La pandemia, el Estado y la normalización Periódico desde ...

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La pandemia el Estado y la normalizacioacuten de la pesadilla

por Tamara San Miguel y Eduardo J Almeida

Introduccioacuten

La llegada de la pandemia al planeta tierra in-tensificoacute los efectos de una pesadilla La crisis que desatoacute el Covid-19 dejoacute ver y agudizoacute las muacuteltiples crisis que ya existiacutean y las condiciones inhumanas en las que ya viviacutea una buena parte de la huma-nidad

El eje del anaacutelisis se basa en la hipoacutetesis de que la mayoriacutea de los Estados actuales son estructu-ralmente incapaces de enfrentar una amenaza como la del SARS-CoV-2 sin estrategias que im-pliquen actos inhumanos violatorios de derechos humanos y potencialmente criminales Estas es-trategias tienen que ver tanto con su debilidad estructural como con dinaacutemicas maacutes profundas relacionadas con la forma en que se configuran las relaciones de poder Nos enfocamos en el po-der Estatal entendido como dominio sobre la vida y la muerte de quienes viven o transitan por sus territorios o jurisdicciones sobre todo en situacio-nes de ldquoemergenciardquo

El anaacutelisis parte de la combinacioacuten entre la vio-lencia los derechos humanos y el desarrollo en una situacioacuten de emergencia y la loacutegica del tria-ge social como justificacioacuten eacutetica de actos inhu-manos A partir de la revisioacuten de algunos casos que hemos identificado como graves pretendemos identificar las violaciones graves de derechos hu-manos que se han cometido durante la pandemia por causas preexistentes agudizadas con la crisis sanitaria o bien por la ejecucioacuten de las medidas de emergencia Abrimos la pregunta de si esos actos que han violado derechos humanos configuran criacutemenes de Estado El ejercicio de sentildealar los ac-tos nos parece esencial para desnormalizar lo que pretende imponerse como normal en el contexto de la pandemia

Aunque nos enfocamos en algunos casos de algunos paiacuteses del continente americano que permiten tener una visioacuten general de las dinaacute-micas Estatales en la regioacuten vemos este texto como un primer paso en un anaacutelisis que valdriacutea la pena hacer a mayor profundidad y en todas las geografiacuteas posibles No es un texto friacuteamente calculado (aunque los caacutelculos sean friacuteos) o con pretensiones de objetividad y asepcia surge de la indignacioacuten por las atrocidades que pretenden ocultarse bajo la tragedia de la pandemia surge de la inquietud por encontrar rumbo para actuar

frente a los crecientes abusos surge de la urgen-cia por buscar sentildeales de esperanza en medio de la incertidumbre

Este texto es un inicio y a la vez es una invitacioacuten para construir o compartir anaacutelisis similares que puedan darnos una visioacuten maacutes clara de las dinaacute-micas de poder en esta nueva etapa pandeacutemica y de los actores que pretenden usar la crisis para sostener estructuras y relaciones que nos estaacuten llevando de una cataacutestrofe a otra hasta que no quede nada maacutes que (tal vez) ellos

httpswwwdwcomescoronavirus-minuto-a-minuto-al-menos-292000-muertos-en-el-mundo-por-covid-19a-53420859


La pandemia

Un virus un ser infinitamente pequentildeo implicoacute una crisis social planetaria La metaacutefora convertida en realidad sobre la fragilidad del mundo globalizado es devastadora El origen griego de la palabra pan-demia ldquopanrdquo (todo) ldquodemosrdquo (pueblo) pareciera un estado idiacutelico de la humanidad el uacutenico problema es que lo que en el 2020 une a todo el pueblo de este planeta es una elusiva y compleja enfermedad que demuestra la profunda vulnerabilidad de la hu-manidad La pandemia no es resultado uacutenicamente de la existencia del virus SARS-CoV-2 ni de las mu-taciones que puede haber tenido ni de los padeci-mientos que provoca es resultado del impacto so-cial que tienen la combinacioacuten de contagios pade-cimientos y la capacidad de contencioacuten y respuesta que podemos tener como humanos y como socieda-des Lo que tambieacuten hace distinto a una pandemia y a esta en particular es su dimensioacuten global

Desde el antildeo pasado existiacutean advertencias sobre el aumento de enfermedades provocadas por la deforestacioacuten en todo el mundo Se sabiacutea que esta praacutectica cada vez menos regulada podiacutea impli-car el surgimiento de enfermedades infecciosas (Zimmer 2019)

Seguacuten un reporte especial del Programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas (UNEP 2020) los vi-rus de origen zoonotico son enfermedades que es-taacuten emergiendo de los animales y saltando a los humanos De todas las nuevas y emergentes in-fecciones en humanos alrededor del 75 por ciento vienen de ldquoespecies de saltordquo de otros animales a las personas La mayoriacutea de las zoonosis pasan de forma indirecta a traveacutes del sistema alimentario En el estudio identifican siete factores que pueden estar provocando la aparicioacuten de estas enfermeda-des 1) el aumento de la demanda humana de pro-teiacutena animal 2) la intensificacioacuten de la agricultura insostenible 3) mayor uso y explotacioacuten de la vida silvestre 4) utilizacioacuten insostenible de los recursos naturales provocado por el acelerado crecimiento de las urbes el cambio de uso del suelo y las in-dustrias extractivas 5) aumento de viajes y trans-porte 6) cambios en las cadenas de produccioacuten y suministro de alimentos y 7) el cambio climaacutetico

Las condiciones para que llegara esta cataacutestrofe se fueron anunciando La pandemia es un desas-tre y lo que lo configura como tal no es la ame-

naza natural sino las vulnerabilidades o capaci-dades de enfrentar esa amenaza El desastre es un fenoacutemeno social que pone en crisis la ldquonorma-lidadrdquo en el caso del Covid-19 lo que se pone en crisis es la capacidad de contener los contagios y evitar las muertes algo que pone a prueba los sistemas sanitarios econoacutemicos y poliacuteticos Como cualquier desastre la pandemia provoca tiempos acelerados a los que cualquier sociedad responde con aquello que tiene es decir lo que hay para enfrentarla es con lo que se puede enfrentar sean capacidades teacutecnicas estructurales econoacutemicas o hasta culturales

Esta pandemia la del coronavirus es como cual-quier desastre pero no es cualquier desastre es uno que ha puesto en crisis praacutecticamente a toda la humanidad y en situaciones de crisis como en un barco que se hunde surgen todo tipo de reac-ciones y decisiones sabias solidarias oportunis-tas y crueles

La crisis de un mundo en crisis Desde que llegoacute el Covid-19 ciertamente nada es igual que antes la cruda realidad que se veniacutea creando diacutea a diacutea provocada por el capitalismo desenfrenado que vivimos en casi todo el mundo nos llevoacute a tener las cifras de terror que tenemos ahora Hoy en diacutea praacutecticamente todos los seres humanos del planeta estamos siendo afectados por la incertidumbre que provoca la pandemia del coronavirus Esa incertidumbre nos estaacute haciendo antildeorar las crisis globales que teniacuteamos antes de estar en esta crisis pues como bien dicen muchos analistas como Naomi Klein (2020) el mundo ya estaba en crisis antes de esta crisis estaba en lla-mas en un deterioro ambiental catastroacutefico con millones de personas sin posibilidades de sobre-vivir y el resto apenas sobreviviendo con un 1 de excepcioacuten La privatizacioacuten de la salud en casi todos los paiacuteses y la situacioacuten de olvido en la que

viven amplios sectores de la poblacioacuten han jugado un papel fundamental en el impacto que ha gene-rado la pandemia del SARS-CoV-2

Hemos presenciado miles de contagios miles de muertes y zozobra en todo el mundo frente a un enemigo mortal que parece apocaliacutepticamente amenazante Sin embargo el viral coronavirus no es un monstruo mitoloacutegico invencible es un orga-nismo que provoca una nueva enfermedad gra-ve en proceso de ser entendida potencialmente mortal pero con la raacutepida respuesta de meacutedicos e investigadores en todo el mundo tratable y cu-rable sin necesidad de magia o soluciones espec-taculares simplemente con hospitales capaces de recibir a los enfermos doctores bien capacitados y medicamentos adecuados y disponibles podriacutea ser suficiente Pero a pesar de ser en teacuterminos pa-toloacutegicos un problema remediable maacutes allaacute de la existencia o no de una vacuna el Covid-19 estaacute re-sultando una tragedia de proporciones globales

Maacutes allaacute de las teoriacuteas de conspiracioacuten sobre el origen del virus (desde los estofados de murcieacute-lago hasta la guerra bioloacutegica) la realidad es que nadie estaba preparado Praacutecticamente todos los paiacuteses del mundo tuvieron que tomar medidas para enfrentar la llegada del virus o para tratar de retrasarla o aplanar la ya paradigmaacutetica curva de contagios Algunos paiacuteses han tenido reacciones maacutes aacutegiles y efectivas que otros pero la realidad es que ninguacuten paiacutes parece salvarse

Byung-Chul Han (2020) hace un interesante anaacute-lisis de las condiciones culturales y poliacuteticas que permitieron a los paiacuteses asiaacuteticos enfrentar la pandemia con relativa efectividad el resultado a largo plazo de su anaacutelisis es casi maacutes preocupan-te que el virus en siacute China Japoacuten Corea Taiwaacuten logran controlar el primer ciclo de la pandemia porque tienen un control casi total de la cotidia-nidad de las personas que viven dentro de sus fronteras Vigilancia digital permanente caacutemaras de seguridad en todos los espacios sean puacuteblicos o privados reconocimiento facial capacidad ab-soluta de control poblacional sumisioacuten completa al Estado (o confianza si nos gustan los eufemis-mos) y eso siacute cubrebocas muchos cubrebocas

La crisis sanitaria y humana que estamos vivien-do en el mundo estaacute siendo aprovechada sin duda para controlar a la poblacioacuten aumentar la pola-

Algunos paiacuteses han tenido reacciones maacutes aacutegiles y efectivas que otros

pero la realidad es que ninguacuten paiacutes parece salvarse


rizacioacuten en cada paiacutes y a nivel global pasar leyes que en otros momentos habriacutean provocado mayo-res reacciones sociales militarizar la vida social y la seguridad puacuteblica vender especular y con-tinuar con la misma loacutegica que nos ha dejado en doacutende estamos a nivel social poliacutetico econoacutemico y ambiental

iquestSalvar vidas o salvar la economiacutea

Las respuestas de cada paiacutes de cada persona han sido diversas y hasta paradoacutejicas desde las com-pras de paacutenico (sobre todo de papel higieacutenico y cervezas esenciales al parecer para la superviven-cia humana) que presuponen que un ldquootro mezqui-nordquo acumularaacute los recursos la exigencia de estra-tegias de cuarentena coercitiva y vigilancia digital hasta la ldquoconfianzardquo en la civilidad ciudadana En toda crisis grave saca lo peor y lo mejor de la hu-manidad como sentildealoacute Rodriacuteguez Lascano (2020) ldquocada uno comienza a elaborar sus criterios de su-pervivencia unos quieren asegurar papel de bantildeo pero otros se cuestionan una vieja forma de rela-cioacuten social y ensentildean una solidaridad horizontalrdquo

En muchos aspectos la pandemia como apunta Zibechi (2020) acelera tendencias preexistentes que van desde la interrupcioacuten de la integracioacuten econoacutemica y el debilitamiento poliacutetico del sistema hasta profundas transformaciones psicoloacutegicas y culturales

En medio de la incertidumbre y del exceso de informacioacuten verdadera falsa y combinaciones entre ambas algunas cosas se han vuelto evi-dentes la primera es que la propagacioacuten del vi-rus nos mostroacute el nivel de interconexioacuten que hay entre los seres humanos de este planeta con-tagio tras contagio Ha sido necesario forzar el distanciamiento social para tratar de disminuir la frecuencia de esas conexiones y asiacute tratar de reducir el nuacutemero de contagios La segunda es que los efectos y temores econoacutemicos y de abas-tecimiento de insumos meacutedicos alimentos ma-terias han mostrado el nivel de interdependencia global desde las grandes cadenas de produccioacuten hasta las cuestiones maacutes cotidianas de la vida La tercera es que en tiempos del Big Data de la nanotecnologiacutea del aparente entendimiento y control minucioso que los humanos teniacuteamos sobre el planeta el imaginario de nuestra apti-tud suprema de supervivencia y dominio sobre la

naturaleza se desmorona y hace expliacutecita nues-tra vulnerabilidad como especie

Algo que es importante apuntar es que esta pan-demia pudo haberse prevenido no la aparicioacuten del virus los contagios iniciales tal vez ni siquiera su expansioacuten por algunos paiacuteses pero siacute su di-mensioacuten global y su letalidad En su anaacutelisis sobre la pandemia y el sistema-mundo Ramonet (2020) muestra que en varios reportes recientes de las agencias de seguridad e inteligencia de Estados Unidos en anaacutelisis de expertos y en muacuteltiples foros se habiacutea planteado la posibilidad de una pandemia de estas proporciones por un virus con las caracteriacutesticas del nuevo coronavirus SARS-CoV-2 y en muchos casos se hicieron recomen-daciones para establecer las medidas sanitarias para poder prevenirla o enfrentarla

No eran necesarias medidas espectaculares ni tecnologiacuteas de avanzada sino estrategias sim-ples con herramientas tan sencillas como el ja-boacuten herramientas de costura para los tapabocas y la implementacioacuten de medidas de distancia y evidentemente un sistema de salud puacuteblica efi-caz Como sentildeala Ramonet Vietnam es un ejem-plo interesante pues con unos cuantos contagios establecioacute estrictas medidas de distancia y logroacute controlar el brote en cuestioacuten de semanas y sin un gran nuacutemero decesos Otros casos interesan-tes de reaccioacuten temprana son Nueva Zelanda y Cuba En el primer caso limitando la hipermovili-dad y estableciendo ldquoburbujasrdquo comunitarias que permitieron la interaccioacuten entre personas sanas Los resultados de esas medidas los conocemos contuvieron los contagios En el caso de Cuba con un sistema de salud puacuteblica robusto con claros protocolos de respuesta ante una situacioacuten como eacutesta un importante desarrollo de medicamentos y diagnosticando casa por casa sin necesidad de grandes recursos espectaculares simplemente con buena praacutectica meacutedica Es decir habiacutea la ex-periencia la informacioacuten y las advertencias nece-sarias para que el mundo y sobre todo la econo-miacutea capitalista aceptara con humildad una pausa en su avance devastador y evitara el nuacutemero de muertes que se estaacute registrando Pero lo que se hizo se hizo tarde y con la excusa de la sorpresa y esto ha tenido efectos graves en la vida de praacutec-ticamente todos los seres humanos del planeta extendieacutendose en el tiempo y afectando las rela-ciones sociales y siacute tambieacuten las econoacutemicas

A lo largo de la pandemia hemos escuchado rei-teradamente la contraposicioacuten entre medidas sa-nitarias orientadas a evitar contagios en particu-lar las medidas de distancia social y la economiacutea global que aparentemente requiere volver a las actividades habituales y a la interaccioacuten directa entre personas lo que ha planteado un aparente dilema entre salud y economiacutea El argumento de las medidas meacutedicas y sanitarias para salvar vidas es directo la distancia evita contagios evitar con-tagios salva vidas El argumento en favor de la re-activacioacuten de las actividades econoacutemicas es com-pletamente indirecto es decir que se basa en la idea de que la reactivacioacuten econoacutemica la produc-cioacuten y el consumo implica evitar el crecimiento del desempleo de la pobreza y que eso resulta en mejores condiciones de supervivencia para todos Plantea la idea de que la economiacutea global salva vidas tantas o maacutes que el evitar contagios Como si el sistema econoacutemico predominante antes de la pandemia beneficiara a todos

