Impugnacion de Acuerdos - Sentencia Vista - Confirmaron F - Tataje Barriga
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SENTENCIA DE VISTA 1° SALA CIVIL - Sede CentralEXPEDIENTE : 01725-2010-0-1401-JR-CI-05MATERIA : IMPUGNACION DE ACUERDOSRELATOR : ANTONIO ARONES YUYALEDEMANDADO : CLINICA TATAJE BARRIGA SAC
TATAJE BARRIGA, ELSI CONSUELODEMANDANTE : TATAJE BARRIGA, JULIO ZENON
RESOLUCIÓN N° 29
Ica, veintinueve de agosto
Del dos mil catorce.
VISTOS: En audiencia pública el recurso de apelación de
la sentencia e interviniendo como ponente la Jueza Jacqueline Chauca Peñaloza.
I CONSIDERANDO:
PRIMERO.- SOBRE LA RESOLUCION N° 5. Es materia
de apelación la resolución N° 5 que declara infundada la nulidad interpuesta por la co
demandada ELSI CONSUELO TATAJE BARRIGA, y, aclara la resolución N° 1 que la
demanda versa sobre Impugnación de acuerdo de exclusión de socio adoptado en la
Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010, y como pretensión accesoria la
impugnación de todo acuerdo posterior como es la reducción d capital y modificación
parcial de estatutos, inclusión de socios, aumento de capital y modificación parcial de
estatutos, transformación de sociedad, revocación de administradores y nombramiento
de gerentes, así como la segunda pretensión accesoria de nulidad inscripciones
registrales contenidos en los asientos 12,13, 14 y 15 de la partida N° 02027588 del
Registro de Personas Jurídicas de la Oficina Registral de Ica. El recurso de apelación
es presentado por ELSI CONSUELO TATAJE BARRIGA, quien en el escrito que obra
de la página 157 a 165, solicita se revoque la impugnada y reformándola se declare
fundada la apelación y declare improcedente la demanda.
SEGUNDO.- Como antecedentes de la resolución apelada
se tiene que la demandada ELSI CONSUELTO TATAJE BARRIGA, por escrito que
obra de la página 135 a 142, solicito la nulidad de lo actuado hasta la resolución N° 1
que admite la demanda, porque debió ser declarada improcedente, dichas acciones a
la fecha de presentación de la demanda habían caducado, por contener indebida
acumulación de pretensiones. En consecuencia se tiene que se ha solicitado la nulidad
de una resolución que es la N° 1.
TERCERO.- Por mandato de la ley, específicamente
artículo 356 del Código Procesal Civil, la actividad impugnatoria se puede ejercer a
través de la vía recursiva, de los remedios y de la pretensión autónoma de nulidad.
Los recursos son medios de impugnación de los actos procesales, la parte agraviada
por él, tiene dentro de los límites que la ley le confiera, poderes de impugnación
destinados a promover la revisión del acto y su eventual modificación. El recurso es el
medio de impugnación más importante, la impugnación es el género y el recurso la
especie. Los recursos son aquellos actos procesales en cuya virtud quien se considera
agraviado por una resolución judicial puede, en el mismo proceso y dentro de
determinados plazos, computados desde la notificación de aquella, que un órgano
superior en grado tal que la dicto, o en su caso este mismo, la reforme, modifique,
amplíe o anule. Los recursos pueden clasificarse en ordinarios y extraordinarios, los
primeros son aquellos que la ley prevé con el objeto de reparar genéricamente la
extensa gama de defectos que puede exhibir las resoluciones judiciales y que
fundamentalmente consisten en errores de juzgamiento derivados de una desacertada
aplicación de la ley o de la valoración de la prueba o vicios producidos por la
inobservancia de los requisitos procesales que condicionan la validez de la
correspondiente resolución y en irregularidades concernientes al procedimiento que
precedió a su dictado. El recurso ordinario opera al interior del proceso, tanto por la
facilidad con que es admitido como por el mayor poder, que se atribuye al órgano
jurisdiccional encargado de resolverlo. Son considerados recursos ordinarios los
siguientes: aclaratoria, reposición, apelación, nulidad y queja por denegatoria de
apelación. En tanto que los remedios para nuestro código procesal civil, son medios de
impugnación que se formulan por quien se considere agraviado por actos procesales
no contenidos en resoluciones; por citar el cuestionamiento de acto de notificación o el
cuestionamiento de la ejecución de un embargo en forma de depósito. Atendiendo a
las premisas normativas citadas se tiene que si se pretende cuestionar un acto
procesal contenido en resolución, como es la N° 1 que admite a trámite la demanda, la
forma correcta no es el uso de la nulidad (remedio), sino el recurso; empero la parte
apelante uso el remedio de tipo de nulidad, según se colige de las páginas 135 a 142;
y en este contexto la nulidad no es procedente.
CUARTO.- Además, una vez resuelta la nulidad de la
resolución N° 1, por resolución N° 5; la co demandada ELSI CONSUELO TATAJE
BARRIGA, ha impugnado la resolución N° 5 en esta parte; cuando está prohibido por
mandato expreso del artículo 365 inciso 2) del Código Procesal Civil. Así el texto legal
referido prescribe que “Procede apelación…. 2. Contra los autos, excepto los que se
expidan en la tramitación de una articulación…”; en este caso la resolución N° 5 en la
parte que desestima la nulidad de resolución es una articulación. El fundamento es
que todo acto procesal tiene la posibilidad de la impugnación, como un mecanismo
orientado a corregir errores en su producción, en ese sentido lo prescribe el artículo
355 del Código Procesal Civil, y para ejercer la impugnación nuestro sistema procesal
acoge tres mecanismos: el remedio, la pretensión autónoma y recurso. Una expresión
de los remedios, es la nulidad de acto procesales no contenidos en resoluciones; por
tanto si utilizo el remedio (nulidad) ya no pudo usar el recurso; lo contrario implica
articulación. Siendo así el recurso de apelación concedido contra la resolución N° 5 en
este punto es improcedente lo cual se califica así a mérito del artículo 367 del Código
Procesal Civil, previa nulidad del concesorio contenido en la resolución N° 6 de la
página 166.
QUINTO.- El numeral 2 de la resolución N° 5 aclara la
resolución N° 1, y esto también fue apelado en el escrito de la página 157 a 165.
Como todo recurso, incluso el de apelación, por mandato del artículo 366 del Código
Procesal Civil, el que interpone recurso de apelación debe fundamentarlo, indicando el
error de hecho o derecho incurrido en la resolución, precisando la naturaleza del
agravio y sustentando su pretensión. La fundamentación del agravio es importante
porque limita los poderes del juez superior, fija el objeto de la alzada y por exclusión lo
que no es objeto de impugnación adquiere autoridad de cosa juzgada; es
indispensable que el recurso de apelación contenga una fundamentación del agravio
indicando el error de hecho o de derecho incurrido en la resolución impugnada y
precisando su naturaleza, de tal modo que el agravio fija la pretensión de la Sala de
revisión. La fundamentación debe indicar el error de hecho o derecho de la resolución
impugnada. El error de hecho es el que proviene de un conocimiento imperativo sobre
los elementos de la pretensión procesal en discusión o sobre algún acontecimiento
producido y que es materia de prueba en el proceso. Según artículo 364 del Código
Procesal Civil, el objeto de la apelación es la revisión de la resolución y existencia de
un agravio.
