La Formación Experiencial de Los Psicoterapeutas Una Necesidad de Hoy

18
“LA FORMACION EXPERIENCIAL DE LOS PSICOTERAPEUTAS: NECESIDAD DE HOY i Alejandro Celis H. RESUMEN Se expone un análisis del método experiencial de aprendizaje como alternativa en que -se propone- debería centrarse el entrenamiento de psicólogos y psicoterapeutas. Se discuten los defectos que poseen los métodos más centrados en el intelecto, y las formas en que la alternativa propuesta podría superar estos defectos y producir resultados más satisfactorios e integradores para el aprendiz. Se exponen definiciones del método, ejemplos de técnicas utilizadas en ese contexto y su aplicación en un seminario de entrenamiento. Se concluye con una visión del psicólogo-psicoterapeuta propuesto, producto del metodo formativo que se sugiere. ABSTRACT This paper exposes an analysis of the experiential method of learning as a proposed alternative of main guideline for training psychologists and psychotherapists. Imperfections amnd defects of intellectually-centered metods are discussed, and the ways in which the proposed alternative would overcome these defects and produce more satisfying and integrative results for the apprentice. Definitions of the method, examples of techniques used within that context and on a training seminar are exposed. i Ponencia presentada en el X Congreso de Psicología Clínica (La Persona del Terapeuta), Santiago, Octubre 1992. Publicado como artículo en Terapia Psicológica 17/18, (1992). Sociedad Chilena de Psicología Clínica, Santiago de Chile.

description

Articulo del psicoterapeuta Transpersonal Alejandro Celis

Transcript of La Formación Experiencial de Los Psicoterapeutas Una Necesidad de Hoy

-2

LA FORMACION EXPERIENCIAL

DE LOS PSICOTERAPEUTAS:

NECESIDAD DE HOY Alejandro Celis H.

RESUMEN

Se expone un anlisis del mtodo experiencial de aprendizaje como alternativa en que -se propone- debera centrarse el entrenamiento de psiclogos y psicoterapeutas. Se discuten los defectos que poseen los mtodos ms centrados en el intelecto, y las formas en que la alternativa propuesta podra superar estos defectos y producir resultados ms satisfactorios e integradores para el aprendiz. Se exponen definiciones del mtodo, ejemplos de tcnicas utilizadas en ese contexto y su aplicacin en un seminario de entrenamiento.

Se concluye con una visin del psiclogo-psicoterapeuta propuesto, producto del metodo formativo que se sugiere.

ABSTRACTThis paper exposes an analysis of the experiential method of learning as a proposed alternative of main guideline for training psychologists and psychotherapists. Imperfections amnd defects of intellectually-centered metods are discussed, and the ways in which the proposed alternative would overcome these defects and produce more satisfying and integrative results for the apprentice. Definitions of the method, examples of techniques used within that context and on a training seminar are exposed.

The article ends with a vision of the psychologist/psychotherapist suggested, formed through the proposed method.

INTRODUCCIN

Antes que nada, quisiera explicitar lo que me motiva a escribir sobre este tema. Si bien tuve la suerte de estudiar Psicologa en la Universidad de Chile en un tiempo privilegiado en muchos aspectos relativos a la docencia, no tengo la sensacin de que lo aprendido en clases haya sido para m lo que Carl Rogers llama aprendizaje significativo: es decir, un aprendizaje que haya tenido importancia para mi ser completo. Ms bien, aprend lo que s de m mismo, de los dems y de una psicologa "de la vida real" en instancias indirectamente relacionadas con la carrera: personas que conoc en la Escuela, actividades que ocurran paralelamente o en otros mbitos que busqu por mi cuenta. Y entre otras cosas, en esas otras instancias descubr que no me era posible entender o captar lo que le ocurre a otra persona si no tengo un verdadero auto-conocimiento.En la carrera aprend a discriminar qu es charlatanera, qu es "serio" desde el punto de vista cientfico, y qu tiene atingencia concreta y profunda con lo que yo como persona y profesional puedo valorar en forma ms significativa. Desgraciadamente, y como ya dije antes, fue muy poco de esto ltimo lo que aprend en la carrera. Como he podido comprobar con el tiempo, este defecto -que para muchas otras personas puede no ser tal- no es privativo de ese tiempo y de esa Escuela de Psicologa.

