Geomorfología: Modelos Evolutivos del Relieve

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UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES E.A.P. GEOGRAFÍA CURSO: GEOMORFOLOGIA (Sección Nro. 2) Prof. Mg. Juan Meléndez Separata (compilación de textos) MODELOS EVOLUTIVOS DEL RELIEVE Los antecedentes del conocimiento geomorfológico Se puede considerar que la “prehistoria” de la geomorfología, es decir el desarrollo del interés por los temas que más tarde conformarán el campo de nuestra disciplina y la acumulación inicial de información relativamente precisa, tiene dos etapas una anterior a los años centrales del siglo XIX, en los que aparece la obra de Alejandro de Humboldt y otra que comprende el resto del siglo pasado hasta la publicación del trabajo de William Morris Davis, con los que se inicia el desarrollo de la geomorfología como disciplina con nombre propio, relativamente bien estructurada y diferenciada a nivel teórico y metodológico. Modelos Evolutivos del relieve La formulación que realizará Davis (1899) que todo relieve es producto de tres factores o variables: Proceso Estructura Estado Así nacieron los estudios sobre el equilibrio del relieve. Plasmados en teorías o modelos sobre análisis históricos-evolutivos e hipótesis para interpretar tipos de desplazamientos en el sistema geomorfológico eso dio lugar al concepto de sucesiones y secuencias morfológicas. El fin último consiste en determinar que “etapas” sigue el relieve durante su evolución o “movimiento” hacia “estados” de equilibrio con los niveles energéticos propios de su dinámica. El modelo Davisiano concibe un “estado final” al que corresponden pendientes muy suaves y terrenos “casi planos”, es decir, una penillanura. Cuando los ríos modifican su valle llegando al “equilibrio” “nivelados” con la pendiente necesaria para evacuar caudal y carga. Para el análisis secuencial y evolutivo del relieve hay que considerar otros enfoques. Entre los cuales destaca el que establece que ante una serie de estímulos dados la respuesta en un sistema geomorfológico es heterogénea. Aquellos fenómenos responsables de cambios “cualitativos o acumulativos” pueden conjuntarse a lo largo del tiempo histórico y conducir a una situación límite: un umbral. Sobrepasada esta situación tiene lugar un salto o “cambio cualitativo”, es decir, una respuesta compleja. Esta teoría es un proceso homogéneo que no siempre conduce a un resultado lineal o acumulativo. En términos dinámicos viene a expresar lo siguiente: el mismo conjunto de acciones físico-químicos elementales articuladas entre sí a lo largo del tiempo pueden dar lugar a secuencias distintas y productos diferentes. Esto

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UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

E.A.P. GEOGRAFÍA

CURSO: GEOMORFOLOGIA (Sección Nro. 2) Prof. Mg. Juan Meléndez

Separata (compilación de textos)

MODELOS EVOLUTIVOS DEL RELIEVE

Los antecedentes del conocimiento geomorfológico

Se puede considerar que la “prehistoria” de la geomorfología, es decir el desarrollo del interés por los temas que más tarde conformarán el campo de nuestra disciplina y la acumulación inicial de información relativamente precisa, tiene dos etapas una anterior a los años centrales del siglo XIX, en los que aparece la obra de Alejandro de Humboldt y otra que comprende el resto del siglo pasado hasta la publicación del trabajo de William Morris Davis, con los que se inicia el desarrollo de la geomorfología como disciplina con nombre propio, relativamente bien estructurada y diferenciada a nivel teórico y metodológico. Modelos Evolutivos del relieve

La formulación que realizará Davis (1899) que todo relieve es producto de tres

factores o variables: Proceso Estructura Estado

Así nacieron los estudios sobre el equilibrio del relieve. Plasmados en teorías o modelos sobre análisis históricos-evolutivos e hipótesis para interpretar tipos de desplazamientos en el sistema geomorfológico eso dio lugar al concepto de sucesiones y secuencias morfológicas.

El fin último consiste en determinar que “etapas” sigue el relieve durante su evolución o “movimiento” hacia “estados” de equilibrio con los niveles energéticos propios de su dinámica.

El modelo Davisiano concibe un “estado final” al que corresponden pendientes muy suaves y terrenos “casi planos”, es decir, una penillanura. Cuando los ríos modifican su valle llegando al “equilibrio” “nivelados” con la pendiente necesaria para evacuar caudal y carga.

Para el análisis secuencial y evolutivo del relieve hay que considerar otros enfoques. Entre los cuales destaca el que establece que ante una serie de estímulos dados la respuesta en un sistema geomorfológico es heterogénea. Aquellos fenómenos responsables de cambios “cualitativos o acumulativos” pueden conjuntarse a lo largo del tiempo histórico y conducir a una situación límite: un umbral. Sobrepasada esta situación tiene lugar un salto o “cambio cualitativo”, es decir, una respuesta compleja.

Esta teoría es un proceso homogéneo que no siempre conduce a un resultado lineal o acumulativo. En términos dinámicos viene a expresar lo siguiente: el mismo conjunto de acciones físico-químicos elementales articuladas entre sí a lo largo del tiempo pueden dar lugar a secuencias distintas y productos diferentes. Esto

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marca una separación entre tiempo de ocurrencia (magnitud o tiempo físico) y de sucesión (concepto histórico o tiempo geológico).