SEXTO.- El numeral 2) de la resolución N° 5 aclara la
resolución N° 1 que la demanda versa sobre Impugnación de acuerdo de exclusión de
socio adoptado en la Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010, y como
pretensión accesoria la impugnación de todo acuerdo posteriores como es la
reducción de capital y modificación parcial de estatutos, inclusión de socios, aumento
de capital y modificación parcial de estatutos, transformación de sociedad, revocación
de administradores y nombramiento de gerentes, así como la segunda pretensión
accesoria de nulidad inscripciones registrales contenidos en los asientos 12,13, 14 y
15 de la partida N° 02027588 del Registro de Personas Jurídicas de la Oficina
Registral de Ica; y esta aclaración se fundamenta en el artículo 406 del Código
Procesal Civil y se refiere a la parte decisoria de la resolución N° 1. Empero en el
recurso de apelación, la apelante no precisa porque en esta aclaración existe error de
hecho ni derecho, se limita a cuestionar el fondo de la calificación de la resolución N° 1
que admite a trámite la demanda precisando que existe caducidad de la demanda e
indebida acumulación, pero no precisa porque la aclaración es errada y cual es el
agravio producido en su contra.
SETIMO.- En dicho contexto se tiene que no ha cumplido
con la exigencia de la fundamentación del agravio contenida en el artículo 366 del
Código Procesal Civil, y no obstante el juzgado en la resolución N° 6 concede el
recurso de apelación; por lo que estando al último párrafo del artículo 367 del Código
Procesal Civil se declara improcedente el recurso de apelación, previa nulidad del
concesorio.
OCTAVO.- SOBRE LA APELACION DE LA SENTENCIA.
Es materia de apelación la sentencia contenida en la resolución N° 22 del 2 de mayo
del 2014 que obra de la página 244 a 253 que falla declarando fundada la demanda
interpuesta por Julio Zenón Tataje Barriga por derecho propio y en representación de
Rosario Virginia Tataje Barriga contra la Clínica Tataje Barriga S.A.C. y doña Elsi
Consuelo Tataje Barriga, sobre Impugnación de acuerdo de exclusión de socio
adoptado en la Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010, y como
pretensión accesoria la impugnación de todo acuerdo posterior como es la reducción
de capital y modificación parcial de estatutos, inclusión de socios, aumento de capital y
modificación parcial de estatutos, transformación de sociedad, revocación de
administradores y nombramiento de gerentes, así como la segunda pretensión
accesoria de nulidad inscripciones registrales contenidos en los asientos 12,13, 14 y
15 de la partida N° 02027588 del Registro de Personas Jurídicas de la Oficina
Registral de Ica.
NOVENO.- La co demandada ELSI CONSUELO TATAJE
BARRIGA, es la apelante, quien en el escrito que obra de la página 266 a 272,
interpone recurso de apelación, por los fundamentos siguientes:
a. Incurre en error al señalar los artículos 295, 301 de la Ley General de
Sociedades, porque es una sociedad anónima cerrada, y no ha considerado el
artículo 51 de la Ley referida.
b. Incurre en error al señalar el artículo 92 del Código Civil.
c. No hizo mención al artículo 139 de la Ley General de Sociedades que regula
los supuestos de impugnación, cuál de los supuestos es aplicable a su caso.
d. No ha precisado la parte del estatuto, norma o disposición legal que ha sido
vulnerada por la Junta General del 15 de junio del 2010.
e. Hizo cita doctrinaria fuera de lugar y contexto como es la del numeral 4.5.
f. No ha considerado que la acción ha caducado según artículo 139 de la Ley
General de Sociedades, porque tratándose de acuerdos inscribibles caduca
dentro del mes siguiente de la inscripción, fue inscrito el 21 de julio del 2010 y
la demanda fue presentada el 8 de setiembre del 2010.
DECIMO.- SOBRE LA CADUCIDAD. La sociedad es un
instrumento jurídico reconocido por su eficiente organización para ser titular de una
empresa, tenga o no fines de lucro. La doctrina y la ley reconocen a la sociedad, en tanto
personas jurídicas, los atributos de la persona física o natural, nombre, nacionalidad,
domicilio, patrimonio, capacidad, ocupación, voluntad, responsabilidad. Los modelos
societarios están contenidos en la Ley General de Sociedades, la norma dispone que toda
sociedad debe adoptar alguna de estas formas jurídicas. La sociedad tiene por finalidad el
nacimiento de otra persona jurídica en la que los socios o accionistas no tiene un derecho
sobre los bienes adquiridos, aunque se trate de inmuebles, sino solamente un derecho en el
capital y utilidades de la misma, la cual nace por convención de las partes, siendo el papel
de la sociedad activo pues se constituye para una finalidad determinada. Las modalidades
de constitución están contenidas en el artículo 3 de la Ley General de Sociedades, siendo
una de ellas la sociedad comercial de responsabilidad limitada.
DECIMO PRIMERO.- El derecho de impugnación es uno de
los principales mecanismos de control que la Ley General de Sociedades reconoce a favor
de los socios, con el fin de que cualquiera de ellos pueda cuestionar la validez de los
acuerdos adoptados en una junta general, haya o no asistido a aquella. La impugnación de
acuerdos se fundamenta en: a) Acuerdos contrarios a la ley societaria, opuestos al estatuto
o lesionantes de los intereses de la sociedad en beneficio de uno o varios accionistas. b)
Acuerdos adoptados con defecto de convocatoria o falta de quórum. C) Las de anulabilidad
o nulidad relativa previstas en la ley societaria o en el Código Civil artículos 139 y 143 de la
Ley. Mientras que las causales de nulidad son los acuerdos contrarios a normas imperativas
o fundados en causales de nulidad previstos en la ley societaria o en el Código Civil.
DECIMO SEGUNDO.- El artículo 139 de la Ley General de
Sociedades, prescribe que “Pueden ser impugnados judicialmente los acuerdos de la junta
general cuyo contenido sea contrario a esta ley, se oponga al estatuto o al pacto social o
lesione, en beneficio directo o indirecto de uno o varios accionistas, los intereses de la
sociedad. Los acuerdos que incurran en causal de anulabilidad prevista en la Ley o en el
Código Civil, también serán impugnables en los plazos y formas que señala la ley. No
procede la impugnación cuando el acuerdo haya sido revocado, o sustituido por otro
adoptado conforme a ley, al pacto social o al estatuto. El Juez mandará tener por concluido
el proceso y dispondrá el archivo de los autos, cualquiera que sea su estado, si la sociedad
acredita que el acuerdo ha sido revocado o sustituido conforme a lo prescrito en el párrafo
precedente. En los casos previstos en los dos párrafos anteriores, no se perjudica el
derecho adquirido por el tercero de buena fe”.
DECIMO TERCERO.- La Impugnación de acuerdo societario
está sujeto a caducidad, esto es un modo de extinción del derecho y la acción por el
transcurso del tiempo, pues conviene al interés social liquidar situaciones pendientes y
favorecer su solución, sustentándose por tanto en la seguridad jurídica; siendo caducidad, el
orden público está más acentuado, puesto que el elemento más importante es el plazo
previsto por la ley para todos y cada uno de los casos que se origina este derecho de
impugnación de acuerdo societarios. Según el artículo 2004 del Código Civil, los plazos de
caducidad los fija la ley sin admitir pacto en contrario, siendo nulo todo pacto orientado a
dificultar a una de las partes el ejercicio de su derecho. En este caso el apelante ha referido
que el plazo de caducidad para impugnar el acuerdo societario de la demanda ha operado,
por lo que nos remitimos a Ley General de Sociedades para verificar el plazo y si de los
actuados se verifica este agravio.
