B a t m a n llamando a Batman,

fauces de brumas nocturnas,antenas de vinil,

despiertas, sueñan, desesperadas, vuelcan,

amplitudes de ondas, latitudes distantes las frecuencias insisten y persisten,

un antiguo radio transmisorportátil y oculto,

sin antifaz y descalzopisa lloviznas marinas

en palabras ciegas,hasta el viejo mundo,

efectúan llamadas, miles de llamadasnadie contesta,

a 100 kilómetros por horaun escarabajo, dice presente,

colores de misterios, un caballeroen éxtasis de tinieblas, asciende,seguro y a tiempo, golpes sonoros

desde el inframundo, puertas sagradas, un par de botas vaqueras, tumban,

retumban, se escuchan pasos,pasos que ahogan

en sepulcros de silencios,lleva consigo flores renacientes,

flores tiernas y frescas aromas del mediterráneo,

bufetes de pétalos, rosacruces celestesque invaden recintos, que invaden cuerpos,

que invaden almas,

besos húmedosafónicos e invidentes,

en la ciudad, sin gentes, sin agujassin hilos, ni hilanderos, sedientos tejen mantos,

la noche se hace mas noche,nadie lee encabezados de diarios

anhelos impacientes, incertidumbreslas angustias, respiran inquietas

y en un vaso de agua el vacío es el rey de la nada,

una dentadura postizasonríe, no tiene prisas,

se acuesta, se recuesta,sobria espera la cita, en punto

al ultimo asomo de luz,una lejana visita, la señal, una llegada rumbos seniles en bandejas de plata,

anuncian reflejos, en lunas nuevaspalpitan matrices frías y grises,

abre sus ojos,la pupila de sus ojos,

el iris de sus ojos,y en el cristalino,

estalla el crepúsculo, alas de libertad,al encuentro,

un psicoanalista en penumbrasescribe, se reescribe

se inventa, se reinventa se ahoga, se desahoga,vive, se desvive, revive..

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Serie:“Un Poema a través del Caos”

dulces fragancias,revolotean

fragmentos esencias

mariposas blancas,y en la brizna, una serpiente se apodera …en rocíos,

B a t m a n llamando a Batman,

fauces de brumas nocturnas,antenas de vinil,

despiertas, sueñan, desesperadas, vuelcan,

amplitudes de ondas, latitudes distantes las frecuencias insisten y persisten,

un antiguo radio transmisorportátil y oculto,

sin antifaz y descalzopisa lloviznas marinas

en palabras ciegas,hasta el viejo mundo,

efectúan llamadas, miles de llamadasnadie contesta,

a 100 kilómetros por horaun escarabajo, dice presente,

colores de misterios, un caballeroen éxtasis de tinieblas, asciende,seguro y a tiempo, golpes sonoros

desde el inframundo, puertas sagradas, un par de botas vaqueras, tumban,

retumban, se escuchan pasos,pasos que ahogan

en sepulcros de silencios,lleva consigo flores renacientes,

flores tiernas y frescas aromas del mediterráneo,

bufetes de pétalos, rosacruces celestesque invaden recintos, que invaden cuerpos,

que invaden almas,

besos húmedosafónicos e invidentes,

en la ciudad, sin gentes, sin agujassin hilos, ni hilanderos, sedientos tejen mantos,

la noche se hace mas noche,nadie lee encabezados de diarios

anhelos impacientes, incertidumbreslas angustias, respiran inquietas

y en un vaso de agua el vacío es el rey de la nada,

una dentadura postizasonríe, no tiene prisas,

se acuesta, se recuesta,sobria espera la cita, en punto

al ultimo asomo de luz,una lejana visita, la señal, una llegada rumbos seniles en bandejas de plata,

anuncian reflejos, en lunas nuevaspalpitan matrices frías y grises,

abre sus ojos,la pupila de sus ojos,

el iris de sus ojos,y en el cristalino,

estalla el crepúsculo, alas de libertad,al encuentro,

un psicoanalista en penumbrasescribe, se reescribe

se inventa, se reinventa se ahoga, se desahoga,vive, se desvive, revive..

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Serie:“Un Poema a través del Caos”

dulces fragancias,revolotean

fragmentos esencias

mariposas blancas,y en la brizna, una serpiente se apodera …en rocíos,

¡ Una corona ¡hierros candentes, cuatro estaciones,

impaciente, sentada, dispuesta, y en el mismo lugar.Recoge su asiento,

se regocija, se alegra,se viste de ausencias,

y en galas de festejadossueñan insomnios de mendigos,

se pierde, sin provisiones los dones, las teclas no esperan, no se contienen,

las horas se congelan, los minutos no existenlunas llenas de marfil, permanecen

intactas, convertidas en abecedarios,inmaculadas lucen, galas finas,

elegancias de frac,se desviven, recuerdan, se acuerdan,

y fluyen como ríos tropicales, calmos, legendarios y caudalosos,bajo oscuras tempestades

se encuentra, inician rituales,ritos de magia negra,

danzas de letras blancas,sin escuchar, escriben mensajes,

entre sueños, despiertan, descubren, una fabrica de relatos, asombra

dictan a boca cerrada, letra a letra palabras, frases de poemas,los versos se acompañan,

las rimas velan y la poesía desvela,un ábaco sin remedios, cuenta vidas,

y en el suave otoño tornasol

no hay islas, nada recorrelas hojas de árboles caídos

no cantan canciones,en soledades nocturnas,

mas soledades,mudos sin inocencia,

despiertan, con agudeza, miran,en el fondo, las paredes, un cuarto,

un cuadro, júbilos maternales, en la euforia de encuentros una fotografía en un retrato,como siempre una espera,

