Ganemosle Al Cansancio

1
Unido al Señor recibirás todo el cuidado que necesitas para ser como uva que produce buen vino. Ganemosle al cansancio El cansancio puede ser emocional, físico o mental. El cansancio es enemigo del éxito, así que debemos renovar nuestras fuerzas para poder terminar lo que empezamos. Una carrera no es nada si no hay corredores. Pero en ocasiones, no queremos seguir, pues hemos tenido decepciones, tropiezos y nos cansamos. A menudo, empieza con un cansancio emocional o mental y se convierte en un cansancio físico. Todos nos cansamos. Sólo el que no corre, no se cansa. Es importante que terminemos lo que empezamos, pues el que no termina no tiene premio; no existe un premio de consolación. No importa cuánto nos cansemos en la vida, si nos agotamos al máximo, pero no terminamos, no obtenemos el premio. Debemos terminar para ganar! Si a un deportista se le acaba el aire y para de repente, se acalambra. Parar no funciona para el cansancio físico, y tampoco para el emocional y mental. No podemos poner pausa a nuestra vida. No paremos, si no que busquemos el segundo aire. Esto no soluciona el problema, pero podremos continuar hasta finalizar. La Palabra de Dios nos inspira a un segundo nivel para terminar. En ocasiones, nos cansamos de hacer el bien, y bajamos el paso, pero recordemos que los esfuerzos extraordinarios nos llevan a premios extraordinarios. Necesitamos un antídoto para ese cansancio, y es seguir adelante. Algunos optan por cambiar de carrera, pero esa no es la solución, pues no terminan ni una ni la otra, y no obtienen ningún premio, solamente una gran frustración y cansancio. Hebreos 12:3 Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar. Recuerde que su éxito puede bendecir a otros; entonces viene una motivación para seguir adelante; le garantizo que Dios le puede dar su segundo aire. Correr con Jesús es más fácil. Un segundo esfuerzo es la oportunidad para alcanzar la meta. El éxito de Jesús al terminar su misión, nos dio una oportunidad para que lo tengamos en nuestro corazón. Lo que tú alcances va a bendecir a la gente a tu alrededor.

description

Sermon pastoral

Transcript of Ganemosle Al Cansancio

Page 1: Ganemosle Al Cansancio

Unido al Señor recibirás todo el cuidado que necesitas para ser como uva que produce buen vino.

Ganemosle al cansancioEl cansancio puede ser emocional, físico o mental. El cansancio es enemigo del éxito, así que debemos renovar nuestras fuerzas para poder terminar lo que empezamos. Una carrera no es nada si no hay corredores. Pero en ocasiones, no queremos seguir, pues hemos tenido decepciones, tropiezos y nos cansamos. A menudo, empieza con un cansancio emocional o mental y se convierte en un cansancio físico.

Todos nos cansamos. Sólo el que no corre, no se cansa. Es importante que terminemos lo que empezamos, pues  el que no termina no tiene premio; no existe un premio de consolación. No importa cuánto nos cansemos en la vida, si nos agotamos al máximo, pero no terminamos, no obtenemos el premio. Debemos terminar para ganar!

Si a un deportista se le acaba el aire y para de repente, se acalambra.

Parar no funciona para el cansancio físico, y tampoco para el emocional y mental. No podemos poner pausa a nuestra vida. No paremos, si no que busquemos el segundo aire. Esto no soluciona el problema, pero podremos continuar hasta finalizar.

La Palabra de Dios nos inspira a un segundo nivel para terminar. En ocasiones, nos cansamos de hacer el bien, y bajamos el paso, pero recordemos que los esfuerzos extraordinarios nos llevan a premios extraordinarios. Necesitamos un antídoto para ese cansancio, y es seguir adelante. Algunos optan por cambiar de carrera, pero  esa no es la solución, pues no terminan ni una ni la otra, y no obtienen ningún premio, solamente una gran frustración y cansancio.

Hebreos 12:3

Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.

Recuerde que su éxito puede bendecir a otros; entonces viene una motivación para seguir adelante; le garantizo que Dios le puede dar su segundo aire. Correr con Jesús es más fácil. Un segundo esfuerzo es la oportunidad para alcanzar la meta. El éxito de Jesús al terminar su misión, nos dio una oportunidad para que lo tengamos en nuestro corazón. Lo que tú alcances va a bendecir a la gente a tu alrededor.