Informe Posconvertibilidad

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Análisis del mercado de empleo en la Posconvertibilidad

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El perodo 1993-actualidad se encuentra dividido en dos grandes modelos de acumulacin: convertibilidad (1993-2001) y post-convertibilidad (2003-actualidad). El ao 2002 suele concebirse como un ao de transicin, por lo que no suele incluirse dentro de ninguno de los dos modelos.

El modelo de la Convertibilidad persegua dos grandes objetivos: baja inflacin y superar la llamada restriccin externa mediante un aumento de la productividad. Para lograr la primera de las metas, se proponan tres medidas principales: mantener un tipo de cambio bajo y fijo, atar la base monetaria a la disponibilidad de reservas y la no-indexacin de precios (entre ellos, los salarios). Para lograr la segunda, se proponan mejoras tecnolgicas va impulso de la inversin y flexibilizacin de los contratos laborales.

En la prctica la Convertibilidad implic, en primer lugar, una cuenta corriente netamente deficitaria. Esto no es difcil de comprender, ya que un tipo de cambio bajo conjugado con una economa abierta y una productividad relativamente baja de los sectores de bienes transables argentinos hizo que las exportaciones cayeran y, al mismo tiempo, las importaciones aumentaran.Este dficit abultado en la cuenta corriente (caracterstico del perodo) era financiado a travs de dos mtodos principales: inversin extranjera directa (IED) y endeudamiento del Estado y los privados contra no residentes (deuda externa).

Sobre la IED podemos decir que en general tomaba la forma de privatizaciones (venta de activos de gobierno a no residentes) aunque no podemos aseverar con los datos de la balanza de pagos disponible que esto haya resultado en un gran aumento de las utilidades y dividendos enviados al extranjero.Resulta ms interesante el tratamiento de la evolucin de la deuda externa, ya que provoc un crculo vicioso en el cual para pagar los intereses requeran de un endeudamiento todava mayor, ya que la cuenta corriente era todava ms deficitaria. Este nivel de endeudamiento ser un legado que el modelo de acumulacin de la posconvertibilidad deber afrontar.

En segundo lugar, la Convertibilidad implic una precarizacin en la situacin de los trabajadores y un aumento sostenido tanto del desempleo como del subempleo, ambas tasas llegando a sus respectivos mximos del perodo 1993-actualidad en el ao 2002, en plena crisis de dicho modelo. Sin embargo, podra decirse que el desempleo tuvo un comportamiento cclico. Por ejemplo, el desempleo llega a un pico de 16,3% en el 1995 y 16% en 1996, para luego situarse en 11,9% en 1998 (ver Cuadro 1). Aunque este es el comportamiento del desempleo, no puede decirse lo mismo de los subempleados ya que aumentan en todo el perodo, materializando la poltica de precarizacin laboral.

En tercer lugar, la convertibilidad signific un leve aumento de la productividad horaria en la Argentina, pasando de un 10,4% en 1993 a un 12,1% en el 2002. Teniendo en cuenta que este perodo es de muy baja inflacin, podemos decir que este aumento de la productividad se debi a avances tcnicos y/o tecnolgicos y no a un simple proceso inflacionario.Aunque la productividad horaria aument en este perodo no sucedi lo mismo con el ingreso laboral horario que mantuvo su promedio entorno a $6,5. Esto explica la cuarta consecuencia de la convertibilidad que fue la baja en la participacin en el VAB por parte de la masa salarial y el ingreso laboral, ambas llegando a un mnimo del perodo de la convertibilidad en 1997.

En quinto lugar, la convertibilidad implic una mayor desigualdad en la distribucin del producto en la sociedad argentina. Si bien el Coeficiente de Gini no refleja esta situacin ya que entre 1995 y 2002 prcticamente no vara su magnitud, el indicador Brecha del ingreso presenta un crecimiento ininterrumpido del 18,77 en 1995 a un 28,57 en el 2002. Es interesante ver como en este caso el Coeficiente de Gini no es un indicador confiable para interpretar la realidad socio-econmica de Argentina.

En sexto lugar, la convertibilidad implic un aumento gradual tanto de la pobreza como la indigencia, ambos indicadores alcanzando sus mximos en 1996 y 2002 productos de dos crisis econmicas (ver Cuadro 2). Si cruzamos estos datos con los de ocupacin y desempleo podemos decir que no slo hubo un alza en dichos indicadores sino que el salario en trminos reales disminuy ya que los sueldos que se pagaban a los trabajadores se encontraban sin indexacin y la baja inflacin acumulada durante 6 aos fue empeorando los salarios reales.

Trminos Agregados

En trminos de crecimiento del PBI es donde podemos encontrar grandes diferencias entre los periodos de convertibilidad y posconvertibilidad.

