GIBERT (2004) - 08 - Los Otros Restos - El Hombre de Orce

8/7/2019 GIBERT (2004) - 08 - Los Otros Restos - El Hombre de Orce

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Figura 24.- Diafisis humeral infantil humana de Venta Micena (VM-1960)

Figura 25.- Fragmento de diafisis humeral humana de Venta Micena (VM-3691)

acutico. Si el fsil, en este caso VM-1960, supera esta comparacin, hay grandesprobabilidades de que sea humano. (Fig. 26, 27)

La diferencia anatmica fundamental de la difisis VM-0, estaba en lasinserciones musculares, especialmente en la extremidad proximal. En los humanos,estas inserciones se desarrollan cuando empezamos a andar, mientras que en loscarnvoros y cercopitcidos ya estn desarrolladas al nacer, puesto que andan demanera inmediata, a los pocos das del parto.

Las comparaciones anatmicas demostraban esta diferencia, pero se tratabade traducirlas en datos mesurables, por lo que tornamos diferentes ndices a lolargo de la diafisis en puntos homlogos, y los representamos de manera simpleen las primeras publicaciones, y con Martnez y ms colaborados en publicacionesposteriores, gracias a los clculos de Prez-Claros y Palmqvist. (Fig. 28, 29)

Nuestros brazos, o extremidades anteriores, tienen una singular caracteristica:su gran libertad de movimientos mediante los que podemos girarlos en casi todaslas direcciones, lo que no consigue ningn otro animal, con nuestra facilidad. Estacaracterstica se traduce, entre otras cosas, en un parmetro anatmico que seconoce como ndice torsin. El humano es muy caracteristico y diferente del de

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Figura 26.- Comparacin de diferentes secciones de hmeros. A y B, carnvoros; C, D, E y Fcercopitcidos; G, VM-1960; H, VM-3691.

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Comparacin de diferentes secciones de hmeros humanos con VM-1960(G) y VM-T -

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los cercopitcidos y carnvoros. Modificamos la metodologa para determinareste ndice y lo calculamos mediante tomografas cumputerizadas. Los resultadosson muy convincentes para clasificar VM-1960 dentro de los humanos. (Fig.30,Tabla 2 y 3). Publicamos estos datos en los Comptes Rendues (ver bibliografa).

Con las Dras. Florentina Snchez y Asuncin Malgosa realizamoscomparaciones anatmicas precisas entre VM-1960 e individuos humanos infantilesy juveniles llegando a la conclusin de que la difisis humeral, era de un humanoinfantil de aproximadamente siete aos.

Recuerdo, con gran satisfaccin, los viajes a la Necropolis Paleocristiana deTarra gona- donde hay importantes colecciones de esqueletos humanos-, para tomardatos. En algunos casos acud a las tum bas para encon trar restos infantiles. Tam binrecuerdo las dificultades para medir restos de cercopitcidos y carnvoros. Porsuerte. en el Museo de Zoologa de Barcelona, hay importantes colecciones que

1 Carnivores Cercopithecids Homo sapiens VM-1960 5cmANT1#*W .00.41-wi~`,.........r11"M 1, PST

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INT-(5-EXT-11.."'

30.- Proyeccin de las secciones proximales y distales obtenidas mediante tomografas7-.iterizadas (TAC), de las dilisis humerales de carnvoros, cercopitcidos, homnidos y VM-Las proyecciones se realizan con el TAC. Puede observarse que los ngulos de los hmeros

-irlos y VM-l960 son muy similares y, ambos, diferentes a los que tienen los carnvoros ypliecidos.me floran de gran utilidad. En el Museo de Nairobi tuve la oportunidad de estudiarel humero de KNMER-15000, un joven de 16 aos, que presenta ciertas

2r gencias con VM-1960, en la extremidad proximal.Este fsil tambin tiene su coleccin de ancdotas. Algn paleontologo que_a rieza. sentencio que se trataba de una costilla de gran carnvoro. Por suerte

habamos comparado con las costillas y otras partes esquelticas. Laserer_Jias son tan grandes que no vale la pena comentarlas. Sin embargo la

de las autoridades prevaleci y cal en Turner- un paleontlogo inglsel cue tena contactos- y la opinin de este cientfico trascendi a otros.

