Javier Vega de Seoane, presidente del Círculo de Empresarios · En este escenario, como en la...

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22 al 28 de febrero de 2016 Tribunas Asociaciones SUPLEMENTO ESPECIAL 35 ANIVERSARIO 51 E n el escenario económico mun- dial preocupan principalmente los efectos que puedan tener sobre la economía la ralentización de Chi- na, la recesión de Brasil, el desplo- me del precio del petróleo y otras materias primas, y las decisiones futuras de la Reserva Federal. En el ámbito geopolítico adquieren relevancia las consecuencias del terrorismo yihadista, la crisis de refugiados en Europa y las incóg- nitas electorales en algunas eco- nomías avanzadas. Los organismos internacionales y nacionales sitúan a España entre las economías avanzadas con mayor tasa de crecimiento. En con- creto, el FMI prevé un 2,7% en 2016, liderando, junto a Irlanda (6,8%), el crecimiento de la euro- zona. La solidez de nuestra recu- peración se basa, hasta el momen- to, en las exportaciones, el efecto de la política monetaria del BCE, el abaratamiento de las importa- ciones energéticas, la creación de empleo, la mayor demanda inter- na y el desapalancamiento priva- do. La evolución del escenario eco- nómico y geopolítico mundial, y de nuestra estabilidad económica y política, condicionará que esta pre- visión se haga realidad. Nuestra economía sigue mostrando debili- dades, como la persistente y ele- vada tasa de paro, el envejecimien- to de la población, su nivel de deu- da pública, el reducido tamaño medio empresarial y la falta de uni- dad de mercado. En este escenario, como en la Transición, los partidos políticos y la sociedad civil deberían vertebrar- se y, de forma responsable, con- sensuar las grandes reformas pen- dientes. No debemos olvidar que nos enfrentamos a un escenario de competencia global, que exige un modelo productivo capaz de afron- tar los retos, aprovechar las opor- tunidades y preservar nuestro Esta- do del Bienestar. Para el Círculo de Empresarios sólo es posible consolidar la recu- peración económica, acelerar el crecimiento, generar empleo y mejorar nuestro bienestar socioe- conómico incrementando nuestra competitividad. Para lograrlo es necesario avanzar en la consolida- ción fiscal, mejorando la eficiencia del gasto público y ampliando las bases imponibles. Ello, junto a la lucha contra el fraude, permitiría aumentar la recau- dación tributaria y equilibrar las cuentas públicas. Acelerar la cre- ación de empleo y reducir la duali- dad de nuestro mercado laboral mediante el diseño de un marco contractual más simple. A su vez, mejorar la empleabilidad, sobre todo de jóvenes y desempleados de larga duración, con nuevas polí- ticas activas más efectivas. Nuevas políticas activas Hay que consensuar una reforma educativa estable y de largo plazo, en la que la igualdad de oportuni- dades y los valores, el mérito, la creatividad, las dotes de comuni- cación, el espíritu emprendedor y el conocimiento de idiomas sean pilares esenciales. Reformar estruc- turalmente el sistema de pensio- nes avanzando progresivamente hacia un sistema mixto basado en tres pilares: reparto, capitalización obligatoria y capitalización volun- taria. Fomentar el crecimiento del tamaño medio nuestras empresas, lo que contribuiría a mejorar la pro- ductividad e innovación, a generar empleo más estable y de calidad, a atraer y retener el talento, y a reforzar e impulsar la internaciona- lización de las empresas. La empresa mediana equivale en el tejido empresarial a la clase media en el tejido social. Sin ella no ten- dremos una estructura empresa- rial sólida, estable y pujante. Poten- ciar y desarrollar nuevas fuentes de financiación empresarial, para mejorar la capitalización y compe- titividad de las empresas. Hay que apostar por el conoci- miento y la innovación, fomentan- do la investigación aplicada según las necesidades de la sociedad, con proyectos de financiación y colaboración público-privados. Garantizar la seguridad jurídica para mejorar nuestro atractivo empresarial. Esto permitiría a Espa- ña convertirse en plataforma de inversiones e instalación de empre- sas extranjeras, aprovechando las ventajas de nuestra localización geográfica, la cualificación de la mano de obra e infraestructuras, los lazos culturales con América Latina y las ventajas del Espacio Económico Europeo. En conclusión, en España sigue siendo prioritaria la puesta en mar- cha de reformas estructurales que consoliden la recuperación econó- mica y la creación de empleo esta- ble y de calidad. Hoy más que nun- ca, dada la fragmentación de nues- tro Parlamento, es deseable que éstas se diseñen con el mayor con- senso posible entre las distintas fuerzas políticas, y con un alto gra- do de participación de la sociedad civil. De lograrlo, aseguraríamos nuevos avances en la modernidad de nuestro país. Cómo seguir creciendo y generando empleo Javier Vega de Seoane, presidente del Círculo de Empresarios “Sólo es posible consolidar la recuperación incrementando nuestra competitividad y, para lograrlo, es necesario avanzar en la consolidación fiscal” D espués de un largo período de crisis en el que se han destrui- do un elevado número de empre- sas y miles de empleos, aumenta- do la tasa de paro hasta niveles insostenibles, la economía espa- ñola se encuentra en plena recu- peración. Durante dos años, el PIB ha registrado una tasa de variación positiva –1,4% en 2014 y en torno al 3,2% en 2015– y se ha empeza- do a crear empleo –más de 200.000 personas en 2014 y 520.000 en los nueve primeros meses de 2015–, lo que ha supues- to que desde 2013 haya 1.400.000 personas desempleadas menos. Aunque estimamos que para 2016 estos resultados se consoli- darán, –con un crecimiento del PIB cercano al 3% y un aumento del empleo de aproximadamente el 2,5%–, queda mucho camino por andar para recuperar los niveles de actividad y empleo previos a la cri- sis. Este año viene marcado por factores exógenos, positivos para la economía española que contri- buirán a su recuperación: la reduc- ción del precio del petróleo –actual- mente por debajo de los 30 dóla- res por barril y que previsiblemen- te disminuirá aún más en los pró- ximos meses–; la devaluación del euro frente al dólar o el plan de estí- mulo monetario del Banco Central Europeo, que está permitiendo que empiece a fluir la financiación a las empresas. Pero, también, en 2016 hay fac- tores de riesgo que pueden poner en peligro esta consolidación: la creciente volatilidad de los merca- dos financieros; la desaceleración de las economías emergentes y el comercio mundial; las tensiones geopolíticas derivadas de los con- flictos existentes; la crisis migrato- ria; así como la inestabilidad polí- tica generada tras las últimas elec- ciones generales. Por ello, en estos momentos, España necesita un Gobierno esta- ble, que genere confianza y que sea capaz de afrontar, con deter- minación y valentía, los nuevos retos que se presenten, con el fin de apuntalar la recuperación eco- nómica y consolidar la creación de empleo para que la salida de la cri- sis llegue a todos los ámbitos de la economía real. Es necesario que las Administra- ciones Públicas establezcan una acción conjunta y coherente a la hora de poner en marcha nuevas, profundas y necesarias reformas y medidas que propicien el cambio estructural de nuestra economía. Desarrollo empresarial Los empresarios somos actores indispensables en la generación de empleo y, por tanto, en el creci- miento económico y progreso para un país. Consciente de nuestra res- ponsabilidad, desde CEIM elabo- ramos el pasado año el “Plan 400.000 empleos”. Un plan que propone una serie de propuestas que deben adoptarse, con carác- ter prioritario y urgente, para aumentar la competitividad de las empresas y consolidar la recupe- ración económica. Entre las propuestas, destacaría como prioritarias las siguientes: Es imprescindible mantener una polí- tica de austeridad presupuestaria, promover el cumplimiento de los objetivos de déficit público y con- trolar el crecimiento de la deuda pública; reforzar la unidad de mer- cado; y ejercer un mayor control sobre toda práctica que suponga competencia desleal. Es el momento de profundizar en las reformas iniciadas, espe- cialmente, la laboral –rebajando las cotizaciones sociales–; la fis- cal –bajando de forma decidida el IVA, el IRPF y el Impuesto sobre Sociedades–; y abordar otras nue- vas como la energética –abaratan- do los elevados costes que sopor- tan las empresas restando su competitividad–. Urge propiciar un marco óptimo para el desarrollo de la actividad empresarial –eliminando rigideces y cargas burocráticas, y simplifi- cando trámites administrativos–; diseñar un marco legislativo más sencillo y estable que proporcione una mayor seguridad jurídica; faci- litar a las empresas, especialmen- te a pymes y autónomos, la finan- ciación necesaria para su creación, crecimiento y/o consolidación; y favorecer la innovación e interna- cionalización de la economía. En definitiva, somos optimistas en nuestras previsiones para este año, siempre y cuando se acabe con la inestabilidad política y el nuevo equipo de Gobierno aplique medidas acordes con los compro- misos asumidos a nivel europeo. Estabilidad institucional para consolidar la recuperación Juan Pablo Lázaro, presidente de la Confederación de Empresarios de Madrid (CEIM) “Es el momento de rebajar las cotizaciones sociales, el IVA, el IRPF y el Impuesto sobre Sociedades y abordar la reforma energética para abaratar los elevados costes empresariales”

