Colegio de Educación Profesional Técnica Superior del

Estado de Sinaloa

CONALEP Mazatlán II – 062

Interpretación de Normas de Convivencia Social

Trabajo de investigación:

Indigencia en Mazatlán

Profesor: Ángel Romero Ramírez

Integrantes de la investigación:

Katia Yanely Moreno Preciado

Blake Thomas Fernandes Astorga

Damaris Beatriz Navarro Alcaráz

Kenneth Jesús Alfredo Gómez Ruiz

Grado: 5to. Semestre Grupo: 501

Mazatlán, Sinaloa - Noviembre 2013

INTRODUCCIÓN

La indigencia es un fenómeno social de carácter mundial, se acentúa en los

países en vías de desarrollo; principalmente en América Latina, ciertos países

asiáticos y africanos. En México es un problema social, que se agudeza en las

grandes ciudades. Se conoce con el término de indigente a aquella persona que

pasa la mayor parte del tiempo de su vida en la calle, algunos d ellos tienen

afectaciones mentales. En Mazatlán por ser un destino turístico, los últimos años

se ha incrementado la tasa de personas que tienen esta condición, las causas

son multifactoriales; en este estudio se intenta conocer la magnitud de este

problema social.

Planteamiento del problema

En los últimos años, en Mazatlán ha aumentado la cantidad de indigencia debido

a las carencias económicas de las familias Mazatlecas. También muchos casos

se deben al abandono de las personas dejándolas desprotegidas en las calles o

también a problemas psicológicos o mentales que no se tratan adecuadamente

ya sea por la falta de recursos o la falta de interés por parte de su familia o de él

mismo.

Esto ocasiona problemas en la sociedad

ya que dañan a terceros con sus actos

inapropiados con lo cual también se daña

la imagen de la ciudad.

ANTECEDENTES

Las personas en situación de calle son un grupo de la población que no ha sido

definido conceptualmente de acuerdo de sus características particulares, sino

que se le ha asociado a fenómenos más amplios como la extrema pobreza, o la

indigencia. Otra forma de referirse a estas personas es a través de su asociación

con ciertas actividades como la mendicidad y vagancia, dando por ello el nombre

de mendigos o vagabundos a toda persona que vive en la calle. Estas formas de

conceptualizar o definir a las personas en situación de calle son insuficientes por

cuanto no dan cuenta de sus principales características e impiden lograr una

comprensión acerca de lo que esta forma de vida implica.

En este contexto, primero las organizaciones de la sociedad civil y más

recientemente el propio Estado, han formulado nuevas definiciones que buscan

integrar las distintas dimensiones que conforman la situación de calle. Se ha

definido como persona en situación de calle a “todo individuo que se encuentre

en una situación de exclusión social y extrema indigencia, específicamente se

refiere a la carencia de hogar y residencia, y a la vez, la presencia de una ruptura

de los vínculos con personas significativas (familia, amigos) y con redes de

apoyo”. Lo anterior, no se refiere únicamente a la carencia de bienes materiales

para guarecerse - estar “sin techo” o “sin casa” -, sino que implica una noción

más amplia, cercana a la idea de “ausencia de hogar”

y a procesos de exclusión y desvinculación social.

Un informe de la Comisión Económica para América

Latina y el Caribe (Cepal), citado por el diario La

Jornada, revela que hasta 2011, último año del que

se tienen cifras comparables para 17 naciones de la

región, 36.3 por ciento de los mexicanos vivían en

pobreza, casi siete puntos porcentuales más

respecto al 29.4 por ciento de la población

latinoamericana que se encontraban en igual

condición.

Los mexicanos en indigencia representaron 13.3 por ciento de la población total,

cuando la media latinoamericana fue de 11.5 por ciento.

Esto quiere decir que 40 millones 778 mil mexicanos viven bajo la línea de la

pobreza y 14 millones 940 mil en la indigencia, al aplicarse los porcentajes

referidos por la CEPAL con los 112 millones 336.5 mil habitantes del país

contabilizados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el

último censo de población.

METODOLOGÍA

Información hemerográfica

Mazatlán y sus indigentes

- Estas personas siguen sin recibir un apoyo o ayuda sicológica

Mazatlán, Sinaloa.- El número de personas

indigentes y con problemas de salud mental que

deambulan por este puerto parece ir en aumento,

no hay una dependencia o bien un lugar donde

puedan ayudarlos.

