junio- julio 2008 · EXTENDIÉNDOME A LO QUE ESTA ADELANTE. Todos anhelamos obtener algunas cosas...

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Tomo 16 Junio - Julio 2008 El Mensajero El Mensajero El Mensajero El Mensajero

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Tomo 16 Junio - Julio 2008

El MensajeroEl MensajeroEl MensajeroEl Mensajero

Tomo 16 Junio - Julio 2008

El mandamien-to de Dios más

difícil

Una cosa hago

¿Es apropiado que la mujer ore a Dios con

la cabeza no cubierta?

Viviendo en el error

“UNA COSA HAGO” Filipenses 3:13,14

Introducción:

En alguna ocasión hemos tenido la oportunidad de leer estos versícu-

Un Pasado Doloroso o Vergonzo-so: Esto se refiere a que como cris-tianos debemos esforzarnos para olvidar situaciones en las que se nos causó daño. Por ejemplo: Una violación ya sea ésta de tipo ver-bal, físico, sexual o psicológico. Todos hemos leído sobre el caso de Tamar cuya violación desató una gran guerra en nombre de la venganza puesto que los protago-nistas de esta historia no estuvie-ron dispuestos a olvidar el pasado. (2 Samuel 13:1)

Nuestros Malos Hábitos: Hoy en día es muy común ver por las ca-lles a un joven fumando, em-briagándose o expresándose vul-garmente. Por el contrario, es muy difícil ver a uno leyendo la Biblia con sus amigos o evangelizando. Esto muestra que los seres huma-

En alguna ocasión hemos tenido la oportunidad de leer estos versícu-los. Las palabras dichas por el apóstol Pablo en este texto son no sólo muy conocidas sino también muy sabias. Sí hemos prestado la debida atención al texto, sabemos que en él se encuentra la fórmula para solucionar algunos de nues-tros problemas. En este texto se nos enseña la manera de vivir tanto nuestro pasado como nuestro pre-sente y nuestro futuro de forma tal que seamos siempre victoriosos. ¿Puede creerlo? Analicemos un poco lo que el texto dice.

OLVIDANDO CIERTAMENTE LO QUE QUEDA ATRÀS.

Muchas personas aún no hemos dejado atrás algunas cosas como:

con sus amigos o evangelizando. Esto muestra que los seres huma-nos tendemos a absorber los malos hábitos con mucha facilidad. Sin embargo, como cristianos debemos rechazar (abandonar o despojar-nos) de todas estas malas costum-bres y por el contrario inculcar en nuestros familiares, amigos y prin-cipalmente en nosotros mismos los buenos hábitos que nos harán here-dar la vida eterna. (Gálatas 5:16-26)

EXTENDIÉNDOME A LO QUE ESTA ADELANTE.

Todos anhelamos obtener algunas cosas materiales que a nuestro jui-cio son buenas y necesarias. Como seres humanos siempre queremos lo mejor para nosotros mismos; sin

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embargo, no nos gusta esforzarnos por lo que queremos. Deseamos que todo lo bueno llegue a noso-tros aplicando la ley del Mínimo Esfuerzo. Nuestro deber como cristianos es emplear todas nues-tras energías en honrar el nombre de Dios puesto que todas las de-más cosas vendrán por añadidura (Lucas 12:31). Pablo sabia que en su futuro cercano habrían pruebas que superar, pero él no se dio por vencido pues su plena confianza estaba en el Señor. Por ello, él es-taba dispuesto incluso a gastar lo suyo y a él mismo por amor a los demás (2 Corintios 12:15). Aún cuando las personas que nos rode-an no aprecien nuestro esfuerzo por ayudarles, nosotros debemos amarles ya que el premio lo recibi-remos de nuestro Creador.

de correr. Esto ha sucedido con algunos de nuestros hermanos quienes han dejado de lado la lu-cha; seguramente ellos no se afe-rraron a alcanzar esa única meta. Pablo se encarga en este texto (Filipenses 3:13,14) de decirnos cuál debe ser nuestra meta: El pre-mio del supremo llamamiento. Al-gunos se preguntaran ¿Cuál es ese premio?. En otra ocasión Pablo hace una comparación entre el pre-mio que recibe un atleta y el que nos espera a nosotros (1 Corintios 9:24,25). Este texto nos da a cono-cer que el premio para todo cristia-no fiel es una corona incorruptible reservada en los cielos; y ese her-manos es el premio por el que to-dos debemos luchar.