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Tribunas Asociaciones SUPLEMENTO ESPECIAL 35 ANIVERSARIO

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En el escenario económico mun-dial preocupan principalmente

los efectos que puedan tener sobrela economía la ralentización de Chi-na, la recesión de Brasil, el desplo-me del precio del petróleo y otrasmaterias primas, y las decisionesfuturas de la Reserva Federal. Enel ámbito geopolítico adquierenrelevancia las consecuencias delterrorismo yihadista, la crisis derefugiados en Europa y las incóg-nitas electorales en algunas eco-nomías avanzadas.

Los organismos internacionalesy nacionales sitúan a España entrelas economías avanzadas conmayor tasa de crecimiento. En con-creto, el FMI prevé un 2,7% en2016, liderando, junto a Irlanda(6,8%), el crecimiento de la euro-zona. La solidez de nuestra recu-peración se basa, hasta el momen-to, en las exportaciones, el efectode la política monetaria del BCE,el abaratamiento de las importa-ciones energéticas, la creación deempleo, la mayor demanda inter-na y el desapalancamiento priva-do. La evolución del escenario eco-nómico y geopolítico mundial, y denuestra estabilidad económica ypolítica, condicionará que esta pre-visión se haga realidad. Nuestraeconomía sigue mostrando debili-dades, como la persistente y ele-vada tasa de paro, el envejecimien-to de la población, su nivel de deu-

da pública, el reducido tamañomedio empresarial y la falta de uni-dad de mercado.

En este escenario, como en laTransición, los partidos políticos yla sociedad civil deberían vertebrar-se y, de forma responsable, con-sensuar las grandes reformas pen-dientes. No debemos olvidar quenos enfrentamos a un escenario decompetencia global, que exige unmodelo productivo capaz de afron-tar los retos, aprovechar las opor-

tunidades y preservar nuestro Esta-do del Bienestar.

Para el Círculo de Empresariossólo es posible consolidar la recu-peración económica, acelerar elcrecimiento, generar empleo ymejorar nuestro bienestar socioe-conómico incrementando nuestracompetitividad. Para lograrlo esnecesario avanzar en la consolida-ción fiscal, mejorando la eficienciadel gasto público y ampliando las

bases imponibles. Ello, junto a la lucha contra el

fraude, permitiría aumentar la recau-dación tributaria y equilibrar lascuentas públicas. Acelerar la cre-ación de empleo y reducir la duali-dad de nuestro mercado laboralmediante el diseño de un marcocontractual más simple. A su vez,mejorar la empleabilidad, sobretodo de jóvenes y desempleadosde larga duración, con nuevas polí-ticas activas más efectivas.

Nuevas políticas activas Hay que consensuar una reformaeducativa estable y de largo plazo,en la que la igualdad de oportuni-dades y los valores, el mérito, lacreatividad, las dotes de comuni-cación, el espíritu emprendedor yel conocimiento de idiomas seanpilares esenciales. Reformar estruc-turalmente el sistema de pensio-nes avanzando progresivamentehacia un sistema mixto basado entres pilares: reparto, capitalizaciónobligatoria y capitalización volun-taria. Fomentar el crecimiento deltamaño medio nuestras empresas,lo que contribuiría a mejorar la pro-ductividad e innovación, a generarempleo más estable y de calidad,a atraer y retener el talento, y areforzar e impulsar la internaciona-lización de las empresas. Laempresa mediana equivale en eltejido empresarial a la clase media

en el tejido social. Sin ella no ten-dremos una estructura empresa-rial sólida, estable y pujante. Poten-ciar y desarrollar nuevas fuentesde financiación empresarial, paramejorar la capitalización y compe-titividad de las empresas.

Hay que apostar por el conoci-miento y la innovación, fomentan-do la investigación aplicada segúnlas necesidades de la sociedad,con proyectos de financiación ycolaboración público-privados.Garantizar la seguridad jurídicapara mejorar nuestro atractivoempresarial. Esto permitiría a Espa-ña convertirse en plataforma deinversiones e instalación de empre-sas extranjeras, aprovechando lasventajas de nuestra localización

geográfica, la cualificación de lamano de obra e infraestructuras,los lazos culturales con AméricaLatina y las ventajas del EspacioEconómico Europeo.

En conclusión, en España siguesiendo prioritaria la puesta en mar-cha de reformas estructurales queconsoliden la recuperación econó-mica y la creación de empleo esta-ble y de calidad. Hoy más que nun-ca, dada la fragmentación de nues-tro Parlamento, es deseable queéstas se diseñen con el mayor con-senso posible entre las distintasfuerzas políticas, y con un alto gra-do de participación de la sociedadcivil. De lograrlo, aseguraríamosnuevos avances en la modernidadde nuestro país.

Cómo seguir creciendoy generando empleo Javier Vega de Seoane, presidente del Círculo de Empresarios

“Sólo es posibleconsolidar larecuperaciónincrementando nuestracompetitividad y, paralograrlo, es necesarioavanzar en laconsolidación fiscal”

Después de un largo período decrisis en el que se han destrui-

do un elevado número de empre-sas y miles de empleos, aumenta-do la tasa de paro hasta nivelesinsostenibles, la economía espa-ñola se encuentra en plena recu-peración. Durante dos años, el PIBha registrado una tasa de variaciónpositiva –1,4% en 2014 y en tornoal 3,2% en 2015– y se ha empeza-do a crear empleo –más de200.000 personas en 2014 y520.000 en los nueve primerosmeses de 2015–, lo que ha supues-to que desde 2013 haya 1.400.000personas desempleadas menos.