Turner he coincidido varias veces. En una ocasin, ya mencion antes, en7 . 7 . r . e sc , de Milan, cuando present una comunicacin que comenz con una



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,..)pecnuen V a I u eChild MZ-124-2 128Fossil VM -1960 131Child MZ-87 137Child IP-C-32 139Child MZ (unnunihered) 139Child IP-C-19 140

Tabla 2.- Valores de ngulos de torsin de diaf s s humerales de diferentes individuos infantileshumanos y VM-1960, obtenidos mediante TAC

Genus Sample size Mean RangeHomo (adult) 150 145 .1 " 134.0-156.2Macaca 102 98.8 92.1 -105 .5 Papio 1 0 96.0 82.2-109.8Cercocebus 8 99.1 ' 92.6-105.6"Cercopithccus 1 6 97.0 88.5 -105 .5

Tabla3.- Valores de ngulos de torsin de hmeros de diferentes gneros de cercopitecidos y Hornosapiens sapiens .

diapositiva de VM-0 afirmando que era el primer europeo. Algn tiempo mstarde cambi de opinin, influenciado por los criterios de las autoridades. Tambinmantuve con l una discusin muy viva en Liverpool, ante sus alumnos, como yahe comentado antes. Me trat con mucha atencin. No s qu piensa ahora.

En VM-1960 se han encontrado, tambin, protenas humanas, por lo que cornoen el caso de VM-0 disponemos de una doble comprobacin de su pertenencia algenero Horno.

En 1990, la ltima excavacin sistemtica de Venta Micena, encontramos unfragmento de diafisis humeral (VM-3961). Recuerdo muy bien el momento exactodel hallazgo. Estaba en el yacimiento atendiendo una visita y un excavador, quizsMartnez, me ense el fsil e inmediatamente lo clasifique como una diafisishumeral humana. La anatoma de esta pieza es dificil pero tiene un carcter comna todos los restos humanos postcraneales de Orce: su reducido canal medular. Estefue el primer aspecto que observ y me convenci de su humanidad.

El canal medular reducido es tpico de los humanos primitivos. En el caso deOrce es ms reducido que el de KNMER-1808, atribuido a Horno ergaster. Estacaracterstica es rara. En todo caso no supone grandes ventajas para los mamferos

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corredores, pues incrementa notablemente su peso y no s, de momento, en quepuede favorecer a los humanos. (Fig. 26, 27).

En esta pieza hemos realizado, tambin, anlisis con oligoelementos mediantelos que se puede conocer su paleodieta, que publicamos con Safont, Malgosa,Subira y otros en Journal of Osteoarchaeology (ver bibliografa). Ms tardecomentar la importancia de estos trabajos.

Adem s, Garca Olivares y su grupo han encontrado protenas humanas en VM -3961.Por ltimo, tengo que comentar el hallazgo del fragmento de molar en Barranco

Len 5. En este yacimiento encon tramos A lfredo Iglesias y yo, en 1987, las prime rasindustrias lticas y, a partir de entones prospectbamos con frecuencia en diferentesniveles, hasta que localizamos un nivel arenoso con abundantes industrias.

Alfonso Arribas realizaba una tesis doctoral, que en aquel momento dirigayo, y necesitaba muestras del sedimento de Barranco Len 5. En una de ellasapareci el fragmento de molar. Se lo enseo a Bermdez de Cartro, el codirectorde Atapuerca. experto en dientes, y le pareci que tena caractersticas humanas.Tam bin al Dr. Van der M ade, del M useo Nacional de Ciencias Naturales de Ma drid,que es experto en suidos (cerdos) y lo excluy de este grupo.

Alfonso Arribas me remiti el ejemplar mediante mi yerno Jaime, que, enaquel momento de amistad y colaboracin se alojaba en su casa. Cuando Jaime melo ense me di cuenta de su importancia y de la dificultad de su estudio. Tambinse lo ense a B. Martnez. a quien le pareci humano.

Estudiar esta pieza era un reto. Consulte a la Dra. Malgosa y me aconsej queacudiera a los especialistas, pero los ms experimentados eran ingleses, franceseso americanos y la pieza tena que salir de Espaa lo que complicaba mucho lainvestigacin. Decidimos reunir bibliografa y comprobar la dificultad de lainvestigacin. Silvia Albaladejo se ocup de este tema.