En este artculo, quisiera explorar, muy modestamente y desde mi particular punto de vista, las caractersticas y efectos de la enseanza a que somos sometidos desde el Jardn Infantil hasta los Cursos de Post-Grado; sugerir una definicin de lo que es el "trabajo experiencial", exponiendo a continuacin la importancia y efectos esperables al trabajar de este modo, en forma combinada con los mtodos cognitivo-intelectuales.

CARACTERSTICAS DE LA ENSEANZA ACTUAL Y SUS EFECTOS

En nuestra sociedad Occidental nos hallamos sometidos, desde la escuela primaria, bsicamente a un solo tipo de mtodo de enseanza-aprendizaje. Si bien es cierto que hay ciertos aspectos de ste que nos resultan prcticos y ventajosos en muchos sentidos, destacaremos aqu algunos de sus inconvenientes o caractersticas negativas. Estos son los siguientes:

* no est dirigido al ser completo de la persona, sino casi exclusivamente a su aspecto intelectual;

* en general, no nos lleva a encontrarnos en forma directa con la realidad que estamos estudiando, sino que a abstraernos de ella mediante la elaboracin y asimilacin de lo que llamamos "conceptos". Una vez asimilados dichos "conceptos", comenzamos a relacionarnos con ellos y no con la realidad. En este proceso, generalmente nos desconectamos de cualquier sentimiento que se halle presente;

* dada esta caracterstica de nuestro intelecto, habitualmente se produce una escisin de magnitud variable entre lo que "sabemos" o "decimos" a nivel intelectual y lo que efectivamente "conocemos" en forma directa o "hacemos" en realidad -segn Tolstoi, es ms fcil producir diez volmenes de obras filosficas que poner en prctica un principio-;

* es as que alguien puede creer de buena fe que efectivamente sabe todo lo referente a un tema o aspecto de la realidad sin haber tenido jams acceso directo a ste. Igualmente, esta persona podra expresar una conviccin personal en forma muy vehemente y en la prctica actuar en un sentido opuesto, sin tener consciencia de esta contradiccin.

Este tipo de entrenamiento -cuando es el nico o el predominante, como muchas veces es el caso-, produce como consecuencias negativas el que la persona tenga dificultades para contactarse con sus "otras realidades": su cuerpo, sus emociones, su espiritualidad. A su vez, la desconexin de estas realidades genera ciertos estados que, si bien ya nos resultan "habituales", representan un funcionamiento alterado, lejano de nuestras posibilidades naturales: stress, confusin respecto a lo que sentimos, prdida del sentido de nuestra existencia. En el Cuadro N1 se comparan las diferentes situaciones en las que nos encontramos segn si asumimos una actitud de "Expansin" o de "Contraccin", concepto que encontr por primera vez en el autor Thaddeus Golas (1980), y que se asemeja, desde el punto de vista psicolgico, a la polaridad fisiolgica inhalacin-exhalacin o distole-sstole. Este cuadro es una derivacin de lo expuesto por l.

Los patrones sociales aprendidos se caracterizan por ensearnos actitudes fbicas ("contradas") de evitacin respecto de nuestras emociones y sensibilidad y de las situaciones que las detonan, y entregarnos una concepcin estrecha respecto a nuestras potencialidades. Los efectos de esta actitud de evitacin son, a grandes rasgos, (a) comnmente, las personas no logran distinguir con claridad lo que sienten; (b) ya sea que tengan una nocin relativamente clara o vaga de lo que sienten, no logran aceptarlo, y (c) no lo comunican con facilidad, ni an a sus ms ntimos, dando lugar a relaciones interpersonales poco profundas y carentes de un verdadero y satisfactorio contacto e intimidad. Esta situacin tiende a mantenerse en el tiempo, pues el actuar en forma ajena a los patrones aceptados es, como sabemos, castigado socialmente.

