Historias Construidas Con Esfuerzo

7/22/2019 Historias Construidas Con Esfuerzo

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utoresSoledad Torres Cecilia Torres

na Riffo Leonardo GuajardoJesenia Cruces Uberlinda GallegoIrma de las Nieves Fuentes Lorena Riffo guileraJohana Silva Evelyn MuozBeatriz Fernndez na Prez OpazoJulia Snchez Magdalena Inzunza

Edicin y produccinConsuelo Sazo A.Vernica Salas M.Taller de Accin Cultural

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Historias construidas con

esfuerzo

escubriendo nuestrasces

Trecacura Octubre 2013


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vuelta pa la casa, agrega Lorena.

Acotar adems que el salir de la casa, poder dejar las ollas en la

casa y dedicarnos a otras cosas y aprender algo nuevo y dejar la

casa por un rato, es muy importante igual, concluye Cecilia.

Conclusiones sobre la historia1 Es difcil encontrar mujeres y hombres que hayan sido capaces

de vencer la adversidad y de transformarla en una fuente deaprendizaje de la manera que lo han hecho las integrantes deeste grupo.

2 Es conmovedora la forma cariosa en que cada una de las per-sonas se relaciona con el resto y como valora el intercambiosolidario, su cultura, sus costumbres, sus afectos.

3 Es valioso el deseo y la voluntad de aprender que demuestra yafirma cada integrante del grupo.

4 Es asombrosa la claridad con que cada una y cada uno analizala realidad en que viven y vislumbra las perspectivas que stapuede tener a futuro.

Es por eso que el desafo de trabajar y alcanzar las metas pro-puestas para este Taller es un reto que tenemos la esperanza decumplir. Esto implica desarrollar al mximo las potencialidadesque cada una y uno lleva dentro de s.

Para eso es indispensable aprender de la experiencia acumuladay unir nuestras energas, voluntades, afectos, sentidos, capaci-dades, con el fin de construir la fuente de trabajo autnoma ysustentable que el grupo necesita para seguir adelante en larealizacin de sus historias.

Taller de ccin Cultural

Trecacura, Octubre del 2013


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hongos y partamos todos para all. Hacamos todos juntos el

proceso, agrega Leonardo.

Fue muy muy bueno, yo qued muy muy contenta y con gusto a

poco me deca alguien por ah, del curso, porque del profesor

hacia abajo y de lo que nos entreg la forestal, muy bueno, afir-

ma Cecilia. Yo soy campesina aqu detoda la vida y la verdad es que con mi

mam recolectbamos la callampa y

todo, pero no estaba el aprendizaje que

nos entregaron. Entonces eso fue bueno,

fue importante aprender lo tcnico.

Adems que tambin fuimos certifica-

dos del curso. A m me gust mucho continua Magda-

lena refirindose al curso, cmo se cor-taban los hongos, cmo se secaban,

aprend mucho y qued con gusto a po-

co, como dice la hermana Cecilia.

Tambin me gust el curso, afirma Julia Lo pas sper bien en el curso, dice

Uberlinda, tambin aprend a cortar elhongo, porque no saba, uno lo tomaba y

lo sacaba de raz y no era as. El profesor

nos ense cul era la callampa que se coma, cul era la vene-nosa, todo eso. Nos ense varias cosas as que fue muy lindo y

tambin fue muy linda la experiencia.

Yo soy de Trunqun, explica Irma de Las Nieves tambin parti-cip en la cuestin de los hongos y me gust mucho participar

con mis compaeras, porque uno aprende muchas cosas, es una

experiencia la que aprende. Como duea de casa siempre

aprende lo de la casa, pero me gust mucho la experiencia y

muy buena mis compaeras.

