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Hormigas en mi cama Un libro de lectura de Reading A–Z • Nivel T Número de palabras: 1,687 Visita www.readinga-z.com para obtener miles de libros y materiales. www.readinga-z.com Hormigas en mi cama LEVELED READER • A Libro de Nivel T Escrito por Deborah Ambroza Ilustrado por Marcy Ramsey

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Hormigas en mi cama

Un libro de lectura de Reading A–Z • Nivel T

Número de palabras: 1,687

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Hormigas en mi cama

LEVELED READER • ALibro de Nivel T

Escrito por Deborah AmbrozaIlustrado por Marcy Ramsey

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Hormigas en mi cama

Escrito por Deborah AmbrozaIlustrado por Marcy Ramsey

Hormigas en mi cama(Ants in My Bed)Libro de lectura Nivel T© Learning A–ZEscrito por Marcy RamseyTraducido por Lorena F. Di Bello

Todos los derechos reservados.

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Nota sobre la serie: Hormigas en mi cama es el segundo libro de una serie de tres partes escrita por Deborah Ambroza. El primer libro de la serie es Las herraduras no son sólo para la buena suerte, y el último libro es Murciélagos en el ático.

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Hormigas en mi cama • Nivel T 3 4

ContenidosIntroducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4

Castillos de arena . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5

Vidrios marinos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7

Visitantes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10

Hormigas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 12

La búsqueda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16

Glosario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19

Apéndice: Las galletas de mantequilla

de maní de Abu . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20

IntroducciónCuando tenía nueve años, pasé el verano con

mi bisabuela . Abu vivía en una casa grande y gris

revestida de cedro junto a la playa . Yo dormía en la

habitación amarilla, donde mi padre dormía cuando

era niño . La ventana de la habitación daba al océano,

y el sonido de las olas rompiendo contra la costa

siempre me ayudaba a dormir . Por lo menos así era

hasta que las hormigas aparecieron de visita unas

semanas después de mi llegada .

Las primeras semanas me la pasé explorando

el mar y salvándole la vida a algunos cangrejos

herraduras . También ocupé mis días andando en la

vieja bicicleta que el amigo de Abu, Juan, me había

dado . No me dejaban ir muy lejos durante los fines

de semana ya que el pueblo y la playa se llenaban

de turistas . Durante la semana, exploraba a gusto .

Juan usualmente aparecía en la mañana para

tomar el desayuno con Abu y conmigo . A veces se

quedaba por allí para ayudar a Abu con los grandes

trabajos de la casa . Otras veces bajábamos a la playa

y me enseñaba a hacer castillos de arena .

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Hormigas en mi cama • Nivel T 5 6

Castillos de arenaSiempre buscaba maneras diferentes de hacer

mis castillos especiales . Utilizaba diferentes tamaños

de tazas, cubetas, cucharas, palas, herramientas de

jardín y juguetes para crear maravillosos castillos

lo suficientemente grandes para gaviotas o lo

suficientemente pequeños para que las hormigas

pudieran marchar por adentro . A veces construía

castillos con la esperanza de que las hormigas de mi

habitación lo transformaran en su nuevo hogar . Me

conformaba poniendo muñecos dentro y alrededor

del castillo una vez que estaba terminado .

Para construir un castillo de arena, primero alisaba

una superficie plana que lo pudiera sostener . Luego,

cavaba arena muy húmeda, pero que no estuviera

tan húmeda que goteara, y la aplastaba dentro de la

cubeta . Luego con suavidad le daba unos golpecitos

para que la arena saliera y formara la base de mi

castillo .

Le agregaba detalles aplastando arena húmeda

entre mis manos y alisándola para formar torres de

vigilancia, balcones y paredes de protección . A veces

cavaba un profundo foso, o zanja, alrededor del

castillo y lo llenaba con agua . Generalmente hacía

chorrear arena acuosa por los bordes para hacer

diseños sofisticados en los techos y por las paredes .

Como toque final, le solía agregar caracoles, pedacitos

de madera que flotaban en el mar, algas y vidrios

marinos que había juntado con Juan más temprano

en la mañana .

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Hormigas en mi cama • Nivel T 7 8

Vidrios marinosA veces Juan me llevaba con él para caminar por

la playa y buscar regalos del mar . Juan llamaba a los

tesoros que encontrábamos “regalos”, porque muy

de vez en cuando podíamos encontrar algo muy

interesante . Él había encontrado pedazos de metal

o madera de los barcos, dientes de un pez grande

y hasta monedas . A Juan le gustaba especialmente

encontrar vidrios marinos, los cuales coleccionaba .

Juan me contó que los vidrios marinos son vidrios

rotos que se habían gastado con el tiempo por el

viento, las olas y la arena . Esto hacía que los afilados

bordes tomaran forma redondeada y de esa manera

fuera lindo sostenerlos . Los pequeños pedazos de

vidrio resplandecían brillantemente cuando el sol

brillaba a través de ellos . Juan encontraba la mayor

parte de los vidrios marinos durante la marea baja,

después de que una tormenta agitara el océano . Decía

que la mayor parte de lo que aparecía con la marea

era de comienzos del 1900, cuando las personas

tiraban vidrios al mar desde los barcos a vapor.