Aunque estimamos que para2016 estos resultados se consoli-darán, –con un crecimiento del PIBcercano al 3% y un aumento delempleo de aproximadamente el2,5%–, queda mucho camino porandar para recuperar los niveles deactividad y empleo previos a la cri-sis. Este año viene marcado porfactores exógenos, positivos parala economía española que contri-

buirán a su recuperación: la reduc-ción del precio del petróleo –actual-mente por debajo de los 30 dóla-res por barril y que previsiblemen-te disminuirá aún más en los pró-ximos meses–; la devaluación deleuro frente al dólar o el plan de estí-mulo monetario del Banco CentralEuropeo, que está permitiendo queempiece a fluir la financiación a lasempresas.

Pero, también, en 2016 hay fac-tores de riesgo que pueden poneren peligro esta consolidación: lacreciente volatilidad de los merca-dos financieros; la desaceleraciónde las economías emergentes y elcomercio mundial; las tensionesgeopolíticas derivadas de los con-flictos existentes; la crisis migrato-ria; así como la inestabilidad polí-tica generada tras las últimas elec-ciones generales.

Por ello, en estos momentos,España necesita un Gobierno esta-ble, que genere confianza y quesea capaz de afrontar, con deter-minación y valentía, los nuevos

retos que se presenten, con el finde apuntalar la recuperación eco-nómica y consolidar la creación deempleo para que la salida de la cri-sis llegue a todos los ámbitos dela economía real.

Es necesario que las Administra-ciones Públicas establezcan unaacción conjunta y coherente a lahora de poner en marcha nuevas,profundas y necesarias reformas ymedidas que propicien el cambioestructural de nuestra economía.

Desarrollo empresarialLos empresarios somos actoresindispensables en la generación deempleo y, por tanto, en el creci-miento económico y progreso paraun país. Consciente de nuestra res-ponsabilidad, desde CEIM elabo-ramos el pasado año el “Plan400.000 empleos”. Un plan quepropone una serie de propuestasque deben adoptarse, con carác-ter prioritario y urgente, paraaumentar la competitividad de lasempresas y consolidar la recupe-ración económica.

Entre las propuestas, destacaríacomo prioritarias las siguientes: Esimprescindible mantener una polí-tica de austeridad presupuestaria,promover el cumplimiento de losobjetivos de déficit público y con-trolar el crecimiento de la deudapública; reforzar la unidad de mer-cado; y ejercer un mayor controlsobre toda práctica que supongacompetencia desleal.

Es el momento de profundizaren las reformas iniciadas, espe-cialmente, la laboral –rebajandolas cotizaciones sociales–; la fis-cal –bajando de forma decidida elIVA, el IRPF y el Impuesto sobreSociedades–; y abordar otras nue-vas como la energética –abaratan-do los elevados costes que sopor-tan las empresas restando sucompetitividad–.

Urge propiciar un marco óptimopara el desarrollo de la actividadempresarial –eliminando rigidecesy cargas burocráticas, y simplifi-cando trámites administrativos–;diseñar un marco legislativo mássencillo y estable que proporcioneuna mayor seguridad jurídica; faci-litar a las empresas, especialmen-te a pymes y autónomos, la finan-ciación necesaria para su creación,crecimiento y/o consolidación; yfavorecer la innovación e interna-cionalización de la economía.

En definitiva, somos optimistasen nuestras previsiones para esteaño, siempre y cuando se acabecon la inestabilidad política y elnuevo equipo de Gobierno apliquemedidas acordes con los compro-misos asumidos a nivel europeo.

Estabilidadinstitucionalpara consolidarla recuperación Juan Pablo Lázaro, presidente de la Confederaciónde Empresarios de Madrid (CEIM)

“Es el momento derebajar las cotizacionessociales, el IVA, el IRPF yel Impuesto sobreSociedades y abordar lareforma energética paraabaratar los elevadoscostes empresariales”

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SUPLEMENTO ESPECIAL 35 ANIVERSARIO Tribunas Asociaciones

E n primer lugar, quiero felicitar atodos los profesionales de

EL NUEVO LUNES por 35 años de infor-mación rigurosa sobre la economíaespañola. Parte de esa labor ha con-sistido en recoger, desde el año2008, las distintas facetas de la gra-ve crisis económica que ha sacudi-do a nuestro país. Una dura trave-sía que por fin muestra signos desuavizarse. Aunque las diversasincertidumbres abiertas –internas yexternas- recomiendan prudencia,tampoco nos sumerjamos en esainclinación tan hispana a ver siem-pre el vaso medio vacío, cuando setrata de juzgar nuestra situación yacciones.

Sin duda queda mucho trabajopor hacer, y también por no desha-cer; pero demos la relevancia quetiene, como cambio de tendencia,a excelentes noticias como elaumento del PIB del 3,2% en 2015,lo que supone crecer a niveles pre-vios a la crisis. También valoremosen su justa medida que las exporta-ciones españolas de mercancíassiguen batiendo récords, y ya supo-nen más de 230.000 millones deeuros. Si no seguimos trabajandoduro y en la buena dirección, estastendencias se pueden revertir, peroes un hecho que están ahí graciasal esfuerzo de muchos; destacada-mente de tantas empresas que hansabido repensarse, para ganar encompetitividad.

Aunque en ocasiones no lo parez-

ca, la historia sirve para aprender deella; también la historia económica.La estructura económica españolaque emerja de la crisis debe basar-se en pilares firmes, única forma deconstruir competitividad a largo pla-zo. ¿Cuáles son esas bases? Lasque vienen reiterándose desde hacetiempo, como son, entre otras, lainnovación, la calidad, la sostenibi-lidad o el conocimiento.

Todos los sectores tienen unaaportación capital que hacer en esteempeño, pero tras un período en quequizá no ha tenido la consideracióny el cuidado que merecía, todo losucedido en el marco europeo harevalorizado el indispensable papelde la industria en toda economía queaspire a prevalecer. Recientementeestá emergiendo con fuerza el con-cepto de industria 4.0; es decir, laincorporación intensa de la tecno-logía de la información a toda lacadena de valor de los procesosrelacionados con la industria. Unconcepto, que me sirve para traer aestas páginas un elemento de com-petitividad del que, no por casuali-dad, hace mucho tiempo que hacenun amplio uso las economías dereferencia en el ámbito europeo, yahora también varias de las emer-gentes más destacadas. Estoyhablando de las normas técnicas, elelemento que aporta un idiomacomún y permite la colaboraciónefectiva entre diversos elementos.Como hace poco declaró Bernhard

Thies, el Presidente del Comité Euro-peo de Normalización Electrotécni-ca “En la Industria 4.0, la normaliza-ción permite conectar la capa deproducción con la capa de gestión”.El internet de las cosas con el inter-net de los servicios.

El lenguaje Las normas son el lenguaje quehablan los mercados internaciona-les, facilitando el acercamiento y laexportación de bienes y serviciosa nuevos mercados; de hecho, tie-nen un impacto del 80% en elcomercio mundial, según cálculosde la Organización para la Coope-ración y Desarrollo Económicos(OCDE). Para comprender su ver-dadera dimensión internacional,sólo hay que ver los más de 50.000técnicos de todo el mundo que par-ticipan en su desarrollo.

Elaboradas por primeros exper-tos, las normas son una herra-mienta esencial a la hora de abor-dar un nuevo mercado o proceso,eliminando la incertidumbreempresarial.