No peleaba ninguna! nos venamos y nos bamos en grupo de

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Recuerdos que nos ayudan a comprender quines somos hoy da Yo me acuerdo de haber

jugado de chica, de haber

ido a tomar callampas, de

haber ido a la mosqueta,cuenta Soledad. Tambin

me acuerdo de haber aca-

rreado el agua en tarros, en

baldes, por acarreo, porque

antes no tenamos puntera

como, gracias a Dios, tene-

mos hoy da Tampoco haba luz elctrica, entonces nuestra

vida era muy, muy, muy sacrificada Y ms encima para aca-

rrear el agua, de ida bamos bajando con los baldes vacos, perode vuelta con los baldes llenos, venamos subiendo Era un

sacrificio, y tenamos que hacerlo

.Aqu en la escuela tambin se acarreaba el agua, agrega Ana.

Claro, aqu tambin, contina Soledad, y se acarreaba de all

abajo y la bajada tambin es bien pronunciada. As que bajba-

mos vacas y despus volvamos llenas para arriba

ramos amigos entre vecinos, recuerda Nos conocamos con

Leo l me andaba trayendo en brazos porque yo soy un poco

menor que l, cierto Leo?... Aqu, con la seora Anita, la Lore

na, que es mucho menor que yo, ella era una mocosita chiquiti

ta Aqu nos conocemos todos, conocemos a sus familias com

pletas, adems que hemos trabajado en el sector Nosotros

hemos adquirido las cosas con mucho trabajo, cuenta Soledad.

Por ejemplo, el agua potable a travs de puntera.

Celebrar la navidad? nunca, jams! recuerda Cecilia.No por-que antiguamente nuestros padres tenan muchos hijos, y la

condicin econmica que tenamos no era para celebraciones.

En nuestra niez yo pienso que muchos de nosotros bueno yo


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voy a hablar por m, pero no haba regalos, no haba cena, no

haba nada. Solo haba un 24 pero un 24 ms de cada ao, por-

que para nosotros no haba eso, porque los paps eran mu-

cha familia. Nosotros somos 8 hermanos y en otras partes ha-

ban ms de 12 y por eso, la condicin econmica no daba,

porque exista mucha pobreza y los paps no daban como hoy.Nosotros como paps hoy en da trabajamos y hacemos todas

esas cositas, el 18 de Septiembre, por ejemplo.

En mi niez por lo menos nunca hubo celebracin de nada,

comenta Ana Riffo. Por aqu siempre se hacen bailes, en los ho-

gares no, pero uno sale en los das esos.

Pero en la casa siempre uno hace lo que se hace para un 18 de

Septiembre, por ejemplo se hace su asado, comer empanadas, se

comen los alfajores, esas cosas, todos los aos, continua Leonar-

do. Es una tradicin que uno la hace en la casa, despus sale a

tomar y a bailar no ms.

En la etapa de nuestros paps, cuenta Jesenia, por ejemplo yo

fui criada con abuelitos y ellos tenan 12 hijos, ms nosotros 2

que nos criaron (yo y otra hermana). Y yo vi que nunca cele-

braban la navidad ni nada de eso, porque no haba como para

celebrar una navidad. Despus, uno de grande ya empieza a

conocer otras cosas. Ni tampoco crea en el viejo pascuero. A mi

abuelita le deca: hay que creer en el viejo pascuero, mentira!me deca, el viejo pascuero no existe. Entonces uno como nia

no tuvo la ilusin que tienen ahora los chiquillos.

Sabe que, yo creo que nosotros, contina Soledad, no es por ser

como extremista en nuestra manera de hablar pero yo creo que

uno tiene que ser sincera en la vida. Yo pienso que nosotros ni

ilusiones tenamos. Como dijo la Cecilia, yo pienso que nosotros

pasamos esas fechas como un da ms del mes no ms, pero hoy

da gracias a Dios todo eso ha cambiado, porque le hacemos

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ignoro esas cosas. Entonces eso es lo que yo digo, uno tiene que

aprender todas esas cosas.