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Hormigas en mi cama • Nivel T 9 10

Cuando íbamos con Juan a buscar regalos

solíamos revisar los que habíamos juntado antes

de que yo construyera mi castillo de arena ese día .

A principios de mi visita, había aprendido a

preguntarle a Abu en la mañana sobre los informes

locales de la marea . Me explicó que los podía escuchar

en la radio o podía leer sobre ellos en el periódico

del lugar también . Quería averiguar los mejores

momentos para encontrar vidrios marinos y para

construir mis castillos .

Para mi gran consternación, durante la marea

alta las olas que venían destruían mis castillos;

los arrastraban al mar . Abu decía que la marea,

o el descenso y la crecida del agua de mar, la causa

la atracción, o arrastre, del sol y la luna . Alrededor

de cada 12 horas le decía adiós al castillo de

ese día . Luego podía comenzar todo nuevamente,

construyendo diferentes castillos y probando nuevas

maneras de darles forma y decorarlos .

VisitantesEstaba pasando un verano estupendo . Abu me

había dado tareas pequeñas como hacer mi cama,

lavar los platos y barrer los porches . En general tenía

la libertad de vagar por mi parte de la playa entre dos

espigones, andar en bicicleta, leer libros, hacer amigos

entre los niños que estaban de visita, o investigar las

tiendas del pueblo .

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Hormigas en mi cama • Nivel T 11 12

Sólo tenía un problema y no sabía cómo resolverlo .

Tenía hormigas en mi cama . Las hormigas no

vivían realmente en mi cama . Sólo la atravesaban

lentamente . Parecía ser un obstáculo en su camino .

¡En vez de pasar por al lado rodeándome, caminaban

por encima de mí! No podía dormir bien pensando

en las espeluznantes y lentas criaturas deslizándose

a través de mí en la noche .

No quería ni aplastar ni pisar ni rociar con aerosol

a las hormigas . Sólo quería que pasaran por otro

lugar . Fui a la biblioteca del pueblo y le pregunté a la

bibliotecaria si podía revisar libros sobre hormigas

para encontrar una solución a mi dilema . Hojeé

varios, saqué cuatro y volví para la casa de Abu .

HormigasA medida que leía, aprendía que las hormigas viven

en colonias que pueden llegar a existir durante varios

años . Cada colonia tiene por lo menos una reina que

pone los huevos . En alrededor de 25 días, los huevos

se convierten en larvas. En otros 10 días, las larvas

hacen capullos blancos para cubrirse . Dentro de los

capullos, las larvas se convierten en pupas con forma

de hormiga . En total, para que una nueva hormiga

obrera nazca se necesitan casi 60 días . En una sola

colonia, miles de hormigas obreras encuentran comida,

construyen sus nidos y cuidan a su reina y a las crías

de ella . El libro decía que las hormigas comen una

variedad de comida tales como otros insectos, semillas

y néctar, que es el jugo dulce que producen las plantas .

Ciclo de vida de la hormiga

larvapupa

huevohormiga obrera

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Hormigas en mi cama • Nivel T 13 14

A medida que seguía leyendo, aprendí que el tórax

contiene tres pares de patas . Al final de cada pata hay

una afilada garra que ayuda a la hormiga a escalar

paredes . Una hormiga tiene patas tan fuertes que si

un hombre pudiera correr igual de rápido que una

hormiga, podría correr a la misma velocidad que

un caballo de carreras .

El abdomen contiene el estómago . Entre el tórax

y el abdomen hay uno o dos bultos llamados nódulos .

Las hormigas no respiran como lo hacemos nosotros

ya que no tienen pulmones . Tienen agujeros por todo

el cuerpo, que absorben oxígeno y eliminan dióxido

de carbono .

Finalmente, llegué a una parte del libro que

hablaba sobre cómo las hormigas dejan pistas de olor

para encontrar el camino de su nido hasta la comida

y viceversa . Deduje que las hormigas en mi habitación

deben de haber dejado un camino con olor que

atravesaba mi cama .

Descubrí que las hormigas tienen tres partes,

la cabeza, el tórax y el abdomen. La cabeza contiene

el cerebro, dos ojos, las mandíbulas y las antenas .

A los ojos de las hormigas se los denomina ojos

compuestos porque cada ojo está compuesto en

realidad de muchos ojos . Las mandíbulas de una

hormiga se abren y cierran como tijeras . Las hormigas

usan las antenas para oír, oler, gustar y comunicarse

tocándose con ellas .

Todo esto era muy interesante, pero todavía

no sabía cómo sacar las hormigas de mi cama .

ojos compuestos

Cabeza de hormiga

mandíbulas

antena

abdomen tórax cabeza

Cuerpo de hormiga

nódulo

patasgarras

Partes de una hormiga

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Hormigas en mi cama • Nivel T 15 16

La búsquedaTraté de seguir a las hormigas que marchaban

hacia mi habitación, para encontrar de dónde venían

y adónde iban . Descubrí que estaban encontrando

migas en el piso y en mi cama . Luego, llevaban las

migas cerca de la ventana, de donde escapaban por

entre la carpintería y la pared . Fui afuera y traté de

encontrarlas saliendo de la casa . Vi muchas hormigas,

pero ninguna estaba llevando migas de galletas . ¡Tal

vez vivían debajo de la casa! ¡Tal vez vivían en las

paredes! Decidí confesarle a Abu .