a la espera de un hijo, aromas de flores, flores de obelisco

sus flores predilectas, pequeños pasos,

mullidos, ligeros y firmessin experiencias, se escuchan

y en un lienzo, color gris oscuro, apenas reflejan ¡ sombras !,

y un niño tuerto, en la penumbra,sin vos, sin oídos, sin palabras,

descubre olores de infanciaquitados de la pena,

pasean sin guías ni lazarillos,en ausencias de luces, ocupan espacios,

ahítos de energías perennes,una gota ancestral de milenaria forma,

se desliza fluida, primero lenta,una a una en el espacio,

una lagrima cae, recae, lágrimasestallan miles de ojos y millones de mundos,

ruedan sin clemencia, atraviesan rayos de luces ámbar,

cuchillos cuaternarios, vidrios fósiles,desfalleciendo impávidos en el suelo,

desvanecidos eclipses sin colorescudriñan en

cavidades perfectasde orbitas pétreas

atisban en multitudes, bordes de cuencasde pozos profundos,

destruidos por inexorablestránsitos, crepúsculos impasibles,

anillos sin fin y sin fondos,cavidades sin ojos

se aplastan, se hunden, enmudecen, se apagan

en instantes, y en sigilos, oscurecen ámbitos,

espacios de treguas, en umbrales de paz,un jaguar olmeca, reina el silencio,

y el niño sordo, cerca, se alumbra con un libro abierto

ligero se acerca, y acercala silla a una ventana

que no está, para contarse un cuento, del “cuento de un ahogado”.

El libro se cierra,dos almas se encuentran,

abrazadas en luces se juntan, como en el origen, se entregan.

Por amor… elevan.

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Serie:“Un Poema a través del Caos”

¡ Una corona ¡hierros candentes, cuatro estaciones,

impaciente, sentada, dispuesta, y en el mismo lugar.Recoge su asiento,

se regocija, se alegra,se viste de ausencias,

y en galas de festejadossueñan insomnios de mendigos,

se pierde, sin provisiones los dones, las teclas no esperan, no se contienen,

las horas se congelan, los minutos no existenlunas llenas de marfil, permanecen

intactas, convertidas en abecedarios,inmaculadas lucen, galas finas,

elegancias de frac,se desviven, recuerdan, se acuerdan,

y fluyen como ríos tropicales, calmos, legendarios y caudalosos,bajo oscuras tempestades

se encuentra, inician rituales,ritos de magia negra,

danzas de letras blancas,sin escuchar, escriben mensajes,

entre sueños, despiertan, descubren, una fabrica de relatos, asombra

dictan a boca cerrada, letra a letra palabras, frases de poemas,los versos se acompañan,

las rimas velan y la poesía desvela,un ábaco sin remedios, cuenta vidas,

y en el suave otoño tornasolno hay islas, nada recorre

las hojas de árboles caídosno cantan canciones,

en soledades nocturnas, mas soledades,

mudos sin inocencia,despiertan, con agudeza, miran,

en el fondo, las paredes, un cuarto,un cuadro, júbilos maternales,

en la euforia de encuentros una fotografía en un retrato,como siempre una espera,

a la espera de un hijo, aromas de flores, flores de obelisco

sus flores predilectas, pequeños pasos,

mullidos, ligeros y firmessin experiencias, se escuchan

y en un lienzo, color gris oscuro, apenas reflejan ¡ sombras !,

y un niño tuerto, en la penumbra,sin vos, sin oídos, sin palabras,

descubre olores de infanciaquitados de la pena,

pasean sin guías ni lazarillos,en ausencias de luces, ocupan espacios,

ahítos de energías perennes,una gota ancestral de milenaria forma,

se desliza fluida, primero lenta,una a una en el espacio,

una lagrima cae, recae, lágrimasestallan miles de ojos y millones de mundos,

ruedan sin clemencia, atraviesan rayos de luces ámbar,

cuchillos cuaternarios, vidrios fósiles,desfalleciendo impávidos en el suelo,

desvanecidos eclipses sin colorescudriñan en

cavidades perfectasde orbitas pétreas

atisban en multitudes, bordes de cuencasde pozos profundos,

destruidos por inexorablestránsitos, crepúsculos impasibles,

anillos sin fin y sin fondos,cavidades sin ojos

se aplastan, se hunden, enmudecen, se apagan

en instantes, y en sigilos, oscurecen ámbitos,

espacios de treguas, en umbrales de paz,

un jaguar olmeca, reina el silencio,y el niño sordo, cerca,

se alumbra con un libro abiertoligero se acerca, y acerca

la silla a una ventanaque no está, para contarse un cuento,

del “cuento de un ahogado”.El libro se cierra,

dos almas se encuentran, abrazadas en luces se juntan,

como en el origen, se entregan.Por amor… elevan.

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Serie:“Un Poema a través del Caos”

Era, mil novecientos treinta

y una misiva malherida, tirita entre líneas

su silencioy en la inquietudde vivir, viaja,

en soledad a través del caos, huérfana de los restos

del viejo naufragio,en su interior habitancientos de encargos,pasajeros y plegarias,

en consuelos, de parabienesse pintan la cara,

angustias y oraciones,en vecindades,

se juntan, se saludan, parientes cercanos,rosarios en canticos,

sin cesar, no se detienenen ocasiones preguntan,

se toman de la mano, mudos se acompañan

Y un naipe, por la victoria brinda;Sin reservas, las rodillas

 

en el exterior el silencio, en silencio, un

testigo,se aferra lacrado,

vestido en heraldos de lunares negros

miles de corazones púrpuras,una paloma blanca exclama

¡ay de mí! ¡ay de mí!

marinero galáctico, destino, los brazos de luna

del romancero gitano,perdidos

en olas sombrías, cenizas de fango,y escombros fríos 

como puñaladas largas,dagas de acero,

rascacielos góticos,sin fin brillan acerados,

bestias mitológicasaguardan en

silencios pétreos,y en fauces de quimeras

impasibles desvelan el tiempo;Miles de luces sempiternas

asombran,

se arrodillan,comprometidas rezan

en la oscuridad,rumores ciegos

miran sin ver, tienen fe,un crucifijo de madera

espera,! Prudencia ¡

en el seno velan,sigilos de paz no disimulan,

los misterios sin querer dan ordenes;

al paso de lunas tiernas, tiernitas,

como en una boca de grana Y en pilas

de aguas benditas,matrices de Hudson

corren ríos raíces de sangre,

Seri

e:

“Un P

oem

a a

tra

vés

del C

aos”

se descubren brillantes,

ojos azules adolescentes,que observan celosos y

en soledad, un piano de cola largo,al resplandor del claro de luna,

juega con notas sublimes retrospectivas melodías,

cubiertas de arras,moneditas de oro

al amanecer el rocío, amanece el alba,

con pendones áureos que vuelan en cintas plateadas

Y en una botella vacía,botellitas de vidrios

seca llevan su garganta;

Un libro, una mujer picando espuelas

y en la punta,giran excelsas,en espirales,

ruedas de la fortuna,en lenta agonía

una mujer le llora, llorauna mujer le está llorando,

lágrimas inundadas de cristalitos de ámbar, sin clemencia rebozan,se ahogan, se funden,en mundos bañados

de rojos vivo carmesí. queriendo sentir,

las huellas, al tactomillones de auroras,desesperadas

trascienden, traspasan,se incrustan, se confunden,

entre intersticios, imploran,

en las piedras, buscan grietas deseando abrazar

un ángelun ángel piadoso,

sin alas,en la Gran M a n z a n a.

susurran halos de estrellas doradas,

y una mujer cabalga, en sueños,…una mujer, cabalgando

en los crines de caballos blancos

con herraduras de plata,

Desiertos de longitud infinita

Ahítos de agujeros negros

en tinieblas inconscientesnoches encendidas, como hojas sueltas,

en frenesía 451 grados Fahrenheit

flotan incendiadasamorfos conclaves de

pétalos fúnebres como mariposas luminosas

y negrasen un libro vacío.

Seri

e:

“Un P

oem

a a

tra

vés

del C

aos”

Era, mil novecientos treinta

una misiva malherida, tirita,en la inquietudde vivir, viaja,

en soledad a través del caos, huérfana de los restos

del viejo naufragio,en su interior

cientos de encargos,pasajeros y plegarias,habitan consuelos,

se arrodillan,los parabienes se pintan la cara

angustias y oraciones,en vecindades,

se juntan, se saludan, parientes cercanos,rosarios en canticos,

sin cesar, no se detienenen ocasiones preguntan,

se toman de la mano,y mudos se acompañan

un naipe, por la victoria brindasin reservas, las rodillas

comprometidas rezanciegos en rumores de oscuridad

miran sin ver, tienen fe,un crucifijo de madera aguarda,

! Prudencia ¡en el seno velan,

sigilos de paz sin disimular, los misterios sin querer dan ordenes,

en pilas de aguas benditas,

 

 

matrices de Hudsoncorren ríos

raíces de sangre,en el exterior

el silencio, en silencio, un testigo,se aferra, lacrado

en lunares negros de corazones púrpuras,

una paloma blanca exclama¡ay de mí! ¡ay de mí!

marinero galáctico, destino, los brazos de luna

del romancero gitano,perdidos

en olas sombrías, cenizas de fango,y escombros fríos 

como puñaladas largas,dagas de acero,

rascacielos góticos,sin fin brillan acerados,

miles de luces sempiternas asombran,

se descubren brillantes ojos azules,

observan celosos, adolescentesun piano de cola largo, solo,sueña con notas sublimes retrospectivas melodías,

cubiertas de arras,moneditas de oro

al amanecer, el rocíoun libro, una mujer

picando espuelas

y en la punta,giran excelsas,

ruedas de la fortuna,en lenta agoníasusurran halos

de estrellas doradas,y una mujer cabalga, en sueños,

…una mujer, cabalgandoen los crines de caballoscon herraduras de plata, una mujer le llora, llora

una mujer le está llorando,lágrimas inundadas

de cristalitos de ámbar, sin clemencia rebozan,se ahogan, se funden,en mundos bañados

de rojo escarlata. queriendo sentir,

las huellas, al tactomillones de auroras,

desesperadastrascienden, traspasan,

se incrustan, se confunden,entre intersticios,

imploran,en las piedras, buscan grietas

deseando abrazar un ángel

un ángel piadoso,sin alas,

en la Gran M a n z a n a.

Seri

e:

“Un P

oem

a a

tra

vés

del C

aos”

Era, mil novecientos treinta

una misiva malherida, tirita,en la inquietudde vivir, viaja,

en soledad a través del caos, huérfana de los restos

del viejo naufragio,en su interior

cientos de encargos,pasajeros y plegarias,habitan consuelos,

se arrodillan,los parabienes se pintan la cara

angustias y oraciones,en vecindades,

se juntan, se saludan, parientes cercanos,rosarios en canticos,

sin cesar, no se detienenen ocasiones preguntan,

se toman de la mano,y mudos se acompañan

un naipe, por la victoria brindasin reservas, las rodillas

comprometidas rezanciegos en rumores de oscuridad

miran sin ver, tienen fe,un crucifijo de madera aguarda,

! Prudencia ¡en el seno velan,

sigilos de paz sin disimular, los misterios sin querer dan ordenes,

en pilas de aguas benditas,

 

 

matrices de Hudsoncorren ríos

raíces de sangre,en el exterior

el silencio, en silencio, un testigo,se aferra, lacrado

en lunares negros de corazones púrpuras,

una paloma blanca exclama¡ay de mí! ¡ay de mí!

marinero galáctico, destino, los brazos de luna

del romancero gitano,perdidos

en olas sombrías, cenizas de fango,y escombros fríos 

como puñaladas largas,dagas de acero,

rascacielos góticos,sin fin brillan acerados,

miles de luces sempiternas asombran,

se descubren brillantes ojos azules,

observan celosos, adolescentesun piano de cola largo, solo,sueña con notas sublimes retrospectivas melodías,

cubiertas de arras,moneditas de oro

al amanecer, el rocíoun libro, una mujer

picando espuelas

y en la punta,giran excelsas,

ruedas de la fortuna,en lenta agoníasusurran halos

de estrellas doradas,y una mujer cabalga, en sueños,

…una mujer, cabalgandoen los crines de caballoscon herraduras de plata, una mujer le llora, llora

una mujer le está llorando,lágrimas inundadas

de cristalitos de ámbar, sin clemencia rebozan,se ahogan, se funden,en mundos bañados

de rojo escarlata. queriendo sentir,

las huellas, al tactomillones de auroras,

desesperadastrascienden, traspasan,

se incrustan, se confunden,entre intersticios,

imploran,en las piedras, buscan grietas

deseando abrazar un ángel

un ángel piadoso,sin alas,

en la Gran M a n z a n a.