Es común que molesten a personas, causen

algún daño o bien en ocasiones son vistos

caminando desnudos o con poca ropa, el riesgo

de que estas personas sufran un accidente

también es alto, ya que muchos de ellos

duermen en las orillas de los camellones.

Fuente: El Debate MAZATLÁN- 17/10/2013

- Más indigentes en la ciudad, sin autoridades

que respondan

La institución Una gota en el Océano es la única que alberga indigentes en

Mazatlán, el gobierno los olvida

Mazatlán, Sinaloa.- Decenas de indigentes deambulan por las calles de la

ciudad, comen lo que encuentran en el suelo y los botes de basura, y se duermen

a la intemperie, expuestos a todo tipo de peligros y las inclemencias del clima.

Entre los programas del Sistema DIF Mazatlán, ninguno está enfocado a la

protección de personas desamparadas.

> Una luz. La única institución que hay en la ciudad para recibir a los

menesterosos es Una Gota en el Océano, que surgió recientemente.

Actualmente tiene a 16 personas, 14 hombres y dos mujeres, en edades que

fluctúan entre los 60 y 70 años, aunque también llegan personas más jóvenes.

La encargada de la institución, Daniela Guadalupe Pinzón, resaltó que hay días

que tienen entre 20 y 25 moradores, pero "lamentablemente hay indigentes que

su estado mental es tan avanzado que no resisten más de tres días y se retiran,

ya que les gusta la calle".

Añadió que están dispuestos a recibir a los desamparados que se pueda, pero

siempre y cuando no sean agresivos, pues no podrían convivir con quienes

habitan el lugar.

> Apoyo. En unos días, el DIF apoyará la

institución con dos médicos que se

alternarán para estar al pendiente de la

salud de sus moradores.

Entre las principales enfermedades que

atienden se encuentran problemas

mentales, diabetes y del riñón. Además, la mayoría son discapacitados.

> Daños. La directora del Centro de Integración Juvenil, Rosa Elena Sánchez

Moraila, aceptó que el abuso de las drogas puede detonar en problema de salud

mental, aunque va depender del organismo de cada paciente.

Algunos de los indigentes que tienen momentos de lucidez piden alcohol y

refieren haber consumido drogas.

> La atención médica. La autoridad de Salud carece de programas de ayuda o

apoyo a los menesterosos, pero cuando requieren atención médica se les otorga,

resaltó el director del hospital general de la Secretaría de Salud, Santana

Quintana.

Explicó que al nosocomio llegan entre uno y dos indigentes por mes, llevados

por la Cruz Roja.

Sufren todo tipo de afecciones.

En invierno las más frecuentes son bronquiales y pulmonares, y en tiempo de

calor, las gastrointestinales.

Se les atiende y se van cuando se recuperan, ya que el hospital no cuenta con

un área para esta población.

> Segregación. Ante la discriminación que hay contra población por problemas

de salud mental en el país, el Senado de la República presentó un punto de

acuerdo al Ejecutivo Federal y Secretaría de Salud para que implementen un

programa de salud mental en el país.

Estos males se han convertido en un problema de salud en México, resaltó la

senadora Margarita Villaescusa.

Dijo que es lamentable que muchos indigentes con severos problemas de salud

mental deambulen por las calles sin que nadie les dé atención.

Se solicitó que se consideren recursos para programas para atender la salud

mental.

El punto de acuerdo lo presentó desde el 4 de junio del 2010, pero se encuentra

en proceso de análisis para su dictaminación y aprobación por el pleno del

Senado

> Donaciones. El único albergue que tiene indigentes en la ciudad se sostiene a

base de donativos de la población, de apoyos de Cáritas y las despensas que

les da el DIF.

Pero las necesidades son muchas y

las personas que deciden hacer

donaciones pueden llevar todo tipo

de productos para la limpieza del

albergue, ya que se utilizan mucho y

son costosos.

El albergue está en Bahía

Magdalena 20, en la colonia Rincón

de Urías.

Fuente: El Debate MAZATLÁN- 26/05/2013

- Indigencia en la ciudad, sin opciones para su atención

Una infinidad de hombres y mujeres caminan por las calles del puerto sin rumbo

fijo y sin alternativas

Mazatlán, Sinaloa.- Con pies descalzos, miradas perdidas, vidas que viajan en

otro mundo, voces que dialogan con personajes de otra dimensión...

