Carlos Chica Guillermo Rico Carolina SanínDirector de programas de la Presi-dencia habla sobre el proceso de paz y sus consecuencias. Página 4

El escritor hizo el lanzamiento de su libro-crítcica Una mentra llamada Post-conflicto. Página 4

La columnista se vio envuelta en un de-bate sobre el feminismo y en una pelea con Matador en la Filbo. Página 4

“Este mundo también es mío”Gina Potes

Fue la primera mujer en Colombia que denunció por ataques con sustancias químicas. 19 años después del ataque Gina confiesa como fue el proceso de recuperación, cómo fundó Reconstruyendo Rostros, las falencias del Estado para atender las víctimas y ha-bla sobre el caso de Natalia Ponce de León. • Página 2

Miércoles 01 de junio de 2016 | Número de publicación 01 | Edición Externado

AIESEC: Una mentira con buena caraLa experiencia internacional que ofrece esta ONG fue una estafa para extranjeros que escogieron a Colombia como destino para hacer servicio social

Para muchos jóvenes, in-gresar a la universidad es la oportunidad de abrir sus mentes. Grupos de danza, música, deportes, grupos políticos, contac-tos y Organizaciones No Gubernamentales (ONG) son algunas de las nove-dades que cualquier estu-diante puede encontrar en su universidad.Una de ellas es AIESEC (Asociación internacional de estudiantes de Cien-cias Económicas y Co-merciales), organización sin ánimo de lucro que

fue fundada en 1949 con el objetivo de alcanzar la paz por medio de la coo-peración internacional de jóvenes universitarios sin importar su campo de estudio. Está presente en 127 países con 70.000 miembros voluntarios a nivel mundial.Al ser una organización fiablez y prestigiosa, es muy factible que se en-tregue la confianza sin cuestionarse si realmente valdrá la pena acceder a los programas que ofrece AIESEC. • Páginas 6-7

AIESEC: Experiencia Internacional

Gina Potes Foto: Reconstruyendo Rostros

Zona CrónicaEn los zapatos de Paola GómezVivir con un salario mínimo no es fácil, pero no es raro. 55% de los colombianos deben sobrevivir con $689.454. Paola, tiene dos hijas, vive en Soacha pero atraviesa la ciudad para llegar a su lugar de trabajo: La Candelaria• Página 9

130 años del Externado

Una celebración a gran nivel El lunes 15 de febrero la Universi-dad celebró 130 años de su funda-ción. La ceremonia fue precedida por el rector Juan Carlos Henao y contó con la asistencia de persona-lidades importantes del país como el Presidente Juan Manuel Santos. Además a decanatura cultural pu-blicó libros conmemorativos con recopilación de poemas de rectores anteriores y la historia de la univer-sidad Externado. • Página 3

Minería y desarrolloUn regalo del Externado al país

Minería y Desarrollo es el nombre de la investigación realizada duran-te dos años por la Universidad Ex-ternado de Colombia. La entrega se dio en cinco tomos, los cuales, abordan el tema de la minería en Colombia desde sus co-mienzos hasta el impacto ambiental en comunidades y territorios.

La colección, que contó con la participación de 90 expertos de diferentes departamentos, fue en-tregada al presidente de la Repú-blica Juan Manuel Santos el 15 de febrero durante la conmemoración de los 130 años de la Universidad.• Página 3

MIÉRCOLES 01 de junio de 20162

“Este mundo también es mío”

Gina Potes, tiene 39 años. Su vida cambió cuando tenía 20: Fue la primera persona en denunciar por agresión con sustancias químicas en nuestro país. Actualmente es la directora de la fundación Recons-truyendo Rostros, que ella misma fundó, hace más de tres años.No imaginó que al abrir la puerta de su propia casa, ubicada en el barrio San Vicente en el sur de Bo-gotá, su hermana y su primogénito serían testigos de como, mientras le explicaba a la desconocida que llamó a su pueta como llegar a un jardín infantil, un hombre se le acercó, le roció una sustancia que ella desconocía y antes de salir co-rriendo le dijo “eso le pasa por ser tan bonita“.Cinco horas soportó -aquel 28 de octubre de 1996- el ardor del áci-do sobre su cuerpo. Según ella, el Hospital del Tunal fue ineficiente a la hora de atenderla.Duró dos meses en el Hospital Si-món Bolívar en el área de cuidados intensivos, Se sometió a 26 cirujías y 70 procedimietnos quirúrjicos, pues el ácido le afecto la cara, el cuello, sus senos y el abdomen.19 años después, Gina es promoto-ra de la Ley 1639 que endurece pe-nas para quienes realicen ataques con ácido. Para sus compañeras, ella es un ángel que les enseñó a mirar la vida de una forma positiva.

Hoy es una mujer diferente a la que era hace 19 años. Es segura de sí misma y de su belleza. No tiene miedo de decir las cosas, no baja la mirada cuando habla, toca su cabe-llo con gran admiración y mostran-do lo hermosa que es. No espera lastima de nadie ni consuelo, como dice ella, “soy un ave Fénix”.En su oficina, se exhiben fotogra-fías de otras víctimas de ataques| químicos. Allí habló sobre su rena-cimiento y de cómo fue la construc-ción de su futuro.

Leidy Lozano: ¿Fue usted la prime-ra mujer en Colombia atacada con sustancias químicas?Gina Potes: Yo soy la primera mujer registrada, pero no soy la primera víctima de ataque con químico. Mi caso es el primero conocido, donde denuncié lo que me había pasado.L.L.: Después del ataque, ¿qué es lo que le da fuerzas para seguir?G.P.: 15 años después de estar su-friendo, de estar mal, de quejarme, victimizarme y recibir tanto rechazo, comprendí que la vida continúa y depende de ti si te dejas destruir. Me hace seguir adelante una familia maravillosa, mis hijos, poderme des-pertar cada mañana, sentir la brisa en mi piel.

L.L.: ¿Alguna vez se preguntó por qué a usted?

G.P.: Claro, pero con el pasar del tiempo entendí que no era un por qué a mí, sino un para qué. Esto hace que me levante y genere todo lo que se ha generado a raíz de mi historia y experiencia. L.L.: ¿Qué disfruta hacer en su vida diaria?G.P.: Me gusta estar con mi familia, verme una buena película en com-pañía de mis hijos, comer, ver el sol en las mañanas y sentirme tran-quila, tener sexo, salir bailar; pero lo que realmente me encanta es poder ayudar, eso me transforma, me llena de motivos para seguir lu-chando y viviendo.

L.L.: ¿Cómo la ayudó su familia en el proceso de recuperación?G.P.: Mi familia fue fundamental, fue mi bastón, mi consuelo, mi polo a tierra en esos momentos donde yo no quería vivir. Ellos es-taban ahí para acariciarme mis cica-trices, pero también para decirme si iba a seguir o me iba a morir, por-que me los estaba llevando a todos. Cada jugó un papel importante en la recuperación física y psicológica.

L.L.: ¿Cómo vuelve a creer usted en el amor?G.P.: Después de mucho tiempo, conocí una persona que me abrió los ojos, que me hizo entender que

yo estaba viva y sentía, que yo podía amar, que seguía siendo una mujer, que ninguna cicatriz me hace me-nos mujer. Volví a creer en las cosas bonitas de la vida.

L.L.: ¿Cómo piensa usted que se puede evitar más casos de ataques con agente químico?G.P.: Es cuestión de conciencia, so-mos tan individualistas. Desde que yo esté bien el resto no me impor-ta. Es una lucha que debemos tener todos, no solo las víctimas. No se trata de justificar al victimario por-que él tuvo un tiempo para planear y ejecutar lo que iba hacer.

L.L.: ¿Qué hace el Estado para ayu-dar y tratar de manera oportuna a las víctimas?G.P.: Absolutamente nada. El Esta-do hasta el 2012 no sabía, no enten-día, no racionaba en cuanto a este tipo de violencia. Después del 2012 cuando se crea la ley 1639 ya hay otro proceso donde nos volvemos más visibles, la violencia deja de estar escondida. Pero no hay mayor impacto ni importancia a la hora de atender a una víctima.

L.L.: ¿Qué tratamiento recibe una víctima cuando llega a un centro de salud?G.P.: La víctima en un centro de sa-lud siempre ha sido violentada, no

hay recursos y la emergencia no la cubre el POS.

L.L.: ¿Cómo nace la Reconstruyen-do Rostros?G.P.: La Fundación Reconstruyen-do Rostros nace de la necesidad de justicia, de mil derechos vulnera-dos, de tristezas, agonías. Nace de puertas cerradas en la cara, de mi historia y la historia de cientos de miles de mujeres que han sido víc-timas vulneradas.

L.L.: ¿Por qué cree que una per-sona se vuelve indiferente a estos hechos?G.P.: Hemos naturalizado la vio-lencia, hemos naturalizado esos episodios trágicos donde las mu-jeres pierden la vida, su rostro, su esencia de ser mujer. Se naturaliza y se justifica.

L.L.: ¿Es suficiente la Ley de Natalia Ponce de León?G.P.: La ley no es retroactiva, esto quiere decir que del 2016 para ade-lante si llega haber una agresión y una buena investigación, puede fun-cionar y dejar castigos ejemplares. Sin embargo, la ley desde el día que se sancionó no recoge ninguno de los casos previos a esa fecha. Enton-ces, las victimas anteriores queda-mos igualmente vulneradas.