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Era, mil novecientos treinta

una misiva malherida, tirita,en la inquietudde vivir, viaja,

en soledad a través del caos, huérfana de los restos

del viejo naufragio,en su interior

cientos de encargos,pasajeros y plegarias,habitan consuelos,

se arrodillan,los parabienes se pintan la cara

angustias y oraciones,en vecindades,

se juntan, se saludan, parientes cercanos,rosarios en canticos,

sin cesar, no se detienenen ocasiones preguntan,

se toman de la mano,y mudos se acompañan

un naipe, por la victoria brindasin reservas, las rodillas

comprometidas rezanciegos en rumores de oscuridad

miran sin ver, tienen fe,un crucifijo de madera aguarda,

! Prudencia ¡en el seno velan,

sigilos de paz sin disimular, los misterios sin querer dan ordenes,

en pilas de aguas benditas,

 

 

matrices de Hudsoncorren ríos

raíces de sangre,en el exterior

el silencio, en silencio, un testigo,se aferra, lacrado

en lunares negros de corazones púrpuras,

una paloma blanca exclama¡ay de mí! ¡ay de mí!

marinero galáctico, destino, los brazos de luna

del romancero gitano,perdidos

en olas sombrías, cenizas de fango,y escombros fríos 

como puñaladas largas,dagas de acero,

rascacielos góticos,sin fin brillan acerados,

miles de luces sempiternas asombran,

se descubren brillantes ojos azules,

observan celosos, adolescentesun piano de cola largo, solo,sueña con notas sublimes retrospectivas melodías,

cubiertas de arras,moneditas de oro

al amanecer, el rocíoun libro, una mujer

picando espuelas

y en la punta,giran excelsas,

ruedas de la fortuna,en lenta agoníasusurran halos

de estrellas doradas,y una mujer cabalga, en sueños,

…una mujer, cabalgandoen los crines de caballoscon herraduras de plata, una mujer le llora, llora

una mujer le está llorando,lágrimas inundadas

de cristalitos de ámbar, sin clemencia rebozan,se ahogan, se funden,en mundos bañados

de rojo escarlata. queriendo sentir,

las huellas, al tactomillones de auroras,

desesperadastrascienden, traspasan,

se incrustan, se confunden,entre intersticios,

imploran,en las piedras, buscan grietas

deseando abrazar un ángel

un ángel piadoso,sin alas,

en la Gran M a n z a n a.

Seri

e:

“Un P

oem

a a

tra

vés

del C

aos”

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Era, mil novecientos treinta

una misiva malherida, tirita,en la inquietudde vivir, viaja,

en soledad a través del caos, huérfana de los restos

del viejo naufragio,en su interior

cientos de encargos,pasajeros y plegarias,habitan consuelos,

se arrodillan,los parabienes se pintan la cara

angustias y oraciones,en vecindades,

se juntan, se saludan, parientes cercanos,rosarios en canticos,

sin cesar, no se detienenen ocasiones preguntan,

se toman de la mano,y mudos se acompañan

un naipe, por la victoria brindasin reservas, las rodillas

comprometidas rezanciegos en rumores de oscuridad

miran sin ver, tienen fe,un crucifijo de madera aguarda,

! Prudencia ¡en el seno velan,

sigilos de paz sin disimular, los misterios sin querer dan ordenes,

en pilas de aguas benditas,

 

 

matrices de Hudsoncorren ríos

raíces de sangre,en el exterior

el silencio, en silencio, un testigo,se aferra, lacrado

en lunares negros de corazones púrpuras,

una paloma blanca exclama¡ay de mí! ¡ay de mí!

marinero galáctico, destino, los brazos de luna

del romancero gitano,perdidos

en olas sombrías, cenizas de fango,y escombros fríos 

como puñaladas largas,dagas de acero,

rascacielos góticos,sin fin brillan acerados,

miles de luces sempiternas asombran,

se descubren brillantes ojos azules,

observan celosos, adolescentesun piano de cola largo, solo,sueña con notas sublimes retrospectivas melodías,

cubiertas de arras,moneditas de oro

al amanecer, el rocíoun libro, una mujer

picando espuelas

y en la punta,giran excelsas,

ruedas de la fortuna,en lenta agoníasusurran halos

de estrellas doradas,y una mujer cabalga, en sueños,

…una mujer, cabalgandoen los crines de caballoscon herraduras de plata, una mujer le llora, llora

una mujer le está llorando,lágrimas inundadas

de cristalitos de ámbar, sin clemencia rebozan,se ahogan, se funden,en mundos bañados

de rojo escarlata. queriendo sentir,

las huellas, al tactomillones de auroras,

desesperadastrascienden, traspasan,

se incrustan, se confunden,entre intersticios,

imploran,en las piedras, buscan grietas

deseando abrazar un ángel

un ángel piadoso,sin alas,

en la Gran M a n z a n a.

Seri

e:

“Un P

oem

a a

tra

vés

del C

aos”

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

Era, mil novecientos treinta

una misiva malherida, tirita,en la inquietudde vivir, viaja,

en soledad a través del caos, huérfana de los restos

del viejo naufragio,en su interior

cientos de encargos,pasajeros y plegarias,habitan consuelos,

se arrodillan,los parabienes se pintan la cara

angustias y oraciones,en vecindades,

se juntan, se saludan, parientes cercanos,rosarios en canticos,

sin cesar, no se detienenen ocasiones preguntan,

se toman de la mano,y mudos se acompañan

un naipe, por la victoria brindasin reservas, las rodillas

comprometidas rezanciegos en rumores de oscuridad

miran sin ver, tienen fe,un crucifijo de madera aguarda,

! Prudencia ¡en el seno velan,

sigilos de paz sin disimular, los misterios sin querer dan ordenes,

en pilas de aguas benditas,

 