La loacutegica neoliberal tiene un fuerte componente de sacrificio de poblaciones que dentro del caacutel-culo de costo-beneficio para la economiacutea consi-dera menos valiosas y por lo tanto descartables como lo sentildeala puntualmente en una entrevista Mbembe (Bercito 2020) Estas poblaciones suelen ser las mismas de siempre aquellas que son con-sideradas menos valiosas o aquellas que sufren una violencia sistemaacutetica y estructural es decir aquellos que se encuentran en la zona del no-ser como diriacutea Fanon (1973)

Meses despueacutes del inicio de esta crisis podemos ver coacutemo en muchos paiacuteses los gobiernos estaacuten privi-legiando la economiacutea por encima de la salud des-de los rostros maacutes grotescos como el de Trump y Bolsonaro hasta los llamados gobiernos progresis-tas La mayoriacutea han optado por salvar la economiacutea por presionar a la reapertura de la produccioacuten por invitar a consumir y por hacerlo con medidas sani-tarias de proteccioacuten individual (cubrebocas lentes guantes etc) por comenzar a acostumbrarnos a lo que llaman una ldquonueva normalidadrdquo

Las medidas sanitarias de distancia implican una proteccioacuten colectiva en donde como dice Marcos Roitman (2020b) el no salir no solo implica cui-darme yo de no contagiarme sino tambieacuten el cui-dar que yo no contagie a otros la distancia es una medida de proteccioacuten colectiva sobre todo en los


numerosos casos asintomaacuteticos que parecen ser caracteriacutesticos de este coronavirus Estas medidas implican que el Estado tiene que asumir la respon-sabilidad de que todos tengan las mejores condi-ciones posibles de supervivencia dentro de la loacutegica del distanciamiento Tambieacuten implica que los pro-pietarios o socios de las empresas privadas tienen que asumir costos por mantenerse inactivos du-rante un tiempo sin recurrir a despidos que hariacutean maacutes precaria auacuten la situacioacuten de los trabajadores En este contexto tambieacuten se requiere de servicios puacuteblicos robustos sobre todo en lo sanitario en la atencioacuten a quienes dependen de la economiacutea infor-

mal para sobrevivir cada diacutea y en la regulacioacuten de las actividades de produccioacuten esenciales (alimen-tacioacuten energiacutea y comunicaciones) Un Estado que depende de servicios privatizados depende enton-ces de la disposicioacuten del sector privado o de tener los recursos econoacutemicos y poliacuteticos para su expro-piacioacuten y asiacute poder asumir los requerimientos de las medidas de distancia Evidentemente como se ha visto en varios paiacuteses existe tambieacuten la posibi-lidad de establecer medidas extremas de distancia sin prever las condiciones de supervivencia de la poblacioacuten maacutes vulnerable sobre todo aquella que vive diacutea a diacutea de la economiacutea informal

La reactivacioacuten de las actividades econoacutemicas presenciales implica un aumento en la interaccioacuten directa entre personas y por lo tanto una mayor exposicioacuten de la poblacioacuten al contagio del virus por lo tanto requiere un eacutenfasis en la proteccioacuten individual Esto exime a las empresas privadas de tener que asumir costos por las medidas de proteccioacuten pues les permite reactivar su actividad lucrativa y hace dispensable la necesidad de que los empleadores asuman medidas de proteccioacuten de la salud de los empleados Asimismo el Estado puede desafanarse de la necesidad de asumir la responsabilidad directa de que todos tengan los medios indispensables de supervivencia Los ser-vicios esenciales pueden seguir su camino de pri-vatizacioacuten incluida la salud

En este uacuteltimo escenario la responsabilidad de evitar el contagio recae completamente en los in-dividuos y en su capacidad por aislar su cuerpo lo que evidentemente seraacute maacutes o menos faacutecil depen-diendo de su ubicacioacuten en las relaciones de pro-duccioacuten Un accionista adinerado de una empresa estaraacute en mejores condiciones para distanciar su cuerpo de los virus que un obrero

La pregunta aquiacute es cuaacutentos Estados tienen auacuten las condiciones institucionales para asumir medi-das de proteccioacuten colectiva ante la pandemia y cuaacutentos estaacuten dispuestos a asumir los costos po-liacuteticos y econoacutemicos para tenerlas Lo que ya se percibe como una realidad en construccioacuten es un nuevo ciclo de operacioacuten de los dos binomios en el proceso del capitalismo neoliberal que identifi-caba el Subcomandante Marcos (1997) hace maacutes de veinte antildeos destruccioacuten-despoblamiento y re-construccioacuten-reordenamiento

El Estado de Malestar en la Cuarta Guerra Mundial

Desde hace deacutecadas se fue instalando lo que Rodriacuteguez Azueta (2019) llamoacute el Estado de Malestar despueacutes de que se fue desmantelando su opuesto el Estado de Bienestar asiacute que ya teniacuteamos norma-lizada la anormalidad que implicoacute que el Estado no gestionara la vida sino la muerte Esto es lo que los zapatistas (Subcomandante Insurgente Marcos 1997) llamaron la Cuarta Guerra Mundial conside-rando que la Guerra Friacutea fue la tercera Para ellos esta Cuarta Guerra es la peor y la maacutes cruel una que el neoliberalismo libra contra la humanidad


En esa guerra la poliacutetica se convirtioacute en organiza-dor econoacutemico ya no en organizadora del Estado nacional El crimen organizado fue penetrando los sistemas poliacuteticos y econoacutemicos de los Estados nacionales las medidas econoacutemicas del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional im-puestas despueacutes de la crisis de la deuda mundial de los ochentas agudizaron las crisis de los nego-cios legales la crisis de la deuda mundial provocoacute que los paiacuteses ldquosubdesarrolladosrdquo presentaran una reduccioacuten en sus ingresos dando pie al origen de una economiacutea ilegal para llenar el vaciacuteo dejado por la caiacuteda de los mercados nacionales

Antes de la llegada del SARS-CoV-2 ya habiacuteamos presenciado rescates econoacutemicos y bancarios a cos-ta de la gente La economiacutea que se instaloacute entonces ha estado basada y sostenida en la desigualdad La loacutegica brutal de la etapa neoliberal del capitalis-mo trajo consigo una creciente gestioacuten burocraacutetica de la barbarie que se sintetiza en lo que Rodriacuteguez Lascano (2017) define como la nueva ideologiacutea del dominio la guerra humanitaria

En estas circunstancias el repliegue en tiempos de crisis de los derechos humanos como herramienta de resistencia ante los abusos del poder es brutal-mente claro De pronto la discusioacuten de los derechos humanos regresoacute a la preservacioacuten de la vida y a

primera vista pareciera que a costa de todos los de-maacutes derechos El antildeo 2001 marcoacute el auge de los estados de excepcioacuten permanentes y de la seguri-dad como derecho supremo a reclamar ademaacutes de como fuente primaria de legitimidad Poco a poco esta loacutegica se ha matizado entre escaacutendalos por criacutemenes de guerra (reconocidos y no) y por la cri-sis de 2008 que puso en evidencia la fragilidad del sistema financiero global y la voracidad de las cor-poraciones transnacionales Pero esas coyunturas que han evidenciado la brutalidad y la debilidad de los Estados se han enfrentado con la agudizacioacuten de las condiciones que las provocaron En el caso de la seguridad con el inicio de una guerra intermi-nable en Medio Oriente y con la criminalizacioacuten de quienes denuncian los actos atroces en esas gue-rras como ocurre con el caso de Julian Assange En el tema financiero la respuesta fueron costosos rescates que llevaron dinero puacuteblico a bolsillos pri-vados Tanto la experiencia de 2001 en el campo de la seguridad como la de 2008 en el financiero nos ensentildea que una palabra que parece generar una aceptacioacuten casi maacutegica de las soluciones maacutes abe-rrantes es ldquoemergenciardquo

Rajagopal (2007) sentildeala que los estados de emer-gencia fueron un mecanismo para deslegitimar los movimientos de liberacioacuten en las colonias europeas y negarles a esos conflictos el estatus de guerra o

de desafiacuteo al Estado los reduciacutea a situaciones que requeriacutean el restablecimiento del orden Por otra parte el estado de emergencia permitioacute eliminar la aplicabilidad de normas juriacutedicas internacio-nales que podriacutean tener efectos en una situacioacuten normal de desorden interno Esta experiencia este mecanismo se trasladoacute de los imperios al derecho internacional que como Anghie (2015) sentildeala de-riva de los primeros y de ahiacute a todos los Estados que de alguna manera se han armonizado con las formas juriacutedicas europeas El efecto de este trasla-do es que en un estado de emergencia no existen muchas normas juriacutedicas que puedan aplicarse no es una situacioacuten de guerra por lo tanto el derecho internacional humanitario queda relegado y no es una situacioacuten normal no es tiempo de paz por lo que los derechos humanos quedan mayormente sujetos a los criterios que el Estado establezca para la emergencia

Existen algunas normas internacionales como los Principios de Siracusa adoptados por la ONU en 1984 que establecen algunas disposiciones que deben aplicarse cuando por una declaracioacuten de emergencia un Estado pretenda limitar o dero-gar el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Poliacuteticos Entre otras cosas establece garantiacuteas que no pueden ser suspendidas como el derecho a la vida a no ser torturado a la libertad de pen-



samiento entre otras y establece criterios de ne-cesidad legalidad racionalidad proporcionalidad y temporalidad para las declaratorias de emer-gencia Sin embargo asiacute como establece protec-ciones a ciertos derechos insuspendibles tambieacuten establece criterios para que los Estados puedan suspender otros derechos en situaciones que con-sideren de emergencia aludiendo al mismo tiem-po a la responsabilidad de los Estados en cuanto a lo ldquoestrictamente necesariordquo En el caso de las emergencias como la que presenta el Covid-19 los Principios de Siracusa determinan que ldquoLa salud puacuteblica puede invocarse como

motivo para limitar ciertos derechos a fin de permitir a un Estado adoptar medidas para hacer frente a una grave amenaza a la salud de la poblacioacuten o de alguno de sus miembros Estas medidas deberaacuten es-tar encaminadas especiacuteficamente a impedir enfermedades o lesiones o a proporcionar cuidados a los enfermos y lesionadosrdquo (UN Commission on Human Rights 1984)

Estas normas tienen una redaccioacuten general y estaacuten sometidas a los criterios geopoliacuteticos que determi-nan su aplicabilidad como ocurre recurrentemente en el derecho internacional A esto hay que agregar que una cataacutestrofe de la que deriva una emergen-cia genera un estado de conmocioacuten en la poblacioacuten que la inmoviliza por lo menos temporalmente y que la hace susceptible a aceptar las acciones que determinen quienes aparentan tener el control (Klein 2007) Esto dificulta la posibilidad de poner la atencioacuten sobre normas internacionales poco di-fundidas y dificulta su aplicabilidad ya no soacutelo por el contexto geopoliacutetico global sino por la dificul-tad de enfrentar simultaacuteneamente la conmocioacuten y enfrentar los abusos de los agentes del Estado El estado de conmocioacuten que produce la cataacutestrofe en este caso la pandemia aumentado por la accioacuten del Estado deriva en un comportamiento de social-conformismo (Roitman 2020a) que inhibe la con-ciencia y paraliza la posible accioacuten colectiva en un estupor que se presenta como responsable Todo esto permite que durante una cataacutestrofe se deacute el ambiente para que la gestioacuten de la vida y la muerte quede en manos de quienes detentan el poder del Estado o estaacuten en condiciones de manipularlo

A este proceso de la emergencia hay que agregar otro elemento que tiene oriacutegenes anteriores a la

pandemia Ulrich Beck (2003) sentildealaba dos proce-sos que permean los Estados y las sociedades en el proceso general de globalizacioacuten el del reacutegimen neoliberal y el de los derechos humanos Por una parte en el periacuteodo neoliberal los derechos huma-nos pasaron de ser una forma de defensa contra el poder a ser la concrecioacuten del poder como apunta Douzinas (2005) Por otra parte el neoliberalismo llevoacute en las uacuteltimas deacutecadas del siglo XX a acele-rados procesos de privatizacioacuten en sectores antes bajo el control del Estado convirtiendo a este uacutel-timo en la representacioacuten de una facultad teacutecnica administrativa que posibilitoacute el crecimiento de una economiacutea global corporativa (Sassen 2007)

En una especie de armonizacioacuten entre el reacutegimen neoliberal como forma de estructuracioacuten de las relaciones econoacutemicas y Estatales en la globaliza-cioacuten con los derechos humanos como su discurso moral toma fuerza otro discurso heredado del des-enlace de la Segunda Guerra Mundial el del de-sarrollo Esta preocupacioacuten por el desarrollo surge tanto de las problemaacuteticas que representaban las ex-colonias y ahora nuevos Estados en teacuterminos de pobreza en combinacioacuten con la necesidad de las antiguas metroacutepolis por recuperarse tras la guerra (Naredo 2015) Si bien el concepto de desarrollo en la posguerra tomoacute un caraacutecter eminentemen-te pragmaacutetico durante el periacuteodo neoliberal ese pragmatismo se volvioacute tan brutal en lo concreto como eufemiacutestico en el discurso Desde los sesenta y setenta el desarrollo se volvioacute casi un sinoacutenimo de bienestar y a finales de los noventa ese bien-estar potencial pareciacutea justificar cualquier accioacuten cualquier proyecto cualquier violencia

Como tambieacuten advierte Rajagopal (2007) la vio-lencia del desarrollo suele ser un punto ciego de los derechos humanos habitualmente se le ubica fuera de ese campo a pesar de la cantidad de vio-laciones sistemaacuteticas que derivan de ella Si bien la violencia del mercado es regularmente sentildea-lada en toda clase de movimientos sociales foros y discursos para denunciar los efectos perversos del capitalismo eacutesta se ha ido adaptando y se oculta bajo esa otra violencia del desarrollo que es menos sentildealada Estar en contra del mercado en Ameacuterica Latina puede ser hasta habitual es ir en contra de los ricos en paiacuteses mayoritariamen-te pobres (independientemente de las alquimias estadiacutesticas) pero estar en contra del desarrollo significa ir en contra de los intereses del bien co-

muacuten del paiacutes por lo tanto la violencia generada por el desarrollo tiende a volverse aceptable

La justificacioacuten de la violencia en nombre del de-sarrollo resulta en una argumentacioacuten capaz de socavar cualquier intento por frenarla desde el discurso de los derechos humanos porque si bien es posible condenar a quienes cometen abusos puntuales la causa estructural de esos abusos los proyectos de desarrollo suelen seguir su curso

Una nocioacuten que resulta muy uacutetil para referirse a la relacioacuten entre comercio y violencia en la economiacutea poliacutetica contemporaacutenea es la de Necrocapitalismo (Banerjee 2008) que establece que las formas contemporaacuteneas de acumulacioacuten organizacional implican desposesioacuten y sometimiento de la vida al poder de la muerte En el necrocapitalismo la vio-lencia el despojo y la muerte son resultado del proceso de acumulacioacuten ahiacute se generan espacios que parecen inmunes a la intervencioacuten legal juriacute-dica y poliacutetica provocando la suspensioacuten de la so-beraniacutea Las corporaciones aprovechan cualquier situacioacuten para implantar estados de excepcioacuten y beneficiarse econoacutemicamente de ellos Aquiacute en-tran los desastres las guerras que aplanan el ca-mino para la posterior reconstruccioacuten que implica el endeudamiento de los paiacuteses y la ejecucioacuten de programas de ajuste