A veces desapercibidos, otras encabezando los temas de conversación en las

reuniones.

"Cómo hay indigentes en Mazatlán, a todos lados que voltees te encuentras

alguno", repiten los ciudadanos, de conversación en conversación.

Para muestra, solo basta observar con atención. Pausar un momento el andar y

mirar alrededor.

Las calles del bello puerto turístico también albergan a una infinidad de curiosos

personajes.

Hombres y mujeres que han decidido vivir errantes, otros a quienes la vida los

ha dejado sin nada y algunos más que padecen enfermedades mentales que los

transportan a un lugar mejor, aunque su realidad sea la miseria.

La presidenta del sistema DIF municipal, Juana Guillermina Ávila de Higuera,

admite lo que no puede negarse.

En Mazatlán no existe un programa de atención a indigentes.

"No lo tenemos, cuando hay una denuncia o nos llega información los

canalizamos, está el albergue Una gota en el Océano, nos coordinamos con el

albergue y cuando se trata de enfermedades los canalizamos al hospital

siquiátrico de Culiacán", expresó.

Establecer un hospital siquiátrico en el municipio para atender la innumerable

cantidad de personas con padecimientos mentales que arriban de todas partes

de la República tampoco es opción.

Al parecer de la presidenta del DIF, la labor está en manos del altruismo.

"La responsabilidad es de todos, no nada más del gobierno", destacó Ávila de

Higuera.

> Un solo albergue para indigentes. Jesús Valencia labora desde hace siete años

con el albergue Una gota en el Océano, antes conocido como Hogar Damasco,

el único en la ciudad que se dedica a la asistencia de indigentes.

Los 22 hombres y 5 mujeres que ahí habitan son casi parte de su familia.

"Aquí están los que ya no pudieron caminar y se tuvieron que quedar, tenemos

tres con padecimientos mentales y varios enfermos", precisó Jesús.

En la temporada de invierno, el albergue ubicado en la colonia Flores Magón,

recibe hasta 50 mendigos que buscan un lugar caliente donde dormir, alimento,

ropa y baño. Cuando el clima mejora, la mayoría regresa a su peregrinar.

Los apoyos para alimentación, medicinas, ropa y limpieza llegan de

comunidades religiosas y el patronato del albergue. Del sistema DIF municipal

solo reciben más y más indigentes.

"No, el DIF no, ellos nos mandan gente, aquí hace falta muchísimo, funcionamos

con los donativos de iglesias católicas", destacó uno de los encargados del

albergue, donde laboran cinco personas.

Fuente: El Debate MAZATLÁN- 04/08/2013

-Indigentes, perdición en Mazatlán

Deambulan por las calles, indiferentes a lo que pasa a su alrederor, indiferentes

a su propio cuerpo, segregados e

ignorados por la sociedad

MAZATLÁN._ Ya olvidados, entre

jardines, bancas y hospitales, al

menos 600 indigentes deambulan

por las calles de Mazatlán. Ellos

son los que duermen donde pueden

y los que comen lo que encuentran.

Hoy en el Día Mundial de la Salud

Mental no existe una estadística

oficial de cuántos enfermos

caminan sin rumbo por nuestro País, tampoco contemplan proyectos para la

construcción de hospitales especializados en México.

En el puerto, la mayoría de los indigentes y enfermos siquiátricos tienen familia,

en algún momento de su vida fueron productivos, algunos son padres, abuelos

o esposos. Sin embargo su trastorno los orilló a la calle, donde ahora viven.

El doctor en Ciencias de la Salud, Gabriel Ramírez López, lamentó la falta de

voluntad política y social para atraer recursos y crear unidades de atención.

Criticó los huecos en políticas públicas y la falta de información sobre

tratamiento de indigentes.

"En el mundo son frecuentes los trastornos mentales, neurológicos y de

conducta, desafortunadamente causan sufrimiento y gastos económicos. Los

enfermos mentales, además, son objeto de aislamiento social, enfrentan mala

calidad de vida y la tasa de mortalidad es más elevada en ellos", dijo.

El siquiatra consideró un panorama preocupante en salud mental, y es que el

consumo de alcohol aumenta entre los jóvenes que a largo plazo enfrentarán

los primeros trastornos del vicio.