Conclusión:

remos de nuestro Creador.

PROSIGO A LA META, AL PREMIO DEL SUPREMO LLA-MAMIENTO DE DIOS EN CRIS-TO JESÚS.

Anteriormente se comentaba que Pablo se extendía a lo que tenía por delante, entonces cabe mencio-nar que él tenía una meta específi-ca que alcanzar ya que él no es de los que corren a la aventura (1 Co-rintios 9:26). De esta misma mane-ra, todos los cristianos debemos luchar por llegar a la meta; debe-mos tener presente siempre nuestro objetivo. Imagínese hasta donde puede llegar usted sí inicia una carrera sin conocer el punto de finalización, seguramente lo único que lograría sería cansarse y dejar

Conclusión:

Puede decirse que en esta vida existen dos tipos de personas:

1.- Los que se proyectan, hacen planes y establecen metas.

2.- Los que actúan sin tener objeti-vos; aquellos que impulsivamente actúan movidos por sus necesida-des, emociones (odio, envidia, etc.) y sentimientos (alegría, triste-za, etc.).

Nosotros, como cristianos, debe-mos procurar encontrarnos en el primer grupo para no actuar con-forme a factores que destruyen nuestra vida sino más bien actuar conforme a los ideales que nos hemos propuesto para lograr el

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éxito. Debemos hacer como hizo el apóstol Pablo. Él olvidó su pasado, todo cuanto era y tenia, él pensó y miró lo que habría de obtener y lo más importante él nunca regreso atrás, ni se detu-vo, sino que siguió caminando hasta estar eternamente en gloria. (2 Timoteo 4 : 7)

Jóvenes El Salvador

El Mandamiento de Dios Más Difícil

"Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arre-pentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte" (2 Corintios 7:10). Podemos ver que la tristeza no es el arrepentimiento, sino la tristeza según Dios produce el arrepentimiento.

El arrepentimiento es el resultado de la tristeza divina. Por ejemplo, un ladrón puede estar muy triste por el resultado de sus pecados, no porque pecó contra Dios, sino por-que fue capturado. Esta es la triste-za del mundo. Este tipo de tristeza no produce el arrepentimiento, sino la muerte. Un ejemplo bíblico es Judas. Judas estaba muy triste porque se dio cuenta que había entregado sangre inocente, pero la tristeza de él no produjo el arre-

El Mandamiento de Dios Más Difícil

Por Tony Melton

Es probable que el arrepentimiento sea el mandamiento de Dios más difícil de hacer. ¿Sabe por qué? Es porque hay gozo en el pecado (Hebreos 11:25), y poca gente quiere cambiar. Jesús nos dice: "Los hombres amaron más las ti-nieblas que la luz" (Juan 3:19). Fue el problema con los judíos y es el problema hoy en día.

Primero, quiero explicar lo que no es el arrepentimiento. El arrepenti-miento no es tristeza por los peca-dos. El apóstol Pablo nos enseña que la tristeza por la causa de los pecados no es arrepentimiento.

entregado sangre inocente, pero la tristeza de él no produjo el arre-pentimiento, sino muerte (Mateo 27:3-5).

Por otro lado, la tristeza que es según Dios produce arrepentimien-to para salvación. Por ejemplo, el apóstol Pedro le negó a Cristo tres veces y estaba muy triste. El "lloró amargamente" (Lucas 22:62). La tristeza de Pedro produjo el arre-pentimiento y Pedro se convirtió en uno de los más grandes apósto-les en el reino de Dios.

Segundo, el arrepentimiento no es un cambio de vida. Es cierto que si uno se arrepiente, entonces se cambiará la vida. Juan el bautista enseñó que el cambio de la vida era el fruto del arrepentimiento. El

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les dijo a los judíos: "Haced, pues, frutos dignos de arrepentimien-to...", (Lucas 3:8-14). Entendemos que "el fruto del arrepentimiento" es un cambio de la vida de uno --un cambio de la conducta. Por ejemplo, si uno está cometiendo la fornicación, el dejar de fornicar es una señal o sea un fruto del arre-pentimiento. Primero viene la tris-teza que es según Dios y después el arrepentimiento y el resultado del arrepentimiento es un cambio de la conducta o vida. (1) Tristeza según Dios (2) El arrepentimiento (3) Cambio de la conducta.