L.L.: ¿Por qué el caso de Natalia Ponce de León tiene tanto eco y los demás no?G.P.: Porque aquí todo se mueve bajo la condición social que tu ten-gas y tu entorno.

L.L.: ¿Cree usted que se llegar a perdonar a el victimario?G.P.: Yo creo que llega el momento donde uno suelta. Mas que sentir odio o rencor, se siente es dolor y tristeza. En mi caso personal, yo pensaba en por qué una persona se atrevió a causar tanto dolor. Lloro. Son tantas las sensaciones y conse-cuencias. Aún lloro cuado entro al quirófano. Yo pienso que se puede llegar a soltar y afrontar, pero no a perdonar por completo.•

Gina Potes

Gina Potes, fundadora de Reconstruyendo Rostros. Foto: Reconstruyendo Rostros

MIÉRCOLES 01 de junio de 2016 3

El lunes 15 de febrero la Universi-dad celebró 130 años de su funda-ción. La ceremonia fue precedida por el rector Juan Carlos Henao y contó con la asistencia de persona-lidades importantes del país como el Presidente Juan Manuel Santos y el Contralor General Edgardo Maya, también director de la aso-ciación de exalumnos.La conmemoración principal em-pezó a las 11 a.m. con el himno nacional y el discurso del represen-tante estudiantil, Sergio Tutaquim-ba, quien además de resaltar los va-lores institucionales, hizo una dura crítica a la situación educativa del país. Se realizó la entrega de la co-lección -realizada por los departa-mentos investigativos de la univer-

130 años del Externado: Una celebración a gran nivel

sidad, materializada en cinco tomos y titulada Minería y Desarrollo-, a Santos. El evento concluyó con la presentación de la tunaPara la celebración principal la uni-

versidad fue decorada con globos verdes y blancos, colores institu-cionales. En la plazoleta del A se colocaron pantallas gigantes que trasmitían la ceremonia en tiempo real. Al finalizar la presentación musical se obsequió pastel a los asistentes del evento

Así, Andrés Ramírez, estudiante de Administración de empresas turísti-cas y hoteleras y líder del proyecto Al Externado en bici, calificó la efi-cacia de la universidad en el desa-rrollo de este proyecto. El día sin carro ni moto que se llevó a cabo el jueves 4 de febrero de 2016 no fue un impedimento para que los es-tudiantes del Externado pudieran transportarse de una manera eficaz.El programa fue organizado por el departamento de bienestar de la Universidad, cuyo fin era motivar a los estudiantes a transportarse en grupos desde diferentes zonas de la ciudad, en bicicleta hacia su respectivo lugar de estudio. Según, participantes del proyecto el obje-tivo fue cumplido y la universidad habilitó 80 parqueaderos adiciona-les para evitar el sobrecupo de los

mismos. Se regalaron bebidas ener-gizantes para los primeros que lle-garon y manillas de la institución.Además, Ramírez afirma que hubo una mejora con el servicio de par-queaderos. De otro lado, Daniel Torres, encargado de las redes so-ciales de Tu Bienestar, aseguró que en ningún momento del día hubo necesidad de habilitar más zonas de parqueo.De otro lado, estudiantes como Laura Téllez, Omar Molina, Sebas-tián Flechas y Juan Pablo Benavides de las facultades de Contaduría, Ciencias Sociales, FIGRI y Comu-nicación social aseguraron que entre las 5:30 a.m. y las 8:30 a.m. el trasporte público (Transmilenio y SITP) prestó un servicio eficaz y veloz lo que les permitió llegar sin inconveniente alguno.

Día sin carro ni moto: Así se vivió en el Externado

Sin embargo la eficiencia pareció disminuir en hora valle, pues se presentó un atraso en diferentes zonas de los articulados de Trans-Milenio, lo cual ocasiono la espera de algunos estudiantes como Liz Ortiz y Leydy Martínez de más de 45 minutos, pues como lo afirmó una de ellas en media hora solo pa-saron dos buses J6 -que se dirigen hacia el centro de la ciudad por la 26-, topados totalmente, por lo que era imposible entrar en ellos.•

Minería y desarrolloUn regalo del Externado al país

Conmemoración 130 años de la Unviersidad Externado de Colombia Foto: Alejandra Santos Andrade

Minería y Desarrollo es el nombre de la investigación realizada du-rante dos años por la Universidad Externado de Colombia. La entrega se dio en cinco tomos, los cuales, abordan el tema de la minería en Colombia desde sus co-mienzos hasta el impacto ambiental en comunidades y territorios. La colección, que contó con la participación de 90 expertos de diferentes departamentos, fue en-tregada al presidente de la Repú-blica Juan Manuel Santos el 15 de febrero durante la conmemoración de los 130 años de la Universidad.“La academia da insumos para el debate, insumos para la discusión sobre un tema que estaba un po-quito abandono desde el punto de vista académico para el país”, dijo el rector de la Universidad. Esta obra es el aporte académico que la universidad hace al país, con la intención de generar un debate amplio en un tema que es de gran importancia. Los tomos recopilan los efectos de la minería, con im-portantes conclusiones sobre las

“La publicación salió barata. Son 238 mil que no reflejan el impacto que esto va a tener para el país”, dijo Juan Carlos Henao, rector de la Universidad Externado.

consecuencias de la minería ilegal.“No se puede satanizar la minería, no podemos decir que no puede haber minería porque no tendría-mos muchas cosas, la minería es un sector económico fundamental para el desarrollo de una sociedad (…) La verdaderamente problemá-tica, que es la minería ilegal, es más o menos el 60% de toda la produc-ción minera del país, la máxima productora de daños ambientales”, dijo el rector de la universidad.Se espera que la investigación, aho-ra en manos del presidente Juan Manuel Santos, suscite un debate más amplio y con más insumos, como dijo Ana Carolina González, coordinadora de investigación en recursos mineros-energéticos y editora de la investigación publica-ción Minería y Desarrollo. Como asegura Henao , esta publi-cación no es la única evidencia del segundo puesto que ocupa la uni-versidad como líder en publicacio-nes, también lo son los 147 títulos impresos en el 2015 •

Los cinco tomos de: Minería y desarrolloFoto: Leidy Lozano

“Hubo una pequeña congestión a la llegada del parqueadero, pues llegaban grupos de 30 o 50 perso-nas, sin embargo la universidad dio a basto con los parqueaderos que habilitó para este día”.

Participantes del proyecto Al Externado en Bici Foto: Bienestar Universitario

“El Externado seguirá educando para la libertad

antes que para la sumisión”

Sin embargo, este no fue el único evento que se realizó. La Orquesta Sinfónica de Colombia se presentó en el auditorio principal el mismo día. A lo largo de la semana se rea-lizaron charlas para las diferentes facultadas con invitados como To-más Piketty, economista francés y Daniel Samper Ospina, periodista y columnista colombiano. La decanatura cultural publicó li-bros conmemorativos con recopi-lación de poemas de rectores ante-riores y la historia de la institución. Los estudiantes recibieron benefi-cios económicos, como descuentos especiales, durante una semana, en los siguientes establecimientos: Cine Colombia, Florencia y Galería de Uffizi. •

MIÉRCOLES 01 de junio de 20164

Filbo y paz: Una moneda de dos caras

El proceso de paz no deja de ser un tema de discusión en estos días. La Feria del Libro -realizada en Bogotá, del 19 de abril al 2 de mayo- sirvió de escenario para reunir diferentes

perspectivas sobre la firma del acuerdo.

Este año la Feria del Libro en Bogo-tá dio de que hablar. Los youtubers, acapararon los debates de progra-mas radiales matutinos, prensa y televisión. El evento logró niveles récord en asistencia. A los booktubers se le sumaron personajes como Vicky Dávila, Fer-nando Vallejo y Svetlana Alexievich, premio Nobel de Literatura 2015.Sin embargo, hubo un tema actual que no podía faltar en los pabello-nes de la feria: El proceso de paz con las FARC.Dos personajes, con perspectivas diferentes hablaron con Ícono a cerca del objetivo de las implica-ciones que traería el post-conflicto para el país.De un lado, en un pabellón espacio-so y atractivo, se encuentra, Carlos Chica, director de La conversación

más grande del mundo, programa de la Presidencia de la República cuyo fin es la socialización de temas referentes con el conflicto armado. Su excelente disposición a escuchar críticas y preguntas incómodas por parte de los visitantes, es su secreto para tener éxito en su proyecto.

Alejandra Santos: ¿Por qué existe indiferencia a la hora de hablar de la paz?Carlos Chica: Existe mucha des-información a cerca de lo que son verdaderamente los diálogos de paz, se crean rumores que indispo-nen a la sociedad colombiana.

Además, existe un vacío histórico especialmente en los jóvenes, que les permitan comprender la com-plejidad del conflicto armado en Colombia. En la medida en que nos sentimos alejados del conflicto, encontrar una solución a un pro-blema que no consideramos nues-tro no es un prioridad en nuestras vidas. A.S: Como usted lo ha dicho, el proceso de paz provoca rencor yra-bia en la sociedad ¿Cómo captar la atención del público para hablar acerca de este tema?