En Mazatlán, la mayoría de los indigentes con avanzado de desequilibrio se

han acostumbrado a las calles y al rechazo. Los enfermos mentales también se

enfrentan a la discriminación en la educación, empleo y vivienda. En algunos

países se les prohíbe votar, que se casen o que tengan hijos.

El panorama en el puerto pinta un futuro sin futuro para los indigentes, y es que

no existen unidades públicas para atención de enfermos mentales y sólo hay

un albergue abierto donde caben menos de 15 personas.

La presidenta del DIF Mazatlán, Perla Sarmiento de López, reconoce la

carencia y acepta las debilidades.

"No tenemos recursos para ayudarlos a todos, en algunos casos los

canalizamos a Culiacán, allá los reciben. La mayoría de los indigentes tiene

familia, ellos también deben asumir la responsabilidad", dijo.

En Mazatlán, el registro es de unos 600 indigentes y enfermos mentales que no

tienen casa, comida y, dicen, tampoco familia. La mayoría se esconde entre

jardines y hospitales y también la mayoría necesita tratamiento siquiátrico

costoso.

Y aunque la construcción de un hospital de Salud Mental es urgente, la

presidenta del DIF aceptó que en estos momentos un proyecto así ni siquiera

existe, al menos en el DIF.

"Es todo un conjunto de necesidades, se requiere infraestructura, especialistas

y medicamentos. Algo en grande, vamos a ver...".

El Hogar Damasco es el único en Mazatlán que recibe indigentes y pacientes

siquiátricos, la falta de espacio los obliga a convivir en habitaciones

compartidas. Aquí llegan enfermos del Sur de Sinaloa y hasta de Culiacán, al

menos 90 por ciento tiene familia que hoy los ha olvidado.

'Tengo 5, tengo 5 años...'

Sheila Arias

Desde que llegó al Hogar

Damasco, Abel asegura que

tiene 5 años de edad, en esa

casa que parece olvidada para

él no hay día ni noche, sólo un

recuerdo vago que de repente

lo hace hablar.

"Tengo 5, 5 años...", dice al

tiempo que abre más los ojos,

estira sus brazos y camina con

más energía. En el albergue los

voluntarios aseguran que desde que llegó en 2007 es todo lo que dice.

Abel tiene 34 años, eso es todo lo que llegó en una boleta cuando lo dejó la

Policía Municipal en el albergue donde lo cuidan y lo alimentan. Olvidado por

sus familiares, es el segundo enfermo siquiátrico que necesita medicinas caras

y vigilancia todo el día.

"Camina sin problema, pero cuando se enoja nos grita no sé qué cosa... es

noble y obedece en todo. Aquí nadie sabe de dónde viene, qué hacía o quién

es en realidad", comenta Alicia Osuna, una de las responsables del Hogar

Damasco.

En este lugar caben 15 personas con espacio amplio; sin embargo, han llegado

a albergar hasta 30 indigentes más los siquiátricos. Algunos llegan de Culiacán

y otros tocan la puerta y se quedan.

"Con esta crisis se nos está complicando mucho salir adelante, tenemos

donativos y apoyo, pero ya son menos. El DIF nos apoya con lo que puede",

dice Osuna, quien también cocina para todos.

Como Abel, en el albergue vive otro enfermo siquiátrico, no tiene nombre, no

camina, no habla y nadie sabe su nombre; calculan que tiene unos 35 años,

eso es todo.

"Aquí nadie es agresivo, le servimos de comer y sabemos que terminó cuando

se oyen los platos, los avienta contra la pared, entonces sabemos que ya

comió. Ellos son como niños, aquí nos preguntamos por qué están así...", dice

Alicia.

¿Qué es la salud mental? La Organización Mundial de la Salud establece que

la salud mental no sólo es la

ausencia de trastornos

mentales. Se define como un

estado de bienestar en el que

una persona es consciente de

sus capacidades, puede

afrontar tensiones normales de

la vida, puede trabajar de forma

productiva y es capaz de hacer

una contribución a su

comunidad. En los países,

principalmente los de bajos recursos, los servicios de salud mental tienen una

grave carencia de recursos humanos y económicos, poco se atiende el

tratamiento integral.