En lo relativo al tema de nuestro potencial, nos hallamos en una poca en que nos hemos visto bombardeados por informacin relativa a hechos en que la concepcin que nuestra sociedad occidental tiene de las capacidades y posibilidades del ser humano han sido constantemente desafiadas. Lamentablemente, sigue alto el porcentaje de personas que, an con datos de investigaciones cientficas corroborativas en la mano, seguirn dudando de la veracidad de estos hechos. En este X Congreso de Psicologa Clnica he presentado una serie de diapositivas que muestran personas caminando descalzas sobre un lecho de brasas ardiendo, experiencia de la que salieron inclumes, sin mediar un estado de trance hipntico o producido por agentes qumicos. A mi entender, despus de haber participado yo mismo en una de estas experiencias -haba otros tres colegas en la misma ocasin-, lo que evita tanto el dolor como el dao fsico es un estado expandido de consciencia (Heckel, T.,1992; Celis, A., 1992).

CUADRO N 1: Correlatos de la dimensin Expansin/Contraccin

EXPANSIONCONTRACCION

RELAJACION MUSCULARTENSION MUSCULAR

APERTURA, VULNERABILIDADTEMORES, HIPERREACTIVIDAD

DISPOSICION A CORRER RIESGOSBUSQUEDA COMPULSIVA DE "SEGURIDAD"

ACEPTACION, ACTITUD DE NO OPOSICIONRECHAZO, CIERRE

ACEPTACION DE LAS DIFERENTESFANATISMO, DOGMAS

POSICIONES PERSONALES

HUMOR, DIVERSION EN LO QUE SE HACESERIEDAD Y SOLEMNIDAD

CONSCIENCIACODIGOS MORALES

ALTOS NIVELES DE CONSCIENCIABAJOS NIVELES DE CONSCIENCIA

IDENTIFICACION CON UNIDENTIFICACION CON UN

CONCEPTO DE SI MISMOCONCEPTO DE SI MISMO

AMPLIO Y FLEXIBLEESTRECHO Y RIGIDO

Nuestra enseanza no se caracteriza por inclur este tipo de hechos en la concepcin que se nos transmite de nuestras capacidades, lo que por supuesto genera las limitaciones auto-impuestas que son de esperar.

NUESTRA FORMACIN DE PSICLOGOSHace poco asist a un Examen de Grado de una alumna de Psicologa, y en esa ocasin dijo: "En la Universidad estamos en el mundo terico, no en el concreto; estamos soando acerca de cmo deberan ser las cosas". Esto me interpret totalmente. Pienso que la actual forma en que se estudia psicologa o que nos formamos en cursos de Post-grado requiere de urgentes cambios: estamos formando Profesores de Psicologa -personas con alto manejo de datos y conceptos-, repetidores y no creadores de informacin, y no personas capaces de tener un real encuentro teraputico y transformador con otras personas. Si bien los puntos de vista que tratar a continuacin son obviedades para una importante cantidad de colegas, siento la necesidad de tratarlos debido a que el acuerdo entre nosotros respecto a estos temas es an muy insuficiente.

A pesar de ser los llamados a ayudar a otras personas, los psiclogos no escapamos a la deformacin general de la enseanza descrita anteriormente. Nuestro currculum de formacin est lleno de informacin -cuando no de deformacin- y muy escaso de formacin. Y qu es la formacin? Ayudar a la persona a conocerse a s misma, a no temerle a sus emociones, a su sexualidad y a sus complejos estados internos, a saber reconocer qu siente, a saber desarrollarse y evolucionar. Las Escuelas de Psicologa no nos ensean a confiar en nuestras percepciones internas (nuestras claves, nuestra intuicin) y no nos ensean a ser congruentes con nosotros mismos. El instrumento analtico y la capacidad de memorizacin son presentados como los nicos instrumentos confiables.

