La Guerra Civil

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LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA 1 TEMA 9 LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA (1936-1939) I. EL DESARROLLO DE LA GUERRA CIVIL 1. INTRODUCCIÓN: EL GOLPE DE ESTADO MILITAR .- El punto de partida del golpe de Estado fueron las elecciones de febrero de 1.936 que dieron el triunfo al Frente Popular, pues sus resultados fueron rechazados por algunos generales del ejército apoyados por los monárquicos, los tradicionalistas (carlistas), la CEDA, la Falange y la Iglesia católica. El gobierno había decretado el traslado de algunos generales de ideología conservadora con influencias dentro del ejército. Franco recibió el mando de Canarias, Goded de Baleares y Mola pasó a Navarra como comandante militar. Mola fue el organizador de la rebelión (“el Director”), y Sanjurjo, en su exilio de Lisboa, el propuesto como dirigente máximo. En la sublevación participaron también generales con antecedentes republicanos, Cabanellas desde Zaragoza y Queipo de Llano desde Sevilla, ya que el golpe de Estado fue presentado como un ataque al Frente Popular y a las tendencias revolucionarias. Franco se incorporó en el último momento. El levantamiento fue iniciado en Melilla el día 17 de Julio, constituyéndose una Junta Militar. La rebelión se extendió rápidamente por todo el Protectorado marroquí. El ejército de África contaba con unos 30.000 españoles, más unos 12.000 marroquíes pertenecientes a los cuerpos de regulares, y tropas jalifianas que dependían teóricamente del Sultanado, pero que estaban bajo el control de España. También lo formaba el "tercio de extranjeros", la Legión, formada en su mayoría por soldados españoles y compuesta por toda clase de fugitivos y marginados que querían rehabilitarse o permanecer a salvo de ser detenidos. Al mismo tiempo Franco se sublevaba en Canarias y volaba a Tetuán (“Dragon Rapid”) para tomar el mando de la rebelión. 2. CARACTERÍSTICAS DE LA SUBLEVACIÓN MILITAR .- El golpe militar fue un fracaso, ya que no consiguió triunfar en las principales ciudades (Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao, Málaga etc.) donde buena parte del ejército y las fuerzas del orden (Guardia civil y Guardia de Asalto) permanecieron fieles a la República; era la España más desarrollada e industrializada con mayor número de obreros industriales y una agricultura más evolucionada. Pero la sublevación militar triunfó en amplias zonas de la España rural más atrasada (Galicia, Castilla y León, Navarra y la Andalucía del Guadalquivir), donde predominaba la gran propiedad trabajada por jornaleros o la pequeña propiedad, y en algunas ciudades importantes como Sevilla, Córdoba, Granada, Oviedo y Zaragoza. Toda la franja cantábrica (Asturias, Santander y parte del País Vasco) quedó aislada por los rebeldes, al permanecer leal a la República. Geográficamente la sublevación fracasó: en Madrid Milicias populares armadas asaltaron el Cuartel de la Montaña donde resistía el general Fanjul al mando de los insurrectos. En Barcelona Milicias anarquistas se impusieron rápidamente a las tropas del general Goded llegado de Mallorca. En la mayor parte de Aragón, La Mancha, Andalucía y las ciudades mediterráneas (excepto en Valencia donde la situación estuvo indecisa varios días) el pronunciamiento militar resultó insuficiente ante la reacción de las masas populares. En la cornisa cantábrica, Asturias (excepto Oviedo) y su zona minera se mantuvo en poder de los obreros, junto con Santander y el País Vasco. La sublevación triunfó en Zaragoza, a pesar de la gran fuerza que allí tenía la FAI anarquista; en Sevilla, con alguna dificultad) donde tomó el poder Queipo de LLano, así como en Granada y en Córdoba. En el Norte Mola dominó Navarra y la sublevación también triunfó en Galicia y Castilla la Vieja y León.

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Guerra Civil Española

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LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA 1

TEMA 9

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA (1936-1939)

I. EL DESARROLLO DE LA GUERRA CIVIL

1. INTRODUCCIÓN: EL GOLPE DE ESTADO MILITAR .- • El punto de partida del golpe de Estado fueron las elecciones de febrero de 1.936 que dieron el triunf o al

Frente Popular , pues sus resultados fueron rechazados por algunos generales del ejército apoyados por los monárquicos, los tradicionalistas (carlistas), la CEDA, la Falange y la Iglesia católica.

• El gobierno había decretado el traslado de algunos generales de ideología conservadora con influencias dentro

del ejército. Franco recibió el mando de Canarias, Goded de Baleares y Mola pasó a Navarra como comandante militar. Mola fue el organizador de la rebelión (“el Director”), y Sanjurjo , en su exilio de Lisboa, el propuesto como dirigente máximo.

• En la sublevación participaron también generales con antecedentes republicanos, Cabanellas desde Zaragoza y

Queipo de Llano desde Sevilla, ya que el golpe de Estado fue presentado como un ataque al Frente Popular y a las tendencias revolucionarias. Franco se incorporó en el último momento.

• El levantamiento fue iniciado en Melilla el día 17 de Julio, constituyéndose una Junta Militar. La rebelión se

extendió rápidamente por todo el Protectorado marroquí. El ejército de África contaba con unos 30.000 españoles, más unos 12.000 marroquíes pertenecientes a los cuerpos de regulares, y tropas jalifianas que dependían teóricamente del Sultanado, pero que estaban bajo el control de España. También lo formaba el "tercio de extranjeros", la Legión, formada en su mayoría por soldados españoles y compuesta por toda clase de fugitivos y marginados que querían rehabilitarse o permanecer a salvo de ser detenidos. Al mismo tiempo Franco se sublevaba en Canarias y volaba a Tetuán (“Dragon Rapid”) para tomar el mando de la rebelión.

2. CARACTERÍSTICAS DE LA SUBLEVACIÓN MILITAR .-

• El golpe militar fue un fracaso, ya que no consigui ó triunfar en las principales ciudades (Madrid,

Barcelona, Valencia, Bilbao, Málaga etc.) donde buena parte del ejército y las fuerzas del orden (Guardia civil y Guardia de Asalto) permanecieron fieles a la República; era la España más desarrollada e industrializada con mayor número de obreros industriales y una agricultura más evolucionada. Pero la sublevación militar triunfó en amplias zonas de la España rural más atrasada (Galicia, Castilla y León, Navarra y la Andalucía del Guadalquivir), donde predominaba la gran propiedad trabajada por jornaleros o la pequeña propiedad, y en algunas ciudades importantes como Sevilla, Córdoba, Granada, Oviedo y Zaragoza. Toda la franja cantábrica (Asturias, Santander y parte del País Vasco) quedó aislada por los rebeldes, al permanecer leal a la República.

• Geográficamente la sublevación fracasó :

� en Madrid Milicias populares armadas asaltaron el Cuartel de la Montaña donde resistía el general Fanjul al mando de los insurrectos.

� En Barcelona Milicias anarquistas se impusieron rápidamente a las tropas del general Goded llegado de Mallorca.

� En la mayor parte de Aragón, La Mancha, Andalucía y las ciudades mediterráneas (excepto en Valencia donde la situación estuvo indecisa varios días) el pronunciamiento militar resultó insuficiente ante la reacción de las masas populares.

� En la cornisa cantábrica, Asturias (excepto Oviedo) y su zona minera se mantuvo en poder de los obreros, junto con Santander y el País Vasco.

• La sublevación triunfó en Zaragoza, a pesar de la gran fuerza que allí tenía la FAI anarquista; en Sevilla, con

alguna dificultad) donde tomó el poder Queipo de LLano, así como en Granada y en Córdoba. En el Norte Mola dominó Navarra y la sublevación también triunfó en Galicia y Castilla la Vieja y León.

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• El golpe de Estado fracasó o triunfó en diferentes zonas de España en función de dos condiciones: - la rapidez y coordinación de sus protagonistas, ya que en las primeras horas sólo la indecisión de algunos

golpistas (cuando aún no había reacción por parte del Gobierno) les llevó al fracaso. - la capacidad de reacción de las fuerzas populares, ya que desde el mismo día 19 de julio las dudas de

muchos gobernadores sobre la necesidad de entregar armas a los civiles favoreció el triunfo del golpe. • El fracaso del golpe de Estado significó el comienz o de la Guerra Civil . • Desde el punto de vista social e ideológico (aunque el conflicto empezó como un pronunciamiento militar de

corte clásico) lo cierto es que se produjo una contienda en la que participaron todos los sectores de la población . En todo el territorio que mantuvo la legalidad republicana provocó una revolución político-social. Y en la zona donde el pronunciamiento triunfó se desarrolló una violenta reacción que iba más allá de la anulación de las reformas republicanas, puesto que se destruyeron todas las formas democráticas e incluso liberales. � En general puede afirmarse que la sublevación fue promovida y secundada por la oli garquía

española , formada por un conglomerado de oficiales conservadores del ejército, de propietarios agrarios e industriales, de monárquicos afiliados a partidos de la derecha, de grupos católicos con el apoyo total de la Iglesia (que predicó la guerra como “cruzada ”) y de “tradicionalistas” (carlistas), todos ellos temerosos de que elementos populares accediesen al poder. Estaban inspirados por la ideología fascista.

� Los leales a la República estaban formados por: - Las clases populares : obreros y empleados urbanos, pequeña burguesía y jornaleros sin tierras,

mayoritariamente afiliados o influidos por organizaciones socialistas, comunistas o anarco-sindicalistas; fueron la base de la resistencia republicana.

- Las clases medias , vinculadas a los partidos republicanos, aunque algunos grupos, bien por motivos ideológicos y religiosos (dada la persecución de que fue víctima la Iglesia en territorio republicano) o bien por el temor a que se produjera una auténtica revolución social, se mostraron distantes en sus apoyos a la República.

• Desde el punto de vista político se produjo la ausencia de un poder civil organizad o:

� Entre los sublevados no había unidad de criterio sobre lo que hacer tras el triunfo del golpe . Mola, “el Director”, proponía establecer una dictadura militar que eliminara el riesgo de una revolución para volver de nuevo, más tarde, a una República o una Monarquía. Los monárquicos y la CEDA deseaban la vuelta a la monarquía alfonsina. Los falangistas quería un régimen fascista a la italiana. Los carlistas anhelaban una “monarquía tradicionalista”. El poder quedó en manos de un puñado de generales que, formando “bandos”, establecieron un régimen autoritario, militarizado y sin libertades civiles.

� En el territorio republicano el poder del Estado se desmembró . Surgieron comités autónomos en pueblos, ciudades y regiones que controlaban la justicia y la policía, y cada partido o sindicato tenía sus patrullas de control e incluso sus propias cárceles. El Gobierno de la Generalitat tuvo que transigir con el predominio revolucionario de las milicias anarcosindicalistas a fin de preservar su autonomía. El País Vasco, zona tradicionalmente conservadora y católica pero nacionalista, luchó en defensa del régimen democrático ante la promesa de obtener un Estatuto de Autonomía. Junto a una parte del ejército y de la Guardia Civil que no secundó la insurrección se formaron las Milicias de voluntarios que, habiendo conseguido armas en los cuarteles, se agruparon por afinidades ideológicas y que fueron mandadas en los primeros tiempos por líderes sindicales o políticos como Durruti, Líster, El Campesino, etc., al menos hasta la creación del Ejército Popular en 1937.

• En la retaguardia de ambos bandos se desencadenó, de forma más o menos incontrolada, una violenta

persecución con el propósito de exterminar al adversario: � En el bando rebelde se procedió sistemáticamente a la eliminación física de los enemigos. Fue una

represión de Estado alentada por los dirigentes militares y políticos que durará toda la guerra. Los sublevados fusilaron (especialmente durante el verano de 1.936) a militantes de sindicatos y partidos del Frente Popular, alcaldes y dirigentes políticos republicanos y maestros de izquierdas, que muchas veces fueron descubiertos al ser delatados por sus mismos vecinos. También fueron ejecutados los militares que se negaron a secundar el alzamiento. Las localidades donde la represión y las matanzas adquirieron mayores proporciones fueron Badajoz, Navarra, Córdoba, Granada, Sevilla o Málaga. Los sublevados, que actuaron impulsados por un deseo de venganza y, con el propósito de “limpiar y poner orden”, mataron a más de 70.000 personas (de las que un 10% eran mujeres). Una de las víctimas más conocidas fue el poeta Federico García Lorca.

� Por su parte, en la zona republicana se produjo en los dos primeros mes es de la guerra una quiebra del orden público reinando en toda la zona el terror dirigido principalmente contra los llamados “facciosos ” (los que apoyaban a los sublevados como el clero y los católicos, los propietarios o los afiliados a partidos de derecha). Fueron actos incontrolados de represalia por la represión del bando sublevado, venganza por agravios anteriores o miedo a los “quintacolumnistas”. La violencia fue terrible y el temor se adueñó de los habitantes de Barcelona y Madrid, donde las víctimas eran sacadas de sus domicilios para el «paseo », es decir, para ser ejecutadas en descampados y arrojadas a una zanja. Entre los más de 50.000 civiles ejecutados en la zona republicana se encontraban los escritores Ramiro

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de Maeztu o Pedro Muñoz Seca, el político Melquiades Álvarez o los falangistas José Antonio Primo de Rivera o Ledesma Ramos. En noviembre de 1936 se asesinó a presos políticos en Paracuellos del Jarama. No obstante, con la ayuda decidida de todas las organizaciones proletarias, y en particular del Partido Comunista, el orden pudo restablecerse .