El Covid-19 no llega a un mundo en blanco se ex-pande en ese mundo en ese contexto de necroca-pitalismo de violencia de eufemismos de bienes-tar privatizado de servicios puacuteblicos insuficientes y de Estados profundamente dependientes de los actores maacutes poderosos del mercado En conjun-to con esto en esta crisis de 2020 la del SARS-CoV-2 no nos enfrenta a ldquootrosrdquo humanos sino a un ldquootrordquo invisible y aparentemente incontenible que pone en riesgo nuestra posibilidad de respi-rar y por lo tanto de vivir Esto ha generado una enorme incertidumbre sobre lo que queremos proteger de ldquolo humanordquo y sobre coacutemo responder sobre todo porque estaacute implicando ponerse frente al sistema hegemoacutenico y a sus inocultables con-tradicciones y sus peligrosas deficiencias

El Triage Social iquestSalvar queacute vidas para queacute economiacutea

La pandemia del Covid-19 ha explicitado el con-trol poblacional a traveacutes de la gestioacuten de recursos


de supervivencia limitados se han desarrollado algoritmos eacuteticos para tener la capacidad de de-cidir quieacuten debe sobrevivir y quieacuten no a partir de imaginarios sobre el ldquobien comuacutenrdquo o ideologiacuteas que resuelven el dilema eacutetico de quieacuten los merece y quieacuten no

Un algoritmo es una mala pronunciacioacuten latina de Al-Khwarizmi el matemaacutetico persa del siglo IX cuyo nombre durante la edad media se usoacute para describir cualquier meacutetodo de caacutelculo sistemaacutetico o automaacutetico Algoritmo actualmente tiene mu-chas definiciones es un aacuterbol de decisioacuten es un sistema al que se le ingresa informacioacuten y del que se obtienen respuestas es un conjunto de instruc-ciones que el usuario sigue de manera mecaacutenica y de las que obtiene un resultado ideal (Steiner 2012) Desde la edad media el estudio de los al-goritmos ha dado resultados interesantes en la buacutesqueda de respuestas sin embargo es hasta Claude Shannon que a finales de los treinta com-binariacutea la matemaacutetica binaria de Leibnitz con el aacutelgebra booleana para disentildear circuitos electroacute-nicos capaces de guardar informacioacuten y resolver problemas Como lo analiza Castells (1999) la importancia de la produccioacuten y gestioacuten de infor-macioacuten desde ese momento y sobre todo a partir de finales del siglo XX ha transformado las rela-ciones sociales en el mundo en todos los aacutembitos incluidas las relaciones de poder y la poliacutetica Una muestra de la relevancia de la informacioacuten es la cantidad que se produce y almacena hasta 1986 la cantidad era de 264 billones de gigabytes (en-tre digital y anaacuteloga) para el 2007 (hace 13 antildeos) la cantidad era ya de 29498 billones de gigabytes es decir que en 20 antildeos se ha almacenado maacutes de cien veces maacutes informacioacuten que desde el inicio de la historia hasta 1986 (Hilbert y Loacutepez 2011)

Ademaacutes de la cantidad la velocidad cuasi simultaacute-nea del flujo de informacioacuten a nivel global ha lle-vado a requerir y depender de algoritmos capaces de procesar grandes cantidades en poco tiempo que permiten a quienes disentildean y controlan esos algoritmos tomar decisiones En este sentido los algoritmos se han convertido en una nueva ideo-logiacutea cientiacutefica para enfrentar la incertidumbre en un mundo global y a la vez reforzar las relaciones de dominacioacuten (Rodriacuteguez Lascano 2020) Los al-goritmos se estaacuten utilizando para enfrentar pro-blemas sociales y eacuteticos para tomar decisiones a partir de una loacutegica que implica ordenar clasificar

y en uacuteltima instancia discriminar lo que sirve de lo que no sirve y a partir de ello decidir coacutemo actuar La aplicacioacuten de algoritmos para problemas eacuteti-cos y sociales implica aplicar rutas mecanizadas de decisioacuten para tomar decisiones que afectan la vida en todos sus aspectos Esto a su vez impli-ca analizar la base sobre la cual se construye esa ruta mecanizada es decir su propoacutesito y su origen contextual e ideoloacutegico

Uno de los algoritmos eacutetico-sociales o de justicia distributiva como argumentan Moskop y Iserson (2007) maacutes conocidos actualmente es el triage meacutedico que viene de la palabra francesa trier (filtrar seleccionar clasificar y separar lo uacutetil de lo desechable) utilizada en la actividad agriacutecola cuyo origen se atribuye al Baron Dominique-Jean Larrey jefe de la Guardia Imperial de Napoleoacuten que desarrolloacute un sistema para evaluar y clasi-ficar la atencioacuten a los soldados heridos en bata-lla entre los que requeririacutean atencioacuten inmediata por la severidad de sus lesiones y los que podriacutean esperar para ser tratados A mediados del siglo XIX el cirujano naval de la Armada Britaacutenica John Wilson agregoacute la clasificacioacuten de aquellos que no recibiriacutean atencioacuten por no tener posibilidades de sobrevivir auacuten con tratamiento Sobre esta base hay una larga historia de adaptaciones en los en-tornos militares meacutedicos y de servicios de emer-gencia En todos los casos se utiliza para que en

una situacioacuten de recursos meacutedicos limitados se pueda ordenar clasificar y discriminar pacientes

La idea general es que en un escenario de muacuteltiples viacutectimas provocado por un evento catastroacutefico la crisis en teacuterminos meacutedicos tiene un protocolo cla-ro de triage de clasificacioacuten en grupos los de faacutecil recuperacioacuten sin intervencioacuten los criacuteticos sin posi-bilidad de recuperacioacuten auacuten con una intervencioacuten y los graves con posibilidad de recuperacioacuten con una intervencioacuten Este es un proceso que se puede realizar en varios momentos que van desde el lu-gar en el que ocurrioacute el evento catastroacutefico hasta la atencioacuten hospitalaria El criterio es simple y existen varias versiones y adaptaciones del algoritmo de triage para tomar estas decisiones pero en el te-rreno la clasificacioacuten depende de los conocimientos cientiacuteficos capacidades teacutecnicas y valoracioacuten eacutetica de quien decide y quien decide normalmente seraacute meacutedico o parameacutedico porque habitualmente son los que estaacuten socialmente (moral y legalmente) le-gitimados para tomar esa decisioacutenAhora pensemos en una situacioacuten en donde la humanidad es ese escenario de muacuteltiples viacutectimas provocado por la cataacutestrofe de nuestras propias acciones Asiacute ha ocurrido con la pandemia del co-ronavirus en casi todo el mundo el Estado estaacute asumiendo las decisiones temporalmente pero poco a poco el mercado y el Estado-gestor reasu-men su relacioacuten para una gestioacuten presuntamente


ldquoeficienterdquo de esos recursos limitados que favorece las relaciones de poder asimeacutetricas Las decisio-nes frente a la pandemia y sobre las prioridades (sanitarias o econoacutemicas) al respecto estaacuten esta-bleciendo la clasificacioacuten de la sociedad y sobre coacutemo gestionar los recursos limitados de cada Estado y del mundo

Sjoberg Vaughan y Williams (1984) definieron el concepto de triage social como el mecanismo mediante el cual las burocracias gestionan a los sectores maacutes ldquodesfavorecidosrdquo de la poblacioacuten Mientras que en el triage meacutedico heredado de las guerras napoleoacutenicas los descartados por ser irrecuperables mueren en el triage social a los descartados las burocracias les sacrifican las posibilidades de acceder a recursos si continuacutean viviendo o mueren resulta irrelevante y se vuel-ve invisible para el ldquobien mayorrdquo Un crudo ejem-plo de una de las formas maacutes obscuras del triage social es el que se dio en el primer periodo del reacutegimen Nazi en Alemania cuando el gobierno de Hitler asesinoacute selectivamente a todos los que tuvieran alguna ldquodiscapacidadrdquo para evitar que se contaminara la ldquopureza racial ariardquo

En el caso de la actual pandemia el triage ocurre en ambos sentidos en el meacutedico y en el social Cada Estado ha definido criterios para adjudicar los recursos sanitarios limitados a la poblacioacuten afectada por el SARS-CoV-2 A partir de crite-rios de bioeacutetica definen algoritmos para otorgar o negar atencioacuten meacutedica directa hospitalizacioacuten o respiradores artificiales Por otra parte toman decisiones sobre las actividades econoacutemicas y so-bre cuaacuteles se consideran esenciales sobre a queacute sectores favorecer con programas puacuteblicos es de-cir sobre queacute partes de la poblacioacuten aprovecharaacuten mejor los recursos del Estado para favorecer los propoacutesitos del Estado algo muy similar a la situa-cioacuten pre-pandemia

Aquiacute surge un meta-triage es decir una clasifica-cioacuten sobre queacute sistemas de clasificacioacuten son maacutes importantes Se trata de salvar vidas pero vidas especiacuteficas y a la vez de decidir sostener el sistema econoacutemico Este meta-triage social estas formas de decidir los criterios para clasificar a la poblacioacuten para decidir sobre la vida la muerte y sobre todo sobre las formas de vivir de morir o de sobrevivir tienen que ver con las intervenciones y controles reguladores de la poblacioacuten que caracterizan a

la biopoliacutetica (Foucault 1991) y a esas formas de existencia social caracteriacutesticas de la necropoliacutetica (Mbembe 2003) condiciones de vida a las que son sometidos grandes sectores de la poblacioacuten que los dejan en calidad de muertos vivientes

En un estado de emergencia se hace expliacutecito el triage como forma de poder en donde todo lo que estaacute formalmente bajo el dominio del Estado se convierte en un campo en un espacio de excepcioacuten que cada vez maacutes tiende a volverse permanente Ahiacute y entonces el soberano el que puede deter-minar la excepcioacuten y definir los criterios del triage asume el control para decidir sobre la nuda vida (Agambem 2001) sobre los humanos como seres bioloacutegicos y de ahiacute determinar quienes tienen la calidad de ciudadanos acreedores de derechos quienes se convierten en refugiados (maacutes allaacute de la documentacioacuten que tengan o no) merecedores de ayuda humanitaria o persecucioacuten policiacuteaca y quienes quedan como zombies muertos vivientes condenados a las formas maacutes precarias de super-vivencia o a morir en el olvido

En la emergencia especiacutefica de la pandemia un criterio de triage es favorecer la proteccioacuten del mayor nuacutemero de personas de posibles conta-gios y evitando asiacute que la demanda de servicios y recursos meacutedicos supere los recursos existentes Esto implica optar por ocupar mayores recursos puacuteblicos para asegurar la supervivencia de aque-llos que dependen de la actividad productiva nor-mal y presencial para sobrevivir Ademaacutes significa la reduccioacuten de ciertas formas de produccioacuten y consumo lo que implica como habiacuteamos estable-cido antes una mayor presioacuten sobre las empre-sas privadas en teacuterminos econoacutemicos y laborales y a su vez una mayor presioacuten poliacutetica sobre los Estados En este punto es importante anotar que

algunos paiacuteses han priorizado evitar la saturacioacuten del sistema de salud (camas y ventiladores) ha-ciendo que las personas infectadas y con siacutentomas permanecieran en sus casas algo que ha llevado a que muchos mueran sin llegar a los hospitales o que al llegar sean casos de gravedad extrema

Otra posibilidad es favorecer la produccioacuten y el consumo y asumir el riesgo de mayores contagios y la sobre saturacioacuten de los servicios de salud que inevitablemente deriva en maacutes muertes La deci-sioacuten de priorizar la actividad econoacutemica sobre la proteccioacuten de la salud implica considerar esencia-les a los actores con mayor poder de generacioacuten de riqueza y considerar ldquoirrecuperablesrdquo o descar-tables a amplios sectores de la poblacioacuten con me-nor relevancia econoacutemica

El debate entre la proteccioacuten de la salud ante po-sibles contagios y la saturacioacuten del sistema de salud la urgencia por ldquonormalizarrdquo la actividad econoacutemica y una especie de reconcientizacioacuten de la necesidad de tener un planeta ldquosanordquo para po-der sobrevivir como humanos resultan en proce-sos definidos en la mayoriacutea de los casos por unos cuantos ldquotomadores de decisionesrdquo y ldquoexpertosrdquo basados no soacutelo en una visioacuten filosoacutefica de lo hu-mano ni en un diagnoacutestico o pronoacutestico de la so-ciedad tambieacuten en gran medida por coyunturas en las relaciones de poder en su futuro mediato

El triage social presenta un algoritmo que per-mite a los Estados justificar moral y teacutecnicamente las consecuencias de decisiones eacuteticas complejas en el que tienen que ver la gestioacuten de la super-vivencia y la discriminacioacuten de las poblaciones que rigen igual que el parameacutedico meacutedico o pri-mer respondiente en un escenario de muacuteltiples viacutectimas donde sus decisiones de triage meacutedico le permiten justificar la muerte de aquellos que determina irrecuperables En este punto es im-portante preguntarnos si esas decisiones bajo la justificacioacuten del triage o no en el contexto del ne-crocapitalismo implican violaciones de derechos humanos y si estas implican criacutemenes de Estado

Si entendemos crimen de Estado como la des-viacioacuten organizacional por parte de agencias del Estado que involucra la violacioacuten de derechos hu-manos (Green y Ward 2000) entonces siacute quizaacutes estemos ante la configuracioacuten de eacutestos conside-rando que la desviacioacuten organizacional se dio por

El triage social presenta un algoritmo que permite a los Estados justificar moral y teacutecnicamente las consecuencias de decisiones eacuteticas

complejas en el que tienen que ver la gestioacuten de la supervivencia y la discriminacioacuten de las poblaciones


privilegiar el funcionamiento de una economiacutea desigual que ejerce formas estructurales de vio-lencia y que beneficia fundamentalmente a una minoriacutea sobre la necesidad de salvar el mayor nuacute-mero de vidas ante la crisis sanitaria

La pandemia y los derechos humanos en crisis

Tanto la conceptualizacioacuten de los derechos huma-nos como su aplicacioacuten y sus efectos estaacuten en una etapa de mucho debate y cuestionamiento Y en estos tiempos se profundizan las crisis pre-exis-tentes

Un cuestionamiento central es el tema de su uni-versalidad La criacutetica conceptual de los derechos humanos tiene un argumento fuerte en que son producto de la narrativa europea de la moderni-dad que como sentildeala Mignolo (2010) es la cara visible y benevolente de la colonialidad por lo tanto su presunta universalidad tiene como cen-tro una concepcioacuten eurocentrada en lo humano patriarcal blanco heterosexual y capitalista donde los que maacutes se acercan a ese modelo se pueden considerar ciudadanos dejando al resto de la humanidad en calidad de baacuterbaros peligro-sos salvajes inconscientes o seres antropomoacuterfi-cos sin la madurez geneacutetica o geneacuterica para ser sujetos No es coincidencia que sea precisamente el discurso de los derechos humanos el que se constituya como el discurso moral de la moderni-dad-colonialidad capitalista como un vapor que respiramos y nos define sin percibirlo con clari-dad En estas condiciones los derechos huma-nos su universalidad tiene un tono imperialista e implica la legitimacioacuten del sistema hegemoacutenico instituido En teacuterminos de Laclau (2005) los de-rechos humanos tienen como liacutemite demandas intra-sisteacutemicas