Existen temas tabes en nuestra sociedad, y a esta influencia no escapamos los psiclogos: el sexo, el dinero, la religin y las drogas son reas en las que existe una gran cantidad de ignorancia. Los tabes a este respecto se han repetido de generacin en generacin por siglos, y nuestros contemporneos se limitan, en gran medida, a repetir los temores sin cuestionar su naturaleza, origen o veracidad. Los prejuicios raciales y conflictos de tipo religioso gozan de buena salud en el mundo actual; y, si bien eso no es demasiado visible en nuestro pas -por la escasa diversidad racial o religiosa, y no por encontrarnos ajenos al fenmeno-, la desconfianza y agresividad frente a extranjeros o a exponentes de otras creencias surgen a la menor provocacin.

De otro alumno -egresado- recog la siguiente frase: "A poco andar me di cuenta de que la Escuela no iba a atender mis intereses (profesionales) ms personales, as que busqu eso en otra parte". Para muchos colegas cercanos a la actividad docente, resulta absolutamente claro que la actual formacin inhibe la creatividad y espontaneidad innata que existe en las personas, y las llena de inseguridades respecto a s mismas. Un estudio (Morales, M. et al, 1988) realizado en base a la opinin de colegas y estudiantes de Psicologa respecto a nuestra formacin, otorga una de las evaluaciones ms bajas al tem "Formacin orientada al desarrollo personal". Otros puntos muy deficitarios son la "Integracin de Conocimientos" y "Formacin tica", aspectos que, a mi entender, tambin son fortalecidos por una formacin experiencial y de desarrollo personal bien planificada. En lo relativo a la formacin tica, cito una frase -expresada en este mismo Congreso- por el colega Carl Goldberg, con la cual concuerdo enteramente: "Slo aquellos que temen conocerse a s mismos son capaces de hacer el mal".

En mi opinin, uno de los grupos de potenciales colegas ms promisorios no encuentran en los estudios de la carrera lo que deseaban hallar. Estos legtimos intereses se frustran, llevando a estas personas a abandonar la carrera o a sobrellevar siete aos de estudios que no les motivan con el solo propsito de obtener al final la autorizacin de ejercer la Psicologa en la forma que realmente desean. A mi entender, las Universidades se ven enfrentadas actualmente al gran desafo de satisfacer las expectativas de esta importante proporcin de estudiantes. Es difcil imaginar, en el cambiante mundo de hoy, las consecuencias de no enfrentar este desafo con xito.

QU ES LA METODOLOGA EXPERIENCIAL?

Cuando hablamos de "formacin experiencial", existe una gran diversidad de comprensiones. He estado en grupos de colegas para los que "desarrollo personal" equivale a ensearles a los alumnos el Cdigo de Etica o normas de conducta deseables. Tambin son muy extendidos los temores irracionales respecto a lo que ocurre en terapias de grupo y, en general, con tcnicas de trabajo personal que sobrepasen la mera conversacin entre terapeuta y cliente. He odo a colegas expresar temores sobre las posibles consecuencias de aplicar una tcnica experiencial muy bsica, como la imaginera.

Hace aos, al colaborar en la realizacin de una Tesis de Grado que utilizaba la tcnica fsica del Rebirthing, (Aranela, E. y Silva, M., 1986) que implica bsicamente una hiperventilacin, descubrimos que la actitud dominante en el mbito mdico era de extrema desconfianza frente a la tcnica, considerndola sumamente peligrosa. En diez aos de observar y/o dirigir sesiones con la tcnica, no he visto ni una sola ocasin en que dicho temor se justifique.

Es as que me he encontrado con este tipo de prejuicio en forma bastante extendida, dado mi inters por el trabajo teraputico humanista y transpersonal en profundidad. Y es claro que si una tcnica o la dimensin a que sta apunta no se conoce, nos producir desconfianza y temor aplicarla o experimentarla, tanto temor como a individuos de algunas culturas les produce que les tomen fotografas.