 

matrices de Hudsoncorren ríos

raíces de sangre,en el exterior

el silencio, en silencio, un testigo,se aferra, lacrado

en lunares negros de corazones púrpuras,

una paloma blanca exclama¡ay de mí! ¡ay de mí!

marinero galáctico, destino, los brazos de luna

del romancero gitano,perdidos

en olas sombrías, cenizas de fango,y escombros fríos 

como puñaladas largas,dagas de acero,

rascacielos góticos,sin fin brillan acerados,

miles de luces sempiternas asombran,

se descubren brillantes ojos azules,

observan celosos, adolescentesun piano de cola largo, solo,sueña con notas sublimes retrospectivas melodías,

cubiertas de arras,moneditas de oro

al amanecer, el rocíoun libro, una mujer

picando espuelas

y en la punta,giran excelsas,

ruedas de la fortuna,en lenta agoníasusurran halos

de estrellas doradas,y una mujer cabalga, en sueños,

…una mujer, cabalgandoen los crines de caballoscon herraduras de plata, una mujer le llora, llora

una mujer le está llorando,lágrimas inundadas

de cristalitos de ámbar, sin clemencia rebozan,se ahogan, se funden,en mundos bañados

de rojo escarlata. queriendo sentir,

las huellas, al tactomillones de auroras,

desesperadastrascienden, traspasan,

se incrustan, se confunden,entre intersticios,

imploran,en las piedras, buscan grietas

deseando abrazar un ángel

un ángel piadoso,sin alas,

en la Gran M a n z a n a.

Seri

e:

“Un P

oem

a a

tra

vés

del C

aos”

Autor: Carlos René Pérez Ulín.

me hice amigo del tiempo,

para esperarte,espectros fósiles,

cuaternarios deseos,

nunca me llevó consigo.

 En irradiante nave

una confidente estrella fugaz

contuvo el instante,

como un plexo solarsilencios inocentes,de alas translucidas

despliegan música virgen,y despiertan

monstruos marinos, intactos,

a velocidad del serdesenfrenados suspiros,

en sendas

   

en los mares titilan,brillos de collares,de mar turquesa

y corales de perlasaguamarinas.

La ciudad y

los perrosen una bacinilla

se pierden, en el cenit,

los sueños de Gaia,se confunden

en la alborada,vahos luminiscentes de auroras boreales,

diademas de atmosferasde pétalos blancos,pétalos rosáceos,

inmaculados escapan, como filos de cuchillos largos

en cristales de roca,paraísos de

aventureros piratas.

de ópalos de fuego.destellan olvidos

de luces incesantes llamas de fuegos fatuos,

se abandonan ansias.Al voltear la mirada,

despreocupadoun adiós,

paseaen orbitas de Saturno,

una montañadice mi nombre

¡ Carlos ¡en la trilla el camino,la pureza

diamantíferadel carbono

destella, vírgenes

terrestres, 

I

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

sin prisas

sin pausasen el horizonte

un pálido punto azulse suspende,

en un rayo de solse mece,

como un juguete en brazos de niño,

como el hilo del hilo de una oruga,

hilos de seda fina,como el ojo del único ojo

que mira,sin que lo veas,

alegrando espíritus colores purpuras,

unas hormigashormiguean,

fieles miligramos de latidos cósmicos.

En el circode la nochelas puertas

hialinasse abren,

en la tempestad,tormentas de oscuridad

luz ambarina,los días están de luto,

octubre son todos los meses

equinox desconocido. 

Solsticios de invierno pasan desapercibidos

el día y la nocheuna misma persona,

las agujas de luz magnéticasen la ultramar,

huyen despavoridas,el norte está en todos lados

un mapa no es el territorio

¡ alguien !no sabes si va o vienesignos sin palabras.

 

Hacia el origen un sonido,

miles de años luz,

prismas cristalinos,en la eternidad

del verso,pupilas cómplices

parpadean sin cesar,amaneceres

antiguos. 

Una vía lácteade almas

cien estrellas veinte lucerosdiez cometas cuatro canicas

una constelación de luciérnagas

solo figuraban.

II

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

En la euforia de la algarabía

fantástica,cultura madre,lunas sagradas

vuelcan, expectantes,honor de sacrificios,

realidad de doncellas, ritos, rituales,

entregan ofrendasvidrios volcánicos,sin misericordia lucen, irradian,

cuchillas ardientes, desvelan cuerpos,en ríos de lavas,

bermellones purpuras,brazas de fuego,olores de estirpe,húmedos brotan y

elevan rastros, vírgenesde espíritus inocentes,

al firmamento;

Un bebe jaguarjuega en la cúspide,

aspira inocente, raíces fugaces

esencias de sigloscostumbres del tiempo,

pródiga naturaleza,y exhala

humos sabios,hálitos de inciensos

convencidos ascienden,cuentan historias

desde el inframundo,sabiduría de

visitantes ancestrosBalam Ajaw,en el umbral,

desean, atisban,veneran esperanzas en

aldabas de broncepuertas sagradas

del señor deSian Ka'an. III

Corazones sagrados

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Tránsito de crepúsculosen camino de ápsides,

atraviesan el núcleo, la vida

de Centauri,en agonía,

brotan,despacio

una a una,millones

de astros, en tintas,

de vino tinto, como luna llena

recorriendo islas

en ocasos de otoño.En la infinidad del Universo

el nocturno verdemultitudes trabajan

  

otros jueganen las tinieblas

valle de sombras, sin sombras,

algunos descansan,Géminis y Orión

solo dibujan Pléyades,

en los bordes, de espadas de luz,

a los madrugadores pasajeros

que navegan despiertos,

rastrean constelacionesbiseles doradosuna osa mayor,

en sus ojossuspira, sueñaen las manos

triunfos anhelados,de estrella polar. IV

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Huellas secretaspoderosas pisadas

ingenioso Pegaso pintobusca los ideales,

un soñadorandante,

una lanza Azteca,un molino de viento,

deja rastros de libertad,y en la gracia

de la adarga antiguaescudan verdad una niña dice:

¿quien me compra la forma de una naranja?

 malvados Ángeles,

en nocturnas bóvedas,de calor helado,

tumbas rebosantes de ataúdes,

inciensos infernalesyacija de cadáveres

fúnebres,eclosiones

de crisálidas,pesadas tinieblas

amortajadas, descripciones perversas,

símbolos malditos.

