Género lírico: Épocas y Autores

INTRODUCCIÓN

El género lírico es aquel que se emplea para expresar sentimientos y emociones.

El tema por excelencia de este género es el amor, aunque varía el modo en que se trata según la época.

Otros temas son Dios, la muerte o el paso tiempo, entre otros.

Edad Media. Contextualización

Denominamos Edad Media al periodo histórico compren-dido entre la caída del Imperio Romano de Occidente (si-glo V) hasta el descubrimiento de América (siglo XV).

Es un periodo histórico caracterizado por la inestabilidad económica, social y política (guerras, invasiones, instau-ración del sistema feudal, pestes, etc.)

La sociedad feudal estaba formada por grupos sociales fi-jos: nobleza, clero y tercer estado.

El tercer estado, formado mayoritariamente por campesi-nos, era el más numeroso.

https://www.youtube.com/watch?v=4yw7HwFffJs

Edad Media. Conceptos de lírica

Diferenciamos dos tipos de literatura: la popular, que se ocu-paba fundamentalmente de asuntos de la vida cotidiana; y la culta, centrada en temas didácticos, religiosos o morales.

Asimismo, vamos a hablar de dos escuelas: el Mester de jugla-ría (trovadores y juglares) y el Mester de Clerecía (clérigos).

Los trovadores solían pertenecer a la baja nobleza y eran, fun-damentalmente, compositores de obras. Componían en len-guas vernáculas y sus temas habituales eran el amor cortés y el espíritu caballeresco de los héroes de las cruzadas. Si con-seguían una cierta fama contrataban a juglares para que re-presentaran sus obras. El término juglar, por su parte, hacía re-ferencia a los cantores, a aquellos que recitaban obras líricas. No obstante, también se aplicaba a saltimbanquis, equilibris-tas, lanzadores de cuchillos, etc.

Edad Media. Lírica popular

La poesía tradicional o popular medieval no tiene, en general, autor reconocido. Suelen ser poemas creados dentro de la tradición y di-fundidos oralmente acompañados de música (juglares). El público la hacía suya y la transmitía oralmente (muchas versiones).

Los textos más significativos eran las jarchas (pequeños poemas populares escritos en mozárabe y puestos en boca de una joven que habla de sus amores a sus hermanas o a su madre); y las cantigas de amigo (poemas en gallego-portugués en los que una muchacha se queja de la ausencia de su amado, al que llama amigo).

Los juglares recitaban, además, poemas épicos cuya finalidad era entretener al público y que narraba las hazañas de un héroe. La obra más importante de este Mester de juglaría fue el Cantar de Mio Cid. Hacia finales del siglo XIII estas composiciones, denominadas “cantares de gesta” se fragmentaron y dieron lugar a los romances épicos recogidos en el Romancero.

Edad Media. Lírica culta

Compuesta por el Mester de clerecía. Obras compuestas por escrito, para ser leídas, no recitadas. Versificación culta y regular. Utilizan la cuaderna via. Usan una lengua culta, muy vinculada al latín y abundancia de

figuras retóricas. Poemas narrativos con finalidad didáctica. Sus principales representantes son Juan Ruiz, arcipreste de

Hita (Libro del buen amor), y Gonzalo de Berceo (El conde Lucanor).

Renacimiento. Contextualización

Una serie de sucesos dan lugar al cambio de época: des-cubrimiento de América, conquista de territorios musul-manes, centralización del poder, etc.

Se inicia un proceso de unificación del país. Castilla, por su peso y su número de habitantes, tiene una

posición privilegiada dentro del nuevo reino.

Renacimiento. Lírica

A nivel literario, se produce el retorno al estilo y a los te-mas clásicos. Grecia y Roma sirven como modelo.

Se busca la claridad en las obras, el equilibrio, y se recu-peran formas como la égloga y la elegía.

Temas y tópicos: naturaleza, amor, paso del tiempo

Renacimiento. Tópicos

Tópicos literarios más comunes:

Carpe diem (“Goza del día presente”) supone la defensa del vivir el día, disfrutar del tiempo que dure la belleza, la juventud y la salud porque, inevitablemente, el paso del tiempo acabará con ellas. Garci-laso a menudo lo usa en sus poemas.

