La mamografía-3D-tomosintesis mejora la sensibilidad de la mamografía analógica, reduciendo...

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La mamografía-3D-tomosintesis mejora la sensibilidad de la mamografía analógica, reduciendo las dosis de radiación Los datos disponibles de los programas de cribado en cáncer de mama avalan su eficacia en términos de supervivencia, ya que una detección precoz de los tumores ayuda a mejorar su pronóstico. Esto se traduce en un menor número de muertes y en un aumento de la supervivencia y de la calidad de vida de las mujeres afectadas. En España, el cáncer de mama es la primera causa de muerte en las mujeres con edades comprendidas entre los 40 y 44 años y una de cada siete mujeres mayores de 70 años tiene cáncer de mama. De ahí, la importancia de un seguimiento controlado y sistematizado de las mujeres. En este sentido, hay una disparidad de criterios en cuanto a la edad a la que se debe empezar a hacer las mamografías en los programas de cribado, aunque la información disponible sugiere que una mamografía anual a partir de los 40 años salva vidas. En Europa, los programas de cribado de cáncer de mama incluyen mamografías a partir de entre los 40 y 50 años y dejan de hacerse a los 65. Esto hace que se escapen casos sin diagnosticar en los grupos de edad superior e inferior. En los últimos años, la detección precoz del cáncer de mama cuenta con un gran aliado: la tomosíntesis, que mejora la imagen ofrecida por la mamografía con una dosis menor de radiación. Con esta prueba diagnóstica se reducen las dosis de radiación a la mitad respecto a la mamografía convencional y se anticipa un año la detección de las lesiones. Se pueden ver antes que con la mamografía convencional y cuando son más pequeñas, ya que lesiones de un pequeño tamaño o de una localización marginal se ven mejor con la tomosíntesis. Imagen global Esta prueba permite obtener cortes de la mama de 1 mm de espesor que después con el programa C-view se reconstruyen en una imagen completa de la mama. De esta forma, se pueden delimitar mejor las zonas donde se localizan las lesiones y verlas en 3D: con localización y profundidad exactas. Esto permite analizar al detalle la lesión, sus límites y sus características. El ordenador sintetiza una imagen que resulta de la superposición de las láminas de imagen obtenidas con el tomógrafo y el especialista puede navegar de una a otra a través de las láminas de imágenes evitando así la superposición de la densidad del resto de la glándula.

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Los datos disponibles de los programas de cribado en cáncer de mama avalan su eficacia en términos de supervivencia, ya que una detección precoz de los tumores ayuda a mejorar su pronóstico.Nos habla de ella el Dr. José María Pérez Aznar, de la Unidad de Diagnóstico por Imagen de Mama y Densitometría del Hospital Nuestra Señora del Rosario de Madrid.

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La mamografía-3D-tomosintesis mejora la sensibilidad de la mamografía analógica, reduciendo las dosis de radiación

Los datos disponibles de los programas de cribado en cáncer de mama avalan su eficacia en términos de supervivencia, ya que una detección precoz de los tumores ayuda a mejorar su pronóstico. Esto se traduce en un menor número de muertes y en un aumento de la supervivencia y de la calidad de vida de las mujeres afectadas.

En España, el cáncer de mama es la primera causa de muerte en las mujeres con edades comprendidas entre los 40 y 44 años y una de cada siete mujeres mayores de 70 años tiene cáncer de mama. De ahí, la importancia de un seguimiento controlado y sistematizado de las mujeres.

En este sentido, hay una disparidad de criterios en cuanto a la edad a la que se debe empezar a hacer las mamografías en los programas de cribado, aunque la información disponible sugiere que una mamografía anual a partir de los 40 años salva vidas. En Europa, los programas de cribado de cáncer de mama incluyen mamografías a partir de entre los 40 y 50 años y dejan de hacerse a los 65. Esto hace que se escapen casos sin diagnosticar en los grupos de edad superior e inferior.

En los últimos años, la detección precoz del cáncer de mama cuenta con un gran aliado: la tomosíntesis, que mejora la imagen ofrecida por la mamografía con una dosis menor de radiación.

Con esta prueba diagnóstica se reducen las dosis de radiación a la mitad respecto a la mamografía convencional y se anticipa un año la detección de las lesiones. Se pueden ver antes que con la mamografía convencional y cuando son más pequeñas, ya que lesiones de un pequeño tamaño o de una localización marginal se ven mejor con la tomosíntesis.

Imagen global

Esta prueba permite obtener cortes de la mama de 1 mm de espesor que después con el programa C-view se reconstruyen en una imagen completa de la mama. De esta forma, se pueden delimitar mejor las zonas donde se localizan las lesiones y verlas en 3D: con localización y profundidad exactas. Esto permite analizar al detalle la lesión, sus límites y sus características. El ordenador sintetiza una imagen que resulta de la superposición de las láminas de imagen obtenidas con el tomógrafo y el especialista puede navegar de una a otra a través de las láminas de imágenes evitando así la superposición de la densidad del resto de la glándula.

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Hospital Nuestra Señora del RosarioC/Príncipe de Vergara, 53. 28006 Madrid, España.www.hospitalrosario.com

Biopsias

La tomosíntesis también es de gran utilidad para poder hacer biopsias dirigidas. Es una herramienta indispensable que permite llegar al lugar exacto de la lesión con un error menor de 2 mm, extraer la muestra y poner un coil en su lugar para el seguimiento posterior de la paciente. Con este sistema, se obtiene el tejido de una forma certera. En conclusión, el diagnóstico precoz del cáncer de mama se basa fundamentalmente en la mamografía. La pugna que existía entre la mejor capacidad diagnostica de la mamografía analógica de alta calidad y la digital convencional se ha resuelto con la llegada de la mamografía-3D-tomosintesis, que mejora la sensibilidad de la mamografía analógica, a lo que se añade una reducción de la dosis de radiació.

La mamografía es una técnica muy buena, pero presenta ciertas limitaciones importantes:

1. La compresión de la mama que se hace durante una mamografía puede resultar incómoda.

2. La compresión también genera una superposición del tejido mamario. De modo, que un cáncer de mama puede ocultarse en el tejido superpuesto y no aparecer en la mamografía.

3. En las mamografías se toma una única imagen de toda la mama en dos direcciones: de arriba hacia abajo y de lado a lado.

La tomosíntesis digital es un nuevo tipo de análisis que intenta mejorar estos inconvenientes, ya que, como hemos comentado, toma varias imágenes de la mama desde varios ángulos, lo que hace que se puedan visualizar mejor cualquier tipo de lesión con una menor dosis de radiación.

José María Pérez AznarUnidad de Diagnóstico por Imagen de Mama y DensitometríaHospital Nuestra Señora del Rosario, Madrid