Ignacio Ramonet. La Nueva Geopolítica Del Petróleo. El Dipló. Junio 2015

3
El Dipló: La nueva geopolítica del petróleo 1/3 1-06-2015 22:06:54 Por Ignacio Ramonet* - 1 - Edición Nro 192 - Junio de 2015 Edición Nro 192 - Junio de 2015 ARABIA SAUDITA IMPONE EL PRECIO La nueva geopolítica del petróleo Por Ignacio Ramonet* Al inundar el mundo con su cuantiosa producción petrolera, Riad provocó una baja del 50% en el precio del petróleo, lo que hace no rentable la extracción por fracking con la que EE.UU. había logrado su autoabastecimiento. Así presiona a Washington contra su acuerdo con Irán. En qué contexto general se está dibujando la nueva geopolítica del petróleo? El país hegemónico, Estados Unidos, considera a China como la única potencia contemporánea capaz, a mediano plazo (en la segunda mitad del siglo XXI) de rivalizar con él y amenazar su hegemonía solitaria a nivel planetario. Por ello, Washington instauró secretamente, desde principios de los años 2000, una “desconfianza estratégica” con respecto a Pekín. El presidente Barack Obama decidió reorientar la política exterior estadounidense considerando como criterio principal este parámetro. Estados Unidos no quiere encontrarse de nuevo en la humillante situación de la Guerra Fría (1948-1989), cuando tuvo que compartir su hegemonía mundial con otra “superpotencia”, la Unión Soviética. Los consejeros de Obama formulan esta teoría de la siguiente manera: “Un solo planeta, una sola superpotencia”. En consecuencia, Washington no cesa de incrementar sus fuerzas y sus bases militares en Asia Oriental para intentar “contener” a China. Pekín constata ya el bloqueo de su capacidad de expansión marítima por los múltiples “conflictos de los islotes” con Corea del Sur, Taiwán, Japón, Vietnam, Filipinas… Y por la poderosa presencia de la VIIª flota de Estados Unidos. Paralelamente, la diplomacia estadounidense refuerza sus relaciones con todos los Estados que poseen fronteras terrestres con China (exceptuando a Rusia). Lo que explica el reciente y espectacular acercamiento de Washington con Vietnam y Birmania. Esta política prioritaria de atención hacia el Lejano Oriente y de contención de China sólo es posible si Estados Unidos logra poder alejarse de Medio Oriente. En este escenario estratégico, Washington interviene tradicionalmente en tres campos. Primero, en el campo militar: Washington está implicado en varios conflictos, especialmente en Afganistán contra los talibanes y en Irak-Siria contra la organización del Estado Islámico (EI). Segundo, en el campo diplomático, en particular con la República Islámica de Irán, a objeto de limitar su expansión ideológica e impedir el acceso de Teherán a la fuerza nuclear. Y tercero, el campo de la solidaridad, especialmente con respecto a Israel, para quien Estados Unidos sigue siendo una especie de “protector en última instancia”. Esta “sobre-implicación” directa de Washington en la región (particularmente después de la Guerra del Golfo en 1991) mostró los “límites de la potencia americana”, que no ha podido realmente ganar ninguno de los conflictos en los cuales se implicó fuertemente (Irak, Afganistán). Conflictos que han tenido, para las arcas de Washington, un costo astronómico con consecuencias desastrosas incluso para el sistema financiero internacional. Reducción del campo de batalla

description

Ignacio Ramonet. La nueva geopolítica del petróleo. El dipló. Junio 2015

Transcript of Ignacio Ramonet. La Nueva Geopolítica Del Petróleo. El Dipló. Junio 2015

  • El Dipl: La nueva geopoltica delpetrleo 1/3 1-06-2015 22:06:54

    Por Ignacio Ramonet* - 1 - Edicin Nro 192 - Junio de 2015

    Edicin Nro 192 - Junio de 2015ARABIA SAUDITA IMPONE EL PRECIO

    La nueva geopoltica del petrleoPor Ignacio Ramonet*

    Al inundar el mundo con su cuantiosa produccin petrolera, Riad provoc una baja del 50% en el precio del petrleo, loque hace no rentable la extraccin por fracking con la que EE.UU. haba logrado su autoabastecimiento. As presiona aWashington contra su acuerdo con Irn.

    En qu contexto general se est dibujando la nueva geopoltica del petrleo? El pas hegemnico, Estados Unidos,considera a China como la nica potencia contempornea capaz, a mediano plazo (en la segunda mitad del siglo XXI)de rivalizar con l y amenazar su hegemona solitaria a nivel planetario. Por ello, Washington instaur secretamente,desde principios de los aos 2000, una desconfianza estratgica con respecto a Pekn.