C.C: Principalmente hay que enten-der el sentimiento de rencor que existe en la sociedad colombiana. Personalmente lo entiendo, mi her-mano fue secuestrado por las FARC, por eso no me molestan los comen-tarios negativos sobre el proceso. Intento ponerme en sus zapatos, y hacerles entender que al existir mucha desinformación sobre las consecuencias de los acuerdos, las personas empiezan a creer los ru-mores difundidos por opositores.

A.S: ¿A qué rumores se refiere?C.C: El mejor ejemplo que se pue-de dar es a cerca del punto que habla sobre participación política. La creencia general es que a los guerrilleros se le darán curules en el congreso sin necesidad de vo-tación popular. ¡FALSO! El acuer-do permite la creación de nuevos partidos políticos con garantías de seguridad, pues no queremos que se repita lo ocurrido con la Unión Patriótica hace unos años.

A.S: Una de las preguntas más fre-cuentes que le suelen hacer es “¿Al-gún día sabremos lo que se negocia allí?” ¿Cómo responde a esto?C.C: Para mí el problema radica en la falencia de la comunicación. La información existe pero no es bien divulgada. Actualmente, existen 4 portales en internet, como Mitos vs Realidades del Proceso de Paz, donde se responde las preguntas frecuentes. Existen foros y publica-ciones que no tienen el suficiente alcance mediático. Además el ruido de la contraparte, que asegura la confidencialidad en la negociación, suele tener más eco. Esa es la razón de este programa, hablar sin tapu-jos de la paz

A.S: Personalmente ¿Cree que es posible alcanzar la paz después del acuerdo?C.C: La paz es un ideal. Tenemos la ventaja de que las FARC es un gru-po de jerarquías, lo que facilita la probabilidad de un mayor numero de desmovilizados. Sin embargo la paz no es de Santos, de Timo-chenko, ni del Estado. La paz es de la sociedad, no importa el acuerdo si nuestro chip no cambia. Es nece-sario educarnos todos. ¿Cómo es posible que la primera norma en una reunión familiar sea no hablar de política? Estamos renunciando al derecho de ser actores políticos,

porque evitamos estos temas. A.S: ¿Cómo le ha aportado este programa a su vida profesional?C.C: Profesionalmente he aprendi-do a entender que el aprendizaje es diferente en todas las personas. Sin embargo, el proyecto me ha aportado más como ser humano. Soy víctima directa del conflicto, como ya lo dije, tuve familiares se-cuestrados, pero es diferente con-coer como esta violencia se vive tan crudamente en los pueblos. Con el programa vamos a zonas con un alto índice de violencia, allí se escuchan historias de madres de jó-venes que se fueron a la guerrilla y entiendes que los guerrilleros son personas que muchas veces por la necesidad tomaron un mal camino.

En contraposición, el escritor, Gui-llermo Rico Reyes, encontró en la Feria del libro la oportunidad de lanzar su segundo libro, Una men-tira llamada post-conflicto, en la que hace una dura crítica a la justi-cia que el acuerdo propone. Con di-nero prestado, alquiló un pabellón, a pocos metros, en el mismo pasillo y tres veces más pequeño que el de la presidencia. No dudó en hacer descuentos a algunos de sus clien-tes para que llevaran el libro, ni se indispuso cuando muchas perso-nas sin intención de comprarlo se acercaban a preguntar sobre la his-toria e investigación que realizó. Es comunciador social y periodista de la Sábana, se especializó en tratar temas relacionados con el conflicto armado en Colombia y las fallas del

“La paz no es de San-tos, de Timochenko, ni del Estado. La paz es

de la sociedad.”

“Lo más importante para que exista la jus-ticia es la verdad. Las víctimas necesitan el

derecho a la memoria.”

Estado que lo fortalecieronAlejandra Santos: ¿Cuál es su posición frente al proceso que se lleva a cabo en la Habana? Guillermo Rico: Soy totalmente consiente que soy un crítico de los procesos. No porque no quiera la paz sino porque no estoy de acuer-do con el modelo de justicia que se quiere aplicar. Si se mira con lupa el punto cinco, se darán cuenta que todos los criminales directos o indi-rectos pasarán sus casos a la justicia transicional, argumentando que fue un crimen de guerra, y puede llegar a quedar libre.

A.S: ¿El interés de escribir sobre este tema nace de una situación personal?G.R: Aunque no he sido una vícti-ma directa –digo directa porque todos hemos sufrido consecuen-cias del conflicto indirectamente- creo firmemente que mi carrera

periodística debe estar al servicio de las clases populares. Porque los ricos tienen voz, pueden pagar por tenerla, en cambio, los pobres no pueden hablar, no pueden denun-ciar, no pueden saber. Amo a mi país, es un compromiso personal con la sociedad. Es un llamado a la justicia social. Es necesario que la gente conozca más que las teleno-velas de “paracos” y narcotráfico, y conozcan otra realidad que a todos nos toca.

A.S: ¿Cómo fue el proceso de investigación y publicación del libro?

Carlos Chica

“Los ricos tienen voz, pue-den pagar por tenerla, en cambio, los pobres no pueden hablar, no pueden

denunciar, no pueden saber.”

G.R: Una mentira llamada post-conflicto contiene material de hace 18 años. Un día decidí reunir esta información. Empecé a estruc-turarlo. Tenía que denunciar las barbaridades del conflicto colom-biano, aquel que la mayoría de co-lombianos pasamos de alto cuando prendemos la televisión. Es una for-ma de actuar frente a la injusticia. Por otro lado, la publicación es un proceso bastante complicado. Yo hago las investigaciones, yo viajo y pago eso. No hay intermediarios: yo lo vendo, yo lo escribo. No hay editorial. Con dinero prestado pue-do imprimirlo y alquilar el pabellón en la Feria. Afortunadamente mi primer libro se vendió bien. Espero que este sea igual

A.S: Al ser el acuerdo un tema de gran indiferencia ¿Cuál es el secreto para llamar la atención del público?G.R: Es todo un reto. El truco está en dos cosas, que me han funcio-nado con los dos libros: La prime-ra es un buen título, este atrae la atención del lector sin importar el tema. El segundo factor clave es el diseño de la portada, la gente com-pra libros que no conocen según lo que ven.

A.S: ¿Por qué Colombia tiene uno de los conflictos más complejos del mundo?G.R: Porque no aprendemos de nuestros errores. En el libro expli-có como otros modelos de justicia transicional han fallado, por el sim-ple hecho de no ser justicia

A.S: ¿Desde su punto de vista es posible el equilibrio entre paz y justicia?G.R: Sí, si en ese proceso el pueblo está presente. Hay procesos de paz en donde el pueblo se hizo presen-te. ¡Sí, son lentos! Pero lo más im-portante para que exista la justicia es la verdad. Las víctimas necesitan el derecho a la memoria, después de esto es más sencillo construir modelos de verdadera justicia. •

Guillermo Rico

Carolina Sanín

Un humorista debe tener sentido de oportunidad y construir sus chistes con ingenio

Carolina Sanín

Aunque el inicio del VII Encuentro de Periodismo, buscaba encontrar la solución para hablar de temas tabúes en Colombia, el protagonis-mo se lo llevo la escritora y feminis-ta, Carolina Sanín. En primer lugar, por la discusión que mantuvo con un espectador y posteriormente por el malentendido que surgió por una broma hecha por Matador. Durante la intervención de Sanín, cuyo fin era expresar su preocupa-ción por la sociedad colombiana, aún marcada por el machismo, un espectador la interrumpió dicién-dole: “No monopolice la palabra”. Después de esto, un debate, con un tono que evidenciaba cada vez más molestia y sarcasmo, se tomó el au-ditorio por varios minutos.

“Lo más insultante del intercam-bio de hoy en la FILBO no fue que un miembro del público me man-dara callar por lo que llamó mi feminismo trasnochado. Lo más insultante ocurrió cuando el cari-caturista Matador salió con la perla (que a él le parecía chiste): ´A mí una vez una modelo me trató de violar´” Aseguró Sanín, horas des-pués del encuentro, a través de su Facebook y otras redes sociales. Carolina recibió el apoyo de su compañero de debate Mauricio Al-barracín, cuando él escribió en su columna del Espectador, cinco días después del encuentro: “Los hom-bres deberíamos escuchar y leer más sobre el feminismo y los dere-chos de las mujeres. Estoy seguro que tendríamos que bajar la cabeza ante la razón, la evidencia y la críti-ca, como la que hizo Carolina Sanín en esa discusión.” Durante el encuentro Sanín pun-tualizó en las prohibiciones mo-rales que tiene la sociedad colom-biana al hablar de temas como las menstruación y el aborto. •

VIII Encuentro Internacional de Periodismo

MIÉRCOLES 01 de junio de 2016 5

Holanda se caracteriza por su ar-quitectura moderna y sus grandes avances en la impresión 3D, por esto fue el invitado de honor a Fil-bo este año.Bogotá es la octava ciudad que tie-ne la posibilidad de conocer el arte de Gillian Schrofer, quien es un diseñador holandés. Su exposición estuvo en: Milán Ámsterdam, Tiflis, Yakarta entre otras ciudadesFundó una compañía llamada Con-cer, que cuenta con buenas críticas por aprte del público. Realiza pro-yectos artísticos y arquitectónicos; sus clientes varían entre Hotel de l’Europe, Lost Boys y Dutch Cultu-ral BroadcastingSuperModels es el nombre de esta exposición, en la cual las sillas to-

El arte del siglo XXI

man un papel importante: peque-ñas, de varias formas y diseños. Además unos minúsculos aparta-mentos, algunos bares, paisajes y restaurantes, con diferentes colores y diseños.La exposicón también contó con la participación de un colombiano, de la empresa I3D Factory, quien en-señó cómo funcionaba esta impre-sora 3D y las ventajas de aplicarla en la educación, la salud,el arte y el diseño, los cuales son de vital im-portancia en Colombia.Esta exhibición que da la posibi-lidad de que todos los visitantes descubran y se asombren con la impresión 3D, da un mensaje para que esta tecnología se aplique en Colombia con mayor fuerza. •

Supermodels Foto: Juan Pablo Benavides

“Si la conversación hubiera sido entre un pareja heterosexual, también lo hubiera publicado”

Vicky Dávila

En conversación con Javier Darío Restrepo la periodista explica las razones de su publica-ción, la historia detrás del video y la tristeza de salir de RCN.