Lo que siempre he querido es formar un comit, explica Leo-

nardo, donde el grupo pueda por ejemplo juntar todas sus

cosas y que se las vengan a buscar. No s, una cosa donde uno

pueda entregar sus especies, porque si no de qu nos sirve loque le acabo de decir yo? El curso de los hongos fue muy

bueno, me gust mucho porque hay hartas cosas que aprender,

como deca la nia ac. Aprendimos a hacer el secador, que

incluso yo hice un secador grande que ahora lo tengo, prctica-

mente para secar fruta, porque mi

fruta que cosecho yo la mayora la

tengo secando.

Yo soy del sector El Naranjo, cuenta

Ana Perez. Yo tambin soy de El Naranjo, con-

tinua Jesenia. Ahora es primera vez

que vengo ac

La mayora de los que estamos ac

somos de Trecacura, aclara Cecilia.

Yo particip de los hongos, en la

recoleccin de hongos, para m fue

muy bueno el curso, adems que no

fue solamente hongos, sino que el profesor Pedro Mejas nostrajo un tcnico en injertos. Parece que no tena nada que ver

con el curso, pero l nos quiso regalar eso. La experiencia con

l fue muy, muy buena, fue como volver a clases porque ade-

ms el grupo que haba era espectacular. Tuvimos un grupo

muy, muy bueno, fuimos compaeros de principio a fin y lo

que no recolectaba uno en callampas o en hongos, porque no-

sotros le llamamos callampa no ms, lo traa el otro. Nunca

hubo diferencias ni nadatodo era compartido.

Por ejemplo haban personas que en el lugar de ellos salan ms


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es muy bien pagado, ese es el tema,

entonces por eso el ao pasado me

inscrib en el curso, porque me gusta

aprender cosas nuevas, o el hecho de

saber, de que te enseen algo para

poder hacerlo t bien... Tambin particip y me gust mucho,

cuenta Beatriz. Pero me dio alergia la

callampa, particip igual pero mis

compaeros y mi mam me pelaban

las callampas.

Me gust harto la experiencia del cur-

so, explica Leonardo. Pero lo nico esque no me dio conformidad porque

quedamos, se puede decir, a mitad decamino porque el curso fue de 10 das.

Claro, lo hicimos completo pero ah

quedamos. A m me gustan estos cursos, aprender pero tambin

ver una fuente donde uno poder entregar, tener una entrega.

Porque si no, quedamos ah no ms, porque imagnese que

aprendimos a hacer el proceso del hongo, cmo secarlo pero

y si no tenemos entrega, qu hacemos?. No vaya a ser que vaya

a pasar lo mismo aqu y quedamos ah, entonces a la final para

uno no es ninguno el logro. Lo interesante es que uno tenga unlogro.

Yo mismo logr vender, cuando secamos los hongos, continua

Leonardo, la misma profesora me compr a $ 3.500 el kilo. Ella

me puso el precio. Ni siquiera fui yo, porque aqu estbamos

acostumbrados a pedir $ 200, $ 500, y ella me pag $ 3.500.

O sea no sabas ni el precio, comenta Soledad.

No, pero como ella tiene idea Imagnese uno ignora todas

esas cosas, porque si ella me hubiese dicho a m a cmo me

vende el kilo?, yo capaz que le hubiese dicho a $ 200, porque

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navidades a nuestros hijos, bueno, en mi caso desde que son

nias.

Mi esposo siempre ha trabajado para afuera y siempre gracias a

Dios en las forestales, explica Soledad, y a ellos nunca les dan

permiso para que vayan a sus casas a pasar las fiestas con sus

familias. Pero igual nos preocupbamos de comprarle regalos amis hijitas. Yo les haca su cena de navidad y cenaba con ellas,

hasta el da de hoy lo hago y para los 18 de Septiembre, como

bien deca Leonardo, su comida con de todo!. Ahora ya tengo

hasta la harina para hacer los alfajores con mis hijas, nosotros

hacemos de todo y creo que en la

mayora de las casas es igual.

