Filosofía Política I

I. LA TRADICIÓN LIBERAL

Tradición es un argumento distendido en el tiempo en el que ciertos acuerdos fundamentales se definen yredefinen por los conflictos, tanto con sus críticos externos como entre sus críticos internos.El liberalismo es la tradición política que ha gozado de amplia hegemonía y ha sido la corriente contra lacual se han definido parte de las otras. Sus principios (individualismo, propiedad privada, libertadindividual, igualdad, división de poderes...) han ejercido una gran influencia en las sociedades occidentales.Esta tradición posee una gran variedad de expresiones, no es un cuerpo homogéneo de ideas.

1. ORÍGENES Y FUNDAMENTOS DE LA TRADICIÓN LIBERAL.El liberalismo comienza a gestarse desde mediados del s. XVII y triunfa en los dos siglos siguientes,llevando a una transformación de las sociedades de la época. Esta transformación tuvo muchas causas,siendo las más importantes las CUATRO GRANDES REVOLUCIONES que marcaron el nacimiento dela modernidad:

1. La Revolución científica, con el establecimiento de una nueva ciencia basada en la razón, laobservación y la experimentación.

2. La Reforma protestante, con el cuestionamiento del poder papal y de la Iglesia Católica, y elrecurso a la libertad religiosa.

3. La Revolución económica, la cual supuso la llegada del capitalismo, la idea de la propiedadprivada y la expansión del comercio.

4. Las Revoluciones políticas inglesa, americana y francesa, con nuevas formas de poder social y elreconocimiento de derechos y libertades de los ciudadanos.

Es importante también la Ilustración y su proyecto de alcanzar el progreso material, social y moral.Las figuras importantes para la aparición del primer liberalismo o “liberalismo clásicos” son JOHN LOCKE,MONTESQUIEU, DAVID HUME, ADAM SMITH, IMMANUEL KANT, entre muchos otros.Si hubiese que definir un momento preciso en el nacimiento del liberalismo, éste sería el de los LEVELLERS:grupo de pequeños propietarios y miembros del ejército de Cronwell que en Inglaterra, a mediados del s.XVII, planteó públicamente demandas y derechos individuales por los que se enfrentaron con elautoritarismo religioso y político de la época, es decir, la Iglesia Católica y la monarquía de Carlos I.Esto refleja que, desde el principio, el liberalismo se preocupa por los problemas del individuo y su lugaren la sociedad.

El individualismo considera al individuo como un ser que tiene un vida independiente, antes de cualquierasociación humana, por lo que no debe nada a ella. Es un sujeto racional, capacitado para dirigir suconducta y determinar sus preferencias, necesidades y fines. Es propietario, poseedor de su persona ycapacidades, así como de los frutos de su trabajo. Se desarrolla mediante la acumulación en plenacompetencia con los otros.Todo esto, define al individuo como libre e igual, poseedor “por sí mismo” de un derecho natural delibertad e igualdad. La tradición liberal concibe la libertad como prerrogativa inherente a todo individuo(birthright como denomina JOHN MILTON) pero tiene presente que necesita ciertas restricciones. Losliberales clásicos saben que la libertad absoluta de todos generaría interminables conflictos. Por ello lalibertad no consiste en la posibilidad de que cada uno haga lo que quiere, sino en estar libre de laviolencia de los otros.

La sociedad es concebida como obra y fruto de la voluntad de unos individuos que la crean porconveniencia para hacer posible la vida común. HUME destaca que también posibilita la división deltrabajo, aumentando nuestro poder sobre la naturaleza. La sociedad, al estar formada por individuosplurales con intereses diversos, está en constante competencia y conflicto.

Este pluralismo y conflicto plantea tres problemas:1. Cómo alcanzar y preservar una sociedad pacífica.2. Cómo constituir la sociedad para que las libertades y derechos individuales estén protegidos.

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3. Cómo organizar la sociedad para que los distintos fines e intereses influyan en la toma dedecisiones políticas.

Estos problemas se afrontaron recurriendo a diferentes interpretaciones de la tolerancia y el pluralismoreligioso, social y político. Condujeron a pensar que la mejor solución era la constitución de un Estado alque los individuos debían ceder solo su derecho natural a castigar. La función del Estado residiría, paraLOCKE, en la protección de la vida, libertad y posesiones individuales; mientras que para HUMBOLDT

consistiría en la preservación de la seguridad interior y exterior. La idea parte de la existencia de ciertosderechos individuales que el poder político tiene obligación de respetar, proteger y promover, así como laobligación de gobernar mediante leyes generales y conocidas de antemano. Además se debe evitar laconcentración del poder en manos de una persona u órgano. Para los liberales clásicos, la forma de gobiernoque debía de establecerse era un “gobierno representativo” y defendían la monarquía constitucional.