DECIMO CUARTO.- El artículo 142 de la Ley General de
Sociedades, sobre el plazo de caducidad dispone que: “Caducidad de la impugnación. La
impugnación a que se refiere el artículo 139 caduca a los dos meses de la fecha de
adopción del acuerdo si el accionista concurrió a la junta; a los tres meses si no concurrió; y
tratándose de acuerdos inscribibles, dentro del mes siguiente a la inscripción”. El computo
del plazo de caducidad supone considerar el decurso desde su inicio hasta su vencimiento,
computándose todos los días sean hábiles o inhábiles, por las características de
perentoriedad y fatalidad de los plazos de caducidad su decurso es indetenible y, por ello se
computan desde su inicio hasta su vencimiento, sin vicisitudes, esto es, sin causas
suspensivas ni interruptivas, salvo la determinada por la imposibilidad de reclamar el
derecho ante el tribunal peruano como lo ha previsto el artículo 2005 del Código Civil. En
este caso el acuerdo cuestionado es la exclusión de socios adoptado en Junta General
Extraordinaria de Accionistas del 15 de junio del 2010 –según página 51-; este acuerdo es
inscribible conforme se colige de la página 21, y artículo 3 del reglamento de Registro de
Sociedades. Ahora bien de la página 21 que se ha referido se tiene fotocopia legalizada de
la partida registral N° 02027588 de donde se colige que la Clínica Tataje Barriga Sociedad
Civil de Responsabilidad Limitada, ha reducido su capital y modificado parcialmente su
estatuto; entre otras decisiones, así dice lo siguiente “Mediante Junta General de fecha
15/06/2010, se acordó por unanimidad la Reducción de capital social (amortización de
capital social de manera automática) en la suma de S/ 1,125.00 como consecuencia de la
exclusión de los socios JULIO ZENON TATAJE BARRIGA, ROSARIO VIRGINIA TATAJE
BARRRIGA e ISABEL CECILIA TATAJE BARRIGA….” ; y este título fue presentado a
Registros Público el 21/07/2010 e inscrito el 09 de agosto del 2010. Ahora bien existe
diferencia entre presentar que es
“Poner a la vista una cosa para que pueda ser examinada con detenimiento”– según
el diccionario; con inscribir que es “Tomar razón en un registro de declaraciones,
documentos” –según diccionario; y artículo VI del Reglamento del Registro de
Sociedades RESOLUCION DEL SUPERINTENDENTE NACIONAL DE LOS REGISTROS
PUBLICOS Nº 200-2001-SUNARP-SN. La norma sobre caducidad referida ordena que
el computo del plazo de caducidad se inicia desde la inscripción, que fue el 9 de
agosto del 2010 y a la fecha de presentación de la demanda que es el 8 de setiembre
del 2010 – según sello de recepción de la página 50- se tiene que no transcurrió el
mes siguiente a la inscripción, por lo cual no ha operado la caducidad.
DECIMO QUINTO.- En el fundamento cuarto de la sentencia
el juzgado precisa que: “…El artículo 92º del Código Civil, establece que “Todo asociado
tiene derecho a impugnar judicialmente los acuerdos que violen las disposiciones
estatutarias. Las acciones impugnatorias deben ejercitarse en un plazo no mayor de
sesenta días contados a partir de la fecha del acuerdo. Pueden ser interpuestas por los
asistentes, si hubieran dejado constancia en acta de su oposición al acuerdo, por los
asociados no concurrentes y por los que hayan sido privados ilegítimamente de emitir su
voto. Si el acuerdo es inscribible en el registro, la impugnación puede formularse dentro de
los treinta días siguientes a la fecha en que la inscripción tuvo lugar (…)”; texto legal que no
es aplicable al caso de autos conforme lo advierte el apelante, pues este es un caso de
Impugnación de acuerdo societario de sociedad civil de responsabilidad limitada, en tanto
que el artículo 92 del Código Civil, es de aplicación a la persona jurídica de tipo asociación,
que son dos diferentes; empero la cita normativa de dicho texto legal no ocasiona la nulidad
de la recurrida, dado que no es trascendente su mención; pues para que opere la nulidad –
según artículo 171 del Código Procesal Civil- no basta la existencia de un vicio si el defecto
no perjudica la resolución, y este es el caso porque con o sin la presencia de este párrafo el
contenido de la sentencia esta debida y lógicamente motivada, dado que en otros párrafos
hace cita a las normas legales pertinentes y los hechos; que dan la conclusión de la parte
decisoria.
DECIMO SEXTO.- En cuanto al numeral 4.5 de la sentencia,
que se remite a la al Tribunal Constitucional en la sentencia recaída en el Expediente Nº
5215-2007-PA/TC y precisa que ha señalado: “…en el presente caso nos encontramos
frente al ejercicio del derecho disciplinario sancionador que una persona jurídica de derecho
privado puede aplicar a sus miembros cuando estos cometan faltas tipificadas como tales
en sus estatutos, siempre y cuando se les garantice un debido proceso y se respeten los
derechos fundamentales consagrados en la Constitución…(…)… Sobre el particular y
respecto a los procedimientos disciplinarios sancionadores llevados a cabo al interior de
asociaciones, existe abundante y uniforme reiterada jurisprudencia expedida por el Tribunal
Constitucional. En el caso de autos, si bien no se trata de una asociación en sentido estricto
(conforme la entiende el Código Civil), sino de una Sociedad Civil de Responsabilidad
Limitada, queda claro que dichos criterios resultan perfectamente invocable y, por ende,
aplicables a la controversia de autos…(…)…En diversas oportunidades este Colegiado ha
señalado que el derecho al debido proceso es un derecho cuyas potestades se encuentran
en esfera de protección no solo se titularizan en el sino de un proceso judicial, sino que se
extienden, en general, a cualquier órgano del Estado, e incluso de un particular o entidad
privada, que ejerza funciones de carácter materialmente jurisdiccional…(…)… De ahí que
este Tribunal haya establecido que el debido proceso –y los derechos que lo conforman,
como por ejemplo el derecho de densa –resultan aplicables al interior de la actividad
institucional de cualquier persona jurídica de derecho privado, máxime si ha previsto la
posibilidad de imponer una sanción tan grave como la expulsión…”; pero no resulta una cita
fuera de lugar no contexto, sino que esta relacionado con el caso si consideramos que la
exclusión de los socios demandantes una especie de sanción con motivo de denuncias –
según contestación- y además que de la cita del juzgado se tiene lo referido al debido
proceso, que si ha sido citado tanto en la demanda como en la contestación; por lo tanto
este error que alega la apelante no esta acreditado.
DECIMO SETIMO.- En la sentencia el juzgado ha considerado
los artículos 295 y 301 de la Ley General de Sociedades; así dice “SEGUNDO.- De la
Sociedad Civil.- Conforme al contenido del artículo 295º de la Ley General de Sociedades,
en el segundo considerando cuando dice: “la Sociedad Civil, se constituye para un fin
común de carácter económico que se realiza mediante el ejercicio personal de una
profesión, oficio, pericia, practica u otro tipo de actividades personales por alguno, algunos o
todos los socios”; y en este mismo considerando cita al artículo 301 de la Ley General de
Sociedades cuando dice “ Por su parte, el artículo 301º de la norma legal indicada refiere
que la Junta de Socios es el órgano supremo de la sociedad y ejerce como tal los derechos
y las facultades de decisión y disposición que legalmente le corresponden, salvo aquellos
que, en virtud del pacto social, hayan sido encargados a los administradores. Los acuerdos
se adoptan por mayoría de votos computada conforme al pacto social y a falta de
estipulación, por capitales y no por personas; y se aplica la regla supletoria del artículo
anterior al socio que solo pone su profesión u oficio. Toda modificación del pacto social
requiere acuerdo unánime de los socios”; aplicación normativa que se refiere a la sociedad
civil, mas no a la sociedad civil de responsabilidad limitada que es el caso de autos; -según
actos postulatorios-; sin embargo; esta cita normativa no ocasiona la nulidad, porque no
perjudica trascendentemente la sentencia, dado que del resto del contenido de la misma si
es factible de advertirse la motivación interna y externa de la decisión arribada, esto por
aplicación del artículo 171 del Código Procesal Civil, por lo tanto no ocasiona la nulidad de
la misma.
