,lleg a Mxico en 1530 como miembro de la Real Audiencia de la Ciudad deMxico. Oidor por ms de 30 aos, luch contra la prctica generalizada deesclavizar a los indios y contra las extremas demandas laborales y tributariascomunes en esa poca. El 1 de marzo de 1565 complet una extensarecomendacin acerca de las polticas de colonizacin apropiadas para lasregiones recin conquistadas. Como prembulo, hizo una breve revisin de latragedia demogrfica de la colonizacin espaola en Mxico (Ceynos, 1858: 2:237).

  • 237 julio/septiembre 1999

    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

    ... y es cierto que del dia que D. Hernando Corts, marques del Valle, entr en estatierra, en los siete aos, poco mas o menos, que la conquisto e goberno, padecieronlos naturales grandes muertes, y se les hicieron grandes malos tratamientos, robosy fuerzas, aprovechandose de sus personas y haciendas, sin orden, peso ni medida;... disminuyose la gente en gran cantidad, asi por los excesivos tributos, y malostratamientos, como por enfermedades y viruelas, de manera que en este tiempo faltmuy grande y notable parte de la gente, y en especial en tierras calientes.

    No sabemos qu nmero, porcentaje o tasa tena en mente el juez Ceynoscuando habl de grandes muertes, gran cantidad o falt muy grande ynotable parte de la gente, pero su relato tiene un tono de veracidad. Ceynosreport un desastre a una escala inimaginable para los contemporneos europeos.Si cinco siglos ms tarde esta tesis se mantiene alejada de una probabilidadrazonable para ciertos historiadores, el nmero de stos tambin disminuyeconforme la evidencia de una catstrofe demogrfica se acumula.

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    Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... Fue el siglo XVI una catstrofe demogrfica para Mxico? ... /R. McCaa

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