Efluvios desustancias condenadas

esencias lúgubressempiternas flores del mal,derraman lagos de sangre

en sepulcroscaminos,

dulzor perfumedel eterno infierno,podredumbres de fidelidad ancestral.

Como un ocultosecreto fresco

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín V

Las ondas de Sputnik,señales lumínicas,serenas, sin razón

mis cabellos alegraron,nació una estela

inocentepasajeros de libros,

hermanos Karamazov y Chejov

movieron alegres y en armonía,

los dedos marcadosde la mano.

En la equidistancia el mismo sueño,un beso estelar

un planeta angustiado,Romeo y Julieta

reclaman,en elixir de clepsidras,

reflejan heridasllamas de fuegos,

como batallas perdidasen soles intensos,

indubitables deseosde amor eterno,

de sortija en solitario,en la cúspide,una rebanada

de sandia tornasol herida, frágil,lenta,

desvanece.

VI

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

El iris de un arco,

en una matriz haces radiantes,

sin ser vistauna flecha de eros

exacta traspasa

el firmamentogermina nítido,

un ecouna voz

siete coloresseñal de promesas,

ausencias de palabras,una boca sedienta

se abre de par en par,

y bebe la angustia de la sed,

un Jaguar hembradesnuda,

la hojarascahace reverencias,

y ocultos, trinos postrerosde guacamayas,

escapan presurosos,en lloviznas de colores

sobre el lomo de la carrera de un tapir

somnoliento, relámpagos

azules y verdes,bandadas de loros

montan asustados, se irrumpe la tregua

al momento, sabor de sentidos,

pueblos de ansiedadeslava en erupción.

entre los surcos se desviste,

al morir la tardeen lunas de abril,

se pierde,se confunde,en la naturaabre paso

fino,sensual,

como joyas ocultasmonte de venus,

descubierto,en cofre de tesoros antiguos,

rubíes y zafiros, amatistas y esmeraldas,

una espera paciente, los últimos rastros

de concienciadesconocen,

VII

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

En Delfos, el Oráculo,“Apolo” no era un cohetela sabia arcada, diáfana

cicatrices rocas de Granito,replica el ombligo

“conócete a ti mismo” 

“yo solo sé, que no sé nada”;Sócrates

dijo a Platónel teorema es de Pitágoras

Aristóteles la razón.

Con la siniestra de las entrañas

de Leonardo el David pinta

un Miguel Ángel, en vuelos febriles,

nubes naranjasmariposas monarcas

en néctar de girasoles,

aletean,miran al rey,en la oreja, descubren,

un nuevo día,hace caravanas,

y en la inmensidad un recinto sagrado,

un enigma,de poesías mudas

mirando,mira sin mirar,

cruza las manos,una

sonrisa. 

VIII

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Orbes de palomasmensajeras,

monocromáticosvuelos renacientes,

en penumbras, satélites diamantados,

dictan pálidos, prístinos rumbos

como heraldos negrossin rumbos,

de rubor ardiente,húmedos en escarcha

de sal helada.

En el centro de Polluxla fiesta está en su apogeosin embargo en el centro

  

de la fiesta no hay nadasolo el vacío,y en el vacío el rey festeja

en un grano de arrozel abandono de su interior.

 Explorando

en los linderosdel Génesisuna melodía

un homo sapiensAdán,

un resplandoruna calma

el Don el lenguaje

una imagen, la creación.

 

IXSerie:

“Un Poema através del Caos”A u t o r :

Carlos René Pérez Ulín

¿Por qué hay algo? el olvido

una lámpara¿ y más

bien nada ¿el hombresiglo XX

“Sery tiempo”,la madre Filosofía

Inagotable,¿Donde éstala morada?,una lengua

camina en las botas del tercer Reich,

un ente,Heidegger

ser humano,hombrecillos,¿donde está

el habla..?

X

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

…y en la ciega soledaddel frío eterno

muy atrás de la nadasólo había paz

y silenciopero no había

nada…

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín XI

Al Al levantar la inocenciade un polvo cósmico,

confundido,salió una cucaracha

con el sombrero de Samsa.

 

Y el as de oros,sin color,

un caballito de maderacilíndrico

sin cabezacon bozal

y sin patasantes de dar cuatro vueltas

y perderseen la vasta infinidad

de praderas sideraleságilmente,

y con alegríarelinchó.

XII

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Sin respuestascabalgué

en límpidas alas Poéticas

del Unicornio extraviadoen la inmensidad,

del océano espacial, tempestades de letras,

y en el marolas de azul eléctrico,

destellan luminiscentes la luna azul de Monet,

¿la Reina?sueña

con un soneto, de Neruda

 

Delgada cuerda, una guitarra

de Diamantesa trescientos mil

kilómetros por segundosurca olas de felicidad,

en un vaso de papellas palabras fluyen,

como una muerte sin finen polvos brillantes

a través del universo.

XIII

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

En Comalaun camposanto

una baraja,castillos de naipes,

un ánima, el hueso

de un esqueleto platica con Pedro Paramo,

Arcadio Buendía mira en el patio de sombras

espejos de media luna,¡ donde posa sus dulces ojos

verdes Aura ¡

transparentes mágicos y misteriosos,

como el realismo

de cien añosde ausencia eternaen Donceles 815

una luzuna veladora¡ un tragaluz !

una campana caminaentre tañidos de

oscuros maullidos.

XIV

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

nunca más, nunca más

dijo el cuervosin detenerse,

en orgías nocturnas,miles de redondeces

alados,ángeles negros

como símbolos solaresmanchas negras de lunas

en el azul del cieloun lienzo,

en picada buscaal encuentro,

el vuelo de cuervos.

XV

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

campos de trigos dorados,Cortázar

en un aviónpinta rayuelas,

un saxofón un arlequín baila jazz,

una maga en la literatura escucha cantos

de cronopiosen sus notas

cuentan historiasdan instrucciones,

a una escalera,

y Borges juega,en la memoria de

Shakespeare,imagina paraísos

de parnasos,y una biblioteca,se regocija, lee,

cuando un libro de arena persigue al Aleph

convertido en un cuerno.