Considero que, en gran medida, dichos prejuicios se deben a una extendida ignorancia respecto a nuestro propio mundo interno. Como ya vimos, la educacin tradicional no favorece este conocimiento: nos centra en ideas de tipo intelectual, nos habla de experiencias, opiniones y actos de otras personas. No se nos ensea a pensar y sentir por nosotros mismos. No se nos ensea a ser individuos autnomos, con pensamiento independiente.

Este tipo de ejercicio no pertenece en exclusiva a una determinada lnea terica, si bien yo me baso preferentemente en ejercicios de tipo humanista o transpersonal. Igualmente experiencial puede ser un ejercicio conductual de thought stopping o de entrenamiento en asertividad, o una imaginera dirigida de tipo Junguiano.

Como su nombre lo indica, el mtodo experiencial va dirigido a la experiencia subjetiva de la persona a quien se le aplica. No se intenta que sta asimile conceptos, sino que experimente en s misma -con diversos fines- ciertos estados internos a travs de un ejercicio, experiencia o situacin. Muchos de estos ejercicios han sido probados -con leves variaciones- por miles de personas a travs del mundo, lo que permite conocer con cierta seguridad el margen de posibles efectos que se producirn en los diversos individuos, as como el tipo de persona que presenta contraindicaciones para someterse a algn tipo de tcnica.

Por ejemplo, existen ejercicios de tipo respiratorio -como el Rebirthing- de los que se excluye a personas que sufran de problemas cardacos, de epilepsia o asma. Sin embargo, por lo general los ejercicios experienciales no representan ningn tipo de contraindicacin, a pesar de que s pueden detonar experiencias emocionales de cierta intensidad, sorprendentes o inesperadas para quien se ha desconectado o inhibido sus emociones en forma sistemtica. Existe gran cantidad de ejercicios ya pautados de dinmica grupal, de trabajo corporal (de relajacin, respiracin u otros) y otros, como visualizacin, imaginera, sensibilizacin a las emociones, etctera.

El mtodo experiencial pretende, entonces, que la persona se familiarice con sus propias vivencias. No se trata de estudiar fenmenos humanos "en abstracto" sino en carne propia: no se trata de leer en un libro qu les ocurri a una muestra de 50 personas que fueron sometidas a este ejercicio, ni se trata de observar a alguien realizar el ejercicio a travs del espejo de visin unilateral: de lo que se trata es que uno mismo lo hace.

La eleccin del ejercicio depender del objetivo que se desee lograr. Por ejemplo, que nos haga percibir qu estamos sintiendo en este momento a nivel emocional-afectivo; que nos haga sentir nuestras tensiones fsicas; que nos haga contactarnos en la prctica con una nueva forma de percibir nuestro entorno o de contactarnos con otra persona; que nos haga contactarnos con aspectos hasta ahora desconocidos de nuestro mundo interno.

Debemos favorecer, en el psiclogo y especialmente en el psicoterapeuta, una formacin que le permita adaptarse a la cultura en que vive pero trascenderla; no ser un sujeto pasivo del momento o del lugar en que le toc vivir, sino ser capaz de cuestionar dicha cultura, no en un afn de rebelda intil, sino en busca de formas superiores de existencia humana.

Esto resulta especialmente necesario en estos tiempos, en los que un mundo en rpido cambio no nos permite recurrir a respuestas pre-establecidas. Se hace cada vez ms necesario ser capaces de responder con creatividad e intuicin a situaciones que difieren de todo lo que hemos conocido previamente.

Si bien podemos definir o delimitar lo que es socialmente deseable o adaptativo en una sociedad, esto no debe estar regido por la repeticin automtica de pautas heredadas de generaciones anteriores. No debemos dejar que una creencia de tipo dogmtico nuble nuestro juicio respecto a las condiciones en que deseamos vivir: ejemplo de esto es la actual polmica respecto a la institucin del divorcio.

APLICACION DEL METODO EXPERIENCIAL EN UN SEMINARIO-TALLER DE LIDERAZGO

Se explica a continuacin y, a modo de ejemplo, la utilizacin de dicho mtodo en un Taller destinado a entrenar personas en habilidades de Liderazgo. En ese Taller se expuso la nocin de lder como una persona que, entre otras caractersticas, (a) se conoce a s mismo, (b) tiene una visin u objetivo claro y (c) comunica y concreta su visin con entusiasmo. Considero esto especialmente atingente dado que, a mi entender, el psicoterapeuta debe ser un cierto tipo de lder.