¿Qué es el arrepentimiento enton-ces? Es una decisión firme de dejar de pecar. Es una decisión de dejar lo malo y hacer lo bueno. Es un cambio de la voluntad obstinada o terca la cual es la fuente (sede) de

Puesto que Dios no hace acepción de personas, entonces tendría que salvar a todos. La Biblia dice que el arrepentimiento es un regalo de Dios en Hechos 11:18. Pero tam-bién es un mandamiento de Él según Hechos 17:30. ¿Cómo pue-de el arrepentimiento ser un regalo y un mandamiento de Dios tam-bién? El arrepentimiento es un re-galo, porque nuestro Dios nos lo ha dado por medio de la Biblia. Cuando Pablo escribió a la iglesia en Corintio, el le dijo: "Porque aunque os contristé con la carta, no me pesa, aunque entonces lo la-menté; porque veo que aquella carta, aunque por algún tiempo, os contristó. Ahora me gozo, no por-que hayáis sido contristados, sino porque fuisteis contristados para arrepentimiento; porque habéis sido contristados según Dios, para

cambio de la voluntad obstinada o terca la cual es la fuente (sede) de toda la rebelión y el pecado contra Dios. Cuando un hombre tiene mucha tristeza por sus pecados y somete su voluntad totalmente a la voluntad de Dios, él se ha arrepen-tido. Él dice, "No seguiré en el pecar y me someteré a mi Dios". Cuando uno cambia su modo de pensar sobre los pecados, entonces el resultado será un cambio de la vida.

¿Cómo se lleva a cabo el arrepenti-miento? Algunas piensan que es una operación directamente de Dios. Pero si es así, ¿por qué muy pocos se arrepienten? ¿Por qué no usa Dios su poder sobre todos los pecadores?

arrepentimiento; porque habéis sido contristados según Dios, para que ninguna pérdida padecieseis por nuestra parte" (2 Corintios 7:8,9; énfasis T. M.). Pablo motivó al arrepentimiento a la iglesia de Corinto por medio de la palabra de Dios --por medio de la carta inspi-rada. La tristeza de Dios viene por medio de la palabra de Él. El pesar divino conduce al arrepentimiento.

Ahora bien, hay, por lo menos, dos clases de predicación que motivan al arrepentimiento. Una clase es temor de Dios. Nuestro Salvador trató de motivar el arrepentimiento predicando sobre el día del juicio. En Mateo 11:20-24, Jesús predica-ba acerca del temor de Dios. Pode-mos leer sobre "el infierno" 12

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veces en el Nuevo Testamento y once de estas 12 veces fueron pre-dicados por Jesucristo. Jesús les advirtió a los hombres para que pudieran escapar de este lugar horrible. Cuando la gente tiene un corazón duro, hay que enseñarle sobre el sufrimiento eterno del in-fierno.

También Pablo, parado ante los filósofos y los intelectuales de Atenas, les llamó al arrepentimien-to (Hechos 17:30). Pablo usó moti-vación de temor. Dios juzgará al mundo "con justicia", todas las personas injustas serán condenadas y sólo las justas se salvarán. Tam-bién, cuando Pablo predicó a Félix, el gobernador, "de la justi-cia, del dominio propio y del juicio v e n i d e r o , F é l i x s e e s -pantó..." (Hechos 24:25a). La pala-

nidad de Dios nos guía al arrepen-timiento. Dice el apóstol Pablo: "¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longa-nimidad, ignorando que su benig-nidad te guía al arrepentimien-to?" (Romanos 2:4; énfasis T. M.). Cuando reflexionamos acerca de la benignidad y misericordia que Dios nos ha mostrado, ello debe motivarnos al arrepentimiento. Cuando algunas personas escuchan sobre el amor y misericordia de Dios, ellos desean cambiar de vi-da.

El juicio de Dios y la benignidad (bondad) de Él son dos formas para motivar al "arrepentimiento" --para producir el arrepentimiento. Cuando el pecador se hace el sordo al amor de Dios y al juicio de Él, no hay más esperanza para esta

v e n i d e r o , F é l i x s e e s -pantó..." (Hechos 24:25a). La pala-bra "espantar" significa "causar espanto; asustar; tener mucho mie-do". Después de la predicación de Pablo, Félix quedo asustado. Por tanto, la Biblia nos dice sobre una forma para motivar al arrepenti-miento. Podemos advertirles a los hombres y mujeres acerca de las consecuencias horribles de conti-nuar pecando. Cuando el pecador reflexiona sobre las consecuencias de sus pecados por algún tiempo, se va a arrepentir y dejar de pecar. El problema es que los pecadores no quieren pensar mucho acerca del infierno. Sin embargo, hay otra clase de enseñanza para motivar al arrepentimiento.