• Desde el punto de vista económico , los republicanos mantuvieron bajo control el 60% del territorio español,

incluyendo los núcleos urbanos más poblados y las zonas más industrializadas del país (siderurgia, mecánica, textil, hierro, carbón), además de reservas de trigo de La Mancha y arroz y cítricos levantinos. Por el contrario, las mejores y más extensas regiones ganaderas y productoras de cereal, patatas, legumbres y maíz fueron pronto ocupadas por los enemigos de la República. En el aspecto monetario, cada uno de los dos bandos emitió sus propios billetes y prohibió la circulación de las monedas del adversario. Las reservas de oro quedaron bajo control republicano.

• En cuanto a los efectivos militares la superioridad estuvo del lado de los sublevados.

� Aunque la mitad de las unidades del Ejército de Tierra permanecía bajo control del Gobierno republicano, la gran mayoría de los oficiales se había sublevado dejando las unidades republicanas sin mandos y desarticuladas. El Gobierno tuvo que recomponer un ejército sobre la base de inexpertas milicias obreras e improvisar un Estado Mayor sin generales. Además, el bando golpista contaba con varias divisiones íntegras en Castilla, Galicia y Andalucía y, sobre todo, con el Ejército de África, el mejor equipado y entrenado. Se calcula que al estallar la guerra había unos 136.000 efectivos republicanos frente a unos 171.000 de los sublevados.

� En cuanto a la flota apenas media docena de buques quedó en manos de los sublevados ya que la marinería se había amotinado destituyendo a los mandos progolpistas. Sin embargo, las bases de El Ferrol y San Fernando quedaron bajo control de los rebeldes que repararon los buques de los astilleros.

� La aviación quedó en manos republicanas aunque muchos aviones fueron inutilizados por los rebeldes. • Respecto a las interpretaciones sobre el significado del confl icto :

- Una opinión generalizada internacionalmente ha aceptado que lo que en España sucedió fue una lucha a muerte entre fascismo, comunismo y democracia liberal, siendo la Guerra Civil un conflicto que preludiaba lo que posteriormente sería, a gran escala, la Segunda Guerra Mundial.

- Sin embargo, la Guerra Civil debe verse también como un enfrentamiento armado entre los viejos grupos dominantes (oligarquía) de la España de la Restauración, cuyos instrumentos fueron el Ejército y la Iglesia, y las nuevas clases emergentes de obreros y burgueses que querían establecer un sistema político realmente democrático y un orden social progresista.

- Así, aunque la Guerra Civil tuvo el aspecto de un conflicto internacional, y así quedó reflejado, en lo esencial se trató de un enfrentamiento propiamente español.

• El levantamiento de las derechas con el Ejército y con el apoyo de la Iglesia significaba que las reformas que

intentaba llevar a cabo la burguesía republicana y el movimiento obrero socialista encontraron una resistencia tan firme, que llevó a la insurrección armada. Esas reformas eran justas e imprescindibles para la modernización de la sociedad española, pero atentaban contra los seculares privilegios de las clases dominantes de España. Por ello, las clases privilegiadas optaron por el abandono de la vía legal y parlamentaria decantándose por el golpe de Estado .

3. DESARROLLO MILITAR .- • Se pueden distinguir tres fases diferentes en el desarrollo bélico de la Guerra Civil: Primera fase: desde el 17 de julio de 1936 hasta ma rzo de 1937: el paso del Estrecho, el intento de to mar Madrid y la conquista de Málaga. • El general Francisco Franco , que desempeñaba la comandancia general de Canarias, se trasladó en un

avión costeado por el millonario mallorquín Juan March desde Las Palmas hasta Marruecos. Allí se puso al frente del ejército de África , que era el cuerpo militar mejor preparado y entrenado de toda España y cuyos efectivos sumaban unos 50.000 hombres entre legionarios, regulares y mercenarios marroquíes.

� PRIMER MENSAJE DEL GENERAL FRANCO (17 de julio de 1936)

“La situación en España es cada día más crítica; la anarquía reina en la mayoría de los campos y pueblos; autoridades de nombramiento gubernativo presiden, cuando no fomentan, las revueltas; a tiro de pistola y ametralladoras se dirimen las diferencias entre los asesinos que alevosa y traidoramente os asesinan, sin que los poderes públicos impongan la paz y la justicia. Huelgas revolucionarias de todo orden paralizan la vida de la población arruinando y destruyendo sus fuentes de riqueza y creando una situación de hambre que lanzará a la desesperación de los hombres trabajadores. Los monumentos y tesoros artísticos son objeto de los más enconados ataques de las hordas revolucionarias, obedeciendo a la consigna que reciben de las directivas extranjeras, con la complicidad y negligencia de los gobernadores de monterilla. (…)

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La Constitución, por todos suspendida y vulnerada, sufre un eclipse total: ni igualdad ante la ley; ni libertad, aherrojada por la tiranía; ni fraternidad, cuando el odio y el crimen han sustituido el mutuo respeto; ni unidad de la Patria, amenazada por el desgarramiento territorial, más que por regionalismos, que los Poderes fomentan. (…). Tetuán, 17 de julio de 1936.”

Alocución radiofónica, transcrita en el diario ABC, edición de Andalucía, el jueves 23 de julio de 193 6.

• Durante los primeros días de la guerra, las tropas de África lograron cruzar el Estrecho de Gibraltar para

unirse a los sublevados en Andalucía que, desde Sevilla, estaban comandados por el general Gonzalo Quei-po de Llano. Los sublevados controlaban los puertos estratégicos de Ceuta, Melilla, Cádiz y Algeciras. Franco dispuso de aviones y de un acorazado alemán; Italia proporcionó barcos y aviones para transportar tropas.

� FRANCO PIDE AYUDA A ALEMANIA (22 de julio de 1936)

“Tánger, 22 de julio de 1936, 8,58 de la tarde. El teniente coronel Beigbeder me ha pedido que mandara el despacho siguiente (muy secreto): Para el agregado militar general Kühlental: ‘General Franco y teniente coronel Beigbeder mandan saludos a su amigo el general Kühlental, le informan del nuevo Gobierno nacional español y solicitan que mande diez aviones de transporte de tropas con la máxima capacidad de asientos a través de sociedades privadas alemanas. Traslado por aire con tripulación alemana a cualquier aeropuerto del Marruecos español. El contrato se firmará después. Muy urgente. Bajo la palabra del general Franco y España. Por el cónsul: Wegener.’”

• Las tropas del ejército de África consolidaron y aumentaron sus posiciones en la Andalucía del Guadalquivir

(Sevilla , Córdoba y Granada ) y, al mando de Yagüe , avanzaron hacia Extremadura eliminando la resistencia de Badajoz (4000 ejecuciones). Por su lado, el general Mola , que dirigía el ejército del Norte, avanzó desde Navarra y Castilla y León hasta Galicia y se dirigió hacia Extremadura .

� BANDO DEL GENERAL MOLA (19 de julio de 1936)

“Art. 1º. Queda declarado el estado de guerra en todo el territorio de la provincia de Navarra y como primera providencia militarizadas

todas las fuerzas, sea cualquiera la autoridad de quien dependían anteriormente, con los deberes y atribuciones que competen a las del Ejército y sujetas igualmente al Código de Justicia Militar. (…)

Art. 3º. Quedan sometidos a la jurisdicción de Guerra y tramitados por procedimiento sumarísimo: (…). b) Los delitos de rebelión, sedición, y los conexos de ambos; los de atentado y resistencia a los agentes de la Autoridad; los de desacato, injuria y calumnia, amenaza y menosprecio a los anteriores o a personal militar o militarizado (…) así como los mismos delitos cometidos contra los que desempeñen funciones de servicio público. c) Los de tenencia ilícita de armas (…).

Art. 4º. Se considerarán también como autores los incitadores, agentes de enlace, repartidores de hojas y proclamas clandestinas o subversivas, los dirigentes de las entidades que patrocinen, fomenten o aconsejen tales delitos, así como todos los que directa o indirectamente contribuyan a su comisión y preparación o tomen parte en igual forma en atracos y robos a mano armada o empleen para cometerlos cualquier otra coacción o violencia.

Art. 5º. Quedan totalmente prohibidos los “lock-outs” y huelgas. Se considerará como sedición el abandono del trabajo y serán principalmente responsables los dirigentes de las asociaciones o sindicatos a que pertenezcan los huelguistas, aunque simplemente adopten actitud de brazos caídos.

Art. 6º. Queda prohibido el uso de banderas, insignias, uniformes, distintivos y análogos que sean contrarios a este Bando y al espíritu que le inspira, así como el canto de himnos de análoga significación.

Art. 7º. Se prohíben igualmente las reuniones de cualquier clase que sean, aun cuando tengan lugar en sitios públicos, como restaurantes o cafés, así como las manifestaciones públicas.

Art. 10º. Quedan sometidas a la censura militar todas las publicaciones impresas de cualquier clase que sean. Para la difusión de noticias se utilizará la radiodifusión y los periódicos, los cuales tienen la obligación de reservar en el lugar que se les indique espacio suficiente para inserción de noticias oficiales, únicas que sobre orden público y político podrán insertarse. También quedan sometidas a la censura todas las comunicaciones eléctricas urbanas e interurbanas. (…)

Pamplona, a 19 de julio de 1936.- El General Emili o Mola.”

• En agosto los ejércitos del Norte y del Sur se habían encontrado. Ambos se dirigieron a Madrid, el principal

objetivo de Franco para acabar pronto la guerra. Sin embargo, el avance de Franco hacia Madrid sufrió un retraso al desviarse su ejército para liberar el Alcázar de Toledo (septiembre), donde se habían refugiado los militares rebeldes de la ciudad, encontrándose sitiados por las tropas y milicias republicanas. En el Norte, Mola tomó Irún y San Sebastián aislando el País Vasco de la frontera francesa.

• La conquista de Madrid parecía ser inminente, por lo que el 29 de octubre se

decretó la movilización general. Miles de hombres y mujeres entusiasmados fortificaron los accesos y el interior de la capital mientras nacían consignas que se hicieron míticas como “No pasarán ” o “Madrid, tumba del fascismo ”. Así, las tropas rebeldes fueron contenidas en los alrededores de la capital y en la Sierra de Guadarrama (donde se desplegaron 20.000 soldados republicanos). Esto supuso un importante revés para los insurrectos, que consideraban esencial la conquista de Madrid por razones políticas, económicas, diplomáticas, propagandísticas y simbólicas.

• El 6 de noviembre, el gobierno republicano se trasladó a Valencia, dejando

Madrid en manos de una Junta de Defensa presidida por el general José Miaja y formada por fuerzas militares y de orden público y por las milicias populares; la estrategia para la defensa de la capital quedaba en manos del entonces coronel y posteriormente brillante general Vicente Rojo .

• La heroica resistencia de Madrid (noviembre-diciembre de 1936) pese a los ataques aéreos y a la

constante presión del ejército de África, se debió también a los refuerzos que significaron la llegada de las

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Brigadas Internacionales (8 de noviembre) y de la milicia anarco-sindicalista (columna “Libertad”) de Buenaventura Durruti, que había combatido en Aragón intentando conquistar Zaragoza.

� DISCURSO DE PIETRO NENNI AL “BATALLÓN GARIBALDI” EN MADRID (6 de febrero de 1937)

“Ahora seguramente, os habréis preguntado, amigos italianos, por qué Mussolini sostiene a Franco y por qué la prensa fascista destila su veneno contra el pueblo español, contra los “rojos” a los que acusa de todos los crímenes. (…) Por esto la prensa de Mussolini los trata, nos trata, de bandidos. Por eso Mussolini sostiene a Franco que quiere exactamente lo contrario de lo que quieren los rojos. Por tal razón estamos aquí y se han formado las Brigadas Internacionales. Por esto hay un heroico batallón Garibaldi, que vuelve a tomar por su cuenta las más gloriosas tradiciones del siglo pasado. Por esto tantos de los nuestros han muerto aquí y han derramado su sangre por la causa de la libertad de España, que se identifica con la causa de la libertad de Italia. Estamos aquí porque queremos para los ciudadanos de nuestro país, lo que el Frente Popular de aquí quiere para los ciudadanos, obreros y campesinos españoles. Luchamos aquí con nuestro pensamiento vuelto hacia Italia. Y miramos el porvenir con una gran confianza porque hoy conocemos el camino de la victoria, del que hemos forjado los instrumentos. ¡Antifascistas de todos los horizontes, formemos un Frente Popular que restablezca en Italia los derechos del pueblo! ¡La victoria en España será para nosotros una etapa hacia la victoria en Italia, hacia la victoria en Europa y en el mundo!

Discurso de Pietro Nenni al “Batallón Garibaldi” (a ntifascistas italianos) de las Brigadas Internacion ales, en Madrid, el 6 de febrero de 1937.