2. INTERLUDIO: LA CRISIS Y LOS ROSTROS DEL LIBERALISMO.El liberalismo clásico se configura para defender un modelo de sociedad y de economía sometido aconstantes cambios. Las sociedades en las que surge el capitalismo (s. XIX) son ya muy diferentes deaquellas en las que nació el liberalismo (s. XVII). El enorme desarrollo de la industria, la aparición desociedades anónimas, el nacimiento de los partidos y los sindicatos de masas y el aumento de laintensidad y conflicto en la lucha por el poder son algunas de esas transformaciones que marcan ladiferencia. Esto acentúa la actividad reguladora del Estado con el doble (y contradictorio) propósito deorganizar el funcionamiento de la economía capitalista y mejorar las condiciones de vida y trabajo de lapoblación. Esto llevó a una crisis interna en la tradición liberal, debido a la necesidad de unir lasantiguas ideas con la creciente demanda de organización social. Si el período que había transcurrido desdelas guerras napoleónicas hasta la Primera Guerra Mundial había constituido la era del liberalismo, losaños posteriores supondrían un rechazo hacia la tradición liberal. Esto llevó a muchos liberales a concluirque debían redefinir su teoría y práctica política para abrir el camino hacia un nuevo liberalismo.Defendieron un amplio programa de reformas sociales que aspiraba a forjar un nuevo orden social en elque se diesen las condiciones de vida necesarias para la liberación y el desarrollo de todos los individuos. Se perfila un nuevo liberalismo “social” caracterizado por su interés en distanciarse del liberalismoclásico unido a una mayor sensibilidad hacía las desigualdades e injusticias provocadas por elcapitalismo. STUART MILL, J. A. HOBSON, J. M. KEYNES, J. RAWLS, R. DWORKIN

Pero la redefinición también llevo a un “nuevo liberalismo clásico” dispuesto a rechazar la crecienteregulación económica y asistencia social del Estado. Se pretende recuperar el individualismo posesivo ylos principios básicos de la sociedad de mercado. Era un liberalismo despreocupado por las desigualdadessociales y en contra de la creciente intervención del Estado. W. BAGEHOT, H. SPENCER, F. VON HAYEK

3. EL LIBERALISMO SOCIAL: LA REVUELTA CONTRA LA LIBERTAD NEGATIVA.Muchos liberales de finales del s.XIX y principios del s. XX percibieron que las consecuencias practicasdel liberalismo clásico tuvo consecuencias negativas para la mayorías de ciudadanos. Ofrecía coberturaideológica al enriquecimiento de una pequeña parte de la población y al empobrecimiento de la mayoría:aumento de la pobreza, condiciones laborales infrahumanas, concentración del poder en unos pocos.Contra esto, muchos liberales defendieron la necesidad de un nuevo liberalismo, una revuelta contra “ lalibertad negativa” y sus consecuencias.

El viejo individualismo debía ser sustituido por un “nuevo individualismo” para el cual el individuo esun ser social y autónoma, además de racional. Un ser cuya naturaleza únicamente en condicionesadecuadas podría ser capaz de alcanzar su plena realización. La sociedad es una entidad colectivaconformada por individuos racionales y autónomos pero igualmente, independientes, cooperadores ycapaces de ayuda o asistencia mutua. Aboga por un “individualismo social”, el cual reconoce la dignidady autonomía individual de un individuo socialmente condicionado. La individualidad de cada uno seforja histórica y socialmente y el pleno desarrollo de la mismo es imposible sin la existencia de ciertascondiciones que han de ser garantizadas por la sociedad y el Estado. El nuevo liberalismo concibe el Estado como una condición necesaria para el ejercicio de la libertad por parte

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de todos. Alude a la “libertad positiva”, “facultad o capacidad positiva de hacer o disfrutar” (T. H. GREEN). Los nuevos liberales creían que la libertad debía ser restringida en los casos en que se pusiera enpeligro el desarrollo físico, intelectual o moral de otros o el bienestar social, especialmente en el caso delderecho de propiedad. Este derecho tiene un carácter social, porque en una sociedad con división detrabajo, cualquier propiedad y riqueza es producto de un conjunto de individuos. Por ello el Estado tieneel derecho y la obligación de regular su uso y disfrute.

Para el liberalismo social el desarrollo del individuo y el ejercicio de la libertad positiva están vinculadoscon la igualdad, la justicia social y la redistribución de la riqueza. Para este liberalismo, las desigualdadesson producto de las diferentes circunstancias sociales y personales de los individuos, así como del modoen que son tratadas por las instituciones sociales. El resultado de la competencia está influido por lascondiciones en las que cada individuo inicia dicha competencia. Por ello, la igualdad de oportunidadesse alcanzaría a través de un plan de reformas sociales destinadas a igualar las condiciones de partido deaquellos que han de competir. Esta igualdad exige un amplio plan de reformas por parte del Estado,ofreciendo ciertos recursos, bienes o medios. Es especialmente relevante la educación ya que en palabrasde RAWLS “es la oportunidad de oportunidades”.