Cogito, virgo, rosas (“coge, doncella, las rosas”), estrechamente re-lacionado con el anterior, anima a disfrutar del día, pero enfocado a la mujer. Lo veremos, ya en el Barroco, en la poesía de Góngora.

“Beatus ille...” (“feliz aquel que alejado de los negocios...”), ensalza la vida sencilla, retirada, normalmente en contacto con la naturaleza.

Locus amoenus (“lugar delicioso”), hace referencia a un lugar ideal en el que, normalmente, se hallan tres elementos: prado, agua y sombra de árboles, que invita al descanso y a la conversación. Lo encontramos en las Églogas de Garcilaso.

Renacimiento. Autores y obras

Destacan, durante el Renacimiento, las figuras de Garci-laso de la Vega, San Juan de la Cruz, Fray Luis de León o Santa Teresa de Jesús.

Es en este momento cuando aparece, como estudiaremos en el apartado de prosa, El lazarillo de Tormes (https://www.youtube.com/watch?v=G2-bPiRrs2M).

Barroco. Contextualización El siglo XVII en España fue un periodo de profunda deca-

dencia social, política, militar y económica, lo que supuso que el Imperio español pasara a ser una potencia de se-gundo rango dentro de Europa.

A nivel político, los denominados “Austrias menores” deja-ron el gobierno de la nación en manos de ministros de confianza o validos (Hombre que, por tener la confianza de un alto personaje, ejercía el poder de este). En política exterior, se pasó de una postura pacifista a inicios de siglo a involucrarse de lleno en la Guerra de los Treinta años, en la que España sufrió grandes pérdidas militares. Asi-mismo, a finales de siglo, Francia aprovechó la debilidad de España para ejercer una presión que acabó con la pérdida de buena parte de sus posesiones en Europa.

A nivel interno, la expulsión de los moriscos supuso gran-des pérdidas económicas, así como una fuerte crisis de-mográfica, y favoreció la generalización de la corrupción administrativa. Al mismo tiempo, se produjeron subleva-ciones debido a la política centralista del conde-duque de Olivares.

El hambre, la guerra y las pestes sólo sirven para empeo-rar la crisis demográfica provocada por la expulsión de los moriscos.

La nobleza y el clero mantienen sus privilegios y tierras. Son los campesinos los que sufren más profundamente la crisis económica. Muchos campesinos emigraron a las ciudades en busca de oportunidades, aunque en gran par-te de los casos acabaron ejerciendo la mendicidad o la de-lincuencia.

Barroco. Contexto cultural

Pensamiento racionalista (la razón como principal fuente de conocimiento): Descartes, Galileo, etc.

En España el racionalismo no tuvo una gran influencia. Actitud de escepticismo hacia la naturaleza humana, visión pe-

simista del mundo (en contraste con la optimista del raciona-lismo).

Baltasar Gracián defiende que las únicas armas para combatir el estado de crisis y ruina de la sociedad son el individualismo y la desconfianza hacia los demás.

Barroco. Literatura

El Barroco está considerado, junto al Renacimiento, el Si-glo de oro de la literatura española debido al importante desarrollo del arte y de la cultura que se produjo.

Época más fecunda y gloriosa de la literatura española. Abundante producción poética. Lenguaje artificioso, complejo, difícil de entender, lo que

contrasta con la sencillez del periodo anterior. Se mantienen las métricas del Renacimiento (gran uso del

soneto), aunque se resucita el romance y los versos de arte menor.

Diferenciamos dos grandes corrientes: conceptismo y cul-teranismo.

Barroco. Conceptismo

Se basa en el concepto, es decir, se prestaba especial in-terés al significado de las palabras y a las relaciones entre ellas.

Empleaban recursos como la metáfora, la alegoría, la antí-tesis, etc. para establecer relaciones entre conceptos.