� EL BATALLÓN NORTEAMERICANO “ABRAHAM LINCOLN” SE INC ORPORA A LAS BRIGADAS INTERNACIONALES

“¡Hola, amigos! Os escribo desde las trincheras del frente de España. Quiero contaros la historia del “Batallón Abraham Lincoln”. Quiero contarlo con mis propias palabras y contar las cosas que he visto. Espero que lo que diga os llegue y que los cañones fascistas no me alcancen antes de terminar lo que tengo que deciros. Es irónico que mientras escribo acerca de las escenas de la guerra esté echado en una trinchera en un campo de olivos, cerca del río Jarama, 40 kilómetros al noroeste de Madrid. Guerra entre ramos de olivos, clásico símbolo de paz. Y, sin embargo, no es del todo extraño e irónico, porque nosotros, los dos mil americanos luchando con el Gobierno republicano (Ioyalist) contra la invasión fascista de España, estamos luchando por la paz y las libertades humanas. Nosotros los americanos no vinimos a España porque tuviéramos nociones románticas o infantiles sobre la guerra ni porque nos gustaran las fanfarrias y festivos desfiles. (…) Nuestro Batallón se formó en las últimas semanas de diciembre y las primeras de enero. En ese tiempo éramos 470 hombres de todas partes de los EE.UU. y Cuba, Méjico, Puerto Rico, Canadá, Hawaii y Filipinas. En la sección James Colly 105 veteranos luchadores del Estado libre de Irlanda que vinieron a componer el Batallón… La sección de Sanidad, compuesta por preparados enfermeros, incluye una unidad completa de Holanda. (…) Estos hombres, cada uno de ellos, es tan opuesto a la guerra como yo. Tenemos en nuestras filas a hombres que estaban en la prisión “Leavenworth” en 1917 por rehusar participar en la guerra mundial. Hay marineros (…) que en muchas ocasiones rehusaron cargar cargamentos de municiones para los italianos que invadían Etiopía. Hay estudiantes que dirigieron la huelga nacional estudiantil, que barrió América (hombres que sólo poco antes habían combatido duramente por pacifismo), profesores universitarios que hacía menos de un mes daban conferencias en universidades sobre los efectos destructores de la guerra en la educación y la cultura. (…) No vinimos a España para meter a América en la guerra, sino para prestar nuestros servicios en una lucha que mantenga la guerra fuera del mundo. Creemos con todo nuestro corazón que la democracia atacada en España es democracia atacada en todas partes (…).” “The story of the Abraham Lincoln Battalion”, writ ten in trenches of Spain, published by the Friends of the Abraham Lincoln Battalion, San Francisco, 1937.

• Así concluye la fase de la guerra denominada “de

columnas” o “miliciana” dado que el ejército republicano estaba formado básicamente por improvisados batallones mixtos de soldados, guardias y milicias voluntarias de partidos y sindicatos. Durante las primeras semanas de combate ya se comprobó que el ejército rebelde superaba en tamaño, experiencia de mando, organización, disciplina y suministros al ejército republicano.

• Entre diciembre de 1936 y abril de 1937 Mussolini

envió a España material de guerra y unos 100.000 soldados (el “Corpo di Truppe Volontarie”) al mando del general Roatta, empleados por primera vez en la conquista de Málaga, el 7 de febrero de 1.937 . Mientras en Málaga se asesinaba a 4.000 republicanos, los refugiados que desde el día anterior intentaban escapar por la carretera de la costa fueron bombardeados desde mar y aire en lo que se ha llamado “el crimen de la carretera Málaga-Almería ”.

� RECUERDOS DE UN NIÑO DURANTE “EL CRIMEN DE LA CARRE TERA MÁLAGA-ALMERÍA” (febrero de 1937)

“Efectivamente, se vivieron momentos muy críticos, el constante ametrallamiento de la aviación alemana e italiana, los obuses lanzados desde los buques “Canarias”, “Baleares” y “Cervera”, acompañados también por barcos alemanes e italianos que, supuestamente descargaban también su artillería contra la retirada de las fuerzas republicanas en su repliegue, pero que siempre ocasionaba las víctimas entre los refugiados. De esta manera nuestra andadura tenía que hacerse de noche entre miles y miles de refugiados no sólo de Málaga y provincia sino también de Granada, pues éstos pasaron por Vélez procedentes de Loja, Alhama de Granada, Ventas de Zafarralla y otros pueblos de esa provincia. Algunos momentos del día los aprovechábamos bien para descansar y para comer si es que había algo. Mucha gente, agotada, descansaba en los mismos bordes de la carretera. Era impresionante. En una ocasión sería el 10 de febrero, mi familia en unión con otros refugiados aprovechó un descanso para guisar una comida, pero, cuando ya estábamos preparados para comer tuvimos que dejarlo de inmediato por la proximidad de las tropas italianas y moras, todos nos quedamos con las ganas. Caminar de noche era lo más seguro, pero resultaba igualmente horrible, pues escuchábamos las llamadas entre padres, madres e hijos para no perder el contacto. (…)” Manuel Muñoz Robles, “7 de febrero de 1937” en “El crimen de la carretera Málaga-Almería”

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• En febrero de 1937, viendo Franco que la toma de Madrid por un ataque frontal era imposible, decidió emprender dos maniobras envolventes para aislar la capital cortando sus comunicaciones con Valencia. Por el sur significó la cruenta batalla del Jarama (25.000 muertos republicanos y 20.000 nacionalistas) en la que ningún bando alcanzó ventajas estratégicas. En marzo Franco intentó rodear de nuevo Madrid esta vez por el norte, dando lugar a la batalla de Guadalajara , en la que las tropas fascistas italianas sufrieron una espectacular derrota a manos del recién creado Ejército Popular de la República. Fue la primera victoria republicana de gran resonancia.

• Franco descubrió que la guerra no podía durar solo unos meses, por lo que replanteó su estrategia (“guerra de

aniquilación” ), dirigiéndose a otros escenarios para reducir el territorio ocupado por los republicanos. Segunda fase: desde abril de 1937 hasta el verano d e 1938: conquista del Norte, avance hacia el Medite rráneo y división del territorio republicano en dos. • Las tropas de Franco, que disponían de mejores abastecimientos de alimentos y armas, tomaron la iniciativa

y, al mando del general Mola, trasladaron la lucha al norte, a la franja cantábrica ; los combates principales se produjeron entre abril y octubre de 1937, desplazándose los frentes de guerra de este a oeste: Guipúzcoa, Vizcaya, Santander y Asturias. El 26 de abril la ciudad de Guernica fue arrasada por la aviación nazi de la “Legión Cóndor” por orden del Cuartel General de Franco (primer ensayo de exterminio masivo de población civil en la historia, “Guernica” de Picasso). En junio fue ocupada Bilbao al rendirse los batallones nacionalistas vascos (los gudaris) a las tropas italianas. De esta manera, el bando republicano perdió impor-tantes recursos económicos y el ejército franquista pudo disponer de las valiosas factorías industriales bilbaínas ya que el presidente Aguirre se negó a destruir las fábricas como le había ordenado el gobierno de la República.

• El ejército republicano, para aliviar la tensión en el norte y tratar de recuperar la iniciativa, desencadenó las

operaciones de Brunete (cerca de Madrid) en julio, y de Belchite (cerca de Zaragoza) en agosto. En ambos casos el resultado fue similar: los republicanos obtuvieron una ventaja inicial pero luego quedaron atascados debido al fuerte calor y a las malas comunicaciones. Estas acciones no consiguieron evitar que los nacionalistas entrasen primero en Santander (26 de agosto) y en octubre en Gijón y Avilés . Miles de personas huyeron de la zona iniciándose un éxodo de exiliados que, a través de Francia intentaban llegar a territorio republicano, especialmente a Cataluña.

• El 3 de junio de 1937 el general Mola moría en accidente de aviación lo que permitió a Franco dirigir la guerra

sin interferencias. • En diciembre de 1937 con el ejército republicano reestructurado, con el general Vicente Rojo al frente, con

mandos militares profesionales, con cuadros procedentes de la milicias como Modesto, Líster y Valentín González el Campesino y con las Brigadas Internacionales, se intentó tomar la iniciativa desencadenando diversas ofensivas, sobre todo en dirección a Teruel, en torno a cuya capital se dio en el invierno de 1937-1938 la batalla de Teruel , ocupando los republicanos la ciudad hasta febrero en que Franco inició la campaña de Aragón , atravesando el Maestrazgo y llegando al Mediterráneo en Vinaroz (Castellón) el 15 de abril de 1938. El territorio republicano quedaba dividido en dos zonas.

• Franco podía haber acabado la guerra de haberse dirigido a la aislada Cataluña donde se encontraba toda la

industria bélica que le quedaba a la República, pero al perseguir una “guerra de aniquilación” no tenía interés en un final rápido de la guerra ni en un armisticio, por lo que desencadenó una ofensiva contra Valencia. Al mismo tiempo y con el objetivo de quebrar la moral y la capacidad de resistencia del enemigo, la aviación franquista efectuó intensos bombardeos aéreos contra la población civil de Valencia, Madrid y Barcelona.

• Pese a la tenaz resistencia de los republicanos, el 23 de julio de 1938 Valencia quedó directamente

amenazada por las tropas nacionalistas a 40 Km. de la capital. Fase final: desde julio de 1938 hasta abril de 1939 : batalla del Ebro, conquista de Cataluña y fin de la guerra.-

• Como respuesta, el presidente Negrín y el general Vicente Rojo planearon una audaz ofensiva en la zona

del Ebro con el objetivo de forzar una retirada del ejército franquista y disminuir así la presión enemiga sobre Valencia y Cataluña. El mando de las tropas republicanas (80.000 soldados y más de 350 piezas de artillería) fue encomendado al general comunista Juan Modesto.

• En medio del intenso calor veraniego, el 25 de julio se inició la batalla del Ebro con el ataque republicano

que cruzó el río y conquistó Gandesa , manteniéndola en su poder unos meses. Franco, para frenar el avance, envió importantes refuerzos a las tropas del general Yagüe: más de 30.000 hombres de refresco, aviación alemana e italiana con 200 aviones y cerca de 500 cañones. Poco después Franco contraatacó y,

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA 7

a principios de noviembre el ejército republicano tuvo que replegarse al otro lado del río Ebro y el ejército nacionalista ocupó todo el sur de Tarragona . El 16 de noviembre se dio por acabada la batalla con el número de muertos y heridos más elevado de toda la guerra.

• Sin duda alguna, el fracaso de la acción ofensiva en el frente del Ebro dejó a la República prácticamente

derrotada. Además, se acentuaron las diferencias internas entre los partidarios de la resistencia a ultranza (con el presidente Juan Negrín a la cabeza y apoyado por los comunistas), y aquellos que se mostraban favorables a intentar una negociación de paz (como el dirigente socialista Julián Besteiro y el general José Miaja); aunque esta posibilidad fue rechazada categóricamente por Franco.

• Tras la victoria del Ebro, al ejército nacionalista no le resultó difícil, en las primeras semanas de 1939,

avanzar sobre Cataluña , defendida por un ejército maltrecho y bajo de moral. El 26 de enero los rebeldes entraban en Barcelona sin lucha. Gerona cayó en febrero, desapareciendo así el frente de Cataluña. Casi medio millón de españoles republicanos cruzaron la frontera frances a hacia el exilio convirtiéndose en refugiados , entre ellos el gobierno de la II República (con su presidente, Manuel Azaña, y el jefe del gobierno, Juan Negrín) que se había instalado en Barcelona desde octubre de 1937. También cruzaron la frontera los miembros de las Cortes republicanas, el gobierno de la Generalitat (con su presidente, Lluís Companys) y el gobierno vasco, refugiado en Cataluña desde hacía más de un año. Toda Cataluña estaba ocupada y la suerte de la República totalmen te decidida .

• En febrero de 1939 a la República no le quedaba más territorio que la llamada Zona Centro (Madrid, parte de

Castilla la Nueva y la región mediterránea entre Valencia y Almería). Negrín, que había regresado de Francia y se había instalado en Alicante, seguía siendo partidario de seguir la guerra hasta el final y dio orden de continuar con la resistencia de Madrid. El 24 de febrero Francia y Gran Bretaña reconocieron al gobierno de Franco y el 27 de febrero Manuel Azaña presentó en París su dimisión como pre sidente de la República .

• El 5 de marzo, el coronel Segismundo Casado , comandante del ejército republicano del Centro y sustituto de

Miaja, dio un golpe de estado en Madrid y, junto a algunos desilusionados líderes anarquistas y socialistas (Julián Besteiro), nombró un Junta de Defensa Nacional , presidida por Miaja (que no hizo acto de presencia), opuesta a la tesis de mantener la resistencia ordenada por Negrín al que se creía bajo la influencia comunista. Casado ya había entrado en contacto desde hacía meses con el servicio de espionaje enemigo en Burgos para intentar terminar la guerra mediante una negociación con Franco. Probablemente buscaban una paz en las mejores condiciones posibles, pero a la luz de la Ley de Responsabilidades Políticas publicada por Franco el 13 de febrero por la que se condenaba como criminales convictos a todos los republicanos, sus esperanzas tenían poco sentido. El 6 de marzo comenzaron las detenciones y ejecuciones de comunistas. El 13 de marzo se iniciaron las conversaciones con el Gobierno de Franco al que sólo interesaba una rendición incondicional. El 18 de marzo Besteiro pronunció por radio un llamamiento a la reconciliación que no sirvió para nada. Desde ese momento las tropas republicanas empezaron a rendirse o sencillamente a intentar volver a sus casas. El 28 de marzo las tropas de Franco entraron en un Madrid si lencioso y aterrado . En los días siguientes la resistencia comunista no pudo impedir la ocupación de Albacete, Alicante y Valencia .

� ALOCUCIÓN RADIADA DE JULIÁN BESTEIRO (18 de marzo de 1939)

“La necesidad de sofocar el pasado levantamiento comunista y los cuidados conducentes a prevenir la repetición de semejantes contingencias no han hecho olvidar un momento al Consejo Nacional de Defensa, lo que constituye su misión y la verdadera razón de su existencia. Hoy, restablecida la normalidad, el Consejo Nacional de Defensa siente reforzada su autoridad y fortalecido su convencimiento de que interpreta una inequívoca voluntad general, encaminada a conseguir, lo más rápidamente posible, una paz honrosa. Es, además, nuestro deseo tener a la opinión debidamente informada del proceso de nuestra actuación para el logro de esa anhelada finalidad. En prueba de ello queremos poner en vuestro conocimiento los términos exactos de la comunicación que el Consejo Nacional de Defensa dirige al Gobierno nacionalista, sirviéndonos de la radio como el medio más rápido y de máxima difusión. Ese comunicado dice así:

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‘Ha llegado el momento de que este Consejo Nacional de Defensa se dedique por completo a su misión, y, en consecuencia, se dirige a ese Gobierno para hacerle presente que estamos dispuestos a llevar a efecto negociaciones que nos aseguren una paz honrosa y que al mismo tiempo puedan evitar estériles efusiones de sangre. Esperamos su decisión.’” Alocución radiada de Julián Besteiro, 18 de marzo de 1939. Publicado en “El Socialista” el 19 de marz o de 1939.