DECIMO OCTAVO.- El artículo 51 de la Ley General de
Sociedades, cuya aplicación solicita el apelante dispone que: “En la sociedad anónima
el capital está representado por acciones nominativas y se integra por aportes de los
accionistas, quienes no responden personalmente de las deudas sociales. No se
admite el aporte de servicios en la sociedad anónima”; empero su aplicación no es
coherente con lo demandado, dado que lo que se cuestiona es el acta de Junta
General Extraordinaria del 15 de junio del 2010 –según demanda de la página 51-, que
ocurrió cuando la demandada tenia la forma societaria de Sociedad Civil de
responsabilidad limitada; así se acredita de la propia contestación que trascribe parte
de dicha Junta –según página 109- cuando dice “ … se da inicio a la Junta General
Extraordinaria de Socios de la CLINICA TATAJE BARRIGA SOCIEDAD CIVIL DE
RESPONSABILIDAD LIMITADA….”, por lo tanto no se acredita el agravio de la
apelación.
DECIMO NOVENO.- La Junta General Extraordinaria del
15 de junio del 2010 que excluye como socios a los demandantes, fue realizado
cuando la demandada tenia la forma de sociedad civil de responsabilidad limitada, por
lo tanto era de aplicación la norma contenida en el artículo 293 de la Ley General de
Sociedades cuyo texto dice:
“Exclusión y separación de los socios. Puede ser excluido el socio gerente que infrinja
las disposiciones del estatuto, cometa actos dolosos contra la sociedad o se dedique
por cuenta propia o ajena al mismo género de negocios que constituye el objeto social.
La exclusión del socio se acuerda con el voto favorable de la mayoría de las
participaciones sociales, sin considerar las del socio cuya exclusión se discute, debe
constar en escritura pública y se inscribe en el Registro. Dentro de los quince días
desde que la exclusión se comunicó al socio excluido, puede éste formular oposición
mediante demanda en proceso abreviado. Si la sociedad sólo tiene dos socios, la
exclusión de uno de ellos sólo puede ser resuelta por el Juez, mediante demanda en
proceso abreviado. Si se declara fundada la exclusión se aplica lo dispuesto en la
primera parte del artículo 4. Todo socio puede separarse de la sociedad en los casos
previstos en la ley y en el estatuto”.
VIGESIMO.- En este caso de autos según transcripción
de la Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010, contenida en la
contestación, una de las causales por las cuales fueron separados los accionantes fue:
“POR HABER REALIZADO GESTIONES A TÍTULO PERSONAL, UTILIZANDO LA
INFRAESTRUCTURA Y EQUIPOS DE LA CLÍNICA TATAJE BARRIGA SCRL PARA
LA SUSCRIPCION DE CONVENIO DE PRESTACION DE SERVICIOS DE SALUD
CON RIMAC… CONFORME SE CORROBORA DE LA CARTA… UNA VEZ
SUSCRITO POR EL DR. JULIO ZENON TATAJE BARRIGA… CON LO CUAL
ACREDITA QUE SE VIENE DEDICANDO POR CUENTA PROPIA AL MISMO
GENERO DE NEGOCIOS QUE CONSTITUYE EL OBJETO SOCIAL DE LA CLINICA
TATAJE BARRIGA SOCIEDAD CIVIL DE RESPONSABILIDAD LIMITADA”. Resulta
que dicha carta a que hace referencia dicha acta no consta en autos, lo que si obran
son cartas notariales remitidas por la co demandada ELSI CONSUELO TATAJE
BARRIGA a RIMAC INTERNACIONALES S.A ENTIDAD PRESTADORA DE SALUD,
a RIMAC INTERNACIONAL COMPAÑÍA DE SEGUROS Y REASEGUROS, a MAFRE
PERU, a PACIFICO SALUD, a PERSALUD S.A, a la POSITIVA CIA DE SEGUROS, y
a la SUPERINTENDENCIA DE ENTIDADES PRESTADORAS DE SALUD; -según
páginas 97 a 104-, comunicando el uso del accionante JULIO ZENON TATAJE
BARRIGA usa a título personal instalaciones y demás bienes de la sociedad
demandada; pero es la afirmación de la co demandada que obra por escrito sin medio
probatorio que lo corrobore; entonces no se acredita esta causal que ha motivado la
exclusión de los accionantes. Cabe resaltar que en la contestación y anexos referidos,
se considera como autor de estos hechos a JULIO ZENON TATAJE BARRIGA, pero
además del demandante citado, han sido excluidos y separados otros socios como es
la co demandante ROSARIO VIRGINIA TATAJE BARRIGA e ISABEL CECILIA
TATAJE BARRIGA –según inscripción registral de la página 21- sin que hayan motivos
de su exclusión ni separación, porque a decir de la propia demandada ellas no usaron
los bienes de la sociedad a título personal.
VIGESIMO PRIMERO.- De otro lado, la exclusión y
separación de los socios accionantes se fundamenta en la existencia de dos
denuncias penales, que se acreditan de la demanda y contestación y disposición N°
18-1949-2010-1°DISFPPC-ICA del caso acumulado N° 2010-0657 y 2010-1837 que
obran de las páginas 93 a 96; que a decir de los demandados violenta el pacto social y
estatuto vigente perdiéndose el animus societatis –ver página 110-. Al respecto no se
colige de autos artículo del Estatuto o pacto social donde se prohíba la presentación
de denuncias en contra de los socios por presuntos actos contra la sociedad; entonces
no se colige la violación de estatutos. Las sociedades se forman con convención de
las partes; y cuando esta se acaba; es una causal de disolución y liquidación de la
misma, empero la sola presentación de denuncia penal por presuntos actos ilícitos en
contra de un socio en agravio de la sociedad, no acredita la pérdida del animus
societatis, por tanto no es causal de exclusión o separación de socios. En
consecuencia; la Junta General del 15 de junio del 2010 vulnera el artículo 293 de la
Ley General de Sociedades, tanto mas que esta exclusión de socio debió
comunicársele a los socios excluidos, para que puedan formular su oposición; empero
esto no ha ocurrido con lo cual se corrobora la violación de dicha norma; según lo
expuso el juzgado en la sentencia específicamente en el considerando 4.6; que
concuerda con el artículo 139 de la Ley General de Sociedades que dispone que
“Pueden ser impugnados judicialmente los acuerdos de la Junta General cuyo
contenido sea contrario a esta Ley…”; que es el caso de autos. Cabe precisar que por
el principio de limitación este colegiado solo se pronuncia por los agravios
denunciados y al no haber sido acreditados se confirma la sentencia.
POR ESTOS FUNDAMENTOS:
1)DECLARARON NULO el concesorio del recurso de
apelación contenido en la resolución N° 6. Proveyendo el escrito de la página 157 a
165: DECLARARON improcedente el recurso de apelación de la resolución N° 5.
2)CONFIRMARON la sentencia contenida en la resolución N° 22 que falla declarando
FUNDADA la demanda interpuesta por Julio Zenón Tataje Barriga por derecho propio
y en representación de Rosario Virginia Tataje Barriga contra la Clínica Tataje Barriga
S.A.C. y doña Elsi Consuelo Tataje Barriga, sobre Impugnación de Acuerdos de
exclusión de socio adoptado en Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010;
con lo demás que la contiene; y, los devolvieron.