Comunicar ideas del modo más conciso posible. Juegos de palabras, ironía, paradojas, uso de palabras

polisémicas, etc. Francisco de Quevedo constituye su figura más represen-

tativa.

Barroco. Culteranismo

Derivada del culteranismo. Se pone más énfasis en la forma y en la estética que en el

contenido. Se adelantan al concepto del “arte por el arte”. Se caracteriza por las innovaciones y aportaciones lin-

güísticas, neologismos, cultismos y gusto latinizante. Abundantes recursos literarios y artificios. Temas mitológicos y evasión del mundo contemporáneo. Su mayor representante es Luis de Góngora.

Neoclasicismo. Contextualización

Encuadrado en el siglo XVII, se produce en una época de grandes cambios y revoluciones.

Denominado “Siglo de las luces”, el lema de este momento será “todo por el pueblo, pero sin el pueblo”.

Se desarrolla la Ilustración, movimiento que defiende la razón como fundamento del saber.

Comienza la dinastía de los Borbones, procedentes de Fran-cia, que tratan de que la cultura de la Ilustración Francesa se introduzca en la vida del país. Es, por tanto, un movimiento de influencia francesa.

El clero y la nobleza pierden influencia. Búsqueda constante del saber.

Neoclasicismo. Literatura

Vuelta a los modelos clásicos (Grecia y Roma). En poesía se busca la armonía, la belleza y el equilibrio

estructural. Objetivo didáctico. Es una poesía de ideas, filosófica y social. Distinguimos dos tendencias: la poesía social y la fábula

didáctica.

Romanticismo. Contextualización

su hija Isabel es demasiado joven para reinar. Isabel II ocupa el trono tras su mayoría de edad. Se produce la primera Guerra Carlista entre los absolutistas,

partidarios de Carlos, hermano de Fernando VII; y los liberales, que defienden la legitimidad del trono de Isabel.

Independencia de gran parte de los países hispanoamericano-s.ula la constitución y restablece el absolutismo.

Regencia de María Cristina a la muerte de éste debido a que su hija Isabel es demasiado joven para reinar.

Isabel II ocupa el trono tras su mayoría de edad. Se produce la primera Guerra Carlista entre los absolutistas,

partidarios de Carlos, hermano de Fernando VII; y los liberales, que defienden la legitimidad del trono de Isabel.

Independencia de gran parte de los países hispanoamericanos. Auge de la burguesía. Crece la industria y se producen grandes

tensiones políticas y sociales.

Romanticismo. Literatura

Se opone al movimiento anterior. Se caracteriza por el irracionalismo, subjetivismo, individualis-

mo y rechazo de la realidad. Los sentimientos prevalecen por encima de la razón.

Exaltación del yo, individualismo. Los propios sentimientos, emociones y pasiones se anteponen a lo demás.

El amor es el sentimiento máximo, ya sea el amor pasional o aquel caracterizado por la melancolía.

Rebeldía y libertad. Se busca la evasión, ya sea espacial (bús-queda de lugares diferentes a la vulgaridad de lo cotidiano), en el tiempo (épocas pasadas) o en el sueño (el romántico en-cuentra una puerta hacia la libertad en los sueños).

La naturaleza se presenta como majestuosa y violenta, reflejo del apasionado y atormentado espíritu del poeta.

Rechazo de las convenciones estéticas tradicionales. Destacan en este periodo las figuras de Gustavo Adolfo Béc-

quer, José de Espronceda y José Zorrilla.

Realismo y naturalismo. Características

Surgen a finales del siglo XIX. Buscan reflejar la realidad tal y como es, sin idealización o

subjetividad alguna. El Realismo pretende mostrar la sociedad tal y como es,

de manera exacta y minuciosa para, de este modo, hacer un análisis crítico de la misma.

El Naturalismo, por su parte, se inicia en Francia (Émile Zola). Supone la culminación del Realismo y se caracteri-za básicamente por el materialismo (el hombre como mero organismo), determinismo (el hombre no es libre, sino que actúa impulsado por las condiciones que le ro-dean).