Esa loacutegica intra-sisteacutemica moderno-colonial estaacute en las formas cristalizadas soacutelidas de los dere-chos humanos en la transformacioacuten de norma moral a norma juriacutedica que se concreta en la for-ma de garantiacuteas constitucionales o tratados inter-nacionales Aunque es un campo profundamente dependiente de los movimientos de la geopoliacutetica al convertirse en normas reconocidas dentro de las formas juriacutedico-institucionales del poder pue-den adquirir una caracteriacutestica relevante obli-gatoriedad Evidentemente esta obligatoriedad

cuando existe estaacute limitada por el juego poliacutetico sin embargo el laberinto juriacutedico de los derechos humanos ha logrado en algunos casos encontrar salidas a situaciones de injusticia

En condiciones juriacutedicas los derechos humanos representan la concepcioacuten europea moderna li-beral y colonial del Estado y es cierto que su uso confirma las relaciones de dominacioacuten sin em-bargo en algunos casos concretos pueden ser una herramienta complementaria que permite detener abusos despojos agresiones e incluso omisiones

Otra forma de los derechos humanos estaacute sujeta a la loacutegica de la poliacutetica coyuntural que surge de la contraposicioacuten entre dominacioacuten y resistencia Por un lado el hecho de que los derechos huma-nos se configuraran como el discurso de justicia y dignidad de la modernidad-colonialidad capitalis-ta los convierte en el discurso de legitimacioacuten del poder y por consiguiente del Estado Esto los hace tambieacuten una narrativa que alimenta una retoacuterica hipoacutecrita que permite que las injusticias concre-tas y los abusos del Estado y de quienes ejercen alguna forma de poder se invisibilicen Es decir el Estado utiliza los derechos humanos como idea-les abstractos intangibles desconectados de la cotidianidad poliacutetica Desde el final de la Segunda Guerra Mundial y sobre todo despueacutes de la Guerra Friacutea los derechos humanos junto con la demo-cracia y el desarrollo se han convertido cada vez maacutes en uno de los discursos de legitimacioacuten del Estado que paradoacutejicamente llega a servir para justificar o enmascarar abusos e injusticias

El otro lado de esa misma moneda es lo que ocu-rre con los derechos humanos vistos desde quie-nes padecen esas injusticias y abusos Hobsbawm (1982) argumenta que en el siglo XVII los recla-mos no eran sobre derechos universales sino pe-ticiones sobre agravios concretos De muchas ma-neras los derechos humanos se han convertido en una herramienta maacutes de quienes sufren para algunos especiacuteficamente aquellos que no logran estar en condiciones para configurarse como suje-tos rebeldes son el uacutenico recurso de defensa que les permite condiciones miacutenimas de resistencia En estas situaciones los derechos humanos per-miten sentildealar la hipocresiacutea del Estado deslegiti-marlo desde su propio discurso de legitimacioacuten Esto evidentemente implica muchas estrategias

de entre las cuales los derechos humanos son soacutelo una pero en ocasiones muy uacutetil

Durante la pandemia los derechos a la vida a la salud a la salud puacuteblica y a un medio ambiente sano han tomado relevancia en la arena puacuteblica En simultaacuteneo a esto estaacuten las declaraciones de emergencia que ponen en segundo teacutermino otros derechos como el libre traacutensito o la privacidad Las mismas declaraciones de emergencia sanita-ria estaacuten reemplazando a los derechos humanos como discurso de legitimacioacuten con uno de justifi-cacioacuten sobre sus actos el del triage social La loacute-gica del triage social funciona en la situacioacuten de emergencia como justificacioacuten eacutetica de actos in-humanos y desplaza como discurso legitimador a los derechos humanos Plantea una nueva narra-tiva hipoacutecrita que el cometer actos inhumanos en una situacioacuten como la de esta pandemia es justo y en defensa de la dignidad comuacuten

En este punto resulta importante desenmasca-rar ese nuevo discurso hipoacutecrita lo que requiere demostrar que la loacutegica del triage social no es un manejo de recursos limitados en beneficio de las mayoriacuteas sino un mecanismo de eliminacioacuten o sacrificio de poblacioacuten desechable en beneficio de las minoriacuteas maacutes poderosas y sentildealar la res-ponsabilidad estructural de los Estados al llevar a cabo o favorecer actos inhumanos

Para el anaacutelisis especiacutefico de la pandemia y los derechos seraacute uacutetil definir salud y salud puacuteblica Salud es un derecho humano fundamental se-guacuten la Declaracioacuten Universal de los Derechos Humanos artiacuteculo 25 ldquoToda persona tiene dere-cho a un nivel de vida adecuado que le asegure asiacute como a su familia la salud y el bienestar y en especial la alimentacioacuten el vestido la vivienda la asistencia sanitaria y los servicios sociales nece-sariosrdquo (Asamblea General ONU 1948)

Para la Organizacioacuten Mundial de la Salud salud es el ldquoestado de completo bienestar fiacutesico mental y socialrdquo (International Health Conference 2002) Seguacuten la OMS los derechos incluyen el derecho de acceso a un sistema de proteccioacuten de la salud que ofrezca a todas las personas las mismas oportu-nidades de disfrutar del grado maacuteximo de salud que se pueda alcanzar Ademaacutes debe prever el ac-ceso al agua potable y al saneamiento baacutesico la educacioacuten para la salud la mejora de los cuidados


materno-infantiles las condiciones de trabajo se-guras El derecho a la salud para todas las perso-nas seguacuten la OMS significa que todo el mundo debe tener acceso a los servicios de salud que necesita cuando y donde los necesite sin tener que hacer frente a dificultades financieras Nadie deberiacutea en-fermar o morir solo porque sea pobre o porque no pueda acceder a los servicios de salud que necesita

La salud puacuteblica implica que se consiga la maacutexi-ma salud posible para el maacuteximo nuacutemero de per-sonas mediante la aplicacioacuten del conocimiento cientiacutefico acorde a cada contexto social histoacuterico y poliacutetico (Benach 2014) Esto permite afirmar que en la actual pandemia en muacuteltiples casos no se ha respetado el derecho a la salud puacuteblica pues desde antes de la pandemia las condiciones de acceso al agua potable al saneamiento baacutesico y a los servicios de salud eran de por siacute precarias en muchas partes del mundo Ahora con la crisis sanitaria ha muerto gente por no tener acceso a un sistema baacutesico de proteccioacuten de la salud

Esto nos plantea muchas interrogantes hablando de derechos humanos iquestPodriacuteamos estar ante criacute-menes de lesa humanidad Si se retoma lo que di-cen los estatutos de la Corte Penal Internacional estariacuteamos ante los que entran en el inciso k) ldquoOtros actos inhumanos de caraacutecter similar que causen intencionalmente grandes sufrimientos o atenten gravemente contra la integridad fiacutesica o la salud mental o fiacutesicardquo (Asamblea General ONU 1998)

La Corte interamericana de derechos humanos en una jurisprudencia en referencia al artiacuteculo 41 de la Convencioacuten Americana sobre Derechos Humanos asentoacute una idea que es de gran utilidad para analizar los derechos vulnerados en el con-texto actual

ldquoEl derecho a la vida es un derecho huma-no fundamental cuyo goce es un prerre-quisito para el disfrute de todos los demaacutes derechos humanos De no ser respetado todos los derechos carecen de sentido En razoacuten del caraacutecter fundamental del dere-cho a la vida no son admisibles enfoques restrictivos del mismo En esencia el dere-cho fundamental a la vida comprende no soacutelo el derecho de todo ser humano de no ser privado de la vida arbitrariamente sino tambieacuten del derecho a que no se le impida

el acceso a las condiciones que garanticen una existencia digna Los Estados tienen la obligacioacuten de garantizar la creacioacuten de las condiciones que se requieran para que no se produzcan violaciones de ese derecho baacutesi-co y en particular el deber de impedir que sus agentes atenten contra eacutelrdquo (Corcuera y Guevara 2001142)

Esta jurisprudencia da la pauta para afirmar que el derecho a la vida no implica solo el derecho a no ser privado de ella asiacute podriacuteamos comenzar a afirmar en el presente contexto global que uno de los derechos fundamentales vulnerados seriacutea precisamente la vida

Entonces aunque las violaciones de derechos hu-manos han sido una realidad cotidiana en el mun-do partimos de que especiacuteficamente los derechos a la vida a la salud y a la salud puacuteblica han sido violados frecuentemente desde que llegoacute la pan-demia Existen otros derechos que han sido vulne-rados como el derecho a la libertad de expresioacuten y a la informacioacuten entre otros maacutes

Es importante anotar que ademaacutes de las cues-tiones de salud y salud puacuteblica violatorias de derechos humanos hay un complejo contexto de conflictos beacutelicos o potencialmente beacutelicos pre-vios al Covid-19 que entrelazan la geopoliacutetica de la guerra y la economiacutea con la de la salud puacutebli-ca El bombardeo de Israel en contra del terri-torio palestino de Gaza en plena pandemia pasoacute praacutecticamente desapercibido igual ocurrioacute con los ataques de Turquiacutea a los suministros de agua del Kurdistaacuten y en general la guerra que se desa-rrolla en la regioacuten Estaacuten tambieacuten las sentildeales de una intervencioacuten armada que la administracioacuten Trump amenazoacute (y amenaza) con lanzar sobre Venezuela esto a pesar de los contagios entre personal naval de los portaaviones y destructores estadounidenses

En otro campo estaacute el continuo bloqueo pro-movido por Estados Unidos auacuten para asistencia humanitaria en contra de Cuba e Iraacuten y los mi-ni-bloqueos que impuso a Alemania y Canadaacute por lo menos en lo que respecta al abastecimiento de mascarillas N95 Habriacutea que agregar tambieacuten las medidas que han derivado en el reforzamiento de modos de control social como ocurrioacute con la ley de seguridad China y sus implicaciones en Hong Kong

En el campo del trabajo algo que estamos viendo es que como resultado de la deslocalizacioacuten del capital la reproduccioacuten de la mano de obra en funciones no es indispensable existe un ejeacutercito de reserva global que en el contexto de la pandemia permite reemplazar a los contagiados o muer-tos como se ha visto en Brasil India Sudaacutefrica Meacutexico e incluso en Estados Unidos

Ademaacutes de las respuestas oportunismos y pro-blemas particulares entre los Estados y de los Estados frente a las poblaciones bajo su dominio o influencia hay situaciones en las que los actos inhumanos han sido un patroacuten casi global Las condiciones en las que se encuentra el perso-nal sanitario son preocupantes a nivel mundial Hasta este momento han muerto por lo menos 3000 profesionales de la salud seguacuten un informe de Amnistiacutea Internacional (2020) Las condiciones que provocaron su muerte no tienen que ver solo con la proteccioacuten que debiacutean tener y con las medi-das sanitarias que requeriacutean para atender enfer-mos de Covid-19 sino con represalias de las que han sido objeto Seguacuten el mismo informe del 13 de julio de 2020 estas represalias han sido desde el arresto y la detencioacuten hasta amenazas y despidos Los paiacuteses con mayor nuacutemero de muertes de per-sonal sanitario hasta ahora son Estados Unidos (507) Rusia (545) Reino Unido (540 incluidos 262 asistentes sociales) Brasil (351) Meacutexico (248) Italia (188) Egipto (111) Iraacuten (91) Ecuador (82) y Espantildea (63)

Otra situacioacuten que se estaacute viviendo tambieacuten a es-cala global es la que padecen los presos ante la pandemia Si de por si la situacioacuten de hacinamien-to que se vive en las caacuterceles en la mayor parte del planeta es muy fuerte ahora con la pandemia el riesgo de contagio y de muerte es auacuten maacutes alto Como lo ha denunciado Zaffaroni (2020) ldquonos en-contramos ante una nueva forma de criacutemenes de

El panorama global es complejo y preocupante y los procesos que se desarrollan en la pandemia

requeriraacuten mucho tiempo de anaacutelisis y esperemos que de aprendizajes


lesa humanidad como es el caso de las caacuterceles Si no se hace nada se muerenrdquo Desde casos en los que permiten esto por razones poliacuteticas como el de Julian Assange hasta los de las personas presas por delitos comunes la constante es que los seres humanos que viven en las caacuterceles pare-cen considerarse poblacioacuten desechable

El 13 de marzo la Comisioacuten Interamericana de Derechos Humanos en el marco de su Sala de Coordinacioacuten y Respuesta Oportuna e Integrada a la crisis en relacioacuten con la pandemia del SARS-CoV-2 llamoacute a los Estados a enfrentar la grave situacioacuten de las personas privadas de la libertad en la regioacuten y a adoptar medidas urgentes para garantizar la salud y la integridad de esta pobla-cioacuten y de sus familias frente a los efectos de la pandemia del Covid-19 asiacute como a asegurar las condiciones dignas y adecuadas de detencioacuten en los centros de privacioacuten de la libertad de con-formidad con los estaacutendares interamericanos de derechos humanos (CIDH 2020) En particular la

Comisioacuten insta a los Estados a reducir la sobre-poblacioacuten en los centros de detencioacuten como una medida de contencioacuten de la pandemia

Los centros de detencioacuten de migrantes presen-tan las mismas condiciones que muchas de las caacuterceles en el mundo y por lo tanto los mismos riesgos de contagio Esta poblacioacuten creciente en el mundo parece ser tambieacuten parte de la inhumana lista de los desechables por partida doble tanto por las condiciones que los expulsan de su paiacutes de origen como por las condiciones con las que se encuentran en los paiacuteses de destino El Covid-19 estaacute dando la pauta la excusa perfecta para que se levanten muros como el que Trump pretende terminar entre Ameacuterica Latina y Estados Unidos o como la fortaleza que se ha pretendido construir alrededor de Europa para separarlos de sus anti-guas colonias en Aacutefrica y Asia La situacioacuten en la que se encuentran los migrantes del mundo ante la pandemia es brutal en estos momentos debe-riacutean de ser atendidos no expulsados La violacioacuten

del derecho a la vida y a la salud en estos casos ha sido grave y vulnerada sistemaacuteticamente

Los pueblos originarios (como los de Latinoameacuterica de Angloameacuterica y de otras par-tes del mundo) o las naciones no estatales o no reconocidas formalmente (como el Kurdistaacuten o Palestina) para sobrevivir se ven ahora forzadas a enfrentar no soacutelo las amenazas que represen-tan los Estados y los mercados sino tambieacuten a tratar de contener los contagios y evitar maacutes muertes

El panorama global es complejo y preocupante y los procesos que se desarrollan en la pandemia requeriraacuten mucho tiempo de anaacutelisis y esperemos que de aprendizajes Sin embargo para poder ha-cer un esbozo de lo que todo esto estaacute implican-do es necesario escoger solo algunos casos No porque sean maacutes importantes sino porque pueden resultar ilustrativos de la conjuncioacuten de los ele-mentos que hemos mencionado

El continente americano iquestDerechos humanos o desechos humanos

Despueacutes de la diseminacioacuten del coronavirus por Asia y Europa con desenlaces traacutegicos y ponien-do en evidencia la vulnerabilidad humana a ni-vel global el epicentro de la pandemia pasoacute al continente Americano con cifras de contagios y muertes que superaron raacutepidamente a los demaacutes continentes