S. S.
CHAUCA PEÑALOZA
ZARATE ZUÑIGA
RIEGA RONDON
PONENCIA
SENTENCIA DE VISTA 1° SALA CIVIL - Sede CentralEXPEDIENTE : 01725-2010-0-1401-JR-CI-05
RESOLUCIÓN N° 29
Ica, veintinueve de agosto
Del dos mil catorce.
VISTOS: En audiencia pública el recurso de apelación de la
sentencia e interviniendo como ponente la Jueza Jacqueline Chauca Peñaloza.
I CONSIDERANDO:
PRIMERO.- SOBRE LA RESOLUCION N° 5. Es materia de
apelación la resolución N° 5 que declara infundada la nulidad interpuesta por la co demandada
ELSI CONSUELO TATAJE BARRIGA, y, aclara la resolución N° 1 que la demanda versa sobre
Impugnación de acuerdo de exclusión de socio adoptado en la Junta General Extraordinaria del
15 de junio del 2010, y como pretensión accesoria la impugnación de todo acuerdo posterior
como es la reducción d capital y modificación parcial de estatutos, inclusión de socios, aumento
de capital y modificación parcial de estatutos, transformación de sociedad, revocación de
administradores y nombramiento de gerentes, así como la segunda pretensión accesoria de
nulidad inscripciones registrales contenidos en los asientos 12,13, 14 y 15 de la partida N°
02027588 del Registro de Personas Jurídicas de la Oficina Registral de Ica. El recurso de
apelación es presentado por ELSI CONSUELO TATAJE BARRIGA, quien en el escrito que
obra de la página 157 a 165, solicita se revoque la impugnada y reformándola se declare
fundada la apelación y declare improcedente la demanda.
SEGUNDO.- Como antecedentes de la resolución apelada se
tiene que la demandada ELSI CONSUELTO TATAJE BARRIGA, por escrito que obra de la
página 135 a 142, solicito la nulidad de lo actuado hasta la resolución N° 1 que admite la
demanda, porque debió ser declarada improcedente, dichas acciones a la fecha de
presentación de la demanda habían caducado, por contener indebida acumulación de
pretensiones. En consecuencia se tiene que se ha solicitado la nulidad de una resolución que
es la N° 1.
TERCERO.- Por mandato de la ley, específicamente artículo
356 del Código Procesal Civil, la actividad impugnatoria se puede ejercer a través de la vía
recursiva, de los remedios y de la pretensión autónoma de nulidad. Los recursos son medios de
impugnación de los actos procesales, la parte agraviada por él, tiene dentro de los límites que
la ley le confiera, poderes de impugnación destinados a promover la revisión del acto y su
eventual modificación. El recurso es el medio de impugnación más importante, la impugnación
es el género y el recurso la especie. Los recursos son aquellos actos procesales en cuya virtud
quien se considera agraviado por una resolución judicial puede, en el mismo proceso y dentro
de determinados plazos, computados desde la notificación de aquella, que un órgano superior
en grado tal que la dicto, o en su caso este mismo, la reforme, modifique, amplíe o anule. Los
recursos pueden clasificarse en ordinarios y extraordinarios, los primeros son aquellos que la
ley prevé con el objeto de reparar genéricamente la extensa gama de defectos que puede
exhibir las resoluciones judiciales y que fundamentalmente consisten en errores de juzgamiento
derivados de una desacertada aplicación de la ley o de la valoración de la prueba o vicios
producidos por la inobservancia de los requisitos procesales que condicionan la validez de la
correspondiente resolución y en irregularidades concernientes al procedimiento que precedió a
su dictado. El recurso ordinario opera al interior del proceso, tanto por la facilidad con que es
admitido como por el mayor poder, que se atribuye al órgano jurisdiccional encargado de
resolverlo. Son considerados recursos ordinarios los siguientes: aclaratoria, reposición,
apelación, nulidad y queja por denegatoria de apelación. En tanto que los remedios para
nuestro código procesal civil, son medios de impugnación que se formulan por quien se
considere agraviado por actos procesales no contenidos en resoluciones; por citar el
cuestionamiento de acto de notificación o el cuestionamiento de la ejecución de un embargo en
forma de depósito. Atendiendo a las premisas normativas citadas se tiene que si se pretende
cuestionar un acto procesal contenido en resolución, como es la N° 1 que admite a trámite la
demanda, la forma correcta no es el uso de la nulidad (remedio), sino el recurso; empero la
parte apelante uso el remedio de tipo de nulidad, según se colige de las páginas 135 a 142; y
en este contexto la nulidad no es procedente.
CUARTO.- Además, una vez resuelta la nulidad de la resolución
N° 1, por resolución N° 5; la co demandada ELSI CONSUELO TATAJE BARRIGA, ha
impugnado la resolución N° 5 en esta parte; cuando está prohibido por mandato expreso del
artículo 365 inciso 2) del Código Procesal Civil. Así el texto legal referido prescribe que
“Procede apelación…. 2. Contra los autos, excepto los que se expidan en la tramitación de una
articulación…”; en este caso la resolución N° 5 en la parte que desestima la nulidad de
resolución es una articulación. El fundamento es que todo acto procesal tiene la posibilidad de
la impugnación, como un mecanismo orientado a corregir errores en su producción, en ese
sentido lo prescribe el artículo 355 del Código Procesal Civil, y para ejercer la impugnación
nuestro sistema procesal acoge tres mecanismos: el remedio, la pretensión autónoma y
recurso. Una expresión de los remedios, es la nulidad de acto procesales no contenidos en
resoluciones; por tanto si utilizo el remedio (nulidad) ya no pudo usar el recurso; lo contrario
implica articulación. Siendo así el recurso de apelación concedido contra la resolución N° 5 en
este punto es improcedente lo cual se califica así a mérito del artículo 367 del Código Procesal
Civil, previa nulidad del concesorio contenido en la resolución N° 6 de la página 166.
QUINTO.- El numeral 2 de la resolución N° 5 aclara la resolución
N° 1, y esto también fue apelado en el escrito de la página 157 a 165. Como todo recurso,
incluso el de apelación, por mandato del artículo 366 del Código Procesal Civil, el que interpone
recurso de apelación debe fundamentarlo, indicando el error de hecho o derecho incurrido en la
resolución, precisando la naturaleza del agravio y sustentando su pretensión. La
fundamentación del agravio es importante porque limita los poderes del juez superior, fija el
objeto de la alzada y por exclusión lo que no es objeto de impugnación adquiere autoridad de
cosa juzgada; es indispensable que el recurso de apelación contenga una fundamentación del
agravio indicando el error de hecho o de derecho incurrido en la resolución impugnada y
precisando su naturaleza, de tal modo que el agravio fija la pretensión de la Sala de revisión.
La fundamentación debe indicar el error de hecho o derecho de la resolución impugnada. El
error de hecho es el que proviene de un conocimiento imperativo sobre los elementos de la
pretensión procesal en discusión o sobre algún acontecimiento producido y que es materia de
prueba en el proceso. Según artículo 364 del Código Procesal Civil, el objeto de la apelación es
la revisión de la resolución y existencia de un agravio.