Reproduce los ambientes más sórdidos de la sociedad. En el Realismo destaca la figura de Galdós y la de Emilia

Pardo Bazán en el Naturalismo. Ambos autores los estu-diaremos en el apartado de prosa.

Siglo XX. Contextualización

En el siglo XX tendrán lugar varios sucesos importantes que marcarán a la sociedad del momento. Por un lado, la I Guerra Mundial (1914 – 1918), que convirtió a EEUU en Primera Po-tencia Mundial. Por otro, los régimenes fascistas que darían lugar a la II Guerra Mundial.

Otros acontecimientos: caída del muro de Berlín, nacimiento de la Unión Europea, etc.

En España se sucerán diversos régimenes políticos (Repúbli-cas, dictadura franquista, democracia).

SIGLO XX. LITERATURA Concentración de diferentes corrientes literarias. Comienza con el Modernismo, cuyo iniciador será Rubén Darío,

y se caracterizará por la preocupación estética, los escenarios exóticos, la atracción por lo insólito y original y un cierto tono melancólico. El lenguaje recargado y la abundancia de símbolos, serán también algunos de sus rasgos.

Estrechamente ligada al Modernismo, surge en España la de-nominada Generación del 98, que comprenderá a una serie de autores preocupados por la crisis en la que ha entrado el país tras la pérdida de sus últimas colonias americanas. Estos escri-tores comparten su preocupación por la decadencia española y se rebelarán contra la apatía del país y el atraso en el que está sumido. Exaltarán los valores patrióticos y nacionales. Su afán reformador les llevará a utilizar unas formas sencillas y concisas y un vocabulario adecuado, con abundantes cultismos.

Sus principales representantes serán Miguel de Unamuno, Valle-Inclán, Antonio Machado, Pío Baroja y Azorín.

SIGLO XX. LAS VANGUARDIAS

Futurismo: defiende el valor estéticos del industrialismo, las máquinas, etc.

Expresionismo: angustia del hombre ante un futuro som-brío plagado de violencia y autoritarismo.

Cubismo: fundamentalmente pictórico. Consiste en la de-construcción de la realidad.

Dadaísmo: se revela contra las convenciones. Surrealismo: comprende el Creacionismo y el Ultraismo.

El primero consiste en algo similar a un enfrentamiento entre el poeta y la naturaleza. El segundo será una mez-cla de elementos de otras vanguardias.

SIGLO XX. GENERACIÓN DEL 27 Generación del 27. Recibieron su nombre a partir de un acto cultural

que tuvo lugar en el Ateneo de Sevilla para homenajear a Luis de Góngora. Se les suele considerar la “generación de la amistad” y comprende a un grupo de poetas que publicaron sus obras en torno a 1920.

Se suele considerar que suponen la Edad de Plata de la literatura es-pañola, por el alto nivel que alcanzaron.

Innovación y tradición se fusionarán en esta generación literaria. Por un lado, las influencias vanguardistas europeas que recibieron, así como la de autores modernistas como Antonio Machado o Gómez de la Serna. Por otro, la importancia que para ellos tuvieron escritores clásicos como Góngora o Bécquer.

Sus características serán el vanguardismo, la búsqueda de la poesía pura, exenta de sentimentalismos, el surrealismo y el neopopularis-mo.

Los autores más representativos serán Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, García Lorca, Vicente Aleixandre, Rafael Alberti y Luis Cernuda.

SIGLO XX. GUERRA Y POSTGUERRA

La guerra civil española, el inicio de la dictadura franquista y el exilio de muchos españoles, interrumpen la evolución natural de la cultura y la literatura y las sumen en un pro-fundo aislamiento, vigilado por una férrea censura.

Diferenciamos, usando la distinción de Dámaso Alonso, dos tipos de poesía: poesía arraigada y poesía desarrai-gada.

La poesía arraigada, representada por la denominada Generación del 36, regresará a las formas clasicistas, re-tomando la métrica clásica y los temas tradicionales a la manera de Garcilaso. Emplearán, asimismo, un tono he-róico.

La poesía desarraigada supone la creación de una poesía existencialista que muestra los primeros indicios de una protesta social y política.