Esto dio lugar a lo que se llamó Estado social, un Estado interventor y asistencial que debía (además deregular el proceso económico) alcanzar el pleno empleo y poner fin a la pobreza, enfermedades ycarencias educativas a las que estaba sometida la mayoría de la población. Se perseguía aumentar lasoportunidades de los individuos, siempre primando la libertad sobre el resto de principios.

El nuevo liberalismo habría de ser democrático e igualitarista, por lo que era necesario el sufragiouniversal. La libertad política es un recurso social imprescindible para el pleno desarrollo individual ypara la implicación del individuo en su comunidad. Defendían una democracia representativa, en la quela toma de decisiones se desarrollara mediante el gobierno local recurriendo a medios de control yparticipación directa de la ciudadanía, como el referéndum.

4. EL LIBERALISMO CONSERVADOR: LA REACCIÓN CONTRA LA LIBERTAD POSITIVA.Mientras se gestaba el liberalismo social los “nuevos liberales clásicos redefinian a su modo elliberalismo. Lo hicieron a partir de una crítica de la realidad sociopolítica. Perciben como un terrible errorla creciente intervención reguladora y asistencial que exige el control del funcionamiento de la economíade mercado y el establecimiento de condiciones para el logro de la libertad positiva. Todo ello es fruto dela osadía de creer que es posible planificar y controlar el desarrollo de la vida social y económica. Estofomenta la pasividad de los individuos al extender la idea de que es el Estado el responsable de ponerremedio, convirtiendo a los individuos en adictos que depende de su ayuda. Recuperar los principios del “autentico” liberalismo exige ofrecer la respuesta correcta a qué puede hacery qué no el gobierno. El liberalismo conservador responde recuperando el individualismo radical parael cual los individuos existen como “vidas separas” cuyos derechos son tan amplios que convierten enilegítima toda actividad del Estado.La propiedad privada es el primero y más importante de los derechos individuales, cuyos limitacionesdeben ser escasas. Desde esta perspectiva, el derecho a la apropiación y acumulación ilimitada deposesiones se convierte en un fin en sí mismo. La propiedad privada constituye la más importantegarantía de la libertad individual. La libertad no consiste en la posibilidad de hacer lo que cada unoquiera. Consiste en la posibilidad de decidir y de actuar dentro de un ámbito en el que la coacción ointerferencia externa queda reducida al mínimo.La desigualdad es un mal a pagar. La igualdad en el liberalismo conservador queda reducida a unaigualdad ante la ley, donde la igualdad de oportunidades se entiende como el igual reconocimiento de losméritos y capacidades de cada individuo. Se entiende la competencia como una carrera en ala que ningúnobstáculo debe impedir a las personas lograr las posiciones acordes con sus talentos. Queda excluidocualquier procedimiento de justicia social o de redistribución de la riqueza . Los problemas se deberánafrentar mediante la caridad privada.

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El ámbito de actuación del Estado será objeto de varias respuestas entre los conservadores. Losultraliberales sostendrán que es preciso “vender el Estado en pequeñas piezas” y devolver sus tareas almercado. Otros opinan que las funciones deben ser soló tareas protectoras de “los derechos naturales delhombre”. La posición liberal-conservadora más representativa, F. HAYEK o J. BUCHANAN, creen que elEstado debe realizar funciones de protección y de producción, imprescindibles para el funcionamientode una sociedad libre y para el desarrollo y crecimiento económico. Defienden una democracia elitista, en la que la élite debe reducir las vías de participación política de losciudadanos, limitándose a la elección de los lideres.

5. LAS TENSIONES DEL LIBERALISMO.La tradición liberal se encuentra entre el conservadurismo y el socialismo. Sus desacuerdos y debatesinternos se han desarrollado a la par que sus tensiones externas. El liberalismo social constituye unconstante y prolongado esfuerzo por configurar un nuevo liberalismo social que comparte un conjunto deideas y supuestos. El liberalismo conservador ha aportado otra revisión del programa liberal cuyo objetivoha sido recuperar el individualismo posesivo y los principios básicos de la sociedad de mercadodefendidos por buena parte del primer liberalismo.Las tensiones externas del liberalismo continúan siendo de mucha relevancia y complejidad. Laconfrontación de la tradición liberal con la «alternativa» socialista, la «reacción» conservadora y la«crítica» anarquista, ha sido una constante desde los inicios de la modernidad hasta el presente, y noparecen existir razones suficientes para creer que tales confrontaciones hayan llegado a su fin. Talestensiones existen y continuarán existiendo a menos que creamos que ha tocado a su fin el conflicto entrelos modelos ideopolíticos rivales. Pero tal creencia es una noción absurda.