Una caracteriacutestica importante en la mayor par-te de Latinoameacuterica (y en menor medida en Angloameacuterica) son los altiacutesimos niveles de des-igualdad a pesar de tener algunas de las econo-miacuteas maacutes grandes del mundo De acuerdo con los uacuteltimos datos del iacutendice GINI (World Bank 2020) en los uacuteltimos diez antildeos la mayor parte del con-tinente se ha mantenido entre niveles medios y altos de desigualdad Los iacutendices GINI miden queacute tanto la distribucioacuten de la riqueza en un paiacutes se desviacutea de una distribucioacuten completamente equi-tativa en donde 0 de desviacioacuten es el una distri-bucioacuten completamente equitativa y 100 es una distribucioacuten completamente inequitativa Un paiacutes puede tener un gran crecimiento econoacutemico un ingreso per caacutepita promedio muy alto pero en la realidad eso significa que hay un 10 de la pobla-cioacuten que concentra el 90 de esa riqueza

Casos de contagio de COVID-19 por milloacuten de habitantes Fuente World Health Organization

Muertes por COVID-19 por milloacuten de habitantes Fuente World Health Organization


Paiacutes Antildeo maacutes reciente Valor maacutes reciente

Argentina 2018 414

Bolivia 2018 422

Brasil 2018 539

Chile 2017 444

Colombia 2018 504

Ecuador 2018 454

El Salvador 2018 366

Guatemala 2014 483

Honduras 2018 521

Meacutexico 2018 454

Peruacute 2018 428

Estados Unidos 2016 414

Iacutendice GINI Fuente World Bank

Otra caracteriacutestica del continente americano es el proceso de privatizacioacuten que han seguido casi to-dos los paiacuteses como parte de las poliacuteticas neolibe-rales impulsadas por organismos internacionales como el FMI y el Banco Mundial y que ha conver-tido el poder adquisitivo en un factor de filtracioacuten en el acceso a la sanidad La salud es uno de los sectores que ha sido tendencialmente privatizado algo que cobra relevancia al momento de reque-rirse atencioacuten sanitaria de manera masiva como ocurre en un caso de pandemia

Ademaacutes de acuerdo con las cifras oficiales maacutes recientes en el continente existen enormes dispa-ridades y deficiencias en la capacidad hospitalaria

En teacuterminos de derechos humanos la situacioacuten continental tampoco es alentadora incluso si soacutelo se toman en cuenta mediciones cuantitativas muy generales como el iacutendice de fragilidad estatal

(Fund for Peace 2015) De acuerdo con su califica-cioacuten de violaciones de derechos humanos para los Estados del mundo en 2014 donde 0 es mejor y 10 peor y que retoman variables como la libertad de prensa libertades civiles libertad poliacutetica traacutefico de personas prisioacuten poliacutetica persecucioacuten religiosa encarcelamientos tortura y ejecuciones Aunque el disentildeo del iacutendice puede tener un sesgo en cuanto a las variables que retoma siacute muestra una situacioacuten bastante preocupante en el continente americano tomando en cuenta que existen pocos conflictos ar-mados reconocidos oficialmente y la mayoriacutea de los paiacuteses son presuntamente democraacuteticos con califi-caciones medias (si se excluye Canadaacute y Uruguay)

De acuerdo con el Iacutendice de Astringencia (Hale 2020) de la Universidad de Oxford que mide queacute tantas medidas de distancia y restriccioacuten de movili-dad aplica un paiacutes para evitar contactos entre per-sonas y por lo tanto contagios (cierres de centros de trabajo escuelas espacios puacuteblicos aeropuer-tos transporte puacuteblico limitaciones a la circula-cioacuten territorial cuarentenas toques de queda etc) en Ameacuterica Latina la respuesta en estos teacuterminos ocurre con mayor intensidad entre marzo y abril de 2020 en donde Argentina El Salvador y Honduras se encuentran entre los paiacuteses que aplicaron ma-yores y maacutes estrictas medidas de distancia social y Brasil Estados Unidos y Meacutexico las menores

Fuente Fund for Peace (Fragile States Index)Camas de hospital por cada 1000 habitantes Fuente World Bank

Gasto en salud ( del PIB) vs Gasto privado en salud ( del total de gasto en salud) Fuente World Bank


Con este contexto de teloacuten de fondo en Ameacuterica hay ademaacutes un sinnuacutemero de proceso complejos de conflictos y crisis previas a la pandemia que se agudizan con esta nueva crisis que han evi-denciado graves injusticias detonado decisiones inhumanas y actos atroces Aquiacute abordaremos casos con antecedentes pre-coronavirus pero que con la pandemia han desembocado en situa-ciones graves que podriacutean representar violacio-nes a derechos humanos y posibles criacutemenes de Estado

La cantidad de actos y decisiones inhumanas o potencialmente criminales de los Estados durante la pandemia difiacutecilmente se pueden agotar en un soacutelo texto y en un soacutelo anaacutelisis sobre todo uno que se desarrolla mientras el SARS-CoV-2 sigue sien-do el protagonista de la coyuntura global Lo que tratamos de hacer aquiacute es presentar algunos casos especiacuteficos en algunos paiacuteses del continente aque-llos que hemos identificado como graves El propoacute-sito no es agotar el anaacutelisis y sentildealamiento de estos actos inhumanos sino sumar en su impulso

Elegimos estos casos como una muestra general de las violaciones de derechos humanos que se estaacuten cometiendo algunas detonadas por la pan-demia otras por enfrentarla y otras que se agra-varon por la crisis sanitaria

Argentina

La Coordinadora Contra la Represioacuten Policial e Institucional registroacute 69 asesinatos y una desapari-cioacuten forzada que involucran a instituciones o agen-

tes estatales entre el 20 de marzo y el 24 de julio de 2020 De ese total 22 muertes ocurrieron en caacuter-celes 14 en comisariacuteas y 24 fueron casos de ldquofusi-lamiento de gatillo faacutecilrdquo (cuando la policiacutea dispara sin clara justificacioacuten para hacerlo) Ademaacutes tres feminicidios que involucran a fuerzas de seguri-dad dos maacutes en casos ldquointrafuerzardquo (intrafamiliar) dos arrollados deliberadamente por un patrulle-ro y dos detenidos por la policiacutea que aparecieron muertos diacuteas despueacutes A esto se agrega el caso de desaparicioacuten forzada en el mes de abril de Facundo Astudillo Castro El 16 de agosto se encontroacute un esqueleto que podriacutea ser de Facundo (el cuerpo se encontraba en un grado avanzado de descompo-sicioacuten) su madre Cristina Castro sentildealoacute que a un lado aparecioacute un zapato tenis como el que eacutel usoacute la uacuteltima vez que lo vio el tenis estaba limpio como ella dice esto bien puede ser un mensaje Hasta el momento no hay confirmacioacuten de las muestras de ADN (Pedulla 2020) Los agentes que cometieron estos actos perteneciacutean a la Policiacutea de la Ciudad de Buenos Aires dirigida por Sergio Berni que parece ambicionar alguacuten cargo puacuteblico de alto nivel y de quieacuten exigen la renuncia a la Policiacutea Federal a la Gendarmeriacutea al Servicio Penitenciario Federal y a los servicios penitenciarios y policiacuteas provinciales (CORREPI 2020)

Bolivia Bolivia se encuentra con la pandemia en plena convulsioacuten poliacutetica Tras el golpe de Estado que llevoacute al poder a Jeannine Antildeez el paiacutes se encon-traba en una situacioacuten precaria con un reacutegimen que intentaba a la vez consolidar su poder por

medios represivos y reestructurar las poliacuteticas internas y externas del paiacutes de acuerdo con su agenda Para 2020 estaban previstas nuevas elec-ciones El contexto electoral boliviano se combina con intereses en los recursos naturales del paiacutes que significaron el apoyo de empresas trasnacio-nales al golpe de Estado Un claro ejemplo de esto es el reconocimiento puacuteblico que Elon Musk hizo en su cuenta de Twitter en apoyo al golpe en un paiacutes con importantes yacimientos de litio materia prima esencial para la industria tecnoloacutegica

El Covid-19 ha evidenciado la fragilidad institucio-nal boliviana con una situacioacuten sanitaria criacutetica hospitales desbordados cementerios saturados y escasez de agua A la par de esta situacioacuten de crisis sanitaria la Asociacioacuten Nacional de Prensa (ANP 2020) manifestoacute su preocupacioacuten por la promulga-cioacuten del Decreto 4231 que en conjunto con decla-raciones de varios ministros en las que amenazan con encarcelar a quien difunda ldquodesinformacioacutenrdquo parece significar que la intencioacuten es castigar penal-mente a los medios de comunicacioacuten que cuestio-nen las estrategias de respuesta al coronavirus por parte del gobierno de Antildeez Esto complica auacuten maacutes el contexto cuando al mismo tiempo el gobierno boliviano pretende posponer el proceso electoral algo que ha detonado grandes movilizaciones

El contexto poliacutetico ha hecho que la pandemia se convierta en parte de la pugna electoral al tiem-po que los contagios y las muertes siguen aumen-tando en Bolivia sin una respuesta institucional de contencioacuten efectiva Oscar Olivera describe la si-tuacioacuten de manera cruda cuando dice ldquoLos de arri-ba muestran mucha inoperancia pillaje y chan-taje La clase poliacutetica soacutelo estaacute interesada en su poder lo uacuteltimo que les interesa es la gente Tanto en el gobierno como en la oposicioacuten hay un apro-vechamiento de la desgracia y de la impotencia de la poblacioacuten abandonada a su suerte La poliacutetica de arriba es un circo putrefactordquo (Zibechi 2020b)

Brasil

Brasil se encuentra con el coronavirus bajo la administracioacuten de Jair Bolsonaro un presidente que se ha caracterizado por la implantacioacuten de poliacuteticas autoritarias cercano al ejeacutercito y a las grandes empresas agroindustriales Su mandato ha sido crecientemente hostil y expliacutecitamente ra-cista hacia las poblaciones indiacutegenas de la regioacuten

Fuente Oxford COVID-19 Government Response Tracker


amazoacutenica En los recientes incendios masivos de la selva el gobierno de Bolsonaro no soacutelo tardoacute mucho en poderlos controlar sino que se negoacute a recibir apoyo internacional para detenerlos al tiempo que minimizoacute la gravedad de las conse-cuencias ambientales y sociales

La Articulacioacuten de Pueblos Indiacutegenas de Brasil en el diagnoacutestico de su plan para enfrentar el Covid-19 en Brasil titulado ldquoEmergencia Indiacutegenardquo (APIB 2020) registra 113 pueblos indiacutegenas afec-tados con 8847 infectados y 365 muertos hasta el 25 de junio de 2020 De acuerdo con la informa-cioacuten de la APIB el SARS-CoV-2 llegoacute a los territo-rios indiacutegenas maacutes remotos a traveacutes del Ejeacutercito y de los meacutedicos y equipos de la Secretariacutea Especial de Salud Indiacutegena (SESAI) del gobierno brasilentildeo Estas infecciones se dan a la par de los constantes ataques e invasiones de los territorios indiacutegenas por parte del gobierno y empresas interesadas en los recursos que ahiacute se encuentran

Desde la llegada de Jair Bolsonaro a la presiden-cia de Brasil la situacioacuten en la que se encuentran los indiacutegenas del Amazonas es grave sobre todo desde que se ha comenzado a invadir su territorio La invasioacuten provocoacute condiciones parecidas a las que se presentaron en el territorio Yanomami en los ochentas cuando una quinta parte de la pobla-cioacuten murioacute de enfermedades despueacutes de que un grupo de trabajadores (40 mil garimpeiros) inun-daron la reserva La situacioacuten actual es muy simi-lar con los 20 mil garimperos que hay en la zona (Phillips 2020) Con la actual invasioacuten garimpeiro Bolsonaro dijo que la reserva es demasiado gran-de para su poblacioacuten de alrededor de 26000 indiacute-genas y que sus riquezas minerales deberiacutean ser explotadas Es importante anotar que Bolsonaro estaacute denunciado ante la Corte Penal Internacional por genocidio desde 2019 (CADHU 2019)

Colombia

De acuerdo con la informacioacuten del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (INDEPAZ 2020) desde la firma del acuerdo de paz entre el gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP) en 2016 se han cometido casi mil asesinatos de liacutederes socia-les y defensores de derechos humanos La mayoriacutea de los asesinatos han sido cometidos por sicarios ldquodesconocidosrdquo probablemente vinculados a terra-

tenientes paramilitares narcotraficantes y a poliacute-ticos vinculados con ellos Maacutes de la mitad de las viacutectimas son campesinos e indiacutegenas y vinculados a conflictos producidos por la mineriacutea posesioacuten de la tierra recursos naturales cultivos iliacutecitos y narco-traacutefico De estos asesinatos las instancias oficiales han documentado menos de la mitad

La crisis sanitaria no detuvo los asesinatos tan solo entre el 6 de marzo cuando se contabilizoacute el primer caso de Covid-19 en Colombia y el 8 de agosto de 2020 el INDEPAZ (2020b) registroacute 114 liacutederes sociales y defensores de derechos huma-nos asesinados en diversas regiones La mayo-riacutea de ellos son de la regioacuten del Cauca en donde hay procesos organizativos potentes y profundos como el de la Asociacioacuten de Cabildos Indiacutegenas del Norte del Cauca

El Consejo Regional Indiacutegena del Cauca (2020) denuncioacute en marzo la agresioacuten del Ejeacutercito Colombiano a su guardia indiacutegena responsable del control territorial en el contexto de la pande-mia en algo que identifican como una estrategia del gobierno colombiano no soacutelo con la intencioacuten de atacar sus territorios sino de usar esos ataques para propagar el virus entre la poblacioacuten indiacutege-na ldquohellip nos declaramos en maacutexima alerta por las intenciones de permear nuestro territorios con la guerra y expandir la pandemiardquo

Chile

En los meses anteriores a la pandemia Chile se encontraba viviendo masivas movilizaciones de-tonadas por el descontento hacia el gobierno de Sebastiaacuten Pintildeeira pero que se orientaban a la buacutes-queda de cambios maacutes profundos y que tuvieron una respuesta violenta por parte del gobierno chi-leno Durante esas movilizaciones entre los meses de octubre de 2019 y febrero de 2020 el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH 2020) de Chile documentoacute 3765 personas heridas 500 por balas Las acciones del Estado derivaron en 1312 acciones judiciales iniciadas por el INDH 5 de ellas por homicidios cometidos por agentes estatales 195 por violencia sexual y 951 por tortura Un actor central en estas propuestas fue el pueblo Mapuche que durante antildeos ha denunciado la invasioacuten de sus territorios por parte de empresas agroindustriales y extractivas y que ha padecido una represioacuten sis-temaacutetica por parte del Estado chileno

Durante la crisis por el SARS-CoV-2 la situacioacuten de los mapuches se ha recrudecido auacuten maacutes Desde el 4 de mayo de 2020 27 presos mapuches iniciaron una huelga de hambre que despertoacute movilizaciones solidarias que como respuesta fueron reprimidas Los presos mapuche han sido excluidos de las medidas miacutenimas de prevencioacuten de contagios Por otra parte en la regioacuten de la Araucaniacutea los mapuches ocuparon edificios mu-nicipales en protesta por la precaria situacioacuten de salud de los 27 presos En esa misma regioacuten el 4 de junio el vocero de la comunidad We Newen Alejandro Treuquil fue asesinado y en la agre-sioacuten otras tres otras personas resultaron heri-das (Comunidad Autoacutenoma We Newen 2020) El 1 de agosto un grupo de civiles armados con la aquiescencia de la policiacutea entraron en los edifi-cios violentamente y agredieron a las mujeres hombres y menores que se encontraban en el in-terior (Voceriacutea de Machi Celestino Cordova 2020) El pueblo Mapuche denuncioacute que la policiacutea per-mitioacute que ocurrieran los hechos auacuten cuando los agresores se encontraban violando el toque de queda con motivo del estado de emergencia Los territorios Mapuche en esa regioacuten han sido recu-rrentemente agredidos por fuerzas estatales y por grupos empresariales interesados en el control de los recursos que se encuentran en esos territorios