Lo otro que estaba recordando, cuen-

ta Cecilia, por dejar algo as como

una marca, que yo me acuerde eracuando las mams quedaban emba-

razadas. Yo soy la ltima hija, pero

siempre lo he escuchado de otras que

decan: va a llegar la cigea! O

miren el avin que va a venir a dejar

la guagita!

Y nosotros vivamos mirando para el cielo, el avin!, agrega

Soledad. Creo que eso lo vivieron mis hermanos mayores, pero

vi que en otras familias igual se daba. Antes los paps tampoco decan que iba a

llegar un hermano, o que la mam estaba

embarazada, se hablaba de la cigea, el

avin, contina Cecilia. Y la mayora las

guaguas nacan en las casas.

Los nios ms grandes no miraban, era un

tab tremendo!, cuenta Soledad.

Cuando pasaba el avin nos decan: ya, ah

est la guagua, comenta Uberlinda.


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Por aqu toda la juventud se cas joven, antes de los 20, a esa

edad uno ya estaba casada, yo tengo 3 hijos uno de 31- 32,

aade Ana.

Lo que yo puedo recordar en mi niez es un pap borracho

para navidad, cuenta Soledad, un pap borracho para el 18, un

pap borracho para el ao nuevo. Yo creo que ese es mi recuer-do ms autntico que tengo.

Y los juguetes era jugar en el campo, recuerda Ana, porque no

haban de estas muecas que estn saliendo ahora ltimo.

Yo siempre me acuerdo que yo jugaba

con muecas y vena mi bisabuela y

me deca: ya andai!, esta quiere te-

ner guagua! y me botaba las muecas,

no nos dejaban tener muecas, cuenta

Jesenia. Me acuerdo que de repenteenvolvamos un palo para poder jugar

en el poco tiempo que tenamos, por-

que si a nosotras nos vean desocupa-

das, que a buscar lea, que a buscar agua o a sacar un pasto

que le sala al trigo uy, me tenan hasta aqu!. Lo nico que

quera incluso me matricul sola porque quise ir al colegio,

porque mis abuelos eran de la idea de que: para qu vas a ir al

colegio, a perder tiempo! Ellos eran de la idea que a uno haba

que sacarla al monte a trabajar, pero a estudiar no. Yo me ma-tricul sola para poder seguir estudiando y anduve por aqu y

por all sufriendo para poder sacar mi sexto bsico. Mi abuelo

era de cuidar fundos, parcelas y era de sembrar papas, porotos,

todas esas cosas, trigo, era agricultor.

Yo tambin tengo los mismos recuerdos, cuenta Irma de las

Nieves, porque pa las fiestas mis paps nunca celebraban. No

sabamos lo que era una fiesta, porque mi pap tuvo una vida

de borracho, pasaba las fiestas puro borracho y no sabamos de

fiestas. Yo igual me crie ms con mi abuelita y era sper estric-

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de otro sector, entonces es diferente compartir con ellos, pero

nos llevamos bien.

Lo bueno es que nos ensearon a hacer pequeos secadores que

hacamos nosotros mismos, pintbamos las cajitas, cuenta Lore-

na. Aqu hay 2 sectores: Johana y la seora Mauda pertenecen

al sector El Naranjo, que queda camino a Florida.Este sector de aqu se llama Manco, contina, pabajo es Treca-

cura donde yo pertennezco.

Hay tres sectores reunidos ac, pero el centro, centro es Manco,

agrega Leonardo.

La forestal colinda con todos esos sectores, aclara Cecilia.

A m me gusta recolectar la mosqueta,

comenta Ana, es en lo que ms traba-

jo. Tengo invernaderos desde hace 7

aos y en ellos trabajo con verduras,le saco la acelga, el apio y el cilantro y

las voy a vender a Florida. Es que

estamos en un proyecto que se llama

Indap - Prodemu, ah nos capacitaron

durante 3 aos y despus tuvimos

que seguir solas. Hace 7 aos que

trabajo sola en mi invernadero y voy

a vender 2 veces a la semana a Flori-

da, verduras, pero callejis, no tengopuesto y me ha ido bien y me gusta.

