La era del imperialismo

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La era del Imperialismo

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La era del Imperialismo

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La Revolución Industrial aumentó la producción de todo tipo de manufacturas. Pero para seguir aumentando la

producción, era necesario contar con abundantes materias primas.

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Movidos por ánimo de lucro propio del capitalismo, causa y, a la vez, consecuencia de la Revolución Industrial, los

países más industrializados se lanzaron a la conquista de

países suministradores de materias primas.

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Además, los países colonizados eran obligados a comprar

a la metrópoli los productos que ésta manufacturaba.

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Por tanto, las principales causas del imperialismo fueron

económicas, pero no fueron las únicas.

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Las grandes potencias no sólo querían poder económico, sino también poder político: cuanto mayor fuera su imperio,

más poderosa era su nación.

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Además les venía muy bien conquistar nuevas tierras para mandar allí a los excedentes de población, pues ésta había

crecido como nunca antes en la Historia.

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A lo largo del siglo XIX se irá completando el proceso de exploración del planeta iniciado en el siglo XV. Muestra de ello fue el fomento de estudios geográficos, geofísicos y

geológicos.

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Por último, hubo también razones religiosas, para evangelizar a todos los pueblos “paganos”, e ideológicas

en general: la superioridad de la raza blanca había de imponerse en el mundo.

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La primera potencia en crear un imperio colonial fue Gran Bretaña.

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Desde el siglo XVIII comenzó a forjarse este imperio que,

como veis, abarca los 5 continentes, pero cuando más creció fue en la época de la reina Victoria, entre 1837 y

1901.

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El resultado fue éste: prácticamente el mundo entero estaba en manos de unos cuantos países europeos.