SEXTO.- El numeral 2) de la resolución N° 5 aclara la resolución
N° 1 que la demanda versa sobre Impugnación de acuerdo de exclusión de socio adoptado en
la Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010, y como pretensión accesoria la
impugnación de todo acuerdo posteriores como es la reducción de capital y modificación parcial
de estatutos, inclusión de socios, aumento de capital y modificación parcial de estatutos,
transformación de sociedad, revocación de administradores y nombramiento de gerentes, así
como la segunda pretensión accesoria de nulidad inscripciones registrales contenidos en los
asientos 12,13, 14 y 15 de la partida N° 02027588 del Registro de Personas Jurídicas de la
Oficina Registral de Ica; y esta aclaración se fundamenta en el artículo 406 del Código Procesal
Civil y se refiere a la parte decisoria de la resolución N° 1. Empero en el recurso de apelación,
la apelante no precisa porque en esta aclaración existe error de hecho ni derecho, se limita a
cuestionar el fondo de la calificación de la resolución N° 1 que admite a trámite la demanda
precisando que existe caducidad de la demanda e indebida acumulación, pero no precisa
porque la aclaración es errada y cual es el agravio producido en su contra.
SETIMO.- En dicho contexto se tiene que no ha cumplido con la
exigencia de la fundamentación del agravio contenida en el artículo 366 del Código Procesal
Civil, y no obstante el juzgado en la resolución N° 6 concede el recurso de apelación; por lo que
estando al último párrafo del artículo 367 del Código Procesal Civil se declara improcedente el
recurso de apelación, previa nulidad del concesorio.
OCTAVO.- SOBRE LA APELACION DE LA SENTENCIA. Es
materia de apelación la sentencia contenida en la resolución N° 22 del 2 de mayo del 2014 que
obra de la página 244 a 253 que falla declarando fundada la demanda interpuesta por Julio
Zenón Tataje Barriga por derecho propio y en representación de Rosario Virginia Tataje Barriga
contra la Clínica Tataje Barriga S.A.C. y doña Elsi Consuelo Tataje Barriga, sobre Impugnación
de acuerdo de exclusión de socio adoptado en la Junta General Extraordinaria del 15 de junio
del 2010, y como pretensión accesoria la impugnación de todo acuerdo posterior como es la
reducción de capital y modificación parcial de estatutos, inclusión de socios, aumento de capital
y modificación parcial de estatutos, transformación de sociedad, revocación de administradores
y nombramiento de gerentes, así como la segunda pretensión accesoria de nulidad
inscripciones registrales contenidos en los asientos 12,13, 14 y 15 de la partida N° 02027588
del Registro de Personas Jurídicas de la Oficina Registral de Ica.
NOVENO.- La co demandada ELSI CONSUELO TATAJE
BARRIGA, es la apelante, quien en el escrito que obra de la página 266 a 272, interpone
recurso de apelación, por los fundamentos siguientes:
g. Incurre en error al señalar los artículos 295, 301 de la Ley General de Sociedades,
porque es una sociedad anónima cerrada, y no ha considerado el artículo 51 de la Ley
referida.
h. Incurre en error al señalar el artículo 92 del Código Civil.
i. No hizo mención al artículo 139 de la Ley General de Sociedades que regula los
supuestos de impugnación, cuál de los supuestos es aplicable a su caso.
j. No ha precisado la parte del estatuto, norma o disposición legal que ha sido vulnerada
por la Junta General del 15 de junio del 2010.
k. Hizo cita doctrinaria fuera de lugar y contexto como es la del numeral 4.5.
l. No ha considerado que la acción ha caducado según artículo 139 de la Ley General de
Sociedades, porque tratándose de acuerdos inscribibles caduca dentro del mes
siguiente de la inscripción, fue inscrito el 21 de julio del 2010 y la demanda fue
presentada el 8 de setiembre del 2010.
DECIMO.- SOBRE LA CADUCIDAD. La sociedad es un instrumento
jurídico reconocido por su eficiente organización para ser titular de una empresa, tenga o no fines de
lucro. La doctrina y la ley reconocen a la sociedad, en tanto personas jurídicas, los atributos de la
persona física o natural, nombre, nacionalidad, domicilio, patrimonio, capacidad, ocupación, voluntad,
responsabilidad. Los modelos societarios están contenidos en la Ley General de Sociedades, la
norma dispone que toda sociedad debe adoptar alguna de estas formas jurídicas. La sociedad tiene
por finalidad el nacimiento de otra persona jurídica en la que los socios o accionistas no tiene un
derecho sobre los bienes adquiridos, aunque se trate de inmuebles, sino solamente un derecho en el
capital y utilidades de la misma, la cual nace por convención de las partes, siendo el papel de la
sociedad activo pues se constituye para una finalidad determinada. Las modalidades de constitución
están contenidas en el artículo 3 de la Ley General de Sociedades, siendo una de ellas la sociedad
comercial de responsabilidad limitada.
DECIMO PRIMERO.- El derecho de impugnación es uno de los
principales mecanismos de control que la Ley General de Sociedades reconoce a favor de los socios,
con el fin de que cualquiera de ellos pueda cuestionar la validez de los acuerdos adoptados en una
junta general, haya o no asistido a aquella. La impugnación de acuerdos se fundamenta en: a)
Acuerdos contrarios a la ley societaria, opuestos al estatuto o lesionantes de los intereses de la
sociedad en beneficio de uno o varios accionistas. b) Acuerdos adoptados con defecto de
convocatoria o falta de quórum. C) Las de anulabilidad o nulidad relativa previstas en la ley societaria
o en el Código Civil artículos 139 y 143 de la Ley. Mientras que las causales de nulidad son los
acuerdos contrarios a normas imperativas o fundados en causales de nulidad previstos en la ley
societaria o en el Código Civil.
DECIMO SEGUNDO.- El artículo 139 de la Ley General de
Sociedades, prescribe que “Pueden ser impugnados judicialmente los acuerdos de la junta general
cuyo contenido sea contrario a esta ley, se oponga al estatuto o al pacto social o lesione, en beneficio
directo o indirecto de uno o varios accionistas, los intereses de la sociedad. Los acuerdos que
incurran en causal de anulabilidad prevista en la Ley o en el Código Civil, también serán impugnables
en los plazos y formas que señala la ley. No procede la impugnación cuando el acuerdo haya sido
revocado, o sustituido por otro adoptado conforme a ley, al pacto social o al estatuto. El Juez
mandará tener por concluido el proceso y dispondrá el archivo de los autos, cualquiera que sea su
estado, si la sociedad acredita que el acuerdo ha sido revocado o sustituido conforme a lo prescrito
en el párrafo precedente. En los casos previstos en los dos párrafos anteriores, no se perjudica el
derecho adquirido por el tercero de buena fe”.
DECIMO TERCERO.- La Impugnación de acuerdo societario está
sujeto a caducidad, esto es un modo de extinción del derecho y la acción por el transcurso del
tiempo, pues conviene al interés social liquidar situaciones pendientes y favorecer su solución,
sustentándose por tanto en la seguridad jurídica; siendo caducidad, el orden público está más
acentuado, puesto que el elemento más importante es el plazo previsto por la ley para todos y cada
uno de los casos que se origina este derecho de impugnación de acuerdo societarios. Según el
artículo 2004 del Código Civil, los plazos de caducidad los fija la ley sin admitir pacto en contrario,
siendo nulo todo pacto orientado a dificultar a una de las partes el ejercicio de su derecho. En este
caso el apelante ha referido que el plazo de caducidad para impugnar el acuerdo societario de la
demanda ha operado, por lo que nos remitimos a Ley General de Sociedades para verificar el plazo y
si de los actuados se verifica este agravio.