• El 31 de marzo, toda España estaba en poder de los nacionalistas. El 1 de abril de 1939 Franco firmó en

Burgos el último parte de guerra : “En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo, nuestras tropas victoriosas han alcanzado sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado”.

4. BALANCE Y HUELLA DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA .-

• La Guerra Civil terminó el 1 de abril de 1939. El bando vencedor iba a inaugurar la dictadura más larga de

la España contemporánea personificada en Francisco Franco Bahamonde. Su muerte el 20 de noviembre de 1975 pondría fin a éste régimen político. La contienda dejó al país destrozado y sus repercusiones no habían desaparecido treinta años después. Significó un autentico cataclismo demográfico, económico, cultural y moral: 1. Pérdidas materiales . El economista Ramón Tamames ha calculado en 300.000 millones de pesetas

de 1963 los gastos efectuados por los dos ejércitos. El I Plan de Desarrollo evaluó en 250.000 las viviendas destruidas y en otras 250.000 las inútiles; 192 ciudades y pueblos tuvieron un porcentaje de destrucciones de más del 60%; la mitad del sistema ferroviario quedó destrozado; se produjo el hundimiento de 225.000 Tm. de la marina mercante. Las pérdidas agrícolas son muy difíciles de medir, pero las ganaderas sufrieron una reducción del 30% del ganado vacuno y lanar y la mitad del porcino. Igualmente parte de la industria fue destruida. También se perdió una parte, pero no la más importante, del patrimonio artístico nacional.

2. Pérdidas humanas . El volumen total de pérdidas humanas producidas por la guerra civil y su compleja distribución ha sido uno de los puntos más polémicos y manipulados por los propagandistas de ambos bandos. Respecto al número de muertos en la contienda habría que decir que la redonda cifra del “millón de muertos” es una exageración. Fue un recurso literario que hizo fortuna gracias al título de la novela de José María Gironella: “Un millón de muertos”. Los estudios demográficos coinciden en cifrar en torno a las 600.000 el total de las pérdidas hum anas , incluyendo los caídos en combate, las víctimas de la represión en ambos bandos, las debidas a enfermedades y desnutrición, los exiliados definitivos, etcétera. El número de muertos a consecuencia de operaciones estrictamente militares podría rondar las 300.000 entre las dos zonas.

Por lo que se refiere a las víctimas de la represión , el cómputo total de la represión perpetrada en la zona republicana (1936-39) sería del orden de las 50.000 frente a las 120.000 víctimas globales de la represión franquista entre la guerra y la posguerra. Semejante coste demográfico resultó nefasto para España y causó estragos en su patrimonio económico, así como en su capacidad de recuperación y reconstrucción.

Se calcula que emigraron más de 400.000 españoles, de los cuales muchos no regresaron. Estos emigrados pasaron gran parte a México y otros quedaron en campos de concentración franceses, sufriendo luego la persecución nazi. La emigración también fue selectiva marchando al exilio muchos de nuestros profesionales, intelectuales y artistas, fue un trauma para una cultura espléndida que estaba viviendo una auténtica edad de oro

3. Pérdidas morales . La guerra civil y el franquismo produjeron daños morales y mentales muy profundos en la memoria colectiva del pueblo español. Se produjo una división radical del país en dos bandos irreconciliables alimentada por la huida al extranjero de centenares de miles de españoles por temor a las represalias, por las ejecuciones y la detención masiva en campos de concentración de sospechosos de republicanismo y por la supresión de las libertades democráticas impuestas por un régimen político dictatorial.

4. Aislamiento cultural, científico y político : La mayor parte de los científicos, intelectuales y gente de la cultura, que habían apoyado a la República, fueron aniquilados o marcharon al exilio. Un 90 por 100 de los intelectuales se exiliaron (la Generación del 27 casi al completo). En cuanto a la política exterior, el carácter dictatorial del régimen franquista llevó a España a una situación de compromiso con los regímenes fascistas que duró hasta 1942. Después, a una fase de aislamiento que se recrudeció en 1946 por la condena de la ONU al régimen y la retirada de los embajadores.

VÍCTIMAS DE LA GUERRA CIVIL

(datos aproximados y redondeados)

Republicanas Sublevadas TOTAL

Combate 85.000 75.000 160.000 Represión en la guerra 79.000 51.000 130.000 Muertos por penalidades 149.000 20.000 169.000 TOTAL (guerra) 313.000 146.000 459.000

Represión de posguerra 40.000 - 40.000 Penalidades en posguerra (zonas antiguas) 84.000 75.000 159.000

TOTAL (guerra y posguerra) 437.000 221.000 658.000

Exilio 430.000 - 430.000

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II. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INTERVENCIÓN INTERNACIO NAL EN LAS DOS ZONAS

1. EL COMITÉ DE “NO INTERVENCIÓN” Y LAS AYUDAS EXTR ANJERAS .- • El conflicto español alcanzó dimensiones populares en Europa y en América. Para muchos, estaba dirimiéndose

una lucha contra el fascismo y por la democracia y la libertad, para otros, los menos, se estaba combatiendo contra el comunismo y a favor de los valores de la religión católica.

• La guerra adquirió desde el primer momento un carácter internacional . Tanto los sublevados como el

gobierno de la República pidieron ayuda exterior, tanto armamento como apoyo político: Franco envió agentes a los países fascistas (Alemania e Italia) y la República pidió ayuda primero a Francia y después a la URSS. La diferente reacción de las grandes potencias determinó en gran medida, tanto el curso como el resultado de la Guerra Civil.

• Y sin embargo, la postura oficial internacional fue la “no intervención” ante el temor de que la guerra española

pudiera internacionalizarse dado el interés expansionista de la Alemania de Hitler: - Gran Bretaña defendía una política de apaciguamiento ante la Alemania nazi que rozaba el “entreguismo”.

Además, la comunidad mercantil británica (con inversiones en minas, vinos, textiles, aceite de oliva y corcho) se inclinaba hacia el bando nacionalista. Por otro lado, miembros del Parlamento británico (sobre todo los conservadores), por razones de clase y educación, simpatizaban con Franco lo mismo que con Mussolini o Hitler. Numerosos miembros del Partido Laborista apoyaron con donativos a la causa republicana.

- En Francia , a pesar del inicial apoyo a la República del jefe del gobierno del Frente Popular, León Blum, la amenaza británica de no ayudarle en el caso de un conflicto con Alemania y el temor a una guerra civil en su propio país entre la derecha y la izquierda, favorecieron la propuesta de creación de un “Comité de No Intervención”.

• El “Comité de No Intervención ”, que implicaba la neutralidad ante el conflicto español y la prohibición de enviar

material de guerra a España, nació el 6 de agosto de 1936 con sede en Londres a partir de la adhesión de Gran Bretaña a la propuesta hecha por Francia. Posteriormente lo suscribieron Italia, Alemania, Portugal, la URSS, Bélgica, Rumanía, Polonia, etc., así hasta 27 países europeos.

� POLÍTICA DE “NO INTERVENCIÓN” (15 de agosto de 193 6)

“Señor Embajador: Las negociaciones llevadas a término entre el Gobierno de la República Francesa y el Gobierno de S.M. del Reino Unido han permitido comprobar su acuerdo común acerca de la actitud que debe ser observada respecto a la situación en España. Tengo el honor, pues, conforme a la propuesta que ha sido ya presentada a otros Gobiernos europeos y recordando las iniciativas tomadas unilateralmente por el Gobierno francés, de hacer a V.E. la siguiente declaración: El Gobierno de la República Francesa, deplorando los trágicos acontecimientos de que es teatro España; decidido a abstenerse rigurosamente de cualquier ingerencia directa o indirecta en los asuntos de ese país; animado de la voluntad de evitar cualquier complicación perjudicial al mantenimiento de las buenas relaciones entre los pueblos; declara lo siguiente:

1. El Gobierno francés prohíbe, en lo que le concierne, la exportación directa o indirecta, la reexportación y el tránsito con destino a España, posesiones españolas y zona española de Marruecos, de todas las armas, municiones y material de guerra, así como de todas las aeronaves montadas o desmontadas y de toda nave de guerra.

2. Esta prohibición se aplica a los contratos en curso de ejecución. 3. El Gobierno francés tendrá informados a los otros Gobiernos participantes en este acuerdo de todas las medidas que tome para

hacer efectiva la presente declaración. 4. El Gobierno francés, en lo que le concierne, pondrá en ejecución esta declaración apenas se hayan adherido a ella los

Gobiernos británico, alemán, italiano, soviético y portugués. A medida que lleguen las adhesiones de los Gobiernos interrogados, serán comunicadas al Gobierno británico, así como a los otros Gobiernos interesados, por parte del Gobierno francés.”

Nota del Ministro de Asuntos Exteriores francés, Iv on Delbos, al embajador británico en París, sir Geo rges Clerk, el 15 de agosto de 1936.

• Sin embargo, el “Comité de No Intervención” fue un fraude ya que mientras Francia e Inglaterra se apresuraron a cumplirlo, Alemania e Italia no dejaron de aportar ayudas a los rebeldes desde el primer hasta el último momento de la guerra. La política de No Intervención fue una enorme injusticia para la República ya que la dejó en clara desventaja en comparación con los rebeldes, confirmando la tendencia antirrevolucionaria de la diplomacia internacional a partir de 1917. El régimen democrático español fue víctima de la pusilanimidad de las potencias occidentales (como en el caso de Austria y Checoslovaquia) al negarle, como Estado soberano y legítimo, el derecho de adquirir armas para defenderse de una insurrección armada.

• Las ayudas internacionales que recibieron cada uno de los contendientes fueron:

- Las tropas sublevadas de Franco fueron apoyadas con diferente intensidad, por Alemania, Italia y Portugal:

� Alemania: su aportación fue fundamentalmente aérea con la “Legión Cóndor” (unos 600 aviones), tanques (120), piezas de artillería (600), municiones y una cifra de soldados que se ha evaluado entre 20.000 y 30.000 hombres. El monto total de la ayuda de Alemania en armamento y otros suministros ascendió a unos

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400 millones de dólares, cifra que España devolvió al III Reich durante la II Guerra Mundial, con el envío de materias primas y alimentos. Para que los envíos parecieran intercambios comerciales se creó en España la HISMA (Compañía Hispano-Marroquí de Transportes) y en Alemania su homóloga la ROWAK (Rohstoff-und-Waren-Kompensation Handelsgessellschaft) bajo la autoridad de Hermann Goering.

� Italia : apoyó con su Armada, aviación (unos 750 aviones), armas y unos 100.000 soldados (“Corpo di Truppe Volontarie”). Invirtieron unos 250 millones de dólares que acabaron pagándose después de 1960. Los dos países ayudaron a Franco en el paso por el Estrecho de Gibraltar de las tropas de Marruecos.

� Portugal : el “Estado Novo” fascista de Oliveira Salazar dejó que en sus puertos desembarcaran suministros alemanes e italianos. Y es posible que en España llegara a haber unos 20.000 voluntarios portugueses diseminados entre las fuerzas nacionalistas. También hubo voluntarios irlandeses (Brigada Irlandesa).

� En EE.UU. mientras el Gobierno se declaraba neutral, algunas compañías norteamericanas , como la Texaco, la Ford o la Firestone vendieron sus productos a crédito a las tropas de Franco.

- La República estuvo apoyada por Rusia (sólo hasta 1938) y por las Brigadas Internacionales:

� Rusia: Stalin aprobó el envió a España de consejeros técnicos y oficiales del ejército (entre 2.000 y 6.000

efectivos), y toda suerte de armamento, especialmente aviones (unos 1.000) y tanques (760). Se ha calculado en 578 millones de dólares el coste de los alimentos y armas enviado por la URSS. Sirvió de aval el oro del Banco de España depositado en el Gosbank de Moscú. Los tres motivos principales que impulsaron a Stalin a tomar esta decisión fueron:

� el intento de contrarrestar el apoyo armado de Alemania e Italia al bando rebelde. � el esfuerzo por desviar la atención de las potencias fascistas desde el área centro oriental del

continente europeo hacia la región mediterránea. � el afán por mantener la credibilidad de la URSS como potencia impulsora de la revolución

proletaria a escala mundial, quedando probada al auxiliar a sus camaradas españoles del PCE. � La llegada del material militar soviético tuvo consecuencias trascendentales. En primer lugar, evitó

el hundimiento del ejército republicano y contribuyó así a la prolongación de los combates; y en segundo lugar, la ayuda rusa reforzó la posición de poder e influencia de los comunistas españoles dentro del gobierno republicano.

� Las Brigadas Internacionales : en ellas se integraron líderes de los partidos socialistas y comunistas de Europa, intelectuales de izquierdas de Estados Unidos, Canadá e Inglaterra, trabajadores de Francia y Bélgica, izquierdistas huidos de Alemania, Italia y Polonia, y aventureros de todas las latitudes. No llegaron a superar los 60.000 hombres y nunca coincidieron más de 18.000 al mismo tiempo. En su organización resultó esencial la Internacional Comunista o “Komintern”. Entre los batallones más conocidos de las Brigadas Internacionales se encontraban el Batallón “Commune de París” (francobelgas), el Batallón “Thälmann” (alemanes), el Batallón “Garibaldi” (italianos), el Batallón “Lincoln” (estadounidenses), el Batallón “Mackenzie-Papineau” (canadienses) o el Batallón “Dimitrov” (yugoslavos).