Estos planteamientos teórico-evolutivos tienen su aplicación a una serie de conceptos básicos que son: Superficies de erosión Interacción dinámica Modalidades denudadoras y Estados evolutivos SUPERFICIES DE EROSIÓN: SIGNIFICADOS Y TIPOLOGÍAS

La presencia de amplias llanuras o casi llanuras debido a arrasamiento de antiguos relieves es una constante en todos los continentes.

En muchos casos lo han explicado mediante cambios climáticos: sucesión de etapas “biostásicas” o “resistásicas”.

Las primeras corresponden a fases húmedas con facilidad para el desarrollo de coberturas vegetales, estabilidad y profundización en la meteorización.

Las segundas son fases secas con decaimiento vegetal aridificación, denudación y desmantelamiento de suelos. INTERACCIÓN DINÁMICA

Siguiendo el modelo de W. Penck. El nivel de cumbres y la escalera de

piedemonte. Esa sucesión de etapas o secuencias discontinuas en el espacio y el tiempo pueden enfocarse también desde la coexistencia complementaria entre ambas dinámicas.

W. Penck (1924) propone un modelo geodinámico interactivo con levantamiento y erosión coetáneos. Esta teoría propugna una desnivelación progresiva y de intensidad creciente que irá dejando colgadas las sucesivas planicies formadas al pie de la elevación considerando así la escalera de piedemonte.

De acuerdo con la interacción dinámica elevación y nivelación constituyen secuencias enlazadas e interdependientes a lo largo de la historia geológica en un territorio.

A partir de esos conceptos debe plantearse la morfogénesis desde una perspectiva global. Así aparecen en algunos métodos que tratan de determinar balances entre ambas dinámicas mediante las relaciones: tasas de levantamiento – tasas de denudación.

Modalidades tectónicas (movimientos epirogénicos, isostasia, orogenías, basculamientos, etc) y denudadoras (proceso de erosión, erosivos sedimentarios, de meteorización, etc., así como tipologías de los agentes: fluvial, glaciar, litoral, etc.). MODALIDADES DENUDADORAS EN LOS CONTINENTES

Las acciones pluvio-fluviales dominan claramente la morfogénesis denudadora. Basta estudiar las grandes llanuras para reconocer que de una u otra manera hay siempre corrientes fluviales implicadas en su elaboración.

A excepción de ambientes hiperáridos (cálidos o fríos), la escorrentía superficial esta presente en todo el planeta.

No es extraño, por tanto, que Davis valorara la erosión fluvial como “normal” su error fue considerar sólo aguas encauzadas en valles bien definidos y limitar estas acciones a zonas húmedo-templadas.

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Es evidente la singularidad de otros agentes del modelado como el glaciar y eólico pero su contribución al balance total de masa movilizada hacia las cuencas continentales o marinas resulta muy limitada.

De no mediar la meteorización y fenómenos gravitacionales, la actividad de las aguas corrientes sería muy poco efectiva.

Allí donde las condiciones ambientales y tectónicas permitieron el desarrollo de grandes saprolito (roca descompuesta “in situ” que conserva la estructura de la roca original) conduce a superficies tipo pedillanura.

Ocurre en áreas desérticas marginales que han permitido describir piedemontes formados por glacis escalonados.

Los piedemontes constituyen la transición entre zonas elevadas donde la erosión es el proceso predominante y las áreas de bajo relieve formado por glacis escalonados.

El glacis es una superficie inclinada 1º a 5º de pendiente ligeramente cóncava

y con escasa disección vertical a pesar que en el tienen numerosas quebradas. El glacis se origina por la erosión en los interfluvios al removerse gradualmente

una capa de rocas de poca resistencia que descansa sobre otra de alta resistencia, al ser erosionada esta última disminuye la intensidad de la disección y se incrementa la acumulación en la base. ESTADOS EVOLUTIVOS: SUCESIONES Y SUSTITUCIONES DE FORMAS

Cada proceso introduce una geometría peculiar en el relieve, sin embargo, esta tarda en imponerse y suele hacerlo gradualmente por eso hay etapas de coexistencia entre geometrías antiguas y nuevas.

Puede que las condiciones morfogenéticas sean capaces o insuficientes para borrar todos los rasgos previos. Por lo tanto no sólo debe tenerse en cuenta las fisonomías acordes con los procesos instalados en ese momento sino también las previas o remanentes.

Este tipo de secuencias deben entenderse como un transito normal en la evolución del relieve pues una unidad geomorfológica es un conjunto de elementos articulados entre sí. Unos son propios del proceso morfogénetico que está desarrollando la unidad. Otros, sin embargo le vienen sobre impuestos bien por herencia o degradación parcial. Referencias bibliográficas DE PEDRAZA, JAVIER. (1996). Geomorfología - Principios, métodos y aplicaciones. Madrid: Editorial Rueda. MUÑOZ, JULIO. (2000). Geomorfología general. Madrid: Editorial Síntesis, S.A.