EL PANORAMA

40 por ciento más es el déficit de siquiatras en México

50 por ciento de los pacientes enfermos mentales en nuestro País sufre

abandono total

50 por ciento de enfermos deben permanecer hospitalizados

80 por ciento de los indigentes en Mazatlán han sido olvidados por sus familias.

LA ACTIVIDAD

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud los siguientes preceptos

se deben difundir para fomentar y proteger los derechos de los enfermos

mentales

- Cambiar las actitudes y aumento de la concientización.

- Mejorar los derechos humanos en servicios de salud mental.

- Dar poder efectivo a los usuarios de servicio de salud mental.

- Sustituir las instituciones siquiátricas por la atención en la comunidad con

servicios completos.

- Aumentar la inversión en salud mental.

Perdidos en su mundo interior, con el signo

de la locura marcado por el descuido de su

apariencia y su cuerpo, decenas de

indigentes y enfermos mentales deambulan

por Mazatlán.

Fuente: Noroeste Mazatlán – 08/09/2013

ENTREVISTA

Que realizan estudiantes de 5° Semestre de Conalep Mazatlán II, de

la carrera de Administración, con la finalidad de conocer la opinión

relacionado con el problema social denominado “Indigencia”.

Toda la información que se obtenga será manejada con reserva.

Nombre del Entrevistado:

Alejandra Vázquez Velázquez

Perfil o profesión: Psicólogo

Ocupación: Presidenta de la fundación Amigos de San José María E C.A.

1. ¿Cuál es su nombre?

Alejandra Vázquez Velázquez

2. ¿De qué se encarga en la fundación?

De proporcionar alimentos a las

personas que más lo necesitan o que

están en situación de calle.

3. ¿Por qué les gusta la idea de ayudar

a los indigentes?

Porque es de gran satisfacción ver

como se puede ayudar en algo a las

personas que más lo necesitan y no

tienen dinero ni para alimentarse.

4. ¿De dónde recaudan fondos para la

fundación?

Lo recaudamos de eventos o donativos

que las personas nos ofrecen.

5. ¿Qué mensaje le darían a las

personas para hacer conciencia y ayuden a los indigentes?

Que se solidaricen con las personas más necesitadas, ya que lo que nosotros

no necesitamos puede ser de gran ayuda para ellos.

Datos de la Fundación

Amigos de San José María E C.A.

Proporcionamos soluciones dignas de Vida a personas con estilos de vida.

Convivencia en familia con un

ambiente positivo que mantenga el

crecimiento, el desarrollo y la armonía.

Mejorar el bienestar físico, mental,

espiritual, cultural y social, con la

convivencia de personas similares en

edad e intereses.

Elevar su autoestima valorando sus conocimientos y experiencias.

Proporcionar orientación y apoyo para aceptar, comprender y asimilar los

cambios que se presentan en su vida como: Personas Mayores, Migrantes,

Indigentes, Hombres y Mujeres Maltratados, Niños de la calle, Adictos,

Enfermos de sus facultades mentales, Niños Huérfanos, Discapacitados.

Con la ayuda de Dios hemos de tener la fortaleza y valentía necesarias para

ayudar a quienes más lo necesitan.

Tú puedes ayudar a estas personas que nos necesitan, donando lo que no utilizas.

Te invitamos a concer las instalaciones para que veas las necesidades que se

tienen.

Donativos en Efectivo:

Mediante Depósito Bancario: BANORTE Cta: 0859013293.

Mediante Transferencia Electrónica:

CLABE: 072744008590132936.

Cuando se vive verdaderamente en la Caridad, No da tiempo de buscarse

a sí mismo.

Sé sencillo. Abre el corazón. Mira que todavía nada se ha perdido. Aun

puedes seguir adelante, y con más Amor, con más cariño, con más

fortaleza.

- San Josemaría Escrivá de Balaguer.

AMIGOS DE SAN JOSEMARÍA E AC

¡ FUERTES EN LA FÉ !

Melchor Ocampo # 523,

Centro,

82000, Mazatlán, Sin.