La Biblia nos enseña que la benig-

al amor de Dios y al juicio de Él, no hay más esperanza para esta persona.

¿Cómo viene el arrepentimiento? La Biblia nos dice que Dios nos da el arrepentimiento, pero, ¿cómo? El arrepentimiento viene por me-dio del evangelio de Cristo. Si queremos arrepentirnos, entonces tendremos que pensar mucho en las buenas cosas que Dios ha hecho para nosotros, y también en las consecuencias de nuestros pe-cados. Nuestro Creador quiere que nos arrepintamos (Lucas 13:1-5; 2 Pedro 3:8,9; Hechos 17:30). Todos los hombres y mujeres tenemos que arrepentirnos porque todos hemos pecado. Cuando una perso-na piensa que no peca, entonces no entiende bien la palabra de Dios.

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Si uno piensa que no ha pecado está equivocado grandemente. Ya que hemos pecado, tenemos que arrepentirnos. Nadie está excluidos de este mandamiento de Dios.

Conclusión:

Hemos visto que el arrepentimien-to no es tristeza por los pecados, ni es un cambio de vida. El arrepenti-miento es un cambio de la volun-tad obstinada hasta que se somete a la voluntad de Dios. Es una deci-sión de dejar las cosas del mundo y poner en práctica las cosas de Dios. Cuando uno peca, tiene que arrepentirse, o no puede tener vida eterna.

muertas", ella no se siente nada. Ella puede pensar que todo es nor-mal o puede sentir remordimiento. En este pequeño artículo, por favor considere la pregunta del apóstol Pablo: "¿Es apropiado que la mu-jer ore a Dios con la cabeza no cubierta?" (1 Co.11:13). Podemos expresar la pregunta así: ¿Es apro-piado o correcto en los ojos de Dios que una hermana le ore a Dios con la cabeza no cubierta?

¿Escucha Dios las oraciones de la hermana quien ha dejado a un lado la cubierta por cortarla o igualar las puntas? ¿Oye Dios la voz de la hermana que había removido la cubierta que Él le ha dado? La Escritura dice: "mientras que a la mujer le es honroso dejarse crecer el cabello? Porque le ha sido dado el cabello en lugar de velo" (1

¿Es apropiado que la mujer ore a Dios con

la cabeza no cubierta?

A menudo cuando una hermana se corta el cabello o las "puntas

el cabello? Porque le ha sido dado el cabello en lugar de velo" (1 Co.11:15). La idea del termino komao según Jose Thayer significa "dejarse crecer el cabello, tener pelo largo"

(Pág. 354). La forma que una her-mana puede tener pelo largo es por dejarse crecer el cabello. Por cor-tarse las puntas o todo el cabello, ella está removiendo su cubierta. Esta cubierta natural fue dada a ella por el Poderoso. El apóstol pregunta: "Juzgad por vosotros mismos: ¿Es apropiado que la mu-jer ore a Dios con la cabeza no cubierta?" (1 Co.11:13). Según el contexto, orar a Dios, la hermana tiene que llevar la cubierta dada por Dios, la que es su pelo no cor-tado (1 Co.11:15). Por atusarse o

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cortarse el cabello, la hermana in-terrumpe su vida de oración.

Ahora bien, preguntamos, ¿recibiría Dios la oración de una hermana quien deshonra su cabe-za , deshonra a la persona que tie-ne autoridad sobre ella? Pablo habla claro: "Pero toda mujer que ora o profetiza con la cabeza des-cubierta, afrenta su cabeza; porque lo mismo es que si se hubiese ra-pado" (1 Co.11:5). Hemos visto de 1 Corintios 11:15 que la cubier-ta de la hermana es su cabello no cortado; por eso, si ella se lo corta o atusa está deshonrando a su ca-beza. El apóstol le pregunta: ". . .¿Es propio que la mujer ore a Dios sin cubrirse la cabeza?" (1 Co.11:13). Esto, por su puesto, es una pregunta retórica la cual es contestada por el contexto. Ya que

bra. Él nos enseña que el pelo no cortado es dado en vez de un velo (1 Co.11:15).