DECIMO CUARTO.- El artículo 142 de la Ley General de
Sociedades, sobre el plazo de caducidad dispone que: “Caducidad de la impugnación. La
impugnación a que se refiere el artículo 139 caduca a los dos meses de la fecha de adopción del
acuerdo si el accionista concurrió a la junta; a los tres meses si no concurrió; y tratándose de
acuerdos inscribibles, dentro del mes siguiente a la inscripción”. El computo del plazo de caducidad
supone considerar el decurso desde su inicio hasta su vencimiento, computándose todos los días
sean hábiles o inhábiles, por las características de perentoriedad y fatalidad de los plazos de
caducidad su decurso es indetenible y, por ello se computan desde su inicio hasta su vencimiento,
sin vicisitudes, esto es, sin causas suspensivas ni interruptivas, salvo la determinada por la
imposibilidad de reclamar el derecho ante el tribunal peruano como lo ha previsto el artículo 2005 del
Código Civil. En este caso el acuerdo cuestionado es la exclusión de socios adoptado en Junta
General Extraordinaria de Accionistas del 15 de junio del 2010 –según página 51-; este acuerdo es
inscribible conforme se colige de la página 21, y artículo 3 del reglamento de Registro de Sociedades.
Ahora bien de la página 21 que se ha referido se tiene fotocopia legalizada de la partida registral N°
02027588 de donde se colige que la Clínica Tataje Barriga Sociedad Civil de Responsabilidad
Limitada, ha reducido su capital y modificado parcialmente su estatuto; entre otras decisiones, así
dice lo siguiente “Mediante Junta General de fecha 15/06/2010, se acordó por unanimidad la
Reducción de capital social (amortización de capital social de manera automática) en la suma de S/
1,125.00 como consecuencia de la exclusión de los socios JULIO ZENON TATAJE BARRIGA,
ROSARIO VIRGINIA TATAJE BARRRIGA e ISABEL CECILIA TATAJE BARRIGA….” ; y este título
fue presentado a Registros Público el 21/07/2010 e inscrito el 09 de agosto del 2010. Ahora bien
existe diferencia entre presentar que es
“Poner a la vista una cosa para que pueda ser examinada con detenimiento”– según el
diccionario; con inscribir que es “Tomar razón en un registro de declaraciones, documentos”
–según diccionario; y artículo VI del Reglamento del Registro de Sociedades RESOLUCION
DEL SUPERINTENDENTE NACIONAL DE LOS REGISTROS PUBLICOS Nº 200-2001-SUNARP-
SN. La norma sobre caducidad referida ordena que el computo del plazo de caducidad se
inicia desde la inscripción, que fue el 9 de agosto del 2010 y a la fecha de presentación de la
demanda que es el 8 de setiembre del 2010 – según sello de recepción de la página 50- se
tiene que no transcurrió el mes siguiente a la inscripción, por lo cual no ha operado la
caducidad.
DECIMO QUINTO.- En el fundamento cuarto de la sentencia el
juzgado precisa que: “…El artículo 92º del Código Civil, establece que “Todo asociado tiene derecho
a impugnar judicialmente los acuerdos que violen las disposiciones estatutarias. Las acciones
impugnatorias deben ejercitarse en un plazo no mayor de sesenta días contados a partir de la fecha
del acuerdo. Pueden ser interpuestas por los asistentes, si hubieran dejado constancia en acta de su
oposición al acuerdo, por los asociados no concurrentes y por los que hayan sido privados
ilegítimamente de emitir su voto. Si el acuerdo es inscribible en el registro, la impugnación puede
formularse dentro de los treinta días siguientes a la fecha en que la inscripción tuvo lugar (…)”; texto
legal que no es aplicable al caso de autos conforme lo advierte el apelante, pues este es un caso de
Impugnación de acuerdo societario de sociedad civil de responsabilidad limitada, en tanto que el
artículo 92 del Código Civil, es de aplicación a la persona jurídica de tipo asociación, que son dos
diferentes; empero la cita normativa de dicho texto legal no ocasiona la nulidad de la recurrida, dado
que no es trascendente su mención; pues para que opere la nulidad –según artículo 171 del Código
Procesal Civil- no basta la existencia de un vicio si el defecto no perjudica la resolución, y este es el
caso porque con o sin la presencia de este párrafo el contenido de la sentencia esta debida y
lógicamente motivada, dado que en otros párrafos hace cita a las normas legales pertinentes y los
hechos; que dan la conclusión de la parte decisoria.
DECIMO SEXTO.- En cuanto al numeral 4.5 de la sentencia, que se
remite a la al Tribunal Constitucional en la sentencia recaída en el Expediente Nº 5215-2007-PA/TC y
precisa que ha señalado: “…en el presente caso nos encontramos frente al ejercicio del derecho
disciplinario sancionador que una persona jurídica de derecho privado puede aplicar a sus miembros
cuando estos cometan faltas tipificadas como tales en sus estatutos, siempre y cuando se les
garantice un debido proceso y se respeten los derechos fundamentales consagrados en la
Constitución…(…)… Sobre el particular y respecto a los procedimientos disciplinarios sancionadores
llevados a cabo al interior de asociaciones, existe abundante y uniforme reiterada jurisprudencia
expedida por el Tribunal Constitucional. En el caso de autos, si bien no se trata de una asociación en
sentido estricto (conforme la entiende el Código Civil), sino de una Sociedad Civil de Responsabilidad
Limitada, queda claro que dichos criterios resultan perfectamente invocable y, por ende, aplicables a
la controversia de autos…(…)…En diversas oportunidades este Colegiado ha señalado que el
derecho al debido proceso es un derecho cuyas potestades se encuentran en esfera de protección
no solo se titularizan en el sino de un proceso judicial, sino que se extienden, en general, a cualquier
órgano del Estado, e incluso de un particular o entidad privada, que ejerza funciones de carácter
materialmente jurisdiccional…(…)… De ahí que este Tribunal haya establecido que el debido proceso
–y los derechos que lo conforman, como por ejemplo el derecho de densa –resultan aplicables al
interior de la actividad institucional de cualquier persona jurídica de derecho privado, máxime si ha
previsto la posibilidad de imponer una sanción tan grave como la expulsión…”; pero no resulta una
cita fuera de lugar no contexto, sino que esta relacionado con el caso si consideramos que la
exclusión de los socios demandantes una especie de sanción con motivo de denuncias –según
contestación- y además que de la cita del juzgado se tiene lo referido al debido proceso, que si ha
sido citado tanto en la demanda como en la contestación; por lo tanto este error que alega la
apelante no esta acreditado.
DECIMO SETIMO.- En la sentencia el juzgado ha considerado los
artículos 295 y 301 de la Ley General de Sociedades; así dice “SEGUNDO.- De la Sociedad Civil.-
Conforme al contenido del artículo 295º de la Ley General de Sociedades, en el segundo
considerando cuando dice: “la Sociedad Civil, se constituye para un fin común de carácter económico
que se realiza mediante el ejercicio personal de una profesión, oficio, pericia, practica u otro tipo de
actividades personales por alguno, algunos o todos los socios”; y en este mismo considerando cita al
artículo 301 de la Ley General de Sociedades cuando dice “ Por su parte, el artículo 301º de la norma
legal indicada refiere que la Junta de Socios es el órgano supremo de la sociedad y ejerce como tal
los derechos y las facultades de decisión y disposición que legalmente le corresponden, salvo
aquellos que, en virtud del pacto social, hayan sido encargados a los administradores. Los acuerdos
se adoptan por mayoría de votos computada conforme al pacto social y a falta de estipulación, por
capitales y no por personas; y se aplica la regla supletoria del artículo anterior al socio que solo pone
su profesión u oficio. Toda modificación del pacto social requiere acuerdo unánime de los socios”;
aplicación normativa que se refiere a la sociedad civil, mas no a la sociedad civil de responsabilidad
limitada que es el caso de autos; -según actos postulatorios-; sin embargo; esta cita normativa no
ocasiona la nulidad, porque no perjudica trascendentemente la sentencia, dado que del resto del
contenido de la misma si es factible de advertirse la motivación interna y externa de la decisión
arribada, esto por aplicación del artículo 171 del Código Procesal Civil, por lo tanto no ocasiona la
nulidad de la misma.