� Además de la ayuda soviética y las Brigadas Internacionales, la República obtuvo sólo una ayuda de México (presidente Lázaro Cárdenas) que no superó los dos millones de dólares.

� Por otra parte, un gran número de conocidos y prestigiosos intelectuales, artistas y literatos extranjeros se solidarizaron con la causa republica na. Entra ellos se encontraban el científico Albert Einstein, el escritor alemán Thomas Mann, los novelistas ingleses George Orwell y Aldous Huxley, los literatos norteamericanos Ernest Hemingway, William Faulkner y John Dos Passos, el intelectual francés André Malraux (que llegó a combatir en las Brigadas internacionales), los artistas franceses Louis Aragon, Tristan Tzara y André Gide, el dramaturgo alemán Bertolt Brecht o los poetas hispanoamericanos Pablo Neruda y Octavio Paz.

2. EVOLUCIÓN POLÍTICA EN LA ZONA REPUBLICANA .- • Tras el levantamiento militar, comités de partidos y sindicatos obreros se hicieron con el control de los

transportes, los suministros militares y los centros de producción, y en el campo se produjo la ocupación masiva de fincas. Fue el propio golpe de Estado y la posterior guerra los que desencadenaron un profundo proceso revolucionario social de carácter colectivi sta en la zona republicana que proponía el cambio del sistema de propiedad y la destrucción del poder del Estado. Este proceso revolucionario fue llevado adelante por el anarcosindicalismo de la CNT y sus grupos activistas de la FAI y, en parte, por el sindicato socialista de la UGT. Ni el PCE ni el PSOE participaron en estas acciones, a las que inmediatamente se opondrían.

• La revolución popular social y política tuvo especialmente fuerza en Cataluña , donde se creó el Comité de

Milicias Antifascistas que, dirigido por los sindicalistas, parecía controlar todo el poder. Sin embargo, la presencia en el Comité de los comunistas catalanes del PSUC (Partit Socialista Unificat de Catalunya) que compartían con el presidente de la Generalitat, Lluis Companys, la idea de que era preciso frenar la revolución para dedicar todo el esfuerzo al conflicto bélico, garantizó en la práctica la continuidad del poder de la

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Generalitat, aunque con presencia de los sindicatos y los partidos obreros desde finales de septiembre. En Madrid , los sindicatos, que crearon comités del Frente Popular y comités de seguridad pública, dominaron el gobierno durante los dos primeros meses a través del control del transporte y las comunicaciones, pero el aparato del Estado sobrevivió.

• El elemento más significativo de la revolución social fue, sin duda, el colectivismo . En Cataluña la

colectivización de la industria, el comercio, el abastecimiento alimenticio y los transportes fue un hecho desde octubre de 1936. En Madrid y en Cataluña fueron confiscados y socializados casi todos los cines, teatros, hoteles, bares, peluquerías, taxis, ferrocarriles, tranvías, autobuses, compañías de electricidad, gas y agua, así como todo tipo de fábricas, que pasaron a ser dirigidas por comités sindicales controlados por la UGT, la CNT o el PCE.

� INCAUTACIÓN POR LA REPÚBLICA DE INDUSTRIAS ABANDONA DAS (2 de agosto de 1936)

“Teniendo en cuenta que se han presentado en este Ministerio denuncias concretas relativas a que por algunos propietarios, directivos y gerentes de industrias se han abandonado las explotaciones sin dejar representantes debidamente autorizados, ni director que continúe las mismas, se hace preciso adoptar aquellas medidas que garanticen la continuación de las actividades industriales de tales empresas, sin perjuicio de aquellas otras responsabilidades que pudieran caberle con arreglo a las leyes. En virtud de estas consideraciones, de acuerdo con el Consejo de Ministros, y a propuesta del de Industria y Comercio, vengo a decretar lo siguiente: Art. 1º. Los propietarios, representantes, apoderados o gerentes de industrias, almacenes o explotaciones industriales de toda clase que

hayan abandonado éstos, se presentarán en sus respectivas oficinas, talleres o fábricas, en el improrrogable plazo de cuarenta y ocho horas, a partir de la publicación del presente Decreto en la Gaceta de Madrid.

Art. 2º. Transcurrido el plazo señalado en el artículo anterior sin que las indicadas personas se hallan presentado, por sí o mediante representantes legalmente autorizados, el Estado procederá a la incautación de la industria y de cuantos bienes o valores de toda clase aparezcan afectos al negocio. Si por la marcha de la industria o explotación fuese preciso, se procederá asimismo a la incautación de los bienes pertenecientes al propietario, empresario o componente de la razón social de la industria de que se trate.

Art. 3º. De este Decreto se dará cuenta a las Cortes. Dado en Madrid a 2 de agosto de 1936. Manuel Azaña .

El ministro de Industria y Comercio, Plácido Álvare z-Buylla de Lozana.” Gaceta de Madrid, 3 de agosto de 1936.

� DECRETO SOBRE COLECTIVIZACIÓN Y CONTROL DE LA INDUS TRIA Y EL COMERCIO DE CATALUÑA

"La criminal sublevación militar del diecinueve de julio ha producido un trastorno extraordinario en la economía del país. El Consejo de la Generalidad ha de hacerse cargo de la reconstrucción de los estragos que ha causado a la industria y al comercio de Cataluña la traición de los que intentaban imponer en nuestro país un régimen de fuerza. La reacción popular producida por aquella sublevación ha sido de una intensidad tal que ha provocado una profunda transformación económico-social, cuyos fundamentos se están forjando en Cataluña. La acumulación de riquezas en las manos de un grupo de personas cada vez menor, estaba acompañada de la acumulación de miseria por la clase trabajadora y por el hecho de que aquel grupo, con tal de salvar sus privilegios, no ha dudado en provocar una guerra cruenta, y la victoria del pueblo equivaldrá a la muerte del capitalismo. Se hace, pues, necesario organizar la producción, orientarla en el sentido que el único beneficiario debe ser la colectividad, el trabajador, al cual corresponderá la función directiva del nuevo orden social. Se impone así la supresión del concepto de renta que no provenga del propio trabajo. El principio de la organización económico-social de la gran industria ha de ser la producción colectivizada. La sustitución de la propiedad individual por la colectividad la concibe el Consejo de la Generalidad, colectivizando los bienes de las grandes empresas, es decir, el capital, y dejando subsistir la pequeña propiedad privada de los bienes de consumo y de la pequeña industria. (…) Atendidas las consideraciones precedentes y visto el informe del Consejo de Economía, a propuesta del Consejero de Economía y de acuerdo con el Consejo, decreto: Art.1º. De acuerdo con las normas que se establecen en el presente Decreto, las empresas industriales y comerciales de Cataluña se

clasifican en: a) Empresas colectivizadas, en las cuales la responsabilidad de la dirección recae en los mismos obreros que las

integran, representados por un Consejo de Empresa. b) Empresas privadas, en las cuales la dirección está a cargo del propietario o gerente, con la colaboración y

fiscalización del Comité Obrero. Art. 2º. Serán obligatoriamente colectivizadas todas las empresas industriales y comerciales que el día 30 de junio de 1936 tenían más

de cien asalariados y también aquellas en que, a pesar de tener una cifra inferior de obreros, los patronos hayan sido declarados facciosos o hayan abandonado la empresa. No obstante, las empresas de menos de cien obreros podrán ser colectivizadas si se ponen de acuerdo la mayoría de los trabajadores y el propietario o propietarios. En las empresas de más de cincuenta obreros y menos de cien, se podrá hacer también la colectivización siempre que lo acuerden las tres cuartas partes de los trabajadores. (…)

Barcelona, 24 de octubre de 1936. El Consejero Primero, Josep Tarradellas. El Consejero de Economía, Joan P. Fábregas. Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya, 28 de octubre de 1936.” Decreto sobre la colectivización y control de la in dustria y el comercio de Cataluña. Consejería de Economía de la Generalidad de Catalu ña. 24 de octubre de 1936.

• Casi de inmediato comenzaron también las colectivizaciones agrarias con el objetivo de que cada comunidad

local pudiera cultivar los campos y repartirse los beneficios de acuerdo con el trabajo realizado por cada individuo y según sus necesidades familiares. Las colectivizaciones se extendieron por Aragón, Valencia, La Mancha y Andalucía. En general, en todas las zonas republicanas la colectivización fue más intensa allí donde la CNT tenía más fuerza . En Aragón y Andalucía, los cenetistas se apresuraron a quemar los registros de propiedad, ocuparon por la fuerza las fincas y llegaron a colectivizar el 70% de la superficie cultivada.

� COLECTIVIZACIONES ESPONTÁNEAS (POUM Y CNT) (agos to de 1936)

“El Gobierno no existe. Nosotros colaboramos pero ellos no pueden hacer otra cosa que sancionar lo que las masas ya han hecho. Nuestra táctica en el momento presente consiste en fortalecer nuestra posición a través de avances sucesivos tales como apoderarnos de los servicios públicos, las industrias y la tierra, así como la obtención de salarios más elevados, disminución de las horas de trabajo, etc.” Declaraciones de Andrés Nin (líder del POUM, a com ienzos de agosto de 1936.

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“Todos los obreros de todas las industrias deben proceder inmediatamente a apoderarse de las empresas colectivizadas. Debe hacerse lo más rápidamente posible; después deberán nombrar un consejo de obreros para dirigir la industria, aconsejados por los expertos técnicos que sean necesarios.” Boletín de la CNT, 27 de agosto de 1936.

• La vida cotidiana en la retaguardia republicana estuvo marcada por el hambre, el desbarajuste

económico, los ataques aéreos y las continuas evacuaciones. Los alimentos básicos y los productos de primera necesidad pronto escasearon en las ciudades y fue necesario organizar un sistema de racionamiento de comestibles (en Madrid se llegó a fijar una mínima ración de I00 gramos de pan por per-sona y día en 1937) que no pudo impedir la extensión de la desnutrición entre la población civil. La falta de carbón en invierno agravó los problemas y muchas personas se vieron forzadas a comer cáscaras de naranja y animales domésticos para sobrevivir. Además, las alarmas aéreas obligaban a la gente a refugiarse y permanecer largas horas dentro de los sótanos de los grandes edificios o en el interior de los túneles del metro en Barcelona y Madrid (donde paradójicamente continuaron funcionando los teatros y los cines). Las autoridades republicanas también optaron por evacuar a 38.000 niños y enviarlos a Francia, Bélgica, Gran Bretaña, Holanda, México y la URSS para que pudieran escapar de los horrores de la guerra.

• Al producirse la sublevación, el gobierno de Santiago Casares Quiroga dimitió el mismo 17 de julio. Tras un

frustrado intento pacificador para negociar el fin de la insurrección por parte de Azaña, al encargar la presidencia a Diego Martínez Barrio (18 de julio), se otorgó la presidencia del gobierno a José Giral el 19 de julio. Giral, miembro también de Izquierda Republicana, incapaz de imponer su autoridad y ante la inexistencia de un ejército organizado, tuvo que abrir los parques de armamento a las milicias de los partidos y sindicatos , a lo que se habían negado sus antecesores. Impotente ante la marea revolucionaria, trató de frenarla legalizando muchas de sus iniciativas. Se disolvió el ejército (ante el temor de deslealtad de sus mandos) y, en agosto, se decretó la creación de “Batallones de Voluntarios ” (Milicia Voluntaria).

� GOBIERNO REPUBLICANO REGULA LOS BATALLONES DE VOLUN TARIOS (3 de agosto de 1936)

“Es propósito del Gobierno premiar la heroica actuación de los milicianos populares que al lado de las fuerzas leales de la República contribuyen de manera tan decisiva al aplastamiento de la subversión. Quiere el Gobierno, al mismo tiempo, recoger los deseos, reiteradamente expuestos por tan entusiastas luchadores, de encuadrarse en organizaciones regulares de combate, ajustándose a normas de disciplina que multipliquen la eficacia del esfuerzo y permitan obtener, con el mínimo sacrificio, el máximo rendimiento. Art. 1º. Se crean en Madrid los Batallones de Voluntarios, cuya recluta se hará entre los actuales milicianos, cuya edad esté

comprendida entre los veinte y treinta años. Los Batallones serán mandados por oficiales y clases del Ejército, Guardia Civil, Asalto o Carabineros. Los voluntarios estarán uniformados, llevarán un distintivo especial y su compromiso abarcará a todo el tiempo que dure la campaña y, como mínimo, a dos meses.

Art. 2º. Los milicianos que ingresen en los Batallones de Voluntarios tendrán derecho a alojamiento, manutención y vestuario en las mismas condiciones que los soldados del Ejército regular en campañas y disfrutarán de sus mismos haberes y pluses, así como de los grados que vayan adquiriendo en el servicio de las armas.

Los que presten sus servicios a la República en los Batallones de Voluntarios creados en virtud de este Decreto: a) Tendrán derecho preferente para el ingreso en Asalto, Guardia Civil, y Cuerpos subalternos de auxiliares del Estado,

provincia o municipio. b) Durante el tiempo que permanezcan en filas les será reservado su puesto de trabajo. Podrán designar persona que

les sustituya mientras dure su compromiso militar, y si el patrono de la oficina, obra o taller en que trabajasen no aceptara la sustitución, estará obligado a abonar el 60 por 100 del jornal a los familiares del voluntario que éste designe.”