Además a esto, Pablo dice: Por lo cual la mujer debe tener se-ñal de autoridad sobre su cabe-za, por causa de los ángeles" (1 Co.11:10). La palabra "deber" viene de una palabra en griego opheilo y José Thayer definió como así: "estar bajo obliga-ción, atado por deber o necesi-dad, hacer algo, es necesario para uno (Pág.469). Noten, por la definición de Thayer, él nos muestra que llevar la "señal de autoridad sobre su cabeza" es un deber, una necesidad o una obligación. Ella está bajo la obligación del decreto del cielo para llevar la señal de autoridad

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una pregunta retórica la cual es contestada por el contexto. Ya que el versículo cinco dice que por hacerlo, ella deshonra a su cabeza, entonces ¿cómo puede ser propio? ¿Escucha Dios las oraciones de una hermana que está deshonrando a su cabeza? ¿Acepta Dios la ora-ción de una hermana que rehúsa llevar la cubierta mientras está orando?

¿Escucha Dios la oración de un Cristiano que quiebra constante-mente los mandamientos de Él? Cuando una hermana se corta o se atusa el pelo, ella está violando el mandamiento que dice: "que se cubra" (1 Co.11:6b). Pablo, sa-biendo que es vergonzoso que una mujer se corte o se rape el cabello, le dio el mandamiento que se cu-

obligación. Ella está bajo la obligación del decreto del cielo para llevar la señal de autoridad sobre su cabeza. ¿Aceptaría Dios las oraciones de un cristia-no que abiertamente viola Su ley? Juan dijo: "Y cualquiera cosa que pidiéremos la recibire-mos de él, porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él" (1 Jn.3:22).

No es algo ligera cuando una hermana se atusa o se corta el cabello. Está interrumpiendo sus oraciones, violando el man-damiento de Dios y rehusando su cubierta dada por Dios. Her-manas, por favor mediten con

mucho tiempo y con bastante seriedad acerca de lo que están haciendo cuando permiten lugar a las tijeras en su cabello.

—Tony Melton

VIVIENDO EN EL ERROR

muy fácil caer en ellos. O sea que lo primero y lo segundo termina en una sola cosa: Vi-viendo en el pecado.

Muchas personas tuvieron pro-blemas con los profetas, con Jesús y con los que siguen a Jesús. Muchos, es decir, la ma-yoría de las personas que salie-ron de Egipto tuvieron grandes dificultades con Moisés, porque Moisés no se ponía de acuerdo con lo que ellos inventaban. Ellos estaban buscando una aprobación para sus errores.

Al profeta Jeremías lo maltrata-ron duramente porque no les aprobaba la mente reprobada que ellos tenían. Ellos deseaban que Jeremías les profetizara lo

EL ERROR Sin duda, para muchas perso-nas es algo duro reconocer sus errores. Cada una de estas per-sonas, cuando hace algo, quiere probar que los que ha hecho es lo correcto. También, buscan quién les apruebe. El hermano que les aprueba que lo que han hecho está bien, aunque esté mal; éste es un verdadero cris-tiano y querido por ellos.

Por otra parte, a muchas perso-nas se les hace muy fácil reco-nocer sus errores. Pero así co-mo les es muy fácil reconocer sus errores, así también les es

aprobaba la mente reprobada que ellos tenían. Ellos deseaban que Jeremías les profetizara lo que ellos querían. Ellos querían que Jeremías les dijera que su futuro era hermoso y de mucha paz, pero Jeremías les profetizó la voluntad de Dios. Les decía que tendrían guerra y que serían desolados por los babilonios (Jeremías 34:2,3).

Cuando mataron a Esteban, fue por-que él no les hablaba a su favor. Por-que les acusaba de los errores que cometían, y que cometieron al dar muerte a Jesús. Por el contrario, algu-nos reconocieron que estaban mal, que el evangelio era el poder de Dios para salvación y que Jesús verdaderamente era el Hijo de Dios. Pero no les aprovechó reconocer en lo que

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estaban errando, porque por te-mor no llegaron ni a la confe-sión del nombre del Hijo de Dios.

Conclusión:

Lo que llegamos a entender en todo esto es que tanto los unos como los otros, terminaron en la misma situación, viviendo en el pecado. Pero tenemos un ejemplo digno de imitar: éste es el de Saulo de Tarso. Él dice que creía con una conciencia limpia que hacía la voluntad de Dios cuando perseguía a los cristianos. Pero cuando se dio cuenta que lo que estaba haciendo era un error grande, cambió inmediatamente su mentalidad. Después él era per-

¡Así no se interpreta!

