Soly sombraSÁBADO 28-8-2004

Björk La musa de la música electrónica pasa adar mayor protagonismo a su voz en ‘Medúlla’ ● 9

DCOMO SETAS El turismo de golf se ha convertido en uno de los más apreciadosdel litoral malagueño. Cada vez hay más campos y más afluencia de foráneos ● 2 y 3

GARCÍA VIVAS

Golfa toda costa

Gastronomía Lastapas del mesónEl Cordobés sonconocidas en todaEstepona por sugran variedad ● 4

De bares Pasearpor la calle MaríaBarrabino enTorremolinos escomo hacerlo pordistintos países ● 5

Rock El grupoalemán Rammsteinpresenta su nuevodisco ‘Reise, reise’,que fue grabado enMálaga ● 8

Música La cadenade televisión MTVprepara una gala‘caliente’ para lospremios de músicade este año ● 9

LA PELEAPOR ELAGUA

Los grupos ecologistas critican elconsumo de agua necesario para elmantenimiento, pero hoy gran partede la que se utiliza proviene depozos no potables.

SOUVENIRSDEJUGADORES

Uno de las costumbres de losgolfistas es comprar, al menos,un recuerdo en las tiendas deprofesionales de cada campoen el que juegan.

G

J. L. García Gómez

■ MÁLAGA. Basta con mirar bien através de las ventanillas del auto-móvil cuando se transita por la N-340 para observar, sin ningúnmargen para la duda, que la Costadel Sol dispone de un buen mon-tón de campos de golf. Si ademásse indaga más allá de los márge-nes de la carretera se puede com-probar que hay aún más campos.Es fácil entender por qué algunosya hablan de la Costa del Golf.

No hay municipio de la costaque no cuente con, al menos, uncampo. De hecho, el fenómeno yaha dado el salto al interior. Pero,¿quién juega en tantos hoyoscomo hay en la provincia? Puesprincipalmente un nuevo tipo deturista: el jugador de golf. Por su-puesto que hay malagueños quepractican este británico deporte,incluso disponemos de algún pro-fesional de éxito como MiguelÁngel Jiménez, pero es el turistade golf el que sostiene todas estasinstalaciones. De todos modos,no conviene olvidar que en el golfMálaga ha estado siempre en van-guardia, pues al fin y al cabo elprimer club andaluz se fundó enla provincia en 1925.

Fue durante los setenta cuandose desató la fiebre por construircampos, que desde los noventahasta hoy día se ha vuelto algo to-

talmente desbocado. Málaga, conmás de 30 campos, concentramás de la mitad de la oferta anda-luza. Aún más, en la franja entreMijas y Estepona existen 20, sincontar los que están en construc-ción o en proyecto.

La clave de toda esta eclosiónde hoyos, que ha llenado de cés-ped nuestra costa, está en los ju-gadores extranjeros. Sólo unacuarta parte de los que practicaneste deporte en la provincia sonjugadores nacionales.

El perfil típico de esta clase deturista es el de personas de altopoder adquisitivo, de nacionali-dad británica o alemana y quepermanecen entre dos días y unasemana en la costa. Es habitualque los hoteles oferten paquetesconjuntos de residencia y campo,ya que tienen acuerdos con lasempresas locales para facilitar asía sus clientes el poder jugar desdeel primer momento de su llegada.También es cada vez más comúnque se alquilen apartamentos ychalets mediante inmobiliariasque igualmente tienen realizadasreservas en campos. El turista degolf suele realizar un recorridosencillo: del aeropuerto al taxi,del taxi al hotel, del hotel alcampo y vuelta.

¿Por qué vienen a nuestracosta? Está claro que no es por lasplayas, ya que rara vez las pisan,

deportesdeverano

1. El puntode reuniónde losjugadoreses la casaclub, encuyasterrazassuelenacumularselas bolsasrepletasde palos delos amantesde estedeporte.2. Estampahabitual decualquiercampo dela costa.

Los campos de golf crecen como setas en la Costa del

Sol pero pocos españoles juegan en ellos. Tres cuartas

partes de las personas que los frecuentan son foráneos

Cambiar laarenaporel céspedREPORTAJE GRÁFICO: MÁLAGA HOY

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SÁBADO 28-8-2004 Málaga hoySol y sombra 2

CADA CAMPOESCONDEUN MUNDO

Aunque en principio los campos sontodos de 9 ó 18 hoyos, lo que podríahacerlos muy parecidos, en realidadcada uno tiene sus característicaspropias que los hacen únicos.