DECIMO OCTAVO.- El artículo 51 de la Ley General de
Sociedades, cuya aplicación solicita el apelante dispone que: “En la sociedad anónima el
capital está representado por acciones nominativas y se integra por aportes de los accionistas,
quienes no responden personalmente de las deudas sociales. No se admite el aporte de
servicios en la sociedad anónima”; empero su aplicación no es coherente con lo demandado,
dado que lo que se cuestiona es el acta de Junta General Extraordinaria del 15 de junio del
2010 –según demanda de la página 51-, que ocurrió cuando la demandada tenia la forma
societaria de Sociedad Civil de responsabilidad limitada; así se acredita de la propia
contestación que trascribe parte de dicha Junta –según página 109- cuando dice “ … se da
inicio a la Junta General Extraordinaria de Socios de la CLINICA TATAJE BARRIGA
SOCIEDAD CIVIL DE RESPONSABILIDAD LIMITADA….”, por lo tanto no se acredita el
agravio de la apelación.
DECIMO NOVENO.- La Junta General Extraordinaria del 15 de
junio del 2010 que excluye como socios a los demandantes, fue realizado cuando la
demandada tenia la forma de sociedad civil de responsabilidad limitada, por lo tanto era de
aplicación la norma contenida en el artículo 293 de la Ley General de Sociedades cuyo texto
dice:
“Exclusión y separación de los socios. Puede ser excluido el socio gerente que infrinja las
disposiciones del estatuto, cometa actos dolosos contra la sociedad o se dedique por cuenta
propia o ajena al mismo género de negocios que constituye el objeto social. La exclusión del
socio se acuerda con el voto favorable de la mayoría de las participaciones sociales, sin
considerar las del socio cuya exclusión se discute, debe constar en escritura pública y se
inscribe en el Registro. Dentro de los quince días desde que la exclusión se comunicó al socio
excluido, puede éste formular oposición mediante demanda en proceso abreviado. Si la
sociedad sólo tiene dos socios, la exclusión de uno de ellos sólo puede ser resuelta por el Juez,
mediante demanda en proceso abreviado. Si se declara fundada la exclusión se aplica lo
dispuesto en la primera parte del artículo 4. Todo socio puede separarse de la sociedad en los
casos previstos en la ley y en el estatuto”.
VIGESIMO.- En este caso de autos según transcripción de la
Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010, contenida en la contestación, una de las
causales por las cuales fueron separados los accionantes fue:
“POR HABER REALIZADO GESTIONES A TÍTULO PERSONAL, UTILIZANDO LA
INFRAESTRUCTURA Y EQUIPOS DE LA CLÍNICA TATAJE BARRIGA SCRL PARA LA
SUSCRIPCION DE CONVENIO DE PRESTACION DE SERVICIOS DE SALUD CON RIMAC…
CONFORME SE CORROBORA DE LA CARTA… UNA VEZ SUSCRITO POR EL DR. JULIO
ZENON TATAJE BARRIGA… CON LO CUAL ACREDITA QUE SE VIENE DEDICANDO POR
CUENTA PROPIA AL MISMO GENERO DE NEGOCIOS QUE CONSTITUYE EL OBJETO
SOCIAL DE LA CLINICA TATAJE BARRIGA SOCIEDAD CIVIL DE RESPONSABILIDAD
LIMITADA”. Resulta que dicha carta a que hace referencia dicha acta no consta en autos, lo
que si obran son cartas notariales remitidas por la co demandada ELSI CONSUELO TATAJE
BARRIGA a RIMAC INTERNACIONALES S.A ENTIDAD PRESTADORA DE SALUD, a RIMAC
INTERNACIONAL COMPAÑÍA DE SEGUROS Y REASEGUROS, a MAFRE PERU, a
PACIFICO SALUD, a PERSALUD S.A, a la POSITIVA CIA DE SEGUROS, y a la
SUPERINTENDENCIA DE ENTIDADES PRESTADORAS DE SALUD; -según páginas 97 a
104-, comunicando el uso del accionante JULIO ZENON TATAJE BARRIGA usa a título
personal instalaciones y demás bienes de la sociedad demandada; pero es la afirmación de la
co demandada que obra por escrito sin medio probatorio que lo corrobore; entonces no se
acredita esta causal que ha motivado la exclusión de los accionantes. Cabe resaltar que en la
contestación y anexos referidos, se considera como autor de estos hechos a JULIO ZENON
TATAJE BARRIGA, pero además del demandante citado, han sido excluidos y separados otros
socios como es la co demandante ROSARIO VIRGINIA TATAJE BARRIGA e ISABEL CECILIA
TATAJE BARRIGA –según inscripción registral de la página 21- sin que hayan motivos de su
exclusión ni separación, porque a decir de la propia demandada ellas no usaron los bienes de
la sociedad a título personal.
VIGESIMO PRIMERO.- De otro lado, la exclusión y separación
de los socios accionantes se fundamenta en la existencia de dos denuncias penales, que se
acreditan de la demanda y contestación y disposición N° 18-1949-2010-1°DISFPPC-ICA del
caso acumulado N° 2010-0657 y 2010-1837 que obran de las páginas 93 a 96; que a decir de
los demandados violenta el pacto social y estatuto vigente perdiéndose el animus societatis –
ver página 110-. Al respecto no se colige de autos artículo del Estatuto o pacto social donde se
prohíba la presentación de denuncias en contra de los socios por presuntos actos contra la
sociedad; entonces no se colige la violación de estatutos. Las sociedades se forman con
convención de las partes; y cuando esta se acaba; es una causal de disolución y liquidación de
la misma, empero la sola presentación de denuncia penal por presuntos actos ilícitos en contra
de un socio en agravio de la sociedad, no acredita la pérdida del animus societatis, por tanto no
es causal de exclusión o separación de socios. En consecuencia; la Junta General del 15 de
junio del 2010 vulnera el artículo 293 de la Ley General de Sociedades, tanto mas que esta
exclusión de socio debió comunicársele a los socios excluidos, para que puedan formular su
oposición; empero esto no ha ocurrido con lo cual se corrobora la violación de dicha norma;
según lo expuso el juzgado en la sentencia específicamente en el considerando 4.6; que
concuerda con el artículo 139 de la Ley General de Sociedades que dispone que “Pueden ser
impugnados judicialmente los acuerdos de la Junta General cuyo contenido sea contrario a
esta Ley…”; que es el caso de autos. Cabe precisar que por el principio de limitación este
colegiado solo se pronuncia por los agravios denunciados y al no haber sido acreditados se
confirma la sentencia.
POR ESTOS FUNDAMENTOS:
1)DECLARARON NULO el concesorio del recurso de
apelación contenido en la resolución N° 6. Proveyendo el escrito de la página 157 a 165:
DECLARARON improcedente el recurso de apelación de la resolución N° 5.
2)CONFIRMARON la sentencia contenida en la resolución N° 22 que falla declarando
FUNDADA la demanda interpuesta por Julio Zenón Tataje Barriga por derecho propio y en
representación de Rosario Virginia Tataje Barriga contra la Clínica Tataje Barriga S.A.C. y doña
Elsi Consuelo Tataje Barriga, sobre Impugnación de Acuerdos de exclusión de socio adoptado
en Junta General Extraordinaria del 15 de junio del 2010; con lo demás que la contiene; y, los
devolvieron.
_______________________________JACQUELINE CHAUCA PEÑALOZA
PONENTE