La Democracia No Ha Llegado Aún a La Economía

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Wilkinson: 'La democracia no ha llegado aún a la economía' Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/03/16/economia/1331908847. html Libertad, Igualdad, Fraternidad... La vieja trilogía no ha llegado aún al reino inexpugnable de las finanzas. Así se explica, por ejemplo, que un directivo gane 300 veces más que sus empleados. O que un banquero cobre 19 millones de euros al año en plena crisis. O que la nueva generación de trabajadores no llegue siquiera a los 1.000 euros al mes. Ése es el mensaje 'revolucionario' con el que llega estos días a España Richard Wilkinson, coautor junto a Kate Pickett del libro que ha sacudido las conciencias de los políticos en Gran Bretaña: 'Desigualdad: un análisis de la (in)felicidad colectiva'. "La democracia no ha llegado aún a la economía", sostiene Wilkinson. "La escala de la desigualdad económica que existe hoy en día no es una expresión de la libertad, sino más bien su negación. No podemos permitir que el sistema financiero lo manejen a su antojo unas elites, de espaldas a la población y al bien común". Habla Wilkinson de los asuntos económicos (el 22 de marzo lo hará en la Fundación Sistema) con una profundidad de campo que va mucho más allá del frío análisis de los números. "No soy economista", advierte. "Mi especialidad es la epidemiología social: me dedico a investigar la salud y la enfermedad en las poblaciones". El origen de todos los males

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democracia, Richard Wilkinson

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Wilkinson: 'La democracia no ha llegado an a la economa'

Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/03/16/economia/1331908847.html

Libertad, Igualdad, Fraternidad... La vieja triloga no ha llegado an al reino inexpugnable de las finanzas. As se explica, por ejemplo, que un directivo gane 300 veces ms que sus empleados. O que un banquero cobre 19 millones de euros al ao en plena crisis. O que la nueva generacin de trabajadores no llegue siquiera a los 1.000 euros al mes.

se es el mensaje 'revolucionario' con el que llega estos das a Espaa Richard Wilkinson, coautor junto a Kate Pickett del libro que ha sacudido las conciencias de los polticos en Gran Bretaa: 'Desigualdad: un anlisis de la (in)felicidad colectiva'.

"La democracia no ha llegado an a la economa", sostiene Wilkinson. "La escala de la desigualdad econmica que existe hoy en da no es una expresin de la libertad, sino ms bien su negacin. No podemos permitir que el sistema financiero lo manejen a su antojo unas elites, de espaldas a la poblacin y al bien comn".

Habla Wilkinson de los asuntos econmicos (el 22 de marzo lo har en la Fundacin Sistema) con una profundidad de campo que va mucho ms all del fro anlisis de los nmeros. "No soy economista", advierte. "Mi especialidad es la epidemiologa social: me dedico a investigar la salud y la enfermedad en las poblaciones".

El origen de todos los males

Por esa va, el coautor de 'The Spirit Level' (ttulo original en ingls) ha llegado al convencimiento de que la desigualdad es "la raz profunda de casi todos los grandes males que aquejan a nuestra sociedad". Las sociedades menos igualitarias son tambin menos saludables, tienen una menor esperanza de vida, unos mayores niveles de violencia, de adiccin, de gente en la crcel, de embarazos entre adolescentes.

Singapur, Estados Unidos, Gran Bretaa y Portugal encabezan el ranking de las sociedades menos igualitarias entre los 24 pases 'ricos' analizados por Wilkinson. Japn, Finlandia, Noruega y Suecia estn sin embargo en el otro extremo, con un reparto ms equitativo de la riqueza. Espaa hace el nmero 10, justo en medio, casi a la misma altura que Francia y Canad.

La crisis, sin embargo, est ensanchando preocupantemente la brecha entre los que tienen y los que no tienen en nuestro pas... "Cuando la economa sufre, los problemas se acumulan en el fondo de la poblacin", advierte Wilkinson. Los recortes sociales castigan a los menos favorecidos y las elites se protegen para mantener su estatus, porque de eso se trata."La desigualdad se alimenta de esta sociedad consumista en la que vivimos, que a veces parece una competicin constante por el estatus social. La desigualdad amplifica los prejuicios de clase, nos hace sentirnos superiores o inferiores. Se trata al fin y al cabo de una fuerza ms corrosiva que divide a la sociedad desde dentro".

El germen de una "democracia econmica"

Al frente del Equality Trust, Wilkinson abandera ahora el movimiento del "nuevo igualitarismo" en Gran Bretaa, donde los 'bonus' multimillonarios de los banqueros se han convertido en el titular de cada da. Despus de tres dcadas marcadas por 'la ideologa neoliberal', el autor de 'Desigualdad' asegura que el pndulo vuelve a oscilar hacia el lado de los que defienden una mayor justicia social. El movimiento 'Occupy', sostiene, no es ms que la primera manifestacin del clamor por una autntica "democracia econmica".

En el Reino Unido, sin ir ms lejos, funcionan ya en seis grandes ciudades las Comisiones de Equidad ('Fairness Commissions'), que elevan recomendaciones a los Gobiernos locales para reducir la desigualdad econmica. En Londres, la campaa por el 'living wage' (salario mnimo vital) insta a las empresas a que eleven hasta un 35% el listn del salario mnimo interprofesional y a que reduzcan la 'brecha' de la riqueza entre sus propios trabajadores.

"La economa tiene que hacerse ms participativa, y ustedes en Espaa han marcado la senda con el movimiento cooperativo en Mondragn", aade Wilkinson. "Los trabajadores deben tener ms acceso a la propiedad y a la toma de decisiones en las empresas. Tenemos que experimentar con nuevos modelos que nos impliquen a todos. No podemos delegar en una elite que mira slo por sus propios intereses y que nos ha llevado a esta situacin".

Informacin y educacin

Wilkinson pone sobre la mesa el estudio del economista Robert Wade, que ha demostrado que en los aos anteriores a la debacle de 2008 hubo una "transferencia" de riqueza de 1,5 billones de dlares anuales del 90% al 10% de la poblacin ms rica en Estados Unidos... "Es increble que algo as pueda ocurrir en una democracia, no le parece? Y es increble que hayamos tenido que esperar a la debacle para enterarnos. Est claro que necesitamos ms informacin y ms educacin para entender la magnitud del problema".A Wilkinson y a Pickett les han llovido crticas por esa otra "verdad incmoda" de la que pocos hablaban antes de 2008. Les acusan de seleccionar aleatoriamente los datos, de adaptarlos al servicio de una "agenda" poltica, de no desmostrar la relacin causa-efecto... Los autores se remiten a las estadsticas y responden alegando que los ataques provienen sobre todo de los 'think tanks' de la derecha, usando la misma estrategia que siguieron contra el cambio climtico. O sea, sembrando la confusin y la duda.

"Pero cuando a la gente le das a elegir, se inclina instintivamente por la igualdad", concluye Wilkinson, que recuerda los resultados de una reveladora encuesta al otro lado del Atlntico... "A los norteamericanos se le dio a escoger entre dos pases. En uno de ellos, el 20% de la poblacin acumula el 84% de la riqueza. En el otro, el 20% tiene el 32% del total. Al final, ms del 90% mostr su preferencia por el segundo pas, sin saber que estaban eligiendo Suecia antes que Estados Unidos".