Gaceta de Madrid, 3 de agosto de 1936.

• Desde el principio, el bando republicano careció de unidad política y durante el verano y parte del otoño

de 1936 el poder del Estado sufrió un derrumbe casi total. La acción del gobierno fue sustituida de hecho por la aparición de nuevos centros de poder revolucionario de carácter local o regional dirigidos por sindicatos y partidos obreros. Así, en los diferentes pueblos, ciudades y provincias de la España republicana se crearon de manera espontánea Juntas , Comités y Consejos para imponer un nuevo orden revolucionario que llegaron a unificarse formando Consejos Regionales entre los que destacaron el Consejo de Aragón, el Comité Ejecutivo Popular de Valencia, el Consejo Soberano de Asturias o la Junta de Defensa de Madrid, que pasaron a asumir el control y tomaron las decisiones políticas, económicas y militares por su cuenta. La situación era bastante caótica .

• La tardanza en imponerse de nuevo el orden público, en organizar el Estado y en dirigir el esfuerzo bélico fue

una consecuencia directa de la confusa relación entre las instituciones del Estado y un poder revolucionario que había pasado a manos del pueblo. El dilema se planteaba en los términos de elegir entre dar prioridad a la guerra o a la revolución : � El PCE (con el apoyo de la URSS), el ala moderada del PSOE y los partidos republicanos burgueses

mantenían que era necesario ganar primero la guerra a través del control de la producción (“economía de guerra”) para dar a la revolución la posibilidad de triunfar después.

� La CNT, el trotskista POUM, la UGT y el ala izquierdista del PSOE, consideraban la revolución proletaria a través de la colectivización de tierras y fábricas, la condición necesaria para la victoria sobre el fascismo.

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA 13

• Ante la situación de caos era preciso encontrar un jefe de gobierno republicano capaz de devolver el poder al Estado y de unir a todas las fuerzas republicanas, burguesas y obreras, en un único esfuerza de guerra. El 4 de septiembre de 1.936, agravada la situación con el ataque enemigo a Madrid, se formó un "gobierno de concentración " o “gobierno de unidad ” que presidió el más prestigioso líder sindical socialista, Francisco Largo Caballero (septiembre de 1936 a mayo de 1937). El nuevo gobierno estaba integrado por distintas fuerzas políticas: había ministros socialistas, comunistas, republicanos, nacionalistas vascos y catalanes y, desde comienzos de noviembre, entraron en el gabinete cuatro ministros anarquistas, hecho sin precedentes en el mundo (Federica Montseny se encargó de la cartera de Sanidad y fue la primera mujer en desempeñar un cargo ministerial en la historia de nuestro país). El 1 de octubre se aprobaba el Estatuto vasco , y José Antonio Aguirre se convirtió en el primer “lendakari”.

• El 6 de noviembre el gobierno de la República decidió trasladarse a Vale ncia ante el inminente ataque a

Madrid por los sublevados. • El proyecto de Largo Caballero se basaba en formar una gran “alianza antifascista ”, recomponer el

poder del Estado eliminando Juntas y Comités, aunque reconociendo a los Consejos Regionales, y dirigir la guerra militarizando las milicias de partidos y sindicatos que se integrarían en el nuevo Ejército Popular sobre la base de las Brigadas Mixtas, a fin de dotar de mejor organización y disciplina a las tropas y concentrar todos los esfuerzos en intentar ganar la guerra.

• Aprovechando el respaldo de la URSS, los comunistas españoles fueron incrementando su in fluencia ,

situando a sus hombres en puestos clave e imponiendo así sus decisiones militares, ideológicas y políticas en la zona republicana. Ello significó el enfrentamiento con los anarcosindicalistas que no renunciaban a poner en práctica su política de colectivizaciones y se resistían a integrar sus milicias en el Ejército Popular.

• El personalismo de Largo Caballero en la dirección de la guerra, su apoyo casi exclusivo en los sindicatos y los

enfrentamientos entre comunistas y anarquistas fueron debilitando su gobierno. La crisis estalló definitivamente con los llamados “Fets de Maig” (Sucesos de Mayo) de 1937 en Barcelona, cuando se enfrentaron violentamente en las calles de la ciudad anarquistas y poumistas contra comunistas, socialistas reformistas de Prieto y republicanos. En el fondo de la cuestión seguía estando el dilema “guerra o revolución” que se tradujo en un intento por controlar el poder en Cataluña.

• El PCE exigió la disolución del POUM (acusado de traidor) y ante la negativa del Presidente los comunistas

abandonaron el gabinete, lo que, junto a una situación militar que empeoraba para la República con pérdida de territorio, y a la falta de apoyo de su propio partido, forzaron la dimisión de Largo Caballero .

• Azaña ofreció la presidencia de gobierno al también socialista y anterior ministro de Hacienda, doctor Juan

Negrín (mayo de 1937). Ante la política de no intervención de las democracias occidentales, Negrín tuvo que favorecer el ascenso político y militar de los comunistas, pues sólo en la ayuda soviética se veía el medio de poder sostener una guerra tan larga y adversa. El POUM fue ilegalizado y los anarquistas ya no estaban en el gobierno. Las conquistas revolucionarias de las primeras etapas de la guerra fueron sistemáticamente desmanteladas y se organizó una “economía de guerra” regulándose la producción agrícola e industrial. También se mejoró la capacidad militar culminando la formación del Ejército Popular.

• El programa de gobierno de Negrín se basó en la persistencia del esfuerzo militar y de la resistencia a

ultranza frente a los sublevados de Franco y reconocimiento de la República como único poder legítimo de España. Sin embargo, Negrín también intentó buscar una salida negociada a la guerra . Para ello propuso su célebre “Programa de los Trece Puntos ” (1 de mayo de 1938) en el que promovía: � la independencia e integridad de España. � la salida de España de fuerzas militares extranjeras. � la República popular como forma de Estado. � la garantía de derechos y de propiedad de los ciudadanos. � una amplia amnistía para todos los españoles.

� “PROGRAMA DE LOS TRECE PUNTOS” DEL PRESIDENTE JUAN NEGRÍN (1 de mayo de 1938)

“El gobierno de Unión Nacional (…) declara solemnemente, para conocimiento de sus compatriotas y noticia del mundo, que sus fines de guerra son: 1º. Asegurar la independencia absoluta y la integridad total de España (…). 2º. Liberación de nuestro territorio de fuerzas militares extranjeras (…). 3º. República popular representada por un Estado vigoroso (…). 6º. El Estado español garantizará la plenitud de los derechos al ciudadano en la vida civil y social, la libertad de conciencia y

asegurará el libre ejercicio de las creencias y prácticas religiosas (…). 7º. El Estado garantizará la propiedad, legal y legítimamente adquirida (…). 13º. Amplia amnistía para todos los españoles que quieran cooperar a la inmensa labor de reconstrucción y engrandecimiento de

España (…) cometerá un delito de traición a los destinos de nuestra patria aquél que no reprima y ahogue toda idea de venganza y represalia (…).”

Programa de los 13 puntos del Dr. Negrín. 1 de may o de 1938.

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• Franco no aceptó las propuestas. Tras la Batalla del Ebro el desmoronamiento republicano se aceleró. A

pesar de todo, el gobierno de Negrín seguía insistiendo en la necesidad de la resistencia militar en la esperanza de que en pocos meses la tensa situación internacional propiciara una “guerra mundial” que aligerara la presencia nazi y fascista en España y que involucrara a las democracias occidentales; de ahí el lema acuñado de “¡Resistir es vencer!”. Sin embargo, sus esperanzas sufrieron un duro golpe cuando el 29 de septiembre de 1938 se firmó el “Pacto de Munich ” por el que Gran Bretaña y Francia reconocían la ocupación de los Sudetes por Hitler y se plegaban al expansionismo nazi.

• A finales de 1938, Negrín estableció un nuevo plan de paz aunque reducido a sólo tres puntos :

- salida de las tropas extranjeras. - ausencia de represalias de los vencedores sobre los vencidos. - establecimiento de un régimen democrático.

� LOS “TRES PUNTOS” DEL PRESIDENTE JUAN NEGRÍN (fina les de 1938)

“LUCHAMOS: por la independencia de nuestra Patria libre de ingerencias extranjeras;

por la seguridad de que será el pueblo español quien rija sus destinos y porque tengan fin todas las persecuciones y represalias una vez liquidada la guerra.

3 puntos del Dr. Negrín. Finales de 1938.

• Franco ya había hecho saber públicamente que “sólo aceptaría una rendición sin condiciones”. La

República tenía los días contados . En febrero de 1939, Azaña presentó su dimisión como Presidente de la República y pocos días después, en medio de una enorme confusión, el coronel Segismundo Casado (que había sido nombrado Jefe del Estado Mayor republicano) dio un golpe de Estado en Madrid contra el gobierno de Negrín.

• La quiebra del poder central gubernamental y la fragmentación política debilitaron al bando republicano y

fueron dos de los elementos que más contribuyeron a su derrota final. Del mismo modo, la falta de unidad de mando impidió una dirección ordenada y eficiente, tanto de las operaciones militares como del esfuerzo económico necesario para la victoria. El general Vicente Rojo escribiría: “Franco había vencido por nuestros errores”. Pero, sin duda alguna, fueron el apoyo de los países fascistas al ejército sublev ado de Franco y la actitud cobarde e injusta de las democracias o ccidentales (Tratado de No Intervención) las causas que más contribuyeron a la derrota del gobierno legítimo de la República.

3. EVOLUCIÓN POLÍTICA EN LA ZONA NACIONAL: CONCENTR ACIÓN DE PODERES EN FRANCO. LA DICTADURA.-

• Los grupos políticos y sociales que habían dado su apoyo a los sublevados militares carecían de un proyecto

político definido para reemplazar a las instituciones republicanas en caso de un rápido triunfo. Por eso aceptaron la supremacía del ejército .

• Tras la muerte en accidente de aviación (en Lisboa, el 20 de julio) del general Sanjurjo, considerado el jefe de

la sublevación, el 23 de julio de 1936 los militares sublevados crearon en Burgos una Junta de Defensa Nacional integrada por militares y presidida por el general más antiguo, Miguel Cabanellas. Su misión era la gobernación provisional del territorio ocupado pero sin jurisdicción en los asuntos militares. La Junta prohibió la actividad de los partidos políticos, suspendió la Constitución, decretó la paralización de la reforma agraria en los territorios ocupados y extendió el “estado de guerra ” a todo el territorio. En estos momentos la España nacionalista estaba dividida en tres bloques de poder: el general Queipo de Llano desde Sevilla, el general Mola desde Burgos y el general Franco que avanzaba hacia Madrid con su ejército africano.

� DECLARACIÓN-PROGRAMA DE LA JUNTA DE DEFENSA NACIONA L (23 de julio de 1936)

“Unas Cortes ganadas por el afán bolchevizante, tanto más peligrosas para la Patria cuanto con más brío despedazaban el Estado español para ofrendárselo, insensatos, al júbilo de las Repúblicas soviéticas. Un gobierno engendrado en el seno del marxismo virulento y especialmente resentido de las adversas jornadas de octubre, que no teniendo otro sostén constitucional que los caudillos de la subversión, de la lucha de clases y del crimen, tiene que claudicar y resignar su grandeza ante la tea del incendiario y la pistola del asesino. ¡Basta! Frente al marxismo, España. Frente a la anarquía, la ley, y llenar el abismo odioso que separaba a los españoles con los frutos bienhechores de una sólida obra de gobierno que asiente la solidaridad nacional bajo una autoridad inflexible que imponga el orden público, y asegure la paz, y propulse las menguadas energías de la economía y de la industria, de cuyas iniciativas han de nutrirse las hasta ahora desorientadas y nobles energías del trabajo.” Declaración-programa de la Junta de Defensa Nacion al (Burgos, 23 de julio de 1936)

• La mayoría de los generales pronto comprendió la necesidad de unificar el mando de las tropas, de manera

que todo el poder, incluso el político, quedara acumulado en un único jefe para garantizar así una dirección estratégica más eficaz de las operaciones bélicas, sobre todo cuando quedó claro que el fracaso del golpe de Estado había provocado una guerra civil. El 30 de septiembre, en Salamanca, Franco fue elegido comandante único con el apoyo de la mayoría de los generales reunidos y tras haber insinuado tanto a

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monárquicos como a falangistas que secundaría sus objetivos políticos. Franco se convertía además en el único interlocutor válido a la hora de solicitar ayuda y reconocimiento a Hitler y a Mussolini.

• El primero de octubre de 1936 , se publicó el decreto por el que se nombraba al general Franco “Jefe del

Gobierno del Estado ” y “Generalísimo de los Ejércitos Españoles ”. Desapareció la Junta de Defensa Nacional y se estableció una Junta Técnica del Estado , con sede en Valladolid y en Burgos, dividida en Comisiones mandadas por militares pero en las que había también civiles. El Cuartel General del Generalísimo se trasladó a Salamanca.

� NOMBRAMIENTO DE FRANCO (28 de septiembre de 1936)

“Art. 1º. En cumplimiento de acuerdo adoptado por la Junta de Defensa Nacional, se nombra Jefe del Gobierno del Estado español al

Excelentísimo señor General de División don Francisco Franco Bahamonde, quien asumirá todos los poderes del nuevo Estado. Art. 2º. Se le nombra, asimismo, Generalísimo de las fuerzas nacionales de Tierra, Mar y Aire, y se le confiere el cargo de General Jefe

de los Ejércitos de operaciones. Art. 3º. Dicha proclamación será revestida de forma solemne, ante representación adecuada de todos los elementos nacionales que

integran este movimiento liberador, y de ella se hará la oportuna comunicación a los Gobiernos extranjeros.” Decreto publicado en el Boletín Oficial de la Junt a de Defensa Nacional, Burgos, 28 de septiembre de 1936.