Las normas tienen impacto direc-to en la cuenta de resultados de lasempresas; de hecho, aquellas orga-nizaciones que las usan habitual-mente en su estrategia general lessupone unos beneficios de hasta el

5% de sus ingresos anuales por ven-tas, según un estudio de la Organi-zación Internacional de Normaliza-ción (ISO). Sobre el conjunto de laeconomía española, las normassuponen el 1% del PIB. El catálogonacional de normas cuenta con31.500 documentos, con solucio-nes para la práctica totalidad de lossectores.

Por todo ello, las normas son ins-trumentales a la hora de aspirar aun crecimiento de calidad. Paraobtener un retorno óptimo de lasnormas, las empresas tienen a sudisposición otra potente herramien-ta: la certificación. Someterse alexamen de una tercera parte reco-nocida e independiente se traduceen una mejora de la competitividadde las empresas, al tiempo queactúa como un pasaporte de cali-dad, que ayuda a la internacionali-zación y a la exportación; así lo cre-en más de 1,5 millones de organi-zaciones de todo el mundo queestán certificadas.

Un total de 52.714 certificadosse registran en España, que vienerepitiendo primeros puestos mun-diales en los últimos años en lasprincipales certificaciones; actual-mente, las empresas españolasson las séptimas del mundo y quin-tas de Europa en Calidad ISO 9001,con más de 36.000 certificados. EnGestión Ambiental ISO 14001, sonlas quintas del mundo y tercerasde Europa, con cerca de 14.000certificados.

En España tenemos mucho cami-no recorrido en lo que a calidad serefiere y es una fuerza que estáimpulsando el crecimiento del teji-do productivo. Sin embargo, esnecesario que la calidad se convier-ta en un verdadero reto país, empa-pando a cada vez más organizacio-nes y, por tanto, sea la base de uncrecimiento sólido, sostenible y com-petitivo. En este empeño, las nor-mas y certificados son poderososaliados.

Crecer sobrebases sólidasCarlos Esteban, presidente de la AsociaciónEspañola de Normalización y Certificación (Aenor)

“Las normas técnicastienen un impactopositivo en la cuenta deresultados de lasempresas de hasta el 5%de sus ingresos anualespor ventas”

R ecién entrados en 2016, y conun panorama político tan ines-

table como el que actualmente vivi-mos, resulta difícil hacer previsionesde cualquier tipo para este año. Másaún si se trata de previsiones de tipoeconómico, ya que este es un terre-no en el que las proyecciones a futu-ro son particularmente inciertas ycomplicadas.

El año 2015 se cerró con unas elec-ciones generales y en un contextoeconómico en el que, por primera vezen mucho tiempo, empezaba ahablarse sin tapujos de crecimientoy de fin de la dura crisis que ha azo-tado a la economía y a la sociedadespañola durante cerca de siete años.

Por lo que respecta al sector eléc-trico, y como presidente de la Aso-ciación Española de la Industria Eléc-trica (UNESA), merece la pena recor-dar que en el pasado ejercicio, y porprimera vez en quince años, se regis-tró superávit en el sistema eléctrico,dejando atrás el temido déficit detarifa y la problemática vinculada almismo.

En efecto, la dura reforma que elsector eléctrico ha asumido en los

últimos años ha tenido como resul-tado el fin de este lastre (el déficit detarifa llegó a tener un saldo pendien-te de recuperación de 27.000 millo-nes de euros). No obstante, la solu-ción al déficit se ha logrado trasafrontar una serie de ajustes que hanafectado en gran medida a la acti-vidad que realizan las compañíasasociadas en UNESA.

Por otro lado, y centrándometambién en la situación del sectorde la energía eléctrica, el cambio deaño no ha traído consigo ningunamodificación en lo que se refiere ala estructura de la tarifa eléctrica.De este modo, el recibo eléctricoque paga el consumidor españolcontinúa cargado –sobrecargado–con una serie de costes ajenos alsuministro de energía eléctrica, esdecir, que no tienen nada que vercon la generación, el transporte y ladistribución de la electricidad. Estaspartidas (derivadas fundamental-mente de decisiones políticas de lossucesivos y distintos gobiernos, asícomo de impuestos) acaparan cer-ca de la mitad del precio de la fac-tura eléctrica.

Seguridad institucionalEsta será una de las cuestiones conlas que tendrá que lidiar el gobier-no que finalmente se forme. Ungobierno del que esperamos quesea capaz de profundizar en la sen-da de la recuperación económica yde la creación de empleo, impres-cindibles para el crecimiento del paístanto desde el punto de vista eco-nómico como desde el social.

Asimismo, será crucial que el nue-vo ejecutivo consiga crear un climade estabilidad y seguridad, indispen-sable para todos los sectores, peromás aún para el energético, en elque las inversiones se realizan a lar-go plazo y movilizan inevitablemen-te sumas considerables.

Son muchas las opciones y alter-nativas que actualmente están abier-tas. Muchas, por lo tanto, las opor-tunidades que tenemos enfrentepara salir airosos del trance quesupone superar la crisis y salir refor-zados de ella.

El sector de la energía eléctricaofrece, como pocos, la posibilidad

de adaptarse a las necesidades ydesafíos actuales, de buscar nue-vas fórmulas y responder a losrequerimientos de la sociedad.

Así lo demuestran avances comoel que entraña el despliegue de lasredes inteligentes (con el aumento

de la capacidad de gestión querepresenta) y el desarrollo de la movi-lidad eléctrica, entre otros. Igualmen-te, la existencia de un mix comple-to y equilibrado, en el que todas lasfuentes de generación aportan susventajas y suplen los puntos flacosde las demás tecnologías, convier-te a la energía eléctrica en garantedel progreso y del crecimiento en lasociedad.

Muchos interrogantes se ciernensobre nuestro futuro inmediato. Con-fío en que seamos capaces de apro-vechar este momento y mirar haciadelante con confianza. Sin duda laindustria eléctrica será una bazaimportante para que ese promete-dor futuro se haga realidad.

La energíaeléctrica, garantedel progreso Eduardo Montes, presidente de la AsociaciónEspañola de la Industria Eléctrica (Unesa)

“El recibo eléctrico quepaga el consumidorespañol continúasobrecargado con unaserie de costes ajenos alsuministro de energíaeléctrica, derivados dedecisiones políticas”

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SUPLEMENTO ESPECIAL 35 ANIVERSARIO Tribunas Asociaciones

L o urgente frente a un cambioes asumirlo y entender en qué

medida las reglas de juego, losmodos de comportamiento, han demodificarse para adaptarse a lanueva situación. La valoración delos sucesos económicos ocurridosen los últimos años variará, lógica-mente, según quién la juzgue; pero,en mi opinión, esto que llamamosla crisis económica del 2008 inclu-ye algunos elementos que apun-tan hacia cambios de paradigma.Y es por ello que considero impor-tante localizarlos, comprenderlos,y actuar en consecuencia.

Un paradigma que creo ha cam-biado ya, y seguirá cambiando, esel relativo al reparto del poder dedecisión en el marco de la socie-dad y de la economía. Nuestromodelo social, diseñado en suslíneas básicas en los 15 años quesiguieron al final de la SegundaGuerra Mundial, se basa en unpacto entre dicha sociedad y losEstados por el cual ésta cedeimportantes ámbitos de decisióna aquéllos, a cambio del sosteni-miento por su parte del bienestarcomún. Antes de estallar la crisiseconómica, este esquema estabasometido a importantes tensionesa causa de su éxito, porque es laeficiencia estatal a la hora de pro-curar el bienestar común la quehace que dicho bienestar cristali-ce en cotas de longevidad cadavez más elevadas. Unas cotas delongevidad que son, en estosmomentos, lo que está en la basede las tensiones demográficas queafectan a ese mismo sistema debienestar.