El ao pasado particip en el curso de deshidratacin y recolec-

cin de hongos, cuenta Evelyn. A mi me gusta aprender, debo

ser sincera, porque no soy como la mayora de ac que en la

temporada de mosqueta sale a recolectar. No soy de eso, pero s

me gusta aprender cosas nuevas, me gusta hacer cosas, en ese

sentido soy hbil, as que si tengo que tomar mosqueta para

hacer algn producto lo voy a hacer igual. Porque por lo que

algunas dicen, es complicado el tema de la mosqueta porque no


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Para que despus no nos apresuremos y digan: a nosotros no

nos dijeron esto, no nos dijeron esto otro, no nos ensearon

esto.

Los vecinos ac presentes tienen que entender que en la vida,

todo lo que uno quiere que resulte para bien, necesita tiempo y

paciencia. Es lo ms factible para que uno llegue a buen tr-mino, a buen puerto con lo que uno se propone en la vida, re-

flexiona Soledad.

Yo me llamo Lorena y vine a

esa capacitacin de los hongos,

pero no la pude terminar por-

que mi hija se me quem. As

que tuve que dejar hasta ah no

ms, tuve que retirarme. Me

gust, era bonito, nos ensearonlos hongos, cmo haba que

tomarlos, cmo se conservaban

para despus comrselos. Lo

que ms nos llamaba la aten-

cin del curso es que era pagado (risas) me gust venir, como

los talleres eran dos veces a la semana... A m me interesa

aprender, porque a uno lo que ms le gustara es tener trabajo

en el campo. A quien no le va a gustar,

uno es duea de casa pero ah no ganaplata, no es como trabajar.

Yo me llamo Johana y tambin estuve en

el grupo de deshidratacin de hongos, lo

encontr bastante bueno porque apren-

dimos bastante. Me gust aprender todo

lo de la deshidratacin, cmo haba que

cortar los hongos y tambin el compartir

con los compaeros, porque nunca lo

habamos hecho yo no soy de ac, soy

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ta, no nos dejaba jugar. Los das

que mi pap sala a trabajar, all

tena que partir a ayudarle. El

campo ha sido muy sacrificado por

mi parte, hasta que me cas y

todava trabajando!. Ahora graciasa Dios mi esposo est enfermo, por

eso ya dej de trabajar, si no fuera

as, todava tendra que estar tra-

bajando con los sacos de papas y de porotos.

Dele harto las gracias a Dios porque lo enferm para algo posi-

tivo, para que pueda descansar! comenta entre risas Soledad.

Por eso me enferm de la columna, con tanta fuerza que haca,

continua Irma.

Lo que yo puedo rescatar es que como nosotros ramos 8 her-manos, no tenamos que salir donde los vecinos a jugar, sino

que jugbamos entre nosotros mismos porque como ramos

hartos, recuerda Cecilia. Entonces los 4 ms chicos jugbamos

harto, siempre me acuerdo de todos los juegos que inventba-

mos con el Romn, la Nena y el Pato, que fuimos los ms chicos.

Esa es la crianza ma con ellos, para arriba es otra cosa! Haca-

mos unas cuestiones era sper entretenido! y no tenamos

que salir. Mis primos igual vivan cerca pero no haba permiso

para salir a jugar a donde ellos Los paps eran estrictos, esorescato y es bonito para m, porque yo jugaba con mis mismos

hermanos. No haba celebracin de las fechas importantes, ni

siquiera nos enseaban cundo era el da de las fiestas patrias.

Yo me recuerdo que si bien mi familia era numerosa, yo me

crie una buena parte con mi abuelita, cuenta Soledad, despus

otra parte con mi mam y mi pap. Mi pap se enojaba con mi

abuelita y parta a buscarme y me llevaba a la casa de ellos.