• Entre los factores que favorecieron la rápida ascensión de Fr anco a la dictadura unipersonal y al

mando supremo estaban sus éxitos militares al frente del ejército de África, su habilidad para entablar contactos y obtener ayuda material de alemanes e italianos, y la ausencia de posibles rivales, ya que otros generales de prestigio como José Sanjurjo, Manuel Goded o Joaquín Fanjul habían muerto al principio de la guerra. Este poder personal de Franco se vería reforzado por la muerte del general Mola en accidente de aviación (3 de junio de 1937) y por la ejecución, en una cárcel de Alicante, de José Antonio Primo de Rivera, jefe de la Falange (20 de noviembre de 1936).

• El general Francisco Franco Bahamonde , según el historiador Paul Preston, “austero y sin sentido del

humor, había aprendido a inculcar la lealtad por medio del miedo durante sus años en África. Su estilo militar, apropiado para una guerra colonial de menor intensidad, también reflejaba su experiencia marroquí: era frío, reservado y despiadado. Su taciturna reserva gallega tendía a ocultar una falta de ideas políticas claramente definidas. Pero nadie podrá poner en duda su tenacidad política. Esta cualidad quedó completamente clara en su forma de dirigir la guerra. Vacilante a la hora de tomar decisiones importantes, se ha dudado sobre su capacidad como militar. Ciertamente, su estilo de mando testarudo y rutinario era la desesperación de sus aliados alemanes. A lo largo de la guerra sacrificó vidas y desperdició tiempo en campañas innecesarias para ganar un territorio militarmente irrelevante. Sin embargo, su lenta estrategia de tortuga facilitó la eliminación de izquierdistas y liberales, lo que iba a ser uno de sus más firmes pilares después de 1939”.

• El terror en la zona nacionalista fue crucial para asentar el poder y la unidad de los rebeldes. A medida que

los nacionalistas conquistaban un nuevo territorio, se mataba por millares a los miembros de los partidos del Frente Popular y de los sindicatos. Desde el principio de la contienda, una Falange en proceso de expansión con la incorporación de nuevos miembros se convirtió en la sangrienta fuerza represiva auxiliar que liberó a los militares de la tarea de purgar políticamente a sus enemigos civiles de la izquierda. En su fervor religioso los requetés carlistas también fueron culpables de bárbaros excesos. Y lo que hacía que esos horrores parecieran aún más graves era el hecho de que se llevaran a cabo bajo la atenta supervisión de la Iglesia y las fuerzas de la ley y el orden: el Ejército, la Guardia Civil y la Policía . Sevilla, Córdoba, Navarra, Badajoz o Málaga fueron testigos del terror (actualmente “Recuperación de la Memoria Histórica”).

• Tras la prohibición de todos los partidos del Frente Popular y de los sindicatos, sólo actuaban como grupos

políticos Falange Española que, tras el fusilamiento de José Antonio Primo de Rivera, tenía como en Manuel Hedilla a su líder, y Comunión Tradicionalista (los requetés carlistas) con su presidente Manuel Fal Conde . Por el momento se toleraba a la CEDA, aunque Gil Robles había perdido su oportunidad al resistirse inicialmente a la llamada de Mola. Otros grupos monárquicos estaban desmantelados y el propio Franco respondió negativamente a la petición de Juan de Borbón , hijo y heredero de Alfonso XIII, para incorporarse a las tropas de los sublevados.

• A principios de 1937, Franco expresó su negativa a reponer en el trono a Alfonso XIII y encargó a su cuñado

Ramón Serrano Súñer (abogado y diputado de la CEDA y que había contribuido a traspasar parte de su militancia a la Falange) la dirección de los asuntos políticos, es decir, la creación de una completa y formal estructura de Estado , de manera que Franco pudiera concentrarse en la conducción militar de la guerra.

• El proceso de institucionalización del Nuevo Estado franquista culminó el 30 de enero de 1938 con la

formación del primer gobierno de Franco con ministros y con la desaparición de la Junta Técnica del Estado. En la persona de Franco se concentraba la Jefatura del Estado y la Presidencia del Gobiern o, además de ser Generalísimo de los Ejércitos y Jefe del Movimiento .

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• Desmontar el sistema parlamentario democrático y constitucional, derogar la legislación reformista republicana, defender los intereses socioeconómicos de los grupos que apoyaban el alzamiento y construir las bases de un “Nuevo Estado ” autoritario tomando como modelo institucional el régimen fascista italiano.

• Las medidas que se adoptaron de manera inmediata fueron:

� Implantación de una “economía de guerra” desde el p rincipio , creándose el “Servicio Nacional del Trigo” (compra de toda la producción a precio oficial para distribuir los excedentes) que evitó la escasez y garantizó el suministro a las tropas.

� Anulación de la Ley de Reforma Agraria, devolución de las fincas expropiadas a sus antiguos propietarios y expulsión de todos los campesinos asentados en esas tierras.

� Prohibición de todos los partidos políticos y sindi catos por “envenenar al pueblo con supuestas reivindicaciones sociales”, significando el fin de la libertad de asociación (decreto de septiembre de 1936).

� El 19 de abril de 1937 Franco dio a conocer el “Decreto de Unificación ” por el que se creaba un partido único y subordinado al Estado que fue denominado “Falange Española Tradicionalista y de las JONS ” (FET de las JONS ) unificando a falangistas y carlistas. Este partido único es lo que se conocerá como “Movimiento Nacional ”. Franco sería “Jefe del Partido ” y “Jefe del Estado ”. Con esta maniobra Franco reforzó su posición de poder y logró poner bajo su control personal a todos los grupos políticos que conformaban el bando sublevado. El antiguo dirigente cedista Gil Robles y los monárquicos ultraderechistas apoyaron esta medida, pero los dirigentes carlistas (como Manuel Fal Conde) o falangistas (como Manuel Hedilla) que se resistieron a esta forzosa unificación fueron silenciados con destierros o encarcelados. Esta nueva fuerza política aportó al recién nacido Estado franquista sus símbolos (el escudo con el yugo y las flechas), canciones (el “Cara al sol”), vestuario (boina roja carlista y camisa azul falangista) y saludos (brazo alzado y mano abierta y extendida).

� DECRETO DE UNIFICACIÓN (19 de abril de 1937)

"Decreto nº 255 Una acción de gobierno eficiente (...) exige supeditar al destino común la acción individual y colectiva de todos los españoles (...) Llegada la guerra a punto muy avanzado y próxima la hora de la victoria, urge acometer la gran tarea de la paz, cristalizando en el Estado nuevo el pensamiento y estilo de nuestra Revolución Nacional (...) Esta unificación que exijo en el nombre de España y en el nombre sagrado de los que por ella cayeron (héroes y mártires) (...) no quiere decir ni conglomerado de fuerzas ni mera concentración gubernamental, ni unión pasajera (...) No cerramos el horizonte a la posibilidad de instaurar en la Nación el régimen secular que forjó su unidad y su grandeza histórica (...) Por todo lo expuesto, DISPONGO: Artículo Primero: Falange Española y Requetés, con sus actuales servicios y elementos, se integran, bajo Mí Jefatura, en una sola entidad política de carácter nacional que, de momento, se denominará Falange Española Tradicionalista y de las JONS (...) Dado en Salamanca a diecinueve de abril de 1937. Francisco Franco.

� El 9 de marzo de 1938 se promulgó la primera de las “Leyes Fundamentales” del régimen de Franco, el

“Fuero del Trabajo ”, inspirado en la “Carla del Lavoro” del fascismo italiano, en la doctrina social de la Iglesia y en algunos principios de la Falange. Esta legislación sentó las bases de la organización corporativa del Nuevo Estado y del sindicalismo vertical como una organización estatal que agrupaba a empresarios y trabajadores.

� Supresión del derecho de huelga y declaración de la misma como un delito grave contra la patria (en marzo de 1938).

� Legislación sobre imprenta y prensa que anulaba la libertad de expresión a través del establecimiento de una estricta censura con el propósito de controlar el contenido y la difusión pública de todo tipo de textos escritos y editados en España o procedentes del extranjero (decreto de abril de 1938).

� Abolición de los Estatutos de autonomía regionales (disposición legislativa de abril de 1938), aunque se mantuvieron los sistemas fiscales especiales forales de Álava y Navarra, dos provincias que apoyaron la sublevación del 18 de julio y donde los carlistas poseían una fuerte implantación.

� El 13 de febrero de 1939 se decretó la “Ley de Responsabilidades Políticas ” que facultaba a los tribunales mixtos (formados por el ejército, el poder judicial y miembros de Falange) para la aplicación de penas a todas las personas que hubieran estado vinculadas de una u otra manera a la República.

� LEY DE RESPONSABILIDADES POLÍTICAS (13 de febrero de 1939)

“Art. 1º. Se declara la responsabilidad política de las personas, tanto jurídicas como físicas que desde el 1º de octubre de 1934 y antes

de 18 de julio de 1936, contribuyeron a crear o a agravar la subversión de todo orden de que se hizo víctima a España y de aquellas otras que, a partir de la segunda de dichas fechas, se hayan opuesto o se opongan al Movimiento Nacional con actos concretos o con pasividad grave.

Art. 2º. Como consecuencia de la anterior declaración (…) quedan fuera de la Ley todos los partidos y agrupaciones políticas y sociales que, desde la convocatoria de las elecciones celebradas el 16 de febrero de 1936, han integrado el llamado Frente Popular, así como los partidos y agrupaciones aliados y adheridos a éste por el solo hecho de serlo, las organizaciones separatistas y todas aquellas que se hayan opuesto al Triunfo del Movimiento Nacional. (…)

Art. 3º. Los partidos, agrupaciones y organizaciones declaradas fuera de la ley, sufrirán la pérdida absoluta de sus derechos de toda clase y la pérdida total de sus bienes. Éstos pasarán íntegramente a ser propiedad del Estado.

Art.4º. En virtud de lo dispuesto en el artículo 1º, quedan incursos en responsabilidad política y sujetos a las sanciones que se les impongan en los procedimientos que contra ellos se sigan, las personas individuales que se hallen comprendidas en alguno de los casos supuestos siguientes:

a) Haber sido o ser condenado por la jurisdicción militar por alguno de los delitos de rebelión, auxilio, provocación, inducción o excitación a la misma, o por los de traición (…).

b) Haber desempeñado cargos directivos en los partidos, agrupaciones o asociaciones a que alcanza la declaración del artículo 2º .

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c) Haber figurado (…), como afiliado de los partidos, agrupaciones y asociaciones a que se refiere el apartado anterior (…). d) Haber desempeñado cargos o misiones de carácter político o administrativo de índole civil y calificada confianza por

nombramiento del Gobierno del Frente Popular (…).” Boletín Oficial del Estado, 13 de febrero de 1939.

� Leyes favorables a la Iglesia que acabaron con la secularización emprendida por la República: se

derogaron las leyes del matrimonio civil y del divorcio, se estableció el culto religioso en la enseñanza y en el ejército, y se instituyó una retribución estatal al clero.

• La iglesia católica española prestó un decidido apoyo ideológico y propagandístico a los militares

sublevados. Con la intención de contribuir al triunfo del bando franquista, la jerarquía eclesiástica se encargó de la elaboración y difusión de un conjunto de argumentos teóricos que fueron utilizados para legitimar el golpe antirrepublicano. En diferentes documentos dirigidos al Vaticano y a los fieles de dentro y fuera de España, los obispos justificaron el levantamiento militar ( que fue calificado de rebelión necesaria “contra la tiranía de los sin Dios”) y describieron el conflicto como una “Santa Cruzada para salvar la civilización cristiana” y la religión amenazadas por los enemigos “comunistas y anarquistas que querían acabar con Dios y gozaban con el asesinato y la destrucción”. Además, condenaron y satanizaron al bando republicano, que fue presentado como una “encarnación de las fuerzas del Mal” compuesta por “bárbaros”, “antipatriotas” e “hijos de Caín”. Desde la Pastoral Colectiva de los Obispos , fechada el 1 de julio de 1937, la Iglesia española apoyó expresamente a los sublevados. El Vaticano reconoció en la práctica al gobierno de Franco el 28 de agosto de 1937, y envió a España a un delegado apostólico, monseñor Ildebrando Antoniutti, el 7 de octubre. El reconocimiento de derecho sobrevino el 18 de mayo de 1938, cuando el arzobispo Gaetano Cicognani fue nombrado nuncio apostólico, y Franco envió un embajador a la Santa Sede. El 16 de abril de 1939, el recién elevado a la silla pontificia papa Pío XII ya había saludado la victoria definitiva de Franco con el siguiente mensaje: “Con inmenso gozo Nos dirigimos a vosotros, hijos queridísimos de la católica España, para expresaros Nuestra paterna congratulación por el don de la paz y de la victoria con que Dios se ha dignado coronar el heroísmo cristiano de vuestra fe y caridad, probado en tantos y tan generosos sufrimientos”. Se estaba cimentando el “nacionalcatolicismo ”, pilar fundamental de la dictadura franquista .