La bibliografa sobre dientes fsiles es muy extensa. Las investigaciones hanprogresado mucho en estos ltimos aos, pero en el aspecto que a nosotros nosinteresaba era bastante simple. Com probar si el molar de Barranco Len era hum anono era difcil bastaba con realizar el siguiente protocolo:

1. La posicin de la ltima estra inbricada de Retzius nos indicaba la antigedaddel molar. (Fig. 31)

2. El paralelismo de las bandas Hunter-Shreger separaban los humanos y otrosmamferos de algunos grupos de carnvoros. (Fig. 32).



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3. La presencia de perikymatas era determinante. Si las localizbamos el molarslo poda pertenecer a un primate. (Fig. 33, 34)

4. El espesor del esmalte era muy importante pues los humanos y los orangutanessomos los nicos grupos actuales que disponemos de un esmalte muy grueso.(Fig.35, 36)

5.-Por ltimo deberamos enc ontrar el modelo de em paquetamiento de los prismas.Este protocolo nos exiga trabajar en el binocular con luz polarizada y

microscopa electrnica. Conseguimos los m edios y empezam os a investigar. Fuerondas muy intensos. Yo haba trabajado con el microscopio electrnico en la dcada

Figura 31.- Fotografa del fragmento de molar BL-0 realizada con luz polarizada en la que puedeverse las estras de Retzius q ue se s ealan con un flecha.

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Figura 32.- Fotografa del fragmento de molar BL-0 realizada con luz polarizada en la que puedeverse las bandas de Hunter-Shreger.

'ura 33.-Fotografa realizada con el microscopio electrnico de la parte distal de BL-0. La flechasefiala la presencia de perikymatas.



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Figura 34.- Fotografa realizada con el microsco pio electrnico en la que puede verse co n m as detallelas perikymatas. Figura 35.- Corona y raz de BL-0. Detalle de losespesores del esmalte en los molares humanos. A laizquierda BL-0, a la derecha un m olar hum ano actual.

de los setenta. En la publicacin internacionalde mi tesis doctoral figuraban fotografas almicroscopio electrnico de los insectvoros,gracias a mi colaboracin con Hans de Bruijnen Utrecht. Creo que fu uno de los primerospaleontlogos de vertebrados espaoles queaplic esta metodologa.

Pero el trabajo del molar era mucho msemocionante. Realizamos numerosas pruebascon dientes actuales hasta aprender al impiarlos, situarlos y observa r sus estructurasmicroscpicas. Fueron muchas horas demicroscopa electrnica en las dependenciasde la Universidad Autnoma. Ensayamos las

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CANIS SP. CV SOERGELIA MINOR V.EV CERVIDAE CV

ENAMELTHICKNESSTHICKNESS0 .30 ENAMELTHICKNESS ENAMELTHICKNESS1.17 0.97P4

"CERVUS" ELAPHUS V.M MACACA SILVANA HOMO S P.ft

ENAMEL ENAMEL ENAMELTHICKNESS THICKNESS THICKNESS0.69 \MIN:0.47MAX:0.66 1.2M1 M1 M

Figura 36.-Secciones de diferentes molares de gneros y especies actuales o fsiles de Venta Micenay Cueva Victoria en las que puede compararse los espesores con los de Macaca silvanay Horno.

fotografas con luz polarizada hasta conseguir obtener resultados de gran calidad.Por fin llegaba el momento de aplicar el mtodo al molar del Barranco Len ysurga una dificultad: no podamos alterar la pieza con el bao de oro que exigael trabajo con la microscopa electrnica, por lo que aplicamos otra tcnica con elmicroscopio de la Universidad de Barcelona mediante la que se consegua unaadecuada conductividad con la fijacin del molar al soporte del microscopiomediante una pasta especial.

Despus de varias sesiones conseguimos identificar las perikymatas y losprismas de hidroxifosfato de apatito, dos estructuras del esmalte dentareo. Elmolar tenia perikymatas! Era de un primate! La comparacin con el resto deprimates nos proporcionaba los datos necesarios para considerarlo humano. El



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grosor era determinate. Tambin el modelo de empaquetamiento de los prismasque forman el esmalte dentareo. (Tabla 4)

Los resultados eran impecables por lo que decidimos enviar la publicacin aNature. La resumimos, nos esmeramos en las fotografas y dibujos y la enviarnos.El artculo pas las revisiones internas, lo que era un gran xito. Se envi a tresrevisores. Dos de ellos hicieron un informe favorable sugiriendo la publicacin.