Ecuador

La situacioacuten de Ecuador ha sido difundida como ejemplo de horror en la pandemia Las imaacutege-nes de los cadaacuteveres en las calles de Guayaquil muestran un sistema de salud y de los servicios puacuteblicos forenses totalmente colapsados Sin em-bargo la situacioacuten no es exclusiva de esa ciudad ecuatoriana es un problema nacional que tiene sus causas inmediatas en decisiones econoacutemicas que derivaron en una crisis estructural

Desde 2019 el gobierno de Lenin Moreno inicioacute la aplicacioacuten de poliacuteticas de ajuste del gasto y de la inversioacuten puacuteblica asiacute como de las condiciones laborales y del sistema de pensiones en el mar-co del acuerdo de Servicio Ampliado del Fondo Monetario Internacional (SAF) suscrito febrero del 2019 Estas poliacuteticas han precarizado auacuten maacutes a los sectores de la poblacioacuten de por siacute empobre-cidos beneficiando a empresas trasnacionales bancos entre otros sectores acomodados Entre


las medidas estaacute la contraccioacuten del sistema de sa-lud puacuteblica De acuerdo con datos del Parlamento Plurinacional de los Pueblos (2020) el presupues-to de salud puacuteblica se redujo de 353 millones de doacutelares en 2017 a 186 millones en 2019 Desde 2017 el gobierno ecuatoriano habiacutea condona-do 4500 millones de doacutelares en impuestos a las 500 empresas maacutes grandes A la par en marzo de 2020 el gobierno de Moreno decidioacute realizar un pago de 324 millones de doacutelares de su deuda externa precarizando auacuten maacutes al paiacutes y sus posi-bilidades de enfrentar la pandemia

Seguacuten la OIT en Ecuador en 2019 el nuacutemero de personas que perdieron su empleo era de 311 000 y calculan que para finales de 2020 la cifra sea de 850000 nuevos desempleados A pesar de esto para enfrentar la pandemia el gobierno de Moreno creoacute la ldquoLey Humanitariardquo con la que pretende crear un impuesto de facto (contribu-cioacuten) al trabajo que implicariacutea que los trabaja-dores ecuatorianos absorbieran el 60 del costo de la crisis

El Salvador

Desde inicios de marzo de 2020 la administra-cioacuten del presidente Bukele de El Salvador esta-blecioacute centros de cuarentena en donde confina-ron a viajeros que llegaban al paiacutes durante 30 diacuteas sin medidas de sanidad ni prevencioacuten de contagio adecuadas En esos mismos centros re-tienen a personas detenidas por las fuerzas mili-tares y policiacuteacas por violar la orden de quedarse en casa impuesta en la declaracioacuten de Estado de Emergencia y el posterior Estado de Excepcioacuten De acuerdo con la informacioacuten del Gobierno de el Salvador (2020) hasta el mes de agosto maacutes de 16 mil personas habriacutean sido retenidas en los 23 centros de cuarentena de las cuales 2400 habriacutean sido retenidas por violar la cuarentena De acuerdo con el informe sobre violaciones de derechos humanos en la respuesta al Covid-19 del Comiteacute en Solidaridad con el Pueblo de El Salvador (CISPES 2020) una gran cantidad de estas detenciones han sido arbitrarias y con un uso excesivo de la fuerza abusos que no soacutelo no han sido investigados o frenados por las autori-dades sino que han sido alentados por el propio presidente Bukele violando incluso la decisioacuten de la Suprema Corte de que soacutelo se detuviera a quienes se considerara infectados

En paralelo a esto la administracioacuten de Bukele se ha mostrado hostil ante periodistas y radios comunitarias y han obstaculizado el acceso a la informacioacuten sobre la respuesta gubernamental a la pandemia Como nota complementaria Bukele solicitoacute un preacutestamo de 389 millones de doacutelares al FMI al tiempo que redujo en 33 millones el presu-puesto de salud

Estados Unidos

Lo que Gordon y Green (2020) llaman racismo estructural y que otros han llamado racismo sis-teacutemico en Estados Unidos quedoacute evidenciado con el surgimiento del movimiento social Black Lives Matter despueacutes de que George Floyd fuera asesina-do a manos de policiacuteas El hecho de que este mo-vimiento se haya convertido en la protesta social maacutes grande en la historia estadounidense (Brooks

2020) y que esto se haya dado en el contexto de la pandemia resulta sumamente importante Como dice Brooks ese movimiento empieza a cuestionar los fundamentos del sistema estadounidense y su injusticia econoacutemica social y poliacutetica protegida a traveacutes de la violencia racista oficial Como hemos podido ver la serie de burdas declaraciones de altos funcionarios y la ejecucioacuten de actos inhumanos se han vuelto cotidianas en Estados Unidos y se han agudizado con la pandemia

Tras el asesinato de George Floyd y las crecientes protestas del movimiento Black Lives Matter (en-tre otros) en las principales ciudades de Estados Unidos la administracioacuten Trump decidioacute utilizar a la agencia de Aduanas y Proteccioacuten Fronteriza (CBP en ingleacutes) perteneciente al Departamento de Seguridad Interna (Homeland Security) y que incluye a la Patrulla Fronteriza como policiacutea fede-

Edgar Antonio Villasentildeor Gonzaacutelez httpswwwflickrcomphotoseantoniovg3484148699inalbum-72157621910231303


ral para enfrentar a los manifestantes De acuer-do con la Unioacuten Americana de Libertades Civiles (ACLU 2020) la CBP y la Patrulla Fronteriza han actuado como policiacutea secreta durante antildeos llevando a cabo arrestos violentos de migrantes sin papeles en todas las ciudades estadouniden-ses Tanto la ACLU como otras organizaciones de derechos humanos han denunciado detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas federales desplegadas por el go-bierno de Donald Trump A esto se agrega el uso tambieacuten de la agencia de Ejecucioacuten de Aduanas e Inmigracioacuten (ICE) que ha sido responsable de las brutales deportaciones de migrantes durante los antildeos recientes

De acuerdo con informacioacuten de los Centros de Control y Prevencioacuten de Enfermedades (CDC) del gobierno estadounidense la poblacioacuten negra ha sido desproporcionadamente maacutes afectada con mayor necesidad de hospitalizacioacuten Muchas de las personas que no pudieron dejar de trabajar y que se contagiaron del virus han sido en su ma-yoriacutea negros y latinos De acuerdo con los datos del Rastreo Racial del Covid-19 en Estados Unidos (The Atlantic 2020) la poblacioacuten negra estaacute mu-riendo 25 veces maacutes que la poblacioacuten blanca (con 74 muertes por cada 100 mil habitantes) seguidos por la poblacioacuten indiacutegena y la poblacioacuten latina (con 40 muertes por cada 100 mil habitantes cada una) y por la poblacioacuten de origen asiaacutetico (con 31 muertes por cada 100 mil habitantes)

Es importante resaltar que la CBP se ha conver-tido en una fuerza militarizada violenta y con un alto grado de impunidad la ACLU tiene un regis-tro de 102 personas asesinadas en los uacuteltimos diez antildeos en encuentros con este cuerpo de seguridad y muertes en custodia por las cuales ninguacuten agente ha sido enjuiciado Los agentes de la CBP incurren en actividades criminales fuera de sus tareas ofi-ciales cinco veces maacutes que cualquier otro cuerpo policiacuteaco El secuestro violacioacuten o desaparicioacuten de nintildeos y familias de migrantes a manos de la Patrulla Fronteriza es recurrente

Esta agudizacioacuten de la violencia interna en Estados Unidos se da en medio de un contexto maacutes amplio de hostilidad racial y social que ha sido alimen-tado por la administracioacuten del presidente Trump Un ejemplo claro ha sido su constante hostilidad hacia la poblacioacuten migrante sin papeles que no

ha disminuido con la crisis sanitaria La expulsioacuten de nintildeos migrantes se ha vuelto cada vez maacutes criacute-tica entre marzo y abril al menos 915 menores de edad fueron expulsados y al menos 60 fueron deportados desde el interior del paiacutes en el mis-mo periodo de acuerdo con cifras oficiales De acuerdo con reportes de diversas organizaciones las deportaciones han sido en plena madrugada y sin que los guardianes legales de los nintildeos fue-sen notificados Algo que se vuelve cada vez maacutes evidente es que Trump estaacute aprovechando la crisis del coronavirus para endurecer sus poliacuteticas mi-gratorias y medidas de deportacioacuten

El caso de Estados Unidos es particularmente complejo por la cantidad de abusos simultaacuteneos que se estaacuten cometiendo y por el impacto regional y global que tienen

Guatemala

En Guatemala el gobierno del presidente Alejandro Giammattei declaroacute entre junio y julio Estado de sitio en varios municipios de la regioacuten Qrsquoechirsquo y Gariacutenagu (gariacutefuna) de los departamentos de Izabal Alta Verapaz y Sololaacute Estas declaraciones han sido rechazadas por decenas de organizacio-nes sobre todo porque la normatividad del Estado de sitio es la misma que existiacutea durante el conflicto armado interno dentro de la Ley de Orden Puacuteblico de 1965 y presenta condiciones para que las fuer-zas de seguridad cometan abusos El Centro para la Accioacuten Legal en Derechos Humanos (CALDH 2020) y la Unidad de Proteccioacuten a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos de Guatemala (UDEFEGUA 2020) han documentado y denun-ciado que el Ejeacutercito de Guatemala y la Policiacutea Nacional Civil han cometido detenciones arbitra-rias han hecho allanamientos ilegales efectuado interrogatorios incluso a menores de edad y han agredido a mujeres

Honduras

La situacioacuten en Honduras era ya compleja antes de la llegada del SARS-CoV-2 el contexto poliacutetico que detonoacute el golpe de Estado se ha agudizado Como lo ha documentado el Centro Hondurentildeo de Promocioacuten para el Desarrollo Comunitario se exacerbaron los conflictos territoriales al mismo tiempo el uso de la policiacutea militar para imple-mentar las medidas de distanciamiento ha des-

encadenado una ola represiva violenta de deten-ciones arbitrarias se han usado armas de fuego en contra de manifestantes y se ha cometido por lo menos un homicidio a manos de agentes es-tatales como lo denuncian las organizaciones que integran la Mesa de Derechos Humanos en Honduras (2020)

Ademaacutes de la situacioacuten general la poblacioacuten Gariacutenagu (gariacutefuna) que ya sufriacutea condiciones cercanas al apartheid con condiciones de enorme discriminacioacuten y el despojo de sus tierras y comu-nidades con fines turiacutesticos durante la cuarentena la violencia en su contra se ha acentuado con la aquiescencia y posible colusioacuten del Estado a pe-sar de la existencia de una sentencia de la CIDH que exige su proteccioacuten La Coalicioacuten contra la Impunidad denuncioacute a finales de julio de 2020 la desaparicioacuten forzada de cuatro hondurentildeos gariacute-nagu y la muerte de otros dos todo esto enmar-cado en el contexto de violencia sistemaacutetica en contra de estas comunidades de la costa caribentildea (Daacutevila 2020)

Meacutexico El coronavirus llega a Meacutexico en un contexto de crisis humanitaria detonada por la guerra abierta que el gobierno del expresidente Felipe Calderoacuten desatoacute en contra de los caacuterteles del narcotraacutefico a poco tiempo de ser nombrado presidente en un proceso electoral muy cuestionado con funciona-rios ahora enjuiciados por viacutenculos con el crimen organizado y que ha derivado en cientos de miles de muertos y decenas de miles de desaparecidos Esta es una estrategia que continuoacute con la admi-nistracioacuten de Enrique Pentildea Nieto En la gestioacuten de Loacutepez Obrador la militarizacioacuten de la seguridad puacuteblica tomo un nuevo giro con la creacioacuten de la Guardia Nacional en 2017 compuesta en su ma-yoriacutea por policiacuteas militares navales y federales y bajo un mando compartido militar y civil

Esto se enmarca en un crecimiento de la influen-cia militar que con la pandemia se acrecentoacute Es importante sentildealar que dentro de la crisis de vio-lencia que se vive en Meacutexico y con la crisis sanita-ria tomando fuerza el 11 de mayo de 2020 el con-greso legalizoacute la presencia de las fuerzas armadas en las tareas de seguridad hasta el antildeo 2024 pre-suntamente como una medida para dar tiempo a la consolidacioacuten de la Guardia Nacional


Desde el inicio de la pandemia en Meacutexico el pre-sidente Loacutepez Obrador se negoacute a detener la cons-truccioacuten de grandes proyectos de infraestructura que presentaban fuerte resistencia local y nacio-nal especiacuteficamente el aeropuerto de Santa Luciacutea (obra en manos del Ejeacutercito Mexicano) la refineriacutea Dos Bocas el Tren Maya y el Corredor Transiacutestmico (proyecto iniciado desde la administracioacuten de Vicente Fox en el marco del Plan Puebla Panamaacute y continuado en las siguientes gestiones) En los cuatro casos y sobre todo en los dos uacuteltimos pro-yectos que ya representaban una amenaza para el medio ambiente y para poblaciones locales y sobre las que el gobierno mexicano habiacutea estable-cido una estrategia que derivariacutea en la confronta-cioacuten entre actores locales

El ejemplo maacutes claro reciente y brutal fue la ma-sacre de 15 personas en San Mateo del Mar el 21 de junio de 2020 en la que un grupo de indiacutegenas Ikoot que se dirigiacutea en autobuacutes a una reunioacuten infor-mativa fueron detenidos en un filtro sanitario para despueacutes ser atacadas con armas de fuego por un grupo armado perteneciente a la policiacutea munici-pal Tras el ataque las autoridades Ikoot solicitaron la presencia de la Guardia Nacional Al regresar a su comunidad Huazatlaacuten del Riacuteo la agencia mu-nicipal estaba tomada por un grupo armado Ante esto la Guardia Nacional no soacutelo no se quedoacute a resguardar a la poblacioacuten sino salieron del lugar agrediendo a las personas que les pediacutean ayuda (Asamblea de San Mateo del Mar 2020)

De acuerdo con los comunicados de las co-munidades afectadas que publica el Congreso Nacional Indiacutegena (Alcaldiacutea Uacutenico Constitucional San Mateo del Mar 2020) el reteacuten donde se dio la emboscada que aparentaba ser un filtro sanitario por el Covid-19 habiacutea sido instalado por el presi-dente Municipal Bernardino Hinojosa Ponce y por su asesor Jorge Leoncio Arroyo Rodriacuteguez quieacuten ademaacutes es socio de la empresa Construcciones Airad y administrador del Grupo Constructor Pritzker dedicados a proyectos de infraestructu-ra y que ha sido protagonista de varias agresio-nes similares en los uacuteltimos cinco antildeos En esos mismos documentos se encuentran comunicados denunciando agresiones armadas por ese mismo grupo desde principios de mayo de 2020 advir-tiendo la posible escalada de violencia y solici-tando la accioacuten preventiva gubernamental que nunca llegoacute