Tel: (669) 981 1957

albergue@amigosdesanjosemaria.org.mx

amigosdesanjosemaria.org.mx

DESARROLLO

Causas

La indigencia motivada por diversos agentes como: la inequidad social, la

violencia intrafamiliar, el desplazamiento

forzoso, la drogadicción, el abuso infantil

etc.; es en principio, un atentado contra la

dignidad humana, del cual somos culpables:

La Sociedad, el Estado, la Iglesia y la

institución familiar, que se encuentra en un

proceso de degradación moral y ética. Luego

de un tiempo, el "Habitante de calle" va

desarrollando una relación sadomasoquista

con esa sociedad que lo segrega,

enfrentándose a las normas establecidas

que transgrede con una actitud intimidante,

en retaliación contra la discriminación de que

es objeto; al tiempo que se regodea en su

papel de víctima, propiciando la compasión

hipócrita, representada en limosnas y en

acciones estatales, paternalistas, de las que

se beneficia impunemente.

Factores que promueven este fenómeno

Distintos factores que promueven esta situación en la calle (%)

Problemas con la familia 32,3

Problemas con alcohol o drogas 21,3

Problemas económicos 19,9

No tiene casa, hogar, familia 13,7

Problemas de salud 11,4

Decisión propia 10,6

Por maltrato 3,2

Problemas con la justicia 1,9

Por abuso 0,8

Otro motivo 12,7

Consecuencias

Como consecuencia, la indigencia trae muchas cosas consigo. El analfabetismo,

la pobreza, las muertes, la drogadicción, inseguridad, robos, entre otros, tienen

un aumento significativo debido a este problema. Además, no todos los

ciudadanos están consientes del problema que posee la ciudad con el alto grado

de indigencia presentes, y que el rango de edad de éstos es muy alto, pues se

encuentran desde niños de 5 años de edad,

hasta ancianos de aproximadamente 85 años de

edad.

Posibles soluciones

- Una vez al mes, se hace una visita a la ciudad,

recogiendo a los indigentes y llevándolos a unas

casas donde se les baña, da comida, ropa limpia,

y se les da la oportunidad de empezar una vida

nueva a las personas que carecen de un hogar.

- Captar los recursos tanto nacionales como

extranjeros y distribuirlos a las personas pobres

y en estado de indigencia, con el fin de satisfacer sus Necesidades Básicas

Insatisfechas.

CONCLUSIÓN

La investigación resultó satisfactoria y

con ella se puede demostrar esta crisis

que nos mantiene frente a unas

desigualdades que han conllevado hasta

el mismo estado a un olvido parcial.

Una razón clara para que este grupo de

personas continúen en este estado no

apto para una vida digna, es el maltrato por

parte de la sociedad. Maltrato porque

discriminan a todas estas personas,

porque no tienen un olor agradable,

porque no visten bien, porque viven en

espacios públicos; pero no se dan a la

tarea de ayudarles, de brindarles cosas tan

elementales como alimentos, o simplemente, brindarles un poco de amor y

afecto.

Otra consecuencia es la gran diferencia económica a la cual muchos pueden

suplir sus necesidades básicas para sobrevivir, es que la problemática

conlleva a otro problema, es un ciclo vicioso, podemos sustentar que nuestra

sociedad calle ya es tan el grado de crisis que la solución es recurrir a la

evasión de su propia realidad, esto también determina que hasta en las

familias no se reconozca a la persona como ser social digno así toda la

sociedad buscará manifestarse indiferente al problema de la indigencia.

SUGERENCIAS

Que las autoridades aporten una cierta cantidad de dinero para abrir más

albergues en la ciudad, ya que los pocos que existen no son apoyados por el

gobierno.

Concientizar a las personas para que realicen donativos voluntarios con los

que se ayude a los albergues para indigentes.

Organizar campañas ya sea en las escuelas o colonias, para recaudar

víveres o cosas en buen estado que puedan ser utilizadas por personas que

lo necesiten.

También pedimos la colaboración de habitantes de la calle, para que asistan

a los diferentes tipos de programas para su rehabilitación, pues hasta cierta

parte es entendible el abandono a estos tipos de instituciones las cuales

ayudan; pues les brindan alimento, refugio, aseo y cariño, pero se olvidan de

brindarles oportunidades laborales para que se sientan útiles y no un

“problema” más en la sociedad.

Donar comida a los indigentes de los que nos percatemos por nuestra calle.

Que se hagan colectas de ropa en buen estado para entregársela a personas

que viven en la calle.

BIBLIOGRAFÍA

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Hemeroteca digital

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http://www.noroeste.com.mx/publicaciones.php?id=519253