En el VIII Encuentro Inter-nacional de Periodismo, se debatió sobre el Derecho a la Intimidad y el Derecho a la Información, con la periodista y exdirectora de la emisora la FM, Vicky Dávila, quien publi-có un video en el que, Carlos Ferro sostiene una charla ínti-ma con el capitán de la policía Ányelo Palacio. “Es alguien que le hicieron un juicio sin escuchar”, dijo Javier Darío Restrepo, maestro de éti-ca periodística de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoame-ricano. En la conversación co-mentó que esta es la primera vez en que ella tuvo oportuni-dad de explicar las razones por

las cuales consideraba correcto publicar el video. “Hubiera sido mil veces mejor que el video saliera editado, quizás hoy estaríamos en otro debate, en el que si yo mani-pule la prueba” dijo Dávila. La decisión de publicar este video generó un debate ético y la sa-lida de la periodista de la emi-sora. Además afirma que tiene más tiempo para su familia y para escuchar a sus excompa-ñeros de la emisora.“El derecho a la intimidad de un funcionario público es más reducida. La intimidad se res-peta si no influye en asuntos públicos (…) Si la conversa-ción hubiera sido entre un pa-

reja heterosexual, también lo hubiera publicado, jamás tuve una intención homofóbica”, dijo Dávila. Estos son algunos de los argumentos que expuso la periodista. “Mi obligación para ese mo-mento era publicar es video, sin pensar en nadie (…) No pensé en lo que me convenía al publi-carlo, pensé en lo que tenía que hacer a mi juicio como perio-dista reconociendo que debió ser editado” dijo la periodista, justificando su decisión. Al terminar el dialogo criticó la actitud de la mayoría de me-dios de comunicación por no seguir con la investigación •

MIÉRCOLES 01 de junio de 20166

AIESEC: Una mentira con buena cara

Para muchos jóvenes, ingresar a la universidad es la oportunidad de abrir sus mentes. Grupos de danza, música, depor-tes, grupos políticos, contactos y Organizaciones No Gubernamenta-les (ONG) son algunas de las no-vedades que cualquier estudiante puede encontrar en su universidad.Una de ellas es AIESEC (Asocia-ción internacional de estudiantes de Ciencias Económicas y Comer-ciales), organización sin ánimo de lucro que fue fundada en 1949 con el objetivo de alcanzar la paz por medio de la cooperación interna-cional de jóvenes universitarios sin importar su campo de estudio. En Bogotá existen siete comités, presentes en universidades como: Los Andes, Rosario, Javeriana, Ex-ternado, entre otras. Esta, ofrece in-tercambios para realizar proyectos sociales y conocer a otras culturas por medio del hospedaje en una familia del país al que se viaja.Al ser una organización fiable, in-ternacional y prestigiosa, es muy factible que se entregue la confian-za sin cuestionarse si realmente val-drá la pena acceder a los programas que ofrece AIESEC.Sin embargo, jóvenes provenien-tes de países latinoaméricanos denuncian la falta de seriedad, or-ganización y responsabilidad de la ONG. Según los testimonios reco-lectados, lo que promete ser una experiencia única e internacional

termina siendo una situación ries-gosa y decepcionante, pues no solo fueron enviados a barrios margina-dos de Bogotá, sin un hospedaje fijo, también perdieron la inversión que hicieron en el viaje.

Bastián Ibacache, oriundo de La Serena, Chile es egresado de la Uni-versidad Católica del Norte. Tras graduarse encontró por Internet la opción de realizar un intercambio en el cual obtendría experiencia laboral haciendo servicio social en fundaciones de Bogotá. “Pa-gué 200.000 CLP (Equivalentes a 896.000 COP) que me garantizaba la participación en un proyecto llamado La huerta. Me explicaron que consistía en un proyecto para educar niños analfabetas prove-nientes del campo. Me garantizaba un hospedaje y una comida diaria, el resto de los gastos corrían por cuenta mía”.Sin embargo, el panorama cambió cuando llegó. De Bogotá lo lleva-ron a la Calera, exactamente a la finca Agua linda.

“Cuando llegamos a la finca, nos pusieron a hacer labores domésti-cos y atendiendo personas porque al parecer allí se hospedaban ex-tranjeros. Trabajábamos 12 horas diarias. De 7 a.m. a 7 p.m. con una hora de descanso”. Después de una semana de reali-zar tareas que no correspondían al contrato que había firmado, empe-zó, junto a su compañera chilena,

Carolina Lizanova a exigir que lo ubicaran en un proyecto social y no en un trabajo que no tenía nada que ver con su profesión.

“Aunque a Carolina le encontra-ron una familia a penas salimos de la finca, a mí me tuvieron tres días dando vueltas por toda Bogotá, es-tuve en Soacha y en Suba sin que me encontraran hospedaje”.Carolina aseguró que durante va-rias noches tuvo que costearse su hospedaje ya que el hombre encar-gado del hogar le prohibía entrar después de las 8:30 p.m.

“En la fundación a la que nos llevaron después de sacarnos de la Calera trabajábamos hasta las 3:00 p.m., solo podía conocer la ciudad de noche, sin embargo, me faltaron cosas por hacer porque no podía pagar más dinero por mi hospedaje del que pagué en Chile”.Bastián, aseguró que “a mí me fue relativamente bien, encontré una familia que finalmente me hospe-

dó, aunque no tuviera nada que ver con la organización. No obstante hubo dos chicas alemanas que al no hablar español no podían expresar sus inconformidades, y ellas siguen allá trabajando como empleadas de servicio”. Después del inconve-niente Bastián también protestó, pues la compañía estaba usando fo-tos de sus salidas para promocionar AIESEC en redes sociales, “después de todo lo que sucedió y van y po-nen una foto mía diciendo que he disfrutado la experiencia AIESEC, ¡Es ridículo!“Al parecer, la mala suerte no solo acompañó a los jóvenes chilenos. Karen Zavala y Guillermo Culajay son de Guatemala y al igual que Carolina y Bastián no tuvieron la mejor experiencia.Karen convenció a sus padres de realizar el intercambio por medio de AIESEC. El contrato le garanti-zaba el hospedaje en una familia bogotana, empero, terminó alojada en un hostal y según ella “los gastos aumentaron porque ellos se encar-gaban de una comida diaria, pero terminé haciéndome cargo de toda la alimentación”De otro lado, Guillermo hizo su intercambio en Valledupar, dijo que su principal problema fue el incumplimiento de la obra que iba a realizar, el voluntariado con la comunidad desplazada Zapato en mano terminó reducido a cuatro visitas. El resto de los días hacían la-bores varias con la Cruz Roja. Asi-

mismo dijo que los voluntarios no cumplían con su labor:

“El contrato garantiza un body, una persona que me guiaría a través de la ciudad, me recomendaría lugares turísticos y además me aconsejaría sobre la se-guridad de la zona. A pesar de esto mi body nunca me ayudó y se excu-saba diciendo que ella era volunta-ria y no tenía tiempo. Yo también fui voluntario y cuando me tocaba hacer algo por AIESEC lo hacía”.Igualmente, la experiencia inter-nacional se tornó negativa para Wendy Gómez, quien hizo su viaje desde Lima, Perú. Consistía en tra-bajar con personas discapacitadas en Manizales. “La experiencia en Manizales estu-vo bastante buena, en cambio lle-gar a Pereira fue todo lo contrario. No existía un proyecto social y al no lograrnos ubicar nos alquilaron una casa para 15 personas en la cual solo había un baño”.A los anteriores problemas se le suma el hecho de que a los extran-jeros que estuvieron en Bogotá, por un tiempo, se les ubicó en ba-rrios peligrosos sin que ellos lfue-ran concientes de esto.