Las cosas vienen cambiando deforma progresiva desde hace más

o menos tres décadas. Si nos des-plazamos todo ese tiempo en laobservación y nos centramos enlas sociedades más avanzadas deaquel momento, nos encontrare-mos con relaciones laborales,modelos productivos y de consu-mo muy diferentes a lo que tene-mos hoy. El trabajador que a menu-do se designa con el neologismojaponés sarariman, que desarrolla-ba una carrera laboral casi sin dis-continuidades y normalmente enla misma empresa desde el princi-pio hasta el final, es cada vezmenos común. Las economíasotrora industriales hoy son básica-mente proveedoras de servicios,porque es a esta vertiente de laactividad donde se ha desplazadobuena parte de la potencialidad decrear valor añadido. El consumi-dor, por último, y muy especialmen-te el consumidor que viene, estáacostumbrado a adquirir lo quenecesita usando canales que hace10 años eran inimaginables.

Si lo que queremos, tal y comopropone el leitmotiv de este núme-ro de EL NUEVO LUNES, es crecermás y crear más empleo, tal vez loprimero que tendremos que com-prender es que esas potencialida-des que estábamos buscando talvez, o sin tal vez, transitan porcanales nuevos. Canales que debe-mos comprender.

Hay que resituar al individuo enel centro de las decisiones. El cre-cimiento del siglo XXI ya no puedeser el fruto de una planificación máso menos inteligente, realizada porun selecto grupo de arcontes. El cre-cimiento del siglo XXI va a ser,mucho más que en el siglo que loprecede, el resultado agregado de

una serie de decisiones particula-res. ¿Niega esto al Estado? ¿Su rolen la economía? ¿En la política? ¿Enla sociedad? ¿En el bienestar colec-tivo? En modo alguno: lo refuerza,porque permite que se centre en lasque verdaderamente han de ser susfunciones.

Estado del Bienestar Quienes defendemos la idea de queel Estado debe circunscribirse a susfunciones esenciales a menudo reci-bimos la acusación de que quere-mos desmontar el Estado deBienes tar. Pues bien, no puedehaber crítica más errónea puesnuestra intención es justo la contra-ria. La mejor forma de defender ymantener el Estado del Bienestares entender la realidad sobre la queva a tener que actuar durante lospróximos 50 años. Resulta curiosoque a opiniones públicas que noencuentran ningún problema enentender que es necesario limitarlas emisiones presentes de gasescontaminantes para no tener en elfuturo una Tierra peor, les cuestetanto entender que para seguir man-teniendo dentro de medio siglo elEstado del Bienestar como lo cono-cemos, debemos tomar hoy medi-das que lo permitan.

El individuo debe tomar decisio-nes. En realidad, ya las está toman-do, lo que ocurre es que muchasveces no lo sabe. Por citar ejem-plos de mi terreno, cualquier aná-lisis serio al que pueda acceder ellector sobre la situación del aho-rro-previsión en el mundo afirma-rá, como primera provisión, que loque ha pasado, y sigue pasando,es que esquemas denominados deprestación definida (que garanti-

zan una prestación mínima a cam-bio del ahorro) están migrando a lacontribución definida (se descono-ce lo que se cobrará). Esta migra-ción supone que los riesgos demercado o de crédito, que antesno estaban sobre los hombros delahorrador, ahora sí lo están. Y estocambia radicalmente sus necesi-dades de conocimiento.

Por esto mismo, resituar al indi-viduo en el centro de las decisio-nes económicas reclama reconsi-

derar los esquemas de transparen-cia pública y privada; el catálogode cosas que los ciudadanosdeben saber, y cómo se las vamosa contar. El siglo XXI es un siglo deciudadanos que necesitarán sermucho más responsables que suspadres o abuelos. Avanzamoshacia un mundo extraño en el quepodremos dejar de hacer cosasque siempre han sido nuestra res-ponsabilidad, como conducir nues-tro coche; pero, al tiempo, debe-remos aceptar esa misma respon-sabilidad en otros ámbitos a losque no estamos acostumbrados.

Crecer pasa por entender estepapel de los individuos, así comola demanda que estos tienen denuevas formas de contacto, decomercialización, de información.Eso supone poner en manos delindividuo las herramientas tecno-lógicas, educativas y económicasque necesita para tomar decisio-nes y progresar. Un mundo distin-to, más complejo, pero, al mismotiempo, con mayor capacidad degenerar oportunidades.

“Dejaremos de hacercosas que siempre hansido nuestraresponsabilidad, comoconducir nuestro coche;pero, al tiempo,deberemos aceptar esamisma responsabilidaden otros ámbitos a losque no estamosacostumbrados“

Crecimiento y empleoen el siglo XXIPilar González de Frutos, presidenta de la Unión Española de EntidadesAseguradoras y Reaseguradoras (Unespa)

D urante los últimos meses de2013 ya se atisbaban sínto-

mas de recuperación en la econo-mía española todavía modestos,que se consolidaron en 2014, conuna tasa de crecimiento de la eco-nomía del 1,4% y más aún en2015.

Nuestro país ha abordado impor-tantes reformas, especialmente enel ámbito presupuestario, laboral,así como en el sector financiero yen la Seguridad Social, que estándando sus frutos de una forma pro-gresiva. Ello se ha reflejado en elcontinuado interés de los inverso-res extranjeros por España, que seha reflejado en los importantes flu-jos hacia la deuda pública y priva-da, lo que ha permitido reducir laprima de riesgo por debajo de los120 puntos básicos, y situar la ren-tabilidad de la deuda pública a lar-go plazo en mínimos históricos.

Las excepcionales rentabilida-des de los mercados de renta fijaen 2013 y en 2014, como conse-cuencia de reducciones de la pri-

ma de riesgo de la deuda españo-la desde niveles de 400 puntosbásicos hasta el entorno de 120puntos, han sido difíciles de repe-tir en 2015, por lo que los inverso-res con perfiles moderados o con-servadores se han planteado la dis-yuntiva de o “más riesgo conexpectativas de rentabilidadessuperiores o menos rentabilidadprevista”.

De hecho, los Fondos de Inver-sión con exposición a mercadosde renta variable (los mixtos de ren-ta fija y de renta variable, y los derenta variable) han realizado en2015 casi 29.000 millones de sus-cripciones netas, frente a un totalen el sector de 24.700 millonescompensados con reembolsos enotras categorías.

En resumen, se ha consolidadola tendencia de 2014 y 2013 de undesplazamiento hacia categoríascon mayor riesgo, tanto en Fondosde Inversión como en Fondos dePensiones, (1.200 millones de apor-taciones en estas categorías, sobre

un total del sector de 950 millones),a lo que sin duda ha contribuido elentorno de incremento de la acti-vidad económica, la  mejora de lasexpectativas y la baja rentabilidadde los productos de renta fija, quehan llevado al ahorrador español auna mayor exposición a la rentavariable.

Todos estos factores, unido a labaja rentabilidad ofrecida por losdepósitos bancarios, han contri-buido al mismo tiempo a un impor-tante impulso de las Institucionesde Inversión Colectiva (Fondos y

Sociedades de Inversión), así comode los Planes y Fondos de Pensio-nes, que han incrementado en2015 su volumen de activos enmás de un 12%, hasta los 470.600millones de euros, de ellos, 104.500millones en Fondos de Pensiones.