Despus me acuerdo que me mandaron a Concepcin para


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estudiar sptimo y octavo, termin y me puse al tiro a trabajar.

Porque ramos tan, pero tan re pobres! que yo me mentalic a

trabajar para que mi madre tuviera pan para comer todos los

das. Y mis hermanos menores 1 vez en la vida tuvieron un

uniforme, una mochila para venir al colegio y gracias a Dios lo

consegu con mi trabajo. Me di los gustos que yo me propuse enla vida y era muy nia, tena 14 aos! Estamos hablando de

una niita campesina, no la Sole que habla hoy da. Una niita

que apenas sacaba la voz, porque a m me hablaban y yo llora-

ba, no tena personalidad ni para hacer que me obedeciera un

gato!

Recuerdo que mi crianza fue muy poco participativa, tengo

muy pocos y vagos recuerdos con mis hermanos, cuando viaja-

ba de donde me tenan en el campo no ms, explica Soledad.

Yo me propuse ser una persona de bien en la vida, contina. Ycuando vea que, por ejemplo, mi pap le pegaba a mi madre,

por nada!, abusaba de ella, yo siempre deca: esto a m en la

vida nunca me va a pasar. Cuando vea que castigaba a mis

hermanos, yo deca: esto conmigo no lo va a hacer nadie!, pero

no lo deca con odio, con rencor me lo deca porque yo tena

que ser una persona diferente, y gracias a Dios hice todo cuan-

do tuve al alcance, me prepar en la vida. Cuando me fui a tra-

bajar como asesora del hogar Dios puso en mi camino a verda-

deros ngeles que me educaron y me ensearon, me prepara-ron para enfrentar la vida de la mejor forma posible.

Despus cuando me enamor, volv al campo y me cas, re-

cuerda Soledad, de ah mi vida empez todo como color de rosa,

todo como un paraso porque Dios me premi con un esposo

maravilloso, un cabro que es un amigo, un partner, responsable

que trabaja todos los das de su vida. Hemos formado un hogar

precioso.

Cuando tuve a mi primera hija, Marisa, me met en la directiva

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que faltaba. En esa oportunidad, cuando ya tenamos el pro-

yecto en el papel, le dije a la seora Marcela: sabe que ac nos

falta algo?. A lo mejor, para entrar a la forestal faltara la im-

plementacin , que consistira en un casco para cuando pasa-

mos debajo de los pinos. Los pinos tienen cocos que ac le lla-

mamos pias, cajetas de pia y a lo mejor si a un vecino le caauno en la cabeza, lo iba a lastimar. Tambin encontramos que a

lo mejor se podran usar zapatos de seguridad con un equipo

reflectante, que desde lejos se dieran a conocer que eran perso-

nas que estaban autorizadas para entrar a sus predios y en co-

nocimiento de la forestal.

Adems, hablamos acerca de las mascarillas por los roedores,

los ratones que tienen virus hanta y tambin el asunto de los

guantes. Todo tena una razn de ser, no era porque a m se me

haba dado la gana. En esa oportunidad yo encontr que era

absolutamente necesario para mis vecinos, para la gente que

trabaja ah, para el que va a recolectar todo esos enseres que

dije anteriormente.

El desafo de aprender Hoy da, obviamente que la palabra la tienen las personas que

estn reunidas ac, porque ya tienen una capacitacin y un ao

de trabajo en esto. Conversando con algunos, estn sper con-

tentos, esto comenz hace ms de un ao, pero ejecutndose

lleva 2 o 3 aos, explica Soledad.

Por eso cuando usted nos hablaba de que esto requiere de tiem-

po, comparto plenamente porque para que las cosas resulten,

se requiere tiempo, paciencia, capacitaciones. A travs de stas

uno adquiere conocimientos y si quiere llegar a buen trmino, a

buen fin, y quiere realmente ganar, lo tiene que hacer as. Pau-

latinamente, ir conociendo, sabiendo en qu se est metiendo.