En San Mateo del Mar habiacutea ya una fuerte re-sistencia al proyecto industrial y de infraestruc-tura transiacutestmica desde sexenios anteriores en particular contra un proyecto de energiacutea eoacutelica que afectaba a varias comunidades Asimismo la consulta que realizoacute la administracioacuten de Loacutepez Obrador sobre la continuacioacuten y desarrollo del Corredor Transiacutestmico fue fuertemente denun-ciada por privilegiar la consulta en comunidades que no seriacutean directamente afectadas por los pro-yectos

Vale la pena anotar que el ambiente poliacutetico en torno a la crisis sanitaria es complejo pues se enmarca en un contexto de gran agresividad de partidos de oposicioacuten al partido oficial y grupos poliacuteticos vinculados al expresidente Calderoacuten y algunos gobernadores han tratado de utili-zar la respuesta al SARS-CoV-2 con propoacutesitos electorales lo que ha detonado que las poliacuteticas en torno a la pandemia empiecen a estar con-dicionadas por el conflicto entre partidos poliacuteti-cos afines o contrarios a la presidencia de Loacutepez Obrador

Al mismo tiempo el 7 de julio el presidente Loacutepez Obrador realizoacute su primer viaje internacional con Estados Unidos como destino para reunirse con el presidente Trump con motivo de la firma del Tratado Meacutexico Estados Unidos Canadaacute (TMEC) En ese viaje la comitiva mexicana incluyoacute a varios de los empresarios maacutes ricos de Meacutexico incluidos Carlos Slim el hombre maacutes rico de Meacutexico con importantes inversiones en proyectos mineros y Ricardo Salinas Pliego uno de los empresarios que se negaron a adoptar las medidas de astrin-gencia Este viaje reflejoacute el peso de la economiacutea en medio de la pandemia en conjunto con el jue-go electoral tanto en Estados Unidos en doacutende Trump pretende lograr la reeleccioacuten en noviembre de 2020 y en Meacutexico donde se avecinan las elec-ciones del congreso en 2021

Peruacute

El 27 de marzo de 2020 el congreso promul-goacute la ldquoLey de proteccioacuten policialrdquo que habiacutea sido aprobada por la legislatura anterior en julio de 2019 La nueva ley implicaba una actualizacioacuten de normas anteriores que protegen a las Fuerzas Armadas y a la Policiacutea Nacional de Peruacute de conse-cuencias penales por provocar lesiones o muerte en el ejercicio de sus funciones Entre las obje-ciones que manifestaron numerosas organizacio-nes como la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH 2020) hay dos matices de la Ley Nordm 31012 que resultan preocupantes el pri-mero es que impide a los jueces dictar prisioacuten pre-ventiva a los agentes auacuten cuando exista riesgo de fuga o entorpecimiento de la investigacioacuten lo cual puede en los hechos favorecer condiciones de im-punidad el segundo es que se deroga el principio de proporcionalidad en el uso de la fuerza Este uacuteltimo elemento aunque no exime al Peruacute de la normativa internacional en la materia siacute significa eliminar un candado legal a los abusos por parte de la policiacutea y el ejeacutercito y otorga un cheque en blanco a la violencia por parte de los cuerpos de seguridad que acentuacutea un contexto de excepcio-nalidad producto de la emergencia sanitaria

La situacioacuten se complica cuando a los tres diacuteas de la promulgacioacuten de la Ley de Proteccioacuten Policial el presidente Martiacuten Vizcarra anuncia medidas de ldquoinmovilizacioacuten total obligatoriardquo entre las 1800 hrs y las 500 hrs medida que implementoacute la Policiacutea Nacional y que ha resultado en miles de detenciones

En paralelo la Asociacioacuten Intereacutetnica de la Selva Peruana (AIDESEP 2020) ha denunciado que du-rante la cuarentena varios defensores ambienta-les han sido asesinados y no soacutelo se ven en la ne-cesidad de enfrentar la crisis del coronavirus sino tambieacuten las amenazas de madereros y empresas extractivas Una exigencia de los pueblos origina-rios peruanos ha sido la ratificacioacuten del Acuerdo de Escazuacute que facilitariacutea la exigencia de acceso a la informacioacuten sobre proyectos potencialmente dantildeinos al medio ambiente asiacute como de mecanis-mos de consulta para su implementacioacuten en te-rritorios biodiversamente ricos que coinciden con los territorios indiacutegenas Grupos empresariales y mineros se oponen a la ratificacioacuten del instru-mento internacional

En los casos en los que los Estados han optado por la economiacutea por encima de la vida de la gente no

estamos ante violencia de Estado


El congreso peruano ha dado mayor agilidad a normativas como la Ley de Proteccioacuten Policial que establece condiciones de mayor violacioacuten de derechos humanos en un paiacutes en el que se le per-mite a la policiacutea incluso dar servicios de seguridad privada a empresas mineras mientras que reza-gan acuerdos como el de Escazuacute que favorecen condiciones de mayor proteccioacuten tanto al medio ambiente como a quienes lo defienden y cuidan

iquestCriacutemenes de Estado en la pandemia

Se suele tener la idea de que un crimen de Estado se comete solo bajo regiacutemenes expliacutecitamente autoritarios o en situaciones de guerra pero no Generalmente implican actos que por su natura-leza se ocultan porque quien los cometioacute tiene a su mando el aparato punitivo la imparticioacuten de justicia y el uso del monopolio de la fuerza es de-cir que quienes los cometen tienen como garan-tiacutea la impunidad Por eso la necesidad de sentildealar esos actos radica en la urgencia de nombrar lo que normalmente no es nombrado

Despueacutes de analizar el conflicto y la discusioacuten por la que atraviesan hoy los derechos humanos es importante pensar en coacutemo se pueden empe-zar a nombrar aquellos actos Actualmente casi cualquier persona en cualquier parte del mundo reconoce que los Estados cometen violaciones de derechos humanos Existe toda una aceptacioacuten respecto a la existencia de esa realidad Pero si se pregunta si el Estado cometioacute un crimen entonces puede haber duda rechazo o desconcierto Por eso es necesario retomar algunas ideas sobre los criacutemenes de Estado

Los criacutemenes de estado son praacutecticas desviadas estatalmente organizadas (Green y Ward 2004) que incurren en la violacioacuten de los derechos hu-manos El teacutermino desviacioacuten es el comporta-miento que infringe una regla en este caso una regla estatal Para Green y Ward se da una praacutec-tica desviada cuando existe cierta aceptacioacuten de esa regla cuando se interpreta ese acto como una violacioacuten de la regla y hay disposicioacuten de aplicar sanciones importantes o significativas contra el acto que violoacute la regla

En muchos casos y claramente en la crisis del Covid-19 esa desviacioacuten es programada porque responde a una loacutegica de triage social La desvia-

cioacuten programada sumada a la muerte como esen-cia del necrocapitalismo produce la gradualidad de la muerte social Las redes de poder que se alimentan del sistema capitalista-colonial nece-sitan del control de la vida y de la organizacioacuten y la programacioacuten de la muerte para sostenerse necesitan establecer las condiciones de excepcioacuten para que los Estados cometan criacutemenes y no exis-tan consecuencias ante esos actos

Estos criacutemenes son estatalmente organizados es decir actos legalmente sentildealados como criminales que son cometidos por funcionarios estatales en el desarrollo de sus funciones (Chambliss 1989) No se les puede ver como actos aislados o individua-les Bailone (2017) identifica estos como criacutemenes de poder y los distingue de los criacutemenes de los po-derosos como aquellos que cometioacute un individuo que es parte de la estructura estatal Refirieacutendonos a los criacutemenes ejecutados desde la estructura de poder estatal existe un debate en torno al castigo que hay en respecto a estos Se les juzga en lo indi-vidual cuando se les deberiacutea de juzgar en lo indi-vidual y estructural porque generalmente hay una relacioacuten entre los actos criminales y la cadena de mando Hasta ahora no se pueden juzgar entes abs-tractos aunque deberiacutean de comenzar a sentarse

modos para que esos actos sean juzgados de otro modo Para Osoria (2016) cuando estos criacutemenes son investigados y condenados se enfatiza en los individuos que cometieron la accioacuten no se condena el sistema ni las estructuras gubernamentales que generaron esas acciones y asiacute se despolitiza la cri-minalidad estatal Desde esa perspectiva politizarla seriacutea darle sentido a que los actos son estructura-les y se han posibilitado no solo por el Estado sino como estamos viendo a nivel global por la implan-tacioacuten de un sistema que estaacute implicando muerte y que estaacute basaacutendose en desechar gente

Los criacutemenes de Estado se cometen bajo el peso de un discurso justificante (Zaffaroni 2017) mu-chas veces en nombre de un ldquobien generalrdquo Esos actos llevan por delante la negacioacuten de quieacutenes los han ejecutado (neutralizacioacuten) que se mani-fiesta desde la negacioacuten literal ldquono pasoacute nadardquo la negacioacuten interpretativa ldquolo que ocurrioacute es real-mente otra cosardquo hasta la negacioacuten implicatoria ldquolo que sucedioacute es justificadordquo (Cohen 1955)

Otra caracteriacutestica importante es que los criacutemenes de Estado causan maacutes dantildeo que los criacutemenes indi-viduales porque eacutestos muchas veces generan dantildeos masivos dantildeos que acaban con la vida de mucha gente o que la lesionan y le causan sufrimientos

Ward (2013) sugiere las siguientes preguntas para responder si se estaacute ante criacutemenes de Estado

1 iquestEl presunto comportamiento criminal es desviado en el sentido en que cierta expec-tativa social significativa condena el com-portamiento y presiona al Estado para que desista de ese comportamiento

2 iquestLa desviacioacuten es organizacional por ejem-plo llevada a cabo en la buacutesqueda de los objetivos organizacionales de una agencia estatal

3 iquestEl comportamiento viola los derechos hu-manos

La combinacioacuten entre las declaraciones de emer-gencia y la loacutegica del triage social pareciera dar la pauta perfecta para que la ejecucioacuten de actos atroces tenga una justificacioacuten tal que las decisio-nes inhumanas se expliquen con cierta normali-dad y generando aceptacioacuten Dentro de esta dinaacute-mica es necesario detenernos para preguntarnos si los actos cometidos en esa dinaacutemica pueden es-


tar configurando criacutemenes de Estado Esto no sig-nifica que en todos los casos se esteacuten cometiendo criacutemenes de Estado pero hay elementos claros de violencia directa y estructural y de responsabili-dad del Estado en ellas pero por su gravedad y por la crisis coyuntural resulta importante sentildea-larlos y en otro momento seriacutea importante pro-fundizar en sus implicaciones especiacuteficas y en las acciones necesarias para detenerlos

En los casos en los que los Estados han optado por la economiacutea por encima de la vida de la gente no estamos ante violencia de Estado aunque bien se le podriacutea encuadrar en un tipo de violencia es-tructural (Gordon y Green 2020) hay otros en los que la violencia la ejercen directamente agentes estatales y hay combinaciones entre ambos con la participacioacuten de agentes estatales y no-estatales

La combinacioacuten entre las medidas de astringen-cia social que muestran los iacutendices con el tipo de agresiones y violaciones de derechos humanos dan indicios de las perspectivas de triage social con las que se aborda la emergencia sanitaria En unos casos se ha enfrentado priorizando la eco-nomiacutea y se define como desechable a la poblacioacuten que los Estados consideran que obstaculiza obje-tivos econoacutemicos o que es reemplazable dentro de la actividad econoacutemica En otros se prioriza el control de la movilidad y cualquiera que desafiacutee o no se someta al ese control es desechable sobre todo si es parte de poblaciones previamente defi-nidas como desechables es decir los de abajo En ambos casos el elemento de control poblacional se acentuacutea con la emergencia para contener o eli-minar a poblaciones que no responden resisten o se rebelan a los propoacutesitos de quienes detentan el poder del Estado y de quienes utilizan indirecta-mente el poder del Estado (el mercado)

Algo que resalta es que en los tres paiacuteses con menor iacutendice de astringencia (Brasil Meacutexico y Estados Unidos) fueron en los que los casos de violencia tienen que ver con violencias estructu-rales derivadas de intereses econoacutemicos y aspec-tos culturales como el racismo En contraste los tres paiacuteses con mayores iacutendices de astringencia (Argentina El Salvador y Honduras) es en don-de la violencia fue cometida directamente por agentes estatales Esto pareciera indicar que la respuesta de los Estados a la crisis sanitaria tiene una correlacioacuten (o tal vez causalidad) con el tipo

de violencia que ejercen directa o indirectamente por agendas expliacutecitas o dinaacutemicas estructurales

En algunos casos deliberadamente la decisioacuten de los Estados ha sido sacrificar la vida de la gen-te por locura intereacutes econoacutemico o electoral una versioacuten traacutegicamente caricaturesca son las frases como ldquoLos abuelos estaacuten dispuestos a morir para no dantildear la economiacuteardquo del vicegobernador de Texas o la ilustre frase de Bolsonaro al inicio de la pandemia ldquotodos moriremos alguacuten diacuteardquo

Lo que estamos viviendo las imaacutegenes que llue-ven en medios y redes sociales de los cementerios que desbordan y las filas y filas de atauacutedes no son provocados solo por la pandemia sino como men-cionamos antes por la implantacioacuten de un siste-ma que sacrifica vidas y que para funcionar nece-sita hacerlo Como dicen Gordon y Green (2020) la crisis generada por la pandemia tambieacuten estaacute exponiendo los criacutemenes estructurales de los go-biernos Con estructurales hacen referencia a las medidas que los estados han instituido contra sus propias poblaciones esa criminalidad tiende a precipitar la muerte social que es gradual Desde 2004 Ward y Green se plantearon que en diversos desastres naturales el estado habiacutea sido culpable de acciones criminales y praacutecticas negligentes so-bre todo relacionadas con las causas estructura-les preexistentes

ldquoLas expectativas de que los gobiernos surgidos de procesos de izquierda los lla-mados gobiernos progresistas funcionaran radicalmente distinto a aquellos provenien-tes de las derechas o los muacuteltiples y am-biguumlos ldquocentrosrdquo han resultado en grandes decepciones maacutes allaacute de algunos matices algunos maacutes relevantes que otros Aunque las personas y grupos que llegan a conver-tirse en gobierno pueden modificar ligera-mente las trayectorias de los Estados y de la dinaacutemica social estaacuten sujetos al mismo sistema se vuelven parte de ese sistema para llegar al poder y sostenerse pactan acuerdan responden a la misma dinaacutemica Algo que ha mostrado la pandemia es que los procesos que llevan a loacutegicas de triage social y a criacutemenes de estado no dependen de la ideologiacutea de unos cuantos funciona-rios puacuteblicos son un problema estructural es un sistema que se alimenta del control

y la gestioacuten de la vida y la muerte Un sis-tema que saquea despoja deja sin territo-rio sin recursos sin sistemas de salud sin vida Planteado de una manera maacutes simple como lo han dicho muchas y muchos antes no se trata de izquierda contra derecha es los de arriba contra los de abajordquo