“No podía quedarme muy de noche con mis compañeros, tenía que llegar al Portal Usme y de allí tomar un carro, pues donde me estaba quedando quedaba lejos y las calles eran solitarias, y después que robaron a una de mis compa-ñeras intenté estar más prevenida”, afirma Maribel Zea, otra estudiante peruana que viajó a Bogotá, y al igual que sus compañeros, su expe-riencia no fue agradable pues como

ella afirma hasta la policía los inten-tó robar un día, pidiéndoles 60.000 para que no los deportaran.

Para Alexandra Andrade, ser familia global es “Enriquecer a una multi-nacional a costa de personas solida-rias que no reciben ningún benefi-cio económico”. Alexandra conoció AIESEC en una fundación para per-sonas con Síndrome de Down. “Al principio me pareció una excelente idea”, por lo que contacto a los fun-cionarios encargados de buscar el hospedaje a los extranjeros.

“Los cité en mi casa, primero llegó uno de los chicos para ex-plicarme lo que implicaba alojar a un voluntario. Él me pidió permiso para recibir a uno de sus compañe-ros que traían el material audiovi-sual. El segundo chico llego con un chileno -Bastián- Al final de la con-versación me pidieron si lo podía recibir de una vez. Me enojé bastan-te y lo deje quedar porque también soy mamá y no me imaginaría a mis hijas sin un techo en el que dormir. Pero lo primero que hice fue acla-

rar que yo no lo recibía en nombre de la organización”. Después de conversar con Bastián Alexandra descubrió que le mintie-ron, pues, al extranjero le dijeron que su familia ya tenía toda la infor-mación a cerca de él

“Los voluntarios a duras penas sabían mi nombre, ni siquiera mi apellido. ¿Cómo es posible que una entidad tan reconocida como esta juegue con la seguridad de

¿Pensando en hacer un intercambio? Reconsidere sus opciones.

“Trabajábamos 12 horas diarias. De 7:00 a.m. a 7:00

p.m. con una hora de descanso”¿Qué es AIESEC?

¿Estafa?

Familia Global:

Una experiencia con pocos beneficios

Bastián Ibacache y Maribel Zea en Bogotá

Logo AIESEC

Cifras porporcionadas por AIESEC. Datos vigentes para finales de 2015

Intercambios periodo: Enero 2016-Diciembre 2016

MIÉRCOLES 01 de junio de 2016 7

AIESEC: Una mentira con buena cara

sus miembros? Mi familia podría dedicarse a la trata de blancas, nar-cotráfico, tráfico de armas, pero no importa porque no hicieron nada para revisar mis condiciones de vida”.Alexandra enfatiza en la necesidad de denunciar a este tipo de empre-sas, que según ella, se disfrazan de ONG para evadir impuestos. Nunca brindaron ninguna ayuda econó-mica, pero si llamaban a pedir que firmara el contrato.

Paola Martínez es la directora de la fundación Construyendo Futuro cuya misión es atender personas de bajos recursos que sufran dis-capacidades cognitivas, Síndrome de Down y Autismo. Paola recibe voluntarios extranjeros desde hace dos años.

“No recibimos ningún apoyo

económico por parte de la funda-ción. Incluso tengo entendido que los voluntarios deben buscar los re-cursos para las actividades que van a desarrollar”.Hasta que conoció a Bastián no es-taba enterada de la situación que tenían que vivir los voluntarios para poder realizar su servicio social. Cabe destacar que, Construyendo Futuro ha colaborado a AIESEC, prestándole lugares para realizar sus reuniones sin costo alguno. Aún cuando la fundación atraviesa por una situación económica com-plicada y un contrato incierto, ya

¿Pensando en hacer un intercambio? Reconsidere sus opciones.

AIESEC y el trabajo social: ¿Dónde quedan las fundaciones?

Revisión legal: ¿Qué dice el contrato?Iván Taborda, profesor de Derecho de la Universidad Libre dice que el contrato de AIESEC se cubre de di-versos factores que logran engañar legalmente.

“El contrato expresa que hay derecho a una IPS. El problema está en que IPS se entiende como Instituciones Prestadoras de Seri-cios, mientras que, en este contex-to el significado real es Incoming Preparation Seminar (Reunión de bienvenida y preparación de los voluntarios)” Además existen cláusulas que son contradictorias entre el contrato que firma el voluntario (Garantía de tres comidas diarias) y el que se

le entrega a la familia global “Por otra parte la mayoría de inter-cambios duran 30 o 40 días, en el contrato se establece que para ex-presar alguna inconformidad esta se debe pasar por escrito y después de 60 días esta será evaluada, lo que imposibilita la expresión de quejas o reclamos porque los extranjeros ya no estarán presentes ”.

Paola Martínez en Construyendo Futuro

La respuesta de AIESEC: La otra cara de la moneda

que, con el cambio de Alcaldía, la secretaria de Integración Social está recortando el presupúesto y esco-giendo a pocas fundaciones para ayudarlas en su financiación.

Para, Brandon Vargas, vicepresiden-te del comité central, estos proble-mas se presentan por falta de logís-tica y orden

“De cierta manera considero que se incumplió con lo prometi-do, sabemos que se generaron pro-blemas (…) afectado por falta algo de falta de compromiso y un poco de esa subjetividad de los negocios, el no saber cómo te desarrollaría en un futuro las cosas”.

Por su parte Ricardo Otálora, vice-presidente para intercambios en-trantes, prefirió no dar declaracio-nes que pudieran dañar la imagen o el prestigio de AIESEC.

“Me ha ayudado a desarrollar li-derazgo y a conocer gente de otros países”, dijo a cerca de la experien-cia que tiene con su comité.Según Otálora, ser voluntario da beneficios inigualables. Además de servir como experiencia laboral, tengo el 30% de descuento para viajar a cualquier destino mundial. Ricardo estudiaba en la Central pero por motivos económicos tuvo que aplazar la carrera. Trabaja ocho horas en un call center y su tiempo libre lo dedica al trabajo no remu-nerado con la ONG.

Para Laura Pacheco, Vicepresidenta Nacional de Relaciones Públicas, la respuesta es muy clara

“El dinero se destina a pagar los salarios del comité nacional”.

Aunque su respuesta no fue más clara se podría deducir con la infor-mación dada por ella misma cuánto dinero aproximadamente queda libre y no es invertido en la orga-nización. A excepción de 15 personas, miem-bros del comité nacional -ganan mensulmente 1.500.000-, todos los integrantes son voluntarios. Deben cumplir un número específico de horas y según sus resultados, su tra-yectoría laboral, y su contribución pueden obtener descuentos para hacer intercambios.Por último, cabe resaltar que al ser una ONG, AIESEC forma parte de las 71.662 entidades sin ánimo de lucro que no son contribuyentes del impuesto sobre la renta y tie-nen un régimen tributario especial.

¿Dónde está el dinero?

¿Pensando en hacer un intercambio?

Reconsidere sus opciones. •

“Me ha ayudado a de-sarrollar liderazgo y a conocer gente de otros

países”

Datos aproximados. Cifras porporcionadas por AIESEC

Todos los violuntarios de AIESEC coinciden en la gran experiencia que esto significa

MIÉRCOLES 01 de junio de 20168

Quizá, si su risa fuera menos estrambótica, la combinación entre el pop moderno de Ri-hanna y el ritmo salsero del Joe Arroyo se haría más evidente. No le gustan las emisoras, ni los CD´s que se repiten una y otra vez en los salones de belleza, por eso, un pequeño espacio de su negocio está disponible para el equipo de sonido que reproduce canciones francesas, reguetón y folclor colombiano de una pequeña USB que una de sus nietas le regaló.Cada vez que le preguntan su nú-mero telefónico, sonríe y respon-de cordialmente “A mí la tecnolo-gía no me ha consumido, quien me quiere buscar sabe dónde tra-bajo”. No luce como una anciana, pero sus anécdotas hacen justicia a la abuela alcahueta de todo el vecindario.Han pasado quince minutos des-de que un hombre joven prove-niente de los llanos llegó a la pe-queña peluquería. Su habilidad y experiencia hace que no le lleve más de dos canciones terminar el peinado, pero el hombre perma-neció 32 minutos hablando con ella y su risa. Es elegante, extremadamente carismática y a pesar del espa-cio hueco en el lado superior derecho de su dentadura, sonríe siempre que alguien le habla. Sus historias se ven interrumpidas por comentarios que ella misma hace acerca de su gusto por la va-riedad interminable de canciones que suenan a lo largo del día.Llega a las 9:00 a.m. para abrir su pequeño local ubicado en el barrio Belén. No es ostentoso, pero creó un estilo muy propio en el lugar. “Lo he adornado de

muchas maneras: Mujeres dibuja-das en caricatura, maniquís deco-rativos y otras cosas pero siempre la Secretaría viene a molestar y a poner problema por algo tan pe-queño como un dibujo en una pared. Esperemos este no cause caos”, dice mientras voltea a ver a su hijo terminando un mural a blanco y negro que le regaló de Día de la Madre.Dany, no revela su edad. Hacer cálculos es una misión imposible. Luce de 40, pero tiene una nieta de 19 años. Las cuentas no cua-dran. Su estilo ayuda a engañar al tiempo, haciéndolo permanecer inmóvil, mientras ella disfruta la vida, en su salón de belleza, contando historias. Si le pagaran por hablar sería millonaria. Su garganta no se seca, las palabras no cesan, ni sus recuerdos le per-miten quedarse algunos minutos en silencio. No es prudente, y sin importar quien está en la silla, alistándose para darle la confianza de su ca-bellera a esta mujer con más de 10 años de experiencia, empieza a hablar con orgullo de su familia y amigos.Sus hija mayor, enfermera y ma-dre de dos hijas, heredó de su madre la espontaneidad que, al parecer, está oculta en un gen familiar. Su hijo, al igual que su hermana mayor, decidió estu-diar enfermería, pero es artista, cocinero y obrero empírico “Me enorgullecen. Sé que lo hicieron por pura vocación. Ambos deci-dieron enfocarse a la geriatría. Desde pequeños sienten voca-ción por ayudar a los abuelos. Nuestra sociedad protege a los niños pero nadie guarda la sabi-duría de los ancianos”.