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aprovechar mejor todo este trabajo y sacrificio. Porque por

ejemplo la recoleccin de rosa mosqueta es muy sacrificada

para mis vecinos y muy mal pagada.

Las personas que venan a comprar a los sectores, nos pagaban

muy poco dinero y el sacrificio era tremendo! Nosotros sac-

bamos rosa mosqueta desde la forestal y la acarrebamos alhombro: 4 tarros de rosa mosqueta, que equivalan a 35-40

kilos y la acarrebamos kilmetros y kilmetros para llegar a

nuestros hogares. En lo personal yo encontraba que la plata que

se nos cancelaba era muy poco, muy poquito, para todo el sa-

crificio que esto reverta, explica Soledad.

En esto de formular este proyecto a la forestal yo le ped que,

viniese de donde viniese, a la gente no se le prohibiera la entra-

da a los fundos, porque le di a conocer esta realidad y le pre-gunt a la supervisora, la seora Edith Fredes, quines son los

vecinos de la forestal hoy da?.

Si la forestal est en todas partes en este pas llamado Chile. No

importa que vengan de all o que vengan de ac, todos somos

vecinos de la forestal, continua Soledad. Y a nadie se le debe

prohibir la entrada, a nadie se le deben poner problemas para

ingresar a los predios. Y la gente as lo ha hecho y as como

nosotros, yo soy muy agradecida y creo que hay miles que estn

en mi misma condicin de agradecimiento.Llegamos a la conclusin de que podamos formar un grupo al

cual se podra perfeccionar. La forestal ofreci toda su ayuda,

compaerismo y apoyo. Entonces en este sector se podra llegar

a hacer algo para que a futuro pudieran ganaran dinero las

dueas de casa y los vecinos que voluntariamente quisieran

participar. En esas ganancias se vera reflejado el sacrificio real

de su trabajo, de su esfuerzo.

As parti esta idea y la seora Marcela empez a llegar a mi

casa. Comenzamos a hacer el proyecto, a revisarlo y a ver lo

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de World Vision, contina. No pude meterme en la directiva

siendo secretaria o tesorera, pero me met como dirigente. Me

prepararon como 3 aos para ser dirigente y no nos venan a

buscar en vehculo. Sabe usted que yo viajaba a pie desde mi

casa hasta Florida, los 13 kilmetros. Y a veces en invierno ida y

vuelta y llegaba a mi casa estilando de la cabeza a los pies. Mimadre se quedaba con mis hijas y cuando llegaba me paraba en

la cocina y el agua me corra por todos lados. Pero si no cum-

pla, mi sector se perjudicaba, porque los proyectos se iban a

otros sectores donde las dirigentes si cumplan, pero nunca

dej de cumplir! Ni a mi familia, ni a mis hijas, ni a mi comuni-

dad, siempre lo hice con todo el amor del mundo. Yo creo que

eso Dios lo mir, porque toma el corazn de las personas. Dios

lo bendijo y hoy da, gracias a l, me siento una persona muy

realizada, muy feliz, porque tengo unas hijas que son maravi-llosas es todo bueno! Mi hija mayor es Contador Auditor.

Y a pesar de que mi padre era un hombre muy castigador yo

jams, pero jams de los jamases! a mis hijas les tir siquiera el

pelo y cuando escucho a mams que dicen que son castigado-

ras, me duele hasta el alma.

Yo, de mi niez no tengo casi nada de muy buenos recuerdos,

comenta don Leonardo Pero, igual, enfrentando la vida, como

dicen todos Tambin logr tener dos lolos, ya tengo uno, gra-

cias a Dios, trabajando, y al otro lo tengo en la Universidad,

tambin estudiando. Y gracias a mi esfuerzo, porque yo me he

sacrificado mucho pa poder educar a mis chiquillos tambin.