Es as que en un Seminario-Taller destinado a potenciar Lderes, se plante como uno de nuestros objetivos el generar para los participantes instancias de auto-conocimiento, de replanteamiento o clarificacin de sus metas y objetivos y, finalmente, de reconexin o de reforzamiento de la conexin con la fuente de su propio entusiasmo respecto a sus intereses vitales.

Se utilizaron, entre otras, tcnicas (a) de Dinmica de Grupo -con diferentes propsitos-, (b) de Relajacin Fsica, y (c) de Imaginera. Haremos referencia brevemente a esta ltima.

La Tcnica de la Imaginera

Esta tcnica utiliza intencionadamente un recurso que nos es natural: el representarnos en nuestra mente una situacin que no est fsicamente presente en nuestra realidad inmediata y actual. Utilizamos esta capacidad en la vida cotidiana cuando, por ejemplo, nos ensoamos recordando las vacaciones del verano pasado, cuando nos anticipamos a una situacin futura imaginando cmo se desarrollar, cuando entablamos un dilogo mental con alguien que no est en este momento con nosotros, cuando imaginamos la concrecin de una meta largamente anhelada.

Es importante destacar que al imaginar estamos utilizando preferentemente nuestro hemisferio cerebral derecho, cuyo lenguaje y funcionamiento se caracteriza por ser analgico e intuitivo, por captar la realidad en "totalidades". A diferencia de ste, el hemisferio izquierdo se caracteriza por funcionar en forma lgica y racional, aprehendiendo la realidad por "parcialidades". Dado que ambos hemisferios son importantes para nuestro funcionamiento en forma equilibrada y total; y que, tal como sealbamos anteriormente, nos hallamos entrenados para funcionar en forma lgica y racional, es fcil deducir que la utilizacin preferente del hemisferio derecho tiende a producir un equilibrio en nuestro funcionamiento, capacitndonos para aprehender la realidad en forma ms globalizada.

La imaginera consiste, entonces, en proporcionar una secuencia de estmulos -generalmente verbales- destinado a que la persona o grupo de personas evoque ciertas imgenes con un fin predeterminado. Estos fines pueden variar ampliamente; si, por ejemplo, deseamos potenciar las caractersticas que atribumos al lder en la pgina anterior, a saber:

I.- que se conoce a s mismo, podemos utilizarlas, por ejemplo, para:

(a) producir un estado de quietud o serenidad interior,

(b) relajar el cuerpo o llevar a cabo un programa de auto- sanacin fsica,

(c) re-experimentar una situacin ya vivida,

(d) contactar a la persona con aspectos desconocidos de s mismo,

(e) contactar a la persona con la emocin que le produjo un evento determinado.

II.- que tiene una visin u objetivo claro, deberemos en primer lugar priorizar las anteriores, pues una persona que no se conoce a s misma no tiene claridad en sus objetivos. Luego, podremos utilizar imgenes para que la persona:

(a) re-defina prioridades,

(b) visualice la concrecin de posibles objetivos y

(c) anticipe y planifique cursos de accin para alcanzarlos.

III.- que logra comunicar e implementar su visin con entusiasmo. En este caso,

las imgenes pueden apuntar a:

(a) reconectarse con la fuente de su entusiasmo y/o con los hechos biogrficos que

alejaron a la persona de sta;

(b) empatizar con las motivaciones de su grupo de trabajo;

(c) ensayar formas efectivas de comunicacin.

Como puede observarse en estos ejemplos, esta tcnica presenta las siguientes ventajas:

(a) permite trabajar con una representacin mental en ausencia del estmulo concreto u original;

(b) permite descubrir y eventualmente modificar aspectos de la representacin que la persona establece de una situacin determinada;

(c) permite visualizar la posibilidad real de que un evento previamente considerado como imposible o improbable efectivamente ocurra en la realidad.