Sin embargo, existe una pregunta que endurece su rostro y hace que por un momento, pierda la alegría acogedora que la caracteriza. Su tercer hijo es un misterio hasta para sus amigas más cercanas. Se queda unos pocos minutos en silencio y abruptamente cambia el tema, sin disimular la molestia que esto le causa.Y vuelve a sonreír, a molestar, a contar anécdotas de una vida digna de telenovela. Ahora gana el salario mínimo, pero no siempre fue así. Trabajó en Beauty Shop un exclu-sivo salón en Centro Internacional, se acostumbró a recibir políticos y gente de la alta sociedad en las si-llas que tenía a su disposición. “Nada tenemos seguro en la vida”, afirma cuando recuerda la re-es-tructuración que la sacó y la obligó a arrendar, hace tres años, un local en el mismo barrio en el que vive: Belén. La estabilidad es lo que más extraña de lo que ella considera fueron los mejores años de su vida.Lo único que, según ella, perma-nece allí son los amigos. No es de extrañar, que al lugar donde llegue cautive a más de una persona: es amable, convincente y positiva. Quizá, por eso la profesora de la escuela cercana, el tendero, el car-nicero y todos sus vecinos, pasan algunos minutos a visitarla y a con-tarle sus días.Extremadamente carismática: No es una hipérbole, ni una mentira pia-dosa. La evidencia más grande de lo llamativa que resulta su risa es el in-digente que se detiene a escucharla a las afueras de su salón.Su buen humor no se disipa ni cuando le recuerdan su salario “A veces logro hacerme un poco más del mínimo, a veces ni alcanzó a lle-gar a esta cifra”, pero como es una

costumbre en ella, se ríe y le agrade-ce a dios por permitirle estar sana. “Esta mañana salí algo molesta, no tenía dinero para comprar choco-late, pero vi a un indigente cojo y recordé lo suertuda que soy”.Crio sola a sus hijos, no se arre-piente de haberse equivocado en el amor, “El que se enamora pierde”, les recuerda a todos los jóvenes que, sagradamente, la visitan des-pués de terminar su jornada estu-diantil. Con algo de nostalgia, pero sin evi-denciar envidia, cuenta como sus compañeras del salón de belleza se fueron del país, algunos residen en Alemania, otras en Estados Unidos, pero ella se siente satisfecha de la vida que lleva. “Es mentira si digo que no tenía las mismas expectati-vas pero mi lugar estaba aquí, con mi familia, mis niños y mis amigos”.Comparte su casa con sus dos hijos y tres nietas. “Es la mejor experien-cia de la vida”, asegura cuando se le pregunta que es vivir con toda su familia. Con mucho orgullo presu-me la atención que le brindan sus hijos. El varón le lleva el almuerzo todos los días. Suelta una carcajada cuando cuenta su típico chiste de

“Debió ser hijo del lechero porque yo no sé cocinar. Yo le enseñé a bailar, a ser valiente, a no depen-der de nadie, pero no le enseñé a cocinar”. Aunque admira muchas cosas de la nueva generación, dice con certeza que “Vivir ahora no es tan difícil como hace unos años, he vivido tantas cosas en la vida, conocí las reuniones de personajes impor-tantes, viajé constantemente en un tiempo cuando mi hermana tuvo dinero y me regaló estas experien-cias inolvidables, viví mal, no tuve dinero. He vivido mucho”.Actualmente su vida trascurre entre la nostalgia y el orgullo, pues aun-que agradece por tener más dine-ro que muchos otros que conoce, extraña los momentos en que ir a cine era una opción y no un lujo, pero cree ciegamente en que dios la tiene allí por algo.Algunas de sus anécdotas parecen tener citas de Coelho o Jorge Du-que Linares, habla de la perfección de la vida cuando se tiene actitud positiva, pero se reconoce a ella misma, con vanidad y sin vergüen-za: “El salario mínimo solo es apto para guerreras”. •

��iac� r�l�El ajiaco es un plato típico sudamericana, sus ingredientes cam-bian según el lugar donde este se realice, incluso mientras que en la región Andina de Colombia el ajiaco es una sopa en Perú es un guisado. Generalmente son ingredientes sólidos como legumbres o tubérculos picados, además trozos de diversas carnes. Depen-diendo de la zona o el país podría incluir ají o aguacate.

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P��p�ra�i��:

En agua fría agregue el pollo, el laurel, la zanahoria (cortada en cuatro) y la cebolla cabezona (cortada por la mitad). Ponga a hervir a fuego alto y 15 minutos después del primer hervor añada las mazorcas cortadas.

Una vez esté el caldo, retire las hierbas, la zanahoria, la cebolla y el pollo. Luego añada la papa paramuna, luego la pastusa y, por último, la criolla. Baje el fuego a intensidad media. No deje de revolver.

Cuando empiece a espesar, baje el fuego. Agregue el manojo de guascas, deshilache el pollo y añádalo, deje un par de her-vores más y sirva en platos hondos.

Se sirve con aguacate, crema de leche y alcaparras.

Es consumida con gusto luego de las �estas. La base de esta sopa son los restos de carne que sobraron del asado del día anterior, los que se reutiliza para hacer este un caldo.

preparada con carne de res y de cerdo, a la que se le agregan maíz, malanga blanca, malanga amarilla, ñame, plátanos verdes y maduros, yuca y boniato. se hace en los barrios cubanos la noche del 24 de junio, para comenzar las �estas del San Juan.

En la cocina peruana, el ajiaco no es una sopa sino un guisado. Consiste principalmente en un prepara-do de aderezo peruano y ají amarillo con papa.

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INFORMACIÓN DE: EL ESPECTADOR - LA PUERTA FALSA - SECRETARIA DE TURISMO - Evelyn Cruz Chef MARIANO MORENO

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La Puerta Falsa Cl. 11 #6-50Restaurante Presidencial Calle 12 No. 6-14Restaurante El miradorCalle 10 # 5-72Trattoria NugagheCl. 13 #6-58Capital Cocina y Cafe Cl. 10 #2-99

Lo� ��j��e� ��iaco� �� Bo�ot�:

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Recomendación: ¿Qué comer en La Candelaria?

Zona Crónica

Salario mínimo: Solo apto para guerreras

Barrio Belén

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Lugar: Teatro PrincipalFecha: 10 de Junio Hora: 8:00 a.m. a 2:00 p.m.

Participa en los premios RecansensLas Categorías son:

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Tus ideas participan

En los zapatos de:Paola Gómez

Es de extrañar que Paola se levanté de buen humor. Su alarma estrépita y tediosa que suena en su celular a las 4:00 a.m. provocaría que el ser más apacible del mundo pierda la compostura. No hay que conocer mucho sus expresiones si se quie-re adivinar que está cansada, que, como a la mayoría de colombianos, las cobijas se convierten en una di-fícil adicción de dejar. Mira la ventana enmendada por su chico, se ve fatal y ordinario, pero se voltea a despertarlo con un su-surro y un pequeño beso. Llevan dos años viviendo juntos, después de un año de ser novios. Cristian ha sido un buen hombre.Soacha-Compartir no le da la mis-ma sensación de familiaridad que le daba su vereda natal: Silencio, ubicada en el departamento del To-lima. Paola hace parte de los 6 mi-llones y medio de personas que se ven obligadas a abandonar su pue-blo de origen para buscar suerte en las grandes metrópolis.