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Tabla 4.-Caractersticas del molar BL 5-0

Pero uno remiti un informe horroroso indicando la posibilidad de que el molarperteneciera a un diente decidual de un cerdo. Esta eventualidad era imposible!Pero Nature, ante el criterio adverso de un revisor no di marcha atrs y el artculono se public.

Con el tiempo he averiguado que detrs de este informe negativo haba algoms que la opinin del presunto especialista, fcil de reconocer. Este paleontlogocontact con nuestros adversarios y prevalecieron los criterios de autoridades yotros intereses sobre la objetividad de los datos.

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Necesitbamos publicar el artculo con urgencia por lo que lo remitimos aHunian Evolution, y sali de manera rpida.

Sobre este fsil apenas hay criticas de especialistas. Arribas y Palmqvist seatreven a dudar de su localizacin en el plano de excavacin. Nada importante.Arribas y yo sabemos muy bien el lugar de procedencia del famoso bloque.

En el 2000 publicamos un artculo-resumen de los restos humanos de la reginde O rce en un l ibro homenaje a D erek Roe, edi tado por Oxbow B ooks , el arquelogode Oxford que tanto nos ha ayudado. Este artculo ha sido seleccionado por laeditorial Pearson. Prentice Hall, de New York, para su nueva edicin de laEnciclopedia de la Evolucin Humana que estar en las librerias en julio del2004. En definitiva, los restos humanos de Orce, sern divulgados, de maneraamplia y a traves de medios cientficos a todo el mundo.

Algunos grupos de cientficos y polticos han intentado elaborar una doctrinanefasta que consiste en negar la presencia de restos humanos en Orce y darnicamente como validas las industrias. Se han basado en la polmica desatadapor Agust y Moy a la que se aadi Palmqvist y despus, de manera oportunista,Martnez con su historia de los rumiantes, que comentar ms tarde. A ellos se hanjuntado algunos expertos que no han estudiado los restos ni ledo, crticamente,los artculos. Pero esta polmica se centra en uno de los fsiles VM-0 olvidndosedel resto. El revuelo meditico entorno a VM-0, impide ver, con claridad, lostrabajos de investigacin que hemos realizado sobre los fragmentos humerales y elfragmento de molar.

Recientemente he tenido una gran satisfaccin: A una investigadora espaola,Elena G arca Guixe, que disfruta de una beca " Curie" en la Universidad de Bradfo rd(U.K.) para estudiar molculas fsiles, el responsable del laboratorio Dr. MichaelRichars, le dio varios artculos bsicos para que los estudiara y entrara en el mundo,muy complejo, de las moleculas fsiles. Uno de ellos era el firmado por Borja,Garca Olivares, Lowenstein y otros en Amarican Journal Physical Anthropology.El Dr. Richars y sus colaboradores discutieron el artculo citado ponindolo comoun ejemplo de excelente trabajo de investigacin.

UN DEBATE NECESARIO

En numerosas ocasiones he propuesto un debate en Orce sobre estos restos,2:rre los que han publicado en contra y nosotros, tanto sobre aspectos anatmicos

inmunolgicos, pero mis intentos no han tenido xito. Tampoco los de un

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grupo de ciudadanos de Orce que remitieron una carta a los responsables polticosde la Diputacin de Barcelona, que tienen autoridad sobre los Drs. Agust, Moy, Khler y tambin sobre mi persona, solicitndole un debate, imprescindible,para ellos y para el futuro de Orce. No recibieron contestacin. Publicaron lacarta en los medios de comunicacin, sin recibir ningn tipo de respuesta de losinteresados, excepto de quien esto escribe, ni de los polticos.

Otros cientficos han descalificado los restos humanos de Orce, afirmandoque "...son de animales" como sucede en el libro de Arsuaga y Martnez titulado"La Especie Elegida" , que es un caparazn de tortuga como afirma la Dra. M. T.Alberdi, un oso infantil o un feto de hipoptamo. Ests dos ltimas son opinionesexpuestas en pblico por emimentes paleontologos pero no escritas, por lo queobvio citar los nombres. En atencin a las numerosas publicaciones que defiendenlo contrario y el gran esfuerzo que hay detrs de ellas, deberan justificar un pocoms, slo un poco ms, sus afirmaciones. Y, por supuesto, estara encantado endiscutir con Arsuaga, Martnez y otros, sus argumentos.

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