RECUPERARESPACIOSDEGRADADOS

A instancias de la Junta de Andalucía se estápromoviendo que la construcción de nuevos camposse realice en zonas degradadas como escombreras ysimilares. Además, el césped es uno de los mejoresagentes contra la erosión.

ni tampoco por conocer gente,puesto que casi todo el tiempo desus estancias lo pasan en el cés-ped de los campos, entre green ygreen. La clave está en las horasde sol de las que disfrutamos eninvierno, porque no son los mesesde verano los preferidos por losgolfistas, sino los de otoño e in-vierno. Al contrario de lo que sepodría pensar, es en septiembrecuando comienza la temporadaalta, que dura hasta febrero.

Otra cuestión curiosa delmundo del golf es que no basta condisponer del equipo y del dineropara pagar el recorrido para poderjugar. Un requisito indispensablepara pisar el césped con los zapa-tos de clavos es la condición de fe-derado. Todo jugador ha de estarfederado, y si no es así, no juega.En el mundo hay más de 50 millo-nes de jugadores y unos 30.000campos. Puede sorprender, perocon esas cifras en la mano, el golfes el cuarto deporte más practica-do. Ah, pero no es suficiente elcarné de federado, también hayque disponer de un handicap quepermita jugar. Cada campo esta-blece un handicap mínimo parapoder acceder a sus hoyos. Y luegoestá la obligatoriedad de ser socio.Bueno, sólo en algunos campos.La gran mayoría distingue entresocios y visitantes. Algunos inclu-so llegan más lejos y tienen una

tercera categoría, la de invitado,obligatoriamente acompañado deun socio.

Por supuesto, el turista queviene sólo por unos días juega encondición de visitante. Pero, ¿esque es caro ser socio? Bueno,echando números no resulta muybarato, si el precio en un campomedio es de 300 euros por mes,pues más de 3.000 euros al año.En fin, el turista de golf realiza ungasto medio al día de unos 300euros, lo cual explica el auge deeste sector.

¿Y qué se le ofrece? Pues lo quevienen buscando. “El jugadorbusca campos que le hagan sentir-se integrado en la naturaleza y quetengan recorridos que resultengratos. Obviamente, también pre-fiere campos cuya dificultad nosea excesiva, pero tampoco fáci-les”, explica Ignacio GarcíaGómez, diseñador de campos en laCosta del Sol. “No significa que loscampos no sirvan para competi-ción, bastaría con acondicionarlosestrechando las calles, por ejem-plo. También se incorporan ele-mentos de diseño cada ciertotiempo para que el jugador no secanse del campo”, comenta el di-señador.

Uno de los atractivos de nues-tros campos es el contraste entrelas zonas arboladas y las vistas almar. “El jugador agradece que

haya belleza en el campo, donde alfin y al cabo pasa bastante tiem-po”, añade Ignacio García.

Otra táctica es ampliar los servi-cios que se ofertan, como en SantaMaría Golf and Country Club, queno sólo es uno de los campos degolf mejor considerados de lacosta, sino que además, al ser Clubde Campo, ofrece pistas de tenis,piscina y, como signo del tipo decliente que es habitual en el club,campo de crocket.

Pese a la polémica que aúnrodea a los campos de golf, su ex-pansión es imparable y, no lo olvi-demos, sus beneficios necesarios.

El jugador tipo de la Costa del Sol es extranjero, por lo general británico o alemán

1. Tambiénlos niños sonhabitualesen loscampos.2. Entrehoyo y hoyose realizabastanteejercicio. 3.Imagen deun proyectode campo degolf de líneaagreste.4. Elobjetivo delos golfistas:el hoyo.

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Como en todo, también el diseño de camposde golf tiene cambios y evoluciones. “Hoy sebusca respetar al máximo el entorno y que elcampo tenga cierto aire agreste, que resultenatural y no artificial”, explica Ignacio García,profesional del diseño de campos desde hacecinco años. Los recorridos arbolados son pre-feridos en la actualidad tanto por los jugado-res como por los diseñadores.

Mayor naturalidadde los recorridos

nuevas tendencias de diseño

3 Sol y sombraMálaga hoy SÁBADO 28-8-2004