Debería ser ilegal tener que levan-tarse 4 horas antes del inicio de la jornada laboral, pero ella sabe que sus hijas no se alimentaran solas. El amor es como la materia: se tras-forma. Cuando se enteró que iba a ser madre a la temprana edad de 17 años, sintió que el odio por ese pequeño ser, la carcomía y la alejó de quién ella consideraba, su verda-dero amor. Ahora, 6 años después su aversión se transformó en adora-ción incondicional, por esas dos pequeñas por las que la salida a la madrugada vale la pena. Sale al tiempo con Cristian, a quién cariñosamente apoda “El Flaco”, le da un beso mientras se dirige a la estación San Mateo para tomar un Transmilenio que la llevará al centro de la ciudad para empezar a laborar. Cuando llegó a Bogotá sus expec-tativas eran más grandes. Quería estudiar, pero con dos bocas que alimentar es complicado hacerlo. Si bien, su estrépita alarma no le amargo el día, las eternas filas para entrar al pésimo servicio de articu-lados si lo hicieron. Dos horas pérdidas en el enlata-do viaje hasta el centro histórico de Bogotá en donde trabaja. -Que injusto- dice –Estoy tan cerca del poder y sin embargo sé qué nunca lo tendré-, haciendo referencia a los políticos afamados y adinerados que trabajan cerca de la tienda de

barrio que atiende durante 9 horas, mientras ellos, los poderosos se llenan los bolsillos por esforzarse menos de lo que ella lo hace. Debe caminar unas cuantas cuadras hasta su lugar de trabajo. Su som-brilla se dañó la semana anterior, lo que, en una Bogotá lluviosa como esa, es una tragedia catastrófica. El frío es una buena razón para que los clientes entren a tomar un café caliente. Como en todo el país, la diversidad de personas que entran y salen del lugar es muy grande. Ancianos atrapados en sus años gloriosos de abogados honorables. Mujeres que como ella, se olvidan de la apariencia personal en el afán de la rutina. Jóvenes cansados de los tortuosos parciales. Tinto y cigarrillos. Son los produc-tos que más vende. El día transcu-rre entre lloviznas pasajeras, con-versaciones entre parejas que van a tomar un café para disipar un poco la rutina y el mal humor de los clientes cuando consideran catas-trófico que Paola no tenga cambio de un billete de 50 mil. Toma un chocorramo y una leche en caja para eliminar el hambre

que la agobia. El desayuno no fue muy amplio, y el almuerzo se de-mora en llegar. Sus gestos son de aquellos que se leen sin conocerla. Le molestó la arrogancia de aquel señor bien vestido que de entrada le gritó por no tener la gaseosa que deseaba tomar. Se enorgullece. A pesar de lo mo-lesto que resulta lidiar con el tem-peramento de los clientes, obtiene un salario que, como ella dice, -No lo tienen muchos de los indigentes que mendigan por aquí-. A las doce pasadas llama a casa de su suegra. Sofía y Valeria, sus pequeñas, llegan allá después de terminar el colegio. Le gustaría ayudarlas con las tareas. No terminó el bachillerato, pero recuerda con deleite, los años en que aprendió las operaciones y pa-labras básicas en la primaria local de Silencio. No quiere que como ella sus hijas se vean limitadas por la injusta repartición de riquezas de este país cafetero. Contesta Sofía, la mayor. En pocos días cumplirá 4 años y Paola, está preocupada porque no tiene mu-cho dinero para comprarle la mu-ñeca que pidió, y especialmente, que merece. Su suegra, según ella, es una bue-na mujer. Se ha encargado de una niña que no lleva su sangre. Valeria, la menor, hija suya y de Cristian, es la preferida de Doña Clara, pero su bondad es amplia, y ha aceptado la

labor de sustituir la ausencia for-zada de Paola en la crianza de las niñas. Son las 2:30 p.m. y su almuerzo aún tarda media hora más. Tiene hambre pero su mal humor se es-fuma cuando escucha Oxígeno –es como ir de rumba, sin el licor, pero con la sensación de querer bailar hasta morir-. Media hora después llega Doña Lucía, quien le lleva el almuerzo, siempre a la misma hora. Le gusta la comida de hoy. No es la mejor, comprar un almuerzo decente a menos de 5.500 COP es una misión imposible. Le gustan los garbanzos y la carne aunque en ocasiones pareciera una trampa para quitar dientes y romper la dentadura. Queda lo suficientemente satisfe-cha para terminar su jornada, y se prepara para la monótona tarde que le espera. –Sí, gano un salario mínimo pero creo que el aburri-miento no depende del salario sino de la actitud. ¿Cuántos abogados con un buen sueldo lloran por la falta de sentido de sus vedad?- No es una mujer muy extrovertida. Pre-fiere dejar de lado el placer de sus colegas que trabajan en otras tien-das: El chisme. Su cabeza no tiene espacio para pensar en la vida de personajes ajenos a su realidad. Recuerda el cumpleaños de Valeria, el año pasa-do no pudo regalarle nada más que un cupcake, porque tenían que pa-gar el crédito de la moto. Le gusta la sensación de soñar. Le permite crear metas, que cree que podrá cumplir –Aunque me tendré que joder mucho-Recibe a su jefe quien se encarga de cerrar la tienda, tres horas después. Busca su impermeable. No es igual a la sombrilla, pero la protege un poco. Lucha entre el cansancio y su instinto maternal. Como siempre, el segundo gana. Camina por la séptima con la esperanza de encon-trar algo que regalarle a su pequeña y amada hija.. Afortunadamente para ella, encuen-tra unas muñecas usadas y bien te-nidas. Elige una pero su cara cam-bia cuando le dicen el precio, así que se conforma con una un poco menos bella. Compra una bolsa de papel regalo y con su maleta. Se alegra, a pesar de que cargar el regalo signifique un encargo más para utilizar Transmilenio en las horas en las que se vuelve el mismo infierno, o incluso peor. Llega a las 7:30 p.m. a la casa, ago-tada. Como casi toda madre resuci-ta de su monotonía cuando abraza a sus hijas. Eso sí, asegurándose de que el regalo haya quedado bien es-condido sin posibilidad de encon-trarlo antes de la gran fecha. Come algo que queda del almuerzo preparado por Doña Clara, Se que-da dormida, dando por terminado su día, pero no la rutina. Mañana sonará la estrépita y ruidosa alarma de nuevo. •

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MIÉRCOLES 01 de junio de 201610

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La aparición de internet y las redes sociales, ha provocado una revolu-ción comunicativa sin precedentes. Las relaciones familiares e interper-sonales han tenido cambios vertigi-nosos. De igual forma, la cultura y el entretenimiento están en una etapa de modificaciones constan-tes, pues los contenidos y las for-mas en las que se transmiten son muy distintas a como se presenta-ban antes. Pero, ¿cuál es la línea que permite diferenciar entre cultura y entrete-nimiento? ¿Se puede pensar en una distinción entre estos dos concep-tos en un contexto social regido por el marketing y el consumismo?Este debate tuvo su clímax en el marco de la Feria internacional del libro (FILBO), donde asistieron dis-tintas personalidades del mundo de la literatura. La polémica surgió cuando uno de los invitados, de cuyo nombre no quiero acordarme, atrajo a una multitud de niños y adolescentes que rápidamente ago-taron todas las boletas dispuestas para ese día. Muchas personas se quejaron de la mala organización del evento y de que las personas que asistieron a ver a este señor, no tenían ninguna intención de for-mar su cultura lectora.

En un principio, los medios tra-dicionales protestaron por la in-vasión a este espacio; pronto se dieron cuenta de una problemática más profunda: la vehemencia con la que los jóvenes entraron a Cor-ferias ese día, no la habían demos-trado por ningún libro, ni mucho menos por un escritor. Es más, el youtuber invitado logró convocar muchas más personas que la actual

Nobel de literatura, Svetlana Alexié-vich, quien, de todas formas, tuvo conferencias en salas atiborradas.La semana siguiente a la visita you-tuber más reconocido de Latinoa-mérica, las discusiones no cesaron. La opinión pública le dedicó un amplio espacio a debatir sobre el tema. Muchos columnistas escri-bieron diatribas en contra de los

Las cosas en su lugar

“Lo único claro acá es que se necesita

distanciar la cultura del entretenimiento”

youtubers y las rutinas que presen-taban en sus canales. Pero, contra-rio a lo que dicen los “acusados”, también hubo quienes defendieron sus nuevos métodos de expresión, arguyendo que la innovación ha de ser vista como algo interesante, po-sitivo, mejor que lo anterior.Los vídeos dramáticos de las es-trellas de las redes sociales no se hicieron esperar. Se quejan, cuen-tan historias difíciles de vida y sos-tienen que quienes no estamos de acuerdo con ellos es porque les tenemos envidia. Además de que suponen que a to-dos los jóvenes nos gusta lo que producen, y los únicos que pueden mostrar una posición distinta son los adultos que no saben manejar un computador..Lo único claro acá es que se nece-sita distanciar la cultura del entre-tenimiento, porque aunque sean graciosos, los youtubers resultan siendo una forma de entretención, no una riqueza cultural. Porque leer un libro-revista de un personaje que no es escritor, es mucho menos educativo que leer una novela de alguien que tiene cierta experiencia en el tema. La problemática tiene una solución simple. No sé por qué los medios de comunicación tienden a agran-dar las peleas y formar conflictos en lugares donde puede haber acuer-dos que lleven a una conciliación. Se trata de dar los espacios pruden-tes para cada una de las actividades que se van a llevar a cabo, ya sean de tipo cultural o de entretención. Al fin y al cabo, todos tienen el de-recho a la libre expresión, a produ-cir el contenido que deseen. •