� RADIOMENSAJE A ESPAÑA DE S.S. PÍO XII (16 de abril de 1939)

Con inmenso gozo Nos dirigimos a vosotros, hijos queridísimos de la católica España, para expresaros Nuestra paterna congratulación por el don de la paz y de la victoria con que Dios se ha dignado coronar el heroísmo cristiano de vuestra fe y caridad, probado en tantos y tan generosos sufrimientos. Anhelante y confiado esperaba Nuestro Predecesor, de santa memoria, esta paz providencial, fruto sin duda de aquella fecunda bendición que en los albores mismos de la contienda enviaba «a cuantos se habían propuesto la difícil y peligrosa tarea de defender y restaurar los derechos y el honor de Dios y de la Religión»…

ESPAÑA, NACIÓN ELEGIDA

Los designios de la Providencia, amadísimos hijos, se han vuelto a manifestar una vez más sobre la heroica España. La Nación elegida por Dios como principal instrumento de evangelización del Nuevo Mundo y como baluarte inexpugnable de la fe católica, acaba de dar a los prosélitos del ateísmo materialista de nuestro siglo la prueba más excelsa de que por encima de todo están los valores eternos de la religión y del espíritu. La propaganda tenaz y los esfuerzos constantes de los enemigos de Jesucristo parece que han querido hacer en España un experimento supremo de las fuerzas disolventes que tienen a su disposición repartidas por todo el mundo; y aunque es verdad que el Omnipotente no ha permitido por ahora que lograran su intento, pero ha tolerado al menos algunos de sus terribles efectos, para que el mundo viera cómo la persecución religiosa, minando las bases mismas de la justicia y de la caridad, que son el amor de Dios y el respeto a su santa ley, puede arrastrar a la sociedad moderna a los abismos no sospechados de inicua destrucción y apasionada discordia. Persuadido de esta verdad el sano pueblo español con las dos notas características de su nobilísimo espíritu, que son la generosidad y la franqueza, se alzó decidido en defensa de los ideales de fe y civilización cristianas, profundamente arraigados en el suelo de España; y ayudado de Dios, «que no abandona a los que esperan en El» (Iudith, XIII, 17), supo resistir al empuje de los que, engañados o que creían en un ideal humanitario de exaltación del humilde, en realidad no luchaban sino en provecho del ateísmo ...

SANTA MEMORIA

Y ahora, ante el recuerdo de las ruinas acumuladas en la guerra civil más sangrienta que recuerda la historia de los tiempos modernos, Nos con piadoso impulso, inclinamos ante todo nuestra frente a la santa memoria de los Obispos, Sacerdotes, Religiosos de ambos sexos y fieles de todas edades y condiciones que en tan elevado número han sellado con sangre su fe en Jesucristo y su amor a la Religión Católica: «majorem hac dilectionem nemo habet»: «no hay mayor prueba de amor» (Io., XV, 13). Reconocemos también nuestro deber de gratitud hacia todos aquellos que han sabido sacrificarse hasta el heroísmo en defensa de los derechos inalienables de Dios y de la Religión, ya sea en los campos de batalla, ya también consagrados a los sublimes oficios de caridad cristiana en cárceles y hospitales...

POLÍTICA DE PACIFICACIÓN

A vosotros toca, Venerables Hermanos en el Episcopado, aconsejar a los unos y a los otros, que en su política de pacificación todos sigan los principios inculcados por la Iglesia y proclamados con tanta nobleza por el Generalísimo: de justicia para el crimen y de benévola generosidad para con los equivocados. Nuestra solicitud, también de Padre, no puede olvidar a estos engañados, a quienes logró seducir con halagos y promesas una propaganda mentirosa y perversa. A ellos particularmente se ha de encaminar con paciencia y mansedumbre Vuestra solicitud Pastoral: orad por ellos, buscadlos, conducidlos de nuevo al seno regenerador de la Iglesia y al tierno regazo de la Patria, y llevadlos al Padre misericordioso, que los espera con los brazos abiertos... En prenda de las copiosas gracias, que os obtendrán la Virgen Inmaculada y el Apóstol Santiago, patronos de España, y de las que os merecieron los grandes Santos españoles, hacemos descender sobre vosotros, Nuestros queridos hijos de la católica España, sobre el Jefe del Estado y su ilustre Gobierno, sobre el celoso Episcopado y su abnegado Clero, sobre los heroicos combatientes v sobre todos los fieles, Nuestra Bendición Apostólica.

Pío XII. 16 de abril de 1939.

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA 18

ANEXO 1936 16 febrero: triunfo del frente Popular en las elecciones. La CEDA sólo logró 87 diputados. 17 de febrero: el general Fanjul fracasa en su intento de promover un motín de las fuerzas del cuartel de la Montaña de Madrid contra los resultados electorales. 19 de febrero: Franco se entrevista con Portela Valladares para que anule las elecciones. El nuevo gobierno de Azaña destinó a Franco a la Comandancia General de Canarias, que el general consideró un destierro. 8 de marzo: reunión de Franco y José Antonio Primo de Rivera, pero no simpatizaron. Reunión de generales - Franco, Mola, Fanjul, Varela, Kindelán, etc.- en la que acordaron la preparación de un movimiento militar si llegaran a considerarlo necesario. Asume la dirección del movimiento el general Mola. 11 de marzo: atentado, presuntamente falangista contra el jurista Jiménez de Asúa, vicepresidente de las Cortes, que salió ileso. 15 de marzo: un falangista colocó una bomba en casa de Largo Caballero. 17 de abril: El consejo de Ministros declaró ilegales todas las organizaciones de tipo fascista en España. 10 de mayo: Azaña Presidente de la República. 12 de mayo: Casares Quiroga, jefe de Gobierno. 13 de mayo: Indalecio Prieto salió ileso de un atentado en Écija. Junio: el general Mola y Fal Conde ( tradicionalista ) llegaron a un acuerdo y fijaron la fecha del levantamiento militar entre el 10 y 20 de julio. 23 de junio: Franco remitió una carta al presidente del Gobierno Casares Quiroga y le propuso que recurriera al Ejército para mantener el orden en el país, advirtiéndole “ de futuras luchas civiles”. 11 de julio: Sanjurjo envió una carta a Mola con las últimas órdenes para el alzamiento militar. El avión Dragón Rapide, alquilado por Luís Bolín para trasladar a Franco de Canarias a Marruecos, despegó de Londres. 12 de julio: asesinato del teniente de la Guardia de Asalto José Castillo por la extrema derecha. 13 de julio: asesinato del diputado Calvo Sotelo por un grupo de guardias de asalto. 17 de julio: Inicio de la rebelión militar en Melilla a las cinco de la tarde.

18-19 de julio: Franco se unió al alzamiento. Partió en el Dragón Rapide hacia Marruecos donde se pone al frente del Ejército nacionalista. Mola decreta el estado de guerra en Pamplona, Queipo de LLano en Sevilla, Goded en Baleares, Cabanellas en Zaragoza. El levantamiento

triunfa sólo en parte de España y estalló la Guerra Civil. Azaña encargó la formación de un Gobierno a Martínez Barrio, presidente de las Cortes, quien tras infructuosos contactos con vistas a una conciliación en los que llegó a ofrecer a Mola el ministerio de la Guerra, renuncia (Gobierno Relámpago) Se forma el 19 un nuevo gobierno presidido por Giral, que solicita ayuda al Gobierno del Frente Popular francés. 20 de julio: Fallecimiento del general Sanjurjo en accidente de aviación cuando se disponía a regresar a España desde Portugal para encabezar el levantamiento militar. Las tropas republicanas asaltan el cuartel de la Montaña, último reducto de los rebeldes en Madrid. 22 de julio: entrevista de Bolín y el marqués Luca de Tena con Mussolini para pedirle que ayude a Franco. 24 de julio: formación en Burgos de una Junta de Defensa Nacional presidida por el general Cabanellas. 25 de julio: entrevista con Goering y Hitler para pedirle ayuda para Franco. 27-29 de julio: llegada a Marruecos de los primeros aviones alemanes e italianos para trasladar al ejército de África a la Península. 1 de agosto: Ledesma Ramos y Ramiro de Maeztu fusilados en Madrid. 4-5 de agosto: Francia e Inglaterra firmaron el acuerdo de no intervención en la guerra de España, con la prohibición expresa de no suministrar armamento. El día 6, la URSS se adhirió, aunque exigió que se suspendiera inmediatamente la ayuda alemana e italiana y que Portugal se adhiriese al acuerdo. El gobierno francés cerró las fronteras a los envíos de otros países europeos. La URSS mantuvo su ayuda a España republicana durante toda la guerra, con envío de alimentos y armas por valor de 578 millones de dólares con el aval del oro del Banco de España, depositados en el Gosbank de Moscú, y otros 120 millones de dólares que no recuperó. 7 de agosto: Franco instala su cuartel general en Sevilla. 11 de agosto: entrada de las tropas de Franco en Mérida. 15 de agosto: El general Yagüe ocupa Badajoz. 19 de agosto: Federico García Lorca es fusilado por las tropas franquistas. 26 de agosto: llegada de las tropas de Franco a Cáceres. 27 de agosto: primer bombardeo aéreo de Madrid por la aviación alemana. 5 de septiembre: formación de un nuevo gobierno republicano, presidido por Largo Caballero y con participación comunista. 12 de septiembre. Reunión de generales rebeldes en Salamanca. Franco se proclamó generalísimo de los Ejércitos sin hacer público su nombramiento hasta

el día 28 de septiembre. 13 de septiembre: las tropas del general Mola ocupan San Sebastián. 29 de septiembre: un decreto de Junta de Defensa amplió los poderes de Franco a Jefe del Estado. 30 de septiembre: el obispo de Salamanca, Enrique Pla y Deniel definió la guerra como “ una cruzada por la religión, por la patria y la civilización”. 7 de octubre: El País Vasco se convierte en región autonómica tras la proclamación del Estatuto. 18 de octubre: el ejército de África se situó a 17 kilómetros de Madrid. 4 de noviembre: reajuste del gobierno republicano de Largo Caballero que incorporó cuatro ministros anarquistas. Un día después el gobierno se marchó a Valencia dejando en Madrid una Junta de Defensa presidida por el general Miaja 8 de noviembre: inicio del ataque general contra Madrid. 18 de noviembre: Alemania e Italia reconocen oficialmente al Gobierno de Franco. 20 de noviembre: fusilamiento de José Antonio Primo de Rivera. 1937 5-15 de febrero: batallas del Jarama. 8 de febrero: conquista de Málaga por tropas nacionales e italianas. 8-21 de marzo: batalla de Guadalajara. 19 de abril: Decreto de unificación con la creación de la Falange Española Tradicionalista y de las JONS que suprimió el resto de los partidos. 22 de abril: Franco nombra a Manuel Hedilla jefe de la Falange, pero renunció al cargo y se manifestó en contra de la unificación. Hedilla fue sometido a consejo de guerra y condenado a dos penas de muerte: la primera le fue conmutada por 20 años de cárcel, la segunda indultada por Franco. 24 de abril: se imponen los símbolos del nuevo estado: saludo brazo en alto de los falangistas, bandera bicolor monárquica junto a la rojinegra falangista y la cruz de San Andrés de los tradicionalistas. 26 de abril: bombardeo alemán de Guernica (Vizcaya). 17 de mayo: Nuevo gobierno de la República, encabezado por Juan Negrín 3 de junio: muerte del general Mola en accidente de aviación en la provincia de Burgos. 19 de junio: las fuerzas nacionales ocupan Bilbao. 6-26 de julio: violentas batallas en Brunete: la actuación decisiva de la Legión Cóndor decidió la victoria para los nacionalistas. 24 de agosto: batalla de Belchite. 7 de octubre: la República decreta la expropiación sin indemnización de las tierras de los insurrectos.

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21 de octubre: la ocupación de Gijón por los nacionalistas acabó con el frente republicano en el norte. 15 de diciembre: Comienza la batalla de Teruel. 1938 1 de febrero: primer gobierno de Franco que incluye carlistas, monárquicos y falangistas, además de militares. Ramón Serrano Súñer, cuñado de Franco, se convirtió en el “hombre fuerte “ del nuevo régimen. 9 de marzo: promulgación en Burgos del Fuero del Trabajo que definía la ideología nacionalsindicalista. 3-5 de abril: ocupación de Lérida por los nacionales. Franco decretó la abolición del Estatuto de autonomía de Cataluña. 15 de abril: las tropas nacionalistas llegan a Vinaroz y dividen en dos la zona republicana. 22 de abril: Ley Serrano Súñer: censura en la prensa. 1 de mayo: el presidente del Gobierno Negrín hace público su programa de 13 puntos para acabar con la guerra pero no tiene ninguna acogida. 25 de julio-15 de noviembre: batalla del Ebro, la más larga y sangrienta de la guerra: 33.000 muertos en el bando nacionalista y 30.000 muertos y 20.000 prisioneros en el bando republicano. 9 de septiembre: conversaciones de paz, secretas y sin resultado, entre el duque de alba y Negrín. 28 de octubre: fallecimiento de Ramón Franco en accidente de aviación. 22 de noviembre: las Brigadas internacionales comienzan a abandonar España. 1939 26 de enero: caída de Barcelona en poder de las tropas de Franco. 1 de febrero: última reunión de las cortes republicanas. 5-9 de febrero: toda Cataluña quedó ocupada por las tropas de Franco. Desbandada republicana hacia la frontera francesa: desde el 27 de enero más de medio millón de personas pasaron a Francia. 9 de febrero: Ley de responsabilidades políticas: depuración y represión franquista. 28 de febrero: Azaña presentó en París su dimisión irrevocable como presidente de la República. Martínez Barrio asumió la presidencia aunque no tenía intención de regresar a España. 4 de marzo: golpe del coronel Casado en Madrid contra el Gobierno de la República encabezado por Negrín con apoyo de los anarquistas y creación de un Consejo Nacional de Defensa para poner fin a la guerra con la participación del dirigente socialista Julián Besteiro y del general Miaja. Los comunistas se opusieron inicialmente, pero el 12 de marzo dieron su conformidad.