    El presidente Barack Obama decidi reorientar la poltica exterior estadounidense considerando como criterio principaleste parmetro. Estados Unidos no quiere encontrarse de nuevo en la humillante situacin de la Guerra Fra(1948-1989), cuando tuvo que compartir su hegemona mundial con otra superpotencia, la Unin Sovitica. Losconsejeros de Obama formulan esta teora de la siguiente manera: Un solo planeta, una sola superpotencia.

    En consecuencia, Washington no cesa de incrementar sus fuerzas y sus bases militares en Asia Oriental para intentarcontener a China. Pekn constata ya el bloqueo de su capacidad de expansin martima por los mltiples conflictosde los islotes con Corea del Sur, Taiwn, Japn, Vietnam, Filipinas Y por la poderosa presencia de la VII flota deEstados Unidos. Paralelamente, la diplomacia estadounidense refuerza sus relaciones con todos los Estados que poseenfronteras terrestres con China (exceptuando a Rusia). Lo que explica el reciente y espectacular acercamiento deWashington con Vietnam y Birmania.

    Esta poltica prioritaria de atencin hacia el Lejano Oriente y de contencin de China slo es posible si Estados Unidoslogra poder alejarse de Medio Oriente. En este escenario estratgico, Washington interviene tradicionalmente en trescampos. Primero, en el campo militar: Washington est implicado en varios conflictos, especialmente en Afganistncontra los talibanes y en Irak-Siria contra la organizacin del Estado Islmico (EI). Segundo, en el campo diplomtico,en particular con la Repblica Islmica de Irn, a objeto de limitar su expansin ideolgica e impedir el acceso deTehern a la fuerza nuclear. Y tercero, el campo de la solidaridad, especialmente con respecto a Israel, para quienEstados Unidos sigue siendo una especie de protector en ltima instancia.

    Esta sobre-implicacin directa de Washington en la regin (particularmente despus de la Guerra del Golfo en 1991)mostr los lmites de la potencia americana, que no ha podido realmente ganar ninguno de los conflictos en loscuales se implic fuertemente (Irak, Afganistn). Conflictos que han tenido, para las arcas de Washington, un costoastronmico con consecuencias desastrosas incluso para el sistema financiero internacional.

    Reduccin del campo de batalla

  • El Dipl: La nueva geopoltica delpetrleo 2/3 1-06-2015 22:06:54

    Por Ignacio Ramonet* - 2 - Edicin Nro 192 - Junio de 2015

    Actualmente Washington tiene claro que Estados Unidos no puede realizar simultneamente dos grandes guerras dealcance planetario. Por lo tanto, la alternativa es la siguiente: o Estados Unidos contina implicndose en el pantanalde Medio Oriente en conflictos tpicos del siglo XIX, o se concentra en la urgente contencin de China, cuyo impulsofulgurante podra anunciar la decadencia a mediano plazo de Estados Unidos.

    La decisin de Barack Obama es obvia: debe enfrentar el segundo reto, pues ste ser decisivo para el futuro deEstados Unidos en el siglo XXI. En consecuencia, Amrica debe retirarse progresivamente pero imperativamente deMedio Oriente.

    Aqu se plantea una pregunta: por qu Estados Unidos se ha implicado tanto en Medio Oriente hasta el punto dedescuidar al resto del mundo, desde el fin de la Guerra Fra? Para esta pregunta, la respuesta puede limitarse a unapalabra: petrleo.

    Desde que Estados Unidos dej de ser autosuficiente en petrleo, a fines de los aos 1940, el control de las principaleszonas de produccin de hidrocarburos se convirti en una obsesin estratgica estadounidense. Lo cual explicaparcialmente la diplomacia de los golpes de Estado de Washington, especialmente en Medio Oriente y en AmricaLatina.

    En Medio Oriente, en los aos 1950, a medida que el viejo Imperio Britnico se retiraba y quedaba reducido a suarchipilago inicial, el Imperio americano lo reemplazaba mientras colocaba a la cabeza de los pases de esas regionesa sus hombres. Sobre todo en Arabia Saudita y en Irn, principales productores de petrleo del mundo, junto conVenezuela, ya bajo control estadounidense en aquella poca.

    Un panorama cambiante

    Hasta hace poco, la dependencia de Washington respecto del petrleo y del gas de Medio Oriente le impidi considerarla posibilidad de retirarse de la regin. Qu ha cambiado entonces para que Estados Unidos piense ahora en retirarsede all? El petrleo y el gas de esquisto. Cuya produccin por el mtodo llamado fracking aument significativamente acomienzos de los aos 2000. Eso modific todos los parmetros. La explotacin de ese tipo de hidrocarburos (cuyocosto es ms elevado que el del petrleo tradicional) fue favorecida por el importante aumento del precio de loshidrocarburos, que en promedio superaron los 100 dlares por barril entre 2010 y 2013.