Rentabilidad y seguridad¿Por qué este crecimiento conti-nuado en los últimos años de losahorradores hacia la inversióncolectiva? Por su rentabilidad, en

el período 2013-2015, los rendi-mientos medios acumulados enFondos de Inversión han sido del3,7% anual acumulado, e inclusosuperior en Fondos de Pensiones(5,4% de rentabilidad anual). Porsu diversificación del riesgo, altener prohibido invertir, con carác-ter general, más de un 5% delpatrimonio del Fondo en un únicoemisor, lo que supone al menosveinte inversiones diferentes.

Por su seguridad, al ser el Fon-

Fondos de inversióny de pensiones, un balanceÁngel Martínez-Aldama, presidente de la Asociación de Institucionesde Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco)

“Tanto los fondos deinversión como losfondos de pensiones sonlos vehículos de ahorroóptimos para cualquierahorrador, conindependencia de sumayor o menor aversiónal riesgo”

Page 5: Javier Vega de Seoane, presidente del Círculo de Empresarios · En este escenario, como en la Transición, los partidos políticos y la sociedad civil deberían vertebrar-se y, de

L a liberalización de las teleco-municaciones en los años 90

desencadenó una época brillanteen el ámbito de la Unión Europeaque condujo a nuestra industria auna situación de liderazgo mundial,a nuestro capital humano a figurarentre los más cotizados globalmen-te y a nuestra sociedad a empren-der el camino de la Sociedad de laInformación desde una posición deprivilegio.

Tras diversos ajustes del mode-lo, y justo cuando este caminohabía empezado a demostrar susostenibilidad con el advenimien-to de una auténtica revolución digi-tal a nivel planetario, en la UniónEuropea una desafortunada con-junción de factores ha hecho quehayamos perdido el posicionamien-to ganado en favor de otras regio-nes del mundo.

El retroceso ha sido tan impor-

tante que en Europa no se estánaprovechando las especiales vir-tudes de la Economía Digital, cuyatransversalidad trasciende a todoel modelo productivo, administra-tivo y formativo. De no invertirse latendencia, las consecuencias seránnefastas tanto para la industriacomo para la economía del país,pues no involucrarse en esta Revo-lución Digital supone no aprove-char la más potente palanca decambio económico que podemosencontrar en estos momentos yque están utilizando la mayor par-te de los países avanzados.

Se trata de apostar por un sec-tor que hoy por hoy puede probarsu capacidad de generar benefi-cios a los países que creen en laEconomía Digital. Se trata, pues,de una cuestión de Estado.

En nuestra opinión, no habrárecuperación ni crecimiento si nose consolida esta apuesta por elconocimiento, la innovación, la tec-nología, la industria y un mercadodigital único europeo en el que

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E l año 2016 ha comenzado condiferentes incógnitas, pero se

presenta lleno de desafíos y opor-tunidades que confiamos en quenuestro país pueda aprovechar.Desde la óptica industrial, la indus-tria del automóvil continuará consu camino hacia el cumplimientodel objetivo que se marcó haceunos años y que no es otro que vol-ver a producir 3 millones de vehí-culos. En 2016, estaremos en unentorno de 2,8 millones de vehícu-los fabricados, de los que el 85%se destinarán a otros países, enespecial de nuestra órbita europea,pero también con mayor protago-nismo de zonas como la asiática ola americana.

Desde la óptica de mercado, tan-to en los turismos como en losvehículos industriales esperamosbuenas noticias, un volumen porencima de 1,1 millones de unida-des para los turismos y cerca de200.000 unidades en industriales.Si las perspectivas económicasmejoraran y pudiéramos contar conun plan de rejuvenecimiento duran-te todo el año, los volúmenespodrían ser superiores. Desde elpunto de vista del producto, vere-mos vehículos que cada vez máscon más asiduidad incorporan ele-mentos de conectividad con elentorno y con el propio conductor.También asistiremos a más ensa-yos de vehículos autónomos, aun-que todavía no los veremos dispo-nibles en el mercado. Tambiénveremos una presencia mayor devehículos alternativos en nuestrascarreteras, con propulsiones eléc-tricas, a gas e híbridos.

Pero, sin duda, el desafío socialmás importante que se presenta alsector es el rejuvenecimiento del

parque automovilístico. Con unaedad media de 11,6 años de edad,el parque no es un parque moder-no y eso provoca problemas decontaminación y una menor segu-ridad vial en nuestras carreteras. Endefinitiva, el año se presenta llenode retos y desafíos que el sector deautomoción asumirá y liderará yano tanto como fabricantes de vehí-culos sino como proveedores demovilidad inteligente y sostenible.

Los fabricantes de vehículosestán evolucionando hacia el con-cepto de proveedores de movili-dad. La sociedad de hoy en díarequiere unas soluciones de movi-lidad distintas a las de hace unosaños. El público joven está másinteresado en la tecnología. Porello, el sector del automóvil ofrecedentro de sus catálogos cada vezcon más asiduidad, la Tablet conruedas que es una evolución delvehículo conectado y una etapaprevia hacia el vehículo autónomo.

Pero, no solamente los fabrican-tes están trabajando en el produc-to, sino también en la forma dehacerlo. Hoy en día, las plantas deautomóviles son completamentedigitales y la tecnología 3D es unarealidad, de manera que se abrennuevas oportunidades de desarro-llo personal y profesional para losjóvenes de hoy en día. Es una fór-mula para atraer el interés de lasociedad del mañana.

Otro campo en el que la indus-tria está trabajando de maneraintensa es el uso del vehículo. Cadadía que pasa es más común ver,especialmente en las grandes ciu-dades, diversas formas de compar-tir coche. La industria es partidariade estos nuevos sistemas de movi-lidad, siempre que se garantice la

seguridad de sus ocupantes. Son tres áreas muy distintas, pero

que forman parte de un conjunto deideas relacionadas con la nuevamovilidad inteligente y sostenible.

También trabajamos para mejo-rar nuestro medioambiente, todosestamos concienciados en elimi-nar la contaminación de las gran-des ciudades y mejorar la vida enlas mismas, tanto de las personasque residen como de las personasque trabajan y se ganan la vida díaa día circulando o trabajando en elcentro de la ciudad.

Ello requiere una estrategia com-partida por parte de todos los agen-tes involucrados en la vida de la ciu-dad. El sector del automóvil estáasumiendo su compromiso con lasociedad y hoy en día los vehícu-los nuevos no son un problema decontaminación para las grandesurbes. El problema proviene de loscoches más antiguos. Por eso, lamedida más eficaz para alcanzarun objetivo a largo plazo es ir reno-vando el parque automovilístico.

Iniciativas Anfac ha presentado un conjuntode iniciativas para colaborar en ladisminución de las emisiones ycongestión del tráfico en Madrid.Creemos que no todos los cochesson iguales y, por ello, una de lasmedidas que hemos propuesto,mientras se acomete la renovacióndel parque automovilístico, en loscasos de episodios altos de con-taminación, es la restricción del trá-fico en función del potencial con-taminador del coche, de maneraque los coches más limpios pue-dan circular por la ciudad porqueno suponen ningún problema deemisiones.

Somos partidarios de solucionesconsensuadas entre todos porqueel vehículo cumple una funciónsocial, comercial y económica muyimportante en la vida diaria.