Se relata a historia e un bandido mexicano llamado José Rivera que hace más de cien años robó a algunos bancos y negocios al

haciendo era un error grande, cambió inmediatamente su mentalidad. Después él era per-seguido. Él mostró con hechos que se había alejado de su error (Hechos 26:9). Ojala que éstas pocas palabras nos ayuden a buscar nuestros errores y corre-girlos. —Adrián Torres

mexicano llamado José Rivera que hace más de cien años robó a algunos bancos y negocios al otro lado de la frontera en los Estados Unidos y entonces vol-vió a su país para buscar refu-gio. Los habitantes de los pue-blos norteamericanos contrata-ron a un pistolero con una repu-tación violenta para entrar en México y recuperar su dinero. Esté siguió el rastro del bandido a una cantina. entrando en la cantina, le dijo en inglés un hombre en el bar, “I’m looking for José Rivera ”, Busco a un tal José Rivera.) “There he is ” Allí está) le dijo el hombre,

señalando a un tipo que tomaba

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una siesta en un rincón de la cantina con un sombrero mexi-cano que le cubría los ojos.

El “gringo ” se acercó al dormi-do le dijo con voz autoritativa, “Are you José Rivera ” ¿Es us-ted José Rivera?) José Rivera se movió un poco, levantó lenta-mente su sombrero para mirar a quién se le dirigía en una forma tan brusca y murmuró, “No spe-ak English ” No hablo inglés [pero dicho con mala gramáti-ca ].) El norteamericano, enoja-do, pidió al encargado de la cantina que tradujera sus palabras José Rivera, I ’ve come from he United States to recover what you ’ve stolen ”

Este le dijo a José Rivera, “El

El traductor tradujo, “¡El Grin-go te dice que si no le dices hora mismo dónde está el dine-ro, que te va a matar! ” José Ri-vera dijo nerviosamente al tra-ductor, “Dile que salga de la cantina a la derecha que camine una milla encontrara un pozo con un árbol al lado. a lado del árbol hay algunas planchas y debajo de las planchas hay un hoyo donde está todo el dine-ro.”

El traductor se detuvo un momento y entonces dijo: “José Rivera says hat he doesn ’t care and to go head and shoot! (¡¡José Rivera dice que no le importa nada y que dispare!)

¡Los intereses personales del traductor se apoderaron el deseo para interpretar correctamente las palabras de José

recover what you ’ve stolen ”

Este le dijo a José Rivera, “El gringo a venido de los Estados Unidos para recuperar lo que has robado.”José Rivera, más despierto ahora, no quiso co-operar dijo a su traductor, “dile que no sé nada. ”

El traductor le dijo al norteame-ricano, José Rivera says that he doesn ’t know anything.”

Al oír esto, el agente sacó su pistola y la puso en a cabeza de José Rivera y dijo al traductor, Tell him that if he doesn ’t tell me right now where the money is, ’ll kill him! ”

¡Los intereses personales del traductor se apoderaron el deseo para interpretar correctamente las palabras de José Rivera!

Algunos son como el “traductor ” interpretar a palabra de Dios. dejan que sus intereses persona-les (sueldo, tradición, familia, etc.) enturbien su interpreta-ción. la verdad es que no quie-ren aceptar las palabras de Dios tales como son porque no les conviene.

Que Dios nos ayude amar la verdad más que nuestros inter-eses propios y así interpretar Sus palabras con el sentido más básico y sencillo.(Historia de “José Rivera ” de Ravi Zacharias )

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El Progreso, Yoro

Del 24 al 27 de junio se rea-lizó una campaña evangelís-tica. Gracias a Dios se contó con el apoyo de varios her-manos de Agua Blanca, Seis de Mayo, La Ideal y algunos predicadores. Quedaron con-tactos para darles seguimien-to, por lo que pedimos sus oraciones. También agrade-

cemos a las hermanas que nos prepararon los alimentos que Dios les bendiga.

Guatemala

Del 21 al 26 de Julio se es-tará realizando una campaña evangelística en Prados de Villa Hermosa. Se contara con la vista del hermano Tony Melton, varios predicadores y lideres de la región de Cen-troamérica. Deseamos que esta labor la incluyan en sus oraciones, para que podamos rescatar almas para Cristo.

Al

Azar

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Barrio Sierra Pina, segunda Calle una cuadra de pulpería “La Norteña” La Ceiba Atlántida Honduras C. A. TeL. 408-0367, 4060258 —FR