IMPORTANCIA DE LA UTILIZACIN DEL MTODO EXPERIENCIAL EN NUESTRA FORMACIN

Deseo sealar aqu el tipo de psiclogo-psicoterapeuta que deseara ver egresar de nuestras Universidades, caractersticas que estimo podran ser favorecidas en alto grado por el tipo de formacin que propongo:

(1) El psicoterapeuta debe ser, para su cliente, una persona que tenga las dificultades neurticas -consecuencia de nuestra educacin- superadas al menos en cierto grado, de modo de constitur un modelo atractivo;

(2) Poseer cierta claridad y familiaridad respecto a su propio mundo y dinmica interna. Esto es importante por dos motivos: en primer lugar, y como ya dije, creo que ste es uno de los requisitos bsicos para tener la capacidad de realmente empatizar con otra persona y aceptarla; y en segundo lugar, -y remitmonos a nuestra propia experiencia personal- el sentir que alguien nos ve tal como somos y nos acepta as tiene un profundo efecto teraputico;(3) Haber contrarrestado en s mismo las actitudes fbicas de evitacin respecto de nuestras emociones y sensibilidad y de las situaciones que las detonan. Haber aprendido a no evitar la experiencia y a no buscar compulsivamente la seguridad, viviendo lo que la vida trae como enseanzas cotidianas;

(4) Poseer al menos una concepcin flexible respecto a nuestras potencialidades y favorecer el autodescubrimiento del otro, an si ste supera lo que imaginamos como posible;

(5) Haber equilibrado en s mismo -o estar en proceso de lograrlo- sus aspectos Masculino y Femenino (o Activo y Receptivo); la mujer terapeuta no debe imitar lo que hace un hombre, pues tiene cualidades especficas e innatas que resultan centrales en la terapia;

(6) Haber equilibrado raciocinio e intuicin: abrirse al "no s", a lo nuevo, a lo desconocido. No temerle a la propia intuicin ni desconfiar de ella: el temor nos limita y nos hace buscar "autoridades" externas. Un entrenamiento meramente informativo nos convierte en estaciones repetidoras de opiniones ajenas, no en generadores de nueva informacin o cambio;

(7) Haber desarrollado una actitud responsable y asertiva con las propias preferencias y percepciones: haber aprendido a escucharse a s mismo y a los dems;

(8) Haberse hecho ajeno a cualquier chauvinismo o fanatismo, religioso o de cualquier otra ndole. Haber desarrollado el sentido del humor, que evita la exagerada rigidez;

(9) En el sexo, -como necesidad imperiosa e ineludible, y como fuente de expresin y crecimiento entre las personas- tener un enfoque cientfico, y no determinado por alguna religin.

En los cuadros 2 y 3, comparo los efectos que sugiero tienen, tanto para el terapeuta como para la terapia, el grado en que el terapeuta se conoce a s mismo.

CUADRO N2: Efectos del auto conocimiento del terapeuta en su propio desempeo en la terapia

ESCASO CONOCIMIENTO DE SI MISMOALTO CONOCIMIENTO DE SI MISMO

BASO MI CONDUCTA EN LABASO MI CONDUCTA EN MI

REPETICION DE IDEAS AJENASEXPERIENCIA VIVIDA Y EN MI INTUICION

REPETICION AUTOMATICA DECONDUCTA CONSCIENTE

PAUTAS DE CONDUCTA APRENDIDAS

ESTEREOTIPOS RIGIDOS DE CONDUCTARESPUESTA APROPIADA A LA SITUACION

PERCEPCION ESTRECHA, SELECTIVAVEO INCLUSO LO QUE "NO QUISIERA" VER

ESTILO EVITATIVO, FOBICOAPERTURA A LA EXPERIENCIA

BUSQUEDA DE APROBACION SOCIALBUSQUEDA DE CONGRUENCIA INTERNA

DIVISION Y DIALOGO MAYOR PAZ INTERIOR,

INTERNOSRECONCILIACION DE "OPUESTOS"