Me di cuenta que debía encontrar su nido . Leí que

podía estar debajo de una piedra, debajo de un tronco

o en un jardín . Las hormigas obreras frecuentemente

entran en las casas en busca de migas de comida,

especialmente cosas dulces . Pensé que había tenido

cuidado al comer en mi habitación, pero las deliciosas

galletas de Abu, especialmente las de mantequilla

de maní, sí que hacían migas . Las hormigas

transportaban comida, como por ejemplo las galletas,

hasta su nido después de ablandarlas con saliva y

morder para sacar un pedazo . Leí que una hormiga

puede transportar de 20 a 50 veces el peso de su

cuerpo . Yo pesaba 35 kilos . Eso quería decir que

si fuera tan fuerte como una hormiga, podría

transportar de 680 a 1,700 kilos!

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Hormigas en mi cama • Nivel T 17 18

Le conté a Abu sobre las hormigas y hasta sobre

las migas de galletas . También le dije que no quería

lastimarlas, sólo quería que se fueran de mi cama .

Le pregunté a Abu si podía usar su aspiradora

para barrer las migas de mi habitación . También le

pregunté si podía mover la cama, cambiar las sábanas

y mover la cama más cerca de la ventana . Prometí

no comer más galletas en mi habitación nunca más .

Me preguntaba si esto terminaría con mis problemas

de hormigas .

Cuando estaba en la cama esa noche, me puse a

pensar en todas las hormigas que habían marchado

por mi habitación . Decidí preguntarle a Abu si podía

poner miel en el piso debajo de la ventana de mi

habitación para darle de comer a las hormigas, ya

que les había quitado su fuente de comida . Cerré los

ojos con una sonrisa en mi cara . Luego escuché unos

ruidos extraños afuera, en mi ventana . Miré hacia

fuera y vi cosas con alas volando alrededor de la luna .

Estas cosas negras que volaban parecían ir y venir en

picada hacia la casa . ¡Oh, no! ¡Tenemos Murciélagos

en el ático!

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Hormigas en mi cama • Nivel T 19 20

Glosarioabdomen (sust.) la parte trasera del cuerpo de una hormiga

(pág . 13)

barcos a vapor (sust.) barcos con un motor a vapor (pág . 8)

capullos (sust.) la cubierta aterciopelada alrededor de una larva durante su transformación a adulto (pág . 12)

colonia (sust.) un grupo grande de criaturas que viven juntas (pág . 12)

consternación (sust.) sentimiento de decepción o tristeza (pág . 9)

foso (sust.) una zanja llena de agua que protege el castillo (pág . 6)

larva (sust.) la primera etapa del crecimiento de una hormiga y otros artrópodos (pág . 12)

marea (sust.) la subida y bajada del océano producida por la gravedad de la luna y el sol (pág . 8)

nódulos (sust.) bultos o chichones (pág . 14)

obstáculo (sust.) algo que se interpone en el camino, impidiendo el progreso o movimiento (pág . 11)

pupa (sust.) etapa de un insecto entre la de larva y adulto, durante la cual el insecto se encuentra dentro de un capullo (pág . 12)

revestida de cedro cubierta con tejas de madera que se cortan (adj.) de árboles de cedro colorado (pág . 4)

saliva (sust.) fluido cristalino de la boca; escupidura (pág . 15)

tórax (sust.) la parte del medio del cuerpo de un insecto entre la cabeza y el abdomen (pág . 13)

Las galletas de mantequilla de maní de AbuIngredientes:1 taza de azúcar negra¾ taza de azúcar blanca2 huevos¼ cucharada de té de sal2 tazas de harina1 taza de grasa o mantequilla1 taza de mantequilla de maní1 cucharada de té de vainilla2 cucharadas de té de polvo de hornear¼ taza de azúcar (para sumergir el tenedor)Instrucciones:1 Calentar el horno a 177 grados C (350˚ F).2 Mezclar juntas el azúcar negra y blanca,

la mantequilla o grasa y la mantequilla de maní hasta obtener una crema.

3 Volcar los 2 huevos y mezclar bien.4 Agregar la vainilla.5 Mezclar la sal y el polvo para hornear con

la harina. Lentamente agregar la mezcla de la harina a la mezcla de la mantequilla de maní, mezclándola a medida que la agrega.

6 Hacer bolitas del tamaño de una bola de golf.7 Aplastar sobre una placa para galletas con un

tenedor sumergido en azúcar. (Sumerja un tenedor dentro de azúcar blanca y presione con él sobre la galleta.)

8 Hornear a 177 grados de 8 a 10 minutos9 Dejar enfriar en una superficie enrejada.

Rinde alrededor de tres docenas de galletas.Nota: Pídele a un adulto por favor que te ayude cada

vez que utilices una batidora eléctrica o el horno.

Apéndice