Todavía quedan muchas cosaspor hacer, las factorías españolaspelean día a día por atraer nuevasinversiones, nuevos modelos, nue-vas cargas de trabajo. En este sen-tido, hay que alabar el capitalhumano que integra este gremio.Personas que con su trabajo y sutesón, han conseguido el reto deformar parte del crecimiento de laindustria de automoción y de laeconomía española, y que a partirde instrumentos como el conveniocolectivo de empresa y el apoyode la reforma laboral han sabidoinnovar para conseguir las dosisde flexibilidad necesaria para con-solidar lo alcanzado. La reformalaboral ha consolidado una formade negociación colectiva en el seno

de la empresa que, en el caso delautomóvil ya se venía usando y queha sido una de las claves del éxi-to de la industria.

Hasta el momento se han anun-ciado inversiones en nuestro paísderivadas de la industria de auto-moción de 10.000 millones deeuros. Pocos sectores han apos-tado por nuestro país como lo estáhaciendo la industria de automo-ción y, en especial, en momentocomplicados. Estamos convenci-dos de que podemos aspirar amás. Hoy en día, España es un paísque ha pasado, en el automóvil, dehablar de deslocalizaciones, ahablar de nuevas inversiones, nue-vos modelos y un nuevo modeloproductivo inspirado en el automó-vil. Somos optimistas y en los pró-ximos años veremos más inversio-nes para alcanzar nuestro objetivode volver a fabricar 3 millones devehículos en el año 2017.

Para concretar, necesitamos másindustria para tener más crecimien-to y más empleo, más reformasque afecten a la competitividadindustrial en determinados aspec-tos como la logística, la energía, lamovilidad, la I+D+i, la formación ola fiscalidad.

“La tablet con ruedas esuna evolución delvehículo conectado y unaetapa previa hacia elvehículo autónomo”

Objetivo: fabricar 3 millonesde vehículos en 2017Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de la Asociación Nacionalde Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac)

do un patrimonio propiedad de lospartícipes y estar separado delbalance de la entidad que gestio-na el Fondo. Por su supervisión ycontrol por la CNMV y por laDGSFP, ambos organismos públi-cos supervisores. Por su gestiónprofesional, al permitir a cualquier

inversor acceder desde diez eurosa los mejores gestores de inversio-nes. Por su fiscalidad, al permitirno tributar, en el caso de Fondosde Inversión, hasta el momento enque el partícipe decida reembolsarsu dinero pudiendo traspasarlodesde un Fondo de Inversión a otro

sin tributar. En el caso de las apor-taciones a Planes de Pensionesson la única vía de reducir la tribu-tación en el IRPF y, además des-de 2015, con liquidez a los diezaños de la inversión y también conposibilidad de movilización a otroplan. Por su liquidez, en el caso de

Fondos de Inversión, permitiendoal inversor disponer de su dineroen un máximo de tres días.

En definitiva, tanto los Fondosde Inversión como los Fondos dePensiones son los vehículos deahorro óptimos para cualquier aho-rrador, con independencia de su

mayor o menor aversión al riesgo.En 2016, y teniendo en cuenta

la continuidad de política moneta-ria del BCE, las perspectivas paraestos instrumentos de ahorro son,un año más, de un crecimientocontinuado en volumen de ahorroy número de ahorradores.

Economía digital,hoja de rutaJosé Manuel de Riva, presidentede la Asociación Multisectorial de Empresasde la Electrónica, las Tecnologías de la Informacióny Comunicación, de las Telecomunicacionesy de los Contenidos Digitales (Ametic)

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podamos asistir a una intensivatransformación digital de todos lossectores productivos.

Después de años de crisis y deuna preocupante contracción delsector tecnológico en España, seprodujo un punto de inflexión en el2014, con un crecimiento del 2,1%que en el 2015 puede haber alcan-zado el 3,5%. Ahora bien, no todoslos segmentos de actividad han teni-do el mismo comportamiento y algu-nos de ellos, que son fundamenta-les para el conjunto, siguen sufrien-do una situación muy complicada.

Podemos concluir que la tenden-cia parece haber cambiado, peroque aún no se ha consolidado niha repercutido por igual en todoslos segmentos de actividad delsector tecnológico. Esto, unido alescenario de incertidumbre quevivimos, no nos permite aún ase-gurar que la recuperación sea nisostenible ni suficiente.

Sin embargo, sí tenemos opiniónsobre qué políticas se necesitanpara un desarrollo adecuado de laEconomía Digital en España. Comobase fundamental se hace necesa-ria una estabilidad regulatoria –unacondición indispensable para un

sector intensivo en inversiones– queorigine confianza. Esto tiene muchoque ver con algo indispensable parael desarroollo de la Economia Digi-tal como son las infraestructuras detelecomunicación: resulta comple-tamente indispensable lograr unmarco regulatorio estable para eldespliegue de redes de acceso debanda ancha ultrarrápida.

Otro punto fundamental es elcapital intelectual. Es crítico impul-sar las carreras técnicas paragarantizar la disponibilidad derecursos. Pero al mismo tiempo,urge adecuar el sistema educativoa las nuevas profesiones digitales,alineándolo con la demanda actualdel mercado. El “déficit” formativoes notable en estos momentos, loque está dificultando la creaciónde empleo.

Este sector se caracteriza por lapermanente evolución de susinfraestructuras, con una capilari-dad sin precedentes y unos pre-

cios en constante reducción. Estono se puede lograr sin un potentemercado de capitales y sin unaesperanza de retorno de la inver-sión. Un punto que podemos con-cretar reclamando mayor eficien-cia en los mercados financieros

InnovaciónPero la transformación digital pre-sisa para su correcto desarrollo yevolución de una continua inno-vación. De ahí que si observamosel muy discreto puesto de Españaen el ranking mundial en materiade innovación, nos daremos cuen-ta de la imperiosa necesidad decambiar nuestra política de I+D+i.

Desde AMETIC venimos siendomuy insistentes en la necesidad decontar con mercados amplios yrobustos. La Ley de Unidad deMercado y el Mercado Único yDigital Europeo son claves, perosiguen generando incertidumbretanto en su reglamentación comoen su aplicación.

En Europa no hemos sido cuida-dosos con el proceso de desindus-trialización, lo que nos ha llevado auna posición de importante debili-dad. En lo que concierne a nosotros,a España, se hace necesario mate-rializar un Plan País de Transforma-

ción Digital apostando por las tec-nologías de futuro. Una auténticapolítica industrial propiciada por unclima de eficiencia institucional enel que exista mayor concreción yvelocidad en la ejecución de los pla-nes de transformación digital.

Hay algo que pudiera parecer ale-jado de nuestras preocupaciones,pero que lo consideramos comoprioritario dentro de nuestro sector:el uso adecuado de los recursosnaturales. Lo que hasta ahora seconsideraba coste propio de la acti-vidad industrial, se convierte paranuestras tecnologías en un objeti-vo en sí mismo por las oportunida-des industriales que conlleva y losbeneficios para la sociedad quegenera. Nos referimos a la impor-tancia de los aspectos que relacio-nan TIC y Sostenibilidad (SmartCities, Smart Grids, Green IT, Edifi-cación Inteligente, vehículo eléctri-co… ) que podrían hacer de Espa-

ña un ejemplo a seguir y una poten-cia a nivel mundial

Finalmente, creemos que todoel marco de referencia hay queorientarlo hacia iniciativas especí-ficas que nos diferencien comopaís. Es momento de ambicionarun futuro apoyado en apuestasconcretas con grandes proyectostractores: Smart Cities, ContenidosDigitales, Industria 4.0, Transporteinteligente, Internet de las cosas,Centros de Excelencia Industrial,Infraestructuras avanzadas de tele-comunicación de última genera-ción, Administración electrónica(Justicia, Sanidad, Educación, etc),Formación masiva sobre nuevosmedios y dispositivos, Cibersegu-ridad, fabricación inteligente,infraestructuras cloud, etc.