El perodo de la posconvertibilidad parte de una situacin pauprrima de la economa argentina. La crisis poltica del 2001 y la devaluacin de la moneda llevaron al producto bruto interno a un piso en el primer trimestre del 2002. Asimismo, los indicadores sociales que venan en descenso desde la dcada de los 90' con la implementacin de las polticas neoliberales de desregulacin y flexibilizacin laboral, llegaron a su punto ms bajo del perodo considerado, promediando un 41.8% de la poblacin por debajo de la lnea de la pobreza en ese ao y un promedio anual del 19.7% por debajo de la lnea de indigencia. La desocupacin en ese ao trep a su mximo llegando 21,5%, en conjunto con la subocupacin que tambin aument llegando al 20,3%. En ese crtico ao tambin la desigualdad alcanz niveles rcord con un coeficiente de Gini del 0.4708 y disparando la brecha del ingreso a un 28.57 entre el decil ms rico y el ms pobre, situacin que se patenta mirando la participacin asalariada que cay por debajo del 30% explicndose por la pronunciada cada del salario real.A partir del 2003 se revierte la situacin y comienza la tendencia que se va a mantener por el resto del perodo con la excepcin del ao 2009. Comienza la repuntada del PBI traccionada por la inversin que comienza el aumento de su participacin en el producto en ms de 3 puntos porcentuales pasando del 12% al 15% aproximadamente, que seguir incrementando conforme avanza el perodo, en conjunto con el consumo pblico cuya participacin empieza a aumentar a partir del ao 2004. As tambin empieza el repunte de los indicadores sociales, cayendo el desempleo y el subempleo 3 puntos porcentuales y aumentando el empleo hasta el 37%. En este ao se da una interrupcin en los datos de desigualdad, a causa del cambio en la medicin de la EPH por lo cual no contamos con este dato, aunque se podra pensar que se mantuvo relativamente estable en los niveles del ao anterior comparando stos con los del 2004. El salario real vuelve a crecer, y aumenta ms que proporcionalmente que la productividad, con lo cual la participacin asalariada en el ingreso vuelve a crecer, llegando hasta el mostrando lo que ser la tendencia para el perodo. La pobreza y la indigencia tambin mejoran este ao, ubicndose en el 38% y 17% respectivamente, comenzando el descenso que caracterizar el resto de la dcada.En los aos 2004, 2005 y 2006 se observa una tendencia parecida, continuando el ciclo ascendente del PBI, ahora si tambin con el aumento de la participacin del gasto pblico que pasa del 11% a casi el 13% en conjunto con la ya mencionado aumento de la participacin de la inversin que pasa del 15% al 23%, esto tiene como contra cara la disminucin de la participacin del consumo privado, revirtiendo as la norma de los 90'. Los indicadores socioeconmicos siguen mejorando, la desocupacin cae del 18% al 10%, muy similar a la subocupacin que tambin cae 7 puntos porcentuales terminando en un 11%. El empleo trepa del 37% al 41% en los tres aos considerados y la el porcentaje de la poblacin debajo de la lnea de pobreza cae del 29,7% hasta el 20% y la poblacin debajo de la lnea de indigencia desciende del 10,5% hasta el 6,7%. El coeficiente de Gini tiene una mejora, aunque poco pronunciada, pasando del 0,46 al 0,45 y la brecha cae del 2002 al 2005, pero vuelve a subir en el 2006 ubicndose en los 27 puntos. El salario real sigue su marcha ascendente por encima de la productividad (que tambin crece), con lo que la participacin sigue creciendo. Cabe destacar que el ao 2007 fue el ao en el cual se intervino INDEC, con lo cual los datos a partir de este ao dejan de ser fiables en tanto fuente estadstica creble. En el bienio 2007/2008, el producto bruto interno sigue la tendencia fuertemente alcista, y se acenta la mejora de los ndices de pobreza e indigencia que caen al 11,5% y al 3.7% respectivamente. En materia distributiva nuevamente falta un dato trimestral en el 2007, con lo cual no se lo considerar para el dato anual, que surgir del promedio de los otros trimestres. De todos modos, el coeficiente de Gini y la brecha continan la mejora, cayendo hasta el 0,437 y el 24,8 en el 2008. La participacin salarial, sigue su ascenso, llegando en el 2008 a casi el 40%. En estos dos aos, el desempleoEl 2009 es el ao que rompe con la tendencia observada a partir del 2002. En este ao la economa sufre una desaceleracin, que hace que el producto crezca a la que fue con creces la tasa ms baja del perodo. A partir de este ao no hay datos respecto de la participacin, y respecto a la desigualdad, se ve que el coeficiente de Gini tiene un muy leve descenso hasta el 0,4361, pero la brecha aumenta un punto porcentual a 25.83. Este ao el porcentaje de poblacin debajo de la lnea de la pobreza vuelve a descender y cae hasta el 8.5%, mientras que la poblacin debajo de la lnea de la indigencia desciende hasta el 2.7%. El desempleoEn el perodo restante, la actividad econmica se recupera de la desaceleracin del ao 2009, y el PBI vuelve a crecer a una tasa alta. Lo mismo pasa con el resto de las variables consideradas, la poblacin debajo de la lnea de la pobreza toca su piso con un 4,9% y lo propio pasa con la indigencia, que llega a su lmite inferior del 2%. El coeficiente de Gini tambin cae a su mnimo de 0,419 y la brecha de ingresos desciende a su punto ms bajo desde 1996 con 22,97. El desempleo Por ltimo, hablaremos brevemente del fetiche de los medios opositores, es decir, de la inflacin. Tomando como base el ao 1993, se observa que el ndice de precios implcitos comienza con un fuerte aumento del 100,9 al 141,72 del ao 2001 al 2002, salto que se explica por la devaluacin de la moneda. A partir de ese momento, comienza la tendencia alcista que tanto se ha remarcado en la agenda pblica, pasando al 210 en el 2006, y, a partir de ah, sigue creciendo a un ritmo elevado, incluso con la intervencin del INDEC en el 2007, trepando hasta el 355 en el 2010, y mostrando un crecimiento de ms de 3 veces y media del precio de los bienes desde el 2002.

Cuadro 1

Cuadro 2