Si consideramos que la pandemia estaacute demos-trando una situacioacuten ambiental que podriacutea re-petirse debemos de actuar en la loacutegica de sentar precedentes no legales sino sociales sentar ac-tos de condena colectivos que cierren la puerta a que cada vez sea peor La tendencia que ahora vemos de normalizar lo atroz debe ser detenida Bolsonaro y Pintildeeira ya estaacuten estableciendo leyes que impiden que sus actos durante la pandemia sean juzgados Entonces las piezas estaacuten puestas Decidir queacute se puede aceptar como normal y queacute no es algo vital y baacutesico para enfrentar la crisis humana que atraviesa el planeta

ldquoDe los casos revisados emergen algu-nos patrones generales Por una parte se hace evidente la incapacidad Estatal para enfrentar las consecuencias sociales de la pandemia tendiendo hacia formas autori-tarias y arbitrarias de toma de decisiones maacutes allaacute de las cuestiones especiacuteficamente sanitarias y justificadas mediante discur-sos de triage social Por otra parte hay una tendencia a aprovechar las condiciones de vulnerabilidad social de la crisis sanitaria para avanzar agendas que afectan a comu-nidades y sectores de la poblacioacuten que en el fondo consideran desechables para salva-guardar el sistema econoacutemico capitalista o en favor intereses de minoriacuteas poderosasrdquo

Por otra parte se han mostrado los intereses elec-torales y de abuso de poder que han minimizado la pandemia porque no les ayuda a continuar con sus campantildeas provocando que el modo de res-ponder a la crisis sea baacutesicamente sacrificando a la poblacioacuten Hay los casos en los que la pande-mia ha dado la pauta perfecta la excusa para que el genocidio se disfrace y la causa de la muerte sea atribuida a hechos naturales como parecen indicar con mayor claridad los casos de Brasil y Colombia Para esto los Estados cometen actos injustos y en muchos casos inhumanos que ade-maacutes constituyen violaciones de derechos huma-


nos y potencialmente criacutemenes de Estado que en un ambiente de excepcioacuten como el que presenta una emergencia sanitaria de estas dimensiones permite encontrar justificaciones para actos que en otro momento se considerariacutean atroces

La condena social a estos actos se ha manifestado de distintos modos desde las protestas masivas en Estados Unidos Bolivia y Chile hasta la respuesta de desconfianza expliacutecita de comunidades de pro-tegerse solas por la historia de abusos en su contra por parte de policiacuteas y militares Una particulari-dad en la pandemia es que hay ademaacutes un amplio porcentaje de la poblacioacuten (mayoritariamente de clase media urbana) que se ha mantenido en con-finamiento obligado o autoimpuesto que desde el encierro manifiestan regularmente su descontento a traveacutes de las plataformas electroacutenicas

Otra fuente de protesta muy relevante ha surgi-do de los meacutedicos y del personal sanitario en casi todo el mundo reclamando no soacutelo condiciones laborales y de seguridad miacutenimamente dignas para poder cumplir con su trabajo en la primera liacutenea sino tambieacuten cuestionando las decisiones de quienes gobiernan

Pero las preguntas y puntos expuestos anterior-mente en torno a los criacutemenes de Estado son preguntas abiertas para ir trazando una ruta de respuesta para que desde diversas geografiacuteas po-damos caracterizar identificar y sentildealar esos criacute-menes de Estado y que nos enlacemos para com-partir y actuar

iquestQueacute sigue

En este texto no hemos abordado las contradic-ciones que tambieacuten ocurren en el abajo en la po-blacioacuten que de uno u otro modo responde como ha podido y con lo que puede responder No se puede esperar que millones de personas que vi-ven al diacutea dejen de trabajar y se encierren a morir de hambre Eso ha demostrado la desigualdad ya muy mencionada en este texto el contraste tan fuerte que se dio entre los que podiacutean permanecer en aislamiento y los que no puso mucho a pensar en el tipo de relaciones y comunidades que de-bemos de construir Por otro lado tambieacuten hubo muchas personas que pudieacutendose encerrar para evitar contagios siguieron saliendo sin entender que el salir podiacutea provocar maacutes contagios y que eso no era una decisioacuten personal

La tendencia a asumir que la amenaza es exter-na a el ciacuterculo social de cada persona asiacute como una costumbre de impunidad y privilegio han lle-vado a las eacutelites a asumirse inmunes al virus o a sus efectos sea por creer que el tener acceso a servicios de salud privados puede favorecerlos o porque asumen que quienes los rodean no tienen las mismas caracteriacutesticas bioloacutegicas que ellos Pareciera que existe la creencia de que el dinero las conexiones poliacuteticas o las jerarquiacuteas sociales pueden permitirles controlar el virus o eximirlos de su responsabilidad hacia aquellos a los que contagian

En contraste existe tambieacuten una reaccioacuten que combina la necesidad de socializacioacuten de consu-mo y de delegacioacuten en el Estado de su sentido de prudencia frente a los contagios potenciales Esto lleva a amplios sectores de la poblacioacuten a deci-dir sobre su movilidad a partir de declaraciones o decretos gubernamentales maacutes que desde la in-formacioacuten concreta sobre el nuacutemero de contagiosAdemaacutes estaacute la poblacioacuten que durante la pande-mia han tenido que trabajar por estar en sectores esenciales o en empresas que no pudieron o se negaron a cerrar temporalmente y la que sobre-

Con este mural en Pariacutes Francia la artista Ardif quiso agradecer al personal de salud por su labor durante el Covid-19 La fotografiacutea es del 14 de mayo de 2020 copy Gonzalo Fuentes Reuter


viven del maacutes amplio sector laboral del continen-te la economiacutea informal Para estos sectores hubo condiciones miacutenimas o inexistentes de proteccioacuten lo que tambieacuten influye en su percepcioacuten sobre las medidas sanitarias Hay que recalcar que fueron tambieacuten los sectores maacutes afectados en teacuterminos de salud y econoacutemicos

La supervivencia en este contexto quiere decir algo muy distinto para cada sector Para unos sig-nifica mantener su estado de excepcioacuten y de inmu-nidad a los males de la sociedad y para otros sig-nifica seguir sobreviviendo a todos los males de la sociedad de los cuales la pandemia es el menor

Lo que es innegable en este momento es que el virus es un mal que ha golpeado a toda la hu-manidad y que explicitoacute la interconexioacuten humana La interconexioacuten tiene varias aristas No todos los cuerpos pudieron encerrarse y muchos entendie-ron que la interconexioacuten completamente palpable representa ahora maacutes que nunca nuevas pistas Una de las tristes realidades que salioacute a relucir fueron los grandes porcentajes de poblacioacuten que no entendieron los riesgos de la interconexioacuten que quedoacute expuesta con este virus Por otra parte estaacute la conciencia de la importancia de la otredad de la dependencia de la vida de cada uno con la vida y las decisiones de todos los demaacutes La relacioacuten dialeacutectica entre cuidar-me y ciudar-nos se ha vuelto ineludible

En estos momentos esa otredad necesita atencioacuten tanto para percibir lo que nos enriquece como lo que nos vulnera Por lo contagioso que ha resul-tado el coronavirus existe el grave riesgo de crimi-nalizar al otro de profundizar el aislamiento y la desconfianza En las ciudades la fragmentacioacuten ya era un problema profundo que muy posiblemente esteacute en aumento y corre el riesgo de agudizarse despueacutes de la pandemia

En algunos lugares se manifestaron modos crea-tivos de no dejar solo al otro y de no criminali-zarlo Se organizaron cacerolas comunes redes de apoyo en las cuales campesinos apoyaron a personas de las ciudades Muchos esfuerzos inde-pendientes de organizar comedores gratuitos no sin la gran dificultad que implicoacute ser solidario con el contagio de por medio La solidaridad maacutes que nunca cuando fue cuerpo a cuerpo implicoacute en al-gunos dar la vida

Otro ejemplo muy interesante es la Nacioacuten Wampis de Peruacute que en el contexto del saqueo y del extractivismo se determinoacute autoacutenoma en 2015 Los diacuteas 8 y 9 de agosto de 2020 en el marco del Diacutea Internacional de los Pueblos Indiacutegenas el Gobierno Territorial Autoacutenomo de la Nacioacuten Wampiacutes (2020) acordoacute declarar su te-rritorio la naturaleza y su biodiversidad como el Hospital Natural de los Wampis Esta declarato-ria incluye la exigencia de respeto al equilibrio ambiental y a los conocimientos que entrantildea la biodiversidad de su territorio asiacute como la crea-cioacuten de un Comando Covid-19 encargado con la tarea de afrontrar la pandemia con acciones de prevencioacuten y atencioacuten sanitaria Todo esto ante la desconfianza de las capacidades e intenciones del Estado peruano

Como dice Zibechi (2020a) las posibilidades de esperanza surgen de las formas de vida hetero-geacuteneas eso resuena con la criacutetica a la univer-salidad que podriacutea ser un modo en comuacuten de sentildealar a los de arriba desde nuestras diversi-dades tambieacuten plantea la idea de que cuando el Estado es genocida los recursos de los pueblos son el uacutenico relevo posible para combatir gue-rras y enfermedades Esto ya lo veniacutea gritando el movimiento feminista de los uacuteltimos antildeos la necesidad de pensar el cuidado en comuacuten que hoy no solo se ve como un acierto sino como una urgencia

Una sentildeal de alerta un siacutentoma alarmante sobre nuestra forma de relacionarnos como humanidad y con el planeta es que al mismo tiempo que es-tamos padeciendo una crisis global que tiene en sus causas el deterioro ambiental que hemos pro-vocado los asesinatos y agresiones de defenso-res del medio ambiente van en aumento y se han

normalizado y las comunidades que se oponen a proyectos que destruyen los fraacutegiles equilibrios del planeta son criminalizadas y olvidadas


Cuando vemos las respuestas estatales la cri-sis del sistema con la serie de atrocidades que hemos repasado maacutes una larga lista que no cabe en estas liacuteneas surge una imagen La de una humanidad que viaja toda en un gran barco el timoacuten lo manejan unos irresponsables des-quiciados borrachos de poder y ambicioacuten que nos llevan directo a una colisioacuten catastroacutefica Las preguntas y el desconcierto abundan iquestQueacute hacemos iquestSaltamos iquestPeleamos por el timoacuten iquestCerramos los ojos iquestEsperamos un milagro iquestBuscamos salir de ahiacute para ir a otra embarca-cioacuten iquestImprovisamos un bote salvavidas iquestNos lanzamos a nadar solos La uacutenica respuesta que tenemos hasta ahora es que sabemos que ya no podemos seguir por ahiacute o es traacutegicamente claro lo que va a pasar Seguimos navegando a toda velocidad hacia la cataacutestrofe y hemos agotado todo aquello que pareciacutea funcionar y que por maacutes que intentamos remendarlo reacomodarlo sigue siendo igual que lo que nos ha conducido a este punto


Para tener esperanza hay que sobrevivir La es-peranza que puede surgir en esta crisis no estaacute en coacutemo recuperar el rumbo sino en hacer que todo tome otro rumbo El sostener el mismo sis-tema econoacutemico las mismas relaciones de poder la mismas relaciones con el planeta llevaraacuten ine-vitablemente a situaciones iguales o peores No es posible seguir viendo hacia el mismo lugar es necesario mirar distinto relacionarnos distinto Esto no es un ejercicio de ingenuidad o locura es la maacutes profunda sensatez es algo que hacen mu-chas muchos en muchas partes del mundo tan distintas en historias y geografiacuteas como la Selva Lacandona o el Kurdistaacuten


ldquoTal vez la pregunta lsquoiquestCuaacutel es la velocidad del sue-ntildeorsquo deberiacutea ser acompantildeada de la pregunta lsquoiquestCuaacutel es la velocidad de la pesadillarsquordquo (Subcomandante Insurgente Marcos (2004) l

iquestQueacute hacemos iquestSaltamos iquestPeleamos por el timoacuten

iquestCerramos los ojos iquestEsperamos un milagro iquestBuscamos salir de ahiacute para ir a otra embarcacioacuten

iquestImprovisamos un bote salvavidas iquestNos lanzamos a nadar solos


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La pandemia el Estado y la normalizacioacuten de la pesadilla

por Tamara San Miguel y Eduardo J Almeida

Introduccioacuten

La llegada de la pandemia al planeta tierra in-tensificoacute los efectos de una pesadilla La crisis que desatoacute el Covid-19 dejoacute ver y agudizoacute las muacuteltiples crisis que ya existiacutean y las condiciones inhumanas en las que ya viviacutea una buena parte de la huma-nidad

El eje del anaacutelisis se basa en la hipoacutetesis de que la mayoriacutea de los Estados actuales son estructu-ralmente incapaces de enfrentar una amenaza como la del SARS-CoV-2 sin estrategias que im-pliquen actos inhumanos violatorios de derechos humanos y potencialmente criminales Estas es-trategias tienen que ver tanto con su debilidad estructural como con dinaacutemicas maacutes profundas relacionadas con la forma en que se configuran las relaciones de poder Nos enfocamos en el po-der Estatal entendido como dominio sobre la vida y la muerte de quienes viven o transitan por sus territorios o jurisdicciones sobre todo en situacio-nes de ldquoemergenciardquo

El anaacutelisis parte de la combinacioacuten entre la vio-lencia los derechos humanos y el desarrollo en una situacioacuten de emergencia y la loacutegica del tria-ge social como justificacioacuten eacutetica de actos inhu-manos A partir de la revisioacuten de algunos casos que hemos identificado como graves pretendemos identificar las violaciones graves de derechos hu-manos que se han cometido durante la pandemia por causas preexistentes agudizadas con la crisis sanitaria o bien por la ejecucioacuten de las medidas de emergencia Abrimos la pregunta de si esos actos que han violado derechos humanos configuran criacutemenes de Estado El ejercicio de sentildealar los ac-tos nos parece esencial para desnormalizar lo que pretende imponerse como normal en el contexto de la pandemia

Aunque nos enfocamos en algunos casos de algunos paiacuteses del continente americano que permiten tener una visioacuten general de las dinaacute-micas Estatales en la regioacuten vemos este texto como un primer paso en un anaacutelisis que valdriacutea la pena hacer a mayor profundidad y en todas las geografiacuteas posibles No es un texto friacuteamente calculado (aunque los caacutelculos sean friacuteos) o con pretensiones de objetividad y asepcia surge de la indignacioacuten por las atrocidades que pretenden ocultarse bajo la tragedia de la pandemia surge de la inquietud por encontrar rumbo para actuar

frente a los crecientes abusos surge de la urgen-cia por buscar sentildeales de esperanza en medio de la incertidumbre

Este texto es un inicio y a la vez es una invitacioacuten para construir o compartir anaacutelisis similares que puedan darnos una visioacuten maacutes clara de las dinaacute-micas de poder en esta nueva etapa pandeacutemica y de los actores que pretenden usar la crisis para sostener estructuras y relaciones que nos estaacuten llevando de una cataacutestrofe a otra hasta que no quede nada maacutes que (tal vez) ellos



La pandemia
































































































































Argentina 2018 414

Bolivia 2018 422

Brasil 2018 539

Chile 2017 444

Colombia 2018 504

Ecuador 2018 454


Guatemala 2014 483

Honduras 2018 521


Peruacute 2018 428














Argentina







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Guatemala


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Referencias






















































































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Argentina 2018 414

Bolivia 2018 422

Brasil 2018 539

Chile 2017 444

Colombia 2018 504

Ecuador 2018 454


Guatemala 2014 483

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Peruacute 2018 428














Argentina







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Argentina 2018 414

Bolivia 2018 422

Brasil 2018 539

Chile 2017 444

Colombia 2018 504

Ecuador 2018 454


Guatemala 2014 483

Honduras 2018 521


Peruacute 2018 428














Argentina







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Argentina







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Referencias




























































































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