XVI

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

En apacible Rivera,

Odas de selva tropical,“Tamul Cantepec”

desentierra ídolos y revive muertos,

en medio decuentas de jade,

una cabeza olmeca,con el poder y la gloria

sacrifican cuatro millones

de patos, parece una fiesta

en Paris. 

Orbe Sideral Jardín

de Luxemburgo,Hemingway de cacería

un león mitológico,escondido

en los trazosde un pincel

impresionista,todos ellos dicen adiós,

adiós a las armas. 

XVIISerie:

“Un Poema através del Caos”A u t o r :

Carlos René Pérez Ulín

Glifos de Obsidiana,

brillantes, Estela Maya

Balan trece Ahau“The eyes of tiger”

el constructor de su propio destino

cada amanecer se escribe así mismo

y en su cuerpo con seguridad

De Lilleimagina su nombre.

XVIII

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

En fragmentos nocturnosse deshiela un medio día,como una fiesta nupcial

en Pragasin preocupaciones

vive un Castillo,sin puertassin llaves,

sin agrimensorel señor “K”,

sobre su hombrolleva una escalera

persistente,sin sombras

sin luces,con equipajes vacios,

 

lleno de ilusiones,un trabajo

busca una promesa,a su paso,una aldea, un mesón

saludaaún forastero,

y un antipoema dice que

NO,Está.

IXX

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

B a t m a n llamando a Batman,

fauces de brumas nocturnas,antenas de vinil,

despiertas, sueñan, desesperadas, vuelcan,

amplitudes de ondas, latitudes distantes las frecuencias insisten y persisten,

un antiguo radio transmisorportátil y oculto,

sin antifaz y descalzopisa lloviznas marinas

en palabras ciegas,hasta el viejo mundo,

efectúan llamadas, miles de llamadasnadie contesta,

a 100 kilómetros por horaun escarabajo, dice presente,

colores de misterios, un caballeroen éxtasis de tinieblas, asciende,seguro y a tiempo, golpes sonoros

desde el inframundo, puertas sagradas, un par de botas vaqueras, tumban,

retumban, se escuchan pasos,pasos que ahogan

en sepulcros de silencios,lleva consigo flores renacientes,

flores tiernas y frescas aromas del mediterráneo,

bufetes de pétalos, rosacruces celestesque invaden recintos, que invaden cuerpos,

que invaden almas,

besos húmedosafónicos e invidentes,

en la ciudad, sin gentes, sin agujassin hilos, ni hilanderos, sedientos tejen mantos,

la noche se hace mas noche,nadie lee encabezados de diarios

anhelos impacientes, incertidumbreslas angustias, respiran inquietas

y en un vaso de agua el vacío es el rey de la nada,

una dentadura postizasonríe, no tiene prisas,

se acuesta, se recuesta,sobria espera la cita, en punto

al ultimo asomo de luz,una lejana visita, la señal, una llegada rumbos seniles en bandejas de plata,

anuncian reflejos, en lunas nuevaspalpitan matrices frías y grises,

abre sus ojos,la pupila de sus ojos,

el iris de sus ojos,y en el cristalino,

estalla el crepúsculo, alas de libertad,al encuentro,

un psicoanalista en penumbrasescribe, se reescribe

se inventa, se reinventa se ahoga, se desahoga,vive, se desvive, revive..

dulces fragancias,revolotean

fragmentos esencias

mariposas blancas,y en la brizna, una serpiente se apodera …en rocíos,

XX

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

¡ Una corona ¡hierros candentes, cuatro estaciones,

impaciente, sentada, dispuesta, y en el mismo lugar.Recoge su asiento,

se regocija, se alegra,se viste de ausencias,

y en galas de festejadossueñan insomnios de mendigos,

se pierde, sin provisiones los dones, las teclas no esperan, no se contienen,

las horas se congelan, los minutos no existenlunas llenas de marfil, permanecen

intactas, convertidas en abecedarios,inmaculadas lucen, galas finas,

elegancias de frac,se desviven, recuerdan, se acuerdan,

y fluyen como ríos tropicales, calmos, legendarios y caudalosos,bajo oscuras tempestades

se encuentra, inician rituales,ritos de magia negra,

danzas de letras blancas,sin escuchar, escriben mensajes,

entre sueños, despiertan, descubren, una fabrica de relatos, asombra

dictan a boca cerrada, letra a letra palabras, frases de poemas,los versos se acompañan,

las rimas velan y la poesía desvela,un ábaco sin remedios, cuenta vidas,

y en el suave otoño tornasol

no hay islas, nada recorrelas hojas de árboles caídos

no cantan canciones,en soledades nocturnas,

mas soledades,mudos sin inocencia,

despiertan, con agudeza, miran,en el fondo, las paredes, un cuarto,

un cuadro, júbilos maternales, en la euforia de encuentros una fotografía en un retrato,como siempre una espera,

a la espera de un hijo, aromas de flores, flores de obelisco

sus flores predilectas, pequeños pasos,

mullidos, ligeros y firmessin experiencias, se escuchan

y en un lienzo, color gris oscuro, apenas reflejan ¡ sombras !,

y un niño tuerto, en la penumbra,sin vos, sin oídos, sin palabras,

descubre olores de infanciaquitados de la pena,

pasean sin guías ni lazarillos,en ausencias de luces, ocupan espacios,

ahítos de energías perennes,una gota ancestral de milenaria forma,

se desliza fluida, primero lenta,una a una en el espacio,

una lagrima cae, recae, lágrimasestallan miles de ojos y millones de mundos,

ruedan sin clemencia, atraviesan rayos de luces ámbar,

cuchillos cuaternarios, vidrios fósiles,desfalleciendo impávidos en el suelo,

desvanecidos eclipses sin colorescudriñan en

cavidades perfectasde orbitas pétreas

atisban en multitudes, bordes de cuencasde pozos profundos,

destruidos por inexorablestránsitos, crepúsculos impasibles,

anillos sin fin y sin fondos,cavidades sin ojos

se aplastan, se hunden, enmudecen, se apagan

en instantes, y en sigilos, oscurecen ámbitos,

espacios de treguas, en umbrales de paz,un jaguar olmeca, reina el silencio,

y el niño sordo, cerca, se alumbra con un libro abierto

ligero se acerca, y acercala silla a una ventana

que no está, para contarse un cuento, del “cuento de un ahogado”.