EVITACION DE SENTIMIENTOS E IMPULSOSGUSTO POR LA AUTO-EXPLORACION

TEMIDOS: PATOLOGIAS Y PERVERSIONESINTERNA Y EXPERIMENTACION EXTERNA

NARCICISMO,VERDADERA HUMILDAD:

EGOCENTRISMOCONSCIENCIA DE LA PROPIA VALIA

OMNIPOTENCIA, ENDIOSAMIENTOCONSCIENCIA DE REALES CAPACIDADES Y

DEL ROLRESPONSABILIDAD EN EL CAMBIO DEL

CLIENTE

CUADRO N3: Efectos del auto-conocimiento del terapeuta para la relacin teraputica

ESCASO CONOCIMIENTO DE SI MISMOALTO CONOCIMIENTO DE SI MISMO

PREJUICIOS, ETIQUETASESFUERZO POR CAPTAR LA VIVENCIA DEL OTRO

DISTANCIAMIENTO: EL CLIENTEALTA EMPATIA

ES TRATADO COMO OBJETO

RESPONSABILIZO AL CLIENTE PORME RESPONSABILIZO POR LO

MIS SENTIMIENTOS POCO GRATOSQUE SIENTO EN LA TERAPIA

ENJUICIOACEPTO

ME "CONTRAIGO" CON ALGUNOSPUEDO ACEPTAR LAS

CONTENIDOS Y CONDUCTAS DEL CLIENTEVIVENCIAS DEL OTRO

ME REFUGIO EN TECNICAS Y ENCONFIO EN MI CAPACIDAD DE RESPONDER

CONOCIMIENTOS TEORICOSAPROPIADAMENTE A CADA SITUACION

ME ESFUERZO POR CONTROLARESTOY ABIERTO A LA VERDAD Y A LA

TODAS LAS VARIABLESSINCRONICIDAD EN LA SITUACION

TENSION Y FALTA DE CONFIANZA:CONFIANZA EN EL CURSO

"EMPUJANDO EL RIO"NATURAL DEL PROCESO

CONSTITUYO UN MODELO NEGATIVOCONSTITUYO UN MODELO POSITIVO Y

PARA EL CLIENTEATRACTIVO PARA EL

CONCLUSINA travs de todo lo anterior, espero haber contribudo a crear consciencia y a aunar esfuerzos para modificar nuestra formacin profesional. Si las Universidades no recogen este desafo a tiempo, tendrn que ser los Institutos privados quienes lo hagan. Lamentablemente, esto duplicara para los interesados el esfuerzo que debern invertir en energas, tiempo y dinero para formarse como psiclogos hoy en da en Chile.

Referencias Bibliogrficas:

Aranela, E. y Silva, M. (1986) Respiracin Consciente. Estudio exploratorio de la aplicacin de una tcnica respiratoria sobre una muestra de eleccin razonada. Tesis de Grado para optar al ttulo de Psiclogo. Depto de Psicologa de la U. de Chile.

Celis, A. (1992) Fuego puro: testimonio de una ceremonia purificadora. Revista Uno Mismo N 34, Octubre 92, Santiago.

Golas, T. (1980) Manual de Iluminacin para Holgazanes. Cuatro Vientos Editorial, Santiago.

Heckel, T. (1992) Caminar sobre el fuego: una forma de cruzar la barrera del escepticismo y el miedo. Revista Uno Mismo, N 25, Enero 92, Santiago.Morales, M., Sziklai, G., Diaz, R., Scharager, J. (1988) La formacin profesional de los Psiclogos en Chile: anlisis de la opinin de psiclogos y estudiantes de la carrera. Revista Chilena de Psicologa, vol.IX, N1, Abril.

Ponencia presentada en el X Congreso de Psicologa Clnica (La Persona del Terapeuta), Santiago, Octubre 1992. Publicado como artculo en Terapia Psicolgica 17/18, (1992). Sociedad Chilena de Psicologa Clnica, Santiago de Chile.