En el punto de inicio de salida dela crisis, hay que empezar a cons-truir un nuevo modelo de desarro-llo económico basado en unaEspaña más eficiente y competiti-va sustentada por la EconomíaDigital. Las TIC son el instrumen-to imprescindible para lograr unimpacto transversal en todos lossectores de la economía y de lasAdministraciones Públicas. Y AME-TIC tiene propuestas concretaspara hacerlo posible.

P ocas preguntas pueden ofre-cer tantas incertidumbres

como la que propone “El NuevoLunes” en su trigésimo quinto aaniversario. ¿Se consolidará el cre-cimiento? Tomando prestado elestribillo de la canción, podría res-ponderse con un dubitativo“depende, todo depende”.

A la hora de escribir estas líne-as, los primeros días de febrero,pocas certidumbres pueden encon-trarse en el proceso de conforma-ción de mayorías, quizás minorías,capaces de formar un gobierno quepueda afrontar los grandes retos dela España actual en términos deconsolidación del crecimiento, paraasegurar el desarrollo social y laexpansión económica.

En los últimos años es evidenteque se han cubierto algunas eta-pas decisivas en el proceso dereformas y modernización de laeconomía española que la demo-ledora crisis que hemos sufrido apartir de 2008, exigía recorrer.

Pero no es menos cierto que, enlos últimos meses, se están des-aprovechando ocasiones y per-diendo un tiempo precioso, del queseguramente no disponemos, paraconsolidar el crecimiento iniciadohace meses.

El actual escenario socioeconó-mico, las perspectivas de la acti-vidad empresarial, el posible hori-zonte de crecimiento y creación deempleo están absolutamente mar-cados por la situación política, porlas incertidumbres abiertas por laselecciones generales del pasado20 de diciembre y por el procesoque se ha abierto para la negocia-ción y conformación de la mayoríaparlamentaria que podría permitircrear un gobierno.

Los resultados electorales del 20

de diciembre demuestran que unagran mayoría de los españoles hanoptado por candidaturas defenso-ras de la moderación, el respetodel marco constitucional y la uni-dad de España, y sobre ello debe-rían construirse las mayorías par-lamentarias y los acuerdos degobierno.

En definitiva, pocas certidum-bres a las que asirse para lanzarproyectos y reforzar los que estánen marcha, o reflotar los que que-daron tambaleantes tras la crisis.

La incertidumbre nunca es bue-na compañía para la actividadempresarial. Y en un momentocomo el presente, en el que, trasla crisis, la economía españolacomenzaba a definir un camino defuturo para ser más sólida, com-petitiva y capaz de generar empleo,la inestabilidad y la ausencia decertidumbres sobre el más inme-diato futuro, se pueden convertiren un obstáculo insalvable.

El Indicador de ConfianzaEmpresarial Armonizado que cono-cimos el pasado mes de eneroretrocedió un 1,3 por ciento res-pecto al último trimestre de 2015,mientras que el Indicador de Con-fianza del Consumidor retrocedía8,3 puntos respecto al dato del mesanterior, y se situaba por debajo delos valores observados durantetodo el pasado año a excepcióndel mes de febrero.

En esa caída de la confianzainfluyen la volatilidad de los mer-cados financieros asociada a lospaíses emergentes y al precio delas materias primas, y su impactosobre la demanda y el comerciointernacional, pero también la ines-tabilidad política derivada de losresultados de las elecciones gene-rales del 20 de diciembre.

Empresas, trabajadores, inver-sores y consumidores, ciudadanosen suma, necesitan expectativasclaras, seguridad y un marco pre-visible para que desarrollar sus pro-yectos, personales o colectivos. Esdecir, precisan estabilidad parainvertir, consumir, lanzar iniciativas,y con todo ello poder crear rique-za, empleo y bienestar.

Durante años España ha dedi-cado todos sus esfuerzos ademostrar su solvencia a los acre-edores, a convencerles de quenuestra economía era de fiar, deque éramos capaces de cambiarla situación y afrontar nuestroscompromisos y nuestras deudas.

Oportunidad de inversión Ahora la prioridad es otra, se tratade demostrar a los inversores queEspaña es una buena oportunidadde inversión, porque una recupe-ración sólida y duradera necesitade esa inversión, y para atraerinversiones, las empresas debenofrecer buenas expectativas derentabilidad.

Ofrecer esas expectativas a lainversión exige estabilidad, reglasdel juego claras y previsibles, yactuaciones en áreas clave paraasegurarse de que la economíaespañola aproveche las oportuni-dades que la postcrisis le ofrece.

Al margen de qué mayoría degobierno pueda sacarse adelante,es necesario mantener las gran-des líneas de la política económi-ca y la senda de las reformas quehan permitido cambiar la tenden-cia de nuestra economía y crearempleo en los últimos meses.

En cualquier caso se deberáinvertir en infraestructuras produc-tivas, estimular la demanda de bien-es industriales, mejorar la financia-

ción de las empresas y actuar con-tra la morosidad, apoyar la interna-cionalización de las empresas y tra-bajar por la simplificación adminis-trativa y la unidad de mercado.

Se ha de combatir el fraude fis-cal, coordinar las políticas tributa-

rias estatales, autonómicas y loca-les, y reducir los Impuestos deSociedades, Patrimonio y Sucesio-nes. Es también necesario flexibi-lizar y simplificar los sistemas decontratación, reducir las cotizacio-nes sociales empresariales, moder-nizar el sistema de negociacióncolectiva y reforzar el papel de losagentes sociales.

Conseguir un suministro de ener-gía estable, competitivo y seguro,apoyar el sistema de I+D+i y orien-tarlo más al mercado, mejorar lossistemas de financiación y racio-nalizar y simplificar el marco nor-mativo, e impulsar la transforma-ción digital, son también impres-cindibles para las empresas, quenecesitan para seguir creandoriqueza, empleo y bienestar, unmarco político y jurídico previsibley estable en el tiempo.

El nuevo Gobierno deberá afron-tar adecuadamente esos retos por-que, por muchos matices que sepuedan introducir en ellos, no hayotro camino, ni se pueden crear fal-sas expectativas.

La política económica que per-mitirá crear riqueza y empleo esuna, y pasa por reforzar la produc-tividad y la competitividad, los dospilares de la actividad empresarialimprescindible para asegurar elprogreso y el mantenimiento denuestro Estado del Bienestar.

Expectativas claras para mejorar lacompetitividad Antonio Garamendi, presidente de la Confederación Española de la Pequeñay Mediana Empresa (Cepyme) y de la Confederación Españolade Organizaciones Empresariales del Metal (Confemetal)

“La Ley de Unidad deMercado y el MercadoÚnico y Digital Europeoson claves, pero generanincertidumbres”

“Resulta completamenteindispensable lograr unmarco regulatorio establepara el despliegue deredes de acceso de bandaancha ultrarrápida”

“La prioridad esdemostrar a losinversores que España esuna buena oportunidadde inversión. Para atraerinversiones, lasempresas deben ofrecerrentabilidad”

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