El libro se cierra,dos almas se encuentran,

abrazadas en luces se juntan, como en el origen, se entregan.

Por amor… elevan.

XXISerie: “Un Poema através del Caos”A u t o r : Carlos René Pérez Ulín

Tic-tac, tic-tacel tic-tac de la aguja

minutero ciclope,de un reloj blando

con bigotes y patas de araña,

por el camino de Swannimperturbable juega

pintando sueños escucha pasos que transitan,

que forman ciclos,en ojos de bueyes,

que miran en crepúsculos tardíos;Edén de recuerdos,

trópicapricornios azulesárboles del bien y del mal;

 Y en la memoria persistente navegan, libres

materias del tiempo,acurrucadas buscan en las esquinas

tesoros ocultos en su interior; Y a su paso la relojería,

inexorable y sorda, asoma

desenfrenada, sin controlescontrola ritmos, y en la ausencia,

se desgranan cuentas, y se descubren vestigios

escondidos,sueños escarlatas,

añejos romances lorquianos,surgen victoriosos

de habitaciones rotasurnas cinerarias,

y en alas rojas intensas, resurgen

del carbono primario,y  ascienden cumbres

en divinos vuelos, como el ave fénix,

Khronossin preguntar mencionó,

no hay tiempo para el tiempo,

¿alguien sabe que hora es? 

XXII

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Bohr juega a leer,en los bordes

de un cuanto de luz; Sorprendidos en un rayo,

de un rin, de una bicicleta,

paseando pasan sin pasar, un electrón, electrones

en frecuencias cósmicasmiles de ondas cuánticas,

sin brazos, escriben cuentos, no tienen alas,

trazan agujeros negros,orbitas elípticas,

en atracciones vibran,nuevas formas se encuentran.

XXIII

En rumbos indefinidosmillones de polvos saludan, de reojo,

en ojos de hormigas microscópicasmirando el lado oscuro

de la luna,y el niño Einstein

sueña al revés,en la mano

arrastra una culebray en la diestra platica

con las partículas de Diosbusca el origen,

en una gran explosiónfotones, energía

átomos,en una estrella

lo relativo se encuentra.

XXIV

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Newton,al paso de la vida,

una sombramira al cielo, sonríe,

 y  cae una 

manzana XXV

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

Desiertos de longitud infinita

Ahítos de agujeros negros

en tinieblas inconscientesnoches encendidas,

como en vuelos de Antares hojas sueltas,

a 451 grados Fahrenheitflotan incendiadas

conclaves depétalos fúnebres, orugas luminosas

y negrasde un libro vacío.y  al amanecer,

renacen mariposasen nuevos vuelos.

Serie: “Un Poema através del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

En el cieloa medio hacer

nobeles fragancias,en inocencia

de ninfas desbordan,se visten,

despiertan sentidos,entre verdadessin exigencias

desnudan almas,al compas la espera

en la esperanza continúanbrillos de la tarde,

como no queriéndose irse alejan, se despiden,cada vez más se alejan

en complicidadsolos, ausentes,

los dueños del tiempo,dos enamoradosendulzan aromas

de café,

con cucharadas,místicas,

de luna llenay en la infusión

el éxtasis, vapores de opio arden,

una espiralla espiral

inicia la funciónen el arte

la espuma, entre la espuma

caracoles de marcaracolillos,

caracoles azulesPalindrómicos

mueven!sin embargo regresan

Entre las olas,surcan olas de felicidad

y emanan humos,se vahos inconfundibles

olores de cacao, y almendrasbordan lienzos de azahar,

en ambrosía de mieles,elevando naturales

frágiles notas musicales, los cuerpos de flores

deseos de frutasdulces y amargas

placeres exquisitos,sin reservas se expresan

¡degustansuavemente,

sin compasión se empapan, se empalagan

en el deleita, del deleite,no ignorando el sabor,

de la noche.Y en el fondo níveo,

oscuros secretosse guardan,

en porcelanas chinas,se descubren,

adictos se revelan, sacan suertes,

al compas no dejan de bailar, como serpientes se escurren

en residuos, se aferran,cumplen cometidos,

al final se desprecian, se agradecen, se abandonan,

y en el velode la noche,

la noche,se alumbra

con más noche,

los colores de alhelí,se cubren de mantos

se adornan de roció, tenuey en la devoción,un galán nocturnorinde pleitesías,

se hace presenteirradia perfumes, ráfagas de viento

como únicos testigos,en el infinito

la humedad deja rastros,sin rastros,

un ligero frescorinvade cuerpos,

cándidos e inocuosinmaculados y castos

libres, sin culpas

las luces del campoabandonan la espera

dicen adiós,se despiden,

a lo lejosse apagan,

solitarios cocuyosrevolotean,

en pleno vuelo, guiñen el ojo 

los amorososatestiguan,una pareja,

en la albura de su pielse funden,en el senodeclaran,por amor

se duermen,por amor

rezan, oranporque,

nunca acabe de empezar.

Remanso de aguasSpoon River

en el viejo oeste,descansa un pueblo

fantasma,en el camino desciende,

¡ un cementerio !lleno de vidas;

escribe un poemario,y en el poemario,el fluir de un rio,

y en el trayecto, el arrullo duerme una siesta,

y en la siestalos poemas saludan

a los habitantes de la colina,

ahí todos son poetas,todos ellos también duermen,

inmortales sueños pétreos,y en el sueño

salido de un amablesueño,

un cumpleaños descansa junto a una tumba

y una lápida,celebra,

un epitafio al caminar

escucha en regocijoa lo lejos,

sutilescantos

de alondras.

De la Serie un Poema“A través del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín

De la Serie un Poema“A través del Caos”

A u t o r :Carlos René Pérez Ulín