    Actualmente, Estados Unidos ha recuperado la autosuficiencia energtica e incluso est convirtindose otra vez en unimportante exportador de hidrocarburos. Por lo tanto, puede ahora por fin considerar la posibilidad de retirarse deMedio Oriente. A condicin de cauterizar rpidamente varias heridas que a veces datan de ms de un siglo.

    Por esa razn, Obama retir la casi totalidad de las tropas estadounidenses de Irak y Afganistn. Estados Unidosparticip muy discretamente en los bombardeos de Libia. Y se neg a intervenir contra las autoridades de Damasco, enSiria. Por otra parte, Washington busca a marcha forzada un acuerdo con Tehern sobre el tema nuclear. Y presiona aIsrael para que su gobierno progrese urgentemente hacia un acuerdo con los palestinos. En todos estos temas se percibeel deseo de Washington de cerrar los frentes en Medio Oriente para pasar a otra cuestin (China). Y olvidar laspesadillas de la regin petrolera.

  • El Dipl: La nueva geopoltica delpetrleo 3/3 1-06-2015 22:06:54

    Por Ignacio Ramonet* - 3 - Edicin Nro 192 - Junio de 2015

    Todo este escenario se desarroll perfectamente mientras los precios del petrleo seguan altos, a alrededor de 100dlares por barril. El precio de explotacin del barril de petrleo de esquisto es de aproximadamente 60 dlares, lo quedeja a los productores un margen considerable (entre 30 y 40 dlares por barril).

    Aqu es donde Arabia Saudita decidi intervenir. Riad se opone a que Estados Unidos se retire de Medio Oriente.Sobre todo si antes Washington establece un acuerdo sobre el tema nuclear con Tehern. Acuerdo que los sauditasconsideran demasiado favorable a Irn. Y que, segn la monarqua wahabita, expondra a los sauditas y msgeneralmente a los sunnitas, a convertirse en vctimas de lo que llaman el expansionismo chiita. Hay que tenerpresente que los principales yacimientos de hidrocarburos sauditas se encuentran en zonas de poblacin chiita.

    Considerando que dispone de las segundas reservas mundiales de petrleo, Arabia Saudita decidi usar el petrleo parasabotear la estrategia estadounidense. Oponindose a las consignas de la Organizacin de Pases Exportadores dePetrleo (OPEP), Riad decidi, contra toda lgica comercial aparente, aumentar considerablemente su produccin yhacer de ese modo bajar los precios del petrleo, inundando el mercado de petrleo barato. La estrategia diorpidamente resultados. En poco tiempo, los precios del petrleo bajaron en un 50%. El precio del barril descendi a 40dlares (antes de subir ligeramente hasta aproximadamente 55-60 dlares actualmente).

    Esta poltica dio un duro golpe al fracking. La mayora de los grandes productores estadounidenses de gas de esquistoestn actualmente en crisis, endeudados y corren el riesgo de quebrar (lo que implica una amenaza para el sistemabancario estadounidense, que haba ofrecido generosamente abundantes crditos a los neo-petroleros). A 40 dlares elbarril, el esquisto ya no resulta rentable. Ni las excavaciones profundas off shore. Numerosas compaas petrolerasimportantes ya han anunciado que cesan sus explotaciones en alta mar por no ser rentables, provocando la prdida dedecenas de miles de empleos.

    Una vez ms, el petrleo es menos abundante. Y los precios suben ligeramente. Pero las reservas de Arabia Saudita sonsuficientemente importantes como para que Riad regule el flujo y ajuste su produccin de manera de permitir un ligeroaumento del precio (hasta 60 dlares aproximadamente). Pero sin que supere los lmites que permitiran al fracking y alos yacimientos martimos a gran profundidad recomenzar la produccin. De este modo, Riad se convirti en el rbitroabsoluto en materia de precio del petrleo (parmetro decisivo para las economas de decenas de pases, entre loscuales figuran Argelia, Venezuela, Nigeria, Mxico, Indonesia, etc.).

    Estas nuevas circunstancias obligan a Barack Obama a reconsiderar sus planes. La crisis del fracking podrarepresentar el fin de la autosuficiencia de energa fsil en Estados Unidos. Y, por lo tanto, el regreso a la dependenciade Medio Oriente (y tambin de Venezuela, por ejemplo). Por ahora, Riad parece haber ganado su apuesta. Hastacundo?

    * Director de Le Monde diplomatique, edicin espaola

    Le Monde diplomatique, edicin espaola