Alejandra Santos Andrade

Ser pilo no alimenta

Hacer un reality show con los per-sonajes de nuestro gobierno no es una idea descabellada. De seguro, no habría un capítulo que aburra a los colombianos. Policías proxene-tas, senadores escandalosos que no pueden abandonar su narcisismo de líder perfecto, presidentes inca-paces de responder el argumento de una representante estudiantil, y ahora, al set, se suma la ministra acusada de plagio. Si bien es cierto el plagio parece convertirse en un pecado capital en los tiempos modernos, dedicar más palabras y argumentos de los que se han sacado estos días sería promocionar este show que, como siempre, maquilla la verdadera e importante problemática. Aunque los argumentos del Minis-terio de Educación Nacional para defenderse contra el plagio, son válidos y creíbles, el problema no radica en quién planteo el proyecto de la Agencia Nacional para la Ali-mentación Escolar, sino en cuándo esto será una realidad. Es factible pensar, que mientras los

medios se dedican a escuchar los argumentos de la senadora liberal Sofía Gaviria y los de la acusada Pa-rody, las familias de los más de 40 niños que en último año murieron por desnutrición en la Guajira o los 16 mil estudiantes que no recibie-ron alimentación en el Quindío, se preguntan cuándo les darán solu-ciones. No importa quién ni cómo, sino cuándo.El daño que provocan este tipo de escándalos, radican en el constante olvido al que se mandan los asun-tos trascendentales y relevantes.Después del video del ex viceminis-tro Carlos Ferro y su posterior en-trevista con su esposa a Blu radio, se olvidaron las supuestas víctimas de la llamada Comunidad del Ani-llo, y se alabó la perfección de mu-jer que tenía en su casa. En febrero del presente año, se de-dicaron titulares, artículos y deba-tes al tipo de relación entre Jorge Otálora y Astrid Helena Cristancho -la cual, a mi parecer no pasaba de ser la pataleta de una ex reina con-sentida.- El “baile” de Sofía Vergara minimizó el impacto del anuncio de la Procuraduría de investigar al General Palomino. Y así, innumerables ejemplos de episodios escandalosos, dignos de cualquier reality show, se repiten en los noticieros que se sienten or-gullosos de tener la primicia de “la mujer que se casó con ella misma”, olvidando a los desnutridos, los amenazados, los inconformes. el debate sobre la propiedad inte-lectual. Al final no sabemos cómo en un país que con descaro presu-me ser el país más feliz del mundo, los niños no pueden alcanzar sus metas porque su cuerpo desnu-trido no soporta la rutina diaria, al final no sabemos que tuvo de fantástico el baile del taxi de Sofía Vergara. Ni sabemos porque Santos escogió unas almendras y no unos chocolates para acallar a Dávila. Sin embargo al final, sabemos que en Colombia ser farandulero paga pero ser pilo no alimenta. •

Feria del libro colapsada por Youtubers

Gina Parody y Sofía Gaviria

MIÉRCOLES 01 de junio de 2016 11

*Aplica condiciones y restricciones. Valido hasta el 9 de agosto del 2016. Valido para marcas y modelos se-leccionadas. No acumulable con otras promociones.

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TODO POR QUE JUNIO ES EL MES DEL HOMBRE

Viaje por Colombia

No hay riesgo de que se quede

Juan Pablo Benavides

Viajar con la persona que uno ama, a un lugar seguro, relajante y pa-radisiaco es el sueño de muchos. Colocar un candado en el pont des Arts para sellar el amor eterno, estar en una góndola junto a su amado o amada en Venecia, o la recomenda-ción del este año: viaje a Colombia, queda al lado de un Paraíso fiscal –para que pueda ahorrar unos cuan-tos pesitos-, y es vecino del país en donde no se multiplica el pan pero si los penes. Sé que le deben surgir una infi-nidad de preguntas: ¿llevo a mi esposa? ¿será que la secretaria me campaña? ¿paso este viaje como viático? ¿tendré que tomarme una selfie como el ministro de hacienda Mauricio Cárdenas? O ¿mejor gasto las pocas millas que he obtenido para viajar? Pero si la cuestión es de plata le ten-go un plan que le arreglará la vida; vuélvase congresista, en Colombia ganará diariamente un sueldo de 2 millones 600 mil pesos. Puede estar ausente en debates –nadie le dice nada-. Eso sí, cuando la estén co-giendo contra usted puede escoger entre estas opciones:

a. Huir del congreso mientras lo comparan como una rata al salir corriendob. Declararse perseguido políticoc. Hacer una resistencia civil

Si esto no le funciona pida exilio en otro país y escápese de investi-gaciones lo antes posible. Porque como dicen por ahí la justicia cojea, pero llega –cojea por la reforma a la ley 100- Al igual para viajar dentro del para-disiaco y alucinante país, no necesi-ta mucho dinero, -mejor siga en su trabajo, recuerde que a usted si lo puede juzgar San Ordoñez, quien compitió con la madre Laura para una canonización, el problema fue que tenía que estar muerto y como hierba mala nunca muere-. Si un gringuito comía de todo con tan solo 5 dólares ¿por qué usted no?Si pertenece a la comunidad LGB-TI lo primero que tiene que hacer es caminar con cuidado; porque aquí hay de todo, lo pueden coger para una red de prostitución den-tro de la policía – lo bueno le dan un favorcito a cambio-, pero eso si libérese, corra, y en el peor caso échese la bendición; si la senadora “liberal” Viviana morales, alias Mo-ralidad, lo ve, es capaz de reunir o hasta hacer planas de firmas con tal que este país siga por el recto… ca-mino para llegar.Si de casualidad prefiere disfrutar los miles de curvas que ofrecen las carreteras en Colombia le advierto que habrá demoras –porque es se-guro que hay derrumbe o choque y como solo se cuente con una calza-da por dirección, pues usted ima-ginará – Tiene que recordar ciertas “normas criollas de la conducción”; por ejemplo, se puede adelantar por el carril contrario mientras no vea un “chupa” o policía, eso si no se cambie como algunos políticos colombianos que cambian de par-tido político. Además, no se preo-cupe por si usted es pillado condu-

ciendo mal por alguna vía de este país, usted puede recurrir a una fra-se algo recurrente la cual es: “Usted no sabe quién soy yo”, tranquilo, la han usado desde políticos hasta recién graduados -si tiene un buen atributo puede desviar la atención-.Si no le sirve, no se me estrese, pue-de pasarle una disimulada lista de 50 mil escusas ($$$) como lo hace Ricardo Silvestre quien es jefe de Control Interno de Indersantander, – si lo graban siga relajado puede decir que jamás hizo eso. Incluso podría “chuzar” llamadas y decir que el del video es una muñeca in-flable disfrazada de usted y seguirá siendo un candidato presidencial-.Por último y menos importante, recuerde somos el país del sagrado corazón, si es mujer ganará menos, si es homosexual lo discriminarán, si es profesor se reirán de usted, si es doctor estará peor que sus pa-cientes, si recién salió de estudiar le pedirán experiencia, si tiene ex-periencia le pedirán que sea más joven, si es mujer no use faldas cor-tas porque estarás buscando que la violen, si sufre de alguna discapaci-dad no podrás predicar la palabra del señor. No te dejaran consumir ninguna sustancia psicoactiva en público – a menos que te pegues el viaje hasta el Bronx, es parecido a aguas inter-nacionales, no hay ley ni dios- Si después de esto no lo convencí de venir a pasar unas inolvidables vacaciones, me temo que nada lo convencerá… Pero espere, ya ca-sito firmamos una importación de mermelada y almendras a ver si por fin se nos hace el milagro de que se acabe el único problema de Colom-bia, las Farc, lo demás son marcadi-tas que inventan la gente. •

Recomendado de la semana

“Ser o no ser, aquella no era la cuestión“

Quizá sea la facilidad con la que Amélie Nothomb hace reír al lector lo que provoca que sus páginas se vuelvan adictivas. El título confun-de: hace pensar en indescifrables obras filosóficas, evoca el aburri-miento que producían las clases de Aristóteles o los más jocosos lo relacionan con la albañilería. Pero el título es la perfecta síntesis del libro: Metafísica de los Tubos ¿Cómo puede ser la existencia de un ser que se autoproclama dios y decide vegetar? En 171 páginas el autor podrá conocer los pensa-mientos sobre la existencia, las re-laciones interpersonales, el placer y el miedo por medio de los pen-samientos de una niña de tres años. La lectura es sencilla, rápida, no se

extrañe que si lee este libro en un espacio público la gente lo observé de reojo por reírse en voz alta, por-que de seguro lo hará. Al tiempo, la autora profundiza en la importan-cia del placer en todas sus dimen-siones –en este caso el comer una barra de chocolate- y la inherente característica humana del miedo que generalmente se convierte en una restricción de la vida diaria. El libro es apto para cualquiera que se interese en él. A pesar de que la portada es algo que se podría mejorar, la primera página es una invitación obligada a leerlo en su totalidad con adicción. La protagonista es la personifica-ción del egocentrismo, además de creerse dios, siente que el mundo gira en torno a ella. Esto provoca que el público entienda la impor-tancia del individualismo y la ne-cesidad de encontrar placeres que ayuden a hacer la vida llevadera..Amelié es reconocida en el mundo de la literatura por sus temas no-vedosos, narraciones con carácter, sarcasmo correctamente utilizado y los personajes de características extremas o radicales. Entre sus obras más reconocidas se encuentran Higiene del asesino, Ni Adán ni Eva, Ácido Sulfúrico y Metafísica de los Tubos, en el cual contradice a Shakespeare porque para “El Tubo“ –citando una frase del libro- “Ser o no ser. Aquella NO era la cuestión” •

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