Pero yo no soy como ellas, que trabajan en la mosqueta. A m me

cabre esa cuestin, porque yo vea que no era una ganancia

como pandar todo el da sacrificndose en la mosqueta. A qu

me dediqu yo? A cazar conejos. Me dio mucho ms resultados

el conejo que la mosqueta. Y gracias al conejo, logro juntar un

milln doscientos o un milln cuatrocientos todos los aos, y


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trabajo solo

tres meses en

la tempora-

da Y no

trabajo nada

ms. He lo-

grado ir edu-

cando a mis chiquillos, he logrado En mi casa tengo de todo,

tengo vehculo y gracias a los puros conejos. Despus no trabajo

ms Despus pololeo No falta el pololito, salgo a hacer

pololos. Siempre me gusta trabajar as, pero, yo, apatronao no,

porque aparte tengo una pensin, yo soy pensionado. A los 11

aos yo estaba invlido Por eso le digo que en mi niez no

tengo nada de bueno Me dio la poliomielitis cuando nio chi-

co, y qued invlido. Ahora, no estoy super bien, pero gracias a

Dios, camino. Por eso digo: de mi niez, nada de bueno, pero de

ah para arriba, despus, ha sido todo muy bueno, concluye don

Leonardo.

Entre todos construimos nuestro entorno Gracias a Dios tuve la honra de trabajar desde la presidencia

con World Vision, o Visin Mundial, cuenta Soledad, trabaja-mos con las 51 familias de este sector y sacamos el agua pota-

ble, yo a la cabeza Gracias a Dios, gracias a World Vision,

gracias a don Sergio Bobadilla que era el Alcalde en ese enton-

ces. El nos regal un milln de pesos aproximadamente y ahora

tenemos agua potable a travs de puntera, dentro y fuera de

nuestros hogares.

Para la luz tambin trabajamos como dirigentes el empalme

de la luz se hizo por etapas. Adems conseguimos arreglar

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nuestras viviendas explica Soledad. Tuvimos tres arreglos de

vivienda Hoy da gracias a Dios, tenemos viviendas dignas,

abrigaditas, y muchas familias de ac las han ido ampliando con

su trabajo de la mosqueta. Porque aqu hay gente que trabaja con

metas y dicen este ao voy a trabajar en la mosqueta para am-

pliar mi casa y es increble pero es la verdad. Si no, que alguiendiga esta mujer est mintiendo, cllenla!. La gente trabaja, se

hace la meta de tomar mosqueta y amplan sus viviendas, hacen

unas piezas preciosas de 3x3, 3x4

Trabajan las familias completas, los nios, trabajamos nosotros,

agrega Cecilia Pero a los nios no los forzamos con las metas

que nos ponemos nosotros.

Ellos trabajan para tener sus monedas, contina Soledad, no son

forzados, porque no les imponemos nuestras metas. Lo otro es que

muchas veces trabajamos en esto de la mosqueta para llevar anuestros hijos al colegio. Hasta el da de hoy hay familias que

trabajan para que sus hijos vayan al colegio, que con esa plata se

les compra: zapatitos, uniforme y sus tiles escolares para que

inicien su ao escolar y hasta el da de hoy se hace eso.

cercamiento de la forestal Celco Estaba recin llegando la forestal Celco e hice muy buenas rela-

ciones con la seora Edith Fredes, cuenta Soledad. Posteriormente

ella me present a la seora Marcela Vallejos y empezamos aconversar acerca de lo que hacamos, las personas, los vecinos, los

colindantes con la forestal. Yo le di a saber que recolectbamos

rosa mosqueta y que aos atrs, siendo nios, tambin recolect-

bamos callampas con nuestros padres. Les di a saber que nosotros

sacbamos conejos, camarones, nalcas, digees y hierbas medi-

cinales desde el fundo de la forestal. As, un da conversando con

la seora Edith llegamos a la conclusin de que a lo mejor ac en

el sector se podra formar un grupo de personas que pudieran